REPÚBLICA ARGENTINA VERSIÓN TAQUIGRÁFICA CÁMARA DE SENADORES DE LA NACIÓN REUNIÓN DE LA COMISIÓN DE SISTEMAS, MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y LIBERTAD DE EXPRESIÓN Salón Eva Perón 5 de abril de 2005 Presidencia del señor senador Jenefes — En el Salón “ Eva Perón” del H. Senado de la Nación, a las 12 y 20 del martes 5 de abril de 2005: Sr. Presidente (Jenefes). — Le agradezco a todos ustedes la presencia en esta Comisión de Sistemas, Medios de Comunicación y Libertad de Expresión en donde el tema que estamos tratando es la reforma de artículo 45 de la ley de radiodifusión. Estamos continuando con las consultas, ya que hace tres semanas se escuchó fundamentalmente la posición de todas las organizaciones, de las cooperativas, y hoy vamos a escuchar a las distintas opiniones de las diferentes cámaras que agrupan a la televisión por cable, a la televisión abierta y también a las radios de la República Argentina. Es objetivo de esta comisión, antes de tomar una decisión definitiva sobre el artículo 45 —y con el propósito de que los senadores que integran esta comisión tengan una visión de la opinión de cada uno de los protagonistas—, escuchar a cada uno de los involucrados, a cada uno de los protagonistas, con la mayor amplitud de debate posible, debiéndose así mismo tener presente que este es un proyecto que ya fue aprobado en la Cámara de Senadores, que fue a revisión a la Cámara de Diputados —en donde se introdujeron modificaciones— , y lo que hoy hay que tratar es si se mantiene lo que aprobó este Senado o si se aceptan las reformas introducidas por la Cámara de Diputados. Voy a ceder la palabra por espacio de diez minutos a cada uno de los expositores. En primer lugar vamos a escuchar a la Asociación Argentina de Televisión por Cable —ATVC— , siendo expositor el licenciado Walter Burzaco. Sr. Burzaco. — Muy buenos días y muchas gracias. Agradecemos a los senadores Jenefes, Marino y Capitanich por habernos invitado para exponer sobre este tema tan trascedente para la televisión por cable. Voy a leer la posición que hemos preparado en ATVC. Ante la disyuntiva que se nos presenta a quienes brindamos servicios de televisión por cable, de elegir entre dos redacciones de un futuro artículo 45 de la ley de radiodifusión, debemos analizar la cuestión desde un punto de vista dinámico, como lo es un película, y no estático, como la foto. Fundamentalmente, nuestra postura la vamos a realizar en base a los antecedentes conocidos, vamos a tratar de ver la película entera. La televisión por cable nació como una respuesta a la falta de cobertura de televisión y de comunicaciones que había en el país. Lleva cuarenta años. En 1964, por decisiones que pudieron tomar los distintos emprendedores, que fueron aportando al desarrollo cultural, económico e informativo de sus comunidades, el servicio comenzó en el interior del interior y luego de muchos años llegó a las ciudades importantes. Los empresarios que asumieron el riesgo con sentido social y visión de Nación, construyeron sus empresas, invirtieron, generaron y generan trabajo y aportan a la cultura. Estas cubren hoy más de 1.200 localidades y dan trabajo a más de 14.000 familias. Tenemos cuarenta años de historia al servicio de la Argentina, hecho que nos ocupamos de comunicar abundantemente durante el año pasado en distintas localidades del país, cerrando estos eventos con una cena a la cual fueron invitados y asistieron muchos de los senadores hoy aquí presentes. En esa oportunidad, pudimos agasajar y distinguir a los pioneros. En esta oportunidad, muchos de los cableros del interior, los mismos que ustedes vieron que fueron agasajados por desarrollar la industria, nos están acompañando dada la preocupación que tienen con este tema. Todos los medios de comunicación social, al igual que el cable, han pasado por la crisis que afectó a lo social, a lo político y a todo el pueblo argentino. Además, nosotros, como medios de comunicación, por estar enfocados al mercado interno, digamos que la recesión y la devaluación no nos ayudaron; muy por el contrario, para poder cumplir con 3 05/04/2005 nuestro cometido ahora debemos pagar insumos dolarizados. Y esta situación llevó a que muchas empresas de medios de comunicación dieran una rentabilidad negativa, lo cual tuvo que ser atendido por el Poder Ejecutivo, alterando algunas normas de registración contable, dado que una empresa con patrimonio neto negativo se tendría que disolver. Pasado lo peor de la crisis, el país se da cuenta de la oportunidad de despegar. Pero así como hemos realizado exitosamente las negociaciones por el canje de la deuda soberana, lo que requiere de un plazo razonable para garantizar su cumplimiento, los medios audiovisuales necesitan también de plazos necesarios para recomponer su situación. A ese fin resulta imprescindible para nuestros servicios contar también con un marco jurídico que permita un horizonte de previsibilidad. En lo referido al artículo 45, desde la ATVC, organización que a través de asociados directos e indirectos —porque reúne a todas las cámaras provinciales— representa unas 700 empresas en el país, queremos expresar nuestra visión y análisis. Llegamos a esta instancia porque la Corte considera discriminatoria la exclusión de sociedades y asociaciones que no sean comerciales. Sin embargo, las dos redacciones del nuevo artículo 45 además permiten ahora el acceso de las empresas de servicios públicos a la radiodifusión; tema que no está contemplado en la demanda original ni en el fallo de la Corte. Se produce así una discriminación en contra de los cableros, que ya están operando desde hace veinte, treinta o cuarenta años en el país. Otro tema es que al modificarse un solo artículo de la ley de radiodifusión no se tiene en cuenta la estructura misma de la norma y se puede llegar profundizar esta discriminación de la cual estoy hablando. Por ejemplo, al modificar este artículo sin contemplar el que establece los plazos para una licencia, se va a perjudicar a la gran mayoría de los operadores de televisión por cable que recibieran su licencia ni bien sancionada la ley 22.285, porque ellos eran preexistentes a esta ley. Con lo cual, quien viene a desafiar al cable que hoy está instalado, arranca con una licencia de cero, mientras que el cablero que ya está quizá hace cuarenta años en esta país, ahora tiene que salir a renovar su licencia. Esto no es un plano de igualdad. Ahora bien, yendo al texto propuesto por el Senado, vemos que luego de prohibir el ingreso de las empresas de servicios públicos, en el inciso G), inmediatamente lo permite tres párrafos más abajo, donde dice: “La autoridad de aplicación adjudicará licencias a las personas comprendidas en la inhabilidad especial prevista en el inciso G) cuando no exista en el área primaria de cobertura otro servicio igual al solicitado o cuando dicho otorgamiento no contravenga las disposiciones de la ley 25.156, en cuyo caso requerirá dictamen previo de la comisión o Tribunal de Defensa de la Competencia”. Pero resulta que la ley de defensa de la competencia invocada, en su artículo 1° prohíbe o sanciona actos o conductas y como el dictamen pedido a este organismo es previo a que se otorgue la licencia, nunca se van a poder verificar actos o conductas, con lo que se otorgarán las licencias de manera automática. Además, según el texto proyectado, la autoridad competente de radiodifusión no emite opinión sino simplemente —y cito— : Adjudicará licencia a las personas comprendidas en la inhabilidad especial prevista en el inciso G) una vez que reciba el dictamen favorable de defensa de la competencia. Por otro lado, durante las Jornadas de Televisión por Cable, hemos analizado cuál es la jurisprudencia en materia de defensa de la competencia en el área de televisión por cable. Y hemos aprendido que ni siquiera dentro de la jurisprudencia del área de defensa de la competencia se consideran los servicios satelitales como una competencia que pudiera desafiar a la televisión por cable. Sin embargo, nuestra experiencia es totalmente distinta, porque competimos con ellos 4 05/04/2005 en todo el país. La cobertura llega a todo el país y lo que tal vez ni siquiera se conozca es que ha habido una fusión de las empresas que competían a nivel latinoamericano y proyectan ahora un desembarco con precios muy agresivos. Entonces, si para evaluar los mercados no se tiene en cuenta a los que ya compiten, poco podemos esperar que se analice a quienes aún no tienen licencia. Además, por lo que dice el párrafo citado de la redacción propuesta por el Senado, quien vigilará el comportamiento competitivo no está obligado a analizar la posición dominante y/o monopolio de las empresas de servicios públicos que tiene el aspirante a la licencia de radiodifusión. Para decirlo simplemente, no van a investigar el mercado de donde van provenir los subsidios cruzados. La redacción de la Cámara de Diputados restringe el ingreso de las empresas de servicios públicos, pero inmediatamente habilita a los prestadores de estos servicios cuando sean personas jurídicas sin fines de lucro, porque dice: Cuando el solicitante de una licencia para la explotación del servicio de radiodifusión sea una persona jurídica sin fines de lucro, prestadora de servicios públicos, la autoridad de aplicación le adjudicará la licencia cuando no exista en el área primaria de cobertura o área de servicio —en el caso de los servicios complementarios de radiodifusión— otro licenciatario prestando de manera efectiva el servicio solicitado. En el supuesto que esto suceda, la autoridad de aplicación deberá— en cada caso concreto— realizar una evaluación integral de la solicitud que contemple el interés de la población. Entonces, en este caso, se remite a la autoridad de aplicación, que tenemos que suponer que es el COMFER, aunque sospechamos que no lo sea, dado que difícilmente este organismo pueda verificar cuál sea el interés de la población. Si la autoridad de aplicación fuera el COMFER como parece, por algunos antecedentes conocidos, también entraríamos en un terreno de incertidumbre. El organismo está intervenido desde que hemos recuperado la democracia, lo que hace que sus decisiones estén al arbitrio de un funcionario de turno, decisiones que son de enorme trascendencia— como vemos— para la televisión por cable. A lo largo de los años hemos visto como ha variado el punto de vista de este organismo, conforme se han sucedido las distintas administraciones; y quiero decir que en diez años llevamos seis interventores. Como conclusión, debemos decir que el punto más controvertido de la modificación del artículo en cuestión no fue definido en ninguna de las dos redacciones, ambas remiten la solución del problema a algún organismo para que este decida. A los servicios públicos los voy a describir —no a calificar—: representan un monopolio de hecho y de derecho; obtienen rentas de usuarios cautivos y poseen redes de distribución que llegan a los mismos hogares donde presta servicios la televisión por cable. Y ahora sí voy a calificar. Esto permite enormes ventajas competitivas, como subsidios cruzados, precios predatorios, prácticas atadas, y la disponibilidad de facilidades esenciales necesarias para extender nuestras redes. Ahora bien, se agrava el caso cuando hablamos de una cooperativa, que además tiene privilegios impositivos. De todos modos, no voy a abundar sobre todo esto, porque hemos preparado algunos documentos de los cuales voy a hacer entrega a la secretaría de la Comisión después de terminado mi discurso. Vamos a entregar un documento que habla sobre la inclusión de los servicios públicos o no; y otro también donde hemos agregado un estudio comparativo de costos de cooperativas eléctricas, donde se demuestra que cobran precios más elevados que todas las otras empresas del sector. De manera que eso es lo que después les permite—y nosotros lo estamos denunciando por anticipado— realizar los subsidios cruzados y meterse en otros negocios no exactamente en un plano de igualdad. Una prueba de la discriminación que va a sufrir nuestra industria—si se sancionaran 5 05/04/2005 algunos de los textos sugeridos—es que los mismos dirigentes de las cooperativas, ante estas mismas autoridades de la Comisión, han dicho que tienen bajo la forma de sociedades comerciales unas 250 operadoras de cable, pero que las quieren pasar a la organización societaria de las cooperativas. ¿Van a perder algo con esto? No parece. Más bien pagarán menos impuestos y se beneficiarán con los privilegios que poseen. Ellos mismos van consolidar una posición que, ahora sí mirando en términos de defensa de la competencia, va a ser difícilmente desafiable por las sociedades comerciales. Como reflexiones finales, queremos decir que no nos oponemos a la competencia y a la multiplicidad de voces; nos oponemos a la concentración de servicios, a la concentración de poder, al subsidio cruzado y al enmascaramiento de ventajas competitivas detrás de objetivos solidarios. La inclusión de las cooperativas afectará directamente a las Pymes que brindan más del 70 por ciento de la cobertura total del cable—esto es medido en localidades—y emplean a más del 50 por ciento de los trabajadores. La modificación del artículo 45 no debe consagrar una discriminación que haga desaparecer a las empresas Pymes y queden los medios de los pueblos en manos de los servicios públicos. Desde la ATVC pretendemos que en nuestro país no se consoliden monopolios de redes de distribución, porque un monopolio de redes se transforma rápidamente en un monopolio de servicios y este en un monopolio de ideas. Sr. Presidente. — Si no hay ninguna pregunta por parte de los señores senadores continuamos con el segundo expositor. Por la Red Intercable, señores José Toledo y Jorge Gambarini. Tiene la palabra el señor José Toledo. Sr. Toledo. — En nombre de nuestros quinientos pueblos, queremos agradecer la invitación a los señores presidente y vicepresidente de la Comisión, a los senadores y asesores presentes. Después de cuarenta años de haber nacido en el interior del país, esta es la primera vez que, con mucho orgullo, estamos en el Senado para traer nuestra terrible preocupación.¿Quiénes somos? Somos quinientas empresas Pymes que estamos en diecinueve provincias de nuestro país, que representamos el 43 por ciento de los municipios que tiene nuestro querido país .Somos todas Pymes chiquititas que hacemos televisión por cable. Están los pioneros; por ahí están los Beninni, los Biazotti, que le dieron nacimiento a la industria de la televisión por cable ¿Y qué hacemos? Televisión por cable en localidades muy chiquitas, a las que tratamos de darle el promedio de las mejores sesenta señales y generar una comunicación local y regional. Y esto lo hacemos con mucha eficiencia. Algunos de los aquí presentes han estado en nuestras comunidades, en nuestros pueblos chiquititos y saben de qué manera lo hacemos. Pero también hacemos otras cosas. A iniciativa de este periodo de gobierno, el interventor Julio Bárbaro, en la primer reunión me hizo un cuestionamiento y me dijo: ¿Qué hace la televisión por cable por la educación? Apenas seis meses después, estos quinientos pueblitos—con un gran sacrificio económico —le dimos nacimiento a la conexión educativa. ¿Qué es conexión educativa? Es llevar por medio del cable la educación a cada uno de nuestros pueblitos tan lejanos de los centros concentradores de la educación.¿Y cuál era el desafío? Poner esta herramienta en manos del gobierno educador, que lamentablemente hasta el día de hoy no tomó la posta, porque nosotros somos la herramienta tecnológica, somos empresarios Pymes, no somos educadores y lo que queremos es vincular a nuestros pueblos chiquititos con la posibilidad de que cada uno de sus habitantes pueda recibir un oficio o un título universitario, el que sea. Pero creemos que la función de educador la tiene el Estado, el es quien debe orientar qué deben recibir nuestros pueblos, qué carreras y cuáles son las 6 05/04/2005 necesidades básicas de cada uno de nuestros pueblos desde el punto de vista de la educación. También colaboramos con Senado TV. Red Intercable pone en el satélite la labor de ustedes para que todo el país la pueda recibir. Lo hacemos con mucha alegría y con mucho placer; no hay nada mejor que difundir la labor de nuestros senadores y que el pueblo vea cómo trabajan. Así, Red Intercable la puso sin costo en el satélite, en beneficio de todos nuestros pueblos. También ya ensayamos en los quinientos pueblitos, esperando a cuarenta y una repetidoras de Canal 7 de la televisión de nuestro país, Argentina. Lo hicimos sin ningún beneficio económico, para que en esas cuarenta y una localidades, donde la gente no tiene poder adquisitivo, puedan ver una señal de televisión en forma gratuita. Estos son tres pequeños puntos que las Pymes en esta evolución le han dado a nuestro pueblo. Nosotros somos gente del interior y decíamos que tenemos que dar un ejemplo para que realmente nos entiendan. Y hay dos maneras distintas: una más sofisticada y otra más común. Si tomamos el proyecto del Senado, a lo mejor nos lleva a la horca —disculpenme, pero quiero ser gráfico— y si agarramos el de Diputados, a lo mejor vamos a la guillotina. Pero pareciera que los dos proyectos, y ahora afirmo que no pareciera sino que decimos y estamos sumamente convencidos, van a hacer desaparecer alrededor de ochocientas localidades Pymes; quinientos dentro de la Red Intercable y hay trescientas más. Aproximadamente eso marca el 70 por ciento de los municipios de nuestro país. Y de qué manera podemos discutir esto. La preocupación de mis colegas era realmente demostrar de qué manera nosotros, como empresas Pymes chiquitas, pudimos llegar aquí después de cuarenta años de lucha, porque tuvimos que pasar por distintas organizaciones para poder seguir estando. La manera de sobrevivir a todo esto fue agrupándonos en defensa de un bien común. ¿Qué nos pasa con las empresas de servicios públicos o las cooperativas? Es muy difícil e imposible competir. Las empresas de nuestras localidades, cooperativas o de servicios públicos, dan luz, agua, alumbrado público, gas, asistencia médica, productos lácteos, crían cerdos, proveen electrificación rural, pan, y algunas ahora hasta prestan servicios de GNC y también embotellan jugos. Pero todo basado en la teoría de la solidaridad. Hemos convivido con algunas de ellas; es más, dentro de Red Intercable existen empresas cooperativas formadas como sociedades de responsabilidad limitada o sociedades anónimas, que nos acompañaron todos estos años. Nunca estuvimos en contra de ninguno de nuestros colegas, utilicen la figura que sea, siempre y cuando tengamos los mismos derechos y las mismas obligaciones. ¿Qué quiero decir con esto? Que no es cierto que no hayamos convivido con las cooperativas; lo hicimos y de hecho lo hacemos, y están dentro de la Red Intercable bajo la figura de una sociedad comercial y al igual que nosotros tienen las mismas obligaciones, los mismos derechos y pagamos los mismos impuestos. Ahora bien, qué ocurriría si pasaran a las órbitas de las cooperativas. Sencillamente no quedaría ninguna de las empresas Pymes que yo les estoy comentando. ¿Por qué no quedaría ninguna? Porque hay una gran diferencia en todo sentido. Las empresas cooperativas no pagan los mismos impuestos, prestan un montón de servicios y generan subsidios cruzados. Y esto no lo digo yo sino que lo puedo demostrar con hechos; es más voy a dejar en Secretaría estos cuatro humildes cuadernillos con información precisa de qué pasa. Tampoco somos como algunas cooperativas que aparecen diciendo en un diario que el decreto 392 las pone al límite económico y financiero y, sin embargo, en el mismo mes aparecen en su revista de las cooperativas señalando que en marzo empiezan las nuevas ampliaciones de redes. Creo que hay muchas diferencias. No soy un enemigo de las cooperativas; convivo con ellas y hasta soy asociado de, pero no se le puede dar a esa organización semejante privilegios y en detrimento de nuestras 7 05/04/2005 empresas Pymes. Es muy probable que muchos no conozcan en profundidad cómo trabajamos, auque tampoco tienen la obligación de saberlo, pero sí decimos que hace cuarenta años que defendemos la televisión por cable. Nosotros empezamos transmitiendo un canal con una cassettera y hoy la mayoría está en alrededor de sesenta señales; y con mucha eficiencia. Como dije al principio; es la horca o la guillotina. Quiero señalar un párrafo del artículo que dice "El interés de la población". Esa palabra se uso muy mal en dos oportunidades en la República Argentina, aquella vez que lo dijo un general de apellido Videla en 1976, cuando decía que lo hacía por el interés de la población. Ese término puesto en una ley, que no dice cuál va a ser el interés de la población —si va a ser económico, cultural o social y quién lo maneja—, es muy difícil. Como empresas Pymes lo que necesitamos —y esta es una sugerencia, una tercera opción— es un nuevo articulado. Yo no soy quién para efectuar sugerencias; desconozco el funcionamiento de las Cámaras legislativas. Pero digo que ninguna de las dos redacciones nos sirve; las dos darán por terminado nuestros cuarenta años de gestión como Pymes en nuestro país. (Aplausos.) Sra. Giusti. — Quiero señalar dos cuestiones, que no están relacionadas con el proyecto sino con algunas aclaraciones que deseo formular. Usted mencionó que están en 500 poblaciones y significó que eso representa el 50 por ciento de las localidades... Sr. Toledo. — En el 43 por ciento de los municipios de nuestro país. Sra. Giusti. — ¿En 500 localidades? ¿Eso significa el 43 por ciento de los municipios de nuestro país? Sr. Toledo. — Exactamente, nosotros cubrimos el 43 por ciento de los municipios de nuestro país. Sra. Giusti. — Entonces, me parece que deberían ser más de 500 localidades. Porque 500 localidades no representan el 43 por ciento de los municipios del país. Sr. Toledo. — Sí, porque cubre más de un municipio. Sra. Giusti. — Yo le interpreté 500 municipios. Sr. Toledo. — Por ejemplo, Adolfo Alsina, es un municipio y tiene 9 localidades. Sra. Giusti. — Ahora lo entiendo. En segundo lugar, me permito disentir con usted en cuanto a que dijo que no sabe por qué el gobierno nacional no tomó la posta de la cuestión educativa, porque creo que la cuestión educativa —y además este no es tema de esta audiencia— no se agota en un programa de televisión por cable de la que ustedes manejan. El Ministerio de Educación de la Nación tiene sus propios programas, que se difunden no sólo por televisión por cable sino también por otros medios. La provincia que represento —Chubut— ha tenido programas de educación a través de la televisión aproximadamente hace veinte años. Creo que es un debate que no debemos tomarlo a la ligera y decir en una audiencia pública que el Estado nacional no ha tomado la posta del tema educativo. De todos modos, reitero, esta aclaración no hace al fondo del proyecto; no tiene que ver con la iniciativa sino con su exposición. En tercer término, a mí me ofende como legisladora y como argentina que usted compare la expresión del ex presidente Videla... Sr. Toledo. — Es una expresión. Sra. Giusti. — ...Porque no es una expresión propia del presidente Videla sino que se usa habitualmente; es una expresión puesta en un artículo determinado. Se habla con mucha generalidad del interés de la población y en diferentes contextos. Me parece que su expresión ha quedado descontextualizada en esta exposición. Sr. Toledo. — Quiero aclarar que la conexión educativa es una señal de televisión que 8 05/04/2005 hicimos a pedido del interventor del COMFER —Julio Bárbaro—, que dijo: "Ustedes pongan la herramienta y el Estado tiene que poner los contenidos". Yo hice esa reflexión. Es una señal de 24 horas, que algunos senadores aquí presentes la conocen en detalle y que fue declara de interés por esta Cámara. Nosotros no dijimos que sea la única señal. Con respecto a mis palabras acerca del término interés de la población, yo antes ya pedí disculpas. Lo que quise reflejar es que en función del interés de la población a veces se cometen grandes errores. Con lo cual pido disculpas, porque no quise ofender a la legisladora. Sr. Presidente. — Tiene la palabra el señor senador Bussi. Sr. Bussi. — Usted dijo que no estaba de acuerdo con ninguno de los proyectos. Incluso hizo mención a que uno representaba la liquidación y el otro el cierre de las Pymes. ¿Hay un tercer proyecto, en donde ustedes tienen alguna idea elaborada para que sea presentada en el Senado? Sr. Toledo. — Personalmente, no. Pero sí supongo, aspiro y deseo fervientemente, que tanto diputados como senadores encuentren un camino que permita a las empresas Pymes salvar este escollo. Sr. Presidente. — Senador Bussi: quiero aclarar que este proyecto viene de la Cámara de Diputados, luego de efectuarle modificaciones al proyecto realizado por el Senado y que de acuerdo a la Constitución nosotros tenemos que insistir en lo que aprobó este Cuerpo o bien aprobar lo que modificó la Cámara de Diputados de la Nación. A su vez, recuerdo que el origen de este proyecto es la inconstitucionalidad que declaró la Corte Suprema de Justicia al artículo 45, en cuanto a la participación de las cooperativas. Esa fue la base por la cual el senador Moro presenta en el Senado de la Nación la iniciativa de modificar el artículo 45. Hecha esta aclaración vamos a pasar al tercer expositor, señor Gamaleri, que representa a la Asociación Pampeana de Circuitos Cerrados Comunitarios de Televisión. Sr. Gamaleri. — En primer lugar, agradezco a los legisladores presentes por permitirnos poder plasmar nuestras realidades y lo que es el interior. Soy presidente de la Asociación Pampeana de Televisión por Cable. Nosotros estamos en la totalidad de los municipios de La Pampa y atendemos localidades de 4 mil habitantes de promedio; estamos llegando con el cable a casi todas las localidades. Desde ya, y como han dicho los expositores que me antecedieron, nacimos en competencia y orgullosos podemos decir que tenemos dos Pymes pioneras, como las de General Pico y Río Colorado, que hace cuarenta años que comenzaron con el cable y forjaron su futuro en ese aspecto, y atrás seguimos la mayoría de las empresas de La Pampa. Como bien sabemos todos, somos Pymes, somos pequeños cables operadores y generamos nuestros puestos de trabajo. Todas las empresas y todas las prestatarias por televisión por cable de nuestra provincia tenemos nuestros propios contenidos. Realmente somos el espejo de la cultura, de la sociedad, del deporte y de toda la actividad que sucede dentro de nuestras comunidades. Es por eso que nos permitimos ir viendo y analizando los dos proyectos que hoy actualmente se están debatiendo, para saber cuál de los dos se aprueba. Estamos convencidos de que estos proyectos son el fallecimiento de las empresas Pymes del país, de todas estas pequeñas empresas que las iniciamos hace cuarenta años, aunque la mayoría tiene veinte años aproximadamente de existencia en el mercado. Con lo cual reafirmamos una vez más que ninguno de estos dos proyectos nos complace o nos va a poder permitir seguir funcionando como lo hicimos hasta ahora. ¿Cómo podemos competir? ¿Qué estamos pidiendo? Lo poco que estamos pidiendo — y creemos que es tan poco— es simplemente que podamos competir entre iguales, que 9 05/04/2005 tengamos los mismos derechos y las mismas obligaciones. Realmente, cómo podemos competir con nuestras cooperativas —a las cuales pertenecemos y muchos de nosotros tenemos cableros presidentes de cooperativas, como en Colonia 25 de Mayo—, cuando en mi provincia se le da la concesión de un servicio público por sesenta años en condición monopólica. Ahora bien, si paralelo a esto nosotros vemos que las cooperativas también dan agua potable, gas, alumbrado público, internet, telefonía, estación de GNC, miel —y tenemos el ejemplo concreto en nuestra provincia— farmacias, artículos del hogar, entonces, qué es: ¿una cooperativa sin fines de lucro o una sociedad anónima? ¿En qué nos estamos convirtiendo? Y atención que nosotros no estamos criticando a la cooperativa y no estamos en contra de la cooperativa o el sistema cooperativo, el problema son los administradores de las cooperativas; no el sistema ni el espíritu de las cooperativas. Por lo tanto, el meollo de nuestra preocupación y de nuestra certeza es que estamos compitiendo con un rival muy desigual. Hagamos un ejemplo práctico: si nosotros hoy en el mismo ring ponemos a boxear a Mike Tyson con la Hiena Barrios, que es argentino, ¿cómo creen que terminará el combate? ¿Será una pelea que terminará en forma igualitaria? ¿Están peleando entre iguales? Evidentemente no. Otro ejemplo: en una competencia automovilística enfrentamos a un auto de fórmula uno con uno de turismo de carretera; es una competencia desleal. Por lo tanto nosotros lo único que pedimos, es que compitamos entre iguales. Además de esto, uno escucha permanentemente argumentar que el sistema es democrático. Y la pregunta es cuán democrático es el sistema cooperativo si, por ejemplo, a nivel de ciudadanos, nosotros no tuviéramos un impuesto al día y no podríamos votar. De qué democracia hablamos cuando no hay controles minoritarios que, justamente, para controlar la gestión de la cooperativa, en donde por un solo voto toda la administración de esa cooperativa, la que encabeza esa lista, termina siendo la que dirige los destinos de la institución. Entonces, como reflexión final, quizá la pregunta es qué espíritu tuvo el legislador para, en primer lugar, dejar fuera de la radiodifusión a los servicios públicos, sabiendo que esto es una cuestión de monopolios. En ese aspecto quisiéramos dejar bien en claro que al legislar bajo ese punto de vista, con ese artículo, están dejando fuera a aquellas empresas de servicios públicos, con lo cual el último inciso o el interés de la población es una redacción que para nosotros no es feliz; y tan amplio es que nos parece que realmente nos perjudica. Sr. Presidente. — Tiene la palabra la señora senadora Giusti. Sra. Giusti. — El tema de los sesenta años que usted mencionó y el tema de los nombramientos de los administradores —usted lo sabrá— no compete a este Senado de la Nación. Esta es una reflexión acerca de lo que usted mencionó. La otra cuestión, que se vincula un poco con lo preguntó el senador Bussi en el caso anterior, es si ustedes tienen una redacción alternativa. Sr. Gamaleri. — Con respecto a su primera consideración, obviamente que conocemos que no es problema del Senado, pero sabemos que es una realidad que está y existe, y es lo que sucede en todos los sistemas de esta índole. Segundo, nosotros no tenemos un párrafo alternativo, pero sí apelamos al conocimiento y a la sabiduría de este Cuerpo para que evalúe y justamente no permita el fallecimiento de nuestras empresas. Creemos que el inciso H), en su parte final, es el que nos deja fuera de toda competencia, con lo cual desapareceríamos del mercado. Sra. Giusti. — Sería importante para nosotros contar con alguna sugerencia. 10 05/04/2005 Sr. Presidente. — Quiero hacer una aclaración, porque parecería que de los dos textos o de las exposiciones que estoy escuchando, las cooperativas y todos los que presten servicios públicos en forma indiscriminada podrían ser radiodifusores. Y de la lectura de lo aprobado por el Senado surge claramente que hay una prohibición primera para quien presta servicios públicos de poder ser radiodifusor. Luego le habilita la factibilidad a quien preste un servicio público de ser radiodifusor, pero en el supuesto de que no exista en esa área un radiodifusor. Tengo la experencia en mi provincia, por ejemplo en la localidad de la Quiaca, en donde no hay ningún radiodifusor. Es decir, no hay ninguna empresa que quiso prestar radiodifusión en la Quiaca y, entonces, es la Cooperativa Telefónica de la Quiaca quien está prestando ese servicio, llenando un vacío que nadie quiso ocupar. En el caso de todas estas localidades pequeñas que están hoy cubiertas por un empresa, en principio estaría vedada la instalación de la cooperativa que presta un servicio público. Quedará una ventana en el caso del Senado, cuando no contravenga la disposiciones de la ley 25.156, en cuyo caso requerirá dictamen previo de la Comisión o Tribunal de Defensa de la Competencia. Y no creo que el tribunal que defiende la competencia desee provocar el cierre de pequeños cables, en pequeñas localidades. Este no es el efecto deseado de la ley. Esta es una pequeña aclaración, porque el debate que nos vamos a dar los senadores va a ser después de escuchar a cada unos de los protagonistas. En el caso de la versión de la Cámara de Diputados, se abre la posibilidad a las empresas prestadoras de servicios públicos cuando son sin fines de lucro, o sea, únicamente a las cooperativas, pero cumpliendo una serie de requisitos, lo que busca preservar los derechos de los radiodifusores actualmente vigentes. Pero tenemos otra reflexión que hacer. Aquí en el Senado, por falta de voluntad política o no sé por qué, duerme un proyecto de ley que tiende a regularizar hoy la radiodifusión que no tiene autorización por parte del Comité Federal de Radiodifusión. Si seguimos como estamos, mi reflexión es que cualquiera puede ser radiodifusor; no le pasa absolutamente nada a nadie en la República Argentina si instala una radio, un canal de televisión o un circuito cerrado clandestinos. Y si ello ocurre, estamos en una peor situación. Lo que tenemos que tratar es de avanzar. Yo sé que hay una realidad, que hay 5 mil radiodifusores clandestinos en la República Argentina y que muchos de esos clandestinos nacieron como consecuencia de la posibilidad de ser radiodifusores conforme la ley 22.285. Pero tenemos que encontrar una solución a todo esto, porque si seguimos sentados y estáticos nos vamos a encontrar seguramente en 2010, en donde van a ver 20 mil los radiodifusores clandestinos. Lo que nosotros queremos es tener la buena intención de tratar de encarar un problema que hay. Hoy estamos tratando el artículo 45. En el bloque de senadores justicialistas se dijo que aprobada la modificación de esta norma, y flexibilizado el tema de quienes pueden ser radiodifusores, se iba a avanzar en un proyecto que tratará de regularizar la radiodifusión clandestina. De tal manera que esto no siga avanzando y se ponga una barrera; que se sancioné penalmente a los futuros radiodifusores que quieran instalar la clandestinidad en la República Argentina. Debemos encontrarle la solución a este problema. Por supuesto que ustedes no vinieron a escucharnos a nosotros, pero creo que esta es una reflexión importante. Porque ustedes hoy están debatiendo que las cooperativa no, pero hoy nadie le impide a una cooperativa que se instale de forma clandestina en un pueblo; y así hay muchas cooperativas de radiodifusión que están instaladas y funcionando y a las que nada les pasa, mientras nosotros estamos esperando encontrar una solución. No quiero entrar en una polémica, pero quería que tuviéramos en cuenta esta reflexión. 11 05/04/2005 Sr. Burzaco. — Como yo tampoco quiero entrar en polémica alguna, quería saber si simplemente en el discurso en donde está fundamentado lo que nosotros decimos lo puedo entregar por Secretaría, a fin de que conste en actas. Sr. Presidente. — Sí, el discurso y todos los papales que hayan traído cada uno de los expositores se los entregan al secretario de la Comisión que, a su vez, lo va a distribuir luego a cada uno de los senadores. A continuación hará uso de la palabra el señor Hugo Genovesio, de la Asociación Cordobesa de Radiodifusión por Cable, ACORCA. Sr. Genovesio. — Quiero agradecer al señor presidente y a los señores senadores que nos permitan estar aquí. Mi nombre es Hugo Genovesio, soy el presidente de la Asociación Cordobesa de Radiodifusión por Cable y soy titular del cable de Oncativo, provincia de Córdoba. En realidad, quiero contarles que en Córdoba los cable operadores independientes somos alrededor de cien empresas. En realidad, hay doscientas empresas de cable en Córdoba y el resto son operadores cooperativos. Córdoba es la provincia que tiene mayor presencia de cooperativas prestadoras de servicios públicos en el cable. Nosotros venimos compartiendo este mercado con las cooperativas que se camuflan bajo sociedades de responsabilidad limitada o sociedades anónimas. ACORCA nació hace veintiún años, cumple veintidós este año, y en el seno de ACORCA había cable operadores independientes y cooperativos; siempre los hubo. Cuando se dictó el decreto 1143, en una de las reuniones de ACORCA —en 1996—, todos los cables cooperativos presentes nos comunicaron que a partir de ese momento en todo lugar donde había una cooperativa iba a haber un cable cooperativo y que los independientes nos teníamos que retirar del mercado. Desde esa época venimos luchando, con inseguridad jurídica y no obstante eso, venimos invirtiendo. En realidad, en la provincia de Córdoba las cooperativas anhelan entrar en el mercado de la radiodifusión. Pero las mismas que quieren competir —como acaba de decir mi colega de La Pampa— en 2002 consiguieron que el gobernador de la provincia de Córdoba les firme un decreto por el que cooperativas que hace cincuenta años que venían prestando el servicio de energía podrían seguir brindando el mismo servicio por treinta y cinco años más, sin que ningún otro operador pueda entrar a brindar energía en donde ellos operaban. Entonces, yo me pregunto si es justo. ¿Y por qué es injusto? Porque yo tengo acá, que una cooperativa —CORELEC— tiene 63 por ciento de diferencia en el costo de la energía. Esa misma cooperativa hace servicio de Internet y hace servicio de cable o quiere prestar servicios de cable. Entonces, a través del 63 por ciento más que cobra esa cooperativa, en realidad está subvencionando a Internet o al cable. Resulta que hoy se cumple la ley del revés. Los servicios de Internet y de cable son consumidos por gente de mayor poder adquisitivo y la luz, que es un artículo de primera necesidad, es consumida por la gente con menores recursos y tiene un sobre precio del 63 por ciento. Por lo tanto, las personas de menores recursos de una población están subsidiando el servicio de Internet de esa población. Reitero: se cumple la ley del revés. Uno cuenta todas estas cosas porque son las que vivimos a diario, todos los días en cada uno de los ochenta o noventa lugares en donde las Pymes estamos prestando servicios de radiodifusión. Y tenemos la amenaza permanente de las cooperativas. La amenaza es que vana dar abono a veinte pesos. ¿Cómo van a dar un abono tan barato? Lo van a subsidiar con el 63 por ciento de la luz, por ejemplo. ¿Y nosotros qué podemos hacer? En Córdoba damos mano de obra a 2500 familias y hay cerca de cien empresas independientes que, como tienen tres o cuatro socios cada una, son doscientos o trescientos empresarios. 12 05/04/2005 Como empresarios Pymes hicimos estudiar a nuestros hijos, preparamos a nuestras familias, trabajamos con toda la familia para el cable día a día, preparamos a nuestra gente, porque algunas localidades de nuestra provincia nacieron con el cable, como por ejemplo Villa María y Carlos Paz, que hace cuarenta años que tienen cable. Es más, en la última jornada de ACORCA hemos tenido un museo del cable y se mostraron los programas de hace cuarenta años. Entonces, venimos preparándonos, empezamos con una antena comunitaria, con cámaras y cassetteras que conseguíamos, como una cámara Normende, alemana, que le pedíamos a nuestros familiares. Y con eso hacíamos televisión. Así empezamos y hoy sentimos, y pido que me disculpen la expresión, que nos están echando del mercado. Hoy apelo a ustedes, que en realidad están legislando, para que nos protejan. Lamentablemente somos cien empresas en la provincia de Córdoba que tenemos que irnos, que no podemos prestar más servicios de radiodifusión, a pesar de todo el tiempo en que vinimos invirtiendo y que nos vinimos preparando. Y es más; en mi localidad hay una cooperativa y yo le alquilo la radio a las cooperativas. En la cláusula segunda del contrato dice (Lee:): “Se deja expresa constancia que la autorización de la CESOPOL se ha conferido únicamente para montar cables destinados a distribuir solamente señales de televisión por cable, estándole vedado a la empresa otro destino aun cuando el cambio no ocasione perjuicio alguno. No podrá la empresa distribuir de los cables montados sobre la infraestructura de CESOPOL ninguna otra señal más que no sea televisión”. Sin embargo, hoy esa cooperativa presta servicios de Internet y a nosotros nos vedan la posibilidad de dar Internet por cablemodem. Entonces, cómo podemos competir con una cooperativa a la que le alquilamos los cables que nos cobran un costo de más del doble de lo que cobra EPEC a las empresas que le alquila EPEC. ¿Cómo podemos sentarnos a competir con esa cooperativa? En realidad esta es la voz de los ochenta cables independientes y pequeños. En realidad hoy nos están invitando a retirarnos del mercado. ¿Por qué? Porque, aunque tal vez se habla del interés general, que es cierto, cuando la cooperativa dice “Les vamos a dar el cable por veinte pesos por mes”, la gente no ve que paga el 63 por ciento más de energía. Entonces, si tienen que juntar doscientas firmas por el cable a veinte pesos las van a juntar, pero eso lo está pagando el 63 por ciento que se cobra demás en la energía. Hoy les quiero pedir a los señores legisladores que vean de qué forma se puede evitar que todas estas empresas dejemos de existir. Es un pedido humilde como presidente de ACORCA y como cable operador. No tenemos otra posibilidad de subsistencia que no sea que se legisle que las cooperativas no puedan brindar el servicio de televisión por cable. Yo he tenido competencia en el cable, he competido y triunfado en la competencia, pero fue una competencia entre iguales. Me ha costado muchísimo. Hemos tenido que luchar y hemos perdido y recuperado abonados, pero quedó una sola empresa; no hay lugar para más de una empresa. En una población de diez mil habitantes, con tres mil viviendas, no pueden haber dos empresas con televisión por cable, porque la unidad económica no da. O sea, hay lugar para una sola. Competimos, pero siempre va a haber una sola empresa. Ahora bien, si hoy autorizan a las cooperativas, ¿qué van a autorizar? Van a autorizar un monopolio. No hay una sola empresa que le pueda competir a una cooperativa. Nunca una cooperativa que brinda servicios de televisión por cable a través de una sociedad de responsabilidad limitada o una sociedad anónima tuvo competencia en el cable, porque son los dueños de los postes, de la energía y, en algunas localidades, hasta dueños de los pueblos. Lamentablemente son los dueños del pueblo. ¿Adónde va a ir un usuario a quejarse por tal o cual servicio? ¿Al cable cooperativo, que es el que le vende el servicio? Con esta legislación, 13 05/04/2005 dejando a las cooperativas que brinden el servicio de televisión por cable, estamos creando el monopolio. Discúlpenme, es la realidad que nos toca vivir. Y es lo que sentimos y les venimos a decir. Sr. Presidente.— Tiene la palabra la señora senadora Giusti. Sra. Giusti.— Me gustaría que nos dejara el material de su exposición, para que podamos verlo y lo que ha mencionado acerca del precio de la electricidad. Sr. Genovesio.— Sí, ¿cómo no? Acá le dejo el material y le adjunto dos facturas del servicio de luz. Sr. Presidente. — De todas maneras, aclaro que existe versión taquigráfica y que se pondrá en la página web del Senado a disposición de todos los que la quieran consultar. El próximo expositor es el señor Matías Detry, de la Asociación de Teledifusoras Argentinas, ATA. Sr. Detry.— Antes de comenzar quiero agradecerle al presidente y a los miembros de la Comisión de Sistemas, Medios y Libertad de Expresión por la invitación que nos brindaron. Dado la gran cantidad de oradores que hay en la reunión, en nombre de la ATA quería adherir a la postura que va a esgrimir la CEMCI, así que si les parece, en todo caso, a la hora de las preguntas y del debate puedo participar. Quiero reiterar el principio histórico que hemos mantenido con respecto a la importancia de que el Estado debe garantizar la competencia efectiva real entre los actores de televisión. Sin perjuicio de ello, creemos que es necesario y útil esta clase de debates. Pero creemos que no corresponde que titulares del servicio de radiodifusión tengan tratamiento impositivo distinto cuando van a prestar un mismo servicio. Fundamentalmente quería expresar eso y tengo el mandato de que nos adhiramos a lo que va a exponer la CEMCI. Las repuestas a las preguntas las haremos en forma conjunta. Sr. Presidente.— Entonces le damos la palabra al doctor Jorge Rendo, de la Cámara Empresaria de Medios de Comunicación Independientes, CEMCI. Sr. Rendo.— Buenos días señores legisladores. Quiero en primer lugar agradecerles la posibilidad de exponer la posición de la Cámara. Represento una Cámara de segundo grado, que agrupa a todas las cámaras de medios de comunicación de la Argentina, no solamente las de radiodifusión sino también las de diarios y revistas. Traje una pequeña postura que es la de la Cámara y que voy a leer si no tienen inconveniente Dice así (Lee:): “Señores legisladores: tanto la media sanción de Diputados como la del Senado amplían el espectro de legitimados para ser adjudicatarios de licencias de radiodifusión al permitir que las personas jurídicas de derecho privado, como las sociedades civiles, las asociaciones sin fines de lucro y las cooperativas, puedan ser titulares de licencias de radiodifusión. “En la actualidad, sólo las personas jurídicas comerciales pueden ser titulares del servicio de radiodifusión. El principio del párrafo precedente es conteste con el criterio adoptado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación dado que el Tribunal manda a no impedir el ingreso lo que no implica que ese derecho no pueda ser regulado y sujeto a condiciones como cualquier derecho. No existen los derechos absolutos. Es por ello que la incorporación al sector de estos nuevos actores requiere la simultánea regulación de las condiciones y requisitos que deben reunir para solicitar licencias. “En este sentido, el texto de Diputados fija sólo condiciones de ingreso a las personas sin fines de lucro, prestadoras de servicios públicos y no fija barrera alguna para el resto de los sujetos a incorporar. No se debe permitir el ingreso de aquellas personas jurídicas que generan desequilibrios y distorsiones en la competencia. La posibilidad de otorgar licencias de 14 05/04/2005 radiodifusión a personas jurídicas que gozan de beneficios que las colocan en una situación diferencial con relación a las sociedades comerciales licenciatarias exige por parte del Estado una regulación que atempere tales privilegios y favorezca la plena competencia. “En el caso de servicios de radiodifusión basados en redes, como es la televisión por cable, se debe limitar el ingreso de aquellas personas jurídicas que, beneficiadas por títulos habilitantes para la prestación de determinados servicios públicos, desarrollaron su red al amparo de regímenes monopólicos de hecho o de derecho. “La propiedad de los medios de comunicación en manos de estos actores económicos acallaría la posibilidad ciudadana del control y el derecho al reclamo en cada una de las localidades en donde estos operan. Los servicios públicos precisan de control social y el control social depende de la opinión pública independiente. “Lejos estamos de oponernos a la diversidad de opiniones o de voces, la estamos defendiendo en concreto, pero debemos alertar que frente a la modificación del artículo 45 debemos preservar la independencia de los medios de comunicación frente a las empresas de servicios públicos, porque esto permite a la sociedad canalizar sus reclamos y denunciar posibles abusos. “La Comisión del senado le había pedido a la CEMCI cuál era su parecer acerca de cada uno de las dos medias sanciones. La CEMCI cree que la versión sancionada por Diputados recepta muchas de las inquietudes que en su momento se hablaron con los legisladores pertinentes. Pero, sin embargo, esta modificación introducida en el proyecto de modificación del artículo 45 que permitiría el ingreso de servicios públicos sin fines de lucro en aquellos lugares donde la autoridad de aplicación lo decida, tomando como base el interés de la población, genera una situación de incertidumbre sobre las actuales licencias de radiodifusión”. Ahora quiero recoger algo que el senador Jenefes mencionó hace un rato. Las cooperativas nacieron en este país precisamente así, como una forma de llevar ciertos servicios elementales a la población, a lugares en donde esos servicios, en manos del Estado —en ese momento ineficiente, paquidérmico y con costos absolutamente estrafalarios—, no llegaban. No nos olvidemos que no hace mucho en la Argentina tener un teléfono en la ciudad de Buenos Aires llevaba entre cinco y diez años de gestión. Ese fue el espíritu de las cooperativas y ese es el espíritu que la CEMCI cree debe seguir siendo el que regule la incorporación de las cooperativas en otros negocios o en la prestación de otros servicios. Por eso, la primera parte de las excepciones a la prestación de servicios de radiodifusión por empresas prestatarias de servicios públicos —como bien mencionaba el señor presidente—, cuando hace referencia a aquellos lugares en donde no hay ningún prestador independiente dando el servicio, es lo que creemos que está muy bien receptado en el artículo 45 sancionado en la Cámara de Diputados, porque ese es el espíritu de las cooperativas y ese es el espíritu con el que nacieron las cooperativas en el país y por el que fueron beneficiadas impositivamente, es decir, para llegar a aquellos lugares en donde el Estado o los particulares no llegaban o no lo podían hacer, porque estaban prohibidos de brindar esos servicios en ese momento. Por lo tanto, la segunda parte de esa excepción, lo que se habló tanto aquí por mis colegas, se refiere a qué es el interés público. Esa es la pregunta que hay que hacer en este proyecto. Si el interés de la población significa la recolección de firmas para que haya un prestador más en una área determinada, creemos que estamos equivocados. Si el interés de la población significa que bajo esa figura el COMFER se va a escudar para otorgar licencias de cable indiscriminadamente, estamos también equivocados. Y si el interés de la población significa que haya un prestador más de cable en cada localidad y que aparte de ese servicio 15 05/04/2005 concentre otro de carácter público implicando una concentración de poder difícil de contrarrestar, estamos también equivocados. Señores legisladores: esos peligros obligan a no dejar abierta una puerta tan grande por donde se puedan filtrar situaciones que generen distorsiones de tal magnitud que pongan en peligro los intereses ciudadanos. Así, la CEMCI entiende que el interés general debe ser comprendido como aquel que, sin abusar de una posición dominante, sin distorsionar el mercado, brindando situaciones de mercado competitivas en igualdad de condiciones, contribuyan al sostenimiento de empresas grandes, medianas y pequeñas, con el objeto de brindar el mejor servicio posible. Los actuales licenciatarios deben preservar sus licencias evitando que se distorsione de manera drástica el mercado en donde operan, no permitiendo el ingreso en su área de cobertura de todas aquellas personas jurídicas dedicadas a la prestación de servicios públicos —insisto, con “todas”—, que atienden a clientes cautivos en situaciones monopólicas, que gozan de privilegios impositivos y que aprovechan ventajas otorgadas por el poder público. La modificación de un artículo de la ley de radiodifusión no puede ni debe distorsionar el mercado en el que operan los actuales licenciatarios. Es necesario garantizar el derecho de los prestadores presentes y entrantes a operar en el mercado bajo reglas competitivas claras y en condiciones igualitarias y no discriminatorias, a fin de que el régimen de licencias promueva el desarrollo del mercado y el respeto por las inversiones incentive a los prestadores. Como dije, la Cámara que represento agrupa también a otros medios de comunicación que no son radiodifusores, como diarios y revistas. Y aunque parezca mentira, la posibilidad de que cooperativas subsidiadas o apalancadas fuertemente en otros servicios que actualmente están brindando, lo cual les otorga obviamente una salud financiera ya que les permite cruzar subsidios y recurrir a cash flows provenientes de otros servicios, afecta también a medios de comunicación como diarios y revistas, que pelean particularmente en el interior por la misma torta publicitaria. O sea, la inversión publicitaria en la Argentina, que desde 1997 se ha venido reduciendo prácticamente sin pausa, ha comenzado a recuperarse recién a mediados del año pasado y todavía se ve cierta recuperación este año. Entonces, no parecería justo que todas estas empresas de radiodifusión, diarios y revistas que hemos soportado quizá la crisis económica más fuerte que tuvo el país en los últimos cien años de historia, que hemos reestructurado nuestras deudas, que no hemos producido despidos masivos y que hemos seguido prestando los servicios que se nos solicitaban, tengamos ahora que enfrentar un nuevo competidor que, insisto, apalancado en otro tipo de ingresos aparece como un peligro fenomenal para las empresas que estamos actualmente operando. El tema de la publicidad no es menor, porque si dispongo de otra caja para subsidiar o soportar un nuevo negocio de radio, televisión o cable puedo vender publicidad a tarifas mucho más baratas porque, en realidad, mi ingreso no depende de publicidad. Es decir, lo que hago es ganar mercado a costa de los que sí dependen de sus ingresos publicitarios. Quiero dejarles claro en nombre de la CEMCI que eso también pone en peligro a medios respecto de los cuales no se ha hablado aquí, como son los diarios y revistas. (Aplausos) Sr. Presidente. — Si ningún senador quiere formular alguna pregunta, pasamos al último expositor: la Asociación de Radiodifusoras Privadas Argentinas, ARPA, cuyo representante es el doctor Edmundo Rébora. Sr. Rébora. — Muchas gracias, señor presidente. No quiero abundar en mayores consideraciones a las que ya expuso el presidente de la CEMCI, Cámara que integramos. La radiodifusión privada tiene con relación a la situación que supone el ingreso de personas jurídicas que no sean sociedades comerciales a los servicios de radiodifusión el 16 05/04/2005 inconveniente adicional de que nuestro espectro radioeléctrico, al estar severamente polucionado y distorsionado, está sufriendo en este momento la suspensión de todos los concursos, a raíz precisamente de la situación que generan los fallos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación con relación a las sociedades cooperativas y, en general, a todas las personas jurídicas de existencia ideal no comercial. La radiodifusión privada sonora ha sufrido durante muchos años, a raíz de la suspensión o la prohibición de los concursos, según los períodos a los que nos podamos referir, la aparición de miles de estaciones ilegales que encuentran sustento en amparos judiciales amparados, precisamente, en la prohibición o en la suspensión de los concursos. No habrá nunca regularización del espectro si no hay concursos abiertos libres y permanentes conforme lo establece la ley de radiodifusión. Por lo tanto, expresamos nuestra preocupación y la necesidad de que este tema se resuelva para que la resolución de la Secretaría General de la Presidencia del año pasado, que suspendió todos los concursos, vuelva atrás y el proceso de normalización del espectro continúe. Pero esa necesidad, que es cara e importantísima para nuestro sector, encuentra como dificultad, frente a los textos tanto de Diputados como del Senado, las consideraciones que muy bien señaló el doctor Rendo. Nosotros consideramos que todas las personas jurídicas de existencia ideal prestadoras de servicios públicos deben estar inhabilitadas para prestar servicios de radiodifusión sonora. No puede haber excepciones de ninguna naturaleza. Y no quiero sobreabundar en este tema. Nuestra necesidad de que este tema se resuelva y que la cuestión se dirima lo antes posible en términos legislativos, para que los concursos vuelvan a operar normalmente, nos hace expresar nuestra preocupación a la Comisión y a los señores legisladores. Reafirmamos la posición de la CEMCI y si hubiera que elegir entre alguno de los dos proyectos, entendemos que es más lineal y más certera la inaptitud de las sociedades comerciales como personas jurídicas de existencia ideal sin fines de lucro para prestar servicios públicos en el proyecto del Senado de la Nación que en el proyecto de Diputados, donde aparecen algunas ventanas por donde se puede desvirtuar este principio que sostenemos y que reafirmamos a través de la posición de la CEMCI. Muchas gracias. Sr. Presidente. — Me informan que en representación de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en la República Argentina —AMCHAM—, que no iba a exponer, está presente el señor Francisco Zubillaga a quien le doy la palabra. Sr. Zubillaga. — Ante todo, muchas gracias por participarnos en el tratamiento de este artículo. Queremos transmitir nuestra posición y, sintéticamente, serían dos cuestiones. La primera de ellas se encuentra vinculada con la inclusión de empresas de servicios públicos y cooperativas y la eventual preocupación de que eso derive en situaciones que restrinjan la competencia y se transformen en virtuales monopolios. La segunda cuestión se encuentra vinculada con la protección de las inversiones extranjeras generadas en el marco de tratados de protección y promoción de inversiones y su reconocimiento expreso en el proyecto de ley, sin limitaciones vinculadas a supuestos de reciprocidad o de inversión, y siempre teniendo en cuenta la supremacía de los tratados sobre las leyes federales. Sr. Presidente. — Tiene la palabra la señora senadora Conti. Sra. Conti. — Me queda claro que todos los representantes a quienes hemos invitado para escuchar sus opiniones preferirían una voluntad diferente a la que el Congreso de la Nación ha expresado, porque aun con sus diferencias, en ambas Cámaras se admite la posibilidad —tras la prohibición como pauta general— de que las cooperativas que prestan servicios públicos pudieran acceder en algún caso, cuando en el área de cobertura no haya otra empresa que lo haga, a un servicio de radiodifusión. 17 05/04/2005 Creo que eso va a ser inmodificable en tanto el trámite legislativo no caduque. Y si caducara sería dejar las cosas hoy como están. Por lo tanto, la cuestión se va a tener que resolver. Lo que no entiendo es por qué entonces, aun con los reparos en ese sentido, en general se han manifestado a favor de la sanción de la Cámara de Diputados. No sé si el señor Burzaco lo expresó aquí pero sabemos, por las tantas charlas que los miembros o los secretarios de la Comisión mantienen con ustedes, que han puesto un óbice especial en lo que el Senado ha votado, que es darle intervención al Tribunal de Defensa de la Competencia en forma de dictamen previo a la resolución de este tema, cuando no se dice siquiera que ese dictamen es vinculante. ¿Por qué el óbice al respecto? Sr. Burzaco. — Hemos expresado eso en el discurso y paso a explicarle. El texto del Senado dice que la autoridad de aplicación “adjudicará”. Es decir, ahí no hay óbice, directamente tiene que cumplir una vez que Defensa de la Competencia dictamine. Y eso es lo que nosotros vemos. Es decir, no interviene la autoridad de aplicación de radiodifusión en el concepto del Senado; va a Defensa de la Competencia y una vez que está el dictamen la autoridad de aplicación adjudicará las licencias. Eso es lo que nosotros vemos. O sea, directamente no interviene la autoridad de aplicación. Sra. Conti. — La suya es una interpretación muy personal. Sr. Burzaco. — Es lo que dice el texto, discúlpeme. Sra. Conti. — Pero no es así la interpretación normal que se hace de un texto legislativo. Justamente, si un dictamen genera la voluntad de la autoridad de aplicación, se pone expresamente que es vinculante. Sr. Burzaco. — Usted me preguntó cuál es... Sra. Conti. — Soy abogada. Sr. Burzaco. — Sí, y yo soy vasco. (Risas) Usted me preguntó cuál era nuestra objeción y yo se la digo. Además, lo que expresé en mi discurso es que estamos ante la elección de dos fotografías, ¿a ver en cuál salimos peor? Y yo le digo que hay que ver toda la película. Nosotros nos hemos tomado el trabajo de invitar a las jornadas a quien ha presidido el área de Defensa de la Competencia que nos dijo: “Olvídense”. Defensa de la Competencia no va a estudiar el mercado de donde proviene la otra empresa, ni siquiera considera a la televisión satelital como un servicio que pueda llegar a desafiar a la televisión por cable. De manera que exclusivamente va a ver si en el mercado hay un sólo operador y en base a eso va a dictaminar. Esa es la jurisprudencia argentina y la comparó ampliamente con la jurisprudencia europea en la cual, por haber muchos servicios satelitales, justamente se tienen en cuenta todos los concurrentes a un mercado. Por lo tanto, si no tienen en cuenta al que ya compite y provoca daños, porque también recurren a algunas prácticas que no nos gustan debido a que el servicio satelital no esta plenamente regulado, y no van a investigar el mercado de donde provienen, o sea, no se van a meter en el mercado de la energía eléctrica, del agua potable y de todas las concesiones públicas que puedan llegar a tener las cooperativas, entonces nosotros estamos viendo la película. Si usted me pregunta en qué foto salgo peor, en las dos me veo muerto. Esa es la conclusión. Yo veo la voluntad —voy a dar un ejemplo— de inmunizarnos contra este problema y me ofrecen vacunarme en forma intramuscular o subcutánea. Y yo estoy diciendo: “Muchachos, la jeringa está infectada”. No quiero una ni la otra. Sra. Conti. — Usted será vasco, pero yo advierto una contradicción muy seria entre este sector y el que pretende que las cooperativas puedan actuar plenamente en su mercado, porque ellos también sostienen el proyecto de Diputados y dicen que el nuestro es mucho más restrictivo para sus intereses. 18 05/04/2005 Sr. Burzaco. — Yo leí la versión taquigráfica y me pareció que había alguna disidencia entre ambos dirigentes. Ellos sabrán lo que hacen. Nosotros estamos viendo este problema. Como se dijo muy bien en la exposición de la CEMCI, que se presten servicios en aquellos lugares donde no hay. Eso ya lo conocemos, si es lo que ocurre. Así como se menciono a la Quiaca también hay tantas otras cooperativas funcionando. Nosotros vemos que no hay equivalencia entre quien tiene una clientela cautiva, que tiene rentas monopólicas y que puede cobrar en exceso —hemos presentado un estudio al respecto— los servicios públicos para después subvencionar otros servicios. Así es como han ido haciendo en el interior del país, que de a poco en los pueblos se van apropiando de distintos servicios. Nosotros decimos que el día que el servicio público además sea el titular de la radiodifusión de ese pueblo, ¿a dónde se va a quejar un vecino? Sra. Conti. — Una pregunta más para al doctor Rendo, que me pareció muy fundada su postura. ¿Por qué no le satisface la limitación del proyecto del Senado, para que se otorgue una licencia a quien ustedes no quieren, que ofrece la ley de defensa de la competencia que está mencionada en el texto? Es cuando usted se refirió al interés general. Sr. Rendo. — En primer lugar, esto lo hemos discutido ampliamente con los presidentes de las distintas cámaras y la idea de la CEMCI está muy en línea con la de ATVC respecto de que no parecería ser hoy Defensa de la Competencia el organismo idóneo con voluntad y herramientas para determinar este tema tan delicado. En segundo lugar, dentro de la CEMCI, obviamente, tenemos algunas diferencias y así lo expresó muy bien el señor Rébora ya que para ARPA el texto del Senado parecería mejor que el texto de Diputados. Sin embargo, consensuado dentro de mi entidad el texto de Diputados aparece como mejor en el sentido de que le da la posibilidad a las cooperativas de intervenir. Insisto y tomo nuevamente las palabras del senador Jenefes respetando el espíritu y la función cooperativa, que es llegar allí donde los demás por alguna razón no llegan. Y esa es una forma entonces de que la legislación esté en línea con los fallos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y que no se vuelva a producir un cortocircuito entre los dos poderes que haga que una vez sancionada la ley quizá nos ponga de nuevo en una situación de incertidumbre durante dos meses, porque el Alto Tribunal la tacha de inconstitucional o hace alguna otra interpretación. Esa es un poco la línea argumental que sostuve. Sra. Conti. — Gracias. Sr. Presidente. — Yo quiero agradecer la presencia de todos ustedes y decirles que con esto ha terminado la ronda de consultas y pedirle a cada uno de los senadores que para la próxima reunión de la Comisión vengamos con una idea de cómo salimos: si caemos en la silla eléctrica o en la horca, o dejamos como está la situación. Muchas gracias a todos. (Aplausos) — Son las 13 y 49.