“Siembra y Cosecha de Agua”. Una experiencia exitosa de integración intercultural de prácticas ancestrales de uso y conservación del agua en la asistencia técnica del proyecto “Haku Wiñay/Noa Jayatai” Nombre de la BPI “Siembra y Cosecha de Agua”. Una experiencia exitosa de integración intercultural de prácticas ancestrales de uso y conservación del agua en la asistencia técnica del proyecto “Haku Wiñay/Noa Jayatai”. [IMAGEN] Año 2017 Reconocimiento Ganador Categoría Gestión Ambiental. Entidad Fondo de Cooperación para el Desarrollo Económico y Social (FONCODES). Resumen Esta experiencia, ejecutada por familias campesinas usuarias del proyecto Haku Wiñay/Noa Jayatai en el Núcleo Ejecutor de Cotaruse (Apurímac), recupera, recrea y pone en valor saberes ancestrales de los pueblos andinos respecto al manejo del agua, fortaleciéndolos con conocimientos técnicos modernos en el marco de un proceso de aprendizaje intercultural, que articula a familias usuarias, yachachiq (expertos campesinos locales) y técnicos profesionales, para atender los problemas de escasez hídrica que enfrentan. Problema a resolver Déficit hídrico en la zona, debido a que la época de lluvias es de menor duración a la época seca. Esta falta de agua no permite satisfacer las necesidades de las personas y los animales. Objetivos Promover la participación y la asociatividad de las familias alto andinas del distrito de Cotaruse para desarrollar acciones que permitan incrementar la disponibilidad hídrica, a través de la implementación de pequeños sistemas integrales de siembra y cosecha de agua. Recuperar saberes ancestrales respetando la cultura y la cosmovisión, para contribuir con la generación y diversificación de ingresos y la mejora del acceso a la seguridad alimentaria. Público Objetivo Alrededor de 1000 hombres y mujeres del distrito de Cotaruse, provincia de Aymaraes, departamento de Apurímac. Desarrollo de la práctica Esta Buena Práctica Intercultural implicó la realización de concursos locales para promover la implementación de pequeños sistemas de siembra y cosecha de agua con la participación de grupos familiares. La difusión del concurso se realizó en asambleas comunales, previa evaluación de las zonas seleccionadas por los grupos de familias para la habilitación de los sistemas de siembra y cosecha de agua, respetando su cosmovisión y cultura. Seguidamente, se inició una etapa de capacitación y asistencia técnica en lengua castellana y quechua. Metodológicamente se partió de la recuperación de los saberes ancestrales locales sobre el manejo y conservación del agua, para luego entrar en diálogo con conocimientos técnicos referidos al ciclo hidrológico, a los efectos del cambio climático en el agua, entre otros. La capacitación se reforzó vía la difusión de microprogramas radiales utilizando los parlantes comunales. Por último, se brindó asistencia técnica en la fase de construcción de los sistemas integrales de siembra y cosecha de agua. Limitaciones Los conflictos entre comunidades o familias por la posesión de terrenos con potencial para la siembra y cosecha de agua representaron un gran problema. Asimismo, se tuvo que hacer frente a la progresiva desvalorización de los conocimientos y tradiciones locales. Lecciones aprendidas La experiencia revela que las innovaciones para mejorar los medios de vida de las familias rurales pueden y deben nutrirse no solo de conocimientos modernos, sino de la revalorización y uso de conocimientos ancestrales andinos. El proceso intercultural demanda no solo focalizarse en el rescate y puesta en valor de los conocimientos ancestrales efectivos en torno al manejo del agua, sino también en las metodologías de acompañamiento, comunicación y facilitación para su implementación. Es decir, no solo enfocarse en el qué hacer sino en el cómo hacer, desde una perspectiva intercultural. Frente al déficit hídrico, la siembra y cosecha de agua es una solución efectiva, económica y de fácil implementación. Genera también beneficios socioculturales, expresados en la revaloración de saberes tradicionales, en el fortalecimiento del trabajo comunitario (el ayni y la minka), en el fortalecimiento cultural (como las festividades en torno al agua) y en la reducción de conflictos. Es necesario entender que el mayor potencial de impacto de estas prácticas no reside en el tamaño individual de ellas, sino en su reproducción masiva. Metodologías como los concursos campesinos que valoran saberes locales y movilizan recursos de las familias campesinas para dinamizar sus actividades productivas, puede ser una vía importante para que los gobiernos locales se involucren en una promoción más franca y masiva de esta práctica y que sus recursos institucionales se orienten en proveer servicios de capacitación y asistencia técnica. Contacto de la entidad FONCODES Coordinación de Desarrollo de Capacidades Av. Paseo de la República 3101, San Isidro Teléfono: (01) 311-8900