Determinación del IVA Se ha señalado que la denominación de este tributo obedece a que lo que se grava es el valor añadido o agregado que cada agente que participa en el proceso de comercialización de bienes y servicios va incorporado en esta cadena de circulación de los mismos bienes. Para lograr este objetivo la ley creó los mecanismos pertinentes esto es y creó el “crédito fiscal y el débito fiscal” por manera que lo que efectivamente se grave se obtendrá mediante la sustanciación del crédito fiscal al débito fiscal y todo aquel que participe en la cadena de circulación de los bienes pero que no ese en condiciones de imputar un crédito fiscal o un débito fiscal pasa a tener la calidad de consumidor final. Esto encuentra asidero en la ley en el art. 20 inc. 2 señala que el impuesto a pagarse se determina estableciendo la diferencia entre el crédito fiscal y el débito fiscal. Por consiguiente y en mérito a la disposición legal citada es de rigor establecer el crédito y débito fiscal que decidir cuál es la carga impositiva que debe soportar el contribuyente. Débito fiscal. El art. 20 inciso 1° de la ley dispone que es débito fiscal mensual, la suma de los impuestos recargados en las ventas servicios efectuados en el periodo tributario respectivo. Es de rigor señalar que se entiende por periodo tributario respectivo. Según el art. 2 n° 5 el período tributario de este impuesto es de un mes calendario. En dicha virtud como la ley habla del débito fiscal mensual significa que corresponde al período tributario del mes respectivo. Determinación del débito fiscal mensual: De la definición del art. 20 queda de manifiesto que se trata de una sumatoria de los impuestos recargados en el mes respectivo, sin embargo esta sumatoria no es pura y simple sino que para fijarla hay que tener en cuenta las reglas que nos proporcionan el art. 35 del reglamento, precepto que obliga distinguir las siguientes situaciones: 1° Contribuyente obligado a emitir factura en este caso se sumará el total de los impuestos recargados separadamente en las operaciones afectas y que se hubieren realizado en el periodo tributario respectivo. 2° Contribuyente obligado a emitir boletas, en este caso se sumará el total de las ventas y servicios afectan en el periodo pertinente incluyendo aquellas operaciones sin boletas por ser montos inferiores al mismo. Efectuada dicha sumatoria se aplicará a este total la operación aritmética que corresponda para determinar el impuesto incluido los actores de transferencias de los bienes o remuneraciones de los servicios prestados. 3° Contribuyente obligado a emitir facturas y boletas en forma simultánea, en este caso para la determinación del débito fiscal mensual se aplicará las dos reglas precedentes por separado. A partir de las reglas del ar.t 35 queda parcialmente del delito fiscal mensual esto por la sencilla razón que éste se encuentra sujeto a determinados reajustes ya sea agregándoles ciertas partidas ya sea deduciéndose otras. Agregados al Delito fiscal mensual. Conforme al art. 36 del reglamento el débito fiscal mensual debe entenderse aumentado cuando dentro del mismo período tributario se hayan emitido notad de débito, la emisión de estos documentos puede corresponder a los siguientes rubros: 1° Diferencias de precios 2° Intereses, reajustes y gastos de financiamiento por operaciones a plazo (relación con el art. 15) 3° Intereses moratorios. Lo importante de estos agregados es que deben corresponder a operaciones gravadas y siempre y cuando esta operación este respaldada por una factura, pues si el agregado al debito fiscal o una operación gravada respecto de la cual se ha emitido una boleta lo que corresponde ahora es emitir una nueva boleta y conviene adelantar además que las notas de débito se emiten cuando se aumenta la carga tributaria, sumando los incisos omitidos. Ejemplo: en diferencia de precios (es lo más recurrente) Si hay un artículo de $30.000 y que por error se emitió la factura por $3000, esto significó aplicar un menor impuesto. Esto es una operación ya facturada, la factura no se puede omitir ni romper, por lo tanto para esto se emite una nota de débito, en el ejemplo nota de débito por $27.000. Si el error fue con boleta, aquí se hace una nueva boleta por los $27.000, en el caso del ejemplo. Si se detecta al mes siguiente del error en ese mes se emite la boleta y/o factura. Ejemplo: en intereses y reajustes. Si hubo una operación que no se pactaron intereses, y el cliente no paga, después se repacta y con nuevos intereses, por lo tanto que a mayor base imponible, aumenta el débito fiscal, se devenga el IVA cuando es exigible y ahí se emite la nota de débito y se declara al mes siguiente del que fue el error. Deducciones al débito fiscal mensual. Disminuir o deducir al Débito Fiscal Mensual significa atenuar la carga tributaria, de acuerdo al art. 21 de la ley y art. 37 del reglamento deben deducirse las siguientes partidas: 1° Bonificaciones y descuentos otorgados a los compradores o beneficiarios del Servicio con posterioridad a la facturación. Debemos enfatizar que las bonificaciones y descuentos son posteriores a la facturación porque si son coetáneos debe indicarse en la misma factura, ello con la finalidad de evitar una infracción en el entendido por el servicio que se esta cobrando un precio inferior al de comercialización del mercado. En el art. 97 n°4 del Código Tributario, inc. 1°, las declaraciones maliciosamente o falsas…… por ejemplo facturar o boletear menos que el precio real o corriente. Art. 66 letra d. Para reflejar la deducción (disminución de la carga impositiva) desde el punto de vista contable debe emitirse una nota de crédito. Art. 37 final del reglamento. Una nota de crédito significa normalmente que se ha pagado un impuesto en exceso y a través de este impuesto se disminuye la carga tributaria. 2° Cantidades restituidas a los compradores o beneficiarios del Servicio, en razón de bienes devueltos y servicios resciliados por los contratantes siempre que correspondan a operaciones afectas y devolución de especies o resciliación de servicios en los términos del art. 70. (art. 21 n°2 y art. 70). Por ejemplo si compro un artículo y quiero devolverlo a la tienda y para el comerciante no tenga problemas con el inciso, este podrá hacer una nota de crédito para enmendar la situación. En las operaciones gravadas, en caso de litigio (por ejemplo comerciante, no quiere recibir el producto que el cliente debe devolver) se utiliza el art. 70 de la Ley de IVA. 3° Debe deducirse al débito fiscal las sumas devueltas a los compradores por los depósitos a que se refiere el art. 13 n°2. (Depósitos, aumentan la base imponible) Ajustes al débito fiscal. Para efectuar los agregados o deducciones al débito fiscal al contribuyente debe: 1° Emitir una nota de crédito o débito según corresponda. 2° Registrar estas en los cobros de compra y ventas todo ello de conformidad al art. 57 de la ley. Crédito Fiscal El IVA grava sólo el mayor valor incorporado a los bienes afectos al tributo, por consiguiente, el contribuyente tiene la posibilidad de rebajar de su débito fiscal los impuestos al IVA que hubiere soportado al adquirir bienes o utilizar servicios que dicen relación con su actividad generadora o susceptible de configurar hechos gravados afectos al IVA. De esta forma, el crédito fiscal está constituido por el impuesto soportado por el contribuyente en un periodo tributario determinado sobre sus compras y utilización de servicios. Como consecuencia de ello, el impuesto a enterar en arcas fiscales se traduce en la diferencia entre el impuesto retenido u originado por sus ventas y prestaciones de servicios realizadas en un periodo tributario determinado y los tributos soportados o pagados por el contribuyente en el mismo periodo tributario. Por el concepto de crédito fiscal queda a nuestro entender mejor precisado en el art. 39 del reglamento que a la letra señala: “El crédito fiscal que establece el párrafo VI del título II de la ley está constituido por los impuestos que a los contribuyentes afectos al IVA les han sido recargados en sus adquisiciones o servicios recibidos y que pueden deducir de su débito fiscal mensual determinado en conformidad a las normas contenidas en la ley”. Como una cuestión de carácter formal, pero de la esencia del crédito fiscal, es que el tributo sea recargado separadamente en la respectiva factura o en los comprobantes de ingreso si se trata de importaciones, por lo demás así queda de manifiesto en el art. 39 inc. 2 del reglamento que califica esta exigencia como requisito esencial. Sin embargo, a pesar de lo que se viene diciendo, no cualquier impuesto al valor agregado que hubiere soportado el contribuyente al adquirir bienes o utilizar los servicios estará configurando crédito fiscal. El efecto, la ley ha sido absolutamente cautelosa y rigurosa en señalar que tributos soportados por el contribuyente configuran o dan derecho al crédito fiscal. Así se desprende de la lectura del art. 23 n°1 de la ley. Según la disposición legal citada podemos establecer las siguientes partidas que configuran o dan derecho a crédito fiscal: 1.- Impuesto recargado en las facturas que dan cuanta de la adquisición de bienes corporales muebles destinados a formar parte del activo fijo. Esto es, aquellos bienes adquiridos por el contribuyente para usarlos en la explotación de sus negocios y sin el ánimo de venderlos. Ejemplo, una fábrica de calzados, la adquisición de una máquina cortadora de cueros y suelas en general. 2.- Impuesto pagado con ocasión de la adquisición de bienes destinados a formar parte del activo realizable. Esto es, bienes que constituyen el giro del negocio del contribuyente. En el ejemplo puesto, la adquisición de calzados para la reventa o la adquisición de materias primas destinadas a la elaboración de calzados. 3.- Impuesto soportado en relación con los gastos de tipo personal que guarden correspondencia con el giro o actividad del contribuyente. 4.- Impuesto soportado con motivo de la importación de un bien destinado a formar parte del activo fijo o realizable. 5.- Impuesto recargado en las facturas que acrediten la utilización de servicios afectos al tributo en referencia. 6.- Impuestos recargados en las facturas emitidas con ocasión: a) b) c) d) De un contrato de venta de bienes corporales inmuebles. Contrato de promesa de venta de bienes corporales inmuebles Contrato de instalación y confección de especialidades. Contratos generales de construcción. En la forma relacionada, son únicamente las partidas precitadas las que configuran crédito fiscal y que el contribuyente se encuentra habilitado para rebajarlo del débito fiscal. Lo preceptuado por el art. 23 n°1 de la ley constituyen verdaderos requisitos de fondo del crédito fiscal. Sin perjuicio de lo anterior, existen requisitos de carácter formal para hacer uso del crédito fiscal, tales resultan del art. 25 de la ley en relación con el 23 inc. 1 de la misma ley. 1.- Que el impuesto sea recargado en la factura o como dice el precepto “sea pagado según los comprobantes de ingreso del impuesto tratándose de importaciones”. Se recordará que este requisito tiene carácter esencial al tenor del art. 39 inc. 2 del reglamento. 2.- Que tales documentos (facturas o comprobantes de ingresos) se hayan registrado en los libros especiales señalados en el art. 59 de la ley. 3.- Que el recargo del tributo se haya practicado y consignado separadamente en los citados documentos. 4.- Que el contribuyente pague una fracción del precio o suma equivalente al monto del impuesto que grave la operación respectiva independientemente del plazo o condiciones de pago convenidas con el vendedor o prestador del servicio. Agregados al Crédito Fiscal De acuerdo al art. 24 inc. 2 y 44 del reglamento deberán agregarse o sumarse al crédito fiscal el impuesto que conste en las notas de débito recibidas o registradas durante el mes por aumentos de impuesto ya facturado. Deducciones al Crédito Fiscal Conforme al art. 24 inc. 1 y 44 reglamento, debe deducirse del crédito fiscal los impuestos correspondientes a las cantidades recibidas en el mismo periodo por concepto de bonificaciones, descuentos y devoluciones efectuadas por los proveedores de los contribuyentes. Facturas Recibidas con Retraso Art. 24 inc. Final., esta disposición debe analizarse con el art. 23 inc. 1 El art. 24 inc. Final se encuentra inserto de la filosofía de la ley de iVA, específicamente del funcionamiento y del crédito fiscal en relación al débito fiscal. Como se sabe el crédito fiscal debe guardar perfecta correspondencia con el débito fiscal es decir el crédito fiscal solo puede rebajarse del crédito fiscal correspondiente al mismo período tributario, (el crédito fiscal de mayo del 2001 se rebaja de mayo del 2001). El legislador previendo la posibilidad que por cuestiones de negocios y operaciones los respectivos documentos, facturas que dan cuenta de una operación gravada no lleguen oportunamente a manos del contribuyente, es decir no lleguen oportunamente a manos del contribuyente, es decir no sean recibidas por el contribuyente en el mismo período tributario, en que corresponda a esa factura (a la fecha de emisión de ella). Pues bien y como dice la ley cabe la posibilidad que las facturas que se reciban con retraso puedan utilizarse en un período tributario diferente del que corresponda a la fecha de emisión de la factura, teniendo como límite claro está que puede utilizarse dentro de los dos períodos tributarios siguientes, según el art. 24 inc. Final. Lo cierto es que esta norma debe entenderse interpretada armónicamente, con el nuevo requisito para hacer uso del crédito fiscal establecido por el art. 23 inc. 1° , se recordará que este requisito exige que para utilizar el crédito fiscal por un IVA recargado en una factura debe haberse pagado a lo menos una cantidad equivalente al monto del tributo y esto pudiere ocurrir en 5 o 6 o más períodos tributarios, posteriores o siguientes a la fecha de emisión de la factura en referencia. De esta manera interpretaciones siguientes: pueden surgir las posibles 1° Que indique que la norma del art. 24 inciso final, está referida para el caso que el contribuyente pague a lo menos el monto del inciso a la época de celebración del negocio gravado mientras que el art. 23 estará referido para el caso en que el monto del impuesto sea pagado después de los dos meses y otra interpretación. 2° Que puede sustentar que se trata de dos situaciones diferentes, una norma, 24 inc. 3° que fija la época o plazos máximos para registrar contablemente la factura en cuestión pues no debe olvidarse que otros de los requisitos para hacer uso de crédito fiscal es que la factura se registre contablemente según art. 59 de la ley mientras que el art. 23 inc. 1 solo fija la época en que podrá utilizarse esa factura para los efectos del crédito fiscal trátese de una operación al contado o crédito las facturas deberán registrarse en los tipos indicados por el art. 24 inc. 3. No hay pronunciamiento al respecto que la reforma es del año pasado, y su vigencia se encuentra suspendida (art. 23 inc. 1) para el art. 6° de la ley 19.747 del D.O: del 28 de julio del 2001 suspendiendo la aplicación de esta modificación hasta el 31 de diciembre del 2002. Ejemplo: si se perdió el documento (factura) su proveedor tiene copias y se le pide fotocopia ante notario fiel del original. Ahora viene el SII y se rechaza el crédito fiscal que no es original ¿Qué pasa? Argumentos: Art. 25 no puede que sea la factura original (como de prueba), además se puede entregar con los originales, la fotocopia; ahora el DS 825, no exige para hacer uso del crédito fiscal que el contribuyente tenga el documento original esa factura. La factura emitida por el proveedor fue contabilizada en el período tributario correspondiente. (En los hechos correspondientes consta) y se cumplió con el impuesto. Por lo tanto no es perjuicio fiscal. (Para una defensa del contribuyente). Tesis del SII: dice que requiere que la contabilidad y documentos sea con documentos verdaderos fidedignas, es decir originales, esto fluye del espíritu de la ley. Una fotocopia aunque sea ante notario puede ser un documento no válido. Conceptos que no dan Derecho a crédito fiscal. Para hacer uso del crédito fiscal no basta cumplir con los requisitos de forma y de fondo que establece la ley, sino que además siguiendo la línea de la ley de IVA las partidas gravadas y que configuran crédito fiscal deben estar encaminadas a su vez a generar operaciones gravadas ese deben estar dirigidas a operaciones que generan debitó fiscal entonces la franquicia es que se puede recuperar un IVA como crédito fiscal en la medida que se destine a una operación que genere débito fiscal. De ahí que el art. 23 establece ciertas hipótesis que no dan derecho a crédito fiscal tales son: 1° Caso del art. 23 n° 2. Por ejemplo tengo una fábrica de calzado, necesito comprar instrumentos para confeccionar un calzado. Las materias primas forman parte del activo realizable y el IVA que se paga por el art. 23 n°1 se recupera como crédito fiscal. Si vendo zapatos se crea un débito fiscal en armonía entre crédito y débito fiscal. Art. 23 n° 2 dice que si se destina a operaciones no gravadas o exentas o actividades no directas con el giro del vendedor, no genera débito fiscal forrar el piso, esto no genera crédito fiscal. Este caso es el ejemplo más demostrativo en cuanto a la correspondiente que debe haber entre crédito fiscal y débito fiscal en un período determinado si los bienes se adquieren, no renieguen, o se destinan a operaciones exentas del mismo tributo o no dicen relación con la actividad del contribuyente del IVA que se pago por los respectivos bienes o por la utilización de los bienes no podrá utilizarse como crédito fiscal al tenor del art. 23 n° 2. 2° Caso del art. 23 n° 3 El fundamento de este numerando es idéntico al anterior, solo que ahora el legislador parte del reconocimiento expreso que es posible que la importación o adquisición de bienes o de utilización de servicios se destinen también a operaciones gravadas de débito fiscal como operaciones exentas. Por ello la ley reconociendo esta circunstancia reconoce el derecho a crédito fiscal por la utilización de tales bienes o utilización de servicios pero en forma proporcional. 3°. Caso del art. 23 n° 4. Esta inspirado más que nada por la fiscalización que se producía pensar por ejemplo voy a comprar bienes, autos, pensando que son bienes del activo fijo, por lo tanto no da derecho a crédito fiscal. Según el art. 23 n°4 no hay derecho al crédito fiscal por la adquisición de los bienes que menciona la norma, sin embargo esta negación no es absoluta por cuanto queda la posibilidad según la tarde final del art. 23 n° 4, que el director del SII (no se puede reclamar las materias que son facultad exclusiva del director del servicio) califique previamente de necesarios a su juicio exclusivo tales bienes y nos diremos necesarios y que generen operaciones gravadas, en dicha forma se ha establecido una perfecta armonía entre el art. 23 n°4 de ley de IVA y el art. 31 de la ley de la renta., esto es si se califica de necesaria la adquisición de tales bienes son gastos necesarios para producir la renta y el IVA que afecta la adquisición de tales bienes constitutivos de Crédito Fiscal 4° Caso del Art. 23 n° 5 Señalan que no dan crédito fiscal, los impuestos recargados o retenidos en facturas no protocolizadas o falsas, o que no cumplan con los requisitos legales o reglamentarios o en aquellas otorgadas por personas que no resultan ser contribuyentes del IVA. Esta negación del crédito fiscal dice relación con la caducidad de la factura la que según la disposición del art. 23 n° 5 puede tratarse de los siguientes casos: 1° Facturas no fidedignas. Se entiende por tal aquellas que no son dignas de fé, esto es que contienen irregularidades materiales que hacen presumir con fundamento que no se ajustan a la verdad, en tales circunstancias se encuentran facturas como: las que tienen numeración y fecha no guardan la debida correlatividad con el resto de las facturas. Facturas con correcciones, interlineaciones o con enmendaduras. contables, copias, etc. Facturas que no guardan armonía con los asientos facturas que no dicen relación entre el original y las 2° Facturas Falsas, son aquellas que faltan a la verdad o a la realidad de los datos contenidos en ellas. La falsedad de una factura puede ser de carácter material, esto es se altera el contenido del documento, en su materialidad, o bien puede ser de carácter ideológico o sea que de constancia de cosas falsas o mentirosas aunque las cosas falsas o mentirosas sean reales o auténticas. 3° Facturas que no cumplen con los requisitos legales o reglamentarios, en este caso el rechazo del crédito fiscal es porque la factura ha sido emitida con infracción al art. 54 de la ley y 69 del reglamento. 4° Facturas emitidas por aquellos que no son contribuyentes del IVA. En este caso estamos en presencia de personas que carecen de la calidad de vendedor habitual de los bienes gravados, o que carece de la calidad de prestador de servicios afectos al impuesto. Ejemplo: arrendamiento del inmueble con mobiliario pero puede ser un arriendo de un inmueble sin mobiliario aquí no sería una operación gravada pero igual emite una factura de la que después se requiere un crédito fiscal. Esta es una situación no gravada y por lo tanto no da derecho a crédito fiscal. Pues bien será materia de la fiscalización del Servicio el que en cada caso dirá que a un contribuyente determinado se le prive de un crédito fiscal, en los casos del art. 23 n°5, es decir los fiscalizadores deberán indicar en cada caso en que calidad se encuentra la factura que ha sido objetada por ellos, vale decir tendrían que señalar que es no fidedigna y que materias y/o tendrán que señalar si es falsa y decir si es material o ideológicamente falsa, o tendrán que decir cuales son los requisitos legales o reglamentarios que carece la emisión de la respectiva factura o en fin tendrán que decir que tales facturas emanan de una persona que no es contribuyente de IVA. Como puede apreciarse aquí hay una verdadera imputación un verdadero reproche que el servicio formula al contribuyente por una eventual utilización ilegítima de un crédito fiscal y este reproche deberá expresarlo: 1° en la oportunidad que corresponda, esto es, en el trámite de la citación o en la liquidación respectiva según lo ha resuelto la doctrina y la jurisprudencia de los tribunales. 2° y en ese reproche se expresará circunstanciadamente los motivos que elevan al fiscalizador a fundamentar el rechazo del crédito fiscal. Las dos consideraciones precedentes conllevan a que oportunamente el contribuyente pueda conocer cabalmente el reproche que se hace sus facturas que constituyen crédito fiscal y por consiguiente pueda formular los descargos correspondientes. Se ha resuelto en algunas sentencias que no se trata de negar por negar un crédito fiscal so pretexto que la factura es no fidedigna o falsa si no se han expresado los factores o condiciones que sirven de fundamento a la negación del crédito fiscal, no debe olvidarse y el reproche debe formularse en la etapa que corresponda si no es en la citación, lo será al menos en la liquidación y esta como lo ha dicho la doctrina constituye una especie de demanda que el servicio deduce en contra del contribuyente y como tal deberá indicarse los fundamentos de hecho y de derecho en que se apoya la liquidación (demanda). Por consiguiente si el reproche es formulado en un instrumento posterior por ejemplo en la sentencia dictada en el juicio de reclamación necesariamente ese fallo se aparta de la litis y transforma la cuestión controvertida en una interpretación que el contribuyente, que desde luego el tribunal de alzada deberá enmendar por la vía de la apelación, pues como se sabe no procede la casación de oficio. El art. 28 de la ley señala que en los casos de término de giro si hubiere un remanente de crédito fiscal se imputará al IVA que se devengue con motivo de la venta o liquidación del establecimiento o de los bienes que lo componen. A continuación señala el precepto que si todavía quedare un remanente se imputará al pago del IVA de 1° categoría que se hubiere devengado en el último ejercicio y se aún existe un remanente, luego de efectuada esta última situación tal remanente se pierde. Situación de los remanentes de crédito fiscal en el caso del art. 27 bis Contribuyente que pueden optar al beneficio: a) que se trate de contribuyentes afectos a IVA b) los exportadores Condiciones de procedencia del beneficio contemplado en el art. 27 bis. 1. que el contribuyente tenga remanente de crédito fiscal acumulados durante 6 o más periodos tributarios consecutivos como mínimo. 2. que en los referidos remanentes tengan su origen en la adquisición de bienes corporales muebles o inmuebles. 3. que tales bienes formen parte del activo fijo del contribuyente. 4. o que también tales remanentes de crédito fiscal tengan su origen el servicio que formen parte integrante del costo de los bienes anteriormente señalados. Fundamentos del beneficio. Como se recordará el art. 23 de la ley n°1 señala cuales son las partidas que dan derecho a Crédito fiscal, entre ellas según la disposición legal citada. Se encuentran la adquisición de bienes destinados a formar parte del activo fijo. Como se sabe el activo fijo está compuesto por todos aquellos bienes que ha adquirido el contribuyente para usarlos en la explotación de sus negocios y sin el ánimo de revenderlos. Pues bien, cuando se trata de bienes de esta naturaleza normalmente se esta incurriendo en una fuerte inversión sobre todo en aquellos bienes o componentes de la mediana industria, por ejemplo en la industria pesquera basta citar la adquisición de una nave pesquera, de calderas, etc. Esa fuerte inversión origina desde luego un crédito fiscal, de elevada cuantía y por lo mismo se generará lo más probable un remanente de crédito fiscal el que de acuerdo con la mecánica normal de la ley solo podrá recuperarse en la medida que exista suficiente débito fiscal. Pero como esta situación no tiene límites en el tiempo, la ley ha creado un mecanismo que favorece no solo a los contribuyentes del IVA, sino que se ha extendido además a los exportadores con el fin de compensar esa fuerte inversión y permitir que tales contribuyentes puedan obtener en el corto plazo suficientes flujos de ingreso para financiar sus operaciones cotidianas. Sin embargo la ley es clara no cualquier IVA que configura crédito fiscal puede recuperarse al amparo de este precepto, sino solo los que tienen su origen en la adquisición de bienes destinados a formar parte del activo fijo o aquellos derivados de la utilización de servicios que forman parte del costo de lso bienes del activo fijo. ¿En que consiste el beneficio? Los contribuyentes puedes acogerse a las normas del art. 27 bis y que cumplan las condiciones antes señaladas tienen el siguiente derecho opcional: a) podrán imputar esos remanentes de crédito fiscal a cualquier clase de impuestos fiscales, incluso de retención y a los derechos, tasas y demás gravámenes que se perciban por intermedio de las aduanas, o bien b) solicitar que ese remanente le sea reembolsado por la tesorería general de la república.