EL CONCEPTO DE CULTURA La especie cultural. Nuestra sociabilidad no es instintiva. Nuestra especie se distingue de las demás por la cultura, la cual induce cambios en la propia biología. La cultura es un mecanismo de adaptación. Su creciente complejidad es la que facilita la aparición del pensamiento formal y la capacidad de abstracción y conceptualización. El lenguaje articulado supondrá la condición indispensable para el surgimiento del pensamiento. De este modo el animal humano se convierte en animal simbólico capaz de generar códigos culturales complejos. La sociabilidad humana está íntimamente mediatizada por la cultura. Las formas culturales varían notablemente de unas sociedades a otras. No existen culturas individuales, sino que es nuestra especie cultural en sí misma. Definición de cultura. En un sentido socio-antropológico la cultura viene referida a los modos de vida compartidos por una sociedad En sentido estricto la cultura es el conjunto de conocimientos, valores y creencias que comparte una comunidad, las normas que acatan y los bienes materiales y simbólicos que producen. En un sentido socio-antropológico la cultura viene referida a los modos de vida compartidos por una sociedad. La cultura es un elemento que puede contribuir a la desigualdad. Cuanto mayor tamaño posee una sociedad y mayor complejidad su cultura, las desigualdades también serán mayores. Los elementos (interdependientes) de la cultura. El lenguaje. Todas las formas humanas de transmitir mensajes, verbales, corporales y escritas. El lenguaje está constituido por signos a través de los cuales atribuimos significado. Conocimientos sobre la naturaleza y la sociedad, generados mediante el lenguaje, que nos permiten sobrevivir en su contexto y adaptarnos a situaciones inesperadas. Creencias. Ideas compartidas acerca de cómo funciona el mundo y la vida, basadas en experiencias comunes, aunque con frecuencia son empíricamente indemostrables hasta que se valida su veracidad, transformándose entonces en conocimiento. Si se confirma su falsedad se convierte en una “falsa creencia”. Los valores. Ideales acerca de lo que es bueno y deseable y sobre lo que no es aceptable y debe provocar rechazo. A los valores se le asignan unas normas. Las normas. Son reglas específicas acerca de lo que la gente debe hacer o no en situaciones concretas. A las normas se le asignan unas sanciones que premian o castigan su observación o no. La tecnología. Conjunto de conocimientos prácticos y equipos que contribuyen a la eficacia de la labor humana y a alterar el ambiente. La diversidad cultural. Cada cultura posee modelos propios de comportamiento que resultan extraños para aquellos que tienen distinto bagaje cultural. Ciertos autores consideran que la cultura se está homogeneizando debido al fenómeno de la globalización pero no está tan claro este extremo. Aunque ciertas formas culturales traspasen fronteras siempre existe cierta resistencia local a la absorción, produciéndose lo que se denomina choque cultural. Aunque la causalidad no es directa, existe una clara relación entre choque cultural y desviación. Choque cultural: Desorientación y tensión que la gente siente al entrar en un ambiente cultural desconocido. Sintomatología típica del choque cultural Sensaciones de incompetencia Miedos (al aislamiento, a la burla, al engaño…) Cambio en los patrones de conducta habituales para adoptar los del nuevo entorno Impredecibilidad en la vida cotidiana que puede desencadenar situaciones de anomia. Anomia: carencia de estándares que guíen el comportamiento en un área de la vida social. Una vez entendida la diversidad cultural como un hecho, se apuesta por el respeto por la diversidad. Conscientes de la imposibilidad de realizar una ciencia absolutamente objetiva y libre de valores, estas ciencias aspiran a la neutralidad valorativa, evitando que los juicios de valor propios salpiquen las investigaciones y sus resultados. Dentro de la diversidad existen ciertos rasgos comunes. Cuando éstos se encuentran en todas las sociedades reciben el nombre de universales culturales. Etnocentrismo y Relativismo cultural Etnocentrismo: Tendencia a evaluar otras culturas en función de la propia y concluir que son inferiores. Se funda en conceptos culturales falsos, dado que cualquier costumbre llevada fuera de contexto puede resultar extraña. Relativismo cultural: Idea de que cualquier cultura debe entenderse en función de sus propios significados. Esto no implica que determinadas prácticas deban de ser aceptables (vg.: ablación, tráfico de drogas…) sino que para convencer a la gente que debe abandonar esas prácticas, antes deben entender qué es lo que significa para ellos. Cultura ideal y cultura real Cultura ideal: Normas y valores a los que la gente se adhiere abierta y formalmente Cultura real: Normas y valores que la gente no puede admitir abierta y formalmente, pero que, no obstante, practican. Desviación positiva y negativa Toda cultura posee pautas ideales que en la realidad casi nunca se cumplen plenamente. Ello hace que exista una especie de comportamiento medio que aceptamos como umbral de la normalidad que depende de: El grado de presión social (mayor o menor tolerancia) El grado de conformidad que manifiestan quienes deben cumplir la norma El valor que, en general, se reconozca a las normas. Desviados positivos son aquellos que intentan aproximarse al ideal de las pautas de conducta elevándose por encima del cumplimiento normal. Desviados negativos caen por debajo del umbral de cumplimiento considerado normal La mayoría de la población se situaría un poco por debajo de lo que se entiende por normalidad. Subculturas y contraculturas. En toda cultura coexisten muchas variaciones. Cuando éstas alcanzan un nivel de desarrollo y entidad diferencial suficientes, reciben el nombre de subculturas. Subcultura: Es una cultura que distingue a un grupo particular de los demás miembros de su sociedad. Los individuos deben identificarse con el grupo y deben interactuar y compartir información. Principales fuentes de subculturas: Etnia Religión Ocupación Estilo de vida Orientación sexual Edad Contracultura: Subcultura que se opone de forma activa a la cultura principal. CULTURA Y CRIMINALIDAD Desviación y cultura La cultura nos convierte en seres culturales que ajustan su comportamiento a las condiciones de su entorno dentro de un marco de valores, normas, etc. Este ajuste requiere de un proceso largo de aprendizaje. Las culturas difieren unas de otras, coexistiendo dentro de un mismo espacio culturas distintas. Por otra parte admiten cierto grado de variación interna como para permitir la existencia de subculturas y contraculturas. Cultura y sociedad forma parte de un todo interactivo: la cultura afecta a cómo se estructura la sociedad y la sociedad afecta al nivel de esa cultura. La posición social de las personas afecta a lo que aprenden y al cómo lo aprenden y las diferencias culturales contribuyen a reproducir diferencias de clase. El conflicto cultural La corriente crítica de la sociología entiende que los patrones de la cultura dominante sirven a la reproducción de los esquemas de poder establecidos y a la perpetuación de las élites, y a este fin se elabora un sinfín de normas sociales. En el seno de esa cultura hay contradicciones que se muestran en mayor medida cuanto más compleja es. Estas contradicciones inducen al cambio cultural y se traducen en crisis culturales que cuestionan las formas tradicionales y los valores oficiales. En épocas de tránsito a menudo conviven elementos culturales antitéticos que inducen respuestas desviadas e incluso criminales. Dado que el individuo no sabe exactamente cuál es el rango más alto de cumplimiento entre dichos elementos, opta en cada situación por el que le aporta mayores beneficios vaciando de contenido moral sus acciones. En toda cultura se da un grado de ambivalencia moral, especialmente en épocas de crisis, que resta coherencia al sistema y acaba generando un buen grado de hipocresía respecto de ciertas prácticas. El orden moral es, en estos casos, altamente restrictivo y su finalidad no es tanto la de facilitar la convivencia cuanto el control de la población, sancionando negativamente comportamientos que en sí no vulneran ningún derecho fundamental ni atentan contra la convivencia. Subculturas desviadas Otros autores de sesgo crítico atribuyen la desviación no tanto a conflictos globales cuanto a la existencia de conflictos parciales que se dan entre culturas que conviven y que se corresponden con grupos sociales que coexisten. Los elementos culturales de unas divergen notablemente de los de las otras originándose una situación de extrañeza que generalmente desemboca en la atribución de cualidades desviantes a los usos culturales de la cultura ajena. Desde otra perspectiva, los procesos sociales que han puesto en marcha la criminalización de conductas entendidas como inmorales tienen como fin penalizar, llegando en algunos casos a ilegalizar una subcultura. Empresarios de la moral: personas que, indignados ante situaciones que estiman inmorales, emprenden campañas de “purificación”. Junto a éstos, actúan los burócratas, políticos, empresarios y medios de comunicación Subculturas delictivas El concepto de subcultura aplicado a la sociología de la desviación pretende explicar la conducta desviada de determinados grupos sociales considerados minorías. La sociedad se entiende como un ente plural en que coexisten distintos sistemas de valores. Cuando estos valores son divergentes respecto de la “normalidad” en torno a ellos se organizan los grupos desviados. Estos grupos deben de ser estudiados desde dentro. Los desviados aquí no son individuos. La desviación debe entenderse como una opción colectiva. Según Albert K. Cohen Definición: Sistema de valores y creencias que: Fomenta la comisión de actos delictivos Confiere rango social a sus miembros por razón de tales hechos Especifica la clase de relaciones que han de mantenerse con las personas ajenas al mundo delincuencial. Origen: Para Cohen el origen de las subculturas desviadas debe buscarse en el malestar de ciertos colectivos: Jóvenes de clase baja De condición social depauperada Con escasez de posibilidades para adquirir reconocimiento social por medios legítimos. Las subculturas surgen en el seno de sociedades plurales y heterogéneas, entre aquellas personas que poseen similares problemas de adaptación, lo que genera una solidaridad de grupo. La subcultura aporta a sus miembros el status que les niega la sociedad mayoritaria. Las familias de clase obrera no son ajenas a la cultura dominante de clase media, sin embargo carecen de las técnicas socializadoras necesarias para alcanzar los objetivos que éstas proponen. El joven de clase baja se siente atraído por el estilo de vida de la clase media. Debe afrontar esos valores en clara desventaja, su autoestima decrece y se siente inferior. El joven de baja extracción pretende lograr la estima social según viene definida por las clases medias, identificándose con ellas a la vez que interioriza los valores de la clase baja. Toma conciencia de sus limitaciones y desarrolla actitudes ambivalentes respecto a valores de una y otra clase. Respuestas que adopta el joven de clase obrera, según Cohen, a fin de salvar la contradicción: El Conformismo: Procura competir/convivir con los jóvenes de clase media aceptando su situación de desventaja. La Acomodación: Opta por renunciar a la lucha pero amortigua su frustración uniéndose a otros jóvenes de similares características. La Delincuencia: Grupo que decide no aceptar ni pactar. Se enfrenta a las ambigüedades culturales adoptando pautas alternativas de acción y un marco de referencia distinto. Generan una subcultura con rasgos de contracultura. La delincuencia juvenil supone una forma de protesta. El joven delincuente forma parte de una subcultura delincuente porque en ella adquiere la estima social que busca. La delincuencia juvenil tiene fines distintos a la adulta. La segunda pretende fundamentalmente lograr con medios ilícitos bienes que no lograría por la vía legal. La primera exhibe sus capacidades como medio de adquirir prestigio. Características: Es gratuita: Las acciones no persiguen un beneficio económico, sino objetivos como El placer La demostración de audacia El logro de prestigio Es maliciosa: La satisfacción se deriva de la sanción negativa. Es negativa-destructiva: Se enorgullece de hacer lo incorrecto. Es grupal: Se origina y manifiesta en grupo. Según R. Cloward y L. Ohlin Definición de subcultura criminal: Aquella en la cual resultan indispensables para el desempeño de roles dominantes, ciertas formas de actividad delictiva. Origen: El origen se encuentra en la frustración que sienten los jóvenes de clase baja al intentar sin éxito lograr el nivel económico y el status social de otros grupos sociales. Las condiciones en que se encuentran les impiden alcanzar tales objetivos legítimamente. En vez de asumir el fracaso, lo atribuyen al tipo de sociedad en que viven, adquiriendo conciencia de la injusticia de las normas. Esa toma de conciencia les inducirá a unirse con sus semejantes formando parte de una subcultura desviada, dentro de la cual encontrarán el respaldo necesario al recibir aprobación y oportunidades de conseguir el éxito. Estas oportunidades son distintas según el ámbito geográfico, social y cultural. Más que las tensiones socioculturales, lo que explica la desviación es la oportunidad que el sujeto tiene de desviarse. En toda sociedad existen diferentes grados de acceso a medios legítimos e ilegítimos de lograr el éxito, y por ello existen diversas modalidades de desviación. La forma de desviación que un sujeto adopte depende del ambiente social en que se mueva. Tipos: Subcultura criminal: Característica de barrios donde la delincuencia adulta está integrada en el tejido social. El joven encuentra oportunidades para delinquir y para aprender las pautas desviadas y las técnicas concretas. Subcultura conflictual: Propia de barrios pobres y desorganizados, con alta movilidad social y geográfica, cuyos habitantes viven en condiciones de precariedad. Los valores desviados no están integrados con la sociedad del crimen organizado. La criminalidad tiene un marcado carácter individualista. Todo ello incrementa el desencanto y la frustración dado que viven en áreas donde el triunfo no puede lograrse de forma convencional, ni se poseen modelos adultos para lograrlo de forma lícita. La única forma de conseguir cierto estatus social es mediante la violencia, manteniendo un conflicto permanente. Subcultura evasiva o abstencionalista: Individuos y áreas que no han obtenido éxito social ni siquiera mediante el delito, por lo que se encuentran en situación de doble fracaso. El integrante de esta cultura es un sujeto residual que no ha conseguido integrarse en una subcultura desviada ni en una convencional, se refugia en la droga o el alcohol como forma de manifestar su indiferencia ante el mundo convencional, del que se evade. Para hacer frente a sus hábitos desarrolla una serie de actividades delictivas. Estos tres tipos de subcultura cambian con el tiempo. El propio slum es objeto de una evolución según se va asimilando la población inmigrada: En un primer momento los jóvenes inmigrados recurren al uso de la violencia para conseguir un status dentro de su barrio. Posteriormente se organizan para lograr provecho del nuevo status adquirido En última fase, una vez obtenido status económico y social suficiente abandonarán el slum, en el cual sólo quedan los fracasados. Diferencias El modelo de Cloward y Ohlin es más explicativo que el de Cohen. Capta mejor la complejidad del mundo urbano de la desviación juvenil al entender la existencia de diversos grupos (gangs). El modelo de Cohen apuesta por una subcultura no utilitaria, maliciosa y destructiva que no tiene por qué ser así. En muchas ocasiones los delitos corresponden al intento racional de satisfacer necesidades por cauces legítimos. En el análisis de C. y O., frente al de Cohen, la subcultura del joven de clase baja no está en directa oposición con la cultura de clases medias. Muchos jóvenes delincuentes comparten los valores y las metas de la sociedad oficial, siendo la ausencia de vías legítimas para alcanzar el éxito el factor explicativo de la desviación. PAGE \* MERGEFORMAT 9