Departamento de Educación Física I.E.S. Sierra de Guadadrrama El ejercicio Físico y la salud 1º De Bachillerato. EL EJERCICIO Y LA SALUD INTRODUCCIÓN Es ampliamente aceptado que el ejercicio físico realizado de forma regular por una persona le da una mejor calidad de vida y menor posibilidad de enfermar. La enfermedad es definida como una condición del cuerpo en la que existe una función anormal de una o más partes de éste. La salud, por el contrario es una condición del cuerpo caracterizada por el vigor y la vitalidad, libre de enfermedades. EL EJERCICIO, LA LONGEVIDAD Y LA CALIDAD DE VIDA Los científicos comparan la duración de la vida en grupos de personas que presumiblemente realizan actividad física con otros grupos similares compuestos por personas inactivas. Existen muchos factores que pueden influir en la longevidad humana y que pueden restar valor a los efectos que el ejercicio realizado durante toda una vida puede ocasionar. Los accidentes de automóvil, las guerras, las enfermedades infecciosas y las epidemias pueden matar a muchas personas que podían haber vivido una vida larga y saludable. De acuerdo con todo esto es previsible encontrar una tremenda diferencia en el promedio de duración de la vida entre poblaciones activas y sedentarias y hacen difícil llevar acabo estudios experimentales que determinen claramente el beneficio del ejercicio físico. A pesar de ello múltiples estudios demuestran que: El ejercicio regular: Mejora la calidad de vida Permite hacer más cosas con menos esfuerzo físico y emocional El sedentarismo: Provoca más cansancio a la hora de realizar actividades Hace más difícil realizar actividades cotidianas (correr para alcanzar el autobús, cargar una bolsa llena, andar por la nieve, etc.....) EL EJERCICIO REGULAR Y LA PREVENCIÓN DE ENFERMEDADES Si la enfermedad es el funcionamiento anormal de una o varias partes del cuerpo, se puede afirmar que la actividad física regular puede prevenir las enfermedades en cierta medida porque ayuda a prevenir las siguientes enfermedades: 3.1. DEGENERACIÓN HIPOCINÉTICA: Carencia relativa de movimiento (paciente escayolado, conductores, oficinistas….). Disminuye la capacidad de funcionamiento de órganos y sistemas: OSTEOPOROSIS (pérdida de proteínas y minerales de los huesos, lo que lo hace propensos a las fracturas. El ejercicio físico es fundamental para fijar el calcio en los huesos) ATROFIA MUSCULAR (debilidad muscular progresiva) PÉRDIDA DE FLEXIBILIDAD (el tejido blando de las articulaciones se torna tenso y se acorta, lo que limita el movimiento) DEGENERACIÓN DEL SISTEMA CARDIVASCULAR (disminuye el volumen de sangre y la cantidad de O2 que esta transporta, aumenta posibilidad de coágulos de sangre -1- Departamento de Educación Física I.E.S. Sierra de Guadadrrama El ejercicio Físico y la salud 1º De Bachillerato. Todos estos síntomas pueden ser tratados con un programa de ejercicios bien diseñado. Así pues, un funcionamiento cardiovascular normal puede ser recuperado con un adecuado programa de ejercicios de resistencia aeróbica. La flexibilidad puede ser incrementada con poco riesgo de lesiones con un programa gradual de estiramientos lentos y estáticos, no balísticos. La pérdida de minerales en los huesos por la osteoporosis puede ser reducida o detenida por medio de programas basados en caminatas moderadas. Los diabéticos que realizan ejercicio físico pueden reducir las dosis de insulina inyectada. El 70% de las personas entre 20 y 55 años padecen dolores crónicos en la zona lumbar de la espalda, el trabajo de fuerza isométrica y los estiramientos de los abdominales disminuyen las molestias. En general la actividad física mejora la atrofia muscular, regula las funciones renales e intestinales, etc… 3.2. LA ENFERMEDAD CORONARIA. Es la obstruccuión de una o más arterias que suministran oxígeno al músculo cardiaco. Un elevado % de habitantes en países desarrollados empiezan a sentir algún síntoma de enfermedad coronaria a partir de los 40 años. Por tanto, los estudiosos analizan la carencia de ejercicio como un factor de riesgo en la enfermedad coronaria (corazón). Existen otros factores: obesidad, dietas con alto contenido de grasa animal, elevado el nivel de colesterol; hipertensión, diabetes, consumo de tabaco y alcohol, factores personales (stress), historial familiar. Todos los estudios comparativos nos llevan a pensar que el ejercicio regular ayuda a prevenir las enfermedades coronarias ya que se mejora la contracción del miocardio, los niveles de grasa en sangre, la fluidez del sistema vascular, la tensión arterial, la estabilidad psíquica, etc… Los ataques al corazón están asociados con la acumulación de depósitos de grasas en las paredes de las arterias, especialmente en las paredes coronarias. La arteroesclerosis es una enfermedad que se produce por el estrechamiento del diámetro de las arterias en razón de la acumulación de grasas en las paredes de éstas. El efecto del ejercicio regular ha sido estudiado en diferentes especies de animales y salvo raras excepciones, el ejercicio físico provocó una reducción de grasas en las paredes arteriales, así como una disminución del 15% del peso corporal. Se ha demostrado que incluso es mucho más eficaz PREVENIR que tratar la enfermedad una vez adquirida por eso es fundamental adquirir hábitos de práctica de ejercicio físico aeróbico desde la niñez. El efecto del entrenamiento para la eliminación de grasa en sangre dura tres días, por lo que los programas para conseguir resultados positivos tienen que proponer al menos práctica en días alternos. Respecto a la estabilidad psíquica hay evidencias que nos indican que hay cierto tipo de tensiones psicológicas, patrones de personalidad y estilos de vida que pueden significar factores de riesgo para contraer la enfermedad coronaria. Aún sin estar delimitado específicamente, está claro que las personas sometidas a programas regulares de entrenamiento mejoran su visión del mundo exterior. Hace años los pacientes que sufrían un ataque al corazón eran sometidos a un reposo casi total en cama. Como resultado de esto se presentaban cuadros de degeneración hipocinética, así pues muchos no se encontraban preparados para volver a su trabajo. Hoy, los cardiólogos insisten en el mínimo reposo en cama y están prescribiendo programas de ejercicios para ayudar a sus pacientes a retornar a una vida normal, incluso algunos ya rehabilitados han podido finalizar una carrera de maratón. Comparaciones clínicas realizadas en pacientes sometidos a programas de ejercicios y pacientes no sometidos a éstos sugieren que los índices de “re-infartos” y mortalidad están por debajo en los pacientes que se -2- Departamento de Educación Física I.E.S. Sierra de Guadadrrama El ejercicio Físico y la salud 1º De Bachillerato. ejercitaban y sus beneficios derivados de los ejercicios incluyen: Incremento de la capacidad física de trabajo. Decrece la demanda de oxígeno del miocardio en estado de reposo y ejercicio. Disminuyen las pulsaciones/min. en reposo. Mayores posibilidades de continuar la vida laboral. Mejora de la actitud psíquica, confianza en sí mismo, etc. 3.3. LA OBESIDAD En muchos países, en el tercer mundo, la desnutrición constituye un serio problema que va asociado al incremento de la muerte por diferentes enfermedades, pero en los países desarrollados de Norteamérica y Europa muchas personas “sufren” por la sobrealimentación, fenómeno que también conduce al incremento del riesgo de una muerte temprana. Cuando el alimento ingerido es excesivo y sobrepasa lo que el cuerpo necesita para producir energía, ésta queda depositada en forma de grasa. La obesidad es usualmente definida como un exceso de grasas en el cuerpo y esto es un factor de riesgo de patologías coronarias, hipertensión, diabetes , etc.. Existen formas diferentes para determinar si existe obesidad, una de ella es medir el porcentaje de grasa en el cuerpo. Se considera normal el 12% en hombres y el 23 % en mujeres (esto está determinado por las exigencia de una posible gestación). Se considera obesidad cuando se sobrepasa el 36% de grasa corporal. Las células que almacenan la grasa (tejido adiposo) aumentan en número hasta los 16 – 18 años, en la edad adulta se mantienen constantes. El tamaño (capacidad de almacenaje) también puede aumentar. El ejercicio físico en niños reduce el número de células grasa y aumenta el tejido muscular. Por ello es fundamental prevenir la obesidad en la niñez y juventud. Por otra parte el tejido magro disminuye a partir de los 30 años. Para evitar que aumente el porcentaje de grasa corporal es necesario controlar el gasto calórico, el ejercicio físico ayuda a equilibrarlo. La obesidad puede ser prevenida por medio del ejercicio físico si la cantidad de calorías que aporta la comida no excede de la cantidad de calorías que gasta en forma de energía el organismo cuando se hace una actividad física y cuando se hacen las tareas habituales. Si las personas obesas logran ser motivadas para que realicen ejercicios físicos con regularidad perderán grasa, incrementarán el tejido muscular y podrán perder peso. El ejercicio presenta ventajas importantes frente a las restricciones dietéticas en el tratamiento de la obesidad: No se pierde proteína, sino que se rebaja el exceso de grasa. A medida que se realiza ejercicio se mejora la capacidad funcional de los sistemas muscular y cardiovascular y se evitan síntomas hipocinéticos. El ejercicio sirve de distracción, no así la dieta. La forma preferida de ejercicios en la terapia contra la obesidad es aquella en la que el sujeto sostiene su cuerpo mientras camina (camitas prolongadas), trota o participa en cualquier deporte. Los buenos resultados exigen regularidad y se mejorar con restricción dietética. -3-