Políticas divergentes Producción Internacional Tal cual digital.com Economía | 04/08/2014 LUIS CARLOS PALACIOS La combinación de guerras y políticas ultranacionalistas afectó la producción de crudo iraní. En 1977 los persas extrajeron 6 millones de barriles al día, en 2013 solo 3,2 millones de barriles. Las exportaciones petroleras venezolanas a Estados Unidos declinaron 49% los últimos años En 1976 Irán producía 5,5 millones de barriles diarios y 6,0 millones en 1977. Después de la revolución de 1979, una combinación de guerras, nuevas políticas ultranacionalistas, inversión limitada, tasa alta de declinación natural de sus pozos, y sobre todo por las nuevas sanciones, ha sido incapaz de retornar a esos niveles. De hecho, después de las sanciones de 2011-2012, la producción petrolera de Irán cayó en forma dramática. Las sanciones impuestas por los EEUU y la UE golpearon en forma importante su producción, intentando paralizar el programa nuclear de Irán. Las sanciones se focalizaron en las exportaciones e importaciones de petróleo, prohibiendo inversiones en petróleo y gas, y cortaron el acceso de Irán de transacciones financieras. Además, también afectaron al Banco Central de Irán. En 2013 Irán produjo aproximadamente 3,2 millones de barriles diarios, de los cuales 2,7 millones de barriles diarios fueron de petróleo. La producción fue un millón de barriles menos que la del 2011, 4,2 millones de barriles diarios. En la primera mitad de 2014 se estima que la producción petrolera de Irán habría aumentado, posiblemente en 200.000 barriles diarios, como resultado de las conversaciones que conducen los EEUU e Irán. Las exportaciones de Irán en gas y petróleo tuvieron ingresos por 118 mil millones de dólares en 20112012. En el 2012-2013 (año fiscal) estas exportaciones cayeron 47%, a 63 mil millones de dólares. El año 20132014 la producción volvió a caer, esta vez 11%, a 56 mil millones de dólares. En noviembre de 2013 se estableció el acuerdo "Joint Plan of Action" entre los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU e Irán, donde Irán se comprometía a enfriar sus actividades nucleares a cambio del levantamiento parcial de las sanciones. Este periodo fue extendido y actualmente se está de nuevo en discusiones, esperando que se levanten las sanciones como comprobante de un nuevo rumbo petrolero. A pesar de todos estos problemas, Irán tiene 157 mil millones de barriles de reservas probadas, solamente por debajo de Canadá, Arabia Saudita y Venezuela. Venezuela tiene las reservas más grandes, 298 mil millones de barriles. La producción ha bajado, mientras subía el precio del petróleo, a algo menos de los 100 dólares el barril. Se produjeron 3,5 millones de barriles diarios en 1997 y actualmente se producen alrededor de 2,40 millones de barriles diarios de petróleo y otros líquidos, quedando aproximadamente 2,2 millones de producción de crudo. En 2013 Venezuela exportó a los EEUU 797.000 barriles de crudo y otros líquidos, una declinación de aproximadamente del 49% respecto a décadas anteriores. Sin embargo tiene importaciones crecientes de los EEUU, debido a la difícil situación financiera y nuestra incapacidad. Hace una década Venezuela importaba 7.000 barriles diarios de productos petroleros de los EEUU y en 2013 llegó a 84.000 barriles diarios, doce veces más. Las exportaciones petroleras a los EEUU representan una parte sustancial del comercio internacional de Venezuela, que se paga religiosamente. Las otras exportaciones se efectúan al Caribe, a Asia y parte a Europa. En 2013 Venezuela envió a China más de 260.000 barriles diarios (se paga con petróleo), la cual se tiene previsto aumentar, y a la India casi 400.000 barriles diarios. Con el Caribe hay un convenio que realmente no se cobra, el cual podría alcanzar casi 400.000 barriles. Hoy en día Venezuela está buscando desesperadamente un importante nuevo préstamo, aparentemente con negociaciones para de vender parte de Citgo por la difícil situación en que se encuentra. Irán parece orientarse hacia una apertura tibia y en la búsqueda de regularizar su mercado doméstico del petróleo. Desde el lado de las exportaciones existe un proyecto de cambio en la constitución para permitir que exista inversión extranjera directa en el petróleo. En ello estarían interesados la China, India y otros países asiáticos, los clientes fundamentales de Irán. La situación de Venezuela es de alta complejidad, por el fracaso del modelo implementado en estos quince años. Elevada inflación, amplio déficit fiscal, financiamiento monetario por el Banco Central, escasez de productos, corrupción y alta deuda son las características de nuestra economía, a lo que se agrega el deterioro de la seguridad. Estos es lo que nos ha colocado en la disyuntiva hipotética de vender parte muy importante de nuestros activos. Parece entonces que la situación entre Irán y Venezuela es, posiblemente, de políticas divergentes.