Los judíos en Holanda

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Los judíos en Holanda
Hasta el año 1506, los países bajos, en los que se encuentra Holanda,
formaron parte del ducado de Borgoña, momento en que los heredó Carlos
V, el joven rey de España y del Sacro Imperio Romano Germánico.
Al ser tratadas como provincias, España impuso un régimen comercial muy
fuerte en estos territorios obligándolos, además, a pagar altos impuestos.
A pesar de todo esto, las capitales de los países bajos tales como Ámsterdam,
Brujas y Amberes, crecieron hasta convertirse en grandes centros
comerciales, reconocidos internacionalmente. Gracias a esto, empezaron a
funcionar los primeros bancos y floreció la venta de acciones de producción
agrícola, en especial la de los tulipanes, a lo que se llamó “La fiebre de los
tulipanes”, lo que terminó en una crisis especulativa.
Ya que las ciudades de los países bajos estaban floreciendo comercial y
económicamente, muchos judíos conversos de España, decidieron radicarse
allí, escapándose de la Inquisición.
En 1609, con la victoria de los Calvinistas sobre los españoles, los judíos
conversos refugiados sefaradím, pudieron gozar de mayor libertad religiosa
para vivir en Ámsterdam, Rotterdam y en otras ciudades más pequeñas.
Hasta el punto de que el gobierno holandés accediera a que la comunidad
judía tuviera un rabino, en tanto éstos se comprometiesen a no hacer
ninguna propaganda religiosa.
Tras una serie de restricciones civiles, la comunidad judía se separó del resto
de la población, causando que los sefaradím desarrollen una amplia actividad
económica y comercial, contribuyendo al rápido progreso del comercio e
industria holandesa en el plano mundial. Así, las imprentas judías de
Ámsterdam brindaban libros a todos los intelectuales de Europa y los judíos
conversos que habían establecido enlaces con Portugal, empezaron a
comercializar diamantes por todo el mundo.
En las kehilot de Holanda, había jajamim, parnasím, un consejo de ancianos
llamado maamad que juzgaba, según sus criterios, a todos los miembros de la
comunidad. Algo que caracterizó a los rabinos de estas kehilot en esta época,
fue que éstos se mostraron muy cuidadosos de que ninguno de los miembros
de la kehilá se alejara de las leyes de la Torá. Entonces, el que no cumplía
estas condiciones, tenía la posibilidad de que se le aplicara el Jerem. Todo
esto sucedía porque la mayoría de los miembros de la Kehilá eran segunda y
tercera generación de judíos conversos que mantuvieron su judaísmo oculto
durante cien años.
Una de las personalidades más conocidas de esa época fue el escritor,
político y rabino Menashé Ben Israel, quien fue un ejemplo de la mentalidad
que tenían muchos sefaradím de la kehilá holandesa, quien, gracias a sus
conocimientos, fue retratado por el célebre pintor holandés Rembrandt. Uno
de sus actos más conocidos fue la aplicación del Jerem a Baruj Spinoza, quien
fue uno de sus discípulos más brillantes pero que se anticipó con sus ideas a
su época, ya que tenía plena confianza en la razón y en sus posibilidades para
conocer el orden físico-matemático del universo. Gracias a esto, fue muy
criticado por su concepción de Dios, el Panteísmo, lo que significa que la
totalidad del universo es Dios. Fue el primero que criticó al Tanaj, porque
pensaba que la Torá no era la palabra de Dios, sino la obra inspirada de
hombres religiosos. Luego de que se le aplicara el Jerem, Spinoza fue un
pensador solitario reconocido sólo en los círculos muy modernos de su
tiempo, que se ganaba la vida como óptico y pulidor de lentes. En la
actualidad, todo el mundo reconoce su aporte al pensamiento universal.
Por esos tiempos, se comenzó a utilizar el mercantilismo, en el cual los judíos
eran importantes. Por esto, se aprobó la readmisión de los judíos en
Inglaterra, pese a la resistencia popular. A los judíos, se les concedió la
igualdad económica pero no los derechos políticos. El interés que generaba la
cultura judía, les concedió, a lo largo del tiempo, la actitud amistosa del
pueblo.
Vínculo con el poder
Impacto del contexto en la vida judía
Situación económica
Organización comunitaria
Desarrollo cultural
Desarrollo religioso
Personalidades
Aportes trascendentes
Tolerancia religiosa limitada y
restricciones civiles.
Mayor libertad para practicar el
judaísmo abiertamente, luego de la
independencia de Holanda del
gobierno español. Participación de
los judíos en el comercio de Holanda
Buena
Kehilot lideradas por jajamim,
parnasím y un maamad
Los judíos sefaradím se adaptaron
rápidamente al idioma y la vida en
Holanda
Rigurosidad de los rabinos sobre el
seguimiento al pie de la letra de las
leyes de la Torá.
Menashé Ben Israel y Baruj Spinoza
Los judíos fueron muy importantes
en la economía y comercio holandés
y la aplicación del Jerem sobre
Spinoza .
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