Inteligencia emocional y motivación en educación física en

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2015, Retos, 27, 8-13
© Copyright: Federación Española de Asociaciones de Docentes de Educación Física (FEADEF)
ISSN: Edición impresa: 1579-1726. Edición Web: 1988-2041 (www.retos.org)
Inteligencia emocional y motivación en educación física en secundaria
Emotional Intelligence and Motivation in Secondary Physical Education
*Elisa Cera Castillo, **Bartolomé J. Almagro, ***Cristina Conde García y ***Pedro Sáenz-López Buñuel
*IES Rafael Reyes, Cartaya (Huelva), **Centro de Estudios Universitarios Cardenal Spínola CEU, *** Universidad de Huelva
Resumen. La motivación y la inteligencia emocional aparecen como dos importantes aspectos de la educación de los jóvenes, cuya relación en
Educación Física ha sido poco estudiada. Bajo la teoría de la autodeterminación, el estudio analizó las relaciones existentes entre la inteligencia
emocional (IE) y la motivación de los estudiantes en las clases de Educación Física (EF). Se utilizó una muestra de 170 estudiantes pertenecientes al
primer ciclo de Educación Secundaria Obligatoria (E.S.O) de un centro de Gibraleón (Huelva). Los instrumentos empleados fueron: la versión española
del Trait Meta-Mood Scale (TMMS), una adaptación para EF del Cuestionario de Clima Motivacional Percibido (PMCSQ-2), el Cuestionario de
Necesidades Psicológicas Básicas (BPNS), y la Escala del Locus Percibido de Causalidad (PLOC). Los resultados del análisis de correlación mostraron
relaciones entre las variables clima motivacional, necesidades psicológicas y motivación en línea con la teoría de la autodeterminación. Los factores de
la IE percibida correlacionaron con el clima motivacional, con algunas necesidades psicológicas y con las diferentes formas de motivación, aunque con
un coeficiente de correlación bajo. Por su parte, se destaca que en los análisis de regresión la claridad emocional predijo positivamente la regulación
introyectada. Son necesarios más estudios que permitan profundizar en esta relación.
Palabras clave. Inteligencia Emocional, Motivación, Educación Secundaria Obligatoria, Educación Física.
Abstract. Motivation and emotional intelligence appear as two important aspects of education of young people, whose relationship in Physical
Education is an understudied topic. Based on the Self-Determination Theory, the study analyzed the relationship between emotional intelligence and
motivation in physical education students. A sample of 170 students from the first cycle of compulsory secondary education in Gibraleón (Huelva) was
used. The instruments used were: the Trait Meta-Mood Scale (TMMS), the Perceived Motivational Climate Questionnaire (PMCSQ-2), the Basic
Psychological Needs Questionnaire (BPNS) and the Perceived Locus of Causality Scale (PLOC). The results of correlation analysis showed relationships
between motivational climate, psychological needs and motivation in line with Self-Determination Theory. The three dimensions of emotional
intelligence (Attention, Clarity, and Mood Repair) correlated with perceived motivational climate, with some psychological needs and the different
forms of motivation, although with a low correlation coefficient. The regression analysis showed that emotional clarity predicted positively the
introjected regulation. Further studies are necessary to enable us to deepen our understanding of the relationship between emotional intelligence and
motivation in PE classes.
Keywords. Emotional Intelligence, Motivation, Secondary Education, Physical Education.
Introducción
La sociedad va cambiando muy rápidamente, mientras que las
escuelas y los sistemas educativos siguen anclados en formas de enseñanza tradicionales (Punset, 2010). En general, los docentes se quejan
de la indisciplina y falta de conocimientos de los jóvenes, mientras que
la mayoría de estos se aburren, les falta motivación para aprender y, en
ocasiones, se reprimen sus talentos (Robinson, 2009). Estos autores
consideran que en los países occidentales, los sistemas educativos se
han diseñado ignorando la educación emocional y la pasión del estudiante por el aprendizaje y del docente por la enseñanza.
Este «analfabetismo emocional» tiene efectos muy negativos sobre
las personas y sobre la sociedad (Goleman, 1996) por lo que la Educación Emocional surge como una respuesta educativa a una serie de
necesidades que se dan en la sociedad actual: ansiedad, depresión, problemas de disciplina, violencia, drogadicción, trastornos de la alimentación, etc. (Fernández-Berrocal & Extremera, 2010).
La motivación y la inteligencia emocional (IE) son dos factores
claves en el reto que supone la educación del siglo XXI (Bisquerra &
Pérez, 2007). Necesitamos conocer la relación de estas dos variables
con el objetivo de disponer de más información para mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje.
La educación física es un área que ha sido muy estudiada dentro de
las teorías motivaciones (Cox y Williams, 2008; Boiché, Sarrazin,
Grouzet, Pelletier & Chanal, 2008; Méndez-Giménez, Fernández-Río
& Cecchini-Estrada, 2013a; Moreno, Hernández & González-Cutre,
2009; Ntoumanis, 2001) aunque escasamente abordada desde la IE. Las
características de esta asignatura con relación a la positiva motivación
del alumnado (Granero-Gallegos & Baena-Extremera, 2014) la hacen
ideal para abordar la relación entre estas dos variables (IE y motivación).
Fecha recepción: 03-01-13- Fecha envío revisores: 06-01-14- Fecha de aceptación: 18-06-14
Pedro Sáenz-López Buñuel
[email protected]
- 8 -
La inteligencia emocional
El concepto inteligencia emocional apareció por primera vez en
1990, en un artículo publicado por John Mayer y Peter Salovey. Sin
embargo, hasta cinco años después no se popularizó el término «inteligencia emocional», con el best-seller del norteamericano Daniel Goleman
(1996). Tras la publicación de ese libro, este tópico ha sido desarrollado
por diversos investigadores que definieron el concepto (Mayer &
Salovey, 1997), delimitaron los componentes de la IE (ej., Matthews,
Zeidner & Roberts, 2002; Mayer, Salovey & Caruso, 2004) así como
elaboraron herramientas para medirla (Salovey, Mayer, Goldman,
Turvey & Palfai, 1995). Entre los diferentes acercamientos a la IE que
se han producido hasta la actualidad, la teoría desarrollada por los creadores del concepto, Salovey y Mayer (1990), sigue siendo la más
defendida y avalada empíricamente (Cabello, Ruiz-Aranda & FernándezBerrocal, 2010; Fernández-Berrocal & Extremera, 2002; Palomera,
Fernández-Berrocal & Barckett, 2008; etc.). Desde esta perspectiva, la
IE engloba un conjunto de habilidades relacionadas con el procesamiento emocional de la información (Extremera & Fernández-Berrocal, 2004).
En concreto, Mayer y Salovey (1997, 10) definen la IE como «la
habilidad para percibir, asimilar, comprender y regular las propias emociones y la de los demás promoviendo un crecimiento emocional e
intelectual».
El concepto de IE resulta revolucionario, en el sentido que viene a
cambiar la noción cotidiana que se tiene de inteligencia. En nuestra
sociedad, permanece la idea de que nuestra inteligencia se basa en el
tradicional coeficiente intelectual (IQ) que considera las competencias
racionales como las más importantes (Goleman, 1996). Salovey y Mayer
(1990) afirman que la IE engloba los conceptos de inteligencia
intrapersonal e interpersonal que propuso Gardner (1983), dándole
además un enfoque algo menos cognitivo, y añadiéndole el componente
emocional que Gardner no consideró tan relevante (Cabello, et al., 2010).
Hay evidencias científicas que muestran que la IE es tan o más significativa para el éxito personal y profesional que el citado coeficiente intelectual (Goleman, 1996).
De acuerdo con Extremera y Fernández-Berrocal (2004), en nuestro país, el modelo mixto de IE de Goleman (1996), ha sido el que mayor
Retos, número 27, 2015 (1º semestre)
difusión ha tenido en los contextos educativos. Según estos autores,
tendría mayor relevancia el modelo de habilidad de Salovey y Mayer
(1990), que se centra de forma exclusiva en el procesamiento emocional
de la información y en el estudio de las capacidades relacionadas con
dicho procesamiento. Desde el modelo de habilidad, la IE implica cuatro
grandes componentes: 1) Percepción y expresión emocional: reconocer
de forma consciente nuestras emociones e identificar qué sentimos y ser
capaces de darle una etiqueta verbal. 2) Facilitación emocional: capacidad para generar sentimientos que faciliten el pensamiento. 3) Comprensión emocional: integrar lo que sentimos dentro de nuestro pensamiento y saber considerar la complejidad de los cambios emocionales.
4) Regulación emocional: dirigir y manejar las emociones tanto positivas como negativas de forma eficaz.
En el contexto educativo, son numerosos los estudios que han
tratado de poner de manifiesto la necesidad de estudiar y de incluir a la
IE dentro del ámbito académico y escolar (Bisquerra, 2000; FernándezBerrocal & Ramos, 2002; Extremera & Fernández-Berrocal, 2003). La
educación emocional propone el desarrollo de las competencias emocionales y se concibe como un proceso esencial del desarrollo integral de
las personas, con objeto de capacitarle para la vida. Todo ello tiene como
finalidad aumentar el bienestar personal y social. Es por tanto una
educación para la vida, por lo que supone un proceso continuo y
permanente que debe estar a lo largo de todo el currículo académico y la
formación permanente de todo individuo (Bisquerra, 2000). La educación emocional pretende dar respuesta a un conjunto de necesidades
sociales que no quedan suficientemente atendidas en la educación formal (Bisquerra & Pérez, 2007). Se trata de ayudar a que las personas
adquieran un mayor conocimiento y regulación de sus estados emocionales (Renom, 2003; Segura & Arcas, 2003). En este sentido, algunos
autores (Cabello et al., 2010; Bisquerra & Pérez, 2007) destacan que,
para poder implantar programas de educación emocional, es necesario
una formación específica del profesorado.
Recientemente, la literatura ha mostrado que las carencias en las
habilidades de IE afectan a los estudiantes dentro y fuera del contexto
escolar (Trinidad & Johnson, 2002). Siguiendo a Fernández-Berrocal y
Extremera (2002), los problemas del contexto educativo asociados a
bajos niveles de IE se resumen en el déficit en los niveles de bienestar y
ajuste psicológico del alumnado; en la disminución en la cantidad y
calidad de las relaciones interpersonales; en el descenso del rendimiento
académico y en la aparición de conductas disruptivas y consumo de
sustancias adictivas. En esta línea, la desmotivación es considerada
como una de las causas de estas conductas de los jóvenes (Elliot, 1999).
Por tanto, conocer las causas y las variables que influyen en la motivación es una necesidad para los educadores.
Como han recogido algunos autores (Gardner, 1993; Carrión, 2001),
uno de los componentes fundamentales de la IE es la capacidad de
motivarse a sí mismo, la auto-motivación. En este sentido, las habilidades emocionales pueden ayudar a producir un incremento en la motivación intrínseca del estudiante para realizar su trabajo escolar (Jiménez &
López-Zafra, 2009). La IE y la motivación pueden estar relacionadas, a
pesar de la escasez de estudios en el ámbito español que relacionen la IE
del alumno con su motivación en las clases de educación física (EF en
adelante).
La motivación
La motivación se considera un concepto abstracto, multidimensional
y explicativo del comportamiento humano. Numerosos autores (ej.,
Dosil, 2008; Roberts, 1995) han tratado de definirla, destacando entre la
mayoría de definiciones tres elementos: dirección, intensidad y persistencia de la conducta. Así, atendiendo a la bibliografía especializada
(Kanfer, 1994; Weinberg & Gould, 2007) se considera a la motivación
como un mecanismo psicológico que gobierna la dirección, intensidad y
persistencia de la conducta. La dirección hace referencia a las metas que
una persona elige perseguir, la intensidad se refiere a la cantidad de
esfuerzo que invierte para lograrlas, y la persistencia a cuánto tiempo
continúa en la persecución de las mismas (Iso-Ahola & St.Clair, 2000).
Teniendo en cuenta esta definición, parece clara la importancia de la
Retos, número 27, 2015 (1º semestre)
motivación de los alumnos en las clases de EF para conseguir consecuencias positivas. De hecho, diversos estudios han mostrado la relación entre la motivación en las clases de EF y diferentes consecuencias:
esfuerzo en las clases de EF e intención de ser físicamente activo tras el
instituto (Méndez-Giménez, Cecchini, Fernández-Río & González,
2012), diversión en EF (Moreno, Hernández & González-Cutre, 2009),
mayor tiempo de práctica deportiva extraescolar (Moreno, Zomeño,
Marín, Cervelló & Ruiz, 2009), etc.
Numerosos estudios que se han centrado en analizar la motivación
en las clases de EF ( Ntoumanis, 2001; Tessier, Sarrazin & Ntoumanis,
2010), lo han hecho fundamentalmente desde el marco de la teoría de la
autodeterminación (Deci & Ryan, 1985, 2000), ya que ha permitido
una mayor comprensión y explicación de la motivación experimentada
por el alumnado.
La teoría de la autodeterminación (Deci & Ryan, 1985) se basa en
que el comportamiento humano es motivado por tres necesidades psicológicas básicas: autonomía, competencia y relación con los demás.
Estas tres necesidades parecen ser esenciales para facilitar el óptimo
funcionamiento de las tendencias naturales para el crecimiento y la
integración, así como para el desarrollo social y el bienestar personal.
Las tres necesidades influirán en la motivación, de manera que la satisfacción de competencia, autonomía y relación con los demás se relacionará con la motivación intrínseca; mientras que la frustración de las
mismas, estará asociada con una menor motivación intrínseca, una mayor motivación extrínseca y con la desmotivación (Deci & Ryan, 2000).
En esta línea, la teoría de la autodeterminación (Deci & Ryan, 2000;
Ryan & Deci, 2000) establece diferentes tipos de motivación a lo largo
de un continuo, en función del nivel de autodeterminación de la conducta. Así, se pueden encontrar, de menor a mayor autodeterminación, la
desmotivación, la motivación extrínseca (regulación externa, regulación
introyectada, regulación identificada y regulación integrada) y la motivación intrínseca. La investigación (Lim & Wang, 2009; MéndezGiménez, et al., 2012; Ntoumanis, 2001) ha mostrado que las formas de
motivación más autodeterminadas se relacionan con consecuencias positivas (cognitivas, afectivas y comportamentales).
Otro constructo que juega un papel crucial en el comportamiento y
la motivación de los alumnos es el clima motivacional percibido (Xiang
& Lee, 2002). Este clima es creado por los padres, entrenadores, compañeros, profesores, etcétera, y puede ser de dos tipos: un clima
motivacional que implica a la tarea y un clima motivacional que implica
al ego, diferenciándose en función del criterio de éxito establecido. En
concreto, un profesor que transmite un clima que implica al ego es aquel
que se centra en el resultado (no en el proceso de aprendizaje) y que
prima la comparación entre compañeros, siendo lo más importante la
superación de los demás. Sin embargo, cuando el profesor transmite un
clima tarea, se está centrando más en el proceso, en aspectos de superación personal y esfuerzo. Por lo tanto, en función de cómo se presenten
las señales implícitas o explícitas del contexto en el que se desenvuelve
el individuo, es decir, el tipo de recompensas utilizado, el diseño de las
prácticas, la forma de agrupar a los participantes y el sistema de evaluación de su rendimiento, determinará si el clima motivacional implica a la
tarea o al ego (Ames, 1992).
Desde el punto de vista de la teoría de la autodeterminación (Deci &
Ryan, 1985, 2000), el clima motivacional es considerado un factor
social que va a influir sobre la motivación a través de la satisfacción de
tres necesidades psicológicas básicas (competencia, autonomía y relación con los demás). En este sentido, diversos estudios han mostrado
esta relación entre el clima motivacional y las necesidades psicológicas
básicas, tanto en el contexto deportivo (Almagro, Sáenz-López,
González-Cutre & Moreno-Murcia, 2011; Reinboth & Duda, 2006),
como en el ámbito de la EF (Cox & Williams, 2008; Méndez-Giménez,
Fernández-Río & Cecchini-Estrada, 2013a). Además, algunos estudios
cuasi-experimentales (González-Cutre, Sicilia, & Moreno, 2011) han
testado que un clima motivacional tarea generado por el profesor de EF
tiene efectos beneficiosos para la motivación del alumno. De esta forma,
se muestra la importancia de transmitir un clima que implique a la tarea
en las clases de EF para lograr consecuencias adaptativas en los discentes.
-9-
Por otro lado, Núñez, León, González y Martín-Albo (2011) encontraron que el clima motivacional tarea predijo la inteligencia emocional percibida (IEP) de los jóvenes deportistas. Estos autores incluyeron
la IEP dentro del proceso motivacional para explicar el bienestar de los
deportistas, lo que ha supuesto un novedoso hallazgo y un primer paso
para entender mejor la relación entre estos constructos psicológicos.
Inteligencia emocional y motivación
Goleman (1996) afirma que una de las competencias de la IE es la
capacidad de motivarse en cualquier actividad que realicemos. Sin embargo, se encuentran muy pocos trabajos de investigación que aborden
de manera específica los vínculos existentes entre estos factores en un
contexto educativo.
En el campo del deporte, se ha puesto de manifiesto que una
motivación más autodeterminada predice la experimentación de emociones positivas en los deportistas (Blanchard, Amiot, Perreault,
Vallerand, y Provencher, 2009). Sin embargo, pocas investigaciones se
han centrado en estudiar las relaciones entre variables motivacionales y
la inteligencia emocional percibida. En concreto, Núñez et al. (2011) en
el ámbito deportivo y Fernández-Ozcorta (2013) en el contexto físicodeportivo universitario, han realizado las primeras aproximaciones para
una mejor comprensión de la influencia de la IEP en el proceso
motivacional. Estudiar relación es necesario debido tanto al interés demandado por estos autores como a la escasez de estudios en el ámbito
de la EF que hayan examinado las relaciones entre la IEP y la motivación
del alumnado en las clases de EF.
Objetivos e hipótesis
De esta forma, el objetivo principal del estudio fue analizar las
relaciones entre los factores de la IEP y los tipos de motivación en un
contexto educativo, concretamente en el área de EF. Asimismo, como
objetivo secundario se examinaron las correlaciones entre clima
motivacional, satisfacción de las necesidades psicológicas, los diferentes tipos de motivación y los factores de la IEP.
En base a los estudios revisados, se propuso como hipótesis que
los alumnos/as con mayor nivel en los factores de la IEP presentarían
niveles motivacionales más autodeterminados en EF.
Metodología
Participantes
La muestra empleada estuvo compuesta por 170 participantes (95
alumnos y 75 alumnas) de un Instituto de Educación Secundaria Obligatoria (E.S.O), ubicado en una localidad de la provincia de Huelva. Las
edades de los participantes oscilaron entre los 12 y 16 años (M= 13.24,
DT= .93). La participación del alumnado en el estudio fue voluntaria y
la administración de los cuestionarios tuvo lugar en hora de tutoría.
Instrumentos
La inteligencia emocional percibida (IEP) fue evaluada a través de la
versión española (Fernández-Berrocal, Extremera, y Ramos, 2004) de
la Trait Meta-Mood Scale (TMMS) de Salovey et al. (1995). La escala
está formada por tres subescalas de ocho ítems cada una. La subescala
atención emocional expresa el grado en que los individuos advierten y
piensan acerca de sus sentimientos (ej. «presto mucha atención a los
sentimientos»); la subescala claridad emocional evalúa la capacidad de
entender el estado de ánimo de uno mismo (ej. «tengo claros mis sentimientos»); la subescala reparación emocional evalúa el grado en que los
individuos moderan y regulan sus sentimientos (ej. «cuando estoy triste, pienso en todos los placeres de la vida»). La escala encabezada por el
enunciado «A continuación encontrará algunas afirmaciones sobre sus
emociones y sentimientos…» se responde a través de una escala tipo
Likert de 5 puntos desde 1 (nada de acuerdo) hasta 5 (totalmente de
acuerdo), con una puntuación intermedia de 3 (bastante de acuerdo). Se
obtuvieron valores alfa de Cronbach de .78 para atención, .72 para
claridad y .75 para la reparación emocional.
El clima motivacional fue evaluado con la adaptación para EF
(González-Cutre, Sicilia, y Moreno, 2008) del Cuestionario del Clima
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Motivacional Percibido en el Deporte-2 (PMCSQ-2; Newton, Duda, y
Yin, 2000). El instrumento estaba compuesto por 33 ítems agrupados
en dos factores: percepción de un clima motivacional que implicaba a la
tarea con 17 ítems (ej. «los compañeros/as te ayudan a progresar») y
percepción de un clima motivacional que implicaba al ego con 16 ítems
(ej. «los alumnos/as son animados a ser mejores que los demás compañeros/as»). Tras el enunciado «Durante las clases de EF», La escala se
puntúa de acuerdo a una escala tipo Likert de 1 (totalmente en desacuerdo) a 5 (totalmente de acuerdo). El análisis de la consistencia interna
mostro valores alfa de Cronbach en este estudio de .85 para el clima
tarea y .84 para clima ego.
Para medir las diferentes formas de motivación establecidas por la
teoría de la autodeterminación, se empleó la versión validada al español
(Moreno, González-Cutre & Chillón, 2009) de la Perceived Locus of
Causality Scale de Goudas, Biddle y Fox (1994). Esta escala estaba
compuesta por 20 ítems (cuatro por factor) que median la desmotivación
(ej. «pero realmente siento que estoy perdiendo mi tiempo en educación física»), la regulación externa (ej. «porque tendré problemas si no lo
hago»), regulación introyectada (ej. «porque me sentiría mal conmigo
mismo/a si no lo hiciera»), regulación identificada (ej. «porque puedo
aprender habilidades que podría usar en otras aéreas de mi vida») y la
motivación intrínseca (ej. «porque la educación física es divertida»). La
escala estaba encabezada por el enunciado «Participo en esta clase de
educación física…» y se respondía a través de una escala tipo Likert del
1 (totalmente en desacuerdo) al 7 (totalmente de acuerdo). Se obtuvieron valores alfa de Cronbach de .74 para motivación intrínseca, .73, para
regulación identificada, .71 para regulación introyectada, .62 para regulación externa y .74 para desmotivación.
La satisfacción de las necesidades psicológicas básicas fue evaluada
con la versión española adaptada a la Educación Física de Moreno,
González Cutre, Chillón y Parra (2008) de la Basic Psychological Needs
in Exercise Scale (BPNES; Vlachopoulos & Michailidou, 2006). La
escala está formada por 12 ítems agrupados en tres dimensiones (4
ítems cada una): autonomía (ej. «la forma de realizar los ejercicios responde a mis deseos»), competencia (ej. «realizo los ejercicios eficazmente») y relación con los demás (ej. «me relaciono de forma amistosa
con el resto compañeros/as»). La escala estaba encabezada por el enunciado «En mis clases de Educación física…» y se respondía a través de
una escala tipo Likert del 1 (totalmente en desacuerdo) al 5 (totalmente
de acuerdo). Se obtuvieron valores alfa de Cronbach de .67 para autonomía, .66 para competencia y .72 para la relación con los demás.
Procedimiento
Para la recogida de la información se contactó con el equipo directivo del centro para informarle de los objetivos del estudio y pedirle
colaboración. Posteriormente, se les solicitó la colaboración a los tutores
de los diferentes cursos para que se encargasen de recoger las autorizaciones de los padres para que sus hijos pudiesen participar en el estudio.
Durante la administración de los cuestionarios estuvo presente el tutor/
a y algún investigador para solventar todas las dudas que pudieran surgir
durante el proceso, insistiendo en el anonimato de las repuestas y en que
se contestara con sinceridad y leyendo todos los ítems. Del mismo
modo, se destacó que la participación en la investigación era voluntaria.
El tiempo requerido para cumplimentar los cuestionarios fue de 25
minutos aproximadamente.
Análisis estadístico de los datos
En primer lugar, se realizó un análisis de fiabilidad (mediante el alfa
de Cronbach) de las diferentes escalas empleadas. A continuación, se
calcularon los estadísticos descriptivos (media y desviación típica) y las
correlaciones bivariadas de todas las variables del estudio. Por último, se
realizaron diferentes análisis de regresión lineal simples utilizando como
variables dependientes los diferentes tipos de motivación y como variables independientes las tres dimensiones de la IEP que mide la TMMS.
Los diferentes análisis se llevaron a cabo con el paquete estadístico
SPSS 20.0.
Retos, número 27, 2015 (1º semestre)
Resultados
Análisis descriptivo y correlaciones bivariadas
En la Tabla 1, se presentan los estadísticos descriptivos y las
correlaciones bivariadas de cada una de las variables del estudio. Con
respecto al clima motivacional percibido, el clima que implicaba a la
tarea obtuvo una puntuación media (M = 3.95) mayor que el clima que
implicaba al ego (M = 1.08). En relación a la satisfacción de las necesidades psicológicas básicas, la necesidad de relación con los demás es la que
mostró una puntuación mayor, seguida de la competencia y de la autonomía. En cuanto a las subescalas que componían el instrumento que
medía la inteligencia emocional percibida, la puntuación más alta correspondía a la reparación emocional, seguida de la atención emocional y de
la claridad emocional. La formas motivacionales más autodeterminadas
obtuvieron medias más altas que las no autodeterminadas. En concreto,
la regulación identificada obtuvo la media más alta (M = 5.65). La
motivación intrínseca presentaba un valor de 5.32, mientras que la
desmotivación mostraba un valor de 2.85.
Tabla 2.
Análisis de regresión con las diferentes va riable dependientes.
Variable dependiente
Variables independientes
Atención emocional
Motivación in trínseca
Claridad emocional
Reparación emocional
Atención emocional
Regulación identificada
Claridad emocional
Reparación emocional
Atención emocional
Regulación introyectada
Claridad emocional
Reparación emocional
Atención emocional
Regulación externa
Claridad emocional
Reparación emocional
Atención emocional
Desmotivación
Claridad emocional
Reparación emocional
R2
.08
.08
.08
.08
.08
.08
.11
.11
.11
.03
.03
.03
.05
.05
.05
Beta
.01
.18
.14
.04
.15
.17
.14
.24
.09
.08
.00
.14
.09
-.09
-.16
t
.15
2.1
1.7
.64
1.8
2.1
1.9
2.9
1.1
1.1
.07
1.6
1.1
-1.0
-1.9
p
.87
.03
.07
.52
.07
.03
.06
.03
.23
.27
.94
.09
.24
.30
.04
relacionó negativamente con la reparación emocional, con la MI y con la
Regulación identificada.
Análisis de regresión lineal
En la Tabla 2, se muestran los resultados de los análisis de regresión
utilizando como variables dependientes las diferentes formas de motivación y como variables independientes los tres factores
Tabla 1.
Est adística descript iva y correlaciones bi variadas entre las variables del estudio
de la IEP (atención, claridad y reparación emocional).
R M
DT 1 2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
Los resultados mostraron que la claridad emocional pre1 C lima tarea
1-5 3.9 5 .68 .01
.11 .30** .42** .07 .21* .28** .42** .35** .17* -.05 -.28
2 C lima ego
1-5 1.0 8 .38 .13 .03
-.08 -.03 -.10 -.0 7 .07
.05 .10
.12 .21**
decía de forma positiva y estadísticamente significativa
3 Autonomía
1-5 2.2 7 1.05 .29** .28** .10 .15* .14
.22** .19** .18* .17* .12
4 C ompetencia 1-5 2.8 5 1.17 .28** -.09 .24** .14
.32** .29** .30** .09 -.10
la motivación intrínseca (F = 4.85; p < .05) obteniendo
5 R elación
1-5 3.2 3 1.23 .01 .24** .28** .33** .23** .14
-.08 -.35
una varianza explicada del 8%. Además, la claridad emo6 C laridad E
1-5 3.4 3 .83 .24** .11
.07
.11 .21** .10 .05
7 Atención E
1-5 3.5 5 .70 .44** .25** .24** .32** .09 -.14
cional también predecía de forma positiva y
8 R eparación E 1-5 3.7 5 .78 .23** .25** .22** .16* -.20**
estadísticamente significativa la regulación introyectada
9 MI
1-7 5.3 3 1.37 .81** .54** .20** -.37**
10 R . Identificada 1-7 5.6 5 1.37 .58** .25** -.34**
(F = 8.40; p < .05) obteniendo una varianza explicada del
11 R . Introyectada 1-7 4.6 1 1.51 .48** -.06
11.6 %. Por otro lado, la reparación emocional predijo de
12 R . Externa
1-7 4.0 5 1.47 .39**
13 Desmotivación 1-7 2.8 6 1.59 forma positiva y estadísticamente significativa la regulaNota: ** p < .01; * p < .05; M = Media; DT = Des viación típica; R = Rango; E = Emocional; MI = Motivación intrínseca; R.
ción identificada (F = 5.29; p < .05) obteniendo una
= Regulación
varianza explicada del 8% y el mayor peso de regresión
El análisis de correlación mostró que el clima motivacional que
(â = .24). Asimismo, la reparación emocional predijo de forma negativa
implica a la tarea correlacionaba de forma positiva y estadísticamente
y estadísticamente significativa la desmotivación (F = 2.94; p < .05)
significativa con las necesidades de competencia y relación, con la atenobteniendo una varianza explicada del 5%. Por último, la regulación
ción y reparación emocional, con la motivación intrínseca (MI), con la
externa no fue predicha por ninguno de los factores de la IEP.
regulación identificada y con la regulación introyectada. Por su parte, el
A pesar de que algunas variables predijeron los diferentes tipos de
clima motivacional que implica al ego se correlacionó positivamente con
motivación no son considerados adecuados, ya que como señala Byrne
la desmotivación en las clases de EF. En cuanto a los mediadores psico(2006) la varianza explicada debe ser mayor al 10%. Por tanto, sólo la
lógicos, la autonomía se relacionó positiva y significativamente con las
claridad emocional tiene un valor de predicción aceptable con respecto
otras dos necesidades (competencia y relación), con la atención emocioa la regulación introyectada.
nal y con todas las formas de motivación excepto con la desmotivación.
La competencia se correlacionó de forma positiva con la atención emoDiscusión
cional, con la MI, con la regulación identificada y con la regulación
introyectada. La relación con los demás se relacionó positivamente con
El propósito de este estudio fue analizar las relaciones entre los
la atención y con la reparación emocional, con la MI y con la regulación
factores emocionales (la atención, la claridad y la reparación emocional)
identificada.
y los tipos de motivación en un contexto educativo, concretamente en el
En cuanto a las correlaciones de los factores de la IEP la claridad
área de EF. Este estudio supone un primer paso para analizar la IE y los
emocional se correlacionó positivamente con la atención emocional y
factores motivacionales dentro del área de EF, ya que los estudios
con la regulación introyectada. La atención emocional se relacionó con la
previos se han centrado en contextos deportivos (León, 2010), en el
reparación emocional, con la MI, con la regulación identificada y con la
contexto físico-deportivo universitario (Fernández-Ozcorta, 2013) o
introyectada. La reparación emocional se correlacionó de forma signifien contextos educativos pero no en dicha asignatura (Bisquerra, 2000).
cativa y positiva con todas las formas de motivación, excepto con la
Los resultados revelaron que existían correlaciones positivas y
desmotivación que lo hizo negativamente.
significativas entre las formas de motivación más autodeterminadas y el
En cuanto a las correlaciones de los diferentes tipos de motivación
clima motivacional que implica a la tarea. Estos resultados van en la línea
evaluadas en las clases de EF, se obtuvo que la MI se relacionó positivade diferentes estudios previos (Gutiérrez, Ruiz & López, 2010), que no
mente con el clima tarea, con las tres necesidades psicológicas básicas,
hacen más que confirmar la importancia del clima que implica a la tarea
con la atención y reparación emocional, con el resto de regulaciones
para conseguir una motivación más autodeterminada en las clases de EF.
motivacionales; mientras que con la desmotivación la relación fue negaPor tanto, un profesor de EF que se centre más en el proceso de
tiva. La regulación correlacionó con las mismas variables que la MI y de
enseñanza que en los resultados, que fomente la superación personal y
forma muy similar. La regulación introyectada correlacionaba positivaque tenga en cuenta el esfuerzo realizado por el alumnado, tendrá más
mente con el clima tarea, con las necesidades de autonomía y competenposibilidades de conseguir una motivación más autodeterminada en sus
cia, con los tres factores de la IEP, con la MI, con la regulación identifialumnos con todos los beneficios que eso conlleva (Baena-Extremera,
cada y con la externa. Por su lado, la regulación externa correlacionó
Granero-Gallegos, Sánchez-Fuentes & Martínez-Molina, 2013).
positivamente con la necesidad de autonomía, con la reparación emoEn relación a las necesidades psicológicas básicas, se obtuvieron
cional y con las diferentes formas de motivación. Por último, la
correlaciones positivas entre la motivación intrínseca y las tres necesidesmotivación en las clases de EF correlacionó positivamente con el
dades psicológicas básicas (autonomía, competencia y relación con los
clima ego y con la regulación externa. Además, la desmotivación se
demás), coincidiendo con lo encontrado en otros estudios previos reali-
Retos, número 27, 2015 (1º semestre)
- 11 -
zados en EF (Méndez-Giménez, Fernández-Río & Cecchini-Estrada,
2013a; Moreno, Hernández & González-Cutre, 2009). De hecho, la
teoría de la autodeterminación (Deci & Ryan, 1985, 2000) establece que
la satisfacción de las necesidades psicológicas influirá positivamente en
la motivación de los alumnos en estas clases de EF. Es decir, aquellos
alumnos que sientan que tienen buenas relaciones con sus compañeros
de clase, que experimenten eficacia o que pueden controlar el resultado
de sus ejecuciones motrices y que además sientan que son el origen de
sus acciones o partícipes de las decisiones tomadas en clase de EF,
tendrán más probabilidades de experimentar una motivación más
autodeterminada. Esto ha sido testado con trabajos empíricos en el
ámbito de la EF que sustentan dichas afirmaciones (Méndez-Giménez,
Fernández-Río & Cecchini-Estrada, 2013b; Moreno, González-Cutre,
Chillón & Parra, 2008; Ntoumanis, 2001; Standage, Duda & Ntoumanis,
2005).
Los resultados del análisis de correlaciones bivariadas y de regresión lineal muestran relaciones entre la IEP y los diferentes tipos de
motivación en las clases de EF. No obstante, los coeficientes de correlación así como la varianza explicada obtenida en los respectivos análisis
entre estas variables fueron bajos o moderados, por lo que estos resultados precisan ser revisados en posteriores estudios. En la misma línea,
en el estudio realizado por Núñez et al. (2011) en el contexto deportivo
las relaciones encontradas entre los factores de la IEP (atención, claridad
y reparación emocional) y la motivación intrínseca también obtuvieron
un coeficiente de correlación bajo.
En el análisis de regresión lineal, se observa que la única forma
motivacional que fue predicha con una varianza explicada superior al
10% fue la regulación introyectada, en concreto por la claridad emocional. Por tanto, parece que aquellos alumnos que tienen la capacidad de
entender su estado de ánimo es más probable que su regulación
motivacional en las clases de EF sea introyectada. Es decir, que su
participación en EF esté motivada por evitar sentimientos de culpabilidad y disminuir el grado de ansiedad. Este tipo de regulación no es muy
autodeterminada, pero asociada a otro tipo de motivaciones más
autodeterminadas (motivación intrínseca o regulación identificada) puede tener consecuencias comportamentales positivas (Boiché, et al., 2008).
Por otro lado, tanto la claridad emocional como la reparación emocional predijeron algún tipo de motivación, pero como se ha mencionado anteriormente la varianza explicada no se consideró adecuada (ya que
fue menor al 10%). Por tanto, no se obtuvieron los resultados esperados
para poder corroborar la hipótesis de partida, que era que los alumnos/
as con mayor IEP presentarían niveles motivacionales más
autodeterminados. En este sentido, son necesarios más estudios que
ayuden a aclarar estas posibles relaciones. Las investigaciones en el
ámbito español sugieren una relación entre la IEP y las necesidades
psicológicas básicas (Fernández-Ozcorta, 2013), así como con la motivación (Martín & Guzmán, 2012). Asimismo, parece necesario adaptar
escalas de IE al ámbito de la EF tal y como recientemente se han validado
en el ámbito deportivo (García-Coll, Graupera-Sanz, Ruiz-Pérez &
Palomo-Nieto, 2013; González, 2008).
La correlación entre factores de la IEP y variables motivacionales
abre una línea de trabajo en el diseño de estrategias para aplicar en el aula
para ofrecer una EF emocionante y motivante que aumenten el disfrute
y aprendizajes útiles. Por ejemplo, fomentar la percepción de competencia del alumnado a través de feedbacks positivos y tareas realizables
probablemente aumentará la motivación autodeterminada, la autoestima
y el autoconocimiento, influyendo en la claridad y atención emocional.
La necesidad psicológica básica de relaciones satisfactorias con los demás a través de actividades de cooperación y oposición en las clases de
EF, también influirán positivamente en la motivación y en competencias como la empatía y habilidades sociales. La resolución de conflictos
a través de la percepción y mejora de la reparación emocional es otra
línea de trabajo muy interesante, especialmente en EF ya que por sus
características las discusiones son más habituales que en otras asignaturas.
Cabe señalar que este trabajo presenta algunas limitaciones, como el
tamaño de la muestra al haberse aplicado en un solo centro educativo.
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Además al tratarse de un estudio correlacional, por lo que las relaciones
descritas no indican causalidad. No obstante, este trabajo ha supuesto
un primer paso para entender mejor algunas de las posibles relaciones
entre diferentes variables motivacionales y la inteligencia emocional
percibida. En este sentido, son necesarias más investigaciones que analicen las variables estudiadas junto a otras en el contexto educativo y que
aborden diferentes diseños (transversales, longitudinales o cuasi-experimentales).
Conclusiones
Los resultados del análisis de correlación mostraron relaciones entre las variables clima motivacional, necesidades psicológicas y motivación en línea con la teoría de la autodeterminación. Los factores de la IE
percibida correlacionaron con el clima motivacional, con algunas necesidades psicológicas y con las diferentes formas de motivación, aunque
con coeficientes de correlación bajos. Por su parte, los análisis de regresión mostraron que únicamente la atención emocional predijo positivamente la regulación introyectada con una varianza explicada superior al
10% Son necesarios más estudios que nos permitan profundizar en la
relación entre la IE percibida y la motivación en las clases de EF.
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