Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa

Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
Por: Arturo J. Solórzano A.
1. Qué es una empresa?
Independientemente de su tamaño, una empresa es la unidad básica de la economía, como lo es
la célula en los organismos vivientes y las moléculas y átomos en la materia. Las empresas son el
motor de la economía de una nación. Con su actividad, producen bienes y servicios destinados a
satisfacer necesidades de los consumidores: personas particulares, otras empresas y organismos;
generan empleo e ingresos de manera directa e indirecta, a través de sus procesos de producción
y ventas; transfieren recursos al Gobierno para la administración de la nación y atender el gasto
social de la población inactiva; entrenan y califican a los que en ellas trabajan y producen
utilidades -como también pueden producir pérdidas- para su(s) dueño(s).
2. El Sistema Económico
2.1
La Economía Nacional
Para comprender mejor el papel que juega una empresa, es necesario conocer cómo funciona la
economía. Por motivos históricos, cada país ha conformado una unidad nacional dentro de las
fronteras que demarcan su territorio, con un gobierno soberano y una población que permanece
unida e identificada con ciertos valores y características nacionales. Así como cada país o nación
cuenta con sus propias leyes y sistema político, tiene también un sistema que rige la forma en
cómo los individuos trabajan, crean riqueza -productos, servicios, intangibles- y satisfacen sus
necesidades. A este sistema se le llama Economía Nacional.
Como en todo sistema, en la economía nacional se producen y se gastan bienes y servicios. En
un sistema económico sano, el valor de los bienes y servicios que se gastan no debe ser mayor
que el valor de los que se producen, sino al contrario. Cuando el gasto es mayor que la
producción -caso de Nicaragua-, se explica por que existe una transferencia de recursos
provenientes de otras economías. Ahora bien, una economía no puede mantener su nivel actual y
mucho menos crecer, si la mayor parte del gasto se consume, es decir si una parte importante del
gasto no se destina a la inversión. La inversión permite incrementar las capacidades de
producción para responder al incremento poblacional y mejorar el nivel de vida. La inversión se
puede hacer en educación, investigación y desarrollo, tecnologías, maquinaria, equipos,
construcción de infraestructura económica y social, etc.
En el siguiente gráfico pueden observarse características básicas de 2 tipos de economía. La
primera es una economía deficitaria, donde la producción (PIB) es menor que el gasto (Demanda
Interna). En esta economía, las importaciones representan una parte importante de la Demanda
Interna. Las Exportaciones, por su parte, no son suficientes para generar los ingresos necesarios
para pagar las Importaciones. En esta economía, la mayor parte de la Demanda Interna es
Consumo, destinándose un menor porcentaje a la Inversión.
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Las barras de la derecha representan a
una economía estable, donde el PIB sí
cubre la Demanda Interna. En este
caso, las Exportaciones son
equivalentes -pueden ser mayores- a
las Importaciones y un mayor
porcentaje de la Demanda Interna se
destina a la Inversión, con lo cual
puede asegurarse el crecimiento de la
economía.
Como podemos deducir de lo
anterior, existen -de manera
simplificada- los siguientes
determinantes clave para que una
economía pueda mantenerse y crecer:
La producción (PIB) debe ser
igual o mayor que el gasto
(Demanda Interna)
Las Exportaciones deben ser iguales o mayores que las Importaciones
Un porcentaje importante del gasto debe destinarse a la Inversión
Con el logro de estos objetivos, la economía podrá crecer y desarrollarse, elevando el nivel de
vida de la población.
2.2
La Economía Global
La economía de Nicaragua, al igual que las economías de otras naciones, son parte de un sistema
económico internacional, donde éstas interactúan entre sí. Esta interrelación se da principalmente
a través del comercio -el intercambio de bienes y servicios: exportación e importación-, el
turismo, la inversión y los flujos de transferencias -préstamos, donaciones y pagos- de gobiernos,
organismos internacionales y organismos privados. De esa manera, la situación económica de un
país influye en la de los demás, especialmente en la de aquellos con los que tiene una relación
económica más estrecha.
Esto sucedía menos a medida que retrocedemos en el tiempo. Las economías de cada país eran
casi autárquicas, producían bienes y servicios a partir de sus propios recursos naturales y
humanos para ser consumidos dentro de sus fronteras. A medida que se incrementa el comercio
internacional y la movilidad de capitales a través de las fronteras, gracias al desarrollo del
transporte, las comunicaciones y la tecnología en general, la eliminación de barreras arancelarias
y no arancelarias y otros elementos que favorecen el libre comercio y movilización, las
economías de cada país se han vuelto cada vez más interdependientes, naciendo y
desarrollándose una economía global.
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Hoy, la globalización económica es un hecho. Los mercados nacionales resultan estrechos para
las empresas. Las fuentes de materias primas, equipos y tecnología se han diversificado. Se han
establecido normas de calidad internacionales y organismos que regulan las prácticas de
comercio internacional. De ahí que muchos países se han organizado en bloques económicos y
en áreas de libre comercio para enfrentar mejor este proceso.
Los primeros síntomas de la globalización se pusieron de manifiesto con la “crisis del petróleo”
de 1973, cuando los países petroleros elevaron los precios del crudo, elevando la inflación en
todos los países usuarios. Más recientemente, las crisis financieras que han afectado a países
como México y el sudeste asiático han dejado sentir sus efectos en otras economías
geográficamente muy distantes entre sí.
2.3
La Empresa en el Sistema Económico
Como se mencionó antes, una empresa es la unidad básica de la economía. La conforman una o
varias personas que juegan diferentes papeles en la misma. El papel clave lo desempeña el
empresario -quien puede o no ser el gerente o administrador de la misma-. El empresario -o el
emprendedor que inicia una nueva empresa- es el alma y nervio de la misma. De sus
características hablaremos más adelante.
Una empresa es una unidad económica que tiene sus propias metas y objetivos, que produce
bienes y servicios que satisfacen una necesidad y por los cuales recibe a cambio recursos que le
permiten operar. Ahora, para que una empresa pueda ser sostenible, debe cubrir sus costos de
operación y generar un excedente.
Las empresas proporcionan empleo e ingresos a la población a través de su cadena de operación.
De manera directa a través de los sueldos y salarios que se pagan a los trabajadores, comisiones
que se pagan a vendedores, sub-contratación o compra de bienes y servicios a particulares o a
otras empresas, y de manera indirecta a través de la cadena de comercialización y de los
impuestos pagados al gobierno, que son utilizados por éste para atender necesidades de la
sociedad -salud, educación, seguridad, etc.-.
Las empresas se interrelacionan entre sí mediante el intercambio de bienes y servicios; interrelacionan a su vez con el gobierno e instituciones privadas y con los individuos mediante
relaciones de empleo, de compra y venta de bienes y servicios, produciendo un flujo continuo de
ingresos y gastos que hace funcionar el sistema económico. Es por eso que las empresas son el
motor de la economía de una nación. En la medida en que las empresas son más eficientes, en
esa medida lo es también la economía nacional y global.
La gráfica siguiente nos ayudará a visualizar el papel de las empresas en el sistema económico.
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3. Características de las Empresas
3.1
El Tamaño de la Empresa
Hasta ahora hemos hablado de la empresa en general, independientemente del tamaño que tenga.
Ahora hablaremos de las diferencias según el tamaño de la empresa. En casi todas las economías,
la mayoría de las empresas son pequeñas: un promedio de 90 a 95 porciento. El resto son
medianas y grandes. En Nicaragua, más del 95% son pequeñas y micro empresas. En cada país
varían los parámetros para clasificarlas. En Nicaragua, convencionalmente se dice que las micro
empresas tienen de 1 a 5 trabajadores y las pequeñas de 6 a 30 trabajadores. La mediana empresa
se clasifica de 31 a 99 trabajadores y la grande, más de 100 trabajadores.
La importancia de las pequeñas y micro empresas en la economía -PYMEs como convencionalmente se les conoce en muchos países de habla hispana- radica en varios factores:
Son una fuente importante de empleo. Generan empleo e ingresos para un rango
del 50% al 65% de la población ocupada
Hacen un mayor uso de recursos locales de capital, trabajo, materias primas y
tecnología
Favorecen un desarrollo territorial más equilibrado
Contribuyen más a reducir la concentración del ingreso
Son más flexibles al cambio
3.2
Empresa Pequeña vs. Empresa Grande
A continuación se presentan algunas características principales que diferencian a las empresas
pequeñas de las grandes, pudiendo ser estas diferencias, ventajas o desventajas, dependiendo de
la situación particular que se analice.
Empresa Pequeña
Empresa Grande
Inversión inicial pequeña
Inversion inicial grande
Mercado reducido
Mercado amplio
Muchos competidores
Pocos competidores
Mayor dependencia de
suministradores
Costos fijos proporcionalmente bajos
Menor dependencia de
suministradores
Costos fijos proporcionalmente altos
Procesos simples y poco
standarizados
Sistemas simples de información y
control
Procesos complejos y standarizados
Sistemas complejos de información
y control
El tamaño de la empresa guarda relación con un sinnúmero de factores: el mercado a que se
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dirige el producto o servicio, el abastecimiento de materias primas, la disponibilidad de mano de
obra y personal calificado, la tecnología del proceso de producción y distribución, para
mencionar algunos de los más importantes.
Cada año se crean miles de pequeñas empresas y muy pocas medianas y grandes. Lógicamente,
son muchas las personas que cuentan con los ahorros necesarios para iniciar una empresa con
una pequeña inversión inicial y muy pocos aquellos que cuentan con ahorros suficientes para
emprender una empresa de tamaño mediano o grande.
Gran parte de esas miles de PYMEs han sido iniciadas por personas que no encontraron un
empleo en el mercado de trabajo y emprendieron un negocio como única alternativa viable para
conseguir ingresos, localizándose en actividades de bajos requerimientos de capital y tecnología,
principalmente en el comercio y los servicios. Otra buena parte ha sido iniciada por exempleados de empresas medianas o grandes que adquirieron conocimientos y destrezas en
determinados procesos de producción de bienes y servicios y se decidieron a abrir su propio
negocio en esas líneas. Sólo una pequeña parte inicia PYMEs que involucran nuevos productos,
servicios o procesos innovadores.
Sin embargo, así como cada año nacen miles de PYMEs, también cada año mueren buena parte
de ellas. En Nicaragua se carece de estadísticas acerca de estos hechos. En los Estados Unidos,
se inician cada año 675,000 nuevos negocios, habiendo actualmente más de 20 millones de
pequeños negocios no agrícolas, pero entre 55,000 y 65,000 quiebran anualmente. De acuerdo a
la tendencia, se estima que el 70% de los negocios iniciados fracasarán antes de los 5 años de
operación. Del 30% sobreviviente, muchos no serán tan buenos financieramente como fueron
imaginados en su origen.1
Existen muchas oportunidades para iniciar pequeñas empresas, pero también existen muchos
riesgos. Una selección adecuada del tipo de empresa que piensa iniciar le ayudará a no fracasar.
Sin embargo, y lo más importante, es saber si Ud. tiene o puede adquirir las cualidades para ser
empresario. La diferencia hace el éxito o el fracaso.
4. El Emprendedor
Los emprendedores son personas que tienen la
capacidad de descubrir y evaluar oportunidades
para hacer negocios, de reunir los recursos
necesarios para aprovecharlas, de aceptar los
riesgos asociados con la ejecución de sus
planes y de hacer realidad sus ideas obrando en
forma apropiada para lograr el éxito
1
Inicie su Propio Negocio. Charles L. Martin. 1992.
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4.1
Empleado vs. Empresario
Todos deseamos tener éxito en nuestra vida personal. Como parte de ésto, deseamos contar con
los recursos que nos permitan satisfacer nuestras necesidades de alimentación, salud, educación,
vivienda, recreación, etc., tanto las propias como la de nuestra familia, hoy, en el futuro cercano
y más adelante para asegurar nuestra vejez. Algunos se conforman con llegar a tener los
ingresos apenas suficientes para una vida normal y modesta. Otros desean contar con mayores
ingresos que les permitan gozar un nivel de vida más alto.
Para muchos, la mejor manera de ganarse la vida es trabajar empleado en una empresa o
institución. Se cuenta con un sueldo seguro cada mes o quincena. Se puede hacer carrera y
conseguir mejores posiciones y aumentos de sueldo con el tiempo. No tiene que quebrarse la
cabeza en buscar la manera de cómo vender para generar los ingresos suficientes que permitan
pagar la planilla, pagar a los proveedores, pagar los impuestos, etc. Se tiene un horario definido y
contar con el tiempo libre para otras actividades. Si hay que quedarse trabajando, se cobran horas
extras. Puede faltar al trabajo y la empresa no se desplomará, pues hay otros que lo pueden
sustituir. Se tiene derecho a vacaciones, seguro social y pensión de jubilación. Y, lo más
importante de todo, se puede dormir tranquilo sin tener que pensar en el futuro de la empresa:
eso le toca al gerente o propietario.
Al iniciarse como empresario, sus ingresos dependerán del esfuerzo que dedique a su empresa.
No podrá limitarse a un horario determinado, mucho menos a faltar un solo día. Le quedará
menos tiempo libre para dedicarlo a su familia, amigos y recreación. Deberá estar vigilante y
atento a todos los detalles que involucra la operación de la empresa. Deberá invertir tiempo en
informarse de los eventos que pueden afectar su negocio. No podrá consultar la mejor manera de
resolver un problema con su jefe, pues Ud. mismo es su propio jefe. Continuará buscando
solución a los problemas encontrados aún en las horas de descanso. Tendrá que tomar decisiones
por su propia cuenta y riesgo, como también deberá saber imprimir a las personas que trabajan
con Ud. y los que lo rodean, el espíritu de lucha y confianza en conseguir los objetivos que se ha
propuesto.
“Quienes inician su propio negocio deben enfrentarse a muchos inconvenientes personales,
además del riesgo financiero de insolvencia. Los dueños de pequeños negocios exitosos, por
ejemplo, raramente gozan de lujos personales, ni de un día de trabajo normal. Como explicaba
el dueño de una pequeña tienda de ropa “tener un negocio propio significa trabajar los sábados
para siempre”. La responsabilidad de manejar un negocio, en última instancia, descansa en el
propietario, un papel que puede tener muchas tensiones y ser solitario. No se pueden delegar
las decisiones más difíciles ni las tareas menos placenteras. Los dueños de la mayoría de los
negocios pequeños encuentran también que no son tan independientes como ellos creyeron
inicialmente. Los clientes, proveedores y agencias del gobierno se convierten en los nuevos
“jefes” del propietario, y son iguales -si no es que más- exigentes que cualquier jefe en un
negocio grande”.1
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4.2
Empresario vs. Emprendedor
Es fácil encontrarle un error a una nueva idea.
Es más fácil decir que no puede hacerse que
intentar llevarla a cabo. Hasta ahora, el miedo
a fallar es por lo que algunos hombres crean su
propio infierno”
E. Jacob Taylor
Algunas veces estos dos términos se manejan indistintamente. Sin embargo, en algunos
contextos existen diferencias. El término “empresario” se aplica a todo aquel individuo que
posee una empresa -de manera individual o en sociedad con otros-, sea que la empresa la haya
iniciado él mismo, la haya adquirido de otros o la haya heredado. El término “emprendedor” se
aplica a todo aquel que inicia y desarrolla una idea y emprende una empresa. De tal modo que
pueden existir empresarios emprendedores y empresarios no emprendedores, pero no pueden
existir emprendedores que no sean empresarios.
4.3
El Emprendedor: Inventor y Administrador
Como se dice en la frase del recuadro que inicia este capítulo, el emprendedor es capaz de
descubrir oportunidades de hacer negocios donde otros no las imaginan y de materializar sus
ideas desarrollando la forma de llevarlas a cabo. Esto exige un alto grado de creatividad y
capacidad de innovación. Un inventor tiene estas características, sólo que puede o no tener la
habilidad de hacer negocio con su invento.
Pero esto no basta para que la idea materializada sea un negocio exitoso. Hace falta tener la
capacidad para reunir los recursos materiales, humanos y financieros que se requieren, para hacer
que la empresa opere con rentabilidad y de manera regular y sostenible. Esto exige capacidad
para administrar los recursos, planificar metas y alcanzar resultados. Un administrador tiene
estas características, sólo que puede no tener la habilidad para detectar nuevas oportunidades de
negocio o de inventar nuevas soluciones.
El gráfico siguiente nos muestra la relación entre las habilidades y capacidades mencionadas y
los perfiles de estos tipos de personas:
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4.4
Características del Emprendedor2
Los emprendedores son individuos fuertemente motivados, dotados para la acción y que asumen
riesgos para lograr sus objetivos. La siguiente lista de cualidades constituye una descripción del
emprendedor en su trabajo como tal:i
Cualidad
Detalle
Confianza en sí mismo
Seguridad
Independencia, individualismo
Optimismo
Conciencia de la tarea necesaria
y del resultado buscado
Necesidad de realizar actividades productivas
Deseo de lucro
Tenacidad, perseverancia, determinación
Laboriosidad, empuje, energía
Iniciativa
Capacidad de asumir riesgos
Gusto del riesgo calculado
Gusto del desafío
Capacidad para dirigir
Conducta de dirigente
Buenas relaciones con las demás personas
Sensibilidad a sugerencias y críticas
Originalidad
Capacidad de innovar, creatividad
Ausencia de prejuicios, flexibilidad
2
Lo que todo pequeño empresario debe saber. Geoffrey G. Meredith, Robert E. Nelson,
Philip A. Neck. Organización Internacional del Trabajo. Ginebra. 1982.
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Ingenio
Talentos variados
Conciencia del futuro
Bien informado
Previsión
Sensibilidad a las tendencias que se manifiestan
La lista enumera las cualidades que usted debe poseer o poder adquirir si quiere ser
emprendedor. Quizá no necesite todas estas cualidades, pero cuantas más posea, mayores serán
sus probabilidades de tener capacidad empresarial.
Hay que aclarar que muchas de estas cualidades guardan estrecha relación entre sí; por ejemplo,
puede suponerse que quienes tienen confianza en sí mismos estarán dispuestos a asumir la
responsabilidad de sus propias decisiones y a correr riesgos, y llegarán a ser dirigentes.
No todos los empresarios son iguales, por supuesto, en lo que respecta a sus caracteres
personales. A menudo hay entre ellos notables diferencias: algunos son fríos y arrogantes, otros
cordiales y amables, y otros aún reservados y tímidos. Pero cuando se los considera desde el
punto de vista de sus diversas cualidades y capacidades, resulta evidente que, como grupo, los
empresarios se diferencian marcadamente de lo que no lo son.
Las diferencias de carácter no sirven de mucho para determinar las cualidades del empresario.
Peter Drucker, el gurú de los negocios internacionales, captó claramente el problema:
Algunos son excéntricos; otros conformistas, dolorosamente correctos; algunos
son aprehensivos, otros relajados; algunos beben en exceso, otros son abstemios;
algunos son hombres de un gran encanto y cordialidad, otros no tienen más
personalidad que un besugo.2
No es probable que usted encuentre alguna vez un empresario
que se destaque en la totalidad de las cualidades enumeradas,
pero en cambio es muy probable que los empresarios que
conozca tengan muy desarrolladas la mayor parte de dichas
cualidades, sobre todo la confianza en sí mismo, la capacidad
de asumir riesgos, la flexibilidad, la necesidad de realizar y el
deseo de ser independiente.
4.4.1 Confianza en sí mismo
Generalmente, el emprendedor es una persona optimista. Ve las cosas desde diversos puntos de
vista, buscando los aspectos positivos, sin perder de vista los negativos. Tiene una fe absoluta en
que puede lograr las metas que se ha propuesto. Tiene confianza en sus propias capacidades y
habilidades para enfrentar y superar los problemas que se le presenten. Confía en que los
conocimientos que ha adquirido le ayudarán a enfrentarse a la vida. Es sincero y confía en la
sinceridad de los demás, porque conoce que la mentira tarde o temprano se descubre y se vuelve
contra el que miente. La confianza en sus propias capacidades le da seguridad en todas sus
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acciones. Por eso también no le gusta depender de otros. Sabe que por sí mismo puede salir
adelante. Prefiere hacer solo las cosas más importantes y no las encomienda a terceros.
4.4.2 Conciencia de la tarea necesaria y del resultado buscado
El emprendedor necesita estar siempre ocupado en alguna actividad , de la cual sabe que sacará
provecho. Odia estar desocupado, sin tener qué hacer. Por lo común, es obstinado y capaz de
resistir un día de trabajo de 18 horas, pero disfruta de su trabajo. Utiliza al máximo los
momentos libres dedicándolos a su enriquecimiento espiritual. Se dedica con ahínco y
responsabilidad a sus tareas. No se amilana ante los problemas, por complicados que éstos
parezcan. Los enfrenta con determinación y tenacidad hasta lograr su solución. No duda en tomar
la iniciativa. Es perseverante en sus acciones y aguarda con paciencia prudente alcanzar las
metas que se ha propuesto. Una vez que ha conseguido la meta, fija su atención en el siguiente
objetivo, tan pronto como es posible. Lo empuja el deseo de superación y lucro, y principalmente
el de asegurar su futuro.
4.4.3 Capacidad de asumir riesgos
Un emprendedor sabe correr riesgos calculados. Encuentra gran satisfacción en luchar por lograr
con su esfuerzo y habilidad cosas difíciles pero no imposibles. No rehúsa los desafíos, pero no es
un jugador. Evita las situaciones en que el riesgo es muy pequeño, porque no entrañan ningún
reto y no prometen gran cosa. También evita las situaciones en que el riesgo es excesivo, porque
lo que quiere es triunfar. Evalúa con realismo los riesgos que vale la pena correr. Tiende a tratar
de reducir al mínimo el riesgo, demorando las decisiones sólo lo necesario hasta conocer los
hechos lo suficiente, ya que, cuando se haya despejado por completo la niebla de la
incertidumbre, demasiadas personas podrán detectar claramente la oportunidad. A menudo toma
decisiones contando con muy poca información, ya que postergarlas puede acarrear más pérdidas
de tiempo y dinero.
4.4.4 Capacidad para dirigir
El emprendedor es siempre un dirigente. Tiene capacidades de liderazgo y sabe cómo hacer que
otras personas sigan sus órdenes. Utiliza la fuerza del ejemplo para motivar a los demás. Sabe
cómo tratar a cada persona. Emite órdenes, pero también sugerencias para mejorar el desempeño.
Mantiene informado a su personal. Sabe escuchar sugerencias y críticas y utilizarlas en su
provecho. Otorga la razón a quien la tiene, pero también expresa su juicio sin demora. Sabe
recompensar de manera justa el esfuerzo de los demás, pero también sancionar las faltas.
Planifica las actividades. Vigila la ejecución de las tareas y controla el cumplimiento de los
resultados. Delega autoridad y responsabilidad en el grado que estima que otros pueden asumir.
Prefiere crear un ambiente de trabajo en equipo y de colaboración.
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Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
4.4.5 Originalidad
La innovación es el rasgo distintivo del emprendedor. Tiende a enfrentarse a lo desconocido;
hace las cosas en formas nuevas y difíciles; entreteje las antiguas ideas en nuevos patrones. Pero
va más allá de la innovación misma y lleva su concepto al mercado. Generalmente con una
buena dosis de ingenio y ningún prejuicio, imagina bienes y servicios para satisfacer necesidades
reales. Posee talentos variados que le ayudan a implementar sus ideas. Siempre está buscando
alternativas y soluciones para mejorar sus productos, servicios y procesos. Disfruta con crear
algo nuevo que tenga utilidad.
4.4.6 Conciencia del futuro.
El emprendedor está bien informado sobre los aspectos propios de su negocio y aquellos del
entorno que se relacionan. Sabe interpretar las señales del mercado que implican oportunidades y
amenazas para su empresa. Posee sensibilidad para interpretar las tendencias que se manifiestan
y tomar ventaja de ellas. Toma medidas precautorias y correctivas en el momento adecuado.
Ahorra y acumula en el presente para poder gastar en el futuro.
5. El Emprendedor y la Empresa
5.1
Ventajas y Desventajas de emprender un negocio3
5.1.1 Ventajas
Es difícil enriquecerse cuando se trabaja para otro. La administración de un negocio propio
cando menos proporciona la oportunidad de ganar más dinero, pero enriquecerse depende en
gran parte de lograr que la empresa tenga éxito. Si todo marcha bien, el fundador puede
determinar la cantidad de dinero qe se asigne como sueldo y puede exigir ciertos beneficios (por
ejemplo, automóvil, viáticos). Los grandes negocios son las pequeñas empresas que han
triunfado. Si un negocio llega a triunfar en grande, el fundador podría considerar la posibilidad
de que cotice en la Bolsa de Valores, lo que incrementará en forma dramática el valor de las
acciones, o bien puede tomar la decisión de vender obteniendo grandes utilidades y jubilarse para
vivir rodeado de lujos.
Sin embargo, para muchos empresarios, algo más importante que la riqueza es la libertad que se
obtiene al ser su propio jefe. Los propietarios son absolutamente independientes y pueden
planear su negocio y administrarlo sin hacer planes a largo plazo y en la forma que quieran.
También les brinda la oportunidad de trabajar en un área que realmente disfrutan.
También hay ciertas ventajas en lo que concierne a los impuestos. Las personas autoempleadas
tienen más concesiones que los empleados normales respecto a los ingresos.
3
La Esencia de la Administración de Pequeñas Empresas. Colin Barrow. 1996.
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Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
5.1.2 Desventajas
Echar a andar un negocio es mucho más arriesgado que trabajar para alguien más. Si el negocio
fracasa, se puede perder algo más que el empleo. No sólo el trabajo arduo habrá sido en vano,
sino que podría sufrir graves penurias financieras si se debe dinero, ya que como autoempleado,
usted es personalmente responsable ante sus acreedores. Eso quizá signifique vender sus activos,
incluyendo su casa y, en el peor de los casos, podría quebrar. Si forma una compañía de
responsabilidad limitada, su responsabilidad personal ante los acreedores se limita, en teoría, al
valor de su aportación al capital social. Pero, en la práctica, los bancos por lo común requieren
una garantía personal de los socios para obtener un préstamo o un sobregiro, lo que hasta cierto
grado anula los beneficios de la condición de responsabilidad limitada.
Usted es responsable por completo del éxito o el fracaso de su negocio. Esto puede ser muy
estimulante, pero inevitablemente causa un gran estrés: la presión constante y las largas horas de
trabajo van a la par. Esto puede afectar de manera drástica su vida social y familiar, y también
su salud.
5.2
Opiniones de empresarios
Para darle una idea de lo que significa ser su propio jefe, he aquí algunos comentarios
seleccionados de varios fundadores de pequeñas empresas, en sus propias palabras:
Le proporciona la sensación de ser totalmente independiente, lo que resulta muy
estimulante.
Uno se siente completamente productivo. Emplea su propio tiempo en lo que quiere. A
menudo esto significa trabajar todas las horas del día, seis días a la semana, toda la vida.
Pero no cuesta trabajo si usted lo hace para su beneficio.
He obtenido mucho más en recompensas personales que en beneficios financieros. Me
ha dado confianza en mí mismo, lo que me ha convertido en una persona más tranquila,
menos neurótica y más preparada para correr riesgos.
El hecho de ya no estar involucrado en los tejes y manejes de la oficina me ha
proporcionado una enorme sensación de libertad.
Usted experimenta placer con las cosas más sencillas ¡incluso con el hecho de que la
copiadora esté funcionando!
La capacidad de adquirir más y mejores posesiones materiales no tiene importancia si se
compara con la sensación de logro que se experimenta.
Para empezar, es una sensación de lo más estimulante, es como haber descubierto
América. Después, hay una espera mortal mientras se queda sentado aguardando a que el
negocio empiece a producir. Si es sensato, sale de ese período concentrándose en planear
el negocio en la forma apropiada y en asegurarse de que ha calculado bien sus costos.
Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
Es bueno para el espíritu.
Es divertido.
Pero:
Uno se siente muy solo sabiendo que es el único responsable del éxito o el fracaso del
negocio.
Se debe ser muy obstinado, lo que puede hacer que su familia y sus amigos piensen que
es egoísta. Eso acabó con mi matrimonio.
Debe estar preparado para hacer cualquier cosa que sea necesario hacer. Una pequeña
empresa no se puede permitir el lujo de contar con todos los servicios de respaldo: ayuda
para mecanografiar, una encargada de servir el café, un encargado de la correspondencia,
algo a lo que tal vez estaba acostumbrado cuando era un empleado.
Algunos aspectos del trabajo son desagradables, por ejemplo, empezar a buscar clientes,
apremiar a quienes demoran sus pagos, y hacer devoluciones.
Se debe desarrollar un poderoso sentido de responsabilidad hacia los miembros del
personal. No puede ser arrogante con ellos; después de todo, sus carreras y sus trabajos
dependen de usted.
Debe estar preparado para ser inflexible con su personal y sus proveedores, no importa si
su relación con ellos es amistosa. Si algún miembro de su propio personal no es
competente, debe despedirlo. Si sus proveedores no cumplen, deshágase de ellos.
Fue un gran alivio volver a ser un empleado, debido a que ya no tenía la carga de reunir
los salarios de los empleados cada semana.
En estos tiempos, todos tratan de vivir al crédito, de manera que el mayor problema es el
flujo de efectivo.
Al principio resulta atemorizante. Uno se queda sentado en espera de que suene el
teléfono y, cuando eso sucede, desea con desesperación que se trate de un cliente
potencial, y no de alguien a quien uno le debe dinero.
El papelo y los formularios que es necesario llenar se llevan mucho tiempo y son una
actividad irritante.
La responsabilidad es una preocupación constante para mí, por las noches me hace sudar
frío.
A pesar de las quejas, la mayoría de los propietarios de negocios se sienten complacidos por
haber iniciado su propia empresa y no dudarían en iniciar otra, antes que volver a trabajar para
alguien más.
Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
En 1991 les preguntaron a los propietarios de alrededor de 800 exitosas e independientes
compañías, qué era lo que les había motivado para iniciar y administrar sus propios negocios. De
los que contestaron -73.5%- un abrumador 98% calificó la satisfacción por el éxito obtenido
como un motivador muy importante y el 70% de ellos como muy importante. El 88% calificó la
capacidad de hacer las cosas a mi manera, y el 87% calificó la libertad de adoptar una
perspectiva a largo plazo, como importantes o muy importantes, lo que indica que la
independencia es un motor clave en la mente de los empresarios.
Evidentemente, las recompensas financieras también son motivadoras, pero es interesante
observar que su calificación no fue tan alta como la satisfacción personal, y sólo marginalmente
más alta que la independencia.
5.3
Factores de Éxito y de Fracaso de las Empresas
5.3.1 Factores de Éxito
No hay una fórmula a seguir para asegurar el éxito de una empresa. Cada empresa es diferente de
otra. Aún aquellas que producen el mismo bien o servicio, se diferencian entre sí por muchos
factores. Uno de ellos, es sin embargo, el más importante y determinante para el éxito: el
empresario que está al frente de la misma.
A continuación presentamos diez ingredientes que James R. Paul, Director General de Coastal
Corporation, dice que son necesarios para ser un empresario exitoso.1
o Trabajo duro: simple y tradicional trabajo duro.
o Enfoque: usted debe ser capaz de concentrarse en lo que hace mejor.
o Buenas ideas: busque nuevas ideas como los perros buscan un hueso. Busque todos los días
nuevas ideas, nuevos métodos, nuevas maneras de menorar, de crecer, nuevos métodos para
alcanzar productividad, encontrar nuevos clientes, controlar costos y eliminar burocracia.
o Flexibilidad: la flexibilidad permite alcanzar los resultados.
o Adaptación a cambios: adáptese a los cambios, pero aprenda a anticiparlos.
o Ventas: usted debe ser capaz de hacer que los demás compren sus ideas.
o Confianza: la gente exitosa suda confianza por cada poro.
o Balance: entre los detalles y el pensamiento global. El sentido de perspectiva es muy
importante.
o Firmeza: toda la gente exitosa lo usa en su ventaja.
o Mejora: mejora constante de usted y de su compañía.
Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
La misma encuesta antes mencionada revela la forma en que los propietarios de pequeñas
empresas miden el éxito de su negocio.
De las compañías que respondieron, el 82% consideró que la calidad de su producto o servicio
era una medida muy importante del éxito del negocio, en comparación del 67% en favor del
desempeño financiero. Esto demuestra que la calidad y el servicio al cliente son la clave de la
prosperidad a largo plazo. La combinación de calidad y desempeño financiero es lo que
proporciona la medida más acertada del éxito.
Un negocio sólo es tan bueno como las personas involucradas en su desarrollo, de manera que es
significativo que el 98% de quienes respondieron calificó el desarrollo de un equipo de trabajo
eficiente como una medida muy importante del éxito.
5.3.1 Factores de Fracaso
De los millones de negocios que nacen cada año en el mundo, sólo la mitad alcanza a sobrevivir
durante 18 meses, y sólo uno de cada cinco llega a los 10 años. Esto revela que la administración
de un negocio exige mucho y de que muchos de los empresarios que empiezan están mal
equipados para hacerlo. Los riesgos más elevados se presentan en los primeros años. No existe
ninguna forma libre de riesgos para tener un negocio lucrativo, pero vale la pena conocer los
peligros que acechan en el futuro.
Básicamente, los nuevos negocios que se inician fracasan por las siguientes razones:
Falta de experiencia.
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Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
Auto-evaluación: Estoy preparado para emprender un negocio?
Con la información que hemos reseñado hasta ahora, ya tenemos una idea general de lo que es
una pequeña empresa y un empresario emprendedor. Pero, para iniciar un negocio debemos
conocer si tenemos la habilidad para detectar una oportunidad de negocio factible y la capacidad
para concentrar todas las energías para lograr una meta específica, la cual creemos firmemente
que podemos alcanzar. Con la siguiente información y respondiendo de manera honesta a las
preguntas planteadas, puedes saber en qué grado estás preparado para iniciar una empresa.
Robert Schaefer, en su manual Para Empezar y Manejar un Pequeño Negocio de Servicios
recomienda que se debe iniciar la autoevaluación con la respuesta honesta a la siguiente
pregunta:1
Sabiendo lo que sé acerca de mí, ¿contrataría a alguien como yo para que
maneje un negocio en el que he invertido los ahorros de toda mi vida?
Auto-evaluación
Lo que debe tomar en consideración el dueño de una pequeña empresa:
La idea ganadora. La selección adecuada del producto o servicios que ofrecerá la
empresa es determinante para asegurar su éxito. La idea del negocio no sólo debe
satisfacer una necesidad real de un mercado de consumidores, sino que también debe ser
demandada por éstos y proporcionar rentabilidad. ¿Te consideras capaz de descubrir una
oportunidad de negocios con estas características? ¿Tienes olfato para los negocios?
El riesgo. Emprender un nuevo negocio conlleva riesgos. Si fracasas, puedes perder la
inversión, los ahorros personales y quedar endeudado con los financiadores. Si tienes
éxito, obtendrás ingresos que te permitirán elevar tu nivel de vida. En el camino,
encontrarás escollos, limitantes y problemas a superar. ¿Estás dispuestos a enfrentarlos o
prefieres la seguridad de recibir un salario regular mediante un empleo? ¿Puedes
enfrentarte fácilmente a la incertidumbre?
Creatividad e Innovación. La materialización de una idea de negocio en una empresa
rentable y sostenible exige una buena dosis de capacidad creativa e innovadora para
resolver los problemas del suministro de los recursos que se requieren para operar el
negocio, para encontrar la mejor manera de llevar a cabo el proceso de producción, para
diseñar una estrategia adecuada de mercadeo y ventas, etc. ¿Confías en tu capacidad para
encontrar soluciones viables a los problemas encontrados en cada uno de los aspectos de
la operación de una empresa? ¿Prefieres encargar a otros buscar la solución a problemas
complicados?
Experiencia y capacidad administrativa. Dos de los factores que influyen en el éxito
de una empresa son la experiencia previa en el giro del negocio y la capacidad para
administrar recursos. ¿Has tenido experiencia en el manejo de un negocio? ¿Conoces los
pormenores que implica la producción del bien o servicio que has elegido? ¿Si no los
conoces o no has elegido el giro del negocio, confías en aprenderlos sin dificultad? ¿Te
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resulta fácil administrar su dinero correctamente? ¿Tienes algún ahorro o gastas más de
lo que recibes y tienes muchas deudas?
El tiempo. Debes calcular un mínimo de 50 a 60 horas de trabajo a la semana, por lo
menos para el primer o los primeros dos años del negocio. Puede que la empresa te exija
más o menos tiempo. Recuerda que la planificación, el control y la resolución de los
problemas que se presentan en la operación del negocio son parte integral de tu
responsabilidad. ¿Te sientes inquieto cuando no estás ocupando tu tiempo en algo útil?
¿Te entusiasma la idea de invertir tu tiempo en un negocio propio? El carácter de la
gestión que pretendes exige que le dediques el tiempo que antes le dedicabas a ir al cine,
a bailar, a pasear, a practicar un deporte, etc. ¿Podrás prescindir de ello? ¿Estás dispuesto
a trabajar duro y reducir el tiempo de descanso?
Independencia y liderazgo. ¿Te agrada ocupar tu tiempo en crear y desarrollar una
actividad de la cual dependerá tu ingreso? ¿Te gusta organizar y dirigir el trabajo de los
demás? ¿Disfrutas siendo el responsable de que se hagan las cosas? ¿Prefieres ejecutar
tareas que te ordenan otras personas? ¿Te agrada trabajar solo y tomar tus propias
decisiones? ¿Tienes cualidades para relacionarte con las personas? ¿Te gusta escuchar las
opiniones de los demás y hablar en el momento adecuado? ¿Erez capaz de venderte a tí
mismo y vender tus ideas de negocios?
Los cambios. ¿Eres una persona de hábitos? ¿Te molesta alterar tus planes? ¿Te resistes
al cambio? El cambio es parte de la vida, pero en el proceso de establecer un negocio, es
un factor constante. Tienes que estar ajustando continuamente tu funcionamiento a las
realidades que te presenta el ambiente. Debes preguntarte si puedes y estás dispuesto a
hacerlo.
El dinero y los gastos personales. Un negocio, como cualquier criatura, necesita estar
bien alimentado para que crezca y se desarrolle. Debe contarse con el dinero suficiente no
sólo para iniciar la empresa, sino también para mantenerla operando por varios meses
durante el lento y caro período de inicio. Si el dinero con que cuentas para tu negocio es
limitado, tendrás necesariamente que ahorrar en ciertas áreas, y es muy probable que una
de ellas sea el salario que te asignes para tus gastos. ¿Estas dispuesto a reducir tus gastos
si de ello depende poner el negocio en marcha? Tendrás la alternativa de buscar dinero
prestado, pero para ello tendrás que ofrecer garantías. ¿Cuentas con bienes que puedan
garantizar el pago del préstamo? ¿Puede apoyarte tu familia o quizá algún amigo?
Recuerda que las deudas son sagradas. Si fallas en honrarlas, perderás tu reputación.
Estudio e investigación. Tu éxito en el mundo de los negocios va a depender en gran
parte de tu habilidad para absorber nuevos conocimientos. Necesitarás buscar
información sobre técnicas nuevas de producción, nuevas posibilidades de mercado, etc.
Necesitarás preparar y analizar informes financieros sobre la situación de la empresa.
Necesitarás informarte sobre las regulaciones gubernamentales y municipales, sobre
acontecimientos y tendencias que pueden afectar el desarrollo de tu empresa. ¿Estás
dispuesto a hacerlo? ¿Sabes sacar provecho de las críticas?
La autodisciplina. Cuando eres tú el dueño del negocio, no hay jefe que vele porque
llegues a tiempo, porque realices bien tu trabajo o porque cumplas con la tarea
Perfil del Emprendedor y de la Pequeña Empresa
encomendada. La disciplina necesaria para integrarte a las tareas que exige el negocio
tiene que partir de tí mismo. ¿Te sientes preparado para cumplir con estas exigencias,
aunque ello implique echar a un lado viejas costumbres?
La familia. ¿Te has preguntado si tu familia apoyaría lo que demanda esta nueva
actividad tuya, especialmente en cuanto a dedicarle menos tiempo y dinero? Si tu familia
puede ofrecerte el apoyo que demanda ese período inicial, te sentirás robustecido para
continuar adelante. Pero si, por el contrario, tu familia va a resentir que tu no cumplas
con ella en la misma medida que lo hacías anteriormente, tienes que calcular cuáles
serían las posibles consecuencias de esa tensión en tu nueva empresa.
Contesta por escrito a todas y cada una de las preguntas anteriores. Piensa en qué otras cosas
puede exigir de tí un negocio. ¿Cuáles de todas las que has considerado te parecen más difíciles
de conseguir o sobrellevar? ¿Cómo piensas abordarlas? En términos generales ¿Cómo te sientes
frente al reto que representa emprender un negocio?
i
Esta lista fue elaborada en un cursillo sobre capacidad empresarial que se realizó en el Centro Oriente-Occidente de
Honolulú, en 1977.