GuÃaNº2_FilosofÃa_LCCP_4º medio A y B electivo

Anuncio
LICEO CARMELA CARVAJAL DE PRAT
PROVIDENCIA
DPTO DE FILOSOFÍA
Guía de Aprendizaje
GUÍA DE APRENDIZAJE Nº 2
FECHA DE EDICIÓN 14 de octubre
SECTOR: Filosofía Electivo-Humanistas
NIVEL/CURSO: 4tos medios A y B
PROFESOR(ES) : Claudia Calderón
MAIL DE PROFESORES : Para consultas
[email protected]
UNIDAD TEMÁTICA O DE APRENDIZAJE:
Diversidad de Observadores diversidad de conocimiento
CONTENIDO: La percepción y los sentidos
La percepción Humana como proceso Activo y Selectivo
La percepción y el conocimiento
Objetividad e intersubjetividad del conocimiento
APRENDIZAJE(S) ESPERADO(S):
a.- Reconocen la percepción humana como un proceso que se construye
b.- Reconocen como condicionantes de la percepción elementos fisiológicos, cognitivos,
personales o subjetivos y personales
c.- Reconocen la importancia de los sentidos en la descripción de la realidad
d.- Distiguen conocimiento perceptivo (sensorial) de conocimiento intelectual
e.- Analizan críticamente las posibilidades del concepto verdad asociado al conocimiento perceptivo
TIEMPO PARA DESARROLLO : 2 semanas:
PLAZO DE ENTREGA: lunes 31 de Octubre
LUGAR: Café Literario Parque Bustamante de 12 a 13 horas
Queridas alumnas, en esta nueva sub unidad les invito a indagar y profundizar sobre aquello que llamamos
Conocimiento y cómo se relaciona con la realidad. ¿Qué está pasando en nosotros cada vez que un
determinado conocimiento comienza a nutrir nuestra experiencia? ¿Repercute en nuestra forma de
percibir la realidad?
En la guía escrita a continuación ustedes podrán ir siguiendo mentalmente e ir comprendiendo cómo se
van realizando procesos físicos y psicológicos para constituir una de las relaciones más misteriosas, la
que se genera entre el hombre y su Mundo Circundante, esta relación da por resultado una mirada
particular de la realidad llamada Conocimiento.
Además, al terminar esta guía les permitirá observar que no es posible juzgar a otros seres humanos por
no ver aquello que sí puedes estar viendo tú, pues este proceso que origina el conocimiento y que
comenzamos a estudiar en la guía Nº1, parte con las Percepciones y éstas están matizadas como
iremos viendo a lo largo de esta unidad, por la estructura física y la historia de vida en cada ser humano,
ambas irán generando relaciones y miradas de la realidad que operan de manera única e irrepetible, al
igual que cada uno de nosotros.
He seleccionado un texto de Russell, que ilustra claramente esta idea. La de observar una realidad a
partir de su experiencia y condición perceptiva. El hace una descripción de una mesa más allá de la
observación mecánica sensorial. El describe desde su ser. Construcción magnánima constituida por su
experiencia, historia y rasgos fisiológicos. Al describir esta mesa lo hace considerándola parte de sí
mismo y de su vivencia en ese instante
Este tipo de descripción recibe el nombre de Fenomenológica, de la que Russell es considerado su
principal representante. Hacer una descripción de este tipo es muy distinto a una descripción científica o
poética, pues en la fenomenológica la realidad descrita está integrada al sujeto que describe y atiende a
una intersubjetividad entre el sujeto y objeto observado.
Al leer observen cómo el filósofo conservando las propiedades objetivas de aquello observado,
enriquece esta descripción con matices propios de su experiencia con la mesa en ese momento y no en
otro (por ejemplo pasado), complementando esta descripción con la intervención de distintos factores,
recogidos por la integración conciente de sus sentidos….
Texto nº 1
Apariencia y realidad
Cualquier afirmación sobre lo que nuestras experiencias inmediatas nos dan a conocer tienen grandes
probabilidades de error. En este momento me parece que estoy sentado en una silla, frente a una mesa de
forma determinada, sobre la cual veo hojas de papel manuscritas o impresas (…). Para hallar las
dificultades, concentremos la atención en la mesa. Para la vista es oblonga, obscura y brillante, para el
tacto, pulimentada, fría y dura; si la percuto, produce un sonido de madera.
Cualquiera que vea, toque la mesa u oiga dicho sonido, convendrá en esta descripción, de tal modo
que no parece pueda surgir dificultad alguna; pero desde el momento en que tratamos de ser precisos
empieza la función. Aunque yo creo que la mesa es “realmente” del mismo color en toda su extensión, las
partes que reflejan la luz parecen mucho más brillantes que las demás y algunas parecen blancas a causa
de la luz que la refleja. Sé que, si yo me muevo, serán otras las partes que reflejen la luz, de modo que
cambiará la distribución aparente de los colores en su superficie. De ahí se sigue que si varias personas en
el mismo momento, contemplan la mesa, no habrá dos que vean la misma distribución de colores, puesto
que no puede haber dos que la observen desde el mismo punto de vista, y todo cambio de punto de vista
lleva consigo un cambio en el modo de reflejarse la luz.
Para la mayoría de los designios prácticos, esas diferencias carecen de importancia, pero para el
pintor adquieren una importancia fundamental: el pintor debe olvidar el hábito de pensar que las cosas
aparecen con el color que el sentido común afirma que “realmente” tienden, habituarse, en cambio, a ver
las cosas tal y como se le ofrecen. Aquí tiene ya su origen una de las distinciones que causan mayor
perturbación en la Filosofía, la distinción entre “apariencia” y “realidad”, entre lo que las cosas parecen ser
y lo que en realidad son. El pinto necesita conocer lo que las cosas parecen ser; el hombre práctico y el
filósofo necesitan conocer lo que son; pero el filósofo desea este conocimiento con mucha más intensidad
que el hombre práctico, y le inquieta mucho más el conocimiento de las dificultades que se hallan para
responder a esta cuestión.
Volvamos a la mesa. De lo establecido resulta evidentemente que ningún color parece ser de un modo
preeminente el color de la mesa, o incluso de una parte cualquiera de la mesa; esta parece ser de
diferentes colores desde puntos de vistas diversos, y no hay razón alguna para considerar el color de
alguno de ellos como más real que el de los demás. Sabemos igualmente que aún desde un punto de
vista dado, el color parecerá diferente con su luz artificial, o para un ciego, o para quien lleve lentes azules,
mientras que en la oscuridad no habrá en absoluto color, aunque para el tacto y para el oído no haya
cambiado la mesa. Así, el color no es algo inherente a la mesa, sino algo que depende de la mesa y del
espectador y del modo como cae la luz sobre la mesa. Cuando en la vida ordinaria hablamos del color de
la mesa, nos referimos tan sólo a la especie de color que parecerá tener para un espectador normal, desde
un punto de vista habitual y en las condiciones usuales de luz…
Así, resulta evidente que la mesa real, si es que realmente existe, no es la misma que experimentamos
directamente por medio de la vista, el oído o el tacto. La mesa real, si es que realmente existe, no es, en
absoluto, inmediatamente conocida, sino que debe ser inferida de lo que nos es inmediatamente conocido.
De ahí surgen, a la vez, dos problemas realmente difíciles; a saber: 1º ¿existe en efecto una mesa real?
2º En caso afirmativo, ¿Qué clase de objeto puede ser? ….Nuestra mesa familiar, que generalmente sólo
había despertado en nosotros ideas insignificantes, aparece ahora como un problema lleno de
posibilidades sorprendentes. Lo único que sabemos de ella es que no es lo que aparenta. Más allá de este
modesto resultado, tenemos la más completa libertad conjetural (…)
La duda sugiere que acaso no existe en absoluto mesa alguna. La filosofía, si no puede responder a
todas las preguntas que deseamos, es apta por lo menos para proponer problemas que acrecen el interés
del mundo y ponen de manifiesto lo raro y admirable que se oculta justamente bajo la superficie, aun en las
cosas más corrientes de la vida cotidiana.
B. Russell: los problemas de la filosofía págs. 15 a 22
Actividad Nº 1
En grupo elijan un objeto único para describir todas juntas y realicen una descripción fenoménica de lo
observado.
Comenten la experiencia.
Deben reportar:
1.-Realizar una definición propia, en no más de 6 líneas, de Descripción Fenoménica. 7pts
2.- Elegir un objeto cualquiera y realizar una breve descripción fenoménica en no más de 6 líneas. 7pts
3.- Las dificultades o facilidades que tuvieron para describir el elemento, considerando no alterar las
cualidades objetivas de lo observado pero filtrarlas por vuestros sentidos. Refiera a lo menos dos
aspectos. (7pts)
Recuerden que no deben confundir una descripción poética o metafórica ni menos una descripción
científica, con la descripción fenomenológica que deben realizar
4- Mencione a lo menos tres factores que determinaron su descripción (7pts)
Actividad Nº 2
*La nota de esta actividad constituye una tercera nota
¿Qué es conocer?
Sería completamente insensato pretender dar ahora, la solución a esta problemática. Únicamente vamos a
intentar, desde una perspectiva filosófica contemporánea, realizar un análisis del conocimiento más
completo, ello permitirá encontrar algunos caminos de solución de los problemas fundamentales.
No existe una forma única de conocimiento
Pasar por alto este hecho conduce a graves confusiones. No es lo mismo el conocimiento
sensorial (la percepción) atada al dato sensible presente y particular, que el conocimiento intelectual,
cuyo objeto -en principio abstracto y general, como el “ser humano” o “la belleza”- no existe (al menos
como existe Juan). En consecuencia el problema de la objetividad del conocimiento no es el mismo:
cuando vemos a Juan estamos viendo a Juan mismo (Realismo); pero cuando pensamos “la justicia” el
objeto de nuestro conocimiento es nuestra idea de justicia (Idealismo).
Tampoco son lo mismo conocimiento inmediato y conocimiento mediato. Aquel supone algún tipo de
visión o intuición (sensorial o intelectual) de su objeto, el cual aparece como directamente “presente”
ante la mente: por ello es una forma privilegiada de conocimiento, y en él es más fácil la evidencia. El
segundo –como el conocimiento histórico- carece de tal “presencia” inmediata, y se requiere un proceso
de investigación: el valor de tal conocimiento radica entonces en la solidez de los principios en que se
apoya o en la habilidad de los documentos utilizados.
También se debe distinguir entre conocimiento y pensamiento. Muy en general se puede decir que
hay conocimiento cuando poseemos algún tipo de datos (normalmente empíricos) que nos dan
información a cerca de un objeto concreto. Tales datos permiten, según la terminología neopositivista,
la “verificación” empírica del conocimiento, en cambio el pensamiento no exige tanto. Puedo “pensar lo
que quiera, siempre que no me contradiga aunque no pueda responder de sí a mi pensamiento le
corresponde o no un objeto.
¿Y qué pasa con la verdad…? ¿Existe? Algunas precisiones sobre la verdad
Posibilidad de la verdad. Cuando una proposición aparece claramente como verdadera, decimos que es
evidente. La evidencia es pues, una propiedad de las ideas claras (descartes). Ello permite a la mente
adherirse con absoluta seguridad a lo que se dice de la evidencia. Esta seguridad con que la mente afirma
la verdad de una proposición se llama certeza, la cual es, por tanto, un estado de la mente. Así, “dos más
dos son cuatro” aparece como evidente, y podemos afirmarlo con certeza. La pregunta acerca de la
“posibilidad de la verdad” es, en realidad, la pregunta acerca de la posibilidad de la certeza. Casi nadie ha
negado tal posibilidad en el ámbito de la matemática. Otra cosa es cuando nos referimos acerca de la
realidad.
Para la reflexión : ¿Cómo relaciono el conocimiento con la verdad?
He aquí una idea que pueda guiar tu reflexión….
“Una nueva comprensión –menos abstracta y reductiva- del conocimiento ayuda a resolver o, al menos, a
interpretar desde otra perspectiva muchos problemas y discusiones, pero…suscita otros inéditos hasta el
momento. Ello no es sino una manifestación más del carácter histórico de la lucha del hombre por la
verdad, incluida la verdad acerca del conocimiento. ¿Toda verdad es, por tanto, relativa e histórica, en el
sentido de que cada momento de la historia tiene su verdad? Lo cierto es que cada vez sabemos más y
que hay verdades que son ya adquisiciones definitivas de la humanidad –aunque muchas de ellas
permanezcan casi olvidadas- Pero la verdad última, como tal, nunca estará ya dada. Mientras tanto,
hemos de seguir viviendo y, por ello, hemos de contentarnos con lo que de momento conocemos y
sabemos.”
Ahora unas preguntas….
Actividad 2A
1.- ¿Con qué tipo de conocimientos se maneja la mayoría de las personas en una sociedad? De un ejemplo
2.- Encuentre dos relaciones entre conocimiento y verdad 7pts
3.- ¿En qué condiciones podemos afirmar que una verdad es cierta? ¿O bien debemos afirmar que solo hay
opiniones? 7pts
4.- ¿Qué es una verdad absoluta? ¿Es posible? 7 pts.
5.- ¿Qué motiva a la humanidad a querer buscar siempre más y más conocimiento? 7 pts.
A continuación llevaremos la teoría a cerca del conocimiento y la verdad a un plano más cercano a la
vivencia
Más abajo encontrarán una parábola que es hermosamente ilustrativa de la relatividad del concepto
verdad y cómo se intenta construir a partir de conocimientos previos.
Si leen sin prisa y con atención observarán como los sentidos juegan un papel preponderante, pues
éstos, unidos a la experiencia o historia personal nos sitúan en aquel lugar donde creemos tener el cetro
del acceso a la realidad, dejando de lado cualquier otra posibilidad emanada desde otros cetros con otras
historias y con otras realidades…he aquí la historia…disfrútenla
Seis hindúes sabios, inclinados al estudio, quisieron saber qué era un elefante. Como eran ciegos,
decidieron hacerlo mediante el tacto. El primero en llegar junto al elefante, chocó contra su ancho y
duro lomo y dijo: «Ya veo, es como una pared». El segundo, palpando el colmillo, gritó: «Esto es tan
agudo, redondo y liso que el elefante es como una lanza». El tercero tocó la trompa retorcida y gritó: «
¡Dios me libre! El elefante es como una serpiente». El cuarto extendió su mano hasta la rodilla, palpó en
torno y dijo: «Está claro, el elefante, es como un árbol». El quinto, que casualmente tocó una oreja,
exclamó: «Aún el más ciego de los hombres se daría cuenta de que el elefante es como un abanico». El
sexto, quien tocó la oscilante cola acotó: «El elefante es muy parecido a una soga». Y así, los sabios
discutían largo y tendido, cada uno excesivamente terco y violento en su propia opinión y, aunque
parcialmente en lo cierto, estaban todos equivocados.
"Parábola de los Seis Sabios Ciegos y el Elefante".
Atribuida a Rumi, sufí persa del s. XIII.
La idea de la relatividad jamás podría haber tenido cabida en el pensamiento occidental, regido por la
lógica aristotélica. Sin embargo, la lógica paradójica maravillosamente plasmada en esta historia
demuestra que, aunque una persona diga blanco y otra negro, ambas pueden equivocarse y tener razón al
mismo tiempo. El relativismo queda eliminado por completo, porque se considera la existencia de una
única Verdad. Sin embargo, nadie puede estar en posesión de esa Verdad: cada uno aportará su propia
visión sobre el mundo, la que estará sustentada por la historia personal de cada individuo.
Aunque superficialmente pueda parecer que las visiones se contradicen, en realidad forman parte de algo
mucho más complejo.
La Verdad siempre será infinitamente más compleja que cualquiera de los acercamientos del ser
humano.
Interesante ¿verdad?
Esta reflexión es la que debemos internalizar y recordarla cada vez que nos dispongamos a usar el “Cetro
de la Verdad”.
Las últimas preguntas…
Actividad Nº 2 B
1.- ¿Se puede aplicar la parábola de Rumi a las grandes cuestiones universales? 1pto
Argumente dos ejemplos (4pts)
2.- ¿Es posible que tanto un creyente como un ateo acierten y se equivoquen en sus planteamientos, y
que ambos ofrezcan diferentes puntos de vista de la misma Verdad? Responda con dos argumentos (4
pts.)
3.- ¿Qué te sucede cada vez que te encuentras con personas plenamente convencidas de que están en
posesión de la verdad? (2 pts.)
Pregúntale a otra persona que le sucede frente a la misma situación y escribe las diferencias y las
similitudes. Desarrolla brevemente a lo menos tres aspectos (3pts)
4.- Te pido que realices un último esfuerzo y traigas a tu memoria la última vez en que tú tomaste el
“cetro de la verdad”.
¿Podrías recordar en qué contexto fue?
¿Cuál fue el tema sobre el que hablaste? ¿Cómo te sentiste al hacerlo? ¿Cómo se sintieron los otros?
Luego de haber leído y reflexionado sobre la parábola, e incrementado tu conocimiento al respecto de la
construcción de las percepciones para determinar nuestra verdad...
¿De qué forma replantearías la situación en la que te encontraste sintiéndote dueña de la única verdad?
(6pts)
Compartan sus historias y elijan al interior del grupo la situación más representativa, y redacten un
ensayo de media página donde se respondan las preguntas que te he planteado más arriba.
5.- En tres líneas resume una enseñanza de esa parábola (3pts)
6.- A propósito de la parábola, de las distintas perspectivas y del rol de las percepciones
construcción de nuestra realidad, comenta y argumenta dos opiniones acerca de la frase:
en la
“En Occidente nos queda mucho que aprender de Oriente” (3pts)
Querida alumna recuerda que dadas las circunstancias y las distintas percepciones que puedas
tener de ellas, el responder esta guía de trabajo en forma mecánica para cumplir con un
trámite académico o hacer de ella una instancia de intercambio respetuoso
de ideas y conocimientos con tus compañeras,
para que al final de la tarea se constituya en un aprendizaje significativo,
es una decisión de la que sólo tú eres responsable….
Con cariño
su profesora
Documentos relacionados
Descargar