La investigación en la metodología del diseño 04 / 2006 “Si bien no existe un modelo genérico de brief, cuatro son los aspectos más importantes que debe contener este listado de requerimientos” por Julio Frías Peña Ilustraciones de Cruz Martínez En agradecimiento a Mauricio Juárez Servín por su apoyo y amistad, fraternalmente, Julio Frías Introducción A diferencia de la arquitectura y la ingeniería, el diseño gráfico e inclusive el industrial, carecen de un cuerpo teórico vasto que ayude al proceso innovativo de sus practicantes, y es que aún cuando el diseño es un proceso creativo proyectual, las diversas metodologías empleadas por esta disciplina han sido poco documentadas, particularmente en los textos editados en español. Por tal motivo, el trabajo de Bruno Munari, Felipe Pardinas y Chistopher Jonas cobran vital importancia en la enseñanza del proceso de diseño en nuestro país. No obstante, estos autores no ahondan sobre el qué y cómo se debe investigar durante el diseño de una comunicación visual. El objetivo de este artículo es revisar qué son “metodología” e “investigación” y a partir de ahí plantear una metodología enfocada al proceso creativo del diseño gráfico. ¿Qué es metodología? La palabra metodología, tiene su origen en la palabra latina Methodus, la cual evolucionó al vocablo griego Méthodos, obteniendo así una doble connotación, ya que mientras meta significa “a lo largo de o a través de“, odos significa “camino”; debido a esto, metodología se entiende como “ir a lo largo del buen camino, del camino del conocimiento”. En el contexto actual, el uso de la palabra metodología nos refiere a la ciencia que estudia los métodos del conocimiento. Vilchis ha sugerido que el método es el camino que conduce al conocimiento, conocimiento que puede ser organizado en un sistema, por lo tanto el empleo de la palabra método denota el conjunto de operaciones necesarias para obtener un resultado que puede brindar conocimiento nuevo. Conocimiento es una palabra derivada del latín scientia, y por ciencia entendemos el conjunto de conocimientos objetivos sobre ciertas categorías de hechos, de objetos o fenómenos que se basan en leyes comprobables y en una metodología de investigación propia. Bajo esta perspectiva, Swann afirma que el diseño es una actividad científica, ya que los diseñadores, industriales, gráficos o textiles experimentan después de observar, crear y razonar, interactivamente, por lo que en cada boceto o prototipo buscan validar sus hipótesis. Desde una posición funcionalista, Bruno Munari afirma que la forma estética del producto diseñado es el resultado de un proceso metodológico que busca resolver todos los componentes de un problema y es que al diseñar, el diseñador escoge los materiales más adecuados, las técnicas más convenientes, y valora las diversas funciones experimentando las posibilidades interactivas de estos elementos, dándole así un carácter científico al diseño. La forma de validar sus hipótesis pueden ser diversas para el diseñador, por un lado la aceptación del cliente puede ser un indicativo, mientras que el éxito del producto en el mercado también lo es; sin embargo, la aceptación del usuario final del diseño puede ser considerada la más certera ya que entonces se podrá corroborar si el diseño cumplió su objetivo. En el diseño, el producto resultante es el medio de interacción entre un emisor y un receptor, entre nuestro cliente y su cliente. Ulrich y Eppinger señalan que el grado de participación de un diseñador en un determinado proyecto está condicionado por el grado de interacción que tendrá el producto a diseñar con el usuario final. Es posible sugerir que la influencia que pueda tener un diseñador gráfico, industrial o textil en la sociedad, será de mayor impacto si sigue una metodología que le permita realizar su trabajo de forma ordenada y comprobable. ¿Qué es investigación? De acuerdo al diccionario Británico Oxford, la investigación es una actividad intelectual y experimental que es sistemática, cuyo objetivo es aumentar los conocimientos existentes en una disciplina. Para Blaxter y otros, la investigación es una actividad planificada, ordenada y confiable que busca descubrir o aumentar el conocimiento en una dirección no explorada dentro de una área determinada. La investigación puede ser social y científica, connotando ésta última un aspecto más riguroso; sin embargo, ambas deben ser organizadas y ejecutadas cuidadosamente. La investigación cumple dos propósitos fundamentales: 1) Producir conocimiento y teorías, la cual es llamada investigación básica. 2) Resolver problemas prácticos, conocida también como investigación aplicada. Podemos afirmar entonces que a través de la investigación conocemos lo que nos rodea, por lo que su uso metodológico dentro del proceso del diseño gráfico es indispensable para ambos: a) generar conocimiento nuevo, b) abordar mejor el proyecto de diseño a realizar. Métodos de diseño Aunque las disciplinas de diseño industrial, gráfico y textil tienen alrededor de 50 años de establecidas en nuestro país, muy pocos libros en castellano han sido publicados sobre los fundamentos teóricos de una metodología del diseño. Anteriormente he señalado que el diseño es un proceso proyectual que implica un alto grado de creatividad, por lo que la falta de una metodología puede llevar a que esta actividad se vuelva caótica y frustrante tanto para el emisor, como para el diseñador y el receptor, inhibiendo así el objetivo final del diseño gráfico que es comunicar. Si a la carencia de un método de diseño se suma que en la mente de un diseñador hay tres áreas de actividad, dicho sistema se hace más indispensable. Tales áreas son: inventiva, artística y lógica o racional. La primera es empleada para proponer nuevas soluciones a problemas de diseño, la segunda tiene que ver con un sentido de orden y sensibilidad, mientras que la tercera es la habilidad que tiene el diseñador para analizar las otras dos y entonces poder tomar decisiones. Con el objetivo de establecer un proceso metodológico de diseño más allá de la “receta” sugerida por Munari, revisaremos cuatro metodologías empleadas en países líderes en el uso y promoción del diseño. La primera a revisar es la de Howard Milton quien ha sugerido un proceso con cinco principales etapas: 1) Investigación, 2) Estrategia, 3) Diseño, 4) Implementación y 5) Evaluación. Por otro lado Borja de Mozota ha desarrollado un proceso que a diferencia del de Milton, plantea seis pasos: 1) Investigación, 2) Indagación, 3) Exploración, 4) Desarrollo, 5) Realización y 6) Evaluación. En ambos métodos se observa la importancia de la investigación en las primeras fases. Un tercer modelo es el propuesto por Bruce y Cooper, quienes desde la perspectiva de la administración del diseño sugieren una metodología que independiente de las disciplinas del diseño, considere los siguientes cuatro pasos: 1) Formulación, etapa que tiene que ver con identificar la necesidad del diseño, la definición del problema, y la generación del brief. 2) Evolución, etapa concerniente a la generación de la idea, el concepto, y refinamiento del diseño. 3) Transferencia, etapa enfocada a la producción del diseño. 4) Reacción, etapa que mide la percepción del cliente sobre el diseño generado. El cuarto y último modelo presentado aquí es el de Ulrich y Eppinger, proceso de seis pasos que comienza con la investigación de las necesidades del cliente, seguido de una segunda etapa llamada conceptualización del diseño. Como tercer paso plantean un primer refinamiento del concepto de diseño, y una cuarta fase que provee un mayor refinamiento y selección del concepto final. En el penúltimo paso los académicos sugieren la realización de planos u originales para manufactura, y por último, un sexto paso enfocado a la coordinación entre la gente de ingeniería, producción y ventas, el cual es necesario para el lanzamiento del diseño. Una metodología para el diseño gráfico A diferencia de la metodología sugerida por Munari, –la cual por estar editada en español es ampliamente difundida en las escuelas de diseño gráfico en México–, las cuatro metodologías presentadas sugieren una evaluación del diseño resultante, medición que como ya se mencionó, se puede dar por: a) el grado de satisfacción del cliente, b) la aceptación en el mercado del nuevo producto y c) evaluación del diseño resultante en base a la mezcla de diseño. De acuerdo con Norberto Chaves, el diseño gráfico es un servicio en el proceso de comunicación, servicio generalmente inmerso en la cultura de la industria y las reglas del mercado. Robin Roy argumenta que la mayoría de los problemas de diseño son en esencia similares, sin importar de qué disciplina del diseño se trate; este profesor británico señala que en su fase inicial, el problema de diseño se sitúa en un área concerniente al cliente, la cual es poco específica, misma que comienza a aclararse cuando el diseñador es convocado al proyecto y realiza una investigación adicional al brief que pudo haber recibido, esta información le permitirá determinar los principales requerimientos a seguir. 1. Basado en experiencia profesional, y en una detallada revisión de estas y otras metodologías, es posible proponer un proceso de diseño enfocado a la generación de comunicaciones visuales. Dicha metodología consta de seis etapas, dónde la primera, titulada “análisis e investigación”, se enfoca al entendimiento del problema de diseño y a la recopilación de la información concerniente al brief. En un segundo paso las actividades se dirigen a la “exploración” y selección de las diversas posibilidades para solucionar el problema de comunicación. La “implementación” de los cinco elementos de la mezcla de diseño conforma la parte medular del tercer eslabón, mientras que la evaluación por parte del cliente y posibles usuarios llevan al diseñador a un “refinamiento” del concepto o diseño antes de un quinto paso llamado “producción” y en el cual se generara el diseño resultante del proceso, mismo que puede ser intangible como una pagina web o tangible como un empaque. Por último, la “evaluación” en el campo de la comunicación generada es necesaria para cerciorarnos de su efectividad y validar el proceso empleado. La aportación de este modelo al área del conocimiento del diseño es que se enfoca particularmente al proceso de diseño en la comunicación gráfica, además ofrece: 1) La descripción de cada etapa, 2) Su objetivo, 3) El elemento visual resultante de cada fase. También plantea la generación de un brief de diseño, elemento poco enseñado en México pero que es trascendental para el éxito o fracaso de cualquier proyecto de diseño; adicionalmente sugiere la evaluación del diseño de acuerdo a los tres parámetros señalados en los párrafos anteriores. La importancia de un brief de diseño es crítica ya que en este documento se transcriben los resultados de la investigación efectuada por el diseñador, información que en muchos de los casos es verbal e inclusive abstracta, por lo que el comunicador gráfico deberá traducir estos en elementos visuales comprensibles no sólo para el usuario final sino diversos tipos de audiencia. Si bien no existe un modelo genérico de brief, cuatro son los aspectos más importantes que debe contener este listado de requerimientos: a) Investigación sobre quién es el cliente. b) Determinación sobre cuál es el problema de diseño. c) Análisis sobre qué soluciones análogas y similares se han realizado. d) Decisión sobre cómo se producirá el diseño. Durante la práctica profesional nos encontramos que muchos de los clientes creen conocer su nicho de mercado perfectamente, por lo que no consideran realizar ningún tipo de investigación, sin embargo, diseñadores y clientes olvidan que en un proyecto de diseño el listado de requerimientos es una herramienta integral entre las instrucciones verbales y los resultados visuales. Vale mencionar que el proceso de diseño no es vertical ni horizontal, sino interactivo, de hecho es más espiral ya que a medida que el proyecto avanza se va cerrando el grado de incertidumbre sobre el diseño a desarrollar. La evidencia de lo anterior se ha encontrado al aplicar una variable de esta metodología durante las actividades de la institución más importante de promoción del diseño en nuestro país, así como en dos de las universidades de mayor prestigio, además de su constante validación en la práctica profesional de este autor. Conclusiones Es necesario recordar por un lado que este ensayo busca enfatizar la metodología de la investigación en el proceso de diseño gráfico por lo que evitó adentrarse en todas las etapas, particularmente en la implementación de la mezcla de diseño, actividad que no puede ser desarrollada si las primeras dos fases son omitidas. Por otro lado se buscó ahondar sobre la investigación como una actividad sistemática y organizada que permite solucionar problemas prácticos y generar nuevo conocimiento, por lo que su uso en el diseño es indispensable. Finalmente recalco que los académicos deben ser los primeros en romper el paradigma de que la investigación es algo innecesario y aburrido; la investigación en el proceso creativo del diseño es tan atractiva como proyectar.