LOMBRICULTURA Tomado del sitio web: http://www.wormsargentina.com La lombricultura es una actividad centrada en la crianza de lombrices, las que posteriormente se utilizan con diversos fines. Tradicionalmente se ha asociado el aspecto comercial de la lombriz con el negocio de la pesca. Sin embargo, ésta es tal vez la menor de sus aplicaciones. La carne de la lombriz se transforma, mediante distintos sistemas de secado, en una harina de altísimo valor proteico. Esta harina se utiliza, en alimentación humana, como complemento proteico en la elaboración de hamburguesas, picadillos y embutidos. En alimentación animal, se emplea para preparar alimentos balanceados. También se usa la lombriz viva, como alimento para peces y ranas, tanto en acuarios como criaderos, sin dejar de mencionar su condición de carnada en el mercado de la pesca. En la industria farmacéutica se utiliza el colágeno presente en las lombrices y, a partir del líquido celomático, se han elaborado antibióticos. La medicina también ha puesto en estudio a este anélido por su capacidad de regeneración de los tejidos y su inmunidad. Otro aspecto de la lombriz es el referente a la producción de humus, que está íntima e inseparablemente ligado al reciclado de basura: come basura y excreta humus. Transforma un grave problema en el más rico fertilizante orgánico. PROGRAMA ABIERTO DE CRIA INTENSIVA En WORMS Argentina, hemos desarrollado un sistema de crianza de lombrices que permite iniciarse en esta actividad a cualquier persona que disponga de un mínimo espacio y algunos minutos diarios. Contrariamente a la crianza de otros animales, la de lombrices no requiere grandes inversiones, espacios, infraestructura ni tiempo. Sea cual fuere su ocupación, Usted puede criar lombrices. ¿Por qué a WORMS Argentina le interesa que Usted sea criador? Porque necesitamos cientos, miles de millones de estos animales. El desarrollo de nuestra actividad tanto a nivel nacional como internacional, se limita a la cantidad de lombrices y humus que disponemos y a su incremento proyectado en el corto y mediano plazo. Si bien nosotros criamos la mayoría, contamos con una red de criadores que ya se han adherido al programa y que mes a mes nos aportan lombrices y humus. ¿En qué me beneficio si me adhiero al programa? En primer lugar, Usted pasa a ser miembro del mismo. Esto es muy distinto a ser un "cliente". Desde el momento en que se suscribe al programa, se establece una relación comercial recíproca: por una parte Usted adquiere a WORMS Argentina un núcleo de cría con el correspondiente asesoramiento técnico permanente; por el otro, Usted le vende el producido de su negocio. Esto puede hacerlo CUANDO USTED DECIDA. En WORMS Argentina no le "vendemos" lombrices, sino que lo iniciamos en su propio negocio y hacemos lo posible para que prospere. Recuerde que necesitamos sus lombrices y su humus. El beneficio más tentador, sin duda es que en poco tiempo comenzará a generar un retorno de su inversión. Seguramente su próxima inquietud es cuánto va a ganar y qué tan fácilmente. Esto depende de Usted, de cuánto quiere invertir y de cuánto espacio y tiempo dispone. Al momento de decidirse debe tener en cuenta que la población inicial de lombrices aumentará notablemente, para lo cual necesitará mayor espacio y más alimento. Para darle un ejemplo práctico, supongamos que usted comienza el 1º de enero con un núcleo de 5 Kg. (unas 15.000 lombrices adultas) en un espacio de 1 metro cuadrado. Para satisfacer las necesidades alimenticias de esta población, le alcanzarán unos 4,5 Kg diarios de alimento (cualquier desecho orgánico: cáscaras, papeles, aserrín, cartones, estiércoles, pasto, hojas, etc.). Es importante destacar que nos referimos a alimento humedecido, o sea que gran parte de este peso es agua. Las lombrices comenzarán a reproducirse semanalmente y la población se duplicará cada 60/90 días. Para enero del siguiente año, no se sorprenda, su población será de aproximadamente 650.000 individuos (de las cuales 150.000 serán adultos). De igual modo, ya tendrá una significativa cantidad de humus. Durante este año de trabajo deberá aumentar gradualmente la provisión de alimento y el espacio que ocupan sus lombrices. Cuando lo considere oportuno, puede realizar su primera "cosecha". WORMS Argentina comercializará la cantidad de lombrices y humus que USTED esté dispuesto a vender y en el momento en que USTED decida hacerlo. Si, por ejemplo, transcurrido ese primer año nos vende la mitad de su población adulta, es decir, 75.000 lombrices, sepa que en un par de meses volverá a tener 150.000 y podrá vender otra vez la mitad. Pero si dispone de mayor espacio y no necesita vender, ¡Adelante! ¡Para el mes de Agosto puede tener unas 600.000 lombrices adultas y millones en via de ser lombrices adultas. Entonces puede vendernos progresivamente cada vez más de su producción cada 2 o 3 meses. También puede vendernos el humus con el mismo criterio. Si bien Usted puede comenzar a vendernos cuando quiera, le aconsejamos esperar unos ocho meses a partir del inicio de la actividad, de manera tal que los individuos más jóvenes hayan alcanzado la madurez sexual y tengan capacidad reproductiva. A partir de ese período de espera, puede vendernos parte de su población cada 2 o 3 meses y en muchos casos en menos plazo. Si Usted es productor agropecuario, sea su establecimiento un tambo, una granja, un criadero, etc., se verá doblemente beneficiado. Los desechos orgánicos (estiércoles, barros, restos de alimentos), que sin duda hoy le acarrean problemas, serán la "comida" que las lombrices transformarán en humus. Entonces, no sólo terminará con un problema sino que ganará dinero con la venta de lombrices y humus. Si su actividad está orientada a la horticultura o floricultura, puede utilizar el humus para fertilizar sus tierras. METODOS DE CRIA En general, podemos decir que la Eisenia Foétida puede criarse en cualquier lugar. Lo más común es el criadero al aire libre, haciendo cunas de 1 a 2 m de ancho por el largo que se desee. Una cuna no es más que un espacio rectangular delimitado por maderas, ladrillos, bloques de cemento o cualquier elemento que sirva de contención. Pero tampoco esto es imprescindible, puesto que se puede simplemente apilar el alimento sobre el suelo e introducir en él las lombrices. La comida que se les brinde debe ser materia orgánica parcial o totalmente descompuesta. De no ser así, las altas temperaturas generadas durante el proceso de fermentación (hasta 75º C), matarán a las lombrices. El proceso de fermentación, llamado también compostización, se realiza de diversas maneras y según la materia utilizada. Por lo general, se emplea una mezcla de estiércol de vaca o caballo, con otro residuo celulósico, como paja, hierba, etcétera. No obstante, puede usarse cualquier materia orgánica, como pasto, hojas, papeles, cartones, cáscaras, maderas y otras. En el curso de maduración la mezcla alcanza altas temperaturas que matan los gérmenes patógenos. Una acción sucesiva de bacterias y hongos, convierte a la mezcla en una sustancia color castaño oscuro, inodora y apta para alimentar a las lombrices. Esta comida debe proporcionárseles periódicamente y en cantidad suficiente para satisfacer sus requerimientos. Una vez establecido el lugar para la cría y luego de haber armado la cuna, se cubre con una capa de paja o pasto seco. Posteriormente se le agrega el compuesto orgánico debidamente humedecido y finalmente se agregan las lombrices sobre la superficie, quienes por sí mismas se introducirán en el lecho. A partir de este momento se debe poner cuidado en cuatro detalles: 1. Proporcionarles el alimento necesario, humedecido y con el debido grado de descomposición. Calcular la cantidad de comida es muy fácil: si hay tres kilogramos de lombrices, deben incorporarse tres kilogramos de alimento humedecido por día. 2. Mantener la humedad de la cuna. En general, si el alimento está humedecido correctamente, la cuna mantiene una humedad relativamente estable. Si es necesario, se puede regar la cuna con una regadera. 3. Cuidar el pH. Es conveniente que esté próximo a 7. Para medirlo se pueden usar unas cintas muy económicas que venden las farmacias. Si el nivel no es el conveniente, no hay que asustarse, ya que el pH se corrige de manera muy sencilla. 4. Controlar la temperatura. Nos referimos esencialmente al calor y al frío intenso. Los que dificultan el normal desenvolvimiento de las lombrices. Siempre es recomendable cubrir las cunas con una capa de paja o pasto, que además de proteger de las temperaturas extremas, ayuda a conservar la humedad. Aproximadamente a los dos meses de comenzada la actividad, la población de lombrices habrá aumentado al doble. Entonces será tiempo de duplicar el espacio de la cuna y también la cantidad de alimento diario. Cuando transcurran otros dos meses, deberá duplicar nuevamente el espacio y el alimento y así, sucesivamente hasta que decida realizar su primera "cosecha". En ese momento puede vender hasta el 50 % de la población sin riesgos, ya que en dos meses se habrá duplicado nuevamente. Entonces, cada dos meses (o menos si las condiciones de cría son óptimas), puede repetir la venta. A medida que transcurre el tiempo, la cuna contendrá mayor cantidad de humus. Puede extraerlo y almacenarlo hasta que decida comercializarlo. Detalles más precisos sobre cada método de trabajo, se brindan personalmente en función de las posibilidades de cada criador. INFORME CIENTIFICO Las lombrices son animales invertebrados del tipo anélidos, o sea, gusanos segmentados. Son hermafroditas y depositan sus huevos protegidos en una cápsula llamada cocón. Hasta la actualidad se conocen entre 6 y 7 mil especies diferentes de lombrices, siendo la más conocida la Lumbricus Terrestris (lombriz de tierra); ésta vive exclusivamente en la tierra y se alimenta de la materia orgánica descompuesta presente en los suelos. En estado adulto llega a medir entre 9 y 30 cm. de largo. Su apareamiento se produce generalmente cuando asoman a comer a la superficie. La puesta de huevos se realiza a razón de un cocón por animal cada 45 a 60 días. Vive de 4 a 5 años. No todas las especies son aptas para la cría. La mayoría, requiere condiciones muy precisas y difíciles de lograr. Sin embargo existe una especie, llamada Eisenia Foétida, conocida como lombriz roja californiana, que no sólo es la que mejor se adapta al cautiverio, sino que posee características sorprendentes. En estado adulto mide entre 3,5 cm y 8,5 cm de largo, y en raros casos llega hasta 13 cm. Su peso oscila entre 0,4 y 0,6 gramos, si bien en condiciones apropiadas de cría, se logran ejemplares que pueden alcanzar 1 gramo. De naturaleza estiercolera, es capaz de ingerir también grandes cantidades de materia celulósica, como rastrojos, aserrines, pulpas de celulosa, y en general cualquier desecho orgánico en descomposición. Es muy voraz, llegando a comer hasta el 90 % de su propio peso por día. De esta ingesta, excreta entre el 50 y 60 % convertido en un nutriente natural de altísima calidad, conocido como lombricompuesto o humus de lombriz. Estas lombrices son muy prolíficas. Se aparean semanalmente, poniendo un cocón por lombriz cada diez días, refiriéndonos siempre a lombrices adultas. Estos huevos eclosionan a las 2 ó 3 semanas de puestos y dan a luz entre 2 y 20 lombrices cada uno. Estas recién nacidas alcanzan la madurez sexual luego de 6 a 10 semanas. Son inmunes a las enfermedades y tienen una increíble capacidad de regeneración. La longevidad de esta especie se estima en alrededor de 15 ó 16 años. Cuando la cría se realiza con todos los cuidados, se obtienen los mejores resultados. LA BASURA Breve Reseña Histórica Sobre la Evolución de la Basura La Era Industrial ha traído aparejado un complicado cambio en el ecosistema que afectó también a la especie humana. Las industrias comenzaron a explotar intensiva e indiscriminadamente los recursos naturales, extrayendo las materias primas para elaborar sus productos, generar energía, etc. Como si esto no bastara, los residuos derivados de la producción iniciaron la contaminación de ríos, tierras, napas subterráneas, atmósfera. El hombre, en busca de mejores posibilidades laborales, se estableció en torno de los grandes polos industriales poblando indiscriminadamente las regiones más "progresistas" del planeta. Esas zonas densamente pobladas comenzaron a generar enormes cantidades de basura. Por eso no sólo las industrias se llevan las críticas. La mejora en la calidad de vida, con el mayor índice de consumo, tiene hoy y desde entonces, un papel preponderante en materia de contaminación: mayor consumo = más basura. Las estadísticas indican que se producen entre 1 y 1,5 kg. de residuos por habitante y por día. Por ejemplo, una ciudad de 1.000.000 de habitantes, genera hasta 1.500 toneladas diarias de desperdicios. No fue sino hasta la década del 50, que grupos y organizaciones ambientalistas tomaron cartas en el asunto alertando sobre el deterioro de la salud del planeta. A partir de allí y particularmente en los años 70, se generan importantes movimientos que concientizan sobre los riesgos presentes y futuros. Desde entonces, la protección del medio ambiente dejó de ser un tema relegado a aquellas regiones más contaminantes, para convertirse en una causa universal. Hoy, esta nueva conciencia, está reflejada en todos los aspectos de la vida cotidiana. Reutilización, reconversión y reciclaje, son palabras utilizadas diariamente. Actualmente, países de alto desarrollo industrial y comercial, reciclan gran cantidad de desperdicios. En los Estados Unidos, por ejemplo, se recicla un equivalente a 720 kilogramos por habitante y por año. Pero este reciclaje comprende principalmente vidrios y carbón. Mientras plásticos, gomas y metales son reutilizados, la basura se sigue amontonando, enterrando o quemando. Los desperdicios orgánicos son un serio problema hoy y una grave amenaza para dentro de pocos años. Esta perspectiva obligó a estados como California, a tomar medidas para reducir el impacto ambiental de final de siglo pasado y comienzo de este. Entre éstas existe una Ley que establece que a partir del año 2000, los basureros están reduciendo su tamaño a la mitad del que tenían en el año 1994, aplicándose multas de hasta U$S 10.000 diarios para quienes no cumplieren esta reglamentación. SISTEMAS DE RECICLADO WORMS Argentina, aporta una eficaz solución al problema de los desechos orgánicos mediante un método natural de reconversión. En nuestros sistemas de reciclaje utilizamos lombrices, específicamente del tipo Eisenia Foétida, conocida comúnmente como "Lombriz Roja Californiana". Esta lombriz es una voraz "comebasura", ingiriendo diariamente hasta el 90 % de su propio peso. Pero debido a su escaso peso (unos 0,3/0,6 gramos promedio), se necesitan millones para procesar grandes cantidades de desechos. Algunos basurales usan para este proceso, de 25 a 50 toneladas de lombrices, lo que equivale de 75 a 150 millones de animales. Sabemos que desde hace algunos años, muchos establecimientos, en su mayoría relacionados con la cría de animales de consumo, han intentado por propia iniciativa, reciclar sus estiércoles de esta manera. Pero la falta de un proyecto planificado y un apoyo técnico específico, los condujo prontamente al fracaso. Adquisición de otros tipos de lombrices, ausencia de una planificación para determinar la cantidad de ejemplares, mala instalación de las cunas, falta de controles periódicos de temperatura, humedad y pH, fallas en el procesamiento y racionalización de los desechos, son algunas de las causas que precipitaron el revés. WORMS Argentina le brinda el apoyo técnico permanente a cargo de personal especializado e instrumental adecuado, para garantizar el perfecto desarrollo del sistema. WORMS Argentina se adapta a sus necesidades, brindándole el proyecto de su conveniencia. En nuestras plantas de compostaje recibimos sus desperdicios; si lo prefiere, los retiramos de su lugar de origen. Podemos instalar en su establecimiento el sistema de reconversión adecuado a sus necesidades, e instruirlo para el correcto funcionamiento, brindándole apoyo técnico permanente, y la posibilidad de comprar su humus y sus lombrices. También podemos tratar sus residuos a un costo muy conveniente. Nuestros proyectos se adaptan a pequeñas y grandes necesidades. Industrias alimenticias, establecimientos agrícolas y ganaderos, municipios, comunas, frigoríficos, tambos, cafeterías de colegios, cárceles, bares, restaurantes, etcétera, tienen en WORMS Argentina un aliado para el tratamiento de los residuos orgánicos.