Asignatura: Realidad Nacional Nombre: Leydi Carolina Noriega Mauricio Danitza Mercedes Alvarado Pacherres Facultad: Psicología Desborde popular: En este capítulo, analiza los antecedentes de lo que denomina “Desborde popular” de los pobladores indígenas a la capital, describiendo el escenario político, económico y social del proceso de migración que afronto el poblador rural a lo largo del siglo XX. A manera de antecedentes, hace una referencia que durante los procesos de colonización e independización que utilizo el sistema de subordinación de lo indígena en su propio beneficio. A demás advirtió que este sistema genero una persistente discriminación entre el indígena y el europeo, posteriormente entre el serrano y el costeño, indio y criollo, entre lo rural y el urbano. Ya en el siglo XX, los principales antecedentes son: -En el campo político, se genera una búsqueda de un Estado Nación en la década 1920 que aterriza en la creación de partidos políticos radicales de izquierda a derecha que se conecta con los gremios obreros, naciendo el populismo, sin embargo en la década de 1960 se genera acciones guerrilleras que conmocionan la institucionalidad política, así como los posteriores gobiernos militares. - En el campo social, refiere que en la primera mitad del siglo XX el ingreso de nuevas ideas y costumbres al mundo rural fue lento, sumado al pobre avance de los medios masivos de información. Sin embargo, en la década de 1950 se genero un elemento central que caracteriza a la sociedad actual; la concentración de grandes contingentes de migrante en Lima, generando en un nuevo tipo de asentamiento urbano denominado barriada. -En el campo económico, es un periodo marcado por el desarrollo de la actividad económica en 3 campos principales; minería, agroindustria y comercio, que a la vez es impulsado por la construcción de vías de comunicación que cruzan el país de norte a sur y también por vías de penetración. Si bien se genera movimientos de reforma agraria, estos se quedaron como “demandas” antes que como políticas de estados. Denuncia la falta de unidad como nación y la falta de una identidad, siendo esta una de las causas fundamentales de la crisis del Perú Republicano, sentenciando que será aun un problema no resulto; al no haberse encontrado una fórmula de síntesis ecuánime que forjase un continuo entre la herencia andina y herencia colonial, la deuda histórica del siglo XlX deviene en tarea prioritaria para el Perú del siglo XXl . En este capítulo nos revela la nueva cara o faceta de la sociedad peruana, una sociedad que a 1980 representa ¾ partes de la población nacional, una sociedad que a dejado el campo o la vida rural y a migrado a las capitales de departamento a las costas del país o a la ciudad de Lima que de por si representa un porcentaje significativo de la población. Pero esta población ha cambiado, no es la misma de la primera mitad siglo XX. Como antecedente de este cambio, explica la existencia de una crisis económica nacional, vinculada a la subordinación al sistema financiero. La respuesta del estado a esta crisis fue el incremento del control burocrático sobre la industria, comercio y trabajo, generándose un estado mucho más inoperante. Frente a esta situación estos sectores económicos escapan hacia márgenes de la legalidad, produciéndose una economía popular llamada informal. En tal sentido se han ido formando dos circuitos económicos: uno oficial constituido por el universo registrado de personas que operen en el comercio, la producción, transporte, servicio al amparo de leyes y otro contestatario y popular en el que opera un universo de empresas y actividades no registradas que se muevan fuera de la legalidad o en sus fronteras, frecuentemente adaptando al nuevo medio las estrategias, normas costumbres de la sociedad andina y desarrollando creativamente sus propias reglas del juego. Al hacerse más rígido el mercado oficia de trabajo los sectores populares tienden a crear el suyo de este ámbito. Y paralelamente se han creado condiciones para respuestas regionales populares en protesta por la ineptitud estatal. De tal forma que el divorcio entre el estado y la sociedad que se genero en la década de 1950 ha dado lugar a un sistema de relaciones que se opone a la formalidad, amplio y masivo. Desde 1940 hasta 1841, la población de Lima de quintuplico llegando a tener inicio de la década de 1980 un aproximado de 6 millones de habitantes. Esto ha generado en la capital una expansión urbana que ha incorporado los valles de Chillón y Lurín, sin embargo Lima se dividí en dos zonas; una primera surgida de barriadas y urbanizaciones populares y otra que incluye a los distritos tradicionales y modernos. Hasta 1950 el crecimiento urbano de Lima se desarrollo principalmente siguiendo los patrones y normas oficinas. En esa situación el migrante tuvo que adaptarse al contexto que le ofrecía la ciudad y encontrar soluciones dentro de las posibilidades dadas por su experiencia previa. Sin embargo para 1984 Lima se ha convertido en escenario de un masivo desborde popular. La población migrante traslada la herencia cultural a la ciudad generándose fenómenos como: la popularización de la música andina. Por otra parte se genera como problema el colapso de los servicios públicos, entre ellos los dos de transporte. Tampoco el descanso y el ocio encuentran un espacio en la urbe. Lima comienza a esbozar el nuevo rostro peruano, que pugna por lograr una forma definida y tratara de legitimarse jurídicamente venciendo toda resistencia opuesta por la ya debilitada maquinaria de la vieja república criolla: estamos ante una fusión interregional de culturas, tradiciones, e instituciones con fuerte componente andino y dotado de un sentido propio de la ley y de la moral, que depende más de los usos, costumbre y decisiones colectivos y de las necesidades de vivir cotidiano que de las fuentes teóricas del derecho que fundamentaros las constituciones y códigos del Perú republicado.