Subido por francisco parma

Escuelas técnicas

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Escuelas técnicas: más de la mitad de
los egresados no trabajan de lo que
estudiaron
Buscan nuevas forma de vincular a las empresas con el sistema educativo
El 55,8% se ocupa de otra cosa. Uno de los principales objetivos de estos colegios
es ofrecer formación para el trabajo, pero aún hay desajustes con las demandas
del mercado laboral.
Aunque uno de los objetivos principales de la educación técnica es ofrecer formación
para el trabajo, el 55,8% de los egresados de esta modalidad trabajan en áreas que no
tienen ninguna relación con la especialidad que estudiaron. El dato surge de una
encuesta que acaba de realizar el Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET)
entre 740 egresados, y evidencia uno de los principales desafíos a futuro: ajustar la
currícula de la educación técnica para que se ajuste mejor al mercado laboral.
Desde el Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET), del que dependen las
1599 secundarias técnicas que hay en todo el país, aseguran que uno de los ejes de la
nueva gestión es articular mejor la enseñanza de las escuelas técnicas con las
demandas del sector productivo de cada provincia. Para eso, se relanzó el Consejo
Nacional de Educación, Trabajo y Producción (que reúne al sistema educativo con
empresas del sector privado y los gremios), tanto a nivel nacional como en 17
provincias.
“Queremos ir hacia un sistema armado desde la demanda productiva, y conectar la
oferta educativa con las demandas de cada provincia”, explica Gabriel Sánchez Zinny,
director del INET. Otro desafío es mejorar la tasa de graduación, que ronda el
40% (debajo de la secundaria común), por una combinación de factores: la modalidad
técnica es más larga (un año más), supone doble escolaridad (los alumnos asisten a
talleres) y suele ser considerada más “difícil” por la mayor carga de materias “duras”
(como matemática o física).
Según la encuesta del INET a egresados de escuelas técnicas, el 77% considera que la
calidad educativa es “buena” o “muy buena”, y el 88% cree que la escuela técnica
brinda una ventaja respecto de los alumnos que asisten a la secundaria común. A la
vez, el 88,1% considera que “hace falta actualizar los programas y contenidos de los
cursos”. Y apenas el 36,1% reconoce haber conseguido trabajo de lo que estudió luego
de terminar de cursar, pese a que la principal ventaja de la escuela técnica debería ser
facilitar la inserción laboral.
En la última década aumentó la matrícula de las escuelas técnicas y se invirtieron más
de 6000 millones de pesos. El siguiente paso es afinar la vinculación con el mercado
laboral: para eso, el INET apunta a que las prácticas profesionalizantes del último año
se hagan fuera de la escuela. “Los alumnos tienen que hacer entre 100 y 200 horas
de prácticas. Hoy la mayoría las cumple en la escuela. Pero queremos cerrar acuerdos
para que puedan hacerse fuera, en empresas privadas, para que la práctica sea un
verdadero acercamiento al mundo laboral”, sostiene Sánchez Zinny.
Un estudio reciente de la Unión Industrial Argentina encontró que la falta de
formación de recursos humanos orientada a oficios es el principal obstáculo que
encuentran las empresas a la hora de cubrir puestos de trabajo en el país. Además, una
encuesta a empresas realizada por la UIA y la OIT encontró que las “falencias” en la
educación constituyen el factor que más afecta el desarrollo normal de tareas en el
ámbito laboral.
Según datos del Observatorio Pyme, la mitad de los trabajadores de las pymes son
técnicos. En promedio, cada pyme industrial emplea en Argentina unos 30
trabajadores: el 50% son operarios calificados y técnicos no universitarios (con escuela
secundaria completa o nivel terciario superior no universitario). Las pymes que más
demandan operarios calificados y técnicos no universitarios son las que pertenecen a
los sectores más modernos de la industria: maquinaria y equipos (37%), autopartes
(36%), aparatos eléctricos y electrónicos (31%), y sustancias y productos químicos
(30%). La demanda de operarios calificados cayó dramáticamente en los últimos diez
años: en 2015 solo el 23% de las pymes buscó contratar personal; en 2006 la cifra
había ascendido al 74%.
Lo más llamativo es que, pese a la caída de la demanda de recursos humanos, en la
última década también aumentaron las dificultades para reclutar trabajadores: en 2015
casi la mitad de las pymes (48%) reportaron dificultades para contratar operarios
calificados y técnicos no universitarios; el porcentaje es 10 puntos más alto que hace 10
años. De las orientaciones de la escuela técnica, la más solicitada es Mecánica: más de
la mitad (56%) de las pymes que necesitan contratar operarios calificados buscan
trabajadores formados en esa especialidad.
------------Los que reparan las sillas del abandono
En acción. Estudiantes de la Escuela Técnica N° 26. Arreglan, en el colegio, las sillas
de ruedas abandonadas por la anterior gestión del PAMI. J. M. FOGLIA
En mayo, las imágenes de miles de sillas de ruedas abandonadas circularon como
retrato de la desidia de un Estado que suele humillar a sus jubilados. La nueva gestión
del PAMI, encabezada por Carlos Regazzoni, encontró 16 mil sillas fuera de uso y
catalogadas como “inservibles”: ahora, por un acuerdo con el INET, los alumnos de
escuelas técnicas las están reparando. “El trabajo solidario hace a la identidad de la
escuela técnica”, dice José De Leo, vicerrector de la Escuela Técnica N° 26 de
Balvanera. Allí 48 alumnos participan de las tareas de lijado, lubricación, cambio de
bujes y rulemanes, regulación de frenos, mecanizado y roscado, entre otras. “Es una
forma de poner en juego los conocimientos y destrezas que aprendieron”, señala el
rector, Gustavo Canavesio. “Les preguntamos: ¿te gustaría que tu abuelo reciba una
silla en este estado?”, apunta el profe Roberto Castro. “Es un trabajo en equipo”,
cuenta Esteban Amondaraz (19), uno de los alumnos que participan. Emanuel Barral
(19) agrega: “Está bueno poder ayudar desde tu especialidad”.
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