documento 1: rol histórico de las etnias en chile

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Estudios Sociales – Guía Nº 1 – 1º-2º Enseñanza Media – Prof. Antonio Rioseco Aragón
GUIA DE APRENDIZAJE 1º-2º MEDIO
Pueblos Indígenas de Chile
DOCUMENTO 1: ROL HISTÓRICO DE LAS ETNIAS EN CHILE. (Extracto)
Etnia, Nación y Estado
En Chile existen comunidades cuya lengua, religión, valores e historia difieren del resto de la población. Desde hace siglos ocupan (y se identifican)
con el mismo territorio. Se les conoce con el nombre de etnias indígenas: aymará, mapuche, qawasqar, yámana, quechua, colla, atacameños y rapa
nui.
Culturalmente, los miembros de una etnia se perciben distintos y así son percibidos por los demás.
Tienen conciencia de pertenecer a una comunidad
cuya cultura nutre una suerte de "honor colectivo"
que está por encima de consideraciones de clase,
puesto que de él participa cualquier miembro del
grupo étnico, al margen de su posición social. El
Estado chileno reconoce la existencia de etnias
pero no de pueblos indígenas. Hablar de pueblo
equivaldría, en su opinión, a reconocer la existencia
de varias naciones al interior de un mismo territorio,
lo cual atentaría contra la visión clásica de una sola
nación y un solo Estado.
Como contrapartida, las organizaciones indígenas y
los defensores de los derechos indígenas, plantean
que las etnias sí constituyen pueblos, por historia,
identidad étnica, religiosa, lingüística y territorial. Si
todos los pueblos tienen una igualdad básica de
derechos, las etnias indígenas pueden aspirar; legítimamente, a la autodeterminación. La visión que
esta última perspectiva de análisis tiene de la relación entre cultura indígena y Estado-nación, es
profundamente crítica. Se habla de colonialismo
interno para dar cuenta de la existencia de pueblos,
dentro de un Estado, económicamente explotados y
culturalmente reprimidos.
Lo anterior se ampararía en el "valor supremo" de
la unidad nacional. Históricamente, los Estados han
privilegiado la vinculación del poder político con una
sola nación o etnia, negando la existencia de otras
comunidades culturales en su territorio o promoviendo su rápida asimilación. Sin embargo, pese a
siglos de discriminación etnocida y también genocida, la culturas indígenas no han desaparecido. En
el último censo (1992), más de un millón de personas señaló sentirse identificado con alguna de las
etnias indígenas que pueblan el territorio, principalmente la mapuche.
Mal que les pese a muchos, las etnias indígenas
existen. Este hecho obliga a repensamos como
nación y como Estado para abrirnos a una realidad
que no puede seguir desconociéndose: que en
Chile conviven diversos pueblos. El reconocimiento
es fundamental para valorar el aporte de las culturas originarias y avanzar hacia políticas de Estado
que aseguren el respeto y la sobre vivencia de las
comunidades indígenas.
Fuente: http://www.geocities.com/cculturalminka/contextochile.html
1. ¿Qué diferencias se plantean entre el concepto de etnia y pueblo indígena?
2. ¿Cómo entienden las comunidades indígenas su realidad de etnia? Enumera las características propias de una etnia y
ejemplifica cada una de ellas con una manifestación de su vida cotidiana.
3. ¿Cuál ha sido la relación del Estado en su relación con los indígenas?
4. ¿Hacia donde habría que caminar para poner fin a los problemas propuestos por el autor?
DOCUMENTO 1: Pueblo Aymara, testimonio.
“El problema fundamental del pueblo aymará es el
de las aguas. Creemos que con la actual política
económica que facilita la presencia de empresas
mineras transnacionales, estamos frente a una
posibilidad peligrosa de perder nuestras aguas,
vitales para la sobrevivencia no sólo de nuestra
agricultura, sino también de la ganadería y de nosotros mismos. Se suma a ello el hecho que las leyes
han sido redactadas para favorecer al inversionista
o al extraño, y no a quienes habitamos largamente
estos territorios. Por otra parte, debemos reconocer
que nosotros no conocemos esas leyes, sea por lo
engorroso de los procesamientos jurídicos o por no
tener la suficiente asesoría técnica.
Otro problema es la prohibición de hablar y expresarnos en nuestra lengua materna; la escuela es,
en ese sentido, un lugar educativo pensado para
castellanizar. Al perder nuestra lengua comienza un
largo proceso de pérdida de nuestra identidad cultural, cada vez los jóvenes se avergüenzan más de
sus propias costumbres, no quieren vestir como
nuestros abuelos, se niegan a alimentarse con quínoa y otros productos típicos...” (Justino Flores,
aymará, Comunidad de Villablanca, Tarapacá)
Estudios Sociales – Guía Nº 1 – 1º-2º Enseñanza Media – Prof. Antonio Rioseco Aragón
DOCUMENTO 2: Pueblo Mapuche, testimonio.
“La pérdida de nuestras tierras nos impide existir
como Pueblo - Nación. Defender la tierra es defender nuestra vida.
Hablar de nuestra lengua, conocer nuestra historia
y la de nuestros antepasados, respetar nuestras
tradiciones y autoridades, celebrar nuestras festividades y ritos, todo ello debe servirnos para defender nuestra identidad y revivir nuestra nación.
Nuestras tierras son la base de nuestra existencia,
requisito para sobrevivir y base de nuestra unidad
como pueblo. Nuestros antepasados dieron sus
vidas por ello. Nosotros y nuestros hijos seremos
dignos y los cuidaremos como nuestra madre
Yo quiero a mi pueblo, mi pueblo es vida, es esperanza”. (Revista El Canelo, vol 3, Nº 7, diciembre de
1987, pág. 17)
DOCUMENTO 3: Pueblo Kawesqar, testimonio.
“Yo soy un pescador y quiero contarles cómo es
nuestra vida en Puerto Edén y cómo realizamos
nuestro trabajo, duro con muchas dificultades.
Salimos en la lancha para afuera, a los canales, a
un día de navegación. Llevamos con nosotros víveres para uno o dos meses. Vamos juntos con tres
compañeros. Llegamos a un lugar en alguna playa
de los canales y allí levantamos el campamento y
comenzamos a mariscar para sacar las cholgas.
Tenemos varios tambores grandes de los que se
usan para el petróleo y en ellos cocemos cholgas
en un fuego grande. La leña es abundante en el
lugar porque hay mucha vegetación. Después con
tiras de junquillo o yapo vamos ensartando y formando los paquetes de cholgas. Las colgamos
dentro de un rancho de lonas y allí las vamos ahumando.
El trabajo es duro con el frío y la lluvia que es continua, pero sobre todo es difícil cuando faltan los
alimentos. Yo recuerdo en una ocasión que se nos
terminaron los víveres y faltaban varios días para
terminar la faena. Tuvimos que internarnos por los
cerros para poder cazar algún ciervo. Hay ciervos
aunque son escasos. Fue difícil cazarlo; hubo que
perseguirlo en el bosque donde es muy blando el
terreno y se hunden los pies en la turba. Lo cercamos en un barranco y lo matamos con un piedrazo.
Con su carne pudimos alimentarnos durante cuatro
días; después sólo quedaban las cholgas.
En otra ocasión recuerdo que estando en la faena
de la cholga se sentí muy enfermo, con fiebre. No
tenía ningún remedio ni pastilla. Los compañeros
no podían ayudar; no podían hacer ninguna cosa
por mí. Me sentía muy mal, pero estábamos muy
lejos sin posibilidad de ayuda. Después de cuatro
días me sentí mejor y pudimos regresar a Puerto
Edén.
Nuestros antepasados usaban como vestido las
pieles de nutria. Al paso de los barcos en que solemos salir para ofrecer nuestros productos, los
pasajeros nos ofrecen ropa y frazadas a cambio de
nuestras pieles y hacemos el trueque o cambalache. Desde entonces comenzamos a vestirnos con
ropa común. Pero eso fue hace muchos años, mi
padre me lo contaba; yo no conocí esa época.
Actualmente también salimos al paso de los barcos
para ofrecer nuestras cholgas y hacer el trueque
por víveres. Ofrecemos también nuestra artesanía:
canastillos que tejemos con junquillo y pequeños
botes que hacemos con piel de lobo marino. En
Puerto Edén vivimos solamente 12 personas kawesqar. El resto está en Puerto Natales dedicados
a la pesca. Algunas familias en Punta Arenas y
algunos jóvenes trabajando en Santiago. En total
somos 31 personas de nuestra raza Kawesqar: 15
hombre y 16 mujeres.” (Testimonio de Carlos
Reuchi, kawesqar de Puerto Edén. En Seminario de
Pastoral Indígena, Area Pastoral de la Conferencia
Episcopal de Chile, Temuco 6 y 8 de Octubre de
1987, pág. 65).
5. ¿Qué dificultades puedes ver para los tres pueblos respecto a su relación con el mundo occidental, según los testimonios
aquí presentados?
6. ¿Cómo se ve afectado el pueblo aymara por los poderes económicos?
7. La aculturación es adoptar o asimilar rasgos culturales de otro, generalmente más desarrollado y en una posición desmejorada respecto a la cultura que se impone. En este sentido, ¿qué peligros y/o beneficios puede significar que los pueblos
indígenas adopten la cultura occidental chilena? ¿Qué elementos culturales se ven más afectados por la aculturación?
8. ¿Cómo es posible respetar la identidad de los pueblos indígenas?
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