LA CALLE DE LA ACEQU IA ARQUITECTURA de BA RRIO LA CALLE DE LA ACEQUIA Editor: Arquitectura de Barrio Autores: Enrique de Andrés Rodríguez Coral Marín Marín ISBN: 978-84-09-09286-4 D.L: MU 208-2019 Reservados todos los derechos La ruta por la calle de la Acequia es un recorrido por las calles que conforman en la actualidad el trazado de la acequia mayor Aljufía a su paso por la ciudad, desde el Jardín de la Seda, hasta el punto donde cambia de nombre pasando a denominarse Benetucer, en la calle Enrique Villar frente al Teatro Circo. El nombre "Aljufía" procede del árabe al-Yawfiyya, "la del norte", nace en el Azud Mayor del río Segura, la Contraparada, entre las pedanías de Javalí Nuevo y Javalí Viejo, discurriendo en paralelo al río por su lado norte, dando riego a estas tierras. La Aljufía fue una de las primeras acequias en construirse en el siglo IX. La acequia favoreció el desarrollo en el arrabal de la Arrixaca de las almunias de las grandes familias andalusíes. Allí construyeron el Alcázar Seguir, primero Ibn Mardanish en el s.XII, transformándolo en un nuevo palacio Ibn Hud en el siglo XIII. Tras la conquista cristiana siguió cumpliendo importantes funciones de abastecimiento de agua a los numerosos conventos y palacios situados en sus proximidades. También tuvo funciones industriales a partir del siglo XVII con la creación junto a su cauce de molinos hidráulicos, fábricas de seda y la fábrica de salitres. Haremos este recorrido a lo largo del tramo urbano de la Aljufía, por los edificios y construcciones que surgieron por su presencia, dando a conocer la importancia de este patrimonio cultural que recorre el centro de la ciudad. JARDÍN DE LA SEDA La acequia Aljufía discurre bajo la calle de la Olma al sur del Jardín de la Seda. Su historia se remonta a finales del s. XV, cuando la ermita y hospital de San Lázaro, creado en sus inmediaciones, quedaron al cuidado de la hermandad de San Antón tomando su nombre la ermita. Posteriormente se establecen frente a esta ermita los franciscanos de San Diego, fundando un convento que permanecería hasta finales del XVIII, ubicándose entonces la moderna fábrica de tejer la Tolonesa, que se nutría de la corriente de la Aljufía. La fábrica, demolida a mitad del s. XX, transformó su solar años después en jardín público, conservando la chimenea, vestigio de aquella floreciente industria. Al final de la calle de la Olma se encontraba el molino de Zoco y su pantano. Junto a la Hornacina de la Virgen de las Angustias una placa indica: “En este lugar estuvo la antigua y monumental Puerta de Molina, por donde entraron los Reyes Católicos al barrio mudéjar el 26 de abril de 1488”. En 1990 se construye el actual jardín, remodelado en 1999. El claustro, un pequeño patio y el huerto articulan el conjunto monástico, situándose el alzado del templo a la calle de la acequia. En 1837, consecuencia de la desamortización, la comunidad abandonó el edificio, regresando en la década de los 60 del mismo siglo. En 1936 al comenzar la Guerra Civil tuvieron que abandonarlo nuevamente, pasando a ser convertido en cárcel y acuartelamiento, sufriendo graves daños el edificio y su patrimonio. LAS AGUSTINAS En 1616 llegaron a Murcia las Agustinas descalzas, instalándose en la ermita de San Ginés. Meses más tarde se trasladaron a su actual emplazamiento, levantando un primer templo. Las monjas comenzaron a trabajar la seda que se convirtió en una fuente de ingresos. En el s. XVIII el aumento de vocaciones y el auge económico que experimentaba la ciudad llevaron a la construcción del actual Monasterio. En 1939 fue utilizado como prisión. En 1946 parte del convento fue refugio para familias que sufrieron pérdidas en las inundaciones de aquel año. En 1981 fue declarado Bien de Interés Cultural. MUSEO DE LA CIUDAD Los orígenes de este edificio hay que buscarlos en el siglo XVI, donde aquí se levantó la llamada Torre de Junterón, residencia de Don Gil Rodríguez de Junterón, destacado personaje de la época. Poseía y se conserva en la parte posterior, un huerto de origen hispano-musulmán regado por las aguas de la acequia Caravija. Este huerto, conocido como Cadenas o Junterón, era una zona de recreo de la casa, remontándose las primeras referencias sobre este espacio a 1479. Entre la vegetación hay especies tan diversas como palmeras, higueras, magnolios y plantas aromáticas. La remodelación más importante de la Torre de Junterón se produjo en 1868, cuando se sustituyeron las torretas del segundo cuerpo y se abrió una puerta hacia el huerto. En el siglo XIX eran sus propietarios la familia López Ferrer. El edificio, adquirido en 1994 por el Ayuntamiento de Murcia fue remodelado y acondicionado para albergar el Museo de la Ciudad, que abrió sus puertas en 1999, sirviendo la silueta de la antigua Torre de Junterones como emblema del Museo. FÁBRICA PRINCIPIOS DEL SIGLO XX CAM IN O DE LA H UERT A 8 17 Fundada por Real Orden de 13 de julio de 1654 expedida por Felipe IV, sobre un área de cuatro tahúllas, llegó a abarcar más de 33 en sucesivas ampliaciones. 10 7 9 Administrada unas veces por el Estado y otras arrendada a particulares hasta alcanzar en el siglo XVIII el título de Real Fábrica, pasando en 1865 a forma parte de la Fábrica de la Pólvora, como taller dedicado a la refinación de sus salitres. 6 5 11 4 El salitre recién extraído, mezclado con otras sales, no servía para la producción de pólvora por lo que se realizaba su afinación en esta fábrica. 12 3 13 14 2 La última reforma de la fábrica se realizó a principios del siglo XX. 15 1 1. OFICINAS Y PABELLONES 2. BOTIQUÍN, ALMACÉN DE EFECTOS, TALLER 3. ASEOS 4. TALLER DE AFINO DE SALITRE 5. ALMACÉN DE SALITRE 6. PABELLÓN 7. DUCHAS Y ASEOS 8. TRANSFORMADOR 9. TALLER DE CARBONIZAR 10. ALMACÉN DE AGNAMITA REAL FÁBRICA DE SALITRES CAL LE D E LA A CE QUIA 11. PABELLONES 12. BÁSCULA 13. BIBLIOTECA 14. DEPÓSITOS DE AGUA 15. CUADRA Y GARAJE 16. CAPILLA 17. PABELLÓN PORTERO 16 Del antiguo complejo de la Real Fábrica de Salitre, tan sólo queda hoy en pie el edificio que fue biblioteca de la fábrica (13), actual sede del Servicio Municipal de Estadística, el antiguo taller de afino de salitre (4), actual sede del Museo Taurino de Murcia, y la chimenea del taller de carbonizar (9), además del antiguo pabellón central de oficinas y residencia de la dirección militar de la fábrica. ERMITA DEL SALITRE Fueron los Franciscanos descalzos del Convento de San Diego en 1598, los que iniciaron en Murcia la tradición de los “Vía Crucis”. La procesión salía de la primitiva iglesia de San Miguel y paso a paso llegaba hasta la ermita del Calvario, configurando la Ermita del Salitre el primer paso. La pequeña capilla que aún resiste, tomó en 1951 su forma actual adoptando un estilo neoclásico barroco con poca ornamentación, propio de la época en que fue construida la fábrica. Conformaba una esquina del antiguo recinto de la Fábrica del Salitre y se construyó para dar servicios religiosos a los trabajadores de la fábrica. Su historia se remonta al S.XVI con la construcción del antiguo Colegio de la Anunciata, cuya arcada del claustro y portada aún se conservan. A finales del siglo XVIII albergó la Real Fábrica de Hilar Sedas la Piamontesa. En 1808 se habilitó como Real Fábrica de Armas de Chispa. El edificio actual fue construido entre 1914 y 1933, obra del arquitecto José Antonio Rodríguez, aunque renunció ante la decisión del promotor José García Martínez de añadirle 5 plantas más de las proyectadas. Edificio de ladrillo visto al estilo de los primeros rascacielos neoyorkinos. Inicialmente el edificio albergó una fábrica de juguetes y golosinas y dos décadas más tarde, debido a la crisis económica provocada por la Guerra Civil, pasó de edificio industrial a edificio de viviendas. CASA DE LOS 9 PISOS COLEGIO DE LA ANUNCIATA REAL FÁBRICA DE HILAR SEDAS LA PIAMONTESA REAL FÁBRICA DE ARMAS DE CHISPA CASA DE LOS 9 PISOS IGLESIA DE SAN MIGUEL Consagrada catedral la mezquita mayor Aljama en 1266, la mayor parte de mezquitas existentes en Mursiya fueron transformadas en iglesias parroquiales, y el resto concedidas a repobladores cristianos que les dieron usos diversos. El templo de San Miguel fue consagrado parroquia en 1272. El inmueble actual, edificado entre 1691 y 1712, es muestra del barroco murciano. La torre de la iglesia se derrumbó en 1864 debido a las filtraciones de agua de la contigua Acequia Mayor Aljufía. PALACIO E IGLESIA DE SAN ESTEBAN COLEGIO DE LOS JESUITAS CASA DE LA MISERICORDIA SEDE PRESIDENCIA GOBIERNO REGIONAL IGLESIA SALA DE EXPOSICIONES SALÓN DE ACTOS La historia del edificio comienza en 1555, cuando se funda en Murcia uno de los primeros colegios de Jesuitas de España. En él se instaló la Compañía de Jesús, en las proximidades de la parroquia de San Miguel, en el arrabal de la Arrixaca. Las obras del conjunto monástico se terminaron en 1557, mientras que la iglesia quedó finalizada en 1564. Tras la expulsión de los Jesuitas de España se estableció en el edificio la Casa de Misericordia en 1777, y posteriormente se edificó un anexo como Manicomio Provincial. Declarado Monumento Nacional en 1931. En 1982 se convirtió en la sede de la Presidencia de la Región de Murcia y del Consejo de Gobierno Autonómico. Desde entonces se conoce como Palacio de San Esteban, habilitándose la iglesia como sala de exposiciones temporales, en la actualidad una nueva rehabilitación la convertirá en sala de actos múltiples. UN PASEO POR LA CA 1 3 4 2 A OVÍ AUT FÍA ALJU 1. JARDÍN DE LA SEDA 2. LAS AGUSTINAS 3. MUSEO DE LA CIUDAD 4. FÁBRICA DEL SALITRE 5. ERMITA DEL SALITRE A AVIJ CAR 6. CASA DE LOS 9 PISOS 7. IGLESIA DE SAN MIGUEL 8. PALACIO E IGLESIA DE SAN ESTEBAN 9. YACIMIENTO DE LA ARRIXACA 10. PORTILLO DE SAN ANTONIO 5 ALLE DE LA ACEQUIA A NELV 8 6 9 10 11 12 14 13 17 15 18 19 20 16 7 11. GRAN VÍA 12. ARCO DE LA AURORA 13. TEATRO Y PLAZA ROMEA 14. LAS CLARAS 15. ESCUELAS GRADUADAS 16. PLAZA E IGLESIA DE SANTO DOMINGO 17. PALACIO DE LOS VELEZ / ALFONSO X 18. CONVENTO DE LAS ANAS 19. TEATRO CIRCO 20. PUERTA NUEVA / IGLESIA DE LA MERCED YACIMIENTO DE LA ARRIXACA Llamado así por situarse en el arrabal de la Arrixaca de la Mursiya andalusí, presenta una dimensión de más de 10.000 m² en pleno centro urbano. El yacimiento sin poseer grandes valores monumentales, describe con precisión la forma de vida del momento de máximo esplendor de Mursiya a través de sus edificios. Un arrabal con amplias calles de trazado rectilíneo, siguiendo una ordenación geométrica, lejos del laberinto de callejuel callej callejuelas de la Medina, con unas edificaciones que muestran la riqueza de la ciudad y sus habitantes. Una zona densamente poblada de palacios y viviendas organizadas en torno a patios. Un posible funduc (posada), una pequeña mezquita, una maqbara (cementerio) y una compleja red de saneamiento. El yacimiento permite poder contemplar en su totalidad la ordenación urbana de un período brillante de vida de la ciudad. PORTILLO DE SAN ANTONIO GRAN VÍA Tras la conquista castellana se llevan a cabo adaptaciones en la muralla de Murcia, principalmente la apertura de nuevas puertas y portillos y el cierre de otros accesos. El portillo de San Antonio se ubicaría en el paño norte de la muralla, próximo al actual yacimiento de la Arrixaca, accediendo a la calle que hoy lleva su nombre. Por la calle Portillo de San Antonio se llegaba a la Torre de la Marquesa, donde a comienzos del s.XX se construyó la Carcel y la Estación de Zaraiche. Comenzando el s.XX la ciudad presentaba carencias importantes de infraestructuras, fundamentalmente comunicación, pavimentación y alcantarillado, que habían motivado la elaboración de distintos planes para la modernización de la urbe desde finales del siglo XIX. A principios del XX, comienza a plantearse la ampliación de la ciudad por el norte y la intervención en el casco antiguo. Tras varios proyectos el Ayuntamiento en 1942 impulsa el proyecto de Gaspar Blein que variaba el trazado de la Gran Vía respecto a las propuestas anteriores. La Gran Vía comunicaba, la nueva Plaza Circular al norte, y el Puente Viejo al sur, pero el trazado afectaba con esta propuesta a los Baños Árabes. Se declaró la voluntad de respetar los baños, incorporados al catálogo de Monumentos Nacionales desde 1931, con categoría de Monumento Histórico Artístico. El debate sobre la importancia de los baños y la necesidad de conservarlos se mantuvo en el ámbito de los expertos hasta 1952, entonces se trasladó a través de la prensa a la opinión pública, el tema llegó incluso a periódicos de edición nacional. Planteado como Gran Vía sí, Gran Vía no, progreso o conservación. Había que elegir entre la nueva y la vieja Murcia. Finalmente los baños fueron derribados y tras la apertura de la Gran Vía, comenzó la construcción de nuevos edificios en la reciente arteria urbana. ARCO DE LA AURORA Su nombre proviene de las devociones marianas, se dice que al ser una calle estrecha y oscura, se puso allí la imagen de la Virgen María en 1767 para dar seguridad a sus vecinos y mitigarles el miedo. Su arco, del siglo XIX, está situado en el antiguo Portillo de la Aurora, en la muralla del arrabal de la Arrixaca en el siglo XIII. El primer Proyecto de Gran Vía de César Cort en 1922, enlazaba esta calle con el Puente de los Peligros. TEATRO Y PLAZA ROMEA Desamortizado el convento de Santo Domingo a mitad del siglo XIX, sobre el solar del convento y su huerto regado por la acequía Aljufía, se levantó el Teatro Romea y la actual plaza. Anteriormente denominada Plaza del Esparto, allí se ubicaba el mercado de este producto. Bajo la plaza se conservan restos de la muralla andalusí del siglo IX. Su aspecto actual corresponde al proyecto del arquitecto Fernando de Retes en 1993. Además del Teatro Romea otros edificios significativos de la plaza son, el palacio Vinader, arquitectura civil del S. XVIII y el palacio González Campuzano situado frente al teatro en lado sur de la plaza. El Teatro de los Infantes fue inaugurado por la Reina Isabel II en 1862, posteriormente se llamó de la Soberanía Nacional, hasta 1872 que adquirió su actual nombre de Teatro Romea. Dos veces se ha incendiado, en 1877 y en 1899, reconstruido en ambas ocasiones por el arquitecto Justo Millán. Las últimas restauraciones se realizaron en 1985 y en 2012. LAS CLARAS Las religiosas transformaron el antiguo alcázar, demoliendo varias construcciones y levantando nuevas estancias, hasta dotar a la residencia de la imagen característica de un monasterio. En el s.XX, las hermanas de Santa Clara se desprenden del ala oeste. Al poco tiempo comienza la Guerra Civil con la exclaustración de las religiosas y la conversión del monasterio en cuartel de tropas. Finalizando los años setenta, se inician los trabajos de restauración, que experimentan un definitivo impulso a partir de 1995. Hoy día alberga el Museo de Santa Clara. En el siglo XII, en un lugar privilegiado al norte de la medina, se edificó durante el emirato de Ibn Mardanish, el Alcázar Seguir (Alcázar menor) de la ciudad. A comienzos del siglo XIII, bajo el emirato de Ibn Hud se construyó un nuevo palacio sobre los restos del conjunto mardanisí. Lo más llamativo de su planta es el singular patio, compuesto por una gran alberca longitudinal y cuatro arriates deprimidos. Tras la sublevación mudéjar en 1266 y la llegada de Alfonso X, el alcázar islámico pasó a manos de la corona castellana, que lo mantuvo como palacio cristiano hasta que Pedro I lo concedió en 1365 a las monjas de Santa Clara de Murcia. ESCUELAS GRADUADAS En 1917 se inauguraron en Murcia las primeras Escuelas Graduadas Públicas. Cada una de ellas se ubicó en un punto cardinal de la ciudad con objeto de llevar la educación a toda la población. Las de Cierva Peñafiel se construyeron al Norte en el barrio de Santo Domingo, las del Carmen al Sur en el barrio del Carmen, las de Andrés Baquero Almansa al Este en el barrio de Santa Eulalia y las de García Alix al Oeste en el barrio de San Antolín. Todas ellas fueron obra del arquitecto Pedro Cerdán Martínez, referente destacado de la arquitectura regional desde finales del siglo XIX hasta mediados del siglo XX. IGLESIA Y PLAZA DE SANTO DOMINGO En 1272 Alfonso X trasladó el mercado al arrabal de la Arrixaca, donde existía una plaza ubicada al sur del Alcázar Menor, la actual plaza de Santo Domingo, en donde construyó cien tiendas. Conocida como Plaza del Mercado se convirtió en centro de comercio durante la Edad Media. También se realizaron ejecuciones públicas y corridas de toros. En el s.XX se diseñó una zona ajardinada en su interior, aunque fue en 1893 cuando se plantó el famoso y centenario ficus que hoy la adorna, la última remodelación fue llevada a cabo en 1998, convirtiéndola en un espacio peatonal. A pesar de que la Iglesia es la que da nombre a la plaza, la fachada principal de la misma se encuentra en la vecina Plaza de Julián Romea. La fachada que da a la Plaza de Santo Domingo, esta creada para dar un remate monumental a la plaza, en un momento de expansión económica de la ciudad como fue el siglo XVIII. PALACIO DE LOS VELEZ LAS ANAS Construido a finales del siglo XVIII, el Palacio de los Vélez, con una arquitectura doméstica barroca, estaba situado entre los conventos de Las Claras y Las Anas. El Marquesado de los Vélez otorgado por la reina Juana I de Castilla a Pedro Fajardo y Chacón en 1507 fue el linaje de mayor relevancia del Reino de Murcia. Durante la Guerra Civil el Palacio albergó el Cuartel para Milicias Murcianas y posteriormente el Colegio Jesús María. En 1937 fue demolido para facilitar la apertura de la Avenida de Alfonso X con la finalidad de conectar el centro de la ciudad con la nueva estación de Zaraiche, en la recien abierta Plaza Circular. El Convento de Santa Ana, es un conjunto monástico perteneciente a la Orden Dominica que tiene su origen en el siglo XV, llegando las mojas Dominicas a Murcia en 1490. El edificio actual fue construido entre 1728 y 1738, representativo del barroco murciano, sus autores fueron Fray Antonio de San José y Toribio Martínez de la Vega, autor del proyecto del Puente Viejo entre otras construcciones importantes. Los huertos del convento son los únicos que todavía permanecen regados por la acequia Aljufía en su tramo urbano. TEATRO CIRCO PUERTA NUEVA/LA MERCED El teatro Circo de Murcia es un edificio diseñado por Justo Millán en 1892, en la calle Caravija, actualmente Enrique Villar (promotor del teatro). La Orden Mercedaria fue de las primeras en llegar a la ciudad tras la conquista cristiana, instalándose junto a la puerta de Santa Eulalia, para trasladarse en 1560 junto a Puerta Nueva. Sirvió como teatro, cinematógrafo, circo y lugar de espectáculos. Durante su primer año de existencia sólo se autorizó su uso como circo al no contar con instalaciones para teatro hasta el siguiente año. En 1896 se presentó en el Teatro Circo el cinematógrafo, en él se llegó a celebrar una corrida de toros, en 1899. En 2011 tras un largo cierre volvió a abrir sus puertas con programación teatral y escénica variada. El claustro original del conjunto es del siglo XVI y la fachada del templo, de estilo barroco, es de 1711. Tras la desamortización fué ocupado por una fábrica de sedas, pasando a ser posteriormente colegio de los Hermanos Maristas y desde 1935 sede de la Universidad de Murcia. Hemos recorrido la acequia Aljufía hasta el punto donde cambia de nombre por Benetucer, lugar también hasta dónde llegaba el recinto del arrabal de la Arrixaca, abriéndose aquí la denominada Puerta Nueva de origen cristiano en 1272. “... la puerta Nueva, la mejor salida, y de más recreo que Murcia tiene; pues luego en saliendo de la ciudad hay un paso, donde concurren cuatro acequias tan juntas, que no hay tres varas de una a otra, llenas sus riberas de yerbas, flores y árboles, vista la más graciosa y amena que puedan gozar ojos humanos ...” “Discursos históricos de la muy noble y leal ciudad de Murcia” Francisco Cascales. 1621