continuación transcribo y comparto con ustedes

Anuncio
Respetable Doctor Guzmán :
lnicialmente quiero contarle que posterior a su magistral conferencia hubieron muy
buenos comentarios al respecto y desde luego, sentimos que en este ciclo de la
presentación de tres panelistas logramos abrir un poco la discusión a nivel colectivo con
relación a diversos temas, lo cual formaba parte de nuestros objetivos.
Luego con la llegada del 20 de octubre planificamos una tertulia en casa del Dr. Fuentes
para analizar este importante acontecimiento en la historia de nuestro país; sobre todo
porque en esta asociación cultural, existen personas de diferentes corrientes ideológicas
lo que es muy ¡nteresante y enriquecedor. En dicha oportunidad me permití abrir la
discusión con la lectura de un articulo que escribió Estuardo Zapeta en el periódico
siglo XXl, que tituló "No hubo Revolución", también otro escrito en la misma semana en
el vespertino La Hora por Alfonso Bauer Paiz titulado: Revolucion 20 de octubre de
t944y, por ultimo el documental "La guerra fría (19 de 24)lntrigas en Latinoamérica"
Traté de incluir varias fuentes, desde luego un testigo presencial como el Dr. Fuentes . Los
resultados y conclusiones fueron excelentes.
Lo que usted gentilmente me ha enviado le daremos lectura en grupo y estoy seguro
que ampliará elconocimiento acerca de este periodo que en lo personal, es de lo único
bueno que podemos realmente los guatemaltecos sentirnos orgullosos de nuestra triste
historia.
Con relación al proyecto del nacimiento, estaremos pendientes de la comunicación y de
su llegada a Xela. mientras eso ocurre reciba un fraternal saludo de mis compañeros de la
Asociacion Cultural Renacimiento y de su amigo:
Noel Neftali Navarro Miranda.
Adjunto le envío los artículos en cuestión y si 'lo cree conveniente por esta via puedo
enviarle el documental
Estimado amigo Navarro:
PD:
nuestro común amigo Roberto Fuentes me contó que tanto usted como
algunos colegas suyos deseaban informarse sobre los porunenores que determinaron los
acontecimientos del 20 de octubre de 1944. En tal virtud, le envío por éste medio un texto
mio que se publicó en la revista AL GRANO en octubre de 2001.
Por otra parte, no me habia comunicado con usted porque atendí mi participación en un
encuentro sobre el pensamiento y la cultura latinoamericanos, realizado en México y
terminado antier. Ayer volví y estoy re incorporandome a la rutina. De manera que con la
ayuda de mi hijo Fernando elaboraremos un proyecto de la distribución del nacimiento y le
proporcionaremos una lista inicial de los materiales que se harrín necesarios para su logro.
El 20 de éste mes estaré nuevamente en Xeljú y ahi le entregaré el proyecto a quien ustedes
envien a recogerlo.
Sobre ésto conversé hace unos momentos con el doctor Fuentes, así que lo mas
conveniente es que ustedes dos platiquen sobre el particular.
Reciba el saludo atento de su amigo,
Carlos F. Guzmán Bóckler
PARA REMEMORAR EL 20 DE OCTIJBRE DE 1944
UNA REFLEXIÓN pngVIA Y NECESARIA
El recuerdo que el siglo XX dejó en la historia de la humanidad no será
de los más agradables. Los textos históricos que ya han sido escritos y, con
mayor raz6n, los que están por escribirse, guardarán muchas imágenes
profundamente negativas de los 100 años en los que los mayores y más
costosos esfuerzos estuvieron destinados a lograr -reiteradamente- los más
eficaces medios de destrucción de pueblos enteros, países completos,
grandes extensiones selváticas y enorrnes cuencas fluviales. Dos guelras
mundiales y gran número de guerras de menor envergadura, ensombrecieron
peÍnanentemente el panorama.
Para América Latina, el siglo XX significó una búsqueda afanosa de mejores
condiciones de vida para grandes núcleos de población inerme ante el azote
de la
explotación económica,
las
discriminaciones raciales, las
enfermedades, la ignorancia y la mala nutrición. En diversos países y en
múltiples ocasiones se intentó quebrar el poder de las oligarquías locales y su
ligazón con las potencias extractoras de nuestras riquezas naturales y
humanas. Algunos experimentos fueron efimeros y otros superaron la prueba
durante algunos años. Salvo Cuba, que logró, a pesar del bloqueo
permanente, rebasar con dificultades la barrera del año 2000, los demás
países tienen que lamentar sus revoluciones frustradas e inconclusas, con su
cauda de muerte, destrucción y desencanto. Un intento de búsqueda
democrática en un país de eterna dictadura como lo es Guatemala se llevó a
cabo entre 1944 y 1954. La conjunción de las fuerzas retrógradas internas y
externas echó por tierra un experimento que, si se le hubiera permitido seguir
sus propios derroteros, habría aliviado a las generaciones subsiguientes de
una buena parte de las desgracias que nos amargan hasta el presente.
Reflexionar sobre aquellos hechos es un ejercicio útil y saludable si se hace
con serenidad e inteligencia.
LA SITUACIÓN MLINDIAL ANTES DE Ig44
El juego mortal entre las grandes potencias
Las discrepancias entre los grandes imperios coloniales francés y
británico, (los últimos en los que nunca se ponía el sol, pues se extendían por
Europa, Africa, Asia, Oceania y América), por una parte, y las potencias
industriales de Europa centro-occidental: Alemania y el Imperio Austrohúngaro, por la otra, se agudizaban al extremo al despuntar el siglo XX. El
z
Imperio Ruso de los Románov, extendido hasta los confines de Siberia en el
Océano Pacífico, chocaba también con los intereses europeos. El potencial
naciente de los Estados lJnidos de América habia trascendido sus propias
fronteras después de vencer a España, a fines del siglo XIX, y haberle
arrebatado sus últimas colonias americanas: Cuba y Puerto Rico, así como
los grandes archipiélagos de las Filipinas y las Marianas en el Pacífico. El
Imperio del Japón, luego de completar un ambicioso plan de modernización
industrial, pudo enfrentar y vencer a la flota imperial rusa en el estrecho de
Tsushima, en 1905, y de paso anunciar al resto del mundo el estado muy
avanzado de su eficiencia militar.
La competencia por la obtención de materias primas a bajo costo y, al
mismo tiempo, por el predominio en los mercados de todo tipo, condujo a los
bloques de potencias europeas, en 1914, ala lu. Guerra mundial, llamada así
porque cuando terminó, en 1918, también participaban en ella los Estados
Unidos de América y el Imperio del Sol Naciente, unidos al bando de los
aliados - encabezado por las fuerzas franco-británicas- que venció a los
Imperios Alemán, Austro-húngaro y Otomano, que luchó al lado de los dos
primeros. Antes de que dicha contienda terminara, la Revolución Rusa habia
depuesto a la familia imperial y, en 1917, el partido bolchevique, dirigido
por Vladimir Ilich [Jlianov, llamado Lenin, habiatomado el poder y echaba a
andar al primer estado socialista de la historia, el cual se afianza luego de
una prolongada gueffa civil y de fuertes desgarraduras internas que, a la
muerte de Lenin, conducen a una pugna mortal entre Stalin y Trotsky. Este
último se ve obligado a abandonar el territorio soviético y es acogido como
refugiado político en México, donde es asesinado más tarde por un agente
del primero.
En octubre de 1929, la Bolsa de Nueva York sufre un colapso mayúsculo
y la totalidad de las acciones de las múltiples empresas que en ella jugaban
se viene abajo, precipitando a muchas a la quiebra. SobrevienE la gran
depresión en los Estados Unidos y sus efectos golpean a todo el mundo, al
extremo de constituir la primera gran crisis del sistema capitalista. El Partido
Republicano, en el poder, pierde credibilidad y en las siguientes elecciones
triunfa el candidato del Partido Demócrata, Franklin Delano Roosevelt,
quien asume la presidencia en enero de 1933, prohijando la política del new
deal (nuevo trato) hacia adentro y la del good neighbour (buen vecino)
hacia América Latina, poniendo así un alto temporal ala llamada política del
big stick (gtan garrote) que aparejaba el uso de lafuerza y la ocupación total
o parcial de territorios por la Infantería de Marina de los Estados Unidos, de
preferencia en el área del Mar Caribe y en la antesala del Canal de Panamá,
por aquel entonces de propiedad norteamericana a perpetuidad.
También al final de los años 20, Benito Mussolini, tras un golpe de mano,
implanta en Italia el primer estado fascista (corporativista y totalitario). En
enero de 1933, Adolf Hitler, líder del Partido Socialista Obrero Alemán
OIAZI, según sus iniciales en alemán) accede a la cancillería y proclama el
advenimiento del Tercer Reich, de corte antisemita, militarista y totalitario.
Inicia el rearme alemán, reclarna y anexiona, sucesivamente, como alemanes
los territorios de Checoeslovaquia (1937) y Austria (1938), al tiempo que
presenta reclamaciones a Polonia (1939).
En 1936, el general Francisco Franco inicia la guerra civil en contra del
gobierno republicano en Espaflu y, con la ayuda militar y económica de la
Alemania nazi y la Italia fascista, logra implantar -apoyado en la Falange-
una dictadura personal, ultraconservadora
y
católica en cuyo ejercicio
permanece hasta su muerte acaecida en 1975.
En 1937, el Imperio japonés ataca en gran escala a China e inicia una
Iarga gueffa de conquista que nunca pudo culminar, pero que puso
temporalmente en sus manos vastas
ricas regiones de aquel país,
densamente pobladas.
En 1939, estalla hnalmente la guerra en Europa. Alemania ocupa
sucesivamente Polonia, Dinamarca, Noruega, Bélgica, Holanda, Francia,
Grecia, Yugoeslavia y ataca (en junio de 1941) a la Unión Soviética. Se
combate también en el norte de Africa y en el Océano Atlántico.
En diciembre de 1941 el Japón afaca a los Estados Unidos, en Pearl
Harbor, y a Francia, Gran Bretaña y Holanda en las colonias de todas ellas
en el sureste asiático. La guerra se vuelve realmente mundial. En mayo de
1945 Alemania se rendirá incondicionalmente, y el Japón 1o hará en agosto,
luego de haber sido victimado con dos bombas termonucleares lanzadas por
la aviación norteamericana.
y
El panorama convulso de América Latina
En América Latina, el acontecimiento más relevante lo constituyen los
diversos movimientos populares, no necesariamente coordinados, que en su
conjunto son conocidos como la Revolución Mexicana, que transcurre, en
sus fases álgidas entre 1910 y 1917, para institucionalizarse alrededor de
1934 y poner en marcha las estructuras no siempre armoniosas de los que
algunos llaman el México moderno. El gobierno del Partido Revolucionario
Institucional (PRI) da algunos de sus pasos más seguros durante la
presidencia de Lázaro Cárdenas, que abre espacios a las participaciones
obrera y campesina, así como a un conjunto abigarrado de grupos sociales o
políticos a los que en el lenguaje de la época se les denominó sectores
populares. Impulsa una política internacional de respeto recíproco con las
potencias del momento; y sabe detener fírmemente los excesos de las
compañías ptroleras cuando estas prefenden desoir los dictados de la
justicia laboral, llegando a la expropiación antes de tolerar el desacato a las
leyes mexicanas. Desde esos años, México dio asilo a los perseguidos
políticos de cualquier país y brindó especial protección a los refugiados
I
republicanos de la guerra civil española, quienes -de paso sea dichopagaron con sus conocimientos y su industriosidad la hospitalidad que
recibieron. Para los perseguidos políticos centroamericanos y, en especial,
para los guatemaltecos mantuvo siempre abiertas sus puertas.
En el Perú, el APRA, partido de afanes democráticos, encabezado por el
intelectual Raúl Haya de la Torre, plantea altemativas viables a través del
poder en manos de civiles, en tanto que en el Brasil y la Argentina se
entronizan las dictaduras, llamadas populistas por algunos, dirigidas
respectivamente por Getulio Vargas y Juan Domingo Perón.
Las "republiquetas bananeras del Caribe"
Con este mote despectivo se denominaba, en los países del llamado Cono
Sur de América, a los nuestros, en los que sentaban sus reales, con bastante
holgura, las empresas bananeras norteamericanas que, desde los inicios del
siglo XX, se habían ido formando al servirse, de barcos primero y de
pequeñas vías férreas más adelante, para el acarreo del banano destinado a
los mercados fruteros de Nueva Orleans. Fue así como en las costas de
Jamaica y otras islas caribeñas, al igual que en las de Costa Rica, Honduras,
Panamá, Guatemala, y más tarde en los territorios de Colombia y Ecuador,
las empresas denominadas Standard Fruit Co. y Cuyamel Fruit Co.
adquirieron de los gobiernos respectivos concesiones para disponer de tierras
y operar redes ferroviarias. Más adelante, las concesiones se ampliaron a
extensas tierras de cultivo, compañías ferroviarias subsidiarias y, ya bajo la
éjida de la United Fruit Company, al control de los muelles de los puertos,
las comunicaciones telegráficas y radiofonicas, así como al transporte de
pasajeros y carga refrigerada entre sus plantaciones caribeñas y varios
puertos importantes de la unión norteamericana.
La consecuencia fue que la "mamita iunai", como le decían
sarcásticamente sus trabajadores panameños, llegó a controlar, con la
consiguiente dósis de soberbia y desprecio, a políticos y gobiemos de la
región, dispuestos a dispensarla del pago de impuestos y a ampliar sus
concesiones cada vez que se les exigía. Las puertas de Guatemala le fueron
abiertas durante el gobierno de Manuel Estrada Cabrera y sus prebendas
fueron ampliadas por el de Jorge Ubico, después de haber estado a punto de
librar una guera contra Honduras al reavivar viejos problemas de límites
heredados de la época colonial que, al final de los años 20 del siglo XX,
eran, en realidad, disputas de límites entre las tierras de la Cuyamel Fruit Co.
y la United Fruit Co., la que, al hacerse en el mercado bursátil de Nueva
York, de la mayoría de las acciones de su rival, zanjó para sí el diferendo.
Sin embargo, como para dirimir el pleito se había pedido el arbitraje de un
alto funcionario norteamericano, el laudo arbitral fue emitido de todos
modos imponiendo como frontera las crestas de la Sierra del Merendón y el
5
bajo curso del río Motagua. A propósito de tales acontecimientos, el
diplomático guatemalteco Virgilio Rodríguez Beteta escribió una obra
histórica que intituló irónicamente 'T.{o es guerra de hermanos sino de
bananos" (Ed. Universitaria, Guatemala, 1969), cuya lectura nos ayuda a
comprender algunos pasajes poco gratos de nuestro pasado cercano.
Ahora bien, en lo que a 1944 atañe, hemos de recordar que la United Fruit
Co. operaba en Guatemala como tal y a través de sus empresas subsidiarias
(registradas como independientes para evitar caer en acciones
monopolísticas ante la justicia norteamericana): Compañía Agrícola de
Guatemala (CAG), Ferrocarriles Internacionales de Centro América (IRCA,
según sus iniciales en inglés) y Tropical Radio & Telegraph, así como
Factorías muelleras. Por consiguiente, disponía de amplias y feraces tierras
en los departamentos de lzabal, Escuintla y Suchitepéquez, así como de las
instalaciones ferroviarias y de las tierras aledañas a las mismas en las
estaciones, talleres y patios de operaciones, a lo largo de rutas que desde la
ciudad de Guatemala conducian a Ayutla (hoy Ciudad Tecún Umán), los
puertos de Ocós, Champerico y San José, sobre el Océano Pacífico, Puerto
Barrios, sobre el Mar Caribe, y Anguiatú, en la frontera con El Salvador, en
cuyo territorio tocaba otras ciudades y puertos. La Gran Flota Blanca cubría
las rutas marítimas
a partir de Puerto Barrios y, a más de las áreas
refrigeradas de que disponían sus barcos, estos contaban con espacios para
llevar pasajeros y carga.
Por otra parte, en Guatemala operaban también, con preferencia, la
Empresa Eléctrica de Guatemala, subsidiaria de la Electric Bond & Share, y
la Pan American Airways. Aún así, los sectores oficiales y oligárquicos, al
igual que muchos miembros de las distintas capas de las clases medias, con
señalado cinismo, lanzaban alabanzas a la independencia y a la soberanía de
las que afirmaban gozaba Guatemala.
Cabe recordar también gu€, para los presidentes y gerentes de las
empresas norteamericanas mencionadas, los dictados de las políticas interna
y externa del presidente Roosevelt carccían de sentido. Ellos pensaban que,
más que.países los nuestros eran factorías en las que podían pasar por encima
de quienes se opusieran a sus designios y, por supuesto, adecuaban su
proceder a tales ideas. Creían que la Política del Buen Vecino no tenía
aplicación práctica en estos lares. En eso coincidían con la forma de razonar
del presidente Ubico y sus partidarios. La oligarquía y los grupos de clase
media a su servicio tampoco discrepaban en ese punto. Además, el gobierno
de Ubico fue el primero en América Latina en reconocer al régimen
encabezado por Franco en España. En lo personal, el dictador no ocultó su
simpatía por los gobiernos de Hitler y Mussolini, máxime cuando, en los dos
primeros años de gueffa, los ejércitos alemanes, luego de invadir y tomar la
mitad de Polonia, vencieron y ocuparon a Dinamarca, Noruega, Bélgica,
Luxemburgo, Holanda, Francia, Grecia y Yugoslavia. Paralelamente
(r
combatieron en el norte de Africa y en el Océano Atlántico, dañaron mucho
a Gran Bretaña y se lanzaron en contra de la Unión de las Repúblicas
Socialistas Soviéticas (funio de l94l). Todo parecía indicar a los
simpatizantes del totalitarismo en Guatemala que los países del Eje RomaBerlín tenían ya la victoria al alcance la mano, por lo que pensaban y
actuaban en consecuencia, pese a que en los sectores ilustrados y en diversos
estratos de las clases medias y populares urbanas las simpatías estaban con
los Aliados. En el campo no se tenía opinión o se tenía muy vaga porque
simplemente sus componentes carecían de información. Los guatemaltecos
que leían los escasos periódicos que se publicaban u oían la radio no sólo
eran muy pocos sino estaban concentrados en la ciudad capital y en los
principales centros urbanos del país.
Los efectos de la 2u guerra mundial se sienten en Guatemala
Empero, el ataque japonés a los Estados Unidos (diciembre de 1941) y la
entrada de estos a la guerra sí que impactó en Guatemala. Por presión directa
del gobierno norteamericano, Guatemala declaró la guerra a Alemania,Italia
y et Japón, y los bienes de sus nacionales residentes en el país fueron
congelados (un poco más adelante serían expropiados y pasarían al
patrimonio estatal a cargo de un departamento específico). Los ciudadanos
alemanes e italianos fueron deportados hacia campos de prisioneros situados
en los Estados Unidos y en el Canadá. El ejército norteamericano se hizo
cargo de la construcción de aeropuertos militares en el antiguo campo de
aterrizaje de la finca nacional La Aurora y en el Puerto de San José, ambos
equipados con aviones de reconocimiento, transporte, bombardeo y caza.
Eran bases de apoyo aéreo al Canal de Panamá. Soldados norteamericanos se
instalaron peÍnanentemente en ellas y trajeron consigo armamento modemo,
del que donaron una parte al ejército de Guatemala. Por tal razón, el 20 de
octubre de 1944 (que aún no se veía en el horizonte) los futuros alzados se
servirían de esos tanques, cañones del calibre 105 y ametralladoras del
calibre 50, montadas en jeeps, al momento de rcalizar su ataque. Ingenieros
militares norteamericanos construyeron la RUME, es decir, la canetera
paralela al océano Pacífrco, y sus servicios geodésicos hicieron el
levantamiento cartográfico sirviéndose de un sistema de triangulación cuyas
marcas se erigieron en las cimas de los volcanes y en las cumbres de los
ceffos más altos. Instructores norteamericanos enseñaron a oficiales y
soldados guatemaltecos el manejo de las nuevas arrnas y, con ayuda
norteamericana, se iniciaron los trabajos de construcción de un gran hospital
destinado a alojar a eventuales heridos de guerra y, más adelante, a pacientes
guatemaltecos víctimas de enfermedades comunes. En honor al presidente de
los Estados Unidos fue bautizado con el apellido Roosevelt.
7
"El otoño del Patriarca"
IJbico llegó a la presidencia de Guatemala después de unas elecciones en
las que, como candidato único en la contienda, apoyado por la facción del
partido liberal llamada progresista, sustituyó al general Lázaro Chacón,
quien se vió obligado a renunciar al cargo al ser afectado por una
enfermedad que pronto le llevaría a la tumba. Así, a los 52 años de edad,
asumió sus funciones el 14 de febrero de 1931, cuando lacrisis desatadaen
Nueva York en octubre de 1929 había golpeado a una Guatemala
monoproductora y monoexportadora del café producido, tanto por la
oligarquía surgida de los enlaces de familias conservadoras con los nuevos
ricos liberales, surgidos del cambio de élites agrarias iniciado en 1871, como
por los plantadores alemanes aposentados en las Verapaces y en la bocacosta sur occidental del país. El cultivo y comercialización del banano eran
negocios exclusivos de la United Fruit Co. y sus empresas subsidiarias.
A Ubico hay que verlo, en primer término, como finquero perteneciente a
familias emparentadas con la oligarquía conservadora y con los políticos
liberales prominentes; era ahijado de Justo Rufino Barrios. En segundo
lugar, como general del ejército y Jefe Político de los departamentos de
Retalhuleu y Alta Yerapaz durante la dictadura de Manuel Estrada Cabrera.
Por lo tanto, acostumbrado a servirse de la brutalidad en el trato con los
inferiores jerárquicos en la milicia, y con quienes considera socialmente
inferiores: clases populares urbanas y campesinos indígenas, sin dejar de
lado un desprecio marcado por la intelectualidad de clase media. Ególatra,
cree que todo lo merece y que puede romper los compromisos contraidos sin
inmutarse. En su af;in de perpetuarse en el poder, ordena despedazar
mediante la tortura y luego fusilar a miembros importantes de su propio
partido liberal-progresista cuando estos se le oponen; y hace reformar dos
veces la constitución para prorogar sus períodos presidenciales.
El "órden" se mantuvo con la presión ilimitada de la Policía Rural en el
campo y la de Seguridad en las ciudades, amén de la Nacional en todo el
territorio. La arbitrariedad y la brutalidad cubiertas por la impunidad fueron
la base de la autoridad ilimitada de los esbirros y sicarios que las componían
y dirigían. La delación y la adulación fueron los métodos que muchas
personas emplearon de buen grado para obtener favores o prebendas. Otras,
tuvieron que pasar sobre su concienciapara doblegarse ante las injusticias y
los abusos de autoridad, pero las humillaciones resultantes mantuvieron viva
la llama de los rencores que más tarde, en cuanto se tambaleara el tirano,
afl orarían torrencialmente.
Los efectos de la crisis de los años 30 se extendieron en Guatemala
durante bastante tiempo. Los precios de café de 1930 no fueron igualados
sino hasta 1947. En su carácter de finquero, Ubico tomó las medidas que
conducirían a salvar a su clase oligárquica y como consecuencia a la
9
Guatemala que dicho grupo social quería ver y deseaba tener. La contracción
económica aparejó la disminución de mano de obra en las tareas agrícolas y
la baja de los salarios tanto en el campo como en las áreas urbanas. Para
yugular cualquier posible alzamiento campesino, desenterró la ley de
vagancia (inventada en la época de Barrios) y puso en vigor la ley de
vialidad. Ambas tenían como finalidad, por una parte, obtener mano de obra
gratuita y forzada para la construcción y mantenimiento de los caminos; y
por la otra, mantener encuadrada a la población rural indígena a fin de
neutralizar cualquier descontento gu€, provocado por las pésimas
condiciones de vida, pudiera desembocar en cualquier tipo de alzamiento.
Al ver a Guatemala como su finca, Ubico y su equipo de gobierno, así
como sus jefes militares y sus partidarios del liberal-progresismo no fueron
capaces de apreciar y mucho menos de entender los profundos cambios que
la2u. Guerra mundial estaba provocando en el mundo, aún cuando en 1944
Italia ya estaba eliminada de la gueffa y ocupada por los aliados y, en los
diferentes teatros de operaciones, las fuerzas alemanas y japonesas se batian
en retirada. Los modelos totalitarios fascistas empezaban a saltar en pedazos
y la propaganda aliada hacía hincapié en devolver al mundo los principios de
la Car:ta del Atlántico, suscrita por el Primer Ministro británico Winston
Churchill y el presidente norteamericano Franklin D. Roosevelt, al inicio de
la guerra en la bahía canadiense de Argentia, a cuyo tenor los aliados
libraban la guerra para garantizar a la totalidad de los habitantes de la Tierra
sus libertades de pensamiento y expresión, y para mantener a los pueblos
libres de miseria y libres de temor.
Sin embargo, Ubico y sus allegados envejecían mientras el mundo se
rejuvenecía. El y sus colaboradores fueron incapaces de ver la posibilidad
que se abría para echar a andar en Guatemala industria ligeras que fabricaran
muchos de los utensilios que, a causa de la guena, no se exportaban desde
los países industriales, volcados de lleno a una economía bélica. Por eso
desalentaron las pocas iniciativas que algunos miembros de los sectores
industriales o importadores tenían en el afán de emular a otros países de
América Latina (México, Colombia, Brasil, Argentina y Chile, en primer
término) que ya estaban trabajando en ese proceso al que más tarde la
CEPAL llamaría de sustitución de importaciones. Muchos empresarios que
quisieron ampliar sus negocios y ponerlos a la altura de las nuevas
exigencias se vieron obligados a tascar el freno para no desagradar al señor
Presidente. Tampoco éste y sus adláteres vieron el crecimiento de los
sectores urbanos de clase media y la creciente preocupación de sus jóvenes
para quienes el horizonte ocupacional lucía muy sombrío. Las instancias
sociales a las que acudían para lograr un ascenso socio-económico y de
status (las escuelas normales, la universidad, el ejército, las burocracias)
funcionaban hasta cierto punto, pero quienes culminaban las careras
intermedias, militares y universitarias, o aquellos que aguardaban el ingreso
el
a las escalas burocráticas públicas y privadas, chocaban con un muro de
viejos inamovibles y con mucho menos oportunidades laborales que
aspirantes a puestos. La crisis habia contraído los negocios, por lo que aún
los graduados de las profesiones liberales (abogados, médicos, dentistas,
etc.) encontraban dificultades para alcanzar los ingresos y las dignidades a
los que creían tener derecho. Las frustraciones acumuladas cobrarían sus
réditos cuando llegó el momento de pedir cuentas sociales. Los sectores
artesanales y del comercio al menudeo, así como los trabajadores, en
general, resentían los bajos ingresos, la ausencia de cobertura ante los abusos
patronales o los accidentes de trabajo, la invalidez, la veiez, etc., etc. Las
injusticias y los abusos mayores se según dando en el campo en contra de las
mayorías rurales e indígenas. Puede entenderse, entonces, cual era el clima
social, económico y político de una Guatemala, sofocada en la vida diaria
por orejas, esbirros y lambiscones prestos a dar el lenguazo, así como a
firmar telegramas de felicitación cada 10 de noviembre cuando el tirano
cumplía años y se los autocelebraba con una feria nacional en el hipódromo
del sur. La única defensa del chapín común y corriente era la burla de los
poderosos a través de las ironías y los chistes, deslizados en yoz baja y
previo movimiento circular de cabeza para cerciorarse que "no había
calzones en ellazo".
EL DESENLACE
Acto I
Dice el refrán que la pita se rompe por lo más delgado. Tal como estaban
las cosas en junio de 1944 se puede decir que toda la pita se había
adelgazado. Por consiguiente, los acontecimientos nuevos se vienen en
cascada. Prácticamente, todos los sectores tenían algún agravio que expresar
muchos anhelos que exponer, por
que las peticiones
las
y
lo
y
manifestaciones se sucedieron con más rapidez de la que Ubico y sus
colaboradores emplearon en aquilatarlas y en entenderlas. Avivado el fuego
rebelde por un acto de represión que dio al movimiento naciente su primera
víctima mortal en la maestra María Chinchilla, y desryarecida la posibilidad
de un respaldo norteamericano al gobierno, un memofial firmado por 3l I
notables de la época, que se sumaban a la petición de renuncia que los
universitarios y los maestros habían formulado al presiderÉe, conrffiieron a
éste de que el momento de partir había llegado, y se fue. El primer acto había
concluido.
Acto
II
IO
Una oleada de júbilo recorrió la ciudad de Guatemala y se derramó por
los otros centros urbanos y poblados menores hasta llegar muy atenuada a las
regiones rurales. En estas últimas el problema lo constituía la falta de
información. Sin embargo, las primeras agrupaciones políticas surgieron en
tanto que el partido liberal progresista, maniobrando en la Asamblea
Legislativa, logró que esta designara un triunvirato militar del que más
adelante y luego de una sesión tormentosa, en cuyo transcurso se mandó a
desalojar labarra popular por la fuerza, se dio la presidencia provisional al
General Federico Ponce Vaides, quien se comprometió a convocar a
elecciones libres y entregar el mando a quien ganara los comicios. Muy poco
tiempo después se desdijo y surgió como candidato del declinante partido
liberal progresista.
Algunos grupos ligados al comercio fuerte y a la industria, así como a la
banca y las instituciones financieras, con el nombre de Partido Social
Demócrata, aparecieron públicamente proponiendo la candidatura
presidencial del Coronel Guillermo Flores Avendaño. Las juventudes
universitaria, obrera y popular, aglutinadas en el Frente Popular Libertador,
aceptaron la proposición de un grupo de profesionales, reunidos en el Partido
Renovación Nacional, que postuló la candidatura del Doctor en Filosofia y
Ciencias de la Educación, Juan José Arévalo, a la sazón catedrático en la
Universidad argentina de Tucumán. Un sector desgajado del Partido Liberal
Progresista alentó la postulación del abogado, diplomático e intelectual,
Adrián Recinos, ex embajador del gobierno de Ubico en Washington.
Diversos grupos de simpatizantes y amigos lanzaron, cada quien por su lado,
las candidaturas de los ciudadanos Dr. Julio Bianchi, Lic. Clemente
Marroquín Rojas, Lic. Arcadio Chévez, Dr., Lic. y Coronel Teodoro Díaz
Medrano, Diplomático José Gregorio Diaz, y Agricultor y Coronel Ovidio
Pivaral. En la contienda final se enfrentaron Recinos y Arévalo, quien contó
con el apoyo de la mayoría de quienes declinaron en su favor sus respectivas
candidaturas.
Arévalo volvió a Guatemala en septiembre e inició una campaña vibrante
que lo llevó con éxito por todo el territorio. Ponce echó mano de todos los
vicios y coacciones del pasado: no para conseguir adeptos, porque le eran
muy escasos, sino para amedrentar a sus oponentes, primero con amenazas y
más adelante con palizas, encarcelamientos, allanamientos, expulsiones del
país, asesinatos, etc., hasta lograr un clima tal de temor y arbitrariedad que
dirigentes de las juventudes universitaria y militar, así como empresarial y
profesional, decidieron tomar el camino de la rebelión cívico-militar cuya
necesidad se venía planteando con mucha claridad desde que la asfixia
política se acrecentabay generalizaba. El Dr. Arévalo tuvo que asilarse en la
embajada de México y todo parecía indicar que el día de las elecciones
Ponce llegaría solo y se consumaría por enésima vez la burla política
máxima. El segundo acto habia concluido.
il
Acto III
Luego de los actos preparatorios, a eso de las dos de la mañana del20 de
octubre de 1944, se inició la rebelión en el interior de la Guardia de Honor.
Los alzados se hicieron de la jefatura por la fuerza y abrieron las puertas al
primer contingente de civiles: 14 estudiantes de la Universidad. Las tropas
blindadas y la infanteria, apoyadas por aquellos cañones del calibre 105, que
mencionáramos líneas atrás, clamaron en voz alta lo que el pueblo había
esperado tanto para oír. Después de algunas suspensiones a efecto de agregar
a la batalla más apoyo de esfudiantes, obreros, artesanos, empleados,
vendedores, etc., etc. y de un blanco perfecto logrado sobre el polvorín del
Fuerte de San José, que juntamente con el de Matamoros defendían al
presidente provisorio, quedó el camino abierto para las negociaciones de paz,
ante el cuerpo diplomático -presidido por el nuncio apostólico- y reunido en
la legación de los Estados Unidos de América, encabezada -en ausencia del
embajador- por el Encargado de Negocios. El ciudadano Jorge Toriello -en
nombre de los rebeldes- aceptó la rendición del gobernante y sus tropas.
Ponce Vaides se asiló en la embajada de México y marchó al exilio (Ubico
1o hizo, más adelante, en la embajada británic&, y se trasladó a Nueva
Orleans, el gran puerto bananero de la United Fruit Co). Al inicio de la tarde
se izó la bandera blanca en el Palacio Nacional. La fase sangrienta había
terminado.
La reacción multitudinaria de los habitantes de la ciudad de Guatemala no
se hizo esperar. Las manifestaciones jubilosas recorrieron las calles y la
Junta Revolucionaria de Gobierno, conformada por el ciudadano Toriello, el
Mayor Francisco Javier Arana y el Capitán Jacobo Arbenz Guzmán, saludó
al pueblo desde el balcón central de la pasarela que une las dos alas del
edificio del Correo. El Dr. Arévalo, prevenido por el Lic. Jorge García
Granados, había abandonado desde la mañana la embajada mexicana y se
había reunido con los conjurados. El eco se difundió con rapidez en todo el
país y la respuesta de los pueblos fue similar a la de la ciudad capital.
El nuevo gobierno integró un gabinete en el que estuvieron representadas
las distintas facciones y grupos que actuaron en los días dificiles.
Rápidamente se tomaron las medidas más urgentes para dar las libertades
fundamentales al pueblo, se convocó a elecciones para la Asamblea Nacional
Constituyente y se decretó la autonomía de la Universidad Nacional que al
poco tiempo retomaría su nombre centenario de Universidad de San Carlos.
El rasgo más característico de la mayoría de quienes pasaron a ocupar los
puestos de dirección política era la juventud. Un releve generacional masivo
había dado principio. Antes de que el año concluyera, la Asamblea
Constituyente tenía casi cprrcluida la nueva constituq$n, las elecciones para
diputados del futuro congreso legislativo habían pasado y el país se
lz
preparaba para enfrentar un futuro empezando por ajustar su reloj con la hora
del mundo; de un mundo en guerra. Conviene traer a cuenta que, mientras
Guatemala decidía al menos para los siguientes l0 años de su vida, los
ejércitos norteamericano, británico y francés habían liberado la casi totalidad
de Francia de la ocupación nazi; el ejército rojo se concentraba en la ribera
oriental del río Vístula, frente a Varsovia, listo para dar el asalto final hacia
Berlín; y las fuerzas anfibias de los Estados Unidos desembarcaban -el
mismo 20 de octubre- en la Isla de Leyte, clave para recuperar el
archipiélago filipino. El sol se ponía irremisiblemente en los imperios
coloniales británico y francés, a pesar de su victoria en Europa, y dos nuevas
federaciones, los Estados lJnidos y la Unión Soviética, se encaminaban hacia
el predominio mundial.
En los comicios generales de fines de 1944, Arévalo ganó la presidencia
de la república, por amplísima mayoría, en elecciones completamente libres
y al Congreso de la República llegaron los jóvenes que se habían
comprometido y arriesgado en la lucha recién terminada. El período
constitucional de las nuevas autoridades dio principio el 15 de marzo de
1945. El tercer acto había concluido.
El porvenir vuelve a quedar hipotecado
La Alemanianazi se rindió el2 de mayo y el Japón, después de haber sido
victimado con dos bombas termonucleares lanzadas por la aviación
norteamericana,lo hizo el l5 de agosto del mismo año. Más de 50 millones
de muertos, el doble de heridos y desaparecidos, así como países destruidos
y hambrientos fue el saldo trágico de aquella conflagración mundial que se
saldaba, paradójicamente, con el estreno de armas aún más terribles y
destructoras.
¿QUÉ NoS DEJARoN
LoS GoBIERNoS DE LA REVoLUCIÓN DEL
44?
Aún cuando el análisis de los diez años que duraron necesitan un relato
ponnenorizado y una serie de reflexiones profundas y desapasionadas, a 57
años de distancia todavia se pueden aquilatar positivamente los esfuerzos,
indudablemente bien intencionados, de aquellos que se preocuparon por la
salud fisica y mental de quienes por las limitaciones de sus recursos no
tenían para pagar sus gastos de enfermedad común, accidente, vejez,
invalidez, prefiez, parto y período postnatal. La ley de seguridad social se
ocupó de esos problemas y, a pesar de los sabotajes de gobiernos posteriores,
ha podido ampliar su cobertura. La dignificación de quienes trabajan y el
aseguramiento de sus derechos laborales irldividuales y colectivos,
garantizados por el derecho de asociación y p{otegidos por principios
t3
procesales tutelares quedaron plasmados en el Código de Trabajo. El
impulsar la creación y actuación de los partidos políticos, a fin de que fueran
el instrumento para lograr a través de las elecciones libres y periódicas, la
resolución de las diferencias políticas y, tácitamente, hacer a un lado el
capricho y la arbitrariedad del tirano de turno, fue un afán que los gobiemos
de entonces impulsaron y respetaron. El haber expandido las áreas culturales
y artísticas y haber promovido el respeto a sus cultores provocó una
considerable proliferación del talento. El intento serio de rescatar para los
guatemaltecos las riquezas que los extranjeros, aposentados en Guatemala,
extraían de nuestra tierra mediante la explotación de nuestros compatriotas
más pobres y necesitados, así como el intento de tener vías de comunicación
y electrificación nuestras fueron políticas que nadie puede tildar de
antipatrióticas. El haber impulsado la ley de reforma agraria para revertir las
injusticias de 4 siglos y medio de duración para darle a la mayoría de la
población rural y maya las bases para una efectiva dignificación econór*te*y
social, es sin duda el acto que empezaba atrasformar aquella búsqueda úela
democracia en un logro verdaderamente revolucionario. Finalmente, el haber
respetado los derechos individuales y colectivos, el haber eliminado las
angustias y las sombras ominosas de los tiranos, y haber permitido que la
población disfrutara de algunos momentos de alegría y pudiera reir sin temor
a represalias no tiene precio. Fue un esfuerzo serio de devolver al p$lo la
dignidad reconociéndo sela.
tLf
Descargar