Subido por Eduardo Jrz

ARQUITECTURA VERNÁCULA ENSAYO

Anuncio
ARQUITECTURA
VERNÁCULA
Por
EDUARDO ARTEAGA JUAREZ
Universidad Politécnica de Tlaxcala Región
Poniente
Materia: Arquitectura Vernácula
Arq. Blas Antonio Tepale Gamboa
Arquitectura Bioclimática
3er Cuatrimestre
A que se Considera Vernáculo en México
La arquitectura vernácula en México es un legado
tangible de la adaptación humana a los diversos
climas, geografías y contextos culturales del país.
Más allá de ser meras edificaciones, estas
construcciones representan una fusión de
tradición, sostenibilidad y funcionalidad,
reflejando profundamente las identidades locales.
La arquitectura vernácula se refiere a los estilos de
construcción tradicionales que son específicos de
una región particular, utilizando materiales y
técnicas locales que han sido desarrollados y
perfeccionados a lo largo de generaciones. En
México, la arquitectura vernácula no solo es una
respuesta a las necesidades prácticas de vivienda y
refugio, sino también una manifestación de la
cultura y las costumbres locales.
La arquitectura vernácula es un sistema social y
cultural complejo, que nace y se consolida de la
relación y profundo conocimiento del humano
sobre su entorno y refleja las diferentes formas de
habitar. Es una arquitectura sin arquitectos de por
medio, pero con grandes soluciones espaciales y
morfológicas que suelen trasladarse y recrearse en
su concepción y su ejecución. La arquitectura
vernácula se construye por el alto nivel de
entendimiento y adaptación al medio natural; la
topografía; el clima; la vegetación y la
disponibilidad de materiales para la construcción
son elementos que condicionan el emplazamiento,
los sistemas y materiales constructivos, la
espacialidad y la forma.
Casa Purépecha,
arquitectura encontrada en el estado de Michoacán.
Casa de techo cónico,
arquitectura encontrada en el estado de Oaxaca.
Cabaña de troncos,
arquitectura encontrada en el estado de Durango.
Características de la
Arquitectura Vernácula
en México
Para comprender plenamente la
arquitectura vernácula en México, es
fundamental analizar sus características
distintivas, las cuales demuestran una
adaptación ingeniosa al entorno y una
profunda conexión con la cultura local.
Materiales Locales
Las edificaciones vernáculas en México
se caracterizan por el uso de materiales
que se encuentran fácilmente en la
región. Por ejemplo, en las zonas áridas
del norte, se emplean ampliamente el
adobe y la piedra, mientras que en las
regiones tropicales del sur se utilizan la
palma, el bambú y la madera. Esta
elección no solo facilita una integración
más armoniosa con el entorno natural,
sino que también garantiza que las
construcciones sean adecuadas y
resistentes a las condiciones climáticas
locales.
Técnicas Tradicionales
Los métodos de construcción vernáculos
son a menudo el resultado de
conocimientos
transmitidos
de
generación en generación. Estas técnicas
no solo son eficientes, sino que también
suelen involucrar a la comunidad en el
proceso de construcción, fortaleciendo
los lazos sociales y asegurando que el
conocimiento perdure.
Integración Cultural
La arquitectura vernácula en México
está profundamente influenciada por la
cultura y las tradiciones locales. Esto
puede verse en los detalles decorativos,
la disposición de los espacios y el uso de
colores y símbolos significativos. Las
chozas mayas de la Península de
Yucatán, con sus techos de palma y
paredes de madera, son un ejemplo claro
de cómo la arquitectura refleja la
identidad cultural.
Adaptación al Clima
Las técnicas de construcción y diseño
están íntimamente ligadas a las
condiciones climáticas locales. En las
regiones cálidas, las casas suelen tener
techos altos y sistemas de ventilación
cruzada para mantener frescos los
interiores, mientras que, en las zonas
más frías, se construyen paredes gruesas
y ventanas pequeñas para conservar el
calor. Esta adaptación es un testimonio
de la ingeniosidad y la comprensión
profunda del entorno por parte de las
comunidades locales.
Funcionalidad y Simplicidad
Un rasgo distintivo de la arquitectura
vernácula es su enfoque en la
funcionalidad.
Los
diseños
son
generalmente simples y prácticos,
creados para atender las necesidades
esenciales de la comunidad sin incluir
adornos innecesarios. Esta sencillez
surge frecuentemente como una
respuesta a las restricciones y recursos
disponibles en el entorno.
Tipología de la Arquitectura Vernácula en México
La diversidad geográfica y cultural de México se refleja en las distintas tipologías de
arquitectura vernácula que se encuentran a lo largo del país. Cada región ha desarrollado
su propio estilo arquitectónico en respuesta a sus condiciones únicas.
Casas de Adobe
Predominantes
en
muchas
regiones, especialmente en el
centro y norte del país, estas
construcciones utilizan barro y
paja para crear viviendas frescas
en verano y cálidas en invierno.
Palafitos
Viviendas elevadas sobre pilotes, típicas de las
zonas inundables como Tabasco, que protegen a
sus habitantes de las crecidas de los ríos.
Chozas Mayas
Con techos de palma y paredes de madera,
comunes en la Península de Yucatán, adaptadas al
clima tropical y a las lluvias intensas.
Casas de Piedra
Comunes
en
las
regiones
montañosas, estas casas utilizan
piedra local para proporcionar
durabilidad y aislamiento térmico.
Materiales Utilizados en Arquitectura Vernácula
La arquitectura vernácula en México
se distingue por su uso eficiente y
adaptativo de los materiales locales
para construir viviendas que se
integran armónicamente con el
entorno y satisfacen las necesidades
prácticas de sus habitantes. A
continuación, se detalla el empleo de
materiales para la cimentación, los
muros y las cubiertas en las
construcciones
tradicionales
mexicanas.
Cimentación
ilustración presentada en la exposición Arquitectura
Vernácula en México.
Piedra
En muchas regiones, especialmente en áreas
montañosas y áridas, la piedra es el material de
elección para las cimentaciones. Su durabilidad y
resistencia a la humedad la hacen ideal para
soportar el peso de las construcciones y
protegerlas contra movimientos sísmicos.
Para
la
cimentación,
la
arquitectura vernácula en México
aprovecha
principalmente
materiales robustos y disponibles
localmente que aseguran la
estabilidad de las estructuras.
Muros
Los muros en la arquitectura vernácula mexicana están diseñados para proporcionar
aislamiento térmico y resistencia estructural, utilizando materiales que varían según la
región y el clima
Adobe
El adobe, una mezcla de barro, paja y agua
moldeada en bloques y secada al sol, es
ampliamente utilizado en regiones áridas y
semiáridas. Este material proporciona
excelente aislamiento térmico, manteniendo
las casas frescas en verano y cálidas en
invierno.
Madera y Palma
En regiones tropicales como la Península de
Yucatán, los muros se construyen a menudo
con madera y palma. Estos materiales
permiten una buena ventilación y son
resistentes a las lluvias intensas y al clima
húmedo.
Cubiertas
Las cubiertas en la arquitectura vernácula mexicana están diseñadas
para proteger contra las precipitaciones y el calor, utilizando materiales
que se adapten a las condiciones climáticas locales
Palma y Paja
En regiones tropicales y costeras, las cubiertas de
palma y paja son comunes. Estos materiales son
abundantes y proporcionan excelente aislamiento
térmico, además de permitir la ventilación natural.
Teja de Barro
En el centro y algunas regiones del sur de México,
las tejas de barro se utilizan ampliamente para las
cubiertas. Estas tejas son duraderas, impermeables
y ayudan a mantener una temperatura interior
confortable.
Zacate
En algunas áreas rurales, especialmente en el norte
y centro del país, se utiliza el zacate (hierba seca)
para las cubiertas. Este material es económico y
ofrece buen aislamiento térmico, aunque requiere
un mantenimiento regular.
Características de la Arquitectura Vernácula en las
Regiones de México
Norte de México
La arquitectura del norte de México, resulta única debido a diferencias históricas con
respecto a otras regiones del país. El norte mexicano fue colonizado después que el centro
y sur, en esta región no progresó el barroco.
“Uno de los orígenes de este tipo de arquitectura, de la del norte mexicano, está en la
española; podemos ver similitudes especialmente en las viviendas, tales como cubiertas
planas, huecos de puertas y ventanas pequeñas para evitar la penetración del calor,
edificaciones generalmente de una planta con áreas anexas como corrales para ganado,
algún pequeño almacén o granero, zaguán, un patio al que se comunican todas las
habitaciones, cocinas amplias, por ser concentradoras de actividad familiar y fogones en
el exterior para evitar el calentamiento de la casa en los meses calurosos y en el patio
siempre se encuentra un pozo de agua o aljibe. Por su parte las calles también fueron
trazadas en busca de amortiguar el calor, y debían ser angostas, mientras que eran
rodeadas de viviendas altas y bien distribuidas para ofrecer sombra en cualquier momento.
Además, debían estar orientadas de tal forma que se pudiera gozar de los aires del medio
día” explica la arquitecta, Karen Zaragoza, de la sección de monumentos del Centro INAH
Chihuahua y quien nos habla de las viviendas protegidas por esta dependencia y que se
remontan a años anteriores al 1900.
Entonces la arquitectura vernácula, es un
ejemplo de adaptación humano, y fue
impulsada por el deseo de cobijo y protección
a las agrestes condiciones climáticas de la
entonces Nueva Vizcaya. Y la elección de
materiales, como ya se mencionó, obedeció a
lo que la naturaleza ofrecía. A pesar de la
aridez de la mayor parte del territorio, este dio
materia para hacerse de elementos de
construcción que hoy en día todavía se usan,
como varas, barro, palma, adobe, cantera y
troncos de madera.
Los primeros asentamientos del Nuevo
Santander se encontraban en condiciones
similares, las viviendas también eran de
bajareque, exceptuando las del gobernador,
capitanes y misioneros pues la gente que
acompañó a Escandón era en su mayoría de
escasos recursos. En respuesta a las
necesidades que se fueron dando, no sólo de
cobijo, sino de expansión y evangelización en
el noreste, surgen edificaciones con funciones
determinadas:
•
•
•
•
Religiosas: misiones e iglesias.
Habitacionales: casa urbana, casa rural.
Haciendas: ganaderas, mineras, y de
agricultura.
De gobierno: casas reales, presidios y
palacios municipales.
No es mucha la documentación que existe
sobre los sitios anteriormente mencionados,
una de las pocas descripciones de arquitectura
norestense, específicamente de Nuevo León la
encontramos en la recopilación de
conferencias de las Segundas Jornadas sobre
Identidad de la Cultura Norestense.
Centro de México
La tipología puede variar de un estado a otro, pero se
conservan algunas características como la forma, el uso de
los materiales, los saberes constructivos y otros aspectos,
pero principalmente tienen en común el de ser una
arquitectura comunitaria acorde al entorno.
Vivienda en Bocasierra
Forma
La forma de las Viviendas es exclusivamente
rectangular con dimensiones variables;
aunque prevalecen los módulos de 4 x8, 4
x10 y de 6 x 8 metros con habitaciones
anexas para servicios como cocina y
sanitarios. El área de lavado cercano a la
vivienda y cubierto y la cocina con
ventilación.
Algunas presentan pórticos de dos a ocho
pilares de madera o piedra; los de dos pilares
son para el área de lavado, cocinas y lugares
de reunión familiar. Los pórticos de hasta 8
pilares es para los pasillos cubiertos; en
donde se coloca un murete bajo para que los
animales no entren a la vivienda.
Cimentación
La piedra utilizada podía ser labrada o
ligeramente devastada y colocada con algún
mortero calcáreo en cimientos o en muros; esta
sobresale de la línea de tierra hasta 80 centímetros
para que la humedad no dañe los materiales de los
muros o para que en el interior la humedad del
ambiente sea menor pues es una región altamente
húmeda y lluviosa.
Sur de México
La arquitectura vernácula en Mérida
La disposición de los espacios que conforman la vivienda y construcciones complementarias
se resuelve en un solar rectangular, donde se disponen las edificaciones alrededor de un patio
cuadrado, destacando cada estructura por medio de plataformas, la distribución está asociada a
los usos, costumbres y tradiciones de la comunidad, por lo general, la casa se ubica al frente
del predio y a través de ésta se ingresa al patio central, donde se ubican las áreas de servicio de
la vivienda, conformadas por diversas construcciones que dependen del tamaño de la familia,
como el molino, cocina, lavadero, pozo o chultunes, bodega, gallinero y huerto, mientras que,
por lo regular, el altar se ubica al oeste del predio.
La estructura de la casa maya parte de un desplante sobre una plataforma cuadrada de piedra
caliza y estuco, que actúa de cimentación, en ésta se apoya la estructura hecha con base en
horcones de 15 a 20 cm de diámetro o “noh-ocom”, que sirven de columna, sobre los cuales
descansan los largueros horizontales o “pachna”, que funcionan como soporte de la techumbre,
reforzada ésta por unas tijeras o “tanches” que en conjunto con un caballete horizontal o “holnache” forman la altura del techo, sobre el cual se coloca una parrilla, integrada por varas más
delgadas a una distancia equidistante según la clase de material vegetal utilizado (zacate o
guano), al terminar el tejado se colocan palmas dobladas aseguradas por estacas y largueros,
para evitar que el viento las levante.
Conclusión
Al conservar el patrimonio vernáculo e intangible de un pueblo, salvaguardamos un proceso
continuo que se adapta a los procesos socio-culturales y ambientales. La conservación se
relaciona con los valores culturales, usos y costumbres asociados al paisaje cultural de estos
pueblos, por lo cual, intervienen principios de salvaguarda que comprenden este tipo de
emplazamiento rural-arquitectónico, como la interpretación que la comunidad tiene de su
entorno, al formar parte de sus tradiciones y costumbres, al imprimirle expresiones materiales
e intangibles a su arquitectura, de ahí la importancia de respetar esta relación con el medio
natural y la integridad del conjunto; al mismo tiempo, que se comprenden las técnicas
artesanales y el aprovechamiento de este conocimiento para su aplicación a las medidas de
conservación, así como son transmitidos a generaciones futuras; y, finalmente, permitir la
integración de estos elementos y técnicas a nuevos diseños arquitectónicos que cumplan con
las exigencias actuales de sus habitantes.
Descargar