No más ausencias por violencia. Manifiesto contra la violencia de género. 25 de noviembre 2010 No más ausencias por violencia. Manifiesto contra la violencia de género. 25 de noviembre 2010 - Son ya más de 60 las mujeres que en este año 2010 han sido asesinadas en España por los hombres con quienes compartían o habían compartido su vida. Hoy sentimos sus pasos perdidos, su huella nos queda en el corazón y sus nombres en la memoria. Hoy clamamos contra la injusticia de su ausencia. - Hay 60 hombres culpables de estos crímenes. Son culpables de matar, torturar, golpear, amenazar, asustar, humillar, imponer, explotar, engañar, utilizar y despreciar a las mujeres que habían tenido junto a ellos. Exigimos a la justicia que los pasos de estos hombres no queden sin castigo. Exigimos al gobierno regional máximo apoyo a las mujeres que están perdiéndose en la espiral de la violencia machista. - Queremos hacer visibles también los 426 asesinatos de mujeres transexuales en los últimos dos años y medio en Europa. Datos escalofriantes ante los que no podemos quedarnos calladas. Solicitamos que se denuncie en la ONU y en otros organismos nacionales e internacionales la situación que viven miles de mujeres transexuales por todo el mundo, en especial en América latina. - El número de mujeres víctimas de la trata de personas es indeterminado. Mujeres esclavizadas por mafiosos que se pasean entre nosotros con total impunidad exhibiendo la marca del éxito que deja el dinero. Por miles se cuentan nuestros machotes vecinos, que ven natural y hasta justo (¡oye, que yo pago!), utilizar los cuerpos de estas esclavas del siglo XXI para aliviarse sexualmente. Exigimos a la policía y a los fiscales que persigan y acaben con esas mafias. Exigimos a los Ayuntamientos que controlen la parte que les toca. A los clientes les iría bien ponerse en el lugar de ellas; quizá al mirarse al espejo vieran asomar la vergüenza de su culpabilidad. - La violencia contra las mujeres se asienta en una sociedad también culpable, que la consiente y normaliza, una sociedad patriarcal y machista que encuentra natural que la tasa de empleo femenina esté muy por debajo de la masculina, que las mujeres suframos más la lacra del paro y del empleo precario, la sobreformación y la discriminación salarial. La misma sociedad que nos exige partos, educación esmerada de los hijos, atención a la casa y cuidados a mayores y dependientes, que nos culpabiliza cuando hay problemas familiares y nos regatea el derecho a decidir sobre nuestra maternidad. Una sociedad que nos mantiene lejos de los centros de poder políticos y económicos donde se toman las decisiones, y lejos de los centros simbólicos donde se acuñan los modelos y el sentido. - Esta sociedad jalea notorias voces que apestan a machismo, como la de Javier León de la Riva, alcalde de Valladolid, o la del presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia Ramón Luis Valcárcel con sus corifeos aplaudidores de los insultos y desprecios que vierten contra las mujeres. Los políticos misóginos no merecen representar a la ciudadanía, formada en su mitad por mujeres. - No aceptamos tampoco que la iglesia católica pretenda regular nuestras vidas y conductas, controlar nuestras decisiones y nuestros cuerpos. Las leyes se votan y aprueban en el parlamento. Las mujeres queremos leyes que reconozcan nuestros derechos y respeten nuestra libertad. 1/2 No más ausencias por violencia. Manifiesto contra la violencia de género. 25 de noviembre 2010 - Actuar sobre la violencia machista supone actuar sobre las causas profundas que tienen que ver con la cultura, la educación, los valores. La igualdad es la única solución frente a la violencia contra las mujeres. Sin embargo para alcanzar la igualdad real aún queda un largo camino. - La situación se ha agravado para las mujeres en estos tiempos de crisis. La desigualdad en el ámbito laboral ha aumentado, porque las medidas de apoyo al empleo se han concentrado en los sectores tradicionalmente masculinos. Ni el impulso ni la protección al empleo femenino es un objetivo político. Además los recortes en servicios públicos afectan sobre todo a las mujeres porque son la mayoría entre las personas necesitadas de asistencia. - Con la crisis aumentan los comportamientos violentos y disminuyen las posibilidades económicas de las mujeres para escapar de ellos. Denunciamos que hay una contradicción entre el discurso de lucha contra la violencia hacia las mujeres mantenido por las instituciones, y la limitación de los recursos para los servicios de atención que estas mismas instituciones aprueban. - Los recortes en políticas de igualdad suponen un avance del machismo ante el que las mujeres nos rebelamos. Por ello rechazamos la desaparición de los organismos dedicados a impulsar la igualdad: el Instituto de la Mujer en la Región de Murcia y el Ministerio de Igualdad en el gobierno de España - En la vida de las mujeres desde la niñez hasta la edad adulta, siempre está la sombra oscura de la violencia, bien como amenaza, bien como realidad. Ante las atrocidades tenemos que tomar partido, el silencio estimula al verdugo. - Si querer es poder, ni queremos ni podemos consentir el desprecio a las mujeres, ni su utilización, ni su discriminación, ni su invisibilización. Hay que terminar con la venta y compra de mujeres y hay que cerrar el goteo de los crímenes machistas. ¡QUE NO SE PIERDAN LOS PASOS DE MÁS MUJERES! ¡NO MÁS AUSENCIAS POR VIOLENCIA! COMISIÓN 8 DE MARZO. REGIÓN DE MURCIA 2/2