La Violación Michel Foucault.- Tengo ahora otro problema. Que se refiere al mismo dominio que me gustaría que discutir. Mi pregunta es ésta. Hay actualmente en Francia una comisión de reforma del derecho penal. Que funciona de hacerse a varios meses (con la hipótesis de un cambio de gobierno) y ha tomado decisiones sin importancia hasta ahora. Sorprendentemente, decidieron telefonearme. Y me dijeron: estamos estudiando el capítulo de la legislación sobre la sexualidad. Estamos muy preocupados y quisiéramos saber usted que piensa respecto... Yo les pregunté por las cuestiones que querían plantear y me enviaron unas preguntas que ha recibido esta mañana. En todo lo que concierne a la legislación sobre filmes, libros, etc., no hay problema. Creo que se puede afirmar en principio que la sexualidad no pide ningún tipo de legislación, sea cual sea. Bien. Pero hay dos dominios que son problemáticos para mí. La violación y el de los niños. ¿Que debe decirse a propósito de la violación? David Cooper.-- Es lo más difícil… Michel Foucault.- Siempre puede uno sostener el discurso teórico que consiste en decir: en cualquier caso la sexualidad no puede ser nunca objeto de castigo. Y cuando se castiga la violación, debe castigarse exclusivamente la violencia física. Y decir que no es sino agresión y nada más: que se plantee el puño en el rostro de alguien, o su pene en el sexo es absolutamente igual. Pero, en primer lugar, no estoy seguro de que las mujeres estén de acuerdo. Marina Zecca-. No demasiado, no. En absoluto, incluso. Michel Foucault.- Así pues, admitís que hay un delito propiamente sexual. Zecca-. ¡Ah!, si. Marie Odile Faye.-. Con todas las niñas que han sido heridas en un jardín público, en el metro, en todas estas experiencias de la vida cotidiana, a los ocho, 10, 12 años: tan traumatizantes... Jean- Pierre Faye.- Pero ¿no es esto "violación psíquica", y no violencia? Michel Foucault.-. ¿Habla usted de él exhibicionismo? Marie Odile Faye.- Si, pero sí en aquel momento no hay transeúntes, gente que aparece o interviene, lo uno lleva a lo otro-y esto pasa todos los días, en los solares, etc.. Y es algo muy diferente a recibir dos bofetadas por un adulto. Michel Foucault.-. Discutí sobre esto hace con un magistrado del sindicato de magistratura. Que me dijo: No hay razón para penalizar la violación. La violación podría estar fuera de la penalidad. Debe hacerse de ella un hecho de responsabilidad civil, simplemente: daños y perjuicios. ¿Qué piensan de esto? Digo: ustedes, las mujeres... porque en este campo los hombres, desgraciadamente, quizás tiene una experiencia mucho menos insistente. Marina Zecca.-. No consigo situarme en el plano de la legislación y del castigo, es esto lo que me molesta. Jean Pierre Faye.- Por un lado, en nombre de la liberación de la mujer, estamos contra la violación. Y en nombre de la anti represión ¿Estamos a la inversa? David Cooper.-. Se debería inventar un "crimen otro". Un solo crimen. (Un poco como en China, donde toda la criminalidad queda reducida a 15 puntos...) un crimen que sería el norespeto al derecho del otro a decir no. Un crimen sin castigo, pero que remita a una educación política... Dejando de lado el caso de las lesiones en la violación. Marie Odile Faye.- En este nuevo clima, en el que la sexualidad debe ser libremente consentida, es evidente que la violación es su "contrario". Jean-Pierre Faye.- Tiene incluso un aspecto represivo... pero ¿cómo pensar la represión de la violación? Michel Foucault.- Sus respuestas, Marie-Odiel y Marina, es muy clara; cuando he dicho: se puede considerar como una violencia, eventualmente más grave pero del mismo tipo que te dan un puñetazo en la cara a alguien. Sus respuestas han sido inmediatas: no, es una cosa muy diferente. Algo más grave que un puñetazo. Marine Zecca.- ¡Ah!, no. Michel Foucault.-. Y entonces, esto plantea unos problemas. Nos lleva decir esto: la sexualidad como tal tienen el cuerpo un lugar preponderante, el sexo no es una mano, no es lo mismo que los cabellos, no es como la nariz. Hay que protegerlo, pues, rodearlo, en cualquier caso conferirle una legislación que no sea la que vale para el resto del cuerpo. Marina Zecca.- Yo pensaba más específicamente en el caso de los niños. Pero lo que se ejerce sobre los niños no es ya un acto sexual creo: es verdaderamente una violencia física. David Cooper.- La violación no es orgásmica. Es una especie de masturbación rápida en el cuerpo del otro. No es sexual. Es una lesión Marina Zecca.- Es lo que quería decir: ya no se trata de sexualidad, entramos en otro campo, el de la violencia física. Michel Foucault.- Pero ¿no da la razón con esto a lo que yo decía? No se trata de la sexualidad, se castigará la violencia física, pero sin hacer intervenir el hecho de que la sexualidad esté en causa. Me perdonaran que insista. Vuestra reacción era, al contrario, decir: es completamente diferente, no es lo mismo que un puñetazo en la cara. Marina Zecca.- Depende el punto de vista, es muy difícil de analizar. Si me planteó la cuestión con una distancia, considero que es una violencia física. Porque pienso en un niño. Pero pienso también que verdaderamente un traumatismo. Marie Odile Faye.- Se habla mucho en este momento del derecho al placer. Precisamente por ello, no se le puede quitar a un ser por este medio... Jean Pierre Faye.- Se trata, pues, de una lesión que puede lastimar la sexualidad misma. Marie Odile Faye.- En Chile, en los barrios de chabolas, las poblaciones, en condiciones de vivienda espantosas en que están (terriblemente agravadas desde la junta [Pinochet]), existen frecuentes casos de violaciones de niñas de ocho-nueve años por los padres, los hermanos. Se ven niños que han enfermado completamente, como en la India a causa del matrimonio entre niños. Jean Pierre Faye.- Si se piensa en términos de lesión, su singularidad es que es futura. Michel Foucault.- No se podría decir respecto este tema-como, por ejemplo, como se atribuye la frigidez de una mujer (o eventualmente a la sexualidad de un hombre) al traumatismo de la violación, o incluso a una experiencia insistente de exhibicionismo- ¿No se puede admitir que se hace jugar a la violación el papel del Edipo en los psicoanálisis fáciles? Jean Pierre Faye.- En el transcurso un debate de Shakespeare and Co, Kate Millet explicó públicamente que en París fue violada gravemente por violación síquica... contó todos los detalles: en un café, el violador psíquico se sentaba la mesa de al lado, cuando ella cambiaba de café le seguía y se sentaba otra vez a su lado... Me contaron un ejemplo más inquietante aún. Una niña de ocho años violada por un joven obrero agrícola de 28 años, en una granja. Ella cree que el hombre la quiere matar, le rompe sus vestidos. Vuelve a casa -su padre médico, cardiólogo, y a la vez interesado por Reich [ Wilheim, psicoanalista freudiano, marxista]: de ahí la contradicción. Ve volver a casa a la niña que no dice nada. Permanece completamente muda, durante varios meses, tiene fiebre. Sigue sin decir nada, por principio. Al cabo de varios días, sin embargo, deja ver que está herida, corporalmente. Le curan el desgarro, suturan la herida. Como médico y reichiano ¿Denunciará el caso? Se limita hablar con el jornalero, antes de que se vaya. No se desencadena ninguna acción judicial. Hablan y se olvida el asunto. Pero la historia acaba con la descripción de una dificultad psíquica inmensa al nivel de la sexualidad, más tarde. Lo que no es verificable sino cerca de 10 años después [situación que recayó sobre la niña]. Es muy difícil pensar algo con respecto esto, al nivel jurídico. Ya no es fácil a nivel psíquico,mientras parece fácil al nivel del cuerpo. Michel Foucault.- Dicho de otro modo ¿Hay que dar una especificidad jurídica al atentado físico que tiene por objeto el sexo? Éste es el problema. Jean Pierre Faye.- Hay una lesión que es a la vez corporal, como un puñetazo en la nariz, y a la vez anticipa una lesión psíquica-entre comillas-, quizás no irreversible, pero que es muy difícil medir. Al nivel de la responsabilidad civil, es delicado medir el daño. Al nivel de la responsabilidad penal ¿Qué posición puede tomar un partidario de Reich? ¿Puede denunciarlo, intentar una acción represiva? Michel Foucault.- Pero, ustedes, en tanto mujeres, chocan con la idea de que se diga: la violación entra dentro de las violencias físicas y debe simplemente ser tratada como tal. Marie Odile Faye.- Sobre todo cuando se trata de niños, de niñas. David Cooper.-. En el caso de Román Polanski, en Estados Unidos., se trataba de sexualidad oral, anal y vaginal con una chica de 13 años, y la chica no parecía traumatizada. Telefoneó a una amiga para contárselo pero la hermana la escuchó detrás de la puerta, y se puso en marcha todo el proceso contra Polanski. Allí no hubo lesiones, el traumatismo tiene su origen en las formaciones ideales, sociales. Parece ser que la chica gozó con sus experiencias. [Estos datos y varios más están en los testimonios de la “joven” en un reciente filme “Polanski Wanted and Desired” (Polanski, Buscado y Deseado); la hermana contó lo que ella escuchó a la madre y la madre puso en marcha una denuncia. Ese filme ¿será proyectado en los cines?] Michel Foucault.-Por lo visto consintió. Y esto me lleva a la segunda cuestión que quería plantear. La violación, a pesar de todo, puede delimitarse bastante fácil no sólo como no consentimiento, sino como rechazo físico al acceso. Al contrario, el problema se plantea tanto para los niños como para las niñas-ya que la violación cuando se trata de niños es algo que no tiene existencia legal- cuando se trata de seducción, el problema del niño seducido. O que trata de seducir. ¿Es posible pedirle un legislador que diga: con un niño que consiente, con un niño que no rechaza, se pueden tener no importa qué forma de relaciones. Esto no atañe para nada la ley? David Cooper.-. Una digresión: hace dos años, en Inglaterra, 5 mujeres fueron condenadas creo que con la sentencia en suspenso- por la violación de un hombre ¿No es éste el paraíso para muchos hombres? Marie Odile Faye.- Mientras se trata de niños entre ellos se finge que no se les ve…Cuando un adulto entra en juego, ya no hay igualdad o equilibrio de descubrimientos y responsabilidades. Hay una desigualdad... difícil de definir. Michel Foucault.- Me atrevería a decir: desde el momento en que el niño no rechaza, no hay ninguna razón para castigar nada. Pero lo que me sorprendió es que ayer hablando de ello con los miembros del Sindicato de Magistratura, uno de ellos tomaba posiciones muy radicales: es aquel que decía precisamente que la violación no debía ser penalizada como violación, que era simplemente una violencia. A propósito de los niños empezó a tomar una posición igualmente muy radical. Pero en un momento dado se sobresaltó y dijo: ¡Ah, debo decir que si viera a alguien que la toma con mis hijos...! Además, encontramos el caso del adulto que tiene una relación de autoridad con el niño. Sea como padre, como tutor, como profesor o como médico. Me atrevería decir al respecto: no es verdad que uno pueda obtener un niño lo que éste no quiere realmente, por efecto de la autoridad. Y sin embargo, está el problema importante de los padres, del padrastro especialmente frecuente.