Murcia como relato: una ficción política (La Verdad, 24-6-09) Así en la memoria se reconoce que nos alejamos de la riqueza media de los españoles ya que “durante los años de bonanza económica la economía murciana no ha podido converger al nivel de desarrollo promedio de España” en términos de PIB o de renta bruta familiar por habitante, y tampoco lo hace en la etapa de recesión. El PIB por habitante en 2008 ha descendido 2,7 puntos en relación al de 2003, ampliándose nuestra desigualdad con la media española en cuatro puntos en un lustro. Por otra parte nuestra riqueza se reparte cada vez peor y la acción del gobierno es más ineficaz en su redistribución. “Entre 1999 y 2006, la mitad de la población más rica de la Región de Murcia ha aumentado su participación en la renta total en detrimento de la otra mitad.” Así el 20% más rico de la población ha aumentado su participación del 33,5% al 38,4%, mientras el 20% más pobre ha pasado del 10,3% al 7,3%. La proporción entre ambos grupos ha pasado de ser 3,3 a 5,2 veces mayor. Además "los resultados confirman que el crecimiento económico no garantiza la reducción de las tasas de pobreza” que han permanecido inalteradas a lo largo del periodo 2004- 2007. En promedio, aproximadamente, la tasa de pobreza se ha situado inalterablemente en torno al 25% de la población residente en la Región de Murcia, sin recortar nuestra distancia con la media española (20%). Una situación semejante encontramos si analizamos con detalle y con la ayuda de otros informes igualmente serios la calidad y resultados de nuestros sistemas educativo y sanitario (ambos competencias regionales), el nivel de nuestros salarios y pensiones, la calidad del empleo, o los principales indicadores medioambientales ( la insostenibilidad que expresan el índice de consumo de agua, de ocupación del territorio o de producción de gases de efecto invernadero), etc., por no hablar de la calidad de nuestro sistema democrático ( con la mayor extensión de la corrupción política de nuestra etapa democrática y una palpable pérdida de pluralidad informativa). Valcárcel ha anunciado que no va a volver a presentarse como candidato a la presidencia regional. Está pues cerca del final de una larga gestión que alcanzará 16 años en 2011. Ha tenido tiempo suficiente para desarrollar un proyecto político pero ya hemos comprobado que no ha logrado, disponiendo de grandes competencias y recursos, acercar la riqueza de los murcianos a la española, distribuirla mejor o reducir la pobreza, como tampoco ha conseguido aumentar la sostenibilidad ambiental, robustecer la calidad democrática, mejorar los resultados comparados de nuestra educación o de nuestra sanidad, ni aumentar la disponibilidad de agua que en su opinión era el principal problema regional. Entonces, ¿como es que se va a ir con el mayor apoyo electoral que ha tenido prácticamente ningún otro presidente autonómico? 1/2 Murcia como relato: una ficción política (La Verdad, 24-6-09) La respuesta es que tener éxito electoral, incluso de forma abrumadora como ocurre con el PP murciano, no es tener razón y tiene poco que ver con la solución de problemas reales de la gente. Con lo que tiene que ver es con el éxito en la socialización de un relato- repetido, maniqueo, sencillo, fácil de comunicar-, aunque esté en contra de las evidencias materiales o estadísticas, por que en nuestras sociedades mediatizadas la lucha política consiste en esto, en una batalla por imponer una narración que nos procure una determinada interpretación de la realidad y cree una ilusión de sentido, que diría el maestro Carles Egea, y que sólo cederá ante la fuerza mayor de otro relato, diga lo que llamamos realidad lo que diga. Patricio Hernández Presidente del Foro Ciudadano de la Región de Murcia 2/2