repudio_ocupacion_estado_de_israel_3.pdf

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Que tan lejos está Palestina de Latinoamérica?
Que tan lejos el saqueo de tierras y recursos?
Que tan lejos el desplazamiento de argentinos por colonos ingleses
en Malvinas del de los palestinos por colonos israelíes?
Que tan lejos queda el secuestro, la violación,
la tortura y la muerte por parte del Estado
sobre la población civil?
Que tan lejos el estado terrorista argentino
del estado terrorista Israelí?
Que tan lejos quedan las bombas que estallan día a día en Gaza,
de las bombas que estallaron en la Amia?
Que tan lejos nos quedan los hombres y mujeres,
Niños, niñas y ancianas que mueren asesinados bajo los bombardeos en las plazas, en
las casas, en las calles?
Que tan lejos nos quedan
las organizaciones de resistencia popular de nosotros mismos?
La Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad de La Plata a
través de su Consejo Directivo, con representación de todos los claustros que componen
la institución, manifestamos el absoluto repudio a la ocupación ilegitima e ilegal del
territorio Palestino por parte del Gobierno Israelí desde hace mas de 47 años,
incumpliendo el mandato explicito de la ONU (Res. 181), y a los bombardeos y
agresiones que desde hace tiempo viene sufriendo el pueblo palestino y que ha
recrudecido durante estos últimos meses.
Repudiamos las metodologías de detención, tortura, violación (delitos sexuales) y
muerte de miles y millones de niños, niñas, mujeres y jóvenes palestinos que el Estado
israelí ejecuta desafiando todos los Acuerdos internacionales de Derechos Humanos
(acuerdo de Ginebra entre otros) que se han implementado desde la Segunda Guerra
Mundial a nuestros días. Prácticas genocidas que, como manifestara la Organización de
Naciones Unidas, apuntan entre otros objetivos, a una “limpieza étnica” que hoy,
paradójicamente, despliega el Estado Israelí sobre el pueblo palestino.
Repudiamos el intento del gobierno Israelí de destruir las iniciativas de consolidación
de un gobierno de unidad nacional palestino entre Hamas y Al Fataj, organizaciones
nacidas de la resistencia popular palestina. Fuerzas políticas y organizaciones que
trabajaron ardua y colectivamente para tener una voz reconocida entre las naciones del
mundo y terminar con las divisiones a las cuales han abonado tanto los servicios
secretos de inteligencia israelíes, como la Mossad entre otras.
Este Consejo Directivo, rechaza la manipulación y bloqueo informativo que está
ejerciendo el gobierno Israelí, y las agencias paramilitares y de seguridad, y mas
directamente el brutal bombardeo a la sede de televisión catarí Al Jazeera.
Estas acciones impiden que los periodistas y veedores internacionales y de
organizaciones de derechos humanos y humanitarias, puedan informar a comunidad
mundial sobre las acciones de expulsión, saqueo y exterminio que implementa el
Estado de Israel y que sufren los ciudadanos palestinos, desde hace muchos años y que
se ha agudizado en estos últimos meses.
Repudiamos esta manipulación informativa que utiliza el Estado Israelí, porque insulta
la historia del pueblo judío y la historia y la memoria de los pueblos del mundo. Esta
estrategia de manipulación que apunta a “culpar” a todos los pueblos de las atrocidades
que gobiernos dictatoriales, imperialistas y opresores desplegaron sobre el pueblo judío
y también sobre otros pueblos del mundo aun anónimos (como los pueblos originarios
de América latina, el pueblo armenio, entre tantísimos otros). Surge así el temor a ser
tachado de nazi o antisemita a quien se atreva a mostrar los sufrimientos del pueblo
palestino en manos del Gobierno Israelí igualando el Estado terrorista Israelí al Pueblo
judío. Estrategia que busca invisibilizar que son las mismas prácticas de exterminio que
se aplicaron sobre el pueblo judío y más de 30 millones de personas de distintos pueblos
europeos y del mundo.
Asimismo, este Consejo repudia la utilización que hacen los medios hegemónicos en
Israel y las potencias que la apoyan de la idea que las organizaciones de resistencia
palestinas buscan “destruir” el Estado de Israel para justificar las acciones genocidas del
Estado israelí contra el pueblo palestino. Afirmamos la convicción de que deben existir
los dos Estados (tal cual lo estableciera la Argentina desde el reconocimiento del Estado
israelí en 1948). Lo que está en riesgo es la existencia del Estado palestino como patria
de un pueblo y no al revés.
Esta Facultad repudia también la ya conocida metodología de colonización de territorios
palestinos que lleva adelante el Estado de Israel, y que tanto conocemos los pueblos
originarios latinoamericanos y de norte América. Metodología que implícale
desplazamiento de los habitantes originarios, la toma de sus territorios y la radicación
de colonos de origen extranjero, apropiándose de las tierras y los recursos. Repudiamos
esta acción que pretende apropiarse de la totalidad del territorio Palestino condenándolo
a ser un pueblo sin tierra. Metodología que los argentinos conocemos en carne propia
porque ha sido utilizada en Malvinas por el imperio inglés para expulsar a los
ciudadanos argentinos que habitaban las islas, financiando la radicación de Kelpers. Del
mismo modo que hoy, Estados Unidos financia a Israel para sostener esta invasión.
También queremos manifestar el repudio a la desobediencia reiterada del Gobierno
Israelí a respetar las distintas resoluciones de la Organización de Naciones Unidas
(ONU) del que nuestro país es miembro y también integra en el Consejo de Seguridad.
Repudiamos la ignorancia del Gobierno de Israel a los reiterados llamamientos de los
países que componen este organismo, al cumplimiento de las numerosas resoluciones
emitidas ante la gravedad de los métodos violentos del Gobierno Israelí: Resolución
181/, Resolución 194/48; Resolución 242/67; Resolución 338/73; Resolución 3379/75;
Resolución 446/79; Resolución 478/80; Resolución 497/81; Resolución 3236/74;
1322/2000; 1559/2004.
Repudiamos la amenaza armamentista que encarna Estado de Israel, quinta potencia en
el mundo, con una acumulación de armas nucleares y de sofisticado armamento de
destrucción masiva, porque sin dudas habla de una decisión política de resolución de
conflictos que contradice nuestros valores como pueblo y como miembros de la patria
grande: somos un pueblo que apunta a las iniciativas de dialogo y encuentro. Creemos
en el dialogo porque años de sufrimiento en nuestra propia piel nos han permitido
aprender sobre la violencia armada y su infinita crueldad, pero sobre todo porque estas
acciones no benefician a los pueblos sino solo a los opresores, a los imperios, a aquellas
potencias que insisten en enriquecer a unas elites a costa del saqueo, el despojo, la
usura, y la corrupción.
En concordancia con lo manifestado por nuestro gobierno nacional y por los gobiernos
de Venezuela, Chile, Ecuador y Bolivia convocamos a la sociedad toda, a los miembros
de esta comunidad académica y de la Universidad a manifestar su rechazo, de manera
contundente, a estas acciones genocidas contra el pueblo Palestino y a condenar las
practicas criminales del Estado de Israel y las complicidades de los Gobiernos que las
financian.
Este Consejo invita a todos los claustros a compartir con los estudiantes, los
trabajadores docentes, los trabajadores no docentes y la comunidad toda, el texto que
Rodolfo Walsh escribiera en 1974 “La Revolución Palestina”, para poder comprender la
dimensión de esta injusticia, el cual, tristemente, mantiene su actualidad en los análisis
sociales y políticos.
Finalmente, convocamos a las organizaciones sociales, políticas y académicas a generar
acciones de ayuda directa al pueblo palestino y sus organizaciones y, al mismo tiempo,
a generar acciones directas de resistencia pacifica a las políticas criminales del Gobierno
Israelí como la reciente
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