Algunos de los principales aspectos de la juventud presentados por

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Algunos de los principales aspectos de la juventud
presentados por el Informe de Desarrollo Humano en Chile.
Acerca de la Política:
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Débil identificación política: hay un claro distanciamiento de los jóvenes
respecto del sistema democrático y la política

Menor disposición a posicionarse en el eje izquierda – derecha, un rechazo
a inscribirse en los registros electorales y a participar en la política
institucional.

Entre los jóvenes denominados "políticos" por su identificación política, los
jóvenes tienden a exhibir una mayor identificación con la oposición.
(A menor edad la identificación con el sistema democrático es más débil)
El Informe PNUD relaciona a los jóvenes con la categoría de ciudadano
desvinculado, el cual tiene una visión desafecta de la política, junto a una
imagen elitista de la democracia y mantiene cierta indiferencia respecto al
régimen democrático.
En el comportamiento cívico de los jóvenes se aprecia la existencia de una
base de interés por participar en la sociedad y en la política. Sin embargo, esta
no se realizaría en las formas políticas o sociales convencionales.
La educación
Una gran mayoría de los jóvenes percibe a la escuela como fuente de
conocimientos útiles para la vida laboral y no como fuente de valores
ciudadanos, posición contraria a los grupos de mayor edad.
Alto impacto de los medios de comunicación en la cultura cívica de los jóvenes.
Un porcentaje importante se muestra interesado, particularmente por las
noticias de televisión.
Los jóvenes tienen una imagen claramente más positiva de los chilenos que los
adultos.
En la producción cultural se percibe una fuerte brecha generacional en el manejo
de las herramientas básicas de la modernización: inglés, computación, teléfono
celular e Internet. La mayoría de los jóvenes muestra un manejo regular o
bueno.
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Consumo cultural
Los jóvenes forman parte en mayor proporción de los grupos de consumo cultural
medio donde destaca el acceso a la música, y también en el grupo de consumo
cultural alto con un predominio de personas entre 18 y 34 años, hombres, del
grupo socioeconómico alto y mayormente residentes en Santiago urbano.
La estetización de la vida cotidiana como forma de individualización es un
fenómeno que se presenta con mayor fuerza entre los jóvenes.
La individualización
Entre los más jóvenes existiría mayor individualización, debido a que por una
parte, las nuevas generaciones se han formado en las orientaciones de un mundo
más individualizado que el de los adultos y por otra que los jóvenes tienen menos
responsabilidades y obligaciones lo que les permite mayor flexibilidad para sus
propias definiciones. Los jóvenes opinan positivamente acerca del proceso de
individualización, ya que representa la posibilidad de perseguir sus propios
ideales, a diferencia de los mayores, que piensan que puede representar una
amenaza a la integridad moral de la sociedad.
Cambio en las relaciones familiares
Mantienen una imagen más positiva de la sociedad y más bien recelan de la
capacidad de la familia para responder a los cambios. Atribuyen los problemas
familiares a las actitudes de los padres, reconociendo que la formación
tradicional de estos no les permite actuar de otra manera. No obstante, para los
jóvenes, la familia es un lugar mejor que la sociedad, en ella se encuentra
protección frente a la sociedad y donde cada uno puede ser sí mismo.
Se revela la percepción de un fuerte cambio en la sexualidad respecto a las
generaciones anteriores. El ejercicio de la sexualidad se vuelve relativamente
autónomo de los fines de la procreación y del matrimonio. Las relaciones
sexuales se inician en forma mayoritaria fuera del matrimonio.
Tolerancia y no discriminación:
Los jóvenes, junto a las personas de los grupos socioeconómicos medio y alto, y
aquellas con mayor nivel educacional son quienes tienden a tener mayor grado
de tolerancia y ser menos discriminadores.
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Temáticas del Informe de Desarrollo Humano en Chile que aborda a los
jóvenes específicamente
La base política del "Nosotros": la débil identificación política
Coincidente con otras encuestas y estudios el Informe aprecia un claro
distanciamiento de los jóvenes respecto del sistema democrático y la política,
proceso que se expresa con mayor profundidad que en el mundo adulto. Los
resultados de la encuesta del PNUD, demuestran un bajo grado de identificación
política en general en la sociedad chilena, lo que se comprueba en la menor
disposición de los chilenos a posicionarse en el eje izquierda –derecha, así como
en el rechazo de los jóvenes a inscribirse en los registros electorales y, en
general, a participar en la política institucional.
La encuesta del INJUV constata que una mayoría de los jóvenes (61,5%) no se
encuentra inscrito en los registros electorales, llegando esta situación a un 63,8%
para el caso de las mujeres jóvenes. La no inscripción aumenta sostenidamente
entre los jóvenes de menor edad y aquellos de nivel socioeconómico medio y
bajo. Situación que contrasta con los niveles de inscripción nacional que llegan a
un 86,8% para el año 2000.
El análisis del PNUD establece dos tendencias en la débil participación política de
los jóvenes:
a) Los jóvenes entre 18 y 24 años suelen manifestar una identidad política más
débil que los otros grupos de edad, presentando un proceso de des-identificación
entre quienes el Informe denomina "generación de la transición".
b) Entre los jóvenes denominados "políticos" por su identificación política, los
jóvenes tienden a exhibir una mayor identificación con la oposición.
Investigaciones acerca de las actitudes políticas de niños y adolescentes, citadas
en el Informe, indican que el juicio negativo que estos manifiestan sobre la
política tiende a estar asociado a la percepción de la ineficacia de la propia
acción. Siguiendo el texto, se afirma que "el joven enfrentaría una disonancia
cognitiva producida por el deseo de transformar el estado de cosas existentes y
de sentirse ineficaz de realizar dicho cambio. Al no cumplir su deseo, tiende a
optar por un rechazo de la política." (PNUD, 110)
Relacionado con lo anterior no es de extrañar que los grados más bajos de
confianza en las instituciones recogidos en la encuesta del INJUV 2000, sean para
aquellas de carácter político o público (Gobierno, jueces, alcaldes, senadores,
diputados y partidos políticos), siendo las instituciones más confiables para la
mayoría de los jóvenes los profesores y la Iglesia Católica.
Apoyo e imagen de la democracia en los jóvenes
De acuerdo a la encuesta del PNUD, a menor edad la identificación con el
sistema democrático es más débil (no presentando diferencias entre los
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segmentos 18-24 y 25-34). Sin embargo, la imagen de la democracia que
el Informe relaciona con la opinión de la juventud no sería homogénea para el
conjunto de los jóvenes.
Por una parte se les asocia a una visión elitista de la democracia, consistente en
un juego de azar donde muchos participan y pocos ganan, es decir donde una
pequeña élite saca provecho, mientras que el grueso de los ciudadanos toma
parte sin incidencia real. Esta visión predominaría en algunos jóvenes y en
sectores de estrato socioeconómico más bajo, no obstante también se encuentra
presente en aquellos sujetos integrados a la sociedad y que muestran un alto
grado de autodeterminación. Situación que lleva al PNUD a la siguiente
conclusión: "una mayor individualización no conduce por sí sola a una imagen
favorable de la democracia" (PNUD, 270)
Asimismo, los jóvenes comparten la denominada visión procedimental, en la cual
la imagen de la democracia es un partido de fútbol donde se busca ganar, pero
con reglas iguales para todos, siguiendo la tradición de la democracia liberalrepresentativa. Visión que sería compartida con individuos integrados a la vida
social como por quienes manifiestan grados importantes de privatización.
Por su parte, la encuesta del INJUV, establece que el 51,2% de los jóvenes piensa
que la democracia es un sistema como cualquier otro, frente al 48,8 que opina
que es el mejor sistema de gobierno. Los datos demuestran que la democracia es
aún menos valorada entre los jóvenes de nivel socioeconómico bajo (57,6%).
Debido a las características descritas el Informe relaciona a los jóvenes en
términos políticos con la categoría de ciudadano desvinculado, el cual tiene una
visión desafecta de la política, junto a una imagen elitista de la democracia y
mantiene cierta indiferencia respecto al régimen democrático.
Actitudes y comportamientos cívicos de los jóvenes chilenos
No obstante, en aspectos de participación de los jóvenes, el Informe identifica la
existencia de una base de interés por participar en la sociedad y en la política.
Sin embargo, esta no se realizaría en las formas políticas o sociales
convencionales. En este sentido, la encuesta del INJUV identifica como las
agrupaciones y organizaciones donde más participan los jóvenes a los clubes
deportivos (especialmente en el caso de los hombres), los grupos religiosos y los
denominados grupos de juego o hobbie. Por el contrario la asociación que
presenta la más baja aceptación es la junta de vecinos.
Los jóvenes en su gran mayoría (88,7%) no manifiestan interés en participar en un
partido político, aumentando el desinterés junto con la edad, manifestándose
con mayor fuerza en los sectores socioeconómicos más bajos con un significativo
90,2%.
De acuerdo a lo expuesto en el Informe, los hallazgos del PNUD coinciden con el
estudio de la International Association for the Evaluation of Educational
Achievement en cuanto a la presencia de un compromiso cívico de los
estudiantes de 8º básico expresado en interés por la política, uso de los medios
de comunicación y disposición a participar en acciones políticas y sociales. Chile,
de acuerdo al estudio, se ubica en el quinto lugar entre veintiocho países, con un
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46% de los estudiantes que declara estar interesado en la política sin
diferencias entre hombres y mujeres. Un 74% de los estudiantes estudiados
considera importante votar en las elecciones nacionales en el futuro. Son las
actividades de participación social las que atraen un mayor interés por parte de
los estudiantes, un 85% recolectaría dinero para causas sociales y un 77% juntaría
firmas para presentar una petición.
Transformaciones culturales y desafíos para la educación
Otro aspecto relevante del Informe relacionado con la juventud es la educación.
En los últimos años la discusión y las políticas educativas se han centrado
fundamentalmente en la preparación de los jóvenes para su integración al mundo
del trabajo y a mercados globales competitivos. Coherentemente, destaca el
Informe que en los grupos etarios más jóvenes (18-24; 25-34 años) una gran
mayoría percibe a la escuela como fuente de conocimientos útiles para la vida
laboral y no como fuente de valores ciudadanos, posición contraria a los grupos
de mayor edad que opinan de forma inversa.
Opinión juvenil coincidente con las recogidas por el INJUV, donde la función de
la escuela como espacio de preparación para la inserción sociolaboral tiende a
fortalecerse siendo mejor evaluada en el 2000 que en años anteriores,
especialmente en aquellos jóvenes que estudiaron en establecimientos
municipales. Quedando de esta forma planteado, según el PNUD, como un
desafío del nuevo contexto cultural la educación cívica para profundizar la
construcción de ciudadanía.
Conocimientos y habilidades cívicas de los estudiantes
Siguiendo el Estudio IEA ya citado, el informe del PNUD establece que los
estudiantes chilenos en relación a conocimientos y habilidades cívicas, se
ubicaron en una posición significativamente inferior al promedio internacional,
ubicándose en el penúltimo lugar de la clasificación, en un rango que va entre 86
y 111 puntos, obtuvieron 88 puntos. No obstante, los altos índices de compromiso
cívico y actitudes cívicas demuestran de acuerdo al informe Mineduc IEA, que "a
pesar de su falta de conocimientos cívicos y sus precarias habilidades de
interpretación, los estudiantes están aprendiendo a ser ciudadanos
comprometidos con su comunidad y su entorno"(PNUD, 132).
Asimismo, el estudio IEA establece un alto impacto de los medios de
comunicación en la cultura cívica de los jóvenes. Un porcentaje importante se
muestra interesado, particularmente por las noticias de televisión. Característica
avalada por la encuesta del Injuv que destaca que los jóvenes confían mucho más
en los medios de comunicación que en las instituciones de gobierno.
Sin embargo, frente al tema del consumo de televisión y la cultura cotidiana, el
informe establece que la mayoría de los chilenos entrevistados (40%) corresponde
al tipo de público que usa la televisión para entretenerse. En este grupo destacan
los hombres y jóvenes de 18 a 24 años, con una preferencia por programas
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deportivos, que tienden a seleccionar películas y series producidas en el
extranjero.
Temáticas del Informe de Desarrollo Humano en Chile que aborda a los
jóvenes eventualmente
La identidad de los chilenos en comparación con los habitantes de los países
vecinos
En el caso de los chilenos, la encuesta del PNUD muestra que la autoestima
tiende a ser más bien alta cuando se compara con los habitantes de los países
vecinos. Presentando esta tendencia importantes diferencias: Los jóvenes tienen
una imagen claramente más positiva de los chilenos que los adultos. Sin embargo
los datos de la encuesta del INJUV 2000, establece que los dos calificativos
usados con más frecuencia para definir a Chile por parte de los jóvenes son
negativos: sin igualdad de oportunidades y oportunistas, ocupando el tercer lugar
el calificativo positivo de solidario. Otros adjetivos utilizados por los jóvenes en
su visión de país son discrimador, inseguro, clasista, injusto y democrático
(INJUV, 91).
Nuevas condiciones de la producción cultural
Un aspecto donde se evidencia una fuerte brecha generacional se produce en el
manejo de las herramientas básicas de la modernización: saber inglés y usar con
regularidad computador, teléfono celular e Internet. De acuerdo a los datos del
PNUD, el 82% de los entrevistados de más de 55 años declara tener un manejo
malo o nulo de estos instrumentos modernos en contraste con el 56% de los
jóvenes entre 18 y 24 años que muestra un manejo regular o bueno.
A pesar de los anterior cabe destacar que aun en los segmentos de menor edad el
conocimiento de un idioma extranjero y de computación es bajo, de acuerdo a la
encuesta del INJUV 2000, un 56,8% de los jóvenes no domina un idioma y un
41,3% declara no tener conocimientos de computación, situación que se
encuentra directamente relacionada con el estrato socioeconómico al que se
pertenece.
La estetización de la vida cotidiana
El Informe establece una importancia creciente de la estética en la vida
cotidiana de los chilenos en todos los ámbitos, siendo estos modos de
estetización consideradas como formas de individualización. La encuesta del
PNUD establece que el 49% de los entrevistados se preocupa de mejorar su
apariencia física, proporción que sube al 60% en el estrato alto y entre los
jóvenes.
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El mapa de los modos de vida de los chilenos elaborado en el Informe
perfila seis grupos, dentro de los cuales los jóvenes hombres de estrato medio y
alto se encuentran preferentemente en el grupo del individuo estilizado. Este se
define por individuos que "imaginan el mundo formado por personas, más que por
grupos o instituciones. En él, cada uno es importante por sí mismo y persigue sus
propios sueños."(PNUD, 245) Para este grupo lo central son sus propios proyectos
y valores, al mismo tiempo que la familia no presenta la importancia que tiene
para el resto de los grupos. Sin embargo no son individualistas, tienen muchos
amigos y creen que hay que interesarse por el futuro del país. El consumo
cultural ocupa un lugar importante en sus actividades de autorrealización. En
general son personas que poseen una alta autoestima y se mueven con confianza
por la vida. En esta categoría se encuentran los grados más altos de
individualización.
La diversidad del consumo cultural
El informe del PNUD elaboró un índice acerca de la distribución general del
consumo cultural sobre la base del total de los encuestados, el cual se dividió en
tramos constituyendo cuatro grupos según nivel de consumo cultural (consumo
cultural mínimo; bajo; medio; alto).
Los jóvenes se presentan en mayor proporción en los grupos de consumo cultural
medio donde destaca el acceso a la música, junto a personas del grupo
socioeconómico medio alto residentes en Santiago urbano, y también en el grupo
de consumo cultural alto con un predominio de personas entre 18 y 34 años,
hombres, del grupo socioeconómico alto y mayormente residentes en Santiago
urbano. Suelen ser personas que estudian o trabajan, en especial profesionales.
La individualización
Uno de los aspectos centrales del informe es la creciente individualización de la
sociedad chilena. Por individualización se entiende "que los referentes y valores
tradicionales son tomados como opciones y no como obligaciones y,
paralelamente, que hay un aumento de la capacidad de los individuos para
diseñar o escoger por sí mismos el tipo de vida que desean." (PNUD, 192)
Entre los más jóvenes existiría mayor individualización, debido a que por una
parte, las nuevas generaciones se han formado en las orientaciones de un mundo
más individualizado que el de los adultos y por otra que los jóvenes tienen menos
responsabilidades y obligaciones lo que les permite mayor flexibilidad para sus
propias definiciones. Los jóvenes opinan positivamente acerca del proceso de
individualización, ya que representa la posibilidad de perseguir sus propios
ideales, a diferencia de los mayores, que piensan que puede representar una
amenaza a la integridad moral de la sociedad.
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Individualización
Grupo de
edad
Baja
Media baja
Media alta
Alta
Total
18-24 años
9
10
17
26
14
25-34 años
24
21
27
28
25
35-44 años
21
25
21
22
23
45-54 años
18
19
17
14
17
55 y más
28
25
18
10
21
Total
100
100
100
100
100
Fuente: PNUD, Desarrollo Humano en Chile. Nosotros los chilenos: un desafío
cultural. p.192
Cambio en las relaciones familiares
El informe expone que la familia parece tornarse cada día más opcional y
flexible. En este proceso los jóvenes desde su posición de hijos tienden a
desarrollar imágenes diferentes de quienes ejercen el rol de padres, si bien
perciben los cambios, mantienen "una imagen más positiva de la sociedad y más
bien recelan de la capacidad de la familia para responder a los cambios" (PNUD,
208)
Estos, atribuyen los problemas familiares a las actitudes de los padres,
reconociendo que la formación tradicional de estos no les permite actuar de otra
manera. Las características más aludidas en las relaciones de los padres hacia
ellos son autoritarismo, desconfianza, descuido y falta de expresión afectiva, al
mismo tiempo que perciben que "el cambio en la sociedad y las mayores
capacidades y derechos de los jóvenes exigen y hacen posible relaciones
distintas."(PNUD, 209) No obstante, incluso para los jóvenes," la familia es un
lugar mejor que la sociedad", en ella se encuentra protección frente a la
sociedad y donde cada uno puede ser sí mismo.
Mujeres hoy: las tensiones de la emancipación
Frente a la afirmación que en la sociedad chilena existe "una tensión entre las
exigencias domésticas tradicionales, que permanecen vigentes y las nuevas
exigencias entre el trabajo"(PNUD, 216), las mujeres jóvenes experimentan una
distinción en su forma de vivenciar el proceso, estas valoran de forma positiva
los cambios, puesto que experimentan con menor intensidad las tensiones entre
la casa, la familia y el trabajo. Proceso que en algunos casos estudiados en el
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informe implica la voluntad de postergar o evitar las responsabilidades del
matrimonio o los hijos.
Pareja, sexualidad e intimidad
Respecto a la sexualidad el informe revela la percepción de un fuerte cambio en
este campo respecto a las generaciones anteriores. El ejercicio de la sexualidad
se vuelve relativamente autónomo de los fines de la procreación y del
matrimonio, lo que se devela en que las relaciones sexuales se inician en forma
mayoritaria fuera del matrimonio. Por otra parte, la frecuencia de las relaciones
sexuales de los jóvenes (con edades inferiores al promedio de matrimonio) no es
inferior que la de los mayores, lo que sugiere que las prácticas sexuales
prematrimoniales no son casuales sino regulares.
Al respecto la encuesta del INJUV establece que entre 1997 y el 2000 aumentó el
número de hombres y de mujeres jóvenes que ha tenido relaciones sexuales.
Frente al inicio de la de sexualidad esta tiende a producirse cada vez más
temprano, la mayoría de los jóvenes tiene su primera relación sexual entre los 15
y los 18, estableciéndose una importante diferencia entre los promedios de los
hombres (16,2 años) y de las mujeres (17,8 años)
Los jóvenes son quienes más valoran las nuevas formas de sexualidad,
considerándolas espacios de desarrollo personal y construcción flexible de
relaciones con los otros. Al respecto los datos de la encuesta del INJUV 2000
corroboran esta afirmación al dar cuenta que entre 1997 y el 2000 se aprecia un
aumento principalmente en las mujeres jóvenes que sostuvieron su última
relación sexual con una pareja ocasional (de 4% al 11,1% respectivamente) Así los
jóvenes se muestran contrarios a las reacciones críticas frente a los cambios en
la sexualidad expresadas por los adultos (preferentemente por las mujeres), que
visualizan una amenaza en el orden familiar.
De acuerdo al PNUD, la afirmación de la individualidad transforma la forma de
relacionarse en pareja, volviéndolas más flexibles y complejas, donde la
sexualidad se vuelve un aspecto central, desligándose del matrimonio y la
procreación. Esta realidad de acuerdo al informe es temida por los adultos,
asumida por los jóvenes hombres y muy valorada por las mujeres jóvenes.
La amistad
El Informe PNUD establece que los chilenos reconocen tener pocos amigos o sólo
conocidos. Los hombres tienden a declarar más amigos que las mujeres, y los
jóvenes más que los mayores. De los datos del Injuv se evidencia la efectividad
de la sociabilidad juvenil al establecerse que la gran mayoría de los jóvenes tiene
al menos un grupo de amigos, siendo más común entre los hombres.
Religión
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El Informe destaca un importante aumento del desplazamiento hacia la no
creencia en los grupos más jóvenes. Información que según el PNUD podría
significar tanto que la no creencia ha aumentado y/o que simplemente los
jóvenes a consecuencia de su etapa de desarrollo son más propensos a la no
creencia y luego con los años retoman la experiencia religiosa. En el grupo
juvenil hay una mayor presencia de no creyentes, y al igual que los hombres de
estrato alto y los habitantes de las ciudades poseen un mayor grado de
privatización de su religiosidad. Coincidentemente este grupo es el que expresa
el más alto grado de destradicionalización y de individualización.
Por su parte, los datos de la encuesta de juventud a pesar de revelar un alto
grado de religiosidad en los jóvenes chilenos, muestra que los jóvenes están algo
menos cercanos a la religión respecto a la población en general.
Situación que lleva a afirmar que "la experiencia religiosa está cambiando bajo el
impacto de los cambios culturales generales del país, y que en general, lo hace
en la misma dirección en que avanza los otros procesos: hacia la privatización de
la construcción de sentido." (PNUD, 239)
Tolerancia y no discriminación
De acuerdo a la encuesta del PNUD, los jóvenes, junto a las personas de los
grupos socioeconómicos medio y alto, y aquellas con mayor nivel educacional son
quienes tienden a tener mayor grado de tolerancia y ser menos discriminadores.
Sin embargo, el estudio IEA, establece que los estudiantes hombres muestran una
actitud negativa respecto a apoyar los derechos políticos, sociales y económicos
de las mujeres, ubicándose por debajo del promedio internacional.