Comedia. No puede ser guardar una muger

Anuncio
CO M E D Ï A.
NO P U E D E SER
GUARDAR UNA MUGER.
DE
DON
AGUSTÍN
MORETO.
PERSONAS.
D. Felix it Toledo.
D. Pedro Pacheco.
J>. Diego de Roxaf.
Daña Ir.c'i Pacheco.
Doña Ana Pacheco.
JORNADA
Galeria. Salen Don Fc¡ix,y Tarugo.
Tar. T 7 S o , señor, es virtud,
P / que en tí no acabo de creer.
Fel. Esto es para entretener
sin ocio ia juventud,
Doña Ana Pacheco es
por su virtud estimada,
por su ingtnio celebrada,
por sus partes lo que vés.
Es sola , rica, y discreta,
su honestidad conocida,
y el empleo de su vida
le dá al estudio. Tar. fís Poeta?
Fe!. Aunque ella no es la primera,
pues en Madrid hoi se ven
mugares, que hacen tan bien
versos, que envidia qualquk-ra;
te aseguro de Doña Ana,
que sin ser sola , pudiera
ser en esto la primera;
y los aplausos que gana,
à que tenga la han movido
una Academia en su casa,
donde yo acudo, y se pasa
un rato muí divertido;
porque de mis mocedades
este cuidado me priva,
aqui el discurso se aviva,
y escuso otras liviandadei.
Manuela, Criada.
Tarugo, Gracioso.
Sancho, Viejo.
Albert», Caballero.
Acompañamiento.
PRIMERA.
Tar. Señor, cosa es mai posible
ser rica , bella , y discreta}
pero ser rica, y Poeta,
vive Dios, que es imposible.
Fel. Por qué? Tar. Eso dudasî
Fel. Sí dudo.
Tar. Pues hai hombre à quien dé el Cíela
con gracia aqueste desvelo,
que no esté siempre desnudo?
Y esto es forzoso , señor,
porque la Poesía es cofa,
que aunque es virtud , y gustosa,
nunca ha tenido valor.
Es flor de esta humanidad
y como una flor, en fin,
sirve de adorno al jardin,
mas no de necesidad
adornan las flores bellas;
y al que en un jardin ¡as mira,
como hermosas las admira,
pero no cena con e'ias.
Y el que un jardin entra à véf,
mas presto se irá á buscar
espárragos que cenar,
que las flores para oler.
Demás de.-esto, la fortuna
parte igualmente sus done»,
y no d i sus perfecciones
al que le quiso dar una.
A
a
No puede ser guardar una Muger.
El bien con el mal mezcló:
nadie à otro envidiará,
si s.-.be el hueso que d i ,
con la carne que le dio.
Al entendido dá ocio,
y pobreza; al que dá precio
de hacienda, siempre es un necio,
mas no para su negocio.
La hermosa es boba, y pesadaj
la fea, discreta, y graciosa^
y tal vez es melindrosa
la aguileña desgraciada:
y si una llega à tener
hermosura, y discreción,
le di una mala elección,
cor» q'ie lo echa à perder.
Y e^to tan claro se nota,
que de esto salió el refrán,
de que al ruin puerco le d i n
siempre la mejor bellota.
Y yo en toda* siempre advierto,
que a! galán, discreto, airoso,
dexanlo por un roñoso,
necio, zambo, zurdo, y tuerto.
Y e n fin, en todo hai su peso,
porque en la mejor fortuna
verás lo que en la azeituna,
que en la mayor hai mas hueso.
Poesía, y riqueza ingrata
siempre trocaron los frenos,
y no hallarás versos buenos
hechos con buxlas de plata.
Con candil sí, que es civil
la Musa pava ía vena,
solo i;¡ Poe.'-ia es buena
hecha à moco Je candil.
Ft!. Q.ié locura! l'jr. A los pasado*
mira, y verá* el efecto:
Por el candil de Epitecto
no dieron tres mil ducados?
Fíl. E.<e es Filósofo. T r. Cesa:
Pues toda la Poesía,
qué es ¡no Filosofía?
Asi fuera G ¡nov esa.
Fel. Tu jnicio, en fin, pertinaz,
entro ry.zzi.. y Poesía,
no oiik-ro -.Irr compañía,
T¿r. Couio cuñados en paz.
Fel. Eso niega la experiencia,
pues prueba, que en Grecia Homero
fue mui r i c o , y el primero,
después con mas experiencia.
Virgilio en Roma dexó
tanta suma de dinero,
que al Cesar hizo heredero
del tesoro que él le dio.
El Petrarca en Francia fue
riquísimo, y laureado
del Pontífice Sagrado
en Roma , y acá se vé
que el Rei Don J u a n el Segundo
hizo rico à J u a n de Mena,
y estimó en su aguda vena
aquel discurso profundo.
El Caballero Marino
fue r i c o , y el ;le la Casa
Don J a r d o en Francia , sin tasa,
el Sanazaro , el Guarino.
A no haber sido atrevido,
fuera riquísimo el Taso;
y en Toledo Garcilaso
fue rico , ilustre, y lucido.
En un asalto murió,
como valeroso, y fuerte,
sintiendo España su muerte,
que Carlos Quinto vengó.
Y qué ingenio en nuestra edad
nuestro Rei no ha enriquecido?
Q u é pluma empleo no ha sido
de su liberalidad?
El Rotor de Villa-Hermosa,
Góngora , Mesa , y Enciso,
Mendoza , y otros , que quiso
por su elección generosa?
Y si toda esta verdad
tu mala aprensión, no allana,
no fue el de Viila-Mediana
rico, y señor? Tur. Es verdad.
Pel. N o ha habido muchos señoree,
que ilustraron la Poesía?
Y en particular hoi dia,
no hai uno de ios mayore»,
que despues que su valor
en el circo mas lucido
aplauso de España ha sido,
la tiene con tal primor,
que
De D
Agustín Morete.
3
que hoi, sin ser lisonja, son
en su casa tai riqueza?
sus dulces versos discretos
Tar. Una noche haciendo versos
por lo alto cié sus concetos,
se le ha de quemar b C<ÍM,
de tocos admiración?
y hado amanecer en cueros.
TV. Eso seri la verdad;
Mas \ a salen, yo me voi.
mas para esos que asi fueroi,,
F=.'. Do'ndt?
.hai quatro mil nue murieron
7'jr. A la casa de un Flamenco,
de pura necesidad.
que ¡o vende fin bautismo,
Fel. Eso su estrella causó,
y allí van unos nw.uelos
que en qua'quiera facultad
mu! ricos, que juegan largo,
oprimió necesidad
y me entretengo c->n ellos.
:\ quien no la mereció.
Ft-/.Pues tú jtieg.is? T.ir. A las pintas,
Mas no lo prueba esc indicio,
FeL Y largo? 7'jr. No s;;v.) huevo»:
que io que alguno baldona,
à quatro, y qusr.ro, y tercers,*
teniéndolo en ia persona.
nos quitamos el peüej...
no es pension del exercicio:
Fe!. Ko quieres ver if. Academia?
y ella es virtud , y tenella,
T¿r- Yo Academia ! no haré luego
con. pri'.nio , o sin él, es bueno,
rir.co pintas en die7 años
que en ia virtud es ageno
si estoi una hora entre versos, ['ate.
lo que pende de la estrella,
SJÍJ, talen Ü. Diego, D. Pedro, Aihr:o,
Tar. Pues por qué ei vulgo indiscreto
y Doñj Ana.
la ilega à desestimar?
JHt't.>sl¡$ el Ingenio noble como el Sol,
FeL Eso suele ocasionar
«que conialuzque alurphradu caior.t)
la pobreza del sugeto:
Fel. Nuevo, è ingenioso rm.do
tiene la Ierra. Ana. La he hecho
dime, la despreciará
para introducir con ella
en un señor? Tur. JNTi aun por chiste.
Fe¡- Luego en ella no consiste,
la Academia. Peu. En vos no es nutro
sino en el vaso en que está?
ei hacer las novedades
De! agua un exemple breve
con :al gracia. Ana, là prot'guietld*
te distinguirá esa Jes,
!a letra . mienrr.-.s que t;,.tos
que en oro es digna de un Rei,
van tomando sus alientos.
y en barro el pobre la bebe.
Siéntente ¡at Davtat ir. airado , * iu
T V , Pero y a , señor, el quarto
Galanes en iV.Íjt.
de la Academia han abierto.
Jllúr.»'Ks !a gaia.y hermosura perfección,
Fe!. Ya Doña Ana viene aquí.
I I X Í S la. deiahnas'emprecslimdyí:'.»
TÍ"'' Con eiiu viene Don Pedro
Fe!. ¡No es tr.u: pulid:-, la ¡ura,
Pacheco, nuestro vecino,
se.íor Don Pedro P.iehec-?
que es un zeloso Estremezo
Pi.l. Si \o< la jjmirais. Don F?\vs,
en e! guardar à su hermana.
qu¿ haré y j , que ti ¡itau tengo
Fe!, No anda en eso mui cuerdo,
en '>;;ña Ana , y r- "cito
J j r . Q u é rica que está !a sala!
ííi elia ¡n! cautiverio?
fel, i\'o Infieres', T a r u g o , de eso,
A'<a. Comience, pues, !;t Acad"íia\ar
que ha¡ poesía con riqueza?
Difg. Diga Doña Ana primevo.
7\jr. Lo estoi viendo , y no lo creo;
Anu. Señor Don Diego do ÍÍO.ÍÍSJ
mas t vive Dios , que >::o:no eres
que no es lisonja os advierto,
tú Don Felix tie Toledo,
porque en la Academia es
si es Poeta, ha de »ej pobre.
mejor lugvr ei rastrero.
Fel. Cómo puede ser, teniendo
£'•>£• Esto es dar lug?r que escojan.
A»
/0,
4
Ko puede ser guardar una Muger.
A:!'. Pues y o diré. Fea. Di;,a Alheño.
A ••'. U:i co;içtc>..me !)3 encar.7r.J0
<a Academia. Ana. A que sngeto?
A'1-. Al A m o r , Ana. Mucho ha: escrito,
dirkil es el intento.
A:r. Ks el A.iijr deseo de un contento,
ouo n u n c a liega à su dichoso estado:
s: :v> es ii rio, no hai gustoe-nsucuidadoj.
í.esíi.ío, e s todo pena, y sentimiento.
C-¿rtc*p: nejido, está del temor lento,
¿•-•la desconfianza atormentado:.
Pues qu-j stiá el Amor deses; erado,
s: atir; í l correspondido es u:::ormea;o?
En su triunfo mayor padece olvido,
J en !?. esperanza rena,í.i n^ ¿Icanza,
dequakjuiermodosiiSpternuertehasiJo.
ToJ ,s v é n su traición, y su mudanza,
riKÍos quantos le sigue;: han perdido,
y todos v a n tris él con esperanza.
Ar,c. Y.,tú. m u í bien diíinido
el A'nor por sus efectos,
j auucjue Amor hai tan dichoso,.
cierto q u e es nuevo, y es bueno.
Z5v£. Yt> t e n g o à cargo una giosa¿
y e-> r-oíamente de un verso,
S'te por difícil me ha dado
I*.. Academia. Anj. Ya ia espero,
&'*g. Para fines, males, quándo.
Oid. yira./. Ya estamos atentos.
JD/i'ç. Para nnc-s de su amor,.
i u e l e d ú r maíes Inés
en d e s d e n e s , y en rigor;
pero l a e g o de alli à un mes,
vuelve à a m a r con mas primor.
í . o h:-.f q u e preguntar on dando
Truies, q u á n d o volverá
i^.tr.ar, a u n q u e esté olvidando ,
que rs¿o s e infiere, si d i
p^r.i <¡n .<$, males, quándo.
jí'.a. (Jiosó con todo rigor.
VtJ. Yo a c a r g o una octava tenge»,.
en «juche de pkr.r.r ¡a furia
de un l e ó n acometiendo.
A'\i. A«ur.ti> es de un buen Poeta, .
decidía. P¿1. Ya la refiero.
En tnsiHo extremo el bruto se en3rbo¡a, „
ç«p. iiizruía la corv;/. valiente,
i ift 1'rs.WC fsrói vuelta la cola,
es la cola penacho de la frente:
Los pies arranca de una estampa s o i |
de ¡as garrasei cuerpo ya pendiente,
y centellando con ia vista enojos,
se le pasan las garras à los ojos.
Ana. Bien pintado , y juntó bien,
naturaleza, y concepto.
Fcl. A mí difinir me tuca
la dicha, y desdicha à un tiempo
en una décima sola.
Ana. Mucho asunto en poco verso,
f e / . Dicha es seguir un bien,
y desdicha no tenerle;
teniendo t s fuerza perderle,
y esto es desdicha también:
Quien siempre sufrió un desdén,.
no liega à estado peor:
con que. dicha es en rigor
causa de un mal mas morta!,
y la desdicha es un mal,
que escusa de otro mayor.
A"". Estraña difinicion,
y es aguda por extremo.
Yo tengo à cargo un enigma;
y proponérosle quiero.
Pintase una carbonera
natural, que siempre ardiendo,
Cubierta de tiexra, exhala
por la tierra el humo denso;
y la glosa dice asi,
escuchadla. Fel. Ya atendemos..
A"3- Este fuego que arde en mí,
otro fuego le encendió,
que arde también como yo,
y à un tiempo ardemos asi.
Ei humo que exhala el fuego
conviene .1 mi perfección,
y el cubrirme es por razón
de que no lo exhale luego.
Mientras que no me consumo .
quando mas tierra me das,.
znaj me abrigas, y ardo mas,
con que he de arrojar mas humo..ís'o dejando yode arder,
saüc en vapor presumo,
«¡eeid quién soi yo, y el humo,
que guardar no puede ser.
Rf, Difícil e¿. Aun. Qué os patece?
Alb.
De Don Agustín Mor et o.
Alb. Y o digo, que es el secreto.
Ana. N o es. Dieg. Yo digo, que son
les 2elos , fuego de fuego,
como bolean encendido-,
que entrambos arden à un tiempo.
Ana. N o son los zelos. Fed. Yo amor,
pues er¡ él todo lo veo.
Ana. N o es amor. Fed. Pues qué será?
Ana. Os rendís? Fed. A vuestro ingenio,
Ana. Pues es::: Fel. Tened , no digáis,
que yo falto, y decir quiero.
Ana. Decid, pues. Fel. Yo digo,que es
aquese encendido fuego
la inuger enamorada.
Ana. Es verdad, yo lo confieso.
Fcl. El humo denso que exhala,
es su honor, la tierra luego
con que-le cubren , parece,
si bien al enigma atiendo,
que son las guardas que tiene
ill honor ; y mientras queriendo
rr.as guardas ponerle intentan,
se enciende mas su deseo,
y crece el daño : de donde
se infiere con claro exemplOj
que quando la muger quiere,
si de su honor no hace aprecio,
guardarla no puede ser,
y es disparate emprenderlo.
Ana. Está mui bien conocido,
y aplicado. Fed. Aunque el intento
del enigma haya sido ese,.
se concluye con un yerro.
Ana. Quál es? Fed. Decir, que el guardar .
una muger, es empeño
que no puede ser. Ana. Por qué?
PcJ. Porque del hombre el desvelo
puede asegurar su'honor,.
y con cautela ¡ y esfuerzo
vencer pv.ede e:te peligrosque las mugeres que vemos
livir.uas, no es por su industria,
sino dcsciúdo dil dueño.
Ana. Pues n<. hai hombres cuidadosos.)
y honrados , que aqueste riesgo
cautelan; y las mugeres,
qusri.io liai mas cuidado en ellos, a
crece eu eUas :nas la industria.
y ofenden al mas atento,
seguras de su noticia ?
Pcd. Muchos h i i , mas todos esos
¡o yerran de confiados,
pues cautelan solo el riesgo
que piensan , y no ei que deben:
que si hubiera uno discreto,
que previniese el peligro,
y con camela , y aliento
mirara todas las puertas,
que puede tener el riesgo,
y las defendiese todas,
fuera imposible ofenderlo.
Y finalmente , concluyo,
que las que hacen ese yerro,te le ocasiona ei descuido
sin que le busque el ingenio;
y si no, la que engañó
à quien la guarda , no es cierto,
que se ofendió por la parte
que él no defendió? Ana. Eso infiero..
Fed. Luego si el qua fue ofendido,
hubiera visto pii:r.ero
aquel riesgo, y le guardara,
no le ofendiera ? Ana. Es mui cierto;
mas si la- muger estab3
metida ya en ese empeño,
si aquel medio no lograra,
hubiera hallado otro medie.
Fed. Pues por eso digo yo,
que el hombre honrado , y discreto
ha de prevenirlo todo;
y al que fuere tan atento,
lo que no puede ser-, es,
que le ofendan. Ana. Para eso
es menester ser un hombre
mas que hombre , porque el ingenie
humano es casi incapaz
de prevenir tanto riesgo.
Fed. Quanto fuere riesgo humano
lo alcanza el entendimiento,
y el hombre es capaz de todo,
Ana. Pues si vos presumís eso,
en pricíka lo pongamos
yo os ruego , mas suponiendo,
que à prevenir todo el daño
sois vos el hombre discreto, c
que dcfer.deis- la muger
6
Kn puede ser g
que 56 resuelve :'• ofifi.'err»!.
Prii. T>ix.ii . y veréis si ha i d a ñ o
:'. que ; i i:n J e u.'iîc. 1 :'».
An*. A u n q u e isu'is vi s r e c J . c v t ,
piiJoi« nn-.M.Mf , «¡Cûtin CUCrd",
e u e saljp acüüM.i n:u;-i'r
de c a s a i iV./. Va :••.;• ¡¡u pi:cdo,
saidre yn sSctnpre A MI !sd><.
y i « j . 'v>ta m i : i l ' i - n : y vn< î'.v.;o
iv> h a i v i s Jt. : i : i r de «•.*'::?
P f J . S s l d n ) , d e s a n d o pri::iuii
ccnti".ií¡.!« i¡jn«»r»«'»-«
y í « j . Au.i.jiie e* li.îîii! i-ir:"c?!:>
p i r a n<> ser C» : ! '.:.: •«!• .
V u US j e p ! * o ; -i* |S C1V !:e *'*!
q u e ïitP-pre «••"•ji·. • -:t .-• •••,
iMi r. . ' -: • -\- d-irn-lr ? l>-.:. ¡:) <u«ifo
tic". :>:brc ir.:c \ t ••• ii> !•• ••..-',
t i s n ç . ' t (C i .". .i.··.í·.í'o, i ¡ rr.ivdo
tic OÜÍ- p;.'.iía ••'* s pi r..i.'>,
!(. : i ••;• en el¡ i •.!•. ; i - . l i o ,
para fi'.iii IÏO S J : , v . : c , s .
A»J. Y si .'..a .-si. .ra i-i - u e í o
coi» hlgtl.". a . - ? , e u e t". f u :i,
ptu'· \c:nns ii;:c !..•..•• ci invenía
Ci.-:*, -r"- ;i;> .-tue ic ini'uiiJun î
P i i . 1 ïiit-r i : i . ! / ! r.·.ci·.iín,
qui: »i:fÍAil ese ,H-!!<;ro.
/ f s a . Y •': M.ndr.bitfû P . / . F i í - u c r j »
n o i":i ,'c* O.Tifiil ?'.! (' ñ'-r
de
i ; n ! ; . l ï I'll t<!„- C:>'*»l'i''l
en fiHJ c,::e tanjii irn.'ur..;,
y si e-v. cNpcrivivia - '• ••'•< '••'!,
Jo ¡ -i-.:iu h.ir>.n c i l ' S , ijisv p!,
/ Í I : J . ^ -i ¡a rr¡i:¿:ef , MMcndn
«pic <!•-• s i l o ' se ha ¿it. g u a r d a r ,
les il M suinblen ñ t l í o i
la coTi'erciors i¡ue os din :\ vos,
y i<;.!.•> ii'.;et:it«n , <\ui! h*rvtu)tt
Pf.Y. Ksü « un caso i:itpi»«ib'e,
y futv.i i:;«rrse et C i e l " ,
y :ne cierro en mi «tpi.iirtn,
<jue t?:i< sun VAn¡>« iaifiüd».
yirîj/. ¡Vu iia^ii» r a i , \M>r vi<ii v u e j t r j ,
señar P o n Pcát;i Pacheco,
y n o f . u t r a h f s h t r vos
T«4» ffue t'ido e! rn'.iîido M MÎOJ
y B.dveftld,quç U exiu-riu-iKÍa
de '••< S.nl·ii)'; , ci-nocier.do
R'.e "^i:«.';·.. ¡v> {-UI..ÎV ^.-r,
P ' i , ,',..»... •,••••.;,<. u:,c¡r.¿'li).s.
I..-. ;.:< I-".¡¡M:!..V
ir:irisas
lo- . . s . ' ? , \ r , ••' i'.urir.icron
Í I n !.¡ v a r a d e M i r ¿ i : r : . i ,
d.ui.lu á t : m n d e r , IJUL el t e r c e r »
• it^t": IIS'J . i t i i i ' t r,i
I¡IUÍ..I>!LT g u a r d a crs ese c m f e S o .
Ai-ii·.·i, p n e u :; n i h'.,a
I)'Í:I-.I.- i n ci f P - r i í r n i.¡H - 'prro
d.e • r'i T o r r e , y l'.ailu en e i U
J ' . i ' i : i ! f:n :I m v d i o ,
»!!••!:. v¿,iit t i : i.::. !_ Í ' J o r o ,
*'••: :"i-!«rr.<c e n su a;-«i5«r.:¡'.
IU- c;i!e s e irificre , i;s:e .;! o r o
i - *:^; i'ors.^cra , ni i¡.cii-rrw
t : v c ..o se ülir.t ; y |*UÍ«I ws J *
¡:i »;t.ni:a l.ii![<^ tjíi-is;p!us,
I!" «M'.tr.i'v , ' . ' • .-.''.rii' if!5«,
t¡'..v !•- ti'.v i o d o s - ü p e r o n .
F ' u ' ;ntd:<> , q u e ) j r i . c ç
?.'..•* taci! , tÍLiie íecrctii
a L ' ü a ric>.ijii , p u e s el m u t i d o
r<> je i:sri ; ¡n^s este l i t s g o
lli!
«B f U L i i e
íilVCCr,
1... -i pi ist-r i-:; i!ec:i>
h exct-.icjop. d e Aqu«l casoHxt't u ' i r i c e* ¡:>i;ei>.io
1!-JS .u!o d e FU v¡i<;7»,
y B! iimSii.ír e n .e,.t i n ' e t u o ,
d.! fui» cl i r c u n ' . L·iiícnte:
y '..ri'.ndti-e e n n-i de.-rvSo
c o r r i j o d e ' ' ' i In.r-tír v i i f i
(•'.! ••:: d i s f i ; » i o aqiicl y t n t » ,
j'.fra - e ^ u i r i o t*«im»in,
\ r ; . r :\ dv»l a* er o: h e c h o .
P n i · i j m u í iicífistla
es ¡«¡a , y p a r a v«"fsf'»S|
«•s iLxr^ ma» c!:ir*:ni'r.;e
*:i txJ'tn i'n u n v:.¡.!i:v!o.
Va ¡:n i.itn¡;i:i:itt"¿ u n L u g a r ,
en ;nuch<M f amt-ios verno»,
n¡se d « ' d e e! p r i n c i p i o suele
vvrie «i I.HirJi à 1« ¡tt!£i>S
s i ^ i r e n d o fl m i n i n o , à v e c t í
s í \.i í;s kCü.-iii turcU'ti'.'o,
q u e j-arti-'c ijuc »e .'.p»ri»
De Don Agustín Morete.
del Lugar : y es , que el primero
ouc descubrió ao,!iel camino,
: I ; ; I a h un ira! raso en medio,
con que fue fuerza torcerle
para ir al Lug:>r mas presto.
Si alguno por su agudeza
este camino sigu'cnjo,
pe:;.*r.re que iría rrr-s breve
muger ninguna , se engaña.
Fcl. Yo daré à entender su yerro.
Ana. Tened, no os descompongáis,
Don Pedro , que el argumento
no se iiiv.o para pendencias.
Ped. Lo que yo he dicho es lo cierto,
y des-mes de defendido,
afuera con el acero
si le siguiese derecho,
lo probará la experiencia
y hac'Ci! !<> norte à los ojos,
con la razón , que aqui dentro. Vate.
ablins, uffli.iii ¡nievo;
Ana. Esperad , que es grande arrojo.
después que con mas trabajo
Allí. Ya es fuerza el irle siguiendo,
hubiese andado gr-.n trecho,
que aunque razón no ha tenido,
daría con el mal paso
¿iempreá su lado estar debo.
Vate.
del pantano , à el despeño,
Ana. Llamadle vos. Dieg A eso voi:
con que era fuerza volver
mas en mí tiene un e.xemplo a¡>.
à su camino primero.
de que es cierta su opinion;
Ped. Lo que ha torcido el camino,
pues quand o à su hermana quiero,
aqui r.o es del argumento,
por él lugar no ha tenido
y yo he de seguir el mió.
de ver , ni hablar nil deseo.
V«tt,
Ana. Mirad que vais à perderos.
Ana. Cierto que ha espado pesado.
Ped. Kn qué? Ana. En errar.
Fel. No reníé.que era tan necio.
Pc.i. Yo no soi
Asa. Don Pedro , señor Don Felix,
es mi galán, y mi deudo,
cacado, ni en Madrid tengo
y por ciertas prevenciones
mas que una hermana , y del Sol
dilato mi casamiento,
à defendería me atrevo.
Ana. Vuestra hermana no tendrá
estando ajustados ya
entre los dos los conciertoi:
la intención que se ha supuesto
para haccrie mi marido
de engañaros ; y asi, en ella
no argüís con ese cxemp'o.
quisiera verle mas cuerdo;
Ved. Y :i tenerla, h. guardara.
y para desengañarle
Am. Mirad que no es fácil eso.
de tan ioco pensamiento,
Ped. El vítor se ha de atrever
su hermana es rica , y hermosa,
si vos::: F-/. Tened , que ya entiendo,
à lo difícil. Fel. Don Pedro,
y me proponéis lo mismo
daos por vencido , que todoc
que tu pensado mi deseo.
nos rendimos à c-Me riesgo,
Ko es que \o h galantee?
sin agraviar las mu -eres,
Ana. Die.a todo quant») tengo
rues de la mano de! Cielo
por verie dvstngjñsdo.
viene sola la que es buena:
Fel. Pues yo en algunos encuentros,
y v ive Dios , que sí en esto
aunque nunca la he servido,
tuvicredes cien cabezas,
la lie dicho algunos requiebro»,
como tuvo Brsarco,
y no mti mal escuchados.
y en eilas los < ios de Argos,
Ana. No es t<e mal fundamento:
y de Mercurio ti ingenio,
mas cómo daréis principio,.
os habia de engañar
si él la guarda ecu desvelo?
la muger que sabe menos. Levantan*
Pe/. A mí me sirve un cri&do,
Ped. Vive Dios, que el que pensare,
con quien Merlin supo menos,
que puede ofender mi aliento
s
Ní> puede ser guardar uva Murer.
si é! la introducción no interna,
no la intentara Juanelo.
Ana. Dónde está? Fel. Ved si ha venido
Tarugo ahí fuera.
A una criada.
Criad. Eso intento.
Llega al paño.
Esrá Tarugo aqui ? Sale Tar. Adsura.
Ana. Traza tiene de discreto.
Tur. Acia e! agiíibus mucho.
Ana. De dónde sois ? Tar. De los hueros.
Ana. Los hueros? Tar. Es, que mi madre,
quando pensó que era huero,
me halló pollo. Ana. El es bellaco.
Tar. Honra que me hacéis es eso.
Fel. Tarugo, aqui está empeñado
• todo el valor de tu ingenio:
.No conoces à la hermana:::
Tar. Quii? Fel. De Don Pedro Pacheco?
Te atreves à introducir
de mi parte un galanteo
con ella ? Tar. Corrido estoi.
Fíl.De qué? Tar. De que digas eso:
con-un hombre de mi sangre
l*me aqui duda tu pecho
el que yo sea alcahuete?
Pues de qué sirve mi aiiento?
eso de mí'ha de dudarse?
No sólo haré, vive el Cielo,
con ella la introducción,
mss con el mismo Don Pedro.
Fil. Cómo lo harás?
Tar. Ko ha i pecunia?
Fel, Quanta quisieres. Tar. Xaus Deo.
Ana. Cómo , estando mui guardada,
has de lograr ese intento?
Tur. Ella , come , viste , y calza?
Ana, No hai duda.
Tar. A estos ministerios
no acude gente de afuera?
Ana. Sí. Tar; Pues no hablemos en.estQ,
Ana. Qué quierçs decir?
Tar. No entiendes?
Yo puedo ser Zapatero,
Sastra, hilo Portugués,
ò muger que quita vello,
porque el-alcahuete tiene
bula de nyjdar el sexo.
Entendeislo ahora ? Anu. SI,
y mira que'esté es mi empeño.
Tar. Pues esto à v e qué os importa?
Ana. Desengañar aeste necio,
que el guardar una muger
no puede ser , y ha hecho empeño,
de la question arrojado,
poniéndose à defenderlo.
Tar. Qué decís? Jesús! à ese hombre
le parece fácil eso?
pues no. sabe que hai Tarugos?
Fel. E l , seguir quiere su intento
por camino extraordinario.
Tar. En dexando ei carretero,
vá el pobre señor perdido:
no sabe quántos se han mu.erta
•por echar por el atajo?
Jesús, y qué lindo exemple*
con un cuento mui común
le diera.yo! Ata Qué es el cuento?
Tar. Iba camino un Abad
mui gordo , .y mui reverendo:
llegando à un rio, intentp
pasar él vado ; y saliendo
un Pastor , ledixo: Advierta,
que ayer se ahogó un pasagero,
porque erró el vado. El Abad
preguntó al Pastor tosiendo:
Quinto hai desde aqui à.la puence?
Dos leguas y media pienso,
dixo el Pastor. Y el Abad
le respondió entre un regüeldo:
Si el que se ahogó hubiera ido
por la puente , aunque está lexos,
desde ayüracá, ya hubiera
pasado el rio. Y el freno
torciendo à la mu!a , dixo:
por la puente , que está seco.
Ana. Hizo niui bien: Y el Abad
quién habrg de ser? Tar. Don Pedro.
Ana. Yo te prometo un regalo.
Tar. Pues à la puente , y. piquemos.
Fel. Señora , al intento vamos.
Ana. Con el aviso os espero.
Fel. Cuenta os vendré à dar de todo.
Ana. Me lograréis un deseo.
Fel. Vamos , pues, Tarugo. Tar. Vamos,
que no hai lei en el ingenio,
si no rieres que este hermano
en la capacha lç meto.
Vante.
Cor'-
Ve Don Agustín Moreto
no puede ser sin causa. /¿/¿.Yoconfieso
Corredor ,y salen Don Pedro, y Alberto.
que la tiene , mas no de haber andado
Pei.Esto ha deser_.nohadequeda-abierta
aqui tan ciego , y tan desalumbrado,
ventana en casa, ni h a d e verse puerta
que su cuidado dé a enter.dei s.1 pecho;
sin guarda en ella:vi:amos si es posible
mas si à tu honor, estando satisfecho,
guardar una muger.
un tan necio desvelo no recata,
Alb. Ya estás terrible;
callarlo yo seria culpa ingrata.
pues qué culpa, me di, tiene tu herma na
Hoi en una Academia ha defendido
de que haya sido su opinion liviana,
(solo de pensarlo pierdo el sentido)
y arrojada también en tu argumento,
Don Pedro, necio , si saberlo quieres,
para ponerla en tanto encerramiento?
que es fácil el guardar à las mugeres,
Vea. Alberto, esto ha de ser, no haique
y el ser ellas livianas, no es empeño
apurarme:
suyo, sino descuido de su dueño:
vos sois mi deudo , perdonarme, (ga:
à esta razón, Don Felix de Toledo:::
y à quien toca mi honor, y el duelo oblino quiero qhaya quien (porque se diga Inés. Conozcole mui bien. Alb. Decirte
que yo fui en la porfía demasiado)
puedo,
ponga en ¿lia los ojos , y el cuidado,
que este Don Felix es el Caballero
y de ello me resulte una deshonra:
mas discreto, galán, noble, y severo,
Vos habéis de ser guarda de mi honra,
que yo en toda mi vida he conocido:
desde hoi está mi casa i vuestra cuenta,^
hizole oposición, y él ofendido,
vos, como g u a r d a , y centinela atenta,
rematando en disgusto el argumento,
Argos habéis de ser de este cuidado.
dexó à un tiempo la sala, y el asiento.
De esto se le ha metido en la cabeza,
Alb.Pxxes todo eso, D. Pedro, es escusado
con D. Inés, quando en su honor emplea
que han de solicitatle à tu belleza,
el cuidado mayor. Ped. Aunque lo sea,
para dexaile en su opinion vencido;
lo habéis de ser, pues y o d e vos lo fio,
y apoyando este error, me ha persuay no me repliqueis.Sa/í» Inés,y Manuela
dido,
Ine't. Hermano mió,
que yo vele tu honor, pues que me toca
qué es esto ? tú enojado?
per deudo suyo ; y tanto se provoca
tú mudado el color,y el rostro airado?
del riesgo imaginado,
qué tienes?
que à cada puerta ha puesto un criado.
PeJ. N o sé , hermana, lo que tengo,
Yo que tu honor conozco, y tu recato,
solo sé, que al peligro me prevengo
te lo prevengo , por no ser ingrato
de una juventud loca, un vulgo ciego;
alamor,qentu infancia me has tenido,
y un noble, descuidado en su sosiego,
y porque esté el peligro prevenido,
al riesgo de su honor irá sin tasa,
dés à entender , por esto que sucede,
y es deuda de mi honor velar mi casa.far
que lo que ser r.o puede,
Inés. Q u é es esto, Alberto , qué palabras
sin la necesidad cíe ser guardada,
necias?
es conquistar una muger honrada.ivj/..
(supuesto que mi afecto tanto aprecias') Inés. Has escuchado, Manuela,
sonestasdemihermanolqué fcailqpasa?
u n a , y otra ceguedad?
riesgoensu honor? cuidadosensu casa?
siendo tal la de mi hermano,
habla de mí? responde, ò ha perdido
la de Alberto es otra tal.
mi hermano la memoria, y el sentido?
E l , por prue ba de su ingenio,
Alb. Señora , vive Dios, que lo parece,
defiende que ha de guardar
según sin causa su cuidado crece.
una muger, siendo cosa
Inés. Sin causa , es imposible.
que nadie supo jamás.
Alb.No la tiene.por Dios. In. Es imposible:
JLo que erró con el discurs.o
decidme la verdad, qu e aqueste exceso
quiere en la experiencia obrar?
B
errar-
No puede ser guardar una Muger.
errarlo alli fue agudeza,
y errarlo aqui necedad.
Estotro , mu i prevenido
de consejo, y de piedad,
me alaba un hombre , de quien
dice, que me ha de guardar.
Y o , que en mi recato he sido
una Torre , una Ciudad
cerrada del alto muro
de mi altivez principal,
no he conocido en mi vida
deseo en mi voluntad,
y desde que esto he escuchado,
estoi resistiendo ya,
sin mas daño, que es arderse,
exhalando el alquitrán,
pero oprimido en la mina,
rodo el mundo bolará.
La muger es como el vidrio,
que el que le quiere guardar
le ha de poner en seguro;
mas si por guardarle mas,
desconfiado del riergo
entre las manos le trai,
con lo que guardarle piensa,
suele venirle à quebrar.
Yo à Don Felix de Toledo
he visto, y aunque es galán,
y me ha hablado muchas veces,
no le respondí jamás.
Y desde que sé que es él
quien tal cuidado les dá,
estoi deseando verle.
Esto es de mi voluntad,
que en quanto à mi entendimiento,
también por tema me vá,
siendo muger , no ser menos
y o , que todas las demás.
tio hai muger tan necia, à quien
el mas discreto , y sagaz,
si ella no quiere guardarse,
yiense que la ha de guardar:
y es fuero de nuestro honor,
porque si fuera verdad,
que el hombre guardarla puede,
aunque le intente agraviar,
consistiendo esto en el dueño,
à quien sujeta.' están,
ni en la honrada hubiera honor,
ni en la libre liviandad;
y mi hermano ha de saber,
que esto en mi elección está,
y no ha de hacer acción suya
la que fue mia no mas.
Manuela , no hai que perder
ocasión , que en esto vá
la opinion de las mugeres;
sepa e.ste necio el refrán.
Man. Señora , lo que te pasa,
à mí pasado me ha
con mi ayuno esta Quaresma;
yo sin mandarme ayunar,
quando obligación no tuve,
no quebré a y u n o j a n u s ,
y ayunaba à p a n , y agua:
este año fue de mi edadl
el tenur obligación,
y en mandándome ayunar,
maldito ci día he dcixado
de almorzar, y merendar.
Saie Aib. Entrad, amigo. Inés. Quién es?
Alb. El Sastre envia u n oficial
à que os tome la medida
del vestido ; que ha de dar
para el dia del Sotillo.
Inés. Entre , pues.
Alb. Amigo, entrad.
Vast.
Man. Señora, Alberto a la puerta:.
• qué es esto ? gran novedad!
Inés. Eso es disculpar, que y o
castigue su necedad.
Sale Tar. Sea Bios en esta casa,
ò no paso del umbral.
Inés. Quien sois?2'ar. Sastre^ con perdón.
Inés. D e q u e ? Tar. De lo que he de hurtar.
Inés. Y à oué venís? Tar. El Maesuo,
por probar mi habilidad,
à que yo os corte un vestido
me envia , porque al Lugar
soi recién venido , y tengo
gran opinion por allá
en ei cortar de vestir.
Inés. Y él por qué no viene acá?
quiere probarle à mi costa?
Tar. En vos no cabe el refrán,
de que en la barba del ruin,
porque el que me envia acá,
está rnui bien informado
De Don Agustín Morete
ce que yo no la he de e-rar.
Jt.ét. Y cómo os limais ? Tar. Garulla.
Inés. Qué decís? Tur. Soi del corral,
y quancío nscí, mi cuna
fVe un cc-.ro de vendimiar.
Inés. Y iltir.de habéis aprendido
tan diestramente à cortar?
Ta-. t':i i'.i&'rueoos. I-.ét. En Marruecos?
Tar. ¥ui niño cautivo al'á,
conijT.ime un Sr.stre Morisco,
y aprendí con gracia tai
í-J oficio , que ¿ !a Princesa,
que es la mas rara beldad,
hacii yo de vestir;
traxome la Trinidad,
y ahora vengo à la Merced,
que espero que vos me hígai».
Jnc's. Pues el vesrir ;: las Moras,
qué importa al uso de acá?
Tar. Kntre Moras , y Christianas
poca diferencia hai,
psra mi todas son unas,
di^o con mi habilidad.
Inc'r. Bestialidad : la Princes»
cómo se llamaba allá?
Tjr. Dofia Fatima de Aguirre.
Inés. De Aguirre? Tar. S i , qué dudáis,
si cu madre es renegada.
Inés. Ka , pues, tomadme ya
la medida. Tur. Antes quisiera,
que aqui unas telas veáis,
y algunas cosas curiosas
de las que traxe de allá.
Inés. Veamos. Tur. Estas son joyas.
Inés. Y qué es aquesta ? Tar. Aguardad,
que esta no es joya. Inés. Pues qué es?
Tar. Que aqui::: le hube de olvidar,
vive Dios. Inés. Ten , no la escondas,
que no te ia he de quitar.
Tur. No hai por qué, éi es un retrato,
veisle aqui. Inés. Bien hecho está.
Tar. Conocéis el dueño? Inés. N o .
Man. Cieno que está mui galán:
señora , este no es Don Felix?
Inés. Calla , que en el Sastre hai mas
malicia de lo que piensas.
Quereisme acaso feriar
esta joya ? Tar. No señora,
que si he de decir verdad,
ii
me la han dado para darla
à una Dama del Lugar,
que también yo en este trato
tengo un poco de oficial.
Inés. Quién es la Dama? Tur. No sé;
porque no la vi jamás,
ni he sabido donde vive,
solo su nombre sé ya.
Inés. Quál es? Tar. Doña Inés Pacheco,
que es mui bella. Inés. Sí será;
mas si esta joya os feriase
à otra de valor igual? Saca otra retrait.
Tar. No es posible que la haya.
Inés. Valdrálo esta? Tar. Sí valdrá.
Rían. Señora, tu hermano viene.
Tar. Pese à mí ! puedo escapar
sin ser visto? Inés. Pues qué importa
si sois Sastre ? Tar. Tengo azar
cen hermanos, porque un hombre,
Astrólogo singular,
me ha dicho, que quatro hermanos
me han de llevar à enterrar.
Man. Que se entra ya.
Tar. Pues yo quiero Ponesevms antcc.jos.
ponerme aqueste disfraz. Sale D. Pairo.
Ped. Hermana,qué hace aqui este hombre?
Inés. Ei Sastre enviado le ha,
porque corta de vestir
con gran destreza , y me trài
algunas telas , que venden,
por si las quieres comprar.
PeI. Anteojos trae? Tar. Por qué no?
Ped. No los vi en Sastre jamás.
Tur. Si el Sastre es corto de vista,
y Vé bien por su cristal,
por qué no se ha de poner
anteojos ? Ved. Es gravedad'
à que el Sastre no se atreve.
Tar. Yo he visto Sastre , que trai
relox en !a faltriquera.
red. Mira tú , hermana , si hai
tela alguna de tu gusto,
y se ia puedes comprar.
Y t ú , Manuela , à mi quarto
lleva luz, que'quiero ya
recogerme. Man. Ya yo voi.
Ped. Haz en saliendo cerrar.
Tur. Ya la tragó , vive Christo,
pues mas falta que tragar.
B 2
Vase.
Vasc.
ab.
hit.
No pmde ser guardar una Mugsr.
12
supe el Sastre, esto me alabo,
lr.cs. Hombre, quien quiera que seas,
que la hacia de vestir;
no me niegues la ^ erdad,
fui alia , y viéndole zurcir,
que en el susto he conocido
d i x e . tate , aqueste t s bravo.
que no eres Sastre ; habla y a
Prometilc unos escudos
sin miedo, y yo te aseguro,
S<'lo por la permisión
que de mi puedas Ear.
de ir en su nombre à esta acción,
Tar. Pues, señora::: Inés. Antesadvierte,
y no me salieron mudos,
que nada me has de ocultar,
porque él io dudó primero,
pues te vá premio, ò castigo.
y temió hacerme oficia 1,
Tar. Ya picó el pez : preguntad.
por si ei riesgo era fatal:
Inés. Eres criado de Don Feiix?
mas apenas '.ióel dinero,
Tar. En este caro algo mas.
q u ñ a d o las señas me dio,
Inés. Amigo? Tar. Alas un poquito.
c<'n que en su nombre fui allá,
Inés. Deudo ? Tar. Otro poquito mas.
y ya tai el Sastre está,
In'i. Pues qué eres? Tor. Su terrero.
q u e hará lo mismo que yo.
Inés. Q u é decís ? TJ>. Te pesara?
E n t r é , p u e s , en la tal casa
Inés. N o , que antes me has hecho gusto.
por medio de tres Porteros
Tur. Y lo estimas? Ir.éi. Claro está.
que tiene como Cerveros,
Tar. Tragóse todo ci anzuelo,
ap.
ansbando lo que pasa.
iré alargando el seda!.
Llevé mi arenga pensada,
Inés. Vete , pues. Tar. Y qué me dices?
y fue tal mi desventura,
lnér. N o vi mi retrato alia?
q u e pensando hallarla d u r a ,
Tar. Y acá queda el suyo. Inés. Pues
estaba ya perdigada.
qué mas quieres ? Tar. Algo mas.
Yo e n t r o , y salgo allá à llevarle
Inés. Vuelve à verme. Tmr. ¿ s o mañana.
recados, y ella desea
Inés. Bien recibido serás.
s o l o , que mi amo la vea,
Tar. Q u é decis ? Inés. Q u e esto aseguro.
porque rabia per hablarle.
Tar. Con memoria ? Inés. Y voiuntad.
Y si los lances postreros
Tar. Pues con esto á D i o s , señora.
no le mienten à mi estrella,
Inés. Hasta mañana no mas.
Vast.
he de h a c e r , que quiera ella,
Tar. Miren los que vén aquesto,
el hermano , y los Porteros.
si es bien grande necedad
Ana. D e tu industria la alabanza
el guardar una muger,
sea esta sortija. Tar. Bravo,
q u e no se quiere guardar.
pues me la llevo, ahora acabo
JORNADA
SEGUNDA.
de creer soi buena lanza.
Sal3, salen Tarugo, Don Felix, y Doña Ana. Ana. D o n F e ü x , por todo el preci*
del m u n d o , y todo el poder,
Ana. Notable principio ha sido,
no trueco el gusto de ver
y mejor fin asegura.
desengañado este necio.
Fel. N o es donosa travesura
Fcl. Mas tiene u n inconveniente,
la que Tarugo ha emprendido?
que lo que tema hasta aqui,
Ana. Tan r a r a , que dudo el modo.
pienfo que vá siendo en mi
Tar. Pues oid atentamente,
cuidado mui diferente.
si gustáis, que brevemente
Y o tenia inclinación
o& daré cuenta de todo.
de Doña Inés al recato;
Lo primero n e informé
y mirando en su retrato
pincin á su casa acudía
su divina perfección,
de fuera, que en compañía
me dexó tan satisfecit*
«rmar con alguien perué;
De Don
su hermosura , que he pensado,
que por él se me ha pasado
el original al pecho.
Ana. Pues cuidado , que es cruel
ese mal, no sea , por Dios,
que os hagáis la burla à vos,
queriendo hacérsela à él.
fel. Aunque inclinado me siento,
y aun algo mas que inclinado,
aun no llego à enamorado.
Ana. No os fiéis del sentimiento,
que es como el áspid Amor,
que el que encontrándole elado,
de su languidez fiado,
le dá del seno el calor,
y obra libre , y satisfecho,
del desmayo compasivo,
y no sabe que está vivo,
hasta que le muerde el pecho.
A quántos ha sucedido,
que de estar enamorados,
no hai mas seña en sus cuidados,
que un estar agradecidos?
Suelen decir éstos : Yo
lio estoi mas que bien hallado,
y es , que aun susto no le ha dado
el áspid que él abrigó}
y en ¡a primera ocasión
del calor de sus desvelos,
siente el diente de los zelo*
hasta el mismo corazón.
Para él el mundo se acaba,
su ardor con sus ansias mide,
y en los remedios que pide,
confiesa el mal que negaba.
Tar. Yo á mi modo , »i asi os place,
os pondré un exemplo breve:
el que bebe , quando bebe,
no sabe el mal que le hace;
y el que bebe sin empacho,
imita al amante fino,
que hasta que vomita el vino,
no sabe que está borracho.
Peí. En llegarme à enamorar
no hallo nada que perder,
siendo Doña Inés muger
con quien me puedo casar.
Tar. Si eso h a i , vano es ei recelo.
Ana. Tías eso lened cuidado.
stin Moreto.
13
Tai: Pita qué ha de andar atado,
teniendo remedio e! duelo?
Yo tuve unas bubas duras,
que andando noches fatales,
las halié en unos portales
de algunas casas obscuras:
de tumores , y chichones
viéndome lleno , al Dotor
fui , y me dixo : Mi señor,
no hai mas remedio, que unciones;
yo acéptelo , y de camino
dixe: Señor , qué he de hacer,
que me muero por beber,
y se me ar.tojs. un pepino ?
Di.xo él : No ancle en invenciones,
ni tiene que reparar,
que si a¡ fln se ha de curar,
todo saldrá en las unciones.
Si tu gusto se acomoda
acia casarte con ella,
dexate hurtar de querella,
que todo saldrá en la boda.
Fel. Dime, y qué medio tendré
yo de hablarla ? Ana. Eso sería,
corona de la porfía.
Tar. Yo anoche me desvelé,
y una industria he imaginado,
que ha de servirnos aqui:
tú no me dixiste a mí,
que este Don Pedro es preciado
de amigo, y aun de pariente
con el Marqués de Villena?
y que desde España ordena
el ser su correspondiente
en México , donde está?
Ana. Es cierto,y que de él recibe
cartas , y aun à mí me escribe.
Tar. Pues por hecho el caso dá.
Fel. Cómo? Tar. La flota ha -venido:
tú un regalo has de buscar
de Indias , que poder llevar,
mui hermoso , y mui lucido.
Si Doña Ana carta tiene
del Marqués , yo tacaré
la firma , y carta me haré,
como quien se la previene:
fingiréme Indiano en ella,
y que me hospede en su casa,
«atiesándole sia tasa
H
No puede ser guardar una Mtiger.
todo lo que lleve à ella.
An¿. Sabiendo su condición,
no puede haber discurrido
à su genio mas medido.
Frl. Pues ponió en ejecución.
Tar. Quieres que vaya à buscarlo,
y aprevenirlo? Fe!. Al instanre.
Tar. Y que compre lo impórtame?
Fel. Pues eso dudas? Tar. Andallo:
si tú no la hablares hoi,
mañana quemo mis flores,
que nt» pueden ser peores:
tengan cuenta á lo que voi,
ap.
à fingirme Caballero,
à comprar regalo Indiano,
à engañar aqueste hermano,
y à sisar en el dinero.
Vase.
Ans. La agudeza de Tarugo
es estraña. Fs!. Celestina
no supo embustes con él.
Ana. Con esto doi por vencida.
la porfía de Don Pedro.
F el. Tened, que él viene. Ana. Pues finja
ei descuido otro cuidado.
Fel. Bien decís , que ya nos mira.
Sale Don Pedro, y quedase ai paño.
Fed. Sin vida vengo , y sin alma:
bien esforzó la porfía
la cautela de Don Felix,
si estaba ya prevenida
su traición contra mi honra.
A ver à mi hermana iba
mi temor , que el riesgo vela,
y en su quarto (qué desdicha!)
vi esta mañana un retrato,
y aunque sus señas afirman
que es de Don Felix , le traigo
por cotejar con la vista
retía.to , y original,
que cosas de tanta estima,
no se han de juzgar con menos
información ; mas mi dicha
me ha ofrecido la ocasión,
quiero reportar las iras.
Ana. Señor Don Pedro Pacheco?
Fed. En vos-,.Doña Ana divina,
viene à hallar mi amor su centro.
Todas las señas confirman
ap.
mi sospecha, y su partido.
Mira el retrato , y à D. Felix con recato.
Ana. Qué reparais? Lo que os mira. ap.
Fel. Y el semblante demudado.
ap.
A'ta. Si acaso de la porfía
le ha quedado algun rencor.
Fel. No os deis vos por entendida.
Fed. A darle de puñaladas
ap.
e¡ furor me precipita.
Mataréle ; ma> acaso,
aunque es difícil , podria
no haber aqui culpa snyaj
y hasta ver en mi noticia
mas cabal información,
es mi templan?.» precisa.
Ana. Qué suspensiones son estas,
Don Pedro? P d. De quien os mira
estrañais que se suspenda ?
no es nuevo en mí : en vano anima
la voz mi pecho asustado.
ap.
Fel. Aun à h s b h r no acierta , è indicia
lo que vos habéis pensado.
Ana. Si acaso de la porfía
de ayer ya os habéis vencido,
no os embarace el rendirla,
que el hombre se vé en el yerro,
y el Sabio en que se corrija.
Fe.l. Antes tengo en la opinion
por tan segura la mia,
que hoi vuelvo à ratificarla.
Ana. Eso será vizarría
del ingenio , que aunque vea
su sentencia concluida,
por vanidad la defiende
contra la evidencia misma.
Y advertid , señor Don Pedro,
si eso os mueve à repetirla,
que el ser ignorante , es falta
al ingenio concedida;
y el ser necio , es una culpa
del entendimiento indigna.
El que ignora , en confesando
lo que ignoró , se acredita,
pues tuvo luz en su ingenio
para ver lo que no vía.
Mas quien quiere defenderlo,
se hace con una acción misma
ignorante-por la duda,
y necio por la porfía.
Por todas estas razones,
Be Den- A.íistin-Morelo.
justo es , Don Pedro , que os pida,
cue mudéis tie parecer,
que como mi afecto os mira
como quien ha de ser dueño
de mi amor, y de mi vida,
no os quisiera ver tan cie¿o
en verdad tan conocida.
Ved. No solamente, señora,
esa opinion no me inclina,
mas lo que no puede ser,
si mi opinion os admira,
digo , que he de sustentar
(<,in que ofenda Ja malicia)
el que se g u a r d e , pues quando
hubiera alguna atiévida
que intentara (qué es intento?)
que piense , en ofensa m¡a,
no manchar , deslucir solo
ti valor que me acredita,
con mi espada , con mis brazos,
con mi aliento abrasaría
su imaginación , de suerte,
que aun no quedasen cenizas
del que inventó mis ofensas
para esemplo de ellas mismas.
Ana. Pues contra quien decís tso?
Ved. Perdonad , señora mia,
que el haber yo discuirido
à solas con mi porfía,
ine ha llevado à este furor;
y para que no prosiga
con mi error , dadme licencia.
Voi à juntar la noticia
a£.
Con el examen., y si hallo
que Don Felix solicita
mi desastre-, vive el Cielo;
que le ha de costar ¡a vida.
Vase.
Ar.i. Habéis visto tal locura?
F<1 A mi me provoca à risa.
Ana. Sin duda está sospechoso.
FiL El cn<<ji> lo confirma,
y eso cía seguridad
al caso ; mas es precisa
diligencia ir ù avisar
•à Tar tiro Ana. So se omita
prevención Fe'. Y con efecto,
quién al necio le dir;a,
que me ha enviado su herman*
un retrato antes de vista?
15
Ana. Quien sabe que las mugeres,
quando las guardan peligran.
Fel. Que no puede ser, es cierto.
Ana. Y el que lo intenta lo escriba
con letra gra::de en su .puerta- •
Fe!. Qué , señora? Ana. Boveria. Vana.
S.iien Doña lr.es , y Manuela.
Inés. Manuela , yosoi muerta si él ha hael retrato.
(liado
Man. Tan poco es tu cuidado,
que tal prenda aventures de esa suerte!
Inés. K l , que en guardarme nada se d i vierte,
fue à verme esta mañana ùmi aposento,
propia acción de un hermano desatento,
(no,
Como él de susto me cogió ante may yo por encubririe de mi hermano,
con un descuido le arrojé en el suelo,
y no se ie.ví alzar ; pero busquéio
despues que ya mi hermano se h a bía ido,
(do.
y er\ todo el dia hallarle no he podiMan. Pues señora , sin duda , que ic ha
. hallado,
•y es mui fácil no haber tú reparado,
que un zeloso es sutil en sus acciones,
Inés. Pues para eso son mis prevenciones,
y que tú tengas atención te advierto
con lo que ordeno, por si acaso es
cierto,
que le tiene. Man. Ya estoi advertida.
Inés. Que yo le he de escuchar aqui escondida.
Man. Pues ya à tu quarto pasa.
Inés. Y asi saber espero lo que pasa.
lieiirar.se , y salen D. Pedro ,y Alberto.
Pid. Alberto , esto que os digo me ha
pasado,
este retrato en su quarto he bailado,
mirad si tiene indicios mi deshonra.
Aló. Tened, Don Pedro, y en cosas de la
honra
ciarlo,
no hagáis tan presto el juicio temeVcd. Buena teme.-idad ! Tan ordinario
es hallarse en el quarto de un.*. Dama
r.n retrato . que es nota de su fama?
Es es:o disculparos neciamente
del
No puede ser guardar una Muger.
del no haber sido guarda diligente ?
Alb. Pues qué hombre hibeis hallado ?
Ped. Buen concierto:
(cierto,
si no le hallé, que pude hallarle espues venir pudo , y es sombra de su
nombre,
por donde entró un retrato , entrará un hombre;
mas si à decir mi prevención tan vana,
el remedio es , que yo case à mi hermana,
que Don Diego de Roxas me la pide;
y aunque no es rico , quando el riesgo mide
la descomodidad , y la deshonra,
no hai mas comodidades, que la hanra.
Inís. Veslo? al remedio , que esto vá
perdido.
(do,
Alb. Mirad, que Doña Inés aqui ha sailno entienda lo que pasa.
Ped. Idos afuera.
Al'\ El à cargo tomó linda quimera, vas.
Inés. Esto importa, Manuela , finge ahora.
Salen.
Aquel ^retrato me has de dar, traidora.
Man. Señora, sabe Dios, q le he pe rdido.
Inés. Si por curiosidad le has escondido,
y si me pones ya mas embarazos,
del pecho he de sacattele i pedazos.
Man, Triste de mí ! Señora , yo protesto,
que en tu aposento le perdí.
P*d. Qué es esto?
(das.
Inés. Maldades son, hermano , de criaViniendo ayer de Misa descuidadas,
esa criada se encontró un retrato,
y menos obligada à su recato,
le alzó del suelo : anoche , estando
en casa,
me le mostró; advierte , si esto pasa,
el riesgo que resulta à mi recato,
de que en mi casa tengan un retrato,
que no sé de quién sea , mis criadas,
qumdo andan las malicias desveladas,
sin dexar sombras que en sus ojos pase:
dixela ,-que al instante le quemase,
y ella, por su capricho inadvertido,
quiere decirme ya que le ha perdido.
Píi.Loestraño del recato bien indicia,a/>.
que ha sido prevención à la malicia.
Qué dices t ú ?
Mm. Señor , creerme no quiere:
me Heve e l d i a b l o donde Dios quisiere,
si no le p e r d í anoche en su aposento,
Inés. No t a l .
Man. Y a u n p e r d í el entendimiento.
Ved. Bien e s t á , Inés, q ya tengo entendido,
que t ú , q u e mis sospechas has sabido,
te curas en. s a l u d , y te disculpas.
Inés.Qué es esto? pues tú ahora à mi
me c u l p a s ?
No te lo d i x e y o ? veslo , traidora?
busca el r e t r a t o . Man. Y o , señora,
dónde le h e d e buscar ?
Inés. Has d e b u s c a r l e ,
ù de tu p e c h o tengo de sacarle.
P« J.Tente, I n é s , q u e ya es vano tu recato:
bien sabes t ú q u e yo tengo el retrato,
y que h a s o í d o las sospechas mias.
Inés. Cómo? Ped. Y q tú primero le tenias;
y sabiendo q u e y o lo he conocido,
tu e n g a ñ o esta cautela ha prevenido.
In. Qué es lo q dices? has perdido el seso?
Ped. S í , I n é s , q le he perdido te confieso;
per» m u c h o n o ha sido,
. si el s e s o , y e l honor junto he-perdido.
Inés. Hablas conmigo?
Ped. Calla, a l e v e hermana,
dé este p u ñ a l à t u traición liviana
el debido c a s t i g o .
Saca la daga.
In. Qué es esto? Ped. Verdad es lo q digo,
y has d e d e c i r m e cómo à tí ha llegado
este r e t r a t o , y quién te le ha enviado.
Inés. A u n q u e p u e d a merecer
tu error l a desconfianza
à mi p e c h o , has d e saber,
que te q u i e r e responder
mi honor c o n esta templanza.
Y a u n q u e c a u s a me haya3 d i d »
para pensar , q u e ya dexo
de ser q u i e n soi , i tu lado
las iras q u e m e has causado,
te he de t r o c a r à u n consejo.
Si tú , h e r m a n o , has conocido
que te o f e n d o , a q u i has errado,
pues mi c u l p a has escondido
con h a b e r m e prevenido,
y no h a b e r m e castigado.
Si yo lo i n t e n t o no mas,
Be Do» ; \gustin Moreto.
y quieres con ese amago
vencerme, mas ciego estás,
pues otro deseo me das
para que logre el estrago.
Si lo presumes, es cierto
que es peor, que si yo estaba
dormida, à tu voz despierto,
acaso me has descubierto
lo que yo no imaginaba.
Con que entre el daño que toco
con ese furor que escucho
has andado necio y loco:
si lo sabes , porque es poco;
si lo dudas, porque es mucho.
Y al contrario en la ocasión,
quien desconfia, dispensa;
pues si imagina traición,
ya ella tiene en su opinion
hecho el gasto de la ofensa.
Y en fin, el que una muger
guardar quiere, lo ha de errar,
porque-no se puede hacer;
y decid si. puede ser
no queriéndose guardar.
Vase.
'Peà. Corrido, viven los Cielos,
oj>.
con-sus razones me dexa:
yo hice mal en declararme:
vete alia dentro, Manuela.
Man. Señor, di que no me riña.
Ped. No te reñirá, no temas.
Msn. No hai que temer, pues no teme,
que acá la llevamos hecha.
Vase.
Sale Alberto. Un Indiano Caballero,
que ahora dice que llega
à Madrid, y que una carta
trae del Marqués de Villena,
• te .quiere hablar, y con él
muchos ganapanes entran,
que traen unos caxones.
Ped. Venga mui en hora buena,
decid que entre el Caballero.
Alb. Entrad.
Sale Tarugo de Caballero del AvilodeSartiago con betas , y espuelas.
Tar. A las plantas vuestras
me tenéis ya. PeJ. Con los brazos
es el recibiros det'.da:
quién sois ? Tar. Ved lo en esta carta.
Ped. Antes de mirarlo en ella,
i?
de la estimación que os 3ebo,
vuestra persona es la muestra.
Tar. Quanto lo primero, ya
*/.
va tragada la presencia:
gran trozo de personage
debf) de tener. Ped. Licencia
me dad de leer la carta,
Tar. Leed mui en hora buena.
Ped. El Marqués mi primo firma.
Tar. Primo le llama? clávela.
Ap.
Lee D.Pedro. -El Señor Don Chrisanio Je
•^Arttaga es persona de toda mi «bligai-oni
va à esa Corte à negocios importantes,y
¡a estrañeza de su condición, qLC casi toca
en locura, le -arriesga en sus pretensiones,
no teniendo à su lado quien le de à conoce-,
y para lograr.la memoria de nuestra amistad,he querido que vaya ten carta <nia,y un
regalo de la tierra para recomendar ¡a estimación de sa persona, la qual suplico que
sea la misma que la rr.ia.
De su letra dice luego:
Encarga mucho su agasajo, que en toao sera
mi mayor estimación.
Caballero, mi persona,
esta casa, y quanto en ella
hubiere está à vuestros pies.
Tar. Yo estoi à las planas vuestras,
mi sefior: La añadidura
af.
pegó como giiapliega.
Ped. De vuestro despacho ahora
tratar lo primero es fuerza.
Vive Dios, que esto en mi casa a¡>.
à que le hospede aie enseña,
y es grandísimo peligro.
Tar. Parece que titubea:
ap.
pongoie un madurativo.
Yo, que de eso hablar quisiera;
os advierto , que no puedo
estar sin gran riesgo y pena
en casa donde hai mr.geies;
y si las hai en la vuestra,
no aceptaré el hospedage,
sino es que imposible sea
que yo las vea de noche.
Ped. Por qué? Tar. k's :\:v.i co-a nueva.
Yo en México i una C- ioüa
hablaba , é.«:a fue hechicera:
cuóme un hechizo, .'.elu:a,
C
7
13
No puede ser gtta 'dar. una Ji Muger.
•y de su mucha- violencia
me resultó un mni tan grande.
que hasta he: mas barras :ne cuesta
que cabezas de muchachos
hai desde.Caçiiz à Armenia.
D anoche fue la bebida,
y me ba resultado de ella,
que en viendo muger de noche,
me da un mal en la hora mesma
de corazón, que me quedo
con tanta bocaza abierta,
que me se ven ¡os ríñones..
por la senda de las venas..
Y asi, si en casa hai mugeres
que yo de noche ver pueda,
perdonad que no la acepto.
Pfi. Con este hombre nada arriesgan ap.
mis temores, y peligros.
Ko temáis vos que os suceda
en mi cas;:. Tar, Lumbre lia dado: ap.
pues me haréis merced en ella.
Pi.i. Yo os he de suplicar eso:
apartaré de manera
ap.
su. quarto del de mi hermana,
«¡'.:e viva en casa sin verla.
De esta suerte lo aseguro.
Alh. Y quandó. aqueso suceda,
yo sé unas- ciertas palabras
con que sano esa dolencia.
Tar. Pues vos me daréis la vida:
Jesus, la carta primera
se me ha dé ir toda en dar gracias.
Ped. A quién, señor? Tar. A Villena.
PcJ. Sois su amigo? Tar. Y camarada:
le tengo yo allá à mi mesa
todos los mas de los dias;
es gran Señor su-Excelencia,
y sabe como ha de honrar
à los hombres de mis prendas;
y aunque yo : lo.diga, todo
cabe en mi sangre-, que lleva
de No¿ acá Caballeros,
como berzas una. huerta.
Pcd. Y habéis-estado otra vez
acá? Tar. Ktí-j ésta es la primera.
Pul. Luego alia el Aviro os dieron?
Ttir, Con notables preeminencias
su Majestad me n>-; >
que ate Avito me pusiera,
y- y°> P< " 'hacerle .-gírsto,
lo acepté. Ped. Rara grandeza!
Habéis vos servido al Rei?
Tar. Yo servidole? esa es buena,
él me sirve à mí. Ped. De qué?
Tar. De gusto en coplas diversas
que le hago yo cada. día.
Ped. Luego también sois Poeta?
Tar. Esa es una habilidad,
que me hallé.en la faldriquera
un dia sacando un lienzo,
mas ya no hago caso de ella. .
Ped. Estraño humor tiene el hombre,
bien la carta me lo acuerda.
Ap.
Aibérto, aquí es menester
que ei regalo se prevenga,
y el quarto de Don Chrisanto.
Tar. Ay, bobo, que à pagar llegas
ap.
los azotes al verdugo!
Pcd..Dadnos- ahora licencia
de preveniros la casa.
Tar. Pues mirad que tenga cuenta
quien reciba aquestas cajas,
porque lo que dentro encierran
no se maltrate al torearlas.
Ped. Pues qué es lo que viene en ellas?
Tar. Chocolate de Guaxaca,
y filigranas diversas,
gicaras de Mechoacán,
y paños que dar con ellas.
Pcd. Bujerías son de gusto,
y dignas de.la grandeza
del señor que las envia.
Tar. Un tuerto es, que tiene tienda
tp.
junto à la puerta del Sol.
Ped. Perdonad, dadme licencia. .
Tar.Bien está. Pía. Venid,Alberto. Vanst.
Tar. Bueno va: el bobo, qué piensa
que es. fácil guardar mugeres?
Rías facii de-guardar fuera .
una viña de muchachos:
mas todo esto en la presencia
-pase de Inés, que avisada
está ya de aquesta treta;
y asi, aquel resquicio pienso
que.huele à faldas-que acachan.
$aíiIre.'. SeorTarugo. 7 > . Ya voi: tomen
S3 soi n.al pero de muestra:
rnir.a si oLi la perdiz.
Inés.
De Don Agustín Morete.
tés. Ya he escuchado tu cautela.
Zjr. No esta bien introducida?
Ir.ts. Vida me ha? dado con tila.
Tar. Pues no ha de parar en esto,
que csra noche haré que veas
à Don Felix aqui dentro.
Jr.és. Como.si hai encada puerta
una guarda? Tar. No hai jardin?
Inés. Si, mas él solo abre, y cierra.
Tar. Pues mejor, lues. Sí; pero advierte,
que está con grande cautela,
porque me ha hallado el retrato.
Tar. Malo; mas no tengas pena,
que yo lo remediaré. •
Inés. Cómo? Tar. Qué hai .de .la materia?
Inés. Que yo he dicho, queen el Carmen,
ayer se le halló Manuela,
y aun sospecha la malicia.
Tar. Pues yo haré que me le vuelva.
Inés. A ti? que diers? Tar. Que vuelve,
retírate allá, y acecha.
Retirase Doña Inés, y sale Don Pedro.
Ped. Señor Don Chrisanto, ya
prevenido el quarto queda,
y podéis entrar à honrarle.
Tar. Para pagar la fineza
del hospedage,m¡ honor
quiero fiaros. Ped. Es deuda
con que.empeñáis mi amistad.
Tar. Yo tengo una hermana bella
en Indias que es un prodigio}
quando sale à alguna fiesta
de diez leguas en contorno
vin forasteros à verla.
Tiene un dote que es locura;
en casas solo la cuentan
ciento y treinta mil ducados:
à mas de las diligencias
que yo vengo, es à casarla,
traigo de allá la propuesta
eje un Caballero de aqui,
qlie vos conocer es fuerza.
Pel. Podrá ser: decid, quién es?
Tar. Si yo su retrato os diera,
conocereisle por él?
Ped. Viéndole os daré respuesta.
Tar. Pues yo os le quiero enseñar;
mas 'guardad, ésta es-buena; búscalo.
vive Dios que le he perdido.
*9
Ped. Cómo? Tar. De Ja'faldriquera
se me ha caído. Ped. Su nombre
me decid si se os acuerda.
Tar. Don Felix es de Toledo.
Ped. Cielos, bien dixo Manuela:
tp>
albricias doi à mi honor.
Dónde se os cayó? Tar. Eso piensa
mi cuidado, y no me acuerdo,
sino.es que ayer en la Iglesia
del' Carmen se me cayese,
porque al'.i una tabaquera,
que se me habia perdido,
me volvieron à la puerta.
Ped. Cielos, allá va mi hermana
ap.
à Misa ; que su inocencia
culpase yo, ciego,y loco!
Y si j o el retrato os diera,
sácale.
qué dixerais? Tar. Dónde está?
P Í ¿ . Veisleaqui. Tar. Hai dichicornoéstal
dos mil ducados de hallazgo,
si los tomarais, os diera:
mas haliazgo os he de dar.
Ped. Qué decís? Tar. Una caden*
que pesa catorce libras,
de filigrana. Ped. Kso fuera
agraviar mi. voluntad.
Tar. Tomadla, por vida vuestra.
Ped. Yo tomarla? Tar. No importa,
ap.
que aun pienso quenoestá hecha.
Ped. Miren si el guardar mi'honra ap.
se luce. Tar. Pero él se quema: ap.
si no le echo esta botana
todo el pellejo rebienta.
PeJ. Venid, señor Don' Chrisanto.
Tar. Digo,conocéis quién sea
ese Caballero? Ped. Sí,
que es mui grande su nobleza.
Tar. Pues eso es lo que yo busco,
que allá nos sobra la hacienda.
Ped. Vos haréis mui digno empleo.
Tar. Gozará la mejor prenda
de España, y la mas guardada,
porque hai muchos que desean,
y esta noche he de ajustarlo.
Ped. Con quién? Tar. Con él, y con ella,
Ped. Pues cómo? Tar. Eso e:i el jardin
se verá de aqui à hora y media.
Ap.
Yo traigo aqui poder suyo.
Ped. Haréis bien, porque se arriesga
C*
I*
TO
Nfi pzede ser git*rdar una Mqger.
li ir.uger Irerrnosa' en ea^a.
7 j ' . Y y:..sé sigurn que picr.sa
que la gv.arda, y es en vano.
Pi J. Seri tonto ei que la veia.
JVr,.C<>mo vos io habéis pensado.
Pcd. Venid . pues. Tar. En hora buena.
Ped. Entrad vos. Tar. Guiadme vos.
Ped. Esto es forzoso. Tar. Esto es deudat
Ped. No haré tal. Tor. Por vida-mía.
Ptd. Ka de ser. Tar. Pues obediencia.
Ped. Ei Don Chrisanto es un bobo.
Tar. El hermano es una bestia.. Vanse.
Salen Dor.x 1res, y Manuela.
Inés, Manuela, hai dicha mayor.
lograrse arr.-jr y recato!
Wl.in. Que le sacase el retrato
cors, tal traza es lo mejor;
<3ue en una palabra sola
lo entendiese es lo que dudo.
Hhés. El Tarugo es muí agudo.
Alan. No ha menester üevar cola.
Inés. Cómo en casa ha de meter
à Don ju'üx, no lo entiendo,
por mas que esté discurriendo.
Jff.in. Señora, dexale hacer,
y quanto dicho te hubiere,
pues tú se lo vés lograr,
no hai sino creer y callar,
y venga ¡o que viniere.
tics. El dio à entender, que al jardín >
luego rue le. ha de traer,
no sé cómo puede ser.
¡Man. VA sabe m¿s que Merlin,
y ya tendrá su desvelo
hecho el enredo i esta, hora:
y estas cosas son, señora,
como el.huevo de Juanelo.
ÏD'S. Yo ?.qui le pienso esperar,
aunque .el medio busco en vano;
:r.r.s qué harán él,, y mi hermano?
Hun. Dándole está de cenar
cel aparato nudoso,
y es nqui lo que ma-s vale3
haber hecha que regale
al alcahuete cl.»zeioso..
Dent. D. VecL-Oh, luces al jarûirf.
¡>i¿s. Que aqui vienen imagino.
¿fon. Traza sorá deTaru'T'). Sale D.Ped.'
Pe¿. Dor.a Inés? In¿s. Hermano mió?
Ped. Que à tu quarto te retires.
por un rato te suplico,
porque ese huésped que tengo,
que le traiga me ha pedido
después de cena al jardin.
Ipés. Pues yo aqui me habia venido,
porque estas noches no duermo,
y la frescura del sitio
me suele llamar el sueño.
Ped..Yo haré, en habiéndole visto,
se vuelva luego-à su quarto,
y entrarás tú. Inés. Eso te pido,
porque yo. en mi soledad
no tengo mas que este alivio;
vén, Manuela. Man. A estar alerta.
Inés. Por la rexa de, los mirtos
estaremos escuchando.
Vanse.
Salen Criados con luces , y Tarugo,
Tar. Bendito sea el que hizo
tal hermosura! es posible-.
que esto pueda el artificio!
Ped.. Para dentro de la Corte
no es malo este rinconcito.
Tar. Cómo rincón? vive Dios,
cue no es sino, un Paraíso:
y está dentro la culebra;
tfpw
y ha de llevarla mi amigo,
porque ya Eva está avisada,
y Adán está prevenido.
Ped. Os queréis recoger luego?
Tar. Antes en tal no imagino,
porque acostarse en cenando
algo mas, tiene peligro.
Ptd. Vive Dios que está de espacio <r/t
este hombre, y como he dicho,
volverá mi hermana luego.
I V . Sentémonos un poquito,
que para de aqui à las.doce.
está famoso este sitio: •
bien podéis <lexarnos solos.
Siéntanse , y vanse los Cr'tadtt.
Ptd. Retiraos. Tar. Para mi aviso
fl/.;
ya tardai mucho Don Fclix,
y tener yo .aqui es preciso
este hombre, para lograr
el embuste que está urdido.
Pc¡i. lisais acostaros tarde?
Tar. Sí señor, ene -es mi estilo,
no me he acostado en mi vid»
sin
21
mira
si
viene
LJon
Félix,
s:. dos horas de-palillo,.
que yo aquí espero t-i aviso.
3 .!Í(.» 3 , tabicado jardin,
Sale D. Fel. Bien la ocasión se ¡ia logrado.
pit MSii f. larga tías à cinco.
P:d. De espacio c-tamos , por Dios. a¿>. Mar.. Don Felix es , hecho, y dieso:
sois Don Félix? Fe!. S í , yo sol.
'i. listólo aprendí de un primo,
Lian. Escondeos aqui conmigo,
que ts grandísimo gincte,
presto, que pueden volver.
y por eso le he traído
à España. PeJ. A qué ? Tar. A torear. Pel. Por vos no temo el peligro.
Escondense, y jalen Don Pedro,y Tarug»
PeJ. Pues cómo con vos no vino?
emhainando ¡as espadat.
Tar. Posa en casa de una tía*
PeJ. Vive Dios,que estol perdido, ap~ Tar. Vive Dios, que se escaparon.
PeJ. Dónde se fue vuestro primo?
si vuelve luego mi hermana.
Tar. Pues qué demonios sé yo?
Yo.estoi aquí desabrido,
pudo engañarse mi oido.
porque me ofende el sereno.
Pid. O eran capeadores. Tar. O eso:
Tur. No digáis tal desatino;
acostarme determino¿
sereno ahora por Mayo?
que me ha hecho mal este susto.
si vos queréis divertirlo,
Ptd. Idos, pues. Tar. Venid conmigo.
discurramos aqui un poco:
S:.beis de Historias? Ptd. N o he sido • Ptd. Pues cerrad quiero la puerta. "
Tar. Lindamente ha sucedido.
cierre.
inclinado à leer jamás.
PcJ. Vamos : Don Chrisanto es
a¡>,
Tar. Gran hombre fue Tito Libio.
PeJ. Vive Dios que estamos buenos. ap.~
valiente como Rodrigo.
Tar. Mucho tarda , vive Christo, *py- Tar. En dándole transcantón
ap>
Don Felix , y mucho aprieta
volveré.
vanse.
este hombre. Pea. Yo estoisin únoiap.Salen Don Félix , y Manuel».
a'.go indispuesto me siento,
Wan. Ya ellos se han ido;
y asi, amigo , me retiro.
señor Don Félix, salid.
Tar. Aguardad , por vida vuestra;
Fel. A poner el alvedrio
quercis'&qui divertiros .
à vuestras plantas', señora,
sin daño ? Ptd. Qué hemos de hacer? Man. Mitad que errais el estilo,
Far. Jugar unos cientecitos.
que y o n o s o i Doña Inés.
Pei. Ya yo pierdo la paciencia.
Fel. Pues quién ? Man. Maajjela.Suena dentro ruido de-cuchilladas. •
Fc!. Qué mira1
Tient. Fel. lia traidores!
pues dónde<está Doña Inés?
Tor. Ya estoi vivo.
Man. Ahora saldrá à recibiros.
PeJ. Mas qué es esto? Tdr. Cuchilladas. Sale Tar. Ya queda el bobo en su q u a r t s
fe'. Traidores, ñ un hombre cinco?
Fel. Es Tarugo? Tar. Señor mío,
Ko l'.ai cuicn i un hombre socorra?
y Doña Inés ? Man. Ya saldrá.
Tar. Cuerpo de Christo conmigo.
Tor. Pues salga, plugutre Chxisto,
Val. Esperad , à dónde vais?
que me cuesta mi sudor
Tar. Kíta es la voz du mi primo.
el zurcir este cariño.
Ptd. Que está cerrada esa puerta.
Sale Inés. Ya sale quien le agradece,
Ta-, Abridla , pleguete Christo.
Fe!. Bien en las flores se ha visto,
Pel. Que me rr.atan. lar. Abrid prestOi
señora , nuevos salis;
PeJ. Ya lo esiá, Tar. Venid conmípo.
pves si las marchitó el brio
PeJ. Y
" amos.
la noche , Vuestra presencia
Vsnst. •
Su'- n ¡Manuela, y iMñá Inest
les dá matices mas vivos. •
Inés. Manuela, te/i tú cuidado
Man. Señora , esto es curto.
si acia la.puerta hacen ruide
in(í. Ya yo ia. industria lie ç-nteniido';
Ve Don ¿¡gustin Moreto,
22
No puede serguardar una Mtiger.
y si habíais, sea mui quedo.
Man. Hablad , que yo os daré aviso.
Tar.
PUES seamos dos á dos,
que quiero estando contigo,
lograr ei rato , y no ser
aqui el Sastre del Campillo.
Inés. Señor Don Felix , dudosa
aqui os escucho, y os miro,
porque como este intento
en vos de tema ha nacido,
para vencer á mi hermano
en su opinion , yo imagino
que es porfia, y no fineza.
Fel. Suspenso, señora, he oido
en vuestra desconfianza,
contra vos mi-ima, un delito;
pues quando de la porfía
naciera en mi este designio,
al mirar vuestra hermosura
se :ne trocara el motivo;
porque quando su opinion
sola me hubiese rncKido
à amaros, siendo forzoso,
por vuestros ojos divinos
lo era también adorados,
porque el poder de ellos mismos
ía voluntad me arrastrara,
y negara mi alvedrio.
Vurdac! es , señora . rnia,
que del intento el capricho
fue el caer en vuestro hermano
aquel tan ciego delirio.
Mas luego vuestro retrato,
como antes os había visto,
y inclinación os tenia,
me robó todo el sentido;
y para que esta verdad,
y la í¿ con que la digo
conozcáis , mano, y palabra.
os daré , si en esto os sirvo,
d e ser vuestro esposo; y juro
esto à los Culos dix ¡nos,
haciendo lentigos deeiio
ù las estrellas que miro,
y elüs dit .in la verdad
del amor con. que io afirmo,
que si están en vuestros ojos,
no seran falsos testigos.
Inés. Mano, y palabra, Don Felix,
te acepto , y de mí te digo,
que aunque mil vidas arriesgue,
yo he de ser t u y a , y tú mió;
y ahora , por esta noche,
no arriesguemos lo adquirido,
procura , señor , volverte.
Tar. Qué es volver ? pleguete Christo?
lo de adentro afuera puede,
que aqui no hai otro camino.
Inés. Luego no puede salir?
Tar. Cerrada como castillo
está ya toda la casa.
In. Pues qué hará? Tar'. Entrarse conmigo,
que yo cerraré mi quarto.
Mjn.Téa , que pasos he sentido.
Tar. Qué dices ? Cuerpo de D i o s ,
la espada se me ha caído.
Cáesele,
Dent. Ped. Ola , q u é ruido es aquel?
Nan. Ay Dios ! Tar. Esto vá p e r d i d o .
Ped. Alberto , ola , sacad luces.
Dem. Meno. Ya vamos. Tar. Pleguete
Christo.
Inés. Qué hemos de hacer? a y d e mí!
Tir. Escóndase entre estos mirtos
Don Felix, y estaos vosotras
como os estais, que al proviso
yo daré remedio al daño.
Inés. Presto. Fel. Ya yo me retiro, escondese.
Tar. Decid quando e n t r é , que y o
de ¡a ventana he caído:
con el mal de corazón
remediarlo determino.
Salen Don Pedro , y Alberto con lux , y
.Tarugo está en el suelo , como que le ha
dado mal de corazón.
Ped. Mirad quién está a q ú i d e n t r o ,
porque yo i;e sentido ruido.
Quk;n está aqui , hermana?
Inés. Este hombre
de esa ventana ha caído.
Ved. D. Chrisanto e s , vive el Cíelo.
Alb. Ay, s e ñ o r , quo según miro,
le dio el mal de corazón.
Ped. Decidle vos ai oido
las palabras que sabéis.
Aíb. Eso procuro. Lùega à hablarle al oidt.
Tar. Ay , Dios mió!
Ped. Qué es esto , Señor. Tar. A y triste!
hombre , que me has destruido:
no
De Don Agí •si in Mor ¿to.
23
no ciecias , que no habia en casa
..ao puede ser , aunque tenga
ir.iigtrcs ? que el diablo quiso,
mas guardas que el vellocino.
que rec asome à esa ventana,
J O R N A D A . T E R C K R A.
y las vi , y ele haberlas visto,
me dio e: mal de corazón.
Salen Don Fclix , y Tarugo.
Fed. Válgame el Cielo divino!
Fe!. Ocho días ha que aquí
que no previniese yo
estoi , Tarugo , escondido,
el cerrar aquel postigo!
y un hora me ha parecido.
lar. Ay ! que me he perniquebrad^
Tur. Y quarenta años à mí,
llevadme à la cama amigos.
según los sustos que paso,
Peti. Alberto, ayudadme, alzad.
por haberte de ocuitar,
J a r . Quedo , mi señor , pasito,
pues es forzoso inventar
que llevo desencajados
un embuste à cada paso.
los huesos del entresijo.
Y aunque hasta aqui en general
Alb. Vamos, señor. P»d. Andad paso.
todos me han salido bien,
Tur. Si , por axor de San Lino,
puedo alguno errar también,
que no es daño el que se vé,
que el ingenio no es igual;
sino el que queda escondido. Llevante*
y según los testimonios
Inés. Qué haremos ahora , Manuela?
¿ e este hermano , temer puedo
Man. Que en nuestro Oratorio mismo
que yo y e n e algun enredo,
pase esta noche Don Felix.
y nos lleven los demonios.
Inés. Eso habrá de ser preciso:
JFí/.Todo el susto , que es forzoso.
Don Felix. .
se descuenta en la alabanza,
Sale Don Félix. Qué me decís?
que de engañarle te alcanza
Inés. Que ia palabra te pido,'
à un hombre tan receloso.
de que.pasar no te atrevas
Tar: No es el desquite que tomo
el límite en tus cariños,
de mi susto ese primor.
que permite mi decoro.
Fel. Pues quái puede ser rrejor?
Fel. Yo, señora , te lo afirmo,
Ter. Los regalos que le cómo;
y lo juro. Inés. De esa suerte^
y aunque me muelan á falos,
entra en mi quarto conmigo.
están mis penas pagadas:
que en mi Oratorio podrás
cien Monjas tiene ocupadas
pasar la noche escondido,
soio en hacerrge regalos;
y luego por la mañana
puedes salir sin ser visto,
las pollas y las perdices,
y irte al quarto de- Tarugo.
digo, que me van cansando,
Fel. Solo tu ingenio divino
y los bofes anda echando
hiciera::- Inés. No es sirio Arnoi
por buscarme codornices.
el que me d i estos aibiirios.
Sale Doña Inés à u?ia ventana.
Fe/. Qu-c en efecto ya eres mía?
Inés. Ce:. Feí. Aguanta, que a la ventana
he's. Como tu , Don Felix , mió.
imagino que han llamado.
Fel. Mas cierto es esto, que esotro.
Tar. Y que es Doña Inés parece.
Inés. 1.a deíCunrki./.a estimo.
Inér. Gran desdicha ! muerta ^l,;*,:
Fc¡. Por qué i tn.-s. Paiccc fineza.
Fel. Muerta? qué dices , mi bie.-n¿
Vén tras mi. be'. Ya tu iionor «:go.Inés. Qu<¡ y a ha sabido mi r.vniu'.no,
Rían. Ydeeíieextímpíe.:: />.•«.QuédiceS:
que ha i hombreen ea%;{ esccü.'Iiilu»
it'Vj?.. b^-JJ?..! ¡O* tICe'ÎCS J v i . ^ l O ,
Fel. Válgame c l C i e ' r ! Tor. Z.Í;VIK».
quv ci gr-ardar una M:;i•-•:,
Fti. Pues cómo ha Mdo? lues. L.i e>císv3
si lilla ¿uardarjv ::o quiso.
te \io cu el jardin, ¿asanas
acia
24
No puede ser guardar una Muger.
acia el quarto tie Tarugo,
y todo se lo ha contado.
Tur. La Mora? Inés. Sí. Tar. Pues la perra
quién la mete con los pasos,
que eso toca à los Judíos,
no à los Moros? Inés. Yo he arriesgado
el venir à esta ventana,
por avisarte del daño,
de que aqui mas nos importa
el poner tu vida en salvo,
que asegurar tu defensa
de riesgo tan declarado;
' que viviendo tu , bien mió,
para mt no hai riesgo humano,
que por.,tí sabré exponerme
à peligro mas estraño;
y à Dios : no puedo estar mas
aqui. Fe!. Aguarda. Tar. Esperaos.
Fe!. Puedo yo salir de casa?
Inés Cómo , si él queda en mi quarto
registrando pieza à pieza,
y las armas en las manos?
cerrando toda la casa
andan todos los criados:
à Dios.
Vase.
Tir, Cori la colorada.
Fe!. Gran mal! Tur. Frescos quedamos
llegó la hora , esto es hecho.
Fe!. Qué haces? Tar. Sacar el Rosario,
y ponerme bien con Dios.
F¿!. Pues yo be de morir matando.
Tar. Eso es cosa de Doter.
Fd. Pues qué he de hacer?Tir.Excusarlo,
que si el morir nose escusa,
el matar es valor de asno;
pues lo mismo hace una albarda,
que mata estando debaxo.
Dent. D. Ped. Requerid todas las puertas.
Tar. Vive Christo , que esto es malo.
Fe!. Este es el postrer remedio:
Tarugo, ponte à mi lado.
Tar. Aguarda , pleguete Christo,
ya di en ella : Soberano
ingenio , norte del hombre,
mas vale un ingenio claro,
que todo el oro del mundo:
metete dentro del quarto.
Fel. Qué es-Jo que intentas?7*<j>·.Sacarte
de esta casa à paz, y à salvo.
fe!. Cómo? Tar. Luego lo retís*
Fe!. De tí tengo de fiarlo.
Tar. No lo fies , que el que fía
es el que viene à pagarlo;
mas cree que-has de salir,
y que el bobo del hermano
te ha de regalar primero,
y te ha ir acompañando.
EntFa presto. Fe!. No lo creo.
Tar. Éntrate allá con mil diablos.
Entrase, y salen Don Pedro , Aíbertt, j
Sancho vejete, con escopetas.
Fed. Es imposible escaparse:
poneos vos aqui, Sancho.
Sanch. Déseme usance apuntar,
y venga el género humano.
Fed. Guardad esa puerta , Alberto.
Tir..Qué es esto? armas en mi quarto?
pues qué prevención es esta?
Fed. He sabido , Don Chrisanto,
que andan ladrones en casa:
encubrir quiero el agravio,
af,
que de mi hermana presumo.
Tar. A buen, tiempo en esto os hallo,
quando tengo una visita,
y venía à suplicaros,
que me hiciesen chocolate,
que es el preciso agasajo,
que i una visita se debe.
Fed. Visita hai en vuestro quarto?
Tar. S í , amigo, y de cumplimiento,
que no he podido escusarlo;
porque como ya por cartas
está el concierto tratado
de mi hermana , y ya el novio,
de mi venida avisado,
supo donde esroi, y ahora
le encontré saliendo acaso,
que buscándome venia,
y asi le tengo en mi quarto.
Ped.Qué aqui está?Tar.Elentró conmigo
delante de esos criados.
Fed. Quién ? Tar. Don Felix de Toledo.
Fed. Quánto vá que ha sido acaso ag.
el hombre que vio la esclava.
Y al jardin habéis entrado
con él ? Tar. ho primero que hice
fue llevarle à ver los quadros,
y al punto que ios miró,
se
Dt?"DonAgustín
se quedó el hombre pasmado.
Ped. Qué decís? Tar. Dice que ha visto
Retiro, Casa de Campo,
Aranjuez, pero ninguno*
le llegan i su zapato.
Si à Don Felix le parece
la novia como los quadros,
los Amantes de Teruel
con él han de ser guijarros.
Ped. Veis como son necios sustos
los que siempre me estais dan:!o?
Alb. Digo, que entrar no le he visto.
Sancb. Ni yo. Tar. Hai tales mentecato^
delante de vos entró,
por señas, que al darle paso
se os cayó al suelo la gorra.
Stnch. La gorra á mí? Verbum cat».
Señor, tal hombre no he visto.
Tar. Si eso decís, no me espanto,
que os olvidéis de la gorra.
PeJ. Misterio tiene el ntgarlo:
ap.
Este es el cuidado, Aiberto,
que de mi honor os encargo?
ved-si por donde entró un hombre,
sin verle tantos criados,
pueden haber entrado otros.
Alb. Señor::- Ped. Andad, descuidados.
Alb. Si no es que ha sido invisible.
Ped. Idos ailá fuera. Alb. Vamos.
Sancb. Por Dios, que pienso que entró:
mas yo siempre estoi rezando,
y no puedo tener cuenta
en la vista, y en la mano.
Tar. Haced que hagan chocolate.
Ped. h\bttio.Alb. Voi à mandarlo. Vanít.
Ped. Miren si deda bien,
ap.
que era imposible mi agravio,
guardando tanto mi honor;
porque aunque este hombre ha entrado,
suceder puede ana vez,
en una casa un acaso ;
mas no es para cada día,
señores, no hai que dudarlo,
el que guardare su honor,
hallará lo que yo hallo.
Tar. Al novio quiero llaman
señor Don Felix. Ftl. Ya salgo.
Tar. A conocer por mi dueño
al señor Don Pedro , os llamo,
f arque cierto que en su casa
Moreto.
recibo tanto agasajo
Ped. Mi obligación es serviros.
Fel. Don Pedro, y y o ha muchos.anos,
que somos grandes amigos.
Tar. Mucho me huelgo ; sentaos:
qué os parece de la novia, Siéntante*
pues habéis visto el retrato?
Fet. Aseguto , hermano mió,
que no caben en mis labio»
los hipérboles que debo
al bien que en él idolatro.
Absorto en ver su hermosura
todas las noches me paso,
y crece tanto mi amor .
con esta dicha que alcanzo,
que presumo que lo escucha,
y está durmiendo a mi lado.
Tar. Qué dixera el hermanico,
ap.
si aqui hubiera un comentario,
que la alegoría explicase?
Fel. Aun de admirarme no acabo ap.
del ingenio de Tarugo.
Ped. Estando ya en este estada
el casamiento , Don Felix,
el parabién puedo daros:
gocéis esa mi señora
en dulce paz muchos años.
Fel. Yo le recibo, Don Pedro,
y sea para lograrlos,
viendo vos la suerte mia.
Tar. La suya vendrá debaxo.
ap.
Vive Christo , que es lo mas
que ha podido hacer el diablo,
que de que le hurte la hermana,
dé parabién un hermano.
Ped. Miren esto.: yo pensaba,
ap.
que Don Felix con engaño
ponía en mi hermana los ojos;
jf aqui el caso averiguado,
tiene su amor.en las Indias.
Lo que es juicio temerario!
Fel. Hermano, dadme licencia,
porque he de ir à Palacio
à hacer una diligencia.
Tar. Aguardar, que aun es temprano:
no viene _ya el chocolate?
Salen A'betts., y dot Criados con xicarar de chocolate.
Alb. Aqui está. Tar. Aqueso aguardo;
que la mejor circunstancia,
ap.
D
que
30
No puede serguar dar.liña Muper.
que aquí tiene aqueste caso,
es haber hecho mi industria
que él le regale à mi amo.
T o m a d , hermano. Fel. Señor,
eso por mí eí escusado,
que-le he tomado dos veces;
Tar. Ko se on dé nada , tomadlo,
que el choco.ate en Madrid
se usa ya como el tabaco.
Ped. Hacedme à m: esa lisonja.
Fet. Ya lo b e b o , si es mandado.
Tar. Cuerpo de Dios, qué bien hecho!
cierto que.parece caldo
de empanada de figón.
P¿ii. Mucho toma el Don Chrisanto. ap.
Tar. Yo io bebo , y no lo sorbo.
Fel. Si es deuda de cortesano,
para cumplimiento basta.
Tur. Dad lo acá si de\ais algo.
Fel. Mirad que.esú mui caliente.
Tar. .Tengo el ga;:na:e empedrado.
Fed. Don Feiix , aquesta casa,
que en vos no es nuevo agasajo,
ya con mas obligación
por el señor Dun, Chrisanto,
podéis honrar como vuestra.
Fel. Yo espero ser de eiia tanto
como é l , y mas, si os merezco
mas favor, por mas esclavo.
Guárdeos Dios. Ped. Dadme licencia
d e q u e os vaya acompañandohasta Palacio en mi coche.
Fcl. Ki) ha de ser est», quedaos.
(ser.
Ped. Yo he de ir con vos. Vel. No h a d e
Tar. Pues pártase el agasajo;
dadnos el coche, à los dos,
que yo i acompañarle * l g y .
Fcl. Q u é e s lo que interuas, demonio?!
lar. HIÍ de hacer que aqueste hermano
te dé la cama también. : •
Ped. Pues si queréis eso , vamot.
Fel. Js'o habéis de pasar de aqui.
Fed. Yo solo obedezco , y callo;
que llegue el coche , Domingo.
F</. Don Pedro, bc-soos las manos.
Tar. A Dios. Pxd. El guarde i los dos.
Tar. Señor receloso, varnos. ..
Vantt..
FeJ. Viven los Cielo», Alberto,
que casi desesperado
n e tiene vuestro descuido.
Alb. Vive el Cielo soberano,
qve tal hombre entrar no he v i s t o ,
y de l i puerta no falto,
hasta la hora que me acuesto,
desde la que me levanto,
y no sé có.no esro sea.
Ped. De que eso digair. me espant**.
Este hombre entro por el Cielo?
que c .aba dtntro no es claro?
lue¿;oíi entró por la puerta,
que no le vistes es llano.
AU, Yo h e d í perder el sentido.
Pedí, Más ie, perderé >o,-.dando
ocasiones à mi -hermana,
nacidas- de sobresalto
de vuestra mucha torpeza.
.¿/¿..Pues no. es ¿nejor cscusaros
de ese desvelo.» y catarla?
Ped. A eso estoi determinado,
y hoi ha de sc-r., vive Dios.
-. Salen Diña lnét,y
Manuelé»
luís. ?.janucla, el ingenio raro
de T:;rugo dio el remedio:
ahora importa hacerle el c a r g o .
K o dirás , D o n . P e d r o , . a h o r a ,
que son mis quexas en vano,
mira si tenerlas puedo
de estos zelos mal fundados;
pues por tu injusta sospecha,
con arrojos temerarios,
tanto tu- opinion desdoras,
como infamas mi recato.
El cuerdo en una sospechaha cíe íKll^r rtca.tado;
•porque si quando la tiene
hace público ,d, agracio, ,quando sabe que es injusta,
y lo que pensóos.«n.vano,
soJo«él. «fuedia- wtisfecboj
y no los que le escucharon:
que tu para ti lo-estés,
no te saca del agravio,
que de la opinion de todos
se comprende eí ser honrado.
Y aunque tú.quedes contento,
no lo queda ¡mi recato;
pues lo que tu habrás creídoj
habrá quien quiera dudarlo?
Y o , en fin., no te he de sufrir,
que tú* zeiosç* engaños.
COÍ
Be Dm. A 'UstinMvretCf,
2?
Don Felix mano de esposo,
con todos me infamen, siendo
sino ganar por la roano:
tú solo el desengañado.
petición , doblón de à ocho,
Conventos tiene Madrid,
y darle con el Vicario.
donde rhienras que me' caso
Inés. Bien dices, si ser pudiese,
podré estar. Ped. Detente, hermana,
mas no sé de quién-fiarlo,que en mi error considerando
para que avise à Don Felix»
la mucha ra-on que ¡tienes,
Man. Tarugo vendrá botando.
qu ; e:o escusâr er.tôsdaños:
In¿s. Y si acaso se tardase,
Ya yo te lcn<;o cacada/
que ignora el riesgo en que estamos,
Inés. Y coi q «i-jn saber aguardo.
y mi hermano con Don Diego
Ped. Es con Don D'e^o de Roxas,
vuelve , y s a furor tirano
un C-bUe.o bizarro.
à dar la mano me obliga?
Inés. Y sabes tú . : yo quieto?
Man. Eso serla mui malo:
P-J. Pue<! que··'endo yo, no es llano,
mas apelar à la Audiencia
que h"s de querer tá también?
del susodicho Vicario,
Inés. N o , que soi yo q"ien me caso.
que yo juraré la fuerza,
Si cú hubieras de vivir
y la maña. Inés. E¡>o es vano,
con mi jrrr ; í'o à tu lado,
que hai muchos riesgos, y en fia
basr.'ba q;-e íii cmisieses;
es pleito. Man. Pero ordinario.
pe.o h.ibíin 'o yo ¿s estarlo,
Inés. No sé aqui de quién vaierme.
es míiic··iet··o··e yo quiera
Sale Alb. Doña Ana Pacheco ha entrado
el ma'.ido, y no tú, hermano,
á visitaros. Inés. Mí prima?
q i ' e n o h a ^fe-ser la elección
veiija en buen hora. Man. El recado
de qi ; e'i no ha de ser el du'ío.
puede dar ella à Don Felix.
Pfí/.·Jues cóíiotií me responde*
Inés. No hará ella tal por mi hermano,
con esa libertad? / és. Pasoj
pues no terreo yo alvedrio?
porque ha de ser su marido.
P:d. Do "a laés ,»«o en este c?so.
Man Si es cuñada, dala al diablo, fmiaí
Inés. Pres'en qual? Pía. En otro intenta, Sale Doña Ana. Dona Inés? Inés. O prima
que paede ser voluntario.
dame en albricias los brazos..
Inés. Yo no conozco ninguno.
Ana. De que os liego à ver tan buen»:
Pel. Muchos hai. Inés. Dirás acaso,
puedo sin recato hablaros?
en elejir Confesor.
porque he menester secreto.
Ped. Yo no digo , ni señalo,
Inés. Con Manuela no hai recato,
mas de que has de obedecerme,
porque de ella el alma fio.
y mas en este mandato,
Ana. Siendo a s i , vamos al caso:
que yo soi tu padre aquí.
Yo he venido, Doña Inés,
Inés. Padre nuestro ? y qué milagro!
lo primero à visitaros
mui mozo sois , padre mió.
por mi obligación , y lue^o
Pe i. No hagamos chiste del caso,
por sacar de un sobresalto
que vive Dios , Doña Inés::en que tenéis à quien tia
mas todo esto es escusado,
de :ni tojos sus cuidados;
lo que te prevengo es solo,
y para q-.ie no estrañeis
que luego à Don Die¿o traigo,
el intento vn .-(¡o he de hablaros,
que le he dado la palabtt,
ya vos sabéis, prima mil,
y que le his de dar la nuno.
Como est«ba concertado
Guardar, Alberto, esas p-iertas,
ya dia- ha el casamiento
que hoi saldréis de este cuidad».Vanst.
conmigo, y con vuestro hermano.
Inés. Manuela, nooyesaquv.-.:;"
Su zelosa condition
kUn. Señora, no liai, pues te ...i dado
•oio ha sido «.1 i:r.barazo
Da
que
a8
No puede serguafda* una Muger.
que no me case con él,
quando yo en sus partes hallo
todas las de un Caballero
de su sangre, y de su aplauso.
Y sabiendo que ûori Félix
de Toledo, enamorado
de vos estaba, le dixe,
que intentase festejaros,
porque habiendo conseguido
vuestra voluntad, casado
con vos, sin haber noticia
en ello de vuestro hermano»
aunque à él le esta tan bien,
tanga un castigo sin daño
del yerro de la opinion,
y haüé, que no hai medio humano
de guardar una muger,
si tila quiere contrastarlo:
Esto supuesto, Don Felix
me ha dicho lo que ha pasado;
y sabiendo que os dexsba
con algun susto del caso,
yo vengo aquí de su parte,
porque habléis sin embarazo,
à que me digáis el medio
que escogéis para casaros,
que él se dispondrá à qualquiera,
aunque temáis intentarlo.
Inés. No paséis mas adelante,
que el Cielo aqui os ha enviado
jara enmendar el peligro:
yo à Don Felix idolatro,
y el riesgo yo me le escojo:
por el riesgo en que me hallo,
me obliga à valerme de él.
Yo ahora estoi esperando,
que con Don Diego de Roías
venga à casarme mi hermano,
y el remedio que hai, es solo,
que Don Felix, ò arrojado,
o industrioso, òcon el medio
de valerse del Vicario,
venga à sacarme de aqui,
poiqué si no, à riesgo estamot
del amor, y de la vida
*1> y y°j P e r o m i hermano
viene, señora Doña Ana,
válgame aqui vuestro amparo
en este riesgo en que estoi;
ved si podéis dilatarlo,,
hasta que tenga Don Felix
aviso, y pueda escusarlo,
sacándome de este riesgo,
y i Dios, que entra ya mi hermano..
Man. Hoi, sin duda,- aqui ha de haber
una de todos los diablos.
Vantt.
Salen Don Pedro,-y Don Diego.,
Pea. Todo-.lo consigue el oro:
Mirad qué presto sacamos,
sin las amonestaciones,
licencia de desposaros.
L·icg. Es tanta dicha ,Don Pedro,
que estoi confuso, y turbado;
no sé cómo os agradezca
esta ventura que gano.
Ped. No mas sustos, vive Dios;
tt,
ya estoi de guardar cansado
à mi hermana, pese à ella,
guárdela este mentecato,
que el peligro del marido
no está à cuenta del hermano.
Pero, Doña Ana, aqui estais?
Sale Doña Ana. De verá mi prima salgo,
que ha dias que no la he visto;
y me yol yo, mientras hallo
<y>,
medio de dar ei aviso •"
à Don Felix i que el sacarlo
de aqui, ha de ser el mejor.
Ped. Pues à tiempo habéis llegado,
que es forzoso que os quedéis,
porque.luego al punto aguardo
que se despose mi hermana,
que cor Don Diego la caso.
Ana. Ya «o es posible quedarme,
que estando ahora en el estrado,
me ha dado alli un accidente,
con principio de desmayo,
y .se, yá avivando mucho,
que es la que me dá cuidado,
y asi-, es forzoso irme luego.
Ped. Perdonad no acompañaros,
por quedar en este empeño.
Ana. Quando podéis dilatarlo,
por el plazo solamente
de venirme acompañando,
sin riesgo del desposorio,
sois mui poco cortesano
en escusaros de empeño
i que estais tan obligado;
por vos, por mí, y por deciio»,
A19
De Don Ak ustin Moreto.
que voi con este cuidado.
Pero si sois tan grosero,
que quando esperáis mi mano
tenéis otras atenciones,
la calidad no reparo
por primero que la mía;
señor Don Pedro , quedaos,
que habiendo yo de ir con vos,
que iré mejor sola , es llano,
que tan mal acompañada.
Fed. Señora, aguardadora.Ya aguardo.
Fed. Perdonadme, y sea disculpa
la llaneza con que os trato,
que yo no puedo tener
mas dicha , que acompañaros.
Ana. Eso , que lhmais llaneza,
•os , en lo que es agasajo,
á qxuiquict rr.ugor se debe:
dispensais mal Cortesano
con lo que amor os obliga:
con qu'i titulo, ò qué cargo
desestimáis la licencia
qua os doi yo de ir à mi lado?
Conmigo llaneza ? andad,
que sois necio , y mal mirado.
D'tg. Mal habéis hecho. Fed. Forzoso
será el irla acompañando,
aunque ella no lo permita:
venid vos conmigo.jD«g.Vamos.FiMUr.
Salen Tarugo ,y Don Felix.
Fel. T a r u g o , riesgo notorio.
Tar. Quien te sacó sin azar,
bien; merecía sacar
Sale una Criada.
un alma del Purgatorio.
Criad. Sin duda son estos dos;.
señor Don Felix ? Tel. Quién llama?
Criad. Quien buscándoos con gran priesa
por aquestas calles inda.
Fii. N o conozco con quién hablo.
Criad. Criada soi de Doña Ana,
y me envia de este modo
i deciros lo que pasa.
JFW.Pues qué hai? Cr/aá.D.PedroPacheco
quiere casar à su hermana
con un Don Diego de Roxasj
y esto está ya de tal data,
que si vos no acudís luego
à sacarla de su casa,
la ha de casar esta noche:
ella está determinada
^9
à que la saquéis del riesgo,
que tan cerca la amenaza,
porque à deciros me envia,
que en vos tiene su esperanza;
y i Dios.
Vast.
Fel. Válgame mi amor:
••
Tarugo , amigo , à qué aguarda*?
Tarugo. Jar. Qué Tarugueas?
qué he de hacer yo , si la casa?
F:t- Aplicar algun remedio
à tan forzosa desgracia.
Tar. Qué remedio ? soi yo ungüento
de sánalo todo ? Fel. El alma
se está saliendo del pecho.
Tar. Señor , dexala que salga.
Fel. Qué dices ? Tar. Que asi saldrá
ella también , que es tu alma.
Fe!. Pues vive Dios , que yo estoi
resuelto à entrar , y sacarla
à todo riesgo. Tar. Eso intentas,
.siendo un castillo esta casa?
Fel. T a r u g o , yo he de arriesgar,
siendo su violencia tanta,
que mi diligencia llegue
tarde, si aqtii se dilata:
para entrar contigo allá,
ya está la Ucencia dada,
y para salir con ella;
el valor es quien lo .allana.
Tar. Y te parece eso fácil
con la gente .que la guarda,
•y:niassi está.aquiel hermano,
y el novjovflue le acompaña,
que hechos pedazos entre ellos,
no hai à tajada por barba?
Fel- P u e s , T a r u g o , esto ha de ser,
vén à entrar conmigo. Tar. Aguarda,
que ya he pensado-una industria
conque tengo de sacarla,
aunque pese à la hermandad.
Fel. Qué dices ? Tar. Que à esta ventana
me dexes liegar primero
•à saber si ahora está en casa
Don Pedro. Fel. No sea , Tarugo,
que ahora yerres la traza.
Tar. Ahora la había de errar
à la tercera jornada,
para que à silvos me abriesen?
Fel. Pues mira que si haces falta:-.:
Tar. Ko hais taL Fel. A qué te expones?
Ter.
3o
No.puede ser gmrdar una Muger.
Tar. A que roe.'dés de patadas;
y si acierto ? Fel. Mil escudos,
y el vestido de escarlata
también te daré , Tarugo.
Tar. Con eso saco ia cara,
sin temor de que DoniPedro
d i g a , al saber la maraña^.
que me. he puesto colorado.
Aqui has de esperar. Fel. Acaba.
Tar. Hago una seña à esta rex3.
JDant. Inés. Manuela, mira quién llama.
£>et3t.:Man. Quién es ? Ta-. Yo soi.
Sale Inér„à<t» ventana..Inés. Es Tarugo ?
Tar. Ipse : tu hermano está en casa? •
Inés. N o . ZV. Pues poneos los mantos,
y.para ir bien disfrazadas,
algunas basquinas viejas,
y luego , luego en holandas
idme à esperar à mi quarto.
Inés. Para qué ? Tar. Asi he de sacarlas:
vayan luego. Inés. Pues si Alberto:::
Tar. No repliquen , noramala;
han visto, que estas mozuelas
siempre han de ser.maLmandadas?
Inés. Luego vamos.'Tjj-JíJso pido,-por ellas voi ,'tónje agua-rda
en ese portsl cteenfrente*
Fel. En tí dexo mi ésperatvia.
Vatt.
Tar. Entro en casa, Dios delante,
invoco ahora.ta pala* : .
d e Ceronc¿ quç£se»Madrid
la cosa: que mejor >sapa.i.!í ' '-'• W<¡ü«
Salan Alb ert n'^ JfSanchoo '•> '
Alb. Sancho , esrad con gran «uidado,
pues tan poco al plazo falta
de esta proiija asistencia.
S»tich'.J?Li..\a& cjas se me saltan
de arisbax i quantos-vienen,
que aquel.que entró-esta mañana
y o le v i , mas me ol»idé¿ ,
jUb.'Pves por qué me lo negaba?
Sancb. No habia cantado el galio.
SaU Tar. Sea Dios en esta casa.
Sançb. Guarde à usance muchos años.
Tar. Ya es la calor demasiada:
quiero entrar à desnudarme.
Sancb. Usance en buena hora vaya.
Tar. Aquella es la Guarda vieja,
mas la amarilla es la mala.
¿Llir. Veaga ,-señor, en buen ¿ora.
Tar. Habrá frió Î All. Las garrafal
están siempre prevenidas.
Tar. Pues à mi quarto las traigan.
Alb. Queréis agua de limon? •
Tar. Esas bebidas nos matan.
Alb. Han puesto à enfriar cerveza;
quereisla? TV.Síjque esmassana.ftf/f.
Alb. Estraño es el Don Chrisanto.
Sancb. Mal año , y quai se regala!
medio Madrid me hizo ayer
andar buscando patatas..
Sale Tar. Jesús , Jesús , qué traición]
aqui mugeres tapadas,
asi me queréis matar?
pues qué es esto , guardas falsas?
Alb. Señor, qué es lo que decís?
Ta-. Qué he de decir ? lo que pasa:
dos mugeres en mi quarto,
sabiendo que .i mí me mata
el ver mugeres de noche.
Yo voi à buscar posada,
aunque duerma en un meson.
Alb. Qué es esto , señor ? aguarda*
Tur. Esto es gran bellaquería.
Alb. Mugeres están encasa?
por dónde han de-haber entrado?
T*r. Pues eso dudáis ? miradlas.
Salen Doña Inés , y Manu?la Upadas.Alb. Válgame el Cielo ! qué veo?
Sancb. Qué es esto i Santa Susana.
Aló. Pues quién son esta.s mugeres?
Tar. Pues eso no es cosa clara?
quién han de ser ? busconcillasÇ
que se andan buscando gangas,
y habrán olido el Indiano.
Alb. Ha i desvergüenza tan rara!
Sancb. Antes que venga Don Pedro,
Alberto, echadlas de casa.
Alb. Pues antes , viven los Cielos,
tengo de verlas la cara.
Tar. Tente, hombre de Barrabás,
qué es lo que intentas i aguarda;
no vés que el mal no me ha dado,
porque encubiertas estaban?
Alb. Mugeres , idos de aqui,
idos al instante. Sancb. Vayan
à los árboles del Prado.
Tar. Va yansejpeiiesusalrnas.f'Vjn.re/¿rae/.
Alb. Hai tan gran bellaquería!
Sancb. Hai desvergüenza mas rara!
Tar.
De Bon Ag ustitfMareüñ
Tar. Milagro de-Dîos h» sido
no meterlas esta daga:
vosotros terieisvJa. culpa»
Alb. Señor::: Tir. JS1 o me habléis palabra:
andad , que sois-útx pdbrete•••
cuitado., y-:mù»-m&la-guar<]-a.;
pues no.eumplúxon la orden,
y sois::: Alb', $¿uéaoi?
Tár. Un pajiarra.
. •
Vate.
Alb. Vive Dios , que por Don Pedrosufro yo aquestas palabras:
.el Sancho tiene la culpa, '
S tifieh. Yo ? All-. Si, que por éT se pasan,
y es que no tiene cuidado. ...
Sanch. Pues vuesarcé àônâe estaba?
si no lo vé , siendo mozo,
qué h3ré yo con estas canas?
créame, que ni usance,
ni yo , somos para guardas.
Vase.
AU. Vive Dios , que estoi corrido!
válgate el diablopor casa,
y quien me ha metido en ella
à ser yo guarda de hermanas.
Vate.
Sale Don Ft lix por una paite , y Doña Inés,
y Manuela tapadas por otfd.
Ft!. Cielos, sin duda son el'.as»
vive. Dios , que ha sido rara.
la cautela de Tarugo.
Inés. Aqui cixo que aguardaba.
Fel. Sois el dueño de mis ojos?
Inés. Soi quien ya tiene esperanza,
y à vivir vuelvo à tu,vista.
Fel. Encúbrete- bien la cara,
que aunque, es de noche1, sus luces
para conocerla bascan,
y importa el it encubierta:
Mas cómo entre tantas guardas
posible ha sido sai.ii?
Inés. Con la agudeza roas rara,q u e pensar pudo ti; ingenio»
las dexóà todas burladas, y
Han. Todo lo ha hecho Tarugoj
habia de ser de plata
para el chapín de la Reina.
li.és. Vamonos , señor >• à C3sa:
d e Doña Ana , porque allí.
m e halle ¡ni hermano casada:
n o arriesguemos esta dicha,
porque su agudeza es tanta,
q u e es para oírla de espacio.
3.1
Fet.'. Sigúeme <çúes ; pero aguarda,
que viene gente. "• i
Sale Don Diego ; y Don Pedro.
Ped. Don Diego,- .
•ya queda desenojada
Dona Ana , crarcriietambiew
yo me casaré mañana. ' '
Dreg. Ella ha renido razón.
Ped. Mas qué gente es la que pasa"?
Ditg. Un hombre con dos mugeres.
PeU. Mi condición esestrafia: .
quaiquier sombra me da zelos
de mi honor. DU: Vamos.Pí.-t.Aguarda:
quién va? Fe!. Un hombre; no lo ven?
Ped. Pues quién es quien le acompaña?
Fel. Sois Justicia ? Ptd. Ni aun piedad.
Ft/ Si no es Justicia , qué manda?
Ped. Es Don Felix? F Í / . lis Don Pedro?
Ped. Perdonad , pues fue la causa
el -no haberos conocido.
Inés. Hai muger mas desdichada!
he!. Disculpado estais con eso. .
/n.Yo estoi muerta! Man. Aqui me mata.
Fel. Queréis algo? Ped. Dad licencia,
si es que esto r.oos embaraza,
yendo con tal compañía, •
de-qtie .yo.sirviéndoos vaya,
porque r.oos encuentren otros.
Fei. Su necia desconfianza
ap.
me ha de pagar , vive Dios.
Esta, señora es casada,
y voi con grande recelo,
que me sigan de su casa
yendo, soio ,'y os su puco,
que os vengáis conmigo. Ped. Basta:
los dos que estamos iremos.
(cía*,
D/r^-.Varr.os., pues.Fí/. Yo osdoi lasgraque me hacéis un grande gusto:.
delante id. f\-¡¡. De buena, gana.
Dieg. Vamos cjelante , Don Pedro. .
Inés. Qué ha* hecho.D; Felix? FJ.Calla.
Ped. Miren quallada. Don-Félix
para inquiéreme à mi hermana}
ai cabo sabe»,q-ueson
locas mis desconfianzas.
F'-/-Venid vosotras ti ES mi.
Inés. Voi temiendo una desgracia.
Fel. Vive Dios, que me ¡a lleva
su mismo hermano á a>\ casa. Vanti.
Salen Doña Ana , y Tarugo.
» Tar,
&
No puede ser guardar una Muger.
Tur. Aquesro que te digo ha sucedido,
à mí ponerme podéis./í».Ycomotuya,alfin,laindustriahasido;
ese exemplo ? aqueso solo
ya elávito, y vestido me lie quitado.
es lo que no puede ser.
Tar. Yquando llegue à « t á r desengañado Ana. No pensais que en vuestra cas*
de lo que al tonto presumir le plugo,
está ahora Doña Inés?
me p!a<nto en su presencia de Tarugo. Ped. Y de eso estol mui seguro.
Ana. Muerto seha deque darde vérelcaso. Am. Pues para que exemplo os den
Tar. Celebrado ha de ser en el Parnaso
vuestras mismas ceguedades,
el cuento, pues haberle yo engañado,
D . Felix, y Doña Inés, Salen los Íot.
mas de dos mil escudos le ha costado.
salid afuera. Fel. Aqui estamos.
.¿n.YdóndeestáD.Ferix?2V.Yaconella::: Ped. Qué es lo que mis ojos vén!
mas no está sino aqui.
pues quién te traxo aqui? Fel. Vos.
Salen Don.Fctix , Inés, y Manuela.
Ped. Qué decís? Fel. Que aquesta fu«
Fel. Feliz estrella!
la Dama que acompañasteis
hatta veros, Doña Ana, me ha guiado.
conmigo. Ped. Ha traidor cruel!
./ífl.Elparabienosdoi.Fí/. Mas he logrado
pues tú a mi me has engañado?
de lo q vos pensais. An.Qué hasucedido? Fel. Tened , que no os engañé:
F.Quehastaaquiacompaüádomehavcldo
con una muger casada
D. Podro, sin saber que era su hermana
dixe que iba ; y verdad es,
la que venia conmigo.7\ir. Jesus, q gana
que Doña Inés es casada,
mena dadodereir'Fí/Yaguarda abaso.
puesto que ya es mi muger.
,/ín.i.Pues entraos ailá todos , que al atajo Inés. Y habéis de saber , hermano,
se ha de echar por aqui de este suceso.
que esto solo os está bien.
Tar.Sí,porque eso es armársela con queso. D>eg. Bien d i c e , pues ya el casarme
^?/jí».Baxa,y llama iDPedro,qéntre luego.
con ella no puede ser.
Ff/Vamos./?:c>.En mis temores no sosiego.
Salen Tarugo, y Manuela.
Tdr.EotraalIádentro, y tu temor so venza, Tar. Sosiegúense, que es Manuela
q él no ha de hablar palabra de vergüeza
de Don Chrisanto también.
Ana.Si conesto sedierepo» vencidOjP'jnrí. Ped. Cielos , qué es esto que miro!
sabrá lo que ha de hacer siendo marido. Tar. Qué se espanta? esto que vé,
Sale!> Din Pedro , y Don Dugo.
(do
no fue por arte del diablo,
JD.Qué me :nfulai»rseñora?/lfl. Acompa ñ a ni milagro , sino es,
venís? Pe.í.Voi con D.Diegomi cuñado.
que con limpieza de manos,
D/>. Yosoi criado vuestro./ínYoosestimo,
el que Don Chrisanto fue,
se ha convertido en Tarugo:
puesesra noche habéis de ser mi primo.
mamóla vu esa merced.
Don Pedro, yo he deseado
Man. Y yo también soi su esposa.
en vuestra opinion vencer
Ana. Viendo esto, qué diréis?
una ceguedad tan loca,
puede à una muger guardarse?
pues confesar no querela,
Ped. Digo , que no puede ser,
que no se puede guardar,
y que miente el que lo piensa.
si ella quiere, à una muger.
Ana. Pue* como eso confeséis,
Ped. Y ahora es quando mas lo niego,
ya podéis ser mi marido,
pues, hasta aqui lo negué
esta es mi mano también.
por discurso , mas ahora
Ped. Corrido acepto la dicha.
por experiencia lo sé.
Fel. Y sirva este exemplo fiel,
Ana. Pues si yo os pongo un exemplo,
para que los que presumen,
en que , aunque mas lo dudéis,
que el guardar una muger
lleguéis con los mismos ojos
es fácil, con este aviso
à ver que no puede ser,
d i g a n , que no puede «er.
cpnfesareislo vos ? Ped. Cómo
St ballarí eo k Librería it Qmrtgt» CoUe it la Ctocepatn Geréniwf.
Descargar