Subido por Robert A Smith

Antiguo ADN muestra el origen del Homo sapiens en cuatro linajes – FÓSIL

Anuncio

Inicio
Tienda Museos
ANTIGUO ADN MUESTRA EL ORIGEN DEL HOMO SAPIENS EN
CUATRO LINAJES
Home / África • Antropología • Arqueología • Biología • Cenozoico • Evolución • Genética • Geología
• Humana • Museos • Paleontología / Antiguo ADN muestra el origen …
23
ENERO
ANTIGUO ADN MUESTRA EL ORIGEN DEL HOMO SAPIENS EN CUATRO LINAJES
 FOSIL
 África, Antropología, Arqueología, Biología, Cenozoico, Evolución, Genética, Geología, Humana,
Museos, Paleontología
 ADN, África, Antropología, Cenozoico, Evolución, Paleontología
Un equipo internacional, ha generado las primeras secuencias genómicas completas de ADN humano antiguo de
África occidental y central y con rma que el origen del ser humano moderno se produjo a partir de cuatro
poblaciones africanas diferentes que vivieron separadas hace entre 300.000 y 200.000 años.
África es la cuna del Homo sapiens y alberga la mayor diversidad genética humana que cualquier otra parte del
planeta. Los estudios de ADN antiguo de sus yacimientos arqueológicos pueden arrojar luz sobre los orígenes más
antiguos de la humanidad. Sin embargo, siguen siendo escasos, en parte debido al desafío que supone extraer
ADN de esqueletos degradados en ambientes tropicales.
Fotografía tomada en 1994 durante las excavaciones en el yacimiento de Camerún. / Isabelle Ribot
Ahora, un equipo interdisciplinar e internacional, ha reconstruido el genoma antiguo completo de cuatro niños
enterrados en el refugio rocoso Shum Laka en Camerún, hace entre 8.000 años y 3.000 años, durante la transición
de la Edad de Piedra a la Edad de Hierro. Esa región se considera la cuna de las lenguas bantúes, el grupo más
diverso y extenso de lenguas africanas.
El estudio, publicado en la revista Nature y con la participación del investigador del IBE Carles Lalueza-Fox,
demuestra que hubo al menos cuatro linajes importantes en la historia de la humanidad, hace entre 300.000 y
200.000 años. Esta rami cación no se había identi cado previamente a partir de datos genéticos.
El hallazgo refuerza el argumento recientemente formulado por arqueólogos y genetistas de que los orígenes
humanos en África pueden haber involucrado a poblaciones profundamente divergentes y geográ camente
separadas.
Los resultados sugieren que los linajes que conducen a los cazadores-recolectores de África central, los del sur de
África y todos los demás humanos modernos divergieron en una sucesión cercana hace unos 250.000 y 200.000
años.
“Nuestro análisis indica la existencia de al menos cuatro grandes linajes humanos profundos que contribuyeron a
las poblaciones actuales, y que divergieron entre sí hace unos 250.000 y 200.000 años”, dice David Reich de la
Facultad de Medicina de Harvard, responsable del estudio.
El cuarto linaje era una población “fantasma” previamente desconocida que contribuyó con una pequeña cantidad
de ascendencia tanto al oeste como al este de África. “Esta radiación cuádruple, incluida la posición de un linaje
humano moderno fantasma profundamente dividido, no se había identi cado antes a partir del ADN”, continúa
Reich.
Según Carles Lalueza-Fox, el análisis genómico de poblaciones antiguas y actuales africanas desmiente las
conclusiones de trabajos previos basados únicamente en el análisis del ADN mitocondrial, y demuestra que el
origen de nuestra especie fue un fenómeno mucho más complejo de lo que pensábamos.
Un raro linaje de herencia paterna
En la región donde se encuentra el yacimiento, los investigadores sospechan que se originaron las lenguas y
culturas bantúes, el grupo de idiomas más extendido y diverso en África en la actualidad. Se cree que la difusión
de las lenguas bantúes y los grupos que las hablaron en los últimos 4.000 años explican por qué la mayoría de las
personas de África central, oriental y meridional están estrechamente relacionadas entre sí y con los africanos
occidentales y centrales.
Si bien los hallazgos del trabajo no hablan directamente de los orígenes del idioma bantú, sí arrojan luz sobre las
múltiples fases de la historia más antigua del Homo sapiens. Los investigadores examinaron el ADN de los niños
de Shum Laka junto con el ADN publicado de antiguos cazadores-recolectores del este y sur de África, así como el
ADN de muchos grupos africanos actuales. Combinando estos conjuntos de datos, pudieron construir un modelo
de linajes divergentes en el curso del pasado humano.
Sorprendentemente, el ADN antiguo secuenciado de los cuatro niños revela una ascendencia muy diferente a la
de la mayoría de los hablantes de bantú en la actualidad. En cambio, son más similares a los cazadoresrecolectores de África central.
Uno de los individuos de la muestra de Shum Laka, un varón adolescente, portaba un raro haplogrupo de
cromosomas Y (A00) que no se encuentra casi en ninguna parte fuera del oeste de Camerún en la actualidad. A00
está mejor documentado entre los grupos étnicos Mbo y Bangwa que viven cerca de Shum Laka, y esta es la
primera vez que se encuentra en el ADN antiguo.
Se trata de un haplogrupo profundamente divergente, que se separó de todos los demás linajes humanos
conocidos hace unos 300.000 años. Esto muestra que este linaje más antiguo conocido de varones humanos
modernos ha estado presente en el centro y oeste de África durante más de 8.000 años, y tal vez durante mucho
más tiempo.
“Este resultado sugiere que los hablantes de bantú que viven hoy en Camerún y en toda África no descienden de la
población a la que pertenecían los niños de Shum Laka”, indica Mark Lipson de la Facultad de Medicina de
Harvard, autor principal del estudio. “Esto subraya la antigua diversidad genética en esta región y señala a una
población previamente desconocida que contribuyó solo con pequeñas proporciones de ADN a los grupos
africanos actuales”, añade.
La propagación de la agricultura y el pastoreo en África, como en otras partes del mundo, estuvo acompañada por
muchos movimientos poblacionales. “Si echas la vista 5.000 años atrás, prácticamente todos los habitantes al sur
del Sáhara eran cazadores-recolectores”, comentan los autores. “Pero si los buscas hoy, verás que son muy pocos
y están dispersos entre ellos”, recalcan.
Este estudio contribuye a un creciente cuerpo de investigación de ADN antiguo que podría descifrar la diversidad
genética antigua y la estructura de las poblaciones que han sido borradas por los cambios demográ cos que
acompañaron la propagación de la producción de alimentos.
“Los resultados destacan cómo el paisaje humano en África hace unos pocos miles de años era profundamente
diferente de lo que es hoy, y enfatizan el poder del ADN antiguo para despejar el pasado humano detrás de los
movimientos de las poblaciones”, concluye Reich.
Referencia:
Mark Lipson, et. al. “Ancient West African foragers in the context of African population history” Nature enero de
2020. DOI: 10.1038/s41586-020-1929-1
 PREVIOUS
Developed by Think Up Themes Ltd. Powered by WordPress.
NEXT

Descargar