2010 Presentado por: Lesdybeth Rodriguez EINSTEIN Y EDDINGTON Video Foro sobre la película Einstein y Eddington UNIVERSIDAD DEL ZULIA DOCTORADO EN GESTIÓN Y DESARROLLO REGIONAL SEMINARIO: GENERACIÓN DE TEORÍA PROFA. ALICIA INCIARTE Einstein y Eddington Algunos de los aspectos a discutir a partir de la Película Nuestras ideas no son reflejo de lo real, sino traducciones de lo real. Estas traducciones han tomado forma de mitología, de religiones, de ideologías, de teorías. A partir de ahí, como toda traducción comporta riesgo de error, las traducciones mitológicas, religiosas, ideológicas, teóricas, han hecho surgir incesantemente innumerables errores en la humanidad. Edgar Morín, 1984* Las primeras pruebas empíricas que apoyaban la teoría general de la relatividad de Einstein fueron dadas por Arthur Stanley Eddington en el año de 1919. El mismo Albert Einstein había afirmado luego de formular su ya famosa teoría, que si alguna de sus predicciones fallaba, sería prueba suficiente para demostrar que su teoría era falsa. De esta forma, para comprobar algunas de las predicciones de la teoría de la relatividad, como la deflexión de los rayos de luz en cercanías del sol (producida por la cercanía de los mismos respecto un cuerpo de gran masa, en virtud de su fuerte campo gravitatorio), según la cual la luz proveniente de ciertas estrellas era desviada ligeramente en su trayectoria durante el día al pasar cerca del sol, lo que no ocurre en la noche, Einstein tuvo que esperar algunos años, hasta que Eddington, en un episodio conocido como la "expedición de Eddington" pudo realizar la comprobación de las predicciones mediante una serie de fotografías tomadas en Isla Príncipe, en la costa occidental de África durante el eclipse de sol de 1919, las que fueron contrastadas con fotografías nocturnas que permitieron constatar un desplazamiento en la posición aparente de las estrellas1. Enfoque epistemológico de Einstein. Albert Einstein es reconocido, sin lugar a dudas, como uno de los más grandes físicos de todos los tiempos, pero mucho se ha debatido sobre su trabajo filosófico. Einstein * Edgar Morin, Ciencia con Consciencia. El error de subestimar al error, pag. 277-283 1 El origen y el propósito del criterio de demarcación de Popper, en Filosofía de la Ciencia y Epistemología. Consultado el 24 de julio de 2010. Disponible en: http://epistemicos.blogspot.com/2008/12/el-origen-y-elpropsito-del-crtierio-de.html consideraba que su actividad científica formaba parte de las contribuciones filosóficas, en la búsqueda continua del entendimiento de la naturaleza. En el libro escrito junto con su ayudante Leopold Infeld: “La Física, aventura del pensamiento” (1939), escribe: "Los resultados de las investigaciones científicas determinan a menudo profundos cambios en la concepción filosófica de problemas cuya amplitud escapa al dominio restringido de la ciencia. ¿Cuál es el objeto de la ciencia? ¿Qué requisitos debe cumplir una teoría que pretende describir la naturaleza? Estas cuestiones, aun cuando exceden los límites de la física, están íntimamente relacionadas con ella, ya que tienen su origen en la ciencia. Las generalizaciones filosóficas deben basarse sobre las conclusiones científicas. Pero, establecidas y aceptadas aquéllas ampliamente, influyen a su vez en el desarrollo ulterior del pensamiento científico, indicando uno de los múltiples caminos a seguir. Una rebelión afortunada contra lo aceptado da como consecuencia, generalmente, inesperados progresos que traen aparejadas nuevas concepciones filosóficas" 2. Para Serrano3, la no existencia de una postura epistemológica sostenida y organizada en el tiempo ha causado que biógrafos y divulgadores de sus teorías ubiquen a Einstein en diferentes corrientes: idealismo, positivismo o post-positivismo, incluso en el empirocristicismo de Mach. A partir del análisis de textos, entrevistas, conferencias y artículos científicos escritos por él se puede conocer su posición epistemológica, bien sea de forma implícita o totalmente declarada, la cual sufrió cambios a lo largo de su vida. Según Serrano3, en sus primeras obras, Einstein muestra una fuerte influencia positivista, producto de su lectura de obras de filósofos como Ernst Mach y el matemático Poincaré, hecho que cambia a medida que madura como científico, reflejado en sus criticas que posteriormente manifiesta hacia esta postura epistemológica. Einstein manifiesta la influencia que ha tenido en él la lectura de las obras de Hume, Kant y Mach, sin embargo, se encuentra en él una postura algo distinta o contraria a estos filósofos. Según Moreno González2, Einstein en sus años de madurez se apartó del positivismo, incluso llegó a calificar a Mach como "un mal filósofo", convencido 2 Moreno González, Antonio (SF). Albert Einstein. Consultado el 23 de julio de 2010. Disponible en: http://dipc.ehu.es/digitalak/orriak/castellano/filosofia.html 3 Serrano, J. A. (1979) La teoría del conocimiento de Albert Einstein. III Coloquio Nacional de Filosofía, Asociación Nacional de Universidades, Puebla, México. Consultado el 23 de julio de 2010. Disponible en: http://www.anuies.mx/servicios/p_anuies/publicaciones/revsup/res033/txt4.htm cada vez más de que la formulación de las teorías científicas no tenían que estar inexorablemente asociadas con la observación. Según Moraes y Sotomaior4, el giro epistemológico de Einstein ocurre entre dos corrientes. Se describe un periodo del Einstein joven, con notables influencias del empirismo epistemológico de Mach y Hume, postura que modifica, según estos autores, alrededor de 1915 cuando se aprecia un debate entre el empirismo y el racionalismo, y un cambio hacia el racionalismo abstracto. Según Howard (2004), citado por Moraes y Karam4, Einstein creía que las teorías científicas necesitan de la evidencia empírica (sin ser un empirista) y que las teorías deben tener en cuenta una realidad física (sin ser un realista). Para Einstein, observación y experiencia son manifestaciones de la realidad objetiva, pero que las teorías son producto de una “creación libre”, en el sentido que no proceden única y directamente de los datos experimentales que pretenden explicar. Fernández5 en su libro “Albert Einstein: Ciencia y Conciencia”, hace referencia a una conferencia impartida en Oxford en el año de 1933, donde Einstein habla del "camino exacto" de la ciencia a propósito de las "creaciones libres de construcciones lógicas": "[…] es mi convicción que la pura construcción matemática nos permite descubrir conceptos con las leyes que a ellos se vinculan, que nos dan la clave de los fenómenos naturales. La experiencia puede, ciertamente, guiarnos en nuestra elección de los conceptos matemáticos útiles; ella no puede prácticamente ser la fuente de la cual brotan. En un cierto sentido, pues, tengo como verdadero que el pensamiento puro es capaz de captar lo real como los antiguos lo pensaban" Según Einstein, no existe una receta establecida que indique como se deben ordenar los conceptos para conectarlos a impresiones o experiencias, el señala la intuición como la mejor forma de alcanzar el éxito en esta operación mental5. Para él, el conocimiento de la filosofía da al científico un estudio independiente que permite decidir sobre la propiedad de 4 Moraes, G. H. y Sotomaior, R. (2004) A suposta mudança epistemológicade albert einstein. Programa de Pós-Graduação em Educação Científica e Tecnológica. Universidade Federal de Santa Catarina, Florianópolis, Brasil. Consultado el 24 de julio de 2010. Disponible en: http://www.sbf1.sbfisica.org.br/eventos/epef/x/sys/resumos/T0184-1.pdf 5 Fernández Buey, Francisco (2005) Albert Einstein: Ciencia y Conciencia. Ciudad de México: Editorial El Viejo Topo. ISBN 8496356213. Consultado el 23 de julio de 2010. Disponible en: http://books.google.com. sus bases teóricas (Howard (2005) citado por Moraes y Sotomaior4). Al respecto, Einstein advierte lo siguiente: La relación recíproca entre epistemología y la ciencia, goza de una naturaleza destacable. Dependen ambas una de la otra. La epistemología en ausencia de contacto con la ciencia se convierte en vacía. La ciencia sin epistemología es – aún cuando solamente pensable – primitiva e intrincada. Sin embargo, apenas el epistemólogo, que busca un sistema claro, se ha abierto un camino hacia un tal sistema, es tentado a interpretar el contenido del pensamiento de la ciencia en el sentido de su sistema y a rechazar todo aquello que no entra en él. El científico como tal, no puede permitirse llevar tan lejos su esfuerzo en dirección de una sistemática epistemológica. Acepta con reconocimiento el análisis conceptual de la epistemología; pero las condiciones externas, que intervienen para él a través de los hechos de la experiencia, no le permiten dejarse limitar demasiado en la construcción de su mundo conceptual por la adhesión a un sistema epistemológico cualquiera que sea. Debe pues aparecer a los ojos del epistemólogo sistemático como una especie de oportunista sin escrúpulos; aparecerá como un realista en la medida que intenta describir un mundo dependiente de los actos de la percepción; como un idealista desde el momento en que considera los conceptos y las teorías como libres invenciones del espíritu humano (es decir, no pudiendo ser deducidas lógicamente del dato empírico); como un positivista si considera que sus conceptos y sus teorías no están justificados más que en la medida en la que proporcionan una representación lógica de las relaciones entre las experiencias de los sentidos […] (Einstein, 1949, citado por López Rupérez6, p. 33). “La creencia en un mundo externo, independiente del sujeto que lo percibe, se encuentra a la base de toda la ciencia de la naturaleza”, señala Einstein. “Ahora bien, como sin embargo, las percepciones de los sentidos no proporcionan sino informaciones sobre este mundo externo o sobre la realidad física, esta última no puede ser aprehendida sino por la vía especulativa. Resulta, pues, de todo esto, que nuestras concepciones acerca de la realidad no pueden ser nunca definitivas. Debemos estar siempre dispuestos a modificar estas concepciones, es decir, el fundamento de nuestra física, si es que queremos estar de acuerdo de una manera cada vez más perfecta, con los hechos de experiencia". (Einstein, citado por Serrano3, p. 11) 6 López Rupérez, F. (2004) Más allá de las partículas y de las ondas: una propuesta de inspiración epistemológica para la educación científica. Madrid : Ministerio de Educación, España. ISBN 8436925300. Disponible en: http://books.google.com En este sentido, Einstein sostiene que en ciencias “la imaginación es más importante que el conocimiento”. “Soy lo suficientemente artista como para dibujar libremente sobre mi imaginación. La imaginación es más importante que el conocimiento. El conocimiento es limitado. La imaginación circunda el mundo”.7 La política, la tradición y la ciencia. En 1900 Kelvin manifestó, aquello que se convertiría en una frase célebre: "No queda nada por ser descubierto en el campo de la física actualmente. Todo lo que falta son medidas más y más precisas". Cinco años después, Einstein publica su teoría general de la relatividad, que más tarde causaría el cambio del paradigma de la mecánica newtoniana al de la nueva mecánica cuántica relativista8 Cuando Einstein introduce la noción de cuanto de luz y caracteriza a la energía de éstos en función de su frecuencia, realiza una atípica combinación de propiedades corpusculares y ondulatorias. Durante casi dos décadas, la hipótesis de Einstein acerca del cuanto de luz fue rechazada de manera casi unánime por la comunidad de los físicos. En efecto, algunos la consideraron como un retorno a una concepción corpuscular que creían superada. Muchos insistieron en la imposibilidad de explicar los fenómenos de interferencia, difracción y polarización de la luz, que tan naturalmente se explicaban en el contexto de la teoría ondulatoria. Einstein aceptó esta crítica y por eso en el Primer Congreso Solvay de 1911 afirmó: “Insisto en el carácter provisional de este concepto (quanta de luz), que no parece reconciliable con las consecuencias experimentales verificadas de la teoría ondulatoria” (Einstein, citado por Cassini y Levinas9). 7 Einstein, A. “La vida según Einstein”: Una entrevista de George Sylvester Viereck. 26 de Octubre de 1929. Saturday Evening Post, citado Vásquez Rocca, A. (SF) La Epistemología de Feyerabend. Esquema de una teoría anarquista del conocimiento.. Consultada el 24 de julio de 2010. Disponible en: http://hosting.udlap.mx/profesores/miguela.mendez/alephzero/archivo/historico/az43/rocca43.htm l#_ftn1 8 Wikipedia: Paradigma. Consultado el 25 de julio de 2010. Disponible en: http://es.wikipedia.org/wiki/Paradigma 9 Cassini, A. y Levinas, L. (2007) La hipótesis del cuanto de luz y la relatividad especial ¿Por qué Einstein no las relacionó en 1905?. Revista Scientiæ Zudia, São Paulo, Vol. 5, Nº. 4, p. 425-52. Consultada el 24 de julio de 2010. Disponible en: http://www.scielo.br/pdf/ss/v5n4/a01v5n4.pdf Holton, citado por Martín Santos10, señala que Einstein continuó con su trabajo de una manera “obstinada” en una dirección, incluso cuando la contrastación experimental era difícil o imposible, y se negaba a aceptar otras suposiciones temáticas diferentes a la suyas. Para el momento que Einstein expone su teoría general de la relatividad, existían otras teorías rivales igualmente viables. Tal es el caso de la teoría propuesta por Richardson. Cassini y Levinas8 explican que desde un punto de vista epistemológico, la teoría de Einstein tenía dos claras ventajas sobre la de Richardson: “en primer lugar, constituía una explicación más profunda porque apelaba a procesos causales que ocurrían en el nivel microscópico. En segundo lugar, aportaba una explicación más general y tenía mayor poder unificador” (p. 10). 10 Martín Santos, L. (1991) Diez lecciones de epistemología. Madrid: Ediciones AKAL. Disponible en: http://books.google.com