M., O. E. s/ Aumento de Cuota Alimentaria

Anuncio
DeCyT 2010‐2013 ‐ Facultad de Derecho ‐ UBA
Base de Datos de Jurisprudencia sobre Derecho de Familia y Sucesiones
Aumento de cuota alimentaria – Ingresos de la madre
AUTOS: C., A. M. d. l. M. c/ M., O. E. s/ Aumento de Cuota Alimentaria
TRIBUNAL: Cámara de Apelación en lo Civil y Comercial del Departamento Judicial de Morón
FECHA: 04/04/2013
TEXTO COMPLETO:
En la ciudad de Morón, Provincia de Buenos Aires, a los cuatro días del mes de abril de dos mil
trece, reunidos en la Sala I del Tribunal, los señores Jueces de la Excma. Cámara de Apelación
en lo Civil y Comercial del Departamento Judicial de Morón, doctores José Eduardo Russo y
Liliana Graciela Ludueña, para pronunciar sentencia en los autos caratulados: "C., A. M. d. l. M.
c/ M., O. E. s/ Aumento de Cuota Alimentaria", y habiéndose practicado el sorteo pertinente
(art. 168 de la Const. de la Provincia de Buenos Aires y 266 del Código de Procedimientos Civil
y Comercial), resultó que debía observarse el siguiente orden: Dres.LUDUEÑA-RUSSO,
resolviéndose plantear y votar las siguientes:
CUESTIONES
1ra.: ¿Es justa la resolución de fs. 145/147?
2da.: ¿Qué pronunciamiento corresponde dictar?
A LA PRIMERA CUESTIÓN: la Señora Juez doctora Ludueña, dijo:
I.- Contra la resolución de fs. 145/147, interpone recurso de apelación el accionado, el que
concedido en relación, es sustentado a fs. 158/161, replicado a fs. 163/165. Habiéndose
expedido la Sra. Asesora de Incapaces a fs. 328.
La Sra. Magistrada de Grado admitió el presente incidente, fijando una nueva cuota mensual
alimentaria a favor de F. A. y F. E. M., en la suma de $ para cada uno de ellos, con costas al
incidentado y difiriendo la regulación de los honorarios profesionales.
Comisión Nº 9351 Derecho de Familia y Sucesiones.
Profesor Adjunto: Juan Antonio Seda. Cátedra: Graciela Medina.
www.niunomenos.org.ar
1
DeCyT 2010‐2013 ‐ Facultad de Derecho ‐ UBA
Base de Datos de Jurisprudencia sobre Derecho de Familia y Sucesiones
II.- Contra tal pronunciamiento se alza el recurrente. Sostiene que la actora no ha
acreditado fehacientemente su caudal económico a los fines de establecer el aumento de la
cuota convenida, argumentando que la resolución resulta injusta, arbitraria e inadecuada.
Alega que no se ha considerado que esa parte se encuentra desempleada, manifestando que
fue su madre quien lo ayudó a solventar las cuotas convenidas y la deuda que las mismas
generaron. Alega que la progenitora de los alimentados tiene un trabajo estable como
docente, siendo sus ingresos suficientes para cubrir las necesidades de éstos. Sostiene que no
se han demostrado variaciones de las necesidades de sus hijos, desde el acuerdo arribado,
excepto las derivadas de su mayor edad. Manifiesta que la Sentenciante omitió merituar el
aumento convencional de la cuota originariamente acordada, como así también la cancelación
de la deuda en tal concepto. Alega la falta de consideración de la nueva unión matrimonial del
recurrente y del nacimiento de una hija discapacitada. Se queja por la valoración de la prueba
basada en indicios, argumentando que resulta desapropiado presumir una mayor capacidad
económica a tenor de la cesión de derechos hereditarios que efectuara su madre a favor de su
actual esposa. Finalmente manifiesta que la herencia recibida no cambió su fortuna, dado que
posee deudas ocasionadas por los años de desempleo.
III.- Liminarmente corresponde señalar que ha quedado firme, por falta de ataque, la
conclusión de la Sentenciante en torno a que las necesidades de los alimentistas se
incrementaron desde la fijación de la cuota convenida, a raíz de: la mayor edad adquirida por
éstos y el aumento del costo de vida derivado de los procesos inflacionarios padecidos por el
país (art. 266, in fine, del C.P.C.C.).
En efecto, los agravios del apelante -tal como se reseñaron- se circunscriben a disentir con uno
de los presupuestos de hecho tenido en cuenta por la a quo para admitir el incidente -las
posibilidades económicas del alimentante-, mas no rebate el concerniente a las necesidades de
los alimentistas, por el contrario, reconoce expresamente la procedencia de un aumento con
fundamento en tal elemento (último párrafo de fs. 160 vta.).
IV.- El monto de la cuota alimentaria es un punto eminentemente circunstancial y variable, de
modo que si las circunstancias fácticas que sirvieron de fundamento para fijarla hubieran
cambiado, también debe modificarse la prestación, aumentando, disminuyendo o cesando la
pensión según fuere el caso (arts. 641 y 647 Código Procesal, su doct.; esta Sala cs. 37.144 R.I.
65/99, 44.916 R.I.481/00 entre otras).
Así, sólo prosperará el pedido de aumento de la cuota ya fijada en sentencia o por convenio como es el caso-, si ha habido, posteriormente, una variación en los presupuestos de hecho
que se tuvieron en cuenta para establecerla; sea que se modificaron las posibilidades del
alimentante o las necesidades del alimentista, es decir que, la modificación sólo procede si se
han alterado los elementos fácticos analizados por el Juez o por las partes, al momento de
fijarse la misma (BOSSERT, Gustavo A. "Régimen Jurídico de los Alimentos". pág. 619; ARAZI,
"El Juicio de alimentos en la ley y la jurisprudencia", L.L., 1984-C-5267-S).
Comisión Nº 9351 Derecho de Familia y Sucesiones.
Profesor Adjunto: Juan Antonio Seda. Cátedra: Graciela Medina.
www.niunomenos.org.ar
2
DeCyT 2010‐2013 ‐ Facultad de Derecho ‐ UBA
Base de Datos de Jurisprudencia sobre Derecho de Familia y Sucesiones
Conforme lo ya expuesto en el Considerando III, encontrándose fuera de discusión lo
concerniente a las necesidades de los alimentistas, corresponde analizar las posibilidades
económicas del incidentado, como así también las alegadas circunstancias impeditivas para
afrontar la cuota fijada en la resolución recurrida.
Consagra el artículo 265 del Código Civil el deber-derecho de alimentos que emana de la patria
potestad, y cuyo contenido delimita en el artículo 267 del mismo cuerpo normativo.
El deber de asistir a las necesidades del hijo menor de edad no nace del parentesco, sino del
deber de crianza y educación que pesa sobre ambos padres, con independencia que uno de
ellos ejerza la tenencia.
Contrariamente a lo sostenido por el recurrente, la obligación del padre no cesa por la
circunstancia de que la madre realice tareas remuneradas, puesto que el caudal económico
materno no es liberatorio o aminorante del deber paterno, sino sólo un beneficio para los
niños. Ambos padres son responsables en la mantención de la descendencia, conforme a su
condición y fortuna, pero incide en mayor grado sobre el padre la aportación dineraria, dado
que sobre la madre -como ocurre en autos- recaen todas las responsabilidades inmediatas del
ejercicio de la tenencia (vgr., atención, dedicación y cuidados domésticos; esta Sala cs. 40.488,
R.I. 314/98; cs. 44.916, R.I.481/00; cs. 52.968 R.S. 22/06).
Aduno a ello, que los progenitores tienen el deber de proveer a la asistencia de los hijos
menores, y para ello deben realizar todos los esfuerzos que resulten necesarios, realizando
trabajos productivos, sin que puedan excusarse de cumplir con su obligación alimentaria
invocando falta de trabajo o de ingresos suficientes, cuando ello no se debe a imposibilidades
o dificultades prácticamente insalvables (BOSSERT, Gustavo A., ob. cit., pág. 223).
De modo tal, habiendo variado las necesidades de los alimentistas, no puede soslayarse la
obligación de alimentos con la argumentación de una difícil situación económica derivada del
alegado desempleo y del nacimiento de una hija con capacidades diferentes, fruto de una
nueva unión. Tal argumentación no se condice con la responsabilidad que implica el rol
paterno respecto de los hijos, que no tienen otra posibilidad de sobrevivir que aquella que
pueden brindarle sus progenitores; en especial durante su adolescencia, cuando se intensifican
las erogaciones tendientes a su formación psicofísica y social (esta Sala, voto del Dr. Russo en
la cs. 19.152 R.S. 306/87 y sus citas, cs. 43.494 R.I. 24/00).
Si bien en el caso no se ha acreditado con precisión el caudal patrimonial del demandado, en
forma reiterada lleva dicho este Tribunal que para la fijación de una cuota que atienda las
necesidades del alimentario, no obsta la falta de demostración concreta de los recursos del
alimentante, por lo que cabe admitirse la prueba indiciaria -contrariamente a lo sostenido por
el recurrente-, resultante de la condición social y económica de las partes, modalidades de vida
e idoneidad demostrada por el marido a través de sus actividades para el logro de los recursos
Comisión Nº 9351 Derecho de Familia y Sucesiones.
Profesor Adjunto: Juan Antonio Seda. Cátedra: Graciela Medina.
www.niunomenos.org.ar
3
DeCyT 2010‐2013 ‐ Facultad de Derecho ‐ UBA
Base de Datos de Jurisprudencia sobre Derecho de Familia y Sucesiones
necesarios a tal fin. Basta para ello que la prueba de tales recursos sólo sea
aproximativa, debiendo tenerse especialmente en cuenta la que emana de presunciones
fundadas en hechos reales y probados, que permitan arribar a una conclusión al respecto,
quedando al libre arbitrio judicial encasillar en cálculos aritméticos la fijación de la cuota (cs.
19.234, R.I. 300/88 y fallos allí citados; cs. 52.968, R.S. 22/06).
En tal sentido, tengo por acreditado que con posterioridad al convenido homologado a fs. 226,
de fecha 25/2/2005, el capital económico del incidentado se ha visto incrementado como
consecuencia de los bienes trasmitidos mortis causa por el fallecimiento de su progenitor 26/07/2005-, habiéndoselo declarado heredero conjuntamente con su progenitora (cs. 64.944
del Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial nº 3 de este Departamento Judicial).
En efecto, de la documentación de fs. 78, 81/87, 96/101 y 109 de los mencionados actuados,
se acredita la titularidad de los bienes y la valuación fiscal -al año 2007/2008- de los tres
inmuebles componentes del acervo hereditario, como así también, se acredita -con la
documentación de fs. 29 acompañada por el propio incidentado- la venta del automóvil que
integra la misma masa.
De modo tal, la comprobación a través de la prueba directa de la propiedad de bienes
fructíferos, autoriza a presumir las posibilidades económicas del alimentante, como así
también establecer el monto de la cuota alimentaria (BOSSERT, Gustavo A, ob. cit, pág. 462;
COLOMBO, "Código Procesal Civil", Tº II, p. 280).
Por otro lado, coincido con la Sentenciante en valorar la cesión de acciones y derechos
hereditarios efectuada por la progenitora del incidentado a favor de su actual cónyuge -fs.
90/91 del exp. sucesorio-, dado que en la escritura pública en la que se instrumentó la
transmisión, no se hace referencia al carácter de los fondos empleados, resultando inatendible
la mera alegación que efectúa el recurrente de su carácter propio (arg. arts. 1272 y conc.del
Código Civil).
Así, tal circunstancia, constituye un indicio de la capacidad económica del incidentado a tenor
del carácter ganancial -en principio- de los fondos empleados para dicha adquisición onerosa, y
de las posibilidades económicas que presenta el nuevo hogar constituido por el demandado y
su actual cónyuge.
Por otro lado, si el demandado pretende que no se tengan en cuenta ciertos indicios, que
permitirían presumir una solvencia mayor que la que tiene, tendrá a su cargo producir prueba
en sentido contrario (BOSSERT, Gustavo A, "ob. cit", pág. 465).
De modo tal, no puede tener andamiento posible la sola manifestación del incidentado de que
"posee deudas", dado que no ha arrimado ni un atisbo de prueba que acredite su existencia
(art. 375 del C.P.C.C.).
Comisión Nº 9351 Derecho de Familia y Sucesiones.
Profesor Adjunto: Juan Antonio Seda. Cátedra: Graciela Medina.
www.niunomenos.org.ar
4
DeCyT 2010‐2013 ‐ Facultad de Derecho ‐ UBA
Base de Datos de Jurisprudencia sobre Derecho de Familia y Sucesiones
En síntesis, sin perjuicio de la falta de comprobación de ingresos regulares o
periódicos del alimentante y de la existencia de nuevas cargas familiares que éste ha asumido;
encontrándose acreditado el capital que el demandado posee, las posibilidades económicas
presumidas a través de los señalados indicios, teniendo en cuenta el exiguo monto que
representa en la actualidad la cuota pactada por las partes en febrero de 2005 y los nuevos
requerimientos de los alimentados, considero que la situación económica del obligado al pago
de los alimentos permite solventar la cuota establecida por la Sentenciante, la que considero
equitativa y ajustada a derecho frente a los mayores gastos que de ordinario demandan los
hijos en la edad de los alimentados, lo que me lleva a proponer la confirmación de la cuota
establecida en la sentencia en crisis y la desestimación de los agravios del recurrente.
V.- Como los agravios dan la medida de la competencia de esta Alzada (arts. 260, 261 y 266 del
C.P.C.C.), y los expuestos no logran hacer mella en el decisorio recurrido, propongo su
confirmación, con costas de esta Alzada al apelante vencido (art. 69 C.P.C.C.) y difiriendo la
regulación de honorarios (art.31 ley 8.904).Voto, en consecuencia, por la AFIRMATIVA.-
A la misma cuestión el Señor Juez doctor Russo, por iguales fundamentos votó también por la
AFIRMATIVA.-
A LA SEGUNDA CUESTIÓN: la Señora Juez doctora Ludueña, dijo:
Conforme se ha votado la cuestión anterior, propongo confirmar la resolución de fs. 145/147,
con costas de Alzada al apelante vencido y difiriendo la regulación de honorarios.ASI LO VOTO.
El señor Juez doctor Russo por los mismos fundamentos, votó en análogo sentido.
Con lo que terminó el Acuerdo dictándose la siguiente:
SENTENCIA
Morón, 4 de abril de 2013.-
Comisión Nº 9351 Derecho de Familia y Sucesiones.
Profesor Adjunto: Juan Antonio Seda. Cátedra: Graciela Medina.
www.niunomenos.org.ar
5
DeCyT 2010‐2013 ‐ Facultad de Derecho ‐ UBA
Base de Datos de Jurisprudencia sobre Derecho de Familia y Sucesiones
AUTOS Y VISTOS: De conformidad al resultado que arrojan las votaciones que
instruyen el Acuerdo que antecede, por unanimidad, se confirma la resolución de fs. 145/147,
con costas de Alzada al apelante vencido y difiriendo la regulación de honorarios.DRA. LILIANA GRACIELA LUDUEÑA - JUEZ
DR. JOSE EDUARDO RUSSO - JUEZ
ANTE MI: ESTEBAN SANTIAGO LIRUSSI - SECRETARIO DE LA EXCMA. CAMARA DE APELACION
CIVIL Y COMERCIAL DE MORÓN
Comisión Nº 9351 Derecho de Familia y Sucesiones.
Profesor Adjunto: Juan Antonio Seda. Cátedra: Graciela Medina.
www.niunomenos.org.ar
6
Descargar