RESÚMEN TEMA -2- CORRIENTES E INSTITUCIONES TEMA -2- GÉNESIS DEL SISTEMA EDUCATIVO FRANCÉS: DE LA REVOLUCION AL IMPERIO NAPOLEÓNICO INTRODUCCIÓN La Revolución Francesa fue el primer levantamiento en el que las masas populares destrozaron el poder de la aristocracia; el absolutismo feudal deja paso a la monarquía constitucional, y ésta se precipita ante una república burguesa que se radicaliza hacia la dictadura jacobina revolucionaria y democrática, pero triunfa la burguesía. La Revolución termina con el golpe de Estado de 1794, la erección del Directorio de la alta burguesía en 1795 y el golpe militar de Bonaparte en 1799. PRECEDENTES INMEDIATOS Frente a la tradicional vinculación de la educación a la Iglesia, se proclama que la educación ha de preparar al ciudadano para una sociedad civil con una moral laica que respete la libertad de conciencia, y que oriente a los niños hacia las actividades profesionales, lo que a su vez exige una alfabetización universal y gratuita. Antes de la Revolución se reclamaba una educación que dependiera del Estado, en cambio para la burguesía emergente, “el pueblo debía ser sólo guiado, no instruido, ya que no era digno de ser merecedor de instrucción”, según Voltaire. Para Chalotais “el bien de la sociedad exige ue los conocimientos del pueblo no vayan más allá de sus ocupaciones”. Para Rosseau “el pobre no tiene necesidad de educación, la de su estado es suficiente”. EFERVESCENCIA REVOLUCIONARIA ENTORNO A LA EDUCACIÓN Durante el período revolucionario, esta perspectiva burguesa entrará en conflicto con las pretensiones más socializantes y radicales de los jacobinos(miembros del ala más radical y exaltada de un grupo político de la Revolución. Son republicanos defensores de la soberanía popular, su visión de la indivisibilidad de la nación los llevará a propugnar un estado centralizado. Se confunden a menudo con El Terror).Concordet y Lepeletier son los representantes de estas divergencias, Concordet representa la línea liberal burguesa y Lepeletier representa la línea nacionalista igualitaria y estatalizante. La revolución tardó en concretar sus realizaciones educativas. Sólo los efectos demoledores sobre las instituciones del Antiguo Régimen, que van dejando Francia sin infraestructura escolar, obligarán a improvisar medidas parciales: - 1789 la Asamblea Nacional Constituyente confía a los Departamentos la vigilancia de la educación pública, la enseñanza política y moral. Y en 1791 por ley se creará y organizará una instrucción común a todos los ciudadanos. - 1792 se presenta en la Asamblea Legislativa el informe de Concordet, se suprimen las congregaciones y hermandades, y se prohíbe que la enseñanza pública sea impartida por casas e instituciones religiosas. - 1793 año en el que es ejecutado Luis XVI, el Terror invade Francia, y los problemas educativos se mezclan continuamente con los políticos. - 1794 empiezan a funcionar las piezas básicas de las aspiraciones educativas que se fermentan des de 1789. El 30 oct. se crea la Escuela Normal para la formación de maestros. En setiembre empieza a funcionar la Escuela Politécnica. - 1795Lakanal crea las Escuelas Centrales para afrontar el problema de las escuelas secundarias. Un nuevo decreto en octubre, llamado Carta escolar y Testamento escolar de la Convención, recogen medidas para la enseñanza primaria, las Escuelas Centrales (secundaria), las Escuelas Especiales y el Instituto Nacional de Ciencias y Arte. Las Escuelas centrales insistían en una cultura predominantemente científica, con débil base humanística y literaria, y neutra en cuanto a enseñanza de la educación. - 1799 Bonaparte encarga la redacción de un proyecto que resulta demasiado liberal. Fourcroy lo acomoda mejor a las exigencias del poder personal y el proyecto resultante se concreta en la ley del 1 de mayo de 1802. 1 RESÚMEN TEMA -2- CORRIENTES E INSTITUCIONES ESTADO Y EDUCACIÓN En el período revolucionario el Estado francés está dispuesto a tomar las riendas de la educación de la nación. Se tiene la voluntad de organizar y controlar los elementos de la instrucción. Se alumbran ideas y principios de organización y se realizan experiencias que van a seguir presentes en la vida de los sistemas educativos en los siglos XIX y XX. La educación entendida como un producto de la sociedad y fuente de bienes para la sociedad y fuente igualmente fecunda de bienes para el individuo, es una base estabilizadora para el poder político para el obispo Autun. La estatalización de la enseñanza es un hilo conductor importante en la evolución del pensamiento educativo de la Revolución Francesa. Ya sea Concordet des de la Asamblea Legislativa, o Lepeletier o Romme des de la Convención. Todos coinciden en que la educación futura debe ser el instrumento por excelencia para forjar la unidad de todos los ciudadanos en torno los principios de libertad, igualdad política y fraternidad. Des de el primer momento tienen como objetivo la formación del ciudadano. Por primera vez en la historia se considera como contenido educativo en el currículum educativo, la enseñanza de los deberes cívicos y de la constitución, para ello proliferan los catecismos. Durante el siglo XVIII la sociedad necesita renovar sus fuerzas para enfrentarse a una nueva concepción del universo y de la sociedad, menos teológica y más entregada a las propias fuerzas. El hombre puede cambiar, puede perfeccionarse, y el medio es la educación. Los revolucionarios trataron de introducir estas ideas en la práctica educativa, pero aunque fracasaron, estas ideas estarán presentes en la política educativa y en la pedagogía del siglo XIX. Estas ideas son centradas según R. Hubert en: “libertad y monopolio, gratuidad, obligatoriedad, laicismo, relaciones entre los grados o niveles de estudios, acceso a los niveles superiores, programas, métodos, equilibrio entre la cultura técnica y la cultura liberal, relaciones entre la investigación y la enseñanza, y por encima de todo, el espíritu y fines del sistema pedagógico”. El debate se produjo sobre todo entre los partidarios de una educación fundamentalmente para la burguesía y los partidarios de una educación auténticamente popular, nacional y única como exigía llevar a sus últimas consecuencias los planteamientos revolucionarios. Los planteamientos educativos estuvieron demasiado mezclados con los planteamientos políticos defendidos. Las dos tendencias más enfrentadas a lo largo de la historia de los sistemas educativos europeos durante el siglo XIX son Concordet y Lepeletier. PROYECTOS DE LA BURGUESÍA LIBERAL: EL INFORME DE CONCORDET Para Considerant la Revolución Francesa fue una querella entre las clases superiores. La mayoría de sus miembros eran profesionales de clase media, algún aristócrata liberal y algún eclesiástico progresista. El tercer estado era la burguesía, y ésta no era el pueblo. En los escritos de la Ilustración se reconocen las luces, el bienestar, la naturaleza, el progreso, la lucha contra la tiranía y el fomento de la instrucción como condición de libertad. El Comité de Instrucción Pública de la Asamblea Legislativa creó en 1791 una sección compuesta por Concordet, Lacepède, Arbogart, Pastoret y Romme, a quienes les encargó la elaboración de un plan general de instrucción. Ésta fue la gran ocasión para Concordet, aristócrata liberal entusiasta de la Revolución. Concordet tenía pasión por el bien público, se pronunció a favor de la República, y en 1791 fue designado como miembro del Comité de la Instrucción Púbica, donde formuló su famoso informe “Relación y proyecto de decreto sobre la organización general de la Instrucción Pública”. Aunque este informe nunca se puso en práctica, fue el texto fundamental de las ideas pedagógicas de la Revolución Francesa. Sus teorizaciones sobre el progreso rechazaban la idea del sentimiento religioso, y en sus teorías económicas mostró preocupación por el modo en como la tierra podía alimentar a los hombres. Preconizó también la limitación de los nacimientos. Desde el Comité de la Constitución luchó contra la demagogia, y en 1793 fue denunciado como enemigo de ésta. Fue detenido y preso, y finalmente se suicidó para librarse del suplicio (pena de muerte). Concordet profetizaba un porvenir mejor para los hombres bajo la “santa ley de la igualdad”. Desde entonces van a luchar dos tendencias educativas estatales, 2 RESÚMEN TEMA -2- CORRIENTES E INSTITUCIONES La que quiere que la educación sea un servicio del Estado al derecho individual del perfeccionamiento, - Y la que quiere que la educación sea el molde donde se troquele el ejemplar perfecto y seriado del individuo al servicio del Estado. Concordet encargaba al Estado la organización del sistema educativo, pero no la gerencia. De los cinco niveles previstos,Primaria, Secundaria, Institutos, Liceo y Sociedad Nacional, este último debía asumir el desarrollo y fomento de la ciencia y el control del resto del sistema respecto del Estado; y los primeros niveles, eran los padres y municipios quienes debían intervenir en el gobierno del sistema a través de la elección de profesores. El liberalismo de Concordet no le permitía propugnar una escolarización obligatoria. Sólo el planteamiento científico y racional, debía proporcionar el modelo del sistema. El Estado sólo debía velar por su implantación y desarrollo, y que todos los ciudadanos tuvieran acceso al bien de la instrucción. Concordet prefiere el término instrucción a educación. Importa más el desarrollo del proceso de pensar y la capacidad de propia reflexión que la entrega al alumno de un modo de pensar tradicional ya elaborado.Concordetfunda los cinco grados sucesivos del sistema escolar: - Primer grado. Es la escuela primaria, donde se enseña lo que es necesario a cada individuo, a conducirse a sí mismo y a gozar de la plenitud de los derechos. Durará 4 cursos y será formado por alumnos con capacidades comunes. No fija la edad de comienzo de la escolarización, sólo dice que será cuando el niño empiece a ser capaz de aprender y antes de que puedan ser utilizados en un trabajo útil. No precisa los contenidos de este nivel, pero sí el carácter moral y cívico de la enseñanza en este nivel, instrumentado sobre los hábitos del lenguaje. - Las escuelas secundarias están destinadas a aquellos niños cuyas familias pueden prescindir más tiempo de su trabajo y consagrar a su educación mayor número de años. No precisa la duración de este ciclo pero sí los contenidos (matemáticas, historial natural y de química, enseñanzas más extensas de los principios de la moral y de la ciencia social y lecciones elementales de comercio). - Tercer grado. Se da en los Institutos y abarca los elementos de todos los conocimientos humanos. Debe preparar a los alumnos a “llenar las funciones públicas que exigen más luces o consagrarse con éxito a estudios más profundos”. A los Institutos se les confía la formación de los maestros de las escuelas secundarias y el perfeccionamiento de los maestros de la primaria. La duración de este grado es de 5 años, y se intenta dar al joven un panorama general de los conocimientos de las ciencias naturales y su aplicación, las ciencias morales y la formación cívica. Hace opcional la elección de la intensidad con que se estudia cada materia y la libertad para abordarla sucesiva o simultáneamente. En estos tres primeros grados de la enseñanza, el poder público designa los libros que deben utilizarse. - Cuarto grado. Es la enseñanza superior y se imparte en los Liceos. Concordet desconfía de la vieja universidad y decide prescindir incluso del nombre. La enseñanza superior debe formar a los sabios, a los que “hacen de la cultura su espíritu y del perfeccionamiento de sus facultades una de las ocupaciones de su vida”. Propone la creación de nueve Liceos en todo el territorio nacional, igual en número que Alemania, Inglaterra e Italia. En los liceos serán los mismos profesores quiénes elijan libremente el contenido y el método de su enseñanza. - Quinto grado. Es el último grado de la instrucción de la sociedad, y se realiza en la Sociedad Nacional de las Ciencias y de las Artes, para dirigir y vigilar los establecimientos de instrucción, para ocuparse en el perfeccionamiento de las ciencias y de las artes, para recoger, estimular, aplicar y esparcir los descubrimientos útiles. Concordet crea una organización autónoma de la instrucción pública en la cual el estado no tiene más misión que la tutela y fomento. La educación era demasiado importante para que el Estado se encargara de ella. Era la familia la instancia responsable de ella con la ayuda de la sociedad. El Estado tenía que limitarse a impartir la instrucción necesaria para que el ciudadano pudiera conocer y ejercer sus derechos y deberes como ciudadano. - 3 RESÚMEN TEMA -2- CORRIENTES E INSTITUCIONES VISION JACOBINA DE LA EDUCACION NACIONAL, EL PROYECTO DE LEPELETIER En junio de 1793 Danou, Sieyès y Lakanal habían presentado en equipo un proyecto moderado que defendía la libertad de enseñanza, pero el verano sangriento del mismo año cambió completamente la orientación de la Convencion. Contra el proyecto de Danou, Sieyès y Lakanal, los jacobinos lanzan en la Convencion el escrito póstumo de Lepeletier, el 10 de octubre, que “el gobierno de Francia es revolucionario hasta la paz”, lo que significaba la suspensión de la Constitución. El plan de Lepeletier es un “plan de educación nacional”. Ya no se tiene el sentido de legislar para la humanidad, su pensamiento es mucho más radical, los niños deben ser entregados a la república. La educación es una y la misma para todos, y baja la santa ley de la igualdad, recibirán los mismos vestidos, los mismos alimentos y la misma instrucción. Lepeletier fue diputado de la nobleza, y en 1789 se pasó al partido más avanzado, pidiendo la abolición de la pena de muerte y la supresión de los títulos nobiliarios. Fue elegido presidente de la Asamblea Constituyente en 1790 y representando en la Convención al departamento de Yonne, defendió la libertad de prensa, sostuvo la competencia de la Asamblea para juzgar a Luis XVI. Lepeletier es asesinado en vísperas de la ejecución del rey Luis XVI para vengar su muerte. Para Lepeletier hay un sentido totalitario de formar al hombre para el Estado “educamos hombres destinados a la libertad, pero no existe libertad sin la obediencia a las leyes”. La educación es el medio idóneo para modelar al hombre al servicio del Estado. Todos los niños debían vivir en régimen de internado desde los 5 hasta los 12 años. Se debían atender en la formación de las costumbres y a desarrollar el fomento físico, fuerte y duro. La disciplina rígida acostumbraría a los niños a ordenar sus acciones en el sentido estricto del deber. El endurecimiento físico se conseguía durmiendo en lecho duro y sufriendo los rigores de la intemperie, cuidar el mantenimiento del propio alojamiento y dedicar parte del tiempo a trabajos productivos que ayuden a cubrir los gastos de su educación. El trabajo manual sería “la ocupación principal, lo demás es algo accesorio”. La financiación del sistema corre a cargo de los ciudadanos y la administración está a cargo de un consejo de 52 padres, que por turno, ostentan a la responsabilidad directa de la vigilancia de maestros y alumnos. A partir de los 12 años, a partir de un duro sistema de selección, a cargo de la República, y en régimen de internado, algunos alumnos llegan a un sistema educativo formado por tres niveles: - Primer nivel. Es la escuela pública y tiene una duración de 4 años. Sólo accede uno de cada 50 alumnos procedentes de la educación nacional. - Segundo nivel. Se imparte en los Institutos y tiene una duración de 5 años. Sólo acceden la mitad de los que han cursado la escuela pública (1er nivel). - Tercer nivel. Se imparte en los Liceos y tiene una duración de 4 años. Sólo acceden la mitad de los que han cursado el segundo nivel en Institutos. El plan Lepeletier desarrolla sólo las disposiciones referentes a la educación nacional. La dictadura jacobina pero, no tuvo la suficiente fuerza para imponer las medidas radicales del plan de Lepeletier. El 13 de agosto la Convencion decretaba la creación de “establecimientos nacionales donde los alumnos serán educados e instruidos en común, y las familias que así lo deseen, podrán conservar a sus hijos en las casas paternas recibiendo la instrucción pública igualmente. Paulatinamente, la discusión educativa de la Convención fue moderando sus posturas, aunque insistiendo siempre en la idea de eliminar 2toda idea del cuerpo académico, de sociedad científica y de jerarquía pedagógica” según Bouquier. Consecuencias de la Revolución Francesa para la educación en Europa: - Se consagra la era de la educación nacional. - Se discutió y algunas veces se consiguió, la disolución del monopolio de la Iglesia en los distintos niveles educativos, acelerando la desacralización de la sociedad. - Se incrementó la politización de los problemas educativos, al plantear como fin del sistema la formación de ciudadanos. 4 RESÚMEN TEMA -2- CORRIENTES E INSTITUCIONES - Se alteraron los horizontes culturales al ser declarada la educación como derecho de todos los ciudadanos. LA UNIVERSIDAD IMPERIAL NAPOLEÓNICA Las concepciones educativas surgidas de la Revolución francesa son objeto de compromiso y controversia a lo largo del s. XIX. Por un lado la tendencia liberal se abre paso, y al final del siglo existe ya una amplia instrucción de os ciudadanos. Por otra parte los golpes revolucionarios afirman la intervención del poder político hasta aspirar al monopolio educativo. En mayo de 1806 Napoleón crea un cuerpo docente responsable de la educación en Francia “para tener un medio de dirigir las opiniones políticas y morales”. Para la creación de esta orden laica Napoleón se inspira en los jesuitas. Esta Universidad napoleónica es una corporación pública estatal que monopoliza el derecho de enseñar. Todo el territorio del Imperio queda dividido en academias, y al frente de cada una hay un rector, sometido a la autoridad del Gran Maestre. El monopolio se utiliza para instrumento para conformar la nación, tanto en dirigir opiniones como a establecer una administración fuertemente centralizada y absorbente. La palabra “Universidad” había desaparecido en 1793 y es retomada en 1806 con un sentido nuevo y forzado, y se ampara en ella una realidad totalmente distinta del sentido originario. Para Napoleón la educación es un instrumento de su política, “no habrá un estado político firme si no hay un cuerpo docente con principios fijos”. Los precedentes 1. Proyecto Chaptal Con Napoleón prefiguraban las contradicciones continuas entre las formas sucesivas de entender el Estado y la educación. En la Constitución de 1799 lo único que está claro es la figura del primer Cónsul, Bonaparte. Es el encargado de producir los reglamentos que aseguren la ejecución de las Leyes, todo favorece la intención centralizadora. Napoleón atiende las peticiones escritas de los consejeros locales y los prefectos, que exigen una reorganización de la enseñanza. Los temas de la instrucción pública pasan de depender del Ministerio de Interior a depender de un consejero de Estado encargado de una Dirección General de la Instrucción Pública. En este contexto Napoleón encarga al consejero Chaptal la redacción de un proyecto de Instrucción Pública en 1801. 2. La ley Fourcroy El plan Chaptal no funcionó, por eso Bonaparte encarga a Fourcroy otro nuevo proyecto, que es presentado en 1802. Esta nueva ley inicia la transición entre la libertad de enseñanza de corte liberal de la revolución burguesa y la concentración de los resortes de la instrucción en manos del Estado. La ley Fourcroy se ocupa más de la enseñanza secundaria y superior que de la instrucción popular. En materia de enseñanza elemental significa la vuelta a las instituciones del Antiguo régimen, ya que los maestros eran reclutados por el ayuntamiento de acuerdo con el cura, y a las funciones escolares se les añaden las de secretario del ayuntamiento, ayudante de cura, sepultero,… las retribuciones dependen de la voluntad de los ayuntamientos; y en las grandes ciudades vuelven a establecerse las congregaciones de los Hermanos de las Escuelas Cristianas. En los años siguientes, estas congregaciones de los Hermanos, formaran parte oficialmente de la organización napoleónica de la enseñanza. Esta ley establece dos tipos de establecimientos de enseñanza secundaria: 1. Escuelas comunales, que son dependientes de los ayuntamientos y de iniciativa privada sujetas a la autorización del gobierno y control del perfecto. El gobierno estimula la creación de tales escuelas, a las que considera como preparación al ingreso a los liceos. Desaparece el principio de libertad del ciudadano para abrir centros de enseñanza. 2. Los segundos tipos son los preferidos por Napoleón, que sustituyen las escuelas centrales de la Revolución. En el nivel de enseñanza superior, las escuelas especiales dependían plena y solamente del Estado. 5 RESÚMEN TEMA -2- CORRIENTES E INSTITUCIONES La universidad imperial - Creación de la Universidad napoleónica Napoleón dijo que “el pueblo necesita una religión, por eso es necesario que ésta esté en manos del Gobierno”, concepto igualmente aplicado al de la educación. La concepción napoleónica es la de estado organizador y jefe de la escuela puesta a su servicio; no es tanto una educación como servicio al ciudadano, sino como una educación al servicio del Estado. Para Napoleón no habrá una situación política estable si no existe un cuerpo docente con principios firmes. En 1806 se vota una ley con sólo tres artículos, el art. 1 dice que será creado bajo el nombre de Universidad Imperial un cuerpo encargado exclusivamente de la enseñanza y de la educación pública en todo el Imperio. Se trata sólo de la creación de un cuerpo estatal que ha de monopolizar cualquier tipo de instrucción o educación. - Organización de la Universidad Imperial El artículo 3 de la Ley del 10 de mayo de 1806 que decía que “la organización del cuerpo de enseñanza será presentada en forma de ley al cuerpo legislativo en la sesión de 1810” no se cumplió. Napoleón la realizó por Decreto en mayo de 1808; así como una serie de disposiciones complementarias que van regulando la compleja organización de la Universidad Imperial. Se compone de centros estatales y de centros privados. Los centros estatales son las antiguas escuelas comunales, primarias y secundarias, y los colegios, además de los centros de nueva creación como los liceos y facultades. Los centros privados son además de escuelas primarias, colegios internados. Todos los centros están agrupados en divisiones territoriales llamados academias. Los órganos rectores están bajo la dependencia del Gran Maestre de la Universidad, autoridad suprema nombrada directamente por el Emperador. El Gran Maestre nombra a los rectores de las academias, los decanos de facultades y los directores de los demás centros. Determina la provisión de cátedra, distribuye los alumnos becarios,… es asistido por el Canciller (cuidado de los archivos y sellos de la Universidad) y por el Tesorero (encargado de los presupuestos y gastos de la Universidad). La Universidad se organiza en academias, al frente de cada una hay un rector, que es nombrado por el Gran Maestre por 5 años, y confirmado por el Emperador. Existían inspectores generales e inspectores con jurisdicción en una Academia determinada. - Centros docentes de la Universidad La enseñanza superior se impartía en las facultades. Al frente de cada una de ellas estaba el decano, que era nombrado por el Gran Maestre, y su finalidad era principalmente profesional. Confería los grados de bachiller, licenciado y doctor. Se quiso hacer de los liceos una especie de seminarios de buenos funcionarios. Ningún otro centro secundario recibió tantas atenciones y cuidados como los liceos eran los titulares de la enseñanza secundaria estatal, se organizaron de forma paramilitar, con internado, uniforme y reglamentos estrictos. La duración de este ciclo es de 6 años, 2 de gramática, 2 de humanidades, 1 de retórica, y 1 de matemáticas. La columna vertebral del liceo era la enseñanza del latín y de las matemáticas. La Universidad napoleónica se ocupó muy poco de la enseñanza primaria, fue abandonada a la iniciativa privada y sobre todo a la Iglesia. - La Escuela Normal Superior La penuria de maestros y profesores cualificados se extendía a todos los niveles de enseñanza, pero es en la educación primaria donde se despreocupa más de este tipo de profesorado, habilitando a los miembros de las congregaciones religiosas para impartir tales enseñanzas. En cambio, sí que se preocupó por los docentes de los liceos, la mayoría exsacerdotes juramentados y eclesiásticos. La necesidad de formar profesores imbuidos de los principios y fines de la Universidad Imperial se planteaba como algo urgente. Un Decreto de marzo de 1808 crea un pensionado para la formación de profesores llamado Escuela Normal, que fue la actualización de la Escuela Normal creada en 1794. Esta escuela venía a ser una escuela superior de magisterio, pues sus alumnos estaban destinados a ser profesores de los liceos e incluso de las facultades. 6 RESÚMEN TEMA -2- CORRIENTES E INSTITUCIONES Breve historia de la Universidad Imperial Los resultados de la Universidad napoleónica estuvieron condicionados en buena parte a la dirección del Gran Maestre, que gozaba de prerrogativas muy amplias. Fourcroy tenía esperanzas de ser nombrado primer Gran Maestre de la institución pero no fue el elegido. Napoleón eligió a Fontanes. Después de la caída del Imperio, los obispos reclaman la abro0gacion de los decretos de Napoleón. Finalmente el gobierno se limitó a declarar la plena libertad de los seminarios eclesiásticos y a suprimir el cargo de Gran Maestre y el Consejo de la Universidad. Las ordenanzas del 5 de octubre de 1814 son el primer paso por desmontar la Universidad. La reforma napoleónica quedó abortada por los acontecimientos políticos, y en la restauración, eclesiásticos y liberales se aliaron para desmontar la Universidad napoleónica. La Universidad napoleónica fue el primer intento monopolista del Estado moderno para ordenar la educación del ciudadano al servicio del mismo Estado. Des de entonces, esta tendencia centralista asoma frecuentemente en los sistemas educativos. Aparte, esta organización estatal no logró desplazar la organización eclesial. También ha quedado de la Universidad napoleónica la concepción de los estudios medios, como meros cursos propedéuticos de la enseñanza superior, otra consecuencia ha sido la configuración de los estudios universitarios con un carácter profesional. Los certificados de estudio que eran tradicionales, se pasa a los exámenes de aptitud, condición necesaria y suficiente para el ejercicio de algunas profesiones, justamente aquellas en las que el Estado actúa como empleador principal. 7