LAS CÉLULAS MADRE Las células madre poseen la capacidad de replicarse y diferenciarse dando lugar a diversos tipos de células especializadas que se distinguen de acuerdo al tipo de tejido que originan, mismos que aportan en la genética y clonación: Totipotentes, que tienen la facultad de procrear un embrión completo; pluripotentes, que son capaces de diferenciarse a progenitores originarios de cualquier capa embrionaria; multipotentes, que originan precursores vinculados a una de las tres capas embrionarias y unipotentes, que crean células hijas durante una única línea celular. Según su tejido de procedencia se dividen en célula madre embrionaria, encargada de producir varios grupos celulares cuya ventaja es su capacidad de proliferar en un ambiente controlado para poder ser modificadas, mientras que la célula madre adulta posee la habilidad biológica de distinguirse en células de diferentes capas embrionarias, que a través de su potencia celular cambian de linaje tras la replicación de células madre, todo ello debido a su exposición a un ambiente distinto del que perteneció desde su origen, esto es conocido como el fenómeno de plasticidad. Dentro de las células madre adultas sujetas a investigación tenemos tres grupos que proceden de la médula ósea: células madre estromales, células madre hematopoyéticas y side population. La diversa clasificación de las células madre embarca diferentes procesos que tras una ardua investigación podrían traer consigo importantes avances científicos que transformarían el mundo de la biología, sin embargo, sigue siendo un tema delicado del que hablar por los distintos factores éticos y económicos que intervienen en su desarrollo.