TEORÍA: 1º) ¿Cuáles son los principales problemas del mundo rural? Señala algunas alternativas: En la actualidad, el mundo rural es un espacio cada vez más heterogéneo y complejo. Por una parte, está recibiendo nuevos usos, diferentes de los agrarios predominantes. Por otra parte, conviven tradición y modernidad. Algunas comarcas mantienen actividades tradicionales de bajo rendimiento y se ven abocadas al abandono. Otras se han modernizado y especializado en producciones competitivas de alto rendimiento orientadas a la comercialización. Sin embargo, ambas padecen diversos problemas que han llevado a hablar de ‘’crisis del mundo rural’’ y se intenta resolver mediante distintas actuaciones políticas. Especialmente las áreas más desfavorecidas padecen diversos problemas que se tratan de solucionar mediante la política de desarrollo rural. En ella intervienen tres administraciones: La Unión Europea, que plantea las directrices generales. Se resumen en competitividad, medio ambiente, diversificación económica y calidad de vida. Para alcanzarlas cuentan con la ayuda del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) El Estado español, que a través del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), ha elaborado el Plan Estratégico Nacional, el cual marca las prioridades nacionales respecto a las directrices europeas Las comunidades autónomas, que elaboran sus Programas de Desarrollo Rural y sus Directrices Estratégicas Territoriales de Ordenación Rural Por todo ello, cabe destacar los principales problemas con los que cuenta el espacio rural, así como sus posibles soluciones: -Problemas demográficos: Por un lado, la disminución y el envejecimiento de la población rural, siendo ambos el resultado de la emigración de los jóvenes a las ciudades para trabajar en otras actividades. Frente a este problema, se favorece la permanencia de la población rural por medio de la concesión de indemnizaciones compensatorias, la mejora de la competitividad de las explotaciones, la diversificación económica y las ayudas a la instalación de agricultores jóvenes. Por otro lado, la escasa cualificación de la mano de obra. Muchos productores agrarios tienen una insuficiente formación que dificulta la innovación. Por ello, se trata de incrementar la formación básica, evitando el abandono temprano del sistema educativo y fomentando también la formación profesional y la formación continua -Problemas económicos: Existe todavía una escasa diversificación económica del espacio rural, que mantiene una excesiva dependencia de las actividades agrarias. Frente a este problema, se promueve la diversificación económica, fomentando la transformación artesanal o industrial de la producción y el turismo rural. A su vez, es insuficiente el empleo de las telecomunicaciones y de las nuevas tecnologías. Para combatir este problema, se fomenta la implantación de las telecomunicaciones y de las nuevas tecnologías en el medio rural, el desarrollo de la I+D+H agraria y la transferencia tecnológica Por otro lado, la dependencia agraria de la industria y del mercado es cada vez mayor. La dependencia de la industria se concreta en la necesidad de comprarle muchos productos básicos y de vender la producción a las fábricas agroalimentarias, mientras la dependencia de los mercados mundiales, se caracteriza por ser las empresas multinacionales quienes controlen la producción y la distribución. Frente a este problema se impulsa la formación de cooperativas agrarias para la compra, transformación y venta de los productos. Otro problema económico que nos encontramos es la necesidad de adoptar nuevas exigencias de seguridad, sanidad y bienestar animal, establecidas en la última reforma de la Política Agrícola Común. Para conseguirlo, las ayudas agrarias estarán condicionadas a su cumplimiento. La seguridad alimentaria pretende controlar los fraudes y peligros alimentarios. La sanidad intenta evitar las plagas vegetales y ganaderas, por lo que se controlan los fertilizantes, los fitosanitarios y los productos transgénicos. Por su parte, en la ganadería se realizan campañas de erradicación de enfermedades y saneamiento ganadero. Finalmente, el bienestar animal se entiende como un trato adecuado al ganado durante la cría en las explotaciones, el transporte y el sacrificio, evitando sufrimientos innecesarios. Por último, las exigencias de la demanda en cuanto a calidad y diversificación en la dieta requiere medidas de adaptación. Entre ellas se encuentran el fomento de las denominaciones de origen y calidad, los planes para adaptar la producción a los gustos del consumidor y las campañas de promoción en mercados emergentes y exteriores -Problemas sociales: muchos núcleos rurales tienen problemas de calidad de vida motivados por las deficiencias en accesibilidad, infraestructuras, servicios elementales y equipamientos. Esto se explica en parte por las bajas densidades demográficas y en algunos casos por la lejanía respecto a los núcleos urbanos. Para solucionarlos, se llevan a cabo actuaciones para mejorar la accesibilidad y la dotación de infraestructuras y equipamientos - Problemas medioambientales: La actividad agraria genera alteraciones medioambientales. El aire se contamina por los olores, el polvo y los gases emitidos por la maquinaria. Las aguas superficiales y acuíferos se sobreexplotan y se contaminan con los productos químicos. La vegetación desaparece debido a la tala y a los incendios provocados para obtener tierras de cultivo o pastos y el suelo se sobreexplota por la intensificación agrícola. Frente a estos problemas, se fomenta una agricultura sostenible, respetuosa con el medio ambiente, promoviendo diversas medidas (mejorar la calidad del aire, evitar quemar los rastrojos, utilización de sistemas eficientes de riego, controlar el uso de fertilizantes, luchar contra los incendios, extensificar la agricultura…) y el desarrollo de la agricultura ecológica, la cual utiliza sistemas naturales para producir. Los suelos se descontaminan y después se usan abonos orgánicos para fertilizar, rotación de cultivos para evitar el desgaste del suelo y sistemas naturales para combatir las plagas. Sus productos son más sanos, pero resultan más caros, por lo que la mayoría de los productos se exportan. Por otro lado, la actividad agraria acentúa la reducción de la biodiversidad, pues la especialización utiliza un número limitado de especies vegetales y animales, generalmente extranjeras, con el peligro de desaparición de algunas especies autóctonas. Por ello, se fomentan las variedades autóctonas y algunas razas ganaderas se han declarado de protección especial. Por su parte, el despoblamiento amenaza la supervivencia de paisajes rurales tradicionales, de gran valor histórico y cultural. Para evitarlo, la política de desarrollo rural de la UE concede ayudas para el mantenimiento de la población y de las actividades tradicionales. 2º) Los sectores industriales en España y sus perspectivas de futuro. En la actualidad, España puede considerarse una potencia industrial, pues ocupa el noveno lugar entre los países del mundo y el quinto dentro de la Unión Europea. Un 18% del PIB se genera en la industria, a lo que se une el 10% de la construcción. En España, la importancia económica de la industria es mayor que lo que refleja sus cifras de empleo. La productividad del trabajo industrial es mayor que en las restantes actividades y crece por la incorporación de nuevas tecnologías. Muchas empresas de servicios dependen de la industria, sector que más invierte en investigación y desarrollo. Pero la industria también es una actividad con fuerte impacto geográfico, ya que es gran consumidora de energía y recursos naturales. Además de generar residuos, los territorios industrializados son los más dinámicos desde el s. XIX, aumentando la población y el nivel de renta. También algunas áreas industriales, hoy en declive, se enfrentan a diferentes problemas sociales. Estructuralmente, la dimensión de las empresas es pequeña, de modo que más del 90% cuentan con menos de 50 trabajadores, o mediana (entre 51-500), aunque generan casi un tercio del empleo. Pero cuentan con ventajas, como la mayor agilidad y flexibilidad ante los cambios y la menor conflictividad laboral. En cambio, sus productos son menos competitivos porque no permiten economías de escala ni grandes inversiones. Las grandes empresas son pocas. Si atendemos a la localización industrial, encontramos diversos factores y tendencias de la misma. Aunque se mantienen las grandes concentraciones ha habido cambios desde 1980. La difusión a espacios periféricos se debe a la saturación y encarecimiento del suelo, equipamientos e infraestructuras, la mayor conflictividad laboral, el deterioro del medio ambiente también... Por otro lado, las mejoras tecnológicas permiten separar la dirección y gestión de la producción buscando el emplazamiento más favorable. El capitalismo busca nuevas estrategias para aumentar los beneficios, reduciendo costes salariales, fiscales... Se desarrolla la industria endógena, basada en los recursos de cada zona. La intensificación de los procesos de difusión industrial tiene varias causas: expectativa de beneficio al sustituir los usos del suelo, lo que provoca presión inmobiliaria, oferta de polígonos de calidad en ciudades menores e iniciativas locales para innovar la industria. También hay causas que frenan el traslado, como la cualificación de los trabajadores, la localización de los centros financieros o la generación de economías externas que no dependen de la propia empresa Hay grandes desequilibrios en población, riqueza, infraestructuras, peso político, etc. Por eso el fomento de la industria ha sido uno de los objetivos básicos en las políticas para el desarrollo industrial. En los últimos 20 años las políticas de reindustrialización y de regeneración urbana han tenido éxito desigual. Se han mantenido antiguas empresas con intensas mejoras y reducción de empleo y han surgido actividades que diversifican la economía. En efecto, podemos encontrar áreas industriales desarrolladas, en expansión, en declive y de industralización escasa e inducida. Por ello, cabe destacar dos políticas que tratan de mejorar el espacio industrial español. Tratan de corregir los problemas estructurales de la industria y los desequilibrios regionales. Sus principales objetivos son aumentar la competitividad y constituir espacios de calidad que rehabiliten los deterioros de los existentes Las propuestas actuales propugnan la industrialización endógena. Se lleva a cabo una microplanificación que requiere mayor protagonismo de las administraciones locales y regionales. Se apoya a las pymes locales por su capacidad de generar empleo y su flexibilidad ante los cambios. Las estrategias se han centrado en la creación de Sociedades para el desarrollo industrial (años 70), con proyectos de inversión medianos y pequeños. Los resultados se han dado en los sectores agroalimentario, metalúrgico y maduros. En cuanto a la producción industrial, los sectores industriales maduros en proceso de reconversión siguen siendo los que cuentan con más peso. Se han visto afectados por la reducción de la demanda, el descenso de competitividad y las exigencias comunitarias. Metalúrgica básica y transformación metálica. La siderurgia ha sufrido el cierre de Altos Hornos del Mediterráneo y Vizcaya, y en Asturias se ha privatizado. Han disminuido los costes, se ha diversificado la producción y ha aumentado la calidad. Los transformados metálicos se concentran en Barcelona-País VascoMadrid. Electrodomésticos de línea blanca que han reorganizado la producción (especialización), la empresa (concentración) y el mercado (diversificación). Construcción naval, de gran concentración que ha sufrido un duro ajuste, teniendo que especializarse en otras actividades Textil del cuero y del calzado. Las fibras químicas tienen un fuerte componente tecnológico y se concentra en grandes industrias con participación extranjera. La confección se caracteriza por el minifundismo empresarial y el abundante empleo de mano de obra Por su parte, los sectores industriales dinámicos ofrecen gran presencia de capital extranjero, mejores expectativas por su alta productividad y especialización, flexibilidad y una demanda asegurada. Emplean tecnología media, ofreciendo productos de calidad y beneficiándose del aumento del consumo y de las exportaciones. Destacan entre ellos: Automóvil: reconversión por las multinacionales con ayudas oficiales, ya que el automóvil es una de las principales exportaciones españolas. Necesita ajustes y renovación tecnológica. Química: base de la industria española pero con exceso de capital extranjero, falta de competitividad y escasa investigación. Comprende la química de base (petroquímica), integrada con la actividad refinera y la química de transformación, estructurada en empresas pequeñas (en País Vasco, Cataluña litoral, Madrid) que incluyen colorantes, barnices, perfumes, farmacia, papel… Agroalimentaria: industrias pequeñas y dispersas, multinacionales con ventas interiores y exportación. Construcción más sensible a las fluctuaciones. aunque también A diferencia, los sectores industriales punta, implantadas con retraso, se caracterizan por dependencia del exterior debido a la baja inversión y a la insuficiente integración. Dominan las empresas pequeñas o medianas, poco competitivas y limitadas al mercado interior. Muestran escasa adaptación de la mano de obra y del sistema educativo a las demandas empresariales. Se localizan en parques tecnológicos o científicos, pretendiendo que actúen como locomotoras para el desarrollo local, atrayendo a otras empresas y difundiendo las innovaciones. Como resultado, la capacidad para atraer empresas ha sido indudable en los parques con un entorno favorable (Madrid, Barcelona), pero la difusión de las innovaciones en el entorno ha sido discutible ya que dichas multinacionales investigan en el país de origen. Han aumentado los desequilibrios espaciales, pues las nuevas tecnologías son muy selectivas y dependen de servicios especializados. A pesar de su incipiente recuperación, la industria española se enfrenta a una seria de problemas estructurales, territoriales y medioambientales que tratan de solucionarse mediante políticas industriales enmarcadas dentro de la política industrial de la Unión Europea: -Problemas estructurales con el predominio de sectores industriales en crisis, la dimensión inadecuada de las empresas, ya que más del 90% de las empresas son pequeñas o medianas, escasa investigación ya que la inversión en I+D es muy reducida, muy por debajo de la de otros países comunitarios y una tecnología atrasada y dependiente de patentes extranjeras. Consecuentemente, trae con ello baja productividad y calidad, el mayor precio de los productos y la menor competitividad, consolidándose la situación semiperiférica de España en el contexto internacional. Para corregirlo se lleva a cabo una política industrial que trata de fomentar la cooperación industrial entre las empresas, promover la inversión en la formación de mano de obra y garantizar la libre competencia dentro del mercado comunitario, evitando que surjan monopolios -Desequilibrios territoriales, existiendo claros contrastes entre áreas industrializadas y zonas de escaso desarrollo industrial. Estos desequilibrios en el reparto espacial de la industria condicen a su vez a otros desequilibrios espaciales en el reparto de la población, de la riqueza, de las infraestructuras, equipamientos y servicios sociales que han afectado negativamente a las regiones españolas más atrasadas. Para corregirlos se llevan a cabo políticas de promoción industrial que promueven polos de desarrollo, zonas de preferente localización industrial, polígonos de preferente localización y descongestión industrial y grandes áreas de expansión industrial. -Problemas medioambientales ocasionadas por la industria, entre los que podemos mencionar el uso abusivo de los recursos naturales, la contaminación debido a las emisiones de gases y los residuos y ruidos que generan y la degradación estética del paisaje. Para corregirlos se llevan a cabo actuaciones de desarrollo sostenible caracterizadas por realizar operaciones de rehabilitación que eviten el uso abusivo de los recursos y la contaminación España no puede basar su futuro solo en el turismo y los servicios. Si quiere construirse un porvenir, además, como productor de bienes, tiene que desarrollar modelos más flexibles de producción, apoyar decididamente la I+D como ventaja competitiva frente a los países que producen a bajo precio y, ante eljust in time, planificar a largo plazo. Tiene que competir con los países más avanzados. En este contexto, el análisis de los factores que pueden conducir al éxito es mucho más determinante que cualquier interpretación de la situación actual. Ya desde hace unos años se ha rechazado la idea de que sean las tecnologías las que diferencien a unos países de otros, ya que la técnica y las máquinas son accesibles a todos. Las empresas españolas tienen un gran reto para poder sobrevivir en un mercado global donde, obviamente, hay que ofrecer diferenciación frente al resto de competidores. El asunto es cómo desarrollar esta diversidad, que no solo puede llegar de la calidad, o del bajo coste de nuestra mano de obra, como ha ocurrido en las últimas décadas, sino que hay que estar reinventando y consolidando dentro de las organizaciones de forma continua. Desde luego empeñarse en posicionarse en productos donde solo el coste sea lo que marque la diferencia resulta muy arriesgado. La adaptación de los procesos y la organización de compras a los nuevos retos de la globalización y la nueva posición competitiva, con un enfoque hacia la reducción de los costes de compra, es otro de los objetivos que resulta necesario conseguir. A ello se le suma mejorar la segmentación de las familias y la planificación de estrategias concretas en cada una de ellas que prevean las oportunidades en países de bajo coste y desarrollar la involucración de los proveedores desde la primera fase de desarrollo. La creación de equipos de programas flexibles e integrados resulta fundamental para desarrollar estos objetivos. Para ello, hay que establecer dentro de las fábricas una orientación dirigida a estos programas, lo que supone un mayor coste de estructura. Sin embargo, a largo plazo, la eficiencia compensa los inconvenientes. 3º) ¿Cuáles son las repercusiones o impactos de la actividad turística en Canarias? Señala algunas alternativas. El turismo es la principal actividad económica de las islas debido al sistema de franquicias, la legislación favorable a la inversión extranjera, el salario y condiciones de vida precarias para la agricultura. Además, es destacado por la posición estratégica de las islas (clima, distancia a Europa y Norteamérica), por el desarrollo del turismo de masas. Los núcleos turísticos pueden tener base urbana precedente, caso de Las Palmas de G.C. y Puerto de la Cruz, que ofrecen emplazamientos con servicios urbanos. En algunos casos no eran ciudades sino pueblos con una estructura menor. También ha habido núcleos de nueva planta, sin base urbana previa pero que han surgido por ser el suelo más barato o por inversiones de capital (Maspalomas, Las Américas). La oferta turística la integran los tipos de alojamientos (apartamentos, hoteles y bungalows), la restauración y las instalaciones complementarias. En Canarias se ha promovido la construcción de urbanizaciones en las zonas próximas a los núcleos turísticos, sobre todo en los litorales meridionales, donde se vendieron grandes parcelas para complejos turísticos. Canarias cuenta con casi 150.000 plazas hoteleras (10’87% del total nacional), pero es necesaria su renovación y diversificación. Las empresas de restauración son pequeñas, mientras las hoteleras son medianas y grandes. En ambas es escasa la preparación y es necesaria la mejora de las infraestructuras. En cuanto al origen de los turistas, domina el europeo, sobre todo ingleses, alemanes, y luego escandinavos y turismo nacional. En Tenerife dominan los alemanes hasta el 74, y actualmente, ingleses, españoles y alemanes. La estancia media es de 8’2 días y la ocupación hotelera tiene una media del 83%. Es un turismo muy ligado a condiciones climáticas por lo que la corriente tradicional ha sido invernal, compitiendo con áreas más consolidadas pero frías en invierno. Para cubrir el vacío estival se explotó el mercado peninsular. En la estacionalidad interviene la edad y la condición socioeconómica, de modo que la población joven y activa viene en verano. Las plazas se concentran en Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura. En las islas occidentales hay gran concentración en Tenerife, observándose más diversidad en las orientales. Además, la mayor parte de las plazas se concentran en muy pocos municipios: Pájara, La Oliva, Antigua, Tías, Tinajo, Teguise, Las Palmas de G.C., Mogán, S. Bartolomé, zonas norte y sur de Tenerife. Por lo que se refiere al impacto, el turismo tiene gran incidencia, a nivel económico, territorial, social, demográfico y medioambiental: Por un lado, a nivel económico el turismo supone para Canarias, aproximadamente, el 28,5 % de nuestro PIB y el 33% de nuestro empleo directo (guías de turismo, recepcionistas, camareros, gerentes, directores de establecimientos turísticos,…) Además del empleo directo, el turismo tiene un efecto multiplicador sobre otras áreas y empleos: bebidas, comidas, restaurantes, comercios, transporte, imprentas… El descenso porcentual en la aportación al PIB en los últimos años es debido tanto al estancamiento del gasto por turista, como a la mayor capacidad de crecimiento de otros sectores. Así explica la concentración de la población en los municipios turísticos del litoral y su desarrollo urbano, el cual crea empleo y ejerce un efecto multiplicador. Territorialmente ha incrementado la densidad edificatoria, dando lugar a grandes irregularidades urbanísticas y proliferando plazas destinadas a un turismo barato en detrimento de la calidad. También ha afectado a zonas de elevado valor paisajístico y ha ocasionado pugna por el suelo y el agua con la agricultura de exportación. A su vez ha provocado destrucción de ecosistemas (introducción de flora y fauna exóticas, proliferación de canteras). Social y demográficamente, el turismo ha sido un factor de atracción de la población que se ha concentrado en los municipios turísticos del litoral (S. Bartolomé de Tirajana, Sta. Lucía de Tirajana…), y ha impulsado su desarrollo urbano no siempre de forma ordenada. Ha originado segregación de los enclaves turísticos en relación con los núcleos dormitorio, pérdida de control de la población residente sobre las decisiones territoriales y excesivo dominio de los tour operadores sobre el mercado (por el aumento de oferta y el incremento de la competencia de otras zonas). Se ha producido una segregación entre los enclaves turísticos por una parte (Maspalomas-Playa del inglés) y los núcleos residenciales por otra (Vecindario-El Doctoral, S. Fernando de Maspalomas…). Así mismo, los residentes han perdido el control sobre las decisiones espaciales en favor de los centros de decisión supramunicipales y extracomunitarios. En cuanto al medioambiente, en algunas zonas, se ha producido una alta densidad edificatoria y se ha construido infraestructuras turísticas en áreas de alto valor paisajístico. Igualmente, la actividad turística demanda un excesivo consumo re recursos escasos en perjuicio de otras actividades. Tampoco es menor la contaminación acústica, atmosférica y visual que provoca el tráfico, discotecas, pubs… y el problema de los residuos. Por ello, el instrumento para paliar estos aspectos negativos del turismo es la política turística. Su objetivo es potenciar el turismo a través de cinco tipos de actuaciones recogidas en el Plan de Infraestructuras y Calidad Turística de Canarias: -Mejora de equipamientos y paisajes urbanos, rurales, costeros… de interés turístico: zonas verdes, paseos, senderos… -Adecuado uso turístico de recursos históricos, culturales y naturales: espacios naturales (Los Tilos de Moya), históricos (Vegueta) y culturales (Auditorio). -Diversificación de la oferta turística y mejora de la calidad: turismo náutico, cultural, golf, de aventuras, deportivo, gastronómico… -Creación y mejora de infraestructuras relacionadas con el marketing y la información turística -Planes de excelencia turística tanto en los destinos turísticos maduros y consolidados (Maspalomas-Playa del Inglés…) como en zonas de potencial turístico aún en sus inicios (Artenara, Tejeda…) El Consejo Económico y Social de Canarias intenta evitar la degradación de la oferta y facilitar su rehabilitación y adecuación con estándares de calidad, debiendo considerar el turismo como actividad exportadora a efectos fiscales. Debe fomentarse el papel del sector público en la formación profesional, en la protección de los recursos y en el desarrollo y consolidación de las infraestructuras. El Régimen Económico y Fiscal de Canarias establece la creación de actividades de ocio complementarias, la potenciación del turismo especializado y la inclusión diferenciada de Canarias en las campañas de promoción estatales. El Plan de Desarrollo Regional propone un turismo sostenible y competitivo, con mejor calidad y oferta diversificada, con campañas nacionales e internacionales de promoción y explorando nuevos mercados. En definitiva, se pretende evitar la degradación de la oferta y adecuarse a estándares de calidad, fomentar el papel público en la formación profesional y en la protección de los recursos e infraestructuras, la creación de actividades de ocio complementarias, turismo especializado e inclusión diferenciada en las campañas de promoción estatales…. Se busca un turismo sostenible y competitivo con una oferta diversificada. 4º) Conceptos: -Agricultura ecológica: la agricultura ecológica, orgánica o biológica, es un sistema para cultivar una explotación agrícola autónoma basada en la utilización óptima de los recursos naturales, sin emplear productos químicos de síntesis u organismos genéticamente modificados (OGM). Se logra de esta forma obtener alimentos orgánicos saludables, de mayor calidad nutritiva a la vez que se conserva la fertilidad de la tierra y se respeta el medio ambiente. Todo ello de manera sostenible y equilibrada, incrementando la salud de los agrosistemas -PAC: la Política Agrícola Común (PAC) es una de las políticas más importantes y uno de los elementos esenciales del sistema institucional de la Unión Europea (UE). La PAC gestiona las subvenciones que se otorgan a la producción agrícola en la Unión Europea y consigue que crezca la economía. Su mayor objetivo es apoyar la renta de los agricultores, al tiempo que los anima a conseguir los productos de alta calidad que exige el mercado y a buscar nuevas oportunidades de desarrollo, como son las fuentes de energía renovables, en armonía con el medio ambiente -Enarenados: técnica que, junto a otras operaciones, incluye la de extender sobre el suelo de cultivo un recubrimiento superficial de arena. Se usa para evitar la pérdida de agua por evaporación, manteniendo la capacidad de infiltración del suelo, en los cultivos tempranos de la costa del Sureste español. Se requiere de una observación constante de las tierras cultivadas, pero sus ventajas son múltiples: ahorro de agua, mejora de la estabilidad térmica de los suelos, favorece la movilidad y absorción de algunos elementos fertilizantes, dificulta el desarrollo de malas hierbas… todo ello, simplificando y economizando las labores. -Aguas jurisdiccionales: máximo ámbito especial marítimo en el cual el Estado ribereño ejerce sus competencias territoriales sin distinguir que sean exclusivas o concurrentes, plenas o fragmentarias; es decir, con esta expresión se designa el conjunto de las aguas interiores, del mar territorial, de la zona contigua y, recientemente, de la zona económica exclusiva. En ella se engloban por igual, con carácter unitario o indistinto, zonas perfectamente delimitadas, con status jurídicos distintos -Deslocalización industrial: se llama deslocalización al movimiento que realizan algunas empresas trasladando sus centros de trabajo en países desarrollados a países con menores costes para ellos, generalmente del Tercer Mundo. Recientemente se ha empezado a deslocalizar a sus países de origen la producción de empresas adquiridas por estas multinacionales. Es uno de los problemas causados por la globalización económica. Las causas de este proceso suelen ser la búsqueda de menor coste de la mano de obra, legislaciones menos estrictas y condiciones de trabajo más flexibles -Parque tecnológico: Un parque científico, tecnológico o de investigación es, según la definición de la International Association of Science Parks (IASP), es un organismo gestionado por especialistas cuyo principal fin es incrementar la riqueza de su comunidad por la promoción de la cultura y la innovación, así como la competitividad de sus empresas e instituciones fundadas en el saber que se le asocian o se crean en su torno. Facilitan la creación y crecimiento de compañías innovadoras como incubadora de empresas, y ofrece otros servicios de valor añadido, además de espacios e instalaciones de alta calidad. -Turismo rural: el turismo rural es una actividad turística que se realiza en un espacio rural, habitualmente en pequeñas localidades o fuera del casco urbano en localidades de mayor tamaño. Las instalaciones suelen ser antiguas masías y caseríos que, una vez rehabilitados, reformados y adaptados, suelen estar regentados familiarmente, ofreciendo un servicio de calidad. El agroturismo, el turismo ecológico y el enoturismo son algunas de las modalidades que, de acuerdo a sus características, pueden incluirse dentro del turismo rural. Es relativamente reciente en España en relación con el resto de Europa, donde ya existía desde los inicios del turismo de masas - I+D+i: Investigación, desarrollo e innovación expresión es un concepto de reciente aparición, en el contexto de los estudios de ciencia, tecnología y sociedad; como superación del anterior concepto de investigación y desarrollo. Es el corazón de las tecnologías de la información y comunicación. Todos los países procuran, en la medida de sus posibilidades, potenciar las actividades ligadas a la I+D+i a través de políticas de apoyo (subvenciones, deducciones, préstamos bonificados y otras), debido a que un alto nivel de I+D+i implica una mayor fortaleza de los productos o procesos que se diferencian positivamente de los de su competencia. - Terciarización económica: transformación económica y social que afecta a los países más desarrollados desde la última fase de la revolución industrial. No solamente consiste en que la población activa en el sector terciario (servicios) pasa a ser más numerosa que la del sector secundario (industria), sino que la forma de trabajo propia de este sector se difunde por todos los demás, terciarizándolos. Tiene como consecuencias la división internacional del trabajo y deslocalización, industria limpia, estructura laboral, subempleo y movimiento obrero, espacio rural, sustititución de espacios residenciales por comerciales y el estancamiento de la productividad. -Turoperador: El término turoperador es el adecuado para aludir en español a la empresa mayorista de turismo que vende viajes organizados, según señala el Diccionario panhispánico de dudas. Organizan los viajes contratando directamente con los proveedores de los servicios. PRÁCTICAS: 1º) Comentario de la Imagen de paisaje agrario tecnificado, Berja Nos encontramos ante un paisaje agrario, concretamente el de Berja, municipio español de la provincia de Almería. Su extensión superficial es de 218 km² y tiene una densidad de 70,29 hab/km². Posee un clima mediterráneo y en consecuencia, sus características serán las propias de un paisaje mediterráneo. De esta forma, se observa a simple vista la presencia de infinidad de invernaderos, generando gran humedad y calor en esta zona seca. A su vez, también apreciamos que se trata de una zona llana, por lo que los cultivos son aun más abundantes. La vegetación es escasa y representada por el matorral mediterráneo adaptado a la aridez del clima, que registra una precipitación media anual algo superior a los 400 mm, y una temperatura media anual cercana a los 18ºC. Por su parte, el suelo es un suelo poco evolucionado, pero regado y acondicionado para permitir el aprovechamiento agrícola. Es de tipo caliza y los usos agrícolas a los que está destinado reside en los monocultivos de exportación hortofructícola (pimientos,aceitunas...),regido por una agricultura intensiva. En cuanto al agua, escasa, se distingue en las proximidades de las montañas, donde se filtra por sus huecos, provocando así avenidas de agua cuando baja por la cordilllera. En cuanto a sus elementos agrarios, destacan los cultivos de regadíos, siendo los invernaderos los que ejercen su predominio en el paisaje. Son estructuras fijas cubiertas de plástico, que crean un microclima cálido y húmedo que acelera la maduración de los cultivos y permite obtener varias cosechas anuales. Generalmente, va asociado al riego por goteo y al enarenado. El riego por goteo aporta agua y nutrientes a cada planta a través de pequeños orificios practicados en tubos. Por su parte, el enarenado prepara el terreno con una capa de estiércol y otra superior de arena, la cual filtra la humedad y el estiércol la retiene y la devuelve poco a poco a las plantas, actuando además como abono. Estas técnicas se ven favorecidas por las características del medio físico, ya que presenta unas temperaturas suaves, elevada insolación y protección del relieve. El uso agrario del suelo es exclusivamente agrícola. Abundan los monocultivos frutales mediterráneos cultivados en regadío mediante una agricultura intensiva continua desarrollada en pequeñas parcelas, destinándose la producción al comercio gracias a la fuerte demanda internacional. La producción agraria se realizará de forma industrial y con tecnología moderna Por su parte, las parcelas son cerradas, de mediano o pequeño tamaño, con formas más o menos regulares y distribuidas separadamente unas de las otras, como apreciamos en la foto. La pequeña dimensión de las parcelas bajo cierre no indica, en modo alguno, la escasez de las parcelas, pues la puesta en cultivo de las mismas exige fuertes inversiones. En cuanto a sus elementos no agrarios, observamos un pequeño núcleo de población en la parte central de la imagen y ocupando zonas llanas del fondo del valle, así como poblamiento disperso, principalmente en las zonas de relieve más abrupto. También observamos la presencia de vías de comunicación, asfaltadas o pistas de tierra, que comunican el pueblo con los cultivos y por tanto, facilitan la producción Finalmente, si analizamos sus repercusiones, podemos comprobar que este tipo de agricultura presenta graves problemas ambientales y genera un significativo impacto visual. El agotamiento y salinización de acuíferos ha forzado la construcción de embalses, habiéndose producido en ocasiones una fuerte presión sobre los recursos hídricos. El uso de plásticos, que son sustituidos periódicamente, y la utilización masiva de productos fitosanitarios generan, además, problemas de contaminación que no deberían ser pasados por alto. Por ello, en cuanto a la comercialización de los productos, las políticas agrarias están fuertemente marcadas por la PAC (Política Agraria Comunitaria), pues determina la estabilidad y posibilidades de futuro de este sector. Su mercado prioritario y casi exclusivo es el de la UE, por lo que sin la protección arancelaria con respecto a la producción de países terceros, no comunitarios, los problemas se multiplicarían en pondrían en serio riesgo su pervivencia. Con respecto a los problemas ambientales, es evidente que las políticas han de intentar paliar los problemas relacionados con el uso intensivo del agua, fomentando su ahorro y buscando otras alternativas de abasto, e incluso poniendo límites a la expansión de la superficie regada, que siempre deberá estar condicionada por los recursos hídricos disponibles. Por otro lado, sería conveniente un mayor control de los productos fitosanitarios, así como una mayor utilización de plásticos biodegradables que reduzcan su impacto sobre el medioambiente. 2º) “Participación del sector terciario en el PIB, 2007”, y “Población ocupada en el sector terciario, 2007”. Nos encontramos ante dos mapas políticos temáticos que nos representan las comunidades autónomas en las que se organiza el país. Cuentan con coropletas, utilizando la gama del color naranja para representar la población ocupada en el sector terciario y la participación del sector terciario en el PIB (Producto Interior Bruto), ambos en el año 2007. Muestra el porcentaje que le corresponde a cada comunidad autónoma, expresado este en valores relativos. Dicha gamas de colores vienen indicadas en las leyendas que nos muestran ambos mapas y cuya información procede del Instituto Nacional de Estadística. A pesar de ello, los mapas en sí, han sido sacados del libro de texto Anaya, pág. 237. Por un lado, en cuanto a la población ocupada en el sector terciario, la media española es de 66’2% sobre la población activa y podemos establecer varios grupos en función de los porcentajes. Podemos formar, en primer lugar, con menos del 60,7% a la Comunidad Foral de Navarra (58%), La Rioja (56,3%), Castilla La mancha (58,8%) y Murcia (57,5%). En estas CC. AA. el peso del sector terciario viene compensado por la importancia de otras actividades económicas como la agricultura y la industria y vienen indicadas con el color más suave. En segundo lugar, Galicia, Cantabria, País Vasco, Castilla-La Mancha, Aragón, Cataluña, Valencia y Extremadura formarían el segundo grupo, siendo este el más numeroso, encontrándose entre el 60’7 % y el 65’7% de la población activa y representadas en un tono de mayor intensidad que el anterior. Aquí también hay otros sectores con cierto peso (agricultura, industria…) Por su parte, Andalucía aparece sola en un grupo que aporte de 65’7 a 70’7% sobre la población activa y aparece con un tono bastante llamativo. Finalmente, representados con la tonalidad más fuerte. Finalmente, agrupamos con más del 70,7% de población ocupada en el sector terciario tenemos tres CC. AA y las 2 Ciudades Autónomas: Madrid (77,7%), Baleares (72,4%), Canarias (75,1%), Ceuta (88,5%) y Melilla (92,6%) . Ello se debe, en el caso de Madrid, a su calidad de capital del Estado español donde se concentran multitud de servicios e instituciones: ministerios, embajadas, comercios, delegaciones de empresas multinacionales, su función como importante centro financiero; la ubicación delas sedes sociales de numerosas empresas nacionales e internacionales… En los casos de Canarias y Baleares es obvio que se debe a su condición de archipiélagos turísticos. Buena parte de la población ocupada lo está en el sector turismo y complementarios del turismo. En los casos de las Ciudades Autónomas se debe a la casi inexistencia de otros sectores. Por otro lado, en cuando a la participación del sector terciario en el PIB, la media española se encuentra en un 66’8% sobre el total del PIB. Al igual que con el mapa anterior, la gama de colores utilizadas es la misma. Un primer grupo lo podemos establecer con Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra, La Rioja, Aragón, Castilla-La Mancha y Castilla y León, ya que todas representan menos del 61’8% sobre el total del PIB. Seguidamente, agrupamos a Cataluña, Valencia, Murcia y Extremadura, representando todas entre 61’8 y 66’8 % sobre el total del PIB. Andalucía vuelve a encontrarme sola, con un 67’9 %, y finalmente, Madrid, Canarias, Baleares, y Ceuta y Melilla, representando todas más del 71’8% sobre el total del PIB. De resto, las comunidades muestran porcentajes parecidos y se aproximan al de la media española, destacando únicamente, la importancia de la industria catalana y de la siderúrgica en el País Vasco. Si comparamos ambos mapas vemos que los % no siempre coinciden. Un % más alto de empleados en el sector pero un menor peso en el PIB puede indicarnos poca o menor productividad, pero también puede significar que en los otros sectores hay una mayor productividad o rentabilidad que hace disminuir el % del terciario independientemente de su calidad o valor. El sector terciario comprende las actividades que proporcionan servicios a la sociedad. Incluye todas aquellas actividades que no son primarias ni secundarias, como el transporte, el turismo o el comercio. El crecimiento de los servicios a partir de la década de 1960 ha supuesto la ‘’terciarización’’ de la economía española, en la que este sector aporta más del 60% al PIB y a la ocupación. Es muy heterogéneo y se presta a distintas formas de clasificación: Una primera clasificación básica diferencia los servicios en dos grupos, según su titularidad y fines. -Los servicios privados o de mercado lo prestan las empresas privadas con el dinero pagado por los clientes. Pretenden obtener beneficios económicos, aportando este tipo de servicios en España, la mayor parte del empleo y del PIB del sector terciario. -Los servicios públicos o de no mercado lo prestan el Estado o las administraciones públicas, con el dinero recaudado por los impuestos. Su fin es proporcionar bienes a la sociedad. Por su parte, los subsectores en los que se engloban las actividades terciarias forman cuatro grupos: -Servicios a la empresa: han ido creciendo hasta ocupar el primer lugar en su aportación al PIB y el tercero en el empleo (asesoría, estudios de mercado, publicidad…) -Servicios de distribución: destacan en España el comercio y los transportes y comunicaciones (transportes, comunicaciones, correo…) -Servicios sociales: la administración pública desempeña un importante papel en el empleo, y la enseñanza y la sanidad públicas disminuyen su aportación al PIB y al empleo, debido a la privatización de una parte de estas prestaciones (sanidad, educación, administración pública…) - Servicios al consumidor: aquí la hostelería ha ganado peso, en relación con el crecimiento de la capacidad de gasto y de las actividades de ocio (hostelería, restauración, reparación…) En cuanto a las desigualdades territoriales explicadas anteriormente al describir los mapas, encontramos varios factores que impulsan este hecho. Las empresas de servicios representan en torno al 80% del total. Las más numerosas son las comerciales, seguidas por los servicios a las empresas, el turismo y los transportes. En su inmensa mayoría son pymes. La mano de obra ha ido creciendo y supera el 60% de la población activa (66’8%), dado que muchos servicios no son mecanizables. Además, presenta grandes contrastes entre mano de obra cualificada, que percibe salarios más altos y es más estable, y ano de obra no especializada, que recibe salarios inferiores y padece mayor inestabilidad. La aportación de los servicios al PIB supera el 60% (66’8% en 2007). En unos casos, este hecho indica desarrollo económico y alto nivel de vida. Sin embargo, en ocasiones significa un escaso desarrollo de los otros sectores, especialmente de la industria, o esconde una polarización económica en una actividad muy concentrada como el turismo. El encarecimiento de los servicios está provocando una tendencia creciente a sustituir los servicios por bienes o por la autoprestación de servicios. La incorporación de las nuevas tecnologías mejora el funcionamiento de los servicios, favorece la creación de servicios nuevos relacionados con ellas, y posibilita nuevas formas de prestarlos No obstante, se observan desequilibrios, ya que, aunque los servicios tienen gran ubicuicidad, su localización está influida por factores que generan diferencias en el volumen de población, en el grado de urbanización y en los niveles de desarrollo y de renta. Estos factores motivan y generan, consecuentemente, diferencias en el grado de terciarización y en el tipo de servicios. El grado de terciarización, como explicamos anteriormente, es mayor en las comunidades especializadas en el turismo, en Madrid, que concentra servicios estatales y funciona como centro de mercado a escala nacional. Ceuta y Melilla, donde son uy escasas las demás actividades productivas. La terciarización es menor en las comunidades con mayor peso relativo agrario y agroindustrial. El sector terciario se concentra también en las grandes ciudades. No obstante, hay que tener en cuenta que algunas grandes ciudades han iniciado una difusión de servicios hacia ciudades medias y pequeñas e incluso hacia áreas rurales, favorecida por la mejora de los transportes y por las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación. Por su parte, la aportación de los servicios al PIB es mayor en los espacios donde predominan los servicios más avanzados, como en Madrid. En este aspecto, se aprecian también importantes contrastes. Los servicios más cualificados, como los servicios a las empresas, dominan en un reducido número de provincias y tienden a concentrarse en las grandes ciudades. Los servicios al consumidor están más implantados en las áreas turísticas y finalmente, la terciarización es menor en los espacios donde predominan los servicios menos cualificados, como el comercio y los servicios personales, administrativos y asistenciales. En el futuro, las desigualdades y consecuencias, nombradas anteriormente, en la terciarización, pueden aumentar. El crecimiento se orientará a la mejora cualitativa y a la diversificación de los servicios. La distribución de los servicios estará cada vez más condicionada por el desigual reparto de las actividades productivas y de la renta. 3º) “Evolución del número de visitantes y de los ingresos por turismo. 1955‐2007”. Nos encontramos ante un gráfico lineal sobre la evolución del número de visitantes y de ingresos por turismo en España durante el periodo 1955-2012. En el eje vertical aparecen representados los números que equivalen a la cantidad de visitantes, en millones y los ingresos por turismo, expresada en miles de millones de euros. Es importante diferenciar ambos conceptos. Visitante es la persona que visita otro país y vuelve a su destino habitual en el mismo día. Es decir, no pasa ninguna noche en el país extranjero. Sin embargo, el turista, es aquella persona que visita un país extranjero y se queda en él, como mínimo, una noche. Por su parte, en el eje horizontal, aparecen representados los años del periodo estudiado. Para ambas representaciones se emplean valores absolutos, estableciendo como única diferencia, el color de la línea empleada para mostrar ambas evoluciones: azul para los visitantes y roja para los ingresos por turismo. La información procede del Instituto Nacional de Estadística. Se entiende por turismo al conjunto de actividades desarrolladas por las personas en los viajes y estancas realizadas, por motivos de ocio, negocios u otros motivos sin remuneración y durante un período de tiempo inferior a un año. El modelo turístico implantado en la década de 1960 fue el turismo de masas de ‘’sol y playa’’. Se caracteriza principalmente por una oferta turística abundante y barata, dirigida a una demanda homogénea y masiva, de poder adquisitivo medio o medio bajo, muy concentrada temporalmente en verano y espacialmente en las zonas de sol y playa de Baleares, Canarias y el litoral mediterráneo. También son rasgos característicos de este modelo la dependencia de tour-operadores internacionales en la comercialización del turismo, y la despreocupación por el impacto medioambiental de esta actividad. Los factores que consolidaron este modelo fueron externos e internos. Los principales factores externos fueron el desarrollo económico de Europa occidental y septentrional tras la Segunda Guerra Mundial y el progreso del transporte que facilitó el traslado. Por su parte, los factores internos son más diversos: la proximidad geográfica de España a la clientela europea, los excelentes recursos naturales (veranos calurosos y secos, excelentes playas…), recursos culturales (tradiciones, folclore, gastronomía…), el bajo coste debido a la devaluación de la peseta, la existencia de infraestructuras y servicios y la política estatal, que normalizó las relaciones internacionales y llevó a cabo una intensiva propaganda de España como destino turístico. Por todo lo anterior, podemos verificar mediante el gráfico, que los inicios de este modelo suponían pequeños ingresos, ya que hasta 1972 no llegaban ni a un mil millones de euros. Con el paso de los años irá cogiendo prestigio y una seria de causas provocarán el aumento progresivo de estos ingresos, convirtiéndose nuestro país en un gran foco turístico. Hay que destacar también el gran aporte monetario que supuso el número de visitantes durante este tiempo, ya que obtuvo un continuo y progresivo ascenso. En 1960 ya se contaba con un 6’1 millones de visitantes, posteriormente con un 14’2 millones en 1965 e incluso alcanzando y superando más de 20 millones entre 1970-1972 Entre 1973 y 1985, el turismo español pasó por un momento de crisis. Esta situación se debió a causas coyunturales y causas de fondo tales como la aparición de nuevos destinos turísticos competidores o problemas de la oferta turística española. Sin embargo, continuaron creciendo el número de ingresos turísticos como podemos apreciar en el gráfico. Se produjo un ascenso progresivo que supuso en 1973 unos ingresos de 1’1 miles de millones de euros y llegando a alcanzar en 1985 unos ingresos de 8’2 miles de millones de euros. Por su parte, el número de visitantes sufrió un descenso y un posterior aumento en ese periodo. En 1973 se alcanzaban los 34’5 millones, pero seguidamente, entre 1974 y 1975 se produjo una reducción, encontrándose los visitantes entro los 30 millones aproximadamente para ambos años. Seguidamente, tiene lugar un gran aumento que hizo alcanzar los 43’2 millones en 1985. A partir de 1985, se recupera el ritmo ascendente de turistas e ingresos. Las causas de este nuevo auge han sido el ingreso de España en la Comunidad Europea, el crecimiento del turismo interno y el inicio de la reconversión hacia un nuevo modelo turístico, basado en la calidad y sostenibilidad. Así se nos muestra un aumento de los ingresos por turistas, llegando a un 11’6 miles de millones de euros en 1989. Durante un breve período a principios de la década de 1990, se produjo un descenso de los ingresos, el cual se puede apreciar en el gráfico, disminuyendo estos a un 11’3 mies de millones de euros. Esta situación se debe a la recesión económica de estos años. Por su parte, los millones de visitantes siguieron aumentando hasta 1990 (54 millones), donde al igual que el turismo, tuvo una pequeña disminución. Se redujeron los visitantes en dos millones y posteriormente aumentaron de manera continua hasta 2008, alcanzando es este año uno de sus mejores resultados, 97’6 millones de visitantes. El nuevo modelo turístico de caracteriza por una oferta turística de calidad, dirigida a una demanda más diferenciada y menos numerosa, con mayor poder adquisitivo y mejor repartida en el tiempo y en el espacio. También se propone reducir la dependencia exterior en la comercialización del turismo y conseguir la sostenibilidad medioambiental. Este nuevo modelo depende de la calidad de la oferta, de la diversificación de la oferta, la promoción del turismo y la sostenibilidad medioambiental. Los tipos de turismos siguen estando encabezados por el de sol y playa, aunque desde la década de 1990 cobran importancia creciente otras modalidades, que aprovechan la diversidad de recursos de España. Así, vemos en el gráfico como a partir de esta década, los ingresos por turismo sufren un ascenso continuo, dejando cifras importantes tales como 19 miles de millones de euros en 1995, 33’7 en el año 2000, 38’5 en el 2005 e incluso, una de sus mejores cifras, 41’9 miles de millones de euros en el 2008. Las causas de este hecho son la exigencia de la diversidad de la clientela, la demanda de espacios menos saturados, el incremento del turismo nacional a lo largo del año y la promoción del turismo como estrategia para el desarrollo de las áreas desfavorecidas, como las rurales y de montaña. Finalmente, podemos observar como los visitantes y los ingresos por turismo sufren una pequeño descenso entre 2009-2010 y un posterior aumento en los años siguientes que los lleva a establecerse en sus valores más alto, alcanzando los visitantes su máximo en 99’8 millones y los ingresos por turistas un máximo de 43’5 millones de euros. Estos grandes incrementos sufridos ya a partir de la década de 1990, se han visto incentivados por el aumento del turismo de proximidad a las grandes aglomeraciones (en el interior y el litoral), las áreas rurales del interior, que han visto en el turismo una estrategia de desarrollo, la necesidad de reestructurar los espacios litorales, incorporando zonas prelitorales, el deseo de calidad y nuevos atractivos. El turismo ocasiona importantes repercusiones espaciales en las áreas receptores. Estas son más evidentes e intensas en las zonas turísticas tradicionales del litoral, pero también afectan al resto de las áreas: -Repercusiones demográficas: en las áreas litorales el turismo incrementa los efectivos de población, con adultos que acuden en busca de trabajo, con adultos jubilados que se establecen de forma permanente por motivos empresariales, terapéuticos o de ocio. Además, el turismo aumenta la población ocupada en el sector terciario y en la construcción. Por su parte, en ciertas áreas rurales, de montaña y en algunas ciudades históricas en declive, el turismo ha frenado el despoblamiento y ha estimulado la revitalización de la artesanía y de las tradiciones. -Repercusiones en el poblamiento: en el litoral, el turismo extiende el poblamiento urbano y favorece la formación de conurbaciones. En algunos espacios rurales, de montaña y urbanos, ha colaborada a la rehabilitación del patrimonio edificado. -Repercusiones económicas: el turismo genera más del 12% del empleo, tanto en servicios turísticos como mixtos, dado que mucho de ellos no pueden mecanizarse y requieren mano de obra. Ejerce un efecto multiplicador sobre las actividades económicas que se ven estimuladas por la demanda turística. Aporta riqueza al país, por lo que constituye uno de los pilares básicos de la prosperidad económica española. También compensa la balanza comercial, frenando el endeudamiento externo. Finalmente, influye en la política de transportes, que se ha orientado a dotar de buena accesibilidad a los núcleos turísticos y ha potenciado los vuelos irregulares junto a la capacidad portuaria. -Repercusiones políticas, culturales y sociológicas: el turismo fomenta el acercamiento entre pueblos y el contacto entre culturas, favoreciendo el entendimiento político entre los estados. A su vez, incide sobre la sociedad local, positivamente cuando estimula el cambio y la modernización social y negativamente cuando conlleva la pérdida de costumbres y señas de identidad propias o cuando empeora la calidad de vida de los residentes. -Repercusiones en la ordenación del territorio: el turismo no solo repercute en los espacios propiamente turísticos, sino que también en su entorno, donde implanta actividades y servicios y donde puede ocasionar conflictos con otras actividades. En las áreas litorales, el turismo ordena los espacios próximos en función de sus necesidades o en las periferias de servicios que proporcionan los abastecimientos básicos. Las consecuencias de este hecho son las alteraciones en el medio y en el paisaje, las transformaciones económicas y los conflictos por el uso del suelo y de los recursos. Por su parte, en las áreas de turismo rural y de montaña, el turismo puede crear conflictos con las actividades agrarias o fomentar su abandono. Finalmente, en las ciudades históricas, los cascos antiguos se especializan en actividades al servicio del turista y sus periferias instalan segundas residencias u hoteles para satisfacer la demanda. -Repercusiones medioambientales: debido al fuerte desarrollo del sector en poco tiempo, en un espacio reducido, y en un momento en el que todavía no estaba extendida la preocupación medioambiental. Las consecuencias fueron el levantamiento de grandes bloques de hoteles y apartamentos junto a las playas, la urbanización incontrolada en espacios naturales de gran valor, la contaminación atmosférica y el exceso de ruido. Por ello, la política turística trata de resolver estos problemas en coordinación con las comunidades autónomas y con la Unión Europea. Las comunidades tienen competencias en la política. La Unión Europea se ha propuesto favorecer el turismo por sus ventajas para crear el empleo, atraer divisas y redistribuir las rentas entre países ricos y pobres. Para ello, se propone mejorar la protección y la información del turista, equilibrar la distribución temporal y espacial del turista, establecer estándares de calidad y mejorar la formación profesional del sector. Por su parte, España ha concretado su política en el Plan del Turismo Español Horizonte 2020, cuyos objetivos son: Incrementar la calidad de la oferta para atraer turistas de mayor poder adquisitivo, mejorando así la formación profesional y las infraestructuras mediante proyectos de modernización integral de los destinos maduros. Diversificar la oferta para atender al deseo de variedad de la demanda y para conseguir un mejor reparto temporal y espacial del turismo e incorporar nuevos segmentos de mercado. Para ello, se fomentan el turismo rural, de montaña, ecológico y urbano. El uso de las nuevas tecnologías en el trato con la clientela para responder a su deseo de participar más directamente en la organización de su viaje. Con este fin, se extiende el uso de internet para la información, las reservas y la compra del viaje. La utilización de la innovación y el conocimiento para conseguir la satisfacción del cliente y el éxito del negocio turístico. Para lograrlo, se incorpora el turismo a los planes de I+D+i. La promoción turística para hacer frente a la competencia externa y atraer nueva clientela. Esta tarea se realiza en ferias internacionales, en las oficinas turísticas existentes en el extranjero y a través de planes para atraer a mercados emergentes. La mejore de la comercialización para incrementar los beneficios turísticos mediante la creación de tour-operadores nacionales. La consecuencia de un turismo sostenible que responda a la exigencia de calidad medioambiental de la demanda. Para conseguirlo, se están adoptando medidas como evaluar el impacto ambiental de los proyectos, cuidar la estética paisajística integrando las construcciones en el medio, regenerar los espacios degradados e intensificar la sensibilización social hacia el cuidado del entorno.