HORAS SANTAS

OREMOS A DIOS CON MARÍA DEL REFUGIO
COMPENDIO DE ORACIONES Y HORAS SANTAS
Contenido
María del Refugio Alma eucarística ............................................................... Ошибка! Закладка не определена.
María del Refugio a la Luz de la Palabra ........................................................ Ошибка! Закладка не определена.
MARIA DEL REFUGIO CONTINUADORA DEL AMOR ..................................................................................................2
EN LA EUCARISTIA.....................................................................................................................................................2
EL SILENCIO TE LLEVA A TU ORIGEN…………… ...........................................................................................................4
JESUCRISTO, PASION DE AMOR………. ......................................................................................................................7
HORA SANTA.................................................................................................. Ошибка! Закладка не определена.
HORA SANTA.................................................................................................. Ошибка! Закладка не определена.
MARÍA DEL REFUGIO Y LA EUCARISTÍA ................................................................................................................. 14
MARÍA DEL REFUGIO A LA SOMBRA DEL SAGRARIO ............................................................................................ 20
“MARÍA MADRE DE LA IGLESIA” ............................................................................................................................ 25
"Tú eres mi Hijo Amado". ...................................................................................................................................... 29
MARIA DEL REFUGIO CONTINUADORA DEL AMOR
EN LA EUCARISTIA
ALABADO SEA EL SANTISIMO SACCRAMENTO DEL ALTAR…
EN LOS CIELOS Y EN LA TIERRA Y EN TODO LUGAR
Exposición del santísimo y visita
Guía: Elevemos al Padre nuestra oración y gratitud por su gran predilección hacia esa gran Mujer que
escucho la llamada y supo responder con dedicación y Amor, AL QUE ES “EL AMOR” manifestado en la
Eucaristía. La eucaristía, es el regalo más grande que el creador pudo dar al hombre ya que es Dios mismo
que se da como alimento del alma. Agradezcamos al Señor por este infinito don.
Todas: La Eucaristía es el Sacramento de la presencia del Amigo que viene a mí para ofrecerme su sincera
amistad, su entera presencia. Es la mejor manera de encontrarme con Dios, de reencontrarme con Jesús.
Voz 1. Nuestra amada Madre fundadora siendo un gran ser humano, una gran mujer, una verdadera hija
de Dios, supo infundir en quienes a través de estos cien años, la hemos seguido, la inspiración
fundamental por ella recibida: El amor a la Divina Eucaristía.
Voz 2. Nosotras, hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento somos llamadas a ser continuadoras
del don de Dios recibido por María del Refugio Aguilar y Torres, a configurarnos con ella, porque ella se
ha configurado con Cristo desde la peculiaridad propia, dotada de la propia existencia.
GUIA: Agradezcamos a Nuestro Señor, dador de toda bondad por su infinito Amor hacia nosotras, por la
apertura y aceptación de Nuestra amada Madre fundadora al don del Espíritu Santo para fundar nuestro
Instituto.
Todas: gracias Dios de Amor
Por este hermoso carisma Eucarístico Mercedario que nos invitas a compartirlo por el mundo entero con
nuestra vida a través de nuestra misión liberadora:
Gracias Dios de Amor
Por nuestras superioras Generales que con su respuesta generosa han sabido darle vida al ideal de María
del Refugio y llevar adelante el florecimiento de su obra:
Gracias Dios de Amor
Por las hermanas que con su vida han sido esos cimientos fuertes de Nuestra Congregación enriqueciendo
Nuestro Carisma Redentor.
Gracias Dios de Amor
Por los beneficios y bendiciones que reciben todos los miembros de nuestras instituciones educativas y
cada una de nuestras familias que participan de este hermoso carisma.
Gracias Dios de Amor
Por los acontecimientos históricos suscitados en nuestro país, que dieron origen a la extensión de
Nuestra Congregación.
Gracias Dios de Amor.
Voz 1. María del Refugio oraba por el prójimo, en particular por los pecadores y por las almas
directamente vinculadas o encomendadas a ella, por la autoridad eclesiástica, sacerdotes, gobernantes
civiles, bienhechores, enfermos, desamparados y por tantas necesidades del mundo entero, es decir, que
estaba al pendiente de todo lo que sucedía a su alrededor, no estaba ajena a los acontecimientos que
ocurrían.
Esta es una invitación a la cual no debemos ignorar o dejar pasar, de esta manera estamos contribuyendo
a ser y a seguir haciendo historia, dejando huella, de la misma manera esta gran mujer.
REFLEXION PERSONAL
GUIA. Los corazones de todas las hermanas han de estar inflamados del Amor que arde en el corazón
eucarístico de Jesús, para comunicarlo a los niños y atraerlos EL.
Este era el anhelo de Nuestra amada Madre María del Refugio en las largas horas que pasaba con el
rosario en la mano, delante de Jesús Sacramentado.
¿CÓMO ES MI ORACIÓN?
¿CUÁL ES MI ANELO, MI TEMA DE CONVERSACIÓN ANTE JESUS SACRAMENTADO?
¿COMPARTO CON JESUS EUCARISTÍA MIS EXPERIENCIAS DE VIDA?
Meditación
ORACIÓN
PADRE BUENO: Aquí estamos tus hijas agradeciéndote con gran amor y admiración este magnifico regalo
que has dado al mundo y a tu Iglesia por medio de esta gran mujer que acogió tu llamada y la hizo vida
en medio de
Persecuciones, desalientos, lucho contra corriente hasta lograr su ideal de santidad: María del Refugio
Aguilar y Torres.
Envía sobre nosotros tu espíritu de Amor para que cada día cada momento encarnemos en nuestro ser a
Jesús Eucaristía y conservamos en tu Amor para que seamos más generosas y te sigamos con radicalidad
amen.
Canto: El ESPIRITU DE MI MADRE fundadora.
EL SILENCIO TE LLEVA A TU ORIGEN……………
Hna. Guía: Hermanas, no podemos ser cómplices de una forma de vida que se está llevando actual
mente en nuestra sociedad, tenemos que entregarnos nuestra propia forma de existir, de amar, de
conducirnos cada día y en cada acontecimiento que nuestro Padre nos permite vivir. Es necesario sacar
del corazón lo que no vale y dedicárselo a Jesús, como seguramente lo hacia Nuestra Madre Fundadora
en ese silencio y oración.
Exposición del Santísimo.
En María del Refugio descubrimos que es Mujer de Merced, mujer que hace vida en gesto de gracia,
que se abre a los demás por medio del silencio. Prestar silencio no es fácil. Hablar de él es un sin sentido
porque el silencio es una práctica.
Padre nuestro, Ave María, gloria
Canto: Un canto de amor
María del Refugio, se centro en el misterio principal del Evangelio: la Eucaristía, y quiso que nosotras,
sus hijas fuéramos apóstoles de la Eucaristía, llamadas a encontrar en la Adoración Eucarística la fuerza
para donar la vida evangelizando y transformando a los niños en personas plenas.
Padre nuestro, Ave María, gloria
Canto: Súplica de una Madre
Amada Madre fundadora encontramos en ti las grandes enseñanzas, nos enseñas a vivir cumpliendo la
voluntad divina, para gloria de Dios Padre y salvación de las almas.
Padre nuestro, Ave María, gloria
Canto: El espíritu de mi madre fundadora
Evangelio según San Juan 14,1-4
“No se turbe vuestro corazón. Creéis en Dios; creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas
mansiones; si no os lo habría dicho; porque voy a prepararles un lugar. Y cuando haya ido y os haya
preparado un lugar, volveré y os tomare conmigo para que donde esté yo estéis también vosotros. Y
adonde yo voy sabéis el camino.
Palabra del Señor
Meditación Personal
<<En la casa de mi Padre hay muchas mansiones…. >>. A través de toda la Biblia se puede encontrar
repetidamente esta palabra. Los significados de la palabra <<casa>> pueden ser variados, pero en
revelación se observa cómo es objeto de inmenso cariño. Es un espacio donde Dios se da a conocer. Se
ve cómo Dios mismo tiene casa. Es un ser con una casa. Nosotras mismas somos una casa. Cada una
somos una casa.
La casa es un lugar donde uno es esperado. Se es feliz cuando uno sabe que le esperan en casa. Quizás
no entre en mi casa porque no sé si me esperan.
El hombre es una casa habitada por Dios. A veces no lo sabemos y no queremos introducirnos dentro
de la casa porque incorporarse a espacios vacios da estremecimiento. Por eso nos lanzamos
frenéticamente a la acción, por eso el movimiento exterior ejerce tanto y tan poderoso atractivo. El
vacio puede asustar, angustiar. Pero cuando se deja todo y se entra en casa como lo hizo María del
Regio es cuando se sabe que alguien está en ella esperándote.
Hay que recordar que cuando se construye una casa hay que pensar en los demás. Es para los demás.
El silencio también es para los demás. No es para mí sola sino para compartir. No es un gesto de
egoísmo. Mi corazón es para Dios y para los otros. La casa la hacen los que viven en ella. Mi casa la hace
Dios y los que habitan conmigo.
¿Qué misterio es este de la casa? Cuando uno agoniza fuera siempre suplica: << ¡que me lleven a
casa!>>. Este es también mi misterio. Todo busca el retorno a su origen. Incorporarse a su principio.
Somos igual que el agua. Ella sube a las nubes. En la cubre de la sierra luce como nieve, pero luego se
deshace para buscar su origen, su fuente, su manantial…….. nosotras vamos a la casa. Echar a andar a
la casa es buscar el camino de regreso. No es bueno estar aquí como huésped. Soy casa. No es que
tenga casa. Es que soy casa. Estar en casa es estar nómada. El silencio te lleva a casa.
Siempre nos gusta oír expresiones así: <<Quiero que te sientas como si estuvieras en tu casa>>. Eso
mismo nos dice Dios en el silencio: <<Siente la paz en tu casa>>. La llave de mi casa, de mi corazón es
el silencio>>. El encanto del silencio es que nos hace vacíos, nos hace habitables. Vacios para vivir, para
compartir la vida.
Guía: María del Refugio, cuando se dispuso a dejar su vida en las manos del Padre, y al estar de rodillas
ante Jesús Sacramentado, supo que: en la meditación hay que estar atentos porque tenemos dos
grandes riesgos: fugarnos hacia arriba pensando, divagando, discurriendo, imaginando o fugarnos hacia
abajo relajándonos, durmiéndonos, evadiéndonos. Y se pierda la oportunidad de escuchar a ese Jesús
amorosa, perdemos la oportunidad de entrar en su casa para habitar con El.
Guía: Con gozo pidamos a nuestra Madre Fundadora que interceda al Padre para que nos guie en
nuestro caminar del silencio, y así encontrarnos con Jesús.
Preces:
Monición: hagamos presentes en nuestra oración el sufrimiento y la agonía de tantos hermanos que
sufren en nuestro México y en el mundo entero. Lo ponemos junto a Cristo, para que sea redimido. A
cada petición responderemos: Escúchanos, Señor Jesús
Jesús Hijo del Padre, te pedimos por el papa, los Obispos y los sacerdotes para que durante su camino
de silencio guíen al pueblo.
Todas: Escúchanos, Señor Jesús
Purifícanos Señor con tu verdad y encamina nuestros pasos por la senda del silencio, para poder
encontrarte en nuestro caminar.
Todas: Escúchanos, Señor Jesús
Señor Jesús te pedimos por las necesidades de la gente que nos rodea, especialmente de los más pobres
y desvalidos.
Todas: Escúchanos, Señor Jesús
Señor Jesús, escucha las suplicas de tus hijos que aclaman misericordia, por sus sufrimientos.
Todas: Escúchanos, Señor Jesús
Señor Jesús, te pedimos por cada una de las hermanas que formamos este Instituto religioso, para que
conserves y acrecientes nuestra fidelidad inquebrantable.
TODAS:
María Santísima, te damos infinitas gracias por habernos dado a tu Hijo Jesús como alimento de Vida y
por haber inspirado a nuestra madre fundadora que nuestro Instituto estuviera bajo tu maternal
protección.
Jesús Sacramentado, te agradecemos por estos momentos que nos permitiste estar ante Ti y
experimentar una vez más que nos amas y estás en todo momento cerca de nosotras, has que
recordemos siempre: “ Nunca una persona es tan grande y agradable a ti que cuando se postra de
rodillas ante tu presencia.
Reserva del Santísimo Sacramento
JESUCRISTO, PASION DE AMOR……….
Monición: Te adoramos ¡oh! Cristo Eucarístico, ¡oh! pan de vida, Tu que te has manifestado como el
Mesías, Hijo de siempre Virgen María, Reina de México. Te adoramos oh Jesús, que en apariencia de
Pan escondes tu naturaleza humana y Divina, y haces que ya no sea sólo un pan sino nuestro Dios, con
su Cuerpo, Sangre Alma y Divinidad. Bendito seas, oh Jesús, porque por nosotros te ofreces en los
altares, eres digno de ser alabado y bendecido por siempre. Porque tu bondad es grande y tu gloria
inmensa te cantamos llenas de fe, amor y confianza.
Exposición del Santísimo Sacramento.
Señor Sacramentado, no permitas que tu presencia en la Eucaristía resulte estéril por nuestra apatía y
desamor. Haz que cada uno de los que formamos la Nación Mexicana te amemos, te deseemos, te
recibamos, te hagamos compañía constante. Si deseaste con ardor darte a nosotros, ardientemente
también queremos estar contigo.
Padre Nuestro, Ave María; Gloria.
Somos tus hijos, Señor, Tú nos amas y queremos corresponder a tu amor. Somos miembros de esta
Nación y nos has llamado a ser Santos y tus testigos ante nuestros hermanos.
Padre Nuestro, Ave María, Gloria.
Te agradecemos, Señor, el gran regalo de Nuestra Patria, el tesoro de la fe, la alegría y la esperanza que
arraigas en nuestros corazones, el don del Amor y la invitación que nos haces de colaborar contigo en
la salvación de los hombres.
Padre Nuestro, Ave María, Gloria.
Evangelio según San Juan 21, 15-17.
Después de haber comido, dice Jesús a Simón Pedro: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos?”,
Le dice El: “Si, Señor, tú sabes que te quiero”. Le dice Jesús: “Apacienta mis corderos”. Vuelve a decirle
por segunda vez: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas?”. Le dice él: “Si, Señor, tu sabes que yo te quiero”.
Le dice Jesús: “Apacienta mis ovejas”. Le dice por tercera vez: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas?”. Se
entristeció Pedro de que le preguntase por tercera vez “¿Me quieres?”, y le dijo: “Señor, tú lo sabes
todo, tú sabes que te quiero”.
Palabra del Señor.
MEDITACION.
El apóstol San Pablo, que decía de sí mismo: “Renuncio a saber otra cosa que a Cristo Jesús” (1 Corintios
2,2) deseaba a los fieles de Éfeso: “Que Cristo habite por la fe en sus corazones, para que, arraigados y
cimentados en el amor, puedan comprender, junto con todos los creyentes, cual es la anchura y la
longitud, la altura y la profundidad del amor de Cristo; un amor que supera todo conocimiento y que
les llena de la plenitud misma de Dios ”. (Ef. 3,17-19).
Este amor es infinito, en todas sus dimensiones. Por su anchura, abarca a todos los hombres de todos
los hombres de todos los tiempos. Por su longitud se hace insondable, sin fondo, en los inacabables
siglos futuros,. Pos su altura, nos hace vernos a nosotros como hijos de Dios en el seno mismo de Dios.
Por su profundidad se hunde en la eternidad de Dios, antes de la creación del mundo...
Metidos así en Cristo, ¿en qué se convierte Cristo para nosotros como hermanas del Santísimo
Sacramento?
El se convierte en el aire que respiramos, como quería San Macario: “¡Respiren siempre a Cristo!”.
Se hace comida nuestra, sobre todo en la Eucaristía, y nos dice por San Agustín: “Yo soy el pan de los
grandes. ¡Cómeme!”.
Se hace bebida nuestra, como dice San Ambrosio: “Bebe a Cristo, porque es la vid verdadera. Bebe a
Cristo, porque es la roca que broto agua. Bebe a Cristo, porque es fuente de vida. Bebe a Cristo, porque
es la acequia que alegra la ciudad. Bebe a Cristo, porque sus entrañas manaran torrentes de agua viva.
Bebe a Cristo, y así beberás la sangre que te ha redimido”.
Se convierte en nuestro sueño místico, que no nos deja ni dormir, como expreso el poeta Beato
Raimundo Llull:”su rostro en aquella tarde tuve tan impreso en mi, que, por que no se borrara, me
empeñaba en no dormir”.
Estos grandes santos, con expresiones tan bellas, enlazan con antigua iglesia que nos dice Ignacio de
Antioquía, discípulo de los apóstoles y mártir insigne: “una sola una cosa importa, que yo me halle en
Cristo Jesús, para el verdadero vivir”.
Monición: En silencio meditemos el siguiente auto examen
Esas expresiones y ejemplos de los grandes Santos de la Iglesia han de ser un estimulo poderoso que
me obligue a amar apasionadamente a Jesucristo y a trabajar para su Gloria entre los hermanos que El
confía a mi generosidad. Mi amor a de polarizarse entre Jesucristo y el hermano que me necesita. ¿Amo
ardorosamente a Jesucristo en su Persona? En especial, ¿Lo busco en su Sagrario? Cuando trabajo con
mis hermanos, ¿Miro en ellos la persona de Jesucristo? ¿O bien la ayuda que les prestó es puramente
social, filantrópica, sin que sea yo capaz de hacerles amar al Señor que mueve toda mi actividad? ¿Trato
de meter el amor de Cristo en sus corazones?
Preces
Guía: Dios, que nos ama, sabe también lo que nos falta. Nosotros acudimos a su bondad inmensa, y le
decimos:
Todas: Te alabamos, te amamos y confiamos en ti.
Señor Jesús, rey del universo que nos has revelado el amor inmenso del Padre y nos has dado el Espíritu
Santo para amar como Dios ama; derrama el amor Divino en nuestros corazones y que transforme
nuestra vida de terrena en celestial.
Todas: Te alabamos, te amamos y confiamos en ti.
Señor Jesús que en el cielo donde eres nuestro mediador intercedes siempre por nosotros; ábrenos la
puerta de tu corazón y has que te sirvamos siempre con santidad y justicia.
Todas: Te alabamos, te amamos y confiamos en ti.
Seños Jesús que te identificas sobre todo con el pobre, el desvalido, el que sufre; derrama la paz de tu
amor sobre los hermanos que viven sin esperanza.
Todas: Te alabamos, te amamos y confiamos en ti.
Señor Jesús, cólmanos de tu gracia a los que te hemos hecho este rato de compañía, y haz que nunca
nos separemos de ti
Todas: Te alabamos, te amamos y confiamos en ti.
Señor Jesús, abre a los difuntos la puerta de la gloria, para que participen plenamente de la salvación.
Todas: Te alabamos, te amamos y confiamos en ti.
Padre nuestro…
Oración final
Señor Sacramentado, a quien tenemos siempre en la eucaristía tan cerca, tan cerca de nosotros. A
tráenos hacia ti de manera irresistible; encadénanos a tu Sagrario; y, cuando salgamos de tu presencia,
que sea ardiendo en amor a tu adorable Persona y a los hermanos que confías a nuestra generosidad.
Así sea
Gracias por el Carisma
EXPOSICIÓN DEL SANTISIMO
CANTO: “Cantemos al amor de los amores”
VISITA:
Te visito con todo el afecto de mi corazón...
Me encuentro ante ti una vez más, quiero contemplar tu presencia en la eucaristía, quiero darme
cuenta de que siempre estás tan cerca de mí, me asistes y cuidas como a cada uno de los que has
llamado en pos de ti.
Padre Nuestro, ave María y gloria.
Padre creo que me has elegido y me has invitado a ser eucaristía como tú , siendo comprensiva y
caritativa en mis comunidad en donde de muchas maneras te haces presente aunque no te vea.
Padre Nuestro, ave María y gloria.
Eucaristía: en donde somos capaces de hacer de lo cotidiano, de lo ordinario algo extraordinario
entregándonos sin medida, sin límites, compartiéndonos a los demás.
Padre Nuestro, ave María y gloria.
Soberano Señor sacramentado…
Todas: Estamos ante tu divina presencia y queremos decirte “gracias por nuestro Carisma Eucarístico
Mercedario, porque nos permites ir en este itinerario en donde muchas veces es navegar contra
corriente para anunciar tu evangelio a los hombres comenzando por nosotras mismas.
Haz Señor que con nuestra vida al servicio de los demás, la ayuda de tu gracia y la intercesión de
María de la Merced te alabemos en la misión apostólica
Canto: Hoy Señor te doy mi vida
1ª Corintios 12, 31-13, 13
Hermanos: Ambicionad los carismas mejores. Y aún os voy a mostrar un camino excepcional. Ya podría
yo hablar las lenguas de los hombres y de los ángeles; si no tengo amor, no soy más que un metal que
resuena o unos platillos que aturden. Ya podría tener el don de profecía y conocer todos los secretos y
todo el saber, podría tener fe como para mover montañas; si no tengo amor, no soy nada. Podría
repartir en limosnas todo lo que tengo y aun dejarme quemar vivo; si no tengo amor, de nada me sirve.
El amor es paciente, afable; no tiene envidia; no presume ni se engríe; no es mal educado ni egoísta;
no se irrita; no lleva cuentas del mal; no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad. Disculpa
sin límites, cree sin límites, espera sin límites, aguanta sin límites. El amor no pasa nunca. ¿El don de
profecía?, se acabará. ¿El don de lenguas?, enmudecerá. ¿El saber?, se acabará. Porque limitado es
nuestro saber y limitada es nuestra profecía; pero cuando venga lo perfecto, lo limitado se acabará.
Cuando yo era niño, hablaba como un niño, sentía como un niño, razonaba como un niño. Cuando me
hice un hombre acabé con las cosas de niño. Ahora vemos confusamente en un espejo; entonces
veremos cara a cara. Mi conocer es por ahora limitado; entonces podré conocer como Dios me conoce.
En una palabra: quedan la fe, la esperanza, el amor: estas tres. La más grande es el amor.
Palabra de Dios.
REFLEXIONEMOS
1.- ¿cuál es el significado que le doy al amor?
2.-¿Cómo le doy Gracias a Dios por mi vida, mi vocación y mi carisma?
3.-¿ Doy a conocer el amor en lo que soy y en lo que hago?
Canto: “Si el amor es ya tan grande”
JESÚS UN EJEMPLO A SEGUIR (música de fondo) Lectura participada
Canto:”Jesús estoy aquí”
Parece increíble que después de más de dos mil años sigamos recordando a Jesús y Aprendiendo de Él.... ¿qué
tiene su persona, que a través del tiempo ha perdurado? ¿Qué es lo que ha hecho que tanta gente le siga, lo
busque para perfeccionar su vida? y a diferencia de tantos hombres célebres, para que en cada generación miles
le conozcan, lo quieran imitar, y le amen?
Estrofa
La respuesta es muy sencilla, Jesús no fue cualquier hombre. Jesús es Dios y como tal siempre está presente en
nuestras vidas y en nuestros corazones a través de sus enseñanzas, a través de su PALABRA. Todo aquel que lo
conoce, queda cautivado, y enamorado.
Jesús es Dios, pero también es hombre como nosotros, y como tal, se nos muestra cercano y alcanzable. Él es
nuestro Maestro, nuestro ejemplo por excelencia para llevar una vida más plena, una vida más llena de pasión y
entrega.
Estrofa
El éxito de la vida de Jesús no estuvo en hacer grandes cosas, sino en hacer cada una de las pequeñas cosas todos
los días bien hechas, en el momento que se debía de hacer y cómo se debía realizar. Con Él no hubo grandes
protagonismos, fue a través de la sencillez y del ejemplo de su vida, como fue marcando un patrón de
comportamiento para quienes queremos aprender de Él.
Estrofa
Jesús siempre estuvo comprometido con su misión, y se complacía en cumplir la voluntad de su Padre. Su Padre
le encomendó un trabajo y Él siempre fue fiel a ello, costara lo que costara, aunque tuviera que ir en contra de
la corriente, aunque implicara renuncia y esfuerzo, aunque para realizarlo tuviera que llegar al sacrificio máximo,
a la muerte. Jesús estaba consciente de cuál era su vocación, conocía cual era su misión, y no se desvía nunca
de ella. Tenía bien trazado el plan de su vida y lo seguía.
Estrofa
REFLEXIÒN PERSONAL
Cuántas veces a nosotros nos cuesta ser fieles a nuestra misión en la vida. Cuántas veces nos comprometemos a
hacer "algo", y somos incapaces de cumplir, porque tenemos muchas cosas que hacer, porque estamos muy
cansadas, porque es mucho más divertido ir por "ahí", que hacer lo que tengo que hacer, aunque libremente me
comprometí a extender el Reino de Dios.
¿Tengo clara mi misión de vida?
¿Tengo trazado un plan y lo sigo para alcanzar mis metas?
¿Con cuanta pasión me abrazo a la vida, para cumplir con mis metas y objetivos? Con mi misión.
¿Que tanto me complazco en cumplir con la voluntad de Dios?
¿Hacia dónde voy?
Canto: “Has venido a llamarme “
TODAS: “Consagración personal al Espíritu Santo”
Monitor: Con amor presentemos a Dios nuestras suplicas y alabanzas diciendo:
EN TU VOLUNTAD SEÑOR ENCONTRAMOS NUESTRA PAZ
 Para que seamos conscientes de ser tus hijos y te alabemos a cada momento de nuestra vida.
Oremos
 Para que bendigas a todas nuestras familias y les ayudes en sus necesidades materiales y
espirituales. Oremos
 Para que con la ayuda de tu espíritu manifestemos nuestro carisma
 Eucarístico – redentor. Oremos
 Para que motivadas por tu amor en él trabajemos por la fraternidad en cada una de nuestras
comunidades. Oremos
 Para que en las adversidades tú seas nuestra fortaleza Señor. Oremos
 Para que siempre Jesús sea nuestro modelo a seguir. Oremos
Porque hemos sido llamadas por Ti a esta vocación, en acción de gracias juntas te cantamos: “PADRE
NUESTRO”
ORACIÓN FINAL
“Aquí estoy, contigo Señor. Quiero darte gracias por mi vocación, por mi familia, mi comunidad y por mi
congregación. Quiero como María continuar dando el sí a tu llamada. Dar un sí sin límite. Quiero que en mi vida
se plasme tu Plan de Salvación. Quiero dejarme moldear por tus manos. Quiero perseverar en la fidelidad con
ayuda de tu gracia. Quiero decir en cada momento de mi vida: ¡Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad! Amén”
Reservar
Canto: “Dios está aquí”
Bendito sea Dios..
Canto: “Tu fidelidad es grande”
MARÍA DEL REFUGIO Y LA EUCARISTÍA
MONITOR: ALABADO SEA EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR
TODOS: En los cielos, en la tierra y en todo lugar.
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO.
CANTEMOS AL AMOR DE LOS AMORES
Cantemos al Amor de los amores, cantemos
HONOR Y GLORIA A TÍ, REY DE LA GLORIA.
al Señor: ¡Dios está aquí! Venid, adoradores,
AMOR POR SIEMPRE A TI, DIOS DEL AMOR.
adoremos a Cristo Redentor.
Por nuestro amor oculta en el Sagrario gloria
GLORIA A CRISTO JESÚS: CIELOS Y TIERRA,
y esplendor; para nuestro bien, se queda en
BENDECID AL SEÑOR.
el santuario, esperando al justo y pecador.
PRIMER LECTOR: En esta hora de silencio y de paz, queremos acompañarte Señor. Como lo hacía María
del Refugio queremos estar contigo, hecho misterio y Sacramento; recordar y meditar que un día
prometiste quedarte para siempre con nosotros y en tu presencia Eucarística has cumplido tu promesa.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
AMAR ES ENTREGARSE
Amar es entregarse,
Olvidándose de sí,
Buscando lo que el otro,
Puede hacer feliz;
Buscando lo que al otro,
Pueda hacer feliz.
Que lindo es vivir para amar.
Que grande es tener para dar.
Dar alegría, felicidad,
Darse uno mismo, eso es amar.
Dar alegría, felicidad,
Darse uno mismo, eso es amar.
Si amas como a ti mismo
Y te entregas a los demás,
Verás que no hay egoísmo
Que no puedas superar,
Verás que no hay egoísmo
Que no puedas superar.
SEGUNDO LECTOR: En estos momentos en los que evocamos tu presencia Sacramental en medio de
nosotros, renovamos nuestro espíritu Eucarístico y queremos fortalecer nuestro amor hacia ti; A
ejemplo de Nuestra Amada Madre Fundadora y sentir ese fuego purificador que invada todo nuestro
ser. (Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
Una espiga dorada por el sol,
el racimo que corta el viñador,
Se convierte ahora en pan y vino de
amor, en el cuerpo y la sangre del
Señor.
UNA ESPIGA
Compartimos la misma comunión,
somos trigo del mismo sembrador,
un molino, la vida nos tritura con dolor; Dios
nos hace Eucaristía en el amor.
Como grano que han hecho el mismo pan,
como notas que tejen un cantar,
Como gotas de agua que se funden en el mar,
los cristianos un cuerpo formarán.
En la mesa de Dios se sentarán,
como hijos su pan comulgarán.
Una misma esperanza caminando cantarán; en
la vida como hermanos se amarán.
TERCER LECTOR: Es verdad, Señor que para alabarte, necesitamos amarte con toda nuestra mente, con
todo nuestro corazón, necesitamos un corazón renovado. Hoy Señor Jesús te lo pedimos, renueva
nuestra fe, y nuestro corazón y concédenos un corazón semejante al tuyo. Para que así como María del
Refugio hizo el propósito de purificar los afectos y rechazar los amores desordenados, para ser
totalmente tuya.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
“POR LA CALZADA DE EMAUS”
Por la calzada de Emaús
Un peregrino iba conmigo,
No le conocí al caminar
Ahora si en la fracción del pan.
Qué llevas conversando,
Me dijiste, buen amigo;
Y me detuve asombrado
A la vera del camino:
¿No sabes lo que ha pasado
Ayer en Jerusalén?
De Jesús de Nazaret
A quien clavaron en cruz.
Por eso me vuelo triste
A mi aldea de Emaús.
Van tres días que se ha muerto,
Y se acaba mi esperanza;
Dicen que algunas mujeres
Al sepulcro fueron de alba;
Me dijeron que algunos otros
Hoy también allá buscaron,
Mas se acaba mi confianza;
No encontraron a Jesús.
TODOS: Soberano Señor Sacramentado,…
MONITOR: OREMOS
Por eso me vuelvo triste
A mi aldea de Emaús.
“¡ Oh tardíos corazones
Que ignoráis a los profetas!
En la ley ya se anunció
Que el Mesías padeciera,
Y, por llegar a su gloria,
Escogiera la aflicción”.
En la tarde de aquel día
Yo sentí que con Jesús
Nuestro corazón ardía
A la vista de Emaús.
Hizo señas de seguir
Más allá de nuestra aldea,
Y la luz del sol poniente
Pareció que se muriera:
Ponte a la mesa y bendice!”
Y al destello de su luz,
En la bendición del pan,
Mis ojos reconocieron
Al Amigo de Emaús.
Señor nuestro Jesucristo, que con tu Pasión, Muerte y Resurrección sellaste la nueva
alianza con tu pueblo y bajo las especies del Pan y del Vino te quedaste en medio de
nosotros; concede a cuantos reconocemos tu presencia real y verdadera en la Eucaristía,
saber descubrir tu presencia en nuestras comunidades, familias, Iglesia; así como María
del Refugio lo creía y lo difundía en todo momento, para fomentar y cultivar almas
eucarísticas que te adorasen. Tú que vives y reinas con Dios Padre en la unidad del Espíritu
Santo y eres Dios por los siglos de los siglos.
TODOS: AMÉN.
MONITOR: EN CADA PAUSA CANTAMOS LA ANTÍFONA
SALMO 5
¿CÓMO PAGARÉ AL SEÑOR TODO EL BIEN QUE ME HA HECHO?
Señor, mi corazón se levanta hacia ti en busca de tu mirada. Escucha las palabras de
quien siente la vida de nuevo, y estate atento, Señor; sé cercano a mi mano abierta. Da
respuesta a mi pregunta; ayúdame en mi inquietud, tú que eres mi Señor y mi Dios en quien
yo confío.
A ti abro mi ser, mis ganas de vivir, mi despertar: de mañana en tus manos pongo
mis miedos y mis ilusiones; en tus ojos pongo la pureza y sinceridad de mi búsqueda; de
mañana, en tu camino quiero dirigir mis pasos. Oye mi voz, Señor, tú que eres bueno y
compasivo y alienta mi vida que busca en ti luz y calor.
¿CÓMO PAGARÉ AL SEÑOR TODO EL BIEN QUE ME HA HECHO?
Mira, Señor, mi corazón de pobre, que como un gorrioncillo busca abrigo entre tus
manos; toma mi arcilla y moldéala según los proyectos que tienes en mí este día. Quiero
estar ante tus ojos y dejarme penetrar por tu mirada; delante de tus ojos, Señor, me siento
pequeño y frágil. Derrama, al comenzar la mañana, tu ternura y tu bondad para que mi
corazón se sienta fuerte y animoso.
Señor, aparta de mi camino el mal que me rodea y no dejes que en este día la
mentira se adueñe de mí; dame mansedumbre y humildad para que mi corazón, Señor, no
sea hoy violento ni haga mal a nadie. Confío en la abundancia de tu amor y camino hacia ti
firme de que me acoges en tu casa. Haz, Señor, que camine hoy en tu presencia y que tema
apartarme de ti.
¿CÓMO PAGARÉ AL SEÑOR TODO EL BIEN QUE ME HA HECHO?
Guíame, Señor, tú que eres bueno y santo; guíame hacia la luz y que camine como
hijo de la luz; guíame y allana mi camino para que sea fiel a tu ley. Que tu camino, Señor,
sea hoy la pasión de mi corazón, y que tu Espíritu Santo me ayude en cada paso.
Que mi boca, Señor, sea hoy la expresión de mi interior; que mis palabras arranquen
de lo profundo y sean verdaderas. Señor, dame un corazón limpio para que te pueda ver;
dame un corazón de pobre para que viva hoy tu Reino; dame un corazón misericordioso
para que derrame misericordia; Señor, dame un corazón lleno de paz para que sea hijo tuyo;
dame un corazón que tenga hambre y sed de justicia para que sea saciado y haga tu
voluntad; Señor, dame un corazón manso para que posea la tierra.
¿CÓMO PAGARÉ AL SEÑOR TODO EL BIEN QUE ME HA HECHO?
Que mi corazón se alegre y se regocije hoy, porque todo lo espero de ti, Señor Dios
mío. A ti me acojo, Señor, al comenzar el día: protégeme. En ti pongo mi confianza como un
niño en su madre: ayúdame. A ti abro mis proyectos y los planes de este día: acompáñame.
A ti ofrezco lo que soy y lo que yo tengo; acógelo. A ti, que eres Dios de la vida, te pido
fuerza; Anímame. Mi corazón te ama y, lleno de gozo, exulta en Ti.
Bendíceme, Señor, y guíame por el camino justo; como un gran escudo defiéndeme,
sé mi fortaleza. Que tus alas, Señor, me cobijen y guarden mientras yo voy viviendo el día
que hoy me entregas.
¿CÓMO PAGARÉ AL SEÑOR TODO EL BIEN QUE ME HA HECHO?
TE DOY GRACIAS JESÚS
TE DOY GRACIAS JESÚS
Mi amor era pequeño, pero ya lo he
TE DOY GRACIAS, JESÚS,
encontrado,
POR HABERME ENCONTRADO,
y ese pequeño amor hoy se ha agigantado.
POR HABERME SALVADO:
TE DOY GRACIAS, JESÚS. (2)
TE DOY GRACIAS, JESÚS (2)
Hoy ya sé el camino, y hacia él me dirijo:
es la senda bendita que representa el Hijo.
Hoy Jesús es mi guía: él controla mi vida,
y no ha ser terreno que mi cariño mida.
TE DOY GRACIAS, JESÚS (2)
TE DOY GRACIAS, JESÚS (2)
DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 6, 51-58
“YO SOY EL PAN VIVO QUE HA BAJADO DEL CIELO”
En aquel tiempo, dijo Jesús a los judíos: “yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que come
de este pan vivirá para siempre y el pan que yo daré, es mi carne para la vida del mundo”.
Comenzaron entonces los judíos a discutir unos con otros, diciendo: “¿cómo puede éste darnos
a comer su carene?”
Entonces Jesús les dijo: “yo les aseguro que si no comen la carne del hijo del hombre, y no beben
su sangre, no podrán tener la vida en ustedes. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna,
y yo lo resucitaré en el último día.
Mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi
sangre, permanece en mí, y yo en él. Así como el Padre, que me ha enviado, posee la vida y yo vivo por
él, así también el que me come vivirá por mí.
Este es el pan que ha bajado del cielo; no es como el maná que comieron sus padres, pues
murieron; el que come de este pan, vivirá para siempre”.
PALABRA DE DIOS
(UNOS MINUTOS DE SILENCIO PARA MEDITAR)
MONITOR: PRECES
OREMOS, HERMANOS, AL SEÑOR JESÚS, PAN DE VIDA, Y DIGAMOS LLENOS DE GOZO: Dichosos los
invitados a comer el Pan en tu Reino.
1. Cristo Jesús, huésped de nuestro banquete, que estás junto a la puerta y llamas, entra en nuestra
casa y cena con nosotros. Oremos
2. Padre que nos amas, te pedimos por toda la juventud del mundo, para que vean que en Jesús
todo es vida. Alimentándose con tu Pan de vida. Oremos
3. Cristo Jesús, que tu intercesión acompañe a nuestras familias, fortalecidas por el ejemplo de tu
Sagrada Familia, para que sean fermento de tu amor, en este nuevo caminar. Oremos
4. Cristo, Maná bajado del cielo, que haces un solo Cuerpo de cuantos participan en un mismo Pan,
aumenta la unidad y la concordia de quienes creemos en ti. Oremos
5. Cristo Jesús, Médico enviado por el Padre, que por el Pan de la Eucaristía nos das el remedio de
la inmortalidad y el origen de la Resurrección, da salud a los enfermos, libertad a los cautivos,
esperanza a los pecadores. Oremos
PIDAMOS EL PAN DEL CIELO, DICIENDO LA ORACIÓN QUE CRISTO NOS ENSEÑÓ:
Padre Nuestro que estas...
MONITOR: El pecado hiere el corazón de Cristo; nos priva de la vida divina; le arrebata el mejor de los
dones; ofende a la justicia de Dios. Pidamos al Señor su misericordia por nosotros, por todos los
miembros de esta comunidad, por todos los cristianos.
TODOS: ORACIÓN
Señor, Tú eres el Cordero de Dios, el que quita el pecado del mundo. Me siento feliz porque soy
como la oveja perdida que has cargado, que cargas ahora, con tanto amor sobre tus hombros.
Señor, soy como el hijo que se alejó del amor del Padre y que ahora siento que el Padre me
espera.
Señor, Tú eres el que nos reconcilias: ayúdanos a vivir la alegría de la salvación; envía, Señor, tu
Espíritu sobre cada uno de nosotros, arráncanos este corazón de piedra y danos un corazón de carne,
fraterno, un corazón de hijo, y haz que podamos volver a decir: “Padre, he pecado contra el cielo y contra
Ti, pero experimento ahora la alegría de tu abrazo, la bondad y la cercanía de tu paternidad.
Te lo pedimos a Ti, Oh Cristo, que nacido de María vives y reinas con el Padre y el Espíritu Santo por los
siglos de los siglos. AMEN
RESERVA DEL SANTÍSMO
BENDITO SEA DIOS
BENDITO, BENDITO, BENDITO SEA DIOS, LOS
ANGELES CANTAN Y ALABAN A DIOS.
Yo creo, Jesús mío, que estás en el altar, oculto
en la hostia te vengo a adorar. (2)
BENDITO, BENDITO, BENDITO…
Espero Jesús, mío, en tu suma bondad, poder
recibirte con fe y caridad. (2)
BENDITO, BENDITO, BENDITO…
Por el amor al hombre moriste en una cruz, y al
cáliz bajaste por nuestra salud. (2)
BENDITO, BENDITO, BENDITO…
Jesús, Rey del cielo está en el altar,
Su Cuerpo, su Sangre, nos da sin cesar. (2)
BENDITO, BENDITO, BENDITO…
Entre sus ovejas está el Buen Pastor,
En vela continua lo tiene el amor. (2)
BENDITO, BENDITO, BENDITO…
MARÍA DEL REFUGIO A LA SOMBRA DEL SAGRARIO
MONITOR: ALABADO SEA EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR
TODOS: En los cielos, en la tierra y en todo lugar.
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO.
SEÑOR PERMITE QUE TE HABLE HOY
Señor permite que te hable hoy,
Del dulce encuentro
Que me cambio, La hora feliz
En que Yo escuche,
Tus palabras de Amor.
Dime cuándo pudo suceder,
Si en la luz que el sol vierte al surgir,
O cuando el calor me hace vivir
O fue en la noche al volver.
Señor permite que te hable hoy,
Del dulce encuentro
Que me cambio, La hora feliz
En que Yo escuche,
Tus palabras de Amor.
¿Fue cuando una rosa deshojé
O en la fuente al agua que bebí;
O fue en el calor del dulce hogar,
Donde por fin te miré?
PRIMER LECTOR: Creemos, Padre Dios, que eres creador de todas las cosas y que te nos has hecho
cercano en el rostro de tu Hijo.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
Señor permite que te hable hoy,
Del dulce encuentro
Que me cambio, La hora feliz
En que Yo escuche,
Tus palabras de Amor.
No fue en las horas de ilusión,
Sino al decidir mirarte bien;
Como amigo en mi alma te encontré;
Tú me esperabas allí.
Señor permite que te hable hoy,
Del dulce encuentro
Que me cambio, La hora feliz
En que Yo escuche,
Tus palabras de Amor
SEGUNDO LECTOR: Creemos, Señor Jesús, que tu encarnación se prolonga en la simiente de tu
Cuerpo Eucarístico, para dar de comer a los hambrientos de luz, verdad y amor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
TERCER LECTOR: Creemos, Señor Jesús, que tu estas realmente presente en la Eucaristía, para darte
como alimento a los hambrientos de perdón, gracia y salvación.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
TODOS: Soberano Señor Sacramentado,…
CUARTO LECTOR: REFLEXIÓN:
En la vida de María del Refugio se aprecia la mano de Dios que quiso llenarla de cualidades, que la quiso
mimar, que la colmó de cualidades.
María del Refugio es consciente de que todo lo que tiene, todo lo que es, es un regalo de Dios. Ella
experimenta personalmente el sentirse amada de Dios. El Señor, el Salvador, el Santo, le ha tomado
totalmente y le ha otorgado un don especial, ser un alma eucarística.
Ella cantó su acción de gracias y expresó su alegría incontenible. Haz, Señor, que mi oración brote de la
experiencia de mi unión con la Eucaristía que ya habita en mí.
Madre María del Refugio, exultantes de gozo te pedimos intercedas por tus hijas ante Dios Padre, para
que seamos fieles y perseverantes ante Aquel que nos eligió antes de la creación del mundo para
realizar nuestra misión.
Tú creíste en su amor y obedeciste su Palabra. El hijo de Dios te quiso como esposa suya, al hacerse
pequeño en la Eucaristía para salvar a la humanidad.
Tú lo acogiste con solícita obediencia y corazón infinito.
El Espíritu Santo transformo tu corazón y lo fortaleció para que fueras dócil a su designio de amor.
Te confía su Iglesia, que ya no lo reconoce y se pierde envuelta en las cautividades del mundo actual.
Tú, que en la tierra cumpliste la misión de ganar almas eucarísticas y ayudarlos en su peregrinación de
fe, conforta a tus hijas en las dificultades y en las pruebas; y haz que seamos en el mundo cada vez más
signos e instrumentos de la unión íntima con Dios y de la unidad de todo el género humano que brota
de la Eucaristía, para ser un solo cuerpo.
A ti, Madre de Merced, redentora de cautivos te encomendamos llenos de confianza la humanidad
entera con sus temores y esperanzas. No permitas que le falte la luz de la verdadera sabiduría, guíala
en la búsqueda de la libertad y de la justicia. Para que llegue el Reino de Dios y que todos formemos un
día, el pueblo de la nueva y eterna Alianza, sellada en la sangre del Cordero de Cristo Redentor.
Dirige nuestros pasos por el camino de la Paz, haz que todos encontremos a Cristo, camino, verdad y
vida.
Sostén ¡Oh, Madre Virgen María de Merced!, nuestro caminar y alcánzanos la gracia de la salvación
eterna. ¡Oh, Clementísima!, ¡Oh, Piadosa!, ¡Oh, Dulce Madre de Dios y MADRE NUESTRA!
(UNOS MINUTOS DE SILENCIO PARA MEDITAR)
MI ALMA GLORIFICA A DIOS
Mi alma glorifica a Dios mi Salvador,
mi espíritu se goza en su salvación.
Ha visto la bajeza de su esclava fiel,
por eso bendecida por siempre seré.
SEÑOR, SEÑOR.
GRANDE ERES, SEÑOR. (2)
Del trono a los soberbios hace descender,
y eleva a los humildes con su gran poder
a los hambrientos sacia de celeste bien, al
poderoso y rico deja sin sostén.
SEÑOR, SEÑOR GRANDE ERES, SEÑOR. (2)
SEÑOR, SEÑOR.
GRANDE ERES, SEÑOR. (2)
En su misericordia acogió a Israel, según lo
prometido al Padre de la fe.
Al Padre sea la gloria, al Hijo el poder,
al Amor infinito, la alabanza. Amén.
SEÑOR, SEÑOR GRANDE ERES, SEÑOR. (2)
SEGUNDO LECTOR:
LECTURA DE LA CARTA DEL APÓSTOL SAN PABLO A LOS EFESIOS 5, 8-14
UNIDOS AL SEÑOR, SOMOS LUZ
HERMANOS: en otro tiempo ustedes fueron tinieblas, pero ahora, unidos al Señor, son luz. Vivan, por
lo tanto, como hijos de la luz. Los frutos de la luz son la bondad, la santidad y la verdad. Busquen lo que
es agradable al Señor y no tomen parte en las obras estériles de quienes son tinieblas. Al contrario,
repruébenlas abiertamente, porque, si bien las cosas que ellos hacen en secreto dan bochorno aun
mencionarlas, al ser reprobadas abiertamente todo queda en claro, porque todo lo que es iluminado
por la luz se convierte en luz.
Por eso se dice: “despierta tú que duermes; levántate de entre los muertos y Cristo será tu luz”
Palabra de Dios.
(UNOS MINUTOS DE SILENCIO PARA MEDITAR)
TERCER LECTOR: PETICIONES A LA SANTÍSIMA VIRGEN:
SANTA MARÍA DEL AMOR
Regálanos el don del amor que renueve todo nuestro ser, para ser almas eucarísticas que iluminen.
SANTA MARÍA DE LA ENTREGA
Tú, que no esperaste nada sino la donación de ti misma, ayúdanos a vivir la entrega apostólica siendo
testigos creyentes de la Palabra del Señor.
SANTA MARÍA, ALMA EN CONTACTO CON DIOS
Concédenos el don de la atención a la llamada y la atención a la escucha de la Palabra y la respuesta
para ser luz del mundo.
SANTA MARÍA LLENA DE GRACIA
Ruega por nosotros porque necesitamos gracia, y siempre estamos en peligro de perderla de renunciar
a la belleza de la fidelidad y perseverancia al servicio de nuestro Dios.
SANTA MARÍA, ARCA DEL SEÑOR
Concédenos la gracia de sentir la presencia consoladora de nuestro amado Señor en los momentos
duros de soledad, de prueba, de incomprensión.
SANTA MARÍA DE LAS HORAS DIFÍCILES
En los momentos grises, haznos oír tu clara voz, llena de esperanza: “El Señor está contigo”. Está con
nosotros partiendo el Pan en la misma mesa. Compartiendo mi gozo y mí llanto. Que está conviviendo
y recogiendo mi existencia de cada instante lleno de luz o de soledad.
SANTA MARÍA DE LAS COMUNIDADES RELIGIOSAS
Ayúdanos a servirte, como María del Refugio, que también le dio un si total a Nuestro
Señor, haznos ser dignas hijas de tal Madre.
SANTA MARÍA DE MIS GUSTOS
Dame comprender el valor de la mortificación del corazón. Que sepa renunciar a los caprichos, para
ofrecerlos por las almas que se pierden, danos la fortaleza para vencer toda adversidad que se nos
presente.
SANTA MARÍA DE MI CORAZÓN
Dale un ritmo definitivo, siempre sostenido en la rectitud. Hazlo fuerte frente al sufrimiento. No me
dejes desanimarme por mis faltas, ni amargarme por lo que soñé un día y no se cumple. Dame un
corazón magnánimo donde quepan todas las preocupaciones de la Iglesia. Un corazón que guarde
siempre la verdad, como lo hacía María del Refugio sostenida por su plena confianza en el Señor de la
verdad.
SANTA MARÍA DE LA SEGURIDAD
En los momentos difíciles, danos la claridad para reconocer esa “Sabiduría” del querer de Dios.
SANTA MARÍA MADRE
Salva a tus hijos. Guarda a los que somos tuyos. Defiéndenos del mundo, la carne y el desorden de
nuestras pasiones. Danos audacia en la caridad y seguridad en la fe. Que seamos almas de temple,
protegidas a la Sombra del Sagrario.
MADRE DE NUESTRA EDUCACIÓN
Alcánzanos la fortaleza que no desanima. La esperanza sin impaciencia. La exigencia que no se
desalienta. La dureza que no fractura. La audacia que se fía de Dios. El empuje para provocar ansias de
superación. Para continuar la obra que iniciara María del Refugio Nuestra Amada Madre, de formar
almas eucarísticas.
ORACIÓN
Danos valentía fundada en Cristo. Que no seamos ligeros en nuestros criterios, ni tampoco tan
fríos que nos hagamos calculadores e inhumanos, descorazonando a las personas que piden nuestro
afecto. Abríganos con tu amor. Enséñanos a sonreír, a perdonar, a olvidar las ofensas.
Que nunca nos falte tu presencia. Que todos sintamos sobre nosotros el aliento de esa mirada
maternal. Limpia nuestros ojos manchados del lodo de este mundo y que nos impide ver la belleza de
nuestro Dios. Por Jesucristo nuestro señor. Amén
RESERVA DEL SANTÍSIMO
TU REINARÁS
Tú reinarás, este es el grito
Que ardiente exhala nuestra fe;
Tú reinarás, ¡oh, Rey bendito!;
Pues tú dijiste: reinaré.
Te prometemos nuestro amor
¡Oh, buen Jesús! Danos consuelo
En este valle de dolor.
Reine Jesús por siempre,
Reine su corazón,
En nuestra patria, en nuestro suelo
Que es de María la nación.
Reine Jesús por siempre,
Reine su corazón,
En nuestra patria, en nuestro suelo
Que es de María la nación.
Tú reinarás en este suelo
“MARÍA MADRE DE LA IGLESIA”
OFRECIMIENTO: Señora y Madre nuestra, te ofrecemos esta hora santa pidiéndote
humildemente nos ayudes a comprender la trascendencia de nuestro compromiso
bautismal y la grandeza de nuestra Consagración Religiosa, haz que podamos amar nuestra
vocación y vivir intensamente el carisma Eucarístico Mercedario que ha sido dado a la
Congregación en la cual nos llamaste para santificarnos.
Alabado sea el Santísimo Sacramento del altar…
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO
La Santísima Virgen, predestinada desde toda la eternidad como Madre de Dios juntamente
con la encarnación del Verbo, por disposición de la divina Providencia, fue en la tierra la
Madre excelsa del divino Redentor, compañera singularmente generosa entre todas las
demás criaturas y humilde esclava del Señor.( Padre Nuestro, Ave María y Gloria.).
CANTO…
Concibiendo a Cristo, lo engendra, lo alimenta, lo presenta al Padre en el templo, padece
con su Hijo cuando moría en la cruz, cooperó de forma enteramente impar a la obra del
Salvador con la obediencia, la fe, la esperanza y la ardiente caridad, con el fin de restaurar
la vida sobrenatural de las almas. Por eso es nuestra Madre en el orden de la gracia. (Padre
Nuestro, Ave María y Gloria.).
CANTO….
La redención del género humano es obra de Cristo y sólo suya. Él es el único Mediador y
Redentor. Pero Dios en su infinita sabiduría y bondad, para llevar a cabo el plan de salvación
ha querido y quiere la colaboración humana. La de María, tal como Dios la ha concebido, es
eminente e insustituible, porque quiso que de ella naciese el Redentor cuando en la
plenitud de los tiempos nos lo envió para que recibiésemos la adopción de los hijos.(Padre
Nuestro, Ave María y Gloria.).
CANTO….
SOBERANO SEÑOR SACRAMENTADO….
MONITOR: Descubramos el rostro de María que es el rostro de nuestras hermanas. Así
podremos mirar como en un espejo nuestra vida y nuestra existencia de consagradas. María
aparece como la creatura plenamente identificada con los planes de Dios; entregada en
totalidad a la voluntad divina. Toda su persona y servicio es de Dios.
SALUDO A MARÍA
“
Coro 1: Tú eres toda hermosa, oh Madre del Señor, tú eres de Dios Gloria la obra de su
amor.
Coro 2: Pureza inmaculada, espejo del Señor, ¡Oh fuente de la gracia, unida al redentor!
Coro 1: ¡Oh rosa sin espinas! Oh vaso de elección, de ti nació la vida, por ti nos vino Dios.
Coro 2: Belleza sin mancilla, encanto virginal, tú eres la alegría, la gloria del mortal.
Coro 1: Infunde en nuestro pecho la fuente de tu amor, feliz madre del verbo, custodia del
Señor.
Coro 2: Dichosa por los siglos, los pueblos te dirán tu fuiste del Dios vivo la aurora
celestial.
CANTO
(Música instrumental de fondo)
LECTOR 1: Señor, mi corazón rebosa de agradecimiento por tantos dones y bendiciones.
No bastaría el canto del corazón, de los labios, si no pusiera mi vida a tu servicio para dar
testimonio con mis acciones.
TODOS: Señor, mi corazón canta agradecido.
LECTOR 2: A ti la gratitud y la alabanza. Tú me has sacado de la nada y me has hecho tu
elegido, me has hecho feliz con tu amor y presencia.
TODOS: Señor, mi corazón canta agradecido.
LECTOR 1: No te conozco bien, no conozco ni siquiera mis necesidades, pero Tú ¡Oh
Padre!, Tú me conoces por entero. Soy incapaz de amarme a mi mismo como tú me amas.
Tú ¡Oh Señor!, me has creado con un solo corazón, para que sea para Ti, sólo para ti.
TODOS: Señor, mi corazón canta agradecido.
LECTOR 2: Me has creado a tu imagen, de un poco de arcilla y me has hecho hija tuya.
Honor, gloria y alabanza para ti, por los siglos de los siglos. Amén.
TODOS: Señor, mi corazón canta agradecido.
MONICIÓN: María es el modelo de escucha atenta de la palabra de Dios. Desde el
principio, el Evangelio nos la presenta como una creyente que tiene que meditar la
Palabra para entenderla y Ella va guardando todo en su corazón.
El corazón de María es un santuario de profundización de la Palabra de Dios. Le pedimos
nos ayude a ser creyentes fieles y aumente en todas nosotras la fidelidad al Dios que nos
llama.
“
LECTURA del Evangelio según San LC. 1, 26-40.56
REFLEXIÓN (música instrumental)
MONICIÓN: Servir no está de moda. Libertad, independencia son las grandes palabras que
escuchamos: “QUIERO SER YO”, MI PROYECTO ES LO UNICO QUE CUENTA”. Si como Ella,
escuchamos, servir es considerado como esencial. Pero es posible sólo si uno ha
reconocido al Dios que llama y al que en Jesús nos dio ejemplo. Servir se convierte así en
título de honor. María Nuestra Madre de la Merced, se proclama Ella misma “Esclava“de
Dios. Y porque es esclava de Dios se presta en servicio a los demás.
La vocación cristiana es un servicio. Es el modelo que practica Jesús y que María Santísima
asumió. El servicio del Evangelio no es trabajo para los demás, no es asalariado.
Solamente se puede servir desde perspectivas de entrega y de diálogo con el Señor.
CANTO:
EL PLACER DE SERVIR
Toda la naturaleza es un anhelo de servir. Sirve la nube, sirve el viento, sirve el surco.
Donde haya un árbol que plantar, plántalo Tú; donde haya un error que enmendar,
enmiéndalo tú; donde haya un esfuerzo que todos esquivan, acéptalo tú; sé el que apartó
la piedra del camino, el odio de los corazones y las dificultades del problema.
Existe la alegría de ser sano y la de ser justo, pero hay, sobre todo, la hermosa alegría de
servir. Que triste sería el mundo si todo en él estuviera hecho; si no hubiera en él un rosal
que plantar, una empresa que emprender.
No caigas en el error de creer que sólo se hacen méritos con los grandes trabajos; hay
pequeños servicios: arreglar una mesa, ordenar unos libros, tenderle la mano a una
hermana.
Aquél es el que critica, éste es el que destruye; SE TÚ EL QUE SIRVE. El servir no es una
faena sólo de seres inferiores. Dios que da el fruto y la luz, sirve. ¡Pudiera llamarse así: El
que sirve!
Y tiene sus ojos en nosotras, por eso nos pregunta cada día: ¿Serviste hoy? ¿A quién? ¿A
tu amigo? ¿A tus hermanas con quien convives?
MÚSICA PARA REFLEXIONAR.
PETICIONES: (CONTESTAMOS “TE ROGAMOS OYENOS”)
 Madre y Virgen María, que estuviste en los orígenes de la Iglesia naciente, continúa
indicando a los fieles el camino de la oración y de la escucha del corazón.
“
 Madre y Virgen María, que supiste cantar y reconocer las maravillas de Dios en tu
historia, haznos capaces de descubrir la presencia de Dios en los signos de los
tiempos que vivimos.
 Madre y Virgen María, que en las bodas de Caná suplicaste a tu hijo y convirtió el
agua en vino, ruega al Señor por nosotras y concédenos un corazón evangélico.
 Madre y Virgen María, que fuiste una creyente fiel y silenciosa, aumenta en nosotras
la fidelidad al Dios que nos llama.
 Madre y Virgen María, te pedimos por la familia Mercedaria y por las organizaciones
de ayuda y caridad, para que alcancen la eficacia necesaria y aporten el remedio
conveniente a los pobres, desamparados y oprimidos, contando con nuestra
colaboración generosa y activa.
 Madre y Virgen María, que todas las que estamos aquí reunidas cultivemos la actitud
de servicio y amor delicado hacia quienes conviven con nosotras.
 Madre y Virgen María, que respondiste con generosidad a tu vocación, intercede
ante tu Hijo, para que suscite jóvenes que se consagren a su servicio en el Instituto
de Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento.
Y por llamarnos hijas de Dios alabemos agradecidas a nuestro Padre con la oración que
Jesús nos enseñó. PADRE NUESTRO…
ORACION FINAL
María, Madre del amor comprometido en la entrega. Tu vida oculta se convirtió, para
los hombres, en portento de luz y pregón de la verdad; la fe se hizo tu única razón de
existir, tu fidelidad fue inconmovible como la roca.
En ti descubrimos el ejemplo a seguir, a la hora de vivir nuestro compromiso en la fe;
queremos ser sinceros pregoneros del mensaje de Dios, y proclamar con la vida la
alegría de la liberación.
Ayúdanos a ser apóstoles, cristianos convencidos, testigos fuertes de la verdad, la
justicia, y el amor liberador de nuestro Dios.
CANTO
“
"Tú eres mi Hijo Amado".
OFRECIMIENTO: Señor te ofrecemos esta hora santa pidiéndote humildemente nos
ayudes a comprender la trascendencia del amor que Padre nos tiene en nuestro
compromiso bautismal y la grandeza de nuestra consagración religiosa, haz que podamos
amar nuestra vocación y vivir intensamente el carisma Eucarístico Mercedario que ha sido
dado a la iglesia por María del Refugio en esta Congregación .
Alabado sea el Santísimo Sacramento del altar…
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO
 Llamadas a la vida somos sostenidos por la llamada constante de Dios y somos
destinados a ser signo de compasión de Dios para el mundo.
(Padre Nuestro, Ave María y Gloria.).
Canto…
 Jesús descubre su identidad. El Espíritu da testimonio de que Jesús es el ungido de
Dios, el que trae la buena noticia y la salvación. Es el Hijo amado
(Padre Nuestro, Ave María y Gloria.).
Canto…
 Jesús "pasó su vida haciendo el bien" porque Dios estaba con él.
Los bautizados estamos llamados a creer en Jesús, a nacer de Dios y a hacer el
bien a todos los hermanos
(Padre Nuestro, Ave María y Gloria.).
Canto…
TODAS
¡Gloria a ti, oh Padre, Dios!
Tú has enviado a tus siervos,
a proclamar tu palabra de amor fiel
y a llamar a tu pueblo al arrepentimiento.
A las orillas del Río Jordán,
haz suscitado a Juan el Bautista,
una voz que grita en el desierto,
enviado a toda la región del Jordán,
a preparar el camino del Señor,
a anunciar la venida de Cristo.
¡Gloria a ti, oh Cristo, Hijo de Dios!
haz venido a las aguas del Jordán
para ser bautizado por manos de Juan.
Sobre ti el Espíritu descendió como una paloma.
sobre ti se abrieron los cielos,
“
y se escuchó la voz del Padre:
"Este es mi Hijo, el Predilecto!".
Del río bendecido con tu presencia
haz partido para bautizar no sólo con el agua
sino con fuego y Espíritu Santo.
¡Gloria a ti, oh Espíritu Santo, Señor!
por tu poder la Iglesia es bautizada,
descendiendo con Cristo en la muerte
y resurgiendo junto a él a una nueva vida.
Por tu poder, nos vemos liberados del pecado
para convertirnos en hijos de Dios,
el glorioso cuerpo de Cristo.
Por tu poder, todo temor es vencido,
y es predicado el Evangelio del amor
en cada rincón de la tierra,
para la gloria de Dios,
el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo,
a Él todo honor en todos los siglos por venir. Amén.
FALTA MUCHO
“
¡ VJE!
Una mirada llena de curiosidad a los pasos de una mujer intrépida:
María del Refugio Aguilar y Torres
Monición: Nos hemos reunido para orar a Dios y agradecer por la presencia de Nuestra Madre Fundadora María
del Refugio, que durante estos cien años nos ha acompañado como madre amorosa. Meditaremos algunos
episodios de su vida con el libro de Hebras de Luz, (Alejandro Fernández Barrajón)
EXPOSICIÓN DE SANTÍSIMO
Te visito con todo el afecto de mi corazón…
Padre nuestro, Ave María, Gloria (3)
Monición: hermanas caminemos juntas por estas líneas para descubrir a una mujer, María del Refugio, que logró
tener la cara radiante de tanto hablar con Dios en el misterio apasionante de la Eucaristía.
Cuando el amor llama de mil maneras.
1° VOZ: “Nunca entendió por qué sus padres la habían empujado a aquel matrimonio, pero sabía que así eran
las cosas en aquel tiempo y en aquellas circunstancias, y rebelarse hubiera sido empresa inútil. Había que
aceptar la voluntad de Dios -suponiendo que lo era- incluso contra la propia voluntad de uno mismo.
“
Se abría ante ella una etapa nueva en la que Dios quería escribir muchas y abundantes experiencias. Y decidió
que sería una buena mujer, una buena esposa y, si Dios lo quería, una buena madre. Miro hacia el retablo y se
quedó prendada en el sagrario que había sido tantas veces sede de su mirada, de su adoración y de su serenidad.
Una leve sonrisa volvió a su rostro como signo de la aceptación gozosa del momento que estaba viviendo. ¡Hágase,
Señor, tu voluntad! (pág. 19-20)
Voz: La felicidad, al fin y al cabo, no es un lugar, ni un estado, sino una actitud ante la vida. ¿Cómo vamos
aceptando la voluntad de Dios en nuestras vidas?
(Momentos de silencio para meditar, música de fondo)
Canto: Amor trascendente.
Cuando la vida se hace llamada irresistible y acaba siendo seducción
2°Voz: “La vocación religiosa de María del refugio se despertó de manera imparable cuando murieron sus
padres. En el año 1906 y en apenas seis meses de diferencia murieron los dos. Primero su madre con neumonía y
después su padre de un ataque de uremia. María de Refugio se quedaba sola con la única esperanza de su hija.
Las perspectivas vitales de María del refugio cambiaron sensiblemente. Perder a los padres significaba situarse
ante la vida con una responsabilidad nueva y sentirse protagonista y única artífice de la propia vida.
Una sensación de desvalimiento y de estar a la intemperie llenó el corazón de María del Refugio. Una soledad que
sólo Dios podía llenar. Sus deseos de ser religiosa se vieron acrecentados por esta nueva realidad de orfandad
que está viviendo. Esta nueva situación la llevó a interrogarse qué quería decirle Dios, qué esperaba de ella. Sin
duda algo quería decirle y tenía que ponerse a la escucha”. (pág. 71-72)
“
Voz: Las experiencias vividas, a fuerza de sufrimientos, cuando son ofrecidas nos van a crisolando en el amor
a Dios. ¿En los momentos difíciles recurro a él para pedir su gracia y aceptar su voluntad?
(Momentos de silencio para meditar, música de fondo)
Canto: El Espíritu de mi Madre fundadora.
Un carisma o una tesela encendida.
3° Voz: “El 25 de marzo de 1910, como un brote espontánea en medio del concierto de colores al que nos tiene
acostumbrados la primavera, surgió un nuevo carisma en la Iglesia, abrazando al carisma mercedario, el mismo
día en que la madre María del Refugio fundó la congregación.
Un carisma es sólo una tesela de ese mismo y colorista mosaico que es la vida consagrada en el seno de la Iglesia;
pero una tesela es imprescindible para ofrecer la belleza del conjunto y manifestar el gran regalo del Espíritu
que es la consagración.
María del Refugio descubrió desde su juventud que merecía la pena una entrega incondicional a la Eucaristía.
Y este amor se fue consolidando a medida que pasaba el tiempo hasta hacerse sólido y firme en ellas con una
pasión arrebatadora. Este espíritu eucarístico se abrazo al carisma mercedario para convertirse en pasión por
los pobres y cautivos y oferta liberadora desde la misericordia y merced de María”. (pág. 93)
Voz: Un carisma no es estático; es dinámico y se actualiza a fuerza de gritos que suben desde la injusticia hasta
el corazón de Dios, que es sobre todo Padre. ¿Qué haces con el carisma que lego nuestra madre fundadora?
(Momentos de silencio para meditar, música de fondo)
Un ocaso que preludia un nuevo amanecer.
4° Voz: “María del Refugio, con su hábito blanco mercedario, había entregado su alma a Dios. Recostada en su
cama de metal dorado, era la prueba más evidente de una vida cumplida en fidelidad y entrega a la causa de
“
Dios. Hizo de su vida un gesto de entrega total y supo abrir un camino de fidelidad que perdura en el tiempo, en
las manos y en los corazones de cada una de las Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento para siempre…
María del Refugio fue una sembradora de vida incansable y sus semillas están brotando hoy como una fuerza
inusitada allí donde habita la fidelidad y la misericordia llaga con sus manos abiertas hasta los más pobres”.
(pág. 127)
Voz: Y la historia continúa porque nunca ha dejado de caminar… en este momento agradece a Dios por la vida
de nuestra Amada Madre Fundadora y se pide su Gracia para ser siempre fieles.
(Momentos de silencio para meditar, música de fondo)
Canto: Suplica a una madre.
Oración final:
Oh, Padre Celestial dígnate conceder la gracia insigne…
Reserva del Santísimo.
“
HERMANAS MERCEDARIAS DEL SANTÌSIMO SACRAMENTO
CELEBRACION LITÚRGICA DE LA PALABRA
“HACER TODO POR AMOR NADA POR LA FUERZA SINO POR LA FUERZA DEL AMOR”
MONICIÓN: La llamada que el Señor nos hace día con día es a construir su reino, un reino donde
habite Él y no nuestros propios interese, un reino donde habite el amor y que se manifieste a través
de nuestras obras, de nuestra coherencia, unámonos con gozo y participemos con alegría de este
hermoso encuentro en presencia de Él que es la fuente misma del amor.
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO
SOLISTA: Adoremos a Jesús y que Él sea siempre el motor de nuestra vida.
TODAS: Por siempre alabémoslo.
Padre nuestro, Ave María, Gloria.
CANTO
SOLISTA: El señor se manifiesta en nuestras vidas y nosotras somos portadoras de Él.
TODAS: Señor se siempre mi guía.
Padre nuestro, Ave María, Gloria.
CANTO
SOLISTA: Ven a nuestras vidas o Dios de amor
TODAS: Y se tu nuestro guía en este diario caminar
Padre nuestro, Ave María, Gloria
CANTO
(MOMENTO DE REFLEXION PERSONAL)
INTENCIÓN: Hermanas unidas en oración elevemos nuestras manos al Señor dador de todo don y
ofrezcámonos y démosle gracias por tanto bien recibido, seamos agradecidas con quien todo nos
ha dado y quien siempre esta dispuesto a recibirnos con los brazos abiertos , y pidámosle que nos
siga a acompañando en este caminar para que a nuestro paso sigamos sembrando amor como lo
quería Nuestra amada madre María del Refugio, podamos ser ese abono para cada ser humano que
el Señor nos pone en nuestro camino.
(MOMENTOS DE ADORACIÓN)
CANTO
“
SALMO DESDE LA LEALTAD Y LA FIDELIDAD
CORO 1
Yo canto tu amor por siempre, Señor del
hombre. Proclamo tu lealtad y fidelidad, con
el corazón gozoso. Eres Dios, eres amor; feliz
el corazón que en ti cree: eres mi padre, eres
ternura; feliz el que te ama.
CORO 2
Tu has hecho alianza con el hombre, con
nosotras; tu cumples tu palabra y realizas tu
promesa; es grande saber que nunca fallas en
tus proyectos y que en ti esta la seguridad del
hombre frágil.
CORO 1
Tu llenas el corazón del hombre de paz y bien;
te conviertes para el débil en escudo que
protege, me has ungido con el oleo de tu
espíritu divino, y tu mano poderosa esta
siempre a mi lado.
CORO 2
Gracias señor, por tu amor y lealtad; gracias
porque tu vida se manifiesta en mi vida,
gracias porque tu eres mi padre, mi salvación;
gracias porque en Jesús me amas como a una
hija.
CORO 1
Yo quiero, Señor, cumplir tus ley, seguir tu
norma de vida; yo quiero, Señor, acoger tu
palabra y hacerla realidad, yo quiero ser fiel a
tus mandamientos, a tu voluntad; yo quiero,
Señor, ser feliz andando por tus caminos.
CORO 2
Gracias Señor, porque nunca olvidas la obra
de tus manos: gracias Señor, porque somos
pertenencia tuya; gracias Señor, porque en
Jesús te manifiestas fiel y leal; gracias Señor
porque en Jesús te hiciste salvación del ser
humano.
CORO 1
Cuando falle en mi camino; cuando sea débil
al dar mis pasos, ten piedad conmigo, Señor y
fortaléceme con tu espíritu de amor. Cuando
quiera volverme a tras para romper tu alianza,
ilumina mi ceguera y fortalece mi corazón
joven.
CORO 2
Que tu amor sea mi aliento y el estimulo de
mi vida, que tu amor sea quien despierte en
mi corazón amor sincero, aunque flaquee en
el amor que te tengo, sígueme amando, Señor
y devuélveme el calor de mi primer amor.
EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 14-1-4; 17,24-25,26
Jesús, camino hacia el Padre
"No se inquieten. Crean en Dios y crean también en mí. En la Casa de mi Padre hay muchas
habitaciones; si no fuera así, se lo habría dicho a ustedes. Yo voy a prepararles un lugar.
Y cuando haya ido y les haya preparado un lugar, volveré otra vez para llevarlos conmigo,
a fin de que donde yo esté, estén también ustedes. Ya conocen el camino del lugar adonde voy"
Padre, quiero que los que tú me diste estén conmigo donde yo esté, para que contemplen la gloria
que me has dado, porque ya me amabas antes de la creación del mundo. Padre justo, el mundo no
te ha conocido, pero yo te conocí, y ellos reconocieron que tú me enviaste. Les di a conocer tu
Nombre, y se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que tú me amaste esté en ellos, y
yo también esté en ellos".
Palabra del señor.
REFLEXIÓN PERSONAL ANTE JESÚS EUCARISTÍA
CANTO
“
REFLEXIÓN (música de fondo)
El amor sea sin fingimiento, aborreciendo lo malo y adhiriéndoos a lo bueno: amándonos los unos
a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndonos los unos a los otros.
Romanos 12-9
TODAS
Señor Jesucristo, Redentor del género humano, nos dirigimos a tu Sacratísimo Corazón con
humildad y confianza, con reverencia y esperanza, con profundo deseo de darte gloria, honor y
alabanza.
Señor Jesucristo, Salvador del mundo, te damos las gracias por todo lo que eres y todo lo que haces.
Señor Jesucristo, Hijo de Dios Vivo, te alabamos por el amor que has revelado a través de Tu Sagrado
Corazón, que fue traspasado por nosotros y ha llegado a ser fuente de nuestra alegría, manantial de
nuestra vida eterna.
Reunidos juntos en Tu nombre, que está por encima de todo nombre, nos consagramos a tu
Sacratísimo Corazón, en el cual habita la plenitud de la verdad y la caridad.
Señor Jesucristo, Rey de Amor y Príncipe de la Paz, reina en nuestros corazones y en nuestras
comunidades. Vence todos los poderes del maligno y llévanos a participar en tu gloria. Amen
PRECES
Monición: Hermanas dispuestas a ser testigo fiel de ese Dios de amor en cualquier momento
roguemos la intercesión de María Santísima y como hijas fieles de María del Refugio acerquémonos
a Dios diciéndole:
“Señor mira a esta tu grey reunida y escúchanos”
 Oremos por el Santo Padre N... y por nuestro Obispo N... que sean siempre fieles
instrumentos del Señor para que cada día sepan congregar y llevar a buen término lo que
Dios les ha confiado. Oremos.
 Pidamos a Dios por nuestro Instituto para que sea el quien lo guie y lo lleve a buen término
esta obra de María del Refugio. Oremos
 Oremos unas por otras, como verdadera familia para que el Señor nos conceda la
coherencia en nuestro diario caminar, y lleguemos a formar esa familia que nuestra Madre
fundadora anhelo desde un principio donde lo que en ella se viva y se trasmita sea el amor
a Jesús sacramentado a través del testimonio fiel de cada una de sus hijas. Oremos
 Te pedimos por nuestra comunidad para que cada día responda con calidad y eficiencia a
los retos actuales mediante una educación basada en el amor a Jesús eucaristía. Oremos
 Confiados en las palabras de Jesús “yo estaré con ustedes hasta el confín de los tiempos”
decimos juntos. Padre nuestro...
ORACION FINAL
“
Señor que viste en María del Refugio un medio para llevar a Jesús Eucaristía a los confines de la
tierra, permíteme seguir su ejemplo y poder así gozar yo también de los bienes que tienes
preparados para los que te siguen con generosidad de Espíritu.
Por Jesucristo nuestro Señor.
RESERVA DEL SANTÍSIMO
“
1. HERMANAS MERCEDARIAS DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO
2. CELEBRACIÓN LITÚRGICA DE LA PALABRA
3. “HE VENIDO A TRAER FUEGO A LA TIERRA Y CUANTO DESEARIA QUE YA ESTUVIERA
ARDIENDO”
4. MONICIÓN: Nuestra Madre fundadora guiada por el espíritu Santo, se dejo penetrar por
ese amor a la Eucaristía. Y fue su gran deseo que la niñez y juventud amaran ese gran regalo,
esa presencia real de Jesús.
5. EXPOSIÓN DEL SANTÍSIMO
6. MONICIÓN: Hermanas ofrezcamos este momento de adoración por aquellas persona
cautivas, sigamos el ejemplo de María del Refugio y como ella seamos ese Sagrario viviente
para todos aquellos que lo necesitan e incendiemos los corazones como ella lo deseo.
7. Música de fondo
8. Salmo a la Eucaristía ( meditado)
9.
10.
11.
Te amo, Señor, por tu Eucaristía, por el gran don de Ti mismo.
12. Cuando no tenías nada más que ofrecer nos dejaste tu cuerpo para amarnos hasta el fin, con
una prueba de amor abrumadora, que hace temblar nuestro corazón de amor, de gratitud y de
respeto.
Nos dejaste tu último recuerdo palpitante y caliente, a través de los siglos, para que
recordáramos aquella noche en que prometiste quedarte en los altares hasta el fin de los
tiempos, insensible al dolor y a la soledad en tantos sagrarios.
13. Sin más gozo que ser el eterno adorador inmolado sobre el blanco mantel; sin más consuelo
que saber que eras el compañero de tus elegidos, que harías más breve su dolor desde tu puesto
vigilante, amoroso.
14. Porque conociste la soledad que iban a sentir los que siguieran tus consejos contrarios a las
normas del mundo, bajaste a nuestras vidas para hacer perfumada, fecunda nuestra soledad.
15. Desde entonces, Señor, tu carne engendra vírgenes y tu sangre mártires.
16. Gracias por querer prolongar tu Evangelio desde el fondo del tabernáculo; se Evangelio íntimo
que enseñas a las almas cuando te descubren su intimidad.
17. ¡Qué pobre serían nuestras vidas sin tu compañía!
18. Nuestro Padre, nuestro Hermano, quieto rincón junto al que descansamos al final del vértigo
de la jornada.
19. CANTO
“
20. EVANGELIO (Lc. 9,51-56)
21. El paso de Jesús por Samaría
22. Cuando estaba por cumplirse el tiempo de su elevación al cielo, Jesús se encaminó
decididamente hacia Jerusalén y envió mensajeros delante de él. Ellos partieron y entraron en
un pueblo de Samaría para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron porque se dirigía a
Jerusalén. Cuando sus discípulos Santiago y Juan vieron esto, le dijeron: "Señor, ¿quieres que
mandemos caer fuego del cielo para consumirlos?" Pero él se dio vuelta y los reprendió. Y se
fueron a otro pueblo.
23. Palabra del Señor
24. MOMENTOS DE REFLEXIÓN
25. CANTO
26. LA DICHA DE VIVIR
27. BAJO LA SOMBRA DEL DIOS-AMOR:
28.
(Salmo 91 (90)) a dos coros
29. MONICIÓN: EL salmo que vamos a considerar en este artículo es una de las plegarias que invitan
a la confianza íntima y total en Dios. Nosotros lo hemos titulado "La dicha de vivir bajo la
sombra del Dios-Amor". Cualquiera de estos títulos pone de relieve el tono fundamental de este
salmo que la Iglesia pone en boca de los fieles en la oración de Completas del domingo, es decir,
al momento de retirarse al descanso tras haber vivido el Día del Señor.
30. CORO 1: Tú que habitas al amparo del Altísimo, que vives a la sombra del Omnipotente,
a. di al Señor: "Refugio mío, alcázar mío, Dios mío, confío en Ti".
31. CORO 2: Él te librará de la red del cazador, de la peste funesta.
Te cubrirá con sus plumas, bajo sus alas te refugiarás:
Su verdad es escudo y armadura.
32. CORO 1. No temerás el espanto nocturno, ni la flecha que vuela de día,
ni la peste que se desliza en las tinieblas, ni la epidemia que devasta a mediodía.
Caerán a tu izquierda mil, diez mil a tu derecha;
a ti no te alcanzará.
33. CORO 2: Nada más mirar con tus ojos, verás la paga de los malvados,
porque hiciste del Señor tu refugio, tomaste al Altísimo por defensa.
o se acercará la desgracia, ni la plaga llegará hasta tu tienda, porque a sus ángeles ha
dado
a. órdenes para que te guarden en tus caminos;
te llevará en sus palmas,
para que tu pie no tropiece en la piedra;
caminarás sobre áspides y víboras, pisotearás leones y dragones.
34. CORO 1: "Se puso junto a mí: lo libraré;
lo protegeré porque conoce mi nombre,
a. me invocará y lo escucharé. Con él estaré en la tribulación, lo defenderé, lo glorificaré,
lo saciaré de largos días
y le haré ver mi salvación".
“
35. MOMENTO DE SILENCIO
36.
PARTICIPADO
GRACIAS SEÑOR, POR LA EUCARISTÍA...
37. Gracias Señor, porque en la última cena partiste tu pan y vino en infinitos trozos, para saciar
nuestra hambre y nuestra sed.
38. Gracias Señor, porque en el pan y el vino nos entregas tu vida y nos llenas de tu presencia.
39.
40.
41.
42.
Gracias Señor, porque nos amaste hasta el final, hasta el extremo que se puede amar: morir por
otro, dar la vida por otro.
Gracias Señor, porque quisiste celebrar tu entrega, en torno a una mesa con tus amigos, para
que fuesen una comunidad de amor
Gracias Señor, porque en la Eucaristía nos haces UNO contigo, nos unes a tu vida, en la medida
en que estamos dispuestos a entregar la nuestra...
Gracias, Señor, porque todo el día puede ser una preparación para celebrar y compartir la
Eucaristía... Gracias, Señor, porque todos los días puedo volver a empezar..., y continuar mi
camino de amor con mis hermanos, y mi camino de transformación en ti...
GRACIAS, SEÑOR!!!!!!!
43. PRECES
44. MONICIÓN: Hermanas todo lo que hagamos es poco para agradecer a nuestro buen Jesús el
haber querido quedarse con nosotros hasta la consumación del los siglos. Por ello digamos.
45. “Ven Jesús y escucha nuestras suplicas”
46. Te pedimos Señor por el Santo Padre N... para que sea tu espíritu Santo quien lo ilumine en su
diario caminar.
47. Por esta familia eucarística a la cual tu has querido que se mantenga, ayudamos par que cada
día podamos llevar este carisma y este mensaje a las personas que mas lo necesiten
48. También ponemos en tus manos a morosas de padre a nuestra Patria para que la sigas
protegiendo de los malos gobernantes de el mal camino y que los que nos rigen sean sensibles
a las necesidades de sus habitantes.
49. Por nuestra amada Madre fundadora para que un día nos permitas tenerla en los altares
50. Por cada una de nuestras comunidades para que sigamos siendo esa luz que en la actualidad se
necesitan para incendiar los corazones de quienes nos rodean y llevar el amor de Jesús
Eucaristía a todos lo rincones del mundo.
51. Se pueden añadir intenciones.
52. Oración final: te damos gracias señor porque has permitido que en María del refugio se fundara
esta parte de tu iglesia te pedimos como hijas suyas que nos ayudes a continuar extendiendo
esta obra redentora a la cual tu la inspiraste y permitir un día alzar nuestras manos como
ofrenda hacia a ti. Por Jesucristo nuestro Señor.
53. RESERVA DEL SANTÍSIMO
“
“
¡V.J.E!
HERMANAS MERCEDARIAS DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO
“CAMINAR CON JESÚS ES COMPARTIR
OFRECIMIENTO: Caminemos con Jesús. Para reconocerlo cuando se nos acerca
en nuestro camino, debemos estar en sintonía con El, sobre todo a través de la
oración. Pero, además, hay que recibirlo con frecuencia en la Sagrada Eucaristía
como lo hacia Nuestra Madre Fundadora María del Refugio.
Alabado…
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO.
Canto: Al Dios escondido
Al Dios escondido,
venid, adoremos, oculto en los signos
de este sacramento (bis)
Cristo, pan de vida,
vivo y verdadero nacido del Padre,
bajado del cielo estas con nosotros,
aunque no te vemos.
Por amor te hiciste,
Cristo hermano nuestro,
nos diste la vida, pastor y cordero de
los peregrinos, fuerza y alimento.
La pascua de Cristo
memorial se ha hecho
del amor más grande,
el vivo recuerdo es Cristo glorioso,
como está en el cielo.
Venid al banquete,
todos los hambrientos
venid a la fuente,
los que estáis sedientos
venid a la fiesta, de cerca y de lejos
Monitor: “Hijas mías, la oración sea siempre nuestra arma contra el demonio”
Padre nuestro… Ave María… Gloria…
Canto: En momentos así
En momentos así, levanto mi voz,
levanto mi canto a Cristo,
en momentos así, levanto mi ser,
levanto mis manos a El. Cuanto te
amo Dios, cuanto te amo Dios,
cuanto te amo, Dios de amor.
En momentos así, escucho tu voz,
“
escucho palabras de vida, en
momentos así, escucho tu voz,
escucho palabras de amor.
Monitor: “El corazón de la religiosa debe estar siempre limpio de todo rencor,
orgullo o vanidad porque es la morada de Dios”.
Padre nuestro… Ave María…Gloria…
Canto: Salmo de la montaña
Es para ti, señor mío,
esta canción de alma Joven,
no sabia que fuera así
de hermoso cantar para ti
como gozo al sentirte Padre bueno,
que bien sabes cuanto te necesito,
tanto yo como todos tus hijos.
Y cuando estoy arriba en la montaña
cansado de haber caminado,
cuando contemplo la belleza de lo
creado, como gozo al sentirte Señor
mío.
Canta el cielo, canto yo,
canta el agua canta el viento,
y al cantar con él yo
siento la alegría de vivir (2)
Cuando la lluvia, la tormenta viene
encima con truenos y
con luces deslumbrantes
que me recuerdan tu poder
de Padre amante como
gozo al sentirte Señor mío.
Quiero decirte con la fuerza
de mi alma con la vida que es de ti,
y que me ha dado con la natura
que Dios mío has creado gracias,
gracias por siempre Señor mío.
Monitor: “A nuestro Señor no le gustan los corazones partidos, hay que dárselo
todo entero”.
Padre nuestro… Ave María… Gloria…
Canto: .Entraré
Entraré, entraré, entraré
a su presencia en libertad
por su amor, el Espíritu me lleva
al trono de la gracia para
adorar cara a cara
“
si al Dios vivo,
adorar libre soy,
libre soy, para entrar. (Bis)
Soberano Señor Sacramentado…
Evangelio Lc. 24, 13-35
Ese mismo día, dos de los discípulos iban a un pequeño pueblo llamado Emaús,
situado a unos diez kilómetros de Jerusalén. En el camino hablaban sobre lo que
había ocurrido. Mientras conversaban y discutían, el mismo Jesús se acercó y
siguió caminando con ellos. Pero algo impedía que sus ojos lo reconocieran. Él les
dijo: "¿Qué comentaban por el camino?" Ellos se detuvieron, con el semblante triste,
y uno de ellos, llamado Cleofás, le respondió: "¡Tú eres el único forastero en
Jerusalén que ignora lo que pasó en estos días!" "¿Qué cosa?", les preguntó. Ellos
respondieron: "Lo referente a Jesús, el Nazareno, que fue un profeta poderoso en
obras y en palabras delante de Dios y de todo el pueblo y cómo nuestros sumos
sacerdotes y nuestros jefes lo entregaron para ser condenado a muerte y lo
crucificaron. Nosotros esperábamos que fuera él quien librara a Israel. Pero a todo
esto ya van tres días que sucedieron estas cosas. Es verdad que algunas mujeres
que están con nosotros nos han desconcertado: ellas fueron de madrugada al
sepulcro y, al no hallar el cuerpo de Jesús, volvieron diciendo que se les habían
aparecido unos ángeles, asegurándoles que él está vivo. Algunos de los nuestros
fueron al sepulcro y encontraron todo como las mujeres habían dicho. Pero a él no
lo vieron". Jesús les dijo: "¡Hombres duros de entendimiento, cómo les cuesta creer
todo lo que anunciaron los profetas! ¿No era necesario que el Mesías soportara
esos sufrimientos para entrar en su gloria?" Y comenzando por Moisés y
continuando con todos los Profetas, les interpretó en todas las Escrituras lo que se
refería a él. Cuando llegaron cerca del pueblo adonde iban, Jesús hizo ademán de
seguir adelante. Pero ellos le insistieron: "Quédate con nosotros, porque ya es tarde
y el día se acaba". Él entró y se quedó con ellos. Y estando a la mesa, tomó el pan
y pronunció la bendición; luego lo partió y se lo dio. Entonces los ojos de los
discípulos se abrieron y lo reconocieron, pero él había desaparecido de su vista. Y
se decían: "¿No ardía acaso nuestro corazón, mientras nos hablaba en el camino y
nos explicaba las Escrituras?" En ese mismo momento, se pusieron en camino y
regresaron a Jerusalén. Allí encontraron reunidos a los Once y a los demás que
estaban con ellos, y estos les dijeron: "Es verdad, ¡el Señor ha resucitado y se
apareció a Simón!" Ellos, por su parte, contaron lo que les había pasado en el
camino y cómo lo habían reconocido al partir el pan.
Voz 4: Escuchemos y meditemos juntas la Palabra de Dios
Voz 5: De regreso de Jerusalén, iban dos discípulos de Jesús a un pueblo llamado
Emaús, situado a unos once kilómetros de distancia. Este recorrido lo hacían
precisamente el día en que Cristo había resucitado. Y mientras iban caminando y
“
comentando todo lo que acababa de suceder en Jerusalén, Jesús resucitado se les
apareció haciéndose pasar por un viajero más. (Lc. 24, 13-35)
Jesús se hace el que no sabía nada de lo que había ocurrido en esos días. Ellos se
impresionan: “¿Serás tú el único forastero que no sabe lo que ha sucedido estos
días en Jerusalén?”. Jesús sigue haciéndose el desentendido, con lo que logra que
ellos expresen exactamente qué piensan de Jesús: “Nosotros esperábamos que él
sería el libertador de Israel, y sin embargo, han pasado ya tres días desde que estas
cosas sucedieron.” Luego le contaron que algunas mujeres de su grupo los habían
dejado “desconcertados”, pues habían ido esa madrugada al sepulcro y llegaron
contando que no habían encontrado el cuerpo y que se les habían aparecido unos
ángeles que les habían dicho que Jesús estaba vivo.
¿Por qué no pudieron reconocer a Jesús resucitado? ¿Por qué estaban
“desconcertados” ante la información dada por las mujeres que fueron al sepulcro?
Si Jesús había anunciado a sus discípulos, a sus seguidores que resucitaría al
tercer día ¿cómo, entonces, no iban a creer el cuento de las mujeres, si lo que ellas
informaron fue justamente lo que El ya había anunciado?
Había falta de fe en ellos y también apego a sus propios criterios. Ellos dicen haber
esperado un Mesías diferente a lo que Jesús fue: ellos esperaban un Mesías
“libertador de Israel”, con lo que nos muestran que no aceptaban del todo lo que
Jesús había hecho o había dejado de hacer, sino que más bien tenían su propia
idea de cómo debía actuar el Mesías.
Con razón el Señor los reprende duramente: ¡Qué insensatos son ustedes y qué
duros de corazón para creer todo lo anunciado por los profetas! Y comienza Jesús
a explicarles todos los pasajes de la Escritura que se referían a El. Y, al sentirse
ellos emocionados con estas explicaciones, le piden a Jesús que no siga de camino.
“Quédate con nosotros”, le dijeron. Jesús accede y al estar dentro sentado a la
mesa, “tomó un pan, pronunció la bendición, lo partió y se los dio”. Fue en ese
momento cuando “se les abrieron los ojos y lo reconocieron”. Al escuchar a Jesús,
su corazón se emocionaba e iban entendiendo lo que les explicaba. Y al recibir a
Cristo en la Eucaristía, pudieron reconocerlo y pudieron creer que realmente había
resucitado.
Para nosotros escuchar a Jesús, debemos buscarlo primeramente en su Palabra
contenida en la Biblia y en las lecturas de cada domingo. Y para reconocerlo cuando
se nos acerca en nuestro camino, debemos estar en sintonía con El, sobre todo a
través de la oración. Pero, además, hay que recibirlo con frecuencia en la Sagrada
Eucaristía.
En la Palabra de Dios, en la oración y en la Eucaristía tenemos las gracias
necesarias para curarnos del síndrome de Emaús. Así podremos creer sin ver,
desprendernos de nuestros propios criterios y de nuestra propia manera de ver las
cosas. Sólo así podremos reconocer al Señor cuando nos enseña su Verdad,
cuando nos muestra sus criterios, cuando nos regala con la gracia de su presencia
en nosotros y en medio de nosotros.
“
Abrimos nuestros corazones a la Palabra de Dios, cantando un himno de alabanza...
Salmo 149
¡Aleluya! Cantad al Señor un cántico nuevo, resuene su alabanza en la asamblea
de los fieles; festeje Israel a su creador, los vecinos de Sión a su Rey. Alabad su
nombre con danzas, tañendo para él panderos y cítaras; porque el Señor ama a su
pueblo y corona con la victoria a los humildes. Que los fieles celebren su gloria y
canten jubilosos desde sus lechos: en las gargantas vítores a Dios, en las manos
espadas de dos filos; para tomar venganza de los pueblos y aplicar el castigo a los
paganos, sujetando a reyes con argollas y a nobles con esposas de hierro. Ejecutar
la sentencia dictada es un honor para todos sus fieles. ¡Aleluya!
Hacemos un rato de silencio, para que la Palabra de Dios pueda anidar en nuestros
corazones...
Voz 6: Vamos a descubrir juntos lo que Dios nos quiere decir en este texto:
Recordemos la escena, ¿qué es lo que sucede? ¿Quiénes van de camino? ¿De
dónde vienen y hacia dónde van? Luego de la plática entre ellos, ¿qué actitudes
toma Jesús? ¿Cuál es el cambio operado en los discípulos, desde el principio del
relato, hasta el final? ¿Qué nueva actitud toman con respecto a su actitud inicial
¿Qué consecuencias, qué cambio de actitud en el trabajo de la comunidad o en
familia, nos genera el partir el pan, el reconocer a Jesús? ¿Hemos reconocido
nosotras a Jesús de Nazaret? (“SI " ) ¿cómo? (“NO") ¿porqué?
CELEBREMOS JUNTOS LA PALABRA DE DIOS
Monitor 2: El camino a la aldea de Emaús era un camino transitado, bajando de
Jerusalén, rumbo al mar. Dos discípulos bajaban desconsolados luego de los
sucesos de la pasión. Se da un diálogo entre los discípulos y un desconocido que
luego de acompañarles y escucharles, se pone a explicarles sobre su tristeza. Se
traba una relación de simpatía y amistad que llevará a cambios concretos. Es la
experiencia del Resucitado por Dios. El texto nos recuerda la pedagogía de Jesús:
ante todo el amor y el compartir sincero, para de ahí partir a los cambios.
Voz 6: La fe cristiana es en esencia, comunitaria, gestada alrededor de un
convencimiento común y una situación en la que varios destinos se unen optando
por el camino de Jesús. No es una opción personal tan sólo que tenga que ver nada
más que con mi salvación. El camino de Jesús es compartirlo todo, dando desde el
amor y la sinceridad con el ejemplo del que nos amó primero, en una actitud gratuita.
Material que se necesita para celebrar y dar énfasis a la Palabra de Dios: Vela, pan,
sandalias.
Monitor 3: Celebremos el gesto de Emaús:
En círculo y colocando la vela, el pan y las sandalias al medio, hacemos memoria
de algún gesto de ayuda o de apoyo que hemos recibido gratuitamente. Luego
“
pensamos en situaciones o personas concretas que necesitan nuestra ayuda
inmediata y las nombramos. Entonces, alguien va al centro y parte el pan en tantos
pedazos como personas en ese momento, cantando o recitar las estrofas
Canto: Por la calzada de Emaús"
POR LA CALZADA DE EMAUS
UN PEREGRINO IBA CONMIGO,
NO LE CONOCI AL CAMINAR:
AHORA SI EN LA FRACCIÓN DEL
PAN.
Qué llevabas conversando,
me dijiste, buen amigo;
y me detuve asombrado
a la vera del camino:
¿No sabes lo que ha pasado
ayer en Jerusalén?
De Jesús de Nazaret
a quien clavaron en cruz.
Por eso me vuelo triste
a mi aldea de Emáus.
POR LA CALZADA…
“Oh tardíos corazones
que ignoráis a los profetas!
en la ley ya se anunció
que el Mesías padeciera,
y, por llegar a su gloria,
escogiera la aflicción”.
En la tarde de aquel día
yo sentí que con Jesús
nuestro corazón ardía
a la vista de Emaús.
POR LA CALZADA…
Hizo señas de seguir
más allá de nuestra aldea,
y la luz del sol poniente
pareció que se muriera:
“Quédate, forastero:
Ponte a la mesa y bendice!”
Y al destello de su luz,
en la bendición del pan,
mis ojos reconocieron
al Amigo de Emaús.
Y para terminar decimos todas la oración final (pausadamente)
¡Oh, Tú, quien quiera que seas! Que tu alma siempre busque amar al Jesús del
Sagrario… ¡Que tengas sed de Infinito… Sed de Dios…! Ya lo había dicho el gran
San Bernardo: <<Cuando Dios ama lo único que quiere es ser amado>> Si Él ama
es para que nosotros lo amemos, sabiendo que el amor hace felices a los que se
aman entre sí… ¿Puede no ser amado Él que es el AMOR por excelencia?
Reserva…
“
¡V.J.E!
HERMANAS MERCEDARIAS DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO
ACCIÓN DE GRACIAS AL PADRE POR EL DON DE VIDA DE NUESTRA
MADRE FUNDADORA MARÍA DEL REFUGIO AGUILAR Y TORRES.
21 de Septiembre de 2010
144 aniversario.
OFRECIMIENTO: Padre Santo, te ofrecemos esta Hora Santa pidiéndote
humildemente nos ayudes a comprender la trascendencia de nuestro compromiso
bautismal y la grandeza de nuestra Consagración Religiosa, haz que podamos amar
nuestra vocación y vivir intensamente el carisma Eucarístico Mercedario que ha sido
dado a la Congregación.
Alabado…
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO.
Canto: El Señor me amo.
El Señor me amo por su gran bondad,
El Señor es bueno para mi (bis)
El Señor es ámale, él es tu Dios,
El es grande con nosotros.
Tú con tu voz cántale, El es tu Dios,
El es bueno con nosotros
El es Jesús ámale, con tú corazón,
El es joven con nosotros.
Monitor: “Jesús sacramentado sea siempre el encanto de nuestros corazones”
Padre nuestro… Ave María… Gloria…
Canto: Tú y Yo
Cuanto he querido yo amarte Jesús
como me amas Tú a mi, en todo
momento he querido Jesús que
me sonrías y me hagas muy feliz.
Tu y yo siempre adelante
hasta el final, tu y yo sin
separarnos, cada momento
pienso en ti un poco más (bis).
Un poco más.
Monitor: “El corazón de la religiosa debe estar siempre limpio de todo rencor,
orgullo o vanidad porque es la morada de Dios”.
Padre nuestro… Ave María… Gloria…
Canto: Tengo un nuevo amor
Yo tengo un nuevo amor
mi vida tiene un gozo sin igual
hay uno que me ha dicho
te amo de verdad, Jesús mi Dios,
mi gran amor mi salvador
Yo tengo un nuevo amor
jamás imaginé poderle hallar
entró en barca perdida
mi vida entera cambió Jesús mi Dios
mi gran amor, mi salvador.
Monitor: “A nuestro Señor no le gustan los corazones partidos, hay que dárselo
todo entero”.
Padre nuestro… Ave María… Gloria…
Canto: Cada vez que te recibo Señor
Cada vez que te recibo Señor
algo grande pasa en mí,
cada vez que estoy contigo mi Dios
me acerco un poco más a ti
porque en la Hostia estas, mi Jesús de verdad.
Yo estoy a un paso del cielo aquí,
estoy a un paso del cielo, ¡oh sí!
Soberano señor sacramentados…
Voz 1: Padre, dador de todo bien, te bendecimos y alabamos por haber creado a
Nuestra Madre Fundadora María del Refugio; desde pequeña mostró su gran amor
a la Eucaristía y al iniciar esta Obra, legó al Instituto cosas muy bellas y valiosas,
pero lo más preciado es su propia persona, por eso hoy te damos gracias y le
decimos:
Todas: Madrecita Fundadora hoy a tus 144 años de nacimiento, tus hijas queremos
agradecerte por el don tan grande de tu presencia, que se hace actual en cada una
de nuestras hermanas y te pedimos que presentes a Dios Trino y uno, el don de
nuestro carisma, recibido por ti. Amada Madre Fundadora encontramos en tu paso
por el mundo, grandes enseñanzas, como el vivir cumpliendo la voluntad divina,
para Gloria de Dios Padre y salvación de las almas, nos invitas a hacer de lo natural
algo sobre natural. Tu vida Madre es un mensaje de Evangelio. “Toda nuestra vida
es un proceso de maduración: maduramos en la medida en que la palabra de Dios
nos va transformando”.
Canto: Espíritu de mi Madre Fundadora”
Tu me llamas Señor a servirte
en entrega total a los hombres
de mi esperas confianza y firmeza,
un espíritu alegre que luche.
Es María del Refugio, mi madre
quien del cielo intercede ante Dios
la que inspira el anhelo de mi alma
de ser fuego y semilla de fe.
Es aquí donde tu me has llamado
porque sabes que aquí puedo ser
Eucarística Liberadora de cautivos
y libre a la vez.
Aquí estoy buen Jesús, tú lo quieres
y ahora dame tu gracia y gran fe,
para darme con celo al trabajo.
de llevar muchas almas a ti.
Y ENSEÑAR A LOS
VIVIENDO Y MORIR A MI
TAMBIÉN A LOS JÓVENES
SIN MIEDO CON MARÍA MI
DE MERCED. (Bis)
Y ENSEÑAR A LOS NIÑOS
VIVIENDO Y MORIR A MI MISMA
TAMBIEN A LOS JÓVENES DARME
SIN MIEDO CON MARIA MI MADRE
DE MERCED. (Bis)
NIÑOS
MISMA
DARME
MADRE
Voz 2: Nuestra Madre Fundadora María del Refugio se centró en el misterio
principal del Evangelio: la Eucaristía, y quiso que nosotras, sus hijas fuéramos
apóstoles del Gran misterio, llamadas a encontrar en la Adoración Eucarística la
fuerza para donar la vida evangelizando y transformando a la persona en seres
humanos plenamente eucarísticos.
Gracias porque con tu ejemplo nos invitas a ser hostia viva, tú fuerza capaz de
superar las adversidades más devastadoras, tu confianza en la Providencia y
Misericordia Divina.
Madre Nuestra, queremos al igual que tu vivir la pobreza, para saber estar al
intemperie y dejar que Cristo, nuestra riqueza, llene nuestras manos vacías; de tu
castidad para aprender a amar con un solo corazón, tu obediencia para
abandonarnos en este proyecto divino.
En María del Refugio, descubrimos que es Mujer de Merced, mujer que hace con
su vida un gesto de gracia, que se abre a los demás. “Para servir a Dios debemos
romper con todas las cadenas que nos apartan de El: la pereza, el odio, la soberbia,
el egoísmo; pues, para ser servidoras de Dios, necesitamos ser mujeres libres”.
Todas: Salmo 37
Ten confianza en Yahveh y obra el bien, vive en la tierra y crece en paz, ten tus
delicias en Yahveh, y te dará lo que pida tu corazón. Pon tu suerte en Yahveh, confía
en él, que él obrará; hará brillar como la luz tu justicia, y tu derecho igual que el
mediodía. Apártate del mal y obra el bien, tendrás para siempre una morada; porque
Yahveh ama lo que es justo y no abandona a sus amigos. Los malvados serán por
siempre exterminados, la estirpe de los impíos cercenada; La salvación de los justos
viene de Yahveh, él su refugio en tiempo de angustia; Yahveh los ayuda y los libera,
de los impíos él los libra, los salva porque a él se acogen.
Música de fondo para meditar el salmo…
Evangelio (Lc. 15, 1-32) Lucas 15, 1-32
En aquel tiempo, solían acercarse a Jesús los publicanos y los pecadores a
escucharle. Y los fariseos y los escribas murmuraban entre ellos: - «Ése acoge a
los pecadores y come con ellos.» Jesús les dijo esta parábola: - «Si uno de vosotros
tiene cien ovejas y se le pierde una, ¿no deja las noventa y nueve en el campo y va
tras la descarriada, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, se la carga
sobre los hombros, muy contento; y, al Regar a casa, reúne a los amigos y a los
vecinos para decirles: ¡Felicitadme!, he encontrado la oveja que se me había
perdido. "Os digo que así también habrá más alegría en el cielo por un solo pecador
que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse. Y si
una mujer tiene diez monedas y se le pierde una, ¿no enciende una lámpara y barre
la casa y busca con cuidado, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, reúne
a las amigas y a las vecinas para decirles: ¡Felicitadme!, he encontrado la moneda
que se me había perdido. " Os digo que la misma alegría habrá entre los ángeles
de Dios por un solo pecador que se convierta.» También les dijo: - «Un hombre tenía
dos hijos; el menor de ellos dijo a su padre: "Padre, dame la parte que me toca de
la fortuna." El padre les repartió los bienes. No muchos días después, el hijo menor,
juntando todo lo suyo, emigró a un país lejano, y allí derrochó su fortuna viviendo
perdidamente. Cuando lo había gastado todo, vino por aquella tierra un hambre
terrible, y empezó él a pasar necesidad. Fue entonces y tanto le insistió a un
habitante de aquel país que lo mandó a sus campos a guardar cerdos. Le entraban
ganas de llenarse el estómago de las algarrobas que comían los cerdos; y nadie le
daba de comer. Recapacitando entonces, se dijo: "Cuántos jornaleros de mi padre
tienen abundancia de pan, mientras yo aquí me muero de hambre. Me pondré en
camino adonde está mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti;
ya no merezco llamarme hijo tuyo: trátame como a uno de tus jornaleros." Se puso
en camino adonde estaba su padre; cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y
se conmovió; y, echando a correr, se le echó al cuello y se puso a besarlo. Su hijo
le dijo: "Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo
tuyo. " Pero el padre dijo a sus criados: "Sacad en seguida el mejor traje y vestido;
ponedle un anillo en la mano y sandalias en los pies; traed el ternero cebado y
matadlo; celebremos un banquete, porque este hijo mío estaba muerto y ha revivido;
estaba perdido, y lo hemos encontrado." Y empezaron el banquete. Su hijo mayor
estaba en el campo. Cuando al volver se acercaba a la casa, oyó la música y el
baile, y llamando a uno de los mozos, le preguntó qué pasaba. Éste le contestó: "Ha
vuelto tu hermano; y tu padre ha matado el ternero cebado, porque lo ha recobrado
con salud." Él se indignó y se negaba a entrar; pero su padre salió e intentaba
persuadirlo. Y él replicó a su padre: "Mira: en tantos años como te sirvo, sin
desobedecer nunca una orden tuya, a mí nunca me has dado un cabrito para tener
un banquete con mis amigos; y cuando ha venido ese hijo tuyo que se ha comido
tus bienes con malas mujeres, le matas el ternero cebado." El padre le dijo: "Hijo, tú
estás siempre conmigo, y todo lo mío es tuyo: deberías alegrarte, porque este
hermano tuyo estaba muerto y ha revivido; estaba perdido, y lo hemos encontrado»
Momentos de silencio para rumiar el Evangelio.
Voz 4: El Evangelio nos habla de tres parábolas de Nuestro Señor Jesucristo sobre
el perdón a los pecadores. Son parábolas que muestran gráficamente cómo es la
Misericordia Divina.
Y Nuestro Señor Jesucristo nos quiere hacer ver con esas parábolas de la oveja
perdida, la moneda perdida y del hijo perdido, cómo es el perdón y la misericordia
de Dios Padre. Son ¡tan grandes! que los hombres no somos capaces de
comprenderlas. Como no la comprendía el hermano mayor del hijo pródigo, el cual
quería justicia, no misericordia.
¡Claro! Son tan grandes el Amor y la Misericordia de Dios porque son ¡infinitas! ...
como lo son todas las cualidades de Dios. A los ojos humanos esas actitudes divinas
resultan hasta ilógicas.
El hijo mayor, que siempre estuvo en la casa, no entendía la actitud del padre. Los
seres humanos tenemos esa misma visión corta sobre las fallas de los demás que
tiene el hermano del muchacho que regresa.
Pero el Amor de Dios no tiene límites: perdona siempre. Pero sí tiene una condición:
que estemos arrepentidos; es decir, que reconozcamos nuestra culpa.
A veces el Señor nos induce y nos ayuda a reconocer nuestras faltas. Nos busca
como buscó a la oveja perdida, por montes y valles, hasta que nos encuentra y nos
regresa. A veces nos deja la cuerda bien larga como al hijo pródigo. Con ése esperó
que las circunstancias de la vida que había escogido lo hiciera ver sus errores. A
veces tiene que usar formas diferentes.
Canto: “Era un nido”
Era un nido construido con ternura
pues tu obra jamás tendrá final
porque en ella solo a Jesús se adora
nos dejaste como ejemplo tu verdad.
Recordemos Oh María del Refugio
como fue tu amor hacia Jesús
Noble y tierno como son las cosas
puras en tu vida lo seguiste hasta la
cruz.
Fue tu amor un remanso en la
tormenta, y también fue tu única
verdad, fue tu amor un ejemplo a toda
hermana, que a Jesús quiera seguir
de verdad.
La Eucaristía fue el centro de tu vida
y a María nuestra Madre de Merced
si todas juntas seguimos tú ejemplo
sentiremos nuestra vida florecer.
El deseo que tenías en la vida
era con tu ejemplo guiar
a los jóvenes, adultos y a los niños
que siguieron el camino al altar.
Fue tu amor un amor trascendente
que llegó a vivir junto a Jesús
fue tu amor un amor reverente
por seguirlo te llevó a la santidad.
Monitor: Pidamos, hermanas, al Señor que escuche nuestras plegarias y atienda a nuestras
peticiones:
Todas: Escúchanos, Señor y aumenta nuestra fe.
1.- Por la santa Iglesia de Dios, para que el Señor le conceda la paz y la unidad, la guarde de todo mal
y acreciente el número de sus hijos, roguemos al Señor.
Todas: Escúchanos, Señor y aumenta nuestra fe.
2.- Por la paz del mundo, para que cesen las rivalidades entre las naciones, renazca en el corazón de
los hombres el amor y arraigue entre todos los pueblos la mutua comprensión, roguemos al Señor.
Todas: Escúchanos, Señor y aumenta nuestra fe.
3.- Para el papa, los obispos, los presbítero, los diáconos, los religiosos, las religiosa, pidamos una
vida santa, tal como corresponde a su ministerio, y el premio abundante de su trabajo, roguemos al
Señor.
Todas: Escúchanos, Señor y aumenta nuestra fe.
4.- Para nosotras mismos y para nuestros familiares, amigos y bienhechores pidamos al Señor que
nos conserve y aumente los bienes que con tanta generosidad nos ha concedido, roguemos al Señor.
Todas: Escúchanos, Señor y aumenta nuestra fe.
5.- Para que el Señor nos conceda perseverar en la fe hasta el fin de nuestra vida y después de la
muerte nos admita en el reino de la felicidad, de la luz y de la Paz, roguemos al Señor.
Todas: Escúchanos, Señor y aumenta nuestra fe.
6.- Para todas las hermanas que integramos esta congregación de Hermanas Mercedarias del
Santísimo Sacramento, vivamos según el Evangelio y que nuestra vida sea de santidad como lo
pedía nuestra amada Madre Fundadora, roguemos al Señor.
Todas: Escúchanos, Señor y aumenta nuestra fe.
7.- Por la pronta beatificación de nuestra Madre Fundadora, y para que sus hijas seamos ejemplo
viviente de Jesús y busquemos ser Santas, roguemos al Señor.
Todas: Escúchanos, Señor y aumenta nuestra fe.
Todas: Oración final (pausadamente)
"Oh, amado Jesús. Ayúdame a esparcir Tu fragancia por donde quiera que vaya.
Inunda mi alma con Tu Espíritu y Vida. Penetra y posee todo mi ser tan completamente, que mi vida
entera sea un resplandor de la Tuya.
Brilla a través de mí y permanece tan dentro de mí, que cada alma con que me encuentre pueda sentir
Tu presencia en la mía. ¡Permite que no me vean a mí sino solamente a Jesús! Quédate conmigo y
empezaré a resplandecer como Tú, a brillar tanto que pueda ser una luz para los demás. La luz oh,
Jesús, vendrá toda de Ti, nada de ella será mía; serás Tú quien resplandezca sobre los demás a través
de mi. Brillando sobre quienes me rodean, permíteme alabarte como mas te gusta. Permíteme
predicarte sin predicar, no con palabras sino a través de mi ejemplo, a través de la fuerza atractiva, de
la influencia armoniosa de todo lo que haga, de la inefable plenitud del amor que existe en mi corazón
por ti. Amén.
Reserva…
¡V.J.E!
HORA SANTA
Guía.Recordemos amadas hermanas que un 21 de septiembre de 1866 en San Miguel
de Allende el sol brillo de una forma esplendorosa al dar gozo a la familia Aguilar Torres con la
presencia de su primogénita María del Refugio, Esto debe llevarnos a meditar la grandeza que Dios
hace con sus creaturas y como las elige con una misión muy especifica que ira forjando día a día como
lo hizo también con nuestra padre Abrahán a quien no le dijo desde el principio cual era su misión a
realizar solo le pidió salir de su tierra, y en camino le fue revelando su designio, hasta llegar el momento
de prometerle hacerlo padre de miles y millones de seres humanos,; con este Gozo en nosotros por
ser hijas de una madre como María del Refugio. Pongámonos ante la grandeza de nuestro Salvador
para adorarle y alabarle.
Exposición:
Canto: Ante ti postrados
Visita
Hermosa es la Creación, puesto que es obra de Dios, que es la Hermosura en esencia y el universo
es solo un destello de la belleza divina, un fulgor de la hermosura de Dios.
Padre Nuestro… Ave María… Gloria al Padre…
Canto: Solo Dios.
Gracias Dios porque cuando María del Refugio oía que la campana de la Parroquia anunciaba que el
Santísimo Expuesto estaba solo, sin más enviaba a los sirvientes a acompañar a Nuestro Amo y ella
misma corría al templo a visitarte.
Padre Nuestro…. Ave María… Gloria al Padre…
Canto: Gracias quiero darte por amarme.
¡Oh Misterio incomprensible! que en los caminos de las almas tu Providencia Divina guía como mejor
le place y hace de sus escogidos obras maestras, hazme adorar a Jesús Sacramentado que sigue
atrayendo almas para que te conozcan le amen y le sigan.
Padre Nuestro…. Ave María… Gloria al Padre…
Canto: Oh Convite sagrado donde el manjar es Cristo.
Momento de silencio (5 minutos)
Cuan cierto es que Nuestro Señor escribe derecho con renglones torcidos. Pues una vez que María
del Refugio pasa por sucesos tan dolorosos y trágicos debido a la muerte de su esposo. No había
cicatrizado aun la herida que en su corazón que había dejado la prematura muerte de don Ángel
cuando vino a abrirse otra muy profunda que la hizo sufrir no poco. Nuestro Señor, que quería que su
corazón fuera desprendiéndose poco a poco de los seres más amados, para tomar Él posesión de su
corazón, le arrebató en pocos días a su primogénito de apenas tres años de edad. A partir de este día
María del Refugio se dio más y más a su vida espiritual y a su unión con Nuestro Señor, sin descuidar
a su hija a quien amaba entrañablemente.
Tu Señor deparaste para tan ardua y difícil tarea a una mujer tan sencilla y temerosa de Dios que
desempeñara verdaderamente en toda la extensión de la palabra, deberes tan sagrados y de tanta
responsabilidad como lo fue la educación de su hija y vigilancia que tuvo siempre sobre ella para
librarla de los peligros espirituales y conservarle el candor y su inocencia bautismal. Como cualquier
madre que ve crecer a su hija terminar y abrir etapas de su vida así, un día tiene que sufrir el dolor
del desprendimiento pero todo por amor a su hija; María del Refugio con esa ALMA DE TEMPLE y
de carácter resuelto y decidido pensando en el porvenir de la niña, sofocó los sentimientos maternales
y siguiendo el consejo de de su sabio Director le llevo a estudiar a México, dejándola en manos de las
Teresianas, quien una vez terminada la etapa escolar la cambió al Colegio Teresiano de Morelia por
el temor de que dejándola en la capital esta perdiera su sencillez y fue allí donde estudio la carrera
de maestra, bajo el cuidado y atención de una madre amorosa, que la deja en manos de quien sabe
la guiaran por el sendero del Señor.
Mientras, la vida de nuestra madre sigue en las manos de Nuestro Señor; manos que seguían
preparándola más y más para el fin a que en sus altos designios la tenía destinada, y nuevamente la
sombra de la muerte cubre su hogar con la pérdida de sus dos seres muy amados, sus padres; siendo
la primera, su madre, dejando el vacio que en un hogar siempre deja una madre, no habían pasado
seis meses que la muerte con su inexorable guadaña había segado una víctima cuando nuevamente
le arrebataba al padre tan querido, mientras la Patria celebraba alegre fiesta de su independencia. El
dolor para Cuca fue insoportable y cada año en las fiestas de la patria recordaba tristemente que junto
con el desfile cívico pasaba también un cortejo fúnebre de ocho hermanos y familiares llevando los
despojos de su amado padre.
Con estos acontecimientos Nuestro Señor iba preparando cada vez más su ánimo y desprendiéndola
de las cosas fugases de este mundo y al mismo tiempo maduraba en su corazón la idea que ya desde
años atrás la dominaba de consagrase a Nuestro Señor en una casa religiosa idea que nació en su
alma con la lectura de las vidas de los Santos y el trato frecuente con su director. A quien el Señor
también llamó a su presencia dejando un hueco en el pueblo y especial en María del Refugio, él era
su único sostén espiritual que tenía y quedo con nave sin timón y sin brújula.
Silencio para meditar
A LA DIVINA EUCARISTIA
¡Oh Divina Eucaristía
A esa legión nacarada
Fuente de amor y consuelo,
Que con
engendrada
Níveo maná del cielo
Encanto del alama mía!
tu
vino
Entre millón y millares
es
Para que ante tus altares
Sea holocausto consumido.
Para cortejar tu realeza.
Esa lámpara, ese holocausto:
Tú eres nuestro fiel Amigo,
Es nuestra madre querida,
Para vencerse á sí mismo,
Padre y amante, Hermano,
Que por ti dio su vida,
Al Capitán del abismo
Buen Dios y Rey soberano,
Y dejó del mundo el Fausto
Y á la mundanal riqueza.
Nuestro Bienhechor y Abrigo.
Tú eres nuestro sostén
Tú, quien has encendido
En toda tribulación
Esa lámpara ardorosa;
Para apurar tantas hieles…
Que por ser tan luminosa
¡Dulce hechizo del Edén!
Entre mil la has elegido.
Junta con ella entone en el
cielo:
Tú, quien da la pureza
Sí, Dios mío la has elegido
Un himno
Eucaristía
Alimento que da fuerza
Que con María Inmaculada
María
Mi
celestial
consuelo,
Madre
eterno
Canto: “Tu me llamas Señor”
Reflexión:
Ver pasar una vida cuantas veces no deja nada a su paso, y al terminar solo se ve
un cortejo fúnebre que le acompaña, en su lapida no dice nada, en estos casos es
mejor callar, que triste es, pero cuando ves pasar a una alma que desde que nace
hasta que muere va dejando una huella, huella que es visible porque el Señor se
á
y
la
encarga de ponerla a la vista de todos en diferentes momentos de diferente forma
y con toda la claridad de su vivencia; entonces vemos en su lapida “aquí Yace un
alma que amó y se entrego hasta el extremo” Ese el paso de María del Refugio.
¿Qué te hace reflexionar su vida?, y ¿tu vida es marcada con un dolor semejante
al de ella?
Le dijo una gran Santa a Jesús experimentando en su vida la contrariedad, el dolor
“Con razón tienes tan pocos amigos, pues los tratas tan mal” Dios que ama a su
hijo no puede darle almas mediocres sino entregadas al cien por ciento, Hna. Como
vemos Jesús se preparo a su esposa de una forma pausada, en el crisol de la vida
bajo la alegría y el dolor; se tomo su tiempo y dejo que esta caminara a luz de la
obediencia paterna, de los instintos esponsales y maternales, bajo la dirección de
su creador y el abandono a su voluntad, llevándola a la práctica de un
desprendimiento total de su ser y lo que rodeaba. No escuchamos en las
narraciones de su vida, queja alguna, solo dolor y un trabajo de ascesis que poco
a poco fue asimilando, vemos a una mujer que jamás se rindió al contrario retomaba
fuerzas en el silencio y meditación, en la cercanía con Jesús Sacramentado,
dejándose formar.
Pregúntate en el silencio de tu corazón, ¿a qué te resistes?, ¿qué es lo que turba
tu vida para no entregarla completa?, ¿porqué te rindes antes de tiempo? Deja que
Salvador teja tu vida a su antojo pues finalmente eres de Él, tiene proyectos grandes
contigo, quiere tú seas ese carro que lo cargue, ese carro del que Él mismo es el
chofer, déjalo dirigir, no te resistas más, no te aferres a tu voluntad débil y volátil,
fugas como la estrella que brilla sola y por un segundo, deja que las huellas del
maestro sigan pisando por tu pie, deja que te de la fortaleza que le dio a María del
Refugio, y observa el paso de Dios en su vida, no serás misma, no será igual, pero
si será lo que Él quiere para ti, suelta tu vida en su vida y gozarás desde ahora de
las gracias de su predilección, pues como Dios a todos sus hijos ama, pero se pule
y da brillo a los que son sensibles a su voz.
Silencio
Guía Ponte en la presencia del Señor y a una suplícale te conserve la gracia de su
llamado.
Suplica al Señor (Todas)
Jesús un día me llamaste y me trajiste a tu casa dándome el entusiasmo por
ti y el secreto para ser libre y feliz siguiendo tu camino. Conserva inmutable en mí,
el arrojo y la felicidad de aquel primer encuentro contigo.
Suscita y acrecienta en mí el gusto por las cosas santas; por el altar, por la
oración, por la verdad, por los demás; dame valor, inteligencia e iniciativa de manera
que mi vida sea constantemente una pequeña central de gracias para quien tiene
sed y necesitado de ti.
Enséñame el arte de llevar tu nombre al mundo, la belleza radiante de tu
persona, el conocimiento de tu doctrina. Que mi carácter y mis costumbres, no
entorpezcan esta acción de tu luz. Quita de mis movimientos, todo aquello que
rebele brusquedad; que mis miradas y toda mi manera de obrar lleven el sello de tu
serenidad y de tu compresión. Que la gente advierta en mí la alegría profunda de
haberte encontrado y de haberte seguido.
Si un día sorprendida por mi debilidad fuera inclinada en mis afectos a un
mundo de luz y de oropel, hazme sentir el vacío exasperado de tu ausencia y la
tristeza de haber perdido el contacto afectuoso contigo.
Finalmente te ruego por mi comunidad, que ella viva en unión u en perfecto
y delicado acuerdo con todos sus miembros. Mi comunidad te ama y en ella todas
trabajamos por ti.
Que ninguna de nosotras se pierda y que los nombres de todas estén escritos
desde ahora en el libro de la vida. Amén.
Peticiones
Respondemos a cada petición: Te rogamos óyenos
En tus manos de Padre amoroso ponemos Señor a todas las Hermanas
Mercedarías del Santísimo Sacramento para que nos concedas el don de
vivir el carisma que le diste a Nuestra amada madre Fundadora María del
refugio en la actualidad de nuestra vida. Oremos
Que con tu amor Señor Jesús seamos luz que alumbra las tinieblas de
nuestro tiempo siendo esas lámparas brillantes puras y alegres en medio de
los que nos rodean. Oremos
Guarda en el seno de María de la Merced Nuestra Madre Santísima, a
nuestra congregación de toda escándalo por causa de la tibieza en la entrega
generosa y de toda pereza espiritual. Oremos
Te pedimos por las hermanas que están en las etapas iníciales de formación
para que sean fuertes en la respuesta a la llamada de vivir en este carisma
donado a la Iglesia por mediación de María del Refugio. Oremos.
Ponemos en tu regazo de amor a nuestras hermanas que han dejado la
congregación para que las protejas y vivan concordes a la formación religiosa
que recibieron. Oremos
Guía a nuestras superioras para que libres y gozosas descubran tu voluntad
en el cargo encomendado y sean transmisoras de las huellas que Jesús quiso
dejar en esta congregación. Oremos.
También Padre de bondad ponemos en tus manos a nuestros bienhechores,
amigos, alumnos, maestros y demás personal que coopera en nuestros
instituciones, bendícelos con toda clase de bienes que
material como espiritual. Oremos.
necesiten tanto
Finalmente ponemos a tu divina voluntad la beatificación de Nuestra Madre
María del Refugio. Oremos.
Oración: Señor Dios Tú que llamas a quien quieres y das las agallas
suficientes para decirte sí, bendice nuestra congregación y nuestras
personas, porque queremos ser un constante si a tu voluntad de Padre
Creador que quieres que sigamos recreando contigo el amor en el mundo, la
liberación del cautivo y la paz en todo corazón. Amén.
VJE
Hijas mías no han venido a ser buenas sino santas
La santidad es el adorno de tu casa
(Con anticipación a la hora santa se preparan los siguientes símbolos, vela y
cerillos, flores, Sagrada Biblia, piedra)
Monitor: El santo sabe que el mundo y todo lo que Dios ha hecho es bueno, mientras
que quienes no son santos, o bien piensan que las cosas creadas son impías o bien ni siquiera se
preocupan en responder a la cuestión de ninguna manera, porque solo están interesados en sí
mismos.
Director: María del Refugio Nuestra Madre Fundadora quería y quiere que sus hijas, las continuadoras
de su obra vivan a diario en santidad, lo constatamos en su constante invitación a ser santas y no
solo buenas. Por eso hoy estamos reunidas para bendecir, alabar y pedir al Padre de Misericordia
las virtudes que necesitamos cada uno de los miembros de nuestra congregación para lograr el
anhelo de nuestra madre fundadora. Alabado sea el Santísimo Sacramento del altar…
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO
Voz 1: Los ojos de los santos santifican todo lo que es bello y las manos de los santos consagran a la
gloria de Dios todo cuanto tocan. Padre Nuestro, Ave María Gloria y jaculatoria
Voz 2: Cuando estamos unidos al amor de Dios poseemos todas las cosas en Él, en Cristo, su Hijo.
Pues todas las cosas pertenecen a los hijos de Dios y nosotros somos de Cristo y Cristo de Dios.
Padre Nuestro, Ave María, Gloria y jaculatoria.
Voz 3: Los santos nunca se ofenden por nada ni juzgan ningún pecado humano, porque no conocen
el pecado. Conocen tan solo la misericordia de Dios y saben que su misión en la tierra es llevar esa
misericordia a todos los hombres. Padre Nuestro, Ave María, Gloria y jaculatoria.
Soberano Señor Sacramentado….
Director: como comunidad orante queremos ofrecer al Señor nuestros deseos de santidad a través
de diferentes símbolos.
 Una hermana pasa a ofrecer la piedra.
Voz 4: Jesús predicó a sus discípulos que quien construye su vida en roca firme no caerá a pesar de
las lluvias, torrentes y vientos. Hoy presentamos esta roca símbolo de nuestro deseo de estar
siempre unidas a Jesús la piedra angular.
Canto: Yo te amo Señor mi fortaleza
 Se ofrece la Sagrada Biblia
Voz 5: Nuestra Madre Fundadora se preocupaba de que las hermanas estudiaran el catecismo o
Historia Sagrada y leyeran los Santos Evangelios “sujétense a los Evangelios, que es nuestra guía”
solía decir, para que así pudiéramos impartir con exactitud y fidelidad la clase de religión. Siguiendo
este consejo presentamos la Biblia para que este sea nuestro alimento espiritual y guía en este camino
y en la relación con nuestra comunidad religiosa y educativa.
Una solista recita el siguiente salmo
También yo amo tus mandamientos,
más que el oro, el oro fino.
También yo me guío por tus preceptos
Y aborrezco el camino de la mentira
Tus dictámenes son maravillas,
Por eso los guarda mi alma.
Al manifestarse tus palabras iluminan
Dando inteligencia a los sencillos.
 Una hermana ofrece la vela.
Voz 6: Que nuestra vida se consuma al pie del sagrario, es la constante invitación de María del Refugio
a sus hijas. Hoy queremos simbolizar en esta vela que se consume lentamente, nuestra vida que se
ofrece constantemente al pie del sagrario, nuestros actos de amor, nuestras luchas constantes por
vencer las tentaciones y nuestro deseo de consumirnos en Dios.
Todas: ¡ Aleluya!
Alabad a Dios en su Santuario
Alabadlo en su poderoso firmamento,
Alabadlo por sus grandes hazañas
Alabando por su inmensa grandeza
Alabadlo con el toque del cuerno,
Alabadlo con arpa y con citara
Alabadlo con tambores y danzas
Alabadlo con cuerdas y flautas
Alabadlo con címbalos sonoros
Alabadlo con címbalos y aclamaciones
¡Todo cuanto respira alabe a Yahve!
 Ofrecimiento de las flores
Voz 7: La gratitud robaba el corazón de nuestra Madre Fundadora, se fijaba mucho en este detalle
que insinuaba en todas sus pláticas, al mismo tiempo manifestaba cuanto le desagradaban las
personas interesadas, egoístas e indiferentes. Por eso por medio de estas flores queremos expresarte
Señor nuestra gratitud por habernos llamado a vivir en tu casa, ayúdanos a purificar nuestros
corazones para ser ofrenda de amor y grato perfume en tu presencia.
Canto: Tal como soy Señor.
Monición: Llegar a ser santas depende de nuestro esfuerzo diario y de la gracia de Dios. Invoquemos
la presencia y ayuda del Espíritu Santo para que sea nuestro guía y nos ilumine en cada momento
de nuestra vida.
Director: Rosario al Espíritu Santo compuesto por nuestra Madre Fundadora María del Refugio Aguilar
y Torres.
Oración final
Agradeciendo a Dios este momento de oración proclamemos juntas y de forma pausada el siguiente
salmo.
El Señor reina, vestido de majestad,
el Señor, vestido y ceñido de poder:
así está firme el orbe y no vacila.
Tu trono está firme desde siempre,
y tú eres eterno.
Levantan los ríos, Señor,
levantan los ríos su voz,
levantan los ríos su fragor;
Reserva del Santísimo Sacramento
pero más que la voz de aguas caudalosas,
más potente que el oleaje del mar,
más potente en el cielo es el Señor.
Tus mandatos son fieles y seguros;
la santidad es el adorno de tu casa,
Señor, por días sin término.
Evangelizar con María a la luz de la Eucaristia
V J E
VINE A PRENDER FUEGO EN LA TIERRA…
(Las hermanas están afuera de la capilla con una vela en la mano para entrar en procesión a la capilla y colocarlo para
hacer la exposición del Santísimo Sacramento. Se entona un canto de invocación al Espíritu Santo)
Director: Existe un punto en donde puedo encontrar a Dios en un contacto real y experiencia con su realidad infinita, este
es el lugar de Dios, su Santuario, el punto donde mi ser continuamente depende de Su amor; dentro de mi mismo es una
cima metafórica de existencia en la que mi Creador mantiene a mi ser con vida.
Alabado sea el santísimo Sacramento del altar……
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO Y REZO DE LA VISITA
Monitora: Hermanas nos hemos reunido para pedirle a nuestro Padre Misericordioso encienda en cada una de nosotras
el mismo fuego que Nuestra Amada Madre María del Refugio Aguilar y Torres la impulso a realizar su voluntad en las
diferentes circunstancias de su vida y asumió las consecuencias de este gran regalo otorgado por Dios a la iglesia. Pedimos
también por los sacerdotes para que cada día renueven se consagración con alegría y fervor.
Canto al Espíritu Santo
Voz 1: María del Refugio Aguilar y Torres nuestra amada Madre Fundadora supo acoger en su corazón la Palabra y en su
vida la voluntad de Dios, escuchemos ahora disposición de mente y corazón el mensaje de la buena nueva.
Lectura del Santo Evangelio Según San Lucas 12,49-53
He venido a arrojar un fuego sobre la tierra y ¡Cuánto desearía que ya hubiera prendido! Con un bautismo tengo que ser
bautizado y ¡que angustiado estoy hasta que se cumpla! Palabra del Señor…
Momentos de silencio para meditación.
Canto: suplica de una Madre
Reflexión
Un carisma no es estático, es dinámico y se actualiza a fuerza de gritos que suben desde la injusticia hasta el corazón de
Dios, que es sobretodo Padre. La fuerte experiencia de Dios de María del Refugio ha hecho posible una legado de futuro
que llega a nuestros días con una fuerza galopante y que nosotros hoy tenemos que interpretar y actualizar para que su
potencial no se detenga apresada por el tiempo. El carisma que María del Refugio fue atesorando lentamente en medio
de profundas vivencias de Dios y de las pobrezas supone una espiritualidad muy original y encarnada que afecta a la
manera de pensar, de sentir y actuar. Compromete a toda la persona y la hace carismática. Supone una manera nueva
de mirar al mundo hasta descubrirlo necesitado de redención, sumido en profundas dependencias que arrebatan al
hombre lo mejor de si mismo, su libertad y dignidad.
Propuesta de reflexión.
¿De qué manera estoy interpretando y actualizando el carisma que María del Refugio recibió de Dios?
Voz 2: El fuego que ardía en el corazón de nuestra Madre Fundadora la impulso a amar a sus hermanos y ser firme en
cada una de las circunstancias que se le presentaron. Confiada siempre en la ayuda de nuestro Padre misericordioso.
Hoy queremos reconocer esta presencia por eso juntas recitamos este salmo.
1.Señor he oído tu fama,
Me ha impresionado tu obra!
En medio de los años realízala
En medio de los años manifiéstala
En el terremoto acuérdate de la misericordia
2.El señor viene de Teman,
3. Sales a salvar a tu pueblo,
A salvar a tu ungido;
Pisas el mar con tus caballos,
Revolviendo las aguas del océano.
4. Lo escuche y temblaron mis entrañas,
Al oírlo se estremecieron mis labios;
Me entro un escalofrío por los huesos,
Vacilaban mis piernas al andar.
Tranquilo espero el día de la angustia
Que sobreviene al pueblo que nos oprime.
El santo del monte Farán:
Su resplandor eclipsa el cielo,
La tierra se lleno de alabanza;
Su brillo es como el día,
Su mano destella velando su poder.
5. Aunque la higuera no echa yemas
Y las viñas no tienen fruto,
Aunque el olivo olvida su aceituna
Y los campos no dan cosechas,
Aunque se acaben las ovejas del redil
Y no queden vacas en el establo,
Yo exultaré con el Señor,
Me gloriaré en Dios mi salvador.
6. El Señor soberado es mi fuerza,
Él me da piernas de gacela
Y me hace caminar por las alturas
PRECES
De María del Refugio nos queda su historia, recogida en mil papeles y conservada en la memoria
afectiva de sus hijas, nos queda su gran riqueza… su carisma extendido en 11 países. Pidamos pues
su constante intercesión para atender a las diferentes necesidades de la iglesia, del mundo y
nuestra congregación, a cada petición responderemos escúchanos Señor
Señor ayúdanos a ser fieles seguidoras de Jesús, que Él nos invada profundamente, que
ponga las palabras en nuestros labios y que sea el fuego que abrase y purifique cuanto
realicemos.
Señor Dios de amor y misericordia, dejamos en tus manos esta obra que inició en María del
Refugio y continúa a través de nosotras sus hijas, para que a través de ella extendamos el
reinado de Jesús Eucaristía.
Para que frente a las diversas circunstancias que se presenten en cada día sea Jesús nuestra
fortaleza.
Todas: Te damos gracias Padre Misericordioso por el regalo que nos diste en María del Refugio,
tus hijas proclamamos las grandezas de tu amor y estamos agradecidas por los dones que
has derramado en nuestra congregación. Enséñanos a vivir confiadas en tu palabra para dar
testimonio de alegría en cada momento de nuestras vidas.
Canto de acción de gracias.
RESERVA DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO
¡VJE!
MARÍA DEL REFUGIO… MUJER DE DIOS
MONITOR: La historia humana no es otra cosa que una larga hilera de cipreses que
se empañan en subir hasta el cielo para poder tocarlo con sus dedos de nieve. Cada
recodo del camino y cada sendero de la vida guardan huellas imborrables de
hombres y mujeres que han pasado, sin pasar del todo, y han ido dejando una
fragancia especial y necesaria para el resto de los humanos podamos caminar con
motivo suficiente para ello.
1° VOZ: María del Refugio ha sido una de esas mujeres que no han pasado
desapercibidas. Su impronta, su decisión y valentía, su fe y su entrega, han llegado a
ser hitos destacados en el camino de muchos hombres y mujeres.
GUIA: ALABADO SEA EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR
Todas: En los cielos, en la tierra y en todo lugar.
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO
Te visto con todo el afecto de mi corazón…
 María del Refugio supo mirar con los ojos profundos del corazón la realidad
más viva que pasaba por su mirada, y no ha sido indiferente.
(Padre Nuestro, Ave María, Gloria)
 Su vida entera fue una respuesta de amor allí donde ha encontrado tanto
amor.
(Padre Nuestro, Ave María, Gloria)
 Su vocación fue respuesta eficaz a esa sensibilidad que le quemaba por
dentro, ningún dolor, pobreza o necesidad le eran ajenas.
(Padre Nuestro, Ave María, Gloria)
2° VOZ: El Evangelio ha sido siempre profundamente seductor. En medio de la
llamada, que es la vida, van apareciendo muchas otras llamadas que nos convocan y
nos inquietan. Y, si sabemos responder, se convierten en largos caminos de fe y de
esperanza que nos conducen a las praderas donde Dios habita, María del Refugio fue
una mujer que supo escuchar la voz de Dios y se dejo guiar por Él.
MONITOR: Oremos con el salmo 22, proclamándolo a dos coros. Después de la
proclamación, se deja un momento de silencio.
El Señor es mi pastor, nada me falta:
Tu bondad y tu misericordia me
acompañan
en verdes praderas me hace recostar;
todos los días de mi vida, y habitaré en
la casa del Señor por años sin término.
me conduce hacia fuentes tranquilas
por años sin término.
y repara mis fuerzas;
me guía por el sendero justo,
por el honor de su nombre.
Aunque camine por cañadas oscuras,
nada temo, porque tú vas conmigo:
tu vara y tu cayado me sosiegan.
Preparas una mesa ante mí
enfrente de mis enemigos;
me unges la cabeza con perfume,
y mi copa rebosa.
(Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.)
3° VOZ: María del Refugio se dejó acariciar por la brisa del Espíritu y desde entonces
sólo quiso ser mujer de Dios enviada a los pobres, mujer consagrada y mercedaria,
hoy nos invita a ser portadoras de ese mismo Espíritu, para llevar la Buena Nueva.
MONITOR: Dispongamos nuestra mente y voluntad para escuchar con atención la voz
del Señor, a través del evangelista San Lucas, así como lo hizo nuestra Madre
fundadora.
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS (4, 16-20)
Vino a Nazaret, donde se había criado, entró, según su costumbre, en la sinagoga el
día sábado, y se levantó para hacer la lectura. Le entregaron el volumen del profeta
Isaías, desenrolló el volumen y halló el pasaje donde estaba escrito:
“El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la
Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los
ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor”.
Enrolló el volumen, lo devolvió al ministro y se sentó. En la sinagoga todos los ojos
estaban fijos en él.
Palabra del Señor.
Gloría a ti Señor Jesús.
(Momentos de silencio, para reflexionar, música de fondo)
(Canto para seguir reflexionado: Oh deja que el Señor te envuelva)
4° VOZ: María del Refugio, ha sido una mujer de Dios, porque lo ha sido de la
humanidad, ésta es la grandeza que esconden las mujeres como María del Refugio;
que fueron mujeres de calidad para su tiempo y lo siguen siendo para nosotras sus
hijas a pesar de la voracidad del tiempo. Porque el amor nunca pasa.
MONITOR: Ahora hermanas, dirijamos nuestra oración al Padre amoroso, y pidamos
que nuestra amada Madre Fundadora interceda por nosotras sus hijas.
SOLISTA: Señor queremos que nos impulses a la escucha generosa de tu palabra y a
cumplir nuestro compromiso de consagradas. Concédenos tu Gracia para seguir los
pasos de nuestra Madre Fundadora y poder ser mujeres de Dios.
Todas: ESCUCHANOS PADRE.
SOLISTA: Señor, danos tu Gracia para ser fieles al Carisma que nos legó Nuestra
Madre Fundadora y ser conscientes de que el mundo necesita ver el testimonio de
nuestra fraternidad, de nuestra ayuda mutua, de caridad y paz para con todos.
Todas: ESCUCHANOS PADRE.
SOLISTA: Madre María del Refugio, intercede por tus hijas para que nos dejemos
acariciar por el Espíritu de Dios, y nos conceda ser mujeres consagradas y
autenticas mercedarias.
Todas: ESCUCHANOS PADRE.
MONITOR: Unidas a una sola voz, agradecemos al Padre la vida de nuestra Madre
fundadora entonando el canto de “EL ESPÍRITU DE MI MADRE FUNDADORA”.
Oración por la pronta Beatificación de Nuestra Madre Fundadora
Oh, Padre Celestial dígnate concedernos la gracia insigne…
Madre María del Refugio; intercede por tus hijas.
Reserva del Santísimo.
Evangelizar con María a la Luz de la Eucaristía
María del Refugio Alma eucarística
MONITOR: Alabado sea el Santísimo Sacramento del altar
TODOS: En los cielos, en la tierra y en todo lugar.
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO.
Padre eterno, que en el vientre de la Virgen nos regalas el Pan que sacia el hambre y la sed.
(PADRENUESTRO, AVEMARIA, GLORIA)
Padre, por tu espíritu, Pan y Vino son alimento que aligera el hambre del camino.
(PADRENUESTRO, AVEMARIA, GLORIA)
Creemos Jesús, que tu amor ha preparado una mesa para grandes y pequeños; por este
Sacramento, nos hacemos hermanos.
(PADRENUESTRO, AVEMARÍA, GLORIA)
TODOS: Soberano Señor Sacramentado,…
LECTOR:
SALMO 62 SED DE DIOS
“SEÑOR, MI ALMA TIENE SED DE TI”
Dios, Dios mío, yo te busco y no te encuentro; sed de ti tiene mi pobre corazón; te busco y
me siento con frecuencia defraudado, porque mi alma se levanta como tierra reseca.
Tengo sed de ti: de tu amor y lealtad sinceros; tengo sed de ti: de tu justicia y fidelidad;
tengo sed de ti: de tu amor y misericordia.
SEÑOR, MI ALMA TIENE SED DE TI
Te busco, como la flor tiende al sol por la mañana; como el río se alarga hasta el mar; te
busco como la semilla crece y camina en libertad; como el niño chiquito, la protección de
su madre.
Tu amor, Señor, es vida; es mejor que mi propia vida; tu rostro irradia la luz de tu
gracia y verdad; tus manos están abiertas al perdón y a la acogida; todo tu ser es fuerza de
salvación para el hombre.
SEÑOR, MI ALMA TIENE SED DE TI
Empapa, oh Dios, mi corazón de tu bondad, rocíame con la lluvia suave de tu ternura; deja
caer tu amor sobre mí como rocío de la mañana; y abre mis labios para que te cante
jubiloso.
Tú llenas mi noche, tú das sentido a mi existencia, y eres para mí el amigo bueno
que me acompaña. Por ti vigilo; por ti mi corazón no duerme; por ti estoy como centinela
esperando tu llegada; por ti mi corazón vuelve hasta tocar tu rostro.
SEÑOR, MI ALMA TIENE SED DE TI
Oh Dios, mi corazón te busca, apasionado, porque sólo en ti hay respuesta a lo largo del
camino, te busco, después de dejar atrás cosas que encontré y que ahora, son para mí nada
ante ti, que eres mi tesoro escondido.
Tengo sed de ti, de tu pan y de tu palabra de vida, tengo sed de ti, de la verdad de
tu evangelio; tengo sed de ti, de comunión con tu iglesia; tengo sed de ti, de la fuerza de tu
espíritu.
SEÑOR, MI ALMA TIENE SED DE TI
Te busco con todos mis hermanos, que también te buscan; con los que caminan conmigo
como amigos; te busco, y sé que estás vivo, presente entre nosotros, que en tu nombre,
señor Jesús, nos hemos reunido.
SEÑOR MI ALMA TIENE SED DE TI
Música para meditar
MONITOR:
MI CANTO ES SOBRE JESUCRISTO:
Él es himno en nuestra boca, Palabra que nos ha sido transmitida desde el principio, la
Palabra que repetimos día tras día para que la fidelidad de Dios sea acogida por todos para
que la nueva alianza no muera jamás.
Dios santo y poderoso, te alabamos, pequeños como somos, con la voz que tú mismo nos
has dado. En nombre de todos los hombres del mundo, adoramos tu poder, fiados de tu
misericordia. Tú te nos has hecho presente en Jesucristo, has amanecido en medio de
nuestras tinieblas, en Él te vemos a ti, Padre, en Él nos abras el futuro de tu fidelidad.
Es tu Palabra, la luz del mundo, el Hijo del hombre, el nuevo Adán, nacido de nuestra tierra,
tu Palabra al mundo. Él vino hacia nosotros y vivió como viven los hombres. Pero los
hombres le destrozaron con sus propias manos y su vida desembocó en la muerte.
Pero tú hiciste lo imposible: él resucitó para nosotros, desarmada y muerta quedó la
muerte. Él, que no podía salvarse a sí mismo, alienado e impotente, se convirtió en fuerza
y sabiduría; tu locura, Señor, es más sabia que los hombres, tu impotencia más poderosa.
Es tu Palabra, la luz del mundo, el hijo del Hombre, el nuevo Adán, nacido de nuestra tierra,
tu Palabra al mundo. Nadie conoce tus caminos y tu amor por nosotros es inagotable,
¿quién fue tu consejero para que te dieras como regalo al mundo? Todo lo que existe te
pertenece, las fuentes de nuestra vida son tuyas. Por ti existen todas las cosas y las palabras.
Nuestra confianza descansa en ti, Señor Dios nuestro.
PRECES
TODOS: Señor, danos tu luz y tu fuerza
● Que la fuerza de Dios esté siempre con nosotros y nos acompañe siempre en nuestro
camino.
TODOS: Señor, danos tu luz y tu fuerza
● Dios nos ha dado la fe, pero sentimos la necesidad de aumentarla para no caer en las
tentaciones.
TODOS: Señor, danos tu luz y tu fuerza
● Porque no reconocemos fácilmente a Dios en los humildes y bajo las apariencias del pan
y del vino.
TODOS: Señor, danos tu luz y tu fuerza
● Porque no mostramos nuestra fe con una vida de entrega al prójimo
TODOS: Señor, danos tu luz y tu fuerza
ORACION:
Dios Todo Poderoso tenga piedad de nuestra debilidad, nos dé fuerzas y nos haga ser
constantes hasta la vida eterna. Amen
María del Refugio a la Luz de la Palabra
MONITOR: ALABADO SEA EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR
TODOS: En los cielos, en la tierra y en todo lugar.
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO
MONITOR:
Creemos, Jesús, que sobre el altar de tu sacrificio recuperamos la fuerza de una débil carne,
que no responde siempre a los anhelos del espíritu, pero tu transfórmanos a imagen de tu
Cuerpo.
PADRENUESTRO, AVEMARÍA, GLORIA…
Creemos en la mesa preparada para todos donde siempre hay un lugar para el que busca,
un espacio para el marginado de la vida, superando los signos de la muerte, inaugurando
cielos nuevos y una tierra nueva.
(PADRENUESTRO, AVEMARÍA, GLORIA)
Creemos que te haces compañero en el camino. “Remar mar adentro” es la consigna en
este momento de tu Iglesia, para construir llenos de esperanza una nueva etapa de la
historia.
(PADRENUESTRO, AVEMARÍA, GLORIA)
Los hombres caminamos, a veces, en tinieblas hasta que vemos la Luz. Ésta se hizo presente
a los discípulos de Emaús en el partir el Pan. A nosotros también se nos hace presente hoy
como Luz liberadora de miedos y esclavitudes y nos envía a proclamar su Palabra.
TODOS VAMOS A CONTESTAMOS: EL CAMINO ERES TÚ, SEÑOR
Aquí estoy, Señor Jesús, a la vera del camino, sin camino; mis pasos buscan tus
huellas donde poner mis pisadas, la vida y la muerte están ante mi como un reto; el bien y
el mal se cruzan en mi corazón que sin descanso busca, pide y llama. Yo quiero ser dichosa,
Señor Jesús, puesto en camino; yo quiero ser libre con la libertad de tu evangelio; libre en
opción sincera y decidida a tu Palabra. Quiero dejar atrás las llamadas opresoras del dinero,
del poder, del placer, de lo que en el fondo es nada. Quiero hacer de tu Evangelio norma de
vida y escucharlo día y noche hasta que penetre en el fondo de mi alma.
TODOS: EL CAMINO ERES TÚ, SEÑOR.
Quiero ser, Señor, como el árbol que crece junto al río y bebe en profundidad y
hondura en la corriente del agua. Quiero dar en su tiempo frutos de paz y bien, y dejar que
las semillas que has sembrado en mí se abran. No dejes jamás, Señor, que se marchiten mis
hojas verdes, ni que el viento las arranque, una a una, de sus ramas.
TODOS: EL CAMINO ERES TÚ, SEÑOR
Quiero seguir el camino del hombre nuevo, del hombre que dice sí a la vida y con
tesón la guarda. Quiero ser persona de espíritu que luche contra la carne y que haga del
amor la Carta Magna, la Ley fundamental de tu Reino. No me dejes caminar por el camino
del mal y que a cada paso deja las señales del que mata; no quiero ser como paja que lleva
el viento y hace de ella un juego fácil entre sus alas.
Quiero ser desde mis raíces y mi historia de ilusiones y fracasos, desde mis luchas y
mis crisis un camino de esperanza abierto hacia la Vida eterna, donde tu moras y donde
esperas con un corazón de amigo, mi llegada.
TODOS; EL CAMINO ERES TÚ, SEÑOR
Señor Jesús, contigo se hace el camino suave y ligero, al llevar entre Tú y yo –los dos
juntos- esta pesada carga. Quiero aprender de ti, Maestro, a ser libre como el viento, en tu
Espíritu, que guía y salva.
TODOS; EL CAMINO ERES TÚ, SEÑOR
HOY EN ORACIÓN
Hoy en oración
quiero preguntar, Señor,
quiero escuchar tu voz,
tus palabras con tu amor.
Ser como eres Tú
servidor de los demás;
dime cómo, en que lugar
te hago falta más.
Dime, Señor, en que te puedo servir,
déjame conocer tu voluntad,
dime, Señor, en ti yo quiero vivir,
quiero de ti aprender, saber amar.
Hoy quiero seguir
tus caminos junto al mar,
tus palabras, tu verdad,
ser imagen de Ti.
Dime, Señor, en que te puedo servir,
déjame conocer tu voluntad,
dime, Señor, en ti yo quiero vivir,
quiero de ti aprender, saber amar.
Lectura del santo Evangelio según san Juan (1, 1.15)
En el principio ya existía aquel que es la palabra, y aquel que es la Palabra estaba con Dios
y era Dios. Ya en el principio él estaba con Dios. Todas las cosas vinieron a la existencia por
él, y sin él nada empezó de cuanto existe. El era la vida, y la vida era la luz de los hombres.
La luz brilla en las tinieblas y las tinieblas no la recibieron.
Hubo un hombre enviado por Dios que se llamaba Juan. Éste vino como testigo, para dar
testimonio de la luz. Para que todos creyeran por medio de él. Él no era la luz, sino testigo
de la luz.
Aquel que es la Palabra era la luz verdadera, que ilumina a todo hombre que viene a este
mundo. En el mundo estaba; el mundo había sido hecho por él y, sin embargo, el mundo no
lo conoció.
Vino a los suyos y los suyos no lo recibieron, pero a todos los que lo recibieron les concedió
llegar a ser hijos de Dios; a los que lo recibieron les concedió llegar a ser hijos de Dios; a los
que creen en su nombre, los cuales no nacieron de la sangre, no del deseo de la carne, no
por voluntad del hombre, sino que nacieron de Dios.
Y aquel que es la Palabra se hizo hombre
V.J.E.
MARÍA DEL REFUGIO,
MUJER EUCARÍSTICA.
Exposición del Santísimo. Con cantos intercalados.
Intención: Agradecer a Dios nuestro Padre, el regalo de María del Refugio, que con su vida
Eucarística, nos marcó el camino de fe en la Presencia de Jesús en su Misterio Pascual, de
donde brotaron las virtudes que la caracterizaron: la Caridad con todos, la Humildad ante
Dios y ante los hombres y la Alegría que manifestó en todo momento.
Monición. A la luz del evangelio de San Juan, veamos las características de los verdaderos
apóstoles de la Eucaristía. Son de los que el Padre ha llamado para estar con Jesús.
Permanecer con él en los momentos difíciles, aunque otros lo abandonen. Hacen profesión
de fe en las palabras de vida eterna que acaban de escuchar, cuando otros se escandalizan…
Lectora. 1 Del Evangelio según San Juan. (6, 58-69 )
Este es el pan bajado del cielo y no es como el que comieron sus padres, y murieron. Quien
come este pan vivirá siempre. Estas cosas dijo en la sinagoga, enseñando en
Cafarnaúm. Al oírlas, muchos de sus discípulos dijeron: Dura es esta palabra; ¿quién la
puede
oír?
Sabiendo Jesús en sí mismo que sus discípulos murmuraban de esto, les dijo: ¿Esto os
ofende? ¿Pues qué, si viereis al Hijo del Hombre subir adonde estaba primero?
El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he
hablado
son
espíritu
y
son
vida.
Pero hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús sabía desde el principio quiénes
eran
los
que
no
creían,
y
quién
le
había
de
entregar.
Y dijo: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado del Padre.
Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él.
Dijo entonces Jesús a los doce: ¿Queréis acaso iros también vosotros?
Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Y nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Palabra del Señor.
Reflexión personal. ¿ Nos sentimos amadas y llamadas por el Padre, a pertenecer a esta
Familia Eucarística –Mercedaria?. ¿Cuál es mi profesión de fe en la Presencia Eucarística de
Jesús?.
Monición. Hermanas, descubramos en la vida de fe de N.M. Fundadora la motivación que
necesitamos para ser mujeres eucarísticas que a pesar de las dificultades nos mantengamos
fieles a nuestra vocación como ella, que nos confía su secreto “ A la Sombra del Sagrario
nada nos faltará”.
Lectora. 2 La vida de fe de María del Refugio, está centrada en Cristo Jesús en su Misterio
Eucarístico. Son muchos los testimonios que podemos aludir de este amor desbordante del
que estuvo llena y que culmina con la Obra del Apostolado Eucarístico. Es por ello que para
nosotras, es un ejemplo de fe y de amor a Jesús Sacramentado. Hagamos memoria del gran
acontecimiento del 24 de septiembre de 1920, cuando muchas personas acudieron a ver
la Hostia consagrada, para descubrir en ella a Jesús en forma visible. Es entonces cuando
María del Refugio expresa la confesión de fe en nombre propio pero también en nombre
de la Congregación; “ Yo no necesito ir a ver, yo sé que está ahí y lo adoro” Vida y Mensaje.
p. 244
Preces: Nosotras que hemos hecho una Profesión de fe desde nuestro Bautismo y
conscientemente en nuestros primeros votos , renovemos nuestro espíritu eucarístico
pidiendo a Jesús Sacramentado la gracia de ser mujeres que expresemos la fe con nuestras
palabras pero también con obras que broten del amor redentor que palpita en la Eucaristía,
diciendo: Jesús Misterio de nuestra fe. Escúchanos.





Para que sepamos responder con fidelidad, en todos los acontecimientos de nuestra
vida al llamado del Padre a extender el Reinado de Jesús Eucarístico
Jesús Misterio de nuestra fe. Escúchanos.
Para que sepamos dar testimonio de nuestra fe, en las dificultades de nuestra misión
apostólica a ejemplo de María del Refugio.
Jesús Misterio de nuestra fe . Escúchanos.
Para que nuestra vida se consuma al “Pie del Sagrario”, como son los deseos de
N.V.M. Fundadora. Jesús Misterio de nuestra fe. Escúchanos.
Concluyamos nuestra oración, con la Oración de la Familia de Dios .Padre nuestro.
En el 145 Aniversario del Nacimiento de N.V.M. María del Refugio
21 de septiembre de 2011
“Evangelizar con María a la Luz de la Eucaristía”