Modelos de apropiación del conocimiento científico – tecnológico en contextos de educación formal y no formal. Plantea la posibilidad de enriquecer los procesos de cambio y transformación educativa en el área de enseñanza de las ciencias naturales, proporcionando modelos alternativos elaborados e implementados en el nivel de enseñanza no formal, como así también criterios y principios teórico empíricos que promuevan la adopción de nuevas maneras de enseñar ciencias en el sistema formal. Mundo Nuevo, se define como un modelo alternativo de enseñanza y divulgación de la ciencia y la tecnología y se configura como unidad experimental y ámbito de investigación – acción. El programa posee valor potencial como mediador en la comprensión pública de la ciencia y en la apoyatura que brinda a los procesos educativos, desde espacios externos a las aulas. Esta apoyatura se estructura en torno al conocimiento científico escolar cuando se refiere a los alumnos y al conocimiento o desarrollo profesional, cuando se refiere a los docentes. Ello supone desarrollar dos líneas complementarias e integradas: a- Construcción de entornos de aprendizaje basados en modelos interaccionales que serán probados y validados en el sistema no formal. b- Desarrollo de un programa de colaboración entre el equipo de investigación y docentes de la Educación General Básica que posibilite la construcción de situaciones áulicas en referencia al modelo experimental: - la organización de espacios autogestionarios (colectivos docentes) para la socialización en las instituciones educativas de los procesos innovadores. - la producción de materiales comunicacionales mediadores en los procesos de experimentación curricular y formación docente. Primera cuestión: la ausencia de prácticas innovadoras en la Enseñanza de las Ciencias Naturales, alternativas a la enseñanza por transmisión y descubrimiento, que favorezcan el desarrollo de la autonomía intelectual en los alumnos. Si bien las instituciones educativas ocupan un lugar privilegiado dentro de las sociedades como “matriz y matrizante” de los modos de pensar o no pensar (Gastoriadis, 1997), en general actúan como obstáculo sistémico para el cambio y la transformación. “Un 65 % de escuelas de la muestra evidencia ausencia de perspectiva crítica y vacío ideológico. La falta de autonomía y participación anula toda posibilidad de innovación. Los cambios son simples episodios aislados, muy pocos frecuentes, escasamente representativos, sin que puedan sostenerse a través de la participación y el compromiso. En la mayoría de los casos la innovación está condenada a una simple reproducción de recetas exteriores al docente. Desde el análisis de los procesos áulicos se puede señalar: “alumnos y docentes reproductores del discurso de otros, con protagonismo del libro texto como única fuente de información aceptada”, “la actividad experimental desde el contexto de la demostración; alumnos pasivos con diálogos unilaterales profesor - alumno; la investigación como la tarea de responder a un cuestionario elaborado desde el saber docente”. Los diálogos en clase y los procesos interactivos están determinados principalmente por la necesidad del docente de mantener el control del contenido y el destino de toda discusión. Aún en contextos de enseñanza más progresistas, con cierta autonomía para la innovación y con espacios institucionalizados para la renovación didáctica se observa un predominio del saber docente y una tendencia a evaluar las ideas espontáneas de los alumnos que condicionan fuertemente: la organización de la práctica en el aula y la toma de decisión didáctica de los docentes, la relación entre docente – alumno y la construcción de contextos y significados a través de lo que se dice e interpreta, el valor de la actividad experimental, como espacio entre lo material y lo discursivo, entre la acción y la metacognición, la autonomía de los alumnos en la definición de problemáticas y el desarrollo de estrategias para su resolución. Esta primera cuestión nos permite interpretar a través de datos y observaciones lo que Driver denomina “el dilema del docente” y que señala el hecho que se produzca dentro de las actividades áulicas una tensión entre lo que está prescripto, entre la cultura establecida y el requerimiento de formar individuos creativos y autónomos, capaces de desarrollar mecanismos de control de sus propios aprendizajes para desempeñarse competentemente en una cultura en evolución continua. El sistema formal impone al docente este dilema de “enseñar lo que se prescribe” en un clima de libertad y de favorecer la autonomía, la independencia, el control de los propios procesos de conocimiento. La autonomía está asociada a la posibilidad de desarrollar un pensamiento crítico, de problematizar la realidad y transformarla y “la posibilidad de distanciarse de alguna manera de lo que se sabe al ser capaces de reflexionar sobre el propio conocimiento” (Bruner, 1988). En un movimiento recursivo, autonomía del docente autonomía del alumno, podría constituir el inicio de procesos innovadores en las clases de ciencias. El contexto comunicativo constituiría la característica prioritaria de la práctica pedagógica. El pensamiento de Walkerdine sintetiza la posibilidad de superar el dilema a partir de modelos ideológicos que enlacen la contextualización de los discursos, la actividad experimental, la toma de conciencia, la resolución de problemas y el traspaso de las estrategias de resolución a situaciones nuevas. Walkerdine dice “los niños no tienen experiencias puras de los objetos conocidos concretos, el significado se crea en la intersección entre lo material y lo discursivo, situado en las prácticas sociales reales, comprendido en términos de éstas y representado en el habla en forma de discurso”. En esta misma línea Bruner describe la actividad negociadora de la enseñanza “lo conocido es simplemente lo que alguien reivindica; está abierto al escrutinio y el escrutinio es un proceso social en el que hay que compartir, comparar, contrastar y discutir los puntos de vista propios con el de los otros”. La experimentación y la resolución de problemáticas son ámbitos propicios para que los alumnos y docentes puedan crear entornos de interacción que permitan el intercambio mutuo de representaciones y propósitos, integrando lo social y lo cognitivo, lo cotidiano y lo escolar, los aprendizajes formales y los aprendizajes no formales. Segunda cuestión: La necesaria complementariedad entre el Sistema Formal y el Sistema No Formal. Los estudios teóricos acerca de la innovación y cambio en educación se refieren, por lo general, a iniciativas y programas desarrollados en el contexto escolar, en el ámbito de la educación formal. En los últimos años, como un rasgo característico de la sociedad del conocimiento existe una multiplicación de contextos de aprendizaje. Se ha ampliado la perspectiva y se ha comenzado a mirar otros contextos, que desde lo no formal, también cumplen con la tarea de construcción de realidades, de mediación en la apropiación de saberes, y fundamentalmente con el propósito de promover procedimientos para “aprender a aprender”. Ante la crisis de la escuela, en su deterioro material, ideológico y simbólico, estos espacios se presentan como ámbitos privilegiados – no los únicos – para propiciar la comprensión pública de la ciencia y para apoyar los procesos educativos más allá de las aulas. “Desde esta perspectiva y frente al desafío del tercer milenio, la divulgación de la ciencia y la tecnología debe desempeñar un papel activo en la rápida expansión de la generación y circulación del conocimiento, así como de la información, para que dejen de ser objeto de apropiación y control de grandes grupos económicos. Debe contribuir a que el conocimiento científico y tecnológico constituya un componente central de la cultura, de la conciencia social y de la inteligencia colectiva, así como a la efectiva integración cultural, étnica, lingüística, social y económica. Para esto es indispensable ampliar los escenarios de la ciencia y la tecnología, integrar lo formal con lo no formal , el discurso académico con el lenguaje cotidiano, y acercar los conocimientos científicos y tecnológicos para que puedan constituirse en temas de opinión tan próximos como los del mundo de la política o del deporte” (Merino, G; Giamello, R.: “Las actividades de divulgación en América Latina en el marco de la Red-POP/UNESCO”. En: Encuentros con la ciencia. Ed. AMMCCT, México, 2000). Las estrategias suelen ser diferentes: se integran operativamente los conceptos de recreación y educación; enseñanza y divulgación; lo lúdico, lo recreativo, lo sorprendente, tienen carácter estratégico, están al servicio de lo educativo y permiten recuperar el deseo y el goce por el conocimiento. Los docentes que han participado de los talleres de ciencia y tecnología Mundo Nuevo – sistema no formal, responden en un 100% con entusiasmo, a propuestas que consideran innovadoras, creativas y atractivas para los alumnos. Sin embargo solo el 12% ha intentado durante los últimos tres años modificaciones en la forma de encarar las clases, a pesar que, un 49% tiene referencias teóricas a través de textos, seminarios y cursos. Las excusas son: “el curriculum no lo contempla”, “la escuela no posee laboratorio o infraestructura”, “debo cumplir con el programa anual, falta de tiempo”. “Estas excusas indican tanto limitaciones de orden institucional, como limitaciones de la propia subjetividad del docente, falta de capacidad innovadora” (Evaluación de Mundo Nuevo, Programa de Divulgación y Enseñanza de las Ciencias, 1998). Esto pone nuevamente en acción “el dilema docente” y lo amplifican en tanto plantean la dificultad para la necesaria recontextualización en el sistema formal de las experiencias del sistema no formal, cuidando que no sea una extrapolación automática de estrategias de un sistema a otro. Estas dos cuestiones plantean la problemática que da lugar al diseño del presente trabajo de investigación: los modelos innovadores de Divulgación y Enseñanza de la Ciencia y la Tecnología implementados en el Sistema no Formal, no garantizan ninguna repercusión innovadora sustancial en el sistema formal, a no ser que se inserten en una propuesta más amplia que implique una primera recontextualización de las propuestas al transferirlas a la escuela y una segunda recontextualización cuando se pone en acto el proceso de aprendizaje. Ello implica y compromete al programa Mundo Nuevo como campo experimental recontextualizador de la práctica pedagógica oficial. El proyecto integra en sus referentes teóricos los aportes de: la perspectiva constructivista del conocimiento, a partir de Piaget y desarrollos posteriores vinculados a la zona de desarrollo próximo (Vigotsky, 1988) y a la construcción colectiva de significados a través de las interacciones comunicacionales (Edwards y Mercer, 1995, 1997). Los estudios sobre el pensamiento del profesor desde la perspectiva cognitiva y su entrecruzamiento con la concepciones de los alumnos (Pérez Gómez, Schulman, Schavelson, 1992, 1994, 1996) y sus implicancias en los modelos didácticos (Osborne, Driver, Nussbaum y Novik, 1985, 1988, 1992). El Paradigma de la complejidad - en oposición al paradigma reduccionista y simplista - que permite el conocimiento e interpretación de la realidad , desde una perspectiva donde confluyen diferentes tipos de saberes, lecturas, interpretaciones y múltiples entrecruzamientos entre las variables. (Morin, 1994) El enfoque reflexivo sobre la practica ,considerando la naturaleza del conocimiento práctico del docente y la naturaleza compleja de las situaciones a las que se enfrenta, lo cual hace imprescindible el desarrollo de procesos de reflexión crítica en y sobre la acción (Schon, Stenhouse, Carr y Kemmis, 1995, 1996, 1997) ALGUNAS CONCLUSIONES Y AGENDA PENDIENTE Contribuir desde lo no formal a la innovación de la enseñanza de las ciencias en el sistema formal, dando repuesta a un planteo de las sociedades actuales que buscan el desarrollo de estrategias de conocimiento en el marco de contextos socio- culturales. Desarrollar modelos de apropiación del conocimiento, que enriquezcan la acción colectiva para la transformación de la realidad sociocultural. Generar espacios colectivos de revisión y recontextualización de experiencias como instancia de formación docente y transferencia de experiencias innovadoras del sistema no formal al sistema formal. Bibliografía: ALDEROQUI, H.; 1996. Colecciones privadas y patrimonios públicos, En: Museos y escuelas: socios para educar. Paidós. Buenos Aires. CULLEN, A., 1979. Criticas a las razones de educar. Paidós. Buenos Aires. DAVINI, C.; 1995. La formación docente en cuestiones de política y pedagogía. Paidós. Buenos Aires. DUJOVNE, M.; 1995. Entre musas y musarañas. Una visita al museo. Fondo de Cultura Económica. Buenos Aires. FREIRE, P.; 1985. La educación como práctica de la libertad. Siglo XXI. Buenos Aires. GARCIA CANDINI, N.; 1990. Sociología y Cultura. Grijalbo. México. MERINO, G.; 1995. Didáctica de las Ciencias Naturales. El Ateneo. Buenos Aires. MERINO, G., 1998. Enseñar ciencias naturales en el tercer ciclo de la EGB. AIQUE. Buenos Aires. MARTÍNEZ, E. y FLORES, J. (comp); 1997. La popularización de la ciencia y la tecnología: reflexiones básicas Fondo de Cultura Económica. México DF. MORIN, E., 1990. Introducción al pensamiento complejo. Gedisa. Barcelona MORIN, E., 2001. Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. UNESCO y Nueva Visión. Buenos Aires. Betancourt, J..(comp); 2001. Reflexiones y realidades. Universidad Nacional de Colombia. Bogotá. PRIETO CASTILLO, D.; 1999. La comunicación en la educación. La Crujía. Buenos Aires.