REPÚBLICA ARGENTINA VERSIÓN TAQUIGRÁFICA CÁMARA DE SENADORES DE LA NACIÓN REUNIÓN DE LA COMISIÓN DE PRESUPUESTO Y HACIENDA Salón Manuel Belgrano 26 de julio de 2005 Presidencia del señor senador Capitanich 2 3 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda — En el Salón Manuel Belgrano del H. Senado de la Nación, a las 15 y 13 del martes 26 de julio de 2005: Sr. Presidente (Capitanich). — Damos inicio a la reunión de la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Hemos cursado invitaciones para también realizar un plenario con las comisiones de Defensa Nacional y de Relaciones Exteriores y Culto con el objeto de tratar el proyecto de ley en revisión, C.D. 137/04, sobre procuración de medios para la defensa. Inicialmente, nosotros pretendemos el tratamiento del expediente C.D. 41/05 que se refiere a un proyecto de ley en revisión por el que se modifica la ley de Impuesto al Valor Agregado, texto ordenado 1977 y sus modificatorias, respecto de las ventas y las importaciones definitivas de fertilizantes químicos para uso agrícola. Hemos cursado invitaciones a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos, al ingeniero Miguel Santiago Campos, quien ha enviado la representación correspondiente por no poder estar presente; al asesor del administrador Federal de Ingresos Públicos, contador Roberto Sericano, que ya se encuentra con nosotros; y también al secretario ejecutivo de la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos, doctor Carlos Capparelli. También hemos cursado invitación a la Comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca de esta Honorable Cámara, en virtud de que la Comisión de Presupuesto y Hacienda ha sido la única comisión receptora de este proyecto, no obstante lo cual entendemos que es de incumbencia del área de esa comisión. Por eso está presente la señora senadora Silvia Gallego, de la provincia de La Pampa. Lamentablemente, nosotros hoy tenemos que afrontar una dificultad técnica derivada del paro de pilotos de líneas aéreas, principalmente de una compañía aérea, que impide que muchos de nuestros compañeros senadores puedan estar presentes en la reunión. No obstante, por ello hemos efectuado la convocatoria. El sistema es extremadamente transparente porque estas reuniones se transmiten por el Canal del Senado, se está tomando la versión taquigráfica correspondiente y está en funcionamiento el audio derivado de esta reunión de comisión. Por lo tanto, creemos que es absolutamente necesario y oportuno efectuar el tratamiento de los proyectos y por ello hemos invitado a los expositores en el día de hoy. También vamos a considerar el expediente C.D. 13/05, que es un proyecto de ley en revisión por el que se sustituyen los artículos 18 y 19 de la ley 24.769, que en general son modificaciones al texto correspondiente. Como ya lo hemos debatido mucho en la Comisión, vamos a hacer circular el dictamen a los miembros. Tenemos diferencias interpretativas respecto de la modificación de la ley 25.246, que tiene que ver con los activos provenientes de ilícitos y las reformas de los artículos 277 y 278 del Código Penal. Al respecto, tenemos en consideración un dictamen alternativo para que pueda ser oportunamente debatido en la próxima reunión. Nosotros vamos a hacer circular este proyecto de dictamen a los señores senadores miembros de la Comisión de Presupuesto y Hacienda. A su vez, hay otros dos proyectos de dictamen. Se trata del expediente C.D. 127/04, que es un proyecto de ley en revisión sobre cancelación de obligaciones a favor de los ex trabajadores de Altos Hornos Zapla; y del expediente C.D. 139/04, que es un proyecto de ley en revisión sobre Programa de Propiedad Participada de ex agentes de SOMISA. También tenemos proyectos de comunicación: expediente S. 2070/05, proyecto de comunicación del señor senador Salvatori y otros, por el que se otorga un subsidio a la 4 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda Fundación de Estudios Patagónicos; expediente S. 2123/05, proyecto de comunicación del señor senador Morales por el que se solicitan informes sobre las acciones realizadas en relación con la implementación de la ley del cheque; expediente S. 2125/05, proyecto de comunicación del señor senador Morales por el que se solicitan informes sobre las decisiones administrativas del jefe de Gabinete de Ministros, en virtud de las facultades otorgadas por la ley 25.967; expediente S. 2160/05, proyecto de comunicación de la señora senadora Paz y otros señores senadores por el que se solicita se incremente la partida presupuestaria correspondiente al SENASA en el proyecto de ley de presupuesto para el período 2006. Otra reunión conjunta que teníanmos prevista con las comisiones de Ambiente y Desarrollo Sustentable y de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología para considerar el expediente S. 1422/05, referido a un proyecto de ley de las señoras senadoras Lescano e Isidori por el que se crea el Plan Nacional de Manejo Sustentable de Residuos Provenientes de Aparatos Eléctricos y Electrónicos, fue postergada para otra fecha. Por lo tanto, vamos a dar inicio al tratamiento del temario previsto por la Comisión. En primer lugar, le doy la palabra al secretario ejecutivo de la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos, doctor Carlos Capparelli. También quisiera decirles que muchos de los señores senadores miembros de la Comisión se han comunicado con nosotros, como los senadores Jenefes, Morales y Sanz porque han tenido inconvenientes para abordar el vuelo. O sea, varios señores senadores han tenido inconvenientes para tomar su vuelo. Tratando de ser extremadamente sintético, diré que este proyecto de ley se refiere la reducción del IVA del 21 por ciento al 10,5 por ciento respecto de fertilizantes y tiene una disminución en el costo de los insumos incorporados al proceso de fertilización por parte de los productores agropecuarios, no generando costo fiscal derivado de la reactivación, desde el punto de vista de la actividad económica, para la gravabilidad del crédito fiscal. Consiguientemente, se va a tratar este proyecto en detalle porque hay una observación que me gustaría que después podamos aclarar enseguida, que tiene que ver con una opinión del senador Celso Alejandro Jaque, que también se comunicó telefónicamente porque tuvo el mismo problema de vuelo que los otros señores senadores, respecto de la no incorporación de fertilizantes azufrados —que es el tema de sulfato de calcio—, reconocido como tal por el SENASA, en virtud de que esto tiene impacto para las producciones regionales que vinculan a la provincia de Mendoza, a la región de Cuyo. Al respecto, hemos efectuado los análisis técnicos correspondientes y hemos pedido el informe de las áreas competentes. Aquí se ha determinado una redacción y también hemos visto la versión taquigráfica de la Cámara de Diputados en sus respectivos debates, en donde con precisión se hace referencia a fertilizantes químicos de uso agrícola, porque son aquellos que contemplan aproximadamente el 95 por ciento de la demanda generada para su uso. Es lo que facilita el sistema de control y fiscalización por parte de la Administración General de Ingresos Públicos. Obviamente, esto se ha debatido muy bien. Tendremos oportunidad de plasmarlo con mayor precisión en el debate. Esto es importante en virtud de que la modificación que se hace a la Ley de I.V.A. tiene que ver con una incorporación del inciso l), a continuación del artículo 28 de la ley y sus modificatorias. Le damos la palabra al ingeniero Capparelli. Tiene doce minutos para la exposición, que puede extenderse en virtud de preguntas y ampliaciones. 5 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda Sr. Capparelli. — Como sabemos, el mundo tiene cada día más habitantes. Este año vamos a llegar aparentemente a 6.500 millones. La necesidad básica a cubrir es la de los alimentos. Todo el mundo está reclamando alimentos, especialmente en América Latina, y no sólo alimentos de cualquier tipo sino alimentos más elaborados. La Argentina está cada día más preparada para entregar al mundo esos alimentos elaborados. China e India, por ejemplo, en donde nuestro comercio de exportación ha crecido diez veces en los últimos diez años, tienen el 37 por ciento de la población mundial. Para la exportación de alimentos tenemos una estrategia que la Secretaría de Agricultura está cada día promocionando más. Pero lo que no tenemos es una clara conciencia como país de que exportar alimentos es exportar nutrientes. Los nutrientes, en general, son minerales. O sea que lo que estamos haciendo es minería sobre nuestros campos. La minería sobre nuestros campos toca a los nutrientes, que evidentemente son recursos tan poco renovables como el petróleo, el gas o el agua dulce. Para que el suelo nos alimente, tenemos que alimentar a nuestro suelo. Veamos un poco de historia. La evolución de la producción anual de granos de la Argentina a partir de 30 millones de toneladas creció hasta ubicarse en este año 2005 en alrededor de 84 millones de toneladas. Ese crecimiento fue, antes que nada, por un aumento de la superficie sembrada, que pasó de 21 millones de hectáreas sembradas a casi 30 millones de hectáreas. Pero, fundamentalmente, se debió al aumento del rinde por hectárea, lo cual se dio por la incorporación de tecnología: mejores semillas, mejor previsión meteorológica, más fertilizantes, mejores agroquímicos. En general, un mejor trato del campo que hoy en día es nuestro principal negocio como país. Pero fundamentalmente ha crecido porque hemos utilizado más fertilizantes en el curso de estos años. Como se puede ver en la proyección, el consumo de fertilizantes parte del orden de las 300.000 toneladas hace quince años, hasta 2.571.000 toneladas en año 2004. Si se fijan, la curva de crecimiento de la producción anual de granos es bastante similar a la curva de crecimiento del consumo de fertilizantes. ¿Cómo es el consumo de fertilizantes? Europa, Asia y Norteamérica son los principales consumidores de fertilizantes. Después sigue América Latina, donde el principal consumidor es Brasil, con un consumo de 22 millones de toneladas, o sea, alrededor de nueve veces lo que consumimos nosotros. Ha llegado a consumir 25 millones toneladas. Argentina consume un 0,7 por ciento de los fertilizantes. La producción mundial de fertilizantes es muy similar. Asia está primero, después, están Europa y Norteamérica. Y, por últimos, nos encontramos con África, donde están los principales yacimientos de fosfatos, y América Latina, donde nuevamente descolla Brasil. Como se ve, el consumo en esta zona es de alrededor del 3,3 por ciento. Para realizar una comparación, tenemos el consumo mundial de fertilizantes y la producción mundial de fertilizantes. Estamos hablando de 300 millones de toneladas de fertilizantes entre los tres fertilizantes principales en todo el mundo. Podemos ver que Asia y América Latina son regiones netamente importadoras de fertilizantes y que Europa y Norteamérica son regiones exportadoras. Allí se producen más fertilizantes que los que se consumen. En el gráfico que se proyecta he querido separar a la Argentina de América Latina y lamentablemente lo he tenido que pintar de negro porque como es tan poca la producción y el consumo que tenemos, no se diferenciaba. Pero a pesar de consumir solamente el 0,7 de los fertilizantes, estamos produciendo el 3,5 por ciento de los granos que se producen en el mundo. Considerando nuestra 6 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda población, estaremos produciendo para este año 2005, 2.200 kilos de granos por persona, mientras que el resto del mundo tiene un promedio de 400 kilos. ¿Cómo tratamos a la fábrica donde producimos nuestra principal exportación? Aparentemente no la estamos tratando muy bien, porque reponemos solamente el 27 por ciento del nitrógeno que extraen nuestras cosechas. Haciendo minería estamos extrayendo 1.400 millones de dólares de nitrógeno y devolviéndole sólo 400. En fósforo reponemos el 37 por ciento. Tenemos una extracción total de 600 millones de dólares y una reposición de 200 millones de dólares. Potasio prácticamente no reponemos nada, pero por el momento aparentemente nuestros campos tienen. En el caso del azufre, es un rubro que está creciendo rápidamente, porque la soja y el maíz son principales demandantes de azufre. El fertilizante tiene un precio en dólares porque es un insumo de tecnología internacional. Eso no se define en nuestro país sino en los principales centros de consumo y producción. Podríamos decir que es caro. ¿Pero realmente lo es? Si tomamos la producción de este año 2005 de soja, maíz, trigo y girasol a valores internacionales, o sea, a valor país, que es lo que interesa, esos cuatro cultivos van a implicar alrededor de 15.100 millones de dólares de producción. Estamos destinando 600 millones de dólares para fertilizar nuestros cultivos, o sea, estamos destinando el cuatro por ciento de nuestro ingreso bruto a fertilizantes. En realidad, el pago del fertilizante lo realiza el productor, que no accede a los precios internacionales sino a un precio puerto. Si sumamos estas producciones, el productor accede a 10.800 millones de dólares de valor bruto puerto condiciones cámara de los granos que produce. Esto significa que los 600 millones de dólares que estamos invirtiendo en fertilizantes como país, a los productores les cuesta un poco menos del 6 por ciento de lo que recibirán en total. Y decimos que están haciendo minería porque no lo podemos llamar de otra manera, y representa el 15 por ciento del ingreso total. Aparentemente 4 ó inclusive 5,5 por ciento no son valores trascendentes. Debemos aclarar que el maíz y el trigo, sobre lo que la revista Márgenes Agropecuarios habla de un consumo de 200 kilos por hectárea —estimativamente como recomendable— generan este consumo del orden de los 600 millones de dólares. Pero si los 200 kilos que usamos en maíz y trigo y lo multiplicamos por las 30 millones de hectáreas que estamos haciendo de granos, podemos darnos cuenta que significaría que en lugar de 2 millones de toneladas destinadas a estos cultivos el año pasado, habríamos colocado en nuestro suelo 6 millones de toneladas de fertilizantes. Por lo tanto, la problemática es que no estamos utilizando en todos nuestros cultivos y áreas el fertilizante correspondiente. Si usáramos esos 200 kilos, en realidad no habría ningún tipo de minería. Brasil, que produce bastante más granos que nosotros, está utilizando alrededor de 300 kilos de fertilizantes por hectárea en la mayor parte de sus cultivos, incluso en la soja. O sea, en Brasil esta minería no existe. La ley de la que estamos hablando establece una rebaja del impuesto al valor agregado en el mercado de fertilizantes. El mercado de fertilizantes fue de 870 millones de dólares en el año 2004, que es el último sobre el que tenemos dados. De este mercado, en función de la clasificación de fertilizantes químicos que tiene el SENASA —es una clasificación por naturaleza—, 820 millones de dólares son los denominados fertilizantes químicos por su naturaleza y alrededor de 50 millones de dólares el resto de los fertilizantes, entre otros las enmiendas, que son los famosas yesos y cales. 7 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda Evidentemente esta ley, con el fin de facilitar el control, el orden de este beneficio por parte de la AFIP, dado que le va a costar revisar y mantener controlado, se refiere exclusivamente a los fertilizantes químicos. En realidad, se está refiriendo a un beneficio para el agro del orden del 95 por ciento. Desde el punto de la cámara, si bien algunos de nuestros asociados también producen yesos y fertilizantes aeróbicos, consideramos que es un excelente beneficio para el agro lograr que el 95 por ciento de los fertilizantes que use el agro tengan el beneficio de una menor erogación financiera, que en realidad es lo que más le preocupa al productor agropecuario. No es que le preocupa un costo del 5,5 por ciento sino la erogación financiera que se puede realizar. Si en algún momento determinado se puede llegar a extender este beneficio a todo el resto de los fertilizantes, bienvenido, pero tenemos que entender que es un beneficio que otorga la AFIP y que evidentemente no resulta muy sencillo llevarlo adelante. El mercado de fertilizantes es de 2.340 millones de pesos. Esto implica que el productor agropecuario pagó un mínimo el año anterior del orden de los 500 millones de pesos. El beneficio del que se está hablando otorgar es del orden de los 250 millones de pesos, es decir, la rebaja del IVA a la mitad. Estos 250 millones de pesos el productor normalmente canjea por granos. El grano se liquida junto con la factura del fertilizante, o sea, en ese momento no hay un perjuicio específico para la AFIP, con lo cual el costo a nivel nacional es una financiación a largo plazo de 125 millones de pesos. El beneficio para el productor es de 250 millones de pesos, tanto si tiene que pagar pesos o entregar granos. Sería muy difícil determinar cuál será la mayor propensión al consumo de fertilizantes. Pero si se llegaran a consumir 140 mil toneladas más de fertilizantes, o sea, 5 por ciento más, gracias a este 10 por ciento de beneficio, un análisis agronómico indicaría que estas 140 mil toneladas pueden generar una mayor producción de alrededor de un millón de toneladas de granos adicionales a las 84 millones de adicionales que tenemos. Por lo tanto, toda la cadena entera, esto es, país, productores, acopios, fletes, etcétera, tendría un ingreso adicional de aproximadamente 600 millones de pesos, y se daría la casualidad o no de que la recaudación sobre esos 600 millones de pesos superaría al aporte financiero que realiza el Estado. Hay un paradigma trascendente: lo que se invierte en fertilizantes genera más volumen de granos, una mayor actividad económica y casualmente, con el esquema impositivo actual, el costo íntegro del fertilizante se paga con los impuestos que recauda el Estado. Reitero, el costo íntegro de fertilizantes se paga con los impuestos que recauda el Estado. O sea, estas 140 mil toneladas de fertilizantes al precio del año pasado cuestan 125 millones de pesos. Sr. Presidente. — Le agradecemos mucho su exposición. ¿Algún señor senador desea hacer uso de la palabra? Aprovecho para hacerle una pregunta sobre los fertilizantes azufrados, el sulfato de calcio, sobre lo que hay una observación. Sr. Capparelli.— Esos son los fertilizantes minerales usualmente denominados yesos. En este momento el IRAM está intentando definir —creo que lo logrará en los próximos meses— una pauta para considerar a los yesos como enmiendas o fertilizantes. Todavía no está definido. La diferencia entre los fertilizantes químicos es que tienen materias primas específicas, orígenes específicos; la mayor parte son importados con un clarísimo control de la pate de Aduana de la AFIP, mientras que los yesos y fertilizantes minerales recién ahora se está empezando a definir cuál será la legislación que regirá sobre ellos. Tienen múltiples orígenes y calidades en todo el país. 8 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda Sr. Presidente.— ¿Para qué se usa el sulfato de calcio, desde el punto de vista de abonos? Sr. Capparelli.— El sulfato de calcio es yeso —aclaro que soy contador— y tiene dos usos: uno es una enmienda, en el caso de los campos que tienen exceso de sal, y el otro es azufre —también genera aporte de azufre— que se puede llegar a utilizar para la soja. Pero todavía no está claramente definido cuál es el esquema de uso en los yesos. Varias empresas de la cámara que represento venden yesos o sulfato de calcio o el nombre que se le esté dando en este momento. Sr. Presidente.— No sé si hay alguna otra observación. Entonces, damos lugar a que el señor Roberto Sericano, en representación de la Administración Federal de Ingresos Públicos, brinde su opinión al respecto. Sr. Sericano.— En realidad, las aclaraciones que se hicieron recién fueron lo suficientemente explicativas o abarcativas como para no generar ningún tipo de observación. Yo también soy contador, de manera que de fertilizantes no entiendo. Con respecto a los yesos hay un viejo decreto que hace dos definiciones: una de fertilizantes y otra de enmiendas, diciendo que las enmiendas no son fertilizantes y, por lo tanto, los yesos y la cal están incluidos dentro de lo que supuestamente son estas enmiendas, con lo cual no estarían comprendidos dentro de esta definición de fertilizantes específicamente. Vuelvo al tema de la supuesta preocupación que puede tener la AFIP, que más que nada está referida a la devolución que hay que hacer, prevista en el segundo párrafo del inciso que se incorpora. Cuanto más concreto y más definido sean los fertilizantes, vamos a saber exactamente cuáles son las empresas que producen esos bienes y, por lo tanto, generar un sistema de evolución rápida, que es en principio lo que constituiría el beneficio real hacia los productores. Si la devolución se difiere en el tiempo, significa un costo financiero para la fábrica de fertilizantes, que después se traslada a los precios, lo cual generaría ineficiencia en lo que puede llegar a ser esta suerte de sacrificio que tanto implica la rebaja del IVA a la mitad en el caso de fertilizantes. ¿Por qué es esta devolución? Porque, en general, creemos que los fertilizantes químicos tienen un componente de costo —el gas— que está gravado al 27 por ciento. Si el producto final está gravado al 10,5 por ciento, se generaría un saldo a favor permanente. Por eso la preocupación es definir o dejar circunscripto específicamente los químicos. De esta manera uno sabe exactamente cuáles son las empresas que están involucradas y, por lo tanto, puede establecer este régimen de devolución rápida. Otra observación no tendríamos. Sr. Presidente. — Yo le hago una, nada más. Cuando se produce esta modificación al artículo 28 se hace el agregado del inciso l), se plantean las ventas, las locaciones previstas en el artículo 3° y las importaciones; esto tiene un gran componente de importaciones. En general, las ventas de producción nacional tienen una menor incidencia en términos relativos. ¿A qué se refieren básicamente las locaciones de servicios? Sr. Sericano. — Haciendo una interpretación muy finita, nosotros no estamos de acuerdo en que sean incluidas. Pero por locación se entiende cuando se hace un encargo de elaboración de algún producto. Entendemos que en definitiva no va a implicar demasiada complejidad para el tema. Si suponemos que la locación es el encargo de la elaboración de un producto, en general los componentes de ese producto van a estar gravados al 10,5 por ciento, para producir un bien final que también va a estar gravado también al 10,5 por ciento, razón por la cual no va a haber necesidad de producir ningún tipo de devolución. 9 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda Sr. Presidente. — La aplicación del artículo 43 tiene que ver con la siguiente situación: uno antes tenía una relación de 21 por ciento contra 21 por ciento en materia de crédito y débito fiscal. Ahora, esa relación pasaría de 21 por ciento a 10,5 por ciento. Lo digo para la aplicación del artículo 43. En general se toma sobre la base de los saldos definitivos emergentes del cálculo sobre la base de la alícuota original más la alícuota modificada. Sr. Sericano. — El saldo técnico se transforma en saldo de libre disponibilidad. En general, el problema más serio es con los que tienen el 27 por ciento por el gas, que es el componente más importante. Cuando la relación era de 27 a 21 por ciento, como el mercado aumentó, uno podía recuperar. Pero ahora que la relación es de 27 a 10,5 por ciento, resulta bastante más difícil. Sr. Presidente. — Se han sumado a la reunión el senador Salvatori y la senadora Curletti. Tiene la palabra la señora senadora Gallego. Sra. Gallego. — La pregunta tiene que ver específicamente con el contrato de locación de obras. Cuando se habla de la locación de obras, ¿se está hablando de la solicitud de la elaboración de un nuevo producto químico o de una locación de obras que tiene que ver con el servicio de la aplicación del producto? Sr. Sericano. — Se está hablando de la elaboración de un nuevo producto, que está específicamente definido. Sr. Presidente. — Exactamente la definición es locación de obras. Esto es muy importante aclarar, porque es una diferencia cualitativa esencial, que no se trata de un sistema de locación de servicios de fertilización derivado del uso de una maquinaría determinada. Creo que es muy importante transmitir el concepto de locación, la interpretación. Esto merecería por parte de ustedes de alguna reglamentación expresa. Sr. Sericano. — En el segundo párrafo, cuando se habla de la transformación del saldo técnico de libre disponibilidad, dice "las ventas e importaciones". Sr. Presidente. — Si no hay más preguntas, le damos la palabra al señor Portillo, que ha venido de la Secretaría de Agricultura. Sr. Portillo. — Soy director de Economía Agraria de la Secretaría de Agricultura. Para nosotros este es un proyecto desde hace tiempo por dos cuestiones centrales. Una tiene que ver con la actividad agropecuaria vinculada al tema de la sostenibilidad de la producción, por lo que se planteaba respecto de extracción de recursos versus aportes que se le hacen al sistema. Nosotros consideramos que esta ley va a impulsar el uso de fertilizantes en el país. Cuando uno compara en términos internacionales el uso de fertilizantes, advierte que en Argentina el consumo es muy bajo. Por eso consideramos que con incorporaciones de fertilizantes se pueden lograr importantes rendimientos. Esto es desde el punto de vista global. Desde el punto de vista particular, desde la Secretaría de Agricultura hemos estado abogando desde hace tiempo sobre la situación particular de las empresas agropecuarias. Algún tiempo atrás hubo una modificación en las ventas de productos agropecuarios — especialmente de cereales y oleaginosas—, que fueron gravados con el 10,5 versus el grueso de los insumos que estaban gravados al 21 por ciento. En general se presentaba el problema de generar saldos a favor, que en muchos casos eran de difícil recuperación. Este era un problema mucho más serio, por fenómenos de carácter climático o algún inconveniente de las empresas. Eran saldos de difícil recuperación. Entonces, en cultivos como el maíz esto es central en la ecuación de los números. Por lo tanto, consideramos que la rebaja del 21 al 10,5 por ciento va a tener muchos 10 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda efectos beneficiosos para las empresas. Respecto del costo fiscal, aspecto sobre el cual se mencionaron algunos números globales, creo que es oportuno que los señores senadores también tengan presente que lo que produce el sector agropecuario son productos intermedios. Se trata de balances de débitos y créditos, con lo cual este costo fiscal tiene un carácter financiero pero no económico. Por consiguiente, es importante analizarlo, porque se decía en la introducción, el costo fiscal es muy bajo respecto de la medida. En general, tal cual está planteado, es un proyecto que ha tenido amplio apoyo dentro del Ministerio de Economía y Producción en su conjunto, ya que fue tratado en el seno del gabinete productivo, donde está el señor ministro de Economía y los secretarios de las diferentes áreas. Asimismo, creo que es importante la salvedad que se ha hecho respecto de la devolución cuando se generen saldos a favor para las empresas fabricantes de fertilizantes químicos. Vamos a poder establecer en la etapa de la reglamentación de la ley todos los mecanismos de manera que la cadena funcione armónicamente sin los problemas de saldos que se puedan generar en ninguno de los componentes de la cadena. Sr. Presidente. — Tiene la palabra la señora senadora Curletti. Sra. Curletti. — En primer lugar, tendría que pedir disculpas porque el primer acceso a la documentación lo tuve hoy, pero no por deficiencias de la Comisión sino porque me reintegré recién, motivo por el cual no pude estudiar el tema. Desde el punto de vista de lo fiscal, de lo que pude ver de lo económico, no tengo reservas. Sí me preocupa un aspecto que se refiere al tratamiento integral del sector agrícola, y dentro del sector agrícola el tema de los fertilizantes, y dentro de los fertilizantes el destino de la agricultura orgánica. Usted muy bien dijo que con relación a muchos países no somos los que menos fertilizante consumimos, porque tendríamos que hacer otro tipo de estudio. Hay economías regionales en las que los fertilizantes son muy escasos, pero también están vinculados al tipo de producto. Decía que me preocupa porque mundialmente hay una tendencia a preservar la agricultura orgánica. Entonces, mi pregunta es la siguiente: ¿ustedes desde Agricultura están visualizando programas que alienten la agricultura orgánica para que Argentina se pueda posicionar competitivamente, adelantándonos a las nuevas tendencias mundiales en ese sentido? Sr. Portillo. — Cuando trabajamos en este proyecto se prestó especial atención a este tema. Desde la Secretaría de Agricultura, en forma conjunta con el SENASA, se estaba trabajando en buscar estos umbrales del uso de fertilizantes químicos versus no uso. Estamos impulsando la creación de programas, en donde se atiendan estos nichos de orgánicos. Hoy el grueso del mercado mundial son commodities, y casi en todos los commodities cuidan más el tema de los rendimientos. Ahora bien, este equilibrio entre lo orgánico y el uso de fertilizantes en general es un equilibrio que estamos tratando de cuidarlo en dos frentes. Por el lado productivo, pero también nos estamos cuidando en el frente de las negociaciones internacionales. Sí hay un par de programas específicos en los que el señor secretario está trabajando. Incluso me acompaña la directora de Agricultura de la Secretaría, que es unas de las responsables de algunos de estos temas. Sí es una preocupación que nosotros también tenemos. Sra. Curletti. — Sobre todo las experiencias en México, que si bien son históricas, 11 27 de julio de 2005 Comisión de Presupuesto y Hacienda determinan que el resultado, habiéndose quintuplicado el rendimiento del maíz, siempre fue en base a fertilizantes, con los cuales se agravó no sólo la dependencia tecnológica sino también la química. En definitiva, debemos ver en qué medida nosotros podemos preservar dentro de un principio ecológico lo que para nosotros puede resultar (...). Sr. Portillo. — Sí, existe un espacio fuerte. Creo que acá hay que vincular esto a una cuestión de técnica, pero la utilización de los híbridos de maíz no fue acompañado por el resto de las tecnologías. En consecuencia, hay variedades de maíz que se pueden utilizar, con los cuales se obtienen casi el mismo rendimiento que con un híbrido. Y la realidad es que en el proceso de base tecnológico que hoy uno podría ver en la soja cómo paquete integral, en el caso de maíz fueron bastante divorciadas las tecnologías. Sr. Presidente. — Muchísimas gracias, licenciado Portillo. Y con este tema damos por concluidas la parte de exposiciones. No sé si algunos de los señores senadores va a emitir opinión. Nosotros vamos a poner en consideración un proyecto de dictamen, si manifiestan acuerdo para suscribirlo, tanto para el tema de la modificación del artículo 18 y 19 de la ley 24.189, que ya ha tenido profundas discusiones en esta Comisión, y también esta modificación se propicia con la inclusión del inciso n) del artículo 28 de la ley del impuesto al valor agregado. Están los expedientes para su circulación, tanto los proyectos de comunicación que mencioné como los proyectos de ley. Les agradecemos muy especialmente a los miembros de la Comisión de Agricultura por su presencia para el tratamiento de este proyecto, porque siempre sus aportes han sido extremadamente valiosos. — Son las 15 y 57.