Demografía - Calcular densidad de la población: número de habitantes ÷ superficie del territorio muy poblado → superior a 100 km/hab medianamente poblado → entre 50 a 100 km/hab poco poblado → entre 10 a 50 km/hab muy poco poblado → menor a 10 km/hab - Calcular tasa de natalidad: número de nacimientos ÷ población total · 1000 - Tasa de fecundidad: número de nacimientos ÷ n. de mujeres entre 15 y 49 · 1000 - Tasa de mortalidad: número de fallecidos ÷ población total · 1000 - Tasa de mortalidad infantil: n. de defunciones menores de 1 año ÷ números de nacimientos · 1000 - Tasa de crecimiento natural: tasa de natalidad - tasa de mortalidad - Saldo migratorio n. de inmigrantes - n. de emigrantes Fecundidad: nacimientos por mujer en edad fértil Emancipación: edad media a la que se abandona el núcleo familiar Esperanza de vida: edad media de los fallecidos en un lugar y momento dados Envejecimiento de la población: predominancia de población envejecida y escasa tasa de reposición PIRÁMIDE DE POBLACIÓN 3 grupos de edad: Jóvenes 0-14 Adultos 15-64 Ancianos +65 La pirámide de población de España es regresiva: se corresponde con países desarrollados, con tasas de natalidad y mortalidad bajas, elevada esperanza de vida, una población envejecida y, comúnmente, saldo migratorio positivo. Régimen demográfico antiguo caracteriza a la mayoría de sociedades hasta la revolución industrial (siglo XVIII/XIX). Se define por una natalidad muy alta, una mortalidad elevada, sobre todo la infantil y una esperanza de vida muy baja. En España se mantuvo hasta principios del siglo XX. Natalidad elevada por: economía y sociedad agrarias, inexistencia o deficiencia de una planificación familiar, temprana emancipación, sociedad patriarcal y religiosa. Mortalidad elevada y esperanza de vida baja por: dieta e higiene deficientes, enfermedades infecciosas (y oportunistas, con fuerte influencia en la mortalidad infantil, acceso limitado a medios médicos y farmacológicos, mortalidad catastrófica (epidemias, guerras..) Mortalidad infantil muy elevada: precariedad en el acceso a cuidados prenatales, neonatales (4 semanas tras el nacimiento) y postnatales. Transición demográfica fuerte crecimiento de la población (boom demográfico) por el contraste entre un descenso brusco y continuado de la mortalidad, y un sostenimiento de la natalidad elevada. En una segunda fase de la transición demográfica, la natalidad lentamente desciende y el crecimiento de la población se estabiliza. Descenso limitado de la natalidad: Crisis económica de 1929, inestabilidad política y limitada emancipación femenina durante la II República (1931 1936), Guerra Civil y Posguerra(1936-39 y 1939-55), a pesar de la política natalista del franquismo. •1955-1975—»Baby boom retrasado (desarrollismo), que se frena a partir de 1965 al extenderse un modelo demográfico urbano (descenso del valor económico de la natalidad, problemas de vivienda, recesión económica a partir de 1973) Descenso de la mortalidad: •Incremento en el nivel de vida—»A partir de 1960, fin de la desnutrición endémica, alfabetización, desarrollo cultural, etc. •Avances médicos—»Desarrollo urbano(alcantarillado, gestión de basuras, etc.), vacunas, antibióticos, infraestructuras hospitalarias,extensión de Seguridad Social. •Descenso De Mortalidad Infantil—»pediatría,alimentación infantil,etc. •Aumento De La Esperanza De Vida Elevado crecimiento natural: Baby Boom (1955 - 1975) Régimen demográfico moderno estancamiento y envejecimiento de la población, provocado por un descenso de la natalidad, un descenso de la mortalidad y el aumento de la esperanza de vida. Desde 1950/1975, este es el régimen propio de los países desarrollados, y más recientemente de China y otros lugares. En España se da a partir de 1975 Descenso de la natalidad: •Aspectos generales—» Emancipación de la mujer (incorporación plena al mercado laboral), sociedad laica (divorcio), extensión de planificación familiar y los métodos anticonceptivos y los supuestos abortivos, aumento de la esperanza de vida,retraso la emancipación, crisis económicas. •1975-1998—» Situación económica desfavorable desde 1973, precariedad laboral, alto precio de la vivienda, laicización de la sociedad (relaciones de pareja pesa más que la función reproductora), consolidación de la Seguridad Social (jubilaciones,políticas sociales, etc.), formas distintas de familia, etc. •1998-2008 —» Ligera recuperación de la natalidad motivada por la recuperación económica (burbuja inmobiliaria y crediticia), natalidad retrasada del baby boom, inmigración, conciliación laboral, etc. •Desde 2008—»Descenso de la natalidad fruto de la coyuntura económica desfavorable. Mortalidad baja: •Oscilaciones —» Leve ascenso desde 1982 por el envejecimiento de la población, y descenso acusado en las últimas décadas, con una población envejecida. •Mortalidad infantil muy baja •Esperanza de vida muy alta —» Mayor entre mujeres (motivos biológicos) que hombres (motivos sociales), creciente a partir de la generación de 1975 Crecimiento natural oscilante: población muy envejecida—» Consecuencias futuras (gasto social, precarización de las pensiones, presión fiscal, etc. Características de la población española Además, la distribución espacial de la población es muy desigual, con zonas altamente pobladas (Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana) y otras muy poco pobladas, como las dos Castillas y Extremadura. Estas diferencias se explican por el desarrollo económico de las áreas más pobladas, vinculado a la industria y al sector servicios, sobre todo al turismo, frente al interior agrario de España; al desarrollo de grandes áreas urbanas, frente al entorno rural del interior; y a los procesos históricos, como el éxodo rural entre 1950-1975, o la inmigración entre 1999 y 2011, y desde 2017 hasta la actualidad. •Desarrollo urbano (s. XIX-1950/55): crecen las ciudades, se desarrolla la industria, y la población rural empieza a trasladarse a los centros urbanos, cuando no emigra a América, perdiendo población el interior agrario. Esta tendencia se ve interrumpida por la Guerra Civil (1936-1939) y la posguerra. •Éxodo rural (1950/55-1970): tras la posguerra, la dictadura de Franco permite la entrada de capitales extranjero y turistas. La economía española se terciariza, y el campo se despuebla por el éxodo a las ciudades y la emigración a países centroeuropeos más desarrollados. •Crisis económica y democracia (1970-1999): un grave crisis económica mundial, en 1973, debilita el turismo, aumentando el desempleo y frenando las migraciones, que se recuperarán lentamente gracias a la llegada de la democracia y el Estado del Bienestar a España. •Burbuja financiera (1999-2011): gracias al sector de la construcción y el bancario, la economía española crece, y el país experimenta un crecimiento motivado por la inmigración. •Crisis económica (2011-2018): la crisis motiva un decrecimiento y saldo migratorio negativo. Problemas actuales de España: •Natalidad: muy baja, tanto que no garantiza el reemplazo generacional, con una tasa de fecundidad del 6,88‰, y un índice de fecundidad de 1,16 hijos por mujer (2022). Las razones son la situación económica, el carácter laico de la sociedad, un menor número de mujeres en edad fértil y un aumento de la edad media del primer hijo, asociado a la alta esperanza de vida, alta tasa de paro y la precarización de los salarios, que hace que las familias consideren como un coste inasumible tener el primer hijo o más, baja tasa de emancipación de los jóvenes, que no abandonan el hogar paterno, o el retraso de la edad para contraer matrimonio o asumir otras fórmulas de convivencia. •Envejecimiento: la disminución en el número de nacimiento reduce al población joven, con un repunte aislado de los nacidos entre 2005 y 2009, en pleno crecimiento económico. Por el contrario, el aumento de la esperanza de vida y el envejecimiento de la generación del baby boom explican el envejecimiento general de la población. A esto cabe sumar un descenso de la mortalidad. •Crecimiento vegetativo y saldo migratorio: desde el año 2011, España experimentó un descenso de población, que volvió a repuntar a partir de 2017. Aunque el crecimiento natural es positivo (con la excepción de los años afectados por la pandemia de COVID), en los años de crisis fueron más los residentes en España (españoles y extranjeros) que abandonaron el país (emigrante) que las personas que se establecieron en él (inmigrante). Esta tendencia ha empezado a rectificarse desde el años 2017 gracias a la recuperación del turismo y la necesidad de mano de obra no cualificada, así como el saldo migratorio, de nuevo positivo. Durante los dos primeros trimestres de 2023, por ejemplo, la población aumentó en 135.186 personas. •Población activa: en España representa el 44% del total (21.265.900), una cifra cada año más baja fruto del envejecimiento de la población. La mayoría de residentes en España trabajan en el sector terciario (77%), con un alto nivel de temporalidad (el más alto de la Unión Europea) y salarios muy bajos. La tasa de desempleo en España es una de las más altas de Europa: alrededor de 3 millones de desempleados, una situación más común entre mujeres que hombres, y mucho más habitual entre jóvenes menores de 25 años que en mayores de esa edad. Procesos migratorios: España ha pasado en poco tiempo de ser un país emigrante a un receptor de inmigrantes debido al crecimiento económico, la estabilidad derechos política, sociales y las condiciones climáticas de nuestro país. Como buena parte de los países desarrollados, España tiene una población envejecida, por lo que la inmigración resulta positiva, aumentando las tasas de natalidad y sosteniendo el gasto social. Migraciones interiores •Antes de 1950/55: España, un país agrario, vive un tímido éxodo rural (población que se desplaza desde zonas agrarias hacia áreas urbanas e industriales) durante el siglo XIX y el primer tercio del siglo XX, coincidiendo con el desarrollo industrial y urbano de algunas zonas (Madrid, Bilbao, Sevilla, el litoral Mediterráneo). Este fenómeno, agudizado por la mecanización del trabajo agrario que afectó al cultivo, floreció hasta la Guerra Civil (1936-1939). El conflicto y la posguerra sumió a España en la miseria, favoreciendo una ruralización (regreso a zonas agrarias). •Entre 1950/55 y 1975: el cambio generacional y político en el franquismo, conocido como desarrollismo, permitió la inversión de capitales extranjeros en España, con el apoyo de Estados Unidos, lo que favoreció la industria y el crecimiento del tejido productivo en lo ejes de desarrollo (Madrid, Bilbao, Barcelona, etc.). La aparición de un turismo basado en la debilidad de la peseta, los precios bajos y la explotación del sol y la playa, permitió el desarrollo económico del litoral mediterráneo y los archipiélagos (Baleares y Canarias). Esto provocó un éxodo rural, tanto de españoles residentes en la España interior como de emigrantes que cruzan las fronteras, se establecen en países europeos desarrollados, y al regresar a España no lo hacen a los espacios rurales de donde salieron, sino a los nuevos centros urbanos. •Desde 1975: la crisis industrial y la recesión económica provocan un freno al éxodo rural, que se completa con un proceso de extensión de las áreas metropolitanas, la aparición de núcleos de residencia suburbanos, zonas de equipamiento y servicios fuera de la ciudad, áreas residenciales y demás elementos que amplían la zona de influencia de la ciudad y reducen la presencia del campo, cada vez más abandonado. En la actualidad, las migraciones interiores son pluridireccionales, con protagonistas más variados (jóvenes estudiantes, ancianos jubilados, población activa, etc.). Entre las migraciones actuales destacan las laborales (procedentes de zonas rurales e industriales en declive a núcleos urbanos), residenciales (en busca de residencia más asequible, y favorecidas por el desarrollo de las infraestructuras viales y de las áreas metropolitanas), de retorno (jubilados y prejubilados regresando a zonas rurales) y pendulares (trabajo, estudios, ocio). Consecuencias de las migraciones interiores en España son: •Demográficas : profundo desequilibrio entre una España interior y agraria, envejecida y despoblada, frente a una España urbana y litoral, mucho más joven. •Económicas : las zonas rurales presentan un déficit de inversiones, privadas y públicas, en infraestructuras o servicios, a lo que se suma la escasa oferta de empleo. •Sociales : la ausencia o precariedad de servicios básicos en zonas rurales, como es el acceso a colegios, institutos, hospitales, espacios de ocio, etc. •Medioambientales : abandono y deterioro de ciertos paisajes rurales frente a la sobrepoblación urbana que genera contaminación, sobreexposición al ruido, etc. Migraciones exteriores •Emigración (s. XIX-1999): tradicionalmente, España siempre ha sido un país de emigrantes, con destino a zonas hispanohablantes (América Latina) o países cercanos de Europa (República Federal Alemana, Suiza, Francia), con discretas tasas de retorno. La emigración a Europa fue puntual, y estuvo en muchos casos relacionada con la inestabilidad política (exilio). Entre 1914 y 1945 decae la emigración por la Primera Guerra Mundial, la crisis económica de 1929, la Guerra Civil y la posguerra y Segunda Guerra Mundial, dándose numerosos casos de exilios forzados a países como México, Francia o la Unión Soviética. Entre 1945 y 1975, la emigración se recupera levemente (ingreso de España en la ONU, alianza con países como Argentina, llamamiento familiar, etc.), pero es superada con creces por la emigración a países desarrollados del centro de Europa que demandan mano de obra no cualificada y barata. •Inmigración (1999-2009): el crecimiento económico convierte al país en receptor de emigrantes, procedentes, en su mayoría, de países miembros de la Unión Europea, Ecuador (lengua) y Marruecos (proximidad). Los sectores de la construcción y el turismo buscarán en estos emigrantes mano de obra no cualificada. •Emigración (2009-2015): la crisis económica animó a muchos extranjeros residentes en España a regresar a sus países o buscar oportunidades en otras naciones. Al mismo tiempo, cientos de miles de jóvenes españoles, un 80% de ellos con titulaciones universitarias, emigraron, en su mayoría a países de la Unión Europea, en busca de empleo y promoción profesional. •Inmigración (2015-2023): la recuperación económica fundada en el turismo y las coyunturas adversas en otros países, permiten regresar al saldo migratorio positivo, tendencia levemente interrumpida por la pandemia de COVID (2019-2021), y recuperada en los últimos años. Emigración española: Estadísticamente, el ciudadano español que emigra al extranjero tiene entre 18 y 30 años de edad; cuenta con una cualificación profesional y académica, habiendo concluido sus estudios superiores (formación profesional o universitarios); su lugar de destino suelen ser países desarrollados, principalmente miembros de la Unión Europea, por la facilidad que los acuerdos de libre tránsito ofrecen entre los países del llamado Espacio Schengen, destacando el Reino Unido y los países nórdicos; si bien los emigrantes españoles desarrollan trabajos no cualificados en sus lugares de destino (hostelería, construcción, etc.), el uso de la lengua y su cualificación de origen les permite acceder a una promoción laboral de la que no pueden gozar, comúnmente, en España por el alto índice de desempleo. Inmigración a españa: La inmigración extranjera en España se divide en varios factores que explican las zonas habitadas. Generalmente, los encontramos en zonas urbanas como Madrid, en busca de oportunidades ya sea de empleo y/o de sanidad, entre otros. Respecto a otro tipo de inmigrante, tenemos a los que utilizan España como un lugar de jubilación, estos suelen escoger los archipiélagos españoles, debido a las buenas condiciones climáticas que presentan. Respecto a otro tipo, los turistas, que suelen ir a zonas urbanas que son conocidas por su prestigio como Sevilla o Valencia, ya sea por el clima o como he dicho, por su popularidad. Por último, otro de los factores es la huída de los magrebíes hacia España, instalándose en los litorales o cerca de estos por su proximidad al mar. En general encontramos a una España desigual en general, ya sea por inmigrantes o por la centralización demográfica a espacios urbanos. Consecuencias de la inmigración: Los inmigrantes en términos generales, han impulsado la natalidad (debido a sus ideales y su gran importancia a la reproducción), también han aumentado el PIB y la tasa de actividad gracias a la incorporación del inmigrante al trabajo. Aunque no todo es bueno, pues aumentan el envío de remesas de dinero al extranjero, además de algunas observaciones de autores que exponen que la inmigración retrasa la modernización por la gran mano de obra y la precarización salarial, sin embargo, no hay que tenerlo en cuenta porque dependerá de cada país. Las consecuencias que más visualizamos es la multiculturalidad en la que podemos interrelacionarnos con personas de diferente cultura, religión, lengua… cosa que a su vez provoca rechazo, xenofobia, racismo e incluso aporofobia por las duras condiciones de existencia de la población inmigrante. Por último, el saldo migratorio se ha visto positivo gracias al mayor número de inmigrantes frente a los que emigran. Población Espacio rural Hab: municipios rurales por debajo de 2000. municipio semiurbano: entre 2000-10000 Actv económica: sector primario (ganadería, agricultura, silvicultura, pesca), y mínima presencia del secundario y terciario. Demografía: población envejecida, baja densidad de población (menos de 20 hab/km2 baja tasa de natalidad, saldo negativo (éxodo rural) Servicios: dificultades en el acceso a servicios básicos (sanidad, educación, etc.) y de ocio. Impacto medioambiental: mantenimiento de la biodiversidad, conservación de recursos básicos, desarrollo de una economía sostenible. Espacio urbano Hab: municipios urbanos por encima de 10000. Ciudad: más de 50000 Actividad económica: sector secundario (industria), y sobre todo sector terciario (servicios, comercio, turismo, etc.) Demografía: población de edades más diversas, alta densidad de población (por encima de los 1.000 hab/km2), tasa de natalidad más alta y saldo positivo. Servicios: amplia oferta de servicios, tanto básicos (públicos y privados), como de ocio. Impacto Medioambiental: problemas medioambientales (smog, lluvia ácida, etc.), agotamiento de recursos, residuos. JERARQUÍA DE CIUDADES METRÓPOLIS MUNDIALES: grandes ciudades, referente mundial, en términos políticos, económicos y culturales. NewYork METRÓPOLIS NACIONALES: capitales de Estado y grandes ciudades de un país, con influencia internacional y predominancia nacional (Madrid y Barcelona). METRÓPOLIS REGIONALES: ciudades entre 500.000 y 1.500.000 h., bien comunicadas y centro de un área metropolitana. Comúnmente, suelen ser capitales regionales (Valencia, Sevilla, Zaragoza). METRÓPOLIS SUBREGIONALES: entre 200.000 y 500.000 de habitantes, capitales de provincia y ciudades con servicios especializados o referentes económicos (Murcia, Elche) CENTROS SUBREGIONALES: entre 50.000 y 200.000 habitantes, relevantes por el papel administrativo como capitales de provincia (Teruel, Soria) CAPITALES COMARCALES: localidades entre 10.000 y 50.000 habitantes, con equipamientos e infraestructuras básicas que les permite influir en las localidades colindantes (Torrente). EJES DE DESARROLLO El eje cantábrico, en el que encontramos parte oriental de Asturias, de León, Palencia, Burgos, Vizcaya, Guipúzcoa, Cantábria. En este eje encuentras metrópolis regionales como Bilbao, metrópolis subregionales como Gijón, y centros subregionales como León. El eje mediterráneo, en el que comprende Castellón, Valencia, Alicante, Tarragona, Gerona, Murcia y Barcelona. Encontramos una metrópolis nacional, Barcelona; una metrópolis regional como Valencia; una metrópolis subregional como Murcia, y un centro subregional como Castellón de la Plana. El eje atlántico, en el que comprende Lugo, Ourense, A coruña y Pontevedra. En este encontramos una metrópolis subregional como la Coruña; centro subregional como Ourense. El eje andalúz, en el que comprende Sevilla, Málaga, Jaén, Granada, Cádiz, Huelva, Córdoba, Almería, Ceuta, Jerez… Encontramos una metrópolis regional como Málaga, una metrópolis subregional como Granada y un centro subregional como Jaén.