presencia en los medios del hecho religioso

EL HECHO RELIGIOSO, ¿PRESENTE EN LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN?
“Tenemos el mejor Mensaje para comunicar, pero experimentamos una gran
pobreza de medios en el mundo de la Comunicación Social”
Así se expresaba Mons. Joan Carrera en la conferencia pronunciada en el Instituto Superior de
Ciencias Religiosas Don Bosco, de Martí-Codolar, Barcelona, dentro del Curso de Actualidad Pastoral
que en el presente año (29-31 de marzo) ha reflexionado el tema: “Presencia e imagen del hecho
religioso en los Medios de Comunicación”
Ésta ha sido una constante en la intervención de los diversos oradores que han participado en el
curso. Ya cuando se pensó en los objetivos para este curso claramente se proponía “analizar y valorar
el trato que dan los Mass Merdia al hecho religioso” para poder identificar posteriormente los retos que
se plantean como oferta pastoral en el momento actual, de forma especial en el mundo de los jóvenes.
En el curso presentaron sus ponencias Francesc Grané, Norberto Alcover, Mons. Joan Carrera
y Peio Sánchez, que se han complementado con una mesa redonda a partir de experiencias concretas
en el campo de la televisión y agencias cristianas de noticias.
Desde el primer momento se ha tenido muy presente el texto de la Evangeli Nuntiandi donde Juan
Pablo II recordaba que “junto a los numerosos medios tradicionales en vigor, la utilización de los Mass
Media ha llegado a ser esencial para la evangelización y la catequesis. En efecto, la Iglesia se sentiría
culpable ante su Señor si no emplease esos poderosos medios, que la inteligencia humana perfecciona
cada vez más... Gracias a ellos puede hablar a todos los pueblos.” (nº 45)
Y Dios, digitalmente, ha acampado entre nosotros
Así introducía su tema Francesc Grané, director de Eulogos Media y profesor de Comunicación
Social en la Universidad Blanquerna. El lenguaje audiovisual como expresión de la experiencia religiosa
tiene grandes posibilidades y perspectivas, no ajenas a muchas dificultades. En este campo de la
comunicación se constata – decía – que los cristianos intervienen poco y en muchas ocasiones salen
malparados. También es cierto que en muchos periodistas se nota una gran ignorancia en los temas
religiosos.
De todas maneras, es patente que la experiencia religiosa y el mensaje cristiano puedan estar
presentes en los lenguajes audiovisuales, aun en medio de la “vanalidad” que ofrece la televisión, por
poner un campo como paradigmático de las posibilidades del audiovisual y de la comunicación de
masas.
De todas maneras, remarcó unos elementos a tener en cuenta y que resumió en los siguientes:
- Los Media, especialmente la televisión, tienen sentido en cuanto son instrumentos de
comunicación masiva, con una audiencia muy amplia.
- Es falso decir que la experiencia religiosa no tiene imágenes y que, por tanto, no es apta para los
lenguajes audiovisuales
- La Iglesia ha sido pionera en los lenguajes audiovisuales, desde la misma presencia de Jesús
con el uso del lenguaje de las parábolas, pasando por el lenguaje simbólico sacramental (agua, pan,
vino...) hasta llegar a muchas de las expresiones religiosas vividas en la Semana Santa.
- A través de los medios de comunicación Dios entra directamente en casa, de forma digital.
- El hecho religiosos supera la imagen de una ONG global. No se agota con elementos
sociológicos. Es mucho más. Con frecuencia se olvida que es una experiencia personal de salvación.
Los Media pueden ayudar mucho a comprender el sentido del cristianismo y de la interiorización del
mensaje liberador de Jesús.
Los medios nos han invadido: ya no necesitamos pensar; sólo hay que ver.
Norberto Alcover, jesuita, periodista muy conocido en los medios de comunicación, presentó “La
trama oculta de los Medios de Comunicación”
Todos nosotros – decía – por el hecho de vivir en un ámbito desarrollado y tecnificado del planeta,
estamos inmersos, condicionados y colonizados por el universo mediático. Esto es así y no sólo una
opinión. Hoy tenemos la suerte de tener un acceso plural a la realidad y hasta podemos “sospechar” y
escoger, como nunca anteriormente. Esta es la suerte, pero también entraña la dificultad de la trama por
donde se mueven esos medios como ventana a la realidad.
Hay que tener presente que todos estos medios condicionan altamente, favorecidos por la
publicidad que lo invade y condiciona todo: la prensa (con el gran fenómeno de la “prensa gratuita”), la
radio (el fenómeno mediático más desarrollado en España), el cine (600 películas se estrenan cada año
en España de las que 400 son americanas, y que se multiplican hasta 3000 en la presentación
televisiva), la televisión (con un promedio de 20 a 25 millones de espectadores al día); el mundo de la
moda (unas 50 pasarelas al año, más cadenas televisivas sobre el tema): la música digital (unos 1000
compactos nuevos y diferentes se editan cada año). A todo esto hay que añadir las posibilidades que
ofrece ahora internet (“usted puede navegar siempre y por donde quiera”): pulsando un botón hay
acceso a todos estos medios.
La gran dificultad está en si todos estos datos los procesamos correctamente. Porque la publicidad
ya nos los da procesados. Se va pasando del “homo scriptor” al “homo videns” (Ramonet) y Humberto
Eco le añadirá el “homo ingenus”. Usted ya no tiene que pensar sino ver, oír. Nos han invadido. ¿Se
puede imaginar la reacción que tendría en la sociedad un solo día sin ninguno de estos medios? La
dificultad en humanizar la televisión está en que antes hay que pensar, ser críticos, tomar distancia del
universo mediático que nos determina la vida.
Valores como la paz, la ética social y los grandes testigos pueden servir de punto de arranque.
Mons Joan Carrera, obispo auxiliar de Barcelona, intervino también con el tema “Iglesia y Media”.
Si los medios son una forma de expresión, lo básico es tener algo importante que comunicar. Pero
también es cierto que se puede malograr los contenidos por falta de medios. De ahí que resulta
imprescindible unir el contenido y los medios.
La Iglesia es comunicadora porque ha recibido de Cristo la mejor comunicación: Jesús es el mejor
comunicador. Y deja este encargo a la Iglesia: “Como el Padre me ha enviado, así os envío yo a
vosotros”. Por eso le interesan los medios de comunicación como transmisores de la Buena Noticia en
los tiempos actuales.
No hay que olvidar que la comunicación fundamental es la relación entre personas. Con
frecuencia nos resulta más fácil navegar por internet que relacionarnos con nuestros vecinos; sabemos
lo que pasa en unos países lejanos, pero desconocemos lo que le pasa al vecino de casa. La
Eucaristía, por ejemplo, es un hecho profundo de comunicación como intercambio de experiencias, de
resonancia de la palabra, de intercomunicación. Recordaba Mons. Carrera, que en tiempos del
franquismo F. Candel decía que no faltaba nunca a la misa del barrio “porque era el único espacio de
comunicación libre”
Si esta es la cara , la cruz está en que desde la aparición de los Media hemos experimentado que
ha bajado el nivel de la escuela como medio de comunicación. Igualmente el de la familia. También el
de la Parroquia como valor comunicativo y presencia entre los jóvenes... Y ha crecido, en cambio, el de
la imagen como avasalladora, potenciada por esos medios. Si como Iglesia no disponemos de los
medios necesarios para acercarnos a las personas, nos encontramos con una gran carencia. Los Media
crean sentimientos y sensaciones. Y nosotros seguimos anclados al mundo de las ideas y de los
conceptos, cuando la gran masa consume sentimientos y sensaciones sin espíritu crítico.
Contraponerlos a ideas nos lleva al fracaso.
Es absolutamente necesario estar presentes en los medios de comunicación. A veces preferimos
la predicación local a la presencia en estos medios más globales y masivos. Una presencia en este foro
que debe ser de confianza y valentía, sin complejos de inferioridad, en medios eclesiales propios, si es
posible, pero sin duda en los ya existentes en el espectro mediático. Una presencia que no sea
excluyente ni prepotente, siendo veraces, sin mezclar la noticia con su interpretación, ampliamente
asumible y que supere las divisiones internas. Presencia con propuesta de otros puntos de vista de
esta realidad que nos envuelve muy diferentes, posiblemente, de lo que nos quieren imponer otros
medios. No hay duda de que hay valores susceptibles de arranque para el diálogo, como la paz y la
democracia, la ética social, los grandes testigos.
Experiencias de presentación del hecho religioso en los Mass Media: Televisión, agencia de
noticias y cine.
En una mesa redonda se presentaron también realidades concretas en este campo de los medios
de comunicación social, desde la presencia de Iglesia.
Ramon Safont-Trias, coordinador del programa “Creure avui” de TVMataró, presentó una rica
experiencia en el campo televisivo. Un programa nacido a partir de la reflexión hecha en el 1987 sobre
unos ámbitos de pastoral de las parroquias de la ciudad. Lleva ya 15 años de emisión semanal, de 30
minutos, con un total de 538 programas y unos 120 colaboradores. Todo ello se ofrece en 4 formatos,
que por semanas, son: temas de hoy, libros y cine; opinión y noticias; cultural y de actualidad;
actualidad y noticias. Una rica experiencia, muy aceptada en la ciudad y poblaciones vecinas, pero que
según Ramón, debe seguir con propuestas de futuro que pasan por la formación, para dar respuestas a
nuestra fe; la presencia en otros medios existentes y un trabajo en red, con la participación de expertos
y técnicos.
Francesc Rosaura, director de “Signes dels temps”, emitido desde Televisión de Cataluña,
presentó otra experiencia, esta vez de ámbito más amplio, en el campo televisivo. Nació el programa en
1986, pactado entra Iglesia y Tevisió de Catalunya, con lo que ya lleva 19 años en la pequeña pantalla,
el segundo más veterano de los programas existentes. Se emite el domingo, aproximadamente a las
10,15 por Canal 33. Tiene una audiencia media estimada en 40 – 50 mil espectadores, como media
semanal. Se trata de presencia cristiana en una televisión pública. Se programa pensando no solo en
destinatarios no sólo cristianos “practicantes”, sino que también está abierta a “cristianos sociológicos” y
a personas inquietas religiosamente. Con estas emisiones, en formato “magazine”, se pretende informar
de la actualidad de la Iglesia catalana, así como de la universal; tratar grandes temas de la actualidad
desde una visión cristiana y todo ello, abiertos al diálogo ecuménico e interreligioso. Como televisión
profesional cuenta con sus equipos periodísticos y técnicos. A la hora de proponer unas pistas para un
programa religioso resaltaría la necesidad de una ética profesional, fundamentada en la veracidad y el
rigor, cercanía a la actualidad, pluralidad, calidad y recursos televisivos y el testimonio como elemento
básico.
Josep Mascaró, delegado de Comunicación Social de los Salesianos de Cataluña en sustitución
de Agustí Gallart, presentó la nueva Agencia Cristiana de Noticias “Flama”, de reciente creación. Una
agencia con comunicación diaria, de carácter gratuito, con la que se contacta por internet
(www.flama.info) y que puede ser recibida como e-mail. Ha nacido con una voluntad de servicio de la
Iglesia, una y plural, para la evangelización de nuestro pueblo. Presta una atención especial a las
noticias del ámbito de la iglesia y cultura catalana pero se hace extensiva también a la Iglesia universal
a los misioneros relacionados con nuestras tierras y a otras confesiones cristianas. La agencia quiere
recoger la vida que hay en el mundo diocesano con sus diversas manifestaciones cristianas, el ámbito
de las instituciones religiosas, el mundo misionero, con testimonios personales; las iniciativas
promovidas por las ONG’s, intervenciones de instituciones internacionales, los movimientos ecuménicos
y el diálogo interreligioso.
Finalmente, y ya en la tercera jornada, Peio Sánchez, profesor del ISCR Don Bosco y coordinador
de la I Setmana del Cine Espiritual celebrada durante este curso en Barcelona presentó “El hecho
religioso en la historia del Cine” destacando las posibilidades que ofrece este medio en el uso de
metáforas y relatos así como los límites que tiene por el hecho de estar fundamentado en el negocio y
en la realidad virtual, que no es sino un montaje sobre la realidad.
Presentó una relación de películas en las que se recoge el hecho religioso en una de estas tres
formas: explícita, implícita o paradójica, en las que aparecen categorías religiosas de forma confusa
pero que se pueden leer fácilmente.
Los 10 argumentos principales que pueden dar paso a la lectura del hecho religioso pueden ser: 1.
Las historias de redención o el amor que trasparenta y fecunda el sufrimiento. 2. Los caminos de la
reconciliación y las oportunidades del perdón. 3. El rostro de la inocencia y la presencia de la gracia. 4.
Lucha contra el mal y la injusticia o la victoria del bien. 5. Reconocer la patemidad/maternidad para ser
confiadamente hijos. 6. El camino del amor: esponsalidad y fraternidad. 7. El milagro o cuando lo
imposible se hace posible. 8. Los enviados de Dios y sus misteriosos poderes. 9. La oración: silencio y
diálogo con Dios. 10. Morir para vivir
A la hora de presentar 10 directores del cine espiritual, destacó: 1. Carl Th. Dreyer (el maestro). 2.
Robert Bresson: (ante el enigma del mal). 3. Andrei Tarkovski: (esculpir el Misterio) 4. Krzysztof
Kieslowski: (busca a Dios en el hombre) 5. lngmar Bergman: (la duda de la fe) 6. Manoel de Oliveira: (en
el umbral del Espíritu) 7. Ermanno Olmi (la belleza de la santidad). 8. Majid Majidi (la Luz del único Dios.
9. Lars von Traer (la fe del corazón). 10. M. Nigth Shyamalan (la intriga entre la bondad y la maldad)
Y a la hora de recomendar diez películas recientes para leer el hecho religioso de forma implícita o
paradójica destacó las siguientes: 1. La vida es bella (1998) Roberto Benigni. 2. Bailar en la oscuridad
(2000) Lars Von Traer. 3. La historia verdadera (2000) David Lynch 4. El camino a casa (2000) Zhang
Yimou 5. Solas (1999) Benito Zambrano. 6. Un lugar en el mundo (1992) Adolfo Aristarain. 7. El color
del paraíso (1999) Majid Mijidi. 8. La doble vida de Verónica (1991) Krzysztof Kieslowski. 9. El sabor de
las cerezas (1997) Abbas Kiarostami 10. El hombre sin pasado (2002) Aki Kaurismáki
Josep Mascaró i Manasanch, salesià
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