El poder de los viajes El texto periodístico que voy a presentar es un artículo de prensa en su integridad que apareció en 1992, pero fue sacado de una obra que se llama: La vida desnuda (2002). Esta obra reúne artículos periodísticos redactados por la famosa escritora y periodista Rosa Montero. Escritos para “El País”, ella nos ofrece una reflexión personal sobre los hechos políticos e historias, pasando por la denuncia social, de las reflexiones de carácter sentimental o las relaciones entre hombres y mujeres. Pero el extracto que voy a analizar se titula El poder de los viajes. Así se puede destacar como el tema principal: los viajes. La tesis que nos expone Rosa Montero es muy breve, clara y un poco explicativa porque el título anticipa la idea fundamental de este texto. Es decir, cómo los viajes son una manera de conocer la verdadera personalidad de la gente, porque es cuando estamos en contacto con la persona que se descubre su verdadera naturaleza. Rosa Montero presenta esta tesis efectuando una reflexión personal porque es un artículo de opinión. Podemos dividir la estructura de dos maneras. Primero los tres párrafos exponen la idea de que los viajes son un medio para conocer a las personas y para descubrir un aspecto desconocido de las personas que frecuentamos, al contrario de los dos últimos que revelan que hay distintos tipos de viajes según la diversidad y los deseos de los humanos. Por otro lado la segunda manera de dividir este texto es que cada párrafo tiene su propio sentido, como de la línea 1 a 5 es la introducción que anuncia la tesis, la línea 5 a 15 son los ejemplos que son muy subjetivos y de la 16 a la 24 es la conclusión, la hipótesis. En primer lugar el primer párrafo nos da la tesis del artículo que es que los viajes nos permiten conocer el verdadero carácter de las personas; para ilustrar su tesis nos presenta una comparación: el viaje se compara al juego. Son comparables porque cuando se va a descubrir un nuevo país es la aventura de una nueva manera de vivir y pensar. Entonces el juego es dejarse llevar en esta novedad adoptando los hábitos del país. A continuación el viaje se compara al juego también y esto enlaza con la tesis del artículo, si viajamos acompañamos por un amigo, porque eso nos permite descubrir otras facetas de la persona como sus puntos positivos y negativos. Es eso que Rosa Montero desarrolla en el segundo párrafo, cuando ella nos comparte sus experiencias con Clotilde y Mariano. No son probablemente personas reales pero la autora los utiliza como ejemplos para apoyar su opinión. Como al principio la autora no vacila, felicita las cualidades de Clotilde, cuando dice: «tan buenecita ella, en lo cotidiano » pero su juicio cambia radicalmente porque no reconocía a su amiga a quien pensaba conocer, es por lo que dice: « antaño conocíamos ». Hay un contraste entre el final y el principio para mostrar que lo que se piensa no es forzosamente la realidad. Podemos ver también en el segundo ejemplo un poco similar, que Mariano una persona muy educada se transforma en un avaro, la autora utiliza muchas hipérboles para hacer hincapié en la amplitud de la situación, cuando dice: (l.21) «espejismo », (l.14) «muriendo de ganas», (l.12) «obliga a dormir», El tercer párrafo emite hipótesis sobre los beneficios que aporta a la gente viajar con las personas con quienes comparte algo importante en la vida. Este pasaje es muy cómico y hay una gradación muy importante porque pasa de un campo razonable a un campo totalmente ilógico. Eso muestra realmente lo absurdo de la situación. En la segunda parte la idea principal es que viajar nos exhibe tal y como somos, eso significa que cada persona tiene su propia idea de viajar. Todos los humanos poseen deseos muy diferentes los unos de los otros, eso explica la diversidad y la personalidad porque los caracteres de las personas son muy distintos; hay personas que son muy tranquilas, aventureras, solitarias, frenéticas. En el texto hay una enumeración de los tipos de viajes que existen como: (l.35, 39), los viajes que son más tranquilos, cuando la persona regresa al mismo lugar, o un viaje muy dinámico para los que prefieren las fuertes sensaciones como el rafting. En el último párrafo la autora habla de los viajes que ella prefiere, eso nos muestra su propia personalidad como una mujer muy solitaria, romántica, que prefiere la tranquilidad y la naturaleza porque el paisaje que guarda en recuerdo de su viaje es: « una noche de luna llena con las montañas…» (l.47) Al fin y al cabo este texto muestra un fenómeno social que afecta al conjunto de la sociedad porque todo el mundo está influido por la primera impresión de una persona, mientras que a veces las apariencias pueden ser engañosas. Por eso que es muy importante cuestionarse esto para no cometer los mismos errores que los otros sin darse cuenta. Comparto un poco el punto de vista de Rosa Montero pero cuando yo viajo prefiero estar en contacto con la población con el fin de incluir y asimilar la cultura durante mi estancia.