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DIPUTACIÓN DE VALLADOLID
Servicio de Asesoramiento Local
Por el Sr. Presidente en funciones de la Mancomunidad...... solicita de este servicio
informe jurídico relativo a un asunto cuyos antecedentes, según se desprende de la
documentación presentada, son los siguientes:
El artículo 9 de los Estatutos, al fijar la forma de elección del Presidente de la
Mancomunidad, establece que “será elegido por mayoría absoluta legal, por la Asamblea
de concejales entre sus miembros”, indicando que “si ningún candidato obtuviera mayoría
absoluta legal en la primera votación, se procederá a celebrar una segunda vuelta en el
término de dos días en la que serán candidatos únicamente los dos candidatos más
votados anteriormente, siendo elegido el que obtenga mayor número de votos.”
En la sesión constitutiva de la Mancomunidad, celebrada el día 30 de julio de 2011,
ninguno de los candidatos a la Presidencia de la misma obtuvo la mayoría absoluta que
exige el artículo 9 de los Estatutos. El día 1 de agosto se procedió a la elección del
Presidente mediante una segunda vuelta, obteniendo los dos candidatos el mismo
número de votos.
Ante la situación planteada se solicita informe sobre los siguientes aspectos:
1.- Forma de elegir al Presidente:
El procedimiento para elegir al Presidente de una Mancomunidad, no está recogido
en la Ley 5/1985, de 19 de junio, de Régimen Electoral General, (en adelante LOREG),
que sí regula como materia electoral la elección del Alcalde, del Presidente de la
Diputación Provincial y de los alcaldes pedáneos.
La LOREG ha dejado fuera del ámbito electoral la elección de los presidentes de las
mancomunidades cuestión que tampoco regula la legislación de régimen local, ni estatal
ni autonómica, y ello porque las mancomunidades, por ser asociaciones voluntarias de
municipios, deben dotarse a sí mismas de su propio régimen de organización y
funcionamiento, en el que se incluye la elección de su Presidente y, en general, la
formación de sus órganos de gobierno. Por este motivo hay que acudir a lo previsto en los
estatutos de la Mancomunidad que, en este caso, como ya se ha indicado, sí regulan un
procedimiento de elección pero no efectúan previsión para el caso de que se produzcan
empates.
Para resolver esta laguna de los estatutos lo procedente es buscar la solución en la
normativa aplicable para un supuesto análogo o similar y estos supuestos similares son
los contenidos en la LOREG, para la elección de Presidente de otras entidades locales.
La procedencia de aplicar la LOREG a la elección de Presidente y Vicepresidente de
una Mancomunidad ha sido declarada por el Tribunal Supremo en sentencia de 4 de
febrero de 2003 (si bien no se trataba de un supuesto exactamente igual al que ahora
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tratamos), señalándose en la misma que con ello “se resuelve la cuestión planteada en
plena conformidad con el Ordenamiento, partiendo, como es exigido, de que el
Ordenamiento es un todo, que ha de posibilitar la solución de las cuestiones no
expresamente previstas en un precepto o norma concreta.”
Admitida la aplicación de la LOREG para suplir la laguna existente en los estatutos,
se trata ahora de ver qué soluciones se prevén para los supuestos de empate, que
puedan servir para resolver la situación de la Mancomunidad ........
Por lo que se refiere al procedimiento para la elección de Presidente de la
Diputación (artículo 207) tampoco contempla soluciones al empate, puesto que
únicamente señala que el candidato debe obtener mayoría absoluta en la primera
votación y simple en la segunda.
Sin embargo, el procedimiento para la elección de Alcalde de la LOREG, regulado
en el artículo 196 de la misma, recoge la previsión de que “en caso de empate se
resolverá por sorteo”. Este artículo sí aporta una fórmula que puede ser válida para
resolver el empate producido en la elección del Presidente de la Mancomunidad, y por
tanto cabe aplicarlo analógicamente y practicar un sorteo.
No obstante, se considera de interés señalar que la Junta Electoral Central, que sí
se ha pronunciado en los casos de empate en la elección del Presidente de la Diputación
porque esto sí es materia electoral, ha entendido que este artículo 196 se puede aplicar
analógicamente de diferentes formas:
En determinados acuerdos, la Junta resuelve que el empate debe resolverse por
sorteo, aplicando analógicamente a este supuesto lo previsto en el apartado c) del artículo
196 de la LOREG. (acuerdos de 30-6-1987; 3-7-1987 y 25-9-1987).
Sin embargo cambia su criterio en el acuerdo de 2-7-1995, (reiterado en acuerdos de
24-5-1999 y 3-6-1999) y aplicando también por analogía el artículo 196 c) de la LOREG,
señala que, en caso de empate, habrá de atribuirse dicho cargo al candidato
perteneciente a la entidad política que más puestos de Diputado Provincial haya obtenido
en la Provincia y, de persistir el empate, a la entidad política que más votos haya obtenido
en la Provincia y, si aun así persistiera el empate, se resolverá por sorteo.
Si se aplicara a la elección del Presidente de la Mancomunidad este segundo criterio
fijado por la Junta Electoral Central para las Diputaciones, habría de resolverse el empate
atribuyendo la presidencia al candidato perteneciente a la entidad política que más
puestos de vocal haya obtenido en la Mancomunidad, en caso de empate al candidato de
la entidad política que más votos hubiera obtenido en el ámbito territorial que forma la
Mancomunidad y, si persistiera el empate, habría que ir al sorteo.
Debe tenerse en cuenta que este criterio de la Junta Electoral Central no es
vinculante para la Mancomunidad, puesto que, se trata de un órgano perteneciente a la
“Administración Electoral”, que resuelve consultas relativas a la materia electoral y, como
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ya hemos indicado, la elección del Presidente de la Mancomunidad no es materia
electoral sino que pertenece al régimen jurídico y organizativo de la misma, del que se
debe dotar a través de los Estatutos.
Por tanto debe ser la propia Mancomunidad la que, mediante un acuerdo de la
Asamblea, determine qué fórmula se va a utilizar para resolver el empate, integrando así
la laguna existente en su régimen de funcionamiento y procediendo posteriormente a
modificar los estatutos estableciendo una previsión para los supuestos de empate que
puedan producirse en el futuro.
2.- Forma de elegir al Vicepresidente, Tesorero, y miembros del Consejo Directivo,
ya que es previsible que se vuelvan a dar situaciones de empate.
De conformidad con los estatutos, tanto para la elección del Vicepresidente, como
para la elección de los miembros del Consejo Directivo, se debe seguir el mismo
procedimiento que para la elección del Presidente, esto es, elección por la Asamblea de
concejales, debiendo obtenerse mayoría absoluta en primera votación o mayoría simple
en segunda y sin hacer tampoco ninguna mención a los supuestos de empate.
Para la elección de estos cargos, una vez elegido Presidente, los supuestos de
empate en la segunda vuelta, al requerirse mayoría simple, pueden ser resueltos
mediante el voto de calidad del propio Presidente.
Por lo que se refiere al nombramiento de Tesorero, establece el artículo 17 de los
estatutos que será un miembro de la Asamblea de concejales, que debe tener, además, la
condición de miembro del Consejo Directivo y que será elegido por la propia Asamblea.
No exige este artículo mayoría absoluta para la elección, por lo que debe entenderse que
sólo se exige mayoría simple y, por tanto, en caso de empate, decidirá el voto de calidad
del Presidente.
En todos los acuerdos que deban adoptarse por mayoría simple, los empates
deberán resolverse por el sistema previsto en el artículo 100.2 del Reglamento de
Organización y Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales, que señala:
“En caso de empate se efectuará una nueva votación, y si persistiera el empate, decidirá
el voto de calidad del Presidente”.
3.- Forma de actuar para disponer de fondos la Mancomunidad para los gasto
ordinarios de la misma ya que en la actualidad no existe el cargo de Tesorero.
El Presidente en funciones explica en el escrito de petición de informe que el vocal
que desempeñaba las funciones de Tesorero en la actualidad no es vocal de la
Mancomunidad.
La legislación de régimen local, en la escasa regulación que hace sobre las
mancomunidades, no contiene ninguna referencia expresa a este tipo de soluciones.
Deben ser los estatutos, como norma que contiene el régimen de funcionamiento de las
mancomunidades, los que establezcan previsiones sobre la forma de actuar en los
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periodos de interinidad tras la celebración de elecciones locales, tanto para el caso de
que, aun no se hayan nombrado vocales por los municipios, como para cuando habiendo
sido nombrados, existe alguna razón por la que todavía no se han podido elegir los cargos
de la Mancomunidad.
Los estatutos de la Mancomunidad ...... no establecen ninguna previsión al respecto
por lo que, por razones de operatividad, y hasta que la situación se resuelva, debe
buscarse una solución para que alguien ejerza las funciones de Tesorero y no se paralice
la disposición de fondos.
Una posibilidad es que se designe un nuevo Tesorero por la Asamblea, aunque
cuenta con el inconveniente de que, si existe empate, no puede operar el voto de calidad
del Presidente, hasta tanto éste sea nombrado.
Si lo anterior no es posible, se podría entender que se encuentra “en funciones” el
Tesorero anterior. Es cierto que ya no es vocal de la Mancomunidad pero también es
cierto que fue designado por la Asamblea para ser Tesorero y cabe entender vigente esa
designación hasta que se nombre otro vocal para sustituirle dada la trascendencia de las
funciones que tiene encomendadas, y sin que ello implique que pueda participar como
vocal en la Asamblea. En todo caso, debería ser la Asamblea de concejales la que, ante
la imposibilidad de nombrar Tesorero, tomase el acuerdo de considerar que se encuentra
“en funciones”.
Valladolid a 29 de agosto de 2011