Ciudad Partida II ( PDF - 369.2 KB )

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CIUDAD PARTIDA (II)
Poemas de libertad de exilio de muertes
Edgardo Adrián López
“[… Nuestros …] destinos [son tristes …]
porque nuestra alma, ¡ah!, no es bastante osada”
Charles Baudelaire, Las flores del mal, p. 14 –que
también podría haberse traducido por Las flores
malsanas
AEROPUERTOS
“[… Hay] que ser temerarios […]” para enfrentarse a
un enjambre de Jueces
Aristófanes, Las avispas, p. 8
“[… Odio] el despotismo. ¿Cómo explicarles esto?
¡La revolución, claro! Pero la revolución por
la vida, para dar una posibilidad a la vida […]”
Albert Camus, Los justos, p. 12
Que ciega
puedas sentir los signos
que encadeno
Regalarte laberintos
atardeceres en que no–
estás
ofrecerte piel
dolores añejos
185
186
Idos de cualquier territorio
ocupantes sin lugar
espacios
acasos
vagabundos del cuerpo
187
188
no/ muero de amor de vos
muero de tu ausencia
sepultamos
la dicha la piel el alma
Muero –de– tus soledades
mi hambre
189
190
Desajustar las perspectivas;
mejor el cubismo de los sentidos
Desquiciar las melodías;
mejor la música atonal del deseo
es suficiente
con las paralógicas
lo múltiple la piel
191
192
Mancharnos
SUPERPOBLARNOS
DUDARNOS
tomar
Multiplicar
territorios mesetas
sales
193
194
Bebo tiempos desolados
porque la hendidura tu boca
no agua saliva mis noches;
tiempo que pierdo por
(mal)apresarte en las paredes los textos;
no– podré recobrar
las honduras frágiles de mi memoria
195
196
Planicies
fracturas hierbas/
manadas en contornos
Pegarnos con agua
de densidad diversa
Medirnos distancias besos
Suspender el sentido
con operaciones
contradictorias unidas palabras
Esparcir
otros registros
197
198
CARTAS
“[… En] una [misiva] escrita a los comunistas, [mis
ex compañeros de arte] confiesan su absoluta falta
de preparación [con respecto a la teoría con la] que
acaban de comprometerse”
Antonin Artaud, En plena noche o el bluff surrealista,
p. 5 –no obstante, el mismo Antonin desconoce de
lo que habla porque los surrealistas a los que
dispara, no eran marxistas, sino leninistas o cuando
menos, marxistas economicistas. Al confundir este
marxismo con lo que enunció el amigo de Engels,
revela que critica al leninismo con los campos
semánticos del leninismo o reitera, bajo la pulsión
de repetición, las isotopías del marxismo vulgar (mi
insignificante obra se condensa en esas raquíticas
líneas…)
“[… En] esto tenían que desembocar […] años de
[…] Carrera; el abismo […]”
Pierre Klossowski, Nietzsche y el círculo vicioso
Las líneas pulsan este comienzo–
desprendiéndome
de aquellas ausencias
de tardes/
los gritos los dolores de mis ojos
desprenden la piel
Recibir el agua de tus manos
el aroma de tus días
la voz de tus pasos–
203
204
Portar/
negras palabras
al límite
de la consistencia
invisible
la muerte
205
206
La revolución será–
un sol pobre
de ocasos perdidos
el costado quieto de la dicha
un lenguaje calcinado
207
208
En los días en que
soy/ apenas
las costas grises de mis horas
en que soy– apenas
la ausencia de tu “no”
en que te llaman los cristales
de sal mis ojos
el filo agudo de las mañanas;
en esos instantes eternos segundos
te digo
209
210
¿Qué anhelos acurrucarás
ahora
en que estás fuera de nosotros
en los latidos oscuros del tiempo
mientras envejece
la semana?
211
212
La espesura
de los significantes
las palabras lentas de la nada/
polvo al viento de las penas
anidadas en el corazón
ese tumor
que espanta las muertes–
Las heridas inútiles de la dicha
su elegía
213
214
Advierte
la finitud
las miserias del lenguaje
de absortos, sonámbulos
insomnes
215
216
Los huesos
la secreta consistencia
de la duda
tan sin piel, sin carne
sin sangre
tan solos
los huesos solos
sin alma
sin nadie
sin habla ciegos sordos
los ojos muertos
gastados
cansados los huesos
217
218
Tanto de vos
ausencia distancia
abismo
tanta nada de vos
penumbras
Vos luz/
tinta delgada
219
220
Palabras famélicas
memoria muda
el día no amanece
Palabras desiertas
la nada las sombras
221
222
Las cenizas del tiempo
la presencia huidiza
de sus cifras
la caída regulada de su movimiento
en el cofre encantado
de tus manos
223
224
Aliviar la espalda
lo inexacto
lo imposible–
huellas negras
de impaciencia
225
226
La muerte/
que no venga
sea demorada en el umbral de mi puerta
dejando su sombra acariciar
La sal los ojos
227
228
La enfermedad
el dolor la ausencia de aliento
la escritura que no alcanza
los nombres que articulo
229
230
Los avatares
las rupturas
sus pasos
las líneas
los alivios
el cielo el más acá
los sueños
la frontera
231
232
Estos días
–se–
van dejando tu mirada
en los rincones del tiempo
dormida
233
234
quedándote
habitando aromas
ansias
tus ojos
235
236
la búsqueda
se inicia
alrededor de tu sombra
en el contorno de tus senos
en el amoroso tajo de tus labios
en el canto de tus muslos
237
238
Juntar memorias
del futuro
en sienes eternas
las palabras jóvenes
que diremos
239
240
Espesar
el silencio de tus gestos
la partida
las palmas
la superficie suave de tu vientre
el retorno
241
242
El tiempo abierto
en la nada
sangrado en su pecho
ajado en venas
sus instantes
243
244
Mal de mujer
la alevosía/ afirmo
la contradicción– su flama
oculta
245
246
/ Totalidades
muecas desencajadas
negras
densas
247
248
Amanecerte a besos
anunciarnos deseo
andar los cuerpos manos apretadas
entremezclar las tardes el reflejo de tu pelo
249
250
Caminar
por tus horizontes
tocar a la puerta
requerirte
internarme en tus soles
251
252
Transcurrir
sin estampar muescas
opacas monótonas
grises
253
254
El no–otro
comunica su existencia
desesperada
asalta con la niebla
de sus pulsos idos
sorprende la habitación
que esperanza mis aflicciones/
interrumpe las luces la ventana
la brisa
255
256
La impotencia
embalsa las aguas
rasga velos
las utopías
aniquila distancias
torna mediocres los anhelos
somete espíritus
ahoga los gritos
calla el tiempo
niega
257
258
Riman las almas desesperan de lo dado
Evolucionan lo posible–
Vida poesía humeante
Oh, ternura suavidad
Locura confusión
Urgente
Compromiso
Inquieto proyecto templado al fuego
Opaco de la sangre
Nacimiento anarquía motín dichoso
259
260
Me duelen las nubes
su escarpado filo
el contorno agresivo
las cosas
los días
las máscaras
el vacío los otros
261
262
He navegado tanto
el agua helada
la muerte
que devino
compañera
empecinada
mi aliento
263
264
La caricia anhela
extender
sobre el corazón oscuro de las cosas
tan constantes
el grito
el lecho apacible de sus agitaciones
265
266
La ausencia
habla de sí
en el rojo endeble
de su pena–
el silencio
de su quebranto
lejos, llega
La piel de las orillas
sinuosas
conserva la tinta/alma
del que sala
por los ojos
horas de nada
267
268
Las fuerzas– que me faltan
multiplican
la desdicha la letra/
inscrita
269
270
Me desvanezco en el llanto silencioso
de mis adentros– las apuestas
que apartaron latidos dolor
el nombre que me cerca
271
272
El deseo tibio
ángel que ríe mi alma
posado en los ojos
de lavidalamuerte
tan sola de vos/
besos
demorados
esquina de lo incierto
273
274
Arrebato
de vivir
nada –agrego
la sangre los ojos los anhelos
su eternidad
los dioses que moran en ellos
invocan
la juntura desencajada
los poros
275
276
Tan lejos para estar acá/
nada un poco de nada
ser de noche andar
con el sombrero puesto de lado–
lágrimas carencias
277
278
La ciudad
que mató la utopía
no logró asesinar
la memoria/
cierta asfixia
279
280
–
sos los dos
el puente
que une separa
la distancia los países
gramática ciega
281
282
Los relojes
buscan
instigándome
a que intente la poesía
los subtes
la ciudad partida
283
284
Ruego
a la noche por su retorno
que se niega a mi boca
la confesión que apuro en las piedras/
blandas
de la pena
285
286
¿Te llegaré yo
signos de vos a vos
en mí? –
en el umbral
el cuerpo afligido
de susurros
diseminados
287
288
En qué sintaxis
estructura del devenir
exclamar las dimensiones
cruzadas
de ser
289
290
Si la frontera
del infinito me arriba
de golpe;
si cayeras mojada mojando
mi piel/ hablara de las estrellas
ignoradas,
entonces salvarnos
a espaldas
291
292
¿Se atreverán los instantes
ensopados en la pasión
un rocío?
¿La gravedad fuerza de los astros
abrazos intangibles del recuerdo
será enviada?
¿Amarás mis debilidades
disueltas
en tu flor
pétalos de carne
desamparada
sin jugos compartidos
sin precio margen?
293
294
No hay cómo– inventar
los palimpsestos
en los que deba arrojar
los ángulos abiertos
Escritura tuya/
la digo tiempo
295
296
El azar se fue
insidioso
en las sombras
los dibujos claroscuros
eclipses no vistos
297
298
Siempre espero
sobre todo
la llegada
su débil espectro
la visita no planificada
pactada
sin ceremonia
fuera de cualquier santuario
rito
programa–
humedad
luz de tus pechos
299
300
El mundo se desmorona
por los fantasmas
densidades de pocos amigos/
espíritus libres
escriben una historia
la carencia–
un pasado
sin lucha sumisión
301
302
La sutil melancolía
convocada
por una línea espesura roja
sangre artificial
tinta/máquina
303
304
Escribimos en un espacio
ordenado de esquinas
orientaciones desmesuradas
de tiempo
305
306
Lleno–s– los vacíos
de habitaciones
extraviadas
en quimeras
307
308
Invocar los nombres
que no dejan de habitar
que no
partirán
sus ausencias
309
310
Si pudiese
nacerme en tu boca
moriría
el sol
pálido
311
312
Permanece
la hora exacta
su dulzura/ sal lágrima
el frío– no
una promesa agobiada
lo manifiesto de tu escucha
313
314
Figuras sin peso
perfiles
abrigados de miseria
La mirada
pobre/ los ojos
cerrados del mundo
Las manos
murmuran
la lenta respiración
de una secuencia abandonada
315
316
Para siempre
negar tiempo
su paso anciano
los contrastes
las o–posiciones
las fugas
317
318
Soledad
insomnio desconsuelo
lágrima oscura
de los rostros mudos/ abismadas
mis ventanas
el transcurrir
el cuerpo
que sus días abandonan
en segundos
heridos
319
320
Insiste
al costado de mi piel
cierto dolor– desgarro
satura mi lecho
No hago más que
nombrar
las cosas
los trazos peregrinos
de mi aliento
321
322
abrir los tiempos
permitirles destino
pausas
la desazón de su demora
el sabor de su esencia
el día
callado
323
324
¿Amanecerán
los ojos
las manos la boca
el corazón helado
su gemido gris
la tristeza extraviada
de amantes sutiles?
¿Vendrán en auxilio
una tormenta
el fuego
las venas abiertas?
325
326
La noche degollada
una caravana de desaciertos
olvido de olvidos/
manto de otoño
327
328
Dejar la fibra del tiempo
deshilvanarse
en el blanco virgen
del instante
329
330
Caminar por la cuesta
escabrosa de los días
llenos
los ojos
las distancias
su pobre suerte
331
332
Ya no una esquina
la tarde amada– ya no
la boca poblada
el calor tibio/
Ya no hoy
333
334
Cubrir poco a poco
el papel
con el sonido enmohecido
del lenguaje–
invocar circunstancias
335
336
Desconozco la gramática
en torno a la que deambulo/
quebrado en la cama
inmóvil olvidada
337
338
La boca
depositada en algún
lugar
de mi rostro
toca la puerta cerrada
a sus labios
339
340
Palabras
decaídas
en cierto desmayo
recurrentes
anémicas
vacías
quedas
341
342
Indecidible
verdadero y falso
sin ser lo uno o lo otro
el límite inseguro
que separa– comunica
el presente ausencia
de un futuro todavía de luto
343
344
Sobrevivo
cargando
la espesa filosa
sangre
de un todo lleno
saturado de un centro
opaco
345
346
tengo escasos signos
para consolar
el dolor las noches/
palabras negadas
dichas
el trazo enmarañado
su miseria
347
348
Hacer de vos
carne de mis horas
huesos de mis días
vida de la muerte
alegría de mi nada–
significantes
desquiciados
en presente
349
350
No me sirven tantos signos
la mirada neutra de su ángel
sus desmesuras
los ángulos diversos de sus perspectivas
No me sirve la invocación
necesaria
para sanar
de vos
distancias de vos
eternidades
sin vos
351
352
No aparto este cáliz
de tu inconmensurable
lejanía
bebo paciente
las mañanas
353
354
El obituario
que rezo
al borde de mi alma
con las monotonías
que pueden conmigo
mujer
danza de rostros/ máscaras
infinitos
totales
múltiples
fluidos
355
356
Los espejos–
llevan
el claroscuro
casi desesperado
de mañanas gastadas
en amanecer
357
358
Horas apuntadas
rizadas en la piel
del tiempo
la desmemoria
359
360
En el crepúsculo
discurro
silencios opacos
tristezas/ tu voz– no más
sonidos
extraviados
361
362
Acordes
desiertos
intempestivos/ poblados
de vos– no estás
y hacen llanto de estrellas
las líneas de tu nombre
363
364
Se desarmarán
los ojos
el sueño
el hambre
pobre solo/ tan solo
sin cuerpo
sin nada– la nada o todo
mañana/ ya no
cabe el presente
no
365
366
Un cansancio
de muerte
se esparce en los pulmones
acosados
de olvido
367
368
Lloro de llorar
el llanto
la boca las manos
la insidiosa compañía
la soledad de sus contornos
369
370
El desgarro de la fortuna
los ojos suaves ríspidos perfiles
sin imágenes claras
sin el alivio de los sueños –secos
mojados
como están por una llovizna insistente
371
372
el principio un tiempo
perdido/
ya no se ven
más que extraviadas
la mirada el ánimo la piel – no
los otros el mundo
las cosas
su murmullo/ anoche
tanto suspirar abrazos
373
374
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