RECOMENDACIONES PARA LA PARTICIPACIÓN EN PROYECTOS TELEMÁTICOS Núria Brichs (Redes educativas iEARN-Pangea y PatiNet). Artículo publicado en catalán en la GUÍA DE TELEMÁTICA EDUCATIVA (www.guiaeducativa.net) Un proyecto telemático consiste en llevar a cabo unas determinadas actividades conjuntamente con otros centros escolares, e intercambiarse los resultados por Internet. Con ello se pretende fomentar el trabajo cooperativo y la comunicación entre escuelas, de manera que a los contenidos propios de cada área se añadan unos nuevos valores: el trabajo en grupo, compartir responsabilidades e información, aprender de los demás, respetar opiniones y culturas diferentes, sólo por citar algunos. Participar en un proyecto telemático cooperativo requiere un esfuerzo de preparación por parte del profesor, que queda a menudo recompensad por un grado muy elevado de implicación por parte del alumnado. Ahora bien, es importante cumplir con el compromiso de participación desde su inicio hasta el final porque el abandono repercute negativamente en los alumnos. Existen proyectos telemáticos de diferentes tipos. Algunos, como el Megavillancico (‘Meganadala’ –en catalán- de la red educativa comarcal PatiNet) son ideales para iniciarse en ellos porque requiere muy poco trabajo previo y pocas sesiones de trabajo en clase. Otros, como El mundo de Harry Potter (http://www.lacenet.org/harrypotter) son más complejos, con calendario de participación y propuesta de actividades. Estos últimos ofrecen un amplio abanico de posibilidades de trabajo, con numerosas actividades entre las que podemos escoger aquellas que mejor se adapten a nuestras necesidades o intereses. Este documento pretende ser una pequeña guía para aquellos profesores que se inicien en la participación en proyectos telemáticos, con unas recomendaciones elementales para tener en cuenta. 1.- Todos los proyectos suelen estar bien estructurados. Los proyectos deben tener un facilitador a quien dirigirse para pedir información, inscribirse, consultar dudas… Los proyectos duelen ofrecer una documentación para los maestros sobre metodología, calendario, objetivos y actividades a realizar. Es aconsejable imprimirla, leerla bien y tea siempre a mano. Esta documentación también nos debería permitir elaborar una programación y nos servirá de orientación para integrar el proyecto dentro del currículum. 2.- En todos los proyectos debe haber dos niveles de comunicación: profesores y alumnos. Antes de iniciar el proyecto, los profesores participantes en cada grupo deberían escribirse para saber en qué condiciones trabajarán; qué disponibilidad de aula (de informática) tendrán, periodicidad en el envío de mensajes, temporización de las actividades… (en ocasiones es difícil coordinar los calendarios, especialmente cuando trabajamos con escuelas del otro hemisferio, dado que los periodos de vacaciones y de trabajo no coinciden). Este canal de comunicación debe permanecer abierto a lo largo del proyecto para resolver dudas, llevar a cabo los reajustes necesarios… contando siempre con la ayuda del facilitador del proyecto. Una vez iniciado el intercambio, los profesores deberían pasar a un segundo plano, y permitir que el grueso de la comunicación sea llevado por los alumnos. 3.- Hay que respetar al máximo el calendario del proyecto Por norma general, lo proyectos tienen tres fases: inscripción, presentación, realización de actividades, cierre y evaluación. Si se respeta el calendario, se mantienen las expectativas en todo momento. Si no es así, se produce una gran decepción entre los alumnos. 4.- La fase de presentación debería ser lo más animada posible. Es bueno que los mensajes de presentación no sólo describan cómo somos nosotros, sino que también contengan alguna pregunta de interés hacia los demás, ya que ello permitirá que pueda haber un intercambio de mensajes del tipo pregunta-respuesta. El envío de fotografías suele aportar un grado de animación extra. 5.- El periodo de respuesta debería ser lo más breve posible. No deberían pasar más de 7 días para dar respuesta a los mensajes (a no ser que previamente se haya acordado otra periodicidad), ya que si no es así, se rompe la comunicación y se crea un gran desencanto entre los alumnos. 6.- Debemos aviar cuando se produzcan interrupciones en la comunicación. Si por algún motivo tenemos que interrumpir la comunicación durante unos días (vacaciones, créditos de síntesis, viajes…) será un detalle de cortesía avisar a los compañeros de proyecto. 7.- Hay que respetar al máximo las normas de funcionamiento del proyecto Las normas de funcionamiento sirven para hacer la comunicación más fluida y ágil. Si el intercambio de mensajes se lleva a cabo a través de correo electrónico, y además hay varios grupos participantes, debe quedar muy claro a quién va dirigido cada mensaje. Es muy fácil indicarlo en el campo ‘Tema’ (subject): o bien en las primeras líneas del mensaje. Si el intercambio se lleva a cabo a través del grupo de noticias (newsgroups) o de los foros, es preciso responder al mensaje adecuado respetando la jerarquía de respuestas. Los alumnos deben tener en cuenta si el intercambio se realiza desde mensajes privados o colectivos. Un mensaje privado no llega a todos los participantes y puede dar la impresión de que el proyecto está inactivo; un mensaje colectivo da vida al proyecto y lo podemos trabajar en clase mientras no llega la respuesta que nos corresponde. Hay que respetar siempre y en todo momento las normas de netiqueta (es bueno que los alumnos las conozcan). Una muestra la encontraremos en http://www.rompecadenas.com.ar/netiquette.htm. También en http://www.cepis.org.pe/eswww/listserv/spanish.txt). 8.- Debemos controlar el tono de los mensajes. Hemos de tener en cuenta que utilizamos la lengua escrita y no la oral. Por lo tanto, los mensajes deberán tener una redacción más cuidadosa. Procuraremos que nuestros alumnos se percaten de que es preciso eliminar los giros característicos de la lengua hablada, y ser mucho más precisos en el redactado para evitar ambigüedades y/o confusiones. Además, escribiremos a personas que no conocemos en persona y que tienen otra cultura, por lo que deberemos extremar las precauciones en la utilización de la lengua, procurando eliminar expresiones malsonantes o que puedan resultar ofensivas. Los mensajes siempre deben ser tolerantes, respetuosos y educados. 9.- Sólo podremos enviar un mensaje colectivo cuando éste haya obtenido el consenso (y la supervisión del profesor). Un mensaje contiene el trabajo llevado a cabo por la pareja / grupo / clase, y por lo tanto el contenido debe ser relevante y adecuado al proyecto, i debe estar bien elaborado y consensuado por todos los integrantes antes de enviarlo. Tampoco debería enviarse sin el visto bueno del profesor. 10.- Si se trabaja en grupo, hay que distribuir las tareas y responsabilidades de cada uno. En un trabajo en grupo es recomendable que cada integrante tenga una tarea o responsabilidad asignada, para asegurarnos de que todos trabajan por igual. Puede haber un encargado de recoger y enviar mensajes, de buscar información, de llevar todos los materiales necesarios, de redactar o de traducir a la lengua extranjera, de dibujar… Estas tareas se pueden asignar según las habilidades individuales, o por sorteo, procurando que sean rotatorias. 11.- La participación en un proyecto no implica la utilización constante del aula de informática. Aunque para llevar a cabo el proyecto telemático deberemos utilizar los ordenadores para diferentes labores, no todas tienen por qué realizarse en el aula de informática. Esto es importante y debe ser tenido en cuenta en el momento de plantear el proyecto en el centro y hacer los horarios. Es preciso recordar también que trabajaremos con máquinas, y que éstas pueden fallar. Debemos tener siempre a mano alguna actividad alternativa por si la tarea prevista para esa sesión no puede llevarse a cabo por motivos técnicos. La sala de informática suele tener unas normas propias y deberemos ser muy estrictos en su cumplimiento. Su mantenimiento requiere mucha dedicación y cualquier pequeño problema puede repercutir en el desarrollo del proyecto. Recordemos que del buen funcionamiento de centro se beneficia todo el centro; de su mal estado salimos todos perjudicados. A efectos prácticos, es aconsejable que los mismos alumnos ocupen juntos el mismo ordenador. Así, si una máquina deja de funcionar, podremos pedir responsabilidades más fácilmente. También es muy fácil contagiar virus informáticos, por lo tanto, es recomendable que ni disquetes ni CDs circulen libremente. Tampoco abriremos nunca mensajes que nos parezcan sospechosos, y tendremos un buen antivirus siempre actualizado. No deberemos preocuparnos en exceso por nuestros conocimientos informáticos. Los alumnos tendrán dudas en el manejo de los programas que, si nosotros no sabemos resolver, seguro que podremos recurrir a la ayuda de algún otro alumno, si se lo pedimos. 12.- Los compañeros del centro educativo deben tener conocimiento del proyecto. Es aconsejable que todo el claustro de profesores sepa que un curso o un grupo determinado está participando en un proyecto telemático, y que este proyecto trabaja unos contenidos concretos relacionados con un área concreta (aunque la mayor parte de los proyectos son multidisciplinares). De esta manera podrán informar a los padres, si se da el caso, o bien ayudar mejor a su desarrollo. Una buena manera de que todos sean partícipes del trabajo realizado es mostrarlo en un mural, una exposición o en actos que el centro organice (jornadas culturales, puertas abiertas…),o bien publicar-lo en la web del centro. 13.- Los proyectos suelen terminar con una evaluación El facilitador del proyecto agradecerá conocer tanto aquellos aspectos del proyecto que han funcionado bien como los que no. I vuestras sugerencias que puedan aportar alguna mejora para próximas ediciones. Los proyectos que consiguen mejores resultados son aquellos en los que los profesores se implican y realizan aportaciones.