UNIVERSIDAD CATÓLICA “REDEMPTORIS MATER” Dirección de Investigación y Postgrado MAESTRÍA EN DERECHO LABORAL Y SEGURIDAD SOCIAL “Resolución Caso Práctico Sindicato de Fuerzas Armadas” Presenta: Lic. Luis Ernesto Alemán Madrigal Catedrático: Msc. Luis Osejo Managua, Nicaragua Junio 2012 50 miembros de la Policía Nacional de Nicaragua y 50 miembros del Ejército Nacional de Nicaragua, de manera separada acuden al Ministerio del Trabajo de Nicaragua, para inscribir sindicato de manera separada, ambos conforme a lo establecido en el CT. En el Ministerio del Trabajo se les niega la inscripción de su sindicato bajo la aplicación del art. 213 inc. A) y el art. 3 CT. Está bien fundamentada la negación de la inscripción El art. 213, inc. A) del Código del Trabajo establece: El registro podrá negarse únicamente: A) Si los objetivos y fines que persigue el sindicato no se ajustan a lo consignado en el presente Código. Como se establece en el supuesto, tanto los miembros de la policía como la del ejército, redactaron los objetivos y fines de acuerdo a lo establecido en el Código del Trabajo, por tanto negar la inscripción no fue un acto correcto, amparado en ese art. El art. 3 CT, establece: “están excluidos del presente Código los miembros de las Fuerzas Armadas, únicamente en cuanto se refiere a sus funciones propias” Con este art. podemos interpretar que la exclusión de las fuerzas armadas es parcial y no total, ya que sólo deja de lado lo que son las funciones propias de las fuerzas armadas, lo que nos remite para el Ejército a la Ley 181, Código Organización, Jurisdicción y Previsión Social Militar y para la Policía Nacional el Decreto No. 45-92, Ley Orgánica de la Policía Nacional. Una vez analizadas el cuerpo normativo que rige a ambas instituciones tenemos: Policía Nacional: El art. 14 regula que “El régimen laboral de los miembros de la Policía Nacional se ajustará a lo previsto en el Decreto No. 45-92…” El art. 24, establece que “los miembros de la policía tienen derecho a una remuneración…” Ejército Nacional: El art. 36 establece que la jurisdicción militar se concreta a la materia penal militar, a la materia disciplinaria militar y demás materias militares que en el ámbito castrense sean determinadas por el Código Militar y leyes respectivas. Por lo expuesto antes podríamos entender que en el Ejército el art. 3 del Código del Trabajo es totalmente inadmisible por lo establecido en el art. 36 del Código Militar. No tan claro lo encontramos con la Policía puesto que se establece en el decreto que el régimen laboral ya está determinado por su normativa interna, una vez que leemos la norma nos damos cuenta que no existe legislación acerca de las formas de asociación, pero si notamos que tanto a los miembros del ejército como a los de la policía se les da el trato de trabajadores, con subordinación, con horarios previamente establecido entre otros. Constitución Política de Nicaragua Por el Principio de Supremacía Constitucional, regulado en el art. 182 Cn, sabemos que La Constitución Política es la carta fundamental de la República; las demás leyes están subordinadas a ellas. No tendrán valor alguno las leyes, tratados, órdenes o disposiciones que se le opongan o alteren sus disposiciones. En el art. 87 Cn. se encuentra regulada la libertad sindical, a la cual tenemos acceso todos los trabajadores nicaragüenses, y por lo expuesto con anterioridad al trato como tales que se les da a los miembros de las fuerzas armadas, ellos están amparados en este precepto constitucional. Organización Internacional del Trabajo El art. 2 del Convenio No. 87 de la O.I.T. establece que todos los trabajadores y empleadores, sin ninguna distinción y sin autorización previa, tienen el derecho de constituir las organizaciones que estimen convenientes, así como el de afiliarse a estas organizaciones, con la sóla condición de observar los estatutos de las mismas. El art. 9 del mismo convenio nos refleja una limitante para las fuerzas armadas: “la legislación nacional deberá determinar hasta qué punto se aplicarán a las fuerzas armadas y a la policía las garantías previstas por el presente Convenio”, al haber hecho el análisis previo de la legislación nacional, no nos encontramos con ninguna restricción para ellos. En la 81 reunion de 1994 de la Conferencia Internacional del Trabajo, la Comisión de Expertos de la O.I.T a través de su estudio de la libertad sindical y la negociación colectiva, en el Capítulo III “Derecho de los Trabajadores y de los Empleadores de constituir organizaciones y afiliarse a ellas”, en el párrafo 55 se informa acerca del acceso a sindicalizarse de parte de la policía y las fuerzas armadas. En el mencionado estudio se plantea la restricción hecha por el Convenio a los miembros de las fuerzas armadas, pero recuerda que es una restricción que al final queda sujeta a la legislación nacional, mencionan que en caso de dudas hay que dar tratamiento a estas personas como civiles. También informan que en algunos países el derecho a estar personas está en poder asociarse pero no de manera sindical, y si pueden asociarse así indican que no acceden a todos los derechos como tal. Al final todo queda a consideración de la legislación nacional, y como logramos comprobar en el país no existe restricción taxativa alguna, por tanto el negar la inscripción fue un acto no apegado a Derecho y equívoco por parte del Ministerio.