La historia del Movimiento Indígena en la Búsqueda del Suma

Anuncio
PFII/2006/WS.3/15
Original: Spanish
UNITED NATIONS
NATIONS UNIES
DEPARTMENT OF ECONOMIC AND SOCIAL AFFAIRS
Division for Social Policy and Development
Secretariat of the Permanent Forum on Indigenous Issues
INTERNATIONAL EXPERT GROUP MEETING
ON THE MILLENNIUM DEVELOPMENT GOALS, INDIGENOUS
PARTICIPATION AND GOOD GOVERNANCE
(New York, 11-13 January 2006)
La historia del Movimiento Indígena
en la Búsqueda del Suma Qamaña (Vivir Bien)
María Eugenia Choque Quispe
Centro de Estudios Multidisciplinarios Aymara
Qullasuyullu. Bolivia
Introducción.
La experiencia investigativa está referida con exclusividad a la historia del
movimiento indígena en Bolivia, la motivación, que de ningún modo era meramente
académico, obedecía a la imperiosa necesidad de fortalecer la identidad, que bajo
el señuelo de construcción de la identidad nacional, estaba siendo arrasada por una
avalancha homogeneizadora proyectada desde el Estado.
En una realidad, como la nuestra, marcada por la dominación colonial, cuyo objetivo
desde el principio fue borrar cualquier vestigio de identidad autóctona, la
producción de la cultura está marcada por la violencia (unas veces encubierta y
otras veces brutal). Los pueblos indígenas en esa situación, enfrenta el dilema de
aferrarse con terquedad a su identidad y cultura o romper radicalmente para
adscribirse a un mundo ajeno en calidad de marginado. En consecuencia el
razonamiento colonial funcionó en base a la lógica de asimilación, así la cultura
aymara, qhichwa, guaranies, y otros, hasta no hace mucho fueron etiquetadas
como cultura popular; los originarios casi por decreto fueron entonces convertidos
en campesinos, y en la ciudad enmarcados dentro de lo popular.
Después de siglos de dominación, la identidad y cultura aymara, están otra vez en
vísperas de recobrar su verdadera naturaleza y pujanza; sin embargo este proceso
de fortalecimiento corre el peligro de empañarse ante la cooptación que proyecta
una fracción de la élite que busca hacerse del protagonismo en el próximo
Pachakuti.
La historia del movimiento indígena en Bolivia, cobra importancia, por el rol que las
autoridades tradicionales,
han desempeñado a través de la historia, hoy
recorremos el ingreso al Sexto Sol, que se inicia con un nuevo momento histórico y
cósmico del mundo, en este camino, se abre el ingreso al Pachakuti, en la tarea de
construir el sujeto histórico, la vuelta del tiempo, para el ejercicio pleno de
nuestros derechos.
El inicio del Sexto Sol
Hoy emerge de la memoria del espacio, desde las wak’as que velan el destino de los
pueblos Qullas identidades como la Nación Pakajaqi, Qharanka, Killaka (…) con un
planteamiento político que se resume en la reposición del Mallku como símbolo del
poder andino. En este proceso el rol de la mujer indígena, se constituye en la
fuerza política e ideológica que empuja un proceso mucho más claro, por el cual,
tanto autoridades hombres y mujeres deben recorrer a lo largo de la vida.
2
El gran día, el Jach’a Uru se percibe, para ello es necesario un esfuerzo colectivo
de todos, para re-establecer la luz del día por encima de la oscuridad de la noche
en la que hemos vivido por tan largo tiempo. Y en esto el aporte de la mujer se hace
fehaciente, por cuanto ella es quién a través del idioma, la vestimenta, tejido,
música y cultura, va educando a la nueva generación, promoviendo la identidad y la
defensa de la cultura, somos las mujeres quienes desde temprana edad a través del
arte del tejido, vamos aprendiendo nuestra historia, nuestra cosmovisión y
reproduciendo el saber y el conocimiento indígena, del cual las portadoras genuinas
somos las mujeres.
La reconstitución desde un principio plantea la restauración del ejercicio de
autoridad que deben ejercer los mallkus, y dar luz en el camino, y es en este
proceso que la mujer aporta con su sabiduría y perseverancia en la defensa de la
identidad y de la cultura, aunque en la estructura organizativa ocupa el cargo de
Mama t’alla, esposa de la autoridad, son muy pocas las mujeres que han logrado
alcanzar el cargo de Mama Mallkus, sin embargo esto a sido a ausencia de la pareja,
o por su liderazgo reconocido.
Comenzando este Sexto Sol, los pueblos indígenas, a la cabeza de sus líderes y
autoridades, protagonizan el retorno al camino propio, qhapaq thakhi (camino de los
señores), que relaciona y estructura los ayllus a las markas y, las markas a los
suyus, que reconstituye el Qullasuyu; qhaphaq thakhi que contacta, a su vez con la
memoria del pasado, con los antepasados, achachilas de las altas cumbres del
sagrado Ande. El retorno a la memoria del pasado, viene de la voz femenina,
traducida en la expresión del canto, la música y la tradición oral. La relación que la
mujer establece con los apus y achachilas, nos lleva a una relación estrecha con
nuestras deidades, que protegen a sus hijos.
Se hace necesario tener la visión histórica de líderes (dirigentes e intelectuales),
herederos de la tradición libredeterminista de los mallkus, que plantean la
necesidad imperativa de mirar al pasado (qhip nayra) para luego apropiar con toda
seguridad el horizonte, el porvenir. Así desde el año de 1990 el colonialismo,
especialmente ideológico y cultural, empezó a ser revertido al visualizarse la
importancia fundamental del modelo organizativo ayllu y al establecerse
claramente el rol colonizador del sindicato campesino.
La reconstitución del ayllu solo fue el comienzo de un proceso, que aún está en
pleno desarrollo, la meta es la libre determinación del Pueblo Qulla. Así la marcha
de los ayllus, markas y suyus por el qhaphaq thakhi, busca la restitución de los
derechos de los pueblos, en el que la participación de la mujer se hace cada vez
más importante.
La reconstitución es kutt’aña, volver a levantar, edificar y constituir (utt’aya) la
institucionalidad Qullana destruida por el colonialismo. Esta institucionalidad, para
los pueblos indígenas, es su modelo social, el ayllu jatha que fue la semilla que
3
originó culturas, naciones y estados en gran parte del continente sudamericano. El
desarrollo libre y autodeterminado interrumpido por el poder colonial retoma su
propio curso, su camino thakhi.
Este volver a levantar lo propio, comenzó con un ejercicio intelectual: pensar por sí
mismos, jiwas pachpa amuyu. Así el ejercicio del amuyu (pensamiento) y lup’i
(reflexión, análisis), se expresó en una producción intelectual que dejó de lado la
vieja tradición colonial de adoctrinamiento. Libros, folletos, revistas, volantes
programas de radio y televisión, producido por los propios indígenas, difundieron la
vitalidad de la identidad, aymara-qhichwa-uru, y qullana a niños y jóvenes, familias
y comunidades.
El ayllu volvió a ser pronunciado, nombrado como el modelo social que permitió
enfrentar con éxito la colonización, defender la tierra, el sustento de la vida de
familias y comunidades. Confrontado con la organización sindical campesina, el ayllu
se yergue como pilar fundamental que sostiene la sociedad y re-confirma el dominio
y soberanía sobre el territorio. El mandato de la reconstitución surgió del seno
mismo de las familias y comunidades indígenas para enfrentar un liberalismo cada
vez más salvaje aplicado a los pueblos indígenas.
El ayllu, pese al rigor de la dominación colonial y a las adversidades del sistema
gamonal sobrevivió hasta vísperas de la revolución de 1952, aunque confinado a las
peores tierras y sus autoridades fuertemente sujetas a la burocracia local. Se
mantuvo la posesión y dominio del territorio, el sistema autónomo de autoridad,
encargado de la administración de recursos, resolución de conflictos y con alguna
capacidad de interacción con el Estado.
Sin embargo después de la reforma agraria fue impuesto desde el Estado la
adopción de la tenencia e incluso usufructo individual de una parcela de tierra y así,
como el relevo de sus autoridades por funcionarios para estatales organizados en
sindicatos, se hizo cada vez más evidente. Este último es una afirmación muy
formal, un análisis más profundo muestra que el sistema de autoridad fue obligado
a despojarse de sus símbolos de poder y mando y colocarse el marbete de
secretarios de un directorio sindical.
En algunos ayllus y markas el despojo fue evidente y real, sin embargo en la zona
de Machaqa y otros ayllus de la nación Pakajaqi los funcionarios sindicales no
pudieron concebir nunca el ejercicio del cargo sin los elementos simbólicos de
mando. En otros como Topohoco y las provincias Karangas de Oruro el sindicato
"convive" con las autoridades naturales de ayllu, constituyen algo así como
emisarios frente a la sociedad global y a la organización matriz campesina, sin
poder en la localidad. En otras zonas como el Norte de Potosí y el Sur de Oruro, el
sindicato es simplemente un negocio y su ámbito de acción se concentra en las
capitales provinciales, la capital del departamento y la ciudad sede de gobierno.
4
La reconstitución es una experiencia compartida, fruto de una dinámica interactiva
entre organizaciones indígena-campesinos con sus intelectuales y profesionales. El
desafío desde un comienzo fue asumido en la más absoluta confianza de hermandad
con las pioneras markas de Jesús, San Andrés y Santiago de Machaqa, en el
departamento de La Paz, que buscaron con afán los viejos títulos de propiedad
comunal de sus tierras y para su interpretación requirieron los servicios de sus
hermanos universitarios, desdeñando los recursos y el poder de entes
asistencialitas enclavados en su territorio.
Concepto de progreso desde la cultura aymara
Cómo se logra el bién vivir o suma jakaña? A través de la satisfacción de la
alimentación y esto a través del control de la producción. El ayllu regula con rigor
el sistema de producción agropecuario y de otros recursos, las decisiones tomadas
por las autoridades luego de la consulta a su pueblo están revestidos de celeridad,
contrariar es castigado. Con el logro de una buena producción se consigue a su vez
uno de los objetivos fundamentales como es suma manq'aña , es decir el comer
bien.
El deterioro de las condiciones sociales y productivas constituyen el principal
motivo para la reconstitución de la organización propia, con el postulado de
organizarnos a nuestra manera para un bien vivir está ligado a una conciencia
nacional que ahora se refuerza en el contexto internacional de reconocimiento a los
derechos indígenas del cual uno de los más importantes el derecho a la gestión
propia.
El suma qamaña, (vivir y convivir bien) es el ideal buscado por el hombre y la mujer
andina, traducido como la plenitud de la vida, el bienestar social, económico y
político que los pueblos anhelan. Entendida como el desarrollo pleno de los pueblos.
Podemos decir que para los aymaras la inauguración del Sexto Sol, es el ingreso de
los indígenas en la política de administración de Estado, ésta inauguración de un
gobierno indio, es sido producto, del dolor de la marginación y discriminación, a la
cual hemos sido sometidos. , durante muchos siglos.
El valor desde lo propio
Es la letra de la canción del techado de la casa. "Esta casa no es de perro, es casa
de la gente". La autovaloración de cualquier pueblo está ligado a su humanidad, su
capacidad de producir cultura, y unido a ello la normatividad que envuelve y el
respeto que a esa casa se debe. En la misma ceremonia la casa/hogar recibe los
títulos de "quri tapa, qullqi tapa" (nido de oro, nido de plata), que no debe ser
hollado en su sacralidad, so pena de represalia por parte del propietario y la
sociedad de la que es parte. Kuntur Mamani es el segundo título, aquí se refiere al
carácter, no solo sagrado, sino de fortaleza que tiene la casa al constituirse en el
5
domicilio del mallku Kunturi, en tanto es autoridad, o en morada mamani, el
prototipo de guerrero. El último y tercer título que recibe es el de cabildo, que es
el reconocimiento colonial del carácter que tiene el hogar indígena.
Quri tapa qullqi tapa, kuntur mamani, cabildo se fijan en un espacio sagrado, donde
solo viven los hijos en familia. Pachamama, llumpaqa constituyen el hogar sagrado
de la colectividad: jatha, ayllu, marka, suyu. Espacio sagrado, jerarquizado y
apropiado recíprocamente en la misma relación de madre-hijo. Hollada, al peligrar
su integridad se produce con toda justicia la ch'axwa, guerra de defensa, al
producirse el sacrificio la conquista es legítima. Este territorio se mantiene en
constante vigilancia y a través de un constante presencia, aunque esta última
situación se entremezcla hoy con situaciones faccionalistas.
Llumpaqa
Es la tierra en toda su profundidad, que con generosidad abriga y alimenta a sus
hijos. El agua que brota de sus entrañas, los frutos que regala al trabajo bien
invertido tienen que ver con una concepción de profundidad, antes que de
superficialidad o el simple suelo.
En la concepción de tapa aplicada al espacio territorial tiene que ver con la noción
de propiedad recíproca entre hombre y tierra. Se es dueño, ella también es dueña,
entonces protege y otorga libertad para aprovechar de su generosidad, por algo es
la madre que cría. Sin embargo la intrusión, la impertinencia es castigada, así los
accidentes sufridos por los extraños es siempre una expiación. La relación de
reciprocidad entre sociedad y territorio se sanciona con la capacidad de
administración y defensa.
La defensa del territorio innegablemente pasa por el conflicto, por el sacrificio
ritual en la ch'axwa. Jumaw jakayista jumarakiw imt'asxitata es el verso que
traduce esta relación de propiedad, la vida es parte de la madre tierra, de la patria
y a ella debe volver.
En la Búsqueda del Ejercicio de Gobernabilidad: Una experiencia a traves del
Ministerio de Asuntos Indígenas (MAIPO)
Los indígenas representan el 64% de la población total de Bolivia. No obstante,
durante la historia, los pueblos indígenas hemos estado excluidos de toda
participación, y según la Estrategia Boliviana de Reducción de la Pobreza (EBRP),
son quienes viven en la extrema pobreza. Sin embargo, la mayor riqueza de
diversidad biológica se encuentra en territorios indígenas.
La identidad se define en torno a:
Autoidentificación
Idioma
Territorialidad
6
Cultura
Vestimenta
Visión
Formular y promover políticas públicas, que protegen los derechos sociales,
económicos, culturales de los pueblos indígenas y originarios, asentados en el área
rural y urbana, en el marco de las leyes nacionales y convenios internacionales
vigentes.
Misión
Generar estrategias de transversalización de políticas públicas, para el ejercicio
real de los derechos de los pueblos indígenas y originarios del país.
Tener mayor incidencia en las políticas de desarrollo económico, políticas de
educación indígena (educación formal, no formal y superior), políticas de salud
indígena, promoviendo acciones de interculturalidad, desde el Estado y la sociedad
civil.
Acciones
- Asumir una posición propositiva y de cambio a partir de las demandas indígenas y
originarios.
- Canalizar demandas de los Pueblos Indígenas.
- Organizar eventos y espacios que coadyuvan el ejercicio real y efectivo de los
derechos de los pueblos indígenas y originarios del país.
- Promover el cumplimiento de las políticas públicas de la mujer indígena y
originaria, en su participación en el desarrollo económico, educación indígena y
salud indígena, promoviendo acciones de interculturalidad.
- Canalizar, vigilar y profundizar a través de la coordinación interministerial, la
aplicación de las diferentes políticas públicas a favor de los pueblos indígenas.
Resultados
- Se ha logrado la inclusión de los mecanismos de representación de los Pueblos
Indígenas en la Ley de Convocatoria de la Asamblea Constituyente.
- Se ha obtenido propuestas de los pueblos indígenas, para la Nueva Constitución
Política de Estado.
Se ha brindado la información a las organizaciones indígenas, para su participación
real y efectiva de las organizaciones.
- Se ha apoyado el liderazgo de la mujer indígena en el proceso de la Asamblea
Constituyente.
- Se ha visibilizado el rol de las mujeres en esferas políticas, en condiciones de
participación real y efectiva de las mujeres.
- Impulsar mayor acceso de las mujeres en las instancias de educación formal.
- Formular políticas de educación indígena, con enfoque de género.
7
- Contar con la alianza estratégica del Ministerio de Educación, para que en los
contenidos se involucre las formas de educación de los pueblos, salud, medio
ambiente.
Tareas Pendientes
- Generar políticas de desarrollo económico, basado en el respeto a la identidad.
- Impulsar el apoyo a las iniciativas de producción de las mujeres, que puedan ser
actores directos en la producción y comercialización de productos.
- Revalorizar las formas de producción indígena, para la protección del medio
ambiente.
- Fortalecer la producción agropecuaria artesanal y turística, en los pueblos
indígenas.
- Crear y promover la integración económica urbana rural de la población indígena,
para una mejor inserción de los productos en los mercados.
Comunicación Indígena
- Planificar agendas de difusión de la Asamblea Constituyente y Políticas de los
derechos indígenas, con énfasis en los derechos de la mujer indígena.
- Rescatar las formas orales de resolución de conflictos.
- Establecer mecanismos de coordinación con instituciones nacional e internacional
en el tema de justicia comunitaria.
- Mejorar el marco jurídico de los derechos consuetudinarios, en el marco de las
organizaciones indígenas.
- Mejorar el marco jurídico de los derechos consuetudinarios en el marco de la
Asamblea Constituyente.
Quiero mencionar que éstas acciones han sido realizas en el marco de profundo
esfuerzo, porque cuanto el acciones de los indígenas en el gobierno, es actuar
dentro de una casa ajena, donde uno es inquilino, en cambio ahora los retos en
Bolivia, son como construir un Estado intercultural, basado en el respecto a la
diferencia.
Bibliografía
Bertonio, Ludovico
1612
Titu Cussi Yupangui
1570
Vocabulario de la lengva aymara. Ed. Facsimil Ceres
Cochabamba 1984.
Ynstrucción del Ynga Don Diego de Castro Titu Cussi
Yupangui para el muy Ilustre señor el Licenciado
Lope... Ed. Pontificia Universidad Católica del Perú,
Lima, 1992.
THOA
1986
Mujer y Resistencia Comunario. Historia y Memoria
Van Den Berg, Hans
Diccionario religioso aymara, Ed. CETA-IDEA,
Ed. Hisbol, La Paz, Bolivia.
8
1985
Perú.
9
Descargar