COMUNICADO DE PRENSA COPARMEX CIUDAD DE MEXICO La deseada Constitución de la CDMX no debe ser la plataforma política de ningún Partido ni atender a los reclamos particulares del poder Ejecutivo en turno o de algún grupo social. Pretender incluir discusiones ideológicas en torno a nuestra nueva Constitución, nos llevará al inmovilismo, a la falta de consensos y al encono. Ciudad de México, a 16 de marzo de 2016.- El proceso que le otorgará a la Ciudad de México una Constitución ya está en marcha y vemos que la discusión sobre el análisis y los posibles efectos en la vida diaria de los capitalinos ha quedado más en manos de políticos que de expertos y mucho menos, de ciudadanos. Han sido estos últimos los que han dado el ejemplo para intentar ciudadanizar la discusión, para bajar “a ras de piso” el entendimiento del proceso constituyente, mucho de ello, derivado del “listón” tan alto que los políticos le pusieron a la ciudadanía para ser sujetos de elegibilidad al Constituyente. En COPARMEX Ciudad de México nos manifestamos preocupados porque el entendimiento de dicha reforma y de lo que será la nueva Constitución de nuestra Capital está cayendo en extremos: por un lado, vamos del desconocimiento de la mayoría de los capitalinos sobre lo que éste proceso implicará para su vida cotidiana y por el otro, las muy altas expectativas sobre lo que diversos grupos y actores políticos quieren incluir en la señalada Constitución. Reconociendo que aún falta mucho tiempo para conocer la propuesta de borrador que ofrecerá el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, desde la COPARMEX Ciudad de México nos interesa aportar nuestra visión sobre lo que debe y no debe incluir dicha Constitución. La Constitución de nuestra Ciudad no debe resaltar el pensamiento de ideologías, de sectores, incluido el empresarial, de partidos o minorías e incluso, mayorías. No puede ser una constitución de “izquierda” o “derecha”, si es que dichas clasificaciones aún caben en la dinámica política moderna. Pretender incluir éstas discusiones en torno a nuestra nueva Constitución, nos puede llevar al camino seguro del inmovilismo, de la falta de consensos y del encono, cuando la definición de nuestra Constitución deberá ser, por sobre todo, inminentemente jurídica. EMPRESARIOS UNIDOS POR LA COMPETITIVIDAD DE LA CIUDAD DE MÉXICO Página 1 de 2 COMUNICADO DE PRENSA COPARMEX CIUDAD DE MEXICO Nuestra nueva Constitución debe establecer el conjunto de responsabilidades y atribuciones de los dos niveles de gobierno, estatal y municipal, así como de los tres poderes, ejecutivo, legislativo y judicial, así como la forma de relacionarse entre ellos y con el marco normativo Constitucional Federal, con el que nunca puede estar en desacuerdo. Debe construir una visión incluyente, que deje en claro el conjunto de derechos y obligaciones establecidos por nuestra Carta Magna. Debe ser una Constitución sencilla, no obesa, ni difícil de entender. Debe reflejar el ideal de convivencia y la visión de Ciudad que queremos para las próximas generaciones. Por ello, debe ser escrita, con visión de Estado, para que perdure en el tiempo y no corra la tentación de ser constantemente reformada al capricho del cuerpo legislativo presente. Nuestra nueva Constitución, debe garantizar el respeto a los derechos que han diferenciado a nuestra Ciudad y permitir que en el futuro se derive de ella un marco normativo claro y cumplible, que genere un Estado de Derecho y de legalidad tal que haga que las inversiones y el desarrollo económico sea la condición de prosperidad para quienes habitamos nuestra Ciudad Capital. Ciertamente, será con tales características, como habremos de dar ejemplo desde la Capital de la República, de que nuestra Constitución aspira a ser un ejemplo de sencillez, claridad, modernidad y pleno respeto al Estado de Derecho. Atentamente, Ing. José Luis Beato González (@JoseLuisBeato) Presidente COPARMEX Ciudad de México (@Coparmex_CDMX) EMPRESARIOS UNIDOS POR LA COMPETITIVIDAD DE LA CIUDAD DE MÉXICO Página 2 de 2