Documento de organizaciones de familiares de personas

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Documento de organizaciones de familiares de personas desaparecidas en
México.
Lo que no debe faltar en Ley General sobre Desaparición Forzada y
Desaparición de Personas por Particulares
Introducción
La Desaparición de personas en México, en la última década, ha tomado dimensiones como nunca
en la historia reciente de nuestros Pueblos, el Comité de Desapariciones de Naciones Unidas,
señaló que la “información recibida (…) ilustra un contexto de desapariciones generalizadas en
gran parte del territorio del Estado parte, muchas de las cuales podrían calificarse como
desapariciones forzadas”1.
Estamos hoy aquí en nombre de cientos de familiares de todo el país para exigir ante ustedes que
la voz de las familias sea tomada en cuenta, que nuestras voces sean verdaderamente escuchadas.
Hace apenas unos días la Secretaría de Gobernación reconoció que al 31 de diciembre de 2014
había en México más de 25,230 personas desaparecidas. Sin contar una enorme cifra negra de
quienes no han denunciado por diversos motivos. Vivimos una enorme tragedia, una crisis
humanitaria que no ha sido reconocida y asumida en su verdadera dimensión, por quien tiene la
responsabilidad de esta situación, el Estado.
Sabemos que una legislación sobre desaparición forzada y desaparición por particulares no es la
solución al problema, que se tienen que hacer muchas cosas más, que se tienen que terminar la
complicidad y la impunidad que han dado origen y mantienen esta situación, a pesar de esto,
esperamos una ley que nos dé más y mejores herramientas para encontrar a nuestros
desaparecidos.
Por ello, reclamamos nuestro derecho a participar en la elaboración de esta ley y la legislación
correspondiente. Tenemos un aporte fundamental, producto de nuestra experiencia y del diálogo
entre nosotros que nos ha permitido construir una visión común y propuestas conjuntas.
Hemos realizado junto con numerosas organizaciones civiles y el acompañamiento de la Oficina
del Alto Comisionado de Naciones Unidas un proceso de consulta con eventos regionales y
sectorial: una Consulta de la región occidente; un Encuentro de las organizaciones del Norte; un
encuentro de las organizaciones del Centro y regiones cercanas; una reunión de trabajo con
quienes abordan los casos de personas migrantes desaparecidas en nuestro país ; otra familiares
que pertenecen a comunidades indígenas del sur de México; finalmente una consulta con
familiares de desaparecidos de los años setentas.
Tuvimos también varias reuniones de trabajo nacionales para definir los puntos fundamentales de
los que debe estar en la ley para que no se convierta en letra muerta, para que elimine
efectivamente los obstáculos que hemos encontrado, que genere condiciones reales de
1
Observaciones finales del Comité de Desapariciones Forzadas al informe periódico de México. Párrafo 10.
INT_CED_COB_MEX_19564_S
investigación y búsqueda potenciando y articulando la acciones del Estado con este propósito; que
reconozca y garantice el pleno ejercicio de los derechos de las víctimas a la verdad, a la justicia, a
la reparación y a las medidas de no repetición.
Principios
Esta ley debe:

Reconocer la problemática de las desapariciones forzadas y las desapariciones por
particulares en su verdadera dimensión y profundidad: la magnitud, las causas
estructurales y condiciones que han generado esta crisis de derechos; las limitaciones y
vicios del quehacer institucional, todo ello para dar una respuesta en la medida y alcance
necesaria para encontrar a todas las personas desaparecidas.

Garantizar la participación de los familiares en la formulación e implementación de la ley,
entendiendo ésta como trabajo en conjunto, diseñando para ello los mecanismos y
procedimientos adecuados.

La ley debe contemplar mecanismos de rendición de cuentas y control ciudadano sobre el
desempeño de los servidores públicos y las instituciones en su implementación.
Queremos que esta sea una ley desde las víctimas, con las víctimas y para las víctimas.
Características de la Ley General:

Debe ser una ley Integral, que aborde las diferentes dimensiones de esta problemática.

En ella debe ampliarse el concepto de persona desaparecida para que sea reconocida
como sujeto de derecho.

Debe ser autoaplicativa para que con su entrada en vigor se convierta en obligatoria para
todas las instituciones en los tres niveles de gobierno.

La ley debe incluir y ser aplicada a todas las desapariciones, las del pasado, presente y las
que desgraciadamente puedan ocurrir en el futuro.

La ley debe atender las desapariciones de personas migrantes, y tener un enfoque
trasnacional.

Debe formularse desde una visión de derechos y con perspectiva de género.

La ley debe prever un enfoque diferenciado en atención a los diferentes grupos en
situación de vulnerabilidad.

Entendemos que más allá de una ley, se requiere una legislación amplia en la materia. A
partir de su aprobación debe generarse un proceso de armonización con todas las leyes y
ordenamientos que se requieran para hacer posible su cabal cumplimiento.

A partir de su publicación se debe generar un proceso de información, capacitación y
sensibilización de los funcionarios responsables de aplicarla.

Para que se convierta en un instrumento efectivo para los familiares de las personas
desaparecidas, debe redactarse en un lenguaje sencillo y ser accesible para todos.

Finalmente la ley debe garantizar las condiciones para la búsqueda inmediata de la
persona desaparecida, la investigación científica, transparente y expedita, así como
contemplar sanciones a los actores materiales e intelectuales que hayan obstruido la
investigación o la búsqueda, a quienes dieron la orden de perpetrar la desaparición, y a
quienes de cualquier manera oculten información sobre el paradero de la persona.
I. Sobre Investigación y Tipo Penal
Investigación
Hemos recorrido un camino largo en el que la tranquilidad de nuestra vida ha sido suplantada por
la tortura, no sólo por la incertidumbre de no saber dónde están nuestros familiares
desaparecidos, sino también por el trato indolente que recibimos de servidores públicos, entre
ellos, los responsables de la investigación.
Es responsabilidad del Estado mexicano llevar a cabo las investigaciones de manera científica,
transparente y expedita.
Hablar de investigación en las instancias mexicanas es igual que enunciar el capítulo de algún libro
de fantasía, pues en México la investigación en casos de desaparición de personas es dirigida por
nosotras, familias de las víctimas, quienes al asumir el rol del Ministerio Público investigador,
somos criminalizadas por las propias autoridades, porque los resultados que obtenemos de
nuestras investigaciones, señalan la responsabilidad directa del Estado, y su colusión con el crimen
organizado. Debido a esto, el Estado nos coloca en una situación de vulnerabilidad y riesgo: somos
sujetas de secuestro, extorsión, desplazamiento, tortura, e incluso, asesinatos. Esto como la
afirmación de una innegable realidad.
Actualmente el Estado carece de una metodología de investigación para los casos de desaparición
de personas y muchas de las investigaciones, dirigidas por las familias, tienen su base en el sentido
de intuición y lógica, ausente en muchos agentes investigadores y del Ministerio Público, situación
que sin duda hace más complejo obtener un resultado positivo.
Por ejemplo, en el caso de las líneas de investigación propuestas por las familias, éstas no son
tomadas en cuenta por el Ministerio Público, pues muchas de ellas señalan la responsabilidad del
Estado, por acción u omisión, en las desapariciones. Y en otros casos, por su incapacidad técnica
de realizar una investigación científica. Esta situación tiene como resultado una investigación
simulada encaminada a la protección de los responsables. Algunas de las estrategias que el Estado
utiliza para deslindarse y detener las investigaciones son: declararse incompetente, cerrar las
líneas de investigación, enviar el caso reserva, declarar que los responsables y los desaparecidos
han sido asesinados, y criminalizar a las víctimas.
Atestiguamos que las desapariciones en México son generalizadas y no un fenómeno aislado, por
ello hemos llevado a cabo infinidad de solicitudes para que se realice una investigación contextual
generadas con el apoyo de unidades de análisis de contexto, de capacitación y profesionalización
de los agentes investigadores y del Ministerio Público, pero poco o nulo es el caso que nos han
hecho y nuestra voz se pierde en la cerrazón de los servidores públicos que sospechosamente
obstruyen las investigaciones.
Mantenemos nuestro derecho a coadyuvar en las investigaciones, sin importar la nacionalidad ni
el país de residencia de las familias y sus representantes. Con la firme convicción que deben ser
dirigidas por personal capacitado y profesional que con nuestro apoyo pueda generar una
investigación científica y no una investigación de papel como las de ahora.
Exigimos la coordinación obligatoria entre autoridades investigadoras en todos los niveles de
gobierno, así como con otros países a través del mecanismo trasnacional. Asimismo, es necesaria
la centralización de las investigaciones en una sola instancia y evitar la dispersión de los
expedientes.
También exigimos nuestro derecho a mecanismos de transparencia, y rendición de cuentas en la
investigación de la desaparición de nuestros familiares, incluyendo tener acceso a expedientes
locales y federales, de manera física y copias.
Tipos Penales
Otro aspecto que denunciamos de forma constante es la impunidad que caracteriza al Estado
mexicano.
Identificamos que una de las puertas de impunidad es la ausencia de una adecuada tipificación del
delito de desaparición forzada y por particulares, y de la perversa manipulación del término
“personas no localizadas” o “ausentes”, por parte del Estado mexicano. Al respecto exigimos un
correcto uso del lenguaje, llamar a las cosas por su nombre.
Es necesaria la correcta tipificación del delito de desaparición forzada y la incorporación del delito
de desaparición por particulares. Con eso se daría un paso para acceder a la justicia, a la verdad y
la sanción a los responsables, para esto no solo es necesario que la Ley se publique sino que se
cumpla. Por ello exigimos se tome en cuenta nuestra siguiente propuesta:
a)
Tipo penal de desaparición forzada
Se entenderá por el delito de desaparición forzada: la privación de la libertad en cualquier
forma cometida por un servidor público o por personas o grupos de personas que actúan con
la autorización, el apoyo o la aquiescencia de un servidor público, seguida de falta de
información o de la negativa a reconocer dicha privación de la libertad o del ocultamiento de
la suerte o el paradero de la persona desaparecida o de la negativa a proporcionar
información sobre la suerte o el paradero de la persona desaparecida.
b) Tipo penal de desaparición por particulares
Se entenderá por el delito de desaparición por particulares: la privación de la libertad en
cualquier forma cometida por personas o grupos de personas que actúan sin la autorización, el
apoyo o la aquiescencia de un servidor público, seguida de falta de información o de la
negativa a reconocer dicha privación de libertad o del ocultamiento o de la negativa a
proporcionar información sobre la suerte o el paradero de la persona desaparecida.
A las conductas arriba descritas, exigimos que se sancionen otras conductas concurrentes a la
desaparición, como el ocultamiento de cadáveres, desaparición de pruebas, menores nacidos en
cautiverio, entre otras.
Ante la dificultad de obtener información de parte de personas detenidas para localizar a nuestros
familiares, exigimos también atenuantes y beneficios procesales para quienes colaboren de
manera efectiva, por ejemplo, respecto de aquellas personas que brinden información certera
sobre la ubicación y paradero de nuestros familiares.
Pedimos que las penas consideren la extrema gravedad del delito, y otras agravantes y sanciones
accesorias, como la inhabilitación definitiva para desempeñar funciones como servidor público.
Hoy estamos aquí exigiendo que esta ley recoja la realidad de las víctimas y sus familias.
II. Búsqueda y Registro
Quienes estamos hoy aquí, frente a ustedes, somos una representación y expresión de miles de
familiares con personas desaparecidas en México, originarias de los diferentes estados de la
República, Centroamérica, así como de familias exiliadas en Estados Unidos.
Pedimos se realizará esta reunión porque no hemos sido consultadas como se debe para la
definición de esta Ley de personas desaparecidas, pero ahora estamos aquí porque exigimos se
legisle para atender el grave problema de las desapariciones en México, que como dijo el Comité
de la ONU sobre Desapariciones, es ya una práctica generalizada en toda la República.
Venimos a decirles que la búsqueda de nuestros seres queridos, que son miles y miles, se ha
convertido en el objetivo de nuestras vidas y no descansaremos hasta encontrarlos a todos y a
todas. Que lo que hoy les venimos a plantear también tiene la palabra de familiares de personas
desaparecidas desde los años setentas, de la Guerra de contrainsurgencia en Chiapas y de los
cientos de desaparecidos en las últimas 4 décadas; esto nos recuerda que la deuda del Estado con
las familias y la sociedad no ha sido saldada. A estos desaparecidos y desaparecidas de nuestros
Pueblos desde hace muchos años, se suman al menos 26,000 personas desaparecidas en el
contexto de la llamada Guerra contra la delincuencia organizada. Por eso hoy venimos a exigir
verdad y justicia para todos y todas. Cuando nos encontramos tantas familias para compartir
nuestra búsqueda y para dar nuestra palabra para esta Ley, nos asombramos y consternamos de
tantos años de guerra en la que han vivido nuestros pueblos, de reconocer que nos faltan tantas
personas amadas en nuestro pueblo.
Desde que nuestro familiar fue desaparecido, desaparecida, hemos buscado por todos los medios
a nuestro alcance y más allá de nuestras fuerzas, aunque esto nos ponga en riesgo. Esta tragedia
nos ha afectado enormemente como familias, nos hemos enfermado, empobrecido más, nos han
extorsionado, engañado, muchas compañeras y compañeros han muerto de tristeza, pero no
pararemos. En este camino de Búsqueda hemos perdido la confianza en las instituciones del
Estado. Por eso también les decimos que las autoridades están frente a una oportunidad histórica
de crear una política de Estado que responda a las desapariciones, con la participación de las
organizaciones de familiares y de la sociedad civil, y empezar así a reparar la confianza que ha sido
dañada por la mentira y la negligencia, la impunidad ha sido el eje que han marcado más de 40
años de la historia reciente de nuestro país, nuestros seres queridos desaparecen porque se
puede, porque se permite, porque no pasa nada a quienes lo cometen o a quienes lo posibilitan.
En este documento que les entregamos hoy, es solo una síntesis, de todo lo que hemos discutido y
de lo que consideramos fundamental no se quede fuera de la Ley General sobre Desaparición
Forzada y Desaparición de Personas por Particulares, en la cual debe quedar reconocido el
legítimo derecho de las familias a ser parte de todo el proceso que posibilite encontrar a
nuestros desaparecidos y desparecidas.
A) Sistema Nacional de Búsqueda y Mecanismos para la búsqueda:
El Sistema debe de posibilitar que todos los recursos del Estado se conjunten de manera armónica
para la Búsqueda de las personas desaparecidas, sus objetivos son dar con el paradero de las
personas desaparecidas, evitar que éstas sigan sucediendo y posibilitar la justicia, la verdad y
reparación de daño. El Sistema debe de contemplar todos los casos de desapariciones es decir, lo
recientes y los de años y décadas anteriores; asimismo todos los perfiles o características
específicas de las víctimas como migrantes.
Para que el sistema funcione debe de contar con la participación de representantes de las
organizaciones de familiares de personas desaparecidas de México, Centroamérica y con el apoyo
de diferentes organismos internacionales y nacionales especializados. El Sistema Nacional de
Búsqueda debe de contemplar por lo menos los siguientes componentes:
1.- Registros nacionales:
a) Hacer un registro nacional de personas desaparecidas (más adelante damos un aporte
más detallado sobre esto)
b) Registro nacional de personas vivas con identidad desconocida (hospitales, albergues,
estaciones migratorias, cárceles, otros)
c) Registro de Personas fallecidas sin identificar en fosas comunes de panteones civiles y
militares, fosas clandestinas, donaciones a universidades. Debe de establecerse un Plan
Nacional de exhumaciones y no dejarlo a lo que medianamente pueda hacer cada estado.
d) Crear una red eficiente para el cruce de información de todas las bases de datos de las
diversas dependencias estatales y federales que puedan facilitar búsqueda.
En lo que tiene que ver con registros actuales de personas detenidas, se podrá realizar
actualización de datos personales, es decir: huellas dactilares, fotografías, datos de identidad a
partir de la solicitud de los Ministerios Públicos para las investigaciones, serán como operativos en
lugares determinados para recolectar esta información.
Las familias y sus representantes tendrán derecho acceder a información de estos registros para
poder facilitar las estrategias de búsqueda de justicia y verdad.
2.- Mecanismos de búsqueda: Estos deben de definirse con base a la presunción de vida.
El Mecanismo de búsqueda debe ser nacional y deberá coordinarse con el Mecanismo
Trasnacional2, deberá contar con personal especializado y certificado, con recursos económicos,
científicos y tecnológicos, con capacidad para coordinar acciones con los estados y dependencias
federales y facultad de acción interestatal. Debe ser una entidad con autonomía y facultades para
activar las acciones necesarias para desapariciones recientes sin importan nacionalidad o
ciudadanía. Asimismo, deberá operar las estrategias de búsqueda para los casos de años o
décadas anteriores.
Los estados no podrán disminuir la capacidad y facultad de las representaciones de este
Mecanismo en sus entidades, pero sí podrá proponer incorporar los recursos que como buena
práctica realizada en sus territorios. Las representaciones del Mecanismo en los estados, de
manera excepcional, podrán contar con personal local, sino que se intencionará que el personal
especializado en búsqueda sea de otros estados.
Ver nexo de propuesta que está siendo trabajada con PGR, Comités de Familiares de Centroamérica y organizaciones de
sociedad civil que trabajan con migrantes.
2
El Mecanismo de búsqueda se activará desde cualquier entidad federativa donde se haya
reportado la desaparición y en caso de ser necesario en el estado o país de origen de la persona. Y
se mantendrá hasta su localización.
El Mecanismo tendrá un órgano con representantes de familiares, ONGs, Gobierno FederalEstatal, tanto a nivel federal como en los estados que serán los responsables de facilitar la
operación de las acciones de búsqueda pronta y eficiente. Asimismo, dará seguimiento a las
acciones de búsqueda de casos de años anteriores.
La recuperación de información de los casos, evidencias, pruebas de todo tipo al que tengan
acceso este Mecanismo serán facilitadas a la instancia investigadora para aportar en las
investigaciones por la responsabilidad de estos delitos. Cuando la persona sea encontrada, se
cuidara de canalizarla a las instancias pertinentes para el tratamiento digno de la persona en vida
o fallecida. Asimismo, se turnará toda la información al MP correspondiente para continuar los
procesos de búsqueda de justicia, verdad y reparación de daño.
3.- Unidad de análisis de contextos: Cuyo objetivo es mantener el análisis permanente que
aportan diferentes fuentes de información, partiendo de los expedientes de Búsqueda y las
averiguaciones previas. Desde esta entidad se diseñarán operativos conjuntos de búsqueda.
4.- Coordinación: Interestatal, interinstitucional, entres entidades federativas y fueros, incluso con
autoridades de estos países. La búsqueda de personas desaparecidas requiere de una política de
Estado que responda a la crisis de desapariciones y a la realidad institucional. Por esto se deberá
privilegiar la coordinación de las instancias y políticas de búsqueda y no la creación de una
burocracia, de acuerdo a los contextos de las desapariciones en las diferentes épocas y regiones,
con plena participación de la sociedad civil, particularmente de los colectivos de familiares.
5.- Mecanismo de control y sanción.
Los funcionarios o servidores públicos que incurran en acciones de obstrucción, indebida
diligencia, violaciones a los DHs en la investigación o contra los familiares serán sancionados y se
les abrirán causas administrativas o penales, según sea el caso. Se realizará un plan de evaluación
de desempeño con base a estándares internacionales de lo que debe ser la debida actuación de
funcionarios encargados de hacer cumplir la ley.
OTROS ASPECTOS RELEVANTES QUE NO PODEMOS DEJAR DE DECIR
En relación a la protección de familiares de personas desaparecidas y sus representantes:
El Sistema de Búsqueda debe de prever los recursos necesarios para garantizar la participación en
este proceso de las familias y sus representantes, por lo tanto debe también generar las
condiciones de seguridad para la participación de éstas en todo el proceso de búsqueda y generar
las medidas de protección necesarias en caso de amenazas a su integridad y seguridad personal.
En relación a la entrega de restos humanos a los familiares de desaparecidos
Los restos humanos de personas localizados no podrán ser incinerados, por ninguna razón, el
realizarlo constituye en delito más por obstruir la investigación y no respetar los derechos
culturales de nuestros pueblos.
En relación al Registro Único de Personas Desaparecidas
El actual Registro Nacional de Personas Desaparecidas y Extraviadas no responde a las necesidades
y objetivos necesarios para aportar a la elaboración de estrategias de búsqueda de las personas
desparecidas, ni a la comprensión de la dimensión de la tragedia. Varios de las organizaciones que
hoy estamos aquí hemos consultado estos registros y comprobamos que han dejado fuera a
muchos de nuestros familiares porque nos hemos dado a la tarea de buscar sus nombres y no los
hemos encontrado.
a) Objetivos del Registro único de Personas Desaparecidas:
El objetivo central del Registro Único está en la búsqueda, desde este punto de partida se debe de
diseñar este Registro que caracterice de manera amplia a la persona desaparecida, es decir “toda
persona de la que no se conoce su paradero o que es reportada como desaparecida ”.
b) Qué casos se deben de registrar y qué información debe de contener:
Todos los casos que conozca cualquier autoridad independientemente de que exista una denuncia
formal, con base a la definición ya propuesta, en caso de las personas migrantes se realizará
desde el Mecanismo Trasnacional. En este registro único se tendrán que incorporar los casos
desapariciones forzadas de la guerra sucia y todos los denunciados en décadas anteriores.
Por lo tanto consideramos que se debe derogar ley del RENPED porque no tiene una definición
clara de persona desaparecida y adecuada a la realidad que vivimos, y se debe crear un Registro
Único de Personas Desaparecidas como una herramienta del Sistema Nacional de Búsqueda. El
diseño se deberá en conjunto con organizaciones de familiares y expertos así como la
implementación y evaluación del Registro.
III. Derechos de las víctimas, reparación integral y declaración de ausencia
Los derechos de las víctimas aquí enunciados, han sido elaborados a lo largo de un proceso de
movilización, de experiencias y de luchas, que nos han permitido el reconocimiento compartido de
nuestra propia dignidad. Son derechos, en el mejor de los casos, reconocidos pero aún no
realizados de manera efectiva; en el peor, son derechos inexistentes en la legislación actual,
desconocidos por un Estado y una sociedad que no comprenden la verdadera dimensión de la
tragedia que vive México, y especialmente la que vivimos los familiares cuyos seres queridos han
sido víctimas de desaparición.
Si bien en la actualidad contamos con una Ley General de Víctimas, la Ley que exigimos debe
tomar en cuenta la especificidad de los derechos en casos de desaparición de personas,
comenzando por el reconocimiento de la personalidad jurídica de la persona desaparecida; por
tanto, debe tomar en cuenta:
- El derecho que toda persona desaparecida tiene a ser buscada de manera inmediata, sin
importar condiciones particulares de la víctima e independientemente de la razón de la
desaparición o de la actividad que realizaba previa o al momento de la desaparición.
- Los derechos que podrán ejercer las familias, en particular el acceso a la justicia, a la
verdad y a la reparación integral.
- Retomar la experiencia de las víctimas en los procesos y mecanismos que deriven de los
procesos legislativos y de diseño de políticas públicas y en las labores de investigación,
garantizando así su derecho a la participación y a la coadyuvancia.
- La implementación de mecanismos de rendición de cuentas y vigilancia ciudadana en la
Ley y en los procesos que de la misma emanen.
- La definición de víctima debe considerar a las personas desaparecidas y sus familiares, así
como aquellas que tengan un vínculo afectivo directo con la persona desaparecida.
Los colectivos de familiares demandamos que la Ley reconozca los siguientes derechos como
imprescindibles:
a. Derecho a la verdad y a la justicia: Las víctimas y la sociedad, exigimos nuestro derecho a
conocer la verdad acerca de las circunstancias en que se cometieron los delitos, aquellos
factores que propiciaron su comisión, las circunstancias que motivaron la desaparición de
nuestros seres queridos, la identidad de los responsables y su sanción, además de la
suerte que corrió la víctima y su paradero. El Estado tiene la obligación de llevar a cabo
acciones que construyan y preserven la memoria colectiva.
b. Derecho a la participación: Incluye acciones de búsqueda e investigación, así como el
acceso a información clara, precisa y de forma periódica tanto de expedientes como de
información relevante sobre el posible paradero de nuestros familiares desaparecidos.
También se debe garantizar este derecho en la formulación de leyes y políticas dirigidas a
las víctimas y sus familiares.
c. Derecho a la educación, la salud, vivienda y trabajo: Se debe garantizar el acceso a dichos
derechos, tomando en cuenta la especificidad del daño causado por la desaparición y las
necesidades específicas para evitar un mayor daño, en especial a niños y niñas. Se deberán
crear programas sociales, y adaptar los existentes a las condiciones particulares de
vulnerabilidad en que se encuentran las familias de las personas desaparecidas incluyendo
familias de personas migrantes.
d. Derecho a la protección: Garantizar medidas de protección para víctimas, familias y
cualquier otra persona que participe en el procedimiento penal, investigaciones y
búsqueda, que respondan a la especificidad de los riesgos y amenazas. Estas medidas se
deben otorgar a través de un procedimiento sencillo que, entre otras, identifique a las
autoridades responsables (organismo autónomo) de implementar dichas medidas.
e. Derecho al acceso a medidas de atención, asistencia y ayuda: Es indispensable diseñar e
implementar programas especiales, donde se tome en cuenta el daño específico y las
necesidades y vulnerabilidades particulares de las víctimas. El acceso a dichas medidas,
incluida la atención médica o psicológica, debe ser inmediatamente después de la
desaparición de la persona con el objeto de evitar que el daño sufrido se agrave, con
especial atención a niños y niñas, migrantes, y a familias que residen en otros países.
Establecer que el acceso a las medidas puede continuar aún en casos donde sus restos
fueren identificados o repatriados. Los programas deben incluir capacitación en materias
que pueden ayudar a la búsqueda e investigación, así como al conocimiento de sus
derechos.
Reparación Integral del daño
La reparación integral del daño es parte fundamental del proceso de justicia y debe ser
proporcional a la gravedad del daño sufrido. Se deben establecer procedimientos, que sean
expeditos, justos, gratuitos y accesibles, a partir del principio de actuación de buena fe de la
víctima. En los casos de desaparición por particulares, debe explicitarse la obligación de los
responsables de reparar el daño y el deber del Estado de reparar de forma subsidiaria. En los casos
de desaparición forzada, el Estado debe reparar de forma directa. Demandamos un programa
nacional de atención a víctimas y familiares de personas desaparecidas.
Las medidas reparatorias deben responder a los siguientes principios: prontas, adecuadas,
efectivas, proporcionales respecto al daño sufrido, idoneidad de las medidas, complementarias,
con enfoque transformador, de no discriminación y enfoque diferenciado para atender daños
causados a población determinada como niñez, pueblos indígenas, migrantes extranjeros, entre
otros. Deben ser dictadas de oficio, contando con el previo consentimiento y con la consulta a las
víctimas. La recepción de medidas de asistencia, ayuda y atención, no menoscaban el derecho a
las medidas reparatorias ni deben ser descontadas de éstas. La Ley debe considerar todas las
medidas reparatorias, incluidas la restitución, compensación, rehabilitación, satisfacción y
garantías de no repetición. Se debe incluir, entre otras, ser informados de la suerte y/o el paradero
de la persona desaparecida y, en caso de fallecimiento, se le debe restituir el cuerpo en cuanto se
identifique, independientemente de que se haya establecido la identidad de los autores o se los
haya procesado.
Declaración de Ausencia por Desaparición
En casos de desaparición es de suma importancia llevar a cabo acciones que salvaguarden la
personalidad jurídica de la persona desaparecida. En la actualidad las víctimas de desaparición se
encuentran en total indefensión frente a la protección y administración de su patrimonio y del
seguimiento a derechos y obligaciones. Es por eso que pedimos que la Ley incluya un
procedimiento diferente a los de la declaratoria de ausencia y presunción de muerte contenidos
en la normatividad vigente para regular la solicitud, el procedimiento y la entrega de la
declaratoria de ausencia por desaparición.
Esta nueva figura debe asegurar una aplicación general y del más alto estándar disponible, a partir
de la presunción de vida de la persona desaparecida. El procedimiento debe ser gratuito, único y
sencillo, y proteger no sólo al patrimonio de la persona desaparecida, sino también el de sus
familiares. Se deben tomar en cuenta todos los cambios legales que será necesario adoptar para
garantizar los efectos protectores de esta declaración ante instancias públicas y privadas.
Explicitar que la obtención de una declaratoria no afectará los derechos de las víctimas o los
deberes de la autoridad con respecto a la búsqueda, localización e investigación de las
circunstancias de la desaparición y su paradero, ni tendrá efectos para la prescripción penal.
Incluir en el procedimiento una perspectiva de género y tomar en consideración a las personas
migrantes y las características propias de los pueblos indígenas, incluida la traducción del
procedimiento a lenguas indígenas.
Petición:
Por lo anterior, exigimos a los poderes del Estado un proceso de diálogo horizontal con los
colectivos de familiares, organismos de la sociedad civil, legisladores y representantes del
ejecutivo federal para la elaboración de la ley y su implementación.
Para avanzar en este proceso, entregamos los contenidos básicos de nuestra propuesta, así como
algunos insumos adicionales, con el compromiso de continuar entregando los resultados de las
consultas realizadas con las organizaciones de familiares. En los próximos días haremos llegar una
propuesta de procedimiento para dar curso a este ejercicio de construcción participativa de la ley.
¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!
Colectivos de Familiares:
1. Agrupación de Mujeres Organizadas por los Ejecutados, Secuestrados y Desaparecidos de
Nuevo León, AMORES (Nuevo León);
2. Asociación Unidos por los Desaparecidos (Baja California);
3. Buscando a los Desaparecidos y Desaparecidas de Jalapa
4. Colectivo por la Paz, Jalapa Veracruz
5. Comité de Familiares de Personas Desaparecidas en México, “Alzando Voces” COFADDEM
6. Comité de Familiares y Amigos Secuestrados, Desaparecidos y Asesinados en Guerrero
7. Comité de Familias Migrantes Desaparecidos del Salvador COFAMIDE
8. Comité-Familias Unidas de Chiapas Buscando a Nuestros Migrantes "Junax Ko'otontik",
9. Desaparecidos de El Fuerte Sinaloa.
10. Desaparecidos Justicia, A.C.,
11. Familiares de Desaparecidos y Desaparecidas de Xalapa,
12. Familiares de Orizaba y Córdoba, Veracruz,
13. Familiares en Búsqueda María Herrera, A.C.,
14. Familiares organizadas con Red Mesa de Mujeres Chihuahua.
15. Familiares organizados con Centro de Derechos Humanos Paso del Norte
16. Familias Unidas en la Búsqueda y Localización de Desaparecidos de Piedras Negras
(Coahuila);
17. Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco,
18. Frente de Víctimas del Estado de Morelos.
19. Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (Fuundec)
20. Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en México – Región Centro
21. Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en México (Fundem)
22. Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León (FUNDLN)
23. Grupo V.I.D.A., Víctimas por sus Derechos en Acción (Coahuila);
24. Justicia para Nuestras Hijas (Chihuahua);
25. Los Otros Desaparecidos de Iguala.
26. Madres Unidas
27. Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad.
28. Personas Migrantes Desaparecidas de Guatemala
29. Plataforma de Víctimas de Desaparición en México.
30. Red de Madres Buscando a sus Hijos, A.C.,
31. Red Eslabones por los Derechos Humanos
32. Red Nacional de Enlaces,
33. Unión de familiares de desaparecidos de Sinaloa en los años 70s.
34. Víctimas y Ofendidos del Estado de Morelos, A.C.
35. Voces Unidas por la Vida.
Organizaciones acompañantes:
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
14.
15.
16.
17.
Bordamos por la Paz,
Casa del Migrante Saltillo,
Cauce Ciudadano,
Centro de Derechos de la Mujer de Chiapas, A.C.,
Centro de Derechos Humanos “Miguel Agustín Pro Juárez”, A. C.
Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan;
Centro de Derechos Humanos Fray Pedro Lorenzo de La Nada Ocosingo,
Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi, A.C. (Coahuila);
Centro de Derechos Humanos Oralia Morales, (Chiapas)
Centro de Derechos Humanos Paso del Norte, A.C. (Chihuahua);
Centro de Derechos Humanos Victoria Diez, A.C.,
Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo, A.C.
Centro de Orientación del Migrante de Oaxaca A.C.,
Centro Diocesano para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios, A.C. (Coahuila);
CEPS Justicia y Participación
Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos, A.C. (CADHAC);
Comisión de Solidaridad y Defensa de los Derechos Humanos, A.C. (Chihuahua);
18.
19.
20.
21.
22.
23.
24.
25.
26.
27.
28.
29.
30.
31.
32.
33.
34.
35.
36.
37.
38.
39.
40.
41.
Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, A.C.
Dimensión de Justicia, Paz y Reconciliación,
Diócesis de Zamora
Fe y Política de la Comisión Episcopal para la Pastoral Social,
Freedom House México;
Fundación de Antropología Forense de Guatemala,
Fundación de Diego Lucero A.C.,
Fundación para la Justicia y el Estado Democrático de Derecho, A.C.
Fundar. Centro de Análisis e Investigación, A.C.
Grupo de Mujeres de San Cristóbal de las Casas "COLEM", A.C.
ID(H)EAS Litigio Estratégico en Derechos Humanos A.C.;
Justicia para Nuestras Hijas, A.C.;
La 72 Hogar-Refugio para Personas Migrantes,
Litigio Estratégico en Derechos Humanos, A.C. IDHEAS
Mexicanas y Mexicanos en el Exilio (Texas, EE.UU.);
Mujeres de Pacto, A.C.
Red Mesa de Mujeres, A.C.;
Servicio Jesuita al Migrante México.
Servicio Jesuita al Migrante Nicaragua,
Servicios y Asesoría para la Paz (SERAPAZ);
South Texas Human Rights Centre,
Taller de Desarrollo Comunitario, A.C.,
Voces Mesoamericanas, Acción con Pueblos Migrantes, A.C.,
Zacatecanos por la Paz.
Centro de Colaboración Cívica A.C., como facilitación en el proceso
Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos
(OACNUDH) en carácter de asesor técnico.
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