INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO QUE... EDUCACIÓN EN MATERIA DE EDUCACIÓN INICIAL

INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO QUE REFORMA LA LEY GENERAL DE
EDUCACIÓN EN MATERIA DE EDUCACIÓN INICIAL
HILDA ESTHELA FLORES ESCALERA, Senadora de la República de la LXII Legislatura al H.
Congreso de la Unión e integrante del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario
Institucional, con fundamento en lo dispuesto en el Artículo 71, fracción II de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como en los artículos 8, numeral 1, fracción I; 164,
numeral 1; 169, numerales 1 y 4, y 172, numerales 1 y 2 del Reglamento del Senado de la
República y demás disposiciones aplicables, me permito someter a la consideración de esta
Soberanía, la presente INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE
REFORMAN LOS ARTÍCULOS 12 FRACCIÓN VIII, 40, 59 SEGUNDO PÁRRAFO, Y SE
ADICIONA EL ARTÍCULO 48 CON UN QUINTO PÁRRAFO, RECORRIÉNDOSE EL
SUBSECUENTE, DE LA LEY GENERAL DE EDUCACIÓN EN MATERIA DE EDUCACIÓN
INICIAL, de conformidad con la siguiente:
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
En el mundo actual, es cada día más generalizada la tendencia y el deseo de que niñas y niños
participen, desde edades tempranas, de algunas experiencias educativas antes de comenzar su
etapa escolar obligatoria.
Dicha tendencia tiene su origen en diferentes factores sociales, económicos, políticos y culturales,
así como en un cambio de mentalidad producido en las últimas décadas, el cual le otorga una gran
importancia a la educación en los primeros años de vida.
Hace algunos años se consideraba que la atención, cuidado y educación en los primeros años de
la vida era un asunto exclusivo del ambiente familiar, y que su intervención sólo se justificaba como
una respuesta a carencias o a un déficit en el seno familiar.
Al paso de los años, con base en ideas de autores como Friedrich Fröbel, María Montessori y
Ovide Decroly, principalmente, la educación inicial (o de manera temprana) se convirtió en una
necesidad de proporcionar a niñas y niños experiencias ricas y estimulantes adecuadas a su edad;
hecho que hoy en día es aceptado de modo general en nuestra sociedad.
Lo anterior nos lleva a definir a la educación inicial como un periodo de atención, cuidado y
educación de niñas y niños en los primeros años de su vida, que se produce fuera de su ámbito
familiar y antes de su etapa escolar obligatoria.
En la práctica, la educación inicial incluye principalmente preescolar, guarderías, estancias
infantiles, jardines de niños, preprimarias y centros de atención, cuidado y desarrollo integral
infantil, los cuales están establecidos para niñas y niños desde los primeros días de su vida y, en
algunos casos, hasta los seis años de edad. Asimismo, en algunos de estos establecimientos se
especifica a la educación inicial como un nivel anterior a la educación preescolar, mientras que en
otros se integra como un requisito previo a la escolaridad gratuita.
Así, la educación inicial es indispensable para garantizar el óptimo desarrollo de niñas y los niños,
ya que este tipo de educación, al trasmitirse en los primeros años de vida del individuo, le permite
contar con conocimientos, aptitudes y habilidades adecuados para desarrollarse con plenitud a lo
largo de su vida.
2.- La Secretaría de Educación Pública (SEP), considera que la educación inicial “es el servicio
educativo que se brinda a niñas y niños menores de seis años de edad, con el propósito de
potencializar su desarrollo integral y armónico, en un ambiente rico en experiencias formativas,
educativas y afectivas, lo que les permitirá adquirir habilidades, hábitos, valores, así como
desarrollar su autonomía, creatividad y actitudes necesarias en su desempeño personal y social”.
De igual forma, la SEP considera que esta modalidad educativa es un derecho de niñas y los
niños; así como una oportunidad para que las madres y padres de familia mejoren y enriquezcan
sus prácticas de crianza.
A cargo de este tipo de educación se encuentra la Dirección de Educación Inicial (dependiente de
la SEP), la cual es la encargada de prestar atención educativa y asistencial a niñas y niños entre
los cuarenta y cinco días de nacidos y hasta los cinco años 11 meses de edad. A través de los
servicios que presta dicha Dirección se busca que niñas y niños reciban la estimulación necesaria
para potenciar su desarrollo físico, afectivo e intelectual, así como cuidados asistenciales para
preservar su salud y apoyar su crecimiento.
3.- La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su artículo 3º consagra que todo
individuo tiene derecho a recibir educación; señalando que el Estado –federación, estados, Distrito
Federal y municipios- impartirá educación preescolar, primaria y secundaria, las cuales son
obligatorias y conforman la educación básica.
En la fracción V del mismo artículo constitucional se estipula que, además de impartir la educación
básica, el Estado promoverá y atenderá todos los tipos y modalidades educativas, incluyendo en
éstas a la educación inicial.
En cuanto a los derechos de niñas y niños, nuestra Carta Magna señala, en su artículo 4º, que en
todas las decisiones y actuaciones del Estado se velará y cumplirá con el principio de interés
superior de la niñez, garantizando de manera plena sus derechos. Asimismo, se señala que tienen
derecho a la satisfacción de sus necesidades de alimentación, salud, educación y sano
esparcimiento para su desarrollo integral.
Además, agrega que los ascendientes, tutores y custodios tienen la obligación de preservar esos
derechos y que el Estado proveerá lo necesario para propiciar el respeto a la dignidad y el ejercicio
pleno de sus derechos, otorgándoles a los particulares las facilidades para que coadyuven al
cumplimiento de ello.
En este tenor, quienes formamos parte de este Congreso de la Unión, tenemos la facultad,
establecida en el artículo 73, fracción XXIX-P, de expedir leyes que establezcan la concurrencia de
la Federación, los Estados, el Distrito Federal y los Municipios, en materia de derechos de niñas,
niños y adolescentes, velando en todo momento por el interés superior de los mismos y
cumpliendo con los tratados internacionales de la materia, de los que México sea parte.
4.- Además de nuestra Ley Fundamental, a nivel internacional existen una serie de instrumentos
internacionales que convergen en la protección de los derechos de niñas y niños, y de los que
México es parte. El más importante es la Convención sobre los Derechos del Niño, adoptada por la
Asamblea General de las Naciones Unidas en 1989 y aprobada por el Senado de la República el
19 de junio de 1990. Este instrumento internacional define los derechos mínimos que los Estados
Parte deben garantizar para asegurar a las niñas y niños un nivel de vida acorde con su condición,
y así permitirles un desarrollo integral.
Dentro de los derechos de niñas y niños consagrados en dicha Convención se encuentran: vivir en
un entorno seguro, afectivo y libre de violencia; recibir cuidado y protección contra actos u
omisiones que afecten su integridad física o psicológica; recibir atención médica y una alimentación
que les permita tener una nutrición adecuada, y recibir servicios de calidad, por parte de personal
apto, suficiente y que cuente con formación y capacidades desde un enfoque de los derechos de la
niñez.
También tienen derecho a no ser discriminados; a recibir orientación y educación apropiadas a su
edad, orientadas a lograr un desarrollo físico, cognitivo, afectivo y social; al descanso, al juego y al
esparcimiento, y a participar, ser consultados y expresar libremente sus ideas y opiniones, de
acuerdo a sus posibilidades y que dichas opiniones sean tomadas en cuenta.
Son estos derechos lo que se deben fomentar y promover al interior de nuestras sociedades, de
ahí la importancia de su inclusión en la Ley General de Educación. De igual forma, son estos
derechos los que se deben fomentar y promover a través de su inclusión en los planes y
programas para la educación inicial que se generan en nuestro país, con la finalidad de proteger,
cuidar y lograr un desarrollo integral de nuestras niñas y niños.
Por su parte, con respecto al tema de la educación inicial, nuestra legislación actual ya la
contempla. Es así que el artículo 9 de la Ley General de Educación establece que, además de
impartir la educación preescolar, la primaria, la secundaria y la media superior, el Estado
promoverá y atenderá todos los tipos y modalidades educativos, incluida la educación inicial.
En este tenor, el artículo 39 de la Ley mencionada estipula que en el sistema educativo nacional
queda comprendida la educación inicial, además de la educación especial y la educación para
adultos.
Asimismo, en los artículos 32 y 33 de la misma Ley se señala que para que las autoridades
educativas establezcan condiciones que permitan el ejercicio pleno del derecho a la educación de
calidad de cada individuo, una mayor equidad educativa, así como el logro de la efectiva igualdad
en oportunidades de acceso y permanencia en los servicios educativos, llevarán a cabo, entre
otras actividades, el fortalecimiento de la educación especial y la educación inicial, incluyendo a las
personas con discapacidad (lo anterior se establece en la adición de una fracción IV Bis al artículo
33 de la Ley General de Educación, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 11 de
septiembre de 2013).
5.- La presente Iniciativa tiene como objeto reformar y adicionar diversas disposiciones de la Ley
General de Educación, para incluir que en los planes y programas de estudio destinados a la
educación inicial se fomente y promueva el respeto de los derechos humanos de niñas y niños, en
consonancia con lo establecido en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en
los Tratados Internacionales de los que México sea Parte. De esta manera, se pretende que niñas
y niños, desde una edad temprana, conozcan sus derechos.
En este sentido se propone reformar la fracción VIII del artículo 12 de la Ley General de Educación
para añadir como una de las atribuciones exclusivas de la Secretaría de Educación Pública, como
autoridad educativa federal, la de revisar que en los planes y programas de educación inicial que
formulen los particulares, se fomente y promueva el respeto de los derechos de las niñas y los
niños.
Con lo anterior, se pretende que la autoridad federal, si bien no está obligada a impartir educación
inicial, revise los planes y programas que tengan como destinatarios a niñas y niños menores de
cinco años, once meses de edad, velando para que sus derechos sean promovidos y protegidos.
Esta reforma al artículo 12 se complementa con la propuesta de adicionar un quinto párrafo al
artículo 48 de la mencionada Ley, en el cual también se propone que la Secretaría de Educación
Pública revise que en los planes y programas para la educación inicial se fomente y promueva el
respeto de los derechos de niñas y niños, los cuales están establecidos en nuestra Constitución,
pero también en los Tratados Internacionales signados por nuestro país y de los cuales es parte.
Asimismo, se busca reformar el segundo párrafo del artículo 59, con el objeto que de los
particulares que presten servicios de educación inicial cuenten con personal capacitado y con los
conocimientos necesarios que les permitan, en su interacción con niñas y niños, proteger y
promover el respeto de sus derechos.
En cuanto al artículo 40, propongo reformarlo con la finalidad de adecuar la información que la SEP
publica a través de la Dirección de Educación Inicial, en la cual señala que la modalidad de la
educación inicial se presta a niñas y niños entre los 45 días de nacidos y hasta los 5 años, 11
meses de edad, a través de tres modalidades: escolarizada, semiescolarizada y no escolarizada.
En este sentido, cabe destacar que la modalidad de educación inicial escolarizada es la que ofrece
diversas funciones con una dimensión pedagógica, que permiten a las niñas y niños su
preparación para la vida escolar obligatoria. Esta función preparatoria para el nivel primario
constituye una especificación de la función pedagógica y trata de enfatizar el carácter propedéutico
del nivel de cara al ingreso a la escolaridad elemental, a través del desarrollo de habilidades
especiales para la introducción a la lecto-escritura y la matemática elemental, e introducir códigos y
reglas propias de la cultura escolar.
Mención especial es este rubro merecen los Centros de Desarrollo Infantil (CENDI), los cuales
ofrecen servicios asistenciales y educativos en la modalidad escolarizada a niñas y niños que van
de los 45 días de nacidos a los 5 años 11 meses, quienes son hijos de padres y madres
trabajadoras.
En cuanto a la modalidad semiescolarizada, ésta se centra principalmente en aquella prestada en
los Centros de Educación Inicial (CEI) –antes llamados Centros Infantiles Comunitarios (CIC), que
surgen durante la última década del siglo XX-, los cuales aportan asistencia educativa a niñas y
niños de 2 a 4 años de edad que viven en comunidades urbano marginadas del Distrito Federal y,
que a su vez, sus madres no gocen de prestaciones laborales.
Por su parte, la modalidad de educación inicial no escolarizada es una alternativa educativa para
las madres y padres de familia que les ofrece orientación y atención, a través del trabajo en
módulos y por medio de técnicas grupales que propician aprendizajes sobre pautas y prácticas de
crianza, y va dirigida a apoyar la formación y educación de niñas y niños desde su nacimiento
hasta los 4 años de edad.
Considero pertinente que en los planes y programas para la educación inicial se debe contemplar
el fomento y la promoción del respeto de los derechos de niñas y niños en México, ya que
protegiendo a quienes son nuestro presente y nuestro futuro lograremos modificar nuestra realidad.
Por ello, es necesario modificar la educación que se presta en edades tempranas para crearle a la
niñez una conciencia crítica hacia la protección de sus derechos; ya que ésta puede ser una forma
para que crezcan de manera integral, desarrollándose plenamente, respetándose y respetando a
los demás, y por qué no, modificando las estructuras que este país necesita.
Por lo anteriormente descrito, y con fundamento en las disposiciones señaladas, someto a la
consideración de esta H. Asamblea la siguiente:
INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMAN LOS ARTÍCULOS
12, FRACCIÓN VIII; 40; 42, PRIMER PÁRRAFO; 59, SEGUNDO PÁRRAFO, Y SE ADICIONA EL
ARTÍCULO 48, CON UN QUINTO PÁRRAFO, RECORRIÉNDOSE EL SUBSECUENTE, DE LA
LEY GENERAL DE EDUCACIÓN, EN MATERIA DE EDUCACIÓN INICIAL
Artículo Único. Se reforman los artículos 12, fracción VIII; 40; 42, primer párrafo; 59, segundo
párrafo, y se adiciona el artículo 48, con un quinto párrafo, recorriéndose el subsecuente, todos de
la Ley General de Educación, para quedar de la siguiente manera:
Artículo 12.- Corresponden de manera exclusiva a la autoridad educativa federal las atribuciones
siguientes:
I. a VII.- …
VIII.- Fijar los requisitos pedagógicos y lineamientos generales de los planes y programas de
educación inicial que, en su caso, formulen los particulares, revisando que dichos planes y
programas fomenten y promuevan el respeto de los derechos de niñas y niños;
IX a XIV.- …
Artículo 40.- La educación inicial tiene como propósito favorecer el desarrollo físico, cognoscitivo,
afectivo y social de niñas y niños desde cuarenta y cinco días de nacidos y hasta los cinco
años, once meses de edad. Incluye la orientación a padres de familia o tutores para la educación
de sus hijas, hijos o pupilos.
Artículo 48.- …
…
…
…
En los planes y programas de estudio para la educación inicial, la Secretaría revisará en
todo momento que en éstos se fomenten y promuevan el respeto de los derechos de niñas y
niños establecidos en el marco jurídico nacional, así como en los tratados internacionales
de los que el Estado Mexicano sea parte.
…
Artículo 59.- …
En el caso de educación inicial deberán, además, contar con personal que acredite la preparación
adecuada para impartir educación, a quienes deberán capacitar en temas relacionados con la
protección y promoción del respeto de los derechos de niñas y niños; contar con
instalaciones y demás personal que satisfagan las condiciones higiénicas, de seguridad y
pedagógicas que la autoridad educativa determine; cumplir los requisitos a que alude el artículo 21;
presentar las evaluaciones que correspondan, de conformidad con lo dispuesto en esta Ley y
demás disposiciones correspondientes que deriven en el marco del Sistema Nacional de
Evaluación Educativa, y tomar las medidas a que se refiere el artículo 42, así como facilitar la
inspección y vigilancia de las autoridades competentes.
ARTÍCULOS TRANSITORIOS
ARTÍCULO ÚNICO.- El presente Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el
Diario Oficial de la Federación.
Salón de Sesiones de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión a 28 de mayo de
2014.
SENADORA HILDA ESTHELA FLORES ESCALERA.