BREVE RESEÑA HISTÓRICA: COMIENZO DE LA EDUCACIÓN INFANTIL EN EL MUNDO Acudir a una memoria histórica es importante porque permite reconocer los antecedentes que han puesto marcas a la educación de la primera infancia, ayuda a ampliar el marco de comprensión de las situaciones que enfrenta, las apuestas que plantea y los retos que encara actualmente, y posibilita una acción que tome en cuenta cómo todo ello es resultado de un entramado social, cultural e histórico que lleva consigo construcciones y concepciones diferentes de infancia y de las maneras en que se procura su atención en la sociedad. Es con esta mirada que realizaremos este breve recorrido por la historia de la educación infantil: Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que antes del siglo XVI, el cuidado de los niños era una tarea que estaba ejercida exclusivamente por las familias, más específicamente, por las mujeres de cada grupo familiar. Uno de los aspectos que caracterizaba esta época fue la poca importancia o la desconsideración total a la educación destinada y pensada específicamente para los niños. Como en toda hecho social, esto se debía a más de una causa, dentro de estas podemos nombrar: falta de desarrollo de las ciencias relacionadas a la educación: pedagogía, didácticas, psicología, etc. y además la concepción de la niñez que se tenía: era una etapa de transición hacia la edad adulta, a la cual no se le prestaba atención pues la misma era irrelevante. En este recorrido que estamos realizado por la historia del nivel inicial no podemos dejar de nombrar, aunque sea brevemente, es el rol de los asilos y hospicios. Es innegable que los hospicios y asilos de niños, constituyen, lo que podría denominarse, el antecedente a los jardines, aunque debemos, definir su función. Estos espacios eran destinados a recibir a los niños huérfanos o que habían sido abandonados por sus padres, por presentar alguna discapacidad. Estos espacios, casi en su totalidad estaban a cargo de órdenes religiosas. Es a partir del siglo XVI / XVII que la niñez comienza a ser considerada como una etapa diferente a la adultez con necesidades específicas a atender para potenciar y cuidar su desarrollo. LA REVOLUCIÓN INDUTRIAL (segunda mitad del siglo XVIII), generó grandes transformaciones económicas, tecnológicas y también sociales. Hubo un desarrollo a pasos agigantados de la industria textil provocando que las poblaciones campesinas emigraran buscando la cercanía a las fábricas en las grandes ciudades. Fue aquí, en las fábricas de las grandes ciudades, donde se produjo una gran demanda de mano de obra lo que ocasionó la incorporación de las mujeres al mundo laboral generando un conflicto doméstico: quién se encargaba del cuidado de los niños. Es aquí donde comienzan a aparecer los centros de cuidado infantil que se encargaban de cuidar y asistir a estos niños durante la jornada laboral de sus padres. Vemos aquí que es la primera vez en la historia que los centros de cuidado infantil no estaban relacionados con la caridad de grupos religiosos. Fueron las mismas fábricas quienes abrían los centros de atención para los niños mientras sus padres cumplían jornadas laborales de hasta 16 horas diarias. De aquí hacia adelante podemos comenzar a observar la evolución del nivel. Nota: es importante que no nos apresuremos a realizar juicios de valor: decir qué buena o qué mala alguna de las situaciones aquí planteadas ya que las mismas no aparecen contextualizadas en este texto pues no es la finalidad de este escrito.