Subido por José Eduardo Villalpando Ruiz

Barkin David & King Timothy (1971) Desarrollo economico regional. ediciones Siglo XXI

Anuncio
c i ón al d es a r r ól lo reg i on a I, d esde su
presentan posibles soluciones que podríantomarlosigobiernos^
para resolver los proyectos de desarrolloen grgn.escgla y con g
múltiples efectos.
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editores
MEXICO
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editores
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traducción de
ROBERTO REYES
DESARROLLO ECONOMICO
REGIONAL
enjo que por cuencas hidrológicas
de México
por
DAVID BARKIN Y TIMOTHY RING
MI
siglo
veintiuno
editores
MÉXICO
ESPAÑA
ARGENTINA
COLOMBIA
siglo veintiuno editores, sa
CERRO DEL AGUA 248. MEXICO 20. D.F.
siglo veintiuno de españa editores, sa
C/PtAZA 5, MADRID 33, ESPAÑA
siglo veintiuno argentina editores, sa
siglo veintiuno de Colombia, ltda
AV.Yq, 17
*73
PRIMER PISO. 8OG0TA, D.E. COLOMBIA
4
primera edición en español, 1970
quinta edición en español, 1986
© siglo xxi editores, s.a. de c.v.
ISBN 968-23-0021-5
título original: regional economic development
the river basin approach in mexico
derechos reservados conforme a la ley
impreso y hecha en méxico/printed and made in mexico
ÍNDICE GENERAL
PREFACIO
;
■1
I POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL EN LOS PAISES ME­
NOS DESARROLLADOS
4
los objetivos de la política de desarrollo regional, 4; el pro­
ceso del desarrollo regional, 8; política de desarrollo regio­
nal, 14; selección de proyectos, 23
! II EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO
;
44
problemas del desarrollo regional y política desde 1821 hasta
1947, 52; el patrón del desarrollo regional reciente, 57
: III LA PREOCUPACIÓN MEXICANA POR EL DESARROLLO REGIO­
NAL
■
■
72
el proceso de decisiones políticas en México, 75; política econónrica y desarrollo regional, 88
i
< IV POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
i
■
j
í
los proyectos de cuencas hidrológicas de 1946, 95; otras politicas de desarrollo regional, 117
j V LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC
:
|
t
‘
fi-
95
121
características físicas, 121; la estructura socioeconómica de la
región antes de 1950, 125; el programa de inversiones de la Cumisión del Tepalcatepec, 131; progreso económico en la cuenca
del río Tepalcatepec, 1950-.1960, 139; servicios sociales, 151
; VI EL EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC SOBRE LA
*
TIERRA CALIENTE
j
las inversiones de la Comisión en la Tierra Caliente, 154; deiarrollo regional, 155; la industrialización de la Tierra Caliente, 201; los efectos de las inversiones sociales de la Comisión, 205
j
í
\
\ VII UNA EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES DE LA COMISIÓN
\
i
el punto de vísta nacional, 211; el punto de vista regional, 230;
el punto de vísta desde 1947, 233; la respuesta humana, 235
154
211
VIII
ÍNDICE GENERAL;
PREFACIO
VIII LOS PROYECTOS DE LAS CUENCAS HIDROLÓGICAS Y EL DESARROLLO REGIONAL
‘
238
el empleo de los proyectos de las cuencas hidrológicas integradas, 238; el crecimiento económico regional de México, 246;
reconsideración de las políticas de desarrollo regional, 248
APÉNDICE I
APÉNDICE II
ÍNDICE DE CUADROS
ÍNDICE DE FIGURAS
ÍNDICE ANLÍTICO
i
Este libro tiene sus orígenes en nuestras tesis (para obtener el
doctorado) y se basa en investigaciones hechas en México du­
rante los últimos seis años. La tesis de Ring fue escrita para
255
el Departamento de Economía Agrícola de la Universidad de
California en Berkeley en 1963-64, Trata de los problemas de la
258
evaluación de proyectos de desarrollo en gran escala, realizados
para obtener una multiplicidad de objetivos, y cuyo éxito de­
260
pendió de la reacción del sector privado ante la acción del sector
26 b público, en el contexto de los esfuerzos mexicanos para promover
el desarrollo regional mediante proyectos integrados de inver­
sión en cuencas hidrológicas y tomando al proyecto del Tepalcatepec como un caso de estudio. La tesis de Barkin, escrita para
el Departamento de Economía de la Universidad de Vale, en
1965-66, estudió la contribución que la Comisión de Tepalcatepec había hecho al desarrollo regional y nacional mexicano
con mucho más detalle. Después de alguna correspondencia
epistolar, tuvimos oportunidad de reunimos, cuando estábamos
en el Colegio de México en el verano de 1967, y discutir la
posibilidad de hacer un libro en conjunto. Posteriormente pu­
dimos trabajar juntos durante breves períodos en Cambridge,
en julio-agosto de 1968, y en Nueva York desde diciembre de
f 1968 hasta enero de 1969.
b
Los primeros cuatro capítulos de este libro se basan de mane­
ra fundamental en la tesis de Ring y los últimos cuatro en la
tesis de Barkin; pero la revisión de todas las reacciones fue con­
junta, tanto por la adición de nuevas ideas y datos como por
la eliminación de material antiguo, de modo que el libro debe
considerarse como un esfuerzo común, incluso si no fuimos ca­
■j paces de unificar nuestros estilos de redacción. En esta forma,
el primer capítulo del libro es un estudio sobre la manera en
[
que las políticas gubernamentales podrían intentar resolver los
problemas del desarrollo regional en los países menos desarrolla­
dos y, en consecuencia, de la forma en la cual deben evaluarse
esas políticas. Los capítulos n-iv describen los problemas y po­
líticas mexicanos del desarrollo regional en sus aspectos eco­
nómicos y políticos, prestando atención especial, en el capítu­
lo iv, a la historia del desarrollo de las cuencas hidrológicas en
México durante la posguerra, discutiendo también otros prof
250
T
2
PREFACIO!
j PREFACIO
gramas de desarrollo. En los capítulos v-vn, analizamos y evalúa-}
mos en detalle el trabajo de la Comisión del Tepalcatepec ai ayuda para cristalizar esta
partir de su formación en 1947. En el capítulo vni utilizamos; Agricultural Development
esta evaluación, junto con los análisis previos de otros esque-í ington y Nueva York y 1:
mas, para evaluar la estrategia de utilizar los proyectos de lasj
cuencas fluviales como el núcleo de las políticas de desarrollo
regional, en sus aspectos económico y político.
Aunque ambos somos economistas, hemos tratado de hacer este
libro inteligible para todo aquel que esté interesado en el des-i
arrollo mexicano global, o en aspectos particulares políticos o
económicos, que no tienen que ver con la economía de la eva­
luación de proyectos. Posiblemente no tengamos un éxito total,
pues la última mitad del capítulo i en particular será difícil
de entender para quienes no sean economistas; sin embargo,;
puede omitirse fácilmente. La alternativa de explicar ese mate-;
rial sin recurrir al “caló” económico y empezar con los princi-í
píos elementales habría significado escribir un tipo de libro di-=
ferente.
í
Durante el largo período de gestación de este libro, nos ayu-¡
dáron el consejo y el financiamiento de un gran número de:
personas e instituciones, Es imposible mencionar el nombre de to-i
dos los que nos ayudaron a ambos o a uno de nosotros. No;
obstante, debemos mencionar nuestra gratitud a nuestros jurados^;
de tesis en Yale y en Berkeley, cuyos presidentes fueron los pro-;
fesores Lloyd Reynolds y David Allee respectivamente. Clarkl
Reynolds, cuyo estudio extenso sobre México hizo sus consejos}
especialmente valiosos para ambos, fue también miembro del ju-;
rado de tesis de Barkin. Estamos muy agradecidos a un granf
número de personas que nos ayudaron en México, en especiaf
al Sr. Víctor Urquidi, al Lie. Gustavo Petriciolli y al Ing. César?
Buenrostro, el cual como secretario ejecutivo de la Comisión del}
Río Balsas fue de gran ayuda para proporcionarnos no sóloí
consejos personales, sino también instalaciones y personal que}
nos ayudara en los estudios. Otros miembros cíe la Comisión;
también nos otorgaron generosamente su tiempo y sus conocí mientos.
‘
La investigación original fue financiada por donaciones dé­
la Giannini Foundation of Agricultural Economics y el Centro
para Estudios Latinoamericanos, ambos de la Universidad del
California en Berkeley; y por el Foreign Area Fellowship Progranr
y el Yale University Councils on International Relations andi
Latín American Studies. En México, el Centro de Economía;
Agrícola de la Escuela Nacional de Agricultura nos ayudó aí
superar muchos problemas y facilitó nuestra investigación. La¡
investigación en un libro provino del
Council, las Universidades de Wash, Fundación Nuffield.
DAVID BARKIN
TJMOTHY RING
!I
¡POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
o
¡sea que se defina ésta, y que en consecuencia no es inteligente,
:por parte de los gobiernos, tratar de alterar el patrón regional
!de crecimiento. Los gobiernos, por varias razones, generalmente
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL EN
íno contemplan impasibles la desigualdad del crecimiento eco­
LOS PAÍSES MENOS DESARROLLADOS
nómico regional, sino que adoptan una variedad de políticas para
¡tratar de reducirla. Este libro se ocupa, principalmente, de los
¡intentos del gobierno de México en este respecto, y en especial
í de su adopción en la estrategia particular de invertir grandes
'cantidades en el desarrollo de las cuencas hidrológicas para
¡lograr este fin.
LOS OBJETIVOS DE LA POLÍTICA DE DESARROLLO REGIONAL
La preocupación que los gobiernos sienten acerca del desarro-p,
,i,n
, .
,
.
- lio regional podría referirse de manera principal ral ingreso per
El proceso del desarrollo económico no afecta por igual en 1
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,
F, ,- i i .
/ .
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de quienes ya habitan en esa región, o bien al producto
f S, .capita
cualquier etapara todas las regiones de una economía. Patrones,,
f, , ,
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total de la región.
importante
b En el primer caso, el motivo mas
de producción
en cambio pueden causar patrones de
localiza- ,
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-j i ,
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. -sera una preocupación porque el ingreso per capita se distribuya
cion cambiantes de una actividad económica. El crecimiento in¿
T■rri
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rían equitativamente como sea compatible
con otros objetivos
t en unas pocas zonas urbanas densamente . i ,■ .
dustnal se concentrara
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. ^sociales. Esta preocupación
podría ser sencillamente humanitaria,
pobladas. Estas atraerán alimentos y materias
primas desde
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I pero en cualquier caso
es probable que la nautopreservacion
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tas regiones agrícolas, que podrían
florecer,
quizas,
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. r. i exija, ya que el descontento
regional podría originar una derrota
de otras regiones agrícolas que antes estaban en crecimiento^ J- J M .
or
&
jen las elecciones o una revolución interior.
Otras regiones podrían seguir escasamente pobladas por falta de­
; Las opiniones que se concentran en ciertas localidades ten­
demanda para su producción potencial o por ausencia de inver^
drán, en este respecto, proporcionalmcnte más influencia que las
siones en servicios de transporte o energía. En etapas posteriores’/
'que se encuentran dispersas en toda la población. Por lo tanto,
de industrialización, regiones que dependen mucho de industrias/
los gobiernos se preocuparán más por los diferenciales regionales
antiguas podrían perder terreno con respecto a las regiones en
..en el ingreso per capita. que por los diferenciales equivalentes
que la estructura industrial es más nueva. Puesto que la movi­
entre diferentes grupos sociales. En algunas ocasiones los gobier­
lidad de los factores nunca es perfecta, es probable que los
nos podrían estar menos interesados en el bienestar individual
salarios de la mano de obra y los rendimientos del capital sean
Jj:de los habitantes de las regiones atrasadas que en evitar la immayores en las zonas que están en rápida expansión que en|
/presión de que están dejando a un grupo totalmente fuera del
otras. En las zonas que están decayendo económicamente o cuy®
¡crecimiento económico que el resto de la economía disfruta, y
crecimiento es relativamente lento, habrá un mayor desempleo ,
,
.,
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,
.
,tp
1 de causar alteración
7
.
,
,
.
,
,
.
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a la imagen de modernismo
que el resto de
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nrDHlirfrunc
fpnrLrin r^whi^r
pcf-.ie -znrtad
°
relativo,
y rprnrsnc
los recursos
productivos
tenderán
cambiar estas zonas!
lia economía presenta. Como explicaremos, esta es una causa ímpor las regiones de mayor crecimiento económico.
i
¡ portante de la preocupación mexicana por los problemas re­
Este patrón desigual de crecimiento regional es, en mayor o:
gionales. En un caso semejante, el interés del gobierno podría
menor grado, inevitable. La desigualdad regional es, en este
:lno referirse sencillamente al ingreso monetario regional per capecio, como todas las desigualdades económicas. Si pudiera
\ pita, sino al hecho de proporcionar ciertos servicios; los ejem­
tarse, la justicia social podría estar mejor servida, pero, en
plos obvios son educación y sanidad.
mundo en el cual los recursos naturales y los talentos están
dis­
En otros casos, los gobiernos están menos deseosos de aumen­
tribuidos desigualmente, casi el único mecanismo que se
liatar el ingreso regional per capita que de aumentar la pobla1
inventado hasta ahora para distribuir estos recursos y talentos
ción de una región a la vez que incrementan el producto regioen sus usos más productivos es permitir que sus precios seanj
J
nal. En estas circunstancias, podría ocurrir el desarrollo regional
una indicación de la escasez relativa y que las variaciones en sus¡
j aunque el ingreso per capita en la región disminuyera. Quizá
precios se reflejen en los ingresos de sus poseedores. Esto no es¡
se creyera que dejar una zona escasamente poblada es invitar a
argumentar que el libre juego del mecanismo del precio condu/
algún país vecino para que la tome abiertamente por la fuerza,
eirá por lo general a la distribución óptima de los recursos, como
CAPITULO I
F
■I
6
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL;
? POLITICA DEL DESARROLLO REGIONAL
7
o la colonice en secreto. En la actualidad esto parece poco pro-:
.,
.
- pasado cierta--da 7 consumo de otro tipo de servicios puede ser mayor,
bable en la mayor parte del mundo, pero en el
desarrollo re-:^oc^a haber sido deseable que los desempleados urbanos humente, ha inspirado los esfuerzos mexicanos de
l hieran seguido viviendo con, y continuado siendo sostenidos
gional.
preocupen
porH3Or’ sus ^amíhas rurales. Por otra parte, es probable que se
Es más probable que los gobiernos modernos
se
i
(requiera
cierta cantidad de desocupación urbana para permitir
reducir la congestión en ciertas regiones. Sin duda, existen ga
a
nancias para la sociedad por la localización cercana entre sí def industria en expansión recurrir a una corriente estable ce
las empresas, A menudo a éstas se les llama “economías de agio-> ma-no de obra. El intento de hacer desaparecer ia desocupación
meración”. Los clientes y los proveedores que están establecidos; Podría ,au^ntar el costo de la mano de obra para las empresas
cerca el uno del otro reducen el costo de la comunicación entre¡industriales, las cuales se veián así inducidas a inyeitn en t.ceellos; pueden obtenerse economías de escala en la oferta de es-:n*cas Jue rempJcen mano de obra poi maquinal ra, ) pot
pecialistas y servicios públicos, y pueden establecerse instituciones: consiguiente restrinjan el aumento de la ocupación.
___ > i ■ _ i . para entrenar
.
r
i trabajo.
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mncúMiión
pí nnnesrnvón
especializadas
una fuerza
de
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el!F.l deseo
de rprlnrír
reducirIíí la
congestión
unan razón posible paia
punto de vista de las familias, cuanto más grande sea la ciu-ídesarrollar zonas que en la actualidad están poco pobladas. Otra
dad, mayor será la variedad de actividades culturales y de di-jes creencia de que en una zona existen tecui sos natuiales cuya
versión que pueda ofrecer. Por estas razones, la tendencia natu-|exP^otac^n daría utilidades, pero que exigen un volumen mini­
ral hacia la concentración del establecimiento de la industria tieneímo de inversión mucho mayor que el que puede proporcionar la
algunos efectos sociales benéficos. Pero los efectos benéficos de-Pnversión Pavada. Para varias actividades, incluyendo el abaste} cimiento de energía y el servicio de transporte, son importantes
ben compararse con las desventajas de la congestión que surgen:
• las economías de escala. Podría ocurrir que las inversiones allí
por esta concentración de la actividad económica. Las fuerzas
no se justifiquen económicamente, a menos que la economía
normales del mercado, por sí solas, no asegurarán, desde ningún
b regional haya llegado a cierto volumen mínimo, pero si esto
punto de vista, que se obtenga el mejor equilibrio entre las
[ocurriera pudieran entonces dar un rendimiento alto. En otras
ventajas y desventajas sociales. Las empresas establecidas recien­
. palabras, podría existir una argumentación en favor de la acción
temente por lo usual pagarán lo mismo por los servicios públicos’
, pública para promover el desarrollo regional paralelo al arguque las demás empresas en esa zona, pero como en donde existe
L mentó de la industria “en nacimiento” para proteger a la indus­
1
una congestión su establecimiento eleva los costos para todas
tria nacional. Algunas veces se argumenta que la población de
las empresas que ya existen en esa zona, lo que la nueva em­
(una región previamente subdesarrollada puede conducir de mapresa considera como costos subestima los costos para la sociedad;
; ñera inesperada al aumento de los recursos productivos de una
en conjunto. El congestionamiento también aumenta los costos:
|
economía, quizá puede conducir al descubrimiento de recursos,
para las familias, pero a menudo es difícil traducir esto a tér­
;
minerales, o atraer colonos pioneros, cuya
iniciativa y espíritu
minos financieros. '
.
s
1'
' ’*se habían
■
Si en algún momento el gobierno considera que cualquier be-j de empresa no
aprovechado’ antes,
pero que■ •’ " apora
neficio proveniente de economías por la aglomeración o por el > encuentran y aprovechan las oportunidades para empezar nuevas
aumento del tamaño de la ciudad son superados por los costos j actividades que aumentan sus propios ingresos, emplean recursos
sociales del congestionamiento, esto proporciona un motivo adi-1no utilizados y representan una adición al escaso talento emcional para tratar de descentralizar la actividad económica, Línf presarial de la nación.
objetivo relacionado que algunas veces estimula la actividad re-! hos anteriores son algunos de los objetivos de una política
grado
gional es el deseo de disminuir la corriente de personas haciaj que se preocupa por las diferencias interregionales en el g
las ciudades, con el fin de reducir al crecimiento de los barrios i de desarrollo. Por supuesto, no son todos los objetivos de la
pobres y la desocupación urbana. Es cierto que esa comente i actividad gubernamental en una región particular. 'Iodos los
crea problemas sociales, pero es la esencia misma del proceso j objetivos económicos nacionales —el crecimiento del ingreso nade industrialización. Es probable que la desocupación urbana 1 cional, la estabilidad de los precios, la diversificación de la ecosea más costosa socialmente que la desocupación rural, puesto i, norn^a’ fortalecimiento de la balanza de pagos, etc,— tienen la
que debe transportarse alimento hacia las ciudades y la víviend misma probabilidad.de estar entre los fines dejas políticas rej gionales que los objetivos esespecíficarnente regionales.
8
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL j
EL PROCESO DEL DESARROLLO REGIONAL
Los objetivos particulares de un gobierno afectarán, por supues­
to, su elección de políticas; éstas se discutirán en la sección si­
guiente. Pero todas las políticas tienen la finalidad básica de
promover el crecimiento regional y una comprensión del proceso
del desarrollo económico regional es esencial al analizar políticas
determinadas. A continuación se supondrá que el contexto del
análisis es el de un país en desarrollo, implicando, por ejemplo,
que más del 40% de la fuerza de trabajo está empleada en la
agricultura, y que una considerable proporción de la fuerza de
trabajo rural está subocupada, excepto, posiblemente, en las
estaciones de gran actividad. La mayor parte de lo que se expone,
sin embargo, no depende de estos supuestos y seria de igual im­
portancia para todos los tipos de economía.
Mucho se ha escrito, desde el punto de vista de todas las dis­
ciplinas, sobre problemas regionales. Los problemas nacionales.
tienen, por lo general, sus contrapartes regionales, de manera
que los estudios sobre regiones pueden tener un campo tan am­
plio como los de las naciones. Además, toda acción económica
y sus efectos tienen lugar en una u otra región, y por lo usual
con un efecto regional desigual. Por lo tanto, una discusión
del proceso del desarrollo regional podría incluir todo aspec­
to del desarrollo nacional. Pero lo que nos interesa son los ¡
puntos en qué el proceso de desarrollo regional diferirá, en (
grado y especie, del proceso de desarrollo nacional. Hay tres
puntos de ese tipo: el papel que el comercio irregional juega
en el proceso de desarrollo comparado con el comercio exte­
rior; los problemas de la manera en que el crecimiento en
una región afecta al crecimiento en otras partes de la econo­
mía, y los mecanismos por los cuales deben equilibrarse los
pagos interregionales. Discutiremos sucesivamente cada uno de
esos puntos.
En primer lugar, el comercio exterior representará una parte
mucho mayor de la producción y del consumo de una región que
de una nación. Excepto en una economía exclusivamente de
subsistencia, es probable que, para cualquier zona, la importancia
de las exportaciones sea una función del tamaño de esa zona.1;
Un hombre puede depender por completo de su habilidad para
exportar sus servicios; para el mundo, como un todo, no hay
exportaciones. Obviamente sería menos realista elaborar una teo­
1 Esto está indicado por Charles N. Tiebout en . “Exports and Regional
Economic Growth”, Journal of Political Economy, lxiv, abril de 1956,.
pp, 160-4.
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
9
ría del crecimiento para, digamos, un condado sobre el supuesto
de que ni bienes ni factores pueden trasladarse a través de las
fronteras, de lo que sería para toda Norteamérica. Debido a la
evidente importancia del comercio para el crecimiento regional,
varios autores han dado gran importancia al papel de las expor­
taciones, La teoría del desarrollo regional de ‘‘base-exportación’’,
tal como la expone Douglass C. North, es tal vez la presentación
más clara de la misma, aunque muchos autores han discutido
ideas similares.2 La teoría es muy sencilla. El crecimiento dentro
de una región es iniciado y continuado por una demanda para
los productos en los cuales la región tiene una ventaja compa­
rativa. La producción, la inversión y el ingreso regionales aumen­
tan y se establecen industrias complementarias. Los ahorros lo­
cales se invierten localmente y sus efectos multiplicadores son
locales. En particular es probable que se desarrolle un número
de “actividades para los residentes” dentro de la región que
proporcionen bienes y servicios para el mercado local. En la ver­
sión de North de esta teoría, el sector de exportación continúa
siendo dominante para la región, jugando un papel vital para
determinar el nivel del ingreso en la misma y para trasmitir
las fluctuaciones cíclicas nacionales a la región. El carácter de las
exportaciones determina el carácter de la región, ya sea “indus­
trializada” o “agrícola”, y podría cambiar a través del tiempo
de manera que una región podría empezar exportando principal­
mente productos primarios locales y exportar posteriormente mer­
cancías que . podrían denominarse localmente “móviles”.
Como un modelo sencillo ele la forma en la cual crecen las
regiones, el modelo de “base-exportación” no tiene rival. La fun­
ción exacta de la base-exportación será afectada, por supuesto,
por la definición de la región elegida, y podría ser posible
concebir regiones geográficas en cuyo crecimiento las exporta­
ciones sólo han representado una pequeña parte. Pero si se está
considerando el desarrollo de regiones en los países menos des­
arrollados, en donde incluso los mercados interiores nacionales
son una base pequeña para apoyar a las actividades industriales
modernas, entonces está claro que el establecimiento de una baseexportación debe ser un objetivo principal de la política econó­
mica regional. La política particular adoptada en la búsqueda
del desarrollo regional determinará la naturaleza de la base-ex­
portación y en consecuencia la clase de desarrollo regional que
se puede obtener. El producto ideal para la base-exportación
2 D, C. North, “Locación Theory and Regional Economic Crov.'th’’, Jour­
nal of Political Economy, lxiii, junio de 1955, pp. 24 3-58.
10
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
tendrá claramente nruy buenas perspectivas económicas a largo
plazo, y ofrecerá muchas oportunidades para invertir en indus­
trias que lo provean o usen sus productos (es decir, los efectos
potenciales en ''‘cadena” son. grandes) con la condición de que
pueda establecerse satisfactoriamente sin estas industrias comple­
mentarias, de manera que la cantidad mínima de inversión qué
se requiere para empezarla no será prohibitivamente elevada. Por
lo general, en donde la región está menos desarrollada que el
resto de la economía, se esperaría que la base-exportación fue­
ran productos primarios. En unos pocos casos históricos, éste no
podría haber sido el caso —por ejemplo, el reciente crecimiento
en Puerto Rico, que para ciertos propósitos podría considerarse
como una región de la economía de los Estados Unidos—, se ha
basado en exportaciones de bienes manufacturados con materias
primas importadas. Pero en donde, como sucede en este estudio,
la región en cuestión es una zona escasamente poblada de un
país menos desarrollado, al principio las únicas exportaciones po­
sibles serán de productos agrícolas o minerales.
Elaborando sobre un análisis similar a la teoría de base-expor­
tación, otros autores han proseguido para discutir el grado en
que, si se les deja solas, las fuerzas normales del mercado ten­
derán a concentrar el crecimiento económico en unas pocas re­
giones, dejando que el resto se atrase. Esto nos lleva a otra dife­
rencia entre el análisis económico del comercio interregional y
el del comercio iníernacional, en esta ocasión haciendo diferentes
supuestos sobre el grado de movilidad de los factores —y esto
influye en la forma en que el crecimiento en una región afecta
al crecimiento en otras regiones. la teoría del comercio inter­
nacional supone, por lo general, que los factores de la produc­
ción no tienen movilidad entre los países, y que, en cambio, tienen
completa movilidad interiormente. Aunque esto no es del todo
cierto, la migración internacional de mano de obra e inversión
es lo siificienícmemc pequeña para hacer de ésta una aproxi­
mación aceptable para muchos propósitos analíticos. En el aná­
lisis del comercio interregional, sin embargo, la inmovilidad interregional de los factores sería una suposición muy poco real
para hacer interesantes los resultados, y suponer una movilidad
perfecta de manera que los factores se trasladen, para eliminar
cualesquiera diferencias interregionales en la tasa de pagos a
los factores también sería muy poco realista y este supuesto ten­
dería a eliminar una. de las principales razones del interés en
el desarrollo regional. En coíisecuencía, debe suponerse alguna
movilidad de los fautores, peto que sea insuficiente para suponer
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
remuneraciones de los factores y niveles de ocupación iguales en
todas las regiones.
La pregunta de si dejado a sí mismo el crecimiento tenderá
a igualar las diferencias de ingreso regionales o hará que éstos
diverjan ha producido mucha discusión y respuestas en conflic­
to, pero no es algo que pueda responderse sin hacer referencia
a situaciones particulares. Los aspectos que determinarán la res­
puesta están, sin embargo, bastante claros. En primer lugar, la
tasa de crecimiento de las exportaciones será de gran importan­
cia. Es probable que estas exportaciones sean de productos prh
marios. Se acepta ampliamente que las perspectivas del mercado
mundial no son muy prometedoras en un futuro previsible, aun­
que hay excepciones individuales. En particular, los productos
de la agricultura tropical, se enfrentan a precios mundiales es­
tancados o en disminución. Considerando la demanda de tales
productos, parece probable que -aumenten con relativa lentitud
con respecto a los crecientes ingresos mundiales, y no es proba­
ble que una baja- en los precios tienda a producir un aumento
compensatorio en la cantidad que se vende. En verdad éste es
el caso para la mayoría de los productos alimenticios. La de­
manda de materias primas por lo usual aumenta con menor
rapidez que la demanda de productos en los cuales se incorporan
los materiales, puesto que a menudo se hacen economías en
materias primas y se desarrollan sustitutos sintéticos. Siendo los
costos de las materias primas sólo una pequeña proporción de los
costos del producto terminado, es probable que las clasücicíadesprecio de la demanda de materias primas también sean bajas.
Por parte de la oferta, puede esperarse que una producción
creciente de materias primas conduzca a rendimientos decrecien­
tes en los recursos naturales fijos. Esto podría causar un aumento
en el precio de algunos minerales, y, en el futuro lejano, de los
alimentos producidos en las zonas templadas. Sin embargo, tal
como son las cosas en el presente, es muy amplio cí campo para
aumentar la producción de los productos de agricultura tropical
en África y América Latina, y parece haber pocas perspec­
tivas de que la demanda tienda a superar a la oferta. Como re­
sultado, estos productos en particular se enfrentan a precios mi lu­
díales estancados o en disminución.
Por esta razón, podría parecer que el cree uniente de las re- giones que dependen de exportación^.» agrícolas debería de ma­
nera inevitable ser más lento que el de las industriales. Ésta es
una opinión simplista. Cualquier región es sólo un pequeño ah.mv
tecedor de la producción mundial de una mercancía en especial,
una expansión en ella tendrá pocos efectos sobre los precios
12
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
mundiales. Por supuesto, los precios mundiales y nacionales en
disminución tendrán algún efecto adverso sobre los ingresos y
por lo tanto sobre el crecimiento, de la base-exportación, pero
éste sería muy compensado por el rápido aumento de la pro­
ducción.
Hay otras razones, sin embargo, por las que los estudiosos han
argumentado que el crecimiento tenderá a ser más rápido en
unas pocas regiones, en las cuales se concentrará el crecimiento
industrial, y que otras regiones tenderán a retrasarse cada vez
más respecto a ellas. En el análisis regional de Myrdal las fuerzas
del mercado abandonadas a si mismas tienden a este resultado.3
Al igual que en la teoría de North, el aumento en la demanda
de bienes de consumo y de factores productivos que resulta de la
inversión inicial repercute de manera principal dentro de la re­
gión en la cual ocurre la inversión. Las oportunidades rendirán
más allí. La banca, el transporte, los servicios de comercio y
otros elementos del capital social de operación se desarrollarán
más allí que en otras partes. La movilidad de los factores tiende
a reforzar este proceso acumulativo, reduciendo el aumento de
los precios de los factores en las zonas en crecimiento, que de otra
manera hubiera detenido la expansión. El crecimiento en una
región se difundirá a otras zonas mediante una demanda de im­
portaciones provenientes de esas regiones, pero sólo en un grado
limitado. Myrdal llama a estos efectos del desarrollo regional
‘'efectos de difusión” y argumenta que por lo normal son más
importantes en los países desarrollados —lo que atribuye a una
utilización más completa de los recursos humanos potenciales en
esas regiones— de manera que el crecimiento presentará una ten­
dencia menor a concentrarse en unas pocas zonas. Éste es un
punto importante: los diferenciales de salario y las diferencias
en la disponibilidad de mano de obra entre las regiones podrían
ser una potente fuerza para atraer la industria en los países des­
arrollados, como lo ha demostrado la experiencia de la posguerra
en el sur de los Estados Unidos y en Puerto Rico. Pero por lo
* general los países menos desarrollados se caracterizan por 'altos
niveles de desempleo en todas las regiones y, desde un punto
de vista económico, uno esperaría que los salarios no fueran muy
superiores al nivel de subsistencia en todas partes. En muchos
países, no obstante, factores políticos conservan los salarios ur­
banos muy por encima de los salarios rurales de lo que estaría
justificado por la diferencia en el costo de la vida, aunque es
3
pp, 23-38.
Gnnnar Myrdal, Rich Lands and. Poor, Nueva York, Harper, , 1957,
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
13
poco probable que estos diferenciales compensen las otras atrac­
ciones de las zonas industriales —técnicas, servicios sociales ge­
nerales y empresas especializadas™ como un imán para atraer la
industria.
Hirschman, quien tiene un análisis similar, pero más optimista
que el de Myrdal, ha indicado que es probable que los empresa­
rios sobres timen las economías externas que existen en una re­
gión en crecimiento, por falta de información sobre las oportuni­
dades que existen en otras partes, o por falta de una imaginación
audaz para intentar aprovecharlas.4 Esto estimulará la polariza­
ción del crecimiento económico, y también lo hará el hecho de
que las personas más móviles son las que tienen entrenamiento,
habilidades o talento empresarial, que serán justamente las per­
sonas adecuadas para empezar el desarrollo en las zonas atrasadas.
La tercera diferencia importante entre el análisis de problemas
regionales y nacionales es la forma en que se ajusta el balance
de pagos interregional. En cierto grado, este ajuste se facilita
por el hecho de que la región tiene la misma moneda que el resto
de la economía, y que, en consecuencia, puede usarse una amplia
variedad de activos para financiar las transacciones interregíonales. Por lo tanto, no hay problemas regionales comparables al
problema de la adecuación de las reservas de divisas para hacer
frente a las fluctuaciones en el balance de pagos —nunca es un
problema la adecuación de la "liquidez regional”.
Por otra parte, un desequilibrio a largo plazo en el balance
de pagos de una región puede ser mucho más difícil de corregir
que el del balance de pagos nacional. Si una nación encuen­
tra que a las tasas de cambio actuales el equilibrio en el balance
de pagos sólo puede obtenerse sufriendo un alto nivel de des­
empleo, siempre puede ajustar el valor exterior de su moneda y
aumentar así los ingresos por exportaciones y llevar a la susti­
tución de las importaciones por producción interior, ¡jara permitir que se obtengan ocupación plena y equilibrio en el
balance de pagos. Por una elección adecuada de la tasa de cam­
bio, será posible aumentar las exportaciones de los productos
' en los cuales la nación tiene una ventaja comparativa. Esto es
cierto incluso si, después de los cambios en la tasa de cambios,
el aumento de las exportaciones y la reducción de las impor­
taciones toman un tiempo y esfuerzo considerable de manera
que, a corto plazo, tiene sentido hablar en términos do restric­
ciones del balance de pagos sobre el desarrollo económico, im1 A. O. Iliiscliman, La estrategia del desarrollo económico, Fondo de Cul­
tura Económica, México, 1961, pp. 184-201.
14
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL í
. í:
I
pilcando que existen recursos interiores desocupados que no
pueden utilizarse para obtener divisas (debido a posibilidades
limitadas de sustitución).5 Diremos algo más sobre esto cuando
discutamos, un poco más adelante, la evaluación de proyectos.
La opción de modificar el tipo de cambio nacional no tiene
un equivalente en la política regional. Deben estimularse las ex­
portaciones a otras regiones sobre la base del tipo de cambio '
existente. Es posible que las exenciones de impuestos indirectos,
si se las otorga selectivamente por regiones, podrían tener algún
efecto en este sentido, pero sólo si tales impuestos son un com­
ponente importante de los costos de producción. Desafortuna­
damente, con frecuencia es difícil obtener mucho mediante este
enfoque, puesto que en las regiones atrasadas la base impositiva
puede ser muy limitada, y no es posible sacrificar el ingreso
proveniente de los impuestos indirectos, La posibilidad de que
un mayor nivel de desocupación llevará a una disminución de
los salarios y los precios es remota, ya que se acepta ampliamente
la ínflexibilidad de la reducción en los precios monetarios, En
particular éste es el caso para los precios de una -región en rela­
ción con los precios de otras zonas de la economía, ya que
muchas de las fuerzas que determinan los precios actúan por
igual en todas las regiones, y la producción de una región tiene
que utilizar insumos importados de otras regiones.
Por consiguiente, una fructuosa política regional tiene que en­
contrar un producto de exportación en el cual la región no sólo
tenga una ventaja comparativa con respecto a otras regiones, sino
que a la vez lo pueda producir a precios competitivos. La habi­
lidad de cualquier política regional para hacer esto debe ser un
criterio importante por el cual debe juzgarse. El grado en el
cual el desarrollo acumulativo y su naturaleza seguirán al esta­
blecimiento de una base-exportación debe también evaluarse
cuando se seleccionen las políticas para promover el desarrollo
regional. Los enfoques alternativos a que pueden recurrir los
gobiernos para promover el desarrollo regional se tratarán en
la próxima sección.
POLÍTICAS DE DESARROLLO REGIONAL
No es la finalidad de esta sección considerar en detalle todas las
políticas alternativas que los gobiernos podrían seguir o han seB Hay mucho escrito sobre esto. Una buena exposición es la de R. L
McKínnon, "Foreign Exchangc Constraints in Economic Development and
Efficícnt Aid Allocation”, Economic Journal, lxxiv, junio de 1964, pp.
388-409.
l’OLÍTXCA DEL DESARROLLO REGIONAL
15
guido en ciertas épocas. En lugar de eso, trataremos de clasificar
los diferentes enfoques de la política en términos de los dife­
rentes papeles que asignan a la acción pública y privada y en
términos de la clase de desarrollo que se prevé. Aquí se pueden
diferenciar tres enfoques: el primero, es el enfoque negativo, que
sólo restringe ciertas acciones del sector privado; en segundo lu­
gar están los enfoques que tratan de inducir a la acción a las
empresas privadas - con frecuencia se describe a éstas como “per­
misivas”—, y en tercer lugar están aquellas que implican una
acción más directa. AI discutir todos estos casos, suponemos el
tipo de economía que es general fuera de los países socialistas.
Aquí se estimula, en mayor o menor grado, a la empresa pri­
vada, pero el gobierno juega una parte activa en el planeamiento
y la promoción del desarrollo económico. Por supuesto, la elec­
ción de la política regional podría reflejar el grado en que
existen “esferas de influencia” claramente delimitadas para los
sectores público y privado, y por ende el grado en el cual el.
gobierno se considera capaz de asumir la iniciativa para realizar
en una región actividades que el sector privado está realizan­
do en otra.
El enfoque negativo implica el simple impedimento del libre
establecimiento de empresas en regiones que se consideran rela­
tivamente muy desarrolladas o congestionadas. Pueden exigirse
licencias, establecerse impuestos o adoptarse una prohibición (se­
mejante a la prohibición de construir nuevos edificios para ofi­
cinas en el centro de Londres). Las críticas que se presentan
por lo general contra la exigencia de licencias u otros controles
directos permiten que las ganancias que se deriven de esa polí­
tica sean apropiadas, en la forma de ganancias monopólicas, para
quienes obtienen permisos para establecerse, o ya estaban esta­
blecidos. En un país desarrollado, se puede esperar razonable­
mente que Tas empresas que no se pudieran establecer en su
región preferida se trasladen a otra parte, o que, cuando menos,
los recursos productivos que se pudieran invertir en esa región
se inviertan en otra; aunque, hablando rigurosamente, la in­
versión que sólo tendría un beneficio marginal en la región
preferida, no se haría ahora. Pero, en cualquier caso, la pérdida
de inversión será pequeña. En una economía en desarrollo, en
donde cualquier -manifestación del espíritu de empresa debe alen­
tarse cuidadosamente, y en donde las diferencias en los atractivos
de distintas regiones como puntos para el establecimiento de la
industria son muy amplias, los controles sobre los lugares en
que deben establecerse las empresas podrían reducir la inversión
total. En particular, no será muy probable que las pequeñas
16
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
empresas que encuentran difícil la supervivencia y el crecimien­
to en cualquier caso, y que prefieren la seguridad de establecerse
donde está claro que otros de la misma industria sobreviven
y donde existen claramente mercados disponibles, se trasladen
a regiones no industrializadas si no pueden establecerse en aque­
llas regiones que ya están desarrolladas industrialmente. Por esta
razón, es probable que la política regional en los países en des­
arrollo no incluirá controles sobre el establecimiento industrial,
sino más bien estímulos para el establecimiento en otras zonas.
Estos estímulos tratan de reducir los costos o aumentar los in­
gresos para las actividades económicas que buscan ganancias con
el fin de compensar las desventajas de las regiones menos des­
arrolladas. Debido a su preocupación por los problemas regio­
nales, el gobierno debe estar dispuesto a hacer esto incluso si su
acción disminuye el ingreso nacional, aunque, como se observó,
uno de los motivos para sus acciones puede ser la creencia de
que una vez establecido el desarrollo regional demostrará ser;.
socialmente provechoso. Las razones por las cuales las empresas!
se establecen en un lugar en vez de otro nunca han tenido un
lugar central en la economía; sin embargo, existe una gran can­
tidad de . literatura sobre el tema. La que ha surgido ha tomado
uno de dos caminos; ninguna muy útil a los gobiernos para
seleccionar su política de desarrollo regional. La mayor parte
de las teorías del establecimiento se ha preocupado por aislar .
los efectos de la distancia, ya sea en los patrones generales de la
actividad económica dentro de una región, como en la obra
.de von Thunen o Losch, o, como sucede en gran parte de la
obra de Weber, en la decisión sobre el establecimiento de una
empresa.6 Isard ha sugerido que el enfoque de von Thunen
puede ser de más valor para el trabajo de los planificadores na­
cionales o regionales que el enfoque más limitado, pero no es
fácil ver el porqué, puesto que por lo general los planificadores
no se enfrentan a planicies aisladas de extensión considerable, y
el desarrollo regional se ocupará en gran medida por una pro-'
ducción para un mercado que está afuera de la región que
interesa y quizá con una producción que trae materias primas
de fuera de la región. Es verdad, sin embargo, que el planifica-.
H Johann Ilcímich von Thunen, The Isohited SlaLe, cd. Pclcr Hall. Pcrgainon Press, Londres, 1965; Aitgnst Losch, The Eamomics of Localicm, tra­
ducido de la segunda edición alemana por Willíani H. Woglom (edición
alemana, 1943), Vale Univcrsity Press, 1954; y Alfred Weber, Álfred IVcber’s
Theoiy oii the Location of Industries, traducción al inglés y notas por C.avl
J. Friendiich (edición alemana, 1909), University of Chicago Press, 1929,
í
X
‘POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
17
‘ dor puede enfrentarse realmente a una elección más limitada de
í industrias que el empresario privado.
¿ Las teorías que explican la microeconomía de la decisión para
/establecer una industria se han desarrollado por una amplia
P variedad de circunstancias hasta un alto nivel de precisión. És­
tas incluyen modelos de programación que tienen en cuenta el
hecho de que el comercio fluye en un sistema de redes más que
: en un continuo en todas direcciones, y que hay diferentes limi\ raciones sobre los servicios de transporte y la disponibilidad de
recursos.7 Otros modelos han incorporado factores espaciales den­
tro del análisis convencional de las funciones de producción.8 No
todas las teorías del establecimiento insisten sobre la distancia.
Algunas también mencionan factores de aglomeración (o de
desaglomeración) y otros varios de costos relacionados con la
i mano de obra, energía, agua, impuestos, seguros, interés (como
pago por los servicios del capital), clima, topografía, con los medios
. sociales y políticos y con otros conceptos? El análisis que se basa
en tales modelos puede ayudar a los gobiernos a predecir los
resultados de acciones para estimular la inversión privada, o para
calcular la magnitud necesaria de las reducciones en los costos
: con el fin de inducir una respuesta por parte de las actividades
que buscan ganancias. Aparte de esto, los modelos no proporcio­
nan muchos detalles para guiar a quienes elaboran las políticas
en la selección de las políticas reales.
Las “políticas permisivas” implican o políticas fiscales que fun­
cionan, principalmente, para hacer a las actividades lucrativas
aún más, o la provisión de varios tipos de capital general so­
cial (cgs) que disminuyen los costos. Este último puede im­
plicar simplemente que a una región olvidada se Heve el nivel
de la norma nacional de escuelas, energía, transporte, etc. El
tipo de inversión privada que será atraído dependerá obviamen­
te, entonces, de la naturaleza de la región y de las facilidades
proporcionadas. Como es obvio, la irrigación estimulará el des­
arrollo agrícola, en tanto que la energía hidroeléctrica puede
tener sus propios efectos particulares sobre el establecimiento
de la industria.
La inversión en cgs es una estrategia que provoca controver­
sias para el gobierno que la sigue y, como es usual en la ecoT Louis Lefeber, Allocation in Space: Production, Transport and Indus­
trial Locatíon, Amsterdam, North-Holland Publishing Co., 1958.
■ León Moses, “Locación and Che Theory of Producción", Quarterly Jour­
nal of Economics, lxxih, mayo de 1958, pp. 259-72.
’ Véase Walter Isard, Location and Space Economy, The Technology Press
of M. I. T. y Wüey, Boston y Nueva York, 1956, p, 138.
18
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
19
.como un asunto de fe, puesto que a menudo parece difícil aplicar
nomía del desarrollo, la controversia sólo puede resolverse recu
los tipos usuales de criterios de inversión, (Éstos los considerarriendo al estudio empírico. Es evidente que algún cgs es esencia
"remos más adelante.) En donde Hirschman difiere más notablepara el desarrollo económico, y lo que lo distingue de otro
F'
1
’ " es sobre• la secuencia
’
’ d. --------- ------------- de
bienes de capital igualmente necesarios es que no puede se ¿mente de Rosenstein-Rodan
necesaria
importado (aunque la energía podría trasmitirse interregionaí Ha inversión del cgs y la inversión en actividades directamente
mente, o incluso ¿nternacionalmente, las instalaciones para traq.productivas (adp). Por supuesto, se requiere un mínimo de cgs,
initirla deben construirse dentro de la región que la recibe). Ade
¿se debe ser capaz de llegar a una región con el fin de desarro­
más, por lo general, se acepta que los gobiernos deben realiza! hilarla. Pero, dice, el campo
de elección que se presenta eneste
tal inversión. Con frecuencia hay economías de escala consi ¿asunto es mucho más amplio de lo que,
por lo general, se supo­
derable, una política de precios que cargue a los consumido
ne. Más allá de cierto punto mínimo, el cgs tiene rendimientos
res sólo los costos marginales de proveerlos a ellos significará ■ decrecientes con respecto a
la disminución del
costo en lasaup.
La diferencia, en esta etapa del argumento, entre las dos opi­
que la empresa tendría pérdidas. A menudo, debido a los efec J
niones, es que, precisamente, por necesidad el cgs es “global”. Si
tos de tales actividades para reducir los costos de otras en)
presas, el beneficio total de la inversión no puede ser apropiad ¡ se acepta que un mínimo es necesario para el desarrollo, y que
para la primera empresa y podría, incluso, ser imposible del tod? no se le puede
llo seañadir
le puede
en cantidades
añadir en cantidades
estrictamente
estrictamente
marginales,
marginales,
tener una política práctica de precios, como es el caso en la iij’la diferencia hasta este punto está sólo en el tamaño mínimo
como a firma Hí rsch m an,
versión en carreteras. Independientemente de esto, podría seifde los “conjuntos?. Podría ser cierto,
que, porque los planificadores del desarrollo se preocupan prindifícil en un país subdesarrollado encontrar inversionistas priva
dos que estén dispuestos ’a realizar una inversión que tiene ur cipalmente por la inversión del gobierno y el cgs es un campo
período de gestación y una duración a largo plazo. Es un desl indiscutible para la actividad gubernamental, tienden a sobresperdido, sin la duplicación, las instalaciones en esta zona, per<
*timar
tamaño
el del
“conjunto”.
sin la duplicación la empresa privada tendría una posición m¡n
Pero Hirschman va más allá al contrastar la inversión en cgs
nopólica; también se acepta que el campo es de un tipo quh
¿con la inversión en adí>, y presenta algunas hipótesis que, aun­
requiere control gubernamental. Nadie negará la necesidad dé
que no nos obligan lógicamente, sí ameritan un examen empí­
actividad mínima gubernamental en este campo.
¿ rico. Dado que la relación entre el cgs y las adp no está deter*Quienes recalcan la conveniencia de dar una importancia par
' minada, tecnológicamente, dentro de límites amplios, y dado
ticular a este tipo de inversión van más lejos. Argumentan quf
que el gobierno tiene fondos de inversión limitados y por lo
como un capital de ese tipo es esencial para el desarrollo eco­
tanto debe elegir entre-la inversión en cada uno de ellos, argunómico y su período de gestación es largo, por necesidad debe
; menta que debe darse preferencia a la secuencia de la inversión
; que .lleva al máximo las decisiones “inducidas”. Esto concuerda
preceder a la inversión en actividades más directamente produ¡r
tivas y, al principio, no será provechoso en términos de los,
con la creencia de que lo que impide el desarrollo es, más
criterios privados. Paul Rosenstein-Rodan ha indicado, ademán
que otros “embotellamientos”, la falta de iniciativa empresarial
que la creación del cgs aumenta la demanda efectiva, y que dt
para explotar los ahorros potenciales, y de que el gobierno debe,
*,esa manera, conduce a inversión privada adicional y a un ere
sobre todo, tratar de establecer los mecanismos para la utili­
cimiento acumulativo del ingreso.10
zación de. estos recursos. Sin aceptar, necesariamente, que la
Por otra parte, Hirschman sostiene que se ha exagerado h
’ primera proposición es verdadera para todos los países en des­
importancia del cgs.11 Se ha hecho mucha inversión en él, dice,
arrollo, ésta nos ofrece una función importante y exclusiva para
el gobierno en una economía en desarrollo. Hirschman argu­
menta que la provisión de cgs antes de la demanda inducirá me­
10 Paul N. Rosenstein-Rodan, "How to industrializo an underdevelopciH
nos inversión privada que si se deja que el mismo cgs sea indu­
area”, Regional Economic Planning: Techníques of Analysis for less Dev&
loped Areas, documentos y actas de la First Study Confcrcnce on ProblcnT
cido por una escasez, haciendo que el primer paso de la secuencia
of Economic Development Organised by the European Productivity Agcncyg
*
sea la inversión en adp. Afirma que el exceso de cgs es permi­
Bellagio, Italia, 1-19 de julio de 1960, ed. Walter Isard y John H. Cumj
sivo. Invita a las personas para que lo utilicen. Por otra parte,
berland, París, E. P, A., 1961, pp. 205-11.
11 Hirschman, op. cit,, pp. 83-97.
: una escasez crea un número de personas que se ven afectadas
20
21
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGION AI EOLITICA DEL DESARROLLO REGIONAL
*'directamente
^presentado por
por la
ella
compra
y así tienen
de insumos
un incentivo
de otrasdirecto
industrias
pa y el r
1
remediar lalasituación.
Se sosten?
nnp ¿cfs»
nna rnnddprnpMí
,
, como .insumos a otras
*- _. industrias ______
*__
situación.
Se sostiene
quep«ésta
es una consideración
porcentaje vendido
proporciona
especialmente importante en ja estrategia del desarrollo regicun indicio de los efectos potenciales de cadena que podrían re­
nal, ya que la simple provisión de cgs no sería suficiente paríjsoltar del establecimiento de estas industrias. Esto es difícil de
atraer a los empresarios a una región que ellos están acostun^^aceptar; un entusiasta del “crecimiento equilibrado” podría uti­
brados a considerar atrasada.
jlizar la misma lista como la de las industrias que deben evitarse,
Esto es plausible, aunque no del todo convincente. Por ejerí^porque son las que con más probabilidad provocarán los mayores
pío, supongamos que la inversión en una carretera reducirá lo i“embotellamientos”. El problema de “cuándo un embotellamien­
costos de una industria potencial en un 20% que se establezc^to es un embotellamiento y cuándo es un estímulo para d
en una región recientemente provechosa. Es posible que los cor,desarrollo adicional” sólo puede resolverse mediante la investi­
tos pudieran reducirse, alternativamente, en la misma cantidad,gación empírica.
por inversión en una industria abastecedora. Es posible que 1 Una política de desarrollo regional que implique un poco más
segunda inversión podría inducir el establecimiento de una in1
de intervención gubernamental es aquella que establece bienes
dustna potencial, en tanto que la inversión en carreteras no ^industriales. Algunas veces esto sólo implica hacer tierra dispoaria asi, porque en su búsqueda de mercados es probable qulnjb£e para construir, y casi no puede diferenciarse de la estrala industria abastecedora sea más activa que los, constructores dqte ¡a £neral de proporcionar capital general social. Otros pro­
carreteras en sus intentos de estimular la actividad complemei|gralnas proporcionan fábricas para rentar. Si esto se hace de
tana. Sin embargo, si ambos son del gobierno, éste no sería e,manera £undamental para1 reducir los costos iniciales de establecaso. AHpmat;
nrnhci ni que
a ñu»
x»l
.
_
.,
, ■<
caso..
Además, pc
es probable
el desarrollo
de una carretea
cimiento a las pequeñas empresas, la renta podría ser la del mer­
redujera
los
costos
para
una
serie
más
amplia
de
industrias
qut
cado privado. Una política más determinada podría cargar rentas
h*
«>
a
k-aU
la inversión en una rama particular de las adp, y en consecuerf ^a;
jas con el fin de subsidiar los costos de capital. Una política
cía, elelefecto
cia,
efecto
global
global
podríapodría
ser mucho
ser mayor,
mucho incluso
mayor,si, incluso si, 3 - •
eí de bienes industriales podría, en su mejor aspecto, prometer
ciertas líneas particulares de producción, hay empresarios poten obtencr relativamente rápido las economías de
'
'la’ i “aglomeración”,
cíales que no aprovechan la ventaja de sus efectos sobre las ga .
................
y concentrando el crecimiento
industrial en una zona de una
nancias. En cualquier caso, los efectos de inducción reales sólcL^j
l en especial, podría reducir algunos costos de urbanizapueden determinarse por amplios estudios empíricos, proporciL¡ón ten¿rían ¿e ejercerse
; en un desarrollo difuso al azar.
nando eventualmente una muestra lo suficientemente grande parí p Vn usarse yt¡cas
¡
Pueden
usarse políticas impositivas para promover el desarro­
aislar los efectos inducidos de diferentes tipos de inversión.
llo regional de diversas maneras. Exención del impuesto sobre la
La inversión en adp podría tener dos efectos de inducción/;
renta o las utilidades, o asignaciones de depreciación mayores
uno, en los proveedores de insumos (lo que Hirschman deno
sobre la nueva inversión, podrían hacer- a la inversión que ob­
mina “efectos de cadena hacia atrás”), y otro, en los usuarios rí
tiene menores ganancias antes de los impuestos en las regiones
los productos (“efectos de cadena hacia adelanté”). Algunas in
; atrasadas que en otras, obtener una tasa relativamente mayor
dustrias pueden considerarse “satélites” de una industria prin/
después de pagar los impuestos, En una economía en donde las
cípal.
En este
respecto,
Hirschman da un ejemplo que nos
entre
ganancias
que se obtienen en diferentes
re•
«
1
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vidiferencias
1XG3X CX AUXdíf X1LX
t A dO ti ílAlas
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interesa. Los molinos, dice, por lo general no tienen efecto?; ¡ no es
industriales,
de
es
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en
muchos
pa£ses
7°
dp
ri’r.Jnrr'í An de los productos agrí­
°
_
..
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deradpns
cadena hacia atrásntrác
en pn
la lnproducción
ésta podría ser una inducción útil, pero es poco probable que
colas que son procesados; .argumenta que es poco realista pensar
atraiga a la inversión industrial pionera, a las zonas subdesarro­
que la producción de arroz, por ejemplo, es inducida por la exislladas en los países menos avanzados.
tencia de procesadoras de arroz Esas empresas más bien deben Es ^obable qüe.Es
lasprobable
exenciones
o reducciones
en losoimpuestos
que
las exenciones
reducciones en los impuestos
considerarse como industrias satélites a través de un proceso <klocalg se ¡nJluso men03 e£ect¡vas que £as exenciones de los
cadena hacia adelante. Empero, con frecuencia, como suceda
impuestos de los gobiernos centrales. Los impuestos locales,
pol­
en el caso de la industria azucarera mundial, las cadenas hacia lo general, son tan pequeños que resultan insignificantes para la
atrás sí aparecen en las industrias agrícolas.
mayoría de las decisiones para el establecimiento, y en aquellos
Hirschman también sugiere que el porcentaje de producción
casos en que sí implican una diferencia, es probable que las reA
ü
*'- a
22
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
23
ducciones otorgadas por una autoridad impositiva local sean rápii SELECCIÓN DE PROYECTOS
damente igualadas por las otras localidades, que también estáíE
ansiosas de atraer a la industria. Desde el punto de vista de un; La sección anterior trató algunas de las consideraciones que de­
autoridad local siempre será mejor tener una industria que líp ben tenerse en cuenta cuando, un gobierno está eligiendo políticas
pague impuestos, que no tenerla, y si éste fuese el caso, se otorga £ amplias para estimular el desarrollo regional. Esta sección se
rán, entonces, concesiones generosas. Dando todas las autoridad^" ocupa más de la selección entre partidas particulares de gasto
locales concesiones similares, los efectos sobre el establecimiento que de la estrategia general que está detrás de la selección de
de la industria se compensarán, pero las autoridades locales ya sH políticas. Por lo general, los economistas han tratado estas dos
vieron privadas de ingresos impositivos. Es más probable quL cosas por separado. Pero, en principio, no se Ies puede separar
concesiones discriminativas por un gobierno central sean mucho de una manera satisfactoria. Un gobierno, por ejemplo, no puede
más efectivas. Un ejemplo de un esquema que ha tenido apa^ seleccionar una política de fuerte inversión en transportes, sin
rentemente gran éxito para atraer fondos de inversión es el qun algunos detalles del resultado de tal inversión que haga posible
en la actualidad se está empleando en el noreste brasileño.1- la comparación con la inversión de una cantidad comparable de
Las empresas han podido usar parte de los fondos que de otn: recursos productivos de algo por completo diferente, quizá un
manera hubieran tenido que pagar en impuestos por inversión programa educativo. La selección de políticas debe tener en
nes en la región.
h cuenta el rendimiento de las inversiones individuales, para im­
Reducciones selectivas en los impuestos indirectos podrían in. pedir el desperdicio de recursos que resultaría si el empleo de
fluir en el establecimiento de las empresas, pero la única
fondos en un sector obtiene un rendimiento mucho menor que
estas concesiones que probablemente tenga importancia real erf en otros sectores. La medición de los rendimientos de la inver­
los países en desarrollo es la exención de los derechos de ind sión, no obstante, sólo puede hacerse a la luz de los objetivos
portación sobre importaciones de productos intermedios. Tal como que están detrás de la realización de esas inversiones, y estos
se describirá en el capítulo iv, México ha adoptado este enfoque objetivos se determinan tanto por las metas como por la natupara estimular el establecimiento de industrias a lo largo de sip rdezM de las políticas más generales. Un proyecto de inversión,
frontera con los Estallos Unidos.
por ejemplo, puede evaluarse desde un punto de vista si su
Una política regional alternativa implica inversión directa de; objetivo es elevar al máximo el- ingreso bruto de una región
gobierno en actividades productivas. Acabamos de comparar ésto en particular, y desde otro punto de vista si su meta es un má­
con una estrategia de una política que invierte cuantiosamente i ximo ingreso per capita regional. Un proyecto elaborado para
en instalaciones sociales generales. No podemos decir much^ estimular la iniciativa privada será evaluado de una manera
más en abstracto. La razón básica para la inversión guberna -diferente de otro que sólo tenga como meta producir bienes
mental directa es que o bien los rendimientos sociales de W de consumo.
Aunque algo de lo que se dirá en esta sección podría apli­
inversión exceden los rendimientos privados, por una o más de
las razones antes descritas, o, como ha sostenido Hirschman, poL carse a la elección de políticas impositivas o de controles di­
que el talento empresarial es escaso y necesita ser estimulado. Por rectos sobre la inversión privada, nos interesan de manera prin­
supuesto, podría argumentarse que si el talento empresarial en cipal los proyectos de inversión y en especial las inversiones para
particularmente escaso es poco probable que el gobierno posea obtener los objetivos del desarrollo regional. Todo proyecto im­
mucho del mismo. No obstante, en donde la provisión de incen­ plica el uso de insumos en una corriente durante cierto tiempo
tivos para aumentar la inversión del sector privado es un objetivé y la generación de productos durante cierto tiempo. El proyecto
propuesto podría describir los insumos y los productos tan pre­
gubernamental importante, la inversión directamente productiva!
cisamente como si el resultado del gasto fuera seguro, o podría
puede ser la forma más eficiente de estimularla.
reconocer cierta incertidumbre tratando de asignar probabilida­
des para diferentes resultados. En el caso de los proyectos de
desarrollo regional, en los países en desarrollo, es casi seguro
M A. O. Hirschman, "Industrial Developnient in the Brazilian Northeasí
and the tax Credit Scheme o£ Article 34/18”, Journal of Development Stu que no se disponga de la información necesaria para prever tales
probabilidades. 'Esto no significa que los planificadores de los
dies, v, pp. 5-28.
24
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL:
APOLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
25
proyectos siempre elegirán el resultado esperado de sus cálculos
;un sector de la economía, no diferirá de la que se emplea en
—podrían estar ansiosos, por ejemplo, de evitar una catástrofe y
= otro sector. En la actualidad se acepta que podrían existir muactuar con seguridad, o la incertidumbre podría hacer provecho^
chas circunstancias en las cuales
sería mejor, para el 1 gobierno
so conservar tanta flexibilidad como fuera posible, incluso a ciertoí
‘ de un país subdesarrollado, calcular su
propio sistema de contacosto. En este libro no nos ocuparemos mucho del hecho ineviá
ineviá" bilidad o de precios sombra que
usar los precios que imperan
table de la incertidumbre o de sus efectos sobre el proceso de la¡
[ en el mercado. Los economistas
han escrito mucho sobre los
*toma de decisiones. Como sucede con la mayoría de los escritos precios más apropiados para usar y sobre la forma de usarlos.
sobre este tema suponemos que el resultado de cualquier acción'
De hecho, en algunas ocasiones, ha parecido como si el único
es completamente previsible. El hecho de que las consecuencias problema en la selección de proyectos fuera la elección de pre­
de una actividad sólo pueden preverse imperfectamente ha sido; cios adecuados; después de todo, los precios pueden emplearse
discutido en un interesante libro de A. O. Hirschman, quien su-; en fórmulas ya bien establecidas y automáticamente obtendremos
giere que el fracaso en apreciar todos los problemas que puedan suficiente información para hacer una decisión sobre cualquier
surgir en el curso de la operación de un proyecto podría tener ? proyecto. Diremos, empero, que ésta es una visión muy simplisus aspectos benéficos.18 A menudo, un proyecto de desarrollo^ , ficada de la evaluación de proyectos, cuando menos en el estado
se ha encontrado con problemas inesperados que, si se hubieran;A actual de la técnica. Aunque es posible concepto al mente idear
previsto, hubieran impedido su aprobación, pero al presentarse;q la determinación de algún conjunto de precios para medir los
han demostrado tener solución. Es útil estar consciente de esto? costos y beneficios de todos los proyectos, estamos muy lejos de
aunque sólo sea por significar que en el futuro se hará más fácil' hacer esto. Trataremos el problema de los precios reales que
prever la capacidad humana para resolver problemas, y será; deben usarse, al final de este capítulo.
importante preguntar, en nuestra descripción de lo que ocurrió
La parte clave de la evaluación de proyectos es la medición
con las políticas de desarrollo regional en México, en qué grado, í’de los beneficios del proyecto. En última instancia, los costos de
el resultado era previsible y si los resultados inesperados fueron: cualquier proyecto son los beneficios que se pudieran obtener
benéficos o perjudiciales.
.
' ippor el uso de recursos del mejor proyecto que se ha rechazado
Incluso si la ignorancia de los problemas que pueden presen-; para realizar otro proyecto. En consecuencia, hay que pregun­
tarse es benéfica en algunas ocasiones, por lo general uno debe tarnos cómo debemos calcular los beneficios de un proyecto de
proceder sobre el supuesto de que las decisiones racionales re- i inversión que ha sido ideado para promover el desarrollo re­
quieren información y que cuanto más tengan, mejor. Pero la ; gional.
información es costosa y algunas veces difícil de obtener y A
procesar. Es cierto que, para quien toma las decisiones en uñó El manejo de los objetivos múltiples de la inversión pública
gobierno centralizado, sería -imposible, en la práctica, obtener ;
información suficiente sobre todos los cursos de acción poten- ;; Lo primero que debe observarse es la multiplicidad de objeticíales para comparar los resultados de cada uso posible de lcn L vos de los proyectos de inversión pública, tal como se ejemrecursos, por la gran cantidad de información que sería necesario^; plifican por nuestra discusión de las políticas regionales. Aquí,
obtener y procesar. Parecería que el uso de los precios evitarías' los gastos tenderán a incrementar el ingreso nacional. No obseste problema. Proporcionando una indicación cierta de los gra-; tante, les interesará en especial aumentar el ingreso regional,
dos relativos de escasez de diferentes factores de la producción- pero podrían referirse al ingreso per cepita o al ingreso regioy de diferentes productos, y permitiendo un cálculo dentro deb nal total. En donde la preocupación es el ingreso per cepita, el
incremento del producto que podría resultar del usó de recursos"‘I gobierno puede estar interesado en el ingreso promedio per ca~
para inversión más que para el consumo corriente, hacen po-I 'pita regional o en el ingreso per cepita de ciertos grupos que
sible establecer reglas para tomar decisiones, que dan alguna.! viven en la región. El proporcionar empleo puede ser una
seguridad de que la base para relacionar el gasto público, en| meta independiente, y puede tener como fin la disminución de
I la desocupación local o la atracción de mano de obra de otras
“ A. o, Hirschman, El Comportamiento de proyectos de desarrollo, Mé-f regiones. El proyecto también podría llevai al descubi imiento y
xico, Siglo xxi Editores, 1968.
I utilización de otro tipo de recursos, sean recursos naturales, ha-
26
POLÍTICA DEL D
bilidad empresarial o fuentes potencial
manera no ce hubieran aprovechado.
El resiiltado de cualquier proyecto
grado en que se logren estos objetivos
gro de objetivos será más que esto, po
particularmente alto de un objetivo
cularmente bajo de otro, y llegará
los beneficios de un proyecto. Puest
mas, en las que se expresan los obj
tados directamente mensurables, deben
netarios a los no expresados en térmi
no sea posible, la mayoría de los ben
todos, que no aumentan el ingreso n
teoría, expresarse en términos de la d
Así, podría desearse una mayor ocupa
ticipación de los desempleados en el i
considerarse perjudicial a la inflación
versos sobre la distribución del ingreso
ideal de los beneficios no implicaría
ponderaciones para todos los resultado
monetarios con anticipación, y el llev
ponderada (la ponderación asignada a
con el nivel de logro de otros objet
de la desocupación podría ser un o
los ingresos per capita fueran de $ 1 0
cia cuando fueran de $100.
Enunciar lo que implicaría una medi
tivos sería demostrar simultáneamente
nerla. La alternativa que se sugiere
hacer máximo el logro de un objeti
ponderada de objetivos sujeta a limitac
15
metas deseables.14
Aunque conceptua
alguna esperanza de que pueda aplic
imposible imaginar que un gobierno
explícitamente las limitaciones de, d
la tasa de crecimiento en términos de
bilidad de los precios. Los gobiernos
14 Varías de las afirmaciones que se hacen
tratadas más extensamente por Tiroothy Rin
Invcsínient Gritería: Coinplementary of Compe
Economics, r.xxx, febrero de 1966, pp. 108-20,
15 Véase Otto Eckstein, "A Survey of the
Criicna”, en The Public Piñonees: Needs, S
rencia de la Universilies-National Bureau Con
Princcton, Princeion University Press, pp. 439-94.
S:
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
idea de lo que es un nivel tolerable de inflación
Podría ser imposible, aunque sólo fuera por r
que un gobierno enunciara el nivel de desocupac
ción que tolerará, pero que, en el pasado, ha
preferencias, lo suficiente para que un econom
presarlas.16 Además, los economistas saben mucho
ción de objetivos sujeta a limitaciones.
Es más fácil manejar la función de objetivos
al máximo un objetivo y establecemos como lim
las otras metas deseables. Cuando queremos incl
tivos dentro de la función y llevar al máximo
rada, encontramos el problema de que es probab
deración sea arbitraria y corremos el riesgo de
dice Eckstein, "o una mezcla sin sentido o estare
todos los objetivos diferentes a la producción tangible”
Los intentos del U. S. Bureau of Reclamation
un conjunto de medidas uniformes de los ben
que no sean las contribuciones hechas por el pro
nacional bruto, condujeron a tantos supuestos
todo el concepto de beneficios, distintos a la efi
ca, cayó en desprestigio.18 La precisión falsa pue
la falta de precisión puesto que podría ocultar lo
cuales hay que tomar decisiones.
Dadas las dificultades implícitas en esto, sería
cerse que no es necesario un intento complejo
cuidadosamente una multiplicidad de objetivos. L
gumentado esto, no sólo porque es difícil formular obje
1<! Arthur Maass demostró, en una discusión muy inte
equivale a un punto de intercambio entre la eficienci
objetivo menos económico puede surgir, y de hecho surg
gislativo, de los Estados Unidos. Esto ha ocurrido en l
rales de carreteras y ele habitación, aunque no en los
arrollo de los recursos hidráulicos. Durante el proceso
de una prolongada discusión y de la consideración de a
a un tipo de intercambio.
Como indica Maass, el reconocimiento explícito del
de un objetivo por el logro de otro es un‘ progreso c
punto de vista de que los proyectos deben elaborarse ex
lograr un objetivo de eficiencia económica y enmendárse
que la multiplicidad de objetivos afectará b. elaboración
Véase Arthur Maass, "Benefit-Gost Analysis; lis Relevant
ment Dccisions”, Quartcrly Journal of Economías, i.xxx
pp> 208-26.
17 Eckstein, op. cit., p, 448.
1S Hay una discusión muy buena de esto en Hiischman
to de proyectos de desarrollo. El capítulo final de su
el análisis de esta sección en muchas punios.
28
POLÍTICA DEL DE
porque ataca a todo el concepto de una
jetivos) y medios, y también porque
en un enfoque alternativo que implica
políticas por pasos pequeños, tratando
Sólo un campo limitado de objetivos
pequeño número de alternativas posibles
importante, ya que tal procedimiento ev
ficultades mencionadas antes, con respec
información en un proceso de decision
hecho innegable de que todas las pred
futuro incierto. Sin embargo, va en co
hace, generalmente, al discutir la selecci
hecho contra el supuesto que se ha hech
las políticas deben seleccionarse despu
cuidadosa y comprensiva de las alterna
de los objetivos formulados con cuid
blom denomina “sinóptico".
La sociedad, argumenta Lindblom, no
fines que busca de los medios que em
que la sociedad es una colección de in
miembros de la misma consideran como
como medio para otro fin. En la socie
seable aumentar el gasto para defensa
el poderío nacional, y la reducción d
medio para ese fin. Para otros, la f
plena, y el aumento del gasto para d
elegido. En estas circunstancias, es más
sobre la política por seguirse que sob
No obstante, debe observarse que la i
ciales no es algo ajeno a la mayoría
últimos parecen estar dispuestos a habl
arrollo" o estar preparados para decir q
ción social con respecto a otra, lo cu
de objetivos sociales.
Lindblom compara el problema de
las virtudes de permitir que surjan p
pequeños pasos no coordinados tomados
lisis, la evaluación y la decisión políti
dientemente en un gran número de pu
19 Lindblom ha expresado estas opiniones e
ñas bigliográfícas, pero, pava la expresión más
David Braybrooke y Charles E. Lindblom, A
Evaluation as a Social Process, Nueva York,
pp. 6-143.
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
sociedad. Este procedimiento permite la represe
serie más amplia de valores en las decisiones po
consideradas por una sola persona que tomara la
donde resulta que pueden seguirse pasos posteri
gir las consecuencias adversas no previstas de
un grupo presiona y obtiene una política que
tantes aspectos del problema, otro grupo los har
nes toman las decisiones en el gobierno y otro
supervisores para asegurarse de que no se descu
lores.
No obstante, hay grandes dificultades en este
larmente en lo relativo a la correlación de error
decisión de inversión podría con frecuencia sig
perdicio extremo de recursos, o incluso ser imposible f
; Cuanto más se haya convertido un curso políti
't aceptada del contexto general dentro del cual
decisiones, tanto más difícil es dar marcha atrás en él d
: punto de vista político y económico. Además,
í las políticas gubernamentales no están sujetas a
pentimientos abruptos podría, en una economía
í charse, ya que puede suponerse que una reducc
tidumbre mejorará las decisiones privadas y
? mejor distribución de los recursos.
En donde las políticas son virtulamente irreversibles
20 Es interesante, en este contexto, comparar las opin
' sobre un experto en tránsito, con las de Peter Hall s
futuro de Londres.
y “Un experto en el tránsito urbano, por ejemplo, podr
í tránsito de ciertas calles se hiciera en un solo sentido.
; de predecir cuantos embotellamiento de tránsito surgirán y
tante, podría hacer confiadamente sus recomendaciones, prop
dida que se ocasionan los embotellamientos, se tomarán
para resolverlo en ese momento, nuevos semóforos, asignac
policía de tránsito, o una revisión del mismo plan d
de la calle en un solo sentido. También podría prever,
consecuencias, como las pérdidas de los negocios en c
desviación del tránsito. Sin embargo, podría ignorar alg
secuencias al elaborar su plan de tránsito. Para evitar e
separado cada uno de los problemas previstos, decidirá
ciones del estacionamiento, facilitará el tránsito de peaton
o usará alguna otra política para reducir las pérdidas d
no se consideraron de importancia en su primer pro
(Lindblom & Braybrooke, p. 125.)
"Al experto en tránsito se le paga para que haga
de vehículos; hace sólo esto; no le importan otras cons
' ciudad tan mal planificada para el tránsito de vehícul
s es Londres, el resultalo podría ser desastroso en térm
■ planeamiento. Hasta ahora, los dos casos más especta
30
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL ► POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
adoptarse algo del enfoque sinóptico, incluso si se consideran rr sobre las actividades de otras unidades descentralizadas.21 Pero,
las dificultades implícitas, o si los resultados sólo tienen un éxito ;; en cualquier caso, la práctica administrativa, con frecuencia, ixatu
parcial. Esto es cierto en donde hay una considerable interde- i; de hacer mínimas las consecuencias negativas de ignorar los
pendencia entre las decisiones del gobierno, como ocurre £re- ;i. efectos colaterales estableciendo oficinas que tienen el poder de
¡i coordinar las actividades de otras personas que toman decisiones
cuentemente con la inversión en los países en desarrollo.
j precisamente en donde los efectos colaterales de sus políticas
Por último, a menos que estemos seguros de que cada sección í
í son más dañinos. Más que ver a un experto en tránsito como
de la comunidad es servida por un fuerte interés de grupo, y í
: ejemplo de las virtudes del enfoque de incrementos, m implicó
que tales grupos están razonablemente equilibrados en el pro- í
r que se requería un planeamiento urbano como uno Lase sinópceso político, hay poca garantía de que lo que surgiría del proceso ’’
1 tica razonable. Sin embargo, es posible que la autoridad del
de Lindblom de negociación sobre decisiones políticas junto con )
1 planeamiento urbano no se preocupó mucho por las aguas ne­
correcciones frecuentes de las políticas existentes sería una mejo­
gras que la ciudad arroja al río. Quienes se preocupan de ello
ría respecto a un intento sinóptico razonable.
; son los habitantes de la siguiente ciudad río abajo. En tal caso,
No obstante, recuérdese que éste es un asunto de interés. El,’
; el gobierno central puede crear una oficina para que coordine
enfoque sinóptico no es operativo en un sentido total y com­
Ha evacuación de las aguas negras en una cuenca.
pleto. Es posible concebir una situación en la que un enorme;
í En nuestro ejemplo sobre México, discutido abajo, la Comícomputador, alimentado' con una función de bienestar social;
completamente especificada y con una lista completa de todos'¡ sión de Cuencas Hidrológicas puede considerarse como si utilizara
los recursos, pudiera darnos una solución simultánea a todas lasj| un enfoque sinóptico al tomar las decisiones para las cuencas
decisiones políticas, pero es imposible creer que alguna sociedad,b • hidrológicas como un todo, pero ignorando los efectos colareintentara alguna vez eso. Es inevitable alguna descentralizaciónf ( rales exteriores de cada cuenca. Pero al hacer las proposiciones
en el proceso de decisiones. Es útil recordar que no siempre es5 ; para el presupuesto, los funcionarios de otras instituciones ¡mdañino lo que a menudo es “suboptimización” por unidades des-;. ;■ pilcadas -la Secretaría de Recursos Hidráulicos, la Secretaría
centralizadas, que podría implicar decisiones tomadas. con res-;-f de Hacienda y la Secretaría de la Presidencia— podrían también
‘ utilizar algo parecido a un enfoque sinóptico, pero basado en
pecto a criterios que son inconsistentes respecto a los criterios;
i consideraciones diferentes. El resultado neto está lejos de ser una
niveles”,
y
que
no
toman
en
cuenta
sus
efectos
de los “altos
helara decisión sinóptica sobre la inversión con las alternativas
o ponderadas a la luz de todos los objetivos. De hecho, es posible
la desviación de una corriente principal de tránsito del West End a través
■ que algunos criterios de decisión utilizados por la Comisión conzona de la época del rey Jorge que ha logrado sobrevivir;
de la más bella
hacer que los camiones pesados que se dirigen hacia el.
y el plan para
tradigan el criterio del nivel más alto de la Secretaría de la. Pronorte desde los muelles y los centros de mercado pasen a través del antiguo
• sidencia. Ciertamente, los procedimientos no ofrecen una gara mía
centro aldeano de Híghgate. (Una nota de pie de página indica que este
-'de que la productividad marginal de los últimos 100 000 pesos
último plan íue modificado por el Ministerio de Transportes en enero de
: gastados por la Comisión de Cuencas Hidrológicas, en términos
1963, después de considerables protestas, reivindicando así, quizás, a Lindblom en esta instancia particular.) Pero hay muchos casos que no son me­
del logro de un conjunto de objetivos nacionales., será la misma
nos inquietantes, pero que tienen menos publicidad espectacular porque
que la de los úldmos 100000 pesos gasiados por la Secretaría
no implican aspectos de estética, o porque las personas afectadas se expresan
:•
de Comunicaciones y Transportes. Quizás pudieran ímeer algo,
menos que las de Híghgate, Y cualquier Remanso residencial tiene' proba­
- sin embargo, para impedir que estos dos productos mm'ghmlm
bilidad de ver terminada su paz y quietud por la desviación de una cosean muy diferentes.
rrícntc principal de tránsito.
"Basándose sólo en consideraciones sobre la corriente de tránsito, es pro­ :
Retornamos aquí al punto de vista sencillo, pero no obvio, de
bable que las técnicas de los expertos en tránsito reduzcan- el nivel de vida : que en la actualidad pudiera ser mejor enunciar los obpíivm
aceptable del londinense con mayor rapidez que cualquier otro ñcontecimiem
con tanta claridad como sea posible, o iudíoir de jmrrmmo pelo, Pero basados en una ponderación cuidadosa de todas las personas afec­
tadas —choferes, residentes, niños de escuela y compradores peatonespueden indicar el camino hacia un método barato y rápido que haga de
Londres un mejor lugar para vivir y para manejar en él, hasta que podamos
disponer de los recursos para una reconstrucción más radical.” Petcr Hall,
[.andón 2 000, Fabcr and Fabcr, Londres, 1963, pp, 120-1.
Y
ai Para el problema de l;i siibopíiniizncíón vAsse Poíjih! N. Mcl-L .in,
Effieif’ncy in Govcrruiiant. 'J'hyon^h Ó'.-Uroev ,1 js/g./.y,
/Lv/Pm ou
Water Re.wtures Dcvelo/miciil, A Kand ( bn potrti ¡<-i? Ih'ajrHi . Sludy,
Yoik, John Wilcy & Sons, J958. pp. 99-31.
32
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
sibles variaciones compensatorias entre ellos en la medida en que i
hgional.22 ¿Cómo debe' tratárseles en la evaluación de los pro­
puedan conocerse, como una guía para la elaboración de pro­ yectos? En los países avanzados, en los análisis de beneficio-costo,
yectos de inversión. Cuando se presentan alternativas para la L; son por lo general ignorados por la correcta razón de que puede
decisión, en la actualidad quizá lo más que puede esperarse e • £erse u6na ocupa°ción plei
£
el aprovechamiento
de las
1 . y... que
A
x
H11P
mnpstrp
pl orrann
Ha In.crm
Haobjetivo
rada AhiAtivn
ruin HrtriHí ■*■
que secp
muestre
el grado
de logro
de cada
y que donde
i oportunidades de ganancia significa tomar recursos de otros usos
es posible indicar las variaciones compensatorias, entre las alter­
¿que casi son igual de lucrativos. Por lo tanto, el beneficio para
nativas, éstas aparezcan con tanta claridad como sea posible. Ta ¿
: la economía proveniente de los efectos de cadena es insigninvez a largo plazo uno podría esperar que puedan crearse índices
cante. Pero, incluso, en los países avanzados el hecho de que
más satisfactorios del logro de objetivos.
"
;^proyectos diferentes tienen diferentes efectos regionales podría
don de
' ser una razón para seleccionar uno en lugar del otro, en
la rael desarrollo regional es un objetivo importante. Ésta era
secun\ zón que subyacía en el uso propuesto de los beneficios
En este tipo de estructura de la selección de proyectos, ¿cómo , darios por el U. S. Burean of Reclamaron.
incluyen los problemas de evaluación de inversiones a las con­ ; En donde los efectos de cadena se refieren a objetivos
de in­
sideraciones aparentemente cualitativas del tipo mencionado eí,
\ greso regional
de ocupación, la evaluación
del^xproyecto implica
Urtl uouc
Cv<uU™
la sección de políticas dé desarrollo regional?; por ejemplo, la
(;tratarde de
no elsin
el proyecto.
Mratar
medir
lo que
ocurrirá
proyecto,
A la ocu- A la ocumedir
lo que
ocurriráo no
0 sin
diferencia entre el capital general social y la inversión directa- ‘í pación
.
regionales,
generados
por
las
actividades
y
el
ingreso’
regionales,
generados
por
las
actividades
com- compacióu y el ingreso
mente pioductiva. La diferencia no está en las razones por laQ pigmentarias, se les dará una mayor ponderación implícita, que
cuales el gobierno persigue una política de desarrollo regional a una cantidad iguai de ingreso y ocupación que pudiera haCuando menos algunas de las formas en que los proyectos cum; 5erse generado en otras regiones. Esto no da lugar a ninguna
píen sus objetivos son las mismas para todos los tipos de pro dificultad especial de evaluación. Mucho más difícil es manejar
yectos de inversión. Todos los productos, que pueden venderá ha posibilidad de que el ofrecimiento de oportunidades de gadirectamente al consumidor, a los productores o que, cuando estp;- ......
. . no aprovechado
- - y conducirá
- •nancia liberará talento empresarial
producto no puede ser apropiado adecuadamente por el produd a un cambio en el uso de los recursos del consumo hacia la
tor y por lo tanto no le puede fijar precio, como una carre inversión. En el caso del aumento de ahorros, la dificultad surge
tera, pueden cuando menos identificarse claramente y dárseles de la predicción de lo que sucederá. El problema del grado,
un valor para los propósitos de evaluación del proyecto. Los en el que debe darse una mayor valuación a los ahorros que
precios que se deben usar se discutirán en breve.
: al consumo, es un asunto que se discutirá en breve, ya que
En el caso de proyectos públicos, esto implica la venta d
forma una parte esencial en la elección de precios sombra.
productos al sector privado (incluyendo las familias) y con bas­
Es más difícil manejar el espíritu de empresa. Una década
tante seguridad la compra de insumos al sector privado. Habrá =
después que Hirschman expresó enérgicamente que una de las
sin embargo, una diferencia en los tipos de proyecto en el grado
principales tareas de los gobiernos en los países en desarrollo
era encontrar formas de utilizar la existencia potencial de em­
en que hacen compras o venden al sector privado y por tanto eC
presarios, hay muy poca evidencia empírica para defender o
el número de oportunidades lucrativas que ofrecen para utilizar:
rechazar esta opinión, y hay muy poco conocimiento sobre qué
sus productos o para venderles importaciones. Habrá una diferenq
tipo de proyectos lo hacen mejor. AI iniciar un proyecto de
cía en la medida que tales oportunidades sean notadas por los
empresarios potenciales o que ya existen, y en el tipo de empre­
" También se les puede describir como una clase importante de efectos
sarios que serán capaces de tomar ventaja de esas oportunidades,;
exteriores “pecuniarios” que un productor puede tener sobre los precios
que confrontan otros productores. Los efectos exteriores “pecuniarios” no
También habrá una diferencia en la medida en que se ofrece'
implican una relación tecnológica directa entre la acción de un productor
ocupación en otras industrias y en el grado en el cual las opor-j
y la productividad de acción por otros productores; tal efecto exterior se
tunidades de ganancia locales son mejores en otras partes.
conoce, con frecuencia, como el efecto exterior tecnológico. Por lo general,
se está de acuerdo que si existe una relación tecnológica entre dos pro­
Estas oportunidades de ganancias son, por supuesto, los efec
yectos, se les debe planear y evaluar como si fueran uno solo. Hay mayor
tos de “cadena” introducidos en la discusión de la política red
Efectos en cadena
desacuerdo en la forma que se debe tratar a los efectos “pecuniarios”.
34
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL ^POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
35
crecimiento regional acumulativo, como es obvio, los pasos ini­ zada por carencia de las divisas necesarias para importar
bienes
ciales son críticos; el estímulo de los empresarios locales es intermedios y materias primas. El efecto de esto sobre el
precio
deseable. ¿Cómo debemos evaluar al espíritu de empresa? Los; de la divisa en términos de la moneda nacional —que
es un
factores normales pueden evaluarse en términos de una corriente elemento importante en cualquier cálculo de los costos y bene­
ele servicios ofrecidos —pero con los empresarios no es claro, de
ficios de un proyecto— se discutirá en breve. En circunstancias
modo alguno, cuál ha sido su contribución. No está cía-; en las que se espera que continúen las dificultades en el balance
ro en qué grado y en , qué sociedades, dentro de los límites! de pagos, la aceptación de la inversión extranjera requiere un
*deestudio
recursos
cuidadoso;
para inversión,
pero su seanálisis
aprovechan
está afuera
las mejores
de la oportuni
presente
dades. Es fácil observar que hay diferencias entre las sociedades^discusión.
vy entre los grupos sociales
i__ ___en_________
_i /__________
. ... de activi­• U’ __
.............. ,
la aparente
búsqueda
; En resumen, el análisis de las “cadenas” debe tratar de eva­
dades que rinden ganancias y en el grado en el cual se llevan luar lo que habría ocurrido en ausencia del proyecto, no sólo
a cabo actividades industriales más que en actividades comer­ en la región de que se trate, sino en toda la nación. Así, puede
ciales. Un ejemplo obvio es la diferencia en el comportamiento; medirse la contribución neta del proyecto a los distintos ob­
económico entre los inmigrantes y el resto de las personas, tanto jetivos.
en la sociedad de emigración como en la de inmigración. Pero
puede discutirse, sin terminar nunca, la medida en la cual las Precios
oportunidades han hecho a los hombres, o los hombres a las opor­
tunidades, y es incierta la medida en que lo “obvio” de las vXqui sólo se discutirán brevemente los precios de los insumos y
oportunidades repeicute en esto. No obstante, está claro que de los productos que deben usarse al calcular el logro de objetivos,
cuanto más pueda un proyecto regional descubrir el talento no porque no tengan importancia, sino porque ya se han discu­
empresarial dentro de una región, en lugar de traerlo de otras tido extensamente en otras obras.23 La selección de precios para
partes, tanto mejor será.
$hacer posibles las decisiones descentralizadas posiblemente sea
Un problema relacionado se refiere a la inversión extranjera. ? aproximada. Observamos antes que, por varias razones (que tra­
En la mayoría de lis circunstancias, la inversión directa por taremos posteriormente), el gobierno podría dejar de usar los
empresas extranjeras será bienvenida, puesto que ofrece al país 'precios del mercado y utilizar sus propios precios sombra. El
receptor un aumento en la inversión total, respaldada, con fre­ ; conjunto ideal de precios sólo surgirá después de que se hayan
cuencia, por el ofrecimiento de conocimientos y el entrenamiento1 comparado todos los usos alternativos de los recursos en térmide la fuerza de trabajo interior. La inversión extranjera podría í nos de su logro de todos los objetivos sociales y se haya elegido
ofrecer “cadenas” que estimulen la actividad interior. En donde , el mejor programa de inversión' y producción. Pero si fuera po­
hay desocupación de mano de obra, y en donde se importa el sible y razonable hacer esto, entonces no habría necesidad de
capital y los empresarios capacitados, la inversión extranjera po­ ’ decisiones descentralizadas y, por tanto, de precios. En conscdría no implicar un gran desvío de los recursos de otras acti­ ' J cuencia, los precios que se utilicen se calcularán sobre una base
vidades, de manera que el producto total del proyecto podría -muchos menos ambiciosa y, por lo general, tratarán de repreparecer una ganancia neta. Contra esto, sin embargo, tienen . sentar la escasez relativa de los productos y factores en relación
que sopesar las posibles desventajas políticas; a los gobiernos' : a un solo objetivo, el de obtener el mejor
les desagrada mucho que cantidades significativas de los activos1 : consumo disponible.
de capital del país estén en manos de extranjeros, quizás por­ \ Una dificultad en el uso de los precios
de mercado es que
que creen que esto implica cierta pérdida del control político.. i los precios relativos de los bienes podrían
no reflejar los cosLa inversión extranjera tiene también efectos sobre el balance
' tos de producción, porque algunos se venden en mercados mode pagos —proporciona divisas mientras se hace la inversión
nopolísticos, o porque el impacto de los impuestos indirectos
inicial, pero establece futuras obligaciones potenciales en térmi­
3? Una introducción bastante clara a este tema se publicó en Manual on
nos de la salida de utilidades. En muchos países, una escasez
Cosí
Benefit Analysis, por I. M. D. Little y J. M. Mirrlees para el Centro
en divisas parece ser el principal obstáculo sobre la tasa de
de Desarrollo de la ocde, París, 1969. El haber leído un borrador prelimicrecimiento—, parece existir cierta capacidad interior subutili- ; nar de ciertos capítulos del Manual nos ha aclarado mucho esta sección.
í
I
36
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
O M
a/
rios, y el nivel actual de calidad de los bienes manufacturados
de todos tipos está lejos de ser idéntico. En donde los impuestos Lace a éstos inaceptables en el exterior, o, porque, del lado
(incluyendo los aranceles de importación) se imponen claramente f de la demanda, el país ya tiene el máximo de ingresos prove­
para desalentar el uso o producción de una mercancía, entonces,
ciente de otras exportaciones. Cuando menos es posible teórica­
estarán incluidos en los precios de los insumos y de los produce mente que haya un límite superior en las divisas sin importar
tos. Pero en donde los niveles de éstos son casuales, resultando cuál sea la tasa de cambio o patrón de tipos de cambio múltiples
principalmente de una serie de accidentes históricos, es muy atrac­
aunque sería poco real suponer que en la actualidad el tipo
tivo, en teoría, el uso de un conjunto de precios que prevalecería
-de cambio o las tasas múltiples puedan ajustarse libremente—,
en condiciones de libre comercio con una tasa de cambio eii por un número limitado de exportaciones potenciales y un comequilibrio.
¿portamiento poco favorable de la demanda, y, quizás, por los
La razón de este uso de los precios es que, en teoría, toda
¡.mercados exteriores controlados por acuerdos sobre mercancías
la producción comercial está disponible para la exportación, o
¿o cuotas de importación. La dependencia de un solo tipo de
remplaza una importación potencial, y que el uso del precio,
¡cambio sin impuestos de exportación, hace a este límite aún
al cual sería exportado o remplazaría una importación, es su
kmenor, pues la tasa de cambio no puede ajustarse para cada
valor
práctica,
no es
calcular
la
vdiui para
paid laid economía.
vcouumidEnisnla id
piacucd,
no fácil
es raui
taicuiar
M ,mercanda de ^3^ para Hevar a un máximo los ingresos
tasa de cambio adecuada. Si los niveles arancelarios son altos divisas
es posible
existente existente
esté subvaluada,
y es
posible quequela tasa
la de
tasacambio
de cambio
esté subvaluada,
y ef; V puede óbjetar> con razón< esta s¡tuación es poco
incorrecta para el propóstto de calcular los. precios sombra. Una i
pi¿0. Por
t0/se necesitaría mucho ¿em.
manera de superar este problema es trabajar con dólares, utila -po para que los productores nacionales y los importadores del
zando precios internacionales. Esto no es argumentar que la' ¿exterior respondieran a los cambios en los precios, y existen
política comercial de los países menos desarrollados debe ser
.muchas razones que dificultarían la expansión de cierto tipo
necesariamente de libre comercio, sino sólo que la protección ¡de exportaciones. Sería bastante difícil obtener un cambio de la
proporcionada a una industria debe considerarse a la luz de las ^producción del mercado interno hacia las exportaciones en los
necesidades de esa industria y que la utilidad social de otras f países desarrollados, en donde los cambios requeridos en la esindustrias no debe ser afectada por el hecho de que tengan que ¿tructura de la producción y en el comercio son menores, en
comprar sus insumos a precios elevados de una industria pro­ donde los factores de la producción son más móviles y en donde
tegida. Aquí puede surgir una objeción del argumento frecuente es probable que la respuesta ante los incentivos de precios sea
de que el crecimiento de una economía está peculiarmente limi-jjpnás rápida. A corto plazo, tendría sentido distinguir, en la platado por una escasez de divisas, en tanto que los recursos inte-líideación en los países menos desarrollados, recursos exteriores y
riores no se utilizan completamente. ¿Qué tan válido es esto ^recursos interiores, ya que los últimos no se pueden sustituir
como objeción?
con rapidez por lo primeros. Sin embargo, es mucho más dudoso
Ciertamente, es posible concebir una situación en la que
las hacer esto cuando se trata de determinar la estrategia de desposibilidades de producción dentro de una economía y el
pa­ arrollo a largo plazo y suponer a priori que la especializa ción
ral en los bienes, en que el país tiene una ventaja comparativa, no
trón de demanda por los productos de la economía sea
que haya recursos no utilizados que no pueden emplearse
sin ¿proporcionará suficiente ingreso de divisas. En donde puedo
divisas adicionales. La más probable razón de esto es qué
la ‘ identificarse a la disponibilidad de divisas como el único “em­
inversión requiere importaciones que no pueden producirse den­
botellamiento” de la producción, siendo general la capacidad
tro del país, pero también una elevada propensión marginal
¡excedente en otras partes de la economía, entonces la selec­
importar bienes de consumo combinada con un sistema imposi­
ción de proyectos estará limitada a llevar al máximo el logro
tivo demasiado ineficaz, para presentar ingresos personales enkdc objetivos con las divisas disponibles. No obstante, esto no
aumento, podría tener el mismo efecto. Las posibilidades de pro­
terminaría el problema de la elección de precios. Todavía sería
ducción y de mercados podrían impedir el uso de recursos
necesario fijar la tasa de interés y se necesitaría ajustar los sa­
internos no utilizados para obtener divisas, quizá porque del
jados de la mano de obra, pero en esta ocasión sólo se consi­
lado de la oferta no están disponibles' los recursos naturales
derarían el ingreso intertemporal y la asignación de divisas, en
necesarios para aumentar las exportaciones de productos prima\
38
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGI O N Al ¡
lugar del patrón temporal más usual de inversión y consumí:'
globales. Dentro de poco discutiremos las tasas de salarios y d í
interés.
ü
Sería difícil utilizar precios de libre comercio en el caso d?
ciertos bienes, como la producción de los proyectos de capití f
general social que no están sujetos al comercio internaciona [
Pero su producción usa importaciones que sí están sujetas a e$ i
comercio o que pueden incorporarse a bienes que estén sujeto L
al mismo. Recorriendo la cadena de producción es posible eit
presar el costo de producción de los bienes no comerciales é i
bienes comerciales y mano de obra. Sin embargo, hay problema
adicionales al dar un precio a la producción de esos proyecto^
El uso de los precios reales (en donde pueden tenerse) podrí r
*reflejar elementos de subsidio deliberado (esto es común, po
ejemplo, en los proyectos de irrigación). Además, con frecuencia
los proyectos sólo son económicos si se les realiza en gran e f
cala, lo cual implica un cambio en los precios de los producto;
y quizás también en los de los insumos. Ésta es una consecuencia
probable de los proyectos de desarrollo regional, efectos en c^
dena, por ejemplo, quizá se manifiesten como cambios en lo
precios que hacen lucrativas a otras oportunidades productiva
En donde un aumento de la producción conduce a una baj;
en los precios que prevalecerán en un mercado competitivo, tf
multiplicar el producto por el precio al cual puede venderse suL
estima su valor social, ya que parte de la producción pud
haberse vendido a un precio mayor. En estas circunstancias, po;
lo general, se acepta que la mejor medida del valor social di;
proveer un bien o servicio es lo que los consumidores del biej
o servicio pagarían por él. En donde las cantidades de que
trate son grandes en relación con el gasto total de los consumí:
dores, y el bien es un bien de consumo, es difícil calcular lo qtp
los consumidores pagarían, puesto que pagar por esa cantidai
afectará el ingreso disponible para otras mercancías y llevará y
una redistribución del gasto. No puede obtenerse una medid;
de lo que se pagaría observando sólo la demanda de una meo
canela. No hay un efecto comparable al bien que se compiy
como insumo de la producción. Así, el valor que se asigna a,
abastecimiento de agua de irrigación se calcula por lo genera?
sobre el supuesto de que, después de pagar el precio del med
cado para todos los otros insumos, el productor estará, si e:
necesario, dispuesto a pagar todas sus ganancias por el agua/?
Esto está bien explicado en el libro de Stephen Marglin, Public Invesi':
ment Criteria, Londres, George Alien and Unwin, 1967, pp, 41-4.
POLÍTICA DE?. DESARROLLO REGIONAL
39
antes que pasarse sin ella. Consideramos el caso para realizar
o no una inversión porque es la medida que debemos seguir,
sin importar lo incongruentes que puedan parecer los resulta­
dos en algunas ocasiones. Si, en ausencia de inversión en obras
de abastecimiento de agua que cuesten menos de un millón de
dólares, no puede realizarse todo el desarrollo industrial de una
cuenca hidrológica que rinda cientos de millones de dólares
sobre los usos alternativos de los recursos, entonces los benefi­
cios de un pequeño gasto serán muy grandes en realidad. Si sin
el proverbial "clavo de la herradura” el Reino está perdido, en­
tonces el rendimiento derivado de proporcionar tal clavo es en
realidad muy alto. El hecho de que otros insumos son igual­
mente indispensables y de que el excedente sobre los usos alter­
nativos pueden por igual asignarse a ellos, sí su producción se
incluyera en el problema, no altera el análisis.
El dar un precio a los productos y a los insumos, al menos
en el comercio internacional, es un asunto teóricamente mucho
más sencillo que el asignar un precio a la mano de obra no ca­
lificada y la determinación de un procedimiento satisfactorio
para el descuento de los beneficios futuros de un proyecto. Al
discutir brevemente los problemas que presentamos aquí, debe­
mos prevenir al lector de que estamos navegando en aguas difí­
ciles. No es el propósito de esta discusión derivar fórmulas que
nos guíen al hacer decisiones reales o tratar las diferencias muy
complejas en las opiniones sobre el bienestar social que están
implícitas en la elección de un criterio de inversión en lugar de
otro,25 La sociedad ahorra e invierte porque al posponer su con­
sumo, puede obtener más consumo en años posteriores, siempre
que el rendimiento sobre la inversión sea positivo. Debe supo­
nerse que cuanto más ahorro ocurre tanto más bajo se buce el
rendimiento marginal. La sociedad, o cuando menos la inter­
pretación del gobierno de las necesidades sociales, no deseará
normalmente, ver que se ahorra ingreso hasta el punto en el
cual el rendimiento marginal del mismo se hace igual a cero. Se
debe, por una parte, porque a medida que se hace disponible
más consumo, la valuación marginal del mismo será probable­
mente menor, nadie argumentará que el indio común que vive
en la actualidad debe sacrificar 10 rupias de consumo para que
sus descendientes puedan disfrutar de 11 rupias de consumo un
as Para una discusión adicional véase Lú'lc y Múrices, op. cit,; Marglin,
Public Investment Gritería, pp. 47-71, y Stephen A, Marglin, "The Rate of
Interest and the Valué of Capital with Unlimitcd Supplies of Labor” en
Karl Shell ed., Essays on the Theory of Optima! Growth, Cambridge,
Mass., M. I. T.,- Press, 1967, pp. 141-63.
40
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL Apolítica
del
desarrollo
regional
41
l *•
siglo después (viviendo quizás a los niveles europeos actuales). salario sombra esté mucho más cerca del consumo de un tra­
Por otra parte, se debe a que la actual generación es mortal, a bajador, obtenido de los salarios (quizá sea una proporción
que es ella quien elige el gobierno y a que, quizá, sea limitado su Imuy grande), que de cero, sin importar lo baja que pueda ser
deseo de sacrificar consumo para que sus hijos puedan consu­ da productividad marginal del trabajador en la agricultura, Los
mir más.
j^resultados se reforzarán si hay alguna tendencia a que un inNo obstante, el gobierno puede creer que la proporción dé ócremento en la ocupación aumente los salarios de todos los
ingreso que se ahorra en el presente es inadecuada en vista del. trabajadores empleados, lo cual puede parecer poco probable
alto rendimiento, en términos de consumo futuro, que puedft : en economías que tienen excedentes éfe mano de obra, pero que
obtenerse por la inversión, pero puede ser incapaz de aumentar J sí puede ocurrir con proyectos de desarrollo regional en zonas
la tasa de inversión, al nivel que considera adecuado, por su '.escasamente pobladas y. que en realidad ocurrió en el caso de
habilidad limitada para establecer impuestos. Hay dos conse­ ; México.
La elección y uso de una tasa de descuento implica dificultacuencias importantes de esto, una se refiere a la elección del
salario sombra de la mano de obra, y la otra, a la elección de las : des semejantes. En las circunstancias descritas antes, la tasa de
tasas de descuento de los beneficios futuros. En primer lugar, rendimientos sobre el proyecto marginal será mayor que la tasa
una estructura de la inversión que conduce a un menor nivel - a la cual el gobierno cree que debe descontarse el consumo fudel consumo actual y a mayores ahorros sería preferible, si lo • turo. Ahora bien, es deseable que, si todo lo demás permanece
demás permanece igual, a una estructura con un mayor consumo igual, la inversión tenga un rendimiento tan grande como sea
actual y menores ahorros. Esto afectará la elección de los pro­ posible y, si estamos eligiendo entre proyectos que tengan una
igual duración, con una proporción igual de reinversión de su
yectos de inversión y las técnicas asociadas a ellos, ya que los ■
salarios sombra que se emplearán en la evaluación de proyectos producto y con iguales contribuciones al desarrollo regional y
y en la selección de técnicas no sólo deben reflejar el costo de . otros desarrollos, no invertiremos en un proyecto que rindió
oportunidad de la mano de obra en los usos alternativos, sino' : 3%, si hay otro que da 15%. Si el gobierno pudiera controlar
toda la inversión y la reinversión y fuera capaz de predecir con
también el efecto que el consumo actual de esa mano de obra
exactitud el rendimiento que se obtendría durante varias déca­
tendrá sobre la corriente de consumo futura disponible para la
economía.
das, como resultado de una inversión particular que se hace
ahora, sin importar la duración del proyecto particular de in­
En la mayoría de los países en desarrollo
es probable que el
versión de que se trate, seleccionaría entonces una tasa, de des­
costo de oportunidad de la mano de obra
dependa directa o
cuento que, cuando se usara para las tasas de descuento de todos
indirectamente de la productividad marginal de la mano de obra
los proyectos y para seleccionar todos aquellos cuyos valores ac­
en la agricultura y por lo general se calcula que ésta es muy
tuales son mayores que cero, hiciera las inversiones totales por
baja, mucho más baja que los salarios que recibiera el trabajador
realizar iguales a la oferta de recursos para inversión. Haría
laborando en la industria o en un proyecto público de inversión.
esto, incluso, si la tasa de interés fuera considerablemente mayor
Pero una mayor ocupación implicará, por lo general, más con­
que la considerada como tasa social de descuento. En estas cirsumo total y, por tanto, menos ahorro. El aumento del consumo
í cunstancias, se supone que la cantidad total de inversión no se
asociado al empleo de un trabajador en un proyecto resulta
' altera por la distribución entre los sectores públicos y privados.
tanto del consumo adicional de quienes siguen en la agricultura
. La tasa marginal de rendimiento en ambos sectores, por lo tanto,
y que disfrutan de un ingreso mayor después de que el traba­
jador se fue, y del mismo consumo incrementado del trabajador,
; debe ser igual.
í En la práctica, todos los supuestos hechos aquí no son reales.
quizá considerable. Por supuesto, este consumo adicional no es
La inversión pública podría financiarse con impuestos y despladel todo un costo para la economía, pero el gobierno lo con­
’ zar, sólo parcialmente, la inversión privada. Podrían existir rasiderará de un valor social menor que si se hubiera ahorrado
■ zones políticas por las que el dinero obtenido de ese modo no
todo el ingreso adicional. El “salario sombra” estará entonces
j estuviera disponible para el sector privado y ésta pudiera ser
entre la productividad marginal de la mano de obra y la tasa
una justificación para que el gobierno invirtiera en proyectos
real de salarios pagada. Little y Mirrleés demuestran que con
¡ que tienen una tasa de rendimiento menor que la que se puede
supuestos posibles sobre las magnitudes de que se trata quizás el
42
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
f
POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL
■
obtener en el sector privado. La vida económica de todos lo;
proyectos podría no ser la misma y podría diferir la reinversiói r
proveniente de ingresos. Entonces el gobierno podría preferir
un proyecto de larga duración con una tasa de rendimiento
relativamente baja (aunque igual o mayor que la tasa social dr
descuento) a un proyecto que diera un mayor rendimiento, coi.
menor duración, y por el que quizás el ingreso se consuma eh
gran parte o se invierta con un rendimiento muy bajo. Um.
manera de tratar esto es que el gobierno utilice la tasa socia i
de descuento al descontar proyectos, haciendo un cálculo de Ir
reinversión esperada y elegir entonces (suponiendo que es igua ■
al grado de logro de otros objetivos) aquellos que tienen le
mayor tasa de beneficio respecto de los costos, Marglin ha obtej
nido una fórmula para calcular la tasa mínima beneficio coslt
que debe satisfacer un proyecto, teniendo en cuenta el grado ef:
el cual la inversión privada es desplazada por el proyecto, la tasó
de rendimiento en^el sector privado y la proporción de ingreso!
f
reinvertido.20
Hemos usado en un sentido amplio la expresión “tasa mat
ginal de rendimiento’’. Para un proyecto ésta puede estar asó.
ciada con la tasa interna de rendimiento sobre un proyecto dr
inversión marginal, la tasa de interés que hará el valor actual!
de los beneficios menos el costo del proyecto igual a cero. Por’
desgracia, en algunas ocasiones, esta medida puede ser ambigua
podría haber varias tasas internas de rendimiento definidas así.
Y por las razones que acabamos de explicar no siempre se pre­
ferirá por la inversión un proyecto con una mayor tasa de ren­
dimiento interna a otro con una tasa de rendimiento internrí
menor. Sin embargo, la tasa de rendimiento interna cuidado­
samente calculada podría ser útil para el analista en ciertas
circunstancias. En el capítulo vii calculamos tales tasas para un
proyecto mexicano bajo una variedad de supuestos. No tratamos
de clasificar proyectos pues no tenemos información sobre lo que
debe ser en México la tasa social de descuento. En estas circuns­
tancias, el uso de una tasa de rendimiento interna significa que
no hay necesidad de seleccionar una tasa social de descuento.
Este procedimiento proporciona una base fácilmente compren­
sible para comparar la tasa de rendimiento con. lo provechoso
de los proyectos privados.
En la práctica, sólo podemos calcular la tasa de rendimiento
con respecto a los objetivos que se expresan fácilmente en tér;
M En este libro no interesan los detalles. Véase Marglin, Public Investmenl
Criterla, pp, 53-71, y “The Opportunity Costs oí Public Investment”, Quar
terly Journal of Economics^, lxxvii, mayo de 1963, pp. 274-89.
43
minos de ingreso. Ésta no es razón para ignorar los otros obje­
tivos. De hecho, como veremos en los últimos capítulos, el pro­
yecto seleccionado para un examen detallado no satisfará nuestra
prueba de aprobación, a menos que algunos de los objetivos,
que no pueden medirse en términos monetarios, se incluyan en
los cálculos. No obstante, antes de proceder a esta evaluación
veremos la forma en la que las consideraciones que se presentan
en ambas partes de este capítulo pueden influir en la historia
de los esfuerzos de desarrollo regional en México.
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
CAPÍTULO II
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
En un país tan grande y tan variado geográficamente, como;
México, son casi inevitables los niveles desiguales de desarrollo;
económico regional y de tasas de progreso. México es muy mom
tañoso, sólo una tercera parte de su superficie puede describirse
como plana y más de la mitad del país está por encima de los
900 metros sobre el nivel del mar. La mayoría de la población
siempre ha vivido en las zonas altas y, especialmente, en la Mesa.
Central, parte media de una cadena de montañas y alta meseta
que forman el espinazo del país. Separada de las zonas costeras
situadas al este y al oeste por escarpadas alturas teniendo hacia
el sur profundos valles y montañas selváticas, y hacia el norte;
zonas desérticas, no ha sido, históricamente, fácil para los habi­
tantes de la Mesa Central salir de ella; por otro lado, han exis­
tido pocas razones para hacerlo. Sus habitantes nunca han com­
partido una sola cultura, en tanto que en otras partes la pobla-;
ción ha estado dispersa en pequeños grupos en las relativamente
pocas zonas en que el suelo ha sido lo suficientemente rico,
la provisión de agua adecuada, y la pendiente lo bastante;
plana para sostener el cultivo del maíz. En otras partes del país,,
la movilidad interior también ha estado restringida por carao
terísticas geográficas. Sólo en los últimos veinte años se conec­
taron las planicies calizas de Yucatán, en el sureste, con el resto7
del país por medio de ferrocarriles, y, en los últimos diez año$¿
por medio de carretera. Antes de eso, las dificultades para atra:
vesar las planicies inundadas de la costa sur del Golfo o las
montañas que están atrás de ellas impedían la comunicación por;
tierra. El aislamiento cultural, lingüístico y económico de los.
diferentes pueblos lia sido, en consecuencia, considerable. Dentro
de las actuales fronteras de México hay cerca de 50 grupos lin­
güísticos indígenas distintos?
Describir con detenimiento la variedad ele características geo-;
gráficas y de economías locales dominadas por diferentes pro­
ductos y su desarrollo histórico sería una tarea inmensa. Los pá1 L eslíe Byrd Símpson, Many M exicos, Berkcléy y Los Ángeles, University
of California Press, 1960, p. 10.
45
rrafos siguientes sólo tratan de bosquejar los principales rasgos
del patrón de desarrollo regional.
Las características principales de la Mesa Central resultaron
de una actividad volcánica que ocurrió a través de una amplia
falla, de unos 150 kilómetros de ancho y 1 200 kilómetros
de largo, que va desde las costas del Pacífico hasta el Golfo de
México. Una topografía más antigua de cerros redondeados, pen­
dientes suaves y amplios valles se volvió más montañosa por el
surgimiento de los volcanes, y los ríos que drenaban los valles
fueron bloqueados por material volcánico, formando así cuencas
cerradas. Después, los ríos cortaron los profundos y estrechos
valles a través de los cerros, y todas las cuencas, excepto el Vahe
de México, son drenadas, en la actualidad, por ríos que llegan
al mar. La altura de estas cuencas varía entre 1 500 metros
sobre el nivel del mar, en la cuenca de Jalisco, y 2 500 me­
tros, en la cuenca de Toluca. Los miles de conos volcánicos
son de alturas variadas; el del Orizaba, el más alto, tiene más
de 5 500 metros.
Desde las épocas que precedieron a la conquista, la i\ícsa Cen­
tral ha sido continuamente la región más impórtame de México
desde todos los puntos de vista: político, económico y cultural.
Al norte de la cadena volcánica, cuyo nivel general está entre
1 500 y 2 500 metros, la meseta presenta una ligera pendiente
hasta la frontera con los Estados Unidos cuyo nivel está entre
los 1 000 y los 1 200 metros. La superficie de la meseta no es
plana en ninguna parte; su parte septentrional recuerda mucho
al terreno del suroeste de los Estados Unidos, con bolsones de
pendiente suave separados por sierras de montañas monolíticas
que se elevan unos 1 000 metros por encima de ellos. Esta parte
septentrional es seca en extremo, recibiendo algunas zonas menos
de 250 mm de lluvia anual y otras menos de 500 mm. Más
hacia el sur, la precipitación pluvial anual aumenta y en partes
de la cadena montañosa excede de 1 000 mm. Por tanto, las tribus
indígenas emigraron del norte más árido para establecerse y
convertirse en pueblos agrícolas, alcanzando niveles de cultura
mucho más altos que los que se llegaron a lograr en el norte
en donde no era posible establecer la agricultura sedentaria.
En la Mesa Central las tribus encontraron mía zona templa­
da, con densos bosques, muchos lagos y ríos alimentados pol­
las capas de nieve de los volcanes más altos. Por lo general, los
pisos de siete cuencas (las tres que hemos mencionado y las cuen­
cas de Guanajo ato y Puebla, los valles de Aguasca lien tes y Moreíos) eran pantanosos, hubo asentamientos primero en los lí­
mites de las cuencas y en las laderas inferiores de los cerros, con
46
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
tEL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
47
•de las fuentes de éstos se encontraban en la Mesa Central o en
mayor densidad que en las zonas más bajas. Los aztecas fueron
potros lugares de la meseta hacia el norte, no hubo razón para
la última de las tribus nahuas que se establecieron en el Valle"
¡un cambio notable en la distribución de la población durante
de México y se vieron obligados a establecer su ciudad capital,
el período colonial. En la época de la Independencia, las ha­
Tenochtitlan, en una isla en medio del lago porque era el único
ciendas se concentraban principalmente en esta región, aunque
sitio que estaba libre de asentamientos. Siendo una nación de
también había algunas en Yucatán.
guerreros, habían obtenido el dominio sobre gran parte de la:
No tenemos una cifra aceptada para la población total de
tierra del sur y tenían un sistema de tributos sobre ella, cuando
¡México
en el momento de la conquista. Un cálculo común es
Cortés entró en Tenochtitlan, el 8 de noviembre de 1519. En dos:
¡de
9
millones,
aunque en ocasiones se lleva tan alto como 25
siglos, Tenochtitlan había crecido hasta tal punto que en tiem­
¡millones.
La
mayoría
vivía en la Mesa Central; cuando los espos de la conquista los españoles calcularon que su población
pañoles
llegaron
ya
estaba
densamente poblada. Pero una vez
superaba los 300 000 habitantes (posiblemente esto es una exa­
¡que estuvo sujeta a las diversas epidemias que siguieron a la lle­
geración) y se maravillaron por su belleza. Más tarde uno de
gada de éstos, la población disminuyó con rapidez y no se había
ellos escribió:
^‘¡recuperado
del todo cuando se logró la independencia en 1821.
"Y desde que vimos tantas ciudades y villas pobladas en el
La
base
de
la existencia de la población indígena era, y sigue
agua, y en tierra firme otras grandes poblazones, y aquella cal­
¡siendo,
el
maíz,
aunque también se cultivaban frijol, chile,
zada tan derecha y por nivel como iba para México, nos que-;
¡calabaza, camote, maguey y otros. En las zonas montañosas bos­
damos admirados, y decíamos que parecía a las cosas de encan-¡
cosas los métodos de cultivo eran variedades de la "roza", que
tamientos que cuentan en el libro de Amadís, por las grandes
■ha
contribuido a los actuales problemas graves de erosión. En
torres y cues y edificios que tenían dentro del agua, y todos de
las
zonas
lacustres exigían el frecuente abandono de la tierra
:
calicanto, y aun algunos de nuestros soldados decían que si
para
que
ésta
recobrara su fertilidad, requiriendo migraciones
aquello que veían si era entre sueños y no es de maravillar quej
d<= tribus dentro de la zona. Las técnicas eran muy
aquí
¿e
^uYhay^chPquE^^^
yo escriba aquí de esta manera, i
’
'
rar en ello que no sé como lo cuente: ver cosas nunca oídas, ní
? 7^°' £uero.n. lntroduc1ldos Pw‘“ “panoles. X.laI.
,
.. ..
finada a menudo
haqirsi
H Ine
AL™GenO,»,
mada a!nmenudo "la zona
básica
de los cereales", laU,Mesa
aun soñadas, como veíamos." 2
ra! durante siglos, la principal región agrícola. Pero con
I
:
Después del sitio y destrucción de Tenochtitlan en. 1521, Cory la introducción de los ferrocarriles y la irrigación en gran escala,
tés fundó la ciudad de México en el mismo lugar y tomó po­
¡zonas alejadas de la región de los cereales empezaron a desarro­
sesión del Imperio azteca en nombre de la Corona de España,k
parse con mayor rapidez. La zona retiene su preeminencia en
Como sitio para una ciudad capital, en aquel tiempo dejabaf
Ja
producción de maíz, por estar menos adaptada a la produc­
mucho que desear, y hoy en día aún más. En los meses dél
ción
de
otros cultivos comerciales, como el algodón, cafe, azúcar,
verano, la estación de lluvias en la mayor parte de México, los!
frigo
y vegetales de invierno, que comercialmente son mucho
lagos en los cuales se construyó la citidad aumentaban con fre­
ínás
importantes que la producción de maíz en otras zonas y
cuencia su nivel, inundándola. Después de varios siglos de inil
cuyo
cultivo,
durante el último medio siglo, ha sido la caracte­
*tentarlo, se logró el drenaje exitoso del lago a principios de este
rística
más
.importante
en México.
El valor
siglo, y desde entonces los problemas de la ciudad han cambiado^
¿
, o - de la agricultura
....... ...............
.
0
i
sido
supepero no han desaparecido. En la actualidad la ciudad se enfrenta» ^
producción agrícola de la Mesa Central ha
tado
ahora
por
el
valor
de
la
producción
de
la
región
agrícola
a una seria escasez de agua más que a un exceso y se está hun­
rrigada del
noroeste.
La Mesa
Central sigue teniendo tprcemiiconolacustre.
iacuoLic.Tendremos
. L.iiuik.ww más que
Mt
,
,
.
.
diendo en el esponjoso( lecho
13/” Us productos de ammalcs, porque el mercado
) HUÍS
problemas
cuando
consideremos
los
actuales^
decir sobre estos |
v importante está localizado en ella.
del desarrollo regional.
i
.,
, .
,
,
„,
:: -i vi HuíI<Al
c i norte de la Mesa Central está una zona escasamente peJú.aeconómica de los españoles eratt namada
ta l ■principal preocupación
.
'
.
, ______a con frecuencia la Mesa del Norte. La industria M
los minerales, en especial la plata y el oro. Como la mayoría!
pera de la región ha estado estancada durante años, pero áreas
’ Berna! Díaz del Cast.illo, Historia verdadera de la conquista de la NWaImportantes han progresado mediante el des'irn'ñH ,M
irrigaEspaña, Colección “Sepan cuantos../’, núm. 5, Editorial Porrúa, S. A., M6® *’
’íción (aunque en años recientes la sequía ha ieníd
efectos
xico, 1964, p. 147.
p
jhiwu
j
W
48
49
EL DESARROLLO-REGIONAL EN MEXIgÍ F DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO
arada
una gran £aj a del desierto. La zona más merídioconsiderables). Sin embargo, en esta Mesa del Norte la irriga­ M Ir , J ^P s por
os esta-dos de Sonora, Sinaloa y Nayarit, tiene una
costeras
aí
^
ción ha sido menos importante que en las zonas <------------------------- J.
'agricultura bastante diversificada, siendo el algodón el cultivo
oeste y este de ella. Separando la meseta de las costas se eré
¡principal. (La sección del capítulo iv que se refiere a la Comi­
cuentran elevaciones abruptas que se conocen con el nombre ck:
sión
de la Cuenca del Río Fuerte contiene ¿más información
la Sierra Madre Occidental en el oeste, y la Sierra Madre Orienj
¡sobre
la agricultura de la zona.) La zona del río Colorado en
tal en el este. Ambas forman barreras de importancia para el
¡Baja
California,
el sector mexicano del Valle Imperial, produce,
movimiento de las costas hacia la meseta. En particular la Sierra r
kasi
exclusivamente,
algodón y es la zona algodonera más im­
Madre Occidental, con un ancho de 160 kilómetros en algunajj
portante
de
México.
partes, ha sido difícil de penetrar, aunque en años recientes hV
¡ El algodón es también el cultivo principal en la zona costera
sido atravesada por dos carreteras pavimentadas y por un feria
del noreste. De especial importancia son las áreas irrigadas a
carril. Sus picos se elevan a más de 3 000 metros, y varios ríd
lo
largo del río Grande (el río Bravo del Norte) que forma la
montañosos que corren rumbo al sur, han cortado valles pro
.frontera
con los Estados Unidos, La frontera ha afectado a la eco­
fundos con paredes de gran pendiente en los acantilados y a /
nomía
del
norte en toda su extensión. Hay considerable opor­
nadas a través de las estrechas serranías que las separan.
tunidad
de
cruzarla, y esto atrae un gran número de personas
Las zonas costeras del norte son muy importantes desde em­
¡que
buscan
esta oportunidad. Por esta razón, las ciudades fron­
punto de vista de la agricultura. La costa noroeste es, en 1L
terizas
-son,
paradójicamente, areas de ingresos, per capita rela­
actualidad, la principal región agrícola de México. La ComisiÓ!
tivamente
altos
y de una alta desocupación. Como describiremos,
de la Cuenca del Río Fuerte, cuyo trabajo se describirá en d
tas Edades son ahora el objeto de un programa para ocupar
igaciót
?
capítulo iv, se encuentra allí, pero sus trabajos de irrig
b - «rndustrialmente esta mano de obra desocupada. El efecto más
sólo son una pequeña parte de la irrigación total de esta región
notable de la cercanía de los Estados Unidos ha sido en el oeste.
Allí la irrigación es esencial para la agricultura —lo que no tieijí
Tijuana
es en la práctica un apéndice de la economía del sur
irrigación es normalmente un desierto— y tiene una larga tri
de
California,
y Baja
estado en que se encuentra
dición. En lo que son en la actualidad los estados de Nayan L..
< . California,
;
er
y Sinaloa, los primeros exploradores españoles encontraron triM
? caPtta mAs alt0 cual^‘CT «indígenas que tenían agricultura con irrigación a lo largo ó ■
‘
,
las planicies fluviales. La zona nunca estuvo poblada densa
embargo eí centro urbano más importante del norte no
mente y en pocas décadas la mayoría de los pueblos
T’.T,120
en la parte baja
exterminados por las enfermedades o se les llevó para convd f ™ Paso conduc.
1 V* “'
"V"
“
e"la “
tirios en esclavos. Se ha calculado que hasta 1920 la poblaciá.1,Vhh, W i
r, oSonora,
„
r.uAnnn qtt
«n ./idad,, es la segunda ciudad industrial en importancia. Ha crecido
de
Sinaloa y Nayarit llegó a 540 000,„ población
en población de 30 000, en 1880, a más de veinte veces ese nú­
3
existía cuando los españoles llegaron por primera vez, En une
mero en la actualidad, como resultado del auge industrial estimu­
pocos valles lejanos, de los cuales el más importante es el Valí
lado
por su industria del acero. Aunque Monterrey no es un
del Vaquí, existen todavía comunidades indígenas; pero la mí
sitio
que tenga mineral de hierro o carbón, está sobre la vía
yoría se convirtió en propiedad de las haciendas. En los año
dérrea
que une a la capital con los Estados Unidos, y en los
treinta, éstas fueron remplazadas por ejidos (las comunidad 5
primeros
años del siglo parece haber tenido un clima político
agrarias establecidas bajo la reforma agraria), o por pequeña
para el establecimiento de la industria; éstas parecen
propiedades privadas.
5
haber sido las. principales
razones por las cuales, en 1903, la iny íiuiiicuua
v. íiiviiztiius oucnii?-,
*
,
*
La zona tiene veranos calientes y húmedos
c inviernos
suavt. r
d
,na
lexlca
a
un formidable competidor d ® "
" del acero tuvo aquí sus principios.
y secos, y está demostrando ser i
*
■ A lA nrcrn np la mds oriMni'd
Af¿v»rAde la costa oriental de México, desde el sur de
A lodnlargo
California en ciertos mercados de los Estados Unidos e inten
^Monterrey, está la zona productora de petróleo que fue lo bas­
nacionales. En esta región están incluidas dos zonas agrícola
cante productiva como para convertir a México en el segundo
productor del mundo poco después de la primera guerra mun3 Presión E, James,
Laim America, 3a, cd., Nueva York, Odysscy I’rei í{jiai. centro tradicional de la industria del petróleo ha estado
A
1959, p. 606.
50
51
EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICÍ DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
en el norte en torno a Tampico, aunque su centro se ha de;
fría, en los años treinta, y de la expropiación de las plantaciones,
plazado ahora a los campos de Poza Rica cerca de Tuxpan. Lí los ejidos
> no funcionaron con la suficiente eficiencia para con­
producción de petróleo en el sur de la región, en el Istmo d^{
servar bajos los costos y se descuidó el hacer nuevas siembras, lo
Tehuantepec y en el estado de Tabasco, ha estado aumentan^
;cual significó que la producción disminuyera con rapidez a prin­
su importancia. <
.) cipios de los años cincuenta. Pero el lograr que la producción
Esta zona meridional, que empieza en el río Támesis que form|:vuelva a su nivel normal (aunque sólo fuera la mitad de la del
la frontera entre los estados de Tamaulipas y Veracruz en lí¡
año de 1916 en que se logró la máxima producción) no asegu­
costa del Golfo, también es importante debido a los productos ■
rará la prosperidad en el fuertemente competitivo mercado mun­
agrícolas que se cultivan allí. Estas planicies costeras son cálidasdial de las fibras.
y húmedas. La lluvia es abundante, aumentando desde 100 j
■ Las otras regiones de México pueden describirse rápidamente.
125 cm en el norte cerca de Tampico hasta 200 y 250 cm ei| 0Ltx
.........
--.........
tAl sur de la parte oriental de la falla volcánica, la
tierra
des­
la parte sur de la costa del Golfo, En parte de las montañas di hiende hacía el valle del río Balsas, rodeado del otro lado por
Oaxaca y de Chiapas, que se encuentran detrás de esta área das
j qas
imponentes
montañas
de laMadre
SierradelMadre
imponentes
montañas
de la Sierra
Sur, quedel
a Sur, que a
que reciben las masas de aire saturadas de humedad procedentes igu vez están separadas del océano Pacífico por una faja costera
del Caribe, la precipitación pluvial es, incluso, mayor. Los ríos de jang0Sta, inaccesible y, excepto Acapulco, subdesarrollada. La
esta costa llevan cerca de la mitad del caudal total de los ríq ¡cuenca Balsas es la sede de la más reciente de las comisiones
de México. El trabajo en esta zona de las comisiones del P«
¡as cuen
cas hidrológicas,
|de las
cuencas
hidrológicas,que
queabsorbió
absorbióa alalaantigua
antiguaComíCoran
paloapan y del Grijalva se describirá en el capítulo iv. Gran
Tepalcatepec que había estado desarrollando la cuenca
i
parte de
tierra
a lo largo
esta costa
se inunda
dela la
tierra
a lo de
largo
de esta
costa anualmente
se inunda anualmente^deqeuno
tributarios
este proyecto
tributarios
desdedesde
1947. 1947.
Es esteEs
proyecto
del Te- del Teunodeqsus
e sus
pero se considera que tiene un alto potencial agrícola; hay up ‘palcatepec el que nos proporcionará nuestro caso de estudio, así
campo amplio para aumentar el area cultivada; sus ríos ofrecej qUe tendremos ocasión de estudiar más esta área. El Balsas drena
excelentes oportunidades para
para lala producción
producción de
de energía
energía hidra
hidrolregión
alta alta
haciahacia
el oriente
quequeconecta
mna región
el oriente
conectalala parte
parte central
central del
i
- j Oaxaca
■
* Mesa
*
. 1T
*^1Sierra Madre del Sur
n_„_,
eléctrica; por esto podemos ver cómo el desarrollo de las cucn-- ;esta(
con
la
Central.
La
0
cas hidroeléctricas es, en cierto sentido, una estrategia natural)
¡en Oaxaca y Guerrero es una meseta erosionada, y la erosión
para el desarrollo de la región. Los bosques y pastizales pantano!
¡fluvial ha dado como resultado una topografía de profundos
,..,--—
fsos
, , e; surrT^e Ver.ac™z y del estado de Tabasco han sido pocavapeSj quedando
ya
muy poca
tierra plana.
Hay
i
Z
*u d.i unas pocas cuen*
1'1 d h I íl fiilí Han
PTranexistido
PvichHn nnac
/-1Í Tt 1 J21 V/X/1 £
..... JL
•- ’l*ff 1
...... poblados.
unas pocas plantaciones que producen
xas aisladas, como aquella
en donde está la ciudad de Oaxaca.
caucho, plátano, cacao, chicle, etc. El principal cultivo es el café,
í La Sierra Madre del Sur desciende con gran pendiente hacia
y no se cosecha en la tierra caliente tropical, sino en la tiem
sel Istmo de Tehuantepec. Del otro lado hay otro grupo de rnontemplada, zona más fría situada entre los 900 y los 1 500 me-.
dañas, la Sierra Madre de Chiapas, que corre paralela a la costa,
tros de altitud. Aparte de las ciudades portuarias, las principales
i Al noreste de esas montañas está el Valle de Chiapas, drenado
ciudades de la región están en la tierra templada. Jalapa, CóM
¡por el río Grijalva en el que se concentra la mayoría de la po­
duba y Orizaba, en la carretera entre México y Veracruz, son ■
blación de esta área. Al otro lado del valle, las montañas vuellos centros de manufacturas.
^ven a elevarse a más de 3 500 metros antes de descender de
Sólo hasta los últimos diez años fue posible cruzar la parte I nuevo hacia las planicies de Yucatán. Los principales cultivos
sur de la región del Golfo por carretera en el verano para lle­ j del valle son el maíz y el café, y también es importante la pro­
gar a la Península de Yucatán; el ferrocarril no es muy ante­
ducción ganadera.
rior. El resultado fue el aislamiento de la llana península caliza.'¡ En todas las montañas de México, pero en especial en las mon­
Esto no significa que Yucatán no tenía importancia económica.itañas de Oaxaca y Chiapas hay todavía muchas aldeas indígenas
Después de 1880, el área en torno a Mérida se convirtió en el,r escasamente tocadas por las influencias europeas. El México ofiprincipal productor mundial de fibra de henequén. Yucatán hial, mestizo (de ascendencia europea e indígena) y orgulloso
sigue siendo principalmente una economía de una sola cosecha, | de su herencia indígena, es muy consciente del problema que
y esto ha producido dificultades económicas en el pasado y ofrece f representa. Robert Scott caracteriza la integración del indígena
*sombrías perspectivas para el futuro. Después de la reforma agra ■
I y del campesino que habita en aldeas dentro de la nación me1
r
*■
*
-
-
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X
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52
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
53
xicana y su vida politicé como una de las más vigorosas metas i En las primeras dos décadas después de la independencia, la
y principales logros de la Revolución mexicana.4 Argumenta que i figura dominante, tanto en las políticas económicas como en
en comparación con la situación anterior a 1910 este proceso casi tíos escritos sobre ellas, fue Lucas Alamán, ministro principal
se ha completado. Si la conciencia de la nación mexicana puedij fen la mayoría de los gobiernos de ese período. Educado en Eurotomarse como el elemento crítico, entonces esto puede ser cierto,; ; pa, e impresionado profundamente por lo que había visto de la
Quedan, no obstante, pequeños grupos aislados que carecen i¿ ¡.Revolución Industrial inglesa y sus efectos sobre el poder nacluso de esa conciencia de nacionalidad, y para los indios de la j cional y el orden político, Alamán pensó que México debía
montaña, por lo general, la integración política no ha implicado f también industrializarse. Pensó que la pequenez de la población
un avance económico. Aunque tal avance es un importante ob­ í (cerca de seis millones) era un obstáculo para esto a través de
jetivo de las políticas de desarrollo regional del gobierno mexi­ I una escasez de mano de obra para la industria y en escritos poscano, es incierto cómo puede ayudarse a esos indígenas. La i teriores también argumentó que eran necesarios incrementos en
mayoría no vive en áreas que se presten a la adopción de téo : la población para proporcionar un mercado a la producción
ocupaban nominalnicas agrícolas modernas,, Sus artesanías, aunque con frecuencia industrial. Los seis millones de habitantes
2. Alamán vio el peligro
í
mente
más
de
3
millones
y
medio
de
km
son notables, no son una base suficiente para la prosperidad en
el siglo xx. Pero, obviamente, el gobierno está poco dispuesto ^inherente en la combinación de tierras mexicanas vacías y un
a dejarlos en su abismal, pobreza hasta que encuentren su camino ípaís vecino en crecimiento. El Istmo de Tehuantepec estaba
hacia las barriadas de las ciudades, para hacer allí una transición ¡casi deshabitado y era una tentación potencial para los Estados
extremadamente dolorosa, aunque relativamente rápida, hacia h Unidos, que buscaban una ruta hacia el Pacífico. Para prevenir
vida moderna. Parte del trabajo de las comisiones de las cueri? • .esta amenaza, Alamán intentó colonizar el Istmo creando una nuecas hidrológicas se ha ocupado de la existencia de tales grupos; Aa provincia que tenía su capital en Tehuantepec. Se buscó ávida'mente la inmigración europea, ofreciéndose pasajes y préstamos
diremos más sobre este problema posteriormente,
■'.para que se establecieran, y también se dieron otros estímulos.
Sin embargo, la única colonización que tuvo éxito fue la ele
PROBLEMAS DEL DE3ARROLLO REGIONAL Y POLÍTICA DESDE
i Texas; propiciada inicialmente en 1823, ya hacia 1826 el resul­
1821 hasta 1947
tado probable fue previsto por el gobierno mexicano que intentó
en vano detener la colonización. En 1830 Alamán impuso varias
En varias épocas desde la independencia, los problemas regio­
restricciones, entre ellas la prohibición a los colonos de traer
nales han jugado un papel importante en el pensamiento y 1; esclavos. Pero estas medidas fracasaron, y el rechazo mexicano
acciones de quienes elaboraban la política económica y sus con­ Ide la demanda texana de que se les convirtiera en un Estado
sejeros. Por lo general la discusión sobre el desarrollo regional ¡ sólo irritó a los colonos. En la guerra que siguió, el ejército
ha insistido en la colonización de las zonas escasamente pobladas i mexicano fue derrotado en 1836 y la admisión de la República
alejadas de la Mesa Central. Esta sección describe los diferentes ¡ de Texas en los Estados Unidos, en 1845, produjo una nueva
puntos de vista asumidos por los sucesivos gobiernos, hasta el ■.guerra, en esta ocasión contra los Estados Unidos, Derrotado de
inicio del programa de las comisiones de las cuencas hidroló­ ■ nuevo, México se vio obligado a ceder la mitad de su territorio
gicas en 1947. No trataremos sobre las razones económicas.) en 1848.
políticas para las diferentes políticas; estudiaremos las políticas : Estas guerras sólo fueron parte de una serie de guerras civiles
recientes en el capítulo siguiente. Pero este breve resumen his­ y extranjeras que mantuvieron a México en el caos político desde
tórico tiene la intención de proporcionar el marco para nuestra ¡ 1830 hasta finales de los años sesenta. En consecuencia, la ecodescripción del estado contemporáneo del desarrollo regional de ¡ nomía se estancó, y posiblemente el ingreso disminuyó. Los inla última sección de este capítulo y para las políticas adoptadas r lentos gubernamentales de estimular la industrialización a prin­
para enfrentarse a los problemas regionales que se discutirán cipios de los años veinte, ofreciendo financiamiento a industrias
en los dos capítulos siguientes.
muy protegidas, fracasaron definitivamente a principios de los
años treinta. La primera vía férrea, que conectaría la ciudad de
4 Robert E. Scott, Mexican Government in Transitíon, Urbana, Universítj
México con Veracruz, se empezó bajo Alamán en 1837, y treinta
of Illinois Press, 1959, p, 12.
54
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO
años después aún no se terminaba. El único suceso que tuvo ud ■ centrado, en su mayor parte, en la Mesa Central, para 1910
efecto significativo en la estructura del desarrollo regional fue uiu í se había extendido en el país.
ley (la “ley Lerdo” incluida en la Constitución de 1857) que proq Las aldeas indígenas habían perdido sus tierras comunales, ya
híbió a las corporaciones (es decir, a las organizaciones reli-■- que eran incapaces de demostrar su propiedad legal o un título
glosas y las comunidades civiles) tener en propiedad bienes ral registrado cuando se los exigían las compañías deslindadoras, o
ces. Aprobada por la facción política liberal, atacaba principal i tuvieron que abandonarlas después de perder sus derechos de
mente el poder económico de la iglesia, pero también se esperaba j agua. Ocasionalmente, ocurrían rebeliones; después de que eran
que el fraccionamiento de las tierras comunales indígenas crean ■ aplastadas, se confiscaba la tierra de las aldeas que habían par­
una nueva clase de pequeños propietarios, de acuerdo con loi' ticipado en ellas, y quienes tomaban parte perdían lo poco que
principios de gobierno de Jefferson. En los años siguientes, li s poseían. Los indígenas despojados se encontraron viviendo en
necesidad de fondos de los gobiernos liberales para financia! ’ haciendas y, poco después, atados a las mismas como peones por
la guerra civil con los conservadores y para derrotar a la Ínter: .sus deudas. En 1910 cerca de 800 haciendas tenían el 90% de
vención francesa llevó a una serie de contratos de colonizacióií ‘
la tierra.5 Más del 80% de las familias rurales carecían de tierra.
La propiedad de la iglesia fue reducida en cierta medida poj ■ ■ Estas consecuencias sociales poco felices no fueron mitigadas
las nuevas leyes, pero, sin embargo, logró retener gran parte di ? por resultados económicos favorables. Con excepción de ciertas
sus posesiones y, bajo Porfirio Díaz, quien tomó el poder q j plantaciones comerciales que producían para la exportación, la
1876, esta parte de la Reforma se convirtió en letra muerta. Ü í;: hacienda no era una forma productiva de empresa agrícola. Pro­
institución que resultó más afectada fue la aldea que poseíí ■ bablemente la producción de cosechas alimenticias básicas, maíz,
tierras. Díaz y sus “científicos” (el grupo de abogados y econo í trigo y frijol, disminuyó entre 1880 y 1890, y después de esa
mistas que lo rodeaban) fueron de la opinión de que la inmi ■ fecha, su aumento apenas excedió el aumento de población.6 En
gración no podía jugar en el desarrollo de México el mismí Min año malo, el maíz se tenía que importar, y en todos los años
papel que había jugado en la Argentina y en los Estados Unidos ■se importaba trigo, harina, azúcar y carne salada. Aunque-por
porque la única zona salubre, fértil y con adecuada provisión ■otros indicadores —kilómetros de vías férreas, aumento de la
de agua era la Mesa Central, que ya estaba densamente poblada
¿producción de minerales, comportamiento de las exportaciones,
Para establecerse en otras áreas se requerían grandes cantidad? ¡los prillcipios de la industria moderrna— los logros de la econo­
de capital y esto motivó que se otorgaran concesiones generosa mía bajo Díaz tuvieron mucho éxito, los costos sociales y ccoa extranjeros. En 1883 una ley permitió a las compañías que a ;nómicos de la política de tierras fueron muy altos.
ocupaban de deslindar las tierras públicas reclamar una tercen I En 1910 se inició la Revolución, Principió como un llamado
parte como pago y comprar las otras dos terceras partes a precia '.político de la clase media por el “sufragio efectivo, no reelec­
bajos. Esta ley especificaba que la reventa a colonizadores debí! ción” y adquirió ímpetu como un movimiento social popular,
hacerse en lotes que no excedieran las 2 500 hectáreas. Además yunque sus objetivos no siempre estuvieron claros para quienes
el gobierno de Díaz estableció algunas colonias modelo en domaban parte en ella, ni se tuvo un consenso sobre ellos. El
meseta, que se ofrecieron, junto con algún capital de trabajo,! Afecto de lo ocurrido en el México prerrevolucionario sobre la
inmigrantes, italianos. Se establecieron muy pocas colonias, y hadi ¿^propiedad de la tierra y la producción agrícola dio origen a
1894, cuando se derogó la ley de 1883, la idea de colonizaciót un gran descontento rural y entre las principales fuerzas revolu­
había sido virtualmente desechada como una política deliberad cionarias estuvieron una petición de tierras y los ataques a las
de desarrollo regional. Sin embargo, las concesiones de tieni
grandes tenencias. El primer efecto de la Revolución en la direccontinuaron como una forma de recompensar a los favoritos $ qe }a reforma social fue una ley de reforma agraria de
líricos y de fortalecer el dominio de la dictadura sobre to
que ¿espU¿s se incorporó a las disposiciones de reforma
el país.
La política de tierras tuvo menos efecto para colonizar lá
ps Daniel
Daniel
jameSjMexico
’’*
James,
and the American?, Nueva York,
Ercdeiick A,
zonas alejadas que
para cambiar la estructura de la propieda] ípraeger, 1963, p. 79.
.
,
pment: The Roles
de la tierra que se
concentró cada vez más. En tanto que el SÍí f ’Raymond
Vermon, The Dilemma of México’s
Develop.
;t>í the Prívate and Public Sectors, Camgridge, Mass,, Harvard University
tema de haciendas
a finales del periodo colonial se había coi d;• Press,
1968, p. 53.
O
x
*
*
-
„J
iUlilLi CliLCj tVHIUUl L<W
EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO ! EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
56
0/
jadas de la Mesa Central se debían colonizar y desarrollar,
Uno
agraria de la Constitución de 1917. Esta Constitución declaró
de los famosos enunciados de esta naturaleza es
el discurso que
a la tierra y su subsuelo propiedad de la nación mexicana, y
hizo'el presidente Ávila Camacho en 1941:
estableció que el derecho de explotarlos era revocable. El nacró
nalismo fue otra fuerza que impulsó a la Revolución, aunqué
no se sintieron lo sufr j- El futuro de la agricultura está en las tierras fértiles de la costa, Una
los primeros gobiernos revolucionarios
de nuestra Mesa
propiedad extranjera o t marcha hacia el mar aliviará el congestionamiento
cientemente seguros para expropiar la
extranjero en una escala f; Central, en donde las tierras agotadas deben dedicarse a cultivos que
restringir las actividades del inversionista
la política colonial les negó con el resultado de que el tradicional culreforma agraria limitaré :
considerable. No obstante, las leyes de
tivo del maíz de la población ha continuado siendo el dominante. La
tierra.
la habilidad del extranjero para poseer
. fertilidad de las planicies costeras hará antieconómico cultivar mualdea que posee tierras . chos productos en la Mesa Central. Pero la marcha al mar requiere,
La reforma agraria creó el ejido, la
pero que en su mayor : como un prerrequisito, medidas sanitarias y de salubridad, la apertura
que a veces se cultivan colectivamente
y cada
vez
más con
frecuencia sej cultivan individual- f de comunicaciones, la reclamación y drenaje de pantanos, y para hacer
pane y cauaparte
vez mas
mas
uctucuua
se más
« xxiu.jviu.uaK
j posibles a esos proyectos, el gasto de grandes cantidades de dinero.
mente por los ejidatarios, que pueden trabajarla y traspasarla i
; Será necesario organizar un nuevo tipo de agricultura tropical, que,
a sus herederos, pero que no tienen propiedad sobre ella. Pqi
■ debido a la misma naturaleza de su producción, no puede ser del tipo
lo usual los ejidos se han formado con tierras expropiadas (ca& i
de pequeña escala.8
siempre sin compensación) a las haciendas. Los aspectos redifr
Esto proporciona un claro enunciado de algunos de los ob­
tributivos de la reforma agraria se han realzado mucho mál ■
jetivos
importantes en los esquemas que describiremos, y cuyos
que la colonización.
1
efectos
analizaremos. Sin embargo, no fue Ávila Camacho, sino
El objetivo de colonizar tierras alejadas de la Mesa Central ;
su
sucesor,
Miguel Alemán, quien dio los pasos más importantes
¡
no se abandonó como una política después de la Revolución :
en
llevar
a
la
práctica
esta política.
que empezó en 19\0. Las regiones alejadas ofrecían la promesa
de proporcionar tierna a quienes no se les podía dar en la Meseü
EL PATRÓN DEL DESARROLLO REGIONAL RECIENTE
Central. En 1926 se promulgó una ley de colonización, estabb
ciendo las condiciones bajo las cuales los mexicanos podían esta?
Desdé 1940 el crecimiento de la economía mexicana ha sido muy
blecerse en tierras públicas, y aquellas en que podían hacerle
L impresionante. Los cuadros n-1 y n-2 describen el crecimiento
los extranjeros. Éstas fueron corregidas varias veces y eventual­
- del producto interno por sectores y las tasas de crecimiento de los
mente fueron sustituidas por una ley de 1946 que creaba uró
principales sectores. El crecimiento del producto ha promediado
Comisión Nacional de Colonización para promover, administra!
‘ más del 6% anual en términos reales, de manera que a pesar
y supervisar la colonización, con atribuciones para hacer los es­
j del extremadamente .rápido crecimiento de la población, que
tudios necesarios, determinar las inversiones requeridas, y seleé
cionar los colonizadores y los cultivos más apropiados. Cifras algí ■ esta^° en aumento durante todo el período y cuyo crecimiento ha t0llegado
ahoraahora
a un 3.5%
per
incompletas sugieren que 1 250 000 hectáreas, divididas entre cau
llegado
a unanual,
3.5%el ingreso
anual, medio
el ingreso
medio per
14 000 lotes, fueron colonizadas entre 1919 y 1944/ Durante ]& caPlta aumentó considerablemente. La población actual (1970)
primeros años
años del régimen de Miguel Alemán (1946-52), se in 1 e}s
aproximadamente 50 millones. En 1968 se estimó el pro­
primeros
cremento la tasa de colonización. Fue bajo Alemán cuando ¿ . «meto nacional bruto por habitante, en 530 dólares.
Los sectores con el mayor crecimiento fueron la energía elécinició el programa integrado de las cuencas hidrológicas, reía
■
trica,
la industria manufacturera y el petróleo, habiendo hecho
clonado en parte a este programa de colonización.
Uas manufacturas la mayor contribución absoluta al incremento
En todo periodo, desdecía Revolución, en reformas legislar
en los distintos
programas
El patrón de desarrollo
sector
ha sido
de colonización, t
vas a las leyes uc
UMU»it.va
^vg.oiiicw
' • i jdt
• *1producción.
J
. de
----este
-------——
Partido, en los discursos presidenciales y de otras formas, s ¡,e* ^e sustitución de las importaciones bajo un sistema de pro ­
reiteró continuamente la idea de que las regiones agrícolas ale Acción que se basa, de manera principal, en controles cuantitaldh
luxiiv u
7 Moisés T. de la Peña, "Problemas demográficos y agrarios", Probleity
Agrícolas e industriales de México, 11, núms. 3-4, México, 1950, p. 10. >■
* Citado por Sanford Mosk, Industrial Revolution in México, Berkeley
‘:y Los Ángeles, University of California Press, 1954, p. 220.
í;
58
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
CUADRO II-I
Producto interno bruto, a precios de 1960, años seleccionados
del período 1940-64 (miles de millones de pesos)
1940
1945
1950
1955
1960
196$
Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca
Manufacturas
Minería
Petróleo
Electricidad
Construcción
Transporte
Comercio
Gobierno
Otros
10.2
7.6
2.0
1,1
0.3
2.3
1.7
10.0
2.1
8.2
11.4
12.3
2.1
1.3
0.4
4.3
2.4
15.2
3.1
12.1
17.1
16.4
2.0
1.9
0.5
3.8
3.4
20.7
4.0
15.5
22.3
22.6
2.3
2.6
0.9
5.2
4.9
27.4
5.0
21.7
25.9
33.3
2.7
3.9
1.3
7.7
6.2
' 36.9
6.2
31.7
30.E
45.7;
2T
5.2
1.9j
10.6!
6.9i
47-2
8.Í
40.0"
TOTAL
45.4
64.5
85.4
114.9
155.9
198.8 •
fuente: Comisión Intersectorial
para la Elaboración de
Planes de Desarroy
lio, Manual de estadísticas básicas, 1939-1963, 2^
ed. México, 1964.
CUADRO 11-2
Tasas promedio
anuales de crecimiento
bruto, por sectores
1940-5
Agricultura, gana­
dería, silvicul­
tura y pesca
Manufacturas
Minería
Petróleo
Electricidad
Construcción
Transporte
Comercio
Gobierno
Otros
TOTAL
fuente: Cuadro ii-L
del producto
1945-50 1950-5
interno
1955-60 1960-4
1940-61
2.2
10.2
El
3.3
3.9
12.9
7.4
8.7
8.3
8.1
8.6
5.9
-0.6
8.6
7.6
-2.2
7.4
6.4
5.2
5.0
5.5
6.6
2.9
6.4
9.6
6.4
7.5
5.8
4.3
7.1
3.0
8.1
2.8
8.7
8.9
8.1
5.0
6.1
4.4
7.8
4.1
8.3
0.3
7.0
10.1
8.3
‘ 2.8
6.3
7.2
6.0
4.6
7.8
1.4
6.8
7.9
6.5
6.1
6.7
5.9
6.8 ¿
7.3
5.8
6.1
6.3
6.3
6.3 t
;
'
:
■
1
r■
r
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
59
> tivos sobre las importaciones, y sólo secundan amen Ce en los
derechos de importación. La sustitución de las importaciones en
l ,una escala significativa fue estimulada primero por la escasez
> durante la segunda guerra mundial y, después de un rápido au­
gmento en las importaciones durante el período inicial de la
posguerra, por dificultades en el balance de pagos. La preocupat ción del gobierno por el desempleo ante una tasa de crecímiento de la población tan rápida también estimuló la protección
¡Ó y promoción industrial. La sustitución de importaciones en bíe. nes de consumo no duraderos nunca ha tenido importancia desde
/ la guerra, si se la mide en términos de la proporción de la
p demanda final que abastecen las importaciones, como es usual
í; hacerlo.9 En especial desde 1950, la sustitución de importaciones
f.se ha hecho principalmente en los bienes intermedios y de iib
5versión. No se. ha limitado a la industria manufacturera; tamybién ha sido importante en los cultivos de alimentos básicos, de
=■ manera más impresionante en el trigo durante los años cincuenyta. En la actualidad prácticamente se ha logrado la meta, por
largo tiempo buscada, de autosuficiencia en los productos áli.. mentidos. La agricultura creció con rapidez por normas inter­
nacionales y también ha contribuido en grado considerable al
faumento de los ingresos por exportación que han hedió posible
f el crecimiento de México. Los productos agrícolas son con mu{ cho el principal grupo de mercancías de exportación de 'México.
Por supuesto, los recursos para el desarrollo de México han pro’ venido, de manera principal, de fuentes interiores, aunque casi
■ el 10% de la formación bruta de capital fijo interior se finanMió en el exterior.10
?’ Como podría esperarse, el efecto regional del crecimiento ecoLnómico y de la industrialización ha sido desigual, y la desigual­
dad de los niveles existentes de desarrollo en el desarrollo repgional es la causa principal de la actual preocupación sobre los
^problemas de este último, preocupación manifestada en varios
Uibros, así como en discursos políticos, artículos periodísticos, con6 Ésta no es una medida muy satisfactoria, ya que uno de los efectos
de ingresos en aumento tenderá a aumentar la demanda más que propor­
ciona Intente para los bienes de consumo complejos y de mayor calidad, es
.ulecir, para aquellos que por lo general se importan. Asi que puede ocurrir
Cuna sustitución de importaciones a la vez que permanece sin cambio la
{proporción de la demanda que es satisfecha con importaciones.
p 19 Las cuentas nacionales mexicanas sufrieron revisiones muy importantes
yen los últimos años. Tanto la cuenta de capital como la de producción
jhan sido corregidas. Véase Banco de México, S. A. Departamento de Estu{dios Económicos, Cuentas nacionales y aceraos de capital consoliladas por
i tipo, de actividad, 1950-1967, ed., México, 1969.
i
el desarrollo REGIONAL en MÉXICO I el desarrollo REGIONAL EN MÉXICO
6.1
> ferencias y otros.11 Para describir el patrón actual del desarrollo
> regional es conveniente agrupar los datos de los estados en re® giones. Inevitablemente, las fronteras estatales no siguen muy
> exactamente las divisiones físicas, pero la siguiente separación
.» servirá para describir las variaciones regionales.12
<■' Pacifico del Norte
>
Baja California Norte, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa y
J Nayarit.
..>■ Piarte
Coahuila y Chihuahua.
tíNorte del Golfo
B Nuevo León y Tamáulipas.
'■W.Norte Central
>: Aguascalientes, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas,
J Occidente
cB Colima, Jalisco y Michoacán.
> Cen/ro
Distrito Federal, Guanajuato, Hidalgo, México, Múrelos, Pue> bla, Querétaro y Tlaxcala.
J- Golfo
> Tabasco y Veracruz.
A Pacífico
«fc Chiapas, Guerrero y Oaxaca.
de Yucatán
* Campeche, Quintana Roo, Yucatán.
sj
Sk
W ” Véase en especial Erneto López Malo, Ensayo sobre, localización de
industria en México, México, D. F., unam, 1960; P, Lamartine Yates,
gfc’ÍI desarrollo regional de México, Banco de México, 1965; Secretaría de Eco<g»nomía e Instituto Mexicano de Investigaciones Económicas, Diagnóstico
yK económico regional, 1958, bajo la dirección de Fernando Zamora, México,
TL1959. Bassols Batalla, Ángel, La división económica regional de México,
«vnam, México, 1967.
$K 11 Los especialistas en aspectos regionales hr u empleado mucho tiempo
'aLpara discutir los prolJemas de la selección de los límites regionales pura
. ^-propósitos analíticos y de planeamiento. Ha ocurrido, incluso, alguna disgkusión sobre si existe algo semejante a una “verdadera" región. Véase Waltcr
oBlsard, “Regional Science, The Concept of Región, and Regional St ruciare”,
'«Paperr and Proceedings of thc Regional Science Associalion, n, 1956, pp. 13-26,
SBy Morris E. Garnsey, “The Dimensions of Regional Science'', ibid, pp. 27-39.
«Ciertamente, él concepto, parece ser irreal. Normalmente se podría consiJB-derar que las fronteras geográficas naturales son mejores fronteras que las
«administrativas para los fines económicos, aunque, incluso si el país fuera
.»Byna planicie homogénea, podríamos seguir deseando hablar de regiones.
«En México, los funcionarios de la Secretaría de la Presidencia han estado
>. ^trabajando recientemente en una división regional que se pueda usar para
;é diñes de la planeación económica regional.
62
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO®^ DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO
^’que en las regiones menos industrializadas, las industrias
exisgentes1tengan una productividad muy baja de la ...........mano de ..........- - obra,
*ílo ---cual quizás
P
'
implique industrias de pequeña escala y poco
^capital por trabajador.
trabajador,
r También son notables las diferencias regionales en la agricul­
tura, aunque
aquítambién
también
podrían
distorsionadas
ÍUura,
aunque aquí
podrían
estar estar
distorsionadas
sistema-sistemá­
ticamente las diferencias regionales. El cuadro n-5 nos propon
piona estadísticamente las diferencias agrícolas descritas antes. En
? las zonas costeras del norte, en particular en el noroeste, están las
á (áreas altamente productivas, con un elevado porcentaje de tierra
CUADRO 11-3
; dragada y una producción relativamente baja de cultivos de
Densidad de población por regiones, 1960
■
i subsistencia (como lo representa la baja participación del maíz).
■; Ta proporción de irrigación dada por estas cifras es quizás ex.aDensidad
perada en ciertos aspectos. Éstas son las cifras para las áreas irride pobla­
’í
;
*
gadas
en los grandes proyectos administrados públicamente, y
ción (perso­
Superficie
'■
enseñan
muy bien en dónde ha ejercido el gobierno sus mayores
nas por kiló­
(miles de
Población
■
'esfuerzos
de irrigación. Si hubiéramos usado las cifras totales del
metro
cua.
kilómetros
(miles de
censo para irrigación de todos los tipos, mostrarían una particidrado)
cuadrados)
habs.)
- pación relativamente más pequeña en las zonas costeras del nor­
6.3
414
2 613
Pacífico del Norte
te, ya que en las áreas central, occidental y meridional del país
5.3
399
2 135
Norte
.una alta proporción de la irrigación se hace usando trabajos
14.6
144
2 103
Norte del Godo
] y bombas construidos privadamente, y no está controlada por el
10.9
263
2
870
Norte Central
1
distrito de riego local. Las cifras para esta irrigación son menos
30.8
145
4 459
Occidente
1 dignas de confianza, pero demuestran que las estadísticas de la
97.4
129
12 561
Gen tro
Secretaría de Recursos Hidráulicos que se dan aquí solo cubren
33.2
97
3 224
Golfo
aproximadamente la mitad de la irrigación.
17.7
233
4 125
Pacífico
5.9
142
*Como puede verse, la producción ganadera es comparativa
832
Península de Yucatán
hente más importante en la zona del norte que en otras reglofuente: Censo de población, 1960,
1 bes; en las regiones central, occidental y meridional, la pro­
ducción de maíz representa la mayor parte del producto agrícola
Irtf-nlLn--Por1----- 1 • — • ' - ■
*•■ •
*ElÍ° cuadro H-4 muestra la. distribución del valor industrial agre
“
implicación estas últimas regiones son las áreas rnás
obres
oe «,^1 del Censo industrial, g
agrícolamente. También son las áreas de menor ingreso
gado por región. Estas cifrasóbao
se tomaron
r caPlta totp “«“> se ve P<w la posición de sus estados comlos
mejores
datos
disponibles,
pudieran
exaí
r
1961. Aunque son I j
los niveles de industrial^ ?0U2ntes er» el calculo del ingreso per capita y niveles de biengerar las desigualdades regionales en
zacion debido
ueomo a la
wxu.a
proporcionan los datos. Éíj
Y’** (cuadro “-6)- Éste indica paridades
zación
forma en que se
ab]LS entre los inSres°s medios per capua de los estados
valor
total
agregado
en
el
censo
está
muy
por
debajo
del
que'.
J
"°!
\
-O" -O-- —'
-X
.
- ¡más ricos
í0s y los
y los
más
pobres.
Como
dijo
antes,
problemas
n-l)i
más
pobres.
Como
se se
dijo
antes,
loslos
problemas
dan las cifras de ingreso nacional (compárese con el cuadro n-l)í
f
de
os
y parece probable que la exactitud y lo completo del censo ser^
& la montana preocupan a muchas
1
mayor en zonas que tienen una proporción relativamente altsj F"?
? los baJos mvees de ingreso monetario de estos
de industrias en ¿an escala; en otras palabras, en las región^ “dl0„s. exPh,can en Pa«e disparidades evidentes en el cuadro
real per capita
* industrializadas.
obstante,
inclusoincluso
sí consideramos
unF S1" emhar
™&6. Sin embargo, es poco probable que el ingreso
--------------* ----------más
industrializadas.No No
obstante,
si consideramos
una
|n
los.estados
más
ricos
sea
en
realidad
10.5
veces
mayor que en
verseverse
que las
diferencias
regionaleiregionales
diversidad exagerada,
exagerada,puede
puede
(pie
las diferencias
en el grado de industrialización son, de hecho, bastante consi] fes más pobres. Por ejemplo, en los estados más pobres, agrí­
alas, una mayor. proporción del producto nunca se llevará al
derables. El producto por hombre empleado también sugiere
El cuadro ri-3 muestra la densidad de población por regiones 1
según el censo de 1960. Puede verse que la población es más.]
densa en la zona central. Esto no sólo refleja que la capital es el j
' principal centro de población y está localizada en esta zona, sino ]
que todos los estados que rodean al Distrito Federal tienen denri
sidades de población mayores que las de los estados en otras!
regiones. Al alejarse de las regiones centrales la densidad de. i
población disminuye.
■
J — rt,. .J .
1.
*__ 'f
'T’í
*
en
CUADRO n-4
per capita de
Valor industrial agregado
industria, 1960
índice
(promedio
nacional
= 100)
876
1 333
1 250
461
887
8 160
791
174
241
335
624
594
161
200
650
245
56
289
80.2
149.4
142.2
38.5
47.8
155.4
58.7
13.3
69.3
14 172
418
100.0
Pacífico del Norte
Norte
Norte del Golfo
Norte Central
Occidente
Centro
Golfo
Pacífico
Península de Yucatán
TOTAL
Valor indus­
trial agregado
per capita de
la población
(pesos)
Valor indus­
trial agregado
por hombre
empleado en
la industria
(miles de pesos)
índice
( promedio
nacional
=. 100)
18.3
24.0
15.4
11.0
16.0
16.8
17.8
11.1
9.6
110.1
144.1
92.3
66.0
96.3
101.3
106.9
66.6
57.6
100.0
16.6
fuente: Censo industrial, 1961.
CUADRO 71-5
Valor de la producción agrícola y ganadera, producción de maíz y superficie
de irrigación en gran escala por regiones, 1960
Produc­
ción agrí­
cola
(miles de
pesos)
Pacífico del Norte
Norte
Norte del Golfo
Norte Central
Occidente
Centro
Golfo
Pacífico
Península de Yucatán
TOTAL
Produc­
ción re­
gional
como
% de la
nacional
Produc­
ción de
maíz
(miles de
pesos)
2 581
I 210
862
1 347
I 385
2 550
1 804
2019
638
17.9
8.4
6.0
9.4
9.6
17.7
12.5
14.0
4.4
329
178
203
481
609
1 038
397
718
96
14 396
100.0
4 049
Produc­
ción re­
gional
de maíz
como
% de la
nacional
8.1
4.45.0
11.9
15.0
25.6
9.8
17.7
2.4
100.0
Produc­
ción de
maíz
como
% de la
produc­
ción re­
gional
agrícola
Irriga­
ción en
gran es­
*
cala
(miles de
ha)
Irriga­
ción re­
gional
como %
de la na­
cional
12.8
14.7
23.5
35.7
44.0
40.8
22.0
35.6
15.0
693
254
300
19
95
237
7
10
2
42.9
15.7
18.6
1.2
5.9
14.5
0.4
0.6
0.1
751
859
473
695
659
I 068
671
620
206
12.5
14.3
7.9
11.6
11.0
17.8
II.2
10.3
3.4
100.0
6 002
100.0
28.1
I 617
=■ Irrigación en gran escala bajo la promoción de los distritos de riego de la Secretaría de
Recursos Hidráulicos, 1959-1960.
fuente: Censo agrícola, 1960.
ProducValor de^ ción gala pro­
nadera
ducción
regional
ganadera como
(miles de % de la
pesos )
nacional
EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO l EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO.
Valor indus­
trial agregado
(millones de
pesos)
la población, y por trabajador empleado en la
en
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO i EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO
66
67
.
'
;
•
?
'■
tividad agrícola también es muy baja. No es sorprendente encontrar una baja productividad junto con bajos ingresos, y estos
Niveles de ingreso y bienestar en los estados más ricos y
últimos limitan el mercado local para otras industrias. Por el
pobres
en los más pobres
contrario,
es probable que los ingresos sean elevados donde hay
(expresados como porcentajes del promedio nacional ~ 100)
mucha industria manufacturera, no sólo porque los salarios mo? nefarios pagados a la mano de obra no calificada pueden ser
índice de
mayores, sino también debido a la gran cantidad de personal cabienestar
PNB per capi*según Yates
ta 1: 960
k lificado, administrativo y empresarial. Esto a su vez tenderá a
~
proporcionar
un mercado que puede atraer otras industrias, de
204
313
Baja California Norte
; manera que, independientemente de otras fuerzas concentradoras,
188
261
Distrito Federal
i como la provisión de servicios especializados, en la disponibilidad
144
186
Nuevo León
i
de mano de obra calificada y otros, podemos esperar que ocurra
157
167
Sonora
un proceso acumulativo de concentración industrial.
136
154
Tamaulipas
136
\
¿Existen fuerzas que puedan disminuir considerablemente este
134
Coahuila
148
124
f proceso? Una escasez de mano de obra en aquellas áreas que
Baja California Sur
147
110
i están experimentando el mayor crecimiento industrial podría, en
Chihuahua
algunos países, lljevar a un mayor aumento en los salarios con
65
49
Guana juato
relación
a un aumento en la productividad allí y no en otras
56
46
Zacatecas
partes.
Pero
en México esto es poco probable, en vista de la
70
43
Querétaro
desocupación,
tanto la reconocida como la oculta, que se en­
70
40
Tabasco
cuentra en casi todas partes. La evidencia de esto se encuentra
52
38
Chiapas
en el gran número de vendedores de billetes de lotería, lustra58
37
Guerrero
72
:
dores
de calzado y otros que se encuentran en buen estado físico
36
Michoacán
60
36
:
y
que
están disponibles en todos los pueblos. A primera vista,
Tlaxcala
65
33
: parecería que esto está en contradicción con los niveles diferenHidalgo
43
27
L cíales en los salarios mínimos de las diferentes zonas, lo cual se
Oaxaca
! consideraría como indicador de una rigidez diferente en el merEl índice de bienestar según Yates es el promedio de una serie de ítt’j(cado de mano de obra no calificada en los distintos estados, En
cada Estado, el recíproco de la tasa de mortalidad, la tasa dé
1966-7, el salario mínimo diario varió entre 35.7 pesos (2.86 dólares) en Baja California Norte, y 10 pesos (0.80 dólares) para los
CUADRO 11-6
>CgUrO SUClcU; Gi Lunüumu
-__ _____ _ _
lina, y el registro per capita de vehículos de motor. Para cada índice li
puntuación de un Estado fue su porcentaje del promedio nacional. La ma­
yoría de los índices se refieren a 1958, pero algunos son de años anteriores.
> trab
Por supuesto, no se da un significado preciso a un índice semejante, perol rendas eñ el■costo»
(U
1 VI
r,pesos (2 dólares). Se
dad
de
México,
el
salario
mínimo
fue
de
25
a
proporciona un complemento interesante a las estadísticas del pnb.
>. d progreso económico
_ __A . Vida,y pero
que también tienen
en Cuenta
la productividad
de cada
zona. Desafor­
¿ supone que los salarios mínimos
reflejan principalmente
difefuente: Paul Lamartine Yates, El desarrollo regional de México, p. 35.
"~
j
_— ta—
tunadamente, no se puede tomar las cifras de los salarios mínimos
como evidencia de que existen fuerzas del mercado que pre­
mercado,
y nocifras
está que
clarodacuántas
sionan para salarios más altos en algunos iugares que en otros
está claro cuántas
de las
Yates, de
st las curas que u<t
en cuenta. El
índice
deVAK.
bienestar
según
habría
implicado
que
la
desocupación no es tan geneno todas, tienen esto un
AjJ.
JL^V.
----------------- ,___
que
b
yates,
perolalacifra
> cifra
Yates,muestra
muestraun
uncampo
campode
devariación
variación^menor,
menor, pero
ma­ma-■
como lwmos sugerido)/ debido a qnCj es bien
e n
yor sigue siendo aproximadamente el 475% de la cifra mas
baja.
y
j
mínimo.
Particularmás baja L ma oría de as zonas no se
el salario
Los
estados
menores niveles de bienestar y de ; niente est0 es cier£o en las zonas rurales Por supues£Oj n0 sólo
Los estados que iLac"
-a-X
c ,-u que tienen los
v de
ingreso
están
comparativamente
poco
industrializados,
ingreso
están
comparativamente
poco
industrializados,
y eny en esa. es el precío locaI de Ja mano de übra
con k
estados la industria tiene muy baja productividad. La produ«|
industrial,
sino también el precio de otros recurproduej concentración
concentración
áriushal
__ ,
.
1.
-1 I ’____________________
68
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO .
sos. Un candidato evidente es el precio de la tierra, que, ge
ralmente, influye en forma importante para el establecimi
de una industria manufacturera.
Como explicaremos, en el Valle de México (el Distrito Fed
y las zonas adyacentes) hay en la actualidad signos obvios
costo creciente del congestionamiento y parece que esto está
vando al establecimiento de las industrias hacia pueblos situ
todavía en la región central, pero fuera del valle, aunque
un fenómeno muy reciente..
Durante el período 1940-60, cuando menos, las fuerzas
presionaban para una dispersión fueron más que compens
por las que trabajaban en favor de una aglomeración. En
primer capítulo describimos, en términos generales, economías
la aglomeración para actividades localizadas cerca la una d
otra. Un incentivo adicional para el establecimiento en el
trito Federal en comparación con otras regiones del país, q
fue la relativamente fácil disponibilidad de energía eléctrica
los años posteriores a la segunda guerra mundial, cuando la
rencia de energía eléctrica era un obstáculo importante par
crecimiento industrial en otros lugares. El Valle de México
tiene una situación especial en la actualidad, ya que las ta
son iguales en todo el país, pero la estructura de tarifas no
porciona un incentivo a las empresas para establecerse cerca d
fuente de provisión hidroeléctrica»
Como es casi esencial consultar a la oficina central de
quier dependencia gubernamental para obtener los permiso
licencias necesarios, así como para obtener exenciones de las
gulaciones existentes, las empresas deben establecer conta
regulares con altos funcionarios en la ciudad de México.
ausencia de una red de comunicaciones altamente desarro
y eficiente entre las oficinas del gobierno hace más tedios
proceso de obtener aunque sea documentos rutinarios en
zonas periféricas. Las empresas localizadas en otras partes
frecuencia encuentran que es necesario establecer una peq
oficina en el Distrito Federal para hacer sus transacciones
negocios con el gobierno.
Para apoyar a la industrialización se han hecho grandes
versiones en educación, en especial para la capacitación téc
Una característica importante del crecimiento del sistema ed
tivo en las grandes ciudades es su flexibilidad en el desar
de programas y horarios que permiten a los estudiantes te
trabajos de tiempo completo, además de continuar sus estu
Además, se está incrementando un programa especial de ed
ción para adultos que no asistieron a los sistemas regulares
EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO
69
cativos primario y secundario. Por supuesto, esto atrae a las
personas a la ciudad de México; las empresas también fueron
atraídas por la oferta relativamente abundante de mano de obra
educada y calificada.
Por esto, no es sorprendente que en su libro Yates mostrara
que estaba aumentando el grado de concentración de la industria
en el Valle de México el porcentaje del valor industrial agre­
gado en. el valle, tal como lo dan los censos industriales de 1940
y 1955, aumentó de 40.1 a 52.5% entre esas dos fechas. En 1960
calculó que el porcentaje estaba entre 55 y 60%. Es verdad que
López Malo da cifras basadas en el producto bruto y ajustadas
con base en censos industriales anteriores que sugieren que la
concentración de industrias no aumentó entre 1930 y 1950.13 Pero
es probable que para nuestros fines, estas cifras den demasiada
ponderación al procesado de la producción agrícola en las zonas
de agricultura comercial en auge, añadiendo la industria sólo
una pequeña parte de valor a la alta producción agrícola.
Pueden calcularse cifras de la migración interna de la pobla­
ción con base en los censos de población.14 Las cifras para los
períodos 1940-50 y 1950-60 muestran una inmigración notable
hacia el Valle de México, y emigración de otros estados de la
zona central. La tasa de crecimiento del Distrito Federal en rea­
lidad disminuyó un poco entre 1950 y 1960, pero las cifras dis­
ponibles sobre migración interior sugieren que el movimiento
hacia otras partes del Valle de México compensó totalmente esto.
Baja California Norte, con su nivel de vida más elevado que en
. cualquier otra parte, experimentó la tasa más alta de crecimiento,
y todos los otros estados fronterizos, excepto Coahuila, que no
tiene ninguna ciudad fronteriza importante, experimentaron una
inmigración neta. En todas las regiones del norte, la apertura
de zonas de irrigación fue probablemente un factor para la in­
migración, aunque Sinaloa perdió población por esos moví• mientos.
Las principales fuerzas que causan los movimientos de la po1 blación son obvias. Las regiones fronterizas están creciendo con
rapidez, no sólo agrícolamente, sino también industrialmente;
hay una floreciente industria del turismo, y existe la posibilidad
13
López Malo, op, cit.f p. 87.
Esto se hizo por primera vez para la migración (le 1940-1950, utilizando
el censo de 1950, por Nathaniel Whetten y Robcrt Burnight, "Internal
Migration in México”, Rural Sociology, xxr, junio de 195Ó, pp. 140-5i. Pue. den encontrarse datos adicionales para el período de 1950-1960 en Timothy
Ring, River Basin Projecls and Regional Deve lupia en t, texis para el docto­
rado en Filosofía, inédita, Universidad de California, 1905.
14
70
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO ]
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
71
de pasar permanente o temporalmente, legal o ilegalmente, a los u costos: costos de recursos debido a la necesidad de más capital
Estados Unidos. El Valle de México ofrece ocupación industrial i social general y costos debido al creciente conges áonamiento y
en expansión, aunque de ninguna manera a una tasa suficiente 1 ; viciamiento del aire a medida que crecen la población y la inpara absorber a todos los nuevos inmigrantes. El gran número] ;; dustria.
de personas empleadas en las actividades de servicio relativa- •
La afluencia de personas y de la industria hada la ciudad
mente improductivas es testigo de la falta de plazas para las i (<> requiere una expansión de todo el campo de servicios públicos
personas sin capacitación. Sin embargo, para estas personas los • ofrecidos a la población. Aunque la investigación cuantitativa
servicios sociales disponibles en la ciudad son mucho más abun- ; sobre las economías a escala en los servicios públicos está lejos
dantes que en las arcas rurales; además de alimentos subsidiados, : de ser adecuada, sugiere que una ciudad del tamaño de la ciu­
servicios médicos y educación para todas las edades, se tiene < dad de México está incurriendo en desecononrías considerables
instalaciones recreativas para todos y son muy frecuentadas por
en la provisión de estos servicios públicos como resultado del.
los pobres.
crecimiento urbano. El ejemplo más notable de esto es el pro­
Los factores que alejan a los emigrantes de muchos estados : blema del abastecimiento de agua en el Distrito Federal. La
también contribuyen a las corrientes migratorias. La baja tasa
ciudad de Méxic.» se construyó sobre un lecho lacustre, en cuyo
de crecimiento de la productividad en la agricultura de subsis­
subsuelo se está hundiendo ahora. La consecuencia más grave de
tencia, la falta de otras oportunidades de ocupación y el están-, . esto es que la mayor parte de la dudad está actualmente en la
camiento de la industria minera han obligado a muchas perso­ . parte más baja de la cuenca y el drenaje implica bombear las
nas a dejar sus estados nativos para buscar ocupación industrial.
aguas negras hasta una altura de 13 metros. El hundimiento
En resumen, las diferencias en los niveles de ingreso y las tasas’ continuará mientras el uso de las aguas subterráneas siga por
de progreso son muy marcadas en México, y han causado muchas encima del nivel de absorción. La tasa de hundimiento es despreocupación. Las razones de esto pueden dividirse en las pura-, , igual, con el resultado de que las aguas negras continuamente
mente económicas y aquellas que tienen fuertes elementos políq . amenazan la pureza del abastecimiento de agua potable. La ines­
ticos e ideológicos. La primera categoría incluye problemas sobre] tabilidad y plasticidad del subsuelo crea problemas de construcel tamaño global del ingreso nacional. El que la concentración? 1 ción y aumenta la vulnerabilidad de la ciudad ante los temblo­
de la industria tienda a disminuir o aumentar el ingreso nació, res.15 El exitoso drenaje de los lagos ha disminuido lo moderado
nal depende de si los costos del congestionamiento superan a. .del clima y en la primavera han aumentado las tormentas de
las economías de la aglomeración. Hemos discutido la natura-; polvo.
leza de la aglomeración económica en el capítulo i. Desafortu4 7 El principal problema es la escasez de agua en el Valle de
nadamente, no es posible dar ni siquiera una idea general dd ■ ¿México, debido a que esto origina directamente el hundimiento
tipo de magnitudes implicadas en el caso mexicano, porque no1; áde la ciudad. Está claro que la expansión industrial en el valle
se conoce ninguna forma de medirlas. Hay, no obstante, consi-' \ contribuye a ello. Es verdad que hay fuertes restricciones para
derable evidencia de que los costos de concentración de la in-; * la apertura de nuevos pozos, pero no siempre de fácil aplica­
dustria en el Valle de México, cuando menos, si no es que de' ción. En la actualidad el agua se trae desde la cuenca del Lerma
toda la región central, son muy altos; en el resto de este capítulo por un acueducto, a la tasa de 5 metros cúbicos por segundos.
estudiaremos esta evidencia. Los factores políticos e ideológicos Esto fue aproximadamente una sexta parte de la cantidad total
que crean preocupación por el estado del desarrollo regional se utilizada en 1960. Un estudio discute varios planes para importar
discuten más apropiadamente en el capítulo m.
agua bajo varios supuestos sobre la magnitud de la población
El congestionamiento implica que tanto la migración a las y su distribución geográfica dentro del valle.16 No es necesario
ciudades como el crecimiento de nuevas industrias impone costos? que nos ocupemos de sus detalles, pero dos de sus conclusiones
a las personas y empresas que ya están establecidas en el área,
a la vez que incrementa la demanda de servicios públicos. A nin­
w Federico Mooser, "La cuenca lacustre del Valle de México", Prablcinas
guno de los dos grupos se le exige que pague estos costos y, en­ del Valle de México, Instituto Mexicano de Recursos Naturales Renovables,
México, 1963, pp. 19-22.
consecuencia, no meditan sobre la carga que imponen a los de-< 14
José Vicente Orozco, "Plan hidráulico pava el Valle de México’’, Prc;más. En el crecimiento de la ciudad se incurre en dos tipos de; blemas del Valle de México, pp. 51-113.
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
72
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
73
individuo y empresa y a los recién llegados no se les exigirá que
son interesantes. Suponiendo una disminución en la tasa de cre-;
.tengan en cuenta su impacto sobre otras personas; los únicos
cimiento de la población en el valle, de manera que la po­
-costos que deben hacer son los relativos al mayor tiempo e in­
blación de 1990 sólo sería un poco más del doble que su nivel
conveniencia para sus propios asuntos. En la ciudad de México
actual, sería necesario importar aproximadamente cinco veces
‘
se han proporcionado grandes proyectos de construcción de vías
el volumen de agua importado a principios de los años sesenta,
'■
de tránsito y sistemas públicos de transporte para ayudar a re­
aprovechando otras cuencas fluviales cercanas al valle, además
solver el problema, pero éstas parecen sólo soluciones temporadel Lerma. Si no disminuye la tasa de crecimiento demográfi-:
t les. El esfuerzo más reciente para tratar este problema es la
co, una población de 16 millones en 1990 tendrá que importar
■construcción de un sistema subterráneo de transporte colectivo
casi once veces el volumen de agua importada a principios de
para reducir el congestionamiento en la superficie.
los sesenta. El costo promedio del abastecimiento de agua aumen•
El viciamiento del aire también es un problema importante
ta con la cantidad de agua necesitada —de 20 centavos por metro,
‘
en
la ciudad de México, agravado por su situación en un valle
cúbico en 1960, hasta 60 centavos, en el supuesto de 12 millones,
^rodeado por montañas muy altas. Sin controles sobre el tipo
de personas en el valle, y hasta 90 centavos si la población
..de gasolinas utilizadas y con la creciente concentración de in­
es de 16 millones.17 Con el costo promedio aumentando de esta
dustrias pesadas en el área, la acumulación de desperdicios indosmanera, podemos ver lo alto que sería el costo marginal.
Este1costo marginal no lo pagan
las nuevas empresas a las : triaie$ en el aire puede ser muy densa. Las corrientes de aire
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°
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n'rp'uoU^Í Q'n *-^0
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que no se puede legalmente cobrar más por el agua que a i prevalecientes hacen poco para aliviar el problema vry con frelas empresas existentes. Además, no es probable que los habí-, Jcuencia la atmósfera es poco agradable.
tantes del Distrito Federal soporten la mayoría de los costos 1 Los costos para proporcionar incluso aquellos servicios que se
del abastecimiento de esta agua, ya que, al igual que el actual' requieren en donde vive una persona son más altos en el área
acueducto de Lerma, probablemente el sistema será construido (metropolitana. La vivienda es el más obvio de estos costos debido
por la Secretaría de Recursos Hidráulicos y financiado con img a la escasez de terreno y a los mayores costos de construcción
puestos federales. Si fuera posible discriminar en los precios yí >.én las zonas urbanas; en las áreas rurales a menudo las casas
cargar a los nuevos inmigrantes hacia el valle algo parecido alj .'pueden construirse durante los períodos de poca actividad, cuan­
costo marginal de abastecerlos de agua parece probable que se. do el costo de la mano de obra rural es muy bajo. Los mayores
lograría una disminución de la concentración.
: mostos de la urbanización se reflejarán en los costos de las em­
Se puede adoptar un razonamiento semejante en el caso de presas en la medida en que aquéllos se reflejen en el salario
otros servicios municipales. Como ,lo indica Yates, en el Distrito ■ mínimo legal y éste en los costos reales de la mano de obra.
Federal éstos son mucho mayores per capita que en' otras ciu-i ■'Aquí, nuevamente, las empresas pagarán costos medios, en lugar
dades. Aquí incluyen gastos como el subsidio de la gasolina uti­ i de los marginales.
A pesar de que las empresas no pagan todos los costos margilizada por los ómnibus y los alimentos subsidiados. En 1958, los
•
nales de su establecimiento en el Valle de México, sí parece que,
gastos per capita del gobierno del Distrito Federal eran de 235
'independientemente
de la medida en que los costos pagados son
pesos, y el que erogaban los gobiernos de las ciudades de Guadalajara y Monterrey era de aproximadamente 50 pesos18 (nin­ .inferiores a los verdaderos costos sociales, son muy elevados para
guna de las dos cifras incluye el costo del abastecimiento de algunas empresas. En los años sesenta ha ocurrido alguna des­
centralización de la industria hacia ciudades como Querétaro
agua).
El congestionamiento físico es otro problema asociado al ere-, y Toluca, que están bien comunicadas por transportes hacia la
cimiento urbano. Como es el caso en el abastecimiento de agua : capital y otros mercados importantes. Esta descentralización su­
para la ciudad de México, la continuada afluencia de emigrantes; rgiere, de hecho, que si se obligara a las empresas a pagar los
e industrias aumentará el costo de hacer negocios en el área y laí : costos marginales que imponen, la descentralización de la indusftria habría ocurrido antes y más extensivamente.
inconveniencias de vivir allí. Estos costos son sufragados por cada
P La mayoría de ,1a discusión política sobre el desarrollo regio­
nal no se hace en estos términos, sino que se preocupa más por
17 Id., p. 113.
la falta de industrialización de las regiones más pobres, que
7R Yates, op. cit., p. 277.
*
■<
74
EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO
por su propio bien en el Valle de México. En el capítulo i sé 'capítulo iii
discutieron algunas de las razones por las que es probable qué \los gobiernos se preocupen por los ingresos regionales relativos^ U PREOCUPACIÓN MEXICANA POR EL DESARROLLO '
En el siguiente capítulo examinaremos los motivos reales que REGIONALREGIONAL
están detrás de la política regional mexicana y para hacer esto •
debemos primero describir el proceso de decisiones políticas en ■
México.
< ÍLa decisión de asignar fondos escasos de inversión a las dife¡rentes instituciones establecidas para desarrollar las cuencas hij Urológicas surgió principalmente por la necesidad persistente de
aumentar la producción agrícola para los mercados internos y
1 piemos y para aumentar la oferta de energía hidroeléctrica. En
a piras palabras, los proyectos se debieron a una meta principal
i 3e política económica para aumentar el producto nacional per
pipita con tanta rapidez como fuera posible. En este capítulo
'adiremos, posteriormente, un poco más sobre este objetivo. Tam­
bién resultaron del deseo del gobierno por una estructura más
4 equitativa del desarrollo regional, en parte debido a fuertes pre| piones políticas e ideológicas para mejorar las condiciones de vida
de gente que pudiera creer que se les había dejado fuera de la
y? corriente principal de progreso económico. La forma en que se
.j lia promovido el desarrollo regional refleja las fuerzas políticas.
En este capítulo presentaremos primero un breve bosquejo del
| proceso de las decisiones políticas en México para ayudar a
Explicar las fuerzas políticas e ideológicas que están funcionando,
y después estudiaremos las razones para la actual preocupación
Ó jor la estructura del desarrollo regional,
;el proceso de DECISIONES POLÍTICAS EN MÉXICO
’fil papel del presidente
*En México el partido predominante, el Partido Revolucionario
‘Institucional (pri), controla la mayor parte del poder político
en el país, sin oposición seria por parte de cualquiera de los
■pequeños partidos a los que se les permite funcionar. El presi­
dente del país es también el líder real del Partido y posee
^amplios poderes para dirigir el destino de la nación durante su
túnico período de seis años. Parece difícil oponerse a su primacía
jy no está claro qué límites hay sobre el ejercicio de su poder.
Las funciones exactas del pri, del presidente y de los grupos
;de intereses en las decisiones políticas y, sobre todo, en la solee-
76
EL DESARROLLO REGIONAL FL DESARROLLO REGIONAL
77
ción clel siguiente presidente está envuelta en el misterio. Existió pedida,, responderá ante las presiones de los grupos de inf.crés
dos interpretaciones diferentes. La primera recalca la importandí tconómico y social.
del proceso de negociaciones dentro del pri, que, debido a h *
amplia base de la organización del Partido, abarca la mayoría ideología de la Revolución
de los sectores de la opinión pública.1 La segunda interpretad
ción da mayor importancia al papel que tiene un pequeño grupí Revolución no fue un suceso claramente planeado para la
de personas, denominado por Brandenburg “El consejo intei ¡tención de un conjunto .de objetivos consistentes y bien cletino de la Eamilia Revolucionaria”, y tiene aproximadamente J lídos. Como partido político cuya razón expresa es la de con­
miembros. Estas dos interpretaciones podrían en cierto gradj tinuar el espíritu y propósitos de la Revolución, el pri y sus
permitir que haya una respuesta ante las presiones de los grupl [¡indidatos no tienen un manual, Biblia o credo marxista-lenide interés, pero ambas dejan al pri en los márgenes del proce| ftista que les proporcione un programa político. Sin embargo, la
político.12
Cualquiera que sea la interpretación que uno adopl Jaturaleza de la Revolución ha dictado algunas de las direcciones
sobre la selección del presidente, la influencia de la presión | |ue tomará la política, Será nacionalista, por ejemplo, la inverlos grupos de interés sobre el resultado de las decisiones relativa |ón exterior se acepta, en realidad es bien recibida, pero estrica los asuntos económicos es significativa.
j bmente bajo los términos mexicanos. Tratará de mejorar la
El proceso de selección del candidato del pri se inicia más di fuerte del campesino; por tanto, se dará importancia a la reforma
un año antes de la elección, y durante varios meses ocurra kraria. Prometerá una ‘'mayor justicia” social; e intentará con
negociaciones, consultas y vetos ocultos hasta que se llega a u ipergía promover-el desarrollo económico. Podemos ver que puede
consenso. El presidente se elige en julio y asume el poder | fcstir un conflicto potencial entre algunas de estas metas. Un
siguiente diciembre. Pero su nominación se anuncia en el otom presidente resolverá este conflicto dando importancia a una de
filas, digamos, menos redistribución de la tierra y mayor interés
anterior a la elección y desde ese momento, el candidato,
que el presidente saliente, se convierte en la, figura política cej p la inversión agrícola; otro la resolverá de otra manera, dando
tral en México. La elección del jefe del Ejecutivo es casi ui| mayor importancia, por ejemplo, a la redistribución de la tierra,
formalidad, aunque ocasionalmente hay oposición real para tós río obstante, puede decirse que las consideraciones ideológicas
cargos locales entre el pri y los partidos minoritarios.
| jan interferido pocas veces de una manera sustancial con el
No es fácil encontrar límites obvios sobre el poder de |eseo de promover el desarrollo económico y en pocas ocasiones
las políticas
adoptadas
de una manera
presidente una vez que ha sido elegido. Domina por compile# siguen
siguen
las políticas
adoptadas
de unadoctrinaria.
manera doctrinaria,
el escenario político. No sólo los secretarios y los principales M^luso los programas particulares que tienen un alto contenido
cionarios civiles dependen de él para su nombramiento, sino qlMógico resultan ser pragmáticos en su funcionamiento, y Méademás el Congreso —que está compuesto por una mayoría abr®co parece haber evitado que las consideraciones ideológicas lo
madora de miembros del pri, con unas pocas enrules reservac®evaran a invertir una gran cantidad de recursos en actividades
para lalaoposiciónoposiciónexiste
existe
sólo para
sólo aprobar
para aprobar
mecánicamente
mecánicamente
tienen relativamente
la¡ pe tienen
un bajo
relativamente
rendimiento un
en términos
bajo rendimiento
de la
en términos de la
iniciativas presentadas por la administración. Como por dispqj ¡ronioción del desarrollo económico,
sición constitucional no se puede reelegir no es necesario qujTl mejor ejemplo de esto es el programa mexicano de reforma
se interese mucho en crearse una popularidad personal.
Como se demostró en el capítulo h, la demanda de ticcomo recalcaremos, diferencias considerables entre las administré p Por quienes carecían de ella fue uno de los elementos de
dones en el interés y estilo político. No obstante, es posibíÍRor importancia deja Revolución. La redistribución de h
¡ierra ;de los latifundios ha sido un programa principal de
predecir que quienquiera que sea el próximo presidente, se ap
fc
sucesivas administraciones durante más de medio siglo. El
gará ampliamente a la ideología de la Revolución y, en cier|
«amaño máximo permitido para una propiedad agraria se lia
«codificado de tiempo en tiempo y depende de la calidad y el
1 Véase Robert E, Scott, Mexican Government in Transición, Universílj
que se hace de la tierra. En años recientes ha variado desde
of Illinois Press, Urbana, 1959.
I
1100
hectáreas de tierra irrigada hasta varios miles de hectáreas
2 Frank Brandenburg, The Makíng of Módem México, Englewood Clíffi
|5ara
la tierra dedicada al pastoreo.
N. J., Preníicc Hall, "1964,
'
1
EL DESARROLLO REGIONM
79
EL DESARROLLO REGIONAL
■ A pesar de estas violaciones, el programa de reforma, agraria
La reforma agraria se ha realizado a un ritmo muy desigual
ha sido una parte importante de los esfuerzos de toda admi­
Durante las dos primeras décadas de reforma agraria —esto
nistración
para hacer sentir a las personas que está haciendo lo
desde su h ielos en 1915 hasta el principio del período de Dj
zaro Cárdenas en 1934- la distribución de tierras promedf^5 I>pd^ Para «alizar las metas de la Revolución.
-- hectáreas -al año. --Ya antes -de —de las parcelas ejidales ha sido una forma muy vi400- 000
1934 al menos, un¡¡^¡asignación
,
^■tdbíe
de
distribuir
los frutos de la Revolución a un gran número
político había manifestado que la tierra disponible para red|
de
campesinos,
algunos
de los cuales tienen tenues relaciones con
tribuirse se había agotado, opinión que, desde entonces, se h
ila
economía
de
mercado
y están conscientes marginalmente de
expresado repetidas veces. Pero, bajo Cárdenas, la distribució
ilos esfuerzos
industrialización
del gobierno
central. central,
de la tierra se hizo a una tasa que no se igualó nunca, anti
^esfuerzosde de
industrialización
del gobierno
fotc
esfuerzo
ara
dlstrlb
r
o después, distribuyendo más de 2 800 000 hectáreas al año. Ba ,,
P
“ la tierra no ha sido acompañado
los siguientes tres presidentes, se hizo una redistribución de api ?e “versiones en gran escala para mejorar las cond tetones pro­
badamente 800 000 hectáreas al año. López Mateos redisl >du,cü™ en la agricultura en las zonas en que ha ocurrido la
buyo aproximadamente 16 millones de hectáreas entre 1958 ^«bución. Una de las cosas notables del programa relativar
■
Garguero J Rente exitoso para mejorar la productividad agrícola en Mé1964, es quien más se lia acercado a la tasa de- Cárdenas, y
*d'aunque'muy
por
ew
concentradón en las zonas y en la tierra que no es
tasa actual de distribución de la tierra, i
-m predominantemente ejidal. Esta política ha producido una difede los niveles que tuvó con Cárdenas y López Mateos, sigí
á íencia dramática entre el desarrollo de las economías agrícolas
siendo bastante alta.
La tierra tomada a las grandes haciendas, por lo general $ ¿
,■^privada y ejidal; la productividad de las tierras privadas se in­
.
crementó con rapidez debido a un importante programa ,de in­
compensación, ha formado el ejido. En algunas ocasiones el
versión pública
en recursos
hidráulicos, crédito y facilidades de
tierra ha seguido siendo poseída y trabajada colectivamente. P<ersión Publlca en recursos hidráulicos,
crédito
y facilidades
mercado,
en
tanto
que
los
ejidos
sólo han experimentado -pequemuy pocas veces ha demostrado ser práctico el cultivo colecüyEL
. - , . •, ,
- J
------------..la
-__
r. ...
08
awMtos
en
de manera que en la actualidad menos del 3% de la tierra <¡í
i’’
productividad a medida
que se ha difundido el
conocimiento
ha dispuesto
mejores semillas
semillas yy fertilizantes,
fertilizantes.
ha sido expropiada se trabaja
colectivamente. En la gran maya Rop^nto
Y se ha y sedispuesto
de demejores
de los casos los ejidatarios
tienen derechos de usufructo peí • A8Í> en tant° <lue
,e¿ gobiernose ha preocupado
mucho por
—«¡sus logros en la distribución de la tierra y en el cumplimiento
petuos sobre una parcela que
pueden heredar, pero que no pt^
■
dwu'' ^as Promefias
den enajenar de ninguna manera. Esto significa, por ejemplo L * del
- programa de reforma agraria, no se ha conr* pitido a1^ limitar
=Pronietidosua limitar
su inversión
el sector
agrícola
los ejidos.
que no puede rentarse legalmente la tierra de un ejidatario.'endatarío
inversión
en el en
sector
agrícola
a alos
ejidos,
'
■
‘
“Como
resultado
ha
hecho
sus
inversiones
agrícolas
en
las
regiones
en la práctica, las autoridades tienden a no fijarse en tales vil L , , .
.. ,
,
,-,
- .
i•
¿a productivo de la tierra. Vui G . Air hubieran
y .éstas se encuentran
1 ...
laciones,
puestoi.que1 aseguran el uso
, sido las ~mas productivas,
,;
.,
E
*
,.
-principalmente en zonas no eudales,
y ha sido capaz de a™1
apiaviolación que1 se permite,
por razones practicas, es la de cod t .
. J ,5
,
1
a millones de campesinos dándoles parcelas, muchas
.
.
v,
~
1
que propietarios privados de la tierra controlen vanas parcelé
■las cuales han sido siempre de baja productividad, con frccuencada una del máximo tamaño legal,. rbajo
la propiedad nomina
m
- *,
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.
,
.
\
. s LCia
n ai rprhhfhti
nnhrpfertilidad
v n 1 n y rl i ft rn!
t ar I narti
idanphtnn
debido
a su
pobre
y a las dificultades para irride parientes o amigos. Esto significa que, de hecho, no se n»
;garlas. Además del programa de redistribución de tierras, el go­
distribuido todas las grandes propiedades agrarias, y que htl d
bierno puede indicar el gran éxito de su programa para mejorar
cierta seguridad de que, cuando menos, las grandes propieda­
da productividad agrícola, omitiendo el asunto de quién es el
nenevioh
i<!.bu
. r. ,
.
.
des restantes serán totalmente utilizadas. No tiene caso
f' viuj«
.
,.
' 'principal
beneficiario
de este progreso,
6
que
el máximo per e r „1
.,
, ., . 1,
.
la ley poseyendo ocultamente más tierra q
n
r
Esta combinación
de ideología
v ora
■ sta combinación
de ideología
y práctica no es por necesidad
mitido si no va a utilizarse para hacer una ganancia. El dejí
físultado de un esfuerzo consciente por varias administraciones
fe jevoJ .
.
..
....
la tierra sin trabajarla quizás origina una investigación por li
lucionarias para dejar al ejidatario fuera del progreso.3 En
autoridades agrarias y la subsecuente expropiación, puesto
$:'
tieii t 3 /
en todas las zonas, hay una demanda insatisfecha por
Agradecemos‘ ~
a Clark Reynolds su participación enjaslas muchas discu­
ejidal. Los ejidatarios tampoco deben dejar de trabajar sil lii piones que llevaron a' ’
tí 1 desarrollo de estas ideas. Se expresan con mayor desu iibro The Mercan Economy: Twenty.Ceniuiy struaure
*rra más de dos años sucesivos, ya que pueden perder su dered l lIe
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al usufructo de la tierra.
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- 197°-1970.
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80
EL DESARROLLO REGIONAL®1 DESARROLLO REGIONAL
81
vez de eso, parece que esta situación surgió como producto d®?°nsideran básicas, entre las cuales están el petróleo, los peleó­
la combinación de diferentes presiones para aumentar la pro®uímicos básicOs> la electricidad, el transporte, el teléfono y las
ducción agrícola y distribuir tanta tierra como fuera posible. AWMmm Daciones telefónicas y telegráficas. LaLa “mexicanización”,
dar gran importancia a este esfuerzo para realizar las metas de®a venta ji ciudadanos^ mexicanos de una parte que les permita el
¡¡control de una subsidiaria extranjera,
se estimula de varias ma­
la Revolución de distribuir la tierra, el gobierno convención" ~
’
illeras,
y
podrían
ser
una
condición
para
que se permita funa los campesinos de su intención de mejorar los ingresos rurales]
Esta preocupación e interés oficial en los problemas del cana ícionar a una nueva empresa. Se sabe que la transferencia de
*pesino se reafirma constantemente ante la evidencia acumula [control de los extranjeros a los mexicanos sólo es simbólica, péro
tiva de un patrón de vida relativo en deterioro para este grupol fe un símbolo importante. Sin embargo, no hay una exigencia
De esta forma, la sustitución de la ideología por los logro® Segal para que las empresas extranjeras se mexicanicen, y cuando
económicos permitió al gobierno distraer menos recursos en prcá fee cree que el interés nacional de México es mejor servido pergramas de bienestar social de lo que hubiera sido necesario d| fcnitiendo que se establezca una nueva subsidiaria extranjera, a
besar de su negativa para vender acciones a mexicanos, se le
otra manera.
ejemplo dWperm^bra °Perar a ta^ empresa.
El programa de reforma agraria no es el único
una combinación de práctica e ideología. El trato que da Méxi($ í
a la inversión privada extranjera es similar. Con una historial grupos de interés
con
de relaciones problemáticas con inversionistas extranjeros, con]
daños reales o imaginarios en ambas partes, México ha tenida ba República Federal tiene 29 estados, 2 territorios (sujetos a
éxito para concebir una política hacia las inversiones extranjera! control central que los estados) y un Distrito Federal (la
udad de
ciudad
de México yyzonas
adyacentes).
CadaCada
una tiene
pro-sus pro­
permite
tanto
satisfacer
los fuertes
sentimientos
zonas
adyacentes).
una sus
tiene
que lelepermite
tanto
satisfacer
los fuertes
sentimientos
nacional naciona? M
listas como explotar los beneficios que puede producir la inver^ ?íos Aderes políticos. Los gobernadores son los líderes nominales
• El —
- - reconoce la valiosa
- contribución que?
4el pri en cada Estado; son nombrados por la organización cen­
censión extranjera.
gobierno
ia inversión extranjera puede hacer a México. No sólo propor-ÍR1 Y aparentemente la elección para cada puesto es cuidadojámente estudiada por el Presidente. Los gobernadores actúan
ciona cantidades importantes a la reserva de divisas, sino también;
, más específicamente,
es una fuente de ahorro exterior para la creciente existencia dd ¡siguiendo los lincamientos del Partido, y,
. , ,
?
.
„
.
__ i-:_______ ______ _____________________ „
Ide
su
dirigente
principal;
la
experiencia
pretérita
índica que se
inversión fija, y quizá de mayor importancia; con frecuencia varíes
puede
remover
y
serán
removidos,
si
sus
acciones
entran en
acompañada de conocimientos técnicos escasos. México también)
¡‘fuerte
conflicto
con
los
intereses
de
quienes
están
en
el
centro.
hace grandes esfuerzos para asegurar que su posición en la co-'
munidacl económica internacional sea fuerte y se le considere, )No obstante, sirven como un canal para comunicar el sentícomo una nación política y económicamente estable con un am­ Caliento local a las autoridades centrales. De manera semejante,
■ hay muchas otras organizaciones en el Partido que pueden re­
biente favorable para la inversión.
presentar
los intereses de diferentes grupos de la población.
Sin embargo, la hostilidad hacia el capital del exterior es una =
Existen
tres grupos organizados principales de interés dentro
herencia de la Revolución y de la prolongada disputa con las, f
de
la
estructura
del pri, que canalizan opiniones a sus miembros
compañías petroleras extranjeras que culminó con su nacionalk
zación en 1938. El disgusto general ante la dependencia de ex-', y de éstos al centro político. El más grande, la Con federación
tranjeros —ya sea como inversionistas, abastecedores o clientes-: ■'Nacional Campesina, fue fundada en 1938 por Lázaro Cárdenas
está muy difundido y se expresa, por ejemplo, en las razonesJ p retiene su estructura organizativa original. A través de esta
de México para su política de sustitución de importaciones.4 El .oiganización más de dos millones de ejidatarios pueden expresar
■sus opiniones y afirmar que se les consulta para las decisiones
sentimiento nacionalista es complacido por una serie de regulaciones que limitan las actividades de la inversión extranjera. Se'gpoMticas a^través de las.secciones locales y de los,niveles regional
y estatal. Existen organizaciones
semejantes para los trabajadores;
excluye a las industrias extranjeras de ciertas industrias que se'
.... . .......... ..........................................................
¿a Confederación de Trabajadores de México se estableció en
.1936 pero su historia ha estado marcada por frecuentes luchas
* Para detalles adicionales véase Tnnolhy Ring, Mexican Indtistrialízatioii
interiores que reflejan la amplitud de las opiniones políticas
and Trade Molicies since 19f0, cap. v, Londres, Oxford Univcxsíty Press, 1970.
82
EL DESARROLLO REGIONAL! EL DESARROLLO REGIONAL
83
dentro del movimiento laboral de México y en la actualidad tien^ .tivo en elaboración de políticas. En última instancia todas las
*como miembros a menos de la mitad de la fuerza de trabajo d( y/decisiones importantes se canalizan directamente al jefe del Eje­
México, aproximadamente 600 000 trabajadores. Finalmente, los *cutivo quien tiene el poder de veto final sobre todas las metrabajadores del gobierno tienen una organización, la Federacíó| Lídidas. Aunque todos los presidentes son nombrados por el pri,
de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado, que es uih
í la personalidad y las opiniones de un presidente individual
miembro importante del pri y, por su misma naturaleza, uní determinan en gran medida el carácter de su administración,
decidida defensora del gobierno; cuenta con poco más de 300 OOv FComo resultado han ocurrido diferencias considerables entre las
ntíembros.
f administraciones en los tipos de programas presentados y la im­
Además, hay varias otras organizaciones que existen para hacct <portancia que se da a diferentes partes del programa de desconocer las opiniones y puntos de vista políticos de sus mien|
■arrollo.
bros ante el centro. Varios grupos diferentes de industriales^
i- Esta concentración extrema del poder también ha significado
de hombres de negocios hacen, con frecuencia, pronunciamiento ,que ¡a mayoría de los programas deben elaborarse para termieconómicas
y políticas
en México.
creó
sobre las
lascondiciones
condiciones
económicas
y políticas
en SeMéxico.
Se creó
fodo
del presidente,
anarse;en
solo
de seisdeaños,
período
del
presidente.
narseunen
un periodo
S0¡0 peidodo
seis el
años>
el per
otra organización cuando el mismo pri fue reformado por $ quien se le prohíbe por la Constitución buscar la reelección,
predecesores (1946) para unir a muchos pequeños grupos indi jqada administración debe trabajar un programa propio y decipendientes, incluyendo a los trabajadores del gobierno (quiera
prioridades; nono
hayproceso
un proceso
de planeación
• dir sus
sus propias
hay un
de planeación
propfas prioridades;
aún funcionan independientemente), cooperativistas, pequen^ ?que ¡ntente atar a un régimen a los programas de otro. Incluso
agricultores, intelectuales y profesionales, choferes de automóvil^ ,ja pianeación formal dentro del período de una administración
de alquiler y otros no comprendidos por otros grupos de í *
es reciente y su .......................
influencia sobre las decisiones económicas es muy
presentación formal dentro del Partido.
< discutible. A partir de los años treinta existieron documentos
Los grupos de interés tienen una función muy importante
llamados '‘Planes”, pero éstos, por lo general, fueron programas
Proporcionan un medio a todas las personas, sin importar clase
políticos y exhortaciones preparadas por el presidente y los funsocial ni ocupación, para sentir que en realidad están partió
¿cionarios del Partido, con muy pocas guías para la asignación
pando en el proceso político, a pesar del hecho de que sólo ha) »de |Os recurí)0S nacionales o incluso de los fondos públicos,
un partido político y se pueden predecir con anticipación loj pj gasto de los fondos públicos se hizo cada vez más difícil
resultados de las- elecciones nacionales. Hacen esto proporciona . controlar a medida que los llamados “organismos descentran­
do una línea de comunicaciones formal y relativamente . abierh r uados” aumentaron en importancia. La creciente intervención del
y los
centrales
de decisión
entre los
losindividuos
individuos
y organismos
los organismos
centrales
de decisión d? J gobierno mexicano en nuevos campos de la actividad económica,
pri. EnEn
palabras,
existen ¡numerables
canales
a través
ejemplo, hapetróleo
nacionalizado el petróleo o
otrasotras
palabras,
existen ¡numerables
canales a través
<!Qa*m7dida
“que7Lr\TeTpE,TZ^aci’on¡lirad¿Tr
medida
que,
por
los que se puede expresar el disentimiento y los intereses esP^;; comprado las compañías eléctricas con frecuencia ha tenido por
cíales de una región; clase social o sector económico puedes f¿cd crear nuevos mecanismos de administración que reormovilizarse y encontrar algún medio de comunicar sus conflicto gardzar las funciones de una Secretaría. El resultado es la exisa los
niveles
de gobierno
en donde
vez se
escuche,
losaltos
altos
niveles
de gobierno
en tal
donde
tallesvez
se lesI escuche, i qencja de m¿s de sjqq organismos descentralizados, que, frecuenpesar de la ausencia de partidos de oposición efectivos y el aitj ^.teniente, derivan su autoridad directamente del presidente. Desde
grado de centralización de la autoridad en el jefe del Ejecutiv hasta 1962 se hicieron intentos para controlar y planificar
la estructura de decisiones mexicana ha logrado conservar su| gasto público y, hasta 1962, la mayor parte de la llamada
cíente flexibilidad
permitir
que que
las opiniones
de la minorf
p]aneac¡¿tn” "pjaneación”
consistió en distintos
intentos
de hacer intentos
esto.
flexibilidadpara
para
permitir
las opiniones
ele la?<(miñón
consistió
en distintos
de hacer esto,
lleguen hasta los niveles más altos para ser consideradas y f jy organismo más importante establecido durante este período
pendidas.
Hue la Comisión de Inversiones, creada en 1954, e informaba
: directamente al presidente. La Comisión era responsable de la
Planeación
j formulación de los criterios para la inversión pública, la selec­
ción de proyectos y la coordinación de éstos con los planes naEl poder del presidente se refuerza..además por un sistema
*
Jcionales
de desarrollo. Sus programas anuales estaban sujetos a
A
x
gabinete en donde los secretarios pueden ejercer su poder col®pa revisión de la Secretaría de Hacienda, aunque el presidente
EL DESARROLLO REGIONAL».
84
| ¿EL DESARROLLO REGIONAL
85
continuaba examinándolos cuidadosamente, Su primer intento de.J ■
planeamiento consistió en un plan de inversión de dos años que! :Para e %orar planes detallados de la inversión pública y se han
más rígidos sobre la inversión
de los orga­
se elaboró en 1956.
^estableado controles ,.............................................
'
nismos descentralizados.
Cuando López Mateos fue presidente, la Comisión se integrój :
Este grado limitado de planeación central, incluso ha tenido
dentro
la nueva Secretaría
de la Presidencia,
dentro de la
nuevadedecretaría
ae ia rresiuencia,
une ci<t que
■- era respon-^
-i '<
.... '
1_XrJiLiAn
o . x _ _„£--------------------------------------------vuv j.-------------,---_ „ _actividade<
..
sable, entre otras cosas, de la coordinación
de las_
Si
5ÍÓ ,
dión de restringir la circulación del plan, y limita los electos
económicas del gobierno. La reorganizada Comisión Nacional dé®
ídel plan para promover la coordinación y el control de los pro­
Inversión Pública fue incapaz de hacer mucho en el campo de la®
gramas de inversión pública. Incluso dentro del sector público,
planeación, puesto que sólo pudo requerir planes de inversión»!
pos planificadores económicos colocados en un alto nivel no
a cada uno de los organismos
queuno
recibían
y tratar
de®
a cada
de losfondos,
organismos
que,recibían
toncios, y* TaLai, uWüenen la última palabra sobre la ejecución de los programas
supervisar sus gastos. Se dio atención especial al uso e ivisas|g(le inversión. En última instancia, el presidente toma las decisiopero no ocurrió un planeamiento comprensivo.
W.
■nes sobre la asignación de los fondos de inversión, y la necesidad
La Carta de la Alianza para el Progreso exigía a los países®,
política de satisfacer ios intereses de ciertos sectores o regiones
receptores la formulación de un plan de desarrollo. Se estable®'
¡debe en algunas ocasiones sobreponerse a las estrictas consideració una Comisión Interministerial para formular un nuevo plan®
Mtiones económicas. Las innumerables decisiones por las cuales el
y desarrollar un nuevo mecanismo de planeamiento. La Cómic
,í (gobierno afecta el comportamiento de la economía, por ejemplo.,
sión produjo un Plan de Acción Inmediata, que cubría el período!
J las que se refieren a las licencias de importación, controles de
de 1962-64 (prolongado, después, hasta 1966), que se sometió
í precios y el permitir o no que funcionen empresas extranjeras,
la Organización de Estados Americanos pero que tuvo una cir<
jüo se consideran en el plan, que no está disponible para los funculación muy restringida en México, incluso en los altos niveles,
.cionaríos que toman las decisiones, Aparte del planeamiento de
del gobierno, Como resultado, el efecto del plan sobre las per-;
fe inversión pública hay poca cooperación interministerial, y es
sonas que estaban haciendo las decisiones sobre la política ecó?í
i ^vidente una gran rivalidad política entre las secretarías refornómica sólo fue muy limitado, excepto en las secretarias q%. ^n¿ose esta competencia por la ausencia de un sistema de gase ocupaban—directamente del plan.
riu nbn
'púnete. Aunque el sistema político mexicano se ha alejado del
Aunque este plan ha sido sujeto a fuertes críticas, por adolecen
personalismo, en que la influencia de los líderes políticos de­
de un modelo macroeconómico consistente de la economía para)
spendía de sus seguidores personales, acercándose a un proceso
basar sus cálculos de inversión y su efecto sobre el desarrollo(más formalizado de decisión política en que los grupos de interés
nacional, fuenacional,
el primertue
intento
en incluir
tanto la inversión pú<
ei primer
funcionales juegan un papel importante, la influencia personal
|
- interno en uiciun umu
’
•f.
• ti!
blica 5como la privada, cuando menos en muchas in ustriaslos secretarios
y
de
los
directores
de los organismos gubersicas. Sin embargo, como este plan no tuvo amplia circulacióu^v XUÍJ ÓCLÍ
sigue
contando mucho.6
esta coordinación no pudo tener mucho efecto sobre el proceso» a es
de! decisiones,
decisiones, en
en especial
especial en
cu el
ci sector
ócuuíprivado.
pnvfluu.
>„
,
1
‘ ’ -segundo
■ ■ - ......................................................................
Un
plan también fue ¿riticado por* falta de exposil™
de deemon política practica:
r
.
,t
comisiones de.
las cnenen^t hidmlAfrimc
pt comisiones
de las cuencas hidrológicas
ción ante las partes interesadas. La Comisión Interministerial
preparó este documento durante los primeros años de la admij|>
comisiones de las cuencas hidrológicas se crearon, con el
nistración de Díaz Ordaz, para cubrir el período de 1966-70, peí
espíritu
que muchos de los organismos descentralizados,
es4|LSm0 e!PÍ
r*
a los detalles deÉfeísmo
incluso menos personas tuvieron acceso
__
programas
específicos que no encajaban claramente
ra ieallZar
b^W
intento que en el caso anterior. La Comisión proyectó una tas
ni
rro
de
la
organización
gubernamental existente. No obstante,
n>
de crecimiento global del 6,5% anual y también proporcionó uffl
jjesde el punto de vista técnico, carecen de la autonomía de los
análisis detallado de algunos de los principales sectores de 1|
^Wganisnios descentralizados puesto que responden directamente
actividad económica y del balance de pagos'. Este plan se ha usa<’
1 Wiite la Secretaria de Recursos Hidráulicos. Una vez que se de^idió ejecutar un programa de inversiones en gran escala en unas
.i ‘ .t i , .
CJ
Jl
•/ r_x__________________ :..• ~
3
Véase Miguel S„ Wionczek, "Incúmplete Forniel Planníng. México”,
Planning Economic Dcvelopmenl, Irwin, Homcwood, Illinois, 1UG3, pp. UG'81W(
.34 Véase Scott, op. ciE, pp. 4-33,
; ------
EL DESARROLLO REGIONALE-EL DESARROLLO REGIONAL
86
cuantas regiones aisladas del país, se crearon comisiones pai^- ■b~«vvü j
'políticos y que de
uuurcxa
otra manera tal,. vez hubiera debilitado al
asignar los fondos y crear el mecanismo administrativo necesario^ Eartido si . no se integraba dentro del ________________
_______________
l "esfuerzo
revolucionario”..
para su gasto. Una característica muy atractiva de estas organh ¡Cárdenas era apreciado por la mayoría del pueblo michoacano
zaciones es su habilidad para trabajar en varios estados simultápy un político, que tenía la habilidad necesaria para obtener el
neamente y para coordinar los esfuerzos de las diferentes secrec
acuerdo político cuando se necesitaba para lograr las metas de la
tarías para mejorar el capital general social.en una región. Comer
_ ______en
______
___
^Comisión, .Más recientemente Cárdenas___
se convirtió
directivo
indicaremos en el siguiente capítulo, se ha encomendado a la^ de la Comisión del Balsas, que se formó en 1960 para ampliar
comisiones de las cuencas hidrológicas una gran variedad el trabajo de. la Comisión
;el trabajodel
de,Tepalcatepec
la Comisión sobre
del Tepalcatepec
una zona sobre una zona
tareas, y han demostrado ser un instrumento flexible de la políj mucho más amplia y que se incorpora a la Comisión del Tepaltica regional. En algunos casos las comisiones han asumido fe tatepec. Aunque parece que en años recientes Cárdenas perdió
autoridad sobre inversiones regionales que eran la responsabilidad^
.hasta su muerte (1970), algo de la influencia política que tuvo
de otras secretarías o gobiernos estatales. En algunas ocasione^
■siguió siendo una poderosa figura política de izquierda y sin
su función principal ha sido la planeación y la coordinación de;
¡duda esto le ayudó a obtener los recursos necesarios para conla inversión por otros. En el primer caso, el foco de interés obvio
•servar el ímpetu de la Comisión del Balsas.
de la inversión en recursos hidráulicos y construcción de sistfr
.El puesto más importante de la Comisión del Papaloapan fue
mas de irrigación, control de inundaciones y generación de enere
ocupado por un ingeniero, Reynaldo Schega, aunque se ha pen­
gía hidroeléctrica sólo son parte de la inversión total de lasado que Miguel Alemán esperaba ocupar el cargo al dejar la
comisión; también se hacen gastos en carreteras, escuelas, mejorar
'presidencia en 1952. El siguiente presidente, Ruiz Cortines, sin
urbanas y servicios de salubridad públicos. La magnitud del
'embargo, nombró a otro ingeniero, Raúl Sandova.l Landázuri,
papel jugado, en este respecto, ha dependido de la prioridad
¡muerto en un accidente cuatro años después. En su libro sobre
que da el presidente y sus principales consejeros al programa
$ proyecto del Papaloapan, Thomas Poleman recalca la irnporparticular de inversión elaborado por cada comisión. Dentro de
jlancia de la persona que ocupa el puesto de Vocal Ejecutivo
los límites impuestos por su presupuesto, cada comisión . puede
í'V.La Comisión se vio privada por un accidente de aviación
ocuparse con un amplio campo de medidas para la planificación
;de un Vocal Ejecutivo particularmente enérgico, y como resul­
regional comprensiva. El segundo tipo de actividad, la coo^
tado de una serie de decisiones de alto nivel sus actividades se
dinación de las funciones de otros organismos que trabajan envieron limitadas considerablemente. Desde entonces ha estado en
la misma región, es más problemática y depende mucho de h
da defensiva”.7 Por varias razones políticas se redujeron mucho sus
influencia y habilidad de su personal. La comisión
ajkno puede
aaxktxv **
l^últimos
uaáauüaños
íua^de
ov
¡fondos avj
en los
la*.^década de los cincuenta, aunino sólo estimular tal cooperación
y carece de los recalque
exigir, sino
_
. t los objetivos que seguía eran, y siguen siendo en realidad,
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sos para realizar
sí misma
las
funciones
evidentemente
delC’tTtAÍ
gobierno.
decimos
director
si éstos rehúsan su cooperación. Como es natural, la rivalidad]
Juna comisión sea necesariamente un político importante para
normal entre los organismos ha hecho esto difícil en la prácticí^ que tenga éxito la comisión; está manifiesto no ser el caso, ya que
En este tipo de situación, la influencia del principal funci£ fe mayoría de las comisiones han estado en manos de técnicos
nario ejecutivo puede ser crucial para determinar el éxito de k jhasta entonces desconocidos. Pero sí sugerimos que la influencia
comisión, y el grado de su influencia política personal puedj-personal del director de una comisión es un factor importante
ser una diferencia significativa. La elección del directivo de para determinar su grado de éxito al obtener los recursos para
comisión ha sido por tanto una decisión importante. Cuand| ¡realizar su trabajo. En otras palabras, los fondos de inversión
1
el presidente Alemán creó las dos primeras comisiones estuv| r ---------------------------- sencillamente
--* sobre*la base
’ de
* un análisis
..........
90 se asignan
impar­
consciente de esto y así seleccionó a los directivos. Como cabeza dal de costo beneficio.
de la Comisión del Tepalcatepec eligió al general Lázaro Cá&
denas, quien había sido presidente de México, originario de
Michoacán, en donde iba a trabajar la Comisión. Esta designa
ción también tenía la característica de dar un puesto de prestígi^ t; Thomas T. Poleman, The Papaloapan Project, Stanford University Press,
a un hombre que tenía un número considerable de seguidor^ hnford, California, 1964, p. 98.
Xd. y LlclUllXkAíXVI, UL O U.
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XCl LLVUdLla, U.C XUü L1X1L, Ul i lld;*tíU-ll
*¡
88
EL DESARROLLO REGIONAL!
EL DESARROLLO REGIONAL
89
í go, maíz y frijol, sus alimentos básicos. Esto ha ayudado directamente, al balance de pagos. También ha significado que
.. sin una tendencia para incrementar la población y elevar los
Objetivos económicos nacionales
: ingresos que tendiera a aumentar los precios internos (o tú meComo indicamos en el capítulo i, algunos de los objetivos dé­ nos causar importación de alimentos), ha sido más fácil que en
la política regional de desarrollo serán, por supuesto, los mis-i otros países latinoamericanos controlar la inflación, y esto indimos que los objetivos nacionales.8 En México, las principales, - rectamente le lia ayudado a evitar crisis en el balance de pagos.
metas de la política económica son el aumento del ingreso peo . Además, las exportaciones agrícolas siguen siendo la mayor parte
capita con tanta rapidez como sea posible, y proporcionar tanta" de las mercancías de exportación (aunque ahora las superan los
ocupación productiva a la fuerza - de trabajo que en la actua­ ingresos por el turismo, incluyendo el gasto en las zonas fron­
lidad crece a un 3.5% anual. Una meta derivada que se men­
terizas), representando casi el 40% de los ingresos totales por
ciona con frecuencia es el reducir la dependencia económica dej exportación.
acontecimientos exteriores, aunque México ha tenido menos éxito
La búsqueda de nuevas tierras para la agricultura ha sido mi
en este respecto que en otros. Aunque es cierto que la susti-.. importante motivo que subyace en las políticas de desarrollo
tución de importaciones ha tenido éxito para reducir la propor­ • regional. La apertura de nuevas tierras ha tenido gran imporción de importaciones con respecto a la demanda final, la com­ - tanda para explicar el crecimiento del producto agrícola desde
posición de las importaciones ha consistido crecientemente de ; 1940. De 1927 a 1940, el área cultivada aumente) 2.2% al año,
bienes de capital, materias primas y bienes intermedios. En con-, en tanto que el rendimiento por hectárea sólo 0.5%. De 1940
secuencia, será difícil disminuir las importaciones durante un ; a 1950, el área cosechada aumentó 3.1% al ano y los rendi­
período prolongado como consecuencia de una crisis de balance, mientos 2.6%.° De 1951 a 1960, el área cultivada aumentó 2.0%
de pagos, sin producir una disminución en la tasa de creck al año y los rendimientos 3.0%. El asentamiento en tierras previamente no utilizadas o usadas sólo para un primitivo pastoreo
miento de la producción. En este sentido, México sigue depen­ ■
diendo mucho de las importaciones. También conserva una con-: ha sido una meta importante de varios de los proyectos de
vertibilidad total interna y externa, y en consecuencia ha tratad^ cuencas hidrológicas. También lo ha sido la provisión de servicios
de impedir que surja cualquier situación que produzca una: de irrigación, ya que la disponibilidad de agua es de gran inr
fuga de capital. México ha devaluado su moneda.dos veces desrie­ ■
portancia para determinar la productividad de la tierra cul­
la guerra, pero en la actualidad está decidido a conservar siij tivada.
Otra forma por la que el patrón particular de desarrollo retasa de cambio. En consecuencia, una situación en donde hayaj
1
un
de pagos
y ausencia
. ........ A
* balance —
m
--- i ofavorable
/ de .'inflación, quel-gional del -que
_ ' nos ocupamos en este estudio
a ha acelerado el
contribuye a lo anterior, es una meta muy importante de k 'desarrollo nacional ha sido por medio del incremento de la
política.
j r oferta de energía eléctrica. A principios de los años cincuenta,
La forma en que el desarrollo de las regiones alejadas de lof < una escasez de 'energía eléctrica afectó a ciertas zonas indus­
centros urbanos del país contribuye a estos objetivos nación^ triales y creó un freno potencial sobre el crecimiento de la
les es primoMialmente a través del desarrollo de la agricultura^ industria manufacturera, amenaza que ha sido contrarrestada por
El crecimiento agrícola ha sido un componente significativo de¡ fel rápido crecimiento de la capacidad de
'
generación de clcctricrecimiento total, y los logros en esto en comparación con vario! ' cidad. La energía hidroeléctrica ha sido una
i característica de
todos
los esquemas
de lasv cuencas
hidrológicas y ha jugado una
otros países latinoamericanos que tienen políticas industriad
industrial^ : todos los esquemas de las
cuencas
hidrológicas
ha j
más o monos semejantes explican en gran parte el relativo éxit§ ■ parte en esta expansión. En 1965 la capacidad hidroeléctrica
instaladaeraera
casicasi
cuatro
cuatro
vecesveces
la de 1950,
la dey representaba
1950, y representaba más
económico mexicano. México ha dejado de ser un importad^ r¡-instalada
de ciertos alimentos, en especial trigo, y se coloca en una situa­ j del 40% de la capacidad instalada en el país. Desde entonces
f la inauguración de grandes obras hidroeléctricas aumentó consición tal que, frecuentemente, exporta grandes cantidades de tu
POLÍTICA ECONÓMICA Y DESARROLLO REGIONAL
f■
* Para una discusión más completa de tales objetivos y logros, véase Kui¿l;
Mexícvm Jndtisl rializalion and Trade Policies since 19'10.
j 8 Secretaría de Agricultura y Ganadería y otras dependencias gabeniaf mentales, Proyecciones de la oferia y la demanda para producios tigiPmtis
> i y ganaderos en México de 1970 a 1975, México, 1965, pp, 145-6,
90
EL DESARROLLO REGIONAL .
EL DESARROLLO REGIONAL
91
derablemente su importancia relativa. El crecimiento de la capa- ’ gresos disponibles para los pobres. La única concesión del go­
cidad termal fue mayor que el de la capacidad hidroeléctrica 1 bierno al deseo de un mayor consumo privado es el subsidio
durante el período 1950-1965, pero el crecimiento en energía
a los alimentos básicos que se distribuyen a través de los cana­
generada fue mayor para la hidroelectricidad.
les oficiales a las personas en los barrios pobres urbanos y en las
zonas rurales, pero éste no es de manera primordial un programa
de desarrollo.
Los objetivos del desarrollo regional
Estos programas de inversión rural se consideran esenciales
para hacer mínimo el peligro de disturbios regionales que al­
Aparte de la contribución que los proyectos regionales pueden
terarían el delicado equilibrio que se ha logrado. Además, mu­
hacer al desarrollo nacional, y de los costos de la concentración,
chos lideres políticos están comprometidos ideológicamente a me­
que se tratan en el capítulo n, el gobierno desea un desarrollo
jorar la -suerte de las comunidades indígenas. Estos programas
regional más equilibrado por el valor que tiene en sí mismo.
están destinados a proporcionar a los grupos más pobres alguna
En el primer capítulo discutimos algunos de los motivos gene- ;
evidencia tangible del efuerzo de desarrollo económico, sin dis­
rales de los gobiernos. En el núcleo de la preocupación política
traer una cantidad de inversión indebidamente grande de este
mexicana por el desarrollo regional está un deseo de equilibrio :
esfuerzo. También tienen importancia para reducir la corriente
social. La importancia que se da a la industrialización y a la
de emigrantes de las zonas rurales a las ciudades en donde crean
sustitución de importaciones tiene su efecto principal en las zonas
una pesada carga sobre las viviendas disponibles y los servicios
urbanas del país. Se construyen nuevas fábricas y aumentan las
públicos que se ofrecen a los residentes urbanos.
oportunidades de empleo en las grandes ciudades. Las inversio- ’
Como se indicó en el capítulo anterior las características geo­
nes complementarias en capital social general han representado
gráficas de la nación y la diversidad cultural de su gente pro­
una gran proporción del presupuesto de inversión dejando rela­
ducen innumerables grupos de personas que aún tienen ligas muy
tivamente poco para las zonas rurales. Por tanto, no es sorpren- .
tenues con. el resto de la nación. El Instituto Nacional Indige­
dente que las personas en estas zonas rurales hayan estado recia- ■,
nista se ocupa directamente de este problema trabajando cotí
mando, de una u otra forma, más atención y trabajos públicos.
Estas demandas no han sido ignoradas por quienes elaboran j grupos indígenas aislados en varias partes del país. El programa
la política. El gobierno mexicano está consciente de los proble- J lo empezó en 1936 el presidente Lázaro Cárdenas con la for­
mas que pueden surgir si explotara en el campo el descontento * mación de cierto número de “Misiones Culturales”, que propor­
cionaban alguna educación y toda una gama de actividades para
total. Su programa de desarrollo tiene en cuenta tales presiones
e intenta reducir el descontento latente, en donde éste puede des- j incluir a las comunidades aisladas en el esfuerzo educativo na­
truir la estabilidad política. Uno de los problemas que confronta d cional.10 También era una forma de establecer ramas locales de
el presidente es el de encontrar un equilibrio adecuado entre los.' organizaciones políticas nacionales para aumentar en los cam­
requerimientos del programa de industrialización y las demandas ' pesinos la sensación de participación dentro de la nación.
Este esfuerzo disminuyó después del período de Cárdenas y
por un mayor consumo de los grupos más pobres. Parte de la •,
respuesta al deseo de mejoras en las zonas rurales ha sido el es- j los actuales esfuerzos educativos y culturales del ini se dirigen
fuerzo, durante la década pasada, de aumentar la distribución j .exclusivamente a aquellos grupos que siguen fuera del marco
de la tierra bajo las leyes de reforma agraria. Como ya dijimos, I de la cultura “mexicana”. Aunque, frecuentemente, ofrecen ins­
ésta sólo fue compañada por una gran inversión en la agricultura 1 trucción en los idiomas nativos, estos programas están elabora­
dos para familiarizar a los grupos indígenas con la serie de
en las zonas en que los rendimientos prometían ser elevados. Se
han instituido otros programas para mejorar los sistemas de.<j servicios y oportunidades que en teoría tienen disponibles. Sólo
carreteras rurales, difundir el programa de electrificación rural, J en raras ocasiones permitirá el gobierno a un grupo que re­
aumentar el número de sistemas de agua potable y, quizá de ma- ;- chace explícitamente un papel de participación activa en la
yor importancia, difundir el sistema de educación rural. De 1 nación en favor del desarrollo de una subcultura viable, pero
esta manera se combina el consumo colectivo de los bienes con
10 Para mayores detalles sobre este programa, sus objetivos y sus logros,
inversiones básicas en capital general social en lugar de propor- ■ véase Ramón Eduardo Ruiz, México: The Challantes of Ponerly and Illiclonar mayores cantidades de bienes de consumo y mayores in- ? teracy, Huntington Library, San Marino, California, 1963.
92
EL DESARROLLO REGIONAL
diferente. Se hacen concesiones a tradiciones que sobreviven
las normas ceremoniales, pero parece que existe una firme in
tencia en alguna asimilación con el resto de la nación.
Los indígenas no son los únicos que están aislados físic
culturalmente. En el país hay aún muchas zonas que han
manecido sin ser tocadas por los esfuerzos del desarrollo. Alg
se han convertido en feudos ideales para políticos locales
esperan establecer su propio protectorado, o en refugio de
minales que intentan evitar ser atrapados por la ley. Si
zonas se tornan especialmente problemáticas, como era el
de la cuenca del río Tepalcatepec, entonces se movilizan
recursos gubernamentales para reducir la amenaza al régimen.
El gasto rural no va mucho más allá de tratar de descen
lizar la industria. Sin embargo, éste parece ser un obje
general del gobierno, siendo una razón los costos de la c
centración. Otra causa parece ser un disgusto por la sobrec
tralización per se, que expresan la mayoría de los escritores s
el tema, aunque no en términos económicos. Zamora com
a la región central con un órgano gigantesco y decadente
se conserva a expensas de las partes más sanas del cuerpo; L
Malo indica la “excesiva concentración y localización defect
de la industria’'’; Enrique Beltrán comenta sobre la “absurda
tralización” del país y Yates compara a la capital con la R
imperial.11
11 Diagnóstico económico regional, p. 371; López Malo, op. cit., p.
Enrique Beltrán, “Los problemas del Valle cíe México", Problemas del
de México, p. 341; y Yates, op. cit., p. 306. Debe notarse, sin embargo,
Yates no predice que bárbaros procedentes del norte caerán sobre la c
de la misma manera.
En este contexto es interesante preguntar si el crecimiento de la c
de México ha sido anormalmente grande, ya que en muchos país
ciudad más importante es claramente mucho más grande que la segund
tamaño. Podemos comparar la distribución del tamaño de las ciudade
México con los resultados obtenidos en otros países viendo cómo
explicárseles por la ley de Pareto que originalmente se ocupaba de la
tribución del ingreso. La idea de hacer esto se obtuvo de Benjamín W
Problems of Greek Regional Development, Research Monograph Series,
4, Atenas, Centro Para Investigaciones Económicas, 1963, pp. 59-77. V
también Hans W. Singer, “The ‘Courbe des Populationsí a paralle
Pareto’s Law”, Economic Journal, xlvi, junio de 1936, pp. 254-63, y
Allen, “The ’Courbe des Populations’, a further analysis”, Bullelin o
Oxford lustitute of Statislics, xvi, mayo-junio de 1954, pp. 179-89. S
sostuvo que Y ~ aXb, en donde Y es el número de ciudades con una
blación de cuando menos X y a y b son constantes, explicaba la distrib
en el tamaño de las ciudades. Si esta ley es cierta, se deriva que la
presión
log Y ™ log a q- b log X
DESARROLLO REGIONAL
93
Varios escritores que han atacado el exceso de centraliza5n, tienen diferentes opiniones con respecto al grado de cen­
tralización que sería deseable. Las recomendaciones políticas de
Yates se referían a la descentralización del Valle de México uti­
lizando áreas de la Mesa Central. Se puede decir que esto tiende
a ‘Ocurrir naturalmente. Zamora, no obstante, vio en el lento
crecimiento de la zona central una especie de rendimientos de­
crecientes de la concentración, y el peligro de que éstos puedan
actuar como un importante freno del crecimiento económico. Al
igual que Yates, pedía una descentralización dentro de la región
central, pero sólo como un primer paso para una descentrali­
zación más completa utilizando otras regiones.
Los proyectos de las cuencas hidrológicas tienen esta meta mús
radical para industrializar las zonas alejadas de las áreas cen­
trales de México. Esta meta ha sido muy explícita, y los proyec­
tos, de las cuencas hidrológicas son uno de los varios pasos que
se han tomado para estimular a las personas y a las industrias
para que se establezcan fuera de las tres ciudades más grandes,
y otras medidas se destinan para hacer más atractiva la perma­
nencia a las personas en los medios rurales. Quizás el más im­
portante de éstos se ha proyectado para el desarrollo de la agri­
cultura, mejoras de carreteras y sistemas de comunicación de
manera que los mercados rurales funcionen mejor. Parece que
los políticos mexicanos están convencidos que una forma impor­
tante de reducir la presión sobre las ciudades es mejorar las
oportunidades económicas en el México rural. En el capítulo si­
guiente diremos más sobre los detalles de tales políticas. En este
apunto puede decirse, sin embargo, que, aunque sin duda el deseo
•de descentralizar la industria es sincero, las medidas para mejorar
la infraestructura rural —y en realidad no van acompañadas de
■será una linca recta. G. R. Alien lia hecho un examen más completo de
esta ley, y la encontró verdadera, en general. Para México en 19(10, tal
¡línea se ajusta mejor para ciudades con menos de 100 000 habitantes, que
■para 17 ciudades que superan esc número. Singer también hizo la hipótesis de
:quc cuando Y era 1, se encontraría que X sería un valor no muy alejado
■de la media geométrica de las dos ciudades más grandes. Alien encontró
ique cuando se consideran los pueblos o suburbios vecinos a la ciudad, cu
¡lugar de apegarse a las fronteras legales, como hemos hecho aquí, once
;de cada doce casos apoyan esta hipótesis. Pero incluso para la ciudad de
¡México, no digamos para el Valle de México, esto no corresponde, Debido
¡a la exactitud general de la hipótesis, el tamaño de la ciudad de México y
pie sus alrededores es en realidad anormalmente grande. Por supuesto esto
¡no demuestra la superccntralización. Para detalles adicionales de estos cálcu­
los, véase Ring, River Basin Projects and Regional Development.
i.
&•
94
EL DESARROLLO REGIONAL
otras medidas— no han sido y no serán por sí mismas adecuadas ]
para contrarrestar las tendencias a la aglomeración industrial j
en las áreas centrales de México, Mostraremos esto con mucho |
más detalle en el estudio que se presenta en el último capí- i
tulo de este libro,
CAPÍTULO IV
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
i; LOS PROYECTOS DE CUENCAS HIDROLÓGICAS DE 1946
i En el capítulo n describimos el marco de las políticas de dcsL arrollo regional desde la segunda guerra mundial, y también
U hemos discutido sus razones políticas y económicas, aunque hei utos dicho poco sobre ellas. Lo haremos'en el presente capítulo,
\ Nos interesaremos principalmente por los cuatro proyectos de
J cuencas hidrológicas en que se ha hecho inversión en gran escala
i y durante un largo período que representan la mayor parte
h'de los esfuerzos de desarrollo regional de México desde la gue\ \ rra. Como mostramos en el capítulo anterior, las comisiones de
L las cuencas hidrológicas han ofrecido una forma de planear y
■ •; coordinar el gasto público en una región en que era difícil ha¿; cerlo por medio de las secretarías y gobiernos estatales, indeé ? pendientemente de la conveniencia económica de las inversio, Ipnes destinadas a obtener un uso más eficente del agua, tan
escasa en algunas partes de México y en ocasiones tan abundante en otras. De hecho, en uno de los casos, el proyecto del
’ 4 Lerma-Chapala-Santiago, que no ha pasado más allá de la etapa
-;[■ de planeación, las posibilidades de coordinación general y de píaj.neamiento asociadas con la planeación integral de una cuenca
■J hidrológica, son claramente lo que ha atraído al gobierno meN xicano, más que el .deseo de planificar el uso de los recursos hi; dráulicos de una manera coordinada. El cuadro iv-1 sintetiza el
? "gasto de las comisiones de las cuencas hidrológicas. A pesar de
i la naturaleza integral del trabajo de las comisiones y de su papG peí en la coordinación de la inversión pública, estas cifras no
í ’ incluyen todos los gastos públicos dentro de cada cuenca, sino
rí sólo aquellos que se canalizan a través de las mismas comisiones,
■ '.Como explicaremos, la proporción de la inversión pública tmal
|len una cuenca hidrológica, controlada realmente por una coa misión, varía de año en año y de lugar a lugar.
\ La "marcha hacia el mar”, tal como la representan los pro
y byectos de las cuencas hidrológicas ha ocurrido tanto en dirección
í del Pacífico como de las costas del golfo. Los trabajos de las
q ‘ comisiones han estado determinados en gran parte por la dife-
1
o
FlJFRTt
ó
Comisiones de estudio
PAPALOAPAN
/
hidrológicas
Operación
Proyectos dé cuecas
en construcción o éfi
n
GH J ALvA
C/i
400
J
O
z
>
r-<
500
I
MÍ
wSc
^FcSÍ
EÍF
(millones de pesos)
O
r
Papaloapan
A precios
de 1960
*
Grijalva
A precios
corrientes
A precios
de 1960
*
Años
A precios
"corrientes
1947
1948
1949
1950
1951
1952
1953
1954
1955
1956
1957
1958
1959
1960
1961
1962
1963
1964
7.8
16:0
21.0
37.5
77.9
111.6
115.1
99.7
96.6
88.9
89.0
■ 102.8
40.8
24.3
30.0
21.1
23.7
20.0
18.6
35.8
43.5
70.9
122.3
167.4
174.9
137.6
117.9
103.1
98.8
110.0
42.8
24.3
29.7
20.5
22.5
19.8
5.5
9.9
13.6
26.3
28.0
34.8
24.3
57.9
49.4
246.9
412.3
135.0
8.4
13.7
16.6
30.5
31.1
37.2
25.5
57-9
48.9
239.5
391.7
129.6
TOTAL
I 023.8
1 360.4
1 043.9
1 030.6
Tepalcatepec
(incl. Balsas)
A precios
A precios
de 1960
*
corrientes
2.4
11.5
14.1
16.8
20.7
27.3
27.7
25.7
32.5
30.6
38.3
33.2
19.9
26.6
10.9
22.3¡1
53.9t’
54.4^
468.8
5.7 -A
25.8
29.3
31.8
32.5
40.9
42.0
35.5
39.6
35.5
42.5
35.5
20.9
26.6
10.8
Fuerte
A. precios
corrientes
A precios
de 1960
*
x
o
>
2
>
cr
ü
51.2
52.2
2.9
38.0
111.6
144.1
121.9
60.2
35.7
20.0
32.9
23.2
25.3
42.0
62.2
3.8
57-8
154.0
175.8
141.4
66.8
38.2
21.0
32.9
23.0'
24.5
39.9
59.7
579.9
’ 720.0
838.8
21.6
a Gastos corrientes ajustados por el índice de precios para la inversión pública, Manual de estadísticas básicas. Bco. de Méx.
b Incluye gastos para toda la cuenca del Balsas. Para la cuenca del Tcpalcatepec exclusiva rúen fe, los gastes comentes
en 1962 fueron 13.9 niillones, para 1963, 13.8 millones y para 1964? 10.4 millones.
puente: México, Secretaría de Recursos Hidráulicos, Informe anualj varios años, e información rmcnx>~cionada o publi­
cada por las distintas comisiones.
ü
<Z>
>
o
r
r
o
0
"'
98
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 99
rente naturaleza de los problemas hidrológicos encontrados en
cada costa. En el Golfo, los problemas han incluido inundaciones
periódicas y la falta consecuente de asentamientos en las tierras
bajas costeras potencialmente fértiles, así como su aislamiento.
En el Pacífico, el problema ha sido una escasez de precipitación
pluvial que restringe el desarrollo de la agricultura, a menos
que se practique la irrigación. Primero, describiremos el trabajo
de los proyectos del Papaloapan y del Grijalva en la costa del
golfo, después nos ocuparemos del proyecto del. Tepalcatepec
(que después se convirtió en el proyecto del Balsas) y del pro­
yecto del Fuerte.
La Comisión del Papaloapan
La Comisión del Papaloapan se estableció en 1947 y se le en­
cargó del desarrollo integrado de la cuenca del Papaloapan.
La cuenca no sólo incluye la zona de captación del Papaloapan
y de sus tributarios, sino también la de un número de pequeños -i
ríos que también desembocan en el Golfo de México a través j
de la Laguna de Aivarado. Definida de esa manera, la cuenca 1
tiene una superficie de unos 46 500 km2, y abarca parte de los ]
estados de Veracruz, Puebla y Oaxaca. El 45% de la superficie j
de la cuenca es reía ivamente plana. La mayor parte de tierra.'
plana es parte de una ondulante planicie costera, que está al j
suroeste de la faja costera y que limita al noreste con la Sierra í
de San Martín, y al suroeste por la más imponente Sierra Ma-.j
dre Oriental. Estas montañas tienen una altura promedio de 1
más de 1 800, metros, pero el Pico de Orizaba, la más alta de México, asciende a más de 5 600 metros en la parte noroeste de la
cuenca. Las partes más bajas de la cuenca tienen un clima tro- j
pical húmedo, con temperaturas que promedian 25°C y la lluvia j
entre 1 500 y 2 000 mm, concentrándose entre mayo y octubre. ?
La ladera este de la Sierra Madre recibe un promedio de 3 000 ;
mm y algunos lugares reciben más de 4 000 mm. Durante los \
meses del verano, las masas de aire saturadas de humedad sej
mueven tierra adentro desde el golfo y pierden su humedad
medida que se elevan y se enfrían sobre las montañas. Ferió-]
¿ticamente la zona se ve afectada por huracanes del Caribe, y las^
fuertes lluvias que traen, en su mayoría durante septiembre yj
octubre, han sido una fuente principal de inundaciones. Éstasf
tienen una larga historia, pero hasta 1944 parece que aumentaron^
debido al depósito pluvial en las partes bajas de la cuenca, red
flejando por una parte la desforestación de sus partes altas jq
por otra los eventos geológicos naturales. En 1944 la peor inund
dación registrada anegó cerca de 200 000 hectáreas, además de
las cerca de 300 000 hectáreas que se anegan anualmente. Más
de cien personas perecieron, muchas perdieron sus casas, y otras
, murieron por enfermedades en las condiciones poco sanitarias
■ que siguieron a la inundación. Aunque antes se había estudiado
el problema de las inundaciones y se habían hecho recomenda­
ciones sobre su control, nada se llevó a la práctica. Ahora, un
nuevo estudio, realizado bajo los auspicios de la Comisión Na­
cional de Irrigación (predecesora de la Secretaría de Recursos
Hidráulicos) sugirió, en 1946, que el control de las inundaciones
por medio de cinco presas en los tributarios del Papaloapan, bor. dos a lo largo de sus bancos y una canal de aforo aunque cos: tosas eran posibles.1
El informe de 1946 recalcó la falta de condiciones sanitaritrs
ó y el aislamiento de la cuenca. En esa época algunos pueblos
■
; grandes con alguna industria se encontraban sobre una de las
p dos carreteras que unen la ciudad de México con Veracruz, y
- usaban el Ferrocarril Mexicano que une estas ciudades, pero la
L inmensa mayoría de la economía del resto de la cuenca era agrí­
cola y, en 1946, contaba sólo con facilidades de transporte del
I todo inadecuadas. Prácticamente no existían caminos transitables
r en ningún tiempo, y había unas pocas líneas ferroviarias mal equiÉ padas y en notoria necesidad de reparación. El tráfico fluvial
i. había precedido cualquier otra forma de comunicación pero esta[ ba ya limitado en grado considerable por el azolve creciente de
[ los ríos. Su principal función se había convertido en llevar caña
I de azúcar, sembrada a lo largo de los bancos del Papaloapan
I y del Tesechoacán, a los ingenios, conectados por ferrocarril con
i? el resto del país. La caña de azúcar era, y sigue siendo, la más
| importante cosecha comercial. Cuando menos durante quince
años, la cuenca ha representado una cuarta parte de la producÉ. ción total de caña de azúcar en México. El ingenio de San GrisI tóbal es uno de los mayores del mundo y con mucho el más
I grande de México. La caña de azúcar se cultiva en varias otras zo| ñas de la cuenca. También se cultivan en la parte baja de la
I cuenca, en donde tienen acceso a medios de transporte, otras
I cosechas tropicales, de las cuales la pifia es la más importante.
| También se cultivaban plátano y tabaco, pero la importancia
I de ambos está disminuyendo.
I En zonas más altas, en la parte más fría pero libre de heladas
1
José S. Noricga, “Control del río Papaloapan: preparación del plan de
estudios definitivos y programa de construcción de obras”, Ingeniería HiK dmu/ica en México, i, abril-junio de 1947, pp. 5-65, parte i, y i, julio-sepI' tiembre de 1947, pp. 5-48, parte 2.
k.
K
100
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONALPOLITICAS
.j
MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 101
que se encuentra entre los 1 200 y 1 800 metros, se cultivaba calé, *
única cosecha comercial que no se cultivaba junto a. las vías, de :
transporte. La principal cosecha de subsistencia era, y sigue siendo, el maíz, que representó más de la mitad de la zona culti- i
vada de la cuenca y cerca de las dos terceras partes, en su zona j
superior. En esta última sigue cultivándose con técnicas muy
primitivas principalmente el tipo de la “roza”. La prevalencia j
de las técnicas primitivas refleja el gran aislamiento de la cuenca. j
Refleja lo mismo, aunque con más dramatismo, el que, en 1950, j
una tercera parte de la población de la zona no hablaba español, 1
y entre ellos hablaban nueve lenguas indígenas diferentes.
|
El informe de 1946 recomendaba el establecimiento de una |
organización con cierta autonomía administrativa para que asti- ■ J
miera las investigaciones e iniciara las obras. La recomendación ]
fue seguida por el presidente Alemán y se estableció la Comisión
del Papaloapan. Se dio a la Comisión, que era responsable ante j
el Secretario de Recursos Hidráulicos, autoridad plena para eL i
planeamiento y construcción de los trabajos requeridos para |
el desarrollo integrado de la cuenca. Su autoridad comprendía i
no sólo la inversión en recursos hidráulicos para controlar las j
inundaciones, irrigación, energía hidroeléctrica y agua potable,
sino también para el establecimiento de todo tipo de sistemas de
comunicación para todos los asuntos de desarrollo industrial y -j
agrícola, urbanización y colonización. Era un paso adicional en 1
la tradición de intentar desarrollar regiones alejadas de la Mesa q
Central; pero también marcó el inicio de un nuevo enfoque del i
problema del desarrollo regional que aún se sigue, aunque algo ••
modificada. En la época en que se creo la Comisión se hicieron q
analogías explícitas entre ella y la Tennessee Valley Authority, j
y en verdad los éxitos de la tva fueron responsables en gran |
parte para el establecimiento de un programa de desarrollo in- ?
tegrado de las cuencas fluviales en México. Sin embargo, no es 1
necesario llevar muy lejos estas analogías. No se adoptó en Mé- |
xico la autonomía de la tva, ya que el presidente de la Comí- j
sión era ex officio, el secretario de Recursos Hidráulicos. El campo de la responsabilidad de la Comisión era más amplio que el |
de la tva, aunque, al igual que ésta, nunca tuvo control sobre ]
todos los aspectos del desarrollo económico y social, ..puesto que |
otras autoridades gubernamentales continuaron operando en hrj
cuenca, y la Comisióii no puede forzarlas a actuar o impedirles ó
que lo hagan.
.,
|
La Comisión del Papaloapan fue en gran parte creación de |
Alemán. Su establecimiento implicó un gran gesto ostentoso que j
concordaba con el estilo enérgico, aunque algo grandioso, de su J
administración y se ha marcado claramente la identificación de.
este proyecto con su fundador. Alemán nació en la misma cuen­
ca y fue gobernador del estado de Veracruz, en donde so encuentra
la mayor parte de la cuenca. La sede de la Comisión se estableció
en una ciudad totalmente nueva, que se debía llamar Ciudad
Alemán, y se previó que, aunque ya había varias ciudades dentro
. de la cuenca, Ciudad Alemán crecería hasta ser una población.
industrial con 150 000 habitantes. La primera obra importante
■ construida fue la Presa Alemán, ' y una de sus funciones era
■ abastecer de agua a la “Zona de Riego Miguel Alemán”. Alemán
; sigue siendo un personaje político sujeto a controversias y po: _ tencialmente poderoso en México. Parece que la identificación
• del proyecto con políticos ha tenido algún efecto en las variables
< fortunas políticas del mismo, desde las fanfarrias con que se
inició hasta su actual estado de casi suspensión.
En sus primeros años la Comisión inició con energía sus trabajos para el control de inundaciones. La Presa Miguel Alemán,
c-sobre el río Tonto, es una de las mayores de América Latina,
r Su vaso contiene casi 9 000 -millones de metros cúbicos y cubre
l 50 000 hectáreas. Debido a que 22 000 indios mazatecos vivían
L en esta zona, se necesitó un prolongado y difícil reasentamienLdo, pero sólo la mitad de los desplazados se quedaron en las
[• zonas de reasentamiento planeadas para ellos. Además de’ la
s presa, se construyeron bordos para proteger la ribera occidental
r y las zonas más pobladas del banco oriental. Áreas considerables
del noreste de la cuenca siguen estando sujetas a inundaciones,
pero cerca de la mitad de la superficie, que antes estaba sujeta
i a inundaciones, está ahora protegida.
| La otra serie importante de inversiones, realizadas en las etaí pas iniciales del proyecto, fue la construcción de un sistema de
£ comunicaciones. Se construyeron, dos carreteras principales desde
| Ciudad Alemán. Una de ellas como carretera de primera clase,
l a pesar de la insignificancia económica de la región en aquel
| tiempo un signo extravagante y falta de planeamiento que ca­
racterizaron a las inversiones de la Comisión durante este período,
|. Por ejemplo, la Presa Alemán se planeó para proporcionar irriga|ción complementaria a 160 000 hectáreas, sin un estudio adecuado
I sobre si esto era deseable o posible. Después de la elección del
| presidente Ruiz Gortines, cambió la administración de la ComíLsión y su política. Se abandonó la idea de irrigación proveniente
|Me la Presa Alemán, ya que el canal principal era muy costoso
|.para justificar el proyecto; el trabajo en la presa continuó, pero
| se destinó un menor porcentaje de los fondos para medidas de
Icontrol de inundaciones, y hubo mi cambio general de las obras
102
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL i
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
103
espectaculares en gran escala hacia la construcción de un sistema í tes. El cudro iv-1 muestra en términos financieros cómo dismi­
de comunicaciones secundario y carreteras de alimentación, y í nuyeron las actividades de la Comisión después le 1958.
hacia medidas más pequeñas y más directas para promover el j
Superficialmente, el proyecto da la apariencia, de haber sido
desarrollo agrícola. Éstas incluían dos proyectos de irrigación para I , una especie de elefante blanco, un monumento a la inhabilidad
regar un total de 34 000 hectáreas;
*I
Se empezaron varios esque
/del gobierno mexicano para planear algo que perdure de una
mas de colonización, junto con un programa de créditos agrí- j ■ ' administración a otras futuras, y un ejemplo perfecto de procolas, pero éstos no tuvieron éxito, y una gran cantidad de di- j ; yectismo, la tendencia a proclamar la intención de realizar granñero se perdió en las operaciones de crédito. Poleman, quien j . des proyectos, pero de fracasar para terminarlos con éxito. Éyler
Simpson describe esto bien:
ha estudiado con detenimiento la experiencia de las colonias,
concluye que la principal causa del fracaso fue la dirección erró­
Así tenemos al mexicano que, habiendo vislumbrado una meta lejana,
nea dada p>or la Comisión, que no había realizado experimentos
previos sobre posibles patrones de cultivo.2 Las dificultades esta- | está propenso a gritar ¡vámonosl y sin pensar en su experiencia paban compuestas de un paternalismo exagerado y de directrices j sada o en la de otras personas, se lanza hacia adelante, sin considerar
inflexibles dadas junto con el crédito. En 1957, terminaron las J das consecuencias. Éste es uno de los rasgos más atractivos del carác|..ter del mexicano, y sorprendentemente, en cierto tipo de empresas,
operaciones de crédito virtualmente, y con ellas el intento de una j 1 conduce con frecuencia al éxito, Pero con igual frecuencia produce un
colonización supervisada.
| cansancio cósmico y la detención al lado del camino para una pro­
No puede decirse que las desafortunadas experiencias de 1953-7 M
longada siesta de la cual uno se despierta, habiéndose olvidado de la
intención original, descansado y listo para otra carga sobre algún
fueron las únicas responsables del fracaso de los proyectos. De ®
molino de viento lejano. En ambos casos, este tipo de comportamien­
hecho, un plan en 1955 proponía un esfuerzo coordinado de
to es poco útil para lograr objetivos que requieren un cuidadoso pla­
colonización
muy
grande
que
comprendería
430
000
hectáreas.
!
(— -------------------------------- ,
neamiento y una dirección estable durante un largo período de años?
0
En vez de esto, las colonias fueron la primera víctima de una B
reducción violenta de actividades que fue acelerada por la muerte B
Quizás ésta sea una exposición un poco ruda de las cosas, y
del director ejecutivo de la Comisión en 1956. Supuestas irre-p
sería injusto decir que el proyecto del Papaloapan se manejó de
gularidades administrativas quizás contribuyeron a la actitud de j
1'jna manera común al manejo mexicano de los proyectos de desirrollo en gran escala. Pero cierto que lo logrado es muy
Limitado. Un cálculo' extremadamente burdo de los daños evi:ados por el control de inundaciones entre 1950 y 1960 (que
parece emplear precios de 1944) ha sido hecho por la Comisión,
i asciende a 116 millones de pesos? En la cuenca, tanto la
superficie cultivada como el valor de la producción obtenida aualentaron a una tasa mucho más alta que en el resto de la
república, en tanto que antes la tasa de crecimiento de la pro¡facción agrícola de la cuenca había sido mucho menor. Entre
1947 y 1957, la superficie cultivada aumentó más del doble, y
la producción de azúcar aumentó de 167 000 toneladas métricas
en 1947-9, a 817 000 toneladas en 1956-8.» En 1958 la producción
fue más de la tercera parte de la producción nacional. Se expe—
«
1
f
1-t. wv-Lt'i
'tn/'fimu í4
ITTlíl
f
* Eyler Simpson, The Ejido, Mexico’s Way Out, Chape! Hill: University
óf North Carolina Press, 1937, p. 581.
104
POLITICAS
MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL105
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
|
se construyó una línea ferrocarrilera que atraviesa la región a
rimentaron otros aumentos. Se estableció una fábrica de papel, . ■
un nivel un poco más elevado que la planicie costera, forman­
que tomó
energía
eléctrica
de
la
planta
de
Temascal,
una
vez;
:
- -------- u
do una cadena de unión terrestre entre la península de Yucatán
aumentó'i 5
que comenzó a operar en 1960. La capacidad generadora aumentó
y el resto del país. Villahermosa, capital del estado de Tabasco y
de 37 500 kw hasta 251 000 kw entre 1947 y 1960, La mayor
mayor;
, no estuvo conectada
parte—de
la
energía
se
utilizó
fuera
ele
la
cuenca.
La
apertura,'
¿
ciudad
principal
de la cuenca del Grijalva,
— — ----------o— -- 1ynni’
el resto
del país hasta la construí
una una
plantaplanta
de aluminio
en Veracruz,
significa que:
i
en 1963,
1963,de de
de aluminio
en Veracruz,
significa
que; ■■por transporte terrestre conr™
o
jla planta de Temascal de 154 000 kw
--- -se está usando
, ahorai.i-------.
a toda j.ción
de la primera carretera costera en 1958.
Aparte del potencial agrícola de esta región, los cuantiosos
su capacidad. Por tanto, el proyecto ha contribuido algo al pro-y
decursos
hidráulicos dan una promesa considerable de genera­
greso económico de México. Pero en términos del objetivo de;
ción
de
energía
hidroeléctrica para el consumo interior y para
descentralización regional los resultados han sido desalentadores,•
exportación
a
Centroamérica
y el desarrollo de los recursos bh
No hay una industria local nueva de importancia. La población;
dráulicos
continuará,
naturalmente,
concentrándose en el control
de la cuenca creció entre 1950 y 1960, pero con menor rapidez;
que la de la república.0 En parte la razón de esto puede estar'; ’.de inundaciones y en la generación de energía.
en el fracaso de la estrategia general: el hecho de que es poco, 1 Hasta ahora sólo una cantidad relativamente pequeña del po­
probable que un esquema basado en la agricultura atraiga a la i tencial económico de la región ha sido utilizada. La Comisión se
industria por sí solo, sin alguna otra atracción poderosa. Pero estoy ^concentró por completo en la cuenca del Grijalva que tiene una
2
no ha hecho que el gobierno de México abandone la estrategia: ^superficie de unos 50 000 km , de los que cerca de una décima
del proyecto del Papaloapan. El proyecto del Grijalva, que en [ parte está en Guatemala. Inevitablemente, el progreso ha sido
la actualidad se realiza con energía en una zona muy similar | dentó. Habiendo empezado sus trabajos en 1953, los primeros
a la del Papaloapan, unos 320 km hacia el sur, tiene objetivos- ; cinco años de la comisión se usaron en estudios, trabajos de drej i naje y una carretera costera que requirió cuantiosos trabajos de
idénticos a los del Proyecto Papaloapan.
- ¡ drenaje y de defensas contra inundaciones. Como resultado de los
i s-estudios se decidió construir la gran presa de Malpaso, de núcleo
El Proyecto Grijalva
?; de tierra
en varios aspectos la más grande de América Latina en
En junio de 1951 el gobierno de México anunció la creación b1» época en que se construyó y los trabajos en una carretera de
de La comisión para promover el desarrollo integrado de las! ;“eso * empezaron en 9t>8. La presa se termino en 190o con
c
. 1 j i •• i m TUuvnonnM tfrfac alvird t un costo de mas de mil millones de pesos. Desde entonces la
Sóoo'k” í .™í *’xH» , M * CM.Camáó,, Fedml * 1WM
^««.,.1..
r
Chianas Ésta es una zona suieta a las mismas tuerzas climática® r. ,
í1 i
i~T•
enlapas,
J
fnprtpí Producir casi 3 000 millones de kw al ano. La primera
energía
que la cuenca del Papaloapan, y también aquí caen fuertes ilug.r
1
*vias
¿ en altas montañas que se yerguen más alia de una planicie
..
'
,
construcción
de
la
nresa
de los tr i
dpDendipr pmp
lp H
costera suieta a inundaciones regularmente. Los ríos se unen a® Independientemente
de la construcción de la pic»a, de los U.iunos pocos kilómetros de Frontera, en Tabasco, desde donde flu-fbaJ0S de drenaJe Y de unas pocas actividades menores como et
ven hada el Golfo de México. Su. caudal combinado representa!.^amiento de agua potable y sistemas de colectores, la Comíyen nacía ci ui
.
»sión se ha empeñado, principalmente, con la primera etapa
ue
*^sVeree^ue
<I
arparte! ptanaTde las cuencas son muy fértilel
« quiere que sea un programa extensivo de coloni*e aunado
importantes
con productora!'potenciales
la provisión de irrigación
de productos-de
y la promoción
agrien® ^
e impuiid luí p
r
inundada®^ Ia agricultura tropical. La numera etapa de esto, el protura tropical. Pero la combinación de planicies costeras munaaaaw_
6
, J; mDMó‘m lOfifi v se nhm une dure
y de escabrosas montañas hizo a esta región virtualmente intranW^10 “e la Cliontalpa, empezó en lJbb y se planea que clme
hable hasta hace poco, y la región sigue siendo insalubre,
década, implicando drenaje e irrigación de M0 000 neciacasamente poblada y aislada del resto del país. Sólo hasta 195®
’ Ibidem, p. 30.
A» 7 El nombre de Malpaso se usa con mucha frecuencia, pera en realidad
W’se lefiere al lugar; el verdadero nombre de la presa es Netzahualcóyotl.
106
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
¡POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 107
reas, de las cuales menos de la mitad se cultivan en la actúa- ■ ■ del proyecto de colonización para lograr los altos rendimientos
lidad. Una etapa posterior del proyecto desarrollará cerca de; esperados depende de su éxito para superar este problema.
otras 130 000 hectáreas. En la primera etapa se beneficiarán, apro-; ' Incluso si el proyecto de colonización tiene tanto éxito como
ximadamente, 11 000 familias, con unas 63 000 personas, a un] jel que esperan sus patrocinadores, el efecto que puede tener para
costo calculado de 125 millones
*
de dólares, de los cuales cerca
...alterar la distribución
regional de la población agrícola de Me«íoiiiuwwvu
de 110 son costo de las obras básicas de irrigación y de mejorasIxico y para aliviar la presión sobre la
tierra en las sobrepobladas
1■
1
1 una... pequeña
. _ /Y _parte
.._z. será pagada
M <•»
i3n
*vmismos
i
-»r wlt íXÍ':llSr:,._ ’ i
* »
«.
_
agrícolas.
Sólo
por a-los
^regiones centrales es, obviamente, limitado. Durante los primeros
campesinos, al menos durante los primeros diez años.. Un cam_
qcinco años________________
de la década de los sesenta,
la fuerza de trabajo napesino pagará por su casa quizá con ganancias derivadas. deltcionai en el sector agrícola aumentó, más o menos, 170 000 per1-proyecto y algo por la limpieza de la tierra, pero hará él mismof®'— -- ------------------ ■ - a cerca de
- mil- -fami­
’sonas anualmente.
El proyecto- beneficiará
las obras de drenaje interno. La Comisión afirma que los rendi’í
lias al año, con dos o tres miembros de la fuerza de trabajo
mientos esperados son altos; gran parte del gasto planeado ori­
en cada una, esto es, se afecta a, más o menos, 3 000 miembros
ginalmente en las diversiones sociales de la zona se ha eli­
l'de la fuerza de trabajo al año, con un costo de más de 3 000
minado. ■
.
... .................................
.
"dólares por cada uno, sin incluir el costo de__control
de inundaQuienes se beneficiaron al principio ya habitaban esa zona.«ciones que proporciona la presa de Malpaso, La absorción de
Sin duda los colonos que lleguen posteriormente provendrán «egl70 000 personas anualmente, al costo de 3 000 dólares por cada
lugares fuera de la región. El problema, que quizá afronte el implicaría una inversión anual de más de 500 millones de
proyecto,
*>
dólares, aproximadamente
es el que redujo upa
las octava
oportunidades
parte dede laéxito
inversión
de lostotal
in
tentos de colonización del Papaloapan y que surge porque l^Xde México. Debe observarse que esto pudiera no ser muy costoso
condiciones agrícolas en las zonas altas densamente pobladas de|p se COmpara con el costo de dar ocupación a una persona en la
México de donde provienen los colonos, son. muy diferentes ajindustria, pero los datos disponibles no permiten una comparalas de las tropicales de la costa del golfo. Significa que los bene-.f c¡¿n directa de los costos que implican crear un trabajo en el
fíelos potenciales de la emigración desde las zonas densamente^ctor industrial, y uno en el sector agrícola. El censo industrial
pobladas
deben ser muy, ~grandes si se ^quiere^e
México de 1961 indicó que cuando menos había £ 5 000 de
i--------- - de
- la
■ Mesa Central^
_
1
inducir a un gran número de personas a *que se trasladen
a
la
~ 7""
77-’- f
invertido por cada trabajador en el sector de manufaccuenca del río < Grijalva. Debido
- - a la
. disponibilidad
'•
...... ’
actual deftturas. Por desgracia, es poca la confianza que se puede dar al
5
mu ch as oportunidades para "A
personas
iniciativa
deseos
pcpaí decenso
jnducon
Este
cálculo
es
mucho
menor
que
el
costo
pro­
Strial.
de arriesgarse en zonas en donde se está introduciendo irrigación bable de emplear un hombre adicional en la industria con téc­
sin programas de colonización, tales personas podrían sentirá nicas modernas, ya que las cifras del censo incluyen datos pro­
repelidas, más bien que atraídas, por las nuevas oportunidades e.( venientes de industrias en pequeña escala, mucho más antiguas,
una región aislada y desconocida que está siendo administrada a estudio de las Naciones Unidas sobre la tecnología óptima
por una nueva organización gubernamental con todos los pro para las empresas textiles latinoamericanas, calculó que en
blemas burocráticos que esto pueda crear.8 Debido a las opo| 965 la inversión por persona ocupada era de ¿20 659 dólares,
tunidades de alternativas y a los considerables estímulos dada n fábricas que trabajaban tres turnos,9
por el gobierno que ofrecen los proyectos de colonización, qui . Por supuesto, la ocupación en el proyecto de colonización su­
zás el tipo de personas que sean atraídas no desearán esperar 1( pervisado no es la única ocupación permanente que creará el
varios años que se requerirán antes de que los rendimientos s royecto. Se utilizarán otras tierras con mayor intensidad una
presenten. Mientras tanto, es probable que las condiciones sea ez que se las haya protegido de las inundaciones y la oferta
difíciles, como sucede en cualquier zona fronteriza. La habilid:
le la energía eléctrica generada contribuirá a una mayor ocuación industrial, aunque, quizá, gran parte de ésta ocurra fues Esto nos fue sugerido por varías personas relacionadas con varios pt
de la cuenca. Se están estableciendo complejos petroquímicos
yectos de colonización existentes y propuestos.
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f
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***------------------ ------------------ --------------- - ---------- ,
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iLgivatu LIC id pWMldLlUll dgiiCUicl Lie 1V.1C"
JL.
¡
Véase Juan Ballesteros, Matthew Edel, Míchael Nelson, La colonizará
en la cuenca del Papaloapan, Centro de Investigaciones Agrarias, Méxic
1970.
’ Citada en W. Paul Strassinan, Technological Chango and Economía Delopment: The Manufachiring Experience of México and Tuerto Rico,
a, Nueva York, Cornell University Press, 1968, p. 154.
108
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL ^LITIGAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
109
_de_la costa del dT
ZLL,y / éstos necesitarán energía eléctrica. iesatTollo integrado de la cuenca del río Tepalcatepec, Para este
Golfo,
energía generada por el proyecto Malpaso será, además, íncog tendíta todas las facilidades para el planeamiento, proposím y construcción de trabajos para irrigación y para el desarrollo
perada dentro de una red nacional. En su cuarto informe prej
.sidencial,
.........................................................
__ el presidente Dial
:las fuentes de energía, ingeniería sanitaria, establecimiento de
hedió el 19 de septiembre de 1968,
Órdaz relacionó la construcción de las instalaciones de energía Wunic a clones, incluyendo carreteras, ferrocarriles, telégrafos y
*hidroeléctrica
fefonos,y paraenlaMalpaso
creación con
y expansión
la expansión
de centros
de las fábricas
de pobla-de ahj
minio, acero, automóviles, fertilizantes, papel y fósforo.10 Per^".11 También tendría autoridad en los asuntos industriales,
■: picolas, de crédito y de colonización y podría intervenir en
no se divulgó lo que estaba implicado en cada caso.
Al intentar evaluar los efectos combinados de los proyecto^ juntos agrarios,
"
’ j.Ta cuenca del Tepalcatepec, de unos 17 000 km3, localizada,
del Papaloapan y del Grijalva, se pone en claro que dos década:
de cuantiosa inversión en la región del Golfo sólo han tenide su mayor parte, en el Estado de Michoacán con una pequeña
un efecto muy limitado en términos de la descentralización en la Ra en el Estado de Jalisco, tiene una superficie de menos del
localización de la actividad económica. Los proyectos hidroelét; del tamaño de la región desarrollada por la Comisión
mucho
tríeos no han ejercido una atracción notable sobre la industrií H Papaloapan, y toda la escala del proyecto lia sido mucho
que requiere mano de obra intensiva, aunque las industrias p$ ^aor. Por ejemplo, entre 1947 y 1960, la Comisión del Papatroquírnícas de la costa del Golfo y las - industrias de aluminé íhpan gastó 927 millones de pesos, y la Comisión del T'epaL
se han beneficiado por la abundancia local de energía. El dei Wec 323 millones de pesos (en ambos casos no se hicieron
arrollo agrícola sólo lia ocurrido a un ritmo moderado y no hjWes para considerar los cambios en los precios),
r
Ta cuenca del Tepalcatepec
se une a la cuenca mucho más
producido muchos movimientos hacia la zona. Sin duda, u T n
buena parte de la inversión realizada en comunicaciones podrí nde del Balsas. Los 100 000 km3 de la cuenca del Balsas se
tan convertido en la responsabilidad de una nueva comisión de
estar justificada en términos del deseo político de llevar un
(¡miento de integración con la nacionalidad mexicana a las a ^nca hidrológica en 1960, y esta comisión absorbió a la Co­
munidades aisladas, incluso sí no estuviera justificada por criterio pión del Tepalcatepec, Al principio esto tuvo poco efecto
?bre el trabajo de la Comisión del Tepalcatepec, y en sus inicios
meramente económicos.
zona más activa de la nueva comisión siguió siendo la cuenca
En la información detallada sobre la inversión en los.proye
Tepalcatepec. Hubo pocos cambios en el personal; el directos de la costa del Golfo parece, a primera vista, que, desde e
ir ejecutivo de la Comisión del Balsas es el ex presidente Lázaro
punto de vista económico, ha ocurrido un gran desperdicié
«lenas, quien sirvió personalmente con el mismo cargo en la
aunque no lo hemos podido comprobar rigurosamente. En lé
Amisión del Tepalcatepec. Bajo Cárdenas, la administración
primeros años del proyecto del Papaloapan gran parte del gast
2 las comisiones ha tenido mucha más continuidad que la aT
fue innecesariamente ostentoso, pero quizás no se pueda justifiq
inistración de la Comisión del Papaloapan y parecería que el
el cambio del proyecto del Papaloapan al del Grijalva en tó
smbio de ideas de los sucesivos gobiernos mexicanos ha tenido
minos económicos.
)co efecto en el trabajo realizado. En años recientes, han dis¡nuido algo sus actividades en la cuenca del Tepalcatepec, a
Los proyectos del Tepalcatepec y del Balsas
Mida que se presta mayor atención al desarrollo de otras zonas
|-la cuenca del Balsas, y falta todavía emprender desarrollos’
El proycto del Tepalcatepec, cuyas actividades describiremos
¡dónales, pero no ha ocurrido una total disminución con parmayor detalle en los siguientes capítulos de este estudio, fue
.críticas del proyecto no empezadas, como fue el caso con la
primero de los proyectos de las cuencas fluviales que se desarroU
tnisión
*
del Papaloapan, Este hecho y el tamaño relativamente
en la zona cálida y seca de la costa del Pacífico. La ComisW
(ueño
del
proyecto hacen un poco más fácil evaluar sus efecdel Tepalcatepec se creó por decreto presidencial en mayo ’t
sobre
el
desarrollo
regional, que junto con una exposición
1947, con un mandato muy semejante al de la Comisión 4
Papaloapan establecido tres meses antes. Se le encomendó
‘Citado en Vicente Fernández Bravo, Estudio emolió mico-social de ¡a.
10
El Mercado de Valores, 9 de septiembre de 19GR, p. 59.5.
del río Tepalcalepec, Tesis para el grado de licenciado en econoa, Escuela Nacional de Economía, unam, México, 1959, p. 23L
110
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL TICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL111
más detalladas de las actividades de la Comisión serán tema delj una especie de grupo de presión en los círculos oficiales para
comPÍej° de fabricación de acero se estableciera allí y
capítulo vi,
? :^Ue
Es probable que la estrategia que se está adoptando en
en otros lugares.
cuenca del Balsas sea muy parecida a la adoptada para la cueiE c bl trabajo hecho por las comisiones del Tepalcatepec y del
ca del Tepalcatepec. El Balsas, con un caudal de casi 14 000 paisas en esta zona ejemplifica tanto el empleo flexible que el
millones de metros cúbicos, es el río más grande de México que gobierno federal ha podido hacer de tales organismos des central idesemboca en el Pacífico. Nace en la zona volcánica y moni ^¡dos con amplios poderes cuya autoridad traspasa otras fronter,.
'as
tañosa de Oaxaca al sureste de la ciudad de México, la mayo^™inistrativas, como el que una vez establecido tal organism
_ . ---------- o-----------lo
retende convertirse en un grupo de presión en favor del des­
parte de su curso fluye hacia el oeste. La cuenca es muy mo
arrollo
regional. Si sigue gozando del favor político, como sucede
lañosa, pero en sus zonas más planas, que están al norte de
n
la
Comisión del Balsas, podría ser muy eficaz. Si, como
río, ofrece posibilidades de irrigación. Al igual que plañid
bajas parecidas a la de México, estas zonas secas y cálidas sí ocurre con la Comisión del Papaloapan, se le relaciona con po­
conocen como la Tierra Caliente. En la Tierra Caliente, cerca d líticos que están en contra, entonces el proyecto tendrá una exis­
Ciudad Altamirano, se lian construido dos presas, primera eta tencia azarosa, independientemente de los méritos económicos de
de los planes para irrigar cerca de 80 000 hectáreas. La semejanzí la Comisión.
entre esta región y la escogida en Michoacán, para un estudie Otros trabajos de la Comisión del Balsas han sido princiImente inversiones sociales en las montañas de Oaxaca, de manos llevará a decir más sobre ella cuando evaluemos las inv
era
similar a la realizada por la Comisión del Papaloapan en
siones de la Comisión.
Al oeste de Ciudad Altamirano el río se une con el Tepalq condiciones parecidas y antes por la Comisión del Tepalcatepec
tepec y cambia repentinamente su dirección hacia el sur par n las zonas montañosas de Michoacán.
correr a través de la Sierra Madre del Sur hacia el Pacífico. E
este tramo final del río la Comisión ha construido dos grandí 0 Proyecto del Fuerte
presas. El Infiernillo, la más grande, está generando actualment
energía para la ciudad de México con una capacidad de 60000 á progreso de la agricultura de irrigación en los valles del
kw. Una presa más pequeña, río abajo, en La Villita, se utilizar noroeste de la costa del Pacífico ha sido el evento más brillante
eventualmente para producir electricidad para una fábrica 4 íi el desarrollo agrícola mexicano desde la guerra. Uno de éstos,
kcuenca del río Fuerte, se convirtió en la responsabilidad de
acero que se proyecta construir en la costa. Los hornos eléctrií
utilizarán mineral de hierro de los cercanos yacimientos de E ia comisión de cuenca hidrológica, formada en junio de 1951
uiendo los lincamientos de las comisiones del Papaloapan y
Truchas y se les unirá con el resto de México por un nu$
ferrocarril y un puerto que se construirá cerca de la desemb d Tepalcatepec, para promover el desarrollo integral. Con
caudal anual de entre 5 y 6 millones de metros cúbicos (auncadura del Balsas. La Comisión del Tepalcatepec y la más ;
ue
ha variado entre 12 000 y 2 000) al año, el Fuerte es el río
cíente Comisión del Balsas han jugado una parte importan
lás
grande de la región noroeste de México en términos de
en la promoción del complejo de acero. A pesar de que los'
tidal. Drena una zona de unos 29 000 km2 en los estados de Sicimientos de mineral de hierro están fuera de la cuenca 4
loa, Sonora, Durango y Chihuahua. Sin embargo, la comisión
Tepalcatepec y su estudio se alejaba del campo normal de col
cimientos de la comisión de la cuenca hidrológica, los estudl fio actúa en la parte inferior de la cuenca, totalmente dentro
d estado de Sinaloa, y hasta ahora no ha trabajado en las zonas
iniciales fueron hechos por la Comisión del Tepalcatepec, a
casamente pobladas. de la Sierra Madre Occidental o de la
dada posteriormente por la Compañía Krupp. En los años se$í.
eseta, en donde hay recursos de madera y minerales no explota, cuando el sitio de Las Truchas era sólo uno de varios lugáf
dos. La principal función de la comisión ha sido la mejora,
posibles que se consideraban para el nuevo desarrollo del jeo:
mservación y expansión del distrito de riego del Fuerte. De
piejo de acero y en muchas formas no er¿i uno de los más p
ho, se le ha criticado por su fracaso en realizar el desarrollo
metedores, ya que, aunque los yacimientos de mineral de hiq
egrado
como se había previsto en la administración de Ale­
son ricos, no había allí servicios de ninguna clase y vírtq
mán,
y
por
su concentración en las posibilidades de irrigación
mente no había población, la Comisión del Balsas se convir
$
112
POLÍTICAS
MEXICANAS
DE
DESARROLLO
REGIONAL
113
i(POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
y los serios problemas de inundaciones de la cuenca inferior. Por 1j la presa era claramente muy pequeña, un hecho que quedó
tanto, no es un buen ejemplo de un intento de promover el ,Jdemostrado por graves inundaciones en 1955, 1958 y 1960. La
una cuenca
desarrollo regional mediante una inversión en una
cuenca hi<>
hi­ última destruyó los cultivos de unas 40 000 hectáreas y destr uyó
drológica integrada, pero la contribución hecha al desarrollo 1 instalaciones para irrigación. En consecuencia, se tuvo que agran­
agrícola del noroeste es en sí misma interesante e importante. I dar la presa entre 1962 y 1964.
La cuenca y su desarrollo merecen una breve
descripción. i; La Comisión Federal de Electricidad construyó una planta con
■
• *se-—
’ionn
,i
j — --------------hasta 1890 cuando
Éuna
capacidad de 60 000 kw en la presa, contribuyendo al
La irrigación en la cuenca se remon5a
.íripido crecimiento de una próspera zona agrícola cuya princiexcavó el primer canal por una comunidad socialista de ameri- f
si primer camu por uiw uuuxuimu1«u
banco 3 í-Pa^ ciudad es Los Mochis. Además del ingenio azucarero, se
canos seg:guidores de Owen,^ que bombea,
’
a aS’ua‘
canal^an establecido varias procesadoras de algodón, así como otras
12
meridional
del
río
Fuerte.
w
as
1
________ i '
Poco. después,
'
■ cons-Nacdvidades de procesado y servicio. Una vía férrea, propuesta
pasaron a ser propiedad de Benjamín r.~
Comunidad de LosJ^e a hacía mucho, llegó a la zona en 1961 y ha contribuido
truyó un ingenio azucarero en la ^pequeña conJ?
Uesde^ < exportación de vegetales de invierno, en especial tomate, a
Mochis en 1903, manejado por su Lmtec ugar
los Estados Unidos. El mayor crecimiento ha sido del algodón,
esta época la compañía dominó toda la tierra
e
¡trigo
y arroz, ’aunqueX estos dos últimos volvieron a disminuir
-e
cuenca
......... 1......... , .
cuenca inferior
inferior hasta
hasta que
que su
su tierra y derechos de agua lueron^a^
después
de alcanzar su máximo,
expropiados en 1938, pasando la propiedad a la recientemente;
creada sicae (Sociedad de Interés Colectivo Agrícola Ejidal). Sin? ( La propiedad de, la tierra en el distrito de riego se distribuye
embargo, por un decreto presidencial de 1943, se obligó a los ejF ’proximadamente por igual entre la propiedad ejidal y la pil­
datarlos a continuar cultivando caña de azúcar para el ingenio ada. Los ejidos han hecho una importante contribución al cre­
lo hicieron así bajo protesta, puesto que argumentaron, no sin cimiento de la mayoría de las cosechas comerciales de la región
razón, que la cana de azúcar era un cultivo relativamente 'poca ", están muy lejos del comportamiento tradicional de produc­
provechoso en una latitud tan septentrional.13 En la época de h es de cosechas de subsistencia que muchas personas asocian
expropiación, se continuaba bombeando del río el agua para n los ejidos, una idea derivada de los logros ejidales en las
irrigación. No obstante, en 1947, empezó a funcionar el Cairi mas agrícolas más pobres de la región central. Sin embargo,
>$ ejidatarios siembran una mayor proporción de cosechas de
sicae (posteriormente Canal del Fuerte), que potencialmente pe
día irrigar 40 000 hectáreas, cerca del doble de la zona entonce Asistencia que dos agricultores privados, y menor proporción de
M’go y tomate. En donde los riesgos son grandes, como con tosujeta a irrigación. La comisión agrandó posteriormente este
ates perecederos que se exportan a un mercado de invierno
nal. Otro canal, previo al trabajo de la comisión, se constrir
ny
competitivo e inestable en los Estados Unidos, los agrien el banco derecho para irrigar unas 25 000 hectáreas. Bajo 1
itores privados parecen más dispuestos a asumirlos, y el que
comisión la zona de irrigación ha aumentado considerablement
diferencia del ejidatario, puedan hipotecar sus tierras los
hasta unas 230 000 hectáreas y, como puede verse en el cuactó
conirte en mejores sujetos de crédito.
v-2, igual ha ocurrido con la zona irrigada, excepto por
Í1 futuro de esta zona parece prometedor. La salinidad ha sido
sionales retrocesos debidos a inundaciones.
f
problema
serio que dio origen a la necesidad de mejorar el
El paso más importante en este desarrollo fue la construcció
Aliaje
de
la
zona para combatirla, pero ya es un problema su­
de la presa, con núcleo de tierra, Miguel Hidalgo que se con
truyó entre 1953 y 1956. Un objetivo principal, aparte de 1 dado. Hay varios planes para aumentar la zona de irrigación,
irrigación, era el control de inundaciones que habían sido grí “nentar la generación de energía y mejorar el control de inun­
ciones. Uno de esos planes, el proyecto El Sabino, tiene el
ves en la cuenca inferior. Por desgracia, se redujo el tamañ
Opósito de irrigar otras 60 000 hectáreas. Su primera etapa,
que se planeó originalmente para la presa antes de construid
[ar unas 40 OOQ hectáreas, la mayoría de las cuales no se
12 La historia del desarrollo de la cuenca puede encontrarse en Mari
tivan actualmente, beneficiaría a unos 3 700 agricultores, que
Gilí, L<? conquista del valle del Idievle, México, 1957.
roximadamenfe 2 000 de ellos provendrían de fuera de la zona,
n Hiidem, pp, 15G-ÍLL Centro de Investigaciones Agrarias, Las distritos.!
embargo, al igual que ocurre con el proyecto Grijalva, la
riego del naracsle: tenencia y aprovechamiento de la tierra, Instituto
onización es costosa; el proyecto requiere una inversión inicial
Investigaciones Económicas, 1957, pp. 78-81.
X-JVt Ai X
---------
A
X
________ _ __ ____ __ 1AVOM.V4
A
A«,
tUUG
114
cuadro
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
iv-2
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
115
Lerma-Chapala-Santiago. El río Lerma nace en el estado de Mé­
xico, cerca de Toluca. Al dejar la cuenca de Toluca, el río des­
ciende abruptamente hasta la cuenca de Guanajuato. Después,
con un descenso menos pronunciado, cruza la importante zona
*1955-6
1952-3
1959-60 1962-3
1965-6
agrícola del Bajío en Guanajuato, el norte de Michoacán y Ja­
I lisco, desembocando en el Lago de Chapala. Toda esta zona está
50.3
28.6
48.7
12.7
12.2
Algodón
en la densamente poblada Mesa Central. De Chapala sale el
26.3
55.7
0.9
Arroz
22.3
.
río Santiago, cuya subcuenca es muy diferente. Desciende a través
11.2
11.0
7.7
8.4
Caña de azúcar
21.5
7.1
1.7
de
cañadas en un territorio montañoso escasamente poblado,
Cártamo
15.4
15.1
0.5
0.4
desembocando en el mar en Nayarít. Además de los cinco Insta­
Sorgo
17.8
32.1
1.5
17.6
0.9
dos mencionados antes, en la cuenca se encuentran partes de
Trigo
51.1
31.7
37.3
'
21.0
26.3
< Aguascalíentes, Durango, Querétaro y Zacatecas. Los 126 700 kmOtros
178.4
47.8
60.3
156.3
152.1
representan
el 6.6% de la superficie
de laue xa
república,
oupcxjuwc
república,pero
pero en
TOTAL
í ________ ~~ /o
-----d|.196O,
aproximadamente
de
6.7
millones
de
personas,
casi
el
18%
1960
2.7
v-L
wauiMw,
cu
ioyo
r
* 1 de junio de 1952 al 31 de mayp de 1953, e igual período Paia---------- la rvnhl^ríAn
\de la población total vivía. .n?-.'-.
aquí. "q'M.
T „ ____
otros añbs.
c La parte superior de. la cuenca, que incluye la mayor parte
fuentes: Comisión del Río Fuerte, Boletín Valle del Fuerte, núm, 6, ma
y abril de 1963, p. 23, y núm. 7, mayo y junio de 1963, p. 15.
Wde la superficie drenada por el río Lerma, es muy distinta de las
JEotras cuencas hidrológicas desarrolladas por otras comisiones,
dól^Webido
, a illnn^
***X-U1JL1M4.ÍVO
_________
_________ de dólares, o sea más o menos 13 500
a sU larga historia como una zona agrícola rica y como
per familia, la cual es de
aún46.5
másmcostosa que la delaiproyecto
Gr|||^
^n
q
e
la
del
proyecto
^^centro
industrial
con altas tasas de crecimiento económico. La
costosa U
C0íltrwcuenca
porcuenta
fami ia,
a
.r
Santiago, contiene muchas
jaiva, y además esta cifra no tiene en
cualquier
* f • ,— — —rnT1tr~cuenca inferior, drenada por el rio______
ri° Santiago,
bución hecha por la presa Hidalgo para el control de todo
comunidades indígenas aisladas y atrasadas. En la cuenca supe­
río. El trabajo hecho aparte de la inversión en recursos hidrái rior, el Bajío es una fuente importante de frutas y vegetales,
licos ha sido poco, aunque la comisión ha construido algún' Muyendo la valiosa cosecha de fresas que se exporta casi en
carreteras locales, ayudó en la planeación urbana de Los Moct
u totalidad a los Estados Unidos en una época en que los cui­
hizo instalaciones de agua potable y de aguas negras en c dadores norteamericanos no tienen producto para enviar al
misma ciudad y proporcionó servicios médicos a sus emplead;’ cercado. Aunque recientemente su producción comercial agrícola
También ha construido, en ,1o que es un desarrollo interesa^ a sido superada por el rápido crecimiento en otras reglones,
que podría generalizarse en México, una serie de instalación ita zona continúa siendo una importante fuente de alimentos
con dinero ejidal, Todas las personas que reciben irrigación
ara la ciudad capital. Las industrias manufactureras en toda la
gan una cuota de 100 pesos anuales por el agua, pero los ejk lenca han experimentado elevadas tasas de crecimiento en años
tarios también pagan cuotas de cooperación por una cantil
tientes (9.6% al año). Por último, las comunicaciones y otros
similar durante 10 años. Estas cuotas se gastan a través de| rvicios sociales generales están así de desarrollados como en
comisión en instalaciones para la educación y otros servicios^
ilquiér otra zona de la república. El producto regional fue
instalaciones públicas en el ejido. No obstante, en esta zona/
ti el 16% del producto nacional en 1965 y estaba creciendo
mayoría de la inversión complementaria de la inversión enj n'mayor rapidez que el de la nación.
cursos hidráulicos ha sido hecha por otros organismos; no pare Esta breve descripción de la cuenca indica cuán diferentes
*que esto haya disminuido de alguna manera la eficiencia de
n sus características de las que hemos estado discutiendo, y
inversión de la comisión en la región.
ti claro que los objetivos que consideramos para los otros pro­
ntos no son congruentes para éste. El potencial para el des­
El Proyecto Lerma-Chapala-Santiago
j
tello de los recursos hidráulicos es aceptable. El caudal anual
el Santiago arroja al Pacífico es de aproximadamente 6 000
La cuenca hidrológica más grande que se encuentra del
ilíones de metros cúbicos. Ya hay proyectos que generan energía
dentro de las fronteras de la República Mexicana es laj
idroeléctrica de ambos ríos, pero el Santiago, en particular,
Comisión del Río Fuerte: Superficie cultivada por cosechas
principales, 1952/3-1966/7, años seleccionados
(miles de hectáreas)
v
116
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL | PolÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
117
regional dentro de la cuenca, financiado por un préstamo del
ofrece campo para mucho más. En la actualidad se irriga menos
Banco Interamericano de Desarrollo. Es posible que las objecio­
del 3% de la zona cultivable de la cuenca; se han propuesto
nes económicas al empleo de una comisión de una cuenca hifuturos proyectos de irrigación, pero en su mayoría son pequedrólogíca en el planeamiento para la Mesa Central estén más
. ños. Aunque el agua es un importante recurso escaso en la '
que compensadas por las ventajas políticas de ser capaces de
cuenca, los problemas compartidos de recursos hidráulicos difE í hacer algún planeamiento.
cilmente parecen constituir un punto de atención central para j
la planeación económica de la región a través de la cual corre el
Lerma. Esto en parte se debe a que, al igual que ocurre en j OTRAS POLÍTICAS DE DESARROLLO REGIONAL
la cuenca del Balsas en menor grado, lo que hay en la cuenca i
es tan diverso, y aun más debido a lo que está fuera de la 4 Aparte de los proyectos de las cuencas hidrológicas, el gobierno
cuenca. Exceptuando Guana]uato, Aguascalientes y Nayarit, me- I j. federal ha tenido poco que constituya una política de desarrollo
nos de la mitad de cada Estado se encuentra dentro de la cuenca, í ¡■regional. Una crítica que se escucha con frecuencia sobre su proy con frecuencia las partes de los estados que se omiten com- í ¡ grama de exenciones impositivas para estimular la creación de
parten problemas con las partes que se incluyen. El Valle de ¡ ji industrias manufactureras, bajo la denominada Ley de Industrias
1 Nuevas
y Necesarias,
es x que entre
una larga lista de criterios
X1Í-111V3
ruiu,visto, domina lad
Ir
’
■ ------ -----México no está en la cuenca, pclv
peroWXJllU
como
hemos
/’-1
(llle deben ser conisderados
-- por la
' Secretará
’ ~ *
ría de Industria y CoCentral.
Como
una
unidad
para®
economía de toda la Mesa C___________
~ —
’* para decir si otorga una exención nn
-----»
*
rvronrfo
incrcio
_
............
para
decir
ai
otorga
una
exención,
no
se menciona el estael desarrollo regional la cuenca parece ser a la vez muy grande 1
Lblecimiento de la industria de que se trate.14 La Secretaría
........___ •’.................................. “_____________________________ico
_____ baj_________ * ~~jo el sistema
quena porque los problemas que tiene los comparte por igual |
“ec , sl.una industr« merece protección
licencias
de importación. Sin embargo, en algunas ocasiones
con 7asPzonas que la rodean, ‘es muy grande porque presentalde hcenc»s de tmportacwn.
Sin embamo
Pn
todas las dificultades relativas a planeamiento de una gran reo podrían tenerse en cuenta factores de establecimiento cuando se
gión, pero es muy pequeña para resolver los problemas maw |;hacen negociaciones directas entre empresas individuales y el
fiestos en la Mesa Central. Sin embargo, está claro que el pla-| t gobierno, al igual que ocurre cuando una empresa propiedad
neamíento de las cuencas hidrológicas es una forma aceptabtí f de extranjeros trata de obtener un permiso para funcionar. Una
políticamente de obtener la cooperación de los gobiernos estataq t oferta de establecerse fuera del Valle de México podría ser
les y de los organismos gubernamentales que podrían rehusar^ Fim argumento útil en las negociaciones para una empresa; el
[gobierno podría ser capaz de hacer que el establecimiento fuera
ceder autoridad a otros organismos,
A
............................
conLa Comisión del Lerma-Chapala-Santiago se creó en noviem® Valle de México fuese
una condiciónc para "da^almur
fpsinnpq
0
as
fcesiones
particulares.
Pueden
encontrarse
ejemplos
en
los
que
bre de 1950, No es una comisión como las otras, y ha trabajador
,
,
íla
presión
política
ha
influido
claramente
en
el
establecimiento
con un presupuesto mucho menor. Consiste de un representante!
de la Secretaría de Recursos Hidráulicos, otro de la Comisión] í de una empresa. Pero no es posible saber con cuánta amplitud
Federal de Electricidad y de uno de cada uno de los cinco estadoy |-y con qué energía se ha aplicado tal presión.
principales: México, Guanajuato, Miclioacán, Jalisco y Nay^ .. Hay otras dos excepciones a Ja relativa falta de actividad del
rít, además de consejeros técnicos. También está en la Comisión gobierno federal en el campo del establecimiento industrial. La
un representante del Distrito Federal, que, aunque no está en h «primera fue el establecimiento de un complejo de industria pe­
cuenca, obtiene parte de su agua a través del acueducto dd cada en Ciudad Sahagún, Hidalgo, en una antigua y agotada zona
Lerma. La principal función de la Comisión lia sido el estijj ¿minera en donde había mucha desocupación. Aquí la inversión
dio de los problemas de la cuenca y hacer recomendación# ^principal ocurrió durante los años cincuenta, en su mayor parte
a otros organismos del gobierno de México. No obstante, en kon fondos de la Nacional Financiera. La segunda excepción ha
ocasiones se ha permitido realizad pequeños proyectos de in$
gación, control de inundaciones y de abastecimiento de agua e|
1J
cooperación con las autoridades locales. De 1963 a 1967 su pera L Para deralles adicionales véase Timotliv Kiuís, AMv/r.v; Lí(LíV;
Trade Policio since JMO, capítulo ¡v.
sonal estuvo trabajando en un amplio estudio de desanol®
*
-
- - - ------- VT
118
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
sido la política para las zonas de México fronterizas con los Es­
tados Unidos.
¿POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL
.erizas mexicanas son suficientes para hacer este proyecto
niy atractivo para las empresas norteamericanas que realizan
peraciones con mano de obra intensiva, y entre otras, han exfronterizas occidentales (esto es,
resado un considerable interés las empresas electrónicas. Sin
mbargo, no está claro qué es lo que esto significará en términos
se permitía a estas zonas importar con
e ocupación a largo plazo, y la cantidad de mano de obra
,
•■
i
_
___________
....
.
aplicada
en proyectos realizados o planeados era (hasta el otoj
del país. Quintana Roo, parte aún más ;aislada
de la Península
po
de
1967)
de unos pocos miles. El éxito del programa depende
de Yucatán que limita con Belice (antes Honduras Británica), ’
p un grado considerable del deseo de los Estados Unidos de
también recibió concesiones semejantes. Ciertos pueblos que es-4
(obrar derechos
derechossólo
sólo
la cantidad
valor real­
agregado real­
por por
la cantidad
de valorde
agregado
taban situados más al oriente a lo largo de la frontera con los •
mente
en
México,
y
no
es
sorprendente
encontrar
que el pro­
Estados Unidos recibieron concesiones menos generosas durantes
faina
ya
ha
provocado
alguna
oposición
en
los
Estados
Unidos.
los primeros años de la posguerra. La persistencia de estas cond
Jodemos
suponer
que
a
medida
que
crezca
el
programa
crecerá
cesiones a la importación a medida que han mejorado las comu­
oposición,
y
por
tanto
es
dudoso
el
efecto
que
este
programa
nicaciones, y en una época en que muchas personas se han pre-‘:
?yede esperar tener en los problemas globales de la ocupación
ocupado en México por el problema de si el mercado es lo j
México.
$fjiMéxico.
suficientemente grande para permitir la explotación de las eco-:;
arte esías políticas limitadas del gobierno federal para
suficientemente
gránete
para
pctmiuiia
Mr
a'"
de"
eliminar
®.^P
................
...............
..
j
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]
íerar el establecimiento de la industria, la mayoría de los estanomias de escala, refleja
la imposi
pi
obstante,
las_ lia
concesiones
privan a los xaon fahri-®
----- ---------------- i
las concesiones. ., _No__________
__
cantes mexicanos de un gran mercado para algunos productos,1 tos tratan independientemente de atraer a la industria. Esto lo
ya que las zonas tienen ingresos per capita muy altos, y hacen; bcen ofreciendo exención de los impuestos estatales, que en sí
mucho más fácil la- introducción de contrabando al resto deb tósmos no son muy importantes, a las industrias que se están
|tableciendo, a menudo durante un periodo considerable. Ésta
país. A los manufactureros mexicanos se les da un subsidio del
al 30% por los envíos en ferrocarril a todas las zonas fronterizas^ | en la actualidad una práctica tan generalizada que las dife(sea que se admitan o no libremente las importaciones). No obs^ pcias en este respecto entre las leyes estatales pueden escasamentante, las zonas que reciben concesiones para sus importaciones^ Kr ser un factor importante para influir en el establecimiento
fedustrial. Incluso antes de que su práctica se generalizara, pa­
siguen tendiendo a ser dominadas por las mercancías de
ite poco probable que la exención de impuestos haya tenido
Estados Unidos.
Las zonas fronterizas originan otros problemas para el gobiern jucho efecto sobre el establecimiento. Un estudio de las exenciono mexicano. Los ingresos son más altos en ellas, y esto se re-i p en el Distrito Federal concluyó que sólo para un pequeño
fuerza por el hecho de que muchos residentes han sido absor-j |upo de industrias eran los impuestos un elemento significativo
bidos por la economía de los Estados Unidos y cruzan diariamente »los costos, y que la atracción del mercado parecía ser una
15
la frontera para ir a trabajar. Los altos ingresos y la posibilidad; Byor influencia sobre el establecimiento. Zacatecas ha tenido
íyes
de
fomento
industrial
que
incluyen
exenciones de impueseventual de ingresar a los Estados Unidos atraen una conside^
g
desde
1930,
Colima
desde
1934,
Aguascalient.es
desde 1935,
rabie inmigración neta y causan un problema continuo de|
16 Estos estados no
¡papas
desde
1939
y
Tlaxaca
desde
1940.
empleo. Debido a que la zona es visitada por millones dé|
norteamericanos, la elevada desocupación es molesta para el| ib experimentado una industrialización de importancia.
gobierno mexicano y desde 1961 ha existido un programa paral iptro medio utilizado por los gobiernos estatales han sido los
mejorar las diversiones ofrecidas por las ciudades fronterí?| ¡fiques industriales. Un número de ciudades, dentro de la rezas. Desde 1966, se ha permitido a las empresas importar ma-í Bn central, pero fuera del Valle de México, los tienen. Por
tenas primas libres de derechos, sin que se les exija añadir uní Egeneral esto ha implicado hacer disponible fácilmente, para las
porcentaje mínimo de valor interiormente, siempre y cuando todaj K Gustavo Romero Kolbeck y Víctor Urquídi, La exención fiscal en el
la producción a la que se da esa ayuda sea reexportada. Losj Igrito Federal como instrumento de atracción de industrias, México, 1952.
diferenciales de salarios entre los Estados Unidos y las ciudades!
BKrnesto López Malo, Ensayo sobre localización de la industria en Me~
unam, México, 1960, p. 216.
U. 1U.
4111 X
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--------------------- ------------------------------.
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JL
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'i;
POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL.
CARACTERÍSTICAS FISICAS
Los 18 000 km2 de la cuenca comprenden cuatro zonas geográ­
ficas distintas. Siguiendo la terminología usada comúnmenie en
México, las describiremos como la Tierra Fría, la Tierra Tem­
plada, la Tierra Caliente y la Gosta Sierra. La Comisión definió
su zona de actividad de tal manera que se extendía más allá
de la cuenca hidrológica para incluir dos cordilleras montaño­
sas dentro de las cuales está la Meseta Central al norte, y al
sur la Sierra Madre del Sur.1
La parte más alta de la Mesa Central se conoce como la Tierra
Fría debido a su clima inhóspito. Con frecuencia las tempera­
turas descienden a menos de cero grados y caen más de I 200 mm
1 Como ocurre con la mayoría de las zonas geográficas, hay muchas for­
mas de definir los límites de la cuenca del Tepalcatepec. Ene estudio
utiliza la definición de la Comisión del Tepalcatepec que ;c basa en la
cuenca hidrológica. En el curso de su trabajo, la Comisión agrandó la zona
para que incluyera algunos municipios que no están propiamente cu la cucn.ca hidrológica. De los 32 municipios de Michoacán que están, total o par­
cialmente, en la cuenca, sólo 27 tienen más de la mitad de su huí bono
dentro de la cuenca, tal como se la define por la Comisión del Tepalca­
tepec; los otros cinco municipios no se incluyen por lo general en las
.discusiones del efecto de la* Comisión sobre la región, práctica seguida en
este estudio. Se puede encontrar una lista de los municipios incluidos
en la cuenca en el cuadro v-2.
122
LA CUENCA DEL RIO TEPALC
Fíg. 3. La cuenca del río Tepalcatepec
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC
123
de lluvia al año (cuadro v-1). La Tierra Fría es un cinturón
volcánico que está en el límite meridional de la Mesa Central,
Está a más de 1 700 metros de altura y aproximadamente al
norte de Uruapan, la ciudad más grande de la cuenca. El punto
Lmás alto de esta zona montañosa está a más de 4 300 metros
¡sobre el nivel del mar y está formado por un cono volcánico
tllamado Tancítaro. La actividad volcánica más reciente formó
el Paricutín, entre 1943 y 1952, y tuvo amplias repercusiones en
;toda la cuenca. Como resultado de los volcanes (en la región
'hay cerca de 800) y de los densos bosques, hay un suelo muy
[permeable que descansa encima de una capa de roca volcánica
[impermeable para formar una gran zona natural de depósito
[para las fuertes lluvias que son comunes en esta zona. Las gran­
ides reservas subterráneas proporcionan aproximadamente 1 824
|millones de metros cúbicos de agua al año a los arroyos y ríos
p¡un gasto casi constante de 57.8 metros cúbicos por segundo. A
Ipesar de estos abundantes recursos hidráulicos, en otras caracteBjsticas físicas la Tierra Fría es la parte más pobre de la cuenIta. Como es una zona montañosa de densos bosques, su suelo
■es delgado y poco fértil debido a la acción volcánica y los siglos
ule empleo de técnicas agrícolas primitivas. El suelo es tan per­
meable que no hay arroyos superficiales y la irrigación es extre­
madamente cara.
B Hacia el sur y el occidente de la Tierra Fría está la Tierra
■Templada que va desde los 1 700 hasta los 650 metros. Gran
fcarte de esta tierra tiene una pendiente pronunciada e incluso
ftn algunas zonas cultivadas el suelo es pedregoso y desigual. Por
general la zona es más seca y más caliente que la Tierra Fría,
|| partes de la región son a la vez cultivables e irrigables, ha­
biendo a esta zona mucho más importante que la Tierra Fría
®esde el punto de vista agrícola. En el noroeste de la. cuenca
3fiiay varias aldeas que están en lo que fue en algún tiempo lagos,
abeto que desde hace mucho se drenaron e irrigaron. También
■p posible la irrigación en pequeña escala cerca de los centros
wbanos de Uruapan y Ario de Rosales.
«Los principales ríos de la cuenca tienen su origen en le, trroijBS de la Tierra Templada. El mismo río Tepalcatepec está
WOrmado por la unión del Itzícuaro y el San Jerónimo que irrigan
Sí' parte noroeste de la cuenca. Sus caudales son controlados por
Mps presas de almacenamiento, una de las cuales fue construida
■rcr la Comisión, en tanto que la otra ya existía y fue mejofl|da por ésta. El Tepalcatepec corre hacia el valle conocido
Homo la Tierra Caliente. Aquí se le unen, por su banco iz■ferdo sus tres principales tributarios, el Cancita (Los Bancos),
124
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPECLA CUENCA DEL RIO TEPALCATEKEC
i
el Marqués, formado por la unión del Cupatitzio y el Cajones,'
tuna vez que se han limpiado de piedras. El clima libre do heladas
y el Casilda (La Farota). En el extremo sureste de la cuenca,
[ permite dos ciclos de cultivo al ano.
el Tepalcatepec se une al río Balsas en el punto en que el
k Al sur de la Tierra Caliente está la Sierra Madre del Sur
río dobla hacia el sur, para correr hacia el Pacífico.
v i (Costa Sierra) que se eleva a 2 500 metros. El clima de la zona
Los tres tributarios principales tienen un caudal combinado f en estas montañas es muy parecido al de la 'Tierra Templada,
de aproximadamente 43 metros cúbicos por segundo, cerca de; Lpero como hay menos árboles que en la Mesa Central hacia
tres veces el caudal del Tepalcatepec. Aunque el volumen de esteij f.el norte, su suelo está más erosionado y los rendimientos agrí­
caudal no es grande, cuando se le compara con el caudal de otrasj colas son menores. Unos pocos ríos, el más importante de los
cuencas hidrológicas, su efecto económico es importante debidaj [■cuales es el Otates, descienden hasta el banco derecho del Tea la constancia --de
corriente
que eliminó la necesidad
de consd
44.
— - la
—
— -. .. _ .
apaleatepec
el *“
verano
caen lluvias
lluvias torrenciales
torrenciales ei
en
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f
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U-- “en en
truir grandes presas de almacenamiento para regular
el i abasted®^^^^
*1C'K Z c,.Viul
> ^durante
' *■ VC1
quequecaen
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erra
as
con
amiento de agua para electricidad y/o irrigación. Además, los® .
? ' ^
diciones naturales impiden el almacena
Ien
SU
íerT
neo
cambios repentinos en la altitud o lo largo del Cupatitzio pro® , °
^ de aguas.
porcionan un medio geográfico natural para la localización d® \
SOCIOECONÓMICA DE LA
REGIÓN ANTES DE 1950
tres series de turbinas hidroeléctricas. Estas mismas características®
______
_____
geográficas habrían hecho difícil, si no imposible, la construcción®^.^
~
XXCAJi
J.UUUUU1UU
producido
de las presas necesarias para controlar las aguas si la corriente®,.,. mrencias en el ambiente y en su historia______
hanJ --«diferentes patrones de asentamiento en las cuatro partes de la
no hubiera sido constante.
«cuenca, cuyos orígenes son anteriores a la llegada de los espawñoles.2 En la época de la conquista española, pueblos de habla
CUADRO V-l
ptarasca vivían en la Tierra Templada y en partes de la Tierra
Datos meteorológicos en la cuenca del Tepalcatepec
tKría, en tanto que en la Tierra Caliente y en la Costa Sierra
|se encontraban grupos dispersos de tarascos así como gente de
Costa
■ Jediabla predominantemente náhuatl. Los tarascos se sometieron a
T ierra
Tie rra
T ierra
Sierra
Fría
ríos españoles sin guerra y en consecuencia no se les sujetó a esTemplada
Caliente
iclavitud. La cultura tarasca casi no se alteró, excepto por algunas
^adaptaciones de su religión-anterior al cristianismo. Por supues­
Temperatura (°G)
15
10
15
26
Promedio
to, como todos los indígenas del Hemisferio Occidental, los ta­
21
18
21
32
Promedio-mayo
rascos sufrieron las epidemias de enfermedades europea;’.s redeu15
12
15
25
Promedio-enero
■■il'temente introducidas, pero, a diferencia
i. de los náhuatl de la
Precipitación pluvial
|Tíerra Caliente y de la Costa Sierra, i
no
fueron virtuahncnte
(mm)
^exterminados.3
1
270
1
390
1
240
510
Promedio
Parte de la devastación en las zonas meridionale.
..es____
d _ la cuenca
A
debió a la enfermedad. Hasta que la Comisión drenó los pan­
fuente; G. Agujrre Beltrán, “Problemas de la población indígena de 1
os cercanos a Apatzingán, la Tierra Caliente siempre fue
cuenca del Tepalcatepec”, Memorias del Instituto Nacional Indigente
toco
salubre, y sólo la inmunidad de los lia hitantes a las enfervol, 3, México, 1952.
aedades usuales había permitido la supervivencia. La iutroducEstos ríos corren hacia la Tierra Caliente, que tiene una ai
AAguirre Beltrán examinó con mayor detalle la influencia tic los conplitud de unos 72 km y unos 120 km de largo.' El valle
instadores sobre la población de la cuenca. En esta sección sólo muy esapáticamente se sugiere su colorida exposición a este respecto. Véase
a m , 400 metros sobre el nivel del mar y sin irrigación sed
’roblcmas de la población indígena en la cuenca del Tepalcatepec”, Me­
una tierra desnuda con suelo rocoso; las altas tempera turase
nas del Instituto Nacional Indigenista, vol. 3, México, 1952. parte 2.
las escasas lluvias contribuyen a su apariencia esteparia,
* Aguirre Beltrán calculó que la población de la parte, meridional de h
parte de la cuenca tiene tierras llanas fértiles, parcialmente
enea se redujo de 50 000 a sólo 4 000 personas entre 1520 y el iinnl del
$o xvi, en tanto que la de la Tierra Fría y la Tierra Templada dismiviales, que son muy adecuadas para la agricultura mecanizr3
iyó de 58 000 a 30 000.
; LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC.
126
127
. que da oportunidad a la población de las zonas adyacentes de
ción de nuevas enfermedades alteró este equilibrio precario. El ?
: vender sus artesanías y comprar provisiones. Dentro de la ciudad
esclavizamiento de la población nativa para trabajar en las plan—
? hay también una industria de artesanías de madera que se estaciones de cacao y en las minas de oro y cobre de la Costa ?
p pecializa en lacas. Hay varias fábricas de trementina. Dos fáSierra y en los límites occidentales de la Tierra Caliente tam-j
p bricas textiles de algodón, hilados y tejidos que envían a México
bien produjeron una gran disminución de la población.
d
sus productos para ser terminados datan de principios del siglo,
En los primeros años del siglo xvii se trajeron esclavos negros.;
L aproximadamente, y fueron las primeras industrias de la cuenca
para trabajar en las minas de cobre y en los ingenios azucareros^
Ique aprovecharon la energía hidráulica del Cupatitzio. Existen
de la Tierra Caliente y de la Tierra Templada. A medida queF
: otras actividades en Uruapan, como plantas embotelladoras, empre­
aumentaba lentamente la población, el mestizaje eliminó viró
sas de construcción, agencias de automóviles y fábricas de tortitualmente a la población tarasca pura de las partes inferioresj
? lias, para hacer frente
las Uk,
necesidades
de la población de
la
___ a— --KI
uc id
de la cuenca. En el siglo xix Apatzingán
obtuvo
, noloI^u^ft-----------------1- Reyes y Ario de Rosales
de la cuenca.
En elnotoriedad^
siglo xix Apatzingán obtuvo
ciudad y zonas irurales adyacentes. Los
cuando se firmó allí la Constitución de 1814; esto provoc Jr son otras cju¿a¿es je mercado importante en la zona,
ataque armado
porarmado
parte de
españoles
quienes destruyeron^
ataque
porlos
parte
de los -—
españoles
quienes
> Las cosechas comerciales de la Tierra Templada incluyen agua­
1
1«
>4 es
/4pc
ta mayor píte de la población’ en* su búsqueda
de-4
los- ret~
y una pequeña cantidad de café, pero la principal cosecha,
mexicanos.
, j 175 OOóS'ComerC^a^’ durante varias décadas, ha sido la caña de azúcar. La
Hacia 1900 la población había aumentado a mas
e
1| irrigación y el drenaje precedieron al establecimiento de la Co­
personas y a pesar de un retroceso durante la Revoluci
n,
au
< misión, y hay varios ingenios azucareros establecidos hace tiemtó a más de 300 000 habitantes hacia 1950 (cuadro
v).
1. po, especialmente en la parte noroccidental de la cuenca. También
embarco, la población de la Tierra Fría disminuyo ligeram
se cuitivan cosechas alimenticias en la tierra irrigada.
Esta atea. continuó dependiendo, como hoy en día, e
Desde que se estableció la Comisión, la Tierra Caliente se ha
cultura de subsistencia, siendo el maíz, con mucho, a co .j Converq¿o s¡n duda en la zona de mayor importancia económica
de importante. LasTtécnicas
as técnicas
primitivas.
Se usan
más
son son
muymuy
primitivas.
Se usan
ara­ ard’« de la
cuenca. A principios de siglo, había ya dos sistemas de
dos, no todos de metal, tirados por bueyes, pero se emplea pocoj
; irrigación funcionando en la Tierra Caliente. Pero, debido a su
o ningún fertilizante artificial. Un sistema de rotación de dos|
(aislamiento y al bajo valor de su producción agrícola, la región
años con un período de reposo después de cada cultivo sigue!
|no
tenía importancia económica hasta que, en 1907, Dante Cussi,
siendo la práctica general. En la Tierra Fría, los únicos produc-|
un
emigrante italiano, se estableció allí. Estableció las haciendas
r
tos importantes que no son de subsistencia son los bosques del
;
de
Nueva Italia y Lombardía bajo un contrato de colonización
pinos que poseen comunalmente las aldeas. La madera se usal
jcon el régimen
de Porfirio Díaz.
A pesar de las graves perturlocalmente para leña y techos de tabla delgada, y se vende a losS., .
j híirmncc - Ir.
x.. ■ -__ _ r_
'
¡
ac
aserraderos para hacer otros bienes de construcción. Se colectas *ones de la Revolución mexicana, que emnp/A Xi ioiV
C"SSI
resina para hacer trementina y brea. Además, las varias comufterm,nrt ln,K {.terminó en 1915 una serie de trabajos de
> ■irrigación,
- J'°’-incluidos
dn
el
contrato
de
colonización,
algunos
de
los
cuales
se
siguen
nidades de la región se especializan en diferentes productos,
uc coionizacior
—
■
’
’
“
lorcionan
un
amplio
ejemplo
de
la
■jlos.
Paracho,
por
ejemplo,
es
muy
actualmente,
Proporcic-;f
'
han hecho así durante siglos. Paracho, por ejemplo, es muy con<$
UIliaa<a que los Cussi llevaron a la región. Durante los
as
y
otros
instrumentos
musicales
de
cuerdas®,
>
años
f
4z
cido por sus guitarras y ’
’
‘*'
u\entes’ ^os Cussi aumentaron sus propiedades bast? cwm
comunidades
producen
vestimenta
y
frazadagB^
en tanto que otras (
f hectáreas de la tierra más rica de la Tierra Calknt¿ fueron el
de lana.
apropiadas por el general Lázaro Cárdenas, en una de las más
La Tierra Templada, más accesible que la Tierra Fría y
famosas medidas de reforma agraria de su administración;5 los
saludable que la Tierra Caliente, ha tenido los principales cei|
jCussi vendieron la tierra que les quedó y otros activos a las nuetros de población. Uruapan tiene el mayor mercado de la cuente
fras comunidades ejidales que se crearon para trabajar colecti­
4 Las cifras de Aguirre Beltrán difieren de las del cuadro v-2, debidcri| vamente la tierra. La agricultura comunal se concentró en los
±
-
- JL--------------
--O”
las diferencias en las definiciones del tamaño de la región. Sus región^
fueron determinadas por características culturales, en tanto que las usada E1 Salomón Ecksein, El ejido colectivo en México, Fondo de Cultura Ecoen este estudio se basan en las de la Comisión del Tepalcatepec queSf! Húmica, México, 1966, pp, 157-63.
fundamentaron en consideraciones geoeconómicas.
*2CUADRO V
rio
oo
Población en la cuenca del Tepalcatepec, 1900-1960
Superfi.,
r. ? ,
cié de la
Población
unidad3 ----------------- :--------------------- --------•------------------*)
(km
1900
1930
1950
1960
CUENCA DEL
Densidad de
*población
1930
1960
214 278
308 95S
424 436
8-1
18.8
35256
8 707
43 887
7 480
3 314
63 067
15 283
6 246
119 411
Apatzingán.
Buenavistac
Gabriel Zamora11
La Huacana
Parácuaro
Tepalcatepec
Zaragoza6
Jilotlán, Jal.f
6 038
806
713
211
1 648
370
714
50
1526
3.8
3.2
2.8
15 240
5 962
5 347
9 139
8 145
6 030
11295
5 742
9 502
7 427
7 572
19.8
38.4
19.8
37.5
10.4
30.7
21.1
23.1
5.0
TIERRA TEMPLADA
6 370
86 246
TIERRA CALIENTE
623
543
402
■ 435
524
753
Ario de fosales
Cotí ja
Nuevo Urecho
Peribán
Los Reyes
Tancítaro ,
-t*
Manuel M. Diéguez, Jal.f
Quitupán, Jal.
Valle de Juárez, Jal.f
TIERRA FRÍA
Charapan
N. Parangaricutiroj
Paracho
Santa Clara
T angamandapio
COSTA SIERRA
Aguililla
Arteaga
Churumucok
Tuníbiscatío1
.-
3&2
9 779
15 487
9 109
6119
4 881
3 088
10 737
7 789
625
•365
208
1 528
102
431
278
460
257
8 582
1 630
3 935
I 390
1 627
43 270
8 696
5 095
8 377
11505
9 597
12 430
6 445
5 985
109 954
15953
7 929
6 472
5 034
11 047
11 152
3 &1O
171 103
19 668
12 384
5 096
4 860
16 533
14 481
. 4 241
30 975
14 100
7 895
17 073
11 360
15 040
15142
7 826
2.4
11.4
7.1
204 229
16.2
32.1
24 236
16 035
5 186
7 288
19 298
16 232
13.3
14.3
29.3
20.1
14.8
24.1
5 178
13.1
38.9
29.5
12.9
16.8
36.8
21.6
14.7
37.0
3.8
3 702
4 170
5 225
16.8
6517
3 532
4 992
11 793
4 448
4 077
13 721
6 553
41 509
4 003
56 923
35 575
3 849
4 058
6 885
13 324
7 459
24 862
8 004
11 808
5 050
10 924
17 176
9 406
33 279
12 984
14 389
5 906
5 516
4 167
13 464
21 177
12 599
43 873
16100
12 570
8 428
6 775
37.4
89.3
102-7
125.7
51.2
97.8
58.3
103.9
3.4
19.4
.
23.2
29.5
1.8
50.0
16.7
12.1
22.1
. 17-1
9.5
14.3
36.4
6.5
37.6
31.5
25.2
-22.4
16.3
47.3
24.7
31.8
13.4
20.7
33.1
31.0
37.3
54.0
9.7
48.4
46.0
48.8
. 37.1
37-8
3.7
9.4
2.3
6.1
5.1
9.9
3.2
6.1
4.2
31.8
24.0
—14.5
42.7
23.3
23.3
33.9
a La superficie de los municipios y regiones es la de 1960.
b Las densidades de la población se basan en las
superficie de 1930 y 1960 respectivamente.
c Buenavista era parte de Tepalcatepec en 1900.
/I Z”' _ 1.
-I
.
11
Gabriel Zamora era parte
hasta
1955.
A de Uruapan---r — - -e ------------- ’
"
Zaragoza era parte de Parácuaro
hasta 1942í
Jilotlán de los Dolores, Quitupán y Valle de Juárez, Jalisco, se crearon
después de 1900.
g Tocumbo era parte de Tingiiindin. en 1900.
h
Ziracuaretiro era parte de Taretán en 1900.
í
Manuel M. Diéguez, Jalisco, era parte de Jilotlán de los Dolores hasta
1939.
i Nuevo ParangaricutirG formó parte de Uruapan en 1950; los datos para
______,
______
Paranugarlen tiro, son_ de antes de. 1943,
cuando
se incorporó a Uruapan debido a la desaparición de su capital por la acción del volcán Paricutín.
l Churuniuco era parte de la Huacana en 1900.
1 Tumbiscatio de Ruiz fue creado con partes de Aguililla, .Arteaga y Apatzingán cu 1955.
fuente: México, Secretaría de Industria y Comercio, Dirección Cene-ral de Estadística, 2, 5, 7, 8, censos de población
(1900, 1930, 1950, 1960): Jalisco y Michoacán, México.
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC i. LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC
177 200
22518
TEPALCATEPEC
Cambio
en la pob ¡ación,
1950-1960
(%del
cambio)
rf
)—i
rio
o
1
LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC
rLA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC
130
cultivos que habían sido lucrativos para los Cussi: maíz, arroz,
huertos de cítricos, así como ganado. El Banco Nacional de ■
Crédito Ejidal proporcionó ayuda financiera para todas estas ,
operaciones. Problemas internos de administración llevaron a la ,
desintegración del sistema colectivo de trabajo y a la acumula­
ción de una gran deuda con el banco. Sistemas modificados que
se basaron en grupos más pequeños no resolvieron estos proble- :
mas. Por último, en 1956, se dividió la tierra y ganado entre los .
ejidatarios.8
Las tenencias de los Cussi no eran las únicas tierras mejoradas
de la Tierra Caliente en la época en que se formó la Comisión.
La Comisión Nacional de Irrigación calculó que en 1939 se_■
131
por supuesto, que la nación en general, tal como lo evidencian
cifras de la fuerza de trabajo. Esto es cierto para cada zona
climática, aunque existían notorias diferencias entre ellas. La inj dustriahzación de la Tierra Templada estaba más avanzada que
otras 7°nas. Había una diferencia similar en las tasas de
7 ^alfabetismo regionales (cuadro v-9), en la cuenca la proporción
A personas alfabetizadas no era muy diferente al de toda la
1 nación, excluyendo la ciudad de México, pero el promedio de las
, : zonas montañosas en particular y también de la Tierra Caliente
;■ estaban por debajo del promedio nacional.
En resumen, sería injusto caracterizar a la cuenca en los años
íní;Cr^?fCS, a. 1.a ^ormación de la Comisión como una zona estan..u
--j
con­
t
tinuado sin la Comisión. Por otra parte, había grandes zonas que
estaban atrasadas económicamente, en tanto que el desarrollo del
recurso más importante, la tierra fértil pero sin irrigación, era
j
i obstaculizado por las condiciones poco salubres y las malas copmunicaciones, así como la falta de inversión en obras de recursos
ObidráuHcos. El encomendar el desarrollo íntegra! de un área
Una
pea era una ostra™en“ ^rológb
;,as
a otras 10 000 hectáreas adicionales. Estos. nuevos proyectos se
localizaban en la parte occidental de la Tierra. Caliente en tie­
de propiedad
privada.
Sin----embargo,
de J
rras ClL
UlV^iLVI..^
--- ----- U - el rápido desarrollo
*
la zona se vio obstaculizado por la falta de comunicaciones a e
*cuadas
generalmente
o por las
insalubres.
condiciones
Alacranes
ponzoñosos, malaria y vitiligio o "mal del pinto" 7 eran las prin^Í^ZÍÍta
asumió rápidamente trabajos para remediarlos, pero no todos j
los nasos en el desan olio esperaron la realización de esa acción, |í
Ix^LF
*.P
,
los particular,
pasos“ -- --,
-------..r;i . ,
PROGRAMA DE INVERSIONES DE LA COMISIÓN DEL Tr.PAI.CATC PE
rque
En
en IS10 se inauguró
un ferrocarril
unía
a
.portación
de
li-l
«,
U ruapan y Apatzingán. Éste se uso para la exp
deis Presidente Miguel Alemán formó 1
a Comisión del Tepalcamones, arroz, azúcar y las principales cosechas que no eran
6
19
en
época
anterior
la Comisión.
i ij? ?
^'7 ten¡endo como objetivo “el desarrollo integral
subsistencia en la época
anterior
a laaComisión.
■'...... i
Estaba investida
"'La
ha sido una región de importancia eco-|A«cursos naturales de la región”. Estaba
■’ de
’
LaCosta
CostaSierra
Sierranunca
'
q
-j— — --------- ---- j^aia el "armonioso
gesarrollo de la agricultura, educación, salubridad y bienestar,
las otras zonas, continuó dependiendo incluso más de una agri-^
programas de comunicaciones que producirían beneficios, "no
cultura primitiva.
»d
p° para los habitantes de la cuenca, sino también para la ecoLas cifras de 1950, mostradas en los cuadros, v-2, v-4, v-a, v-oj
8
pomía nacional".
1
v v-7 fv se discuten con mayor detalle en la última parte de este»
capítulo') resumen la población, la fuerza de trabajo y las prfrjt omisión ha trabajado en la cuenca del Tepalcatepec
duducciones industrial y agrícola tal como eran poco después queW
dos décadas, y ha construido obras a un costo de
casi
la Comisión empezó a trabajar. La zona era mucho más agrícola,I 1'lon“ de Pesos- Se esperaba que estos gastos mejoraran
la comisio e p
j
condiciones productivas en la zona y presentaran la infraes• Para los detalles de la expropiación y la historia subsecuente de estoOnictura social para el mejoramiento de las condiciones de vida
ejidos véase Emilio Romero Espinoza, XntwedenfM de la. re!orm“ “P «■? elevación de tos niveles educativos y el desarrollo do
cornu«XVomía,' Zíel^^l^XiZ^AÍ^a-iones más eficientes con el resto le la
resto de la nación. En 1960 la
1950 V Tavier Hernández Segura, Estudio de las condiciones económic«®omision del Tepalcatepec fue absorbida por una nueva
t orga1 íl kJ 1 1 X- 1 1 JL H
V —■
*« ■
”-------------- - .. . _
A
■ó-
agrfcoíL deV1fc ^edades d^Nuáa 'italia, tesis, Escuela Nacional de Agri-W
"“^Énferm'edad6^
la misma.
provocada por un hongo que causa manchas
™
^epec 1947 a 1952.
autor fue secretario de Recursos Hiofficio de la Comisión del Tepaka-
132
LA CUENCA DEL .RIO TEPALCATEPEC
LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC
133
linó a la irrigación y drenaje (cuadro v-3). Para facilitar la cons­
nización, la Comisión del Río Balsas, que ahora realiza funcio­ trucción y administración de los trabajos se establecieron tres
nes similares en una zona mucho mayor que abarca ocho esta- . ^tos de rie80, Dos de ellos> los distritos de Cupatitzio-Caiones
dos. No hubo cambios en la organización del trabajo dentro, ',y del Tepalcatepec, están localizados en la Tierra Caliente en
de la región aunque se hizo obvio que debía dedicarse relativa-. ¡ tanto que el tercero, el Distrito de Cotija-Quitupan, está ¡ocamente mayor atención a otras zonas de la cuenca del río Balsas: tizado en la esquina noreste de la cuenca y es independiente
que a la zona del Tepalcatepec. Este cambio se manifiesta en , ., los otros dos. De acuerdo a un cálculo reciente de la Comi­
las decrecientes asignaciones para el programa de inversiones y ¡ sión del Balsas, los canales pueden proporcionar agua a 92 000
operación de la Comisión en la zona del Tepalcatepec (cuadro ■hectáreas en los dos distritos de la Tierra Caliente, en tanto
v-3). En el curso de esta sección examinaremos los gastos de ,que 11 500. hectáreas adicionales son irrigables en el Distrito de
la Comisión para determinar los costos de los proyectos que.se. !. lego Cotija-Quitupan. Además, se construyeron un número
están considerando, para después poder comparar los beneficios; i, pequeños proyectos de irrigación a través de la cuenca, que
que produjeron. De acuerdo con los objetivos de ja Comisión; ; favorecieron a 6 000 hectáreas. Cuando se tiene en cuenta la
del Tepalcatepec, los gastos principales eran inversiones “econó­
uhLT E estaba bajo irriSación en 1947, aproximadamente
micas” (cuadro v-3) para irrigar nuevas zonas de cultivo en
; 15 500 hectáreas, la adición neta a las tierras irrigadas de la
Tierra Caliente y para mejorar y ampliar los sistemas de
■ x--...... ....... 94 000 hectáreas.
(.cuenca fue de aproximadamente
ción existentes en otras partes de la cuenca. Los gastos de irr-p La mayor parte del área irrigable adicional está domi
----¡.nada por
pación y drenaje se complementaban con carreteras para llevarqcanales construidos por la Comisión. Parte de la tie
6
—
“erra en DE’
■ producción
,
se promovió eljdmn lÍ-? Lotija-Quitupan fue reclamada
__
ía creciente
al mercado. TambiénTambién
se promovió
mediante canales de drecooperación con la Secretaría de Agrig i naje. Además, una pequeña proporción de la tierra, en
c especial
desarrollo agrícola en
108
’
,
,
proyectos de irrigación más pequeños, depeáde'i de bomcultura. nura.
Los esfuerzos para mejorar las condiciones de vida y elevar fletas para abastecer agua para irrigación.
nivel ele alfabetización también fueron importantes metas de la^
Los gastos totales de la Comisión en el desarrollo de sistemas
inversiones "sociales” de la Comisión. Se construyeron sistemas
¡de irrigación hasta 1965 fueron de 180 millones de pesos, a pie­
agua potable y drenaje-de aguas negras, así como escuelas. U|
mos . corrientes, o aproximadamente 240 millones de pesos a
campañas sanitarias y educativas se financiaron con subsidtosy
. resultó en un costo.......
.precios de 1960? Esto
por hectárea
de.......
tierra
r...............
Las mejoras urbanas fueron parte de los esfuerzos para mejoras ^irrigable de aproximadamente 2 550 pesos, a precios de 1960 I a
el ambiente, aunque sin duda también tuvieron un efecto bft anversión promedio en México por hectárea de tierra irrigada
néfico en la estabilidad política de la región. La mayoría de lqg
**
ue de aproximadamente 5 230 pesos (a precios de 1960) hasta
programas de construcción han sido terminados, reflejando .i|
1958?» Las favorables características físicas de la zona explican
importancia que se da a otras partes de la cuenca del río Balsa|
ate costo promedio relativamente bajo por hectárea para meen que ahora está actuando la Comisión.
♦: r.
Los gastos administrativos y de operación remplazaron
H¿JSt°S §aSt,°S lnclll>en Ios clasificados como costos del desarrollo hidrainversión económica y social a medida que aumentaba el pj
por.,la comlsión 7a TJC- según sus memorias, fueron utilizados para
•
sonal de la Comisión y a medida que las tareas, cambiaban d
La. r'ra- de Cana eS CUya PrinciPal finalidad era la irrigación. Los
la construcción a la operación de un sistema de irrigación,
fcmie m1V¡dlra0IL e"tre a Comisión dcI Tepalcatepec y la Comisión FeC - ZA ■
Lúa CÓLUC.J. LOO jgwraA
Inversión económica
----- ------------ - -
'
*
---------------------
■
-
Éstas son las inversiones de la Comisión del Tepalcatepec qiij
permitieron a los campesinos aumentar su producción y cambig
a cultivos más valiosos. Incluyen las inversiones en irrigación^
sistemas de drenaje, la red de carreteras y las estaciones agrícoW
experimentales que se describirán posteriormente.
1
1] Irrigación. Más de la mitad de la inversión total se
£1 .E eCtr,C’dalSegUnJa finaIi<lad principal para la cual se utilizaban los
OMos, y la parte financiada por la Comisión del Tepalcatepec provee agua
fatwlórt"3 del ..D1Síl'lt0, d? Rleg° CuPati‘2ÍO-Cajones. Puesto que la planta
gdioeléctrica está completamente separada de los sistemas de irrigación no
I» A'Sari°« ¿en“ 3 en cuenta en eI presente análisis. Véase pp 211 ss
L°X ' °P\ Cit” PP' 161 Taks “niparaciones deben usarse con
Función porque la mayona de los proyectos de irrigación incluyen ei
Mo de grandes presas (costosas a la vez) de almacenamiento, que por
LTmZSe necesMaban ™ la Tierra Caliente. En 1965 el costo fue dc
gas dc 10 000 pesos por hectárea.
134
LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC ;
LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC
1
¡orar la productividad de la tierra usando el agua disponible
ofrecet la mayoría de los aldeanos es su mano de obra. La
para irrigación en la cuenca del rio Tepalcatepec.
Comisión gastó aproximadamente 50. millones de pesos en estas
2] Comunicaciones. Las carreteras fueron el segundo concepto ,
carreteras secundarias hasta 1965.
en importancia en el presupuesto de la Comisión; casi una cuarta
Varias comunidades de la Tierra Caliente nunca hubieran pe­
parte de la inversión tenía este fin. Además del sistema de cadido prosperar sin esta red de carreteras secundarias. Desde un
rreteras, se incluyen los gastos para cuatro pistas de aterrizaje y ppunto, de vista económico, puede considerarse a ésta como una
muchos puentes pequeños que se construyeron debido al sistema < j
inversión suplementaria necesaria a los trabajos de irrigación
de canales. Dos carreteras, el puente-acueducto de Barranca Hondebido a que reducen los costos de transporte para el mayor
1
da/ y la sección de carretera construida encima de la presa
producto agrícola. No obstante, otras carreteras, en especial Las
Piedras Blancas en el Distrito de Irrigación de Tepalcatepec, nop
de la Tierra Caliente, no tenían, como propósito primordial, una
se incluyeron aquí porque las cifras no eran lo suficientemente^
finalidad económica; en cambio, estaban destinadas a facilitar la
detalladas para separar el componente de carreteras. .
y comunicación entre las comunidades que previamente sólo ha­
La carretera más importante construida por la Comisión, tantop
bían tenido contacto marginal con otros centros cíe población.
por su costo como por su importancia económica, fue la carre-j ■
Más adelante examinaremos el efecto de estas carrereras sobre
tera Uruapan-Apatzingán. La construcción. ,de esta carretera em-jj
el desarrollo continuo de la zona.
TT
el ; í
pezó tan pronto como se c™ U creó la Comisión. Hasta entonces
'* “
1-53] El desarrollo agrícola. La Comisión del Tepalcatepec
vaa.a traja sj
único medio de comunicación entre la Tierra Caliente y lap; j bajó
relacionada estrechamente con la Secretaría de Agricultura
zonas —
de --------tierras ------altas? Ganadería
era una para
carretera
tierra las
quetécnicas
requería|
ayudarde
a mejorar
amícoL
las. Sus
proximadamente un día de viaje (dependiendo de la ép 1 esfuerzos se dir¡gieron hacia el desarroilo de t
___
un
número
de esdel año) para del
llegar
a Apatzingán
^Uruapan,
en Uruapan,
vez de U en vez ; paciones experimentales para agricultura p-anadería v aviadtt
año)
para llagar adesde
Apatzingán
desde
hora y media que se emplea en la actualidad. Esta carretera, dej...
P aoricuituia, ganadeiia y ariculu
en la Tierra Caliente, una estación apícola, un puesto zootécnico
una unídad de inseminación artificial
aproximadamente 100
linces ha constituido la principal ruta entre la Tierra GabentJ tación de piscicultura y un péquTño/n^eníó ^uctre/ Tí /
u nación.
construcción
costó
o menos 2^ )venión
arero. a my el„1resto de la nación.
Su Su
construcción
costó
másmás
o —---------------------en
millones de pesos.
£.millones de pesos indicados en los informes de la Comisión de­
También fue parte del programa una red de carreteras secufrj
pido a que la Secretaría de Agricultura proporcionó una parte
darías, incluyendo algunas transitables en todo tiempo con su­
perficie de terracería. perficie
Se pavimentaron
más pavimentaron
o menos 50más
*kilóme
de terracería.'Se
o menos 50
taiciÓXientoV/^as'lArÍ" En”íños LXnUT'ÍLdÍ
tros de carreteras en la Tierra Caliente, ademas de la carr j Wnado una
mencionada antes. Sin embargo, un mantenimiento inadecuado^
hizo
desaparecer
vestigio
en'h'cuenca.
L
.____
-------------todo
------- o pavimento en muchas nrt^ d6n^ p^Za^le^ífoLV/ón
’
Además, se construyeron en la cuenca cerca de 1 600 km de ca-,
rreteras no pavimentadas; de éstas, aproximadamente 100 *tiene
.Inversiones sociales
superficie de grava, 300 tienen terracería terminada, y el resto
*son caminos vecinales. El programa de carreteras depende, e
^radón' deri¿° personas que se beneficiarán d|fcb f"'/Ias. inversiones sociales se hacen para mejorar el
parte, de la cooj
Se espera que los aldeanos contribuí ®blent« dondí viven las personas. No aumentan directamente
rectamente con ellas.
"efectivo o en especie, con ,cerca
., brTT dlsPonibfes para el consumo, pero podrían conyan, en (--------- x
. de una tercera par®
1
llbuir a la may°r eficiencia de los factores de la producción
------------"®
del costo de la construcción de estas carreteras de la . granja a|
mercado” la experiencia ha demostrado que esta contribución «®¡1^le?tando el conocimiento y las capacidades que tienen los
algo menor a ¿ tercera parte y que la ünica ayuda que puedej^i’.
a
.■!
--------- ”O'—-------------------------- *'"■
y o. it.au.; pee tra-
a
'
,
, ®hctívo mediante cosas como programas de sistemas de agua nota-
Estructura con una finalidad doble: paso de vehículos y peatones; «jle 0 ¿e electricidad rural. Una característica común de estas
de agua a través de un abismo.
«aversiones es que no se les puede evaluar sencillamente por sus
11
CUADRO V-3
o
Gastos de la Comisión del Tepalcatepec, 1917-1965
(miles de pesos)
potable
y alcan­
tarilla­
dos
Otras
inver­
siones
Precios
corrien­
tes
Precios
de 1960
*
6
514
1975
4 700
Servi­
cios ur­
1
*
banos
Años
Irriga­
ción y
drenaje
1947
1454
1
1948
2 972
4 380
208
184
177
1471
9 392
1949
6 385
3 865
34
98
397
1049
1950
8 043
5 500
3
156
433
1951
10 448
6 052
64
55
202
1952
16 382
167
397
1953
18 775 t
4 997
r
3 431
280
1954
18 182
3 418
181
1955
21 269
5 447
134
221
530
243
1 379
29 223
35 652
1956
16 423
6 285
161
817
501
2 443
717
27 347
242
2 143
2 379
1958
12 059
10 526
267
2 153
1 539
1877
766
1959
5 789
6 640
377
681
631
1 184
1 182
1960
14 795
3 538
261
467
107
1255
1961
4 141
394
163
72
58
1962
72
2 934
58
1231
1963
259
2 352
92
1 575
1964
480
2 621
250
1965
655
yígricolas
Educa­
ción
Total
Precios
gastos
corrien­ corrien­
tes
tes
Precios
de1960b
416
2 391
5 691
21038
2 091
11483
25 722
11 828
24 602
2 251
14 079
29 284
583
14 718
27 817
2 089
16 807
31765
760
912
18 493
29 034
2 203
20 696
32 493
199
1277
877
24 296
36 444
2 981
27 277
40 916
32
276
604
1 255
24 653
37 473
3 004
27 657
42 039
57
109
560
495
23 002
31 743
2 713
25 715
35 487
3 275
32 498
39 648
31 723
3 224
30 571
35 462
34 309
>8 083
3 982
38 291
42 503
29 187
31 230
3 991
33 178
35 500
16 484
17 308
3 397
19 881
20 875
941
21 364
21 364
5 196
26 560
26 560
273
318
5 419
5 365
5 490
10 909
10 800
628
593
647
6 163
5 978
6 916
13 079
12 687
406
200
715
5 599
5319
8 283
13 882
13 188
420
230
3 020
7 021
6 740
6 760
13 781
13 230
730
1 627
1 546
8 729
10 356
9 838
312 100
76 991
389 091
szo
242
TOTAL
Precios
corrien­
tes 177 305
78 849 3 517
Precios
de
1960^238 260 106 052 4 004
11 53S
6 286
14 655
19 950
12 740
7 464
18 127
26 512
413 159
t T!>n4I,C Se‘°S par:l, hosP'la3esPara control de enfermedades y electrificación
G?-“í ."’dT,de ,nvcra,ón Púwi« de >» Secretaría de la Presidencia, Dirección de inversión l’úhHca
,™',e‘7c
r
cíe
fueml. comisión del a» Balsas, Gerencia del Bajo Rfo Balsas. Departamento de Contabilidad.
90 529
503 688
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC
Comu­
nica­
ciones
T otales
Inversión total
Sociales
Económicas
LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPECLA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC
Aunque la mayor parte de las inversiones económicas se hizo
efectos sobre la productividad. Esto no significa que no tengan
en la Tierra Caliente, la mayoría de Las inversiones sociales so
tal efecto, sino que éste es sólo una parte de las razones que
realizó en otras partes de la cuenca. Como se sugirió en el ca­
llevaron a realizar tal inversión.
pítulo in, el gobierno parece haber utilizado sus programas para
En el capítulo in indicarnos que en México los gastos en in­
disminuir el resentimiento contra las zonas que se beneficiaban
versión social se han restringido para conservar recursos para el
económicamente por las inversiones de desarrollo de la cuenca
esfuerzo de desarrollo. En la cuenca del río Tepalcatepec as­
fluvial.
cendieron al 10% de todas las inversiones de la Comisión hasta
1965. Los gastos proporcionaron un mínimo de servicios a perso­
nas en todas las partes de la cuenca y se concentraron en las g PROGRESO económico en la cuenca del río tepalcatepec
zonas en que el aislamiento cultural y físico era.mayor. Se.iia¡.- ;1950
*11950-1960
960
dado mucha publicidad a los proyectos que mejoran el. bien-:
estar social, pero en último análisis parecen ser una forma poctq : Las.
queque
el trabajo
de la Comisión
afectó afectó el crecas formas
i°rmas enenlaslas
el trabajo
de la Comisión
costosa de demostrar el interés del gobierno en el pueblo. Mu-J i rán^ento cd la Tierra Caliente se describen detenidamente en
chos problemas de evaluación surgen con respecto
al problema;:
""- —
,i ■ el siguiente capítulo. En ese capítulo es posible usar cifras
anís.s anísde Jas inversiones goales; se les considerará cuandox evaluemos el ¡ . tadas para la producción de Ias principales cosechas en la f jc.
<
trabajo de la Comisión.
.
_
Zjj ira Caliente . (esto se explica en el apéndice x). No se pueden
La construcción de escuelas fue la más importante . de estas, , hacer tales ajustes para toda la cuenca; la siguiente descripción
inversiones sociales, aunque representa sólo el 3% de. los gastos- “ general de los cambios que ocurrieron entre 1950 y 1960 se tomó
totales. Se construyeron cuatro grandes escuelas técnicas, varias j í.de los datos del censo, presentados en los cuadros del v-4 al
escuelas secundarias y muchas escuelas primarias. Dos de las es-.’ f V-7. Debe recalcarse que gran parte de la irrigación y del aumen*.cuelas técnicas capacitan estudiantes para el trabajo en la agrí ..to de la producción agrícola que puede atribuirse al trabajo
cultura y una requiere solamente educación hasta el tercer grado.) ¡.••de la Comisión ha ocurrido a partir de 1960 y en consecuencia
para ser admitido. Las otras escuelas técnicas son para la capa-, f no aparece en las estadísticas del censo.
citación de profesores y de guardias forestales.
.
; j Aparte de sus inversiones en la agricultura y campos relacio­
Los sistemas de agua potable, electrificación rural y mejora^ nados en la Tierra Caliénte y su inversión social dispersa en
urbanas fueron parte de un esfuerzo cooperativo con las comtM • toda la cuenca, la Comisión realizó obras de drenaje e irrigaO
nidades afectadas. Se esperaba que los aldeanos de las coinuni-: é ción en las zonas de cultivo de la caña de azúcar de la Tierra
dades que recibían las mejoras contribuyeran, cuando menos, con; ^Templada, en especial en la parte noroeste de la cuenca. En
la mano de obra necesaria para los proyectos, permitiendo que" testa zona la Comisión construyó una presa y rehabilitó otra
un gran número de aldeas se beneficiaran a un bajo costo. Se-¡ durante .los primeros años de sus actividades. También funciona
instalaron, aproximadamente, 85 sistemas de agua potable, e im-3 jun distrito de riego en esta región. La superficie cosechada con
portantes mejoras urbanas en Apatzingán y Uruapan incluyeron caña de azúcar al año en la Tierra Templada
, - m se ha más que
1 duplicado desde que se estableció la Comisión. Hasta ahora la
calles, mercados, monumentos y un parque nacional que enmarca;
las fuentes del río Cupatitzio (el río ele las aguas cantantes) Comisión no ha tenido influencia para aumentar la superficie
en forma muy imaginativa. El consumo de electiicidad estimado^.. - cultivada en la Cesta Sierra, Uno de los proyectos aún no teraumentó dos veces más rápido que el promedio nacional entre/■ minados de la Comisión del Tepalcatepec es la construcción
1950 y 1960.
’’ ide una presa de almacenamiento para capturar y utilizar las
paguas de esta fuente para irrigación durante los meses de seca.
La Comisión también construyó instalaciones sanitarias y prod
por clonó alguna pequeña ayuda financiera para la erradicad ón«E
■oblernos¿Merecimiento
¿Merecimiento de lalapoblación
y deyla de
fuerza
trabajode trabajo
del paludismo, patrocinada conjuntamente por los gobiernos
población
la de
fuerza
los Estados Unidos y México. Construyó varios hospitales y clí-W > .
nicas comunales en la cuenca y en sus alrededores en donde»1 crecimiento de la población, durante la década 1950-1960,
Uüa a °tra ?arte
cuenca- El incremento más ráactúa, hoy en día, la Comisión del Balsas,
’
lhuo
d
140
LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC
CUENCA DEL
LA
pido fue en la Tierra Caliente, en donde la población aumentó
más del doble en la década que siguió a la creación de la
Comisión del Tepalcatepec. Él incremento promedio en toda
la región fue del 40%; el crecimiento más lento ocurrió en las
zonas templadas de la sierra de Uruapan y en las cordilleras
montañosas del sur.
La tasa "natural” de crecimiento de la población de la cuenca
del Tepalcatepec (nacimientos menos muertes) aumentó en cer­
ca de 18% de 1950 a 1960 (cuadro v-4); en ese período fue
mayor que el promedio nacional. Esto fue resultado tanto de
una mayor tasa de nacimiento como de una menor tasa de mor­
talidad que las tasa’s promedio de la nación. Con excepción de
la Tierra Caliente, todas las partes de la cuenca tuvieron tasas
de mortalidad menores que el promedio nacional en 1950. Hacia
1960 incluso la tasa de mortalidad de la Tierra Caliente era
menor que la tasa nacional. La tasa de natalidad también era ma­
yor que el promedio nacional, en todas las. regiones, excepto
en la Costa Sierra.
El crecimiento natural de la población estimado fue mayor
que el dado por los censos de 1950 y 1960. Esto es, se informó que
vivían en la cuenca menos personas en 1960, que lo que se
hubiera esperado por una extrapolación del crecimiento natural
(cuadro v-4). La migración estimada para la cuenca durante
los arios cincuenta fue de aproximadamente el 6% de la pobla­
ción de 1950. Las diferencias interregionales en los patrones de
migración fueron grandes; la Tierra Caliente fue la única zona
con inmigración, que se calculó en casi el 40% de la población j
en el año base. La emigración de otras zonas fue un reflejó J
de la relativa falta de oportunidades económicas en la sierra de
Uruapan.13
Al igual que es cierto para el resto de México, un poco me­
nos de una tercera parte de la población de la cuenca estaba
dentro de su fuerza de trabajo según el censo de 1960. Las
diferencias regionales dentro de la cuenca eran muy pequeñas/
comprendiendo el campo de variación desde un bajo 29% en_ la . .
í ir
Tierra Caliente y en la meseta tarasca hasta un máximo deJ (
38% en la Costa Sierra. En 1960 el promedio para la cuenca^
fue del 31 por ciento.
,í í
1?
':®T
Desde el censo de 1960 es probable que la inmigración hacia la Tierra,®
Caliente haya aumentado como resultado de la creciente prosperidad. Así,®' o
es posible que durante un mayor período la afluencia neta de personases|
a la cuenca como un todo fuera positiva.
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142
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC
Estructura económica
La economía de la cuenca sigue siendo fundamentalmente agrí­
cola. Incluso la Tierra Templada, la zona más industrializada,
tiene una proporción más pequeña de personas trabajando en
la industria que la nación como un todo (cuadro v-5). La fuerza
de trabajo agrícola de la Tierra Caliente creció incluso con más
rapidez que su fuerza de trabajo total, que a su vez creció un
75% durante la década. Este crecimiento fue una respuesta a
las oportunidades económicas considerablemente incrementadas
que resultaron de las inversiones de la Comisión del Tepalcate­
pec. La población de Apatzingán aumentó más del doble en los
diez años que siguieron a la creación de la Comisión. El aumento
de las oportunidades de ocupación agrícola indujeron un creci­
miento adicional de la ocupación necesario para introducir y
conservar una tecnología agrícola más compleja.
La Tierra Fría también experimentó un incremento en la im­
portancia relativa de su fuerza de trabajo agrícola. A pesar de
una demanda creciente de muchos productos de artesanía por
los que es bien conocida la región, la proporción de personas
ocupadas en manufacturas disminuyó casi 20% durante la dé­
cada de los cincuenta. La Costa Sierra siguió ofreciendo pocas
actividades económicas distintas de la agricultura. La minería
aumentó su importancia en años recientes pero sigue ocupando
menos del 1% de la fuerza de trabajo.
Los censos industriales proporcionan una medida de la im- *
portancia relativa de la producción industrial de la cuenca.13
Aunque la producción industrial de la cuenca aumentó de 1950 j
a 1960, su participación proporcional en la producción industrial J
nacional disminuyó. En ambos años representó menos del 1% 1
del total (cuadro v-6), pero en 1960 había disminuido de 0.7 a’i
cerca del 0.2%. De esta producción, más de las tres cuartas i
partes del valor se producían en la Tierra Templada. La par- ®
ticipación relativa de la producción industrial en la Tierra Ca-J
líente casi se duplicó de 1950 a 1960. Apatzingán, la segunda®,
ciudad en importancia en la cuenca, aumentó su contribución ®
relativa a la producción industrial regional desde menos del 10®
a más del 20% del total durante el período. Uruapan sigue®.
13 No se dan cifras absolutas para la producción industrial en cada niu-ÍMa
nicípio debido a lo incompleto de los censos industríales. A pesar
hecho de que tales cifras se proporcionan para los totales de la cuenca,.jfb
sólo pueden proporcionar una idea general del tipo de magnitudes ímpli-áK
cadas más que un cálculo preciso en cada categoría. Probablemente losiK
números relativos nos den más información.
143
\ CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC
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la cuenca del río tepalcatepec
144
la cuenca del río tepalcatepec
14o
parte a casi la mitad. La construcción por la Comisión de un
siendo la ciudad más importante de la región, pero su crecí- ,
de distribución de agua para irrigación, de los ríos que
miento ha disminuido en años recientes y durante la década de :
1960
se
observó
emigración
a
otras
partes
de
la
cuenca
y
vienen
de la Tierra Templada, produjo un aumento en la su­
1950 a
perficie cultivada1 de la Tierra Caliente de, aproximadamente,
de la nación.
En 1960 la En
industria
1960 la industria
más importante
más importante
en la en
cuenca
la cuenca
era era
la larere- ; 42 000 hectáreas a. 109 500 en 1965:- -------la
m superficie irrigada aumen­
finería de azúcar. Aunque no es una industria nueva, represen- : U 1
*tó n■ aprpxlmadamente, 15 000 hectáreas a casi 72 000 en 1960
taba casi la tercera parte de la producción industrial de la cuen­
y a 89 500 en 1965. Así, en sus primeros quince años de opera­
raca. Empleaba una parte muy pequeña de la fuerza de trabajo
ción, la Comisión puede reclamar el crédito por un aumento en
industrial. La industria química era la segunda en importancia.
la tierra cultivada de casi 250% y un cambio considerable de,
Incluidos entre sus productos son la trementina y la brea que, , ■aproximadamente, una. tercera parte a cuatro quintas partes en
junto con otros derivados de la madera, representan cerca deL a proporción de esa tierra irrigada. Sin embargo, según el cen­
75c7 del valor producido por esta industria.14 Más de una ter­
so, la superficie cultivada en las otras tres partes de la cuenca
cera parte de la producción industrial y más de una quinta parte en realidad disminuyó durante la década.
de la ocupación industrial provinieron de los recursos foresta- r El rendimiento agrícola por hectárea cosechada en la cuenca
les de la zona. En una época hubo planes para la construcción; c fue menoL.que el de la nación. Aunque se hizo algún progreso
de una fábrica de papel que sería financiada por la Nacional. Jipara acercar los promedios nacionales-y regionales, en 1960 las
Financiera, el banco de desarrollo mexicano, pero se selección [ curas de la cuenca'seguían siendo un 13% más bajas que las de
naron otras regiones para esta inversión. .
,
■ a .nación. La Tierra Caliente fue la única zona cuyas cifras se
Desde el censo industrial de 1960, se han instalado varias des­ ■■ -acercaron al promedio nacional. La gran importancia de las comotadoras de algodón en la Tierra Caliente para procesar las- sechas de subsistencia explica estos bajos rendimientos. En 1960,
*.crecientes cosechas. Son una fuente importante de' ocupación du f mas del 60% de la superficie cultivada en la cuenca se sembró
rante una parte del año. Podrían, de hecho, constituir la mayan í con maíz, con una proporción mucho mayor de maíz en la Tierra
industria de la cuenca en la época actual. Su papel en la econo-i
. Sierra. En la Tierra Templada
_____ se
____
pFna y en_ la Costa
observó
mía regional se discute posteriormente. Una fábrica procesado^ r una mayor diversidad
en
el
censo
de
1960.
Caña
de
am
1
b, de la Tier#, ^.garbanzo, ---- frutas ocuparon lugares importantes
de bario es otra adición reciente a la base industrial
y varias
en la
Caliente. En
han ocurrido,
pocos de
cambios,
" el“ resto de' la’ cuenca
- - ’------------producción
la región. La agricultura de la Tierra Caliente
en la estructura ----------o magnitud
ele la industria. .,
. J J:.es lazmás vanada de todas las regiones. En 1960 ajonjolí, arroz
(
o___.
?
y maíz fueron
fue lalas
actividad
cosechas
económica
principales.mas
En mapót.
comparación
con otras
Aunque la *.agricultura
-------- .nrnrhirp
nncApoco
másmasdel del1%i/0 dec 1®regiones,
han ocurrido cambios significativos desde esa época
tante de la ——
cuenca,L la—zona
produce
l
producción agrícola de la nación (cuadro v-7).15 Como sucede Como se describirá en el capítulo vi, el algodón, el melón y la
con la producción industrial, esta participación disminuyó d| (sandia han aumentado su importancia a medida que se terminan
rante la última década, aunque no con tanta rapidez. Durant| I las obras de irrigación y se hace disponible el crédito y conoesa década la importancia geográfica relativa de la zona cambi| [cimiento técnico.
de manera impresionante. La proporción de la Tierra Calientg | Según el censo agrícola de 1960, el valor de la producción
en la zona cultivada de la cuenca aumentó del 30 al 43%, y || fanimal vendida en la cuenca fue de aproximadamente el 60°7
V‘dor de las cosechas y de la producción de frutas (cuadro
participación en la producción, de aproximadamente una tercera
f V‘ / %urante los . años cincuenta la importancia de los productos
11 En 1967 se estableció una nueva fábrica de trementina y brea enfjl Animales disminuyó tanto en términos absolutos (a precios cons­
municipio de Paracho. Construida con ayuda gubernamental, es propieuaj ientes) como relativos. El censo de 1960 indicó que había una
[disminución absoluta en el número de ganado en la región. La
colectiva de los miembros de un ejido local y proporciona una v%a
mostración de la continua importancia de los recursos forestales en la iJ
ierra Caliente es la zona ganadera más importante de la cuen­
15 Esta sección se basa en cifras del censo agrícola, a pesar de
tea. Muchos residentes de la Tierra Caliente afirman que la
chas deficiencias de esa fuente. A algunas de ellas nos referimos en||
apéndice I. Aunque se presentan cifras absolutas, quizá los órdene J|| [ganadería ha disminuido a medida que la irrigación usurpaba,
|para el cultivo, gran parte de las tierras de. pastoreo. Sin erntivos de magnitud sean un mejor reflejo de la situación real.
■D
üc UlUl'J V.O wuxvi
.....
i 1___________
—------------------ ----------- -■
.
.
:S
CUADRO V-6
*Actividad industrial en la cuenca del Tepalcatepec
t
1950^ y 1960
Inversión de
capitalA
Número de esta­
blecimientos
Valor de la
producción
1950
1960
1950
*32 324
*100 081
*19 947
5434
715
2 789
609
*140 735
Número
0.7
0-2
0.5
0.6
0.7
0.4
0.8
0.3
Porciento
24.6
■ 12.5
23.3
18.7
23.7
38.8
14.8
8.8
Tierra Caliente
Tierra Tem­
plada
84.8
75.2
81.9
74.8
49.9
47.8
77.1
61.1
19.5
24.9
1.8
1.3
2.1
1.2
5.5
Tierra Fría
2.7
0.9
0.3
2.3
8.6
1.6
4.6
0.3
Costa Sierra
27.7
42.1
40.9
29.0
41.2
46.1
36.5
21.3
6.1
16.8
7.9
20.8
1.5
21.5
3.8
35.8
1960
1950
Número de empleados
1960
1950
1960
tepalcatepec0
municipios
industrializados
Uruapan
Apatzingán .
Otros municipios
70.5
54.7
g.s
9.5
11.4
15.7
43.7
28.8
58.1
21-6
'
9.7
3.2
2.4
46.9
25.3
INDUSTRIAS
PRINCIPALES6
Refinado de azúcar
32.6
30.3
4.3
Productos químicos
19.9
17.0
6.9
Fábricas de hielo
10.8
8.1
25.6
Textiles
7.6
3-0
5.3
Molinos de arroz
1.9
1.4
0.6
27.2
30.2
57.3
Otras industrias
a
Expresado como la parte relativa de la industria en cada región tal como aparece en el censo.
Las cifras para 1950 omiten cuatro municipios de Jalisco. En 1960 estos municipios representaron menos del 01<7
del valor total de la producción en la cuenca.
’ /o
c La cuenca del Tepalcatepec como porcentaje del total para México. Las otras
zonas se muestran en términos de su
importancia relativa dentro de la ai enea.
d Incluye tanto el capital fijo como el de operación.
« No están disponibles las cifras de 1950 para la industria en la cuenca.
* Miles de pesos.
fuente: 1950: México, Secretaría de Economía, y Estado de Michoacán Provecto
de programa de gobierno del estado
de Michoacán, México, 1957, pp. 202-204. Basados en cifras del Censo 'industrial
de 1950.
?*éXtCO’ Secre^ría de Industria y Comercio, Dirección General de Estadística, 7? Censo industrial, 1960, México
19o5. Basado en hojas de trabajo no publicadas para el nivel municipal.
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC LA
CUENCA DEL
oo
CUADRO V-7
Producción agrícola, ganadera y forestal, cuenca del Tepalcatepec, 1950 y 1960
Cuenca del
Tepalcatepec
1950 .
Tierra Caliente
~1950~
1960
~1960
Tierra Fría
Tierra Templada
1950
Costa Sierra
I95O " 1960
1960
1950
1960
agricultura»
49 769
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC
Superficie culti­
vada (hectá­
reas)
Total
1
Relativa5
% de cambio
Valor de la pro­
ducción (miles
de pesos de
1960)
Total
Relativa5
% de cambio
Rendimiento (pe­
sos por hectá­
rea, pesos de
1960)
Total
12 148
Relativa5
como % de la
superficie total
GANADERÍA
Producción ani­
mal (miles de
pesos de 1960)
Total
Relativa5
% de cambio
Cabezas de
ganadoc
Total
Relativa5
% de cambio
45 996
0,8
-7.0
314 648
318437
16 395
35,6
130
3 046
135 969
PRODUCTOS FORESTALES
Valor de la pro­
ducción (miles
de pesos de
1960)
Total
Relativa5
% de cambio
1 517
20,1
a
7 oíal de la producción de cosechas y de frutas.
.Las cifras relativas de la cuenca del Tepalcatepec
proporción total n—>
v
1'
1 ■ ' n as otras zonas las
cifras son la contribución de la región al total de la cuenca,
'
*
~
e Las cifras de 1960 se basan en el censo ganadero realizado por la agenciaPde la Secaría
dería en Apatzíngán (véase el texto).
°
ce ia Secretaría de Agricultura y Ganafven-te: Censos agrícolas 1950 y 1960 (cifras preliminares), excepto en donde se indica otra cosa.
5
i
150
LA
CUENCA
DEL
RIO
TEPALCATEPEC
j
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC
151
bargo, un censo hecho por el jefe de la estación experimental
Funcionan algunas minas de cobre; la extracción y procesado
de ganadería en la zona indicó que esto no era cierto; esta
del bario empezó en 1962.
fuente comparada con el censo de 1950 muestra que la cantidad
de ganado permaneció casi constante en la Tierra Caliente y í
SERVICIOS SOCIALES
disminuyó ligeramente en el resto de la cuenca.16 Probablemente 1
no hubo un cambio significativo en el número de ganado de la |
región, y quizá el valor de los productos animales aumentó en | . La oferta de servicios sociales en la cuenca del Tepalcatepec íntérminos absolutos, incluso si la participación relativa de la pro | ! cluye la mayoría de los elementos esenciales aunque no tan
ducción de la cuenca en el total de la nación disminuyó.
j j abundantes como en otras partes del país. Su sistema de carroperas tiene actualmente cerca de 225 kilómetros de carreteras
La producción de madera también es muy importante en la
í pavimentadas. Una red complementaria de carreteras secundar!.
economía regional. Hay mucha explotación poco científica de <
.as
[ y vecinales se ha construido a través de toda la cuenca. En
los bosques en la Mesa Central, y como en su mayoría es ile­
todos
dos pueblos hay servicio postal y en 16 comunidades hay
gal, no hay informe del valor de los productos forestales de la
oficí: ñas de telégrafos. Las principales ciudades tienen
servicios teleregión. El censo agrícola indica un gran aumento en la pro- ¡
fónicos, incluyendo líneas de larga distancia.
ducción forestal, pero, a la vez, muestra una disminución, en ’
;
Aunque en la zona había menos kilómetros de
carretera pavíproporción, de la producción regional respecto de la nacional 1
___ _—.......
quu
(cuadro v-7). El cambio más importante en la distribución de la Identada por. kilómetro cuadrado
remedio
c^.9ue elya
nacional
en 1958, es poco probable que
producción, dentro de la cuenca, fue el importante incrementoBnac^onal en 1958
fUPer^cambie
pr que las ca­
P(¡
rreteras actuales son suficientes para casi todas ias necesidades
de la producción forestal en la Sierra Madre del Sur. Esto se j! .
arhialpc v rv-> Uov,
—
debe casi exclusivamente a la apertura de superficies consíde-<^Uaíes y no hay planes, por"otr<f i "1
us n su super­
T*
de lata Costa
rabies cíe
UiosraSierra
oiaia aa las técnicas de explotación
„ r comercial.T
J Cn cuenca
también tiene uX/r^-■ ra aunie a °> para aumentar
aría que conecta
£ Uruapan ycon
Apatzingán
iimótríy Apatzingán
Esta producción representó más de la mitad de la producciótw? Uruapan
la ca1^^ errov^ri ■
agrícola en 1960, en comparación con la insignificante produc®? ^42 y es una vía comercial
' ^sta ^nea se terminó
0
U
re
ión
ción forestal en 1950.
jfc otra Mnea, de ^s leyTa cT/U 8 - _
a Guadalajara, que conecta
¡esta región productora
En resumen, la economía de la cuenca del río Tepalcatepec^ ""
' 1 ' de azúcar
’
•con su mercado.
atalajara, que conecta
está dominada por actividades agrícolas. Éstas proporcionan ocu| t Cerca de u^ cuarta parte de la población de la cuenca tiene
pación para la mayoría de la fuerza de trabajo y producen la £gua potable en sus casas; el promedio nacional es de, aproxi­
mayor parte del ingreso regional. La estructura de la producciój madamente, 30%. Sin embargo, la mayoría de esta población se
agrícola y ganadera no ha cambiado mucho en la zona; hub® encentra en las zonas templadas de la sierra de Uruapan. Casi
cambios importantes en la agricultura de la Tierra Caliente, pexfl fedie en la meseta tarasca o en la Costa Sierra cuenta con este
férvido. Durante el período de 1946-1963, se construyeron aprose presentaron después del censo de 1960. Otro cambio fue 3
pmadamente cincuenta sistemas de agua potable en la cuenca.17
incremento en los productos forestales en la Costa Sierra. La cuenj
gtas comunidades- beneficiadas tienen una población en con­
ca sólo provee una pequeña proporción de la producción agr|
feto de, más o menos, 160 000 personas, o sea cerca del 38%
cola, ganadera y forestal de México. En términos de rendimientoj B la población de la cuenca.
monetarios, su agricultura es menos productiva que de la nació|
|3egún un estudio de la Secretaría de Salubridad y Asistencia,
en conjunto. Sigue siendo un pequeño productor de mineral^
& cinco municipios ningún doctor residía en la cuenca en
Ifcl, sino que sólo había 94 doctores ejerciendo su práctica
M La disminución en una tercera parte del número de cabezas de gana.<¡g
|r ella,18 pero once municipios carecían de instituciones médiregistrada en el censo de 1960, no es un buen reflejo de la situación
p.como clínicas y hospitales.
1*■
■ ’-—3
i-,
*
en la cuenca. También es probable que el censo haya subestimado eos»
derablemcnte el valor de los productos animales en 1960, pero no tenerla
disponible información adicional en este respecto. Los métodos de
lección de información para las cifras sobre la ganadería fueron los mis^j
que para la información agrícola y por tanto están sujetos a los mismos
blemas que se discuten en el apéndice I.
-jS
X7
^'México, Secretaría de Recursos Hidráulicos, Agua potable y alcantari­
llo, I de diciembre de 1946 - 31 de diciembre de 1963, México, 1964.
%a información sobre los doctores y los servicios médicos proviene de
^archivos de la Comisión del Río Balsas.
LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC
152
45% entre 1950 y 1960, aumentó con menos rapidez que la de
la nación (excluyendo a la ciudad de México) que ahora es
mayor que el promedio de la cuenca (cuadro v-9).
CUADRO V-8
Educación primaria en la cuenca del Tepalcatepec, 1964
Tierra
Tempiada
Cuenca
del TeTierra
palcatepec Caliente
Número de
estudiantes
matriculados
en la escuela
Total
Relativa
Proporción
de la pobla­
ción en edad
escolar matriculada
en
v
*
escuelas
Proporción
de estudian­
tes en el pri­
mer grado
Proporción
de estudian­
tes en el sexto
grado
Estudiantes/
aulas
Estudiantes/
profesor
Tierra
Fría
CUADRO V-9
Costa
Sierra
Proporción de personas alfabetizadas^
Méxicob
75 529
100
58.7
21 691
28.7
58.3
38 502
51.0
63.0
153
9 321
12.3
54.7
Cuenca del Tepalcatepec
Tierra Caliente
Tierra Templada
Tierra Fría
Costa Sierra
6 044
8.0
1930
1950
24,9
26.0
18.6
31.9
20.5
19,7
42.0
43.0
37.2
48.6
36.7
34.6
*El alfabetismo se define como la habilidad de leer y escribir,
porción es el porcentaje de habitantes mayores de seis años
años en 1930) que estaban alfabetizados.
I
45.2
1960
47.0
45.4
43.0
49.6
41.4
37.8
La
pro-
(de diez
: h No incluye la ciudad de México.
39.0
43.3
47,6
41.2
5.1
3.9
5.8
58
66
57 .
53
66
■ 77
62
55
5,9 .
■ fuente: Censos dze población, 1930, 1950 y 1960.
47.7 % / A pesar de grandes esfuerzos para mejorar los servicios sociaúi les, hay menos disponibilidad de los mismos en la cuenca que
% ;?en la nación en conjunto y la infraestructura social es menos
i completa que en el resto de México. Sin embargo, en la cuenca
p están disponibles servicios públicos esenciales, y con una distri3.6
q : bución geográfica adecuada de manera que ninguna región carece
55 q por completo de los beneficios que estos servicios proporcionan.
. h......
..
.
71
a Basado en el número de niños entre 6 y 14 años de edad en I96C
utilizando las cifras del censo y suponiendo que no ocurren muertes ri
migración,
-I
fuente: Secretaría de Industria y Comercio, Dirección General de Estada
tica, Departamento de Estadísticas Educativas, México.
'41
Más de la mitad de los niños en edad de asistir a la escueg
primaria se matricularon en escuelas en 1964 (cuadro v-8). Cer|
de dos quintas partes de los alumnos de las escuelas priman®
estaban matriculados en el primer grado, en tanto que sólo’4
cinco por ciento estaba en el último año de la primaria. El
mero de estudiantes por aula y por profesor era un 20% mayg
que el promedio nacional de cincuenta alumnos por profesor er
la primaría. Aunque la tasa de alfabetismo aumentó del 48 C
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
CAPÍTULO VI
EL EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
SOBRE LA TIERRA CALIENTE
El programa de inversión, discutido en el capítulo precedente,
tuvo un impacto significativo sobre el desarrollo del medio social
y económico en la Tierra Caliente. Además de un cuantioso
aumento en la tierra cultivada, en producción agrícola y en
fuerza de trabajo a que hicimos alusión antes, el sector industrial
de la región se expandió para incluir nuevas empresas desmo­
tadoras de algodón y hubo algún aumento en otras actividades
no agrícolas. Sin embargo, los principales esfuerzos de las acti­
vidades de la Comisión del Tepalcatepec se dedicaron a la agri­
cultura. La segunda parte de este capítulo trata de los desarro­
llos de ese sector. La Comisión continuó y aumentó el programa
de inversión que se había empezado en el Distrito de Riego de la ¿
Tierra Caliente por su predecesor, la Comisión Nacional de Irri- <
gación, Aunque se siguen haciendo nuevas inversiones en la zona, q
la creación de la Comisión del Río Balsas resultó de un nuevo;
hincapié en los desarrollos de otras zonas cercanas que hasta hace ;;
poco estaban olvidadas; los proyectos que se continúan en la
Tierra Caliente son pequeños en comparación con los realizados j
previamente.
Una discusión de la industrialización y de su relación cong
este desarrollo agrícola se presenta a continuación junto con una.?)
descripción más general de la estructura económica de la regiónó
y de sus perspectivas para el futuro. Estas variables económicas^
*que se relacionan con un desarrollo más equilibrado de la regíón, fueron de gran importancia para quienes tomaron las deci- J
siones como ya lo hemos indicado; es necesaria una discusiónj
de las mismas para facilitar la evaluación que se presentará en |
el siguiente capítulo. Por último, se exponen esquemáticamente.^
las mejoras en el bienestar social.
J
LAS INVERSIONES DE LA COMISIÓN EN La TIERRA CALIENTE
•
1
á
J
Los principales programas de la Comisión del Tepalcatepec en la^
Tierra Caliente se destinaron a aumentar la productividad agrí-3
cola y mejorar las condiciones de vida. Esta región incluye siete 1
•¿
155
municipios que fueron el objeto de la mayor parte de la investi­
gación para este estudio debido a su posición preponderante
en las actividades de la Comisión desde 1947.
En el cuadro vi-1 se presentan por función y por ano los gas­
tos de inversión en la Tierra Caliente, como se hizo en los cua­
dros anteriores para todos los gastos de la Comisión. Casi el 90%
de los gastos en irrigación fueron para obras en la Túrni Ca­
liente. Esta 'inversión en obras de irrigación represen! ó más de
las dos terceras partes de los gastos en la Tierra Caliente.
En comparación con los gastos en irrigación, la construcción
de carreteras en la Tierra Caliente requirió menos de las tres
cuartas partes de los gastos totales para comunicaciones dentro
-de la cuenca. Esta menor proporción es, en parte, un reflejo de
la importancia que se dio a la construcción de carreteras en la
: meseta, parte alta de la cuenca, para proporcionar una cornil. nicación entre las comunidades aisladas de esa región y el resto
? del país. La menor proporción de las inversiones “sociales” que
íse hizo en la Tierra Caliente refleja la necesidad general por
¡ estos servicios en toda la cuenca.1
I Una gran mayoría de los gastos en la Tierra Caliente, al igual
que en toda la cuenca, se dedicó a la construcción de obras que
proporcionaran irrigación para tierras que tenían mala irriga­
ción o sólo eran cultivadas durante la temporada de lluvias. Este
¡interés hacia la Tierra Caliente, que representó las tres cuartas
¡partes del presupuesto de inversiones de la Comisión, produjo
¡im aumento en la producción agrícola mucho mayor de lo que
úe hubiera esperado si no hubiera intervenido la Comisión. Este
[efecto es tema del presente capítulo.
DESARROLLO AGRÍCOLA
Esta sección presenta una descripción cuantitativa de los cam­
bios que ocurrieron en la Tierra Caliente; identifica y mide la
Jarte del cambio atribuible a la intervención de la Comisión.
Truniento en el valor neto de la producción desde la crea­
sen de la Comisión proporciona una medida de los beneficios
Primarios del nuevo sistema de irrigación. Aunque ésta requiere
fin ajuste para tener en cuenta el progreso que podría haber
Barrido sin las actividades de la Comisión, lo consideraremos
asta el siguiente capítulo en donde reducimos el valor neto
1 Cf. Henry Stelner, Criterio, for Planning Rural Roads in a Developing
fymntry: The Case of México, Stanford, Institute of Engineering-Economic
^stems, Stanford University, 1965; capítulo v. Para un estudio més completo
¡Obre las inversiones sociales véase la última sección ele este capítulo.
Cjx
CUADRO VI-1
Inversiones de la Comisión del Tepalcatepec en la Tierra Caliente, 1947-1965
(miles de pesos)
Irrigación
y drenaje
Educa­
ción
Agri­
cultura
Comuni­
caciones
Agua po­
table,
drenaje
de aguas
negras
1
Inversión total
Sociales
Económicas
Servicios
*
urbanos
n
H
o
o
Precios
de 1960
*
Otros
Precios
corrientes
74
1527
3 634
1947
1452
I
1948
1 706
4 303
159
158
69
681
7 076
15 850
1949
3 435
3 726
2
5
241
379
7 788
16 199
109
169
13 080
24 721
1950
7 521
5 281
1951
10 215
5 853
15
591
226
16 900
26 533
1952
16 068
4 820
45
923
50
21 906
32 859
1953
18 375
3 078
23
234.
157
21867
33 238
1954
17 893
2 902
8
84
30
20 917
28 865
1955
19 905
3 588
1
7
93
23 594
28 785
r
>
n
o
g
**
►
1
O'
z
ü
■r
H
hj
>
r
o
w
1958
1959
1960
1961
1962
1963
14 447
9 346
4 172
221
171
557
18 541
2 076
21 508
2 772
56
654
646
20 651
4 586
22 923
897
982
489
116
16 416
17 565
463
456
546
26
10 758
II 296
125
86
476
39
15 888
15 888
129
53
4 420
4 376
205
398
92
I 545
1499
43
167
280
1 985
1 886
180
173
41
39
5 647
3 525
14 045
I 117
4 131
69
844
1964
180
1965
41
95
21
55
31
737
21
23
575
76
TOTAL
A precios
corrientes
158 740
A precios
de 1960
212 430
Incluye
gastos para
h Derla, clon ado con el
fuente: Comisión deJ
50 361
247
4 785
1 991
5 288
3 668
75 004
247
5 456
2 282
6 824
5 594
225 080
hospitales, campañas de control de enfermedades y electrificación.
índice de inversión pública de la Secretaría de la Presidencia, Dirección de Inversión Pública.
Ría Balsas, Gerencia del Bajo Balsas, Departamento de Contabilidad.
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
1957
Cjx
OO
CUADRO VI-2
Superficie
cultivada en la Tierra Caliente, Michoacán, 1949-1950 ¡1964-1965
Proporción de aumento
en la superficie cultivada
Cosechas
1949-50
1954-55
Frijol
Aíaíza
Algodón
587
22 310
12
3 146
256
6 852
7 887
1 100
88 000
500
4 458
1 335
11 661
8 000
1 608
55 292
4 099
8 380
4 552
13 828
10 690
658
79
530
129
131
3 000
553
3 964
2 698
42 317
63 314
105 664
Limón
Melón
Arroz
Ajonjolí
Caña de
azúcar
Sandía
Otros
TOTAL
1959-60
1964-65
7954-55 1959-60
Distribución relativa de las
cosechas (porciento)
796T65 ~1949-50 1954-55 ~ 1959-60 ~7o 64-65
-- 14.2
173.9
87.4
500
- 10.4.
147.8
47.9
20 000
42 000 4 066.7 34 058.3 349 000.0
154.3
166.4
41.7
8 000
2 243.8
42L5 1 678.1
6 000
75.1
101.8
70.2
12 000
52.1
35.5
1.4
12 000
5 000
4 000
—80.4
65.8
466.0
-16.0
4 917.7
409.1
109 500
53.2
149.7
b
n.d.
6 229.1
654.7
7-4
0.6
16.2
18.6
1.7
52.1
0.8
7.0
2.1
18.4
12.6
1.5
52.3
3.9
7.9
4.3
13.1
10.1
0.5
18-3
38.4
7.3
1.6
0.2
1.3
0.2
0.2
4-7
0.5
3.8
2-6
n.d.
4.6
2.7
100.0
100.0
1.4
52.7
158.8; IQO.O 100.0
5-5
11.0
11.0
a Incluye maíz y frijoles intercalados,
b Menos de 100 hectáreas.
fuentes: 1950 y 1960: apéndice i. 1955 y 1965: Comisión del Río Balsas; Secretaría de Agricultura y Ganadería, México.
«Mi
ó»
cuadro vi-3
Superficie irrigada en la Tierra Caliente, Michoacán, 1949-5011964-65
Aumento en la superficie
irrigada sobre la de
1949-50
(porciento)
Superficie irrigada
(hectáreas)
194950
Frijol
Maíza
Algodón
Melón
Limón
Arroz
Ajonjolí
Caña de
azúcar
Sandía
Otros
TOTAL
195455
mo­
do
196465
195455
195960
196465
0
133 1 107
0
a
a
0
2 600 10 204 33 537 12 500
292.5
1 189.9
380.0
12
500 4 099 42 000 4 066.7 34 058.3 34 900.0
256 1 335 4 552 6 000
42L5
I 678.1
2 243.8
3 146 4 458 5 674
6 000
41.7
80.4
90.7
6 852 11 661 13 828 12 000
70.2
101.8
75.1
1 500 1 464 3 331 4 000
-2.4
122.1
166.7
658
79
265
15 368
129
131
1 500
31 515
553
3 964
1 349
0
5 000
2 000
-80.4
65.8
466.0
-16.0
4 917.7
409.1
71 999 89 500
105.1
368.5
- 100.0
6 229.1
654.7
—— --------- r
Distribución relativa de
la superficie irrigada
(porciento)
Proporción de la super­
ficie irrigada cultivada
(porciento)
1949- 1954- 1959- 1964- 1949- 1954- 1959- 196450
55.
60
65
50
55
60
65
0
16.9
0.1
1.7
20.5
44.6
9.7
0.4
32.4
1.6
4.2
14.1
37.0
4.6
1.5
46.6
5,7
6.3
7-9
19.2
4.6
4.3
0.5
1.7
0.4
0.4
4.8
0.8
5.5
1.9
0
14.0
46.9
6.7
6.7
13.4
4.5
0
11.7
100.0
100.0
100.0
100.0
19.0
36.3
a Incluye maíz y frijol intercalados.
1950 y 1960: véase apéndice i. 1955 y 1965: Comisión del Río Balsas; Secretaría de Agricultura y Ganadería.
México.
fuentes:
12.1 68.8
0
30.9 60.7
62.5
100.0 100.0 100.0
100.0 100.0 100.0
100.0 67.7
75.0
100.0 100.0 100.0
qí) d
18.3 31.2
0
100.0 100.0 100.0
5.6 100.0 100.0 100.0
2.2 50.0 50.0 50.0
482.4 100.0 100.0 100.0 100.0
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EFECT° DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
Superficie cultivada
(hectáreas)
49.8
0
100.0
50.0
6S.1 81.7
i—>
co
160
DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPECEFECTO
J
161
j : cipal, cubría más de la mitad de la tierra cultivada y se senii . braba en pequeñas parcelas. El ajonjolí tenía el segundo lugar
j : por la superficie utilizada, y lo seguía muy de cerca el arroz,
. que se había cultivado en la región durante .varias décadas. El
1 frijol representaba una parte muy pequeña de la superficie total,
r. Sólo el 10% de la superficie cultivada, durante el ciclo agrí­
cola de 1949-1950 estaba sembrada con cosechas que tenían un
La situación agrícola en 1950
•
i rendimiento bruto de mil pesos o más por hectárea. Toda esta
f tierra estaba irrigada, y en su mayor parte se utilizaba para
En 1950 la producción en la Tierra Caliente todavía no había !
^limones, que requieren poco esfuerzo para obtener una cosecha
reflejado la presencia de la Comisión en la zona. Se seleccionó.!
[ valiosa. Desde 1943 se introdujeron gradualmente en la región
a 1950 como el año base porque, aunque ya se estaban cons-.»
í melón y sandía, pero no ocupaban una parte importante de
fruyendo varios proyectos, no se irrigó ninguna tierra adicional®
¿la tierra en 1950. En esa época el algodón era un cultivo expe­
hasta 1951 y 1952. Además, la elección de 1950 facilita el usoj
rimental sembrado sólo en una parte de la zona. La producción
de, los censos periódicos de población y agricultura que pro
*®
caña
de azúcar disminuía a medida que se encontraban usos
porcionan la descripción más completa disponible sobre la agri-Stíe caña defe'de
azúcar
disminuí^
para la tierra irrigada. A pesar de la pequeña
cultura de la zona; fue necesario ajustar- estas cifras con loslánás lucrativos&nás
nara Lalucrativos
H^rr«superficie
que
hnwrfkL
ocupaban,
estas cinco cosechas representaban más
datos obtenidos durante la investigación de campo?
í
cultivaron más de 42
una cuarta parte de la tierra TigaX%
una proporción simi-
de la producción en la misma proporción en que aumentó la
producción agrícola en una zona de control. Algunos de los cambios cualitativos en la economía agrícola y en las vidas de los
campesinos que resultaron por estos cambios se incluyen para
hacer más completa la discusión.
. campesinos de sus
cion (cuadro vi-3). Alg ,
irrigada, en tant®osechas principales eran muy bajos Los ce
os. Los costos de producción
Car L Sa±chSaes
no se cultivaba^ aW. En e>a 1950, obtenidos duranteT hrso de uuna investigación de
s cuacuiao <»■<.
que tas
___ __
A m 1907 rip
sunerficiecon
cultivada
se restaron
a losa rendimientos
monimonetarios brutos para
Jámpo,
se restaron
los rendimientos
año sólo se irrigó el 12% cíe.la • superficie
cultivada
maí con ma®Ripo,
febtener los rendimientos netos (cuadro vi-6)? Las cuatro principa­
y el 19% de la cultivada con ajonjolí.
J
les cosechas tuvieron todas rendimientos monetarios menores que
Aproximadamente el 78% de la tierra se sembraba sólo durantá
00$ 350 pesos: el maíz rindió 97 pesos por hectárea; el ajonjolí,
la estación de lluvias (cuadro vi-4), pero, entonces, el cultíy|
$06;
el arroz, 317, y el frijol sólo 26 pesos? i' Los rendimientos
era precario debido a que la lluvia, según cálculos locales, ei'
relativamente
altos del arroz se debieron a sus bajos costos
insuficiente para permitir cosechas lucrativas en más de tres
de
gultivo, una vez que se había hecho la inversión inicial en la
cada cinco años.3 Por tanto, cualquier cálculo de la produedójj
preparación de la tierra. Puesto que esta inversión se hizo en
debería reducirse en cerca del 40% de la producción potencié
|sta región antes de 1940, los costos de cultivo incluían sólo
para reflejar adecuadamente su valor esperado en cualquier an|
el
trabajo de mantenimiento. La cosecha más lucrativa era la sanMás del 70% de'la superficie cultivada se .utilizaba para ciíá
tro cosechas que rendían poco en términos monetarios: hijoj
, Jp Los costos de producción a que nos referimos aquí y en otras partes
maíz» la cosecha
este capítulo incluyen la renta de la tierra, la mano de obra y los costos
maíz, arroz y aj j ”
' *,e icnuiax
'
jonjolí (cuadro Vl-b).
|||e materiales, una asignación para el interés sobre el capital de trabajo,
■ Una descripción más completa del proceso de ajuste y de su signifkacW | administración. Los cargos por los bienes de capital fijo utilizados en la
SJ '¡¡reducción se basan en sus valores de alquiler. Estas cifras no incluyen,
es proporcionada en el apéndice i.
s De la Peña comentó que "de 1942 a 1947 Pa región] experimentó aíra
pago de impuestos, las tarifas de agua, y las primas por seguros, tal
|tno se explica en el apéndice n de la obra de Barkin, Bconomíc Developnativamente un año malo y uno bueno, y antes, un año bueno por
tn the Tepalcatepec Rivers Basin, tesis inédita para el doctorado, Vale
dos malos durante un largo período, según los campesinos. Para el u® geni
fcversity, 1966.
de temporal.., hay quienes tienen la opinión de que dos años malos,
|* Los campesinos continuaron sembrando maíz y frijol a pesar de sus
años normales y un año bueno es la esperanza normal durante un
de cinco años". Problemas y posibilidades de la cuenca del Tepalcatepía |jas utilidades debido al lugar predominante que ocupan en su dieta,
costa michoacana, México, manuscrito inédito, p. 32. Durante la ínves® teto que temían Jas fluctuaciones en los precios de los bienes agrícolas
ción del campo se aseguró que 1950 podía considerarse un buen afú® Kitrolatlos por los comerciantes locales, muchos de ellos recurrieron a los
||tivo$ de subsistencia de preferencia sobre Jos cultivos comerciales.
términos de cosecha agrícola.
162
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EJ
día, que dio un rendimiento de 1 952 pesos por hectárea, siguiendo después el algodón con 1421 pesos.
Los costos de producción de las cosechas comerciales eran re­
lativamente bajos comparados a los costos similares en otras par­
tes de México, La fertilidad de la tierra, poco utilizada antes,
explica este hecho. Sólo se usaban desperdicios animales natu­
rales como fertilizantes. Había pocas plagas o enfermedades de
manera que se necesitaban fumigadores o insecticidas, y no había
vendedores locales de estos productos. El caballo y el buey, que
podían conservarse a bajo costo debido a la abundancia de tierra
de pastos, proporcionaban la principal fuente de. energía, No se- v
asignaba ninguna renta a la tierra utilizada en las cosechas du- ;? k
rante la época de seca, puesto que había mucha tierra vacante <
disponible para siembra y pastoreo.
;j •
El valor neto de la cosecha se convirtió a los precios de 1960,j f
utilizando un índice de precios rurales elaborado por la Oficinaj 5
de Proyecciones Agrícolas del Banco de México (cuadro vi-6.? £
columna 4).6 Después se ajustaron estas cifras para tomar en®:,
cuenta las pérdidas esperadas en las cosechas, sembradas sin la®,
ayuda de la irrigación (columna 6), Como se explicó antes, se lsupuso que en dos de cada cinco años, no habría suficiente pro-®
ducción para garant’zar una cosecha.
- jL
Las cifras de los párrafos precedentes se refieren a los nueveí principales productos de la Tierra Caliente durante el ciclo agrí^ i
cola de 1949-50. Según el censo, el valor de otros productos^
ascendió al 12% de la producción total, aunque la superficie^ r;
dedicada a su cultivo representaba sólo el 1.5% de la superficie^ g
total en la Tierra Caliente. La mayor parte de ella se ocupói
en la producción de frutas (en especial, plátanos, cocos y mangos);
que rinden una cosecha de alto valor y ocupan relativamente £
poco espacio. Al ajustar los totales de los cuadros vi-2 y vi-5 utvj ?.
que apa<j
lizamos los cálculos conservadores de esta producción
tendencia^
recen en el censo, cuyas cifras muestran una clara
basados et
* Debe recalcarse que éstos son rendimientos netos promedio
i. Probable
los costos y rendimientos calculados de la producción promedio,
mente la dispersión de los ingresos reales es muy amplia. Obviamente
es fácil obtener las cifras de éstos sin extensivos muéstreos. Sin embaió
puede obtenerse un indicio por los resultados publicados por el Banco
dal que dan los detalles de sus operaciones relativas al algodón para
año 1961’2. El Banco paga los gastos de vida así como otros costos de pij
ducción, desmota y vende el algodón, paga los impuestos y regresa?
ganancia neta al ejidatario. Casi una cuarta parte de los ejidatarios ti
pérdidas netas, la ganancia promedio por hectárea £ue de 1 529 pesos,
8.5% de los prestatarios hicieron una utilidad por hectárea que ex
a los 4 000 pesos.
T
w
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I
ÍCTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
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CM
164
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPECf EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
Producción agrícola en la Tierra Caliente, Michoacán, 1949-1950
Super­
ficie
(hectá­
reas)
Rendi­
miento
físico
(kgfha)
Frijola
Maíza
Algodón
Limón
Melón
Arroz
Ajonjolí
Caña de
azúcar
Sandía
Otros”
587
22 310
12
3 146
256
6 852
7 887
300
898
2 070
3 951
5 195
I 954
470
TOTAL
42 317
Cosecha
658
79
530
52161
8 082
- Rendimientos monetarios netos en la Tierra Caliente,
J ; Michoacán, 1949-1950
Rendi­
Produc­
miento
Va
ción
Precio mone­
(tone­
Miles
rural
tario
(pesosf (pesos/ de
ladas
pesos
métricas) ton)
ha)
196
19 994
25
12 430
1 330
13 389
3 704
34 322
638
730
244
288
322
1 530
3 167
1 375
348
400
2 078
348
680
905 . 425
28
400
1460
3 233
452
lor
--------- --
143
6 427
38
4 324
532
' 4 659
3 352
959
255
240
í
Reía- q
tino
í
A
0.7
?■ '^vseCfiQ
30,7
0.2
í Frijol
20.7
f Maíz
2.5
22,3 * -i
16.0 ■ 6 ■ Maíz y frijol
Á i Algodón
4.6
alimón
1.2
: Melón
1.1
(Arroz
1
495 20 929 100.0
valor
a la disminución en los productos más valiosos. El
pro
de estos productos se obtuvo suponiendo (pe sus costos' de
ducción eran las dos terceras partes de su valor bruto. Se supuso,¿
además, que la mitad de la superficie plantada con estos pro­
ductos era irrigada, y se calculó que el valor esperado de I?
producción sería el 80% del de una cosecha en un buen añ<
(cuadro vi-6, columnas 4 y 6).
En el resto de la cuenca del Tepalcatepec la agricultura ni
estaba tan cómercíalizada como en la Tierra Caliente. La mayo
pane de la superficie se dedicaba al cultivo del maíz y su rq
dimiento por hectárea era aproximadamente un 20% más baj
que en la Tierra Caliente. Según el Censo Agrícola de 1950/ (
94 000 hectáreas de tierrá sembradas durante el ciclo agrícola.
T Para el resto, de la cuenca del Tepalcatepec se usan las cifras del
so, debido a que el tiempo y los recursos no permitían investigaciones di:
liadas de la' economía agrícola cíe Jos otros municipios.
Costos
totales
pesos /
ha
Rendi­
mientos
mone­
tarios
netos
pesos /
ha
(1)
w
:■
-'1 La superficie del maíz incluía 200 hectáreas sembradas con maíz y fri-j
Taña de
jol. Los productos se sumaron en las columnas 3, 6 y 7, pero no se toma-’- :
azúcar
ron en cuenta en los rendimientos físicos (columna 2).
b Véase el texto,
Sandía
fuente: Apéndice i.
Otrosa
•%
165
CUADRO VlT
CUADRO VI-5
D
~218~
178
W'
191b
290
. 203
1 746
978
1 254
36.3
D
198
219b
W 309
P 2 096
1 314”
s
923
1 281
26
97
Palor
y alar neto de la cosecha
espera—— do de la
Miles
cosecha.
Miles de
Miles
de­
de
pesos de Por­
pesos de
pesos 1960
ciento
1960
O)
(O
(0
15
25~
0.2"
15~
2 145
3 532
27.6
2 285
17
1 421
397
324
317
3
17
1 249
211
2 173
6
28
2 057
347
3 577
0
0.2
16.1
2.7
28.0
28
2 056
347
3 577
206
1 625
2 676
20.9
1 809
146
96
158
1.2
158
1 952
154
80
254
132
2.0
LO
ok.í
7 768
12 792
—_
100.0
—
OTAL
» Véase el texto.
b Promedio.
xz Tierra de irrigación.
~ Cultivo de temporal,
=■ Plantación original,
tez Cultivo subsecuente.
"entes: Columnas:
4
105
10 638
Barkin, Eccmomic Development in Ihe Tepalcatepec River Badn.
Cuadro vi-4, columna 5 y cuadro vi-5, columna I.
Cuadro' vi-4, columna l X cuadro vi-5, columna 2: La columna tres se convirtió a los precios de 1960 mediante el índice
precios rurales del Banco de México, Oficina para el-Estudio de las Progeiones Agrícolas, Proyecciones de la oferta y la demanda de productos
rícelas
endeMéxico
para4,1970 y 1975, México, 1965, cuadro in-34, p. 182.
Derivada
la columna
lMvo
Basada
en una expectativa de mi 60% de la cosecha en condiciones de
de temporal.
166
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC, EFECTO DE LA. COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
!
Í
167
costo por
hectárea que en
el -----resto de la cuenca.
1949-50 produjeron cerca de 37 500 000 pesos como valor de la pro­
• j<
*
A
i ilillUJCXl 111’
También
inducción a precios de 1950. Esto es, los otros 18 municipios del r arcan que la zona superior estaba afectada por el problema
_ _ de
_______ ,—uijiciiid ue
Estado que se encuentran en la cuenca del Tepalcatepec cul­
tierra agrícola, posible },UllDtfú
causas UX
de la
; las pequeñas tenencias --de —
Ibaja productividad
observada
en esta
zona.
diferenciaenen el
el tativaban una superficie 120% mayor que la de la Tierra Ca­
baja productividad
observada
en esta
zona.
La La
diferencia
taliente pero sólo producían un 80% más en términos monetarios.
«maño
de
lás
tenencias
agrícolas
es,
en
parte,
el
resultado
de
las
________
..—ve.,
c&Liit-ítciu
u.e
xas
;. rli (•
•*»<
***
■»•«
**
’ -—
La ganadería era una importante fuente de ingresos para mu­
diferentes características geográficas de las dos regiones. El resto
chas personas en ambas zonas.8 Se usaban más de 417 000 hec­
de la cuenca, descrito
— .-.U.JU1altitud
LLALLA LAVAy
y
en C el capituloA "está a ---mayor
1„
_ *./- i •
táreas para el pastoreo en ]
ganado ascendía a ap_____’
mexicana, no
se encontraban
en las zonas
La densidad
de
18 municipios -sólo había 268 000 hectáreas de tierra de pastoreo,
es más imontañoso
que
la Tierra Caliente.
Lasaltas.
grandes
tenencias
; la de
población
también bajas,
era mayor
en la
de la cuenca
pero había casi 155 000 cabezas de ganado en esta tierra. El
características
las regiones
antes
departe
la alta
reforma
agraria
... ....................
«. -------------------------------------------------------------------------®pues el clima '---------------------------era saludable. También hubo
presión para que
ganado se criaba más..........
extensivamente
en mexicana,
la Tierran»Caliente,
en v
® se repartieran las grandes propiedades que existían una vez que se
donde la tierra probablemente tenía menos demanda para otras
W promulgó lá reforma agraria. El resultado de la reforma agraria
finalidades, que en el resto de la cuenca, en donde las condi- J
7“''“^"' i~ tierra. Había mási®7en la Tierra Caliente fue la división de las grandes tenencias en
clones requerían un uso lj-XCVU? — v — — ___
intensivo,
^parcelas individuales, considerablemente mayores que en otras
del doble de cabezas de ganado pormáshectárea
en, los otros 18
municipios situados fuera de la Tierra Caliente, que en los seis t zonas, debido a que había menos solicitantes de tierra. A algunos
cuitó
que están dentro de ella.
*ir r propietarios
__ ______ todavía no se les expropia su tierra5UyEestán
En la Tierra Caliente se ocupaba en la agricultura una mayoráftvando grandes proDiedadZs 7n
Jerra y este
proporción de la población que en otras regiones. En 1950, se- J® T
._•__ ’ ade
gnnos
ilegalmente,
7 La mayor relación tierra-mano
obracasos
en la Tierra
Caliente
tfue también un reflejo de su oferta relativamente
gún el censo de población, había cerca de 62 000 personas tra%
escasa de mano
pe obra. A pesar de los salarios
bajando
enCUla agricultura y en la
silvicultura en la cuenca del 1
notoriamente más altos que preD2LJÜXIU.V
**
j Vi<rK
1 _ 'i
’
’
-- - >1 ________________
“ representaban, aproximadamen-;®valecen en la Tierra Cal’ t d
Tepalcatepec
(cuadro vi-5), que
Uit>
te, el 70% de la fuerza de trabajo y el 22% de la población. ^><1^ son casi el doble de JoTd' 1 T°S CUaie ,s se ha informado
la Tierra Caliente más de las tres cuartas partes de la fuerza-|B.ciones sanitarias
^.ciones
sanitarias y la falta de
ÍL_ercomunicaciones
.ra í?r*a' ^as nia^as se
condó
v*i
combinaban
Jpara
hacer
el
trabajo
diario
en
de trabajo se ocupaba en la agricultura. En los 18 municipios,]
.........
la agricultura
lo suficientemente
restantes era menor la proporción de la fuerza de trabajo dedi-J poco atractivo para crear una <. .. „ ____ escasez de trabajo. Izas activídacada a la agricultura, debido a que la zona tenía grande$| vdes de construcción, de la Comisión empezadas en 1947, agravaciudades que atraían a gran número de personas a los sectores^ hron este problema; la garantía de un salario fijo atrajo a muchas
comerciales y de servicios. Sin embargo, la proporción no es tatú apersonas de la agricultura hacia los trabajos de construcción,
baja como se podría suponer, debido a la mayor intensidad de, breando de esta manera presiones adicionales sobre la oferta de
mano de obra en la explotación agrícola en la parte de la cuenca I-trabajo durante las estaciones de cosecha. La situación mejoró
situada fuera de la Tierra Caliente. Si suponemos que toda| jen los últimos años cuando nuevas oportunidades de trabajo en
las personas incluidas en estos sectores estaban trabajando sóláj fc agricultura y en la construcción atrajeron a un gran número
tierra cultivada (esto es, no trabajaban en tierras de pastoreo 3 Be trabajadores a la Tierra Caliente y redujeron las presiones
fcobre la tasa de salarios.
en los bosques), entonces cada hombre en la Tierra Caliente
taba cultivando un 15% más de tierra que la cultivada por cadj|
hombre en el resto de la cuenca. Esta relación sería aún may® ^esarrollo agrícola desde 195(9
si pudiéramos hacer ajustes por el número de personas ocupad»
en la ganadería y en la producción forestal.
W pomo potaría esperarse, han ocurrido cambios significativos en
Además, estas cifras confirman que la agricultura en la Tiera ja economía agrícola de la Tierra Caliente desde la iniciación
Caliente usaba la tierra más intensivamente y quizá tenía meng
Los errores en las estadísticas oficiales de la producción agrícola páre­
au
x
o
va a
t
a—
* Cf. de la Peña, op. cit.} p. 36 y capítulo vi.
_____ _
la aumentar con el tiempo. La subestimación parece ser peor cuando están
jbandonando las cosechas de subsistencia por las cosechas comerciales de
168
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC EFECTO
>
DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
1 69
del programa de construcciones para proporcionar irrigación a :
una gran parte de la zona. La productividad se incrementó algo
y la superficie cultivada ha crecido con rapidez. Las cosechas
tradicionales han cedido su lugar a cosechas para exportación
*cuyo
de divisas
valor janual es mayor que los costos totales
*del
jj programa. En esta sección examinaremos los cambios ocu
rridos durante los primeros dieciocho años de existencia de la j
Comisión.
1] Aumento de la superficie cultivada e irrigada, - El efecto
más directo del programa de inversión de la Comisión fue el j
; -arroz y ajonjolí. Durante los siguientes cinco años, la situación
cambió de manera impresionante. El algodón desplazó al maíz
i como el más importante de los cultivos irrigados. La producción
de melón y de sandía continuó ocupando una octava parte de la
í tierra irrigada, al igual que en 1960.
f* Una de las cosas más notables del cambio de los cultivos ira
\ dicionales a los comerciales en la Tierra Caliente fue su ritmo
j lento. No fue hasta el ■ ciclo agrícola de 1962-3 que la proÍL ducción de algodón cubrió más de una cuarta parte de la tierra
; cultivada en. la zona. El cambio se produjo al ser disponibles
más créditos provenientes de fuentes públicas y privadas pura
de la irrigación. Durante el período
de quince años, 1950 J
_
.créditos de producción que financiaran las cosechas. Las institu1965, hubo un incremento del 160% de
* la tierra cultivada (cua 9
í ciones públicas Tenían fuertes limitaciones sobre la cantidad de
dro vi-2). Aún más espectacular fue el aumento de la superficie 1
crédito que podían proporcionar, y sus esfuerzos empresariales
irrigada, que en 1965 era un 480% mayor que quince años antes ?
*rí-para
siembraalentar
de cultivos
la
de exportación de mayor
(cuadro vi-8). La zona está ahora menos sujeta a las variaciones
M valor estaban limitados por el grado de la cooperación privada.
de la lluvia que en 1950, a pesar del gran aumento de la super- j
j‘ Una vez que las fuentes privadas de capital de trabajo agríl cola observaron el éxito del aumento de las tierras dedicadas
ficie total que está bajo cultivo.
A medida que aumentaba la irrigación, hubo una tendencia
1 al algodón y el mercada establecido para las cosechas de melón,
gradual a sustituir las cosechas tradicionales con cultivos más
x- satisficieron rápidamente la demanda de créditos.10 Los cambios
valiosos. Los canales de irrigación<_jredujeron el riego de una
Jó oen
Tierra
Caliente,
- los cultivos sembrados en la------------------------ p.
por tanto, re­
humedad insuficiente e hicieron más efectivo el uso de nuevos m sultaron ser una función de la oferta de insumos para el proceso
ara el proceso
insumos aj agrícolas. Sin embargo, este cambio ocurrió con mucha $ de producción. La producción lucrativa de cultivos comerciales
que
J
requiere relativamente
cantidades relativamente grandes de capital .....
para?.......
cono
lentitud como H lo muestra el hecho
-- de
- __
“Xel maíz aún dominaba ■ requiere?.cantidades
la producción de la Tierra Caliente en 1960 (cuadro vi-2). La 5J v prar semillas, fertilizantes, insecticidas y pagar el alquiler de
mayoría de los cambios ocurrieron durante la década de los se-'j g maquinaría para trabajar adecuadamente la tierra. La oferta de
senta. Hacia 1965 se dedicaba más superficie de tierra para el jX nuevo crédito no1 se dio con la misma rapidez con que se hacía
. algodón que para el maíz. Los melones y las sandías represen- 3 disponible nueva-tierra irrigada. El proceso de ajuste fue pro­
taban una décima parte de la tierra cosechada. El maíz disminuyó^ longado porque era poca la experimentación que se había hecho
1
u'- U«
1
1
en importancia relativa, ocupando sólo una quinta parte de KM y el nivel técnico
*'-'
U'¿I, oíde 1
,
UUI
Majo
U1Cl 11ULJUO
de,ia región era tan bnjo
tierra cosechada.
íoup
i™
M que los inversionistas consideraban que los riesgos eran grandes.
*^El cambio en la estructura de los cultivos es más notable cuan
> En la actualidad los factores de la demanda se han unido a
do sólo consideramos la tierra irrigada (cuadro vi-3). Los cambio^ los factores de oferta para determinar la distribución de las co­
relativamente pequeños entre 1950 y 1960 contrastan notoria^’ bechas en la tierra disponible para cultivos. El debilitamiento
mente con los observados en los siguientes cinco años. A pesar rdel mercado del algodón, y los crecientes costos de producción
del aumento, casi de un 500%, en la tierra irrigada durante lo" fea la Tierra Caliente han reducido los atractivos de este produc­
años cincuenta, no hubo un desplazamiento significativo hadí to. Las ventas de melón están sujetas a la demanda en el mercado
los Estados Unidos, y como ésta no ha aumentado significa­
nuevos cultivos; por el contrario, hubo un pequeño aumento
relativo en la cantidad de tierra irrigada dedicada al maíz? tivamente durante los meses en que los cultivadores mexicanos
me den ofrecer esta mercancía muy perecedera, hay un límite
disminuciones significativas en la superficie dedicada al limój
YU-UMCuj.
--------- —
------ —
m
mayor precio. Se hicieron correcciones considerables con el fin de llegar.,
las cifras que se utilizan en esta sección. Véase el apéndice i para la dísd
sión de este problema.
•“Para una discusión más detallada de la relación entre las fuentes pú­
blicas y las privadas de financiamíento de la cosecha y sus efectos sobre
á producción agrícola, véase más adelante la sección “Espíritu de empresa y
anzas”.
170
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPECEFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
171
sobre la superficie que se puede sembrar, lucrativamente, con ?
en donde aún predominan los cultivos tradicionales. Es común
este producto. En fecha reciente ocurrieron otros cambios en la y utilizar
utilizaraeroplanos
aeroplanos para lalaaplicación
de los
aplicación
de insecticidas.
los insecticidas,
e
■
estructura de la demanda que indican que es probable que haya
Se enseñaron técnicas de cultivo a las personas de la Tierra
nuevos ajustes en la importancia relativa de los productos en4
Í
Caliente
> por inmigrantes de otras regiones, incluyendo los que
la Tierra Caliente; se tratará de ellos en la parte del presente
fueron
contratados
por los bancos para supervisar el crédito agrí­
capítulo acerca de las perspectivas para los años futuros.
cola, Poco trabajo de extensión agrícola fue hecho por las
, 2] La estructura estacional del cultivo. El incremento en la .»
superficie cultivada fue acompañado por un cambio en las épocas ' . agencias del gobierno, debido a que carecían de fondos y de
de cosecha. La disponibilidad de agua para irrigación hizo po­ ¿personal capacitado. Se estableció una escuela de capacitación
sible un aumento considerable en la superficie cultivada durante l ^agrícola en la región pará entrenar a los hijos de los campesinos
la estación seca. Esto benefició a las cosechas de melones y san­ pn las nuevas técnicas de la administración de las propiedades
días, ya que su éxito depende del calor y ausencia de humedad. f agrícolas y en la cría de animales. Estos programas no fueron
El maíz, que gradualmente cedió su lugar al algodón en la pan efectivos como la ayuda dada a los prestatarios por los disestación de lluvias, fue sembrado en ambas estaciones agrícolas; ■ tintos prestamistas públicos y privados para proteger sus inven
más de una quinta parte de la producción total se cosechó hiones. Pof este servicio le cobran al prestatario mediante una
durante la estación seca en 1960 y aproximadamente el 50% en: í “cuota de supervisión” que es usual en muchos contratos de
Lcrédito.
tu anos recientes, ocurrió un cambio notable en las técnicas
1965 (cuadro vx-4).11
Enproducción,
años recientes,
notable
3] Cambios en 1la productividad y tecnológicos. Las técnicas lde
en elocurrió
métodoundecambio
siembra
del arroz del si...... ..... sistema d;
de pr
*-1-1i-, ,1 tja.
r^o-^í rs/| rv z~fphleste cambio, impuesÓdüaión cambiaronEnoUblemente,
durante
el periodo,
debí-|
veteo,
*an-ua
los campesinos
para irrigación
por lacomo
administración
al culltoala de trasplante. Como resultado de
_
ClU ItlllL'-J a
del distrito de riego
do
a la intensivo
disponi ucaen. la tierra ° irrigada.
, T La introducción del
mi <p
tivotanto
más
| ara hacer mínimo el uso de agua para la producción de arroz,
cultivo del algodón en la región trajo consigo muchos problemas j [los rendimientos aumentaron el doble y el triple sin añadir fer­
nuevos de plagas y de su control, desconocidas en la región | tilizantes. Muchos campesinos se oponían a este cambio
y lo
hasta esa época. A diferencia de otras zonas cultivadoras de al-1 |siguen aún, debido a los altos costos de producción y al trabajo
godón, la Tierra Caliente no tiene un período de heladas durante | ímás intensivo que se requiere para obtener una cosecha. SimuL
guuuu,
iaxxttnu
de vida latente y hongos, quewtáneamente, sin embargo, los mayores rendimientos, que llegan
Lx
_.v. ____ „ L- i
el
quer mate
a losuninsec
s
ocho toneladas métricas por hectárea, y los mayores precios
porañotanto,
tienen
efecto
acumulativo. Cada año se utiliza ’>™3®|hasta
unaj
cantidad creciente de fumigantes y de insecticidas para protegetl bara el arroz, hicieron el cultivo de arroz más atractivo para
a las cosechas de algodón, limón, melón y sandía. Su uso eoj sanchos. Como resultado, el arroz sigue siendo una cosecha im­
menos frecuente para las cosechas más tradicionales, pero se iíb portante en la región.
forma que los campesinos que siembran ajonjolí están recurriendo; y La productividad de la tierra de la región aumentó con los
a estos controles químicos con creciente frecuencia.
qj Cambios en las técnicas de producción y el aumento en el agua
La mayor intensidad del cultivo aumentó la necesidad de U ¿ara irrigación. El incremento en los rendimientos físicos (cuafertilización artificial, que se está convirtiendo en una necesidad Ero vi-7, columna 3) no fue grande en ninguna cosecha, con
para cualquiera de los cultivos comerciales; se usa con menos ^cepejón del frijol cuya importancia estaba disminuyendo. Los
frecuencia en el cultivo de maíz y ajonjolí. Para la aplicacióií ¿ambíos en la productividad del arroz no aparecieron hasta
,964. Sin embargo, los rendimientos monetarios sí aumentaron,
de estos fertilizantes químicos se introdujeron los tractores eí
gran escala, así como para trabajar la tierra. Los caballos se4 ^medida que cultivos más valiosos ocupaban una mayor propor­
ción de la superficie total; la parte de la tierra dedicada a las
guen utilizando en muchas granjas, especialmente en las zonas
cuatro ■ cosechas más valiosas (algodón, limón, melón y sandía)
Amentó del 8% en 1950 al 20% en 1960, y al 56% en 1965.
11 Aunque el cultivo del algodón se prolonga más allá de la estación sed
ptas cosechas representaban el 20% del valor de La producción
por lo general, se cuenta durante' esa estación; generalmente hay suficieid
|p
1950 y más del 40% del valor en 1960.
tiempo entre una y otra estación para tener una cosecha de maíz, sí-ra
í:4] La Tierra Caliente como parte de la cuenca del Tepalcatecampesinos desearan sembrarla.
J
1
Ltc Viuuuvk.iuu
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X U VU v
Í¿ vtl.
■ ¡-^
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL 1EPALCA EE1 "EC
efecto de la comisión del tepalcatepec
172
173
' -'1
CUADRO VI-7
Producción agrícola en la Tierra Caliente, Michoacán, 1959-60
Cosecha
Frijol
Maíz3Algodón
Limón
Melón
Arroz
Ajonjolí
Caña de
azúcar
Sandía
Otros11
Super­
ficie
en
hectá­
reas
(V
Cam­
bio
en el
ren­
Rendi­ dímiento mien­
to
físico
50-60
kg/ha
V
IV
700
1 049
2 436
5 000
6 956
1 959
685
553 54 898
3 964 9 937
2 698
Produc­
ción
ton
métri­
cas
(4)
Rendímiento
Precio mone­
rural tario
pesos/ pesos/
ha
ton
W____
(5)
1 669
133
17 57 393
18" 9 985
27 41 900
34 31 600
0 27 094
7 322
46
1 260
700
2 250
800
500
' 870
1900
882
.734
5 481
4 000
3 478
1704
1 302
30 359
39 392
50
550
2 745
5 465
2 337
5
23
mente 76 000 hectáreas bajo cultivo en los veinte municipios de
(la cuenca que están fuera de la Tierra Caliente, durante el ciclo
1959-60, que rindieron una cosecha que valía casi 71 millo■;®'nes de pesos. Esto indicó una disminución absoluta en la su’Wperficie-de cultivo del 19% y una baja del 7% en el valor de la
;®.producción a precios constantes.13 En esta zona más extensa se
palor
^«informó que la tierra bajo cultivo representaba el 72% de la
" «cultivada en la Tierra Caliente, pero sólo produjo en términos
Miles
PorMe valor un 30% del de aquélla. Es obvio que en J96O la Tierra
de
pesos ciento'Caliente dominaba la producción agrícola de la cuenca del Tepalcatepec.14’15
CT____
El número de cabezas de ganado permaneció estable de 1950
“"¡ir
"TíoT
ja
e
*
n
1960
pimbas zonas. Según los cálculos de la estación expe22.2;
40 175
22 467 12.4'5 j’ipiental de' la zona, el número de reses aumentó ligeramente
a 115 000 en la Tierra Caliente y disminuyó a cerca de 150 000
33 520 18.5'
8/H cabezas en el resto de la cuenca.16 En el censo de la tierra Cali­
15 830
23 572 13.0 ‘ ficada corno de pastoreo aumentó aproximadamente en una
7-P
13 912
fuarta parte durante el período de diez años en los veinte mm
Micipíos, en tanto que disminuyó un 7% en la Tierra Cadente.
1 518 •0.8;i
Como puede esperarse, el número de hectáreas por cabeza dis21 666 i2.o;>
Jninuyó
a medida que aumentaba la presión sobre la tierra en
sX'
6 304
1'714 181 067 100.0
•—.íz y frijol. Los prod
» Incluye 1 603 hectáreas de (ierra sembrada con maíz no a los rendimientos
los se han sumado a las columnas 4 y 6, pero ' ~
eos (columna 2).
b Véase el texto,
fuente: Apéndice i.
no fue igualado por:
pee. El progreso de la Tierra Caliente
puede proporcionará
resto de la cuenca. El censo, que sólo r„___________ x
cálculo mínimo de la producción en el resto de la cuenca/?
gistró rendimientos monetarios por hectárea, en esta zona,’
un 55% con respecto a las cifras ajustadas que se indicó se or
vieron en la Tierra Caliente.13 El censo reportó aproximé
15 Esta comparación entre los ciatos del censo y cifras que alteran sí
cativamente los datos del mismo es injustificada, en principio. Aunqu
evidencia complementaria indica que hubo grandes omisiones en las'-'1
del censo correspondientes a los veinte municipios, como ocurre en la T|
Caliente, la relación entre la superficie y las cifras de producción-;
las propiedades agrícolas que se incluyeron es, probablemente, un reflej
rrecto de la situación real. Si se usaran las cifras del censo para la
Caliente en lugar de las cifras ajustadas para los rendimientos moxioentonces los rendimientos en el resto de la cuenca serían aproximadas"
el 76% de los de la Tierra Caliente.
w El tipo del mecanismo de recolección de datos del censo agrícola de
) es, probablemente, la causa de esas cifras tan bajas. Es poce probablete resultados semejantes a éste sean producidos por falsa de información
e los incluidos en el censo, Aunque los totales, probablemente, son bajos,
posible que los rendimientos sean representativos de los incluidos en el
inso (véase el apéndice i).
,íl Un análisis de los censos agrícolas de 1950 y de 1969 (apéndice i)
Sdicó que las cifras registradas en el primero representan mejor los hechos
¡je las del último. Una intensiva investigación de campo realizada en la
ierra .Caliente sugirió que es probable que la falta de información sea
iyor cuando una región está cambiando de las cosechas tradicionales a
¡echas de mayor precio. Sin embargo, los veinte municipios que estamos
liando no experimentaron cambios estructurales en la agríenItura durante
baños cincuenta. La única conclusión que podemos obtener de los restillos que se reportaron cuando se les compara con la situación real es
é hubo omisiones importantes en el proceso de enumeración que no fuecaptadas por los trabajadores de campo.
!5 Estas cifras proporcionan una información suficiente para inferir que las
*jdicíones
la producción
de agrícola no cambiaron notable-mente durante
ipeidodo íntcrccnsal en los veinte municipios que están fuera
de la Tierra
líente. En consecuencia, no se hizo ningún análisis de los
cambios que
rricron en esta parte de la cuenca para incluirlo deiiLro ■
de los bciicos que se pueden atribuir a la inversión en irrigación de
la Comisión,
‘Estos cálculos, disponibles sólo en la agencia local de la
Secreta ría de
icultura, se usaron en lugar de los del censo debido a que
estos últimos
tCíiban una disminución, aproximadamente, del 37% en el
I mi nievo de
ezas de ganado en ambas zonas desde 1950. Eso m> es posible.
’
total 105 664
í
174
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
i EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
175
CUADRO VI-8
la Tierra Caliente. Con los rendimientos relativos disminuyendo
para la agricultura en el resto de la cuenca, el costo de opor­
: Rendimientos monetarios netos en la Tierra Caliente
___ ! i1959-60
sn
■
*
tunidad para la tierra de pastoreo también disminuía y la reía- j
Michoacán,
ción pastos-ganado aumentó, aproximadamente, una tercera par- y
te. No obstante, la cría de ganado seguía usando más super- (
Valor
fíele en la Tierra Caliente, en donde había casi un 50% más de :i
Rendi­
Valor neto de la
espera­
pastos por cabeza de ganado que en el resto de la cuenca. :
mientos
cosecha
do de la
La fuerza de trabajo agrícola creció con más rapidez (89%) Cosíos
moneta­
cosecha
en la Tierra Caliente que la población trabajadora (82%) en •;
totales
rios netos miles de
miles de
pesos ¡ha
los años cincuenta (cuadro v-5). En el resto de la cuenca, la j;
pesos¡ha
pesos
porciento
pesos
ocupación agrícola creció a casi la misma tasa que toda la fuer- i Cosecha
w
(2)
0)
(0
(V
za de trabajo (30%). La intensidad de la mano de obra en la ■
Frijol
Tierra Caliente disminuyó en 30%, debido al cuantioso aumento 1
D
552
en la tierra cultivada (150%) había cuatro hectáreas de tierra í
683»
199
320
0.5
280
bajo cultivo por cada hombre en la fuerza de trabajo agrícola :
W
742
en 1960, en tanto que diez años antes sólo había tres. Es pro- j Maíz
bable que la intensidad de la mano de obra haya permanecido ; .
D
491
constante o haya aumentado ligeramente en el resto de la región,?
595»
139
7 463
12.5
6 291
W
pero es poco probable que haya aumentado un 30% como se í
663
551
356
indica en las cifras del censo.17
i Maíz y frijol
571
1.0
343
3 829
1 652
6 772
El que hubieran podido obtenerse rendimientós crecientes a . Algodón
11.4
6 772
Limón
2 269
1 731
14 506
24.3
la vez que se aumentaba la tierra cultivada por persona en laj ¡
12 635
.Melón
2 222
1 256
5717
9.6
fuerza de trabajo demuestra la importancia de la considerable® Arroz
5 717
I 477
227
3 139
5.3
8 139
inversión de capital en la Tierra Caliente durante este periodo,® Ajonjolí
en comparación con su relativa ausencia en otras partes de laj
D
592
cuenca. Fuera de la Tierra Caliente los problemas de las pe641»>
661
7 066
11.8
5 123
quenas tenencias agrarias y los bajos ingresos agrícolas se inten-j
W
748
sificaron durante el período 1950-60. En la Tierra Caliente, lo$í Caña de
P
4 189
ingresos agrícolas netos aumentaron rápidamente, igual ocurriój 7 azúcar
2 541»
204
con la demanda de^ mano de obra, lo cual aumentó los salarios..
113
0.2
113
s
1 718
No obstante, hubo grandes problemas de crecientes desigualda-j
Sandía
2 334
3 131
12 411
20.8
des en el ingreso que acompañaron a este crecimiento.
7
12 411
Otrosa
1
576
2.6
I 261
5] Costos y valor netos de la cosecha. Las necesidades adicio-J
nales
*®
T0TAL
de las nuevas tecnologías y de los nuevos cultivos aumen
59 654
100.0
54 085
taron los costos de producción (cuadro v-8). Debido a que
___ __________________________________________________
1
véase el texto, p — plantación original; S ~ cultivo subsecuente; D -oferta de mano de obra no creció con tanta rapidez como la de®
manda de trabajadores agrícolas, se tuvo que traer trabajadores® ^promedio temPoraí: W = Tierra de irrigación.
de otras regiones. Se necesitaron salarios altos, durante la épo®yUENTES. Columnas
ca de la siembra y cosecha, para atraer a estos trabajadores a lí®T Barkin, Economic Development in the Tepalcatepec
River Basin, Apéa­
Tierra Caliente. En esas épocas, con frecuencia más de una ter®dice n.
cera parte del año, los salarios en la zona eran considerablemente®-^ Cuadro vi-7, columna 6; cuadro vi-8, columna 1.
0
n rn
-'«,3: Cuadro vi-7, columna 1 X cuadro Vi-8, columna 2.
Éste es un argumento adicional en favor de la creencia de que el censq®^Derivado de la columna 5.
agrícola de 1960 subestimó considerablemente la superficie cultivada y,
, sa*^° en un 60% de las expectativas de una cosecha
consecuencia, el valor de la producción agrícola.
cultivo de temporal.
11
176
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TETALCATEPEGEFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
177
más altos que los del trabajo agrícola en .otras regiones cerca­
dicó que había gran cantidad de desperdicio en la aplicación
nas. Durante la cosecha de algodón de 1965-66, se atrajeron cerca
de los fumigantes debido a la ignorancia con que se "hace la
producción del algodón no lucrativa”?9
de 15 000 hombres de fuera de la región para satisfacer la nece­
Como sucede en el caso del algodón, la sand.a y el melón
sidad de mano de obra.
En parte, la oferta inadecuada de trabajadores no calificados
tienen altos costos de producción debido a los gastos en el con­
que residieran en la zona se debió a las condiciones .climáticas
trol de plagas. ^Durante los primeros años de esta década, los
poco atractivas de la región y a la falta de oportunidades de
costos de algunos productores llegaron a niveles inaceptables muy
trabajo permanente en la zona, que pudieran absorber a los tra­
altos, debido a que los cultivos eran dañados por los insectos o
bajadores desocupados durante los períodos de poca actividad.
los hongos. Los cultivadores de melón pensaron que la larga
La mano de obra agrícola calificada para manejar equipo me­
historia del cultivo del melón en la región pronto llegaría a
cánico y para servir como capataces para dirigir a los trabaja­
su fin. Hay un período óptimo durante el cual pueden culti­
dores no calificados era todavía más escasa. Ésta reflejaba una i varse melones y sandías lucrativamente antes que los costos sean
falta de personas entrenadas en toda la nación. A medida que
prohibitivos a medida que el suelo se hace menos fértil y más
aumentaba la tierra irrigada con la terminación de nuevos ca­
caro el control de plagas. Los norteamericanos que estaban en
la Tierra Caliente decían que la experiencia pasada indicaba
nales y la mejora de los viejos sistemas de irrigación, aumentó,
que este período es de aproximadamente siete años.
la demanda de mano de obra y la presión para que aumenta-.,
ran los salarios resultó en mayores ingresos reales para muchos ó Como consecuencia de estos factores, el valor neto de la pro­
de los trabajadores.18 Este problema no era tan agudo, como lo
ducción en 1960 indicó una proporción menor del valor bruto
había sido en años anteriores, debido a que los trabajadores mi­ i de la producción que la representada años atrás; bajó del 37%,
gratorios habían empezado a incluir a la Tierra Caliente en su
en 1950, al 33%, en 1960 (cuadro vi-8). La sandía continuó
itinerario durante Las épocas del año que sabían habría demanda Tiendo el cultivo más lucrativo, seguido por el limón, el algode mano de obra no calificada. Es a través de este mecanismo, Ldón y el melón (cuadro vi-8, columna 2).
que un gran número de trabajadores subocupados en México Ó Se llegó al valor neto esperado de la producción, según los
puede encontrar suficiente trabajo y aliviar así la presión sobre : cálculos hechos, de obtener una cosecha lucrativa en tres de cada
I' cinco años en tierra no irrigada (cuadro vi-8. columna 5).20 El
los salarios durante los períodos de gran demanda.
El mismo incremento de la tierra cultivada explica parte de : aumento en el valor neto de la producción sobre el ciclo agrí­
los altos costos de producción. El precio de la tierra aumentó cola de 1949-50 fue la base para los cálculos de los beneficios
a medida que la irrigación se hada generalmente disponible. Las ¿agrícolas netos que surgen de la disponibilidad de agua para
SdíTirríJ r-íAv
*en la zona (cuadro
/«
* - — —vj 9\
tierras ociosas que podían cultivarse casi desaparecieron. Se oh.®irrigación
servaron grandes diferencias en las rentas entre las tierras irri-.^l
ch<. cifras de producción se refieren sólo a los nueve cultivos
q||. FEstas
gadas y las no irrigadas, y se hizo cada vez más difícil encontrar ! ^principales en la Tierra Caliente durante el ciclo agrícola de
RCÍKü fin. tu...-. ------ -------tierras no reclamadas sin irrigación por las que no tuviera que Sí 959-60; se hizo un'
'í"
pagarse renta, o imputarse al costo de la ¿reducción.
“ región usando
.!E?e Paralas
.,los otros
P^uctos
que se cul||ivan ~enu. la
cifras
preliminares
del censo agrí.~
• rult¡vo nevó a deseconomías ex-jfcola de 1960, Se informó que estos productos cubrían el 5% de
La creciente superficie
*medida
superficie
quecultivada
el aumento:®
y representaban el
10% del valor bruto
ternas para los cultivadores e a g
la producción de la región. Al igual que en 1950 estos proeg los ínsectos
en el número de mtensi a . -ones aéreas para controlar las®luctos fueron, fundamentalmente, frutas y también los más
por unidad de tierra. Se ajustaron los cuadros vi-2,
plagas. El aumento de ios eos os P ,nivor presión sobre el®v3, vi-4 y vi-7, como antes, añadiendo las cifras del censo a las
de estas fumigaciones aereas ejercieiun
aqt¿v0 con ej fin®
JL
[”
1
-'-
campesino para que mejorara SUS t cuicas
de obtener una cosecha lucrativa. La
1--------------------
lln.,Á o rfacnrrmri
exnerimental
F
Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas, Secretaria de Agricub
'JaBiia y Ganadería, El cultivo del algodón en la cuenca del río 'Tepalcatepec,
Michoacán, México, 1963, p, 8.
30 Al igual que para 1950, los campesinos afirmaron que la cosecha de
reares”
de
alcodón
ganaron
hasta®
?/
.,
®&960 era buena.
el cuádruple del salario diario normal en la región.
,
Durante la cosecha (le I9oj-nb,
’re
i
f
178
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC;;EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
I
179
cifras de producción y de superficie ajustadas, ya discutidas. En
perficie y el ajuste concomitante en la composición de los proel cuadro vi-8 se hicieron ajustes suponiendo que las tres cuartas
;■ ductos representó la mayor parte del aumento. Ambos factores
partes del valor bruto de los productos adicionales representa­
; explican el 67% de la mayor producción,23 en tanto que el
ban costos de producción y la mitad de la superficie estaba irri­
' f aumento en los precios que reciben los campesinos explica aprogada y no sujeta a las variaciones en la lluvia.
’ rimadamente un 8% del cambio y el incremento en los rendi­
1
6] Producción agrícola neta. Con el fin de hacer un juicio
mientos físicos, el 5%, Los tres factores se influyen mutuamente
sobre el desarrollo agrícola, es necesario medir el valor de la
para inducir un aumento adicional en la producción durante
producción después de restar sus costos, Esta sección presenta |
la década, que representó aproximadamente un 20% del cambio
el valor neto de la producción, en tanto que la siguiente, los j
total, La mayor parte de esta influencia mutua (15%) se debió
desarrollos futuros en la región, como preámbulo para el cálcu- «
al cambio en la composición del producto hacia productos cuyo
lo de los beneficios netos obtenidos de la producción agrícola
rendimiento físico aumentó,
atribuible al programa de inversiones de la Comisión.
Estas mejoras fueron acompañadas por cambios similares en el
La presentación cuantitativa en la evolución de la estructura
; valor neto de la producción agrícola (cuadro vi-9). Durante los
agrícola de la cuenca, desde la creación de la Comisión del
años cincuenta, el valor neto del producto aumentó a más del
Tepalcatepec, indica dos cambios considerables en la economía
Jacuádruple,
Se espera que durante la década de los sesenta se haya
agrícola de la Tierra Caliente hasta 1960: un incremento del ¡
:
duplicado.
La medición de este progreso depende de las cifras
150% en la superficie cultivada y del 108^ en el rendimiento
“ ^discutidas en la sección anterior. La información de cuatro años
monetario bruto por hectárea. La producción aumentó 412%
base, 1950, 1955, 1960 y 1965, proporciona un fundamento para
durante la década final de desarrollo en la Tierra Caliente.
la
determinación de la cantidad de superficie cultivada durante el
Este progreso es el resultado del aumento en la superficie, del
^período
(cuadro
vi-2 y vi-3, y el apéndice n); las proyecciones
cambio de los cultivos tradicionales hacia las cosechas comerV
enars
icwo
hicieron
con la ayuda de la información resumida
se
*cíales de exportación, del incremento en los rendimientos físicosllPy 1970
fen
la
siguiente
sección,
Se combinó la información sobre las con­
y en los precios de algunos productos. La disponibilidad de irri- ®
diciones
del
mercado
con
datos sobre los costos para obtener los
gación facilitó el aumento de la superficie cultivada y el cambio
¡cálculos
de
ganancia
y
determinar
el valor neto de la produc­
1
hacia productos más valiosos. Los cambios tecnológicos, alentados i
ción
agrícola
de
ja
región
(cuadro
vi-9,
columna 2). No se in­
por la irrigación, permitieron el uso más efectivo de insumos J
cluyó la producción agrícola del resto de la cuenca, como se
modernos, como fertilizantes, insecticidas y equipo mecánico, para 1
.explicó antes, porque parece que no hubo importantes cambios
compensar, e incluso superar, la influencia negativa de la dismi'.j
23
$ue
nucíón en la fertilidad del suelo y el efecto creciente de las¿j|
fa.-..puedan atribuirse a la intervención de la Comisión.
plagas en los rendimientos físicos. No obstante, las tierras irri-j
Ifonceptualmente los términos de la identidad representan:
gadas necesitaban insumos mejorados y los campesinos debíanj
11] El incremento en la superficie multiplicado por el cambio en la comresponder a las condiciones del mercado si se quería realizar elj
hasición de los productos; 2] los cambios en los precios; 3] los cambios
potencial.
7¡¡án los rendimientos físicos, y 4] la interacción entre todos
, t _j -------------------S esos factores,
producción agrícola se desagregó;^ |gradecemos
El aumento en el valor de la
aaloslos
doctores
ShaneShane
Hunt y Hunt
WalteryHettich
padecemos
doctores
Walter Hettich su ayuda en
21 El cambio en la su-| |le
MÍA
ÍÍYllAfnnr.
enfoque.
obtenido,
v
para determinar cómo se había
luuu
P Por desgracia, no fue posible separar la influencia del cambio, en la
Imposición del aumento en la superficie, porque las dos se multiplican
la identidad presentada en la nota anterior.
fe” Como se dijo en el capítulo anterior, la Comisión invirtió en irrigaSÓn en la parte noroeste de la cuenca, en donde las cosechas importantes
fe el trigo, garbanzo y la caña de azúcar. Aunque no se hizo ningún
|tento para incluir los beneficios provenientes de estas inversiones en el
|tal, los cambios en la Tierra Caliente superaron considerablemente los
2 (PWAYAA + YmAPAA 4- AmAPAY 4- APAYAA) | | la parte noroeste de la región, El cuadro vi-7 es, por tanto, una subestilición de los beneficios derivados de las inversiones en irrigación de la
1 r ------------- - -------------------------------------------------------------------------------------V P V.„A..
^misión, debido a a este olvido; aunque se pensó que esto tendría una
fluencia mínima en los resultados, las conclusiones cuantitativas sobre el
bruto
21
del incremento
—LaLjdesagregación
Ü*Lganv
UCSiig
11 UL., ----- ----* en la producción se logró utili-'':
< *
.'HK
zando la siguiente
identidad:
(A ™/ Asuperficie, P — precio,
*
Y ™ rendimien
■A
tos físicos, S = suma).
SAs
ff 2AA
SAsA
-------2 PsoY«jv ( Aw------- j
|
2 Abo
2 PMYg0A«, á
a 2 A^y
---------------- - ---------------- — I 4"
■"
* —1 - * — 1 4
2 PmYmAso-------------------------2 PeAboAbo
R
1
180
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
El valor neto de la producción agrícola aumentó rápidamente
de 1961 a 1962, reflejando el cambio hacia el cultivo de algo­
dón. Antes hubo una tendencia continua hacia el ascenso en el
valor neto, con un aumento repentino en 1957. Hubo otro
aumento significativo en 1965 cuando comenzó a reflejarse la
influencia de la nueva técnica de cultivo de arroz. La dismi- .
nución en el producto agrícola neto, proyectado para el resto ;
de la década de los sesenta, refleja las malas perspectivas del ,
mercado para el algodón y el melón, a ellas nos referiremos i
ahora.
7] El futuro de la Tierra Caliente. La historia reciente de la |
Tierra Caliente se caracteriza por el carhbio de las cosechas tra- |
dicionales a cuatro productos comerciales importantes: algodón, 4
limón, melón y sandía. Esta orientación de las empresas agrí- j
colas ha hecho de la Tierra Caliente uno de los principales :
contribuyentes a las exportaciones mexicanas de algodón y melón., í
Las perspectivas para estas cosechas, o para otras que pueden 1
ocupar su lugar,- determinarán si la región continuará prospe- 1
raudo, se estancará ó decaerá.
El algodón es la cosecha de exportación más importante de i
México y, en la actualidad, es la principal cosecha de la Tierra 1
Caliente. Prácticamente no se conocía en la cuenca cuando la |
Comisión empezó sus operaciones allí, en 1947, aunque los habí- |
tantes de. la región lo había cultivado en tiempos prehispánicos.-4 i
La superficie cultivada con algodón aumentó de 12 hectáreas,, en 1
1950, a 4 100 hectáreas, en 1960, y después aumentó rápidamente I
a 42 000 rectárea-s, en 1965. Varios factores limitaron la expan­
sión de esta importante cosecha: La disponibilidad de créditos
para cubrir los costos de producción es limitada, los costos del
cultivo del algodón aumentan continuamente debido a la cre­
ciente necesidad de control de plagas, las cambiantes condiciones
del mercado mundial han hecho que su precio baje, y la bús-,
queda de nuevos mercados se ha hecho más difícil. Los dos pro-,
blemas que mencionamos primero se discuten en otra parte, pero
el último nos interesa tratarlo ahora.
El debilitamiento del mercado mundial se debe a un crecí-,,
miento más rápido de la oferta que de la demanda y a un cambio J
en las políticas de mercado de los norteamericanos. Como re<
sultado, el campesino mexicano no recibió un aumento en el;
181
CUADRO VI-9
I
Producción agrícola neta en la Tierra Caliente, Michoacdn,
19504970
Año en que
terminó la cosecha
1947
1951
1952
1953'
1954
1955
1956
1957
1958
1959
1960
1961
1962
1963
1964
1965
1966
1967
1968
1969
1970
j
|
Superficie
cultivada
(hectáreas)
~~42 317
42 842
45 350
51625
55 625
63 314
67 300
76 150
82 600
92 450
105 664
106 600
107 400
106 500
107 700
109 500
109 000
103 000
108 000
114 000
109 000
Producción
agrícola neta
10 637
11 375
13 200
15 777
17 653
20 804
26 994
44 622
47 429
53 784
54 483
68 851
91 578
103 971
108 990
139 064
138 218
131 039
134 918
122 003
113 743
1
q Mukntk; Apéndice n.
;i ; rante la estación de 1965-66 se combinaron precios mundiales en
; ^disminución,25 costos crecientes y presiones políticas en la Tierra
■4 | Caliente para ejercer presión contra el gobierno, que proporcio4 i nó subsidios para algunos campesinos fijando los precios pagados
4 - por el Banco Ejidal a los ejidatarios por encima de los precios
1 ■ mundiales prevalecientes.26
| Esta situación ha hecho surgir un grupo de personas que
i argumentan que el cultivo del algodón debe desaparecer
dede la
parecer
la
ITierra Caliente. Hay quienes afirma
an que nunca se debió es.timular el cultivo de algodón en la
~ y que cuanto antes
....
i zona
.-desapare
proyecto podrían haber sido más favorables, incluso si se hubieran adjuiitadoífcg^.
esos datos.
28 Aguirre Beltrán, op. cit., p. 146,
W
55
Banco Nacional de Comercio Exterior, Comercio Exterior, noviembre Je
.. 28 El Día, México, II y 22 de enero de 1966.
182
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC ;
183
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
se cultivaba adecuadamente con irrigación para complementar las y
chatamente después, de la cosecha. El único mercado, hasta ahora,
lluvias, el campesino podía obtener la misma ganancia por hechan
sido los Estados. Unidos y el Canadá; durante el período
J
tárea con una inversión menor de la mitad de la requerida por .%
p
enero
a abril México abasteció casi todos los melones que
se
el algodón. Este grupo, compuesto, principalmente, por agróno- v’
consumieron en los Estados Unidos?8 La
- demanda, según la
mos y personal técnico que trabaja en la región, también indica ¡,gente
de la Tierra Caliente, fluctúa con el
clima y el número
que la cría de ganado puede ser un importante potencial para ;,
de convenciones en la ciudad de Nueva York.
- ---------- — La fierra Caliente
la tierra. Nos volveremos a ocupar de ambas sugerencias dentio..
es la región productora de melón más importante de México,
de poco,
"■
Por otra parte, hay un número considerable de personas queq aunque -su participación en el mercado está disminuyendo a
'tienen intereses creados en la continuación del cultivo del algoM medida que los cultivadores de melón se trasladan a nuevas
dón. Los más notorios son los propietarios de las despepitadoras? zonas. En 1963, la Tierra Caliente representó cerca de las tres
de algodón, de los cuales se informa que obtienen grandes ga-u cuartas partes de, las importaciones norteamericanas de melón
nancias por sus operaciones, incluso cuando las condiciones de j cantalupo, pero hacia 1965 representaba sólo0 el 60% de las exhor­
mercado mundial no corresponden a sus esperanzas. Junto a ellos . taciones mexicanas a los Estados Unidos? Con frecuencia" los
están los comerciantes que venden y dan servicio a la maquinaria j precios fluctúan mucho para la cosecha de exportación; durante
agrícola, proporcionan fumigación aérea, y. distribuyen semillas,q una cosecha reciente, el precio de una fruta de la misma calidad
fertilizantes y otros insumos. Estos grupos tienen gran influencia? ■variaba entre 60 y 20 pesos por cesto. Este precio mínimo, sin
sobre la producción de algodón porque son fuente principal de< embargo, es superior al precio interior que, en su punto má­
es de, aproximadamente, 20 pesos por cesto para el cam­
créditos de producción cuando los campesinos no lo pueden ob- « ximo,
pesino?0
tener de las fuentes bancarias. También cultivan superficies con­
Con estas condiciones, hay un incentivo fuerte para controlar
siderables de tierra bajo contratos de arrendamiento. ~
-y
&
los
costos debido a que los cultivadores, incluso los abastecedo*Es
| poco
Es poco pivodoie
4UC probable que se continúe durante muchos años el- Fies, tien
tienen poca influencia sobre los precios en el mercado?1
actual programa de subsidio para el algodón, y los productores^
,
---, estos productores no tienen la influencia política sufide algodón de alto costo en la Tierra Caliente tendrán que en-i * d C!^nte, obtener un programa gubernamental de estabiliza¿
contrar sustitutos lucrativos. El principal obstáculo que retrasa
t prod a,
n
13
dito
dito para
para remplazar
remplazar los
los fondos
fondos que
que actualmente proveen lasJ l*> gteso en la Tterra Caliente vanan mucho y esto ir
plantas despepitadoras. Por tanto, el gobierno u otros intereses• ÍS Cf. Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Agricultura!
privados tendrán que proporcionar crédito agrícola adiciona^ y
F.Marketmg Service, Freth Fruit and Vegetable Shipments (ams-36, 1968'1
! W™nSton’ Government Printing Office, mayo de 1964, pp. 19-20.
alguna ayuda técnica para facilitar el cambio, si se quiere Hh
- Departamento de Comercio de los Estados Unidos, Oficina del Censo
terrumpir el programa de subsidios con un mínimo de pertur
U S. Imports of Merchandise for Consumption, Washington, Government
bación.
.Prmting Office, abril de 1963 y abril de 1965.
La experiencia reciente sugiere que habrá una disminución gnw Hay dos precios para el melón, que dependen del mercado en donde
dual en la ^superficie sembrada con algodón a medida que y se venda. Los precios interiores son menores que los precios de exportación,
■y la calidad de la fruta para el consumo interior es, por tanto, inferior.
productores de alto costo cambian a otros productos, Duran
los cinco ciclos agrícolas que siguieron a la estación de 1964-5 J \ Los productores' tienen poco control sobre dos precios del melón debido
a la organización del mercado. Los campesinos individuales tratan de ob­
superficie sembrada con algodón probablemente ha disminuí^ tener
crédito del prestamista-distribuidor, intermediario entre los productores
27
hasta, aproximadamente, 30 000 hectáreas.
y los compradores. Hay, aproximadamente, diez distribuidores que compiten
La producción de melón y sandía también se enfrenta a.,
entre sí bajo condiciones de competencia imperfecta; cada uno tiene que
considerar su efecto sobre la oferta total, pero ninguno puede controlar la
*mitaciones impuestas por la demanda del producto. Debido
pantidad total de melones en el mercado,
su naturaleza perecedera, estos productos deben venderse
• Los cultivadores ven al mercado como sí fuera perfectamente competitivo
i
« Esta reducción en la siembra de algodón probablemente será ito
ñada por una disminución en la superficie , total cultivada en la región^
como por un retorno a las cosechas tradicionales.
!La
y
„
x
íiaoia CUlulcq
demanda es una función retrasada del equilibrio del año anterior y la
Oferta depende de la cantidad de crédito disponible. Los procesos del merado
' < con frecuencia, resultan en un ciclo de "telaraña”, cuyas fluctua­
ciones- son controladas por los distribuidores en competencia imperfecta.
184
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
185
sido desastroso para algunos cultivadores. Actualmente se habla
• rarse las técnicas de cultivo mediante la observación, la experi­
de trasladarse a otras zonas en donde el control de plagas sería
mentación y la instrucción por agrónomos en el uso del agutí y
. .la aplicación de “'fertilizantes.
' menos costoso, y de una estructura de cultivos rotativos, basada
en un ciclo de siete años para reducir, a un mínimo, el daño
t El ajonjolí és otra cosecha que puede tener relativamente un
por las plagas. El resultado probable de las actuales tendencias .
...cambio importante. Cuando el campesino acepte nuevas técnicas
a la consolidación será una pequeña disminución de la su per- ■:
i para esta producción, y esto empieza a ocurrir, los rendimientos
fície cultivada, unas 10 000 hectáreas para melón y sandia dentro
1 podrán aumentar de una a una y media toneladas por hectárea.
de la Tierra Caliente, y un sistema de rotación dentro de la
1 También han aumentado los precios rurales para el ajonjolí, por
zona. A la vez, habrá un aumento en las nuevas zonas produc- ;
tanto la cosecha se hace cada vez más atractiva. Los funcionarios
toras de melón, a medida que se localicen nuevas zonas ade- ... del Departamento Agrario creen probable que hacia 1970 se siemcuadas, se construyan las carreteras necesarias y se realicen expe- •
) bren 20 000 hectáreas con ajonjolí, y que una gran parte de
esa tierra será irrigada.
rimemos agrícolas. Hay un gran mercado potencial para estas
! Nos queda por discutir un aspecto del panorama agrícola: la
frutas dentro de México, aún no desarrollado, porque la fruta
disponible interiormente consiste en frutas rechazadas para la
■ ganadería. Se dijo antes, en este capítulo, que el número de cay bezas de ganado, en la Tierra Caliente, no varió durante el
producción de exportación.
En la actualidad, el Banco Nacional de Crédito Ejidal esta
...período 1950-60, aunque la superficie dedicada a pastos dis­
estimulando la producción de limón, como resultado de un con- ■
minuyó, al aumentar la demanda de tierra para cultivo. Esto no
trato, a largo plazo, para la exportación de productos del limón ;
continuó, porque, comojndicamos, la cantidad ele tierra cultivada
recientemente firmado por la fábrica procesadora del Banco. La
; no aumentó mucho desde 1960. Por el contrario, posiblemente
producción era muy reducida y sólo se estaba usando una pe­
¿ hubo algunos pequeños aumentos en las tierras de pastos al hacerse más común la ganadería intensiva,
queña parte de la capacidad de la planta antes de la firma del
nuevo contrato. Los funcionarios del Banco esperan autorizar
L Actualmente, dos bancos gubernamentales de crédito agrícola
créditos suficientes para aumentar la superficie dedicada, exclu­
estimulan el desarrollo de una técnica intensiva para la cría de
sivamente, a los limoneros hasta 10 000 hectáreas irrigadas, en el
ganado sobre una base “piloto”. Sus operaciones, en conjunto, no
implican a más. de 5 000 cabezas de ganado, pero hay gran espe­
futuro próximo.
Probablemente la superficie cultivada con arroz no se incre­
ranza
de que estos proyectos alentarán empresas similares por
1■
mentará en su actual nivel de 12 000 hectáreas durante los pró­
otras personas. Los bancos financian el mantenimiento de tierras
ximos años, El requisito de que todo el cultivo se haga con el -j
de pasto artificial y la mejora del ganado. Los resultados prelisistema chino o de trasplante y la cantidad limitada de agua j * minares confirman las esperanzas que los bancos tenían en esíc
disponible para la producción desalientan su'expansión. El cam-t proyecto e indican que las ganancias netas por hectárea, derivadas
bio hacia el sistema de trasplante era necesario por las crecientes)
y de la ganadería, estarán entre 1 000 y 3 000 pesos. A pesar de
demandas de agua para irrigación (el nuevo sistema
í estos comienzos auspiciosos, es poco probable que en el futuro
---------- hace unj —
■ j.
*i,|...incluso,
próximo
con
haya
esteun
método
cambiodesigmificativo
uso más eficiente del agua), pero,
) en este tipo de actividad.
cultivo el arroz requiere, aproximadamente, tres veces más agua;'
I-Tal programa requeriría una gran inversión en capital fijo y
--------- '____ _ ______ > Jlargo,
_
1de ges- . t
,
las otras cosechas. Como resultado, la administración
que L._
_ delj ^de operaciones,
. f así como un período, relativamente
,
x
distrito de riego tiene pocos deseos de permitir una expansión^ ración antes de que la inversión produjera un rendimiento.
La experiencia reciente indicaj El efecto combinado de todas estas tendencias
adicional del cultivo de arroz.32
es que habrá
utos del arroz hasta un proine-^ |tpocos cambios en la variedad de productos sembrados en la
que pueden elevarse los rendí' m
algunos rendimientQ^ Tierra Caliente durante los próximos Adiez años. Pa
dio de cinco toneladas por hectárea, con
Para
época,
—aesa
época
producirán al mejo^ i'habrá más de 80 000 hectáreas sembradas con algodón, limón
de ocho o más toneladas; estos cambios se
u arroz, ajonjolí y sandía.
» La administración del distrito de riego controla la . siembra del arro$
p.: Ciertamente, el maíz no desaparecerá de la escena, y podría
y otros cultivos otorgando permisos para cosechas específicas después que
yTaber pequeñas cantidades de nuevas cosechas, en especial cogepagan las cuotas por el agua. Las tarifas del agua para el cultivo de anyH
Fíales de alto precio y un interés renovado en el potencial de
son tres veces más altas, por ciclo agrícola, que para las otras cosechas. ■
s.
-------------------- - ---------------- r .------------------- ----
_ 1___________ _________ _____ ____________ _____ _________________________________________ _________ _________-______ L
186
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC :
187
sorprendente que las personas que controlan el crédito no sólo
la región como productora de frutas. Pudiera, incluso, ocurrir •
. pudieran determinar qué cosechas se sembrarían, sino también
una disminución en la superficie cultivada, pero sería, teladquién las sembraría.
vamente, pequeña y provendría de las partes no irrigadas de la .
; En esta sección estudiamos la influencia del crédito en el seczona. Se calcularon los beneficios provenientes de la irrigación ;
■ tor agrícola, durante sus años iniciales de crecimiento, agrupando
en los años futuros sobre la base de este análisis y se añadieron ¿
■
a los prestamistas según los motivos que tenían para proporcíoa tos que se observaron realmente (cuadro vi-9) para un cálculo ;
i nar el crédito. Después de describir las actividades empresariales
de los beneficios totales provenientes de la disponibilidad de '
; de las instituciones bancadas públicas en la región, estudiamos
agua para irrigación en la región.
•J
■ las de lo.s cultivadores norteamericanos de melón. Otro grupo
que entró tardíamente al panorama son los intereses de las desEspíritu de empresa y finanzas
f pepitadoras privadas de algodón, ansiosas de asegurarse un abas| tecimiento continuo y estable de algodón en bruto, de manera
Los desarrollos que acabamos de describir estuvieron fuertemen- :
t que sus otras inversiones fueran lucrativas. Un tercer grupo, los
te influidos por la disponibilidad de crédito agrícola en la Tierra j
• comerciantes locales, estaba interesado en aumentar sus ventas de
Caliente. Las instituciones, los negocios y los individuos que ;
x abastos agrícolas y de otros bienes, en tanto que otro grupo, los
proporcionaron el crédito agrícola han jugado un papel impor-.i
.? bancos privados, participó en el financiamiento del desarrollo agrítante en el progreso de la región y en la deterininación de los 1
cola, como una extensión de sus fundones normales de préstamo.
beneficiarios del programa de inversión pública. La mayoría de :
En la Tierra Caliente funcionan dos de los bancos de crédito
la producción agrícola comercial no puede continuarse sin la
í agrícola del gobierno y han tratado de cumplir una función emayuda del crédito para gastos inmediatos, como semillas, fertili- presarial además de su función más tradicional de canalizar
zantes, maquinaria y mano de obra, incluso si el campesino puede ■
i fondos a los ej i datar ios y a los pequeños campesinos con tierras
sufragar sus propios gastos de subsistencia durante la estación
7 privadas. Al primer grupo lo ayuda el Banco Nacional de Créde crecimiento de la cosecha.
? dito Ejidal (Banco Ejidal), que es, prácticamente, la única fuenLo notable del desarrollo agrícola en la Tierra Caliente es la ■
; te de crédito para el sector ejidal que, bajo la ley, no tiene el
importante función que tienen los abastecedores de crédito en j
la determinación de los productos introducidos y en la época j derecho de amortizar su tierra con el fin de obtener el capital
7 de trabajo necesario para la producción de cosechas comerciales,
en que se hicieron los cambios. Varias fuentes de crédito tuvie-'¡
ron este papel por distintas razones que estudiaremos posterior-J i Otro banco, el Banco Regional de Michoacán, ayuda a los pe­
mente, pero al evaluar el desarrollo agrícola es importante ,ób- ; queños campesinos no ejidatarios en la Tierra Caliente; es una
^sucursal del Banco Nacional de Crédito Agrícola.
servar que la iniciativa para las innovaciones en la Tierra GaU
líente con frecuencia ha sido asumida por personas de fuera! í El Banco Ejidal presta dinero para cubrir los costos de proque tratan de aumentar la contribución de la región a sus ac-| Inducción y de vida y mantiene una constante supervisión sobre
Edos prestatarios. El banco ha estado operando en la Tierra Ca­
tívidades comerciales, más que por los campesinos de la zonaj
La experiencia pasada sugiere que cualquier grupo que deseaf ndiente durante más de dos décadas, localizándose sus operaciones
introducir innovaciones en la región, por lo general tratará do Bmás importantes un Lombardía y Nueva Italia, ejidos coope­
rativos, en tierra que fue de los Cusa i. Experimentó grandes pér­
convencer a los campesinos para que acepten un crédito paráj
didas debido a fracasos len las cosechas y mala administración
sembrar nuevos cultivos.
-4
Bdurante sus primeros quince años en la región; como resultado,
Sin embargo, el crédito no sólo es importante cuando se estáijj
Kse ha hecho más selectivo en sus operaciones de préstamo. Se
cultivando nuevos productos. La mayoría de las cosechas lo rgi
Retiró de varios ejidos a consecuencia de fuertes pérdidas y sólo
quieren en cierto grado y la facilidad de acceso a la ayuda ffil
■foresta a los campesinos que han tenido más éxito en las comu­
nanciera es un determinante primordial de la prosperidad de3
nidades en que actualmente trabaja,33 Las operaciones del Banco.
campesino. En un país en desarrollo quizá el crédito sea escasea
e incluso más en una región próspera como la Tierra Calienta MÍ*Muchos de estos préstamos apoyaban la decisión política de ayudar a
en donde las demandas de crédito aumentaron, dramáticamej|l Kps ejidos colectivos de Lombardía y de Nueva Italia a cualquier costo. Estos
Kxpcrimentos en la agricultura comunal eran los ejemplos de lo que podía
te, en un período muy corto. Debido a esta situación, no
188
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
Ejiclal se han concentrado en el maíz, algodón, limón y arroz;
también ha jugado un papel empresarial importante para es­
timular la producción de algodón y reconstruir los huertos de
limoneros que habían empezado a decaer.
La influencia del Banco Ejidal fue de gran importancia para
estimular la expansión de la producción de algodón en la Tierra
Caliente. El banco construyó una planta despepitadora de al­
godón en 1956 con componentes usados de otras plantas, que
habían dejado de trabajar en otras partes del país, y empezó
a financiar la producción de algodón. En 1956, proporcionó
crédito para 197 hectáreas de algodón34 y aumentó sus opera­
ciones a más de 2 000 hectáreas en el año siguiente.35 Hacia 1960,
había aumentado aún más sus operaciones para cubrir más de
3 000 hectáreas. En 1964, prestó dinero para casi 12 000 hectáreas
(cuadro vi-10) y estaba operando una segunda planta despepi-,
tadora con maquinaria de alta velocidad para procesar la mayor
producción; esto representó más de una cuarta parte de la su­
perficie sembrada total.
El Banco Ejidal supervisa el cultivo de algodón desde las pri­
meras etapas de preparación de la tierra hasta la cosecha y pro­
cesado de los productos. Proporciona crédito en efectivo para
cubrir los costos de producción directos, tales como el pago a los
peones agrícolas y a otros empleados y los gastos de vida de la
familia del campesino, durante la estación de crecimiento. Pro­
vee el resto del crédito en especie en forma de productos qub
micos y semillas, maquinaria rentada y servicios, como ayuda
técnica y despepitado del algodón que después deduce del valor
de la cosecha que vende en el mercado mundial, junto con el(
algodón de otras zonas productoras, como agente de los pro-.;
ductores. Así el cultivador obtiene ganancias por la producción ••
y procesado de sus productos y no tiene que pagar a un in-’
tcrmediario por su disposición, ya que el banco sólo carga lo$|
costos incurridos en la administración de sus servicios más unj
cargo, por interés mensual, del 1%.
.ó
La importancia del banco en el financiamiento de la cosecha-^
de algodón está no tanto en el volumen de sus operaciones, que|
hacerse por medio de la reforma agraria. Este apoyo se ha hecho
lectivo en los últimos ocho años. El banco también se retiró de
dos en donde las políticas de préstamo fueron influidas, en un
por la política. Su actual administración parece tratar de manejar
sobre una base de obtención de ganancias,
aÁ Banco Nacional de Crédito Ejidal, S. A. de C. V., Boletín de
Especiales, México, viii, 88, 15 de mayo de 1957.
30 Id., ix, 130, 10 de .julio de 1958.
189
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
más
otros ¿O
principio
al band|l
TÍ
.. CUADRO VI-10
Crédito agrícola en la Tierra Caliente
: Fuente y
’• producto
:
% de la
cosecha
financia­
da con el
préstamo
Superficie cubierta
(hectáreas)
Crédito otorgado
(miles de pesos)
BANCO NACIONAL
DE CRÉDITO EJIDAL
k
1964/65
. Maíz
Algodón
Arroz
, Ajonjolí
Ganadería y
apicultura
Otros^
15 052
56 054
1 843
11 667
960
1 582
9.5
27.8
8.0
13.2
.1 584
52 195
1 325
485
257
208
*
BANCO REGIONAL
DE MICHOACÁN
. 1965/66
- Maíz
c Algodón
■Ajonjolí
; Frijol sorgo
; Ganadería
i BANCOS PRIVADOS
enero de 1965
Agricultura
5 Ganadería
f Plantas despepitadoras, 1964/65
6 Algodón
[ Empacadores de
I melón, 1965
|: Melón
6 409
■ 2 277
2 777
752
595
14 472
11.7
6.9
’ 5.4
n.d.
926
12 030
338
178
1 000
13 881
10 593
3 288
■ 27 500
11 000
65.5
1 10 000
100.00
33 000
Incluye frijol, ingenio azucarero y equipo de bombeo,
£n. d. No disponible.
^.'fuentes:
|Banco Nacional de Crédito Ejidal, oficina de Apatzingán, Departamento de
B Contabilidad.
|'Banco Regional de Michoacán, oficina de Apatzingán, Departamento de
| Contabilidad.
I Bancos privados, Banco Nacional de México, S. A.
.:>^l ^Plantas despepitadoras y empacadores de melón: los cálculos los hizo el
Ájl |autor; tienen una exactitud con un campo de variación de aproximadaLuiente 15%.
190
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCA
representan más de una cuarta parte de la cosecha, sino en
ejemplo que proporcionó de lo lucrativo de tal empresa.
intereses privados observaron de manera atenta los resul
dos del banco del gobierno y respondieron a los resultados
vorables con una inversión adicional en plantas para el proces
inicial del algodón en bruto y con créditos para la producc
del mismo. Aunque el banco proporcionó una gran parte
crédito para la producción de esta cosecha, en las primeras
pas del cultivo del algodón en la región, el ejemplo que es
bleció, dando apoyo financiero a este producto muy costoso y
procesado del algodón en la región en sus propias despep
doras, fue de gran importancia para inducir a la empresa p
vada a participar en la región. El Banco Ejidal por si mismo
podía financiar la expansión adicional de la cosecha debido
la falta de recursos financieros que plaga perennemente a
institución.
En años recientes los recursos financieros del banco han
mentado y se han expandido sus operaciones de crédito en
algodón. El sector privado se ha retirado un poco a medida
aumentaban los costos de producción del algodón y sus gan
cias marginales disminuían. Por tanto, incluso después que
banco tuvo éxito para estimular los intereses privados, para
asumieran la responsabilidad por una gran parte de la prod
ción de algodón, ha continuado conservando su posición co
una importante fuente de financiamiento para las cosechas y
dado crédito en casos en que las plantas despepitadoras priva
estaban renuentes a continuar financiando la cosecha. Las o
raciones del banco con el algodón pueden considerarse como
esfuerzo cooperativo, que incluye tanto al banco como a
ejidatarios elegibles para el crédito. El problema con la situac
actual es que Ja tierra que se ha puesto bajo cultivo ha pro
nido de las partes más prósperas de la zona. Como resulta
hay continuas quejas de discriminación contra las secciones me
afortunadas de la región.
Más recientemente (1965-66), el banco ha empezado a ejer
una influencia importante en la rehabilitación de los huertos
limoneros en la Tierra Caliente. La Nacional Financiera,
co mexicano de desarrollo de propiedad pública, tran
al Banco Ejidal una gran planta procesadora, para que la
siera a trabajar. Ha estado trabajando a una capacidad con
rableniente menor que la total, debido a una demanda i
cíente en los mercados de exportación, pero recientemente fí
un contrato para la exportación de concentrados de jugo
limón y derivados oleaginosos. En un esfuerzo para alentar
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
191
los ejidatarios a que mejoren sus huertas, ha proporcionado cré­
dito para producir la fruta y se ha prometido comprarla al ma­
durar. Esta planta es la más importante productora de derivados
del limón, en 1a- región, y puede transformar el fruto en jugo,
ácido cítrico y aceites, además de preparar los desperdicios para
forraje y empacar la fruta para los mercados interiores y exte­
riores.
Las actividades innovadoras del Banco Nacional de Crédito
Ejidal no se limitaron al algodón y limón. A principios de los
años cincuenta, el banco se unió a otros intereses, ya estable­
cidos, para financiar la producción de melón cantalupo para
exportarlo al prometedor mercado norteamericano.313 Se. quejaría
que este financiamiento complementara el crédito proporcionado
por los intereses norteamericanos en el melón, que existían en
la región desde hacía varios años, de manera que se pudiera
-aumentar la superficie sembrada con melón. Este programa ter­
minó muy rápido, ya que el capital mexicano principió a fi­
nanciar está lucrativa cosecha y la aumentó a los límites de la
;demanda por el producto. El hecho de que el banco no pudiera
. hacer arreglos satisfactorios para la venta del melón en el este
de los Estados Unidos redujo las ventajas que el banco podía
proporcionar a los ejidatarios sobre las fuentes privadas de cré­
dito, y el banco se retiró de este campo en 1957.
Recientemente el banco empezó la construcción de un ingenio
azucarero en Gabriel Zamora (Lombardía) para complementar
..los planes para la siembra de caña de azúcar en varias partes de
la zona. Los experimentos en la estación agrícola, que el banco
í ayuda a financiar, indican que los rendimientos serán casi cua­
dro veces más grandes que los obtenidos en 1950, cuando la caña
■de azúcar estaba en plena decadencia en la región. Hasta ahora
Ise han hecho nuevas plantaciones y aún es demasiado pronto
’a juzgar los resultados de este experimento. Es indicativo, sin
bargo, del estímulo que el banco da a la diversificación adinal de la economía agrícola de la región.
El banco'también construyó un molino de arroz para procesar
cosecha de arroz que estaba financiando en Lombardía y
teva Italia. Esta cosecha ha perdido importancia en años re­
192
DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPECEFECTO
i
193
operaciones de una planta despepitadora, propiedad de algunos
de sus prestatarios, Todas estas operaciones son, sin embargo,
en una escala mucho menor que las del Banco Ejidal. Su re: dente ingreso en las actividades ganaderas indica que el banco
, desea seguir la tradición del otro banco nacional en la región,
estimulando la diversificación de la economía regional. De acuer­
do con esto, el director del banco estaba entusiasmado del
posible papel que su banco podía jugar para evitar el están ca. miento, debido a la demanda limitada por los productos que
- en la actualidad se producen en la región/9 Por consiguiente,
ambas instituciones combinan sus funciones normales de provi. sión de crédito agrícola barato y ayuda técnica con nn esfuerzo
empresarial, para asegurar la prosperidad futura de la región
mediante la diversificación de la producción.
. En el sector privado, el ejemplo más notable de tal actividad
empresarial, con beneficios importantes para la región, es el au­
mento de la producción de melón y sandía. En la. actualidad
estas cosechas son financiadas por los cinco o diez ’ empacadores
interesados en conservar la producción para poder cumplir sus
contratos de abastecimiento de fruta en los Estados Unidos. Se
sembraron por primera vez en la región desde hace más de dos
décadas como respuesta a las posibilidades que ofrecía el mer­
cado norteamericano y fueron financiadas por intereses norte­
americanos. En los años cincuenta, los norteamericanos alenta­
ron a sus trabajadores mexicanos para encargarse del financiamiento, producción y envío de la fruta, y permanecieron en la
.región para asegurar un abastecimiento suficiente de frutas du­
dante los cuatro meses de invierno en que la Tierra Caliente
[abastece al mercado. A la vez, los norteamericanos se están tras­
ladando a otras partes de México en busca de fuentes adicionales
de oferta de melón y otras frutas.
ó En 1965, se prestaron, aproximadamente, 33 millones de pesos
.'a los agricultores para financiar su producción de melón, du£Tan te los tres meses del período de cultivo. Los mismos agricul<ÍAV<»r --------- ---------- ’--------Atoles proporcionaron otros 25 millones de pesos para
pairar
los r -O"- —"
X
i
40 N
37 AI hacer esto, el banco estaba fuertemente influido por la intervenaónvWostos que 1
que los
prestamistas
no cubren.40 No se cobra
ningún
los Costos
prestamistas
no cubren
l' in­
•
C0^la ningun in­
personal de individuos importantes en la región. Los arreglos políticos y las ..Wterés por
1 debe
1 •vender
° 56
teréslos
porpréstamos
los préstamos, pero el cultivador
su coamistades establecidas, durante los años cincuenta, fueron importantes para.JE^ ni
, j
’
, Cultivador debe vender su co­
£ mpacaaor que proporciona el crédito. La mayor parte
ios intentos de consolidación del banco y causa de las quejas de que
don (el cuadro vi-10 muestra que en 1964-5 el banco financió, 1
aproximadamente, 1 500 hectáreas de ajonjolí, 1 800 de maíz, y I
menos de 1 000 de arroz),
Lo más notable de la historia del banco en la Tierra Caliente
ha sido su papel de innovador y empresario, estimulando,. en :
la región, la diversificación de su economía agrícola y conven- ■
deudo a los intereses privados de la conveniencia de nuevas lí­
neas de inversión. Este panorama contrasta con la idea gene- :
ral de que banco es un instrumento ineficiente del gobierno
mexicano para subsidiar a los campesinos atrasados del sector ;
agrícola colectivo. En la Tierra Caliente ha tratado de eliminar
sus pérdidas y ha estimulado activamente la expansión de la
agricultura comercial en cooperación con los intereses privados.37
El segundo banco de crédito publico es el Banco Regional de
Michoacán, sucursal del Banco Nacional de Crédito Agrícola, que
proporciona crédito para los pequeños propietarios agrícolas en .
toda la nación. En la Tierra Caliente, el banco adquirió los ac­
tivos de un gran terrateniente, William Jenkins', cuando murió •
en 1963; esas instalaciones se usan ahora para beneficio de los
prestatarios del banco. Aunque sus operaciones son mucho me- .
ñores que las del Banco Ejidal, han aumentado considerablemente ■
en años recientes y con este crecimiento ha llegado un esfuerzo
para ser más innovador. En 1960 proporcionó menos de 2 midones de pesos de crédito para 1 500 hectáreas de tierra no irri­
gada cultivada con maíz, en tanto -que, en el ciclo agrícola de A
1965-66, prestó más de 14 millones de pesos a los propietarios j
de más de 6 400 hectáreas para maíz, algodón, ajonjolí, sorgo y j
ganadería (cuadro vi-10).38 La mayor parte de este crédito fue; i
para 2 777 hectáreas de algodón, pero el banco también prestó: «
un millón de pesos para 1 250 cabezas
*j
de ganado en un expe
rimento para determinar cuán atractivas podrían ser las empresas
de ganadería. En total, financió cosechas en cerca de una quinta 4
parte de la tierra de propiedad privada en la Tierra Caliente, ¿U
El banco también opera una planta de hielo, y financia lar<i
banco era el instrumento de las personas que estaban en mejores
mej‘oresPR­
L’* Entrevista con Benilo Casares, director del Banco Regional de Michoasicioncs. Probablemente una gran parte de las pérdidas, durante los primeros;!
^án, abril de 1966.
años, se debe a estos arreglos y algunos ejídatarios que ya no tienen acceso
al crédito del banco fueron, posiblemente, las víctimas de la campaña parad». 10 Estos cálculos de la cantidad de crédito
, proporcionada por los empaeliminar esta influencia perniciosa.
««lores y los cusios complemenúrios pagado?
’
' s, están su­
38 Banco Regional de Michoacán, oficina de Apatzingán, Departamento dej»Jdos a amplios márgenes de error auizá d? i • - ■ L pestnos,
un
co ambos casos
;t
I3Sttí
Contabilidad.
, J *partir de las cifras mencionadas.
194
; EFECTO
DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
J
195
el crédito para la producción, no proporcionado por los dos bandel crédito se proporcionó con fondos mexicanos acumulados de :
.
beneficios pasados obtenidos de las cosechas de melón en la j eos gubernamentales. Otorgaron créditos para más de 27 000 hec­
táreas de algodón en 1964, de, aproximadamente, 110 millones
Tierra Caliente; algunos cultivadores fueron financiados por !
! de pesos, más del doble del crédito dispuesto por el Banco
;
el capital norteamericano, pero esta fuente de crédito ha perdido
Ejidal para ese propósito (cuadro vi-10)A Las plantas despepiimportancia en el transcurso del tiempo.
.
i
La actividad empresarial de los norteamericanos al establecer! ;; tadoras fueron obligadas a ampliar su crédito para asegurarse
un mínimo de oferta de algodón en rama y un rendimiento
el cultivo del melón en la Tierra Caliente no fue única; tam­
; adecuado de su inversión fija en su equipo para desmotar albién se presentó en el norte de México con respecto a los pro­
? godón. Las plantas despepitadoras tienen acuerdos semejantes a
ductos agrícolas y otras frutas, que pueden transportarse en ca­
p los del Banco Ejidal con los abastecedores locales de insumes
mión. En la actualidad se amplía hacia otras partes de México
agrícolas, de manera que los cultivadores recibieron la mayor
y el capital existente se desplaza a nuevas zonas a medida que
parte
de su crédito en especie. También supervisan al cultiva­
los intereses mexicanos penetran en las zonas establecidas. Este |
dor y le proporcionan ayuda técnica para asegurarse que los
cambió del capital extranjero hacia el nacional es alentado por i
\ abastecimientos y el dinero se usan adecuadamente; al prestamuchos norteamericanos, porque significa que pueden continuar |
; tario se le cobra por estos servicios, aunque en realidad se trata
ampliando sus fuentes de.oferta en los productos ya establecidos^
!
y experimentar con nuevos productos sin aumentar su inversión, j de una forma en que el prestamista protege su inversión. A
diferencia de quienes piden prestado a los bancos gubernamenLos norteamericanos también proporcionan la oportunidad dej
tales, la mayoría de los cultivadores que reciben crédito de los
diversificar por igual la agricultura de nuevas y de antiguas re- j;
procesadores
deben vender su algodón en bruto a las plantas
giones. En la Tierra Caliente, por ejemplo, se están sembrando,]
l
despepitadoras
y no pueden obtener ganancias por el despepite;
sobre una base experimental, calabazas y otros vegetales de 1
; la diferencia puede ascender hasta 1 000 pesos por hectárea, una
valor, para los cí ales existe un gran mercado potencial en los;
consideración importante en vista de los crecientes costos del culEstados Unidos.
,
1 divo del algodón. Al prestatario se le cobra un interés mensual
J
La oferta potencial de este tipo de inversión extranjera en!
del 1.5% por el dinero que le prestan las plantas despepitaMéxico está aumeruando probablemente y puede jugar un papel;! doras.
cada vez más importante, en la exploración del potencial pro-i
ductivo de nuevas regiones y de las posibilidades de diversiÍH, < Un tercer grupo de prestamistas son los comerciantes que
; ¿venden insumos agrícolas y otros bienes a los campesinos loca­
cación en otras zonas. A medida que la tierra y la mano de obra,
dles. Los abastecedores de insumos dan crédito en forma de pagos
se encarecenh ch
en lúa
los Estados Unidos, se
está -----estimulando
el desq
— ---t , A¡ ¿diferidos por los bienes comprados antes de la cosecha y cobran
jal°J^Jyun
7
México
de
nuevas
fuentes
de
oferta
a
más
interés
mensual
1 W Fedel 1.5%. Es raro que proporcionen efectivo
un* nterésdel
arrollo
r olio en México de nuevas iutni.es ue
VelÍf
mensual
Los norteamericanos han estado dispuestosi a pioporciona^^w|os gastos de subsistencia o el pago diario de los trabajacapital
de trabajo y la ayuda técnica para tales empresas,
flores. Puesto que estas empresas venden semillas mejoradas,
ca
zadas generalmente, en cooperación con mexicanos emP^
^fertilizantes e insecticidas, sus clientes son miembros de la parte
*En vista de los recursos limitados para la exp<
dores
m¿s avanzada técnicamente. Estos prestamistas
servicio de extensión agrícola y la pequeña canil ac
tpor lo general tratan con personas entendidas en combinar £erdesean trabajar en Jel campo, esta
■ , d utilizantes, mejores semillas y agua, para obtener rendimientos sa­
. ... la productividad de la agricultura
de ayuda paranemos
mejorarque
embarg0>
c¡fmpes¡nos no pueden obtener
y podría ser estimulada por el gobierno.
ILiDXa
Los intereses privados de las despepitadoras de algodón taíft ^“it
*a o de los bancos locales y deben recurrir este/rV.UiJLCllí;
mas
|caro;
otros podrían no querer hipotecar
susv tierras
como
C Io ma lo exige
bién proporcionan crédito para asegurarse una fuente estable <61 típl rw>rlíii"
_____
_____
___
_
'
x
í-.. zf .a. a ...i I—--— V
*^algodón
//.
en bruto para sus despepitadoras y contratos de entrega^ pedir prestado a un banco/ya que la'podrían"
A diferencia de los distribuidores de melón, estas compañía
.
r < pti er
41 Ésta es una estimación
burda que probablemente varíe en un 15% de
fueron las primeras en el desarrollo de la cosedla; a] contrario
^la cantidad prestada por las plantas despepitadoras en 1964-5. La mayor
su tardío ingreso.es bastante sorprendente.
.. [iparte de este capital proviene de organizaciones nacionales que financian la
í producción en varias zonas de cultivo.
Las plantas despepitadoras de algodón proporcionan casi to¡L
i-.- i---------------------------- i
’’
■
_
196
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
197
ces de juzgar los resultados de sus clientes y asignar la escasa
caso de fracaso en la cosecha. Los abastecedores de insumos agrí­
oferta de capital de trabajo entre los más productivos. Haciendo
colas, que se benefician con las mayores ventas, serán más bené­
esto, asumen un gran riesgo, ya que muchos prestatarios no
volos que los bancos para quienes no Ies cumplen en el plazo
pueden dar ninguna garantía por los préstamos. El alto costo
f i j ado.
del capital para los campesinos que tienen que recurrir a estas
Otros mercaderes locales proporcionan ayuda financiera para
fuentes de crédito es un reflejo del menor potencial productivo
algunos campesinos que siembran cosechas tradicionales: maíz,'
y del mayor riesgo de las técnicas de cultivo más primitivas. No
arroz y ajonjolí. Éstos se siembran sin fertilizantes y no se usan
obstante, es indudable que los comerciantes obtienen ganancias
semillas mejoradas; generalmente, el maíz y el ajonjolí no tienen ;
monopólicas por sus actividades financieras.
irrigación durante la época de lluvias. El crédito es necesario 1
Por último, el sistema bancario privado proporciona una pe­
para los gastos de vida del campesino y su familia durante el
queña cantidad de crédito para la agricultura en la Tierra Ca­
ciclo agrícola. Éste es el tipo de préstamo más arriesgado para
liente. La cartera total de los bancos privados en la región, para
el prestamista ya que los campesinos son los menos avanzados y
préstamos agrícolas, era de, aproximadamente, 6 millones de pe­
usan técnicas primitivas cuyo éxito depende del clima. Si la
sos en 1961 y aumentó hasta casi II millones en 1965 (en com­
cosecha fracasa, como sucede con frecuencia, el prestamista pier-.
paración
con más de 50 millones de pesos de préstamos para
de lo prestado. Es también el más desventajoso desde el punto de
d cultivo de algodón del Banco Ejidal, en la cosecha del año
vista del prestatario, por los términos poco favorables con que ¡
anterior). Los intereses ganaderos pidieron prestados 1.8 .millo­
se otorgan estos créditos (con frecuencia, un interés mensual del
nes de pesos en 1961 y aumentaron sus deudas hasta 3 330 000
1.5% más un descuento sobre el precio de mercado prevaleciente).;
pesos a principios de 1965?2 El rápido aumento en los préstamos
La cantidad de crédito disponible del .Banco Ejidal para estos
(empezando con una base muy pequeña) fue en parte el resill­
productos (cuadro vi-10) es limitada y por tanto la mayoría de;
ado de fondos provenientes de la Alianza para el Progreso, que
las personas que no pueden financiar su propia producción/
$e volvieron a prestar por el sistema bancario privado a los
con los recursos de la familia o por su trabajo diario durantej
pequeños campesinos con bajas tasas de interés (6% anual), Esel ciclo agrícola deben vender su cosecha “a tiempo”,*esto es,
j jos bancos no podían prestar a los ejidatarios porque no tienen
antes de que sea recogida.
j&da para dar como garantía por los préstamos. No pueden
Este crédito permite a los intermediarios tener una influencia
pesad Mpótecar sus tierras y no tienen maquinaria agrícola u otro
significativa en los precios de las cosechas de la región, a pesar
cosecim^
ug
ograma del huT° 6e capital que garantice el préstamo. Como resultado, los
de los esfuerzos los precios ríe~las
----—x.n nmarai
del gobierno para pr o por ci oirá
subsistencia/ Uncos otorgan préstamos con un interés mensual del L.
.5%, sólo
apoyo a un j precio mínimo para los agncu
rpntavW ^os agricultores comerciales de más éxito,
l —el precio
.
oficial del maíz fue ae
.
..
......
„
con mayores proAunque, en 1965,
i
el campesino, en raras ocasiones, _____ recíbi'ó"m¿
_____ _ "de 80 u 85 cerffwdades y que dan como garantía su tierra y equipo.
/Hemos visto que en la Tierra Caliente el crédito agrícola ha
tavos por su producto en época de la cosecha, a pesar delj
(ido
la cantidad
de tierra
agenciagubernamental
gubernamentalque
queapoya
apoyalosxu»
, importante para determinar
ueiermmar
la
> semofrecimiento dedelalaagencia
precio»
L ........
j. muy
a los productores. Layada para cada una de las cosecha tantldad de tierra semde comprar cantidades ilimitadas
...................de■ 1maíz
i
Comercia^e^ cuyo cultivo
personas, a quienes se les exigía vender a los comerciantes qtuffi relativamente costoso v n- >s
les habían prestado dinero para la cosecha, con frecuencia recil^drán tomar ventaja del poten * C.eterminar CU£íles campesinos
rra.
La
ben 70 o 75 centavos por kilogramo, precio demasiado bajo. Loycisión de proporcionar crédito^- economíCO ke berra. La
compradores de arroz y ajonjolí tienen, incluso, un control
**
determinante de la estructura aeiEas cosechas es el prin-cosechas de
ie\U íaníe en ^as c« ^cL._
yor sobre el mercado, porque son menos y las cosechas deben» región. El nan?l m
d
l. como
de C1 lka E ida
procesarse antes de poderse usar.
novador en la canaLSn
_ ____ JKJ ^ í ^ « VI líXS (.1^
Estas fuentes de crédito han jugado un papel importante
reemsos un
hacia
las cosechas
aportación de mayor valor >y en proporcionar
ejemplo
insHictivo, ha sido decisivo en el desarrollo pasado de la región. Las
llenar el vacío dejado por las otras instituciones. En ausendwuc
«entes de crédito privado empezaron a ofrecer capital de trabajo
de facilidades de crédito proporcionadas por los comerciantes yPei
las casas de abastecimientos agrícolas, muchos campesinos HQp
Banco de México,
hubieran podido sembrar su tierra. Estos prestamistas son capaq
’>
'RpmfiC iricf-rt roía z-.,, 1 '“V"
■
*■
■
■
198
, EFECTO DE LA COMISION .DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
199
*arreglos ilegales o semilegales. 3 Esta práctica provoca
a otros sectores de la economía agrícola que los bancos del go­
muchas
bierno no podían o no querían satisfacer. La disponibilidad de : críticas por la forma en que se ha desviado ia reforma agraria
crédito privado o público para algodón» sandía y melón» fue mexicana de mejorar la suerte del campesino. Según esto, per­
de gran importancia para determinar cutí Ies campesinos han sonas influyentes y agresivas aprovechan su posición para trabaprosperado gracias ai programa de inversiones públicas. Con fre­ i'jar grandes extensiones de tierra rentada a los ejidatarios. Un
examen bajo este punto de vista indica que pudiera haber me­
cuencia, el crédito para las otras cosechas permitió al presta­
nos injusticia y más beneficios económicos por esta práctica, de
mista controlar mejor los mercados y sus prestatarios.
do que desearían creer los críticos. En circunstancias normales
sería poco inteligente que alguien rentara su tierra si cree poder
Tenencia de la tierra
obtener un mayor provecho trabajándola él La investigación
de campo en la Tierra Caliente no indicó razón en contra para
Estos cambios en la agricultura de la región no se han originado .
-que el principio anterior se aplique allí. Se buscaron explica­
sólo como una respuesta al programa de inversiones de la Comí- ’
ciones de las, posibles diferencias en los rendimientos potenciales
sión del Tepalcatepec. Además de la importante influencia del'
de la misma parcela.
crédito agrícola en la producción de la Tierra Caliente, los ajus­
Muchos ejidatarios no tenían acceso a un crédito suficiente
tes en ios patrones de la tenencia de ia tierra fueron un preñe-;
piara utilizar su tierra en la más valiosa de las cosechas comer­
quisito importante para el éxito del proyecto de irrigación. Como ■
ciales. En algunas comunidades no había disponible crédito al­
hemos visto, la expropiación de las tenencias de los Cussi re­
guno, y en otras no era suficiente el crédito disponible para
presentó
un cambio importante
en la estructura de la tenenci^ í
presento
tin
iu;~--.. _
’ t -ia—tierra
- — i„y,alta
Hp la mitad
la tierra
estáj de la tierra está/ tque todos los campesinos pudieran sembrar las cosechas comer­
de
enorílarn:U
actualidad,
másdede
la mitad
nominalmente en manos de ejidatarios cuyos derechos están gaq ciales más costosas. Esto limitó el número de cosechas enne las
rantizados bajo la Constitución.
• -J que podían elegir los campesinos: la tradicional del maíz, ajon­
jolí y, en algunos casos, arroz.
De manera irónica, algunas de las tierras distribuidas bajo
£ A su vez, la -disponibilidad de crédito es una función de la caprograma de reforma agraria han pasado al control de los
Btcidad técnica del individuo y de su experiencia pretérita con
tereses monetarios privados que rentan la tierra a los ejidatarios;
s cosechas comerciales. Así, una persona que nunca ha cultipara la explotación comercial, debido a qv? —.Utímnc caz
>ado algodón y no tiene experiencia con los fertilizantes y los
recen del capital de trabajo para una adecuada utilización de|
controles químicos de plagas no tiene mucha probabilidad de que
las tierras irrigadas. Tales arreglos de arrendamiento empezaron^
le otorgue un crédito para sus cultivos. El Banco Ejidal propoco después de 1960, cuando hubo necesidad de grandes inverj
ferciona alguna ayuda técnica al igual que lo hace el agente
siones para mejorar la tierra, de manera que pudiera utilizars®ot
'Kal de extensión agrícola, pero sus recursos son limitados y la
maquinaria agrícola. El suelo en la Tierra Caliente es muy.
coso y el costo para limpiar las parcelas estaba más allá de lo®ayor parte de
’ i -su atención es para las comunidades que tienen
cu“lLlIH<4aues
*"medios
?
de los ejidatarios. Se elaboraron arreglos legales con lájpás éxito/Las fuentes privadafhan
? técnica,
ÍJase L
personas que deseaban trabajar la tierra, Los términos usualdEero, nuevamente, aquí el éxito II ^P^do ia-p.—
a.*v*ama3.exit0
aj.n¡. la: tu y
211AS
que ellos limpiarían la tierra en lugar de pagad™ ™
y Lis
tilden que les penni¿obres no han podido obtener ,la ayuda
inicial
consistían en
1
1 -—1—---- i« (inrv'í /lurantá
iría .cambiar sus métodos de producción.
j **
-•-y —*tendrían el derecho de trabajar la tierra durant^
una renta
|¿Por último, muchos no habían trabajado en tierras irrigadas
dos años, por lo general, tiempo suficiente para obtener un pr<¿
Hites de la creación de la Comisión, y hay una falta de comvecho adecuado por la operación de limpia de la tierra. Despué|
6’ensión muy generalizada sobre la influencia del
de esa operación, que limpió aproximadamente 40 000 hectárea^
agua proveinversionistas'
■ ®;
algunos continuaron rentando su tierra a los "inversionistas'^
^
nropias
La oficina local de la Secretaría de Agricultura calculó
trabajaban como peones por un
salario diario ei 1 i
lma cncuesca> cerca {lei G8% dc Ia Li(;rra epdaI obrada
rras y en otras parcelas.
- 1b
fiaba rentando, situación que correspondía al 89% de k
Ya dijimos en el capítulo ni que esto es ilegal,
pero los
fuá|
,_
_____
.
x
.
Cupatitzio-Cajones en 1963. Para 1965 la oficina caí
w
ia aqiiHUi
<-i prefijen **-q-------------:<mn»‘arlo Gran parte del
65% de la cosecha de algodón se recogía en tierras reneclonarlos
de lacuregión
cionanus
uc ni
a
Wados.
dón, sandía y melón se siembra en la tierra ejidal, rentada, bajé!
UV+V
una i i~i.ii..
*
_ ...
------ —
'i
200
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC :
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
201
,i
niente de una fuente estable sobre las cosechas. Incluso, después j i cuencia se argumenta que el traspaso de sus tierras a los peones
de más de cinco o diez años de irrigación regular, muchas per- j ' que la trabajan actualmente significaría una disminución en los
sonas causan graves daños a sus cosechas por la aplicación de j altos rendimientos obtenidos en el presente, porque los trabajamuy poca o de mucha agua. De esta manera, los rendimientos j dores carecen de crédito y de experiencia técnica. No hay cifras
son incluso menores en las cosechas de subsistencia, de lo que ; § que nos permitan comparar los rendimientos de las grandes y
podría esperarse de un campesino con alguna experiencia en la J las pequeñas tenencias en la Tierra Caliente. Sin embargo, de­
nueva tecnología.
] bemos esperar que las pequeñas propiedades agrícolas tengan
El crédito insuficiente y la falta de conocimientos técnicos | cuando menos rendimientos por hectárea tan altos como los de
se combinan para hacer más atractivo a algunos campesinos ren- s i*las grandes propiedades agrícolas, a .menos que tuvieran una
tar sus tierras (o arreglar alguna variante de esa forma que | i., mala administración o padecieran gravemente por falta de crésea más legal) a otras personas que pueden hacer un mejor uso J : dito, ya que se aplica más mano de obra por hectárea. Además,
de ella. Los campesinos parecen considerar sus derechos de usu-J el actual * arreglo Xes'"................................ ye wicí ___ be una distribución del
fructo como donaciones de capital, las cuales tienen el derecho-F
. .continuo
al idealesdeimposible negar que
¡ ingreso más equitativa,
No obstante,
de utilizar en una forma que lleve a un máximo sus ren din lien- J el actual panorama de una exitosa agricultura comercial, de pro­
tos esperados. De esta manera, las alteraciones de la estructura piedad y financiamiento privados, es impresionante y está con­
ejidal ideal son benéficas desde el punto de vista del aumento ■! tribuyendo, considerablemente, a las metas del desarrollo regional
de la productividad de la tierra disponible para el cultivo. Ade-q ; y nacional.
más, con frecuencia, el ejidatario trabaja su propia tierra yd
adquiere el conocimiento técnico sobre el cultivo de las cose-z ''"Bu industrialización de la tierra caliente
chas más valiosas que puede, y con frecuencia lo hace así, aplí4
car a su propia producción en años futuros. De esta manera, elj
|La economía de la Tierra Caliente no se ha diversificado mucho
arrendamiento puede considerarse como una mejora para el biert-T
ten respuesta a los estímulos proporcionados por el programa de
estar individual debido a que el campesino se transforma en unj
¡inversiones d'e la Comisión del Tepalcatepec. Durante las dos
agente libre, al grado de que desea pasar sobre la ley para disvi
¡¿décadas pasadas la infraestructura se amplió de tal manera que
poner de sus recursos en -manera más productiva posiblej
be dispone fácilmente de transporte y energía a bajo costo. La
dada su propia preferencia' y sus funciones de producción pú-a
actividad económica fue estimulada por el aumento en la tierra
.cultivable y el incremento en el valor de la producción agu­
si bles.
Una segunda distorsión de la legislación mexicana sobre re¿Jf
atóla.
A pesar -de vauuj
estos cambios, han ocurrido pocas adiciones al
forma agraria, discutida también antes, es la tenencia por unBhúmero
ios, nan ocurrido
_________ j m¿t yoría de ellas son sa­
esas
solo propietario de una superficie mayor del máximo permitidqptfUif.^
J^„
Rustríales
y la _mayorú
télites . de los nuevos productos agrícolas
de la región.
para la Tierra Caliente, por lo general mediante familiares di
Éste es el resultado que se hubiera previsto mediante el aná“prestanombres”. Parte de la razón por la cual la reformauiagrág
irt *«■ x —................ °
de Hirschmann de los efectos en cadena, tratados en el
U ¿¡viduales fue la inefiwprimer capítulo. Los productos primarios no proporcionan un
de ia ra¿UU i^fue
ría limitó el tamaño d~
ínAivíHuales
ineff
s \nla
e
- Áde las
rrevo|ucionario. ®estímulo ele amplia base para la industrialización de una región.
ciencia del latifundista en i
el
1
'ue>a un papel tan importa^OSegún Hirschmann, incluso con las técnicas más modernas de
México actual, la tierra yaia ya no juega un papel tan importante^
n0 1 en alguna
io
social
como
lo
hizo
ocasiónj
"
«producción que requieren un gran uso de equipo de capital, lo-,
en términos de prestigio
uc
*
~f~
"je
de
tierra
no
cultivada
iWeíectos en cadena habrían sido muy débiles.44 débiles.44
MíHpuíálty
y la existencia ia de grandes super ici c S
. expropia.........
pación.
comprobación de esta
hipótesis
se encuentra
vita a la
. Así, se estimula la utilización eficiente
____
encuentra
en la c en la expeandes
tenencias
privadas
por la nueva estructura instituí
¿rienda en la —
Tierra
Caliente. La h
ii
mayor
parte
de la diversificade gn....... . .
L elemento que desaliente a hacéÉ
i.a mayor i
cional, aunque debe existir un
más
una
respuesta a Lus
SÍd° mfi
. - ca]
-apital
grandes inversiones en
’ 1 fijo, que no podrían recuperará Unidades de cXn^ A
en
lapido
ciccimiento
■ r----------------e
un
expropiada, Varios conocidos terratenientes. íl|
a población
míe a los efectos en cadena, hacia
adelante
si la tierra fuera
inducidos, estimalanla Tierra Caliente hacen’ uluj
un mi buen uso de su tierra empleando |
y
*
:r Slrategy of Ecotjomíc Dez’elopment, p. ¡09.
tecnología moderna y _ sembrando cosechas comerciales. Con M p Th.
ící
202
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCA
tes del desarrollo económico. Las compañías de maquinaria agrí­
cola y de productos químicos establecieron sucursales locales parg
vender sus productos. Varios grupos abrieron centros de servicio
para maquinaria agrícola y fumigación aérea para satisfacer las
necesidades de una tecnología agrícola crecientemente compleja, ;
No obstante, las actividades que provienen de efectos en cadena J
hacia atrás dan ocupación a muy pocas personas. Todas las ,
actividades manufactureras y comerciales emplean sólo una décima parte de la fuerza de trabajo de la región (cuadro v-5).
Desde el punto de vista nacional el importante aumento en el '
uso de maquinaria agrícola en la región pudo haber contribuido j
a efectos de cadena hacia atrás en la producción de equipo,
pero los efectos regionales fueron muy pequeños. La Secretaría '
de Recursos Hidráulicos informó que había 900 tractores en
uso, durante 1963, Un cálculo para 1966 nos da la cifra de J
2 000,15 También había 300 sembradoras y 371 vehículos de tía- J
bajo de todos los tipos trabajando en tierras irrigadas de la ■
Tierra Caliente durante 1963;46 el número aumentó notablemente j
desde ese año. Por último, varios aeropuertos dan servicio a
muchos aeroplanos pequeños que se ocupan de la fumigación
aérea durante las estaciones de cultivo de algodón y melón. El j
ingreso por ventas y servicios es mínimo comparado con los in-J
gresos agrícolas; toda la maquinaria agrícola empleada en la ó
región vale, probablemente, menos que la mitad del valor de ;•
la cosecha de algodón de 1965.47
La fabricación y mezcla de fertilizantes químicos fue la se ,
gunda industria en importancia, después de la fábrica de hielo, 1
en la región en 1960 según el censo industrial.48 Representó ,unayj
quinta parto del valor agregado en la cuenca, pero dio empleo
a menos del 5% de la fuerza de trabajo industrial. La mayoría ’¡
de los productos mezclados y empacados en la región se usan i
México, Sccrcf.n'ía de Recursos Hidráulicos, Dirección General de
trilos de Riego, Dcpm lamento ríe Estadística, Informe estadístico No.
ba mecenízííción . zígrícola en los distritos de riego, ciclo 1962-63, Méx
1964 Hicimos el cálculo para 1966 en colaboración con el agente de e
sión agrícola en la región.
Idem.
Esta comparación se ¡rasó en estimaciones sobre el valor promedi
varios tipos de equipo hedías por los vendedores. Se ha tenido en c
un margen suficiente de error para aceptar esta afirmación como indic
del orden de magnitud.
44 El censo indicó que iuliía una instalación de gran tamaño para la
ducción de artículos farmacéuticos medicinales en Apatzingán que, s
las personas entrevistadas en la región, nunca existió. Es probable
haya habido un error en la codificación y que los datos se refieran
fabricación y mezcla de los fertilizantes químicos.
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALO A1 EPI'T.
¿'■T>
localmente y no ingresan en los canales cíe clisiribucíón o e ;.-vil
de las compañías que operan en la Tierra Caí ñaue.
Han surgido otros elementos nuevos como paite del sector in­
dustrial regional. Los efectos en cadena hacia adelante han
creado “industrias satélites”, las cuales están muy rehirió nadas a
otra actividad cuyo valor agregado es pequeño comparado con
el valor del producto agrícola. La más nueva e importante de
: estas industrias es la planta despepitadora. En la actualidad hay
. diez plantas despepitadoras que pueden procesar el algodón cu
bruto antes de que se le envíe al mercado. Representan E mayor
/inversión privada de cualquier tipo en la región,4!t " de las
plantas son propiedad y son manejadas por el Ba:iu> njidah y
l sirven sólo a los campesinos que trabajan en tierras expropia[das bajo el programa de reforma agraria. La primera que operó
|..en la zona- se' construyó en 1956. Una de las instalaciones prip'vadas de-procesado es propiedad de una cooperativa y varias
j otras son propiedad total o parcial de grandes organizaciones
r nacionales con amplias operaciones en el algodón.
| Este procesado aumenta el valor del algodón, en cerca de un
120%. El precio rural de una tonelada métrica de algodón au­
gmentó en cerca de un 20% en 1964, de 2 000 a 2 400 pesos una
Evez que 'se ha despepitado la cosecha; para la cosecha como un
ítodo esto representó cerca de 40 millones de pesos. El total de
¡.inversión fija en esta industria probablemente no excede de 50
¡¡millones de pesos,-sólo, un poco más que el valor agregado por
¡el procesado ¿n un año. Estos establecimientos juegan un papel
limportante en el financiamiento de los costos de la cosecha de
I-algodón. Su capital de trabajo excede en mucho a la inversión
Ifija en las despepitadoras.
í Hay, además, una unidad para la extracción de aceites de la
tsemilla de algodón. En la actualidad la mayoría de las semillas
|se envían a otras zonas para su procesado. El Banco Ejidal platnea construir su propia planta de procesado en la 't ierra Calliente para evitar los costos del transporte de la semilla, increlínentando así las ganancias de los ejídat arios.
I Hay otras “industrias satélites’' en la Tierra Gaiiem.c. El B.-m
Ico Ejidal tiene tina planta secadora de arroz y una gíai> phmta
rprocesadora ele limón. Además, hay once proccsadoms de arroz
|.más pequeñas, siet,e plantas procesadoras de limón y cieno nimio
iro de empacadoras de melón y sandía. Probablcmonte la inverComo siete de las grandes plañí as despepitadora1, fueron oiimnám
Rlespiiés del‘censo industrial de 1961, no hay disponibles datos cimniiiatito/
gpmfiables para defender esta observación.
K
204
efecto de la comisión del tepalcatepec
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
205 ■
sión total en estos establecimientos no excedió los 15 millones
nación, y por tanto anula así las ventajas de contar con abun­
de pesos. Al igual que en el caso del algodón, la inversión fija . .
dantes ofertas de energía hidroeléctrica barata en zonas cercaes menos importante que el capital de trabajo utilizado para
- ñas. Las facilidades en el transporte son una espada de dos
financiar los costos de la cosecha. El .crédito ayuda a asegurar \
. filos desde el punto de vista del desarrollo regional: propon
tasas adecuadas de utilización de la capacidad de proceso y a 4
..'donan un acceso fácil a los mercados, pero también proporcíocumplir con los contratos de ventas.
J ' *nan un acceso fácil a los bienes manufacturados en. otras re
La falta de diversíficación en la zona resalta porque en 1960’ |
. giones. La región no ha podido atraer una. fuerza de trabajo
la principal industria de la región era la fábrica de hielo. Re- |
.'permanente adecuada a sus necesidades agrícolas, y su lejanía
presentaba las dos quintas partes del producto industrial y enr 1
zde otros centros de población hará más difícil atraer personas
pleaba más del 70% de
*j la fuerza de trabajo industrial. La pro
'calificadas para las ocupaciones industriales, incluso si estuvie*ducción- de hielo se ajustaba a las necesidacles comerciales ñor . .
¿ran disponibles.
males, pero durante la cosecha de melón y de sandía todo el
; El programa de inversiones de la Comisión ha tenido un éxito
hielo se usa para refrigerar los furgones en los que se trans- J
Ilimitado en el inicio del desarrollo industrial de la región. Sólo
porta la cosecha a los mercados de exportación. Durante lo más A
establecieron unas pocas industrias satélites y la perspectiva
intenso de la cosecha se trac hielo desde ciudades lejanas para-2
i para -una mayor industrialización es pequeña. Estos resultados
satisfacer las demandas de los empacadores de me/k
y ;eran de esperarse dado el tipo del programa que el gobierno ha
Hay muy pocos otros desarrollos industriales, excepto el que
realizado en. la cuenca y la falta de incentivos específicos para
se ha presentado como respuesta a las demandas diarias de una
establecerse en una región que, por sí sola, no puede ofrecer
creciente población urbana. Las tortillerías y la elaboración de ninguna ventaja comparativa al inversionista.
pan y otros productos alimenticios representan una parte im- :
portante en el creciente número de establecimientos en la región.’*
■ LOS EFECTOS DE LAS INVERSIONES SOCIALES DE LA COMISIÓN
En 1962 empezó a trabajar una gran planta para el procesado ¡
de bario y de caldo, que se extraen en el cercano municipio de ■
*Las inversiones sociales de la Comisión del Tepalcatepec mere
Tepalcatepec. Probablemente su producción ha incrementado ]
Ten atención especial debido al efecto que tuvieron sobre Jas
cerca de una quinta parte el valor de la producción industrial 'J
condiciones de vida de la zona y por la atención que se les ha
en la región, pero emplea menos de 25 personas; por lo gene-> j
•dado como, ’una justificación del programa de inversiones púral, en la mina se emplea un número igual de personas.
J ■blicas en la región. Estos programas se dirigieron a la reducción
No parece que habrá un desarrollo de nuevas industrias en,j Je las amenazas para la salud, la mejora de los niveles educala región en el futuro próximo. Las otras industrias que po- J divos y la ■"mejora de las instalaciones urbanas.
drían establecerse por los efectos en cadena hacia adelante es- á i. Como se dijo en el capítulo v, el programa de inversiones
tán limitadas y tienden a crearse en otras zonas en que hay.jI ¡sociales representó menos del 10% de los gastos d.e inversión de
un obvio excedente de fuerza de trabajo y un clima más tenv i da Comisión en 1965, Es evidente (pie la principal responsabi­
piado. Desde que se redujeron los costos del transporte por 4 lidad de la. Comisión fue la explotación de los recursos natu­
carretera y ferocarril, hay menos incentivos para trasladarse a la#rales para el desarrollo económico, más que la oferta de facili
zona con el fin de procesar algo que no sean las materias pri<#
| Jades para mejorar la educación y la salud. Sin embargo, los
*jmas más voluminosas como el algodón o el bario. Por lo gene •i gastos relativamente reducidos de la Comisión en este campo no
ral, el procesado adicional (por ejemplo, el hilado del algódóni fueron las únicas inversiones públicas en la cuenca que tuviehace ‘cerca
y la purificación del bario) se
....•de los grandes meij merd
|Bon dichas finalidades; la Secretaría de Educación Pública, la
vados.
%
4 decretaría de Salubridad v .Asistencia y la Secretaría de Recursos
A menos que se encuentren otras fuentes de recursos
___ icos proporcionaron la mayoría de los fondos de operales que requieran la construcción de otras plantas procesadoras'ab, "
¿
'p
........,----- LWJ1.
1 as consti’l6das por la Comisión,
en la Tierra Caliente, es difícil pensar en algún atractivo
y----- JA, / construyeron
i
[otras con fondos de sus propios presupuestos. Dcsafortunada*el establecimiento industrial en la región. México está llevando, Juente, no estaban disponibles las cifras sobre la cantidad de
a cabo una política que igualará las tarifas eléctricas en toda Ia|
gastos de otras oficinas gubernamentales.
Lh.Hj
DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC
EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPECEFECTO
.
207
»
(ion lates gastos limitados, era fácil predecir que el efecto del ? les, en 1947 hubo 77 homicidios que representaron cerca del
programa de Inversión social de la Comisión del Tepalcatepec J 9% de las muertes totales.52 En 1964 se informó de 115 homicidios; casi el 8% de las muertes totales. Incluso suponiendo
sería limitado. La mejora más notoria en las condiciones de
vida fue la reducción de la tasa de mortalidad de la cuenca í que en 1947 la estadística no haya incluido todos los casos, paen, aproximadamente, una tercera parte durante los años cin-aj ” rece que la reciente prosperidad no ha reducido la tasa de
cuenta, de 14.1 muertes por cada mil habitantes, en 1950, a 9.6, j ■homicidios, aunque es probable que actualmente las causas de esta
violencia sean diferentes. Aunque ya no es un buen escondite
en 1960. En la Tierra Caliente la disminución fue incluso ma­ ■
yor, de 16.5 a 10,6 muertes por cada mil habitantes (cuadro-i . para los criminales, la región tiene una gran población migra­
v-4)?° Esta disminución fue un poco mayor que la experimen- ' toria, en especial durante la época de la cosecha del algodón,
tada para la nación, que bajó de 16.2 a 11.5 durante el mismo) y lo que produce tensiones y conflictos que con frecuencia se reperíodo. Parte de esa disminución se debió a la virtual erradi- i suelven violentamente. Sería difícil detei'minar la proporción de
las muertes causadas por este nuevo factor, pero muchos resi­
cación del paludismo de esa región. En 1947 murieron 88 per
*;
sonas de paludismo en los seis municipios que integraban en-j lientes culpan de los disturbios a la fuerza de trabajo temporal
; agrícola.
Cotices la Tierra Caliente; hacía 1955 el número se redujo al
Por otra parte, la reciente prosperidad de la región también
25 defunciones registradas. Continuó disminuyendo hasta que,,
en 1960, sólo hubo dos muertes, y en 1964 no se informó dEt ?ha contribuido a la disminución de la tasa de mortalidad por
ninguna muerte por paludismo?1 La Comisión sólo hizo una) otras causas. El aumento en los ingresos regionales permitió a
pequeña contribución a la campaña contra el paludismo que sej 4a población alimentarse mejor y obtener mejor tratamiento ruésigue sosteniendo por contribuciones del gobierno mexicano y; -dico. Es probable que, como resultado, tanto la productividad
de la UNiCEF, La principal contribución de la Comisión a la re-¿ -como la espéranza de vida hayan aumentado. Estos beneficios,
ducción de la tasa de mortalidad fue la construcción de sistemas- :potencialmente cuantificables, derivados ele las mejoras en las
de agua potable y drenaje de aguas negras, que disminuyeron5 ¿condiciones económicas de la región, no se tomaron en cuenta
el aumento de las enfermedades gastrointestinales. En 1947. hubo ien este estudio, pero lo haremos en la evaluación final. Además,
más muertes por esas enfermedades que por el paludismo. Según; ¿sin duda hay beneficios derivados de un ambiente más saluda­
la Oficina de Defunciones, en 1947 murieron 141 personas al ble, no sujetos a cuantificación, sin embargo son electo de los
causa de diferentes enfermedades intestinales. Desde esa época,! .logros de la Comisión.
otra parte importante del pro­
la proporción de personas que mueren por esta causa ha dis4 Las mejoras educativas fueron
minuido, aunque el número absoluto de personas que murieron^ grama de inversiones sociales de la Comisión en la cuenca. Se
por las mismas en 1964 aumentó a 172. En 1947 los problemas^ .construyeron numerosas escuelas en cooperación con los gobier­
intestinales causaron cerca del 17% de todas las muertes y ehl nos estatales y locales y se proporcionó alguna ayuda financiera
para pagar profesores extra en la cuenca. A pesar do esta aten­
1964 el 11%.
!
ción,
la proporción de personas alfabetizadas aumentó con más
Otra característica de la región, cuando se creó la Comisión^
lentitud que en toda la nación (excluyendo la capital) y hacia
de
homicidios.
Se
sabía
bien
que
la
falta
dd|
era su alta tasa u
.
condiciones
sanitarias
creaban ui|
uní¿1960 esta proporción era menor al promedio nacional."'3
comunicaciones y las pobres condiciones
sanitarias
creaban
____fugitivos
escondite ideal para los
uc u de la ley. Su presencia erali; El impacto del gobierno sobre las condiciones de educación y
x i los fugitivos
la causa
de
muchos
hechos
ilegales.
Según
las estadísticas oficia®^ salubridad ciertamente es subestimado"
.......en las cifras menciola causa de muchos hechos ilegales. Según
Miadas. Sin duda, la calidad de la educación estaba mejorando
IVrt kík, Xíi .»
-------- -------------
la tasa de mortalidad es un reflejo de las mejoras e||í
,,i0 La reducción en l,i
losa ................. ........ ........ ....
- Ibidern, Probablemente hay una falla significativa en estas cifras poi
las condiciones sanitarias, Estas mejoras, sin embargo, no se reflejan
falta de información, especialmente en 1947. Por desgracia, no hay otras
completo en estas estadísticas debido a que también resultaron en mayó®
¿(tientes que puedan ayudarnos a corregirlas.
productividad para los miembros de la fuerza de trabajo y en mejores cótlK
w”
del analfabetismo es sólo una medida burda de las
(liciones de vida, cu general.
" Wm •La disminución
...... —uC. ^naimoensn
51 México, Secretaría de Industria’ y Comercio, Dirección General de EsjFTiras
j
educativas. Es piobabíc 'p-.c
que uno de los efectos de la intervención
:z- r —fueron
sgA ’’’
la Comisión
mdisíica, Departamento de Defunciones. Estas cifras no se basan en
-las mejoras en la calidad y en la tlmaiión de la
informes de los certificados médicos y, por tanto, deben considerarse coffi'iJlfecolaridad disponibles pura los niños en edad escolar. Hasta ahora no
una forma satisfactoria de medir esto.
una aproximación,
íf
208
’ EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EFECTO
I
PE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC
209
al igual que las facilidades y oportunidades disponibles para > que sólc se quedaban durante el ciclo agrícola y durante el resto
cada generación sucesiva. Las decrecientes tasas de mortalidad no ; i del año retornaban a sus hogares.
reflejan las mejoras sanitarias para quienes continúan vivíen- ’ ¡ Como resultado de la inmigración de estos distintos grupos de
do y que, por tanto, pueden ser más productivos y llevar vidas ... gente, las ciudades de la región crecieron con rapidez. Apatzinmás satisfactorias. Por otra parte, la comisión no era la única j gán aumentó más del doble su población durante ios años cinorganización oficial que trabajaba para mejorar las condiciones; '■■■ r .cuenta, de 8 300, en 1950, a 19 500, en 1960, en tanto que Zara: goza (Nueva Italia) aumentó de 4 750 a 8 900 durante el mismo
en consecuencia la asignación de estos beneficios es difícil. '
La Comisión propició la colonización de tierras no cultivadas .? período.54 La región en conjunto experimentó una duplicación
para lograr una utilización más racional del potencial económico ,tde su población durante la década y seguía creciendo con rade la región. Se formaron varios ejidos para quienes tenían de-J í pidez durante la primera mitad de la década siguiente. Se calcu­
recho a dotación de tierras bajo la reforma agraria, y no había . ló que casi 23 000 personas inmigraron a la región hasta 1960
suficiente tierra para ellos en otras partes de la Tierra Caliente J (cuadro v-4).
o dedelaslas
zonas
vecinas.
En 1958
organizaron
200 familias-00
en •. familias i Sin embargo, los inmigrantes permanentes a la Tierra Caliente
zonas
vecinas.
Ense 1958
se organizaron
una comunidad en la Tierra Caliente. Los emigrantes prove-•. , ueron menos numerosos que los emigrantes de otras partes de
nían de la Tierra Fría y a cada familia se le dio una parcela-: a cuenca. Se calculó que más-de 17 000 personas abandonaron
ejidal de diez, hectáreas para que la cultivara. No hubo otros j las regiones altas durante la década. Incluso el desarrollo de las
intentos organizados para colonizar partes -de la región. No oW-. cosechas, que requieren mano de obra intensiva en una próspera
tante, la población aumentó a medida que campesinos de otra «anonua agrícola, fue insuficiente para-absorber
el crecimiento
- - -------------—r..
partes de México llegaban en busca de tierra y_ trabajo. Se les.j <de la población y la fuerza de trabajo ociosa en las regiones
unieron comerciantes y tenderos que buscaban oportunidades para, vecinas, en donde la agricultura estaba estancada. Las otras in­
hacer negocios en la próspera región. Algunas de estas personas, versiones sociales, como las facilidades para la educación, aumen­
se establecieron en la región y aprovecharon la disponibilidad> taron probablemente la emigración de las zonas altas, ai cono­
de tierra e irrigación para sembrar cosedlas comerciales. Se ford cerse formas alternativas de vida y difundirse las oportunidades
55
marón nuevas comunidades ejidales por algunos, en tanto que, de ocupación.
otros compraron tierra que antes había sido estéril para el culq El mejor sistema de carreteras jugó su papel en la corriente
tivo y transformaron pastizales en tierra de cultivo. Otros ingreó emigratoria cíe personas desde las zonas menos atractivas de la
saron a la vida comercial de la comunidad.
j cuenca, como la Tierra Fría, y en el aumento de la presión de
Los trabajadores campesinos temporales inundaron la regiónj da población en otras ciudades en que la desocupación entre los
para recoger las cosechas de algodón y melón. Durante Ta cose-j Trabajadores no calificados ya era un problema. Sin duda, las ca­
cha de algodón de 1964-65, la mayor en la historia ele la Tierríi-J rreteras también facilitaron la importación de nuevos bienes e
Caliente, se necesitaron cerca de 15 000 hombres para complfrjfideas hacia la zona, estimulando, así, la demanda de productos
mentar ia fuerza de trabajo local. Los trabajadores provenían.![por medio del efecto de demostración, Debido a la poca imporde otras zonas algodoneras, en su mayoría del norte de México^tancia económica con ■ ‘ ---- —------- - Jt<
. - o-- 1-».- 'C la región
así como de zonas rurales cercanas en que hay gran cantidad d|tnontañosn lontañosa, la mayor
LífM. parte de la justificación
&lan Parte
dedeestas carreteras
.»-4---1 r •
- desocupación oculta. La estación de recogida del algodóu durfctá en el objetivo o-ene-M 1
11'
'----casi cien días; la siguen la cosecha de melón y la de sandía, (®el desarrollo mexicano 1 evai) a^unos de los beneficios
*manera
¿U'
que la fuerza de trabajo absorbe un gran número de trajearreteras mejoraron la n
/TT incÍ28'enas más remotas. Las
bajadores temporales durante más de una tercera parte del a^®fecto en ambos sentídos° Rmano de obra, que tiene
Trabajadores calificados fueron atraídos a la región por to®)¡enes de cons mío a la y ampdaron el mercado para ciertos
a Vez ^Lle CUmpííun una importante funaltos salarios ofrecidos por los cultivadores e inversionistas, qu®/
M Censo de población 1960, Michoacán, p. 4.
•;
nes necesitaban capataces y operadores de maquinaria, .así conw
-ts A partir de 1960, quizá aumentó la inmigráción a la Tierra Caliente
agrónomos, vendedores entrenados y toda una serie de trab|«
«libido
a la prosperidad ocasionada por ■ los grandes aumentos cu la proL /T. ,. ef desarrollo de una eeononjMUtc¡ón
¡adores calhL...L-,rar
... ;..... . <
pudiera
invertido la tendencia hacia la emilifícados,
esencia
sp
. región, sil^
rracíón netacomercial.
observadaEsta
durante
los haber
años cincuenta.
agrícola. Muchas
de estas
personas
no residían en la
~
•
*
-------- --ta
efecto de la comisión del tepalcatepec
CAPÍTULO VII
UNA EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
DE LA COMISIÓN
En la primera parte de este libro presentamos una discusión de
los objetivos de los programas de las cuencas fluviales y ahora
lo hemos ejemplificado con el estudio de las actividades de la
Comisión del Tepalcatepec. Queremos, en este capítulo, utilizar
este estudio para evaluar los resultados de la Comisión del Te­
palcatepec. La estrategia, en conjunto será considerada en el si­
guiente capítulo. Aquí indicaremos que el proyecto del Tepalicatepec fue en general atractivo y que su productividad justificó
la decisión de realizarlo. Será necesario, sin embargo, hacer al­
gunas modificaciones a este juicio, ya que no se cumplieron sa­
tisfactoriamente los objetivos del proyecto y el ritmo del des­
arrollo agrícola fue muy lento para obtener un impulso.
Empezaremos el análisis investigando los cambios que contri­
buyeron al desarrollo nacional sin considerar sus efectos sobre
la economía’ regional. Estos cambios se debieron, básicamente,
* al potencial agrícola liberado por la disponibilidad de agua para
] irrigación y el potencial hidroeléctrico de esta agua antes de
' ser distribuida por los canales de irrigación. No obstante, el
¡ proyecto ha hecho una contribución de cuantía al ingreso naj cional, y las ganancias de divisas también han influido en la
j oferta de algunos factores escasos o superabundantes de la proIducción.
/ Después examinaremos los mismos desarrollos y otrós, excluí divamente, desde el punto de vista del desarrollo de la misma
, región. En esta parte del análisis nuestro interés se limitará a los
* .cambios en la' producción y en los niveles de vida que tuvieron
' un.efecto directo o indirecto sobre los habitantes de la Tierra
i .Caliente, independientemente de su influencia sobre el resto de
■ ja nación.
■ft'
jk PUNTO DE VISTA NACIONAL
jilas inversiones de la Comisión de la Cuenca del Río Tepalcac ascendieron a más de 500 millones de pesos (a precios de
durante los primeros dieciocho anos de su existencia. En
rable subinversión en J|[
Secüon 1965 capítulo
1
212
EVALUACION DE LAS ACTIVIDADES
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
213
CUADRO VII-1
ese tiempo se construyó una importante red de canales de' irri-,
gación y un sistema de carreteras secundarías para facilitar el
desarrollo agrícola en la Tierra Caliente. El aumento en la pro­ El sector agrícola en la Tierra Caliente y en la región de “control’'
ducción agrícola, medida en términos de valor, es el principal
beneficio producido por el programa de inversiones y el único
Región de
*Tierra Caliente
que podía medirse.
“control"
*
Trataremos por separado la generación de energía hidroeléc­ Población
trica, en la que la Comisión cooperó con la Comisión Federal [ 1950
55 191
de Electricidad en la construcción de ciertos trabajos conjuntos.-; 1960
76 238
111 585
Los costos globales se distribuyeran según el principal usó que :j % del cambio
91 525
102.2
20.1
se hiciera de la parte del proyecto en cuestión. Por supuesto, Fuerza de trabajo
no se pudo evitar la arbitrariedad inherente a toda asignación? 1950
.17 969
1■ 1960
24 396
de costos conjuntos.
32 739
% del cambio
82.2
El desarrollo agrícola
Fuerza de trabajo agrícola
1950
No es necesario revisar el proceso por medio del cual llegamos 1960
al cálculo del producto agrícola neto en el capítulo vi; en lugar % del cambio
30 656
25.7
13 753
25 617
86.3
de eso tomaremos a este último como base para medir los be­
neficios agrícolas netos debidos a la irrigación. Este paso no es|hpeyfícíe cultivada
difícil, pero implica hacer una pregunta hipotética: ¿Qué hubiera 1950
sucedido en la Tierra Caliente si no se hubiera creado la Co­ 1960
misión? Esta pregunta es importante, porque, incluso sin la in­ % úel cambio
versión, hubiera ocurrido probablemente algún aumento en el
valor de la producción agrícola, aunque hubiera sido menor queípalor de la producción
el observado en la realidad. En 1947 ya existían obras de irri­ d (miles de pesos de 1960)
gación en la Tierra Caliente; éstas hubieran podido aumentarse, 1950
34-479
23 786
privadamente. Es posible que hubiera ocurrido un cambio en JajJ 1960
181 067
47 297 .
composición de las cosechas, por ejemplo, ya se había iniciado’ . % del cambio
425.2
üG.a
la primera producción de melón y ésta hubiera aumentado sin láj
05
inversión de la Comisión.
1ten dina lentos rrionetat’i po* heutárea
miles de pesos de 1960)
Un indicio de la magnitud probable de tal cambio hipotético!
1950
815
puede obtenerse examinando los resultados agrícolas en una re-j
536
1960
.
1 714
825
gión que tenga un medio físico similar y no se haya beneficia!
>% del cambio 1m
53.9
do con programas, en gran" escala, del gobierno hasta fechad!,
recientes. Una región como ésa es la llamada Ciudad Altami-p
rano, en el vecino estado de Guerrero.1 Puede obtenerse infor-j
h Tierra Caliente incluye los municipios, de: Apatzingán, E.
Buenavísia,
mación, sobre los cambios agrícolas en la región durante los afwV
gbriel Zamora, La H-uacana, Parácuaro, Tepalcatepec y Zaragoza,
, en Micincuenta, de la información del censo agrícola.
asacan.
La historia del distrito de Ciudad Altamirano no permite
:U región de control en Ciudad Altamirano comprende los municipios de:
Coyuca, Pungarabato y Zirándaro, Guerrero, y San
comparación exacta con la Tierra Caliente de la cuenca del Tf®oaCáñ.
Lucas, Mi. líneas 1-9,
1
Agradecemos al ingeniero Cesar Buenrosuo de la Comisión del Balsar™'
por la sugerencia en poner a esta región como zona de control.
W
censo de población, 1950 y 1960, Michoacán y GLielíneas 10-i8, apéndice i para la Tierra Caliente. Para la región
control los censos agrícolas, 1950 y 1960, Michoacán y Guerrero.
214
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
palcatepec. En 1950, sólo había en la región obras privadas de 1 CUADRO vn-2
irrigación en pequeña escala. En 1958, se creó el distrito de riego i
de Ciudad Altamirano. Se instalaron varias bombas y se cons-' Costos y beneficios del programa de inversión de la Comisión
del Tepalcatepec
truyeron una presa para almacenar agua de irrigación y canales
complementarios para riego, empezados en 1954. En cierta ma­
nera, esto aumenta el atractivo de Ciudad Altamirano como una
Inversiones económicas
Beneficios agrícolas
región de control debido a que la zona de Michoacán tenía ca­
Costos
de la Tierra Caliente
Tierra
Año
totales
nales de irrigación al principio del período de observación. Sin
Total
Caliente
Te al es
Alternativa
embargo, como estos trabajos públicos de irrigación en Guerrero
(1)
(V
P)
(4)
(5)
no estaban construidos en 1950, las cifras para la región, por sí
sola, exagerarían el progreso que pudiera haberse esperado en 4947
5415
23 447
Michoacán. Para compensar esto, se incluyeron otros dos muni­ 1948
1949
27 600
cipios en la región de control. Ambos pronto disfrutarán de los 1950
30414
frutos de la irrigación como resultado de la construcción de 1951
30 672
presas de almacenamiento para irrigación por la Comisión del 1952
37 558
Balsas. El incluirlos disminuye el efecto de la irrigación en Ciu­ 1953
40 132
dad Altamirano, a mediados del período, pero no lo elimina poí:i 1954
34 390
completo. En el cuadro vnd se presenta una comparación dej 1955
38 303
los cambios en la Tierra Caliente y en la región de control. I 1956
30 725
En la zona de control la tierra cultivada aumentó en un 29%| 1957
35 189
y los rendimientos un 54%, desde 536 hasta 635 pesos por hec­ 1958
28 195
1959
17 672
tárea, durante los años cincuenta (cuadro vu-1). Este aumento;
4960
24 245
en la productividad de la tierra (como resultado de la mejor 4961
9 938
tecnología y del cambio en la composición de las cosechas) y? ■1962
8 670
en la superficie cultivada formó la base para el ajuste en el vabi 1963
9 005
' “
'
.i
_ . Y La tasa de
1 creció 1964
fñe j
del producto
agrícola en la Tierrai •Caliente.
10691
:
miento del valor de la producción agrícola en la región de con- 1965
7 898 '
de aproximadamente el 7% anual, se aplicó a la produqj1966«
7 000
7 000
ción incrementada q«o se observó en la cuenca del Tépalcatep^|j968
7 000
y se redujo la producción agru_mu de acuerdo con esto, ant^ggq
7 000
que se determinara el aumento en la producción agrícola netjjgyo
7 000
2
sobre el año base (cuadro vn-2, columna 4). El cTecímicnt<®971-99
7 000
de la producción agrícola, una vez deducidos los costos y siáfe--——
tener en cuenta los aumentos esperados en la productividad,Jafc>rAL
687 659
474 322
3 166 932
el cálculo de los beneficios que se atribuyeron a la inversión ------------------------ 741 638
1- . ...... „ ac b
Esta tasa de incremento del valor neto de la producción agricola,J®|EÍÍT£.s. Columnas;
recios constantes,
constantes, es
es muy
muv alta,
alta cad
« = «-Cuadro v.g
precios
casi dnhlP
el doble del promedio nacional,
puede esperarse que continúe durante los cincuenta años de duración ( f v
proyecto. En consecuencia, los beneficios medidos en este estudio son,
4' 3, Cuadro v-3. En estas columnas sólo se incluyen los costos imputables
bablemente, un cálculo conservador de la situación real. Este efecto se W Cu;
inversiones económicas y a ios gastos de operación corrientes^
Cuadro
vi-9,
compensado por la introducción de una tasa de descuento (véase más
ro vi. aumento sobre
„ vbase
_
menos progreso anticipado. Véase
lante) que hace a los. ingresos futuros mucho menos importantes que 4®
producción presente,
® Columna 4, adelantándola 5 años, véase el texto.
3
el
215
216
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADESEVALUACIÓN. DE LAS ACTIVIDADES
217
irrigación por la Comisión del Tepalcatepec durante el período i
1950-1970.3> *
AI calcular los costos y los beneficios hemos aceptado valores
en pesos (convertidos a precios constantes) con los que se hicie­
ron las transacciones en el mercado. Como dijimos en el ca­
pítulo i, es poco probable que ésta sea la forma ideal de hacer ?
una evaluación de proyectos de inversión en los países subdes­
arrollados, ya qué los precios de mercado de los productos e
insumos del proyecto, por lo general, están lejos de representar
la escasez relativa social de los productos y los factores. El uso =
de un conjunto de precios más complejo hubiera requerido mu- ,
cho más información (y tiempo) de la disponible, y también
hubiera exigido juicios de valor difíciles de hacer, por ejemplo, ■
¿logró México un equilibrio ideal entre la inversión y el con- .
sumo durante el período 1947-1965, o debió consumir menos e ■
invertir más?
3
Aunque no hicimos ningún ajuste en los precios, vale la pena ;
;
*iindicar
do podría
en qué
necesitarse
sen
hacer los ajustes. Necesitamos considerar si hay alguna desviación, en los valores del ,
mercado, de valores sociales más adecuados, que pueda afectar
los beneficios o costos de manera sistemática haciendo así ten­
denciosa nuestra evaluación. Considerando primero el lado de los .
costos, nuestros dato, no nos permiten separar los gastos en in- :
sumos de mano de obra directa y en otros insumos, y, mucho
menos, valorar los insumos intermedios y los bienes de capitala los precios mundiales. Aunque existe, como hemos dicho, una.:
gran cantidad de desocupación en México y aunque la creación
de ocupación es uno de los objetivos principales nacionales clel, ¡
gobierno de México, la utilización de salarios monetarios reales):;
en lugar de salarios ".sombra” estimados podría no ser muy des-7
orientadora. En la misma cuenca hay mucha evidencia de una
ocupación casi plena, cuando menos durante las estaciones de
mayor actividad, con una tendencia a que cualquier aumento
notorio en la actividad económica produzca a su vez un aumento
en los salarios. En otras palabras, los salarios monetarios no sub­
estiman seriamente el costo de oportunidad de la mano de obra
dentro de la cuenca.
Podría objetarse que el costo de oportunidad, a corto plazo, de
un aumento de la ocupación en la cuenca sobrestima el costo
de oportunidad social para toda la nación. La expansión de las
oportunidades de ocupación, en la cuenca, da a la mano de obra
desocupada la oportunidad de trasladarse a la cuenca y emplearse
productivamente. Pero los costos en términos de consumo adi­
cional implicados en este proceso probablemente sean grandes y,
como se argumentó en el primer capítulo, no es probable que el
salario "sombra” adecuado para la mano de obra no calificada
que de otra manera estaría desocupada, se aleje mucho del sa­
lario monetario pagado. En donde el aumento en la ocupación
de mano de obra implica el empleo de personas entrenadas y
calificadas, que de ninguna manera sufren desocupación en Mé­
xico, no hay razón para valorar sus servicios a menos del salario
del mercado.
Los insumos de bienes y servicios comprados por la misma co­
misión y por los campesinos que producían mercancías auspicia­
das por el proyecto provinieron tanto de productores nacionales
como extranjeros. Como describimos en el capítulo u, la política
de México ha sido la sustitución de importaciones mediante altas
tarifas protectoras. Los diferenciales promedios del precio entre
los bienes manufacturados interior y exteriormente se calcularon
recientemente en el orden de un 25% (con un amplio campo de
variación),5 Si, como dijimos en el capítulo I, los gastos en insu­
presentados
en el —-cuadro vn-2, columna 4, se calen-..; mos producidos interiormente se valoraran a los precios mundia3 Los beneficios netos, prcsenuiuvo
v. ...........
, i^.-, vi-5 a vi-8.
.MLa1 marcada
v; 8. .... ------------laron con los ciatos de los cuadros
disminución
1 les, probablemente serían menores. La mayoría de los insumos
después de
1966 se debió,
en los beneficios netos ! proyectadosa para
'
~ en gran.™
* importados consistía en bit.net de producción, que ingresan ai
a
, para — I producción de algodón en la región^
r._ . a las malas perspectivas
parle,
país con tarifas muy bajas, y ui ellos el uso de los precios mun­
Incluso,
si
estas
proyecciones
son
erróneas
por
un
gran
margen,
afectará».^
L.d.........
diales significaría relativamentt poca diferencia, Pero una vez con­
muy; poco la tasa ___ ‘ interna de rendimiento debido al efecto del descuento^
siderados todos los aspectos, > as gastos del proyecto expresados
en 1.los
. beneficios
. " ’ y costos en una época tan alejada como ésta del principio^
de la construcción.
dos
de
1a
irrigación
atribuye
iodo"
;£n
términos’
de ios precios mexicanos son mayores que ri
si se hu___ mét~..~
..ratodo —de medición de los beneficios de la ini;
■ 4 Este
solo factor de la
producción:
¿oleran
usado
los precios mundiales.
1
el incremento en la productividad a un C..
atribuidle a este ín-Oj En comparación, la producción agrícola del provecto se mml-’ó
agua. En efecto, es un cálculo de la renta ricardiana 1competitivos
gn sn «rn-ni-L o
,
piuyct.io ,>c > tilmo
factor después que se han pagado a .sus precios competitivos todos
todosles.lríJ|
óvnputo hipotético-de
1^ ' n SU m’l>olía a los precios mundiales o a precios inferiores. Es
1
demás factores del proceso de producción. Es "un córni
\
- a pagar
si fuerai^
;
cantidades máximas que lo.s campesinos estarían dispuestos
a pagar
si fuerath
'Para un?, discusión adicional o'-a.-.e Tirnothv Kimj.
empresarios peí rectamente racionales" (O. F.ckstein, op. dt., p. 19). Las .ra-1
‘
zones de esto se discutieron en ■ el capítulo n
-1 salitm and í'rade Policies sinea JO-/Ó.
‘‘
218
EVALUAC
cierto que los precios interiores para la
frijol son mayores que los niveles m
ducciones tienen relativamente poca im
producción exportada, que incluye las
de algodón y melón, reciben, por lo ge
los mundiales, ya que, durante todo el
han estado sujetas a impuestos. En dond
cios mundiales, esto ha sido seguido con
nución o exención total de los impuest
la adopción de una escala decreciente que de
Por tanto, parece que nuestro método
ficios y de los costos tiene el efecto d
sociales y sobrestimar los costos sociale
de esto, el rendimiento sobre los gastos
las oormas que se aplican generalmente
lo suficientemente bajo para dejar plant
se hubieran obtenido rendimientos más
dos en otras partes de la economía.
En el cuadro vn-2, los costos se anal
con el fin de examinar la sensibilidad d
en los supuestos, así como para ver p
de utilizar los recursos de inversión pú
na del cuadro vn-2 incluye todos los
Comisión, desde su formación en 1947.
de separar los gastos que se hicieron
vida de las personas en la región, pe
aumentado el producto económico mens
se hace en las columnas 2 y 3 en dond
versiones que pueden clasificarse como
tulo v, junto con alguna parte de los g
atribuirse al funcionamiento del sistema
mínistración de los proyectos de inv
tercera columna sólo se presentan los c
versiones económicas de la Comisión e
se hace con el fin de compararlos dir
de beneficios utilizada en este libro: l
cola de la Tierra Caliente que tiene su
de la Comisión del Tepalcatepec.6 *
• Las corrientes de tiempo en el cuadro vn-2, se pr
para proporcional' información para la duración estim
del proyecto. Estas proyecciones se hicieron con ayu
Comisión del Balsas. Debido al efecto de la tasa de d
rendimientos que se tendrán en el futuro distante, aju
la cuantía de las diferentes corrientes sólo afectan, m
sultados del análisis de la tasa interna de rendimiento
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
En el capítulo i discutimos las razones para n
la tasa de rendimiento interior. En el cuadro
resultados para una serie de alternativas diferent
lisis más severo, esto es, cuando se comparan los
Tierra Caliente con los costos totales del proy
mostró una tasa de rendimiento de aproximada
Cuando sólo se usaron como base del costo las in
micas en la Tierra Caliente, la tasa interna
aumentó hasta el 11%.7*
Dados los factores que determinan los valore
producción y las distorsiones resuham.es en nue
tasas de rendimiento pueden considerarse acep
embargo, algo bajas en términos de las tasas m
dimiento disponibles en el sector privado, aunq
obtener buena información para determinar cuá
nivel. Nuestras conversaciones con comerciantes
cias, como el hecho de que se observó que los
prestado a los bancos privados a tasas de inter
realidad (se informa que en algunos casos éstas p
sugieren que’la tasa de rendimiento esperada sob
siones es considerablemente más alta que el prom
que se obtiene en los Estados Unidos.9 Las tasa
menores al 15-20% nos tientan a la conclusión d
obtenido una mayor tasa de rendimiento usando
el sector privado de las manufacturas.10 La Secretaría d
7 Debe recordarse que en varios puntos de nuestro análisis los
dujeron cálculos conservadores de los beneficios agrícolas obten
programa de inversiones de la Comisión del Tepalcatepcc. Uno
importantes de estos factores que hace que nuestros resultados ti
menores es el progreso que se hubiera esperado en la región si n
biera realizado el proyecto. Sí no hubiéramos ajustado los benef
tener en cuenta el crecimiento esperado en ausencia de! proyect
rendimiento interna en este último habría sido del 18.4%.
* W. Paul Strassman, Technological Changas and Economía E
Ithaca, Nueva York, Cornell University Press, 1968, pp. 124-5.
* Tobín informó que "Phelps... calculó que la tasa a
de la inversión tangible (privada) en los Estados Unid
madamente, 14% en 1954". "Ecoaomic Grotvth as an Ob
PolícyL American Economic Reuiew, uv, mayo de 1964, p
que la tasa media de rendimiento en las industrias ma
6.26% en 1954, pero esta tasa casi debe duplicarse p
el efecto de los impuestos a hs empresas sobre lo tasa d
and Rates of Retnm m Manufacturing Industries, Prince
ersity Press for the National Burean of Econotnic Research. 196
w Sin embargo, debe observarse que los altos rendimie
mucho a la protección, mencionada antes; si se evalu
mundiales la tasa de rendimiento en las manufacturas sería muc
220
EVALUAC
Hidráulicos, de México, usa una tasa
sus análisis económicos y está claro qu
esa tasa, y el criterio de la Secretaría
se logró también.
Muchas de las personas implicadas e
sobre la Comisión del Tepalcatepec se
el proyecto sólo puede considerarse mar
rendimientos económicos. Por lo general
notable éxito. Esto refleja el problema
de las tasas de descuento, ya sea para
las inversiones alternativas o para prop
preferencias sociales de tiempo. Si no se
to, entonces el proyecto es en verdad
descuento (esto es, el costo de oportun
proyecto muestra una relación beneficio
comparan los beneficios en la Tierra C
tales del proyecto (cuadro vu-3); esta
6,7 si sólo se usan los costos de la Tierra Cal
CUADRO Vll-3
Medidas de. los rendimientos del programa
Costos
totales
A. Beneficios reales
Tasa interna de
rendimiento (%)
Relación B/C
descuento 0%
descuento 10%
descuento 20%
4.3
1.0
0.4
17.3
Relación B ,'C
0%
io%
20%
fuente: Cuadro viR.
y pro
10.2
B. Beneficios,
'I’asa interna de
rendimiento (%)
Cos
inve
eco
4.8
1.6
0,9
altern
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
i
La diferencia entre los dos análisis es resultado
retraso en el tiempo entre la terminación de las ob
ción y el impresionante crecimiento de la producción
años recientes. El poco deseo o la falta de capacida
toman las decisiones de política para incorporar las ta
cuento en sus evaluaciones del proyecto ha signifi
hayan entendido cuán costoso fue ese retraso. En e
describimos la lenta respuesta de los campesinos y d
proporcionaban crédito ante las nuevas oportunidades
las inversiones de la Comisión en la 'fierra Caliente
adicionales para la experimentación y extensión agríc
aportaciones de crédito han acelerado la transición
agricultura moderna comercial que es en la actualida
tica de la zona. Esto también hubiera podido ayud
algunos de los problemas de desigualdad en los ingr
tenencia de la tierra que han surgido en la región.
Tal inversión complementaria en el desarrollo a
haber aumentado, si hubiera sido efectiva, la corrien
ficios antes de lo que ocurrió en la realidad. Para
efecto que tal cambio podría haber ti nido sobre la
adelantó cinco años la corriente de beneficios compa
los costos. La corriente de beneficios alternativa (cuad
lumna 5) dio tasas internas de rendimiento notor
altas (17.3%, cuando se incluye todos los costos, y
la inversión en la Tierra Caliente únicamente) y rela
ficio costo favorables con el empleo de tasas de des
riores a cero (cuadro vn-3). Este descubrimiento c
una adaptación más rápida al nuevo ambiente por to
tores habría hecho al proyecto mucho más provechoso
en la relación beneficiq costo con una tasa de descu
cero no es tan notorio como cuando la tasa es mayo
como base los costos de la Tierra Caliente, la nu
12% más ¿tita que la estimación original sin una
descuento, y fue del 64% mayor con una tasa
del 10% (cuadro vn-3).
En conclusión, el proyecto pudo mejorarse de man
rable si se hubieran invertido recursos adicionales en
ule las técnicas apropiadas y en la creación de suficientes fa
• 11 Este retraso, de respuesta a la oportunidad de produc
puede explicarse satisfactoriamente sólo con las fuerzas cid in
el período 1950-55 la producción total de algodón cu Méxic
mente, se duplicó, pero la producción casi do existía en la '
en tanto que la superficie irrigada cultivada con maíz am
cuádruple.
•
£•
i
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
222
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
223
gía al sistema, sino que, además, los costos de producción disdades para el crédito, con el fin de acelerar la respuesta ante el
■ minuyeron de manera impresionante. Una de las razones más
nuevo ambiente. Una conclusión importante de este estudio, por
importantes para esta baja en ios costos fueron los bajos costos
tanto, es que debe darse más importancia a los problemas del 3
iniciales de construcción y las atractivas características de ope­
ajuste de la estructura productiva de la región para nuevas in­
ración proporcionadas por el río; debido a la corriente, casi
versiones con la suficiente rapidez, para aprovechar, de manera
constante durante todo el año, desde las fuentes que ¿iKmentaplena, una adición indivisible al capital general social de la región.
Si la iniciativa privada no está preparada para asumir la tarea . ¡ ban al Cupatitzio, no fue necesario construir grandes presas para
el almacenamiento de agua,
de proporcionar esos elementos, entonces el gobierno debe or­
No se anticipa un aumento en la capacidad generadora insta­
ganizar el esfuerzo para asegurar que su inversión sea empleada
lada dentro de la cuenca del Tepalcatepec durante la próxima
plenamente con la mayor rapidez que sea posible.
década. El consumo regional no aumenta con suficiente rapidez
para requerir inversiones adicionales, como veremos en breve, y
Hidroelectricidad
. cerca hay varios otros proyectos hidroeléctricos que tienen mayor
Aunque la Comisión no tuvo un papel importante en el desarrollo ¡ prioridad para la asignación de fondos de inversión. En el Estado
del potencial hidroeléctrico de la región, sí cooperó con la Co- j de Michoacán, en 1971 estarán disponibles cerca de 336 00 ki: lovatios de capacidad adicional cuando se termine La Villita
misión Federal de Electricidad (cfe) en la construcción de las
■
dos presas. Estos proyectos no se han discutido hasta ahora, por- i en la cuenca del Balsas, cerca de la costa del Pacífico. Este pro­
que son partes completamente separadas del programa de desarro- J yecto, parte de los esquemas de desarrollo regional de la zona
lio, aunque este potencial hidroeléctrico fue, quizás, un factor j ; costera, proporcionará energía para una fábrica de acero inte­
importante en la selección de la cuenca para el desarrollo.
j grada verticalmente, así como para las necesidades del crecimiento
futuro de .la zona para muchos años. Otro proyecto del río Bal­
Cuando la Comisión empezó a trabajar en la cuenca, la peque- i
sas, El Infiernillo, empezó a funcionar en 1964 y en la actuaña cantidad de energía hidroeléctrica generada en ella se desti-, a
j lidad tiene instalada una capacidad de 672 000 kilovatios, con
naba por entero a los mercados locales. La generación de electrici- 4
. los que se abastece al creciente mercado de la ciudad de Médad aumentó considerablemente durante el período 1950-65, al
xico. Ninguno de estos proyectos está relacionado de manera
construirse dos grandes plantas en el curso del río Cupatitzio, Las ..j
directa con las plantas del río Cupatitzio, que forman el Sistema
dos plantas, la Cóbano y la Salto Escondido, se localizan en eL
Lázaro Cárdenas.
rio, exactamente arriba de la Tierra Caliente, en donde el agua |
se usa para irrigar los campos de algodón y de arroz (figura 4)./j
; El consumo de electricidad en la cuenca no aumentó con igual
rapidez que la producción, a pesar de que su crecimiento ha sido
En la evaluación preliminar del potencial económico de la zona,ni
imás
*
que rápidd
el promedio nacional.. En
1964 la electricidad
d equipo de ingenieros observé) que el Cupatitzio:
j disponible para la venta en México fue casi 2562', mayor que
la importante corriente que proviene de sus arroyos —15 M 4a disponible en 1950, pero en 1964 las ventas de la región íucDebido a
...’/s en L estación seca— así como a la pronunciada pendiente de.5 ron un 533% mayores que en 1950T Como resultado del rápido
17 ni’ó. v
lecho. que en 30 Rilóme iros desciende 1 200 metros, ofrece uno®láumento en 1.a producción, había disponibles grandes mu calcules
su
los potenciales hidroeléctricos más importantes en la República»W.
Ijiara exportarlos a las regiones vecinas, en donde las demandas
de
sólo debido a la capacidad de generación potencial, sino lankfB
industriales eran grandes y estaban en continuo crecimiento (cuano
ios bajos costos unitarios de los trabajos, que también se®'“
bien por
■ i.orúi para dirigir el agua a las tierras irrigables en las planicies
*Los datos sobre el consumo de
consumo de energía eléctrica se obtíh ícron pm.i
zo,la de operaciones de la Con;
\niúnez.,:
..
... ^,x,ni¡5Íóii Federal do Elcctriiidad «que c<
ÍHjayor que la cuenca hidrológica definida por la Secreta) ía de Recurso', íliricncin apoyó esas observaciones, como puede verse (
úajpráulicos. Cerca de dos (cu
---- Federal
' ■ ucvras
'-'■'■y io\ non kilovatios de £ne|®!e la Comisión
de partes de la energía rendida en el Dimite
vio-i. No sólo se aña..ñadieron —
¿«kingán, Zaragi
......... c Electricidad se tendió a los distritos de Apal.... goza y Uruapan en 1965. La cuenca representó aproximadamente
■-« |l 80% de toda la energía que se informó en el cuadro vu ■{ fue vendida
,
« repalcuepe..
</, le
de, T'P<M
‘-áKln la región.
1950. p. 9.
w.
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
EVALUACIÓN de las actividades
224
i dro vn-4). Puesto que no hay diferencias en las tarifas de la
electricidad en las diferentes regiones, no hay ninguna ventaja
I local en construir una fábrica cerca de tina fuente de euereía
o
y así la disponibilidad de ésta no proporcionó un estímulo a la
industrialización de la región,
i Según sus proyecciones, la cfe no prevé un aumento notorio
en el consumo regional de electricidad durante la próxima déj cada. Su programa de construcciones se basa en el supuesto de
;i una continuación de la estable tasa de crecimiento en la demam
• da de poco menos del 10% que resultará de los mayores in. gresos, el crecimiento normal del comercio y el programa de
! electrificación rural. La mayor parte de esta demanda incrementada se abastecerá con la capacidad generadora existente,
K.O
PROA TZARAÍU.'.LA
-FRESA TZARARACUA
ukel n(5m, i
nt¡ M
| CUADRO VH-4
TÚNEL NÚN- 2 “O H
TÚNEL NU«. 3-700 M
Producción de -electricidad en el Sistema Lázaro Cárdenas,
1950-65
TÚNEL KIÍM- <-»<> M
SiFÍN DEL «ORAL
■i
.
.
PUENTE SIFÓN BARRANCA HONDA
SnEL NÚM. 5 BARRANCA HONDA 731 M
ñama
Capacidad
instalaba
(kw)
SIFÓN EL SALVADOR
túnel NdM. sjoo M
presa JICAlAN
Iño
TANQUE REGULADOR
\ planta hÜm
tubería oe alimentación
OE lOMBAflOU
1950
1951
PRíU be DERIVACIÓN
TÚNEL NÓM. Í'2SW^
u ruaran .apawhgÍk
zonas irrigadas
l;ig.
... Obias lúdroelccu'icas en e! río Cupaüuio
Venta
total
- -------
" í(,a HF
\ PRESA 0E OERIVAC.ÓK El COBAND
LCW&AADIA '
Costos de
generación
Ventas de electricidad
por hvh
(a precios Dentro de
Fuera de
de 1960)
la región
la región
8 010^
8 090
8 090
8 090
8 090
34 100 60110
60 110
60 110
60 110
60110 60 110 \
132 560
132 560
132 560
132 560
13 183
10 771
12 177
11 318
7 651
4 418
2 850
3 659
5 521
8 303
6815
5 249
4 304
3 051
3 922
12 397
12 985
19 379
20 269
9 069
14 500
17 926
20 785
26 910
32 556
37 278
50 811
51 804
69 045
78 470
93 950
2 984
5 079
6 207
13 275
5 359
74 685
144 990
185 025
143 596
105 324
151 614
218 254
268 417
471 345
534 944
546 744
15 381
18 064
25 586
33 544
14 428
89 186
162 917
205 810
170 506
137 881
188 892
269 064
302 221
540 390
613 415
640 694
e: Comisión Federal de Electricidad, información preparada a solí1 de los autores e informes financieros.
i
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
í EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
226
22'7
mientras se construyen nuevas plantas en otras partes de la Re­
j EZ sector externo
pública, para satisfacer las demandas de las regiones situadas
fuera de la cuenca y que en la actualidad son abastecidas por
En el capítulo i, examinamos la opinión de que una escasez
el Sistema Lázaro Cárdenas. Es posible que se añada un tercer
en los recursos exteriores puede imponer una limitación sobre
generador a la planta Salto Escondido, durante los años
el desarrollo independiente de una escasez en los recursos inte­
ese pro­
setenta aunque no se han elaborado planes para
riores.
La distinción pareció más válida desde el punto de vista
cacidad
instalada
yecto. Esto aumentará en casi un 25% la ca¡ 1
de la planeación, a corto plazo, que para la duración del período
en la región.
durante el cual estamos considerando el funcionamiento de la
Los intentos de calificar la tasa de rendimiento de las inver­
Comisión del Tepalcatepec. Durante un largo período hay muchas
siones en la producción hidroeléctrica fracasaron debido a la
cosas que casi todos los países pueden hacer para igualar la
falta de información suficiente y a las políticas de precios que
¡escasez relativa de los recursos interiores y de los exteriores. Du­
tienen como fin estimular el uso de la energía eléctrica por la
rante la existencia de la Comisión del Tepalcatepec, México
industria. Los datos proporcionados por la cfe muestran que
ha devaluado su moneda dos veces, ha sustituido la importación
las inversiones a lo largo del río Cupatitzio tienen un rendi­
por producción nacional en una escala considerable, ha
consermiento negativo. Sin embargo, es posible que la tasa de rendi­
¡ fado además la libertad de cambio
y, por consiguiente, es difímiento social de la inversión en instalaciones de energía eléctrica
*las
considerar
divisas
como
una limitación sobre su des­
haya sido alta, ya que dos costos unitarios dé construcción fueron
lio. .
bajos y las plantas tuvieron una tasa alta de utilización. En
No obitante, la necesidad de
na.sido
sido
vapunacionesha
nuevas exportaciones
parte la explicación de este rendimiento negativo está en las ta­
Ina ansiedad continua entre los políticos mexicanos. Sin duda,
rifas relativamente bajas cobradas a los industriales que usan
precian proyectos como el del Tepalcatepec, que hace una adila energía eléctrica en su producción, y que representaron la
í ión neta considerable a los ir
V-L/MÜ
ingresosVIL
de divisas, mucho más
mayor parte del co rsumo de la energía producida en la región.
j ue un proyecto de igual provecho
interior
■
pero que no hace
Otro factor podrían ser las prácticas de contabilidad dé las di­
Jinguna contribución r:i„ „ L neta a la mejora en el balance de pavisiones dentro de k Comisión Federal de Electricidad; es posible
í os. La Comisión del Papaloapar.
i
calculó que el contenido
que la energía se venda a las divisiones de distribución a un
; e importaciones de su inversión total, 1,inen el período 1947-1956,
bajo precio y estas últimas sean las que en realidad obtengan
14
ie del 31.7%.
Utilizando aquí
un porcentaje, aproximadaganancias. Se necesitaría un examen más cuidadoso del tema para
lente similar (qi
¡ue
quizá
sea
exagerado
para los proyectos de
asegurar cuál de estas dos explicaciones es más importante y si
4r\"'
■Comisión del Tepalcatepec, ya que son a una escala más
hubo otros factores que produjeron los resultados . inesperados.
Jkqueña), tendríamos ...
mi^unaciunes
ae, más
me o me—1 '_____ 5 un «v
total
de importaciones
de,omás
En la época en que se empezaron a construir las plantas había
>«8, 160 millones de pesos (a precios de 1960) entre 1947 y 1965.
una grave escasez de electricidad en los estados industriales ve­
' . «lemás, otras inversiones, en especial la maquinaria agrícola,
cinos y se necesitó la energía de la planta Cóbano para el cre­
Jpbién habrán absorbido muchas divisas,
Pero la Comisión
cimiento continuo de la región. Desde ese tiempo, esta energía
llculó el valor de la producción de algodón,
i,
en
el ciclo 1962-3,
20Q
-----se ha integrado a la red nacional y representa sólo una pequeña ,>209 millón-Jshd~
" r mí-----------"
es
s
proporción de la producción nacional. Esta producción, no obs- ,,Jcomn H XluxZ
^ ^el‘ algodón es la cosecha de
pomo
exportación más importante
conI
México,
esto f puede considerarse
tante, es aproximadamente veinticinco veces mayor que el
como 209 millones de pesos
J divisas. Esto cubriría el uso de avisas que m divisas que hace la Comí____
sumo de la cuenca, incluso después del reciente aumento1 en' la-----una
>
jML
Utia
de la cuenca, hiuuou — r............
.
-W» Y probablemente la mayor parte de las que se necesitan 1
representó
se necesitan
9Ur°-dad económica. Por esto, la electnci
económico de los esta-A comprar tractores, despepitadoras de algodón, aeroplanos,
actlV1
contribución im¡ portante para el desarroi •
;dad era escasa yjE Además, ya han ocurrido varios otros ciclos agrio '
dos vecinos en unar ,época en que u --------------------Jyjfclón, cada uno tan productivo como la cosechaotros
« la elec <
,
de ciclos agrícolas del
desde entonces la energía barata de esta región se ha utilizadoj
1962-3,
?®gual que de melón
cantalupo, melón y sandía, así como
como una base de energía dentro de la red nacional de elec-J
t
I
tricidad.
■.i’
•
«Comisión del Papaloapan, Economía del Papaloapan, vol. 1, p. 202.
1
228
evaluación de las actividades
EVALUACIÓN de LAS ACTIVIDADES
otras cosechas. Por tanto, el proyecto es claramente un proveed0Como°d^ÍSante
la región también ha experimentado el
S,
retiro de mucho capital extranjero del ímancianuento de las
cosechas y su sustitución por capital local acumulado con g
E“,“ai
Xia, ¿«a. *>.
mi extraniero ha continuado utilizándose en otras paites
México pala alentar la búsqueda de nuevas regiones en que pue­
dan cosecharse, lucrativamente, cultivos que tienen gran demanda
los Estados Unidos. En este sentido la cuenca del repalca
en
urocc
te pee no
no sólo ha sido una fuente de divisas sino también
que se les
liberado recursos que necesitó originalmente, para
use en otras partes de México» .
La oferta de factores internos de la pr&duccion
tieran fuentes de capital no utilizadas en la repión antes
llegando a «.T’.'"? a£C,:^ntl> <’e b praetaJÓ, o,¡á
C probabIe Que las ganancias futuras no serán
igualarla,
nU
aS
!
versiones
ntóó te / n X "
- E1 capital norteamericano J
LL U Slembra.(i« «elón y sandía ya ha sido capaz de trt’h
darse a otras regiones, siendo remplazado con capital loc-il L,
importancia
Ha existido una considerable
consiaciauit-. controversia sobre
------------la
*
-i
cascz
relativa que la escasez
( de determinados factores de la producción ,
P8SadaS La ’-ersióXn J íquipo
limitación de la tasa de desarrollo económico..,
S'deX'1
tiene como una 1............ ......
tísico de las despepitadoras de algodón se recuperó denml U
•
ipítulo
i,
esto
es,
en
gran
parte,
un
pros
Como indicamos en el ca]
dos ciclos en todos los casos, (hacia 1966-7), sqX una fuente
Mema 'práctico, y es de utilidad cualquier aclaración que robre;
CXn£bCXí!an? " regÍÓn' y Us
é hagan estudios como éste. El aprovechamiento de recursos y
tÍpS
- ddade d
V «pial
de trabajo fueron satisfechas, por las ganancmde talento empresarial no explotados, hasta el momento, son
potencialmente una valiosa contribución de un proyecto de
- ‘ apodrfeSPUéS X CCrCa dC tinc° dclos de siembra en gñi? escala
versión nública al desarrollo nacional.
-vado nudo" en1"'61'683?116 °lTrVar qUe 61 sistema bancXio pX
ParecePque la falta de espíritu de empresa redujo, efectiva-. ■en años r’ ’ gene‘a ’ «nallzar fondos hacia fuera de la reo-ron
en 1965 a
nJnte el hendimiento de la inversión durante los primeros an«. meno de sTXui TItera * Pléstamos tendió
.3 menos de 20 millones de pesos, mientras
que en ese año había
?? nrovecto pero que posteriormente el proyecto pudo tent?;
.......... í® Ia \e8iód depósitos a la vista que ascendían a casi 30 mi
aumenlr e? número de campesinos con imciativ^
aban 12
^XtXa «iZ^En^^tulo^, « ’w^es
X-dXÍ
X
limitaciones
incluidas
en
.
iue el lento principio en la utiliza^ i.ZX/X™0’'la regi6n ha podido
atraer muchos inmigrantes
desarrollo del Tepalcatepec fue el temoprincipio
86 blibiei““ L“'oi<luan trasladado a los centros de
rsos
que
proporcionaron
los
trabajos
dS
'
ción de los nuevos recursos
de considerables estímulos por parte dej 4^ ™
desocnnnHíi T ■->
tí (XóXdX Te^e^c
picada desocupada? La'
BÍTÍaJoimldlTcrédrtoV^¡“empezó
la
región
a
el potencial que se había desarrollado. En el proceso se ent n|
ídbaXoedeeceírdenOTnente "UeVa gCnte' Se realizó <1
ron campesinos y empezaron a funcionar losq
|
ETlí rec /n X h" pr°srama de Colo“izació“' pero la mílE n de ios recién llegados no necesitaba de incentivo, especiales
mercado, de manera que los,residentes dispuestos a tomtu riega
XezaXn a aprovechar las oportunidades de cultivo de nue|
?
ireSPUeSta 3 h PlétOTa *
P tdad s
migración ha continuado, quizás a una
usa
tXroas para su propio beneficio. Este estímulo inicial fue ,p| LvX V *•!
1 pO51ble (3ue e“
la
O
'
actualidad
la
inmigración
hacia
la
ins
j
porcionado, quizás un poco tardíamente, por una
““^ " j
qUC
COm
ense
Ia
e ?a mP
emigración de otras parres
Dudo r«,Sma' íuera.° éste el «so, hacia 1960 el proyecto
|udo retener, aproximadamente, 40 000 personas más en la redecir que los recursos que alentó son realmente empresan |
23q
evaluación de las actividades
;
EVALUACIÓN LE LAS ACTIVIDADES
231
gión de lo que se hubiera podido esperar y esta cifra aumenta I
ver la plena utilización de las obras de inversión construidas
con el transcurso de los años.15
i
por la Comisión y para asegurar las inversiones complementaPara resumir el punto de vista nacional, está claro que una
rías por los intereses privados que resultarían en un desarrollo
evaluación únicamente cuantitativa de los resultados de la m - :
regional
equilibrado; el desarrollo regional era un bien imporyor producción agrícola en la Tierra Caliente no bastan para .
.
tante
para
quienes elaboraron originalmente el programa de in­
justificar la inversión de la Comisión en el caso extremo en que ;
versiones públicas en la región. A pesar del resultado en general
se usa una tasa de interés de 20% como unidad de medida pero
favorable del análisis, examinado en la sección precedente, está
sí se obtuvo una tasa de rendimiento aceptable. Hay, adem ,
claro que estos desarrollos no tuvieron los efectos deseados sobre
otros beneficios que no se cuantificaron y que pueden incluirse ,
la región; los beneficios fueron para la nación como un todo, v
con iustificia en el análisis. La creciente producción de madera
para
ciertos individuos, pero el efecto regional fue limitado
en la Sierra Madre del Sur, mencionada en el capítulo v, y la
Esto aparece con más claridad en la descripción del desarrollo
nueva mina y planta procesadora de bario deben su existencia ?
a las carreteras construidas por la Comisión en re aci n
, industrial en la región. La inversión inducida en las industrias
relacionadas fue muy limitada, y sólo las industria;
programa de irrigación. La mayor ocupación y la contribución ,
•ias cuya estruo
ceica de la
a los ingresos de divisas contribuyeron al esfuerzo de
j tura de costos hizo determinante la estabilización
lio nacional aunque estos efectos son, en teoría, explicados, Sj fuente de materias primas se encuentran hoy c« d.d CI1 men día en la zona.
se acepta la estructura de precios empleada al hacer los cálculo ; Sin una política favorable de precios de la electricidad
, 1OS
de beneficios y costos. Cuando se añaden estas consideraciones, abundantes recursos de energía de la región no contribuyeron
al análisis cuantitativo los resultados son suficientes para reco­ a as otras características de la misma para atraer una base inmendar este uso particular de los fondos de inversión guber-; dustnal más diversificada.
El desarrollo agrícola sí aumentó los ingresos de las personas
namental. Este descubrimiento, sin embargo, no reduce la im-j
en
la región. No sólo se abrieron nuevas tierras para el culti­
portancia de la observación de que hubieran podido hacerse,
vo,
sino que las tierras antiguas se hicieron más productivas. El
grandes mejoras si se hubiera prestado más atención al proble­
efecto
de este desarrollo se transfirió, en gran medida, a otras
ma de acelerar el ritmo de la adaptación al nuevo potencial de;
la economía como resultado del programa del gobierno.
ó regiones debido a la industrialización limitada de la cuenca del
no. Tepalcatepec. Hay dos componentes del crecimiento econó­
mico en la cuenca: el crecimiento como resultado del mayor
EL PUNTO DE VISTA REGIONAL
numero de habitantes y como resultado del mayor iiweso para
La contribución del proyecto al desarrollo nacional también ha
esas personas. El primer tipo de crecimiento aumenta la deman- '
sido su contribución al desarrollo regional. Pero como en h
da de productos alimenticios y de servicios básicos que con frerealización del proyecto se tenían objetivos regionales econó
cuencia se proveen ¡ocalmente, en tanto que el segundo depende
eos y sociales específicos, sus resultados deben examinara
, mucho más ■ de bienes manufacturados y procesados y servicios
luz de esos objetivos.
j que son proporcionados desde afuera de la región debido a la
falta de una base industrial local.
El desarrollo económico regional
Xa ciudad más grande en la Tierra Caliente, Apatzingán, cre­
ció rápidamente, como dijimos, para convertirse en un centro
A lo largo del cuarto capítulo de este libro se hizo referencia^
■ de distribución de bienes producidos en la región e importados de
la ausencia de políticas cuidadosamente estudiadas para promq ó
, d ; -otras, 1
------------j Uc.i y del
IVlUCllc
partes
del país
exterior. Mucha de esta mayor actieconómica puede
de la región de control Miran que en la Tierra Callente |
al
n,
d(?
i
i
.í
vaIVUU1,
bi:a
Do^o1un7%mV:drn‘‘d“e¡
¿2^'de U
- ZameTdtad^MeVíejorado las condición^ ;« ^as a lat región por elrama
programa
de inversiones
de" la Code inversiones
de la Codurante
decada, i a,---------------.mmón
cultiva^ZT.^7
piones
en
la
Tierra
Callente
j.
* del Tepalcatepec. Los mayores ingresos de los uuiiivaa 37 465 personas mas a la región de lo que se hubrera esperado^«Ja
~ -------------. . aores y los
J mores
y losaumentos
pequeñosobtenidos
aumentospor
obtenidos
por los trabajadores
pequeños
los trabajadores
“
misión no existiera; este número es un poco menor que el de los y lariQ d¡ar¡0
comr¡buyeron a¡ Acimiento
---- u contribuyeron
al crecimiento de Apatemigraron de otras parte se de la cuenca.
| >nngán. Sin embargo
se tuvo
traer partes
de-otras
se tuvo que
traerque
de-otras
delpartes
país del país
232
í
EVALUACIÓN DE LAS
actividades
se consumían
a la mayoría de los bienes manufacturados que
en la región.
El efecto regional fue limitado además por la forma en que 4
evolucionó la agricultura de la Tierra Caliente. Con la firma de ?
acuerdos de alquiler y la disponibilidad limitada de crédito, sólo •
una pequeña proporción de las personas de la zona pudo par- 1
ücipar en la prosperidad que trajo el proyecto de irrigación. La
mayoría de los ejidatarios en cuyas tierras se cultivaban algodón
y melón se vio forzada a rentar sus parcelas a los cultivadores
privados y ejidaies que tenían acceso al crédito de] Banco Eji- .
dal o de las plantas despepitadoras. Trabajaron como peonesL
con salario diario, con frecuencia, en sus propias tierras, y re­
cibían un salario por este trabajo además de la renta por sus
tierras. Este ingreso es una mejora sobre los rendimientos que
hubieran podido esperar si hubieran continuado sembrando en i
la tierra las cosechas tradicionales. Los que han recibido crédito
gozaron de considerables mejoras en su ingreso; aunque gran
parte de éste se volvió a invertir, hubo algunas mejoras en los ¡
niveles de vida de estos campesinos. Por tanto, incluso en esta ;
zona se concentró con rapidez el ingreso en las manos de unos
pocos campesinos.16
Evaluación de las inversiones sociales
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
238
Incluso si fuera posible medir con claridad la producción de
la educación, sería un error considerar los gastos en educación
únicamente como una inversión para aumentar la productivi­
dad. En gran parte la educación es un bien de consumo dura­
dero que puede enriquecer las vidas de las personas que la reci­
ben. Este aspecto social del trabajo de la Comisión en toda la
cuenca es -un intento de traer los beneficios del progreso hecho
por la nación mexicana a las zonas rurales. Éste es tanto un
intento de redistribución del ingreso, con el fin de asegurar
1 un nivel mínimo de vida para todos los ciudadanos, como, es­
pecialmente en la Tierra Fría, un reflejo de la creencia de que
México no puede ser una nación verdaderamente unida mientras
grupos de mexicanos sigan siendo excluidos de los progresos que
. se han hecho desde el siglo xvi.
I Estas afirmaciones son adecuadas igualmente para las medidas
l de salubridad y para muchos de los gastos en carreteras secun­
darias, en las. zonas de tierras altas, con las que se comunicó,
i por primera vez, algunas comunidades con las rutas de transporte
i público. Las obras urbanas, descritas antes, también sirvieron a
esta función y son una fuente de orgullo para los residemes de
la
región, tantoy urbanos como rurales. Son un símbolo de que la
i
Revolución mexicana ha sido capaz de llegar a las partes más
distantes de la nación y de unirlas en un solo pueblo.
A pesar de estas contribuciones, quizá el efecto m¿ís impor­
tante que la Comisión ha tenido sobre el desarrollo regional fue
la atención que creó sobre la zona como un foco de la inversión
4
, gubernamental. El programa de inversión social fue mínimo en
„ relación con las necesidades, pero los gastos inducidos hechos
. por otros organismos y por las mismas comunidades fueron de
gran importancia para mejorar el bienestar de los habitantes.
El aumento de la población en la Tierra Caliente, durante la ?
primera década de funcionamiento del proyecto, fue acompañado ■
de mejoras significativas en las condiciones de salubridad y sa- »
nidad. El paludismo había desaparecido casi por completo como,
*una
j amenaza a la salud, en tanto que se habían disminuido sig
nificativamente otras enfermedades, incluyendo los malestares in- ■
testinales, por la construcción de sistemas de drenaje de aguas
negras y otras obras. El analfabetismo también disminuyó mucho ,
EL PUNTO DE VISTA DESDE 1947
mediante campañas intensivas y la expansión del sistema esco-J|
*lar. El problema de la evaluación de las inversiones sociales, que
■ En el capítulo i sugerimos que cualquier cvaiuacio]
uier evaluación a póster i orí
tuvieron un efecto importante sobre las condiciones de vidOf
'del proyecto deberá estudiar la predictibilidad del iLJuud'ju ue
i resultado de
5WUn proyecto. ¿En qué medida habría sido posible anticipar el
tanto en la Tierra Caliente como en el resto de la cuenca, ri®
*"bl~
varias medidas
desarrollo
futurodedelaun programa
muy difícil. Por ejemplo, son ¡
h: para justificar así sus benefí0S1 •
- cualquier grupPW
°nT®cios antes de que se hiciera la construcción? Con el conocimiento
producción de la educación: el Pporcentaje
de
particular de edad que está matriculado, el número de profe-1. obtenido por el. transcurso del tiempo, podemos ahora decir
que
sores por habitante, el nivel de alfabetismo, etc.
ó® probablemente el proyecto valía la pena, pero uu hex
no hemos respondido a la pregunta de si un economista habría hecho . ----- .o un jniPara un análisis más completo de este proceso de concentración de®■ció semejante en 1947.
ingreso, asi como algunas sugerencias para la redistribución del mismo®
El principal aspecto de este problema seria la habilidad de los
véase David Barkin, “Concentración del ingreso dentro del proceso de des®
expertos en 1947 para predecir el curso de los acontecimientos
arrollo agrícola”, Comercio Exterior, xix, 11 (noviembre de 1969), pp. 8704®
.i
234
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES j EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
235
y bien integrado al sistema nacional de transportes y comuni­
en el desarrollo agrícola de la región. Al crearse, uno de los ¡
caciones
se cumplieron a principios de la existencia de la Comi­
primeros actos de la Gomisión fue el establecimiento de una esta- í
sión.
En
las zonas más altas de la cuenca, la gente y las comu­
ción experimental en cooperación con la Secretaría de Agri- j
nidades habían estado aisladas durante décadas y el programa
cultura, que centró su atención en el algodón. Aunque sólo había J
de construcción de carreteras y de escuelas de la Comisión, ade­
doce hectáreas de algodón sembradas en 1950, parece claro que j
más
de la electrificacióh, jugaron un papel importante en la
los agrónomos estaban convencidos del valor potencial de este j
integración de la región a la nación. También pudo haber ace­
producto al principio de la existencia de la Comisión. Quizás j
lerado el ritmo de la emigración a otras zonas más prósperas
el analista no hubiera previsto, en 1947, el largo lapso entre el .
del país.
desarrollo de la tecnología para sembrar algodón y su adapta­
Finalmente, podría preguntarse si “la mano oculta'’ observa­
ción, mencionadas en otras partes del libro, y quizás hubiera pre­
da por Hirschman tuvo algún impacto sobre el progreso en la
dicho una estructura de beneficios más parecida a la alternativa
cuenca del río Tepalcatepec.17 Podría ser un tributo ¿1 los inge­
presentada en este capítulo.
nieros. y planificadores del proyecto o a la generosidad de la
La contribución de la producción hidroeléctrica fue de gran ;
dotación física de la región que no parece hayan surgido obs­
importancia para la nación a principios de los anos cincuenta- :
táculos no previstos que requirieran grandes cambios en los pla­
cuando ocurrieron interrupciones ocasionales de la corriente en i
nes o que, si se hubieran anticipado, habrían amenazado la
toda la parte central del país debido a una escasez en la capa- ;
incorporación del proyecto dentro del programa de inversiones
cidad generadora. Las diferentes plantas de energía que se cons­
públicas de México. Un posible acontecimiento positivo fue el
truyeron fueron previstas y anticipadas con impaciencia por los
descubrimiento de grandes depósitos con un alto contenido de
planificadores gubernamentales y por los industriales.
;
mineral
de hierro en una zona cercana; actualmente desarrolla­
Por otra parte, la afirmación de que la presencia de la Comí- ;
da por la industria del acero en cooperación con el gobierno.
sión del Tepalcatepec diversificó el crecimiento económico en i
■De esta manera, el .analista que hacía una evaluación similar
la cuenca o incluso en la Tierra Caliente, además del creci­
a
la presente, pero hace 20 años, podría haber terminado su
miento de la producción agrícola, parece ser injustificadamente
informe con una Recomendación entusiasta para la ejecución in­
optimista, incluso para 1947. Es difícil saber en qué se basaban
mediata del programa de inversión. Sus descubrimientos podían
tales predicciones de una industrialización extensiva, pero en ver­
haber sido que la tasa de rendimiento excedía del 20% y que
dad sería difícil fundamentar algo más grande que las plantaslos otros beneficios por los cambios en las condiciones de vida
proceshdoras y centros de servicio que surgieron durante las dos
y la. posible atracción de personas alejándolas de la Mesa Cenprimeras décadas de crecimiento. La Tierra Galiente sigue es-y
tral eran más que suficientes, para justificar el proyecto, incluso
tando muy distante de los principales mercados de la Mesa | :
si no aseguraba el crecimiento espontáneo de la región más allá
Gentral a pesar de la construcción de buenas carreteras y lal del aumento en la producción agrícola.
inauguración de un servicio regular de ferrocarril. El clima exige j
aire acondicionado en la mayoría de las oficinas y en las fá­ L LA RESPUESTA HUMANA
bricas que no pueden dejarse abiertas para su ventilación. Pou
último, hay una escasez de mano de obra que, sin duda, influye:
y Los grandes cambios en la economía y la estructura social de la
en las decisiones sobre el establecimiento. Por tanto, la producción;
Tierra ..Caliente han sido acompañados por cambios en las acti­
manufacturera y los costos de transporte serían relativamente;
tudes de los campesinos. Las diferencias en la habilidad técnica
altos. A la luz de estas consideraciones, la opinión que considera ;.y en. la-riqueza que se observan en la actualidad en la región
a la Tierra Caliente como un nuevo polo de crecimiento, y que Aon el resultado de las diferentes respuestas de los campesinos ante
1
parece haber sido creada por quienes desean esas inversiones,!t
________
I*!
_ _
no debe considerarse más que como un artificio retórico al eva-jf ^nteryención gubernamental
: Quizá las grandes diferencias en la riqueza y en el ingreso
luar el proyecto, porque no se tomó ninguna medida para esfl
son resultado de la disponibilidad limitada de crédito, debido
timular el crecimiento industrial de la región.
En el campo social, los planes para cambiar al medio ambicn- ; 17 Véase el capítulo 1.
te y hacer de la Tierra Galiente un lugar saludable para viyM
W
-----
236
EVALUACIÓN DE LAS ACTIVI
a la pequenez del mercado para los nuevos productos comerc
les. Quienes estaban más dispuestos a asumir un riesgo aprovec
ron las ofertas de ayuda, al principio, y continúan recibiendo c
dito si sus cosechas son lucrativas, en tanto que quienes vacila
aceptar no han podido obtener crédito.
Una de las formas importantes de acelerar la adaptación
nuevo potencial agrícola de la región es reducir el riesgo a
rente para el c^^esino debido a la experimentación. Esto pu
hacerse garantizando al campesino su costo de oportunidad
cosechas de subsistencia por la. tierra que siembra con produc
comerciales.18 De esta manera, puede usarse un sistema p
costoso para reducir los riesgos, con el fin de acelerar la tran
ción de una agricultura tradicional a una moderna y mejo
así los rendimientos de las inversiones públicas hechas en
agricultura.
Para terminar, los campesinos que tienen acceso al crédito y
conocimiento de nuevas técnicas de cultivo demuestran que r
ponden a los cambios en los precios y varían las cosechas se
lo amerita la situación económica. Se espera que la producc
de ajonjolí aumente a medida que las personas encuentran f
mas de mejorar los rendimientos de la cosecha y se quita
control del mercado a los pocos comerciantes de Apatzingán,
lo dominan en el presente. No hay razón para dudar que e
grupo de campesinos continuará mostrando esta capacidad
ajuste y quizá proporcionará algunos de los recursos financ
ros que otros campesinos necesitan para empezar a cultivar
cosechas comerciales de mayor valor.
Este análisis añade evidencia adicional a la creciente lite
tura sobre la racionalidad de los campesinos. No indica que
campesinos de la Tierra Caliente no actuaron como mejor co
venía a sus intereses ya sea aceptando o rechazando las ofer
de ayuda para la limpieza de sus tierras. Antes bien sugiere
si se redujeran los riesgos a que se enfrentan podría acelera
el desarrollo agrícola.
Esta afirmación de la racionalidad del campesino no sig
fica, sin embargo, que puede dejársele sólo para que se las ar
gle por sí mismo. Las diferencias en los niveles económicos
la región son, en su mayoría, resultado de un acceso desigual
crédito y a la asistencia técnica. El campesino sin estos recur
necesita ser protegido contra quienes buscan obtener el control^
1S La garantía tendría que ser sobre el cultivo real de una nueva cos
en la tierra que actualmente se siembra con cultivos de subsistencia,
evitar una situación en la que la tierra no se siembra por esperar un
greso mínimo garantizado por el gobierno.
■■ EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
237
de la tierra que arriendan; la prohibición contra la venta de la
tierra,, que se‘ da bajo la disposición de reforma agraria de
/ la“Constitución, sirve a este propósito. Bajo la misma, el cam­
pesino siempre tiene la opción de terminar el contrato y reiornm
a la tierra una vez que ha obtenido los recursos necesarios, p
sean propios o de. fuentes del gobierno. Por tanto, la racionad'
dad económica no debe implicar, como se argumenta a veces,
que el gobierno' puede- abandonar al campesino y dejarlo que
reaccione a las fuerzas libres que operan en el mercado.
LOSi PROYECTOS ¥ EL DESARROLLO REGIONAL
vm
LOS PROYECTOS DE LAS CUENCAS HIDROLÓGICAS
Y EL DESARROLLO REGIONAL
capítulo
La estrategia de promover el desarrollo regional mediante los
proyectos de las cuencas hidrológicas tiene aspectos económicos
y políticos, como ya vimos. Desde un punto de vista de la eco­
nomía nacional, tal estrategia implica cuantiosas inversiones en
la agricultura y en energía hidroeléctrica. Ya hemos discutido la
contribución que tales inversiones han hecho al crecimiento eco­
nómico nar.oj al. En el caso de un proyecto que tiene éxito,
como el dei Tepalcatepéc, esta contribución ha sido impresio­
nante. Es probable que el proyecto del Fuerte también demos­
trará tener un alto rendimiento sobre la inversión, pero no
medimos esto con detalle. Por otra parte, el proyecto del Papaloapan parece haber tenido relativamente poco éxito. Es poco
lo que podamos añadir, con provecho, sobre esto, aunque sí di­
remos algo sobre los efectos de los proyectos en la oferta de los
factores que contribuyen a los objetivos del desarrollo nacional
y regional. D a? airemos, primero, las razones para utilizar los
proyectos de las cuencas hidrológicas integradas para realizar
la inversión pública en irrigación, obras de energía hidroeléctrica
y en el capital social general, en lugar de asignar cada concepto
de inversión a otros organismos que por lo normal hacen esas
inversiones en México. Necesitaremos enfocar la pregunta tanto
desde un ángulo económico como político. Después terminare­
mos resumiendo las contribuciones económicas que los proyectos
han hecho a los objetivos del desarrollo económico regional mexi­
cano, basándonos tanto en el análisis detallado del proyecto del
Tepalcatepec, presentado en los últimos capítulos, como en las
descripciones previas de los proyectos de las cuencas hidrológicas
descritos en eL capítulo iv, y considerando de manera general las
implicaciones para las políticas de desarrollo regional.
EL EMPLEO DE LOS PROYECTOS DE LAS CUENCAS
HIDROLÓGICAS INTEGRADAS
239
do nuevos organismos para administrar los programas de des­
arrollo regional si no hubieran mostrado perspectivas de contri­
buir considerablemente al esfuerzo del desarrollo nacional, además
de su efecto sobre las regiones en donde se localizaron los pro­
yectos. La distinción entre los efectos de los programas sobre el
crecimiento- del ingreso nacional y su distribución regional es
importante al considerar las políticas de desarrollo regional.
En la mayoría de los casos estudiados, el punto focal de las
inversiones ha sido la utilización de los recursos naturales exis­
tentes como parte del esfuerzo nacional de desarrollo. El go­
bierno nppca ha, proporcionado incentivos especiales para que
-Has nuevas empresas se establezcan
en estas cuencas lUUlU
hidrológicas
Jen lugar de otras partes. Más bien, los programas
de las
1
'
5 cuencas hidrológicas se han enfocado a
propórcionar el capital general
social básico y a desarrollar el potencial agrícol:
'a e hidroeléctrico
1 de una región? Con una atención centrada en las actividades pri­
marias y sin algún estímulo específico para cambiar sus patrones
de localización tradicionales, las nuevas empresas muy pocas ve­
ces encuentran ventajas en establecerse en regiones muy alejadas
de los grandes centros de población y del centro del poder.
; Este tipo .de desarrollo regional dependerá,
en ausencia de es"tímulos positivos, del establecimiento de utJ
una base de exportación. Las ventajas comparativas de cualquier
: zona recientemente
desarrollada, ,si las tiene, probablemente
se encontrarán en la
^producción primaria, lo que determina el -------------- JU un.K
carácter
de suHC
base de
deportación inicial. El hecho de que los proyectos de las cuencas
hidrológicas harán más importante, si tienen éxito, a la agri­
cultura como la base de exportación (excepto en donde la dis­
ponibilidad de materiales y de energía hidroeléctrica barata atrae? :án industrias, metalúrgicas)
c"
________
—
.vi.
líe­
es¿un
punto
en su ...favor.
Como henos visto con los proyectos del Tepalcatepec y del Fuerte, el
Iesarrollo de la irrigación puede tener Uuuntícuu
efectoiuq
impresionante
obre la producción agrícola y los ingresos locales. I.
Los resulta•i ios del proyecto del Papaloapan nos recuerdan, si
**
si n embargo, que
J se no es un resultado inevitable del desarrollo de las
_ _L Ls cuencas
. lidrológicas. Allí, la irrigación ha sido
en especialucixucnia
desalentadora:
: ay obras fueron muy caras y es poca su utilización. Aunq'
¡ue la
j ligación en la región del Golfo ha tenido efecto sobr
re la pro­
■ - Actividad, los críticos que argumentan que debió
tener prio? idad la irrigación en las zonas en que es realmente indispensabl
”
-pensadle
J robablemente tengan razón.1 Sin embargo, el principal trabaj
io
i
Las razones económicas
Como sugerimos en los capítulos n-iv de este libro, en especial
en el capítulo ni, quizás el gobierno mexicano no hubiera crea-
’
J
Moisés
T.
de
la
Peña,
El pueblo y su tierra: mito y reriidad de la
'.forma agraria en México, México, Cuadernos .Americanos, Rml-, pp. 455-6.
1
240
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REG
de la Secretaría de Recursos Hidráulicos siempre ha sido la irr
gación, de manera que parece inevitable una tendencia en e
sentido en los proyectos del Papaloapan y del Grijalva. En u
país tropical árido como México, en la mayoría de las regio
nes, la irrigación es una condición necesaria para una al
productividad agrícola. El desarrollo agrícola que México h
experimentado en las décadas recientes se atribuye por, lo ge
neral, principalmente el crecimiento en una zona irrigada.2 Pe
un aumento de la zona irrigada no es una condición suficien
para el progreso agrícola. Son necesarias inversiones en comun
caciones, crédito, ayuda técnica y, quizá, otras en capital soci
general. Así, ya estén o no coordinados dentro de un organism
los elementos básicos de la estrategia parecen bien elegidos pa
promover el desarrollo agrícola, y es difícil pensar en cualqui
estrategia alternativa que pueda haber obtenido resultados co
un éxito semejante en este respecto.
Pero para el desarrollo continuo la agricultura podría est
alejada de lo ideal como una base de exportación. En prim
lugar, sus productos son aquéllos para los cuales, al menos m
allá de cierto punto, es probable que las elasticidades del ingres
de la demanda sean bajas, y los términos del comercio entre
región y el resto del país pueden empeorar. En segundo luga
los efectos en “cadena” sobre otros productores serán pequeño
Incluso aunque una agricultura avanzada compre una alta pr
porción de sus insumos a fuentes no agrícolas, especialmente t
mercado es muy difuso y no parece tener mucho efecto sob
el establecimiento de las principales industrias. Un ejemplo d
ese caso puede ser la falta de industrias en grandes zonas d
medio oeste de los Estados Unidos, en especial en los estado
de las planicies. Esto será incluso más cierto para la agricu
tura en una economía subdesarrollada, que estará menos meca
nizada y por tanto comprará una menor proporción de sus in
sumos a otras fuentes no agrícolas, Lo mismo es cierto co
respecto al establecimiento de las industrias manufactureras d
bienes de consumo. Por tanto, los efectos en “cadena” hacia atr
son pequeños. Además, el valor agregado en el procesado de
mayoría de los productos agrícolas es una proporción muy pe
queña del valor bruto de la producción. Tanto la experienc
del proyecto del Tepalcatepec como del proyecto del Fuert
apoyan este argumento. Otra producción primaria y procesad
local, como las de los productos forestales, podrían aprovecha
las obras de capital general social que existen actualmente en
2
Por ejemplo, ibidem, p. 206.
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIONAL
241
cuenca. Ejemplos de esto son la Fábrica de Papel Tuxtepec, en
la cuenca del Papaloapan, la planeada (pero que nunca se cons­
truyó) en la cuenca del Tepalcatepec, y los trabajos en el bario
con su planta en Apatzingán. Pero la experiencia mexicana su­
giere que quizás tal producción tenga algo más que un efecto
menor sobre el ingleso bruto regional.
La ausencia de cualquier desarrollo económico regional autosostenido es importante en especial en vista de nuestra discusión
de los problemas a que se enfrenta la ciudad capital de Mé­
xico. En el capítulo n indicamos que los costos del “congestio­
namiento'’ originado por el rápido desarrollo de la industria
en el Valle de México y el crecimiento de su población, han
aumentado con rapidez y son causa de gran preocupación para
algunos políticos. Es probable que los beneficios provenientes de
las economías de la aglomeración ya no están aumentando e,
' incluso, podrían estar disminuyendo por el crecimiento del Dis­
trito Federal; en vista de esto, no parece sorprendente que otros
centros industriales se desarrollen en los estados vecinos, exac­
tamente fuera del Valle de México, pero quedándose a una dis­
tancia de la capital fácil de recorrer.
No obstante, los programas de desarrollo de las cuencas hi¡ drológicas ¡d facilitaron el proceso de incorporar economías técni■ cas externas dentro de cada cuenca directamente en el proceso
de planeación. En la cuenca del río Tepalcatepec, la ejecución
simultánea de los segmentos de irrigación y de energía hidroeléc­
trica de los planes de desarrollo fue, probablemente, la forma
más eficaz de utilizar los fondos gubernamentales. De manera
similar, la construcción de carreteras para fines de comunicación
también requiere alguna coordinación con las demandas futuras
del comercio y de los pasajeros por transportes de superficie.
Sin embargo, la coordinación por la Comisión no implica que
dentro del proyecto se asignen cantidades adecuadas de inver­
sión. Por ejemplo, no hay ninguna cantidad determinada técni­
camente en inversión en carreteras que deba combinarse con un
determinado proyecto de irrigación. Es posible que haya un mí­
nimo absoluto de carreteras indispensables antes de que los pro­
yectos de irrigación puedan hacerse productivos. Más allá de este
punto, que podría representar unta gran inversión, los “insumos
. adicionales en carreteras” continuarán aumentando la producti­
vidad del proyecto de irrigación, pero, eventualmente, lo harán
a una tasa decreciente que podría, incluso, disminuir hasta cero.
Es probable que los problemas más interesantes sobre las polí­
ticas de transportes estén en la etapa en que la productividad
marginal disminuye, pero, sigue siendo positiva. Es aquí donde
242
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGI
quizás se. tenga que decidir si debe pavimentarse una carrete
o, en “una economía desarrollada, si debe construirse una auto
pista. En el capítulo i encontramos el argumento, de Hirschma
de que podría ser mejor dejar que el gobierno se vea inducid
a ampliar el sistema de carreteras por el crecimiento previo d
sector privado, más que ampliar el sistema y esperar que indu
cirá a la actividad privada a- utilizarlo. Este argumento es má
plausible durante esta etapa.
Existe el peligro, como indica Hirschman, de que los orga
nismos gubernamentales lleven muy lejos la construcción de ca
rreteras; puede considerarse a un- “embotellamiento” mucho me
nos deseable políticamente que la menos obvia subutilizació
Podría incluso llevarse la construcción de carreteras más allá d
punto en que un aumento en la inversión no tendrá ningún efec
to sobre la productividad. Quizás tal es el caso con algunas d
las carreteras de la cuenca del Papaloapan. El otorgar a u
organismo el poder de coordinar las inversiones, no elimina
evidentemente este riesgo. En justicia, debe recalcarse que
subutilización puede surgir por aspectos de indivisibilidad, y qu
las economías a escala podrían justificar que se le construye
antes de la demanda.
Aunque la productividad de todas las actividades en la cuen
ca depende hasta cierto grado de la existencia de una red d
carreteras, habrá variaciones obvias en esto. La etapa en la cu
las mejores carreteras no tienen un efecto sobre la productiv
dad podría alcanzarse para algunas actividades mucho antes qu
para otras. Si todas las actividades se plantearan de manera s
multánea y centralizada, entonces, conceptualmente, una activ
dad o un grupo de actividades determinará en dónde estaba
punto marginal de la construcción de carreteras. Esto es clar
en particular, cuando estamos considerando la expansión en tér
minos de un sistema de carreteras de mayor densidad, más qu
en términos de un aumento en el volumen del tráfico que un
carretera en particular pueda manejar en un período determ
nado (porque la demanda total sería inevitablemente parte d
cálculo). Hacer de mayor densidad el sistema de carreteras
el tipo de expansión que más interesa al desarrollo de las cuen
cas hidrológicas en México, pero en la Mesa Central, la amplia
ción de la capacidad de transporte de las carreteras es, quizá
de igual importancia. Las decisiones sobre la pavimentación d
una carretera tienen algo de ambos aspectos, ya que no sólo
afecta a la capacidad de transporte de una carretera, sino tam
bién a la calidad de servicio que puede dar.
Con frecuencia, en una región agrícola recientemente “abie
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIONAL
243
ta”, la irrigación podría ser una de un grupo de actividades
que determina la extensión del sistema. Pero también es posi­
ble que sea más necesario coordinar la mayor parte de la inver­
sión en carreteras con el aumento de las actividades en una
región vecina, o con la minería, o con el turismo. En el caso
de la cuenca del Fuerte, por ejemplo, la carretera que forma la
principal ruta turística y comercial entre el México central, Baja
California y la costa del Pacífico de los Estados Unidos cruza
la parte baja de la cuenca. El que la Comisión del Fuerte se
haya preocupado poco por utilizar su poder de construcción de
carreteras refleja el hecho de que la zona a la cual sirve ha
tenido buenas carreteras para otros propósitos, y que una inver­
sión adicional en carreteras por su parte —excepto en carreteras
locales para transporte de productos agrícolas— habría tenido
poco efecto sobre la productividad de sus otras inversiones.
Es probable que uno pueda argumentar de manera análoga
respecto a otras inversiones de capital general social, aunque
deben mencionarse dos cosas: El componente de consumo de tal
inversión quizás sea más importante aquí que en el caso, de la
inversión en transportes, de manera que los efectos de la produc­
tividad no tengan importancia en la decisión al margen de cuánto
debe gastarse en cada una. Se ha trabajado poco con la relación
técnica entre tal inversión y la productividad de otras inver­
siones, y es mucho más difícil hablar de manera general sobre
los efectos de diferentes cantidades sobre la productividad.
Las razones políticas
Aunque el argumento económico para hacer de las cuencas hi­
drológicas el punto de coordinación de la inversión pública regio­
nal no parece, por lo general, ser particularmente fuerte, en Méxi­
co la estrategia tiene mucho más sentido si además de los factores
económicos consideramos factores políticos. Como hemos discuti­
do, con frecuencia ha demostrado ser muy difícil para el gobierno
mexicano lograr alguna planificación coordinada de la inversión
pública y existe un gran número de organismos descentralizados
con poder de gasto. Las comisiones de las cuencas hidrológicas
representan un intento de coordinar el gasto del gobierno bajo
un organismo semiindependiente sobre la base regional.
Las dificultades en la coordinación de la inversión pública,
frecuentemente, han reflejado, en el pasado, el patrón fuerte­
mente personalista de las políticas mexicanas en las cuales .. Jos
líderes nacionales. .. se han identificado con determinadas ideas
244
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIO
o políticas. Aunque Scott informa que recientemente este rasgo
de personalismo entró en decadencia,3 el proyecto del Papaloa
pan es un buen ejemplo de un esquema en el cual se identificó
a su fundador con su desarrollo. Un síntoma de esta decadencia
es la desaparición de los viejos “caudillos" líderes cuyo poder se
derivaba, no de la autoridad constitucional, sino de sus segui­
dores personales y militares. Esta decadencia puede hacer má
fácil lograr la coordinación, lo que pudiera ser la razón por la
que ha existido una tendencia a que las comisiones se trans­
formen de un organismo que sólo gasta el dinero en uno que
planifique y coordine también la inversión que no se destine a
recursos hidráulicos, incluso aquella que será hecha por algún
otro organismo gubernamental. Es interesante que las dos secre­
tarías que tienen una responsabilidad especial en la coordinación
de las inversiones públicas, la Secretaría de la Presidencia y l
Secretaría del Patrimonio Nacional, hayan sido establecidas hac
muy poco tiempo (durante el régimen de López Mateos). N
obstante, aparentemente es cierto que los celos y rivalidades po­
líticas y el liderazgo personal siguen haciendo difícil la coordi­
nación. Según Scott, el personalismo ha sido remplazado po
un proceso de elaboración de políticas más formal que da un
mayor papel a la burocracia profesional y a los grupos de inte­
reses funcionales? Ninguno de esos hechos hará probablement
más fácil la coordinación: los organismos administrativos pueden
estar tan ansiosos de no compartir sus funciones con otros orga­
nismos, como los políticos lo están de no dividir su poder entr
otros políticos.
Una de las razones para utilizar a las comisiones de las cuen­
cas hidrológicas con el fin de lograr la coordinación de la inver­
sión pública dentro de una región es que ésta parece ser un
forma ampliamente aceptada para que un presidente trate d
hacerlo. Puede argumentar, basándose en el éxito de la Comisió
de Río Tenneessee (tva), que hay una necesidad especial par
integrar las actividades dentro de una cuenca hidrológica. Algun
otra unidad espacial podría parecer más razonable, pero ést
puede originar una fuerte oposición. Las cuencas hidrológica
atraviesan las fronteras de los estados, y esta estrategia puede se
la única forma práctica de coordinar las inversiones en diferen­
tes estados. Podría parecer la única forma legítima de evitar l
canalización de los fondos a través de un corrupto gobiern
estatal. Habiendo establecido una comisión, el presidente pued
Scott, op. cit,, p. 13,
* Ibidem, p. 9.
3
LOS PROYECTOS Y FJ, DESARROLLO REGIONAL
245
entonces utilizarla de una manera flexible para una serie de ac­
tividades; la Comisión del Tepalcatepec fue utilizada para estu­
diar el desarrollo potencial de los depósitos de mineral de hierro
que ni siquiera estaban dentro de la cuenca sobre la que tenía
jurisdicción.
Por otra parte, como vimos en el capítulo iv, hay muchas si­
tuaciones en que parece poco apropiado utilizar una cuenca
hidrológica como la unidad de planeamiento. Sí la planificación
a nivel de cuenca es útil, es porque las interdependencias entre
los diferentes proyectos de inversión dentro de la cuenca son
considerablemente mayores que las existentes entre las inversiones
interiores en la cuenca y las hechas en el exterior de ella. Si la
cuenca es muy variada, como ocurre con la cuenca del río Bal­
sas, entonces' esto es cierto sólo para una pequeña gama de
inversiones; y si, como es el caso con la cuenca del Lerma, las
fronteras de la cuenca tienen poca importancia desde el punto
de vista económico, entonces esta condición no se presentará.
Aunque la flexibilidad de las comisiones las lia sacado en algunas
ocasiones de sus cuencas para diversos trabajos, hasta ahora no
se les ha dado poder para hacer una planeación extensiva fuera
de la cuenca. Podemos expresar esto en términos de nuestro aná­
lisis previo. En el capitulo i discutimos el concepto de un aná­
lisis sinóptico incompleto a diferentes niveles de la decisión po­
lítica. Las comisiones de las cuencas hidrológicas representan un
ejemplo de esto, más en su planeamiento que en sus funciones
de inversión. No consideran todos los objetivos nacionales en su
trabajo; sólo se ocupan de pequeñas zonas del país, e ignoran
los efectos laterales (con frecuencia denominados '‘efectos exte­
riores” o “desbordes” en Jas discusiones sobre inversión pública)
en otros objetivos como la estabilidad de precios, c ignoran los
efectos afuera de la cuenca. Pueden considerarse como el resul­
tado de decisiones políticas sinópticas incompletas hechas a un
nivel más alto.
El éxito de tal estrategia depende de dos cosas. Primero, de
los problemas que pueden resolverse dentro de la cuenca, con
efectos laterales insignificantes sobre decisiones políticas con res­
pecto a problemas en el exterior de la cuenca u otros objetivos,
de manera que éstos pueden razonablemente omitirse por las
comisiones. En segundo lugar, depende del grado en que las so­
luciones a que se llegue en las decisiones políticas no se vean
afectadas por efectos laterales de otras decisiones políticas.
La coordinación centralizada del proceso de decisiones impone
un costo en manejo de información y flexibilidad. Además, pu­
dieran existir otros costos en términos de la libertad individual
246
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REG
de decisión, la oportunidad para tener iniciativas, el estímulo
tipo Hirschman, etc. La descentralización de la decisión impo
un costo en donde, al descuidar la interdependencia de las dec
siones, la productividad total del sistema es menor de la q
hubiera sido bajo una coordinación ideal centralizada. La ele
ción de una unidad de planificación incluye el equilibrio en
estas dos. Podría plantearse la hipótesis de que si se convirtie
la cuenca Lerma-Chapala-Santiago en una verdadera unidad
planeación, sería una mala unidad. Con una economía com
pleja y grande, muchos costos en que incurrió la coordinaci
centralizada sucederían aquí. Sin embargo, debido a que la cue
ca está tan ligada con el desarrollo de toda la Mesa Centr
incluyendo al Valle de México, es probable que exista un gr
número de interdependencias entre las decisiones de inversi
en la cuenca y fuera de ella, y el omitir las que se tomen fue
sería aún muy costoso.
Otras cuencas hidrológicas podrían ser mejores unidades
planificación, debido a que tienen algunos problemas comun
cuyas soluciones no dependen de manera significativa de inve
siones hechas fuera de la cuenca, No obstante, incluso en ell
los principales problemas comunes de las cuencas altas no ser
probablemente iguales a los de las cuencas bajas, lo que cau
la dicotomía de funciones de las comisiones del Papaloapan
del Tepalcatepec, e hizo que la Comisión del Fuerte ignore
parte alta de la cuenca.
EL CRECIMIENTO ECONOMICO REGIONAL DE MEXICO
Un rendimiento satisfactorio sobre la inversión en un proyec
de una cuenca hidrológica, semejante al que hallamos para
proyecto del Tepalcatepec, implica que el proyecto hizo u
contribución satisfactoria al aumento del ingreso nacional glob
Ésta es probablemente una justificación suficiente de las po
ticas mexicanas, al menos en las cuencas del Tepalcatepec y d
Fuerte. Sin embargo, deben estudiarse los proyectos a la luz
otros objetivos. En primer lugar debe evaluarse, como discutim
en el capítulo i, el efecto de los proyectos sobre la oferta
factores de la producción. En segundo lugar, aunque el rend
miento de un proyecto puede ser satisfactorio en términos n
cionales, los resultados pueden ser desalentadores para quien
esperaban que produjera un mayor desarrollo regional.
Puede considerarse el efecto de un proyecto sobre la oferta
los factores de la producción separando sus efectos sobre la a
sorción de mano de obra que de otra manera estaría desemplead
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIONAL
247
y sus efectos en el aprovechamiento de ofertas no utilizadas de
recursos humanos y naturales e insumos de capital, Ambas son
benéficas para la economía, por supuesto, pero es probable que
la primera sea un objetivo gubernamental más directo debido
a que mejoraría con claridad la distribución del ingreso y eli­
minaría una fuente de descontento político. La importancia de
la segunda depende del aspecto empírico de la existencia o ausen­
cia de recursos no utilizados; si existen, y pueden aprovecharse,
tienen un efecto acumulativo que lleva a la explotación de otros
recursos no utilizados.
En México, el número de personas que se benefician directa­
mente por los proyectos ha sido de hecho muy pequeño en
relación con la población total agrícola, o incluso comparada
con quienes ingresan a la fuerza de trabajo. Como una estrategia
para lograr la descentralización de la actividad económica o para
reducir la corriente de emigrantes hacia las zonas urbanas los
proyectos han logrado muy poco. En el capítulo iv dimos algu­
nos indicios aproximados del costo marginal de ocupación de
los hombres en los proyectos de colonización, excluyendo los
costos por los principales conceptos de gasto de capital, como
las presas-que tienen múltiples fines y las carreteras principales,
cuyos costos no es posible asignar a partes separadas del pro­
yecto. Estas cifras sugieren que el costo en proyectos adecuados
para tener un efecto importante en la estabilización de la po­
blación agrícola serían enormes. Por otra parte, es probable que
sea verdad que el costo de equipar a un hombre adicional con
técnicas industriales modernas sería mucho mayor, y en este
respecto los efectos sobre la ocupación de estos proyectos deben
considerarse satisfactorios.
El éxito de los proyectos en la utilización de recursos no apro­
vechados hasta entonces depende de dos cosas: Primero, deben
existir esos recursos, y segundo, debe formularse tina estrategia
correcta para aprovechar estos recursos que sí existen. La expe­
riencia mexicana que estudiamos no sugiere que baya grandes
cantidades de talento empresarial potencial o de ahorros frus­
trados que están esperando ser utilizados en las regiones perifé­
ricas. Pero los proyectos de mayor éxito sí lograron alentar in­
cluso a pequeños campesinos para que cultivaran cosechas más
lucrativas, aunque de más riesgo y mayor trabajo, y sí hubo
ahorro local e inversión inducidos por 'ellas. Por supuesto, se uti­
lizaron ampliamente recursos naturales no utilizados hasta en­
tonces: en su mayor parte los efectos de esto se calculan en cual­
quier estimación del rendimiento sobre la inversión agrícola e
hidroeléctrica, .
248
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REG
Pero al realizar el potencial en esos aspectos el proyecto d
Tepalcatepec, cuando menos, sólo produjo una lenta respue
en el sector privado, incluso en industrias primarias en que
inversión gubernamental redujo los costos y aumentó las g
nancias potenciales para toda una serie de negocios posibl
Por lo general los proyectos de inversión pública están diseñad
sobre el supuesto de que no será necesaria una intervención ad
cional del gobierno para proveer el capital fijo y el capital
trabajo. Si la respuesta del sector privado es lenta, entonces
reduce mucho el rendimiento de la inversión pública. Tamb
pudiera ser administrativa o políticamente imposible para el g
bierno encontrar recursos financieros o personal para proporci
nar todos los recursos complementarios que se necesitan.
Con las varias calificaciones que hemos discutido, está cl
que los proyectos de más éxito han hecho una valiosa contrib
ción al' desarrollo de México. En donde han desilusionado m
es en sus efectos acumulativos sobre el crecimiento regional, p
las razones que expusimos en la primera parte de este capít
lo, El gobierno mexicano no intentó una estrategia que fu
capaz de conducir u la industrialización regional cuando men
en un período previsible. Cualquiera que haya sido el apo
verbal que haya dedo la idea, es probable que supiera perfe
tamente que la industrialización regional habría exigido un e
foque muy distinto. Probablemente en la mayoría de las r
giones la industrialización no puede lograrse, excepto al co
de un subsidio continuo proveniente de otras regiones. La e
cepción de esto se encuentra en regiones que están dotadas c
materias primas cuyo procesado, por lo general, se hace ce
de su localización, y no cerca del mercado, como el acero en
cuenca del río Balsas y los petroquímicos en la costa del Gol
Está claro que el gobierno mexicano no ha deseado promo
el desarrollo regional al costo del crecimiento económico n
cional.
RECONSIDERACIÓN DE LAS POLÍTICAS DE DESARROLIjO regional
En el primero y en el tercer capítulos sugerimos que la preoc
pación por el desarrollo regional surge por dos tipos diferen
de problemas: las desigualdades regionales y los costos de
aglomeración urbana. El primer problema produce el desconte
to con respecto a la distribución regional del ingreso existe
y con frecuencia fuertes presiones políticas que buscan un camb
Las economías de la aglomeración, que hacen atractivo pa
las personas y las empresas establecerse cerca unas de otras, c
LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIONAL
249
frecuencia son más que compensadas por los costos del "congestionamiento” impuestos sobre las personas y los servicios públi­
cos en una gran zona urbana. Aquí también existen presiones
para la creación de políticas especiales que estimulen la des­
centralización del crecimiento futuro, si no es que presionan
por la dispersión actual de la actividad económica y la población
existentes.
La experiencia mexicana sugiere que la combinación de estas
presiones, analizadas con más detalle en los capítulos ii-iv ele este
libro, fue insuficiente para producir costosas políticas de descen­
tralización que debilitarían el esfuerzo nacional de desarrollo. Los
programas de desarrollo regional que llevó a cabo el gobierno
mexicano parecen haber sido realizados de manera principal con
la esperanza de que hicieran importantes aportes para las metas
del desarrollo nacional, más que para redistribuir el ingreso a
las personas infortunadas que han sido dejadas fuera del pro­
greso económico mexicano. Al analizar esta experiencia, parece
estar claro que los políticos han deseado sacrificar muy poco en
respuesta a las demandas de una distribución regional más equi­
tativa del ingreso nacional.
Además, la experiencia mexicana nos indica que la creación
de un& base de exportación no es una condición suficiente para
el crecimiento económico acumulativo de una región. La expe­
riencia obtenida durante las décadas pasadas sobre la importancia
de los efectos en "cadena” se ve confirmada por nuestro estudio.
Sin incentivos obligatorios técnicos o financieros para la locali­
zación de la nueva inversión en una zona, es probable que jue­
guen un papel dominante otras consideraciones, como la cercanía
al mercado y las economías de la "aglomeración”, en las dc<isiones de localización.
Por consiguiente, parece claro que se necesita una estrategia
más positiva que los proyectos de las cuencas hidrológicas para
lograr el desarrollo de las regiones atrasadas. El capital genera!
social sólo es una política paliativa que no traerá, por necesi­
dad, el desarrollo consigo. Además, es muy ÍYuii proporcionar
mucha inversión y es difícil para el político decidir sobre el nivel
adecuado para inducir a la inversión privada necesaria sin que
ocurra desperdicio. Una política regional más eficaz debe tam­
bién incluir algunas limitaciones sobre la inversión en otras re­
giones o dar estímulos positivos para invertir en las regiones en
desarrollo. Es probable que una política semejante exija algún
sacrificio del crecimiento económico en aras del logro del obje­
tivo del equilibrio regional.
APÉNDICE I
J J,
APÉNDICE I
CUADRO A-l
CAMBIOS EN LA BASE ESTADISTICA PARA EL ANÁLISIS
DEL PROGRESO AGRÍCOLA EN LA TIERRA CALIENTE1
Datos para el ciclo, agrícola de 1949-50
*Michoacán
(cosechas principales)
Superfi­
cie cultiFuen- vada
Cosecha te (ha)
Durante el curso de la. investigación de campo en la Tierra Ca­
liente, se hizo evidente que el censo agrícola de 1960 era del
todo inadecuado para los propósitos del estudio. Con el fin de
cuantificar los beneficios provenientes de la construcción del sis­
tema de irrigación discutida en este libro, fue necesario obtener
un panorama tan realista como fuera posible de la situación
para poder analizar los cambios ocurridos desde el año base
hasta el presente. Este apéndice presenta las cifras oficiales que
indicaron la necesidad de las revisiones que se hicieron para
esta evaluación.
Con el fin de ajustar los datos del censo, se usaron dos fuen­
tes de estadística agrícola y se relacionaron con la otra infor­
mación disponible en el campo para obtener un panorama com­
pleto de la situación agrícola durante el período 1950-1960. El
censo se basa en un procedimiento de enumeración con la in­
formación proporcionada por los campesinos o sus representantes
en el campo. Se supone que las cifras incluyen todos los esta­
blecimientos agrícolas del país, agrupados por el tipo y tamaño
de la tenencia de tierra: propiedad privada de más de cinco
hectáreas, propiedad privada de cinco hectáreas o menos, y tie­
rra distribuida bajo la reforma agraria, independientemente del
tamaño de la tenencia individual. Además, se distribuye un cues­
tionario especial con el censo de población para obtener infor­
mación sobre el ganado que hay en pueblos y aldeas. Estas cifras,
según la ley de estadísticas de México, son confidenciales y no
pueden usarse para ninguna finalidad fiscal. A pesar de esa dis­
posición y de los esfuerzos de los directores del censo para expli­
car sus características, muchas personas creen que su informa­
ción no será confidencial y dan información poco precisa y en
ocasiones falsa. Con frecuencia ocurre también que no recuerden
la información que se les pide en el censo porque no tiene im­
portancia para la administración de sus propiedades agrícolas.
1 Este apéndice’ está tomado de una monografía de Barkin: Cambios en
la agricultura de la zona de Tierra Caliente, Michoacán, 1950-1960f Chapingo, México, Escuela Nacional de Agricultura, 1965.
Frijol
Ib
2b
1°
Maíz
2
Algodón
Limón
Melón-'Arroz
Ajonjolí
Caña de
azúcar
Sandía
total
J
1
2
1*
2*
1
2d
1*
2*
1*
2*
1
2
1
2d
1
2
587
168
20 208
6 950
12
Volumen
(ton)
196
155
17 503
5710
25
2 580
1 513
1
79
4813
7 468
7 539
3 765
289
.665
89
79
en
la Tierra Caliente
Valor
(miles de
pesos)
Rendi­
miento
(kgjha)
Precio
rural
(pesos/
ton)
143
113
5 612
1 759
38
334
323
866
822
2 070
729
730
321
308
1 520
4 328
6 200
3 150
4 544
2 338
1 841
472
439
348
350
369
400
347
319
905
900
8 881
3 285
I
144
3 901
4 381
3 219
1 487
15 601
32 060
215
522
468
862
75
209
53 983
48 211
5 506
6 608
30
27
351
400
36 068
20 687
j a La Tierra Caliente incluye los municipios de Apatzingán, Buenavista, La
j Huacana, Parácuaro, Tepalcatepec y Zaragoza. Además, se incluyó el muni| cipio de Uruapan ■ cuando era evidente que los datos se referían a Lomí bardía. Esto se indica mediante <
*).
. b Incluye, el volumen y el valor del frijol intercalado con maíz, pero no
, su rendimiento.
c Incluye la superficie, el volumen y el valor del maíz intercalado
frijol, pero no su rendimiento.
Las cifras se refieren a 1950 ya que la cosecha
ocurre er¡ el primer
mestre del año,
con
tri-
fuentes: México, Secretaría de Industria y Comercio, Dirección General de
Estadística, III censo agrícola, ganadero y ejidal, 1950, “Michoacán", México,
1957.
México, Secretaría de Agricultura y Ganadería; Dirección de Economía Agrí­
cola, cifras correspondientes a 1949.
APÉNDICE I
252
253
CUADRO A-2
CUADRO A-3
Datos para el ciclo agrícola 1946-47 en tierras irrigadas
en la Tierra Caliente, Michoacán
Cosecha
Camote
Maíz»
Frutas
Limón
Pastos
Arroz
Caña de azúcar
Vegetales
TOTAL
APÉNDICE i
Superficie
cultivada
(ha)
33
2 931
I 198
970
313
3 164
' 1 035
57
9 701
Volumen
(ton)
99
2216
8 725
10 955
6 961
51 750
Datos para el ciclo agrícola 19)9-60 en la Tierra Caliente,
*Michoacán
(cosechas principales)
Valor
(miles de
pesos)
Rendi­
miento
(kg/ha)
Precio
rural
(pesos/
ton)
20
I 158
2 480
1 745
66
2 784
I 552
80
3 000
756
200
522
8-995
35 000
2 200
50 000
200
6
400
30
Superficie culti­
vada
Cosecha te
Frijol
Maíz
9 885
De estas 2 931 hectáreas, 53 se sembraron con chile y maíz, con un valor
<ie 1 19 280 pesos, y 300 hectáreas se sembraron con maíz y fríjol con un
valor de 371 250 pesos.
ruENTES: México, Secretaría de Agricultura y Ganadería, Dirección General
de Distritos de Riego, División de Planeación, Sección de Estadística Agrí­
cola, Informe Estadístico ¡\rot ¿2, Mexico, 1948.
(ton)
692
515
Algodón
íl
Valor
Volumen (miles de
'' ' pesos)
Fuen- tareas)
Limón
Melón
Arroz
728
26 600
12910
33 974
1 599
4 045
4 100
3 354
4614
I 280
5 180
4 362
6 166
7 745
12 090
10 136
5 988
7 098
474
n.d.
728
5 620
4 510
33 974
1 134
4 045
4 100
n.d.
4 614
1 251
5 180
4 362
4 766
6 545
12 090
2 379
730
7 098
583
728
617
1 092
2 184
25 553
18 973
10 740
7 196
76 922
61 588
2 749
6 203
9 854
24 524
12 300
28 900
9 282
7 240
— no disponible —
28 656
7 997
5 611
2691
32 742
16041
32 534
32534
9 218
7946
11617
10 025
40 860
35220
5 723
10928
3 907
7384
4 478
10757
471
Precio
Rendí- rural
miento (pesos/
(kg/ha) ton)
565~~T250
360
1 310
1 500
2 000
986
743
832
670
. 2 264
800
1 719
2 256
2 486
2 489
3 000
2 350
2 612
863
1
También hay un coeficiente no conocido de evasión censal, esto
es, propiedades agrícolas que no se incluyen en el censo. Con
Ajonjolí
estas consideraciones en mente, creimos necesario revisar los
datos para obtener una mejor idea de la magnitud de las desvia­
ciones en los datos del censo con respecto a la situación real.
Taña de
Una segunda fuente de estadística agrícola es el Departamento j azúcar
1
Tí
17
1 098
de Economía Agrícola de la Secretaría de Agricultura y Gana­ j
2
337
337
16
988
dería (sag). El dea publicó información sobre la superficie cul­
.3
269
269
1 614
tivada, rendimientos y producción para cada cosecha. Utilizando Sandía
4 • 1 724
1 604
10 897
9<i
la información sobre precios rurales uno puede contabilizar el
3 451
3 451
26 .361
3
valor de la cosecha. Estas cifras son edículos de la producción
3 624
3 621
68 232
anual en cada municipio hechas por los presidentes municipales ¡TOTAL
1 aFttT ~Í7Tir
y es poco probable que se haga una encuesta cuidadosa. Se
2
40 171
24 798
hacen ajustes para agregar estos datos en los niveles estatales y i
3
70 859
70 859
municipales. Las estadísticas del dea sólo pueden dar un indicio f
aproximado de la situación en un año determinado, debido a T‘La Tierra Caliente incluye los municipios de Apatz.ingán, Bucnavir.ta
vista. Gabriel Zamora (Lombardía), la Huacana, Tepalcatepec, Zaragoza y Pala forma en que se recolecta la información.
tácuaro.
La última fuente de información sobre la producción agrícola .
1 Incluye el volumen y el valor del frijol intercalado con maíz, pero no su
es la administración de los distritos de riego para aquellas zonas rendimiento.
controladas por
la
Secretaría
de
Recursos
Hidráulicos
($
rh
\
Lab
* 1
\
aosu
rendimiento.
: Incluye
la superficie, volumen y valor del maíz intercalado con fríjol, peto
i
.......... .
254
apéndice i
APÉNDICE XI
información es proporcionada por quienes están a cargo del fun­
cionamiento de los canales de irrigación y verificada por medio
de los permisos que se supone debe obtener cada uno de los
campesinos antes de cada ciclo agrícola. Por desgracia, la reco­
lección de esta información sólo ha sido obligatoria desde 1958
y los distritos controlados por organizaciones descentralizadas,
como la Comisión del Tepalcatepec, fueron los últimos en cum­
plir esas reglas. Esta información sólo se refiere a la tierra irri­
gada y por tanto no incluye datos de la producción en tierra
de temporal. Las cifras de la producción son cálculos que se
basan en rendimientos teóricos y en precios rurales fijos. Con
frecuencia son cálculos poco reales y como resultado sólo las ci­
fras para la superficie cultivada son de confiar, e incluso éstas
presentan deficiencias.
Cada fuente reúne un tipo diferente de información. El censo
proporciona la mejor idea de la producción de subsistencia, que
no llega al mercado y predomina en las propiedades más pe­
queñas debido a que es el único que hace encuestas entre los
pequeños campesinos. Por otra parte, parece qué el censo es
menos adecuado en lo relativo a la producción comercial. En
estos casos, existe la posibilidad de que la producción calculada
por los presidentes municipales o por los trabajadores en los
distritos de riego se acerque más a la realidad. La información
de la Secretaría de Recursos Hidráulicos es un control útil para
analizar las otras fuentes cuando se refieren a la producción
en tierras irrigadas.
Los cuadros a-1 a a-3, presentan los datos reales de las tres
fuentes mencionadas antes. Comparándolas con las cifras corre­
gidas utilizadas para la evaluación del progreso real en la Tierra
Caliente (cuadros vi-5 y vi-7) es posible apreciar la magnitud
de los errores que tienen las publicaciones oficiales. El proceso de
ajuste se describe con más detalle en la monografía citada , al
principio de este apéndice, o en la tesis doctoral de Barkin.
d Las cifras son para 1960 ya que la cosecha se hace en el primer trimestre ,
del año.
fuentes: 1. México, Secretaría de Industria y Comercio, Dirección General J
de Estadística, ZF censo agrícola ganadero y ejidal, 1960, "Michoacán” (d* ¡
fras preliminares).
2. México, Secretaría de Agricultura y Ganadería, Dirección de Economía
Agrícola; cifras para i 959.
3. México, Secretaría de Recursos Hidrálicos, Informe de labores, 1959-60,
México, D. F,, 1961, pp, 594-96.
ELABORACIÓN DE LAS CIFRAS DE BENEFICIO AGRÍCOLA
NETO EN LA TIERRA CALIENTE, MICHOACÁN
Los beneficios agrícolas netos derivados de la irrigación (cua­
dro vx-9) se basaron en la información de la producción bruta
presentada en los cuadros vi-5 y vi-7 y los datos de costo sinte­
tizados en los cuadros vi-6- j . . y vi-8. Este elj-'GilLilL
apéndice describe
____ _ las
mrn U
--- *2 - J i
bases para la elaboración de las cifras de beneficio n^o y la base
■ estadística para el cuadro vi-9.
El primer paso, al calcular los beneficios, fue la determinación
j de las ganancias provenientes de la producción agrícola en la
! Tierra, Caliente durante el período 1950-65 y estimaciones para
’ las ganancias para el período 1966-70. Esto se hizo determinando
la distribución de la tierra en cada año por tipo de cosecha
(cuadro b-1) y obteniendo después la magnitud de la ganancia
. que podría esperarse de cada tipo de cosecha en cada año. El
1 nivel anual de las ganancias para cada cosecha se obtuvo deter­
minando la tendencia de las ganancias de 1950 a 1960. En la
práctica, se tomó un promedio ponderado de las ganancias en
1950 y 1960, con las ponderaciones cambiadas para cada año.
Gon excepción del arroz, que se ajustó para el período 1965-70,
1 con el fin de tener en cuenta el importante cambio en tccno; logia que se discutió en. el capítulo vi, las ganancias de 1960
■
se aplicaron para el período 1960-70.
- Este método para determinar las ganancias provenientes de la
j producción agrícola se basa en el supuesto de que la producción
¡en la Tierra Caliente no influyó en los precios de los productos
! que estaba ofreciendo y que los precios agrícolas utilizados en
el cálculo del rendimiento se basaron en la situación agrícola
en un año promedio. En el caso del algodón, el precio era de­
terminado en el mercado mundial. En el caso del melón y la
sandía, el precio era determinado en el mercado de los Estados
1
1950— j como 1960 fueron con---- -- tanto
■_____
d Unidos. i Afortunadamente,
isiderados años "normales”
por los agricultores de la región.
1
es
¡I Aunque la Tierra Caliente
______
un abastecedor importante de melón y
sandía para el mercado norteamericano, durante el breve período eti el que
■los productores norleamericanos no tienen producto para enviar al mercado,
los compradores basan sus programas de compra en las condiciones de de-
APÉNDIC
256
CUADRO B-l
Superficie sembrada según las cosechas en la Tierra Caliente,
Michoacdn, 1950-70
,
Fri
Año
1950
195!
1952
1953
1954
1955
1956
1957
1958
1959
1960
1961
1962
1963
1964
1965
1966
1967
1968
1969
1970
Total
42 317
42 842
45 350
51 625
55 625
. 63 314
67 300
76 150
82 600
92 450
105 664
106 600
107 400
106 500
107 700
109 500
109 000
103 000
108 000
114 000
109 000
Húme­
do
1 000
1 107
1 000
500
Jol
Seco
587
700
800
900
I 000
I 100
1 000
I 000
1 000
500
501
500
500
500
500
500
Maiz
Húme­
do
2 600
2 500
3 000
5 000
7 000
10 200
10 500
12 000
15 000
22 000
33 537
29 000
22 000
16 000
14.000
12 500
12 500
14 000
14 000
15 000
15 000
Seco
19510
19 300
19 250
20 100
21 000
22 200
21 500
20 800
20 600
19 500
20 152
16 500
11 000
9 200
9 500
7 000
7 000
4 500
4 500
4 500
4 500
Maíz y
Algodón
frijol
200
200
250
400
500
600
1 000
I 200
4-100
1 500
1 603
1 500
1 000
800
500
500
500
500
500
500
500
12
12
150
200
300
500
I 500
5 000
4 000
8 450
4 099
12 000
25 000
34 000
36 000
42 000
40 000
35 000
35 000
35 000
30 000
fuente: Véase el texto.
Los cálculos de ganancias agrícolas netas (cftadro vi-9, colum
na 2) tuvieron que ajustarse aún más para tener en cuenta cam
bios en la productividad que pudieran haber ocurrido si la C
misión no hubiera intervenido en la región. Estos cambios, com
se explicó en el capítulo vii? podrían haber ocurrido debido
un aumento en la superficie irrigada como resultado de irrig
ción financiada por el sector privarlo, de un aumento de
maiida del mercado, que pueden prever con facilidad. El programa de c
sechas se ajusta a esc esquema partí limitar la oferta de fruta en el merca
y conservar así alguna estabilidad en los precios. Los precios utilizados p
estas cosechas en el cálculo de la.s ganancias agrícolas fueron promed
que tenían en cuenta ese factor. Esto se discute con más amplitud en
capítulo vi.
APÉNDICE II
Lim
Humedo
3 146
3 200
3 500
4 000
4 000
4 458
4 500
5 500
5 500
4 500
5 674’
6 000
6 000
6 000
6 000
6 000
8 000
9 000
10 ooo
10 000
10 000
257
ón
Seco
2 000
2 500
2 706
2 000
2 000
2 000
2 000
2 000
A/on joli
Melón
Arroz
Húme­
do
Seco
256
250
300
400
1 000
1 335
4 000
4 000
3 900
4 200
4 552
5 100
6 200
5 800
6 200
6 000
6 000
6 000
6 000
6 000
6 000
6 852
7 000
8 000
10 000
10 000
11 661
12 000
12 000
13 000
13 000
13 828
14 000
13 500
12 000
12 500
12 000
12 000
12 000
12 000
12 000
12 000
1 500
1 500
1 500
1 500
1 500
1 464
1 500
1 500
2 500
2 500
3 331
3 500
3 500
4 000
4 000
4 000
6 000
7 000
10 000
15 000
15 000
6 387
6 500
6 500
6 500
6 500
6 536
6 500
7 000
7 000
7 000
7 359
8 000
8 000
8 000
8 000
8 000
8 000
5 000
5 000
5 000
5 000
Caña
de
azú­
car
Sandia
658
600
500
500
200
129
150
150
300
300
553
500
200
100
79
80
100
125
125
131
150
3 000
3 400
3 000
3 964
4 500
5 000
4 600
5 000
5 000
5 000
5 000
5 000
5 000
5 000
Otros
530
1 000
1 500
2 000
2 500
3 000
3 000
3 000
3 000
2 500
2 698
2 500
3 000
3 500
3 500
-1 000
4 000
5 000
6 000
61100
6 900
agricultura de temporal, o de aumentos en la productividad
como resultado de mejoras tecnológicas.
Estos factores combinados resultaron de una duplicación de la
producción agrícola, durante la década de los años cincuenta,
en la región control de Ciudad Altamirano. La duplicación im­
plica una tasa compuesta de crecimiento de la producción agrí­
cola en la región, un poco mayor al 7% anual, tasa que se usó
al tratar de eliminar de los cálculos de los beneficios netos la
influencia ‘‘independiente” del progreso "normal” durante el tiem­
po. La última columna del cuadro vn-2 presenta los resultados
de estos cálculos.
ÍNDICE DE CUADROS
¡i-1
Producto interno bruto, a precios de 1960, años se­
leccionados del periodo 1940'64
n-2 Tasas promedio anuales de crecimiento del pro­
ducto interno bruto, por sectores
n-3 Densidad de población por regiones, 1960
n-4 Valor industrial agregado per capita de la pobla­
ción, y por trabajador empleado en la industria,
1960
ii-5 Valor de la producción agrícola y ganadera, pro­
ducción de maíz y superficie de irrigación en gran
escala por regiones, 1960
ii-6 Niveles de ingreso y bienestar en los estados más
ricos y en los más pobres
iv-1 Gastos por las comisiones de las cuencas hidroló­
gicas, 1947-’964
iv2
Comisión dt1 Río Fuerte: Superficie cultivada por
cosechas principales, 1952/3-1966/7, años seleccio­
nados
v- 1 Datos meteorológicos en
la cuenca del Tepalcatepec
2
vPoblación en la cuenca
del Tepalcatepec, 1900-1960
3
vGastos de la Comisión
del Tepalcatepec, 1947-1965
4
vMigración en la cuenca
del Tepalcatepec, 1950-1960
v-5 Distribución de la fuerza de trabajo por activida­
des, 1950 y 1960
v-6 Actividad industrial en la cuenca del Tepalcatepec,
1950 y 1960
v-7 Producción agrícola, ganadera y forestal, cuenca del
Tepalcatepec, 1950 y 1960
v-8 Educación primaría en la cuenca del Tepalcatepec,
1964
v9
Proporción de personas alfabetizadas
vi- 1 Inversiones de la Comisión del Tepalcatepec en la
Tierra Caliente, 1947-1965
2 Superficie cultivada en la Tierra Caliente, Michoavicán, 1949-1950/1964-1965
3 Superficie irrigada en la Tierra Caliente, Michoavicán, 1949-50/1964-65
ÍNDICE DE CUADROS
Superficie cultivada en la Tierra Caliente, Michoacán
vi-5 Producción agrícola en la Tierra Caliente, Miclioacán, 1949-1950
vi-6 Rendimientos monetarios netos en la Tierra Calien­
te, Michoacán, 1949-1950
vi-7 Producción agrícola en la Tierra Caliente, Michoa­
cán, 1959-60
vi-8 Rendimientos monetarios netos en la Tierra Calien­
te, Michoacán, 1959-60
vi-9 Producción agrícola neta en la Tierra Caliente, Mi­
choacán, 1950-1970
vi-10 Crédito agrícola en la Tierra
Caliente
vii- 1 El sector agrícola en la Tierra Caliente y en la re­
gión de “control”
vii-2 Costos y beneficios del programa de inversión de
la Comisión del Tepalcatepec
vii-3 Medidas de los rendimientos del programa
4 Producción de electricidad en el Sistema Lázaro
viiCárdenas, 1950-65
A-l Datos para el ciclo agrícola de 1949-50 en la Tierra
Caliente, Michoacán (cosechas principales)
a-2 Datos para el ciclo agrícola 1946-47 en tierras irri­
gadas en la Tierra Caliente, Michoacán
a-3 Datos para el ciclo agrícola 1959-60 en la Tierra
Caliente, Michoacán (cosechas principales)
b-1 Superficie sembrada según las cosechas en la Tierra
Caliente
259
vi-4
163
164
165
172
175
181
189
213
215
220
225
251
252
253
256
ÍNDICE DE FIGURAS
1 México: estados y regiones administrativas
2 México: comisiones de cuencas hidrológicas
3 La cuenca del río Tepalcatepec
4 Obras hidroeléctricas en el río Cupatitzio
'
ÍNDICE ANALÍTICO
acero, 49, 110, 223, 235
agricultura, 48-9, 58-9, 63-5, 88-9,
108; maquinaria, 170, 178, 202,
227; véase también fertilizantes;
cuenca del río Tepalcatepec;
Tierra Caliente; trabajo; pro­
ductos agrícolas por separado
agricultura de subsistencia, 113,
126, 160
agua, abastecimiento de, 71-2
agua potable, véase capital gene­
ral social
aguacates, 127
aguas de albañal, véase capital ge­
neral social
Aguascalientes, 45, 61, 115-6, 119
; Aguirre Beltrán, G., 125-6, 180
’ aire, viciamiento del, 73
ajonjolí, 145, 158-65, 172, 175
Alemán, M„ 56, 86, 100-1, 111, 131
algodón, 47, 49, 113-4, 145, 158-65,
168-72, 180-2, 198-9, 225, 232,
234, 253; baja respuesta a las
i oportunidades, 168-9; costos, 165,
- 172-7; financiamiento, 188-92; in­
troducción,
169-70;
procesado,
• 194-5, 203; prospectos, 180-82
Alianza para el Progreso, 84, 197
■ Altee, D., 2
; Alien, G. R„ 93
' Apatzingán, 125-6, 138, 142, 146,
' 231, 236
apicultura, 135, 188
| Ario de Rosales, 123, 127
¡arroz, 113-4, 130, 145, 147, 158-65,
171-2, 175, 184, 188-9, 191-2, 196,
199, 203, 251-3, 257
'asistencia técnica, véase agricultuí ra; crédito; Tierra Caliente
¡Ávila Camacho, M., 57
azúcar, 47, 49, 103, 112, 113, 126127, 135, 139, 144-5, 147, 151,
158-9, 161-5, 172, 175, 191, 251-3,
257
Baja California Norte, 49, 61, 66-7,
69, 243
Baja California Sur, 61, 66
Bajío, 115
balance de pagos, 34-5, 88; interre­
gional, 8, 13
Balsas, río, véase Comisión del Río
Balsas; cuenca del río Balsas
Banco de México, Oficina de Pro­
yecciones Agrícolas del, 162, 165
Banco Interamericano de Desarro­
llo, 115
Banco Nacional de Crédito /Agríco­
la, 187, 192
Banco Nacional de Crédito Ejidal,
130, 162, 184, 187-93, 196-7, 199,
203-4, 228; actividades empresa­
riales, 187-91
Banco
Regional
de
Michoacán,
187, 192
bario, véase industria minera
fíarkin, D., 1, 161, 232, 250, 254
Bassols Batalla, Á„ 61
Belice, 118
Beltrán, E,, 92
beneficio, indirecto, 27, 33; en Tie­
rra Caliente, 215-21, 230; razón
beneficio-costo, 42, 220
Brandemburg, F., 76
Braybrooke, D., 28-9
brea, 126, 144
Buenrostro, C„ 2, 212
Burnight, R., 69
cacao, 50
café, 47, 50-1, J 00, 127
I
i
262
ÍNDICE ANALÍTICO
ÍNDICE ANALOGO
263
calcio, véase industria minera
cambio, tasa de, 13, 36-7, 227
Campeche, 58-9
campesino, racionalidad del, 236
cantalupo, véase producción frutal
capital, fuentes utilizadas, 228; mo­
vilidad, 10, 12; por trabajador,
107; véase también capital gene­
ral social
capital general social, 14-9, 32, 71,
90, 106, 114, 131-3, 138, 150,
156-7, 201, 238, 243, 249; efectos,
205-10, 232-3; véase también
cuenca
del
río
Tepalcatepec;
educación; Tierra Caliente
Cárdenas, L., 78, 81, 86-7, 91, 109,
127, 229
carreteras, véase comunicaciones
Casares, B., 193
caucho) 50
caudillos, 244
Ciudad Alemán, 101
Ciudad Altamirano, 110, 212-3
Ciudad Sahagún, Hgo., 117
Coahuila, 60-1, 66, 69
Cóbano, planta, 222, 226
coco, véase producción frutal
Colima, 61, 119
colonización, 5-7, 52-6, 102, 106-7,
113, 208, 229, 247
comerciantes, 195-6
comercio
iuterregional
comparado
con el comercio exterior, 8-10;
véase también exportación; im­
portación
Comisión del Río Balsas, 87, 94,
108-11, 132, 153; véase también
Comisión del Río Tepalcatepec
Comisión del Río Fuerte, 48, 97,
111-4, 238-40, 243, 246
Comisión del Río Grijalva, 50, 95,
104-8, 240
Comisión del Río Papaloapan, 50,
87, 94, 98-104, 108-11, 238-41,
244, 246
Comisión del Río Tepalcatepec, 12, 51, 86, 97, 108-11, 121, 238,
240, 245-6; evaluación, 211-37;
respuesta humana, 235-7; progra­
ma de inversión, 131-9, 154-5,
156-7; véase también descuento,
tasa de
Comisión Federal de Electricidad,
105, 113, 116, 222-6
Comisión Interministerial, 84
Comisión Lerma-Chapala-Santiago,
95, 114-7, 246
Comisión
de ColonizaNacional
ción, 56
Inversión
Comisión Nacional
de
Pública, 83-4
Comisión Nacional de Irrigación,
99, 121, 154
comisiones de las cuencas hidroló­
gicas, 85-7, 95, 120, 238-49; gas­
tos, 94; razones económicas, 238243; razones políticas, 243-6
comunicaciones, 134-6, 156-7, 205;
carretera
Uruapan-Apatzingán,
134; carreteras, 50, 114, 134, 151,
233, 241-3; correos, 151; ferroca­
rril Los Mochis-Estados Unidos,
113; ferrocarril Los Reyes-Guadalajara, 151; ferrocarril MéxicoVeracruz, 99; ferrocarril Méxi­
co-Yucatán, 44; teléfonos, 151;
telégrafos, 151
Confederación de Trabajadores de
México, 81
Confederación
Nacional
Campesi­
na, 81
congestionamiento, 6-7, 68-73, 94,
241-9
convenciones, en Nueva York, 183
Constitución política, de 1814, 126;
de 1857, 54; de 1917, 56
Cortés, H„ 46
Costa Sierra (Sierra Madre del
Sur), 51, 121-2, 125-6, 129, 139143, 148-53
costos, 215, 218-9
Cotíja-Qúitupan,
133
crecimiento
equilibrado,
21
crédito, véase agricultura; Tierra
Caliente
cuenca del rio Balsas, 51, 109-10,
Distrito Federal, véase México,
223, 245, 248
ciudad de
cuenca del río Fuerte, 243
Durango,
61, 111, 115
cuenca del río Lerma, 71-2, 245
cuenca del río Papaloapan, 99, 104,
241-2
Eckstein, O., 26, 27, 216
Eckstein, S., 127
cuenca del río Tepalcatepec, 92,
economías, de aglomeración, 6, 2!,
108, 121-237, 240; actividad in­
68-70, 241, 248; de escala, 6-7
dustrial, 130, 142-5; agricultura,
educación,
68-9, 132, 152-3, 156-7,
126, 132, 135, 142, 144-5, 148-9,
210, 233; construcción de escue­
171-3; características físicas, 120las, 138; mejoramiento, 207-8
125;
estructura
socioeconómica
I
efectos en cadena, 21, 32-5, 38,
antes de 1950, 124-31; fuerza de
201-4, 240; potenciales, 21
trabajo, 140, 142, 166-7, 174,
efectos externos, pecuniarios, 33
176; inversiones sociales, 185-9,
ejidos, 56, 78-81, 113, 197-9, 208
151-3; irrigación, 140-2, 166-7,
El Infiernillo, presa, 110, 223
174, 176; migración, 139-41, 208;
electricidad, véase energía eléctrica
población, 126, 128, 139-41; véa­
I
empresas, 13-4, 19-20, 22. 34, 169,
se también capital general social;
186-98, 228; norteamericana, 194;
comunicaciones; educación
véase también Banco Nacional
Cupatitzio (río de las aguas can­
de Crédito Ejidal
tantes), 124, 138, 210, 222-3, 226
energía eléctrica, 57-8, 68, 86, 89,
Cupatitzio-Cajones, 133, 199
104-5, 107-8, 115, 205, 212, 222-6,
Cussi, D,, 127-30, 187
234, 239; consumo, 222-3
esclavos negros, 126
Chapala, lago, véase Comisión Lerestablecimiento, véase colonización
ma-Chapala-San tiago
estación experimental, 135, 176
Chispas, 51, 61, 66-7, 104, II9
estación piscícola, 135
chicle, 50
exportación, 9-10, 88-9, 227-8, 239Chihuahua, 61, 66, 111
240, 249
Chontaipa, proyecto, 105
i
demanda, 240
Departamento Agrícola de la Secre­
staría de Agricultura y Ganade­
ría, 252
desarrollo regional, 4-22; mexicaí no, 44-94, 246-8; objetivos, 4-14;
políticas, 14-22, 95-120, 248-9
descuento, tasa
41-2, 218-22;
,
Comisión del
río Tepalcatepec,
j
218-21
■ desigualdad .regional,. 4-5, 11-2, 59,
70, 248
Díaz, P„ 54-5, .127
, Díaz del Castillo, B., 46
. Díaz Ordaz, G., 84, 108
j difusión, efectos de la, 12
Federación de Sindica tos de Tra­
bajadores al Servicio del Estado,
82
Fernández Bravo, V,, 109
ferrocarril, véase comunicaciones
fertilizantes, 162, 178, 202
fresa, véase producción frutal
frijol, 47, 55, 89, 158-60, 161-2, 172,
175, 189, 251-3, 256
Fuerte, río, véase Comisión del Río
Fuerte; cuenca del río Fuerte
fumigantes, 170, 176
Gabriel Zamora (Lombardía), 128,
191
ganado, 51, 58, 63, 65, 130, 135,
264
144-£, 146-7, 166, 173-4, 185, • 189,
192
Gilí, M., 112
Grijalva, río, véase Comisión del
Río Grijalva; cuenca del río Gri­
jalva
grupos de interés, 81-2
Guadalajara, 72
Guanajuato, 45, 61, 66, 115-6
Guatemala, 104
Guerrero, 51, 60-1, 67, 214
guitarras, 126
Hall, P„ 30
henequén, 50
Hernández Segura, J., 130
Hidalgo; 60-1
hidroelectricidad, véase energía
eléctrica
hielo, fábricas de, 147, 192, 204
Hirschman, A. O., 13, 18-20, 22,
24, 27, 33, 201, 235, 242, 246
homicidios, 206
importación, 183; sustitución, 57,
88, 217; véase también industria,
estímulo para su establecimiento
índice de bienestar, 61, 66-7
industria, descentralización, 73, 9294; estímulo para su estableci­
miento, 16-23, 117, 119, 239; ma­
nufacturera, 55-6, 115; políticas
restrictivas, 16; valor agregado,
60; véase también cuenca del
río
Tepalcatepec;
Tierra
Ca­
liente
industria minera, 47, 58; bario,
144, 204, 230, 241; calcio, 204
industrias satélites, 20, 203
ingreso nacional, 57-9; distribución
regional, 66, 239
insecticidas, 171, 178
Instituto Nacional Indigenista (tNi),
91
instrucción, véase educación
insumos, abastecedores de, 196; véa­
se también efectos en cadena
ÍNDICE ANALÍTIC
inundaciones, control de, 89-103,
116
inversión,
desarrollo
industrial,
221; extranjera, 34-5, 80-1, 194;
inducida, 231; objetivos múltiples
de la inversión pública, 25-32,
247; razón, 22; selección de pro­
yectos, 23-43; véase también ca­
pital general social
irrigación, 47, 63, 65, 86, 101-2, 105106, 111-6, 178, 214, 228, 241-3;
véase también cuenca del río Te­
palcatepec;
Comisión
del
Río
Tepalcatepec; Tierra Caliente
Isard, W., 16-7, 61
Jalisco, 45, 61, 109, 115-6
James, D., 55
Jenkins, W., 192
Johnson, B. F., 112
La Villita, presa, 110, 223
Lefeber, L„ 17
Lerma, río, véase Comisión LermaChap a la-Santiago; cuenca del río
Lerma
Ley de Industrias Nuevas y Nece­
sarias, 117
Ley Lerdo, 54
Lindblom, Ch. E., 27-31
Little, I. M. D., 35, 39-40
Lombardía, 127, 187
López Malo, E., 61, 69, 92
López Mateos, A,, 78, 84, 102, 244
Los Mochis, 114
Losch, A,, 16
Lucas Alamán, M., 53
Maass, A., 27
maíz, 47, 51, 55, 63, 65, 89, 100,
126, 130, 145, 148-9, 158-61, 163165, 168-9, 172, 175, 185, 188-9,
192, 196, 251-3, 256; programa
de inversión, 186
mango, véase producción frutal
Marglin, A„ 39, 42
McKean, R. N„ 31
McKinnon, R, L, 14
ÍNDICE ANALÍTICO
melón, véase producción frutal
Mesa 'Central, 44-7, 54-7, 100, 106,
114-6, 120, 234, 242
Mesa del Norte, 47
mexicanización, 81
México, ciudad de, 61, 66-9, 71, 116,
119, 121, 131
México, Valle de, véase Valle de
México
migración de mano de obra, 10,
12, 47, 69-70, 91, 106; véase tam­
bién cuenca del rio Tepalcatepec;
Tierra Caliente
Mirrlees, J. M., 35, 39-40
Monterrey, 49, 72
Mooser, F., 71
Múrelos, 45, 61
mortalidad, tasa de, 206-7
Moses, L„ 17
Myrdal, G-, 12
Nacional Financiera, 117, 144, 190
naliua, 43, 125
Nayarit, 48-9, 61, 115-6
Noriega, J. S., 99
North, D. C„ 9, 12
Nueva Italia, Michoacán, 127, 187
Nuevo León, 61, 66
Oaxaca, 51, 61, 66, 98, 110-11
Organización de Estados America­
nos, 84
Orive Alva, A., 131, 133
Orozco, J. V„ 71
paludismo, 138, 206, 232
Papaloapan, río, véase Comisión
del Rio Papaloapan; cuenca del
río Papaloapan
papel, 104, 144, 241
Paracho, Midi., 126, 129, 144
parque nacional, 138
parques industriales, véase indus­
tria, estímulo para su estableci­
miento
Partido
Revolucionario
Institucio­
nal, 75-7, 81-2
265
Peña, M. T. de la, 56, 160, 166,
239
personalismo, 85, 243
Petriciolli, G., 2
petróleo, 50. 58; nacionalización,
80-1
Phelps, E„ 219
pina, véase producción fruta!
Plan de Acción Inmediata, 84
planeación, 80-7, 243-4
plátano, véase producción frutal
población, conquista de México,
46-8; México 1960, por región,
62; México 1968, 57; México fu­
turo, 72; véase también coloni­
zación; cuenca del río Tepalca­
tepec; migración de mano de
obra; Tierra Caliente
Poleman, T., 87, 102
políticas sinópticas, 245
precios, 24-5, 35-43, 182
precios sombra, 25, 35
presidencia, 75-7, 242; planeación
y, 82-5
Presión, E. J,, 48
producción frutal, cantalupo, 227;
coco, 62; empacadoras, 203; fresa,
115; intereses americanos, 182-3,
191; limón, 130, 158-64, 171-2,
175-7, 184, 188, 190-1, 251, 253,
257; mango, 162; melón, 145,
158-64, 168-72, 175-7, 180-4, 189,
193-4, 198, 227, 251, 253, 257;
pina, 99; plantas procesadoras,
203; plátano, 50, 99, 162; sandía,
145, 158-64, 168,
170-2, 175-7,
180-4, 193, 198, 227, 251, 253,
257
producto nacional bruto, véase in­
greso nacional
productos animales, véase ganado
productos forestales, 126, 149-50
programa fronterizo, II8-9; desocu­
pación, 49
proyecto, predictibilidad del resul­
tado, 23, 233-5; véase inversión
proyecto Chontalpa, 105
266
Puebla, 45, 61, 98
puesto zootécnico, 135
punto de vista regional, 92'3
Querétarp, 61, 66, 115
Quintana Roo, 61, 118
reforma agraria, 55, 77-80, 167; dis­
torsión, 197, 200-1
regiones mexicanas, 59-62
renta, 198-9, 232
retraso en el tiempo, 221
Revolución mexicana, 52, 56. 127,
233; ideología, 77-81
Reynolds, G, 2, 79
Reynolds, Ll„ 2
Romero Espinoza, E., 130
Romero Kolbeck, G., 119
Rosenstein-Rodan, P., 18
Ruiz, R. E., 91
Ruiz Cortines, A., 87, 101
salario mínimo, 66, 73
salarios, diferenciales de los Estados
Unidos y ciudades fronterizas me­
xicanas, 118-9
salarios sombra, 40-1, 216-7
salinidad, 113
Salto Escondido, 222
San Luis Potosí, 61
sandía, véase producción frutal
Sandoval Landázuri, R,, 87
Santiago, río, véase Comisión Lerma-Cliapala-Santiago
Scott, R, E., 51, 76, 85, 244
Schega, R., 87
Secretaría de Agricultura y Gana­
dería, 135, 252
Secretaria de Comunicaciones y
Transportes, 31
Secretaría de la Presidencia, 31
Secretaría de Obras Públicas. 220
Secretaría del Patrimonio Nació
nal, 244
Secretaría de Recursos Hidráulicos,
31, 63, 72, 99, 205, 219, 240, 252
Secretaría de Salubridad y Asisten­
cia, 151
ÍNDICE ANALÍTI
sector externo, 227-8
Sierra Madre del Sur, véase Costa
Sierra
Simpson, L. B., 44
Sínaloa, 48-9, 61, 66, 69, 111
Singer, H. W„ 93
sistema bancario privado, 197
sistema de hacienda, véase tenencia
de la tierra
Sociedad de Interés Colectivo Agrí­
cola Ejidal, 112
Sonora, 48-9, 61, 66, 111
sorgo, 114, 189, 192
Steiner, H„-.155
Stigler, G.t 219
Strassman, W. P., 107, 219
tabaco, 99
Tabasco, 50, 61, 66, 105
Tamaulípas, 50, 61, 63
tarascos, 125-6
tasa interna de rendimiento, véase
descuento, tasa de
tenencia de la tierra, 55-6, 167
198-201, 232, 250; véase tambié
ejidos
Tennessee Valley Authorithy, 100
244
Tepalcatepec. río, véase Comisió
del
Rio
Tepalcatepec;
cuenc
del río Tepalcatepec
textiles, 127, 147
Thünen, J. H. von, 16
Tiebout, Ch. N„ 8
'fierra Caliente, 110, 121-2, 123-31
133-4, 139-50, 142-5, 152, 154-237
250-7; actividad industrial, 142
144, 146, 201-5; agricultura, 156
186, 212-22: bajo nivel técnico d
los campesinos, 169, 201-2, 248
colonización, 229; costos, 161.174-8; crédito, 169, 182, 186-201
espíritu de empresa y finanza
186-98, 228; inversión social, 205
210; irrigación, 154-60,
167-7
178, 199-200, 214, 252-3; migra
ción, 173-4, 208-9, 229; pobla
ción, 208-9, 213; productividad
ÍNDICE ANALÍTICO
162-73, 177-89; prospectos futu­
ros, J 80-6; tenencia de la tierra,
198-201; trabajo, 166-7, 174, 208209, 213; véase también comu­
nicaciones; cuenca del río Tepalcatepec; energía eléctrica; ga­
nado
Tierra Fría, 121-2, 125-6, 129, 141143, 148-9, 152
Tierra Templada, 50, 120-9, 139147, 152-3; industrialización, 131
Tlaxcala, 61, 66, 119
Tobin, j„ 219
Toluca, 45, 73, 115
toma de decisiones, 75-87, 245-6; des­
centralización, 246; enfoque si­
nóptico vs. enfoque de incremen­
tos, 28-31, 244-5
tomate, 113
trabajadores campesinos temporales,
208-9
trabajo, calificado, 208; crecimien­
to, 86, 107-8; desempleo, 6-7, 12,
49, 67, 209, 246; escasez, 67, 167,
234; fuerza de, 142, 174; no cali­
ficado, 39, 67; véase también
cuenca del río Tepalcatepec; mi­
gración; Tierra Caliente
267
trementina, 126-7, 144
trigo., 47, 55, 88-9, 1 14
Ü. S, Burean of Reclamation, 27,
30
UN1CEF, 206
United Sugai’ Company, i Í2
Urquidi, V„ 2, 119
Uruapan, 121-3, 127-30, i 38, 142,
146
Valle de México, 45-6, 68-74, 93,
116, 119-20, 246
ventaja competitiva, 239
Veracruz, 50, 61, 98. 101, 104
Veruon, R.> 55
Ward, B., 92
Webcr, A., 16
Whetten, N„ 69
Wionczek, M. S„ 84
Yates, P, Lamartine, 61, 6t3, 69,
92
Yucatán, 44, 50, 61, 64, 105, 108
Zacatecas, 61, 66, 115, 119
Zamora, F., 61, 93
zona de control, i'éa.se Ciudad Al­
tamirano
zootecnia, véase puesto zootécnico
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