Tema 5: El léxico español 2º Bachillerato TEMA 5 EL LÉXICO ESPAÑOL 1. DE QUÉ SE COMPONE EL LÉXICO DE UNA LENGUA 2. CLASES DE PALABRAS SEGÚN SU ORIGEN Y EVOLUCIÓN 2.1. El léxico heredado: voces patrimoniales, cultismos y latinismos 2.2. El léxico adquirido: los préstamos lingüísticos 2.2.1. Los prestamos históricos 2.2.2. Los prestamos actuales 2.2.3. El léxico inventado y multiplicado 2.3. El desgaste de las palabras: arcaísmos ANEXO Ejercicios 1 Tema 5: El léxico español 2º Bachillerato 1. DE QUÉ SE COMPONE EL LÉXICO DE UNA LENGUA El léxico de una lengua está integrado por todas las palabras que esa lengua posee. Con el término vocabulario nos referimos a la parte del léxico que domina un individuo o a la parcela de palabras propias de una determinada actividad o especialidad. Del estudio de las palabras, atendiendo a su origen, proceso de formación y las relaciones que se establecen entre ellas se encarga la Lexicología. De la composición de diccionarios se ocupa la Lexicografía. 2. CLASES DE PALABRAS SEGÚN SU ORIGEN Y EVOLUCIÓN Si atendemos a sus orígenes, el léxico de una lengua se compone de un léxico heredado (o patrimonial), un léxico adquirido y un léxico multiplicado. En el caso del castellano: El LÉXICO HEREDADO es el tomado del latín que se habló en la Península Ibérica a partir de la dominación romana, además de las voces tomadas de los idiomas hablados antes de la romanización. Constituyen el LÉXICO ADQUIRIDO todos los préstamos que, a lo largo de los siglos, ha ido tomando nuestra lengua de otras. El LÉXICO MULTIPLICADO es el que se crea a partir del léxico anterior mediante varios mecanismos de formación de palabras, entre los que sobresalen la derivación y la composición. 2.1. El léxico heredado: voces patrimoniales, cultismos y latinismos El castellano es una lengua romance, esto es, procede del latín. En consecuencia, la base principal del léxico castellano es latina. Del latín proceden las VOCES PATRIMONIALES (populares, primitivas o tradicionales) de nuestra lengua, es decir, aquéllas que tienen su origen en el latín vulgar que entró en la Península Ibérica con los colonos romanos a partir del 218 a. de C. Están en nuestro idioma desde su origen y han experimentado una fuerte evolución fonética desde el latín vulgar hasta llegar a su forma moderna: hembra < femina, razón < rationem, mujer < muliere, padre < patre, hijo< filium, viejo< vetulo. También tienen origen latino los llamados CULTISMOS O VOCES CULTAS: palabras que se incorporan tardíamente al idioma (normalmente por vía culta) y que, en consecuencia, son ajenas al proceso evolutivo natural de las palabras patrimoniales: retina, evocar, sideral, vigilar, mortificar, tabernáculo, voluntad o espíritu son cultismos, pues no han sufrido los cambios fonéticos propios de la evolución lingüística: no han cambiado su forma originaria o lo han hecho muy levemente. Son muy similares a sus étimos, es decir, a las palabras latinas de las que proceden (voluntate, spiritu). En determinados casos se produce algún cambio fonético respecto de su étimo, pero no la evolución completa correspondiente a las formas patrimoniales; entonces hablamos de semicultismo. Por ejemplo, el étimo latino saeculu ha dado siglo, cuando por evolución lógica debería haber dado sejo, como conejo ( cuniculu) o espejo ( speculum). No se debe confundir cultismo con léxico culto –aunque muchos cultismos pertenezcan a este nivel léxico-, ya que gran cantidad de cultismos se emplean de forma constante por todos los hablantes. 2 Tema 5: El léxico español 2º Bachillerato Una palabra latina (o griega) puede dar origen a una doble solución léxica (es decir, dos palabras distintas): una voz patrimonial y un cultismo (o semicultismo). Es grande la cantidad de cultismos y voces patrimoniales con el mismo étimo que conviven en castellano. Estas parejas de palabras, tan diferentes en su forma, pero de idéntico origen etimológico, se llaman dobletes léxicos: Femina > hembra + fémina litigare> lidiar + litigar solitarium >soltero + solitario signum > seña + signo rapidus > raudo + rápido. Compruébese en este caso cómo, en ocasiones, el hablante tiende a considerar más culta la voz patrimonial que el cultismo, pues aquella –al ser menos utilizadaproduce mayor extrañeza en el usuario medio. En ocasiones, el doblete léxico puede estar formado por un cultismo y un semicultismo: capítulo + cabildo. En un doblete, la voz culta suele tener un sentido más general y abstracto y, en ocasiones, elevado y metafórico; la patrimonial suele tener un significado más concreto y material. Pero no siempre es así y, además, las dos voces de un doblete a veces pueden intercambiarse en un mismo contexto. También se consideran cultismos las palabras tomadas del griego. La mayoría de ellas, no obstante, han entrado en nuestra lengua a través del latín. Por ejemplo, el cultismo griego profeta llega al castellano desde la construcción original griega profetes (pro-femis, “decir delante”) a través del término latino propheta. Llamamos LATINISMOS a las palabras, expresiones y rasgos idiomáticos propios del latín y procedentes de él, que se conservan en una lengua moderna (en la que pueden haber adquirido otro significado, es decir, haber sufrido un cambio semántico): a priori, a posteriori, ad hoc, currículum vitae, desideratum, grosso modo, ipso facto, in fraganti, motu proprio, sensu strictu... 2.2. El léxico adquirido: los préstamos lingüísticos La parte fundamental del léxico español es, por tanto, de origen latino: tal vez unos dos tercios. Sin embargo, las lenguas están en permanente transformación, como el pueblo que las habla. En efecto, el sistema léxico de una lengua debe adaptarse continuamente a las circunstancias cambiantes de la sociedad. El fondo de palabras originales o primitivas (patrimoniales) está en constante evolución: se amplía mediante procedimientos como la derivación, la composición, etc. así como por la incorporación de voces nuevas tomadas de otros idiomas (pues siempre surgen nuevos referentes que debemos nombrar) y, al mismo tiempo, prescinde de otras voces (arcaísmos y palabras en desuso). 2.2.1. Los prestamos históricos Los PRÉSTAMOS LÉXICOS consisten en adoptar voces de otros idiomas. Todas las lenguas deben a este procedimiento gran parte de su léxico. El contacto directo entre hablantes de lenguas diferentes, las relaciones económicas y culturales entre los países, la proximidad geográfica, la influencia de los medios de comunicación y los intercambios culturales (cine, literatura, música…) facilitan el paso de vocablos de una lengua a otra. Por su proximidad y su influencia cultural, el mayor número de préstamos modernos que recibe el castellano son galicismos y, sobre todo, anglicismos. Los préstamos que nuestra lengua ha ido adquiriendo a lo largo de su historia reciben una denominación específica según su procedencia: 3 Tema 5: El léxico español 2º Bachillerato 1. Germanismos: entran fundamentalmente en nuestra lengua cuando los pueblos bárbaros (principalmente suevos y visigodos) se asientan en la Península (siglo V). Dado el carácter belicoso y conquistador de los pueblos germanos, son, sobre todo, palabras relacionadas con la guerra. También son germanismos las palabras que proceden del alemán. Guerra, níquel, sable, espuela, espía, guardia, ropa, arrancar, jabón, bigote, vals, obús, brindis, parra, búnker, feldespato, blindar, espacio vital…También antropónimos como Alfonso, Carlos, Adolfo, Elvira… 2. Arabismos: después del latín, la lengua que más voces nos ha legado es el árabe. Los préstamos tomados de este idioma son los “arabismos”. Se incorporaron al castellano a lo largo de los ocho siglos de convivencia con esa cultura. Son más de cuatro mil vocablos referentes a todos los ámbitos de la vida (agricultura, política, arquitectura, matemáticas, música…) y muchos topónimos: arroz, aceite, aceituna, zoco azúcar, zanahoria, algodón, almacén, alcantarilla, albañil, alguacil, azotea, fachada, laca, alcázar, tabique, aldea, azucena, alcalde, cifra, guarismo, azul, añil…Algarbe (El occidente), Guadiana (Río Ana), La Rábida (el convento fortificado), Calatayud (castillo de Ayud), Albacete (el llano). 3. Galicismos: son palabras procedentes del francés, que penetraron en la lengua castellana, especialmente, durante la Edad Media (sobre todo en los siglos XI y XII, a través del Camino de Santiago) y en el siglo XVIII (con la llegada a la corona de la dinastía de los Borbones, de origen francés). No obstante, dada la vecindad de España y Francia, la influencia lingüística mutua se ha prolongado hasta nuestros días. Son galicismos bricolaje, menú, chalé, maquillar, gourmet, carné, servilleta, bayoneta, cremallera, restaurante, coger, bisutería, bechamel, jaula, jabalina, coger, etc. 4. Italianismos: son palabras procedentes del italiano. Se introducen, sobre todo, durante el Siglo de Oro, a raíz de las relaciones comerciales y culturales que España estableció con Italia. Abundan las referidas al arte, la cultura y la cocina. Algunas de ellas son: bagatela, capricho, casino, novela, madrigal, terceto, partitura, libreto, piano, pirata, soneto, batuta, góndola, escalinata, sotana, diana, terraza, soprano, bufón… 5. Americanismos o indigenismos americanos: proceden de las lenguas amerindias. Entraron en nuestro idioma tras el descubrimiento de América. Reflejan costumbres y realidades propias del Nuevo Mundo y que en Europa se desconocían: tabaco, chicle, tiza, chocolate, canoa, huracán, cacique, patata, huracán, mocasín, cacao, loro, petaca, etc. 6. Anglicismos: palabras procedentes del inglés y que constituyen el aporte léxico más importante en la actualidad: sándwich, look, bit, fútbol, estándar, flirtear, kit, jersey, rock, pop, pudin, mitin, filme, yate, túnel… Pero el castellano ha recibido influencias de otras muchas lenguas: podemos reconocer galleguismos (vigía, macho, morriña, vieira) y lusismos (mejillón, vitola, cachimba, caramelo, chubasco), catalanismos (clavel, peseta, cartel, paella, anguila). Y también identificamos voces prerromanas, es decir, palabras tomadas de las lenguas habladas en la Península antes de la conquista romana, a saber, el tartesio, el ibérico, el celta, el vasco… Tal fondo forma el llamado sustrato lingüístico (arroyo, balea, banasto, páramo, perro, barro...) Los términos heredados del euskera son los vasquismos (por ejemplo, chabola, morena, izquierda, aquelarre, pizarra, zamarra, ascua, cencerro). 4 Tema 5: El léxico español 2º Bachillerato 2.2.2. Los prestamos actuales Lógicamente, entre las lenguas modernas se está produciendo un continuo trasvase de palabras. Por norma general, estas voces “importadas” pasan un “período de prueba” hasta que son admitidas oficialmente en el idioma y son recogidas en el Diccionario de la Real Academia. Esto suele depender de la aceptación que tengan entre los hablantes y de que la lengua no disponga de los recursos léxicos oportunos para cubrir la necesidad. En conclusión, la introducción de préstamos es un fenómeno natural; el peligro radica en adoptar términos extranjeros para realidades que ya tienen denominación castellana, o en el hecho de que distintas naciones hispanohablantes incorporen préstamos diferentes y eso afecte a la unidad del idioma. Los préstamos innecesarios reciben el nombre de barbarismos (hit parade, spray, holding, cake, brioche, panty, pullover). Es indiscutible que, en la actualidad, la presencia del inglés en la lengua castellana es cada vez mayor. Así, forma ya parte de nuestra vida y se deja sentir en el lenguaje empleado en los más diversos ámbitos: prensa, televisión, radio, situaciones profesionales y cotidianas, moda, arte, música, técnica… Encontramos tres tipos de préstamos, según su incorporación y adaptación a nuestra lengua: a) CALCOS SEMÁNTICOS: son traducciones literales del término original → rascacielos (< skycreper), lluvia ácida (<acid rain), fin de semana (<week-end), duro (“personaje rudo, de carácter fuerte, <hard). El calco es el resultado de “calcar” en una lengua un compuesto o frase hecha, esto es, una forma de pensar o de configurar la realidad. Así, frente al préstamo fútbol, del inglés, el calco castellano es balompié. Son préstamos parciales, al adoptarse de la otra lengua sólo el significado. b) Los HÍBRIDOS O TÉRMINOS ADAPTADOS, préstamo que se adecua a nuestra pronunciación y ortografía, es decir, sufre cambios fónicas, gráficos y, a veces, semánticos. En estas voces que sufren una adaptación morfológica, casi siempre se conserva el lexema originario y se modifica el morfema: fútbol, estrés, gol, budín del inglés football, stress, goal, pudding. Algunos préstamos no se incorporan con el mismo significado que tienen en el idioma original: gol < goal (“meta, puerta”). c) Incorporación literal: son los XENISMOS, también denominados extranjerismos o palabras-cita, es decir, palabras que se instalan sin ninguna variación (clown, cross, film, marketing, best-seller, récord, pizza, croissant, stop, self-service, parking, camping, whisky, graffiti, surfing, masacre…). En ocasiones, los cenismos se incorporan en forma de acrónimos o siglas: UNESCO (=United Nations Educational Scientific and Cultural Organization), radar (radio detection and ranking), láser (light amplification by stimulating emisión of radiation). 2.2.3. El léxico inventado y multiplicado Otra vía de ampliación del léxico es que la lengua genere nuevos vocablos. A las innovaciones léxicas que se van produciendo en una lengua con el objeto de nombrar nuevas realidades las denominamos NEOLOGISMOS -del griego neo (nuevo) y logos (palabra). Las novedades en el campo científico, artístico, etc. exigen de las diferentes lenguas un esfuerzo de asimilación de los nombres que designan esos nuevos referentes: airbag, CD ROM, fax, télex, láser, escáner... Estas palabras nuevas o neologismos pueden ser creaciones de la propia lengua, que los genera mediante procedimientos como la derivación (contestador, cuponazo, grabadora), la parasíntesis, la composición (ultraligero, telemando, monoplaza, tocadiscos) o agregando nuevos significados a una palabra ya existente (ratón, culebrón, el busca). 5 Tema 5: El léxico español 2º Bachillerato En realidad, la gran mayoría de los neologismos incorporados al castellano son préstamos y, en especial, anglicismos. Pero el español, como cualquier otra lengua, está capacitado para aumentar su caudal léxico “forjando” sus propios neologismos. Para ello, se sirve de distintos mecanismos neológicos, con los que se origina lo que algunos llaman “léxico multiplicado”: 1. La ya mencionada combinación de monemas (palabras derivadas, compuestas y parasintéticas). 2. Las SIGLAS, esto es, formación de una nueva palabra mediante la combinación de las iniciales de otras palabras que, de forma conjunta, sirven para nombrar una realidad, normalmente un organismo o entidad: ONU (=Organización de Naciones Unidas). Similares a las siglas son los ACRÓNIMOS, que se forman uniendo sílabas iniciales y finales del grupo de palabras: Adena (= Amigos de la naturaleza), Banesto (= Banco Español de crédito). Siglas y acrónimos son recursos útiles por su capacidad simplificadora, dada la compleja y extensa denominación de las realidades a las que se refieren (láser = Light Amplification by Stimulating Emisión of Radiation; radar = Radio Detection and Ranging). Este procedimiento neológico ha dejado ejemplos desde la Antigüedad (INRI = Iesus Nazarenus Rex Iudaeorum; RIP = Requiescat in Pace), pero es en nuestra época cuando, en aras de la economía lingüística, ha alcanzado su máximo apogeo, hasta el punto que el siglo XX ha sido bautizado como “el siglo de las siglas”. 3. El ACORTAMIENTO es un procedimiento de formación de palabras que consiste en la eliminación de parte de una palabra ya existente. Es un mecanismo con el que el hablante tiende hacer su charla expresiva y fácil. En los siguientes ejemplos, comprobarás que hay ciertas palabras que rara vez se usan en su forma plena, pues es la forma apocopada o abreviada la que se ha consolidado: metropolitano = metro fotografía = foto cinematógrafo = cine motocicleta = moto otorrinolaringólogo = otorrino En la mayoría de los casos, el acortamiento es un procedimiento de formación de palabras característico de usos coloquiales y familiares de la lengua, prefiriéndose la forma plena en los usos formales. Así sucede, por ejemplo, en: milicia = mili; televisión = tele; policía = poli; bolígrafo = boli; profesor = profe; el protagonista de la película = el prota de la peli, etc. El acortamiento es un procedimiento de formación de palabras muy utilizado en las jergas juveniles (ridi, mates, insti, cole, finde, peli, pelu,…). 4. Las ONOMATOPEYAS son aquellas voces que intentan reproducir sonidos reales: susurro, murmullo, murmurar, sisear, chistar, cuchichear... Con frecuencia, los sonidos que la lengua reproduce son voces de animales: guau, miau, quiquiriquí, cacareo, piar, relinchar, rebuzno... ; en otras, la palabra onomatopéyica está asociada a un movimiento (titilar, tic-tac, zig-zag). 2.3. El desgaste de las palabras: ARCAÍSMOS Los arcaísmos son las palabras o expresiones que apenas se usan o se emplean muy poco, y que los hablantes consideran antiguas o en desuso, como saya (por “falda”), botica (por “farmacia”), o faltriquera (por bolsillo que se llevaba entre las faldas para guardar dinero). En general, una palabra deja de emplearse si designa objetos que ya no se usan (maravedí, antigua moneda) o actividades que ya no se realizan (aguador, pregonero). También sucede que cada persona o cada región prefiere unas palabras, desestimando otras que tienen plena vigencia y actualidad en otra región distinta, de modo que una palabra puede caer en desuso (y ser un arcaísmo) en unas zonas y en otras no. Es el caso de rojo/grana/ colorado/encarnado, lindo 6 Tema 5: El léxico español 2º Bachillerato (argentino)/ sabroso o bello (venezolano) / guapo (asturiano) / chulo (mejicano) / hermoso (manchego) / bonito, agradable; invitar / convidar, etc. Hoy casi no se oyen palabras que a mediados del siglo XX eran corrientes (“pisaverde”, “mangante”, “tarambana”) o expresiones como “A la buena de Dios”, “!Oiga, pollo! “, “¡Vaya una señorita del pan pringao!” 7