El proceso de convertirse en persona Llegar a ser, ser persona, se puede considerar desde dos puntos de vista. Uno, no hay que hacer nada porque por el hecho de vivir ya se es, nacemos con la dignidad de nuestro ser de persona. Dos, considerar un proceso no lineal en el que se va avanzando a la conciencia del yo, de la vida, de los otros seres y del mundo. Llegar a SER implica centrarse en sí mismo, afirmarse, participar y estar con otros, tomar conciencia de la naturaleza y conciencia de uno mismo. Implica, además, abordar y conocer el sufrimiento, los problemas y el dolor. Centrarse en sí mismo significa que el centro del amor soy yo mismo, yo misma. Requiere cuidarme a mí, a mis emociones, mis pensamientos y a mi cuerpo, porque eso es cuidar la vida, porque yo soy vida y somos dadores de vida los unos para los otros. Afirmarse quiere decir e implica que lo que soy está bien, dentro de mí están las cualidades y los valores necesarios para ser feliz, solo necesito ponerme en marcha, no quedarme parado como un espectador y salir al mundo. Al salir al mundo me encuentro con otros seres y personas y necesito convivir y saber estar con ellos porque cuidándolos a ellos cuido la naturaleza y a las personas y, por lo tanto, me cuido a mí. Sin una naturaleza limpia, cuidada y viva mi propia vida sería un mal camino centrado en la supervivencia. Somos naturaleza y vida porque las personas también somos, por ejemplo, aire y agua y nos componemos de los elementos de la vida. Es en el encuentro con el otro también te encuentras a ti mismo y tomas la verdadera conciencia de lo que eres y son los otros seres humanos, pues solo se ama lo que se conoce. Cuando conocemos los problemas y el sufrimiento queremos evitarlos debido a que deseamos vivir en una felicidad constante. No obstante, observar y contemplar tus problemas sin juicio despiadado ayuda a paliar el efecto dañino que tiene en la persona andar rumiando los errores propios o los de otros. El pasado pasó y no se puede modificar. Rogers afirma que en este proceso de llegar a SER la persona alcanzará: la autopercepción valiosa, bondadosa y confiada; el autoconcepto, positivo y ajustado de sí mismo; la percepción de los otros y del ambiente, no como alguien hostil o atacante; las estrategias personales en la resolución de problemas; la autorrealización y la integración e inclusión adaptativa de la persona en el ambiente y su entorno natural. Para ello deberá la persona considerar que: Tiene que asimilar los cambios y decir que no a mis actitudes defensivas y creencias limitantes. Considerar su capacidad de amar y ser amada Dejarse sentir y contemplar las emociones sobrevenidas a su corazón y a su cabeza. Amarse a una misma. Concentrarse en un proceso de interiorización que implica percibir que la felicidad soy yo y está dentro de mí, no fuera. Se involucra en un camino que le lleva a una meta, pero el aquí y ahora es el foco de atención para SER. De tal modo que, una persona que experimenta el camino del ser: Estará más centrada en la realidad y los problemas con un mejor enfoque privado y personal de la ansiedad y los miedos. Se aceptará más a sí misma y a los demás (espontaneidad y sencillez) Experimentan la privacidad y la intimidad. Vivirá la independencia entre cultura y medio. Será más original y creativa, sin miedo neurótico al fracaso o el error. Tendrá sentido del humor no hostil. Son democráticas, consultan, opinan, contrastan, se defienden pero consideran a los demás y empatizan. Tienen relaciones personales íntimas o sublimadas, disfrutan de su afectividad y sexualidad. Discriminan entre medios y fines Viven experiencias espirituales En definitiva, el yo y su desarrolló se nutren de cinco elementos que nos dan la vida y el sentido de lo que somos. 1. La familia. No solo la familia biológica, también los que me quieren, me protegen y me cuidan y lo llevan haciendo mucho tiempo. 2. La naturaleza y los seres sintientes. 3. El ambiente y el contexto en el que crecemos, amigos y trabajo. 4. El amor y las metas, las funciones ejecutivas para llegar a objetivos que nos den vida. 5. El sufrimiento el dolor y la frustración como elemento que nos acompaña porque todas las personas comentemos errores. Reflexión final, no obstante, cualquier atributo que se le ponga al yo resulta insuficiente. Soy estudiante, no soy neurótico, soy Paco, soy Gaia, soy conductor, soy de la familia García, soy portugués, no soy amable, soy psicólogo, soy…, nada de eso me define, simplemente soy yo, yo soy. Con silencio, calma y paz, a veces entre el ruido y la prisa, es como mejor podemos tomar conciencia del yo soy.
