05-11- - Agronews Castilla y León

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Esta tarde, en una interpelación a la Ministra Ana Mato en la sesión plenaria de
la Cámara Alta
Elena Diego reivindica el papel de la mujer rural y
asegura que las reformas y recortes del PP son “una
bomba de relojería” contra la calidad de vida y los
avances en derechos y libertades de las mujeres rurales

Acusa al PP de desmantelar la Ley de Dependencia, de ejecutar un brutal
recorte de los servicios públicos básicos así como en las políticas de
igualdad y en la lucha contra la violencia de género y de aprobar una reforma
laboral tremendamente dañina para las mujeres

Asegura que el Gobierno está haciendo que España vuelva a ser un país con
ciudadanos y ciudadanas de primera y de segunda, y hasta de tercera, como
las mujeres que viven en nuestros pueblos
Madrid, 5 de noviembre de 2013.- La Viceportavoz del PSOE en Igualdad y
senadora por Salamanca, Elena Diego, destacó que desde hace dos años, el Gobierno
del PP y sus políticas, dirigidas y exigidas por el Ministerio de Hacienda, han roto
totalmente con los avances producidos en materia de Igualdad. “Sólo han producido
más desigualdad, más regresión, más conservadurismo, menos protección social,
menos educación en igualdad, menos “todo”, porque el PP está arrasando con todo”,
apuntó.
Diego afirmó que “el Ejecutivo del Partido Popular está haciendo que España
vuelva a ser un país con ciudadanos y ciudadanas de primera y de segunda, y hasta de
tercera, como las mujeres que viven en nuestros pueblos”.
La parlamentaria del PSOE inició su intervención reivindicando el papel
histórico de la mujer rural y señalando que las decisiones del Gobierno como la drástica
implantación de la Ley de Dependencia o los recortes de los servicios sociales básicos
están dañando especialmente a nuestros pueblos y a sus mujeres.
A continuación, subrayó que las políticas de casi todos los ministerios afectan
de forma directa y negativa a la calidad de vida de las mujeres y de manera especial a
las que viven en zonas rurales. “Políticas directas contra las mujeres, ante las que la
Ministra Mato calla y lo que es más grave, sus propias políticas que empobrecen,
quitan derechos y silencian de forma extraordinaria a las mujeres rurales”, apostilló.
Elena Diego explicó que las políticas del PP junto con la despoblación, el
envejecimiento y la masculinización de los territorios rurales, nos presenta una realidad,
donde las que se quedan, son en su mayoría viudas, pensionistas, muy mayores y que
viven solas. A su juicio, “las deficiencias de infraestructuras propias de las zonas
rurales, la escasez de servicios asistenciales, el alejamiento de centros de salud, la
falta de transporte público o las malas comunicaciones afectan de forma muy grave a
las mujeres rurales”.
Diego aclaró que los servicios de proximidad son esenciales para estas
mujeres y que la reforma local unida a los recortes en sanidad y servicios sociales, de
los que la Ministra es directa responsable, van a tener como principales afectadas a las
mujeres mayores del mundo rural, en la medida que son las que hacen un mayor uso
de estos servicios.
También apuntó que el recorte en las pensiones, aprobado la semana pasada,
empeora la situación de desprotección de las mujeres mayores, sobre todo de las que
viven más aisladas, las de nuestros pueblos. “El 62% de las pensiones de jubilación de
las mujeres están por debajo de los 600 euros. Las mujeres son el 93% de quienes
reciben una pensión de viudedad, y el 70% de quienes reciben una pensión no
contributiva”, detalló.
En este sentido, puntualizó que, frente a las políticas de igualdad y de
desarrollo rural, que generaron avances en cuanto al emprendimiento y la ocupación
laboral de las mujeres rurales, sobre todo en el ámbito de los servicios sociales y la
dependencia, apareció el PP con una reforma laboral que vuelve a relegar a las
mujeres al trabajo en casa.
Diego acusó a los populares de desmantelar la ley de Dependencia, de
ejecutar un brutal recorte de los servicios públicos básicos así como en las políticas de
igualdad y de la lucha contra la violencia de género, que son muy preocupantes.
La viceportavoz en Igualdad del PSOE recriminó al Gobierno que relegue, de
nuevo, a las mujeres al hogar y que provoque que la violencia de género se convierta
en un problema privado, de puertas adentro. “No queremos mujeres desprotegidas y
silenciadas, la violencia contra las mujeres no puede volver a ser un asunto “entre
visillos” sobre todo en nuestros pueblos”, reivindicó.
Seguidamente, señaló que “las mujeres deben sentirse seguras para reunir
fuerzas y denunciar la violencia que sufren, deben conocer los recursos públicos con
los que cuentan y, lo que es más importante, “deben confiar en ellos”. Nosotras, las
mujeres, valoramos muchísimo poder acceder a servicios sociales de proximidad,
sanitarios, educativos y de atención a personas dependientes que puedan ayudarnos a
poder tener un trabajo fuera del hogar, una demanda que no es ningún capricho porque
la igualdad no es un lujo”.
En el turno de réplica, Elena Diego evaluó el papel de la titular de la cartera de
Servicios Sociales e Igualdad y afirmó que se ha ganado un suspenso categórico. En
este punto, ironizó y señaló que la Ministra “no pasa la reválida del ministro Wert y será
difícil que consiga una beca para el próximo año, aunque quizás si puede pagarse una
Erasmus”.
Diego incidió en la idea de que la reforma laboral, las dificultades para la
conciliación que esta genera, la desaparición de políticas activas de empleo, la
contrarreforma de las pensiones, los recortes en servicios sociales, sanidad y
educación, el desmantelamiento de la Ley de Dependencia y la futura ley local, que
hará desaparecer servicios de proximidad, como los de atención a mujeres que sufren
violencia de género, “son una bomba de relojería contra la calidad de vida y los
avances en derechos y libertades de las mujeres rurales”.
“A ello, matizó, hay que sumar la cruzada del ministro Gallardón contra todas
nosotras. ¿Usted se ha parado a pensar el efecto que sobre la mujer rural puede
generar volver a la clandestinidad, a esconderse, a no decidir en libertad sobre su
maternidad? Esto nos silenciará más y nos hará más invisibles”.
La senadora socialista concluyó indicando que “la igualdad no debe ser una
“maría” dentro de las asignaturas que debe aprobar un Gobierno. Debe ser de las
máximas prioridades, se le deben dedicar todos los esfuerzos humanos y económicos,
y los resultados deben ser positivos, no que pase a engrosar las listas de más
desigualdad, más retrocesos en derechos y libertades o de menor protección por parte
de los poderes públicos a la mitad de la población, las mujeres y, de manera especial, a
las mujeres que viven en el mundo rural en nuestro país”.
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