Subido por Elvia Elizabeth Ajuchán Velásquez

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ACUERDOS SALT
(Strategic Arms Limitation Talks - Conversaciones Sobre Limitación de Armas)
Se refiere a los dos encuentros de conversaciones bilaterales, correspondientes a
tratados internacionales, entre la Unión Soviética (URSS) y Estados Unidos (EE.
UU.); las súper potencias oponentes durante la guerra fría. El tema de las
mismas fue el de control de armas, ya que buscaban poner un límite a las armas
nucleares estratégicas y frenar la carrera armamentista.
SALT I (1969-1972) Helsinki y Viena
Es el tratado entre la Unión Soviética y Estados Unidos para limitar el número y
tipo de:




Misiles Anti-Balísticos ABM
Misil Balístico Intercontinental ICBM
Misiles instalados en submarinos SUBM
Prohibición del establecimiento de sistemas de defensa antimisiles
Iniciaron en noviembre de 1969. Tras arduas negociaciones Leonid Brezhnev
(URSS) y Richard Nixon (EE. UU.) firmaron en Moscú los Acuerdos Salt en Mayo
de 1972, los cuales estuvieron vigentes durante 30 años y así pusieron un límite
a la guerra y la mutua destrucción, de otra forma, asegurada.
Paradójicamente, estos acuerdos llevaban el nombre coloquial de “Equilibrio del
terror”, simbolizan la distensión de la época, e incluso los Estados Unidos lo
llamaron Brinkmanship (la política “al borde del abismo”).
SALT II (1972-1979) Viena
Limitaba el número y el tipo de misiles nucleares intercontinentales para las dos
potencias opuestas. En teoría, estos acuerdos ratificaban los primeros, pero
Estados Unidos se negó a asumir el compromiso, juzgándolos como favorables
para la Unión Soviética; y fue así como se desvincularon oficialmente. Se ocupó
de reemplazar el arreglo interno con un tratado comprensivo sobre armas
ofensivas.
En 1986 se dio fin a dichos acuerdos. El 13 de junio de 2002 se discutían
nuevamente, sin embargo, 6 meses después de anunciarlos, los EE. UU. se
retiraron oficialmente.
1
CONFERENCIA DE HELSINKI
(La Conferencia sobre la Seguridad y Cooperación en Europa)
Tuvo lugar en Helsinki (Finlandia) a lo largo de varias sesiones entre el 3 de julio
de 1973 y la decisiva tercera sesión del 30 de julio al 1 de agosto de 1975; entre
los Estados Unidos de América, Canadá, la Unión Soviética y todos los países
europeos (incluyendo a Turquía y excluyendo a Albania y Andorra). Fue firmada
por 35 países. Es el punto de partida de la
Contexto | Mientras que la
Organización
para
la
Seguridad
y
la
parte occidental de Europa
Cooperación en Europa (OSCE).
era capitalista y estaba
integrada
por
gobiernos
La Conferencia tuvo reuniones posteriores, que
democráticos, el Este de
tuvieron lugar en Belgrado (4 de octubre de
Europa era comunista y
1977 - 8 de marzo de 1978), Madrid (11 de
estaba
conformado
por
noviembre de 1980 - 9 de septiembre de 1983),
Estados
socialistas.
Sin
y Viena (4 de noviembre de 1986 - 19 de enero
negar
las
distintas
de 1989). La Cumbre de París de 1990 puede
concepciones políticas entre
considerarse
como
punto
final
de
la
ambos bloques, ni valorar al
otro de manera negativa, una
Conferencia, por la desaparición del bloque del
serie de conferencias debían
contribuir a la distensión y a
la preservación de la paz en
Europa.
este.
Representantes de 35 países
viajaron a Helsinki
Tras dos años de negociaciones, el primero de agosto de 1975 los países
firmantes garantizaron mutuamente la inviolabilidad de sus fronteras, la
integridad territorial de los Estados, el arreglo de las controversias por medios
pacíficos, la no intervención en los asuntos internos, la abstención de recurrir a
la amenaza o al uso de la fuerza, la igualdad de derechos, el derecho a la
autodeterminación de los pueblos y el respeto de los derechos humanos,
incluidas la libertad de pensamiento, conciencia, religión y convicciones.
Aunque en el texto pareciera algo seco, el Acta de Helsinki supuso una
transformación política en el continente, una transición de la confrontación a la
cooperación. Los países firmantes renunciaron voluntariamente a la provocación:
2
el desearse mutuamente la ruina y subrayar la superioridad de su propio sistema
político.
Por primera vez tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, los países occidentales
aceptaron las fronteras del continente. Como por ejemplo, la controvertida
frontera germano-polaca, que ya había sido previamente reconocida por la
República Federal de Alemania a través de un acuerdo con Polonia, el Tratado de
Varsovia, impulsado por la Ostpolitik del gobierno de coalición socialdemócrata
liberal bajo el canciller Willy Brandt. En este sentido, mientras que el Acta de
Helsinki supuso para los países de Europa del Este un avance político
significativo, los países occidentales concentraron sus demandas al bloque
socialista en el respeto y la defensa de los derechos humanos. Ambos elementos
contribuyeron a la distensión en el continente.
A la mañana siguiente, según fue acordado, el Acta de Helsinki fue publicada en
todos los países firmantes.
El ex-canciller alemán, Helmut
Schmidt.
Contenido del Acta de Helsinki |
1. Igualdad soberana, respeto de los derechos inherentes a la soberanía
2. Abstención de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza
3. Inviolabilidad de las fronteras
4. Integridad territorial de los estados
5. Arreglo de las controversias por medios pacíficos
6. No intervención en los asuntos internos
7. Respeto de los derechos humanos y de las libertades fundamentales
8. Igualdad de derechos y Derecho a la autodeterminación de los pueblos
9. Cooperación entre los estados
10. Cumplimiento de buena fe de las obligaciones del derecho internacional
En el momento de la firma, el documento se vio al mismo tiempo como un paso
significativo para reducir las tensiones de la guerra fría (la llamada distensión), y
como un triunfo diplomático de la Unión Soviética, debido a las cláusulas de
inviolabilidad de las fronteras nacionales y el respeto para la integridad
3
territorial, que reconocían por primera vez las incorporaciones territoriales de la
Unión Soviética en el Este de Europa tras la Segunda Guerra Mundial.
No obstante, la parte dedicada a los derechos humanos proporcionó las bases
para el funcionamiento del Grupo de Helsinki en Moscú, una ONG independiente
creada para vigilar el cumplimiento de los Acuerdos de Helsinki. El Grupo de
Helsinki se extendió con la creación de varios comités regionales, que acabaron
formando la Federación Internacional de Helsinki y Human Rights Watch.
Consecuencias:
 Los ciudadanos europeos se enteraron de que los derechos humanos
tenían vigencia incluso ahí en donde no eran respetados, y que los países
europeos eran garantes entre sí, de la vigencia de las fronteras comunes.
 Los grupos disidentes en la República Democrática Alemana (RDA) y en
Polonia, entre ellos el Sindicato Solidarnosc, se remitieron al Acta de
Helsinki. También la Carta 77, que entre otros firmó posteriormente el
presidente de la República Checa, Václav Havel (1936), se remitió a que el
propio gobierno se había comprometido en Helsinki con la defensa de las
libertades individuales. Esta situación impidió que los gobiernos de los
países del bloque del Este combatieran a los movimientos disidentes con
medios militares, como se había visto ya en 1953 en Berlín Oriental, en
1956 en Hungría y en 1968 en Praga.
 El proceso de la OSCE, comenzado por iniciativa de los países del bloque
del Este con el objetivo de garantizar su integridad territorial, contribuyó
indirectamente, entre 1975 y 1990, al proceso de desintegración del bloque
detrás de la Cortina de Hierro. Como consecuencia de esta transformación
geoestratégica, el conflicto Este-Oeste que llevó a Europa en más de una
ocasión al borde de una nueva conflagración mundial, que sería esta vez
atómica, fue superado. La Guerra Fría había terminado.
EL ROL DE GORBACHOV
Mijaíl Sergueievich Gorbachov nació en Stavropol en 1931, creció
en una familia campesina rusa de la región norte del Cáucaso,
ingresó a la Universidad de Moscú en donde estudió Derecho
desde 1950 hasta 1955. Se afilió al Partido Comunista, en donde
tras una carrera política en su lugar de origen, logró puestos
regionales en las juventudes comunistas y en su Partido. Luego
estudió Agronomía en los sesenta, lo cual lo ayudó a afrontar la
sequía de 1968. Fue miembro del Sóviet Supremo en 1970, del
Comité Central del Partido como secretario de agricultura en
1978, y del Politburó en 1980. La experiencia en política nacional
lo llevó a ser secretario general del Partido Comunista de la URSS
en 1985, y luego fue jefe del Estado y presidente del Sóviet
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Supremo en 1988.
Él propuso la corriente reformista, que planteaba una apertura liberalizadora
para sacar a la URSS del mal momento económico, político y cultural por el que
pasaban desde la época de Brezhnev. Desde 1990 puso en marcha un programa
político que, eventualmente, acabó con la dictadura comunista y con la existencia
de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Con dicho programa pretendió
reforzar y perfeccionar el régimen socialista mediante la reestructuración
(Perestroika) y la transparencia (Glasnost).
PERESTROIKA
Reforma económica implementada por el político Mijaíl Gorbachov entre los años
de 1985 y 1991, la cual tenía como fin desarrollar una nueva estructura
económica en la Unión Soviética. La visión que Mijaíl Gorbachov tenía para el
futuro era reorganizar el sistema socialista para así poder conservarlo, además de
la transformación de la sociedad soviética para que estuviera lista y así pudiera
ayudar a la creación de un nuevo sistema económico dentro del socialismo, en la
Unión Soviética. Durante este proceso se llevaron a cabo muchas conversaciones
hacia la democracia y los miembros del Kremlin, que trajo consecuencias para la
sociedad y la economía, las cuales llevaron al final de la era de Gorbachov y la
caída de la URSS.
Proceso: cuando en 1985 el reformista Mijaíl Gorbachov fue elegido secretario
general y se convirtió en el máximo dirigente soviético, esta política ya estaba
previamente diseñada, pero fue en la reunión del Comité Central del PCUS de
abril de 1985 cuando se decidió ponerla en práctica de inmediato. El programa
consistía en convertir a la URSS, en 500 días, en una economía socialista de
mercado, bajo las premisas de corregir los errores de la economía socialista de
corte estaliniano. Basado en el totalitarismo económico del estado, que fungía
como administrador de todos los medios de producción, industria y dueño de la
tierra en su totalidad, sin existencia de propiedad
privada excepto de artículos personales básicos,
bajo la teoría Marxista de la propiedad colectiva
de los medios de producción administrada por el
estado. Desde la época de Lenin hubo muchos
conflictos y controversias sobre la forma de
economía que debía fungir como transitoria hacia
el comunismo real. De hecho, uno de los
conflictos más intrincados fue la existencia o no
de un sistema de mercado basado en oferta y
demanda
en
una
economía
marxista,
revisionismo que aún no han resuelto los teóricos
Marxistas.
Para la década de los ochentas existía un sistema
de sanidad, educación y vivienda gratuita o muy
subvencionado, vivienda modesta pero muy digna
5
en constante aumento (para los ochentas el m² habitable era de 15 m² por
persona, superior al estándar europeo actual), la alimentación del soviético y la
esperanza de vida eran de las mejores del mundo. La agricultura era muy
eficiente, pero con problemas de distribución de productos, y ante todo existía el
pleno empleo, no existía pobreza extrema, todos estos indicadores hacían del
ciudadano de la URSS, en general, una persona culta, con una vida digna pero
sin llegar a los estándares de vida occidentales.
El objetivo principal era pasar de un sistema de economía centralmente
planificada a un sistema de economía de mercado (ley de oferta y demanda), para
lo cual se permitió una cierta autonomía local y se procedió a liberalización de
precios. También se pretendía luchar contra la corrupción, el alcoholismo y el
absentismo laboral (según la nueva teoría, el pleno empleo que existía en la URSS
generaba que los trabajadores no se pudieron persuadir por medio del despido y
pérdida de beneficios) propugnando la liberalización económica, permitiendo a las
empresas tomar decisiones sin consultar a las autoridades y fomentando la
empresa privada y las sociedades conjuntas con un número limitado de
compañías extranjeras, impulsando así la inversión. Asimismo, se implantó una
cierta democratización de la vida política. Abel Aganbegyan, el primer consejero
económico de Gorbachov, y en gran parte responsable de la base teórica del
programa de cambio, afirmó que en un 40% de la industria se habría producido
una disminución de la producción y que, además, existía una degradación de la
agricultura. Por ello, propuso reformas para dar más autonomía a la empresa,
medidas para mejorar el rendimiento del trabajador y la calidad de los productos.
Las alternativas económicas de otros países socialistas se ignoraron (como la
modificación del Socialismo Chino de los setentas) y las medidas que se
adoptaron no se discutieron previamente, permitiendo la entrada de capital
extranjero y acercándose cada vez más al capitalismo. Así, poco a poco se fueron
introduciendo actividades económicas privadas, mediante la paulatina
introducción de contratos individuales en fábricas y haciendas colectivas. Se
llevaron a cabo medidas, como la venta de un gran número de empresas
estatales, reformas de la moneda y un nuevo sistema bancario y financiero.
Para inicios de la década de 1990, la URSS se encontraba sumida en una
profunda crisis económica sin precedentes, puesto que no existía a la fecha una
teoría o metodología académica de cómo un estado de economía planificada
centralmente, pasa a convertirse en una economía de mercado libre. Se dislocó
completamente todo el complejo entramado industrial y agrícola de la URSS, el
país virtualmente se paralizó, la inflación se disparó y las condiciones de pobreza
(prácticamente inexistentes de la URSS) se propagaron al 90% de la población al
punto que la misma URSS desapareció como estado y como superpotencia
mundial del periodo de la Guerra fría.
El “desastre” de la Perestroika:

Lo cierto es que las reformas aplicadas a través de la perestroika aunque
con buenas intenciones acabaron bastante mal y de hecho el elemento más
destructivo fue la Ley de Empresa que aunque pretendía hacer prospera la
6




economía de Rusia, se volvió en contra del país, pues anulaba todo control
sobre los recursos, de modo que se redujo la inversión. La desmembración
de la URSS en pequeñas repúblicas, la creación de bancos propios y la
concesión de créditos ilimitados provocaron inflación y la escasez total, el
interés por el dinero llegó a ser mínimo.
La calidad de vida que se pretendía durante este proceso era que los
ciudadanos tuvieran cada vez mejor nivel de vida, y de hecho la idea era
invertir en los habitantes y dejar de una vez por todas las inversiones
militares.
Dicha calidad de vida nunca llegó a mejorar por culpa de factores como la
falta de regularización en los sueldos o la liberación de los precios.
De hecho surgió una clase de ricos cuyos ingresos no provenían del trabajo
y se amplió el número de pobres; en 1993, casi una tercera parte de la
población rusa tenía ingresos que no garantizaban un nivel mínimo de
subsistencia.
La perestroika afectó también en lo político si bien Gorbachov apostó por
reducir el gasto en armas, además de retirar tropas de Afganistán, así
como abrirse más a los medios de comunicación y a la auto-crítica.
En agosto de 1991, un fracasado golpe de estado por sectores opuestos a las
reformas de Gorbachov provenientes del PCUS (Partido Comunista de la Unión
Soviética) puso en evidencia que se habían desbordado las metas políticas de la
Perestroika. Este hecho consumó finalmente la desintegración de la URSS, el que
Gorbachov dimitiera del cargo y que llegara al poder Boris Yeltsin, abandonando
el comunismo y convirtiéndose en presidente de la recién fundada Federación
Rusa.
GLASNOST
Junto con la perestroika, se implementó la Glasnost o transparencia, la cual
permitía, entre otras cosas, mayor libertad a los medios de comunicación, el
descenso de la censura, y mayor libertad de expresión, contrastando con el
régimen anterior de represión hacia quienes no comulgaran con los principios del
sistema soviético.
Permitió que el gobierno adoptara una postura autocrítica, reconociendo sus
errores e implementando instrumentos para resolverlos. Consintió, entre otras
cosas, la confrontación política que se dio en la URSS en 1987, con las agrias
críticas de Boris Yeltsin al sistema, sin embargo, a pesar de los avances en
materia de Glasnost, Yeltsin sufrió represalias al ser apartado del gobierno.
Gracias a ella, fueron puestos en libertad prisioneros políticos, la mayor parte de
los cuales eran “presos de conciencia” por sus críticas al gobierno soviético y al
sistema político.
Las elecciones de 1988, pusieron de manifiesto el sentir popular; el partido
comunista soviético no obtuvo todos los puestos del gobierno, al que pudieron
tener acceso reformadores de minoría (como Yeltsin) y otros 18 partidos. La
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perestroika comenzó a recibir ataques de conservadores y alas progresistas, los
primeros veían en ella una amenaza al socialismo y los segundos pensaban que
las reformas avanzaban muy lentamente.
En definitiva, la libertad de expresión que trajo la
glasnost desencadenó un proceso que finalmente se
le fue de las manos a Gorbachov y terminó por
hacer perder toda su legitimidad al sistema nacido
de la revolución de octubre de 1917 y al propio
estado soviético.
PLAN DE 500 DÍAS
Programa económico lanzado en agosto-septiembre de 1990 por
Grigori
Yavlinski, su objetivo era superar la crisis económica de la Unión Soviética en
vísperas de su desaparición como Estado, por medio de la transición a
una economía de mercado. Desarrollado por un grupo de trabajo bajo la dirección
de Stanislav Shatalin, que también era el asesor económico de Mijaíl Gorbachov.
En agosto de 1990 el grupo publicó un informe de
cuatrocientas páginas titulado “Transición al mercado”.
En él pide la creación de una economía de mercado
competitiva, que incluía la privatización en masa de
empresas públicas, la libre fijación de precios por el
mercado, la integración con el sistema económico
mundial, una gran transferencia de poder desde el
gobierno de la Unión al de las Repúblicas, y muchas
otras reformas entonces consideradas de carácter
radical.
Al principio fue aceptado pero, en el caso del primer
ministro conservador Nikolái Ryzhkov lo rechazó
abiertamente.
Grigori Yavlinski, uno de los
impulsores del fracasado
Programa de los 500 días.
Este programa se dividió en tres fases:
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
Un primer estadio en que se procediese a la estabilización económica
reduciendo el déficit presupuestario. Se da el comienzo de las
desnacionalizaciones y unificación del tipo de cambio (final de 1990,
ocupando los cien primeros días).

Una segunda fase de liberalización de precios, que incluyese estrictos
controles financieros (los días 100 a 250).

En los últimos 250 días se procedería a estabilizar el mercado, profundizar
en la privatización, convertibilidad interna, ofreciendo a las repúblicas una
unión económica que incluyese el mantenimiento de una moneda única.
En conclusión, el Sóviet Supremo de la Unión Soviética rechazó la adopción del
programa, para después aceptar otro más adecuado en sus reformas, titulado
“Directrices básicas para la estabilización de la economía y la transición a una
economía de mercado”. Éste contenía muchas de las medidas del programa de los
quinientos días, pero se diferenciaba fundamentalmente en que no contenía un
calendario de aplicación, y por otro lado no contenía previsiones de
descentralización del poder económico desde la Unión a las repúblicas. El
Programa de los 500 días acabó por tanto no siendo aplicado por la oposición de
los sectores menos propensos a las reformas.
EL TRATADO DE SOBERANÍA
La caída del Muro de Berlín representó el final de la conflictiva separación entre
la República Federal Alemana y la República Democrática Alemana, la cual
originó cambios en su estructura política y social como resultado de la
unificación de su territorio dentro de la OTAN. Se considera que la política
ejercida por Mijaíl Gorbachov fue un aspecto importante que contribuyó al
acontecimiento de dichos sucesos en Alemania.
El 12 de septiembre de 1990 se firmó en Moscú el convenio que recibió el nombre
de “Tratado sobre la Soberanía” o “Tratado 2+4”, en donde los aliados de la
Segunda Guerra Mundial renunciaron a sus derechos sobre Alemania. El 3 de
octubre de 1990 “las dos Alemanias” se reunieron oficialmente, siendo derribado
El Muro de Berlín, a excepción de
varios fragmentos conservados como
monumentos históricos.
El Tratado plasmó sobre el papel del nuevo equilibrio del poder entre Estados
Unidos, considerada como única superpotencia real, y Alemania unida, fuerza
emergente de Europa.
9
Según (Peters, 1995), las cuatro potencias (Reino Unido, Francia, E.E.U.U. y
U.R.S.S.) declararon el fin de sus derechos y responsabilidades respecto a Berlín
y Alemania, con el resultado de que la Alemania unida tendría “plena soberanía
sobre sus asuntos internos y externos”. Esto significó un acuerdo de paz final, ya
que se desligaron de ejercer la administración conjunta de Berlín, se abstuvieron
de involucrar su equipo bélico en el territorio, y la determinación del estatuto
alemán conjunto a la reasignación de su poder sobre sus límites territoriales.
Sin embargo, la recuperada soberanía estaba restringida por medio de tratados
internacionales y la constitución alemana, limitándose la producción de armas, el
alcance y uso de las Fuerzas Armadas y el respaldo de la primacía del control
político civil sobre el mando militar. Dichas restricciones eran parte del proceso
de integración de la RFA y la RDA, con el fin de la reformación de un estado
nación.
Los países aliados mantuvieron distintas posturas, entre ellos Estados Unidos
quien estaba a favor para debilitar a su rival la U.R.S.S., y disminuir su
influencia abarcando esas áreas. Por el contrario, Francia se oponía a la
reunificación alemana, ya que le preocupaba cómo se vería afectada su posición
de potencia al perder poder relativo sobre Alemania. Igualmente, la primera
ministra Margaret Thatcher, se inclinó por conservar el statu quo ya que el
ascenso de Alemania amenazaba con sustituir a Reino Unido como el principal
aliado de E.E.U.U. Rechazando la reunificación a corto plazo, la puesta en
práctica de cambios en el marco de la defensa europea, tales como reformar la
OTAN (y su doctrina militar) o crear una entidad europea de seguridad y defensa
vinculada al ámbito de las Comunidades (Spence, 1991; Deighton, 1997, p.6:
Merkl, 1993, pp. 322-325).
La Unión Soviética demostraba su inconformidad respecto al tratado, por el
mismo dilema acerca de la influencia alemana a nivel global. De acuerdo a Lion
Bustillo (2013), poseía varias razones por las que al final se mostró a favor: 1)
poseía una capacidad militar global inferior en relación de Estados Unidos; 2)
anteponer la mejoría de su situación económica sin sacrificar su seguridad; 3) las
reformas económicas beneficiaban al mantenimiento de un poder militar notable.
Además, la RFA se había convertido en la conexión entre la U.R.S.S. y los países
del occidente, lo que impulsó a que la primera se mostrara a favor del
acercamiento paulatino entre los dos Estados Alemanes. Sin embargo, la
desaparición de la RDA y los conflictos internos de la U.R.S.S. aceleraron la
unificación de Alemania, por lo que Gorbachov se vio obligado a aceptar los
cambios.
Después de la caída del muro de Berlín, Alemania siguió con la visión de la RFA,
siendo una influencia económica internacionalmente con una idea de poder
alejada del uso de las fuerzas armadas. Asimismo, buscaba la unidad nacional y
la integración europea, por lo que aceptó las condiciones expuestas en el Tratado
2+4. De esa forma, manteniendo un perfil no bélico, concentrándose en su
avance y en colocarse como potencia mundial, ha sabido tomar decisiones
astutas que promulgaron su situación económica, política y social actual, en
cuestión de menos de 30 años.
10
Genscher, Gorbachov y Kohl durante las negociaciones en el Cáucaso decisivas para
firma definitiva del Tratado 2 + 4.
CAÍDA DEL SOCIALISMO
El bloque socialista europeo y la U.R.S.S. se encontraron al principio de los
setenta, en una etapa aparentemente favorable para su economía. La “crisis del
petróleo”, así llamada por su elevado aumento del mismo, había dejado a la
U.R.S.S. en inmejorables condiciones, ya que ésta última era uno de los
productores de petróleo más importantes a nivel mundial.
Las reformas indispensables que necesitaba el sistema comunista, fueron
postergadas debido al enorme ingreso de divisas que se producía gracias a las
exportaciones petroleras. Al mismo tiempo, la enorme cantidad de dólares de los
países productores de petróleo del “mundo árabe”, los denominados petrodólares,
comenzaron a estar al alcance de aquellos países que lo solicitaran. Y la U.R.S.S.
no fue la excepción. A través de los organismos internacionales de crédito, el
bloque soviético ingresó a su economía cada vez más capitales y tecnología desde
Occidente, quedando, en consecuencia, fuertemente endeudado.
11
La U.R.S.S bajo la dirección
de Leónidas Brezhnev, aprovechó la crisis
circunstancial que en ese momento afectaba al sistema capitalista occidental e
incorporó a la órbita soviética a países como Vietnam, Laos, Mozambique, Angola,
Etiopía, Camboya, Yemen del Sur, Nicaragua y Afganistán.
Los cambios ocurridos en la década de los ochenta, encontraron a la U.R.S.S.
sumida en una carrera armamentística que su economía y su equipamiento
tecnológico, muy pronto no podrían soportar. En el cercano oriente, un aliado de
la U.R.S.S., Egipto, a través de su presidente Nasser, había dejado su protección
a partir del gobierno de Sadat. Este último, había buscado solucionar sus
problemas políticos y económicos con un acercamiento a los EE.UU. y hasta
firmó acuerdos con Israel.
En este período, el socialismo llegó al poder en varios países europeos como:
Mario Soares en Portugal en 1976, Felipe González en España en 1982 y Francois
Mitterrand, en Francia en 1981. Pero no por esto, el comunismo lograba
imponerse. Por el contrario, el comunismo europeo comenzó a dividirse e incluso
algunos partidos anunciaron la intención de maniobrar independientemente de
Moscú.
Con un producto interno bruto equivalente a un tercio del de los EE.UU., la
U.R.S.S., debía competir por la hegemonía como superpotencia mundial. Su
influjo militar se había extendido notablemente, además, debía competir por el
predominio nuclear y en la carrera misilística y espacial, sin contar con la ayuda
económica y militar que debía brindar a sus aliados que habían aumentado
notablemente.
Pero lo peor, era que la U.R.R.S, no solo no alcanzaba a competir con EE.UU.,
sino que tampoco cumplía con una política social repartitiva equitativa que
supuestamente debía cumplir un régimen comunista. Las diferencias entre el
trabajador común y el “gran dirigente” se profundizaban cada vez más. La
burocratización era un problema urgente para el régimen y la economía comenzó
a ocupar un lugar central en la U.R.S.S. La misma prensa soviética, aceptaba
que, el ausentismo provocaba importantes pérdidas de horas de trabajo. Las
cifras indicaban, que prácticamente la mitad de la población activa no trabajaba
durante un año. La estructura industrial soviética se había transformado
también en un inconveniente, ya que para su funcionamiento exigía cuatro veces
más energía, materias primas y acero que la de los países capitalistas.
La economía soviética, para los años ochenta, presentaba un claro signo de
reprimarización de la economía, es decir, la exportación de materias prima
superaba las ventas de productos manufacturados. En 1982, tras la muerte de
Brezhnev, sus sucesores, Yuri Andropov y Konstantin Chernenko, nada pudieron
hacer para mejorar la situación social y económica. A partir de 1985, con la
asunción de Mijail Gorbachov, como Secretario General del Partido Comunista y
presidente del Soviet Supremo, se comenzó a cambiar de rumbo. Gorbachov lanzó
12
dos reformas que dieron que hablar: la perestroika y la glasnost. La perestroika
significaba un cambio en la “reestructuración” de la economía y la sociedad
soviética, y la glasnost se comprometía a una mejora en la transparencia
informática.
A pesar de los cambios producidos en el principal Comité Ejecutivo del Partido
Comunista (Politburó), Gorbachov se proponía una modificación mayor: sacar a la
U.R.S.S de lo que él denominaba la “era del estancamiento”. Gorbachov y su
equipo diagnosticaban, que el “estancamiento” era producto del aislamiento y
apuntaban a establecer un régimen de libertades que facilitara el contacto de los
ciudadanos de la U.R.S.S con otras culturas y países del mundo. Este no era un
desafío menor, ya que no era fácil modificar, en profundidad, el régimen de vida
de los soviéticos. Una gran parte del pueblo se sentía cómodo con un sistema que
le proporcionaba una subsistencia garantizada y una seguridad social, si bien era
de niveles modestos pero seguros, una sociedad igualitaria en lo social y en lo
económico, exceptuando los privilegios de la alta regencia del partido comunista.
Si bien Gorbachov, calificaba como “era del estancamiento” a la gestión de
Brezhnev, una parte del pueblo soviético, la recordaba como un período de calma
y prosperidad. Debido a esto último, la “perestroika” no fue aceptada
automáticamente y sin resistencia.
De todas formas, la renuncia al uso de la fuerza por parte de la U.R.S.S para
reprimir ciertas resistencias y oposiciones hizo que se debilitara su dominación.
En 1989, entre Agosto y Septiembre, en Checoslovaquia y Hungría, miles de
jóvenes y profesionales comenzaron a emigrar hacia Alemania Occidental ante la
pasividad de sus respectivos gobiernos. Al poco tiempo se le sumaron a la
migración los alemanes del este, que utilizaron esa vía para escapar del régimen
comunista.
Hacia los años ochenta, en los países centrales de Occidente, había comenzado la
denominada “revolución científico-tecnológica” y el mundo se comunicaba cada
vez más y cada vez más rápido. Si la U.R.S.S y los países del bloque comunista
querían competir con Occidente, debían abandonar la centralización de las
decisiones de los dirigentes, generalmente radicados en Moscú. Para esto, debían
otorgar poder de decisión a los dirigentes regionales. Esta postura, debilitaba al
partido comunista y a sus dirigentes, acostumbrados a monopolizar el poder
político desde un centro de decisiones, a la vigilancia y a la coacción. Este intento
de amparar el sistema desde el nivel económico, produciría luego una debacle
política que finalmente hizo colapsar a la URSS.
Por ultimo en 1989, la caída del Muro de Berlín, como hecho simbólico del final
de una época, fue el comienzo de las fases finales del sistema comunista en la
U.R.S.S o lo que se llamó “el final de la era de los socialismos reales”, que siguió
por el desconocimiento del Partido Comunista como único partido representante
de la clase trabajadora, y el reemplazo de la U.R.S.S por una comunidad de
Estados Independientes a partir de 1992.
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